El ganado productor de servicios

Es importante primero que todo entender que todos los animales que se han
desarrollado con el ser humano y que cumplen un fin zootécnico merecen que se
les respete y cumpla con sus 5 libertades, ya que son seres vivos y sintientes los
cuales realizan un trabajo para nuestro beneficio y desarrollo como claramente se
ve en el caso de los equinos, asnales y mulares alrededor del mundo.
Este tipo de ganado ha sido el responsable de un desarrollo más acelerado en
toda la humanidad, ya que se han y siguen utilizando como medio de transporte,
trabajo de carga, caza, ocio e incluso alimento, es claro entonces el rol
fundamental de estos magníficos seres que impactan tanto en la vida de las
personas en todos los estratos socioeconómicos.
Por cultura, Colombia es un país con tradición de usar los équidos, asnos y sus
cruces híbridos para la facilitación de la actividad agrícola en el campo, ya que la
geografía del país hace merecedora a una necesidad constante de en este caso,
seres que faciliten la vida de las personas, lo cual hacen muy bien desde la
llegada de los primeros ejemplares los cuales fueron evolucionando y
adaptándose a todas las condiciones del territorio nacional, creando así animales
con la adaptación ideal y contribuyendo a la creación de la cultura anteriormente
mencionada que hace hoy en día que el ganado caballar, asnal y mular tenga una
creciente contribución en el PIB de la nación.
Existe una clara diferencia de este tipo de ganado a los demás, pues los caballos
no producen cuantitativamente como las vacas, gallinas o cerdos, y es complejo
realizar la valoración numérica o estadística del aporte para los productores; más
sin embargo una forma muy clara para evidenciar la gran importancia que tienen
estos seres dentro de las unidades productivas es la ausencia de los mismos, ya
que al sustraer a los encargados de la prestación del servicio de transporte, las
actividades económicas e incluso las sociales se ven afectadas. El óptimo
mantenimiento de este tipo de ganado es más soportable por el bolsillo de los
productores debido a que se maneja en gran parte basado a una economía
circular, en donde lo que se produce en las fincas o se permuta entre ellas es en
algunos casos lo necesario para mantener y hacer de estos animales buenos
servidores; mientras que la inversión de tecnología la cual puede ser buena, más
nunca igualable, requerirá de mayor inversión y no tendrá el mismo impacto que
un caballo, burro o mula dentro de una familia campesina; o incluso hablando del
ocio no habría un desarrollo de habilidades sociales y ese lazo que conecta con la
sensibilidad que transmite un ser vivo y todos los eslabones que están detrás de
aquel ser que contribuye al desarrollo de muchas vidas a su alrededor.
Alrededor del mundo los equinos, asnos y mulas se usan como anteriormente se
menciona para la prestación de servicios de transporte, carga, ocio y alimentación,
omitiendo la parte de producción cárnica que generan solo algunas razas; el
ganado caballar, asnal y mular contribuye para lo que quizás podría ser, un
ganado servidor contribuyente del desarrollo socio-económico de y para toda la
población.