¿CÓMO SABER SI ES DIOS QUIEN NOS HABLA?

La prueba es que no contradiga la Palabra de Dios, la Biblia. Es por ello que es de mucha importancia
estudiar la Biblia.

Si un ángel, un predicador o cualquiera traen un mensaje contrario a la Biblia, NO ES lo que Dios está
diciendo.

Hay quienes se llaman cristianos y dicen que el Señor Jesucristo nació otra vez en Estados Unidos de
Norteamérica y “dio revelaciones”. Otros dicen que Jesús vendrá a raptar a su Iglesia en platillo volador por
“revelaciones” a una determinada persona; otros dan fechas para su Segunda Venida, etc. Ninguna de estas
afirmaciones viene de Dios.

CUANDO DIOS HABLA, PRODUCE:

a) Fe, La fe producida es para realizar actos conforme a la Voluntad de Dios.

b) Arrepentimiento, El arrepentimiento de haber ofendido a Dios.

Cuando Dios habla no produce condenación sino la paz de saber que alcanzamos misericordia al
arrepentirnos.

c) Esperanza, en tu palabra he esperado.

d) Fortaleza, Susténtame conforme a tu palabra, y viviré; y no quede yo avergonzado de mi esperanza.”

e) Gozo y alegría, Cuando Dios habla produce un buen fruto en la vida del creyente y siempre le llevará a
acercarse a Jesucristo.

No olvidemos lo siguiente:

No debemos pedirle a Dios que nos responda con relación a algo que ya está escrito en la Biblia, por ejemplo:
si casarme con un(a) inconverso(a) o no; si debo devolver el vuelto que me dieron de más o no; si quiere el
Señor que me quede con mi esposo (a) o que me vaya con fulano (a), etc.

Si está escrito en la Biblia, Él ya te expresó SU VOLUNTAD, sería necio pedir “confirmaciones”.

La revelación en cuanto a la salvación y los acontecimientos futuros ya está toda completa y no será añadido
nada por Dios.

¿CÓMO HABLA DIOS?

1. Por medio de la Biblia.

2. Por medio de visiones.

3. Por medio de Sueños.

4. Por medio de los dones del Espíritu Santo.

I. POR LA PALABRA DE DIOS O LA BIBLIA, Es la forma que Dios más habla al creyente: por las prédicas, las
enseñanzas, cuando alguien comparte un pasaje o en la lectura devocional.

1) La Palabra Escrita o la Biblia. 2 Timoteo 3: 16 “Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar,
para redargüir, para instruir en justicia”.

Somos enseñados, convencidos de pecado, instruidos por la Palabra de Dios escrita a través de la revelación
recibida por el Espíritu Santo.

DEDICANDO TIEMPO A LA PALABRA DE DIOS

a) Dios te hablará con palabras o frases que se encuentran en la Biblia.

Cuánto más de su Palabra esté en ti, más podrá el Espíritu Santo usarte en el cumplimiento de sus
propósitos.
Cuánto más de la Palabra more en tu corazón y en tu mente, más discernimiento espiritual tendrás.

b) La diferencia entre Logos y Rhema:

Hay dos palabras griegas que han sido traducidas como PALABRA en la Biblia en español.

RHEMA = Es lo que dice o ha dicho.

LOGOS = Es la expresión de un pensamiento, mensaje o discurso.

Logos es el mensaje de la Biblia.

Rhema es la comunicación, es la revelación en un determinado momento de un pasaje, cuando la Escritura

cobra vida para una situación específica y esa Palabra no es sólo LOGOS sino RHEMA de Dios para ti en ese
momento

c) La Palabra de Dios es:

Poderosa y efectiva.
Destruye fortalezas.
Convence a su pueblo de verdad.
Da esperanza.
Fortalece.
Da gozo.
Trae liberación.
Da vida y sanidad.

Dios mismo instruyó a Josué a no apartarse de Su Palabra:

Dios te hablará al leer la Biblia, al escuchar una prédica o enseñanza por medio de su PALABRA ESCRITA.

2) La Palabra audible.

Es cuando alguien escucha la voz de Dios con volumen de tal manera que hasta se llega a pensar que
alguien cerca, una persona está hablando. Un ejemplo claro es el joven Samuel.

Otros ejemplos bíblicos son Moisés, Abraham, Pedro, Isaías, Jeremías, etc. El libro de los Hechos de los
Apóstoles tiene muchos ejemplos: Hechos 9: 4 “Y cayendo en tierra, oyó una voz que le decía: Saulo, Saulo,
¿por qué me persigues?”

3) El mensaje al corazón o testimonio interno.

Se produce cuando sin escuchar una voz audible viene al espíritu de la persona una Palabra o mensaje.

Es sencillo darse cuenta, pues no se trata de un pensamiento propio sino ajeno.

Hechos 8: 29 “Y el Espíritu dijo a Felipe: Acércate y júntate a ese carro”. No nos dice que Felipe oyera voz
alguna. En otros casos la Biblia dice: “Vino a mi Palabra de Jehová diciendo” Hoy generalmente decimos:
“Siento que Dios dice...” para referirnos a un mensaje interno, en el corazón o espíritu.

II. VISIONES

El Señor lo prometió, y en su primera prédica Pedro hizo referencia a lo que Dios había prometido por medio
del profeta Joel:

Una visión es similar a un sueño, con la diferencia que ocurre cuando la persona está despierta y consciente.

a) Visión Abierta, Es muy vívida, es como si se viera una película y da la impresión que uno está allí.

b) Visión interna, Son imágenes vistas en la mente, no con los ojos naturales sino en la mente. La persona
puede estar con los ojos abiertos o cerrados.

c) Visión en éxtasis, Se produce generalmente al estar orando en profunda adoración a Dios.

LAS VISIONES Y LOS SUEÑOS

Pueden ser literales o simbólicos:

a) Literal, es el mensaje tan claro que no necesita interpretación alguna.

b) Simbólico, a veces los símbolos son muy claros, pero en esta ocasión no.

I. POR SUEÑOS

Al igual que las Visiones el Señor ya había prometido hablar a través de sueños, esta promesa fue hecha por
medio del profeta Joel y el apóstol Pedro lo confirmó en:

Es bíblico que Dios habla hoy al profetizar, tener visiones y sueños de parte de Dios.

No todos los sueños son mensajes de Dios.

En la Biblia, muchas veces los sueños son llamados visión de noche o visión en sueños.

a) Patriarcas y Profetas que recibieron sueños de Dios.

Abraham, Jacob, Daniel.

b) Gente de Dios que no eran profetas.

José, Salomón, José

c) Gente que no era del pueblo de Dios y recibieron sueños de Dios

Abimelec, Labán, Faraón, La esposa de Pilatos.

d) Los sueños de Dios fueron prometidos para los creyentes, el pueblo de Dios:

Somos un pueblo profético y debemos esperar que Dios nos hable. Él no se ha limitado para hablar sólo a
pastores, evangelistas, profetas, maestros, apóstoles o líderes, sino a todos en la Iglesia.

Clases de Sueños:

a) Sueños propios de nuestra mente.

Pueden ser producto de temores propios como, por ejemplo:

Preocupados por una situación y sueña como producto de esa preocupación.

Por algunos anhelos y deseos y sueña como producto de esos anhelos.

El hábito pecaminoso de ver películas, revistas pornográficas, etc., podrá ser el motivo de sueños lujuriosos.

En el caso de ver películas de terror, el tener pesadillas.

También por pecado oculto:

Por esta razón se podría tener sueños perturbadores.

Por mala digestión, producto de desarreglos en la comida antes de ir a dormir.

b) Sueños bajo influencia de espíritus malos o espíritus demoníacos

Tiene por finalidad perturbar, causar angustia, temores, etc.

Razones por las cuales un creyente puede tener estos sueños:

Por pecado escondido: películas pornográficas o de terror, prácticas de ocultismo.

Por falta de perdón.

Poseer objetos de idolatría, o de ocultismo en casa, es bueno revisar nuevamente lo que tenemos en casa ya
que en el transcurrir del tiempo vamos adquiriendo no sólo mayor conocimiento de la Palabra de Dios, sino
que también adquirimos mayor discernimiento para saber lo que no debemos tener en casa.

El Señor no quiere que estemos sin protección.

c) Sueños de Dios.

Son sueños que nos traen mensajes de parte del Señor, es decir cuando Dios nos quiere decir algo. Cuando
esto ocurre, generalmente el mensaje no es muy claro, porque muchas veces los sueños son con símbolos.

Los sueños que vienen de Dios a veces podrían permitir que pudiéramos tener un sueño con demonios que
nos permitiera “espiar” el campo enemigo para saber cómo orar con relación a la forma de cómo el enemigo
piensa atacarnos.

Los sueños deben ser interpretados y la Biblia nos habla de hombres de Dios que interpretaban sueños como
Daniel, José, etc.

NOTA, Los libros que tratan de simbología de los sueños que no tienen base bíblica no tienen ninguna
autoridad como para ayudarnos a interpretar sueños. Recordemos que el diablo, siempre ha querido imitar lo
que Dios hace.

Cuando tenemos un sueño a veces no lo entendemos en ese mismo momento, por eso es bueno llevar un
cuaderno en dónde anotar los sueños para poder relacionarlos con sucesos, acontecimientos, otros sueños y
la misma Palabra de Dios; así tendremos la seguridad de poder diferenciar los sueños y saber si Dios te está
hablando a través de éstos. De esta manera se está atesorando lo que Dios está hablando.

PROPÓSITO DE LOS SUEÑOS DE DIOS.

En la Biblia vemos que cuando Dios habló por sueños tuvo que ver con:

a. Revelación de hechos o acontecimientos en el futuro, cosas que iban a suceder.

José: Génesis 37: 5 – 8

El Rey Nabucodonosor: Daniel 2: 4

b. Dar a conocer eventos:

II Reyes 6: 8 – 23

c. Enseñanza:
Salmos 16: 7; Job 33: 14 – 18

d. Dirección:
José con respecto a Jesús: Mateo 1:20–25 Pablo para ir a Macedonia: Hechos 16:9–10

e. Alertar:
Abimelec: Génesis 20: 3 – 7
Los Magos: Mateo 2:12

f. Fortalecer y animar:
Pablo en Corinto: Hechos 18:9–10

¿CÓMO PODER IDENTIFICAR SI UN SUEÑO ES DE DIOS?

La respuesta es en base de preguntas:

1. ¿Cuándo te has despertado de ese sueño, te lleva a buscar a Dios, te acerca a Dios?

2. ¿Durante el sueño o inmediatamente después de despertarte, sientes la presencia de Dios en la

habitación?
3. ¿Se ha repetido ese sueño?

4. ¿Aparece en el sueño alguna parte de la Biblia?

5. ¿Hay símbolos en el sueño? Por ejemplo, en el sueño del Faraón: 7 vacas flacas.

INTERPRETACIÓN DE SUEÑOS

En el Antiguo Testamento la Biblia nos enseña que Dios dio a algunos en su pueblo el conocimiento y
sabiduría para entender o interpretar sueños, Daniel 1: 17. Como es el caso también de José en el Libro de
Génesis.

En el Nuevo Testamento vemos que José, los magos entre otros, entendieron sus propios sueños; el estudiar
la Biblia profundiza la intimidad y comunión con el Espíritu Santo, el creyente puede interpretar sus sueños
con mucho cuidado, pues no puede contradecir la Palabra de Dios. La interpretación viene de Dios mismo.

En el caso de José y Daniel ellos recibieron ese don en el Antiguo Testamento.

No es un don del Espíritu Santo, cuando Dios da un sueño, esa persona tiene la responsabilidad de pedirle a
Dios en oración que le dé la interpretación del sueño.

Cuando un sueño viene de Dios, lo más probable es que uno mismo lo sepa. No todos los sueños son
bonitos, por ejemplo: el sueño de Faraón, de los magos, etc.

Lo más aconsejable es que cada persona tenga un cuaderno donde anotar los sueños y si son repetitivos es
bastante probable que sea de parte de Dios. También se puede anotar los sueños que otras personas tengan
con uno, de esta manera se podrán relacionar unos sueños con otros y se estará valorando lo que Dios está
hablando.

Es Dios quien da el entendimiento de los sueños. Por ejemplo, Daniel porque tenía un propósito su vida; para
que ese propósito se cumpliera le dio el poder de interpretar los sueños.

NOTA: No debemos depender de otras personas para que interpreten los sueños; es Dios quien da la
interpretación porque Dios anhela tener comunión con nosotros.

Tanto en Génesis como en el Libro de Daniel, Dios le habló a gente impía.

En Daniel Capítulo 2, Dios le habló a Nabucodonosor y tenía magos, encantadores, hechiceros que imitaban
interpretar sueños, porque el diablo es un imitador de todo lo que viene de Dios para confundirnos. Así hoy en
día hay libros de “interpretación de sueños” y hasta fotocopiados, los cuales vienen a ser como la
interpretación de los magos y hechiceros de Nabucodonosor o del Faraón.

Es bíblico escribir lo que soñamos, las visiones, las profecías, porque esto es valorar lo que Dios está
hablando.

La interpretación tiene que venir de parte de Dios:

Daniel 2: 26 – 28; 5: 12 y capítulo. 16

Génesis 40: 16 – 23
Vemos que tanto Daniel y José recibieron la interpretación de parte de Dios.

Los sueños no siempre son literales tal como los hemos soñado.

No todo detalle en el sueño es necesariamente simbólico, y no es necesario ser interpretado; es decir parte
del sueño puede estar con símbolos y otra parte no

SIMBOLOGÍA BÍBLICA

1 = Dios mismo, como el Único: Mateo 6: 33; Él es el primero.

2 = Testigos, testificar.

3 = Plenitud Divina, la Trinidad. Algo completo que nos viene de Dios.

4 = Los cuatro Vientos, 4 estaciones, 4 evangelios, muy probable está hablando de todo el mundo, algo que
incluye mucho Génesis 2: 10; Marcos 16: 15.

5 = Ministerio. Representa la organización a nivel ministerial.

6 = Humanidad, hombre, cuando este número se repite es reafirmación. No siempre representa algo satánico
o al anticristo.

7 = Perfecto

8 = Nuevo comienzo Génesis 17: 1; I Pedro 3: 20

9 = Dones y frutos del Espíritu Santo. Plenitud, llenura.

10 = Mandatos de Dios, leyes de Dios para llamarnos quizás la atención o para enseñar a otros. Éxodo 34: 28

11 = Desorganización, incompleto, sin ley, sin reglas; es lo que quiere establecer el anticristo: el caso Daniel
7: 24; Génesis 32: 22

12 = Organización de Dios, orden de Dios. Mateo 10: 25; Levítico 24: 5 – 6

13 = Rebelión, apostasía (apóstata: el que conociendo a Dios se aleja de Él) Génesis 14:4; 10:10.

Agua: Palabra de Dios, ella nos limpia, purifica.

Animales: Arañas, culebras = sueño de alerta.

Ratas, babosas, gusanos = pecado.

Serpiente o culebra = oposición o pecado

Carro, auto: La vida de uno mismo. (Contra el tráfico: se está caminando en dirección opuesta a la que Dios
quiere.)

Pastor(a): El Señor mismo diciendo algo.

Mar: El mundo ajeno a Dios, que vive de espaldas a Dios.

Zapatos: Relacionado con el evangelismo.

Símbolos tomados de los colores y materiales del Tabernáculo de Moisés:

Colores:

Blanco = Algo puro, limpio.

Rojo = La Sangre del Cordero, redención, salvación.

Azul = Celestial, asuntos celestiales.

Púrpura,

morado,

granate = Realeza (color de los reyes)

Materiales:

Oro (dorado) = Divinidad, Rey supremo.

Plata (plateado) = Redención (para obtener la plata se sufría mucho: el sufrimiento de la redención).

Bronce = Sacrificio (el altar del sacrificio era de bronce).

Esta simbología no sólo es para los sueños, también se puede considerar para las visiones.

Cuando soñamos con otra persona no “necesariamente” se lo tenemos que decir, es para preguntarle a Dios:
¿Qué quieres que haga con este sueño? Generalmente es para interceder.
Hay sueños que no son sucesos inmediatos, puede ser que sea para algo futuro. Hay sueños que no
necesitan interpretación, tal es el caso de los magos: ellos cogieron sus maletas y se marcharon donde Dios
les indicó.

Los sueños y visiones siempre serán para que hagamos algo, para animarnos, consolarnos, darnos dirección
y también llamarnos la atención o corregirnos.

¿QUÉ VAMOS A HACER CUANDO TENGAMOS UN SUEÑO?

1. Preguntarle al Espíritu Santo ¿Qué hacer con él?

2. Relacionar el sueño con lo que se está viviendo, es decir con las circunstancias.

3. Buscar en la Palabra de Dios relación con el sueño. Proverbios 25: 2 “Gloria de Dios es encubrir un asunto;
Pero honra del rey es escudriñarlo.”

Es gloria de Dios encubrir o revelar algo y es nuestra honra escudriñar, buscar en la Palabra de Dios.

Un sueño o visión de Dios, nunca puede contradecir su Palabra.

APLICACIÓN DEL SUEÑO O VISIÓN

¿Qué voy a hacer con ese sueño o visión?

1. Ver si ese sueño, se aplica a nuestra vida o a la vida de otra persona. Si es para otra persona, es para que
nosotros oremos, porque el autor del sueño es Dios y sólo Él podrá dar dirección. Contarle a “esa persona” el
sueño sólo si Dios se lo manda.

2. Preguntarle al Espíritu Santo, si te ha dado el sueño para que intercedas y debes ser fiel a ello, porque es
un encargo que viene directamente de Dios.

A veces es solamente para orar y mantenerlo en secreto.

Daniel 7: 28 “Aquí fue el fin de sus palabras. En cuanto a mí, Daniel, mis pensamientos me turbaron y mi
rostro se demudó; pero guardé el asunto en mi corazón.”

Marcos 8: 30 “Pero él les mandó que no dijesen esto de él a ninguno.” Lucas 9: 21 “Pero él les mandó que a
nadie dijesen esto, encargándoselo rigurosamente.”

3. A veces cuando soñamos con otra persona puede ser para acercarnos a esa persona, tal vez para cuidarle,
brindarle amor, afecto y si Dios te manda, te dará el amor suyo para que se lo des a esa persona. Muchas
personas incomodan o asustan a otros con sus sueños. Guárdalo en tu corazón, porque llegará el momento
que lo entiendas.

4. Ten mucho cuidado a quién se lo cuentas.

5. Ten en cuenta que podría ser para otra persona.

6. Suponiendo que se concluye que el sueño o visión es de advertencia: si es para la vida de uno mismo se
acudirá al Líder de Sede o a nuestra Pastora, porque bajo la dirección de Dios se sabrá qué hacer

POR MEDIO DE LOS DONES DEL ESPÍRITU SANTO

Dios nos hablará a través de: Palabra de Conocimiento o Ciencia, Palabra de Sabiduría, Discernimiento de
espíritus, Interpretación de lenguas, Profecía.

Palabra de Conocimiento o Ciencia, es la revelación de Dios a cerca de sus planes y voluntad sobre algo
específico.

Palabra de Sabiduría, es el consejo de Dios sobre lo que debemos hacer acerca de esos planes y esa
voluntad de Dios es lo que tenemos que hacer nosotros.

Discernimiento de espíritus, es el poder sobrenatural para identificar espíritus, de la manifestación de Dios o

de espíritus demoníacos y conocer su actividad.
Interpretación de lenguas, capacidad divina de interpretar el mensaje recibido en lenguas, cuando se trata de
profecía. Se interpreta las lenguas cuando hay un mensaje de parte de Dios.

Profecía, revelación Divina que da un mensaje de parte de Dios.

Tenemos que discernir:

1. Si es del Espíritu de Verdad o del Espíritu de Dios.

2. Si es que viene de error o espíritu de mentira.
3. Si es que es de la carne.

Preguntas a formular cuando viene un “supuesto” mensaje profético:

1. ¿Cómo afectará mis responsabilidades en este momento? Por ejemplo, si es un mensaje: múdate de
ciudad, renuncia a tu trabajo.

2. ¿Es congruente con mi vida? Es decir, ¿tiene sentido al tipo de vida que tengo?

3. ¿Qué dice mi Pastor o Líder de Sede o nuestra Apóstol acerca de esto?

No tomes decisiones que van a cambiar radicalmente tu vida solamente por un “supuesto” mensaje profético.

¿Quiénes son los que frecuentemente se equivocan con un mensaje que no es de parte de Dios?

1. Los creyentes que son “turistas de iglesias”; es decir, los que no están bajo ningún ministerio pastoral.

2. Los bebitos en la fe, porque como no han madurado no saben que tienen que discernir todo.

FLUIR DE LOS DONES DEL ESPÍRITU SANTO:

Estos Dones del Espíritu Santo nos pueden llevar a hacer:

1. La oración profética del uno por el otro. Se empieza a orar y en el corazón hay un sentir de lo que Dios
quiere que se ore y la otra persona ni siquiera le expresó lo que deseaba y uno se sorprende de ese sentir;
Dios comienza a mostrar cosas que uno no sabe. Es una oración guiada por el Espíritu Santo. Los profetas
intercedían por su nación y Dios les revelaba las cosas por las cuales interceder, porque Dios es el que
conoce todas las cosas.

2. Las proclamas proféticas.

Hay personas que no fluyen en los Dones del Espíritu Santo por temor, por miedo y esto es falta de fe y es
orgullo: “Voy a quedar mal”, “¿Qué van a pensar de mí?”, “Me van a ver mal.”, “Y si me equivoco”; “Que
vergüenza quedar mal”

Todo esto se vence pensando de la siguiente manera: “Prefiero quedar mal delante de los hombres, que
delante de mí Señor”.

También hay temor de rechazo de los demás. Tenemos que tener el sentir de Jeremías. “Ay de mí si no lo
hago”

PROFECÍA EN EL ANTIGUO TESTAMENTO

Los profetas del Antiguo Testamento todos fueron llamados por nombre, para la tarea específica de profetas:
“Desde el vientre de tu madre te conocí”. (Jeremías)

Los vaticinios eran exactos; sus profecías y enseñanzas llevaban al pueblo a adorar a Dios.

Las palabras de estos profetas acerca de las profecías eran inexactas porque había pecado en ellos.

La Palabra de Dios también reconoce falsos profetas.

Jeremías en repetidas veces reconoce: “entonces conocí que era palabra de Jehová”. Esto lo mencionaba
cuando reconocía que era Dios quien le habló.
El problema de no estar muy seguros es un problema humano, pero igualmente hay que decir lo que Dios le
dice a uno que diga. Jeremías no estaba seguro de sí mismo.

La dependencia de Dios nos llevará a estar seguros, no de uno mismo, sino seguros de Él.

En el Antiguo Testamento los falsos profetas eran: orgullosos, impertinentes, soberbios; habían llevado malos
frutos en su vida, vidas y ministerios de pecado; y constantemente sus vaticinios eran inexactos.

En las siguientes citas veremos que había falsos profetas y lo que ellos hacían: Jeremías 23: 9; Ezequiel 13: 1
-3

Cuando discernimos una profecía tenemos que ver si se ajusta o no a la Palabra de Dios; se debe de
escudriñar todo

I Reyes 13: 11 – 22 Era un buen profeta, pero se desvió.

Gálatas 1: 8 Pablo reconocía que uno corría el riesgo de desviarse de la verdad, de alejarse de Dios.

Estos Dones del Espíritu Santo por lo general operan juntos y fluyen en forma natural y espontánea cuando
los creyentes se reúnen y no contristan al Espíritu Santo con falta de fe, incredulidad, divisiones, discordias,
chismes, pecados escondidos.

PROFECÍA EN EL NUEVO TESTAMENTO

Lo más importante es buscar a la luz de la Palabra de Dios, que debemos esperar; todo lo debemos de
escudriñar y nuestra base para TODO lo que hacemos en la vida de la Iglesia, es la Biblia.

Es lo que Dios mismo quiere para nosotros: su Iglesia.

Hemos estudiado los Dones del Espíritu Santo, estos son repartidos por Voluntad de Dios entre los creyentes
que vienen a ser administradores de lo que recibieron por gracia, para edificación de la Iglesia.

La palabra de mensaje profético viene al creyente como Revelación Divina con relación a los Propósitos
Divinos; es decir, lo que Dios trajo en forma espontánea a mi corazón y a mi mente.

No significa que todos tienen que hacerlo como obligación, si no que, TODOS tienen el Poder para hacerlo.

La Profecía en el AT La Profecía en el NT (Bajo el Nuevo Pacto)

 Sólo unos pocos profetizaban  Todos son capacitados I Corintios 14:31, Hechos 2:17

 Llamado personal  Llamado a los creyentes

 Mensaje exacto palabra por palabra  Mensaje por una revelación en forma de pensamientos
espontáneos “sentir” que es de afuera hacia adentro (de Dios al
creyente)

 Escuchaban lo que Dios decía y lo transmitían.  El escuchar no es necesariamente audible.

 Era un oficio.  Es un Don.

 El Espíritu Santo estaba sobre:  El Espíritu Santo está en: Mateo 3:16; Juan 1: 32-33; II Reyes
2:15; Isaías 42:1; Ezequiel 6:1 Hechos 1:8; 10:44-45; I Pedro 4:14; Juan 14:17

 El Profeta se aislaba, se separaba del pueblo.  Es dado como regalo a los creyentes, está en el
cuerpo unido en amor.

 Transmitían bastante juicio.  La Profecía es para edificar, consolar y exhortar.

En la profecía la instrucción recibida es para EDIFICAR, CONSOLAR Y EXHORTAR.