Está en la página 1de 4

¿Qué es la memoria funcional?

childmind.org/es/articulo/que-es-la-memoria-funcional

Entender nuestra “libreta de notas” mental.

Escrito por: Rae Jacobson

Experto clínico:
Matthew M. Cruger, PhD

Imagínese esto: usted está organizando una fiesta y le pide a su hijo ayuda con los
preparativos. Las instrucciones que le da parecen bastante simples: colocar sus
juguetes en su habitación, llevar los zapatos de todos al armario y poner la mesa. Él
está de acuerdo, pero cuando usted va más tarde a ver cómo va, la mesa no está
puesta, los zapatos todavía están en el pasillo y ha puesto los juguetes… ¡en el
armario!

¿Qué está pasando?

Los niños que tienen dificultades para “mantenerse en el camino sin desviarse”
pueden tener problemas con la memoria funcional, que es una función ejecutiva que
juega un papel central en cómo procesamos, usamos y recordamos la información de
manera cotidiana. Acordarse de un número de teléfono, recordar instrucciones y
cómo usar la gramática y la sintaxis, poder  escribir un ensayo y aplicar la fórmula
cuadrática son todas tareas mentales que utilizan la memoria funcional.

“La memoria funcional es una especie de categoría que está por encima de la
atención”, dice Matthew Cruger, PhD, director sénior del Learning and Development
Center del Child Mind Institute. “Es tener en cuenta todo lo que necesitamos tener en
cuenta mientras hacemos algo”. Mientras que los recuerdos a largo plazo
permanecen con nosotros incluso cuando no pensamos en ellos, la memoria
funcional es un proceso activo: una libreta de notas mental donde almacenamos y
procesamos toda la información a la que necesitamos acceder en un momento
determinado.

Un espacio de trabajo limitado


Pero, ¿qué sucede cuando la libreta de notas se sobrecarga?

1/4
“Nuestros cerebros tienen una capacidad finita para manejar mucha información a la
vez”, explica Linda Hecker, MEd, especialista líder en educación en el Landmark
College Institute for Research and Training. Hecker, quien también se desempeña
como profesora asociada en la universidad, dice que ayuda a sus estudiantes a
comprender el papel de la memoria funcional, al describirla como un tablero. “Nos
referimos a ella como un ‘espacio de trabajo cognitivo’. Cuando tienes mucha
información nueva, es fácil sobrecargar tu espacio de trabajocognitivo

y las cosas comienzan a caerse”.

El Dr. Cruger está de acuerdo, y señala que cuando se les pide a los niños que tienen
problemas con la memoria funcional que realicen una nueva tarea y piensen en cinco
reglas sobre cómo debe hacerse la tarea, a menudo se quedan cortos. “No pueden
recordar ambos grupos de instrucciones la vez. Terminan haciendo la tarea, pero
cometiendo muchos errores en el camino (o completando únicamente la mitad de la
tarea), porque no pueden recordar al mismo tiempo lo que deben hacer, lo que sigue
y las instrucciones de cómo se hace.

Trastornos del aprendizaje y memoria funcional


Todos batallamos a veces con los límites de la memoria funcional: olvidar un artículo
de la lista de compras o quedarse en blanco cuando intentamos recordar las reglas
de un nuevo juego. Pero para los niños con trastornos del aprendizaje, dice Hecker,
la memoria funcional a menudo presenta un problema más significativo.

“Los niños con discapacidad del aprendizaje tienen una menor capacidad de memoria
funcional”, dice Hecker, porque adaptarse a las dificultades que vienen con las
discapacidades del aprendizaje, como dislexia, trastorno del aprendizaje no verbal o
problemas de procesamiento auditivo, ocupa una cantidad considerable de su
“espacio de trabajo cognitivo”.

Eso se debe a que necesitan dividir y realizar a conciencia procesos que otros niños
hacen de manera automática. Por ejemplo:

Si un niño tiene problemas de procesamiento auditivo, tiene que esforzarse


mucho más para escuchar, recordar y aplicar lo que se dice en clase.
Un niño con un trastorno del aprendizaje no verbal tiene que trabajar de manera
activa para interpretar y responder adecuadamente a las señales sociales,
como expresiones faciales, el sarcasmo o las insinuaciones: un proceso que es
natural para la mayoría de los niños.

Este trabajo adicional significa más desorden en el “tablero”, lo que deja menos
espacio para nueva información y, a menudo, se traduce en una velocidad de
procesamiento más lenta en general.

2/4
TDAH y memoria funcional
Los niños contrastorno por déficit de atención con hiperactividad

o TDAH también pueden tener dificultades con la memoria funcional, que es una de
las funciones ejecutivas básicas (o esas habilidades mentales responsables de
ayudarnos a mantenernos organizados, establecer metas y completarlas). Las
debilidades en las funciones ejecutivas son las que hacen que los niños conTDAH
sean propensos a la desorganización y a la falta de atención. Al igual que los
trastornos del aprendizaje, los niños con TDAH tienen que trabajar activamente para
mantenerse concentrados y organizados, cosas que tienden a ser automáticas para
otros niños.

Por ejemplo, recordar las reglas o principios rectores es más difícil para los niños con
TDAH que ya están teniendo problemas para tratar de eliminar las distracciones.
Pueden ser distracciones externas, como un grifo de agua que gotea o niños jugando
afuera, o internas, como ansiedad o incluso simplemente preguntarse qué hay para
cenar más tarde.

“Un espacio de trabajo cognitivo más pequeño significa que las funciones de la
memoria funcional (retener información, recordar instrucciones o realizar tareas que
requieren planificación) son más difíciles de realizar”, dice Hecker. “Menos espacio
significa que es más probable que las cosas se pierdan en el camino”.

Uno de los desafíos que enfrentan los niños que tienen problemas con la memoria
funcional, señala el Dr. Cruger, es que sus lapsos pueden malinterpretarse fácilmente
como un mal comportamiento. Cuando no pueden seguir un conjunto de
instrucciones, parecen estar desmotivados o incluso desafiantes, lo que puede
generar conflictos con los maestros y los padres, y llevar a acusaciones de que no  se
esfuerzan lo suficiente.

Los niños odian tener que admitir que no pueden recordar cosas, agrega, y tienden a
tratar de minimizar la cantidad de esfuerzo que ponen en cosas que no producen
resultados positivos. Y, a su vez, las críticas que reciben los desmotivan a invertir la
energía adicional que se requiere para dar seguimiento a lo que se espera de ellos.

Por ejemplo, explica el Dr. Cruger, “si  usted le dice a su hijo ‘ve a ponerte pijama,
saca tu ropa para mañana y lávate los dientes’, pero él solo completa una o dos de
las acciones o sigue viniendo a preguntar ‘¿cuál fue la tercera cosa otra vez?’”. Sin
contexto, podría parecer que su hijo está siendo desobediente, pero una vez que se
sabe a qué estar atentos,“ es una señal bastante evidente de que está luchando con
la memoria funcional”.

La última revisión de este artículo se realizó el 8 de febrero de 2022.

3/4

4/4

También podría gustarte