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Por nosotros, Por el medioambiente

Giny Marcela Parra Ramirez

Facultad de ciencias empresariales, Universidad IBEROAMERICANA

Administración de empresas

Competencias Comunicativas

Julieth Cuellar

10 de abril del 2022


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Por nosotros, por el medioambiente

Las enfermedades no nos llegan de la nada,

se desarrollan a partir de pequeños pecados diarios en contra de la naturaleza.

Cuando se hallan acumulado suficientes pecados, las enfermedades aparecerán de repente.

Hipócrates

Desde finales de 2019, y a raíz de la declaración de la pandemia por COVID-19, el

tapabocas, un accesorio personal poco habitual hasta entonces, se convirtió en el

protagonista en la lucha contra el contagio de la enfermedad. Es así como el uso de

protección de las vías respiratorias se volvió obligatorio en casi todos los países del

mundo y, por casi dos años, ha sido el acompañante diario a la hora de salir de casa

(universidad Javeriana, 2021). Aquí veremos como gracias a los avances tecnológicos en

la medicina, contamos con una vacuna, la cual hasta el día de hoy demostrado su

eficacia en frenar el contagio por el covid-19.

Hoy en día ya la mayor parte de la población colombiana ha sufrido la infección por el

COVID-19. La vacuna contra el COVID brinda a la mayoría de las personas un alto nivel

de protección contra el COVID-19 y ofrece protección adicional a las personas que ya

tuvieron COVID-19. (centros para el control y la prevención de enfermedades, 2021).

Con la vacuna lo que hacemos es crear una respuesta de generación de anticuerpos sin

tener que sufrir la enfermedad, según “vacuna coronavirus, canal institucional.tv, 2022”

Colombia ya tiene 35 millones de personas con esquema completo de vacunación, llegar

a esta cifra significa que el país queda mucho menos expuesto al COVID-19.
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En la actualidad el uso del tapabocas ya no es una medida necesaria para la prevención

contra el COVID-19, debido a la implementación de las vacunas. Con la eliminación del

uso del tapabocas se disminuye la cantidad de residuos generados por su uso constante.

Si bien se ha demostrado que disminuye el riesgo de contagio, su uso de forma masiva

en todo el planeta se ha vuelto un problema a nivel ambiental. Buena parte de las

mascarillas usadas en el mundo son quirúrgicas y desechables, por lo que después de

ser usadas algunas horas, van a dar a la basura, en el mejor de los casos. (universidad

Javeriana, 2021).

Con lo expuesto anteriormente se puede concluir que la eliminación del uso del

tapabocas puede ser una de las medidas más acertadas tanto para nosotros como para

el medioambiente, pues para ninguno es un secreto que las personas no les damos el

uso adecuado, sabemos que el tabocas debe ser cuidadosamente colocado para evitar

la auto contaminación y que también debería ser cambiado regularmente para que no

sea antihigiénico, esto a su vez afecta en gran manera medioambiente debido al

desecho masivo que según la ONU un 70% de estos terminan en los océanos y un 12%,

de ellos sea quemado, causando en ambos casos graves impactos por contaminación.

(universidad Javeriana, 2021).


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Bibliografía

1. https://vacunacoronavirus.canalinstitucional.tv/

2. https://www.javeriana.edu.co/hoy-en-la-javeriana/y-que-hacemos-con-tanta-

contaminacion-por-tapabocas/

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