EQUILIBRADA PRANAYAMA El ritmo básico del Pranayama es el siguiente:
1. Tape suavemente CON EL PULGAR la fosa
nasal derecha e inhale por la fosa nasal izquierda (ver fig.). Ahora tape la fosa izquierda y exhale fuerte por la fosa nasal derecha. 2. Siga tapando la fosa izquierda e inhale por la fosa derecha y exhale por la fosa nasal izquierda. 3. Repita y alterne de ese modo las fosas durante diez minutos mínimo. Luego baje el brazo y permanezca reclinado confortablemente, con los ojos cerrados, durante uno o dos minutos. Puede proceder inmediatamente a la meditación, si ésta es su actividad siguiente.
Observe que se inicia cada respiración con la inhalación y se termina con la
exhalación. En el Pranayama es necesario inhalar a fondo. La respiración debe ser natural, aunque algo más lenta y más profunda que de costumbre. Si en cualquier momento usted siente la necesidad de respirar por la boca, hágalo, y reanude el ejercicio en cuanto se encuentre a gusto otra vez. Algunas personas presentan mareos; esto es normal, además de una buena señal, ya que indica que empiezan a respirar de un modo más equilibrado y aumentan el suministro de oxígeno al cerebro, evitando así, la hipoxia que es el principio de mal de Parkinson y Alzheimer.
PRINCIPALES BENEFICIOS DEL PRANAYAMA:
POSICION MÁS RECOMENDADA Purifica la sangre, las vías respiratorias y los pulmones. Es considerado el mejor ansiolítico natural. Incrementa la captación de oxígeno y la expulsión de CO2. Previene de resfriados y todas las molestias de cabeza y cuello, inclusive sinusitis. Ayuda a controlar la mente, proporcionando calma y serenidad. Tonifica el cerebro, corazón, sistema nervioso y médula espinal. Aporta vitalidad. Alivia la hipertensión, la diabetes, las enfermedades cardiovasculares, herpes y la caída del cabello, etc.etc.
TIEMPO DIARIO DE PRÁCTICA: diez minutos en la mañana y diez