En sentido preciso es ciencia y arte de gobernar la polis, la ciudad-Estado. A quienes viven en ella. En sentido amplio es conjunto de medidas con el fin de alcanzar un objetivo. Ejemplo, política partidista, o las medidas de un partido, en una democracia para llegar al poder… así se pueden poner ejemplos de las políticas económicas para alcanzar un fin de desarrollo financiero; etc. Puede tener una connotación peyorativa cuando se inspira en la idea de que los fines justifican los medios, al separar así la política de la ética.
Según Hannat Harendt, 1950.
1) Se basa en el hecho de la pluralidad de los hombres. Dios ha creado al hombre… los hombres son un producto humano, el producto de la naturaleza humana. Sin embargo, en estos ámbitos (entre filosofía y teología no existe una definición concluyente), pues solo existe el hombre. 2) La política trata de estar juntos los unos con los otros de los diversos (en la diversidad). Los hombres se organizan políticamente según determinadas comunidades esenciales a partir de un caos absoluto de las diferencias. Por ejemplo, se crean cuerpos políticos sobre la familia, de ahí se crean los parentescos, uniendo inclusive lo más diverso a partir de figuras similares, con lo cual se distingue una familia de otra. De donde proviene la idea arcaica sobre el símbolo de la familia: Dios no ha creado al hombre sino a la familia (lo diverso). 3) En la familia hay algo más que participación. Ahí hay participación en la pluralidad. Algo así como que la naturaleza no se pudiera escapar de la diversidad. Es como afirmar que no se crea a un hombre, sino al hombre (familia, colectivo…). Por eso el refugio practico-político para el hombre es la familia. El problema es que al establecerse los parentescos se pervierte políticamente; porque suprime la cualidad fundamental de la pluralidad (más allá de los parentescos). 4) El hombre (como genérico o género humano) sólo existe o se realiza en la política con los mismos derechos en que se organiza la diversidad. ahí existe la igualdad jurídica. 5) La filosofía no ha encontrado el lugar de donde surge la política, por dos motivos. a) Sobre todo, al partir de la idea de que el hombre es apolítico en su esencia: el hombre el político por naturaleza (Aristóteles). No lo es por naturaleza. La política nace en el Entre-los-hombres, fuera del hombre. La política se establece como relación. b) Ante la visión teológica del hombre creado por Dios a su imagen. En ese caso solo puede haber el hombre, los hombres son una repetición afortunada del mismo hombre. El estado natural (teológico) lo convertiría en un opuesto de del otro hombre, tal como lo describe Hobbes. De ahí el riesgo de generalizar la política de esta visión. 6) Sólo hay libertad en el particular ámbito del entre de la política. Si subsiste la visión antes expuesta la política es algo absurdo. 7) Para recuperar una visión de la creación del hombre a imagen y semejanza de Dios, hay que admitir que el hombre ha recibido una fuerza generadora para organizar al hombre a semejanza de la creación divina (dado que el mismo Dios es diversidad). Pues en la diversidad de todos los hombres entre sí está entendida la creación del hombre por Dios. Ya que la “la política organiza de antemano lo absolutamente diverso en consideración de una igualdad relativa para diferenciarlos de los relativamente diversos” (47).