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1.

Seguridad

(Sanchez, 2006) La prevención de accidentes es una responsabilidad de la


administración del almacén. De hecho un programa de seguridad detallado requiere
examinar a menudo los procedimientos y el equipo de trabajo para de cierta manera
localizar y realizar acciones correctivas que eliminen las condiciones de inseguridad
antes de que se produzcan accidentes. De hecho los accidentes Ocurren accidentes
cuando los trabajadores no tienen cuidado o están expuestos a peligros mecánicos o
físicos. Ejemplo:
los pisos de un almacén pueden provocar accidentes si no se limpian
adecuadamente.
los envases rotos provocan filtraciones de productos en el piso.
Por ello se concluye que Los procedimientos de limpieza adecuados reducen el
riesgo de accidentes por tales causas

7.1. Seguridad y la prevención de riesgos en el almacén

Cuando planteamos la estructuración de un almacén es muy importante tener en cuenta


la instalación de los elementos de seguridad porque es una materia de extrema
importancia.

Cada país, cada comunidad e incluso cada ayuntamiento, puede tener normas
específicas en lo relativo a los incendios o la seguridad y el proyectista las ha de tener
en cuenta y aplicarlas en todo momento. Así se evitarán problemas posteriores.

7.1.1. El riesgo de incendio

Existen numerosas normas de edificación y de seguridad redactadas por expertos que


tratan ampliamente las cuestiones relativas a los incendios, cómo se inician y se
propagan o de qué manera se detectan y se extinguen.

La seguridad contra el fuego debe ser, por lo tanto, una cuestión de primera importancia
en el proyecto de una instalación. Dejar su diseño para el final, puede traer como
consecuencia que el almacén no sea un lugar seguro o que el proyecto tenga que ser
ampliamente modificado e incluso, que no se pueda llevar a cabo.
Por ejemplo, los medios utilizados para facilitar la salida del personal en caso de un
suceso, pueden influir en el diseño de los espacios y hasta en la elección de los medios
de manutención.

En circunstancias normales, la descripción del centro debe incluir dispositivos para la


detección (llamas, color o humo) y aparatos automáticos o semiautomáticos para la
extinción (por agua, por espuma o por gas). Hay que considerar el humo no solamente
como un riesgo de incendio, sino también como un peligro para la salud del personal y
para los materiales almacenados.

7.2. Sistemas de previsión de incendios en la instalación

La prevención de un incendio consiste, básicamente, en la reducción de los riesgos.

¿Qué podemos hacer para evitar los incendios?

Lo primero que se debe evitar, en la medida de lo posible, es el almacenamiento de


productos inflamables o combustibles. En el caso de que no se pueda evitar, se deben
proteger estos materiales contra el riesgo que puede suponer la proximidad de
fumadores, las instalaciones eléctricas defectuosas y las posibles actividades auxiliares
–asociadas normalmente a los equipos de mantenimiento–, como las soldaduras, por
ejemplo.

Además, las mercancías suelen estar apiladas sobre paletas de madera que también son
proclives a arder y que tampoco se tratan contra esta circunstancia dada su naturaleza
itinerante.

- Palet de madera tipo europeo

Ejemplo de palet de madera

o Cómo se han de tener en cuenta todos los detalles: las piezas


metálicas sueltas introducidas en contenedores metálicos pueden ser
un producto de alto riesgo ya que es posible que se formen residuos
de aceite en el fondo del contenedor.

o Por otra parte, el plástico retráctil usado para envolver paletas las
convierte en más fácilmente inflamables, aunque su principal
contribución al riesgo de incendio se debe a la propagación del
mismo y no a su inicio. Por eso, unas cargas de latas de líquido
inflamable cubiertas por un plástico retráctil están mejor protegidas
contra el fuego que si no llevasen esa protección.

o Por otro lado, un embalaje de cartón actúa como una pantalla frente al
agua, en caso de incendio. Sin embargo, cuando el calor aumenta, el
plástico retráctil se convierte en un material seco para el fuego.

A pesar de tener todas estas cuestiones en cuenta y observar la normativa al respecto, es


inevitable la existencia de un determinado riesgo de incendio en un almacén. Por lo
tanto, es preciso asumirlo y tomar las medidas necesarias para reducir las consecuencias
del mismo, tanto las causadas por el fuego, como las producidas por el humo, el calor e
incluso, muy frecuentemente, por el agua empleada en su extinción.

Una solución que se puede adoptar en almacenes de gran volumen, o en aquellos en los
que se deban aislar mercancías de alto riesgo, es su división en compartimentos con
mamparas resistentes al fuego.

La tendencia actual es la de dividir los almacenes de gran volumen, por lo que se suelen
compartimentar.

8. Unidad de carga

(Mecalux esmena, s.f.)

Una unidad de carga es la unidad básica de almacenaje y transporte dispuesta sobre un


soporte o embalaje modular (caja, palet, contenedor, etc.) con el fin de conseguir una
manutención eficiente. Las unidades de carga se manipulan en los puntos de trabajo
tales como un almacén general, un almacén de reserva, un almacén de picking, un
elemento de transporte interno, etc.,

(Noega System, 2020) La unidad de carga es un conjunto de productos que se agrupan


en un mismo embalaje, con el fin de facilitar su manejo. El número de artículos que se
pueden agrupar en una carga está en función de la naturaleza y tamaño de los mismos
La unidad de carga puede dividirse en elementos más pequeños que también pueden
manipularse.

> La primera división lógica da como resultado las unidades de preparación de


pedidos, que son las unidades mínimas de producto que se pueden servir a un cliente
para cada referencia.

> A su vez, la unidad de preparación de pedidos se puede dividir en unidades de


entrega, que son agrupaciones formadas por unidades de venta que permiten una
explotación optimizada de los sistemas de producción, distribución o
comercialización. Si esta unidad no coincide con la de preparación de pedidos, esto
significa que hay un mayorista entre el proveedor y el detallista.

Esta unidad de entrega puede subdividirse en unidades de venta, que son las menores
unidades de producto que el consumidor puede comprar al detalle.

Dentro de un almacén se pueden encontrar distintas unidades de carga, por ejemplo:

- La propia caja de embalaje que envía el proveedor.

- Un contenedor donde van introducidas las cajas de embalaje enviadas por el


proveedor.
- Un contenedor donde se ubican, sueltas, las unidades de venta.
- Una paleta sobre la que se colocan las cajas de embalaje que envía el proveedor.
Éste también puede enviar la mercancía ya paletizada (sobre una paleta).

En un almacén también se pueden alojar las unidades de venta ya sueltas, sin la caja de
embalaje o el contenedor. Con ello se facilitan las denominadas operaciones de picking
(que consisten en ir tomando selectivamente unidades de mercancía para conformar un
pedido).

En su mínima expresión, este hueco de picking puede ser, por ejemplo, un casillero de
reducidas dimensiones o una compartimentación dentro de un cajón extraíble de una
estantería, como se muestra en la siguiente imagen:

- Estanterías con casilleros de reducidas dimensiones.

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