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UNIVERSIDAD DON BOSCO

ANTROPOLOGÍA FILOSÓFICA
(SEMANA DOS)

Tema 2: Planteamientos filosóficos insuficientes


sobre la Antropología Filosófica

Agenda
a. ¿Por qué “Planteamientos filosóficos insuficientes”? ¿En
qué está la insuficiencia?
b. Algunos ejemplos de planteamientos filosóficos
insuficientes:
2. A. El dualismo antropológico
2. B. El creacionismo y la doctrina sobre la Creación
2. C. El evolucionismo y la teoría de Darwin de la
evolución de las especies

b. Desarrollo

Planteamientos filosóficos insuficientes a la Antropología


filosófica. ¿Qué significa esto? Vamos a ir por pasos
pequeños… Veamos.

1. PLANTEAMIENTO: Es la acción de plantear. Y plantear


es enunciar o representar gráficamente un asunto,
problema o discusión. Con esto, lo que se busca es una
aproximación o acercamiento a algo o alguien. En este
sentido sería como retomar una distancia desde la cual se
puede ver el objeto en cuestión.

2. FILOSÓFICAS: Lo filosófico tiene que ver con la razón


crítica, pero también con el conocimiento sabio o la
sabiduría. Lo filosófico no es la filosofía, sino el carácter
que imprime esta a la actitud humana que busca
resolverse la vida. Aquí es importante saber diferenciar
entre lo que es la filosofía como ciencia o disciplina crítica
y lo que es su carácter adjunto que comporta el hecho de
que el ser humano busca niveles de mayor contenido
cualitativo para desarrollarse en el mundo. Eso es lo
filosófico.

3. INSUFICIENTES: Lo insuficiente es el carácter de la


insolvencia. Es decir, que es necesario algo más para
lograr la culminación plena de la cosa sentida, de la razón
suficiente o de “el todo” de la realidad. La insuficiencia
hace referencia al proceso o al debido proceso para
conseguir el logro esperado.

4. ANTROPOLOGÍA: Esto ya lo vimos con ustedes,


estudiantes, por tanto, digan ustedes qué es la
antropología: Estudio del ser humano.

5. FILOSÓFICA: La búsqueda de la sabiduría con el estudio


humano.

POR TANTO:
Los planteamientos filosóficos insuficientes son como
aproximaciones filosóficas insuficientes a la Antropología
filosófica. Estos consisten en un acercamiento al lugar
existencial desde el cual podemos decir con cierto nivel de
certidumbre, qué es la antropología filosófica y cómo ha sido
analizada y estudiada en el devenir histórico de la humanidad.

No olvidemos que por el espíritu humano y su ansia de


dominarlo todo, se han presentado estas teorías como una
especie de absoluto, como teorías acabadas. Es decir, que
dependiendo de la perspectiva que han presentado cada uno
de los filósofos, estos han creído que con su aporte están
ofreciendo al mundo la última de las teorías y de las ideas, las
cuales nunca serán superadas por alguien. No obstante, la
realidad se impone. Y, lo que nos damos cuenta es que en
realidad lo que ahora es novedoso y lo último, mañana ya no
lo es. Sino que hay otra teoría más acabada y englobante.

En esta perspectiva, hay que considerar al filósofo Georg


Wilhelm Friedrich Hegel, que ha sido uno de los filósofos más
importantes del siglo XIX. Hegel, al ofrecer su teoría filosófica
afirmaba que con él se había acabado todo pensamiento
racional y existencial y que con su aporte al desarrollo histórico
de la filosofía, la razón humana llegaba a su fin. Por tanto, ya
no había que esperar nada nuevo bajo el sol, según Hegel;
pero el mundo, la ciencia y la sociedad no habían dicho su
última palabra. De hecho, no la han dicho aún. Ejemplo claro
de esto es la internet y todo el mundo digital que se ha
generalizado ahora a finales del siglo XX y principios del siglo
XXI.

a) En qué está la insuficiencia, entonces de estos


pensamientos?

Aquí cabe leer un bien logrado artículo que escribió


José María Tojeira hace un par de años para que
veamos la dualidad que existe en las personas.
Leamos y comentemos Las lecciones de Salvini. Este artículo
se los coloco al final de este documento.

b) Algunos ejemplos de aproximaciones filosóficas


insuficientes:
• El dualismo
• El creacionismo
• El evolucionismo
DUALISMO ANTROPOLÓGICO
Se llama dualismo a la doctrina que afirma la existencia de
dos principios supremos, increados, coeternos,
independientes, irreductibles y antagónicos, uno del BIEN y
otro del MAL, por cuya acción se explica el origen y evolución
del mundo. También en un sentido más amplio, se le llama
dualismo a las doctrinas que afirman dos órdenes de ser
esencialmente distintos, con más o menos radicalismo: por
ejemplo, ser ideal y ser real, Dios y mundo, naturaleza y gracia
(en el plano cognoscitivo razón y fe), materia y espíritu, orden
físico (de la necesidad) y orden moral (de la libertad y el deber)
(en el plano cognoscitivo constatación y valoración ética),
conocer y querer (plano de la actividad consciente), bien y mal
(plano de la actividad moral), felicidad y tristeza, etc. Dualismo
teológico, cosmogónico (relativo al origen del cosmos) o
religioso; en el segundo caso se puede hablar de un dualismo
filosófico o metafísico, que se opone de modo irreductible al
panteismo y el holismo.
En la filosofía china se utilizan los términos YIN Y YANG para
indicar la dualidad de todo lo existente en el universo yendo
más allá de dos principios supremos e irreductibles.
En líneas generales, las doctrinas dualistas coinciden en los
siguientes rasgos: el principio del Bien es identificado con la
Luz y el Espíritu; el principio del Mal con las Tinieblas y la
Materia, o con el diablo o demonio (maniqueísmo). La materia
es, pues, mala, y principio del mal; o bien creada por un
demiurgo distinto del dios bueno. Esto último fue formulado por
Marción de Sínope1), o por el diablo, principio del mal

1
Marción de Sinope (C. 85 en Sínope, Ponto - c. 160 en Roma, fue escritor y teólogo griego, fue
heresiarca cristiano del siglo II, fundador de la secta marcionita.
Su doctrina se resume en la existencia de dos espíritus supremos, uno bueno y otro malo, y considera
al Dios del Antiguo Testamento un inferior de estos, simple modelador de una materia preexistente.
(Prisciliano2), rigorista y extrema; o bien ceden ante lo
inevitable y justifican la relajación: porque no es posible resistir
al principio del mal que inclina a pecar, y es ese principio, no la
persona singular, el responsable del pecado.

Las lecciones de Salvini


José María Tojeira
Matteo Salvini es el vicepresidente y ministro del Interior del Gobierno italiano, y ha
tomado una serie de iniciativas respecto a los migrantes que llegan en masa desde
África que ha escandalizado a toda persona con hondo sentido de humanidad. Ha
amenazado a los barcos que recogen migrantes que salen de Libia y están a punto
de naufragar en el Mediterráneo, diciéndoles que solamente verán los puertos
italianos en fotografía.
Personas empobrecidas, desesperadas por guerras o por la pobreza, que miran a
Europa como nuestros salvadoreños han mirado a Estados Unidos, se encuentran
hoy con este ministro italiano que tiene un lenguaje agresivo y de clara fobia a los
migrantes, que no recuerda que muchos italianos migraron también en el pasado
por razones parecidas a países que los recibieron mejor de lo que él está haciendo
con los africanos.
Y lo peor de todo esto es que mezcla esa fobia al extranjero pobre con la religión.
Ahora, al mismo tiempo que desecha y descarta a los migrantes, propone que se
coloque un crucifijo en todos los establecimientos públicos, en un lugar visible e
importante, como muestra de la cultura y tradición italiana, sin darse cuenta de que
el rostro de Cristo es más importante verlo en un migrante que en una imagen. Como
él, son muchos los que hablan de religión y desprecian al pobre, los que dicen que
creen en el injustamente condenado a la pena de muerte en la cruz y defienden la
pena de muerte en silla eléctrica o en inyección letal, los que dicen que creen en
Dios y matan al prójimo. Ciertamente, veneran a un dios que ni es cristiano ni existe
realmente, al menos con esas cualidades de justificar el maltrato del prójimo o su
muerte.
Esto mismo se lo ha recordado a Salvini el director de una importante revista,
oficiosamente vinculada al Vaticano, La Civiltà Cattolica. Le ha dicho que “la cruz

Rechazaba por tanto el Antiguo Testamento, y del Nuevo solo aceptaba el Evangelio de Lucas y las
cartas de Pablo.
2
Prisciliano de Ávila (¿Gallaecia?, aprox. 340-Civitas Treverorum, actual Tréveris, Alemania, 385)
fue un obispo galaico que, tras ser acusado por brujería,fue ejecutado junto a otros compañeros.
Prisciliano fue ejecutado por el gobierno de Magno Clemente Máximo, aunque varios obispos de
Occidente, con Martin de Tours a la cabeza, junto con Juan Crisóstomo en Oriente, protestaron contra
tal decisión. El propio papa Siricio criticó duramente el proceso. La sentencia y la ejecución fueron
criticadas por muchos, que se escandalizaron porque un hombre piadoso y entregado al culto a Dios
fuera ajusticiado. En la cristiandad, se considera la ejecución de Prisciliano como el primer ejemplo
en que la justicia secular intervino con una condena a muerte por un asunto de índole eclesiástico.
es una señal de protesta contra el pecado, la violencia, la injusticia y la muerte. No
es nunca una señal de identidad”. Y mucho menos, diríamos nosotros, un adorno
que nos deje tranquilos en nuestra comodidad y en esa conciencia individualista y
egoísta que desprecia a los pobres, débiles, migrantes o maltratados por las
diversas injusticias del mundo en que vivimos. Como decían nuestros obispos
reunidos en Puebla, México, no es plenamente cristiano quien es incapaz de
contemplar el rostro sufriente de Cristo en niños golpeados por la pobreza antes de
nacer, en jóvenes desorientados, en campesinos empobrecidos, en trabajadores
mal pagados, en marginados urbanos, en subempleados y desempleados, en
ancianos olvidados y condenados a convertirse en desecho de la sociedad.
En nuestra sociedad, como en muchos de los que votaron por Salvini, abunda la
indiferencia ante el pobre, el rechazo al mismo, el irrespeto sistemático a su
dignidad. En gremiales empresariales, en política, más allá del discurso tan lleno de
promesas como de mentiras, en nuestras burbujas de bienestar, abunda demasiado
esa hipocresía que lleva a dividir el mundo en buenos y malos, tratando de
establecerse a sí mismos, desde la comodidad y el lujo, como los perfectos y los
buenos. Se discute el tema de la pensión para una minoría y se deja a la mayoría
de la población abandonada a su suerte. Se mantienen dos sistemas de salud
pública con diversas prestaciones según sea la capacidad de cotizar o no cotizar de
la gente, como si el dinero abriera la puerta a ese derecho a la salud que es
universal.
Los violadores de derechos humanos tienden a quedar en libertad mientras que a
los jóvenes de los barrios suburbanos se les considera sospechosos y se les
encarcela tras redadas masivas sin tener en cuenta la presunción de inocencia.
Quienes derrochan agua o se enriquecen con ella se consideran con más derechos
a gestionarla que quienes tienen sed o un acceso indecente a la misma. Como
tenemos migrantes, y son en buena parte la garantía real de la lucha contra la
pobreza y una fuente de ingreso para los ricos, molesta la hipocresía de Salvini o la
brutalidad de Trump. Pero ambos no son más que un llamado de atención para
nuestras propias hipocresías y para crecer, mucho más de lo que ahora hacemos,
en respeto a los derechos humanos y a la dignidad de las víctimas.

* José María Tojeira, director del Idhuca

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