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La estructura perversa- Guía

El término perversión fue escogido por Krafft Ebing en 1889 y es una de las 3
grandes estructuras clínicas, junto a la psicosis y la neurosis. Los planteamientos a
continuación vienen desde un enfoque psicoanalítico para descubrir cuáles son las
condiciones necesarios para definir un verdadero perverso.
Freud nombró la perversión como las extralimitaciones de la vida sexual y una
desviación con respecto al acto sexual, haciendo referencia a la práctica sexual a su
condición erótica. Encontró la negación como mecanismo específico que opera en la
perversión.
La renegación tendría un origen edípido, y de esta forma, el perverso estaría fijado a
fines sexuales pregenitales, ocasionando una fijación libidinal patológica debido a la
ausencia de la castración.
Lacan, por otro lado, para referirse a la perversión recurre al objeto de la pulsión. El
objeto de la pervesión está constituido sobre la base del intento de negar la castración
de la madre, una desmentida de la castración materna. Es un modo de respuesta a la
falta del Otro y un intento de cubrir la falta materna.
Lacan considera que no hay que limitarse solo al plano sexual para definir la
perversión sino que ésta se encuentra al nivel del goce y de esta forma, la parte corporal
no es tan relevante para obtener dicho goce.
El perverso hace sentir al Otro la falta, causando angustia, él ya ha encontrado el
objeto de la libido que le procura un goce, su misión ahora es hacer que el Otro sienta
ese goce, él se convierte en el objeto de goce del Otro, pero en apariencia es como si los
otros no le importaran, no necesita ni la aprobación ni el acuerdo del Otro, anda solo, y
no tiene razones para cambiar. No se avergüenza ni tiene sentimientos de culpa.
Por otro lados, se encuentran varios tipos de perversión; sadismo, masoquismo,
exhibicionismo y voyeurismo. Lacan intenta romper con la idea de pares, son posiciones
heterogéneas y ninguno es el reverso del otro, son relaciones asimétricas o como Freud
lo denomina, ninguna pulsión comporta el recorrido inverso de la otra. Por lo tanto, los
perversos no se dividen pero sí necesitan producir la división subjetiva en el otro,
causando angustia.
Finalmente, lo que tienen en común cada forma de perversión es que el objeto sea
representado por un fetiche y la imposición de la voluntad del goce, que consiste en no
escuchar lo que el Otro le demanda, no hay anda más que lo que él impone, esa es la
voluntad del goce.
Con relación a la teoría anterior, el perverso quiere finalmente que el Otro goce,
trabaja para el Otro todo el tiempo, hace todo por el Otro, dándole una importancia a ese
Otro, pero al mismo tiempo demuestra gran indiferencia con relación al Otro y colocando
su goce sobre el Otro, ¿Por qué se dan estas dos paradojas en la perversión y
finalmente que es lo que el perverso busca con la importancia y la indiferencia hacia el
Otro?

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