Lección practica

David es ungido por Samuel (1Samuel 16:1-13)

Tema: Dios mira el corazón

Texto: 1 Samuel 16:7

«Porque Jehová no mira lo que mira el hombre, pues el hombre mira lo que está
delante de sus ojos, pero Jehová mira el corazón.”

I.- El hombre ve lo que esta delante de sus ojos:

Samuel se dejó impresionar por la apariencia física. Al ver al primer hijo de Isaí,
Elia, inmediatamente dijo que delante de Jehová estaba su ungido. Pero Jehová
dijo a Samuel: “No mires a su parecer, ni a lo grande de su estatura porque yo lo
desecho” (1 Samuel 16:6-7).

II.- La apariencia es engañosa:

Hay muchas personas en este mundo que muchos consideran hermosos por
fuera, pero su interior no coincide con su belleza exterior temporal.

«Engañosa es la gracia, y vana la hermosura, pero la mujer (u hombre) que teme

a Jehová, ésa será alabada.» (Proverbios 31:30).

III.- Un verdadero hijo de Dios se conoce:

Un verdadero hijo de Dios reflejara un espíritu humilde, amor por Dios y por los
demás, y posee así alegría, paz, paciencia, amabilidad, bondad, fidelidad,
humildad y dominio propio (Gálatas 5:22-23). Y esta es realmente una persona
hermosa a los ojos de Dios.
 Lección practica

Tema: Un hombre conforme al corazón de Dios

Texto: Hechos 13:22

“Quitado éste, les levantó por rey a David, de quien dio también testimonio
diciendo: He hallado a David hijo de Isaí, varón conforme a mi corazón, quien hará
todo lo que yo quiero”.

I.- Obedece:

David obedeció a su llamado, La obediencia es la característica que Dios quiere

que tengamos, para que seamos de su agrado, y que estemos dispuestos a
obedecerle.

II.- Se deja guiar por Dios:

1Samuel 16:12,13 “Envió, pues, por él, y le hizo entrar; y era rubio, hermoso de
ojos, y de buen parecer. Entonces Jehová dijo: Levántate y úngelo, porque éste
es. Y Samuel tomó el cuerno del aceite, y lo ungió en medio de sus hermanos; y
desde aquel día en adelante el Espíritu de Jehová vino sobre David. Se levantó
luego Samuel, y se volvió a Ramá.

Eso debemos tener presente siempre si fuimos llamados por Dios debemos
dejarnos, guiar por su Palabra y por su Espíritu.

III.- Depende de Dios:

Siempre en nuestro ministerio debemos depender de Dios David tuvo que

enfrentar batallas antes de ser rey de Israel, su llamado fue puesto a prueba, pero
sin embargo, Dios lo había puesto y Dios mismo lo ayudaría.