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Integrantes :

Sebastián Penas Dni. 31362731

Alvarez Florencia Glenda Dni. 39.407.233

Faus Hernan - Dni. 33.368.135

Bollini Ezequiel - Dni. 29.278.276

8. Renuncia Retractación.

1) Gaston puede oponer como excepción que Adrian nunca renuncio a la herencia porque un
escrito en el expediente no está dotado de la formalidad pertinente para renunciar puesto que es
necesario hacerlo por escritura pública o acta judicial y a su vez puede oponerse a la decisión de
Juan porque una vez aceptada la herencia no se puede mover de ese estatus jurídico .

2) Adrián y Juan aceptaron la herencia por lo que se consolida así el estatus jurídico como
herederos. A Su vez Gastón inicio el juicio sucesorio por lo que se presume así aceptada la
herencia.

Capitulo IV. Ejercicio 1

La cesión de derechos hereditarios (y acciones hereditarias) únicamente podrá ser


realizada mediante la pertinente escritura pública, toda vez que ello es uno de los
actos que deben otorgarse de dicha forma, como reza el art. 1618 inc. a del Código Civil y
Comercial.

1) El registro puede fundar el rechazo de la inscripción en que es necesario que el convenio


sea realizado por realizada mediante la pertinente escritura pública con la intervención de
un oficial público matriculado.
2) Diría que fue un mero acuerdo entre partes sin protocolizar.
3) Si podrá negarlo porque no cumple con la formalidad expresada de forma taxativa en la
ley.
4) Aplicaciones de Criterios de cesion de derechos hereditarios en el país jurisprudencia :
Fallo AGUILAR Juan Livorio y Rios de Aguilar Irma s/ Sucesorio: en este fallo Se resolvió
que la escritura pública es la única forma idónea para instrumentar la cesión de
derechos hereditarios. La cuestión a resolver era, si la cesión de derechos hereditarios
tiene que ser necesariamente efectuada por escritura pública o si basta para ello un
escrito presentado en el proceso sucesorio.

Se resolvió que la escritura pública es la única forma idónea para instrumentar la cesión de
derechos hereditarios. La cuestión a resolver era, si la cesión de derechos hereditarios tiene

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que ser necesariamente efectuada por escritura pública o si basta para ello un escrito
presentado en el proceso sucesorio.

Las razones dadas por mayoría fueron, que la escritura pública debe extenderse después de
concluir el contrato de cesión de herencia (arg. art. 1185 Cód. Civil) dando las razones que se
expondrán. El artículo 1184 inc. 6 exige la escritura pública para la cesión, repudiación o
renuncia de derechos hereditarios.

No obstante la letra clara legal, ha sostenido que en materia de cesión de herencia, la


escritura pública es un requisito exigido sólo "ad probationen" y no "ad solemnitatem". Dice el
fallo, que la mayoría no coincide con este criterio y pone de resalto que la antigua doctrina que
se limitaba a distinguir entre las forma "ad probationen" y "ad solemnitaten", ha sido superada
al abrirse paso otra moderna clasificación.

"Existen por un lado los actos formales de solemnidad absoluta, en los cuales la omisión de
las formas establecidas por la ley les priva de sus efectos propios. Por el otro, lo de
solemnidad relativa, en los que, si se omite la forma del acto, se les asignan otros efectos,
produciéndose la conversión que permitirá tenerlos por concluídos como tales, una vez
cumplida la formalidad legal.

En tercer lugar, los que, cualquiera sea la forma de su exteriorización, son eficaces, pero si se
los contesta, sólo pueden ser probados en juicios exhibiendo determinada forma (arts.
1193, 2006 C. Civil).

Partiendo de la clasificación expuesta, no cabe duda de que la cesión de herencia se


encuentra abarcada dentro de la segunda categoría y comprensiva además de todos los
supuestos a que se refiere el art. 1184 del C. Civil, en tanto no existen disposiciones
específicas que dispongan lo contrario.

Se ha sostenido, sin embargo, que es de aplicación analógica el art. 1455 del C. Civil, que se
refiere a la cesión de derechos litigiosos, que pueden hacerse por acta judicial en el
expediente, e incluso se ha admitido por vía jurisprudencial, la presentación de un escrito
ratificado ante el actuario.

Empero, esta norma hace excepción a la regla general, en materia de cesión, contiene el art.
1454, en cuanto se limita a exigir la forma escrita.

En la excepción a una norma general, al igual que la del art. 1184 inc. 6º, por lo tanto queda
bien definido el supuesto de hecho que prevé cada norma, la primera se aplica a las acciones
litigiosas, y la segunda, entre otros casos, a los derechos hereditarios. Además en la sucesión
bien no puede existir controversia y de hecho es un proceso voluntario.

Queda descartadas de esta manera la aplicación extensiva del artículo 1455 relativo a la
cesión de acciones litigiosas -que no es el caso de la cesión de derechos hereditarios, en
cuanto tales-, o del art. 3346, que no se refiere, sino a la renuncia de los derechos adquiridos
por la aceptación de la herencia, como acto bilateral (Confr. art. 3347).

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No se olvida que tanto la cesión como la renuncia a la herencia aparecen mencionadas
conjuntamente en el art. 1184 inc. 6º y ante la falta de una previsión específica acerca de la
posibilidad de efectuarla por instrumento privado, como sucede en el caso del art. 3346, o por
acta judicial como lo prevé el art. 1455, la forma impuesta es imperativa consecuentemente
con todo lo expuesto, para quedar concluída como tal la cesión de derechos hereditarios,
debe ser efectuada por escritura pública.

De no ser así no tendrá efectos frente a terceros, pero nada obsta a la conversión del acto en
otro que satisfaga el interés de las partes, lo que surge del artículo 1185 en tanto prescribe
que los contratos que debiendo ser hechos en escritura pública, fuesen hechos por
instrumentos particulares firmados por las partes, o que fuesen hechos por instrumentos
particulares en que las partes se obligasen a reducirlo a escritura pública, no quedan
concluídos como tales, mientras la escritura pública no se halle firmada, pero quedarán
concluídos como contrato en que las partes se han obligado a hacer escritura pública.

Se estará así frente a una convención de cesión que legitima a las partes para exigir el
otorgamiento de la forma prevista en la ley. Es por eso, que la escritura pública es la única
forma idónea para instrumentar la cesión de derechos hereditarios." "Cuando la forma
instrumental fuere exclusivamente decretada en una determinada especie de instrumento, el
contrato no valdrá si se hiciese en otra forma".- Esto es, que el contrato que debiendo ser
hecho en escritura pública (determinada especie de instrumento), no valdrá si se hiciese en
otra forma (será nulo como tal), pero hay más, el art. 976 dice, que en los casos en que la
forma del instrumento público fuese exclusivamente ordenada, la falta de ella no pueden ser
suplida por alguna otra parte, y también el acto será nulo." "Es decir, que no se ha ordenado
"exclusivamente" la forma del instrumento público (escritura pública), su falta provocará que el
acto sea nulo".

"Resulta interesante destacar, que las Primeras Jornadas Sanjuaninas de Derecho Civil
(octubre de 1982) tuvo despacho favorable, relativo al tema del Contrato de Cesión de
Derechos Hereditarios, que la cesión debe ser concluída en escritura pública (art. 1184 inc. 6
C. Civil)." "Esta forma no se suple por el acta judicial, ni por instrumento privado, aún cuando
el instrumento fuese reconocido por sus otorgantes, o se declara su autenticidad por
resolución judicial".

La cesión de derechos hereditarios, debe formalizarse por escritura pública, dado los valores
de seguridad y certeza que se logran acabadamente, por medio de uno de los instrumentos
públicos que la ley señala, esto es la escritura pública".

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