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El Desarrollo Sostenible

La sociedad de la cual formamos parte de consumo origina una cantidad enorme de


millones de toneladas de residuos: productos industriales de desecho, objetos antiguos y
utilizados, embalajes y residuos agrarios. La acumulación industrial, la densa hermandad
poblacional en zonas metropolitanas y monumentales metrópolis, y la progresiva
deserción del campo nos daña doblemente; entre tanto, la calidad de vida urbana se
deteriora y las superficies agrícolas cultivadas a lo largo de siglos se transforman en
tierras infecundas. La actividad humana fue constantemente causa de la generación de
residuos y de contaminación.
Varias personas han dicho que es una cantinela de ambientalistas y nada más, todavía
una vez que la prueba experimental y científica indica que algo extraño pasa en la
actualidad en nuestro amado mundo azul, además, sostienen que todo lo cual sugieren
los estudios para tomar acción contra el calentamiento global (energías más eficientes,
vehículos más pequeños, etcétera…) terminaría por lastimar o al menos, ralentizar la
economía mundial.
Los beneficios del desarrollo sustentable en sí son muchas, comenzando ya que un
funcionamiento correcto de nuestro alrededor nos asegura que al menos tendremos un
lugar estable en todo el tiempo en cuanto al clima y un sistema responsable en el extenso
plazo si hacemos referencia a la flora, fauna y al conveniente periodo de los ecosistemas.
En teoría, los resultados positivos de un procedimiento para regir de forma globalizada el
ámbito que nos circunda son que estas podrían ser mundialmente compartidas y
ejecutadas por todos, según nuestro nivel de capacidad para encarar los probables
precios que el desarrollo sustentable puede producir, o sea, de una forma equitativa y
justa.

No obstante, este panorama no sacia los requerimientos de varios políticos, que vuelvo a
mencionar, sostienen que el precio de una sociedad sustentable significaría pérdida de
empleos y decrecimiento económico. El incremento económico que se pierda por las
regulaciones del medio ambiente podría ser poco comparado con la total parada de los
medios de producción de un futuro y caótico mundo, donde nos lamentaríamos de no
haber actuado previamente una vez que los precios relativos eran mucho menores para
resolver el problema.

No obstante, falta mucha conciencia, en especial en las naciones más desarrollados, que
poseen la más grande responsabilidad por sus gigantes emisiones de gases, y según el
inicio de igualdad, son los que deberían costear más, por lo menos en un mundo de
responsabilidades y actividades compartidas. Ya hace subjetivamente poco, unos 50 años
el hombre ha tomado cierta conciencia, en el asunto de la contaminación y la inquietud
por el futuro de los pobladores del mundo, pese a este interés, en verdad únicamente se
ha quedado en aquello, en interés, debido a que son pocos los proyectos para parar en
seco esta devastación planetaria.

El propósito de la raza humana referente a energías, ha de ser el de obtener una energía


limpia, barata y segura, que logre suministrarse a todo el mundo. Las fuentes de energía
renovables son diversas a las de combustibles fósiles o centrales nucleares gracias a su
variedad y copiosidad. Se estima que el Sol abastecerá estas fuentes de energía
(radiación solar, aire, lluvia, etcétera.) a lo largo de los siguientes 4 mil millones de años.
La primera virtud de una determinada proporción de fuentes de energía renovables es que
no generan gases de impacto invernadero ni otras emisiones, contrariamente a eso que
pasa con los combustibles, sean fósiles o renovables.
Los cambios que se han producido en la sociedad en las últimas décadas han tenido un
gran impacto a nivel económico. Antes de la industria y la maquinaria a gran escala,
nuestros antepasados se centraron en la agricultura y la crianza de animales. Sin
embargo, a medida que el crecimiento de la población se ha vuelto más complejo para
satisfacer las necesidades mínimas de las personas, el concepto de desarrollo sostenible
se ha vuelto más importante. Básicamente, se trata de una serie de acciones
encaminadas a proteger el medio ambiente y priorizar la justicia social, todo ello basado
en las generaciones presentes y futuras. Esta visión surgió por primera vez en la década
de 1950 y ahora está siendo promovida por muchos países para construir un modelo
económico más responsable. Para comprender mejor qué es el desarrollo sostenible, es
necesario analizar su relación con los problemas que caracterizan el mundo actual.

Actualmente, existe un gran número de personas que no pueden cubrir sus necesidades
básicas. Este nivel de pobreza dificulta cualquier posibilidad de mejorar sus condiciones
de vida y presenta una grave crisis humanitaria. Con esto en mente, uno de los objetivos
de la organización de la ONU es apoyar a los grupos vulnerables.
Por otro lado, cabe mencionar que el crecimiento de la población ejerce una presión cada
vez mayor sobre el planeta y los recursos naturales. Como respuesta a esta situación, se
ha optado por el uso de nuevas tecnologías, que pueden acarrear mayores
complicaciones a largo plazo. Un ejemplo de esto se observa en los fertilizantes
manipulados químicamente, y si bien aumentan la productividad de los cultivos, afectarán
negativamente a los suelos a lo largo de los años. La única forma de evitar esto es a
través de un programa responsable de la empresa.
Asimismo, los gobiernos están obligados a elaborar leyes y reglamentos para regular
ciertos procesos que, en última instancia, perjudicarán a las generaciones futuras. No hay
duda de que el desarrollo económico traerá cambios importantes en los ecosistemas, ya
que la extracción de recursos afecta la regeneración y el mantenimiento de sistemas
naturales interconectados y complejos. Existe la necesidad de maximizar su producción
de forma inteligente sin comprometer la biodiversidad de ninguna zona.
Uno de los mayores desafíos del desarrollo sostenible es la gestión de los recursos no
renovables. En el caso de los combustibles fósiles y fósiles, es importante implementar
mejores tecnologías para minimizar su consumo. También se debe priorizar la búsqueda
de alternativas y la realización de campañas de sensibilización relacionadas con el
reciclaje. La próxima generación depende de ello, y el futuro de la humanidad pronto
estará en tus manos. Realizando acciones como: cerrar cada una de las centrares
nucleares, reducir las necesidades del transporte motorizado y frenar el incremento.

Las principales amenazas para el desarrollo sostenible: Las emisiones de gases de


impacto invernadero de las ocupaciones humanas desencadenar eventos climáticos más
extremos (huracanes, inundaciones), que van a tener graves impactos en la
infraestructura, los bienes raíces, la salud y la naturaleza. La pérdida de diversidad
biológica en la biosfera se ha acelerado dramáticamente fertilidad están afectando la
viabilidad de varias superficies rurales. En mi crítica creo que el desarrollo sustentable o
sostenible tiene cosas para lograr sobrevivir, y lo malo es que para realizarlo destruimos
habitad. Pero es muy necesario para la supervivencia humana.

Para lograr finalizar, llego a la conclusión que el desarrollo sostenible, es una parte
importante imprescindible en nuestro día a día y en nuestra sociedad, es verdad que
poseemos a eliminar otros ecosistemas para saciar recursos que nos satisfacen a todos
en la sociedad de la cual formamos parte, pero de la misma forma construimos nuevos
recursos.

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