Mi plan de vida

Por Adilenny Medel Bravo.

Me gustaría comenzar diciendo, que no tengo un plan de vida. Es por eso por lo que lo
realizo a forma de ensayo y no como un documento bien estructurado. Las razones por
las cuales no lo hago, es porque se que la vida es impredecible, y como lo dijo un hombre
sabio al cual admiro tanto, “la vida esta llena de cambios”. No se lo que pasara mañana,
si las cosas marchen para bien o para mal, hay cosas que simplemente no esperas y
cambian tu vida de una manera muy drástica, dándole un giro totalmente distinto,
arruinando aquello que ya habías planeado, o incluso sale mejor de lo que esperabas.

Con lo anterior no quiero decir que no tenga metas o sueños, al contrario, hay mucho que
quisiera alcanzar, aunque no sepa como hacerlo. Me gustaría tener un buen trabajo, uno
en el cual disfrute lo que hago y me haga descubrir cosas nuevas. También deseo formar
una familia, tener un buen esposo e hijos, me gustaría que fueran varones, pero creo que
los amaría, aunque no fuera así. Me encantaría viajar a otros países, tanto de vacaciones
como para un voluntariado, creo que ambas serian interesantes. Ayudar a las personas
que lo necesitan, a los que se sienten solos o esclavizados, aquellos que están perdidos
en sus problemas, ser ese apoyo y ser esa luz que a veces necesitan para seguir adelante.

Crecer tiene una desventaja, es como si el mundo se te viniera en cima y derribara todos
tus sueños; comienzas a ver a través de la realidad y te das cuenta de que todo lo que
querías no es tan fácil como pensaste, pero que aun así nada es imposible.

Debemos de vivir con un poco de fe, y permitirnos soñar como un niño de vez en cuando.
Es cierto que no tengo un plan de vida, no se lo que hare para alcanzar lo que quiero; tal
ves tenga unas cosas en mente, pero nada concreto. Pero el presente es lo que tengo; el
pasado, no vale la pena aferrase a él, solo te daña, si lo traigo a la memoria, seria solo
para recordar buenos tiempos y para aprender de ello. El futuro, es incierto, no tengo nada
asegurado ahí; por eso disfruto lo que tengo hoy, porque se que tampoco es para siempre,
además el simple hecho de vivir es grandioso y a veces no nos detenemos a pensar en lo
afortunados que somos por ello.
Solo puedo terminar diciendo, que me esforzare en alcanzar aquello que quiero, pero no
me aferrare ni me frustrare porque no salió como lo elabore en mi “plan de vida” hace
años. Seré flexible, con la mente abierta a lo que venga; con mi fe firme en Dios, de esta
manera ¿Qué puede salir mal?