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DMGO. XV T°. ORD.

, CICLO C

Bienvenida:
La celebración de la Eucaristía siempre nos hace presente la llamada que
Jesús dirige a todas las personas. La parábola del buen samaritano es el
contenido del evangelio que proclamaremos hoy. En ella se nos hace una
llamada que merece nuestra respuesta, desde la total libertad con que Dios
nos ha creado. Pero también Cristo, como buen Samaritano, saldrá a nuestro
encuentro para curar nuestras heridas y debilidades. También hoy nos
podemos hacer esta pregunta ¿quién es mi prójimo? Porque hay mucha
gente que sufre a nuestro lado, a quienes hay que ayudar y levantar, a
quienes hay que curar y estar cercanos... Hoy necesitamos descubrir quién
es nuestro prójimo.
Recibamos a quién preside esta celebración, el padre…, a nuestro hermano
Diácono… y a los acólitos de nuestra comunidad; nos unimos al coro en el
canto de entrada.

Acto Penitencial
o Porque no te reconocemos en nuestro prójimo. Señor, ten
piedad.
o Por no seguir el ejemplo de Jesús que, como Buen Samaritano,
nos acoge siempre. Cristo, ten piedad.
o Por no atender con respeto y cariño a las personas más cercanas
a nosotros. Señor, ten piedad.

LITURGIA DE LA PALABRA
Primera lectura
El pasaje del Libro del Deuteronomio que escucharemos es parte del último
discurso de Moisés al pueblo de Israel. El pueblo será feliz, si cumple los
mandamientos de Dios. Los mandamientos de Dios están impresos en el
corazón de cada uno. Pongamos atención.

Salmo 68      


La súplica de este salmo se eleva desde lo profundo del dolor; el Dios fiel y de
inmensa ternura y amor no permanecerá indiferente.
R./ Humildes, busquen al señor, y revivirá su corazón.
Segunda lectura
Esta lectura, de la Carta a los Colosenses, es un himno cristológico que canta,
como otros himnos paulinos, la dignidad divina de Cristo Jesús: Cristo
creador, Cristo redentor y Cristo reconciliador que se unen para describir esa
inmensa novedad. Escuchemos al Apóstol del Señor.

Evangelio
Según el relato evangélico que vamos a escuchar el prójimo es el que se
acerca a la otra persona. La parábola es una explicación
impresionante de las reacciones suscitadas ante el prójimo necesitado de
ayuda. Jesús es el Buen Samaritano y nos invita a tener sus mismos
sentimientos y hacer lo que él hizo. Aclamemos con el canto a Jesús.

Oración de los fieles


Oremos al Señor, nuestro Dios, que no juzga, sino que libera. A cada
invocación decimos: "SEÑOR, ESCÚCHANOS Y DANOS TU AMOR"
1.-Por la Iglesia, para que, con sentido crítico y profético, analice la situación
de nuestro mundo y responda desde el Evangelio a los nuevos desafíos
sociales. Con María, roguemos al Señor.
2.-Por los cristianos; para que sepamos romper los moldes que nos atan,
salgamos al encuentro de cuantos sufren, donde nadie quede malherido por
el camino. Con María, roguemos al Señor.
3.-Por quienes gobiernan las naciones; para que, en sus gestiones, pongan en
primer lugar las necesidades de las personas. Con María, roguemos al Señor.
4.-Por nuestra comunidad parroquial para que, en este tiempo de
vacaciones, seamos motivo de alegría y colaboración para cuantos están
junto a nosotros. Con María, roguemos al Señor.

LITURGIA EUCARISTICA
Presentación de las ofrendas
La riqueza de significado que tienen el pan y el vino, que ahora presentamos
al altar, los pone en conexión cercana con nuestra vida de trabajo, anhelos,
necesidades y alegrías. Compartir el pan es como ayudar en otras
necesidades.

La colecta que vamos a realizar es un signo de nuestro compromiso con la


parroquia, que es nuestra casa. colaboremos económicamente, de modo
especial en estos momentos tan complicados, en los que tantas carencias se
han visto acentuadas. Agradecemos su generosidad.

Comunión
Cada Eucaristía es un llamado concreto a ser otros Cristo, que caminemos
tras sus huellas, llevando su mensaje de amor, de paz, de fraternidad, a todos
los hombres, sintiéndolos verdaderamente nuestros hermanos. Cantamos
junto al coro.

Comunión espiritual
Todos aquellos que no han podido acercarse a recibir a Jesús
Sacramentado, especialmente quienes siguen esta eucaristía por las RRSS,
pueden hacer la Comunión Espiritual rezando la siguiente oración:

Creo Señor mío que estás realmente presente


en el Santísimo Sacramento del altar.
Te amo sobre todas las cosas y deseo
ardientemente recibirte dentro de mi alma;
pero, no pudiendo hacerlo ahora sacramentalmente,
ven al menos espiritualmente a mi corazón.
Y como si te hubiese recibido, me abrazo
y me uno todo a Ti;
Oh, Señor, no permitas que jamás me separe de Ti. Amén.

Acción de gracias

Avisos
-

Despedida
Hemos escuchado la Palabra de Dios que nos compromete en una acción
responsable a favor de nuestros hermanos más desfavorecidos, para que
salgamos decididos a descubrir en nuestro entorno y para servir a nuestro
“próximo-prójimo”, ya que el Buen Samaritano, Jesús, ha curado nuestras
heridas y nos ha transmitido su fortaleza para estar cerca de los que más
sufren.
Nos ponemos de pie para hacer oración y recibir la bendición de envió.

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