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UNIVERSIDAD NACIONAL DE ASUNCIÓN

FACULTAD DE CIENCIAS AGRARIAS

Carrera de Ingeniería Ambiental

ZOOLOGÍA

MAMÍFEROS
Integrantes:

Myriam Aquino
Ana Insfrán
Álvaro Mercado
Dante Silvera
Sofía Vecca

Profesor: Wilber Ortiz

Primer Semestre

San Lorenzo – Paraguay

Año: 2022
Introducción
Los mamíferos son uno de los grupos biológicamente más desarrollados de
los cuales se puede ver, mirando un poco para atrás, la gran evolución por la cual han
pasado con el transcurso del tiempo. Primitivamente, los mamíferos estuvieron
estrechamente relacionados con los reptiles, es decir que evolucionaron a partir de
ellos. Actualmente, solo un orden conserva aún algunas las características reptilianas
puntuales, y es el orden monotrema que incluye a los ornitorrincos y equidnas.
Los mamíferos se clasifican en dos subclases, uno de los cuales incluye a los
monotremas anteriormente mencionados y luego en otras infraclases donde existen
alrededor de 25 órdenes de especies.
Las características de los mamíferos son mencionadas en esta investigación,
así como también su alimentación, reproducción, sistemas que hacen que los
organismos tengan esa complejidad y así también algunos animales en peligro de
extinción en nuestro país.
Es importante también hablar de los mamíferos y conocer sus
particularidades porque a parte de ser importantes para los ecosistemas también
influyen en el aspecto económico y productivo de las sociedades humanas. Aunque
de gran manera sea relevante mencionar aquellas especies que están en peligro de
extinción debido a diversos factores como la actividad humana desmedida que atenta
a los mismos, y que de alguna forma puede volver a repercutir en los seres humanos
en algún punto.
Es de vital importancia conocer las características que hacen a una de las
clases más complejas de seres vivos, donde se incluye a los humanos; para de esta
manera poder asegurar el conocimiento general del caso y preservar el ambiente que
nos rodea y todos los seres vivos que habitan en el mismo.
MAMÍFEROS
Los mamíferos, con su sistema nervioso altamente desarrollado y numerosas
e ingeniosas adaptaciones, ocupan casi todos los entornos de la tierra que albergan
vida. Aunque no es un grupo grande (4500 especies en comparación con 8600
especies de aves, aproximadamente 20 000 especies de peces y 800 000 especies de
insectos), la clase Mammalia es en general el grupo más biológicamente exitoso en el
reino animal, con la posible excepción de los insectos. Muchas potencialidades que
habitan más o menos latentes en otros vertebrados están muy desarrolladas en los
mamíferos. Los mamíferos son extremadamente diversos en tamaño, forma, y
función.
Características
1. Cuerpo cubierto de pelo, pero reducido en algunos
2. Tejido con glándulas sudoríparas, olfativas, sebáceas y mamarias
3. Boca con dientes difiodontes en ambas mandíbulas.
4. Párpados móviles y orejas externas carnosas
5. Cuatro extremidades (reducidas o ausentes en algunos) adaptadas para muchas
formas de locomoción.
6. Sistema circulatorio de un corazón de cuatro cámaras, aorta izquierda persistente
y no nucleada glóbulos rojos bicóncavos
7. Sistema respiratorio de pulmones y laringe.
8. Separación muscular (diafragma) entre el tórax y el abdomen.
9. Sistema excretor de metanefros riñones y uréteres que por lo general desembocan
en una vejiga.
10. Cerebro muy desarrollado, especialmente neocerebro;
11. Sistema endotérmico (generan calor metabólico) y homeotérmico (su temperatura
es constante)
12. Sexos separados
13. 12 pares de nervios craneales
14. Fertilización interna; óvulos desarrollados en un útero con fijación placentaria
15. Jóvenes nutridos por la leche de las glándulas mamarias.
16. La placenta permite a la cría permanecer dentro del cuerpo de la madre hasta que
el desarrollo embrionario está completo.
Dado que tanto los mamíferos como las aves evolucionaron de los reptiles,
podemos esperar encontrar y de hecho, hay muchas similitudes estructurales entre los
tres grupos. De hecho, es mucho más fácil señalar numerosas semejanzas entre los
mamíferos y los reptiles que señalar características que son únicas y diagnósticas
para los mamíferos. El pelo es la característica más obvia de los mamíferos, aunque
está muy reducido en algunos (como las ballenas) y aunque las escamas de los
reptiles, de las que se deriva el pelo, pueden persistir (como en las colas de las ratas y
los castores).
Una segunda característica única de los mamíferos es el método de alimentar
a sus crías con glándulas secretoras de leche; los reptiles no tienen nada remotamente
similar. Aunque menos obvias, existen varias diferencias importantes en la estructura
craneal y mandibular y en la articulación mandibular. Los mamíferos placentarios
tienen dientes bifiodontes (dientes de leche reemplazados por un juego de dientes
permanente) en lugar de dientes polifiodontes de reptiles (juegos sucesivos de
dientes). Pero el factor más importante que contribuye al éxito de los mamíferos es el
notable desarrollo del neocerebro, que permite un nivel de comportamiento
adaptativo, aprendizaje, curiosidad e inteligencia (Hickman, Roberts, Hickman.
1982).

Clasificación

La clasificación de los mamíferos es muy compleja y en algunas ocasiones


muy controvertida por parte de los propios taxonomistas. Dentro de la taxonomía de
los mamíferos encontramos dos grandes subclases que separan a los mamíferos
ovíparos de mamíferos vivíparos o placentarios.

Subclase Prototheria

La constituyen un grupo de animales extintos que existieron durante el


cretácico y principios del cenozoico, así como los mamíferos actuales que ponen
huevos (ovíparos). Esta subclase se compone de un solo orden, monotremas. Este
orden integra a los mamíferos ovíparos de la actualidad: ornitorrincos y equidnas.
Las cinco especies del orden se restringen a Australia, Tasmania y Nueva Guinea.
Entre las cinco especies encontramos Ornithorhynchus anatinus (Shaw,1799);
Tachyglossus aculeatus (Shaw, 1792); Zaglossus bartoni (Thomas, 1907); Zaglossus
attenboroughi (Flannery and Groves, 1988); Zaglossus bruijni (Peters and Doria).

Subclase Theria

Dentro de esta clase se encuentran los mamíferos capaces de “parir” crías


vivas, conocidos como vivíparos. Se reconocen dos infraclases que separa a los
mamíferos con placenta primitiva y marsupio de los mamíferos placentados.

La infraclase Metatheria, comprende a los marsupiales actuales, aunque en la


actualidad los únicos mamíferos que reciben la denominación de placentados son del
infraorden Eutheria, los metaterios también cuentan con una placenta primitiva
coriovitelina. Esta clasificación cuenta con siete órdenes y alrededor de 21 familias,
92 géneros, 335 especies y 211 subespecies. Los órdenes conocidos actualmente son:

1. Orden Dasyuromorphia (Gill, 1872). Dasiuromorfos: orden de mamíferos


marsupiales endémicos del continente australiano. Especies representativas: el
numbat como única especie viva de la familia Myrmecobiidae; y la familia
dasyuridae con 73 especies; entre ellas las más conocidas, los gatos marsupiales, las
ratas marsupiales, el diablo de Tasmania.

2. Orden Didelmorphia (Gill, 1872). Marsupiales americanos: básicamente son las


zarigüeyas, marmotas, comadrejitas y colicortos, con 19 géneros y 102 especies.

3. Orden Diprotodontia (Owen, 1866). Canguros, Koalas, Cucues, orden marcada por
su extraordinaria capacidad de adaptación dando como resultado una diversidad
morfológica como pocos grupos taxonómicos.

4. Orden Microbiotheria (Ameghino, 1889). Monito de monte, única especie viva, de


hecho se creía extinto.

5. Orden Notoryctemorphia (Kirsch in Hunsaker, 1977). Marsupiales topos.


6. Orden Paucituberculata (Ameghino, 1894) Ratones runchos, solo cuenta con 6
especies, se caracterizan por tener el cuerpo delgado y diminuto parecido al de una
musaraña,

7. Orden paramelemorphia (Ameghino, 1889). Bandicuts y bilbies. Tienen la forma


característica del bandicut, un cuerpo rechoncho, arqueado hacia atrás con un hocico
largo, delicado y afilado, orejas verticales muy grandes y patas relativamente largas y
finas, igual que la cola.

La infraclase Eutheria representa a los auténticos placentados dentro de la


taxonomía de los mamíferos. La principal característica de este grupo es la presencia
de placenta corioalantoidea. Esta es la responsable de que los embriones se implanten
en la pared uterina y, además, les permite nutrirse a través de su madre. La infraclase
de los euterios compone 21 ordenes, 138 familias, 1214 géneros y alrededor de 5683
especies distribuidas en todo el mundo. Los órdenes en los que se distribuyen son:

1. Orden Artiodactyla, artiodáctilos, extremidades con terminación en un par de


dedos, venado, ungulados de pezuña hendida, ungulares de dedos pares, 10 familias,
89 géneros, 248 especies. (Camellos, vacas, cerdos, vacas o toros, cebras, ovejas,
hipopótamos, etc).

2. Orden Afrosoricida, afrosoricidos o tenrecomorfos, 2 familias, 19 géneros, 51


especies. Incluyen especies, como es el caso de las musarañas nutrias, topos dorados,
entre otros.

3. Orden Carnívora, carnívoros, su organismo está desarrollado para la ingestión de


carne, son 15 familias, 40 géneros y 90 especies.

4. Orden Cetácea, cetáceos, mamíferos acuáticos, ballenas, delfines, mamíferos


marinos, marsopas. Son 14 familias, 40 géneros y 90 especies. Orden del mamífero
más grande del mundo (La ballena azul antártica).

5. Orden chiroptera, quirópteros o murciélagos, mamíferos con facultad para el


vuelo. Son 21 familias, 235 géneros, 1447 especies.
6. Orden Cingulata, cingulados, con placas óseas en la pie como los armadillos,
cuenta con una sola familia compuesta por 9 géneros y 21 especies, entre las especies
representativas encontramos, a los ya mencionados armadillos.

7. Orden Dermoptera, dermopteros o colugos, mamíferos capaces de planear en el


aire gracias a las membranas que poseen en su cuerpo. Lémures voladores, 1 familia,
2 géneros y 2 especies.

8. Orden Erinaceomorpha, erinaceomorfos, este orden agrupa, entre otros, a los


populares erizos. Cuenta con una familia, 10 géneros y 24 especies.

9. Orden Hyracoidea, hiracoideos o damanes, parecen roedores pero son parientes de


los elefantes, cuenta con una sola familia, 10 géneros y 24 especies.

10. Orden Lagomorpha, lagomorfo, liebres y conejos, pikas, Constituye 3 familias,


13 géneros y 99 especies.

11. Orden Macroscelidea, macrocelideos, musarañas elefantes. Forman parte de una


sola familia con 4 géneros y 15 especies.

12. Orden Perissodactyla, perisodáctilos, extremidades con terminación impar


(ungulados impares). Son 3 familias, 8 géneros y 24 especies.

13. Orden Pholidota, pangolines, osos hormigueros escamosos, cuentan de una sola
familia de un solo género con 8 especies.

14. Orden Pilosas, pilosos, como el oso hormiguero o el perezoso. Son 4 familias de
5 géneros con 18 especies.

15. Orden Primates, orden en el que se incluye, entre otros, a los monos, grandes
simios y los humanos, cuenta con 5 infraordenes de 16 familias con 80 géneros y 520
especies.

16. Orden Proboscidea, proboscideos, los populares elefantes, cuentan con una sola
familia de dos géneros con 3 especies.
17. Orden Rodentia, roedores, un número muy amplio de mamíferos, 2 infraordenes
con 34 familias de 512 géneros y 2367 especies,.

18. Orden Scadentia, escadentios, las tupayas o musarañas arborícolas, forman parte
en este orden 2 familias de 5 géneros con 5 especies.

19. Orden Sirenia, sirenios, mamíferos marinos herbívoros, se agrupan en dos


familias de 3 géneros con 5 especies.

Reproducción en Mamíferos
La fecundación es siempre interna en los mamíferos. Todos los mamíferos,
excepto los monotremas que ponen huevos, son vivíparos: el embrión está encerrado
en membranas extraembrionarias y se nutre después del nacimiento con la leche de la
madre. En los marsupiales, el período de gestación es muy corto, la cría nace en una
etapa temprana de desarrollo y hace su camino hacia el marsupio, o bolsa, donde
experimenta un mayor desarrollo adherido a un pezón. El embrión de un mamífero
placentario se desarrolla en el útero y se nutre de una conexión íntima entre el
embrión y la madre, la placenta. La mayoría de los mamíferos tienen temporadas de
apareamiento definidas, generalmente en invierno o primavera y programadas para
que coincidan con el momento más favorable de la vida para criar a los jóvenes
después del nacimiento. Muchos mamíferos machos son capaces de realizar una
cópula fértil en cualquier momento, pero la función de apareamiento de la hembra
está restringida a un momento durante un ciclo periódico, conocido como ciclo
estral. La hembra recibe al macho sólo durante un período relativamente breve
conocido como extrus o calor.
El ciclo estral se divide en etapas marcadas por cambios característicos en el
ovario, el útero y la vagina. El proestro, o período de preparación, cuando crecen
nuevos folículos ováricos, es seguido por estras, cuando ocurre el apareamiento. Casi
simultáneamente, los folículos ováricos estallan, liberando los óvulos (ovulación),
que son fertilizados. Sigue la implantación del óvulo fertilizado y el embarazo, sin
embargo, debe aparearse y no se produce la fecundación, al estro le sigue el metestro,
un período de reparación. A esta etapa le sigue el diestro, durante el cual el útero se
vuelve pequeño y anémico. El ciclo luego se repite, comenzando con el proestro.
La frecuencia con la que las hembras están en celo varía mucho entre los
diferentes mamíferos. Los animales que tienen un solo estro durante la época de cría
se llaman monestros; las que tienen recurrencia del estro durante la época de cría se
denominan poliestros. Los perros, zorros y murciélagos pertenecen al primer grupo:
los ratones de campo y las ardillas son poliestros, al igual que muchos mamíferos que
viven en las regiones más tropicales de la tierra. Los monos del Viejo Mundo y los
humanos tienen un ciclo algo diferente en el que el período posovulatorio finaliza
con la menstruación, durante la cual el revestimiento del útero colapsa y se expulsa
con algo de sangre.
La gestación, o período de preñez, también varía mucho entre los mamíferos.
Los ratones y las ratas tienen un período de gestación de aproximadamente 21 días;
conejos y liebres, de 30 a 36 días; gatos y perros, 60 días; vacas, 280 días, y
elefantes, 22 meses. Los marsupiales tienen un período de gestación muy corto; al
final de ese tiempo, las diminutas crías salen del orificio vaginal y se dirigen a la
bolsa marsupial donde se adhieren a los pezones. Aquí permanecen por más de 2
meses antes de emerger.
El número de crías producidas por los mamíferos en una temporada depende
de muchos factores. Por lo general, cuanto más grande es el animal, menor es el
número de crías en una camada. Uno de los mayores factores involucrados es el
número de enemigos que tiene una especie. Los pequeños roedores, que sirven de
presa a tantos carnívoros, producen por regla general más de una camada de varias
crías cada temporada. Se sabe que los ratones de pradera producen hasta 17 camadas
de cuatro a nueve crías en un año. La mayoría de los carnívoros tienen solo una
camada de tres a cinco crías por año. Los grandes mamíferos, como los elefantes y
los caballos, dan a luz a una sola cría en cada embarazo. Un elefante produce, en
promedio, cuatro crías durante su vida reproductiva de quizás 50 años (Hickman,
Roberts, Hickman, 1982).
Sistemas
Tegumento y sus derivados
La piel de los mamíferos y sus modificaciones distinguen especialmente a los
mamíferos como grupo. Como interfaz entre el animal y su entorno. la piel está
fuertemente moldeada por la forma de vida del animal. En general, la piel es más
gruesa en los mamíferos que en otras clases de vertebrados, aunque, como en todos
los vertebrados, está formada por epidermis y dermis. Entre los mamíferos, la dermis
se vuelve mucho más gruesa que la epidermis. La epidermis es relativamente delgada
donde está bien protegida por el cabello, pero en lugares sujetos a mucho contacto y
uso, como las palmas de las manos o las plantas de los pies, sus capas externas se
espesan y se complican con queratina.
El pelo es especialmente característico de los mamíferos, aunque los humanos
no son criaturas muy peludas, y en las ballenas el pelo se reduce a unas pocas cerdas
sensoriales en el hocico. Un cabello crece a partir de un folículo piloso que, aunque
es una estructura epidérmica, se hunde en la dermis de la piel. El cabello crece
continuamente por la rápida proliferación de células en el folículo. A medida que el
tallo del cabello es empujado hacia arriba, las nuevas células se alejan de su fuente
de nutrición y mueren, convirtiéndose en el mismo tipo denso de queratina que
constituye las uñas, las garras, los cascos y las plumas.
Los mamíferos tienen característicamente dos tipos de pelo que forman el
pelaje (abrigo de piel): (1) pelo inferior denso y suave para aislamiento y (2) pelo
protector grueso y más largo para protección contra el desgaste y para proporcionar
coloración. La parte inferior del cabello atrapa una capa de aire aislante; en los
animales acuáticos, como el lobo marino, la nutria y el castor, es tan denso que es
casi imposible mojarlo. En el agua, los pelos protectores se humedecen y se
apelmazan sobre la parte inferior del pelo, formando una manta protectora. Una
sacudida rápida cuando el animal emerge arroja el agua y deja el pelo de protección
exterior casi seco. (Hickman, Roberts, Hickman, 1982).
El pelo aísla el cuerpo y lo ayuda a mantener la alta temperatura corporal
constante requerida por la endotermia. El beneficio de la endotermia es una alta tasa
metabólica, que permite un alto nivel de actividad incluso en bajas temperaturas
invernales. (Solomon, 2013).
Sistema Nervioso
Contribuyente significativo en el éxito de los mamíferos, el sistema nervioso
está más enormemente desarrollado que en cualquier otro grupo de animales. El
cerebro es grande y complejo de manera especial, con una región gris exterior, la
corteza cerebral. En los mamíferos, la corteza cerebral muy especializada, llamada
neocórtex, tiene seis capas de neuronas. Regiones específicas en el neocórtex están
especializadas para funciones como visión, audición, tacto, movimiento, respuesta
emocional y funciones cognitivas superiores. (Solomon, 2013)
Sistema Esquelético
El esqueleto es en gran parte óseo, con cartílagos en las superficies
articulares, en parte de las costillas y en algunos lugares más. Además del cartílago y
de los huesos membranosos, ciertos tendones contienen osificaciones denominadas
huesos sesamoideos; el más notable de éstos es la rótula, pero en los pies hay otros.
La caja craneana, redondeada, es una caja dura con todos los huesos estrechamente
unidos por suturas irregulares que pueden obliterarse durante la vida.
La región anterior o facial comprende, dorsalmente, las aberturas nasales y
las grandes órbitas, que protegen los ojos, y ventralmente está el paladar, plano,
bordeado por los dientes de la mandíbula superior.
Por fuera de las órbitas hay una barra horizontal, el arco cigomático. En la
superficie posterior hay un gran foramen magnum a través del cual la medula espinal
se comunica con el encéfalo y, a cada lado del mismo, hay un cóndilo occipital
redondeado por el cual el cráneo se articula a la primera vértebra o atlas. La
mandíbula inferior, que también lleva dientes, está formada por un solo hueso a cada
lado, que se articula con el hueso escamoso del cráneo.
La columna vertebral o espina dorsal forma un sostén flexible del cuerpo y
protege la medula espinal; las vértebras adyacentes están separadas por discos
intervertebrales de denso cartílago fibroso. La columna comprende cinco regiones: 1)
el cuello corto con 7 vértebras cervicales; 2) las 13 vértebras torácicas en que se
articulan las costillas, que son móviles; 3) las 7 vértebras lumbares de la parte
inferior del dorso; 4) las 3 vértebras sacras, que están soldadas para articularse con la
cintura pélvica, y 5) 16 o 20 vértebras caudales en la cola, que se afila hacia el
extremo. Los 13 pares de costillas y el alargado esternón, en posición ventral media,
forman una armazón torácica flexible que protege los órganos vitales situados en su
interior y verifica además los movimientos respiratorios.
La cintura escapular está unida al tórax mediante músculos y sostiene las
extremidades anteriores. A cada lado tiene una hoja triangular plana o escapula que
recibe la cabeza del húmero. La delicada clavícula «flota» en los músculos cercanos.
La cintura pélvica se articula rígidamente al sacro; cada mitad (el hueso innominado)
está formada por un ilion dorsal anterior, un isquion posterior con una tuberosidad
sobre la que se sienta, y el pubis ventral.
En el punto de unión de los tres huesos existe una cavidad o acetábulo, en la
que se articula la cabeza del fémur. Los dos pubis e isquiones se unen en sínfisis
ventralmente debajo de las vértebras. Los huesos de cada extremidad posterior son el
fémur, la tibia y el peroné, separados, 7 tarsianos en el tobillo, 4 largos metatarsianos
(y un vestigio del más interno o primero) y las falanges. (Storer et al., 1982)

Sistema Circulatorio
Los glóbulos rojos de los mamíferos difieren de los demás vertebrados por
ser redondos, bicóncavos y carecer de núcleo (son esféricos en los camellos).
El corazón, situado en la cavidad torácica, está encerrado dentro de un
delicado saco pericárdico. Está formado por cuatro cavidades separadas
completamente, como en las aves, con dos aurículas y dos ventrículos de paredes
musculares gruesas. El recorrido de la sangre por el corazón y los pulmones es el
mismo que en las aves, pero en los mamíferos sale del ventrículo izquierdo del
corazón por el arco aórtico izquierdo.
El arco emite una arteria innominada de la cual salen las dos arterias carótidas
comunes, y la innominada se continúa en la arteria subclavia, que va a la extremidad
anterior derecha. El arco emite una subclavia izquierda y luego se convierte en la
aorta dorsal, que se extiende hacia atrás. Esta última emite ramas a los órganos
internos, pared del cuerpo y extremidades posteriores, y luego se continúa en la
arteria caudal de la cola.
El sistema venoso está formado por un par de venas yugulares, procedentes
de la cabeza y del cuello, y las venas subclavias, procedentes de las extremidades
anteriores; todas ellas se unen formando la vena cava anterior, que entra en la
aurícula derecha.
La vena cava posterior devuelve la sangre de la cola, extremidades
posteriores, riñones, gónadas y músculos dorsales. Un sistema porta hepático
conduce sangre desde los órganos digestivos al hígado mediante la vena porta
hepática. Las venas hepáticas drenan el hígado y se unen a la vena cava posterior
cuando entra en la aurícula derecha. No existe sistema porta renal, pero cada riñón es
drenado por una vena renal que se une a la vena cava posterior. El bazo es una masa
oscura alargada situada detrás del estómago. (Storer et al., 1982)
Sistema Respiratorio
El aire entra por las aberturas nasales y pasa por un laberinto de huesos
espirales situados sobre el paladar y recubiertos por un epitelio mucoso, donde se
limpia, humedece y calienta. Detrás del paladar blando cruza la faringe para entrar en
la glotis. Esta es la abertura de la laringe (nuez de Adán en el hombre), una armazón
formada por varios cartílagos que contiene las cuerdas vocales mediante las cuales,
por ejemplo, el gato produce sus maullidos.
De la laringe el aire desciende por la flexible tráquea, reforzada mediante
cartílagos en forma de C para impedir que se aplane. La tráquea se continúa en el
tórax y se divide luego en dos bronquios. Éstos distribuyen el aire mediante
ramificaciones sucesivas que terminan en los microscópicos alvéolos pulmonares.
Los alvéolos están rodeados por capilares pulmonares en los que tiene lugar
el intercambio de O, y CO, de la respiración externa. Los pulmones son órganos
esponjosos y elásticos, formado cada uno por tres lóbulos. La parte externa de los
pulmones y la interior del tórax (cavidad pleural) están tapizadas por un peritoneo
liso, la pleura. (Storer et al., 1982)
Sistema Excretor
Los dos riñones están situados en la región lumbar, encima del peritoneo. La
orina líquida sale de los riñones por un conducto, el uréter, y se almacena en la vejiga
de la orina, que es elástica y está situada en posición ventral media debajo del recto.
De vez en cuando las paredes musculares de la vejiga de la orina se contraen
voluntariamente, forzando la salida de la orina por la uretra, que es única. En las
hembras ésta desemboca en el vestíbulo, donde se unen el conducto reproductor y el
urinario, pero en los machos la uretra atraviesa el pene. (Storer et al., 1982)
Otras características derivadas de los mamíferos son glándulas mamarias, que
producen leche para las crías; un par de aberturas temporales en el cráneo;
diferenciación de dientes en incisivos, caninos, premolares y molares; y tres huesos
del oído medio (martillo, yunque y estribo) que transmiten vibraciones desde la
membrana timpánica (tímpano) hacia el oído interno. La evolución de la cóclea, el
órgano de audición en el oído interno, brinda a los mamíferos un excelente sentido
del oído. (Solomon, 2013)
Alimentación de los mamíferos
Los mamíferos han explotado una enorme variedad de fuentes de alimento;
algunos mamíferos requieren dietas altamente especializadas, mientras que otros son
comedores oportunistas que prosperan con dietas diversificadas. En total, los hábitos
alimenticios y la estructura física están inextricablemente unidos. Las adaptaciones
de un mamífero para el ataque y la defensa y su especialización para encontrar,
capturar, reducir, tragar y digerir los alimentos, determinan la forma y los hábitos de
un mamífero.
En cuanto a los hábitos alimenticios, Hickman (1982), divide a los animales
en cuatro grupos principales: herbívoros, carnívoros, omnívoros e insectívoros.
Los animales herbívoros, que se alimentan de pastos y otra vegetación,
forman dos grupos principales: ramoneadores, como los ungulados (caballos,
cerdos, ciervos, antílopes, vacas, ovejas y cabras), y los roedores y
“mordisqueadores”, como los ratones y conejos. En los herbívoros, los caninos están
suprimidos, mientras que los molares son anchos y de corona alta y tienen crestas de
esmalte para triturar los alimentos. Los roedores tienen incisivos en forma de cincel
que crecen a lo largo de la vida y deben desgastarse para seguir el ritmo de su
crecimiento continuo.
Los mamíferos herbívoros tienen una serie de adaptaciones interesantes para
hacer frente a su dieta masiva de alimentos vegetales. La celulosa, el carbohidrato
estructural de las plantas, es un alimento potencialmente nutritivo, compuesto por
largas cadenas de unidades de glucosa. Sin embargo, las moléculas de glucosa en la
celulosa están unidas por un tipo de enlace químico que pocas enzimas pueden
atacar. Ningún vertebrado sintetiza enzimas que dividan la celulosa. En cambio, los
vertebrados herbívoros albergan una microflora de bacterias anaerobias en enormes
cámaras de fermentación en el intestino. Estas bacterias descomponen y metabolizan
la celulosa, liberando una variedad de ácidos grasos, azúcares y almidones que el
animal puede absorber y utilizar.
En algunos herbívoros, como el caballo y el conejo, el intestino tiene una
bolsa lateral de gran capacidad, o divertículo, que sirve como cámara de
fermentación y área de absorción. Las liebres, los conejos y algunos roedores a
menudo comen sus gránulos fecales, dando a la comida un segundo paso a través de
la acción fermentadora de las bacterias intestinales.
Los rumiantes (vacas, bisontes, búfalos, cabras, antílopes, ovejas, ciervos,
jirafas y okapis) tienen un enorme estómago de cuatro cámaras. Cuando un rumiante
se alimenta, el pasto pasa por el esófago hasta el rumen, donde la rica microflora lo
descompone y luego se forma en pequeñas bolas. En su tiempo libre, el rumiante se
lleva el bolo alimenticio a la boca, donde lo mastica deliberadamente para triturar la
fibra. Tragado nuevamente, el alimento regresa al rumen donde es digerido por las
bacterias celulíticas. La pulpa pasa al retículo, luego al omaso y finalmente al
abomaso (estómago "verdadero"), donde se secretan enzimas proteolíticas y tiene
lugar la digestión normal. Generalmente, los herbívoros tienen grandes y largos
tractos digestivos y deben comer una abundante cantidad de plantas para sobrevivir.
Los mamíferos carnívoros se alimentan principalmente de herbívoros. Este
grupo incluye zorros, comadrejas, gatos, perros, glotones, pescadores, leones y tigres.
Los carnívoros están bien equipados con dientes para morder y perforar, además de
poderosas extremidades con garras para matar a sus presas. Dado que su dieta
proteica se digiere mucho más fácilmente que el alimento leñoso de los herbívoros,
su tracto digestivo es más corto y el intestino ciego pequeño o ausente. Los
carnívoros comen comidas separadas y tienen mucho más tiempo libre para jugar y
explorar.
En general, los carnívoros llevan vidas más activas y, según los estándares
humanos, más interesantes que los herbívoros. Dado que un carnívoro debe encontrar
y atrapar a su presa, se premia la inteligencia; muchos carnívoros, los gatos, por
ejemplo, se destacan por su sigilo y astucia en la caza de presas. Aunque la evolución
parece haber favorecido a los carnívoros, su éxito ha llevado a una selección de
herbívoros capaces de defenderse o detectar y escapar de los carnívoros. Por lo tanto,
para los herbívoros, se ha premiado la agudeza de los sentidos y la agilidad. Sin
embargo, algunos herbívoros sobreviven gracias a su gran tamaño (los elefantes), o
por un comportamiento grupal defensivo (los bueyes almizcleros).
Los mamíferos omnívoros viven tanto de alimentos vegetales como de
animales. Ejemplos son los cerdos, mapaches, ratas, osos, humanos y la mayoría de
los demás primates. Muchos organismos carnívoros también pueden comer frutas,
bayas y pastos dependiendo de las circunstancias. El zorro, que generalmente se
alimenta de ratones, pequeños roedores y pájaros, come manzanas congeladas,
hayucos y maíz cuando sus fuentes normales de alimento son escasas.
Los mamíferos insectívoros son aquellos que subsisten principalmente de
insectos y larvas. Algunos ejemplos son los topos, las musarañas, los osos
hormigueros y la mayoría de los murciélagos.
Para la mayoría de los mamíferos, la búsqueda de comida y la alimentación
ocupa la mayor parte de su vida activa. Los cambios estaciones afectan al suministro
de alimentos en zonas de temperaturas cambiantes. La vida puede ser más fácil en el
verano, cuando la comida es abundante, pero, en invierno, muchos carnívoros deben
recorrer largas distancias para encontrar una presa. Algunos migran a zonas donde el
alimento abunda, otros hibernan y duermen hasta el final del invierno.
Mamíferos en peligro de extinción en Paraguay
Las especies cuya categorización es Vulnerable o VU, En Peligro o EN, o En
Peligro Crítico o CR, son considerados como mamíferos amenazados del Paraguay, y
son en total 29 especies, de diferentes grupos taxonómicos. Cuatro especies están En
Peligro:
● Priodontes maximus (Tatu carreta).
● Speothos venaticus (Jagua yvyguy).
● Ctenomys pilarensis (Tuco tuco).
● Catagonus wagneri (Tagua).
Cada una de ellas debería tener un plan de acción y contingencia para asegurar su
conservación.

Más urgentemente, cinco especies están En Peligro Crítico y se precisan de


acciones inmediatas para la sostenibilidad de sus poblaciones. Éstas son:
● Panthera onca (Jaguarete).
● Pteronura brasiliensis (Nutria gigante).
● Ozotocerus bezoarticus (Guasuti).
● Lama guanicoe (Guanaco).
● Ctenomys paraguayensis (Tuco tuco).
También podemos encontrar muchas especies en la categoría de vulnerables (VU),
algunas de ellas son;
● Caluromys lanatus (Mykuré viyú).
● Metachirus nudicaudatus (Yupatí o Filandro Pardo)
● Myrmecophaga tridactyla (Jurumi).
● Mico melanurus (Tití de cola negra).
● Peropteryx macrotis (Murciélago canino de orejas largas / Mbopi).
(Abba et.al, 2017).
Conclusión
Los mamíferos forman, sólo siendo superados por los insectos, el grupo más
exitoso entre los animales en cuanto a supervivencia, reproducción, estando en casi
todos los rincones de la tierra.
Tienen muchas características que los distinguen de otros en el Reino
Animalia, especialmente el pelo y las glándulas mamarias, siendo la mayoría
resultado de su evolución de los reptiles.
Su clasificación es bastante extensa, divide los mamíferos ovíparos de los
vivíparos en dos subclases: Prototheria y Theria; los vivíparos son los más diversos
en Orden.
Su reproducción es sexual, la fecundación siempre es interna y al nacer las
crías se alimentan de la leche materna por medio del pezón de su madre.
Tienen muchos sistemas indispensables para su desarrollo y ambiente interno
estable, tales como el sistema tegumentario, el sistema nervioso, el sistema
circulatorio, el sistema respiratorio, el sistema esquelético y el sistema excretor.
En cuanto a su alimentación, se dividen en cuatro grupos: herbívoros,
carnívoros, omnívoros e insectívoros.
Los mamíferos son de los grupos de animales más interesantes y diversos en
la tierra, los hay de todos los tamaños y formas, se han adaptado a muchos cambios
para sobrevivir gracias a su desarrollado sistema nervioso. Lastimosamente por
varios factores, mayormente humanos, hay muchas especies extintas y en peligro de
extinción en el Paraguay, se deben tomar medidas para conservar estas especies ya
que su extinción causa efectos negativos en el ambiente y en la economía, afectando
nuestra vida cotidiana.
Anexo
Bibliografía
Asociación Paraguaya de Mastozoología y Secretaría del Ambiente (2017). Libro
Rojo de los Mamíferos del Paraguay: especies amenazadas de extinción. Asunción.
Storer, T., Stebbins, R., Usinger, R., Nybakken, J. (1982). Zoología General (6ta ed.)
Hickman, Cleveland P. Jr., Roberts, Larry S., Hickman, Frances M. (1982). Biology
of Animals (3ra ed.)
Solomon, Eldra P., Berg, Linda R., Martin, Diana W. (2013). Biología (9na ed.)

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