La educación es un derecho, que debe poder ser ejercido por todos, cualquiera sea la zona. Sin embargo algunos hechos demuestran lo contrario. La educación urbana brinda más oportunidades, existen más escuelas, más oportunidades, más escuelas con más tecnología, mejores docentes, mayor comodidad. Los alumnos de las escuelas rurales son, pocos por lo general, muchas veces se reúnen en un mismo aula y con un mismo docente. La escuela rural, debe ser realista, adecuarse a cada ámbito y sus necesidades, tomando en consideración los conocimientos (teóricos y prácticos) que le permitan a los alumnos lograr una mejor calidad de vida con los recursos que ya cuentan y ayudarlos a generar nuevos, en vista a su formación intelectual y física. El chico que concurre a una escuela rural, debería tener la posibilidad de aprender, continuar y profundizar las tareas que su familia realiza. La igualdad entre estas escuelas es una utopía, ya que cuando el joven egresado de una escuela rural, con contenidos adaptados a su ámbito, ingresa o quiere ingresar a una universidad, se encontrará con que sus conocimientos son más escasos con los que otros compañeros poseen. Las malas condiciones de infraestructura y largas travesías para llegar a clase son algunos de los ejemplos de las inequidades de la educación rural. Las diferencias entre un docente rural y uno urbano son las condiciones en las que trabajan y su material de apoyo. Un factor que distingue a la escuela rural de las urbanas es la ubicación geográfica, podemos decir que todas las escuelas están determinadas por un tipo y un espacio específico, formando parte de la cultura del lugar. En concreto, las escuelas rurales se nutren del entorno que los rodea. Actualmente, muchos edificios destinados a las escuelas rurales fueron construidos hace mucho tiempo. Es decir, las aulas son las mismas que antaño, generalmente aulas pequeñas, con escasos recursos materiales. La educación urbana es la cual la persona puede y tiene los medios necesarios para poder ejercer, ampliar y especializarse en cualquier rama que desee estudiar, ya que las técnicas que los establecimientos de educación entregan son capaces de lograr que el individuo alcance su objetivo. No podemos olvidar que las escuelas rurales han sido pioneras en muchos aspectos, como es el caso de la atención individualizada, ya que es menor el número del alumnado, el docente siempre ha podido estar más pendiente de cada alumno y ayudarle en todo lo que necesitaba. Hoy en día, considerar la educación rural como un modo de capacitación para el trabajo, es subestimar las capacidades de estos alumnos, que tienen el derecho de elegir si quedarse en ese ámbito o elegir una profesión. De lo contrario lo estaríamos limitando y discriminando. Se puede concluir que la escuela rural brinda las mismas oportunidades que cualquier otra institución ubicada en el medio urbano. Los chicos educados en ambos entornos poseen los mismos conocimientos básicos. Podemos elegir cualquier tipo de escuela para educar a los niños ya que en todas recibirán la misma educación que por ley compete. A la hora de elegir una escuela u otra hay que tener en cuenta varios elementos, pero la ubicación geográfica no debe ser uno de ellos. “Lo único que separa a la escuela rural de la urbana son los kilómetros”.