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Escuela clásica criminología

El mundo clásico partió de una imagen excelsa, ideal, del ser humano como centro
del universo, como dueño y señor absoluto de sí mismo, de sus actos. El dogma
de la libertad que hace iguales a todos los hombres (sin diferencias entre el
hombre delincuente y no delincuente) y fundamenta la responsabilidad: el absurdo
comportamiento delictivo solo puede comprenderse como consecuencia del mal
uso de la libertad en una situación concreta, no a pulsiones internas ni a
influencias externas. Para los clásicos, el delincuente es una suerte de pecador
que optó por el mal, pudiendo y debiendo haber respetado la ley.
Por tanto, no consideran diferencias entre el individuo que viola la ley y quien la
respeta. El interés no se encuentra en el actor, sino en el acto. Concibe al delito
como creación jurídica y la violación de la norma como un rompimiento del pacto
social.

La base de la teoría clásica de la criminología estaba apoyada sobre la teoría del


contrato social, que sostenía que los hombres se reunían libremente en sociedad
conforme a una serie de acuerdos que garantizaban el orden y la convivencia. Es
en relación a este consenso, que se proponía el castigo de aquellas conductas
que eran perjudiciales o peligrosas para el cuerpo social, y la recompensa de
aquellas que de alguna manera contribuían al mantenimiento del equilibrio del
mismo.

EL DELINCUENTE NO ES UN SER DIFERENTE DE LOS DEMÁS.


(ESCUELA CLÁSICA)

Postulados de la escuela clásica:


1. El encontrar sus bases filosóficas en el Derecho Natural.
2. Un respeto absoluto al principio de legalidad.
3. Ver al delito como un ente jurídico y no como un ente filosófico.
4. El libre albedrío.
5. La aplicación de las penas a los individuos moralmente responsables.
6. La pena es la retribución que se hace al criminal por el mal que hizo en la
sociedad.
7. La retribución debe ser exacta.
9. La finalidad de la pena es restablecer el orden social externo que ha sido roto
por el delincuente.
10. El Derecho de castigar pertenece al Estado

Características de la Escuela Clásica


1.- Igualdad de derechos: el hombre ha nacido libre e igual en derecho
2.- Libre albedrío (capacidad de elección): si todos los hombres son iguales, en
todos ellos se ha depositado el bien y el mal; pero también se les ha dotado de la
capacidad para elegir entre ambos caminos
3.- Entidad delito (con independencia del aspecto interno del hombre): el delito es
un ente jurídico, una injusticia; sólo al derecho le es dable señalar las conductas
que devienen dificultosas
4.- Responsabilidad moral (consecuencia del libre arbitrio): como consecuencia del
libre arbitrio, base de la ciencia penal para los clásicos: si el hombre está
facultado, para discernir entre el bien y el mal y ejecuta este, debe responder de
su conducta habida cuenta de su naturaleza moral.
5.- Método deductivo, teológico o especulativo (propio de las ciencias culturales):
Teológico, es decir, finalista.

Precursores de la Escuela clásica


La reforma clásica cuyos supuestos se basaban en las teorías del control social de
Hobbes, Montesquieu y Rousseau, tuvo sus inicios en la última mitad del siglo
XVIII en Inglaterra e Italia y se extendió a Europa Occidental y a Estados Unidos.
Teniendo en cuenta que lo más importante es que la Escuela Clásica no existió
como tal, desde el punto de vista histórico, sino gracias a Enrico Ferri, que
comenzó a llamarle clásicos a los juristas prepositivistas y posteriores a C.
Beccaria, conocido también como el divino marqués.
Cesare Beccaria (1738-1774)
En 1764 publica De los delitos y de las penas [Trattato dei delitti e delle pene],- el
autor contaba con 26 años de edad-: en dicha obra, compendia las leyes
existentes, proponía escribir las leyes para que pudieran ser comprendidas por
todos los individuos y no solo por máximos juristas, tratando de encontrar la
igualdad de todos los ciudadanos ante la ley y evitar una interpretación desviada
por conceptos morales de los juristas o los jueces y, por último, el de limitar el
ámbito de las leyes penales al mínimo necesario para disminuir el delito.

Pellegrino Rossi (1787 - 1848)


El profesor de Bolonia, Ginebra y París que es asesinado por los pensamientos
políticos que generaba, fue quien escribió el primer gran clásico reconocido por
todos, aunque no es posible olvidar otras aportaciones de sus contemporáneos
como Bentham, aporto con su obra Teoría de las Penas y de las Recompensas
escrita en 1840 y Romagnosi, con Génesis Del Diritto Penale en 1837. Para
algunos es este autor el que sienta las bases para la Escuela Clásica, con su obra
Filosofía del Delito escrita en 1839.

Francisco Carrara (1805 - 1888)


Es considerado por algunos como el padre de la escuela clásica del derecho
penal, en 1859 escribió Programa di Diritto Criminale, lo cual llevo al Derecho
Penal a su verdadera esencia jurídica y cobra importancia porque cuando se hace
referencia a la Escuela Clásica, son las doctrinas de Carrara generalmente las que
se someten a examen.

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