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[Escenario]

[1] Esto he escuchado. En cierta ocasión el Bienaventurado estaba en Savatthi, en la


arboleda de Jeta, en el Parque de Anathapindika.
[2] En esa ocasión, en un monje de nombre Arittha, que anteriormente se dedicaba a matar
buitres, surgió el siguiente pernicioso punto de vista: “Aunque el Bienaventurado hubo
enseñado acerca de las llamadas ‘obstrucciones’, tal como yo entiendo esta enseñanza, estas
cosas no necesariamente tienen que ser obstáculos para quienes se entreguen a ellas”. [3] Y
varios monjes, al escuchar acerca de esto, se acercaron al monje Arittha, quien anteriormente
se dedicaba a matar buitres, y le preguntaron: “¿Es cierto, amigo Arittha, que surgió en ti
este pernicioso punto de vista: ‘Aunque el Bienaventurado hubo enseñado acerca de las
llamadas «obstrucciones», tal como yo entiendo esta enseñanza, estas cosas no
necesariamente tienen que ser obstáculos para quienes se entreguen a ellas’?”
“Así es, amigos. Efectivamente yo mantengo el punto de vista, según el cual las
obstrucciones, acerca de las cuales hubo enseñado el Bienaventurado, en realidad no pueden
ser obstáculos para alguien que se entregue a ellas”.
Entonces, aquellos monjes deseosos de persuadir a Arittha para que abandone este pernicioso
punto de vista, lo presionaban, cuestionaban y exhortaban de esta forma: “No digas esto,
amigo Arittha, no digas así. No malinterpretes las palabras del Bienaventurado. No es
correcto tergiversarlas de esta manera. Nunca, el Bienaventurado hubiese podido decir
semejante cosa. Por el contrario, de diferentes maneras el Bienaventurado enseñaba sobre las
obstrucciones como cosas que necesariamente se convierten en obstáculos para alguien que
se entrega a ellas. Él dijo también que los deseos sensoriales ofrecen muy poca gratificación,
y causan gran insatisfacción y gran desilusión. El peligro que ellos representan es aún mayor.
Los deseos sensoriales, dijo además el Bienaventurado, son como los huesos desnudos, como
un bulto de carne, como la antorcha de paja, como el pozo con carbones ardientes, como un
sueño, como un árbol con frutos amargos, como la cuchilla del carnicero, como la lanza y la
espada, como la cabeza de la serpiente [1]. Todos estos símiles usó el Bienaventurado para
enseñar que los deseos sensoriales ofrecen muy poca gratificación, y causan gran
insatisfacción y gran desilusión. El peligro que ellos representan es aún mayor”. Sin
embargo, aunque el monje Arittha, que anteriormente se dedicaba a matar los cuervos, fue
así presionado, cuestionado y exhortado, permaneció obstinadamente adherido a su
pernicioso punto de vista.
[4] Cuando los monjes se dieron cuenta de que no iban a poder persuadir al monje Arittha,
que anteriormente se dedicaba a matar cuervos, que abandonara este pernicioso punto de
vista, se fueron junto al Bienaventurado, a quien saludaron respetuosamente y se sentaron a
un lado. Estando sentado ahí, le relataron todo lo ocurrido agregando: “Venerable señor, ya
que no pudimos persuadir al monje Arittha, que anteriormente se dedicaba a matar cuervos,
que abandonara este pernicioso punto de vista, vinimos a reportar este hecho al
Bienaventurado”.
[5] Entonces, el Bienaventurado se dirigió a un monje con estas palabras: “Ve, monje, y di
al monje Arittha, que anteriormente se dedicaba a matar cuervos, lo siguiente: 'Amigo, el
Maestro te llama'. -“Sí, señor”, respondió el monje y fue junto al monje Arittha, a quien dijo:
“Ven, amigo Arittha, el Maestro te llama”. -“Sí, amigo”, respondió el monje Arittha y fue a
encontrarse con el Bienaventurado. Al llegar ahí, lo saludó respetuosamente y se sentó a un
lado. Cuando ya estaba sentado ahí, el Bienaventurado se dirigió a él con estas palabras:
“¿Es cierto, Arittha, que surgió en ti este pernicioso punto de vista: ‘Aunque el
Bienaventurado hubo enseñado acerca de las llamadas «obstrucciones», tal como yo entiendo
esta enseñanza, estas cosas no necesariamente tienen que ser obstáculos para quien se
entregue a ellas’?” - “Así es, venerable señor. Efectivamente yo mantengo el punto de vista,
según el cual las obstrucciones, acerca de las cuales hubo enseñado el Bienaventurado, en
realidad no pueden ser obstáculos para alguien que se entregue a ellas”. [6] “Oh hombre
estúpido; ¿Quién te habrá dicho que yo enseñaba de semejante forma? Acaso, ¿no había yo
enseñado, por el contrario, hombre estúpido, de diferentes maneras sobre las obstrucciones
como cosas que necesariamente se convierten en obstáculos para alguien que se entregue a
ellas? Los deseos sensoriales, así lo he dicho, ofrecen muy poca gratificación, y causan
mucho sufrimiento y gran desilusión. El peligro que ellos representan es mayor. Los deseos
sensoriales, dije también, son como los huesos desnudos, como un bulto de carne, como la
antorcha de paja, como el pozo con carbones ardientes, como un sueño, como un árbol con
frutos amargos, como la cuchilla del carnicero, como la lanza y la espada, como la cabeza de
la serpiente. Todos estos símiles usé para enseñar que los deseos sensoriales ofrecen muy
poca gratificación, y causan mucho sufrimiento y gran desilusión. El peligro que ellos
representan es mayor. Pero tú, hombre estúpido, lo has tergiversado mediante tu propia mala
interpretación, por lo cual te dañaste a ti mismo y debilitaste tu propio futuro, que será
doloroso, por la cantidad de acciones demeritorias que acumulaste”. [7] Entonces, el
Bienaventurado se dirigió a los monjes con estas palabras: “Monjes, ¿qué pensáis vosotros:
existe, aunque sea tan pequeña como una chispa, algo de sabiduría en la enseñanza que
sostiene Arittha, el que anteriormente se dedicaba a matar cuervos?”
“Ciertamente no, venerable señor. ¿Cómo podría existir, señor?”
Al escuchar estas palabras, Arittha, que anteriormente se dedicaba a matar cuervos, bajó los
brazos, inclinó la cabeza y permaneció en silencio, apesadumbrado y confundido.
Entonces el Bienaventurado, viendo que Arittha bajó los brazos e inclinó la cabeza,
permaneciendo silencioso, apesadumbrado y confundido, se dirigió a él con estas palabras:
“Hombre estúpido, por tu propio pernicioso punto de vista serás reconocido. Y, acerca de
este tema, tengo una pregunta a los monjes”.
[8] Acto seguido, el Bienaventurado se dirigió a los monjes con estas palabras: “Monjes,
¿tenéis vosotros el mismo entendimiento del Dhamma por mí enseñado, que tiene este
monje
Arittha, el que anteriormente se dedicaba a matar cuervos y que, luego, ha tergiversado mis
palabras mediante su propia mala interpretación, por lo cual causó daño a sí mismo y debilitó
su propio futuro, que será doloroso, por la cantidad de acciones demeritorias que acumuló?”
“Ciertamente, no, señor. En diferentes maneras el Bienaventurado enseñaba sobre las
obstrucciones como cosas que necesariamente se convierten en obstáculos para alguien que
se entregue a ellas. Los deseos sensoriales, así él ha dicho, ofrecen muy poca gratificación,
y causan mucho sufrimiento y gran desilusión. El peligro que ellos representan es mayor.
Los deseos sensoriales, dijo también el Bienaventurado, son como los huesos desnudos,
como un bulto de carne, como la antorcha de paja, como el pozo con carbones ardientes,
como un sueño, como un árbol con frutos amargos, como la cuchilla del carnicero, como la
lanza y la espada, como la cabeza de la serpiente. Todos estos símiles usó el Bienaventurado
para enseñar que los deseos sensoriales ofrecen muy poca gratificación, y causan mucho
sufrimiento y gran desilusión. El peligro que ellos representan es mayor”.
“Bien, monjes. Es bueno que entendáis el Dhamma, por mí enseñado, de esta forma. En
diferentes maneras yo enseñaba sobre las obstrucciones... [se repite el contenido del párrafo
anterior] ... El peligro que ellos representan es mayor. Pero, este monje Arittha, el que
anteriormente se dedicaba a matar cuervos y que, luego, ha tergiversado mis palabras
mediante su propia mala interpretación, causó daño a sí mismo y debilitó su propio futuro,
que será doloroso, por la cantidad de acciones demeritorias que acumuló. Esto, por largo
tiempo, va a traer a este hombre estúpido mucho sufrimiento.
[9] “Monjes, ciertamente es imposible que alguien que se entrega a los placeres sensuales,
lo haga sin tener deseos sensuales, sin tener las percepciones de los deseos sensuales, ni sin
tener los pensamientos sobre los deseos sensuales”.
[Símil de la serpiente]
[10] “Monjes, existen hombres estúpidos que estudian el Dhamma –los discursos, las
narraciones, las exposiciones, los versos, las exclamaciones, los dichos, las historias de
nacimientos, los eventos asombrosos, las preguntas y respuestas- pero, habiendo estudiado
el Dhamma, no examinan con sabiduría el significado de estas enseñanzas. Para aquellos que
no examinan con sabiduría el significado de las enseñanzas, el Dhamma no puede ser
reflexivamente aceptado y, entonces, sólo les sirve para criticar a otros o para ganar algún
debate, pero no pueden realmente experimentar el propósito con el cual este Dhamma ha sido
enseñado. Estas enseñanzas, siendo erróneamente aprehendidas por ellos, les conducen al
dolor y mucho sufrimiento por largo tiempo. ¿Por qué así? Por la errónea aprehensión que
tienen de estas enseñanzas.
“Imaginad, monjes, a un hombre que necesita una serpiente, que requiere de una serpiente y
va en busca de una serpiente. Y cuando visualiza a una serpiente larga, la agarra por su cuerpo
o la cola, pero la serpiente, al darse la vuelta lo muerde en su mano, en su brazo o en algún
otro miembro delcuerpo. Y así mordido, sufre la muerte o los dolores mortales.
¿Por qué así? Por la mala aprehensión de la serpiente.
“De manera similar, monjes, los hombres estúpidos que estudian el Dhamma –los discursos,
las narraciones, las exposiciones, los versos, las exclamaciones, los dichos, las historias de
nacimientos, los eventos asombrosos, las preguntas y respuestas- habiendo estudiado el
Dhamma, no examinan con sabiduría el significado de estas enseñanzas. Para aquellos que
no examinan con sabiduría el significado de las enseñanzas, el Dhamma no puede ser
reflexivamente aceptado y, entonces, sólo les sirve para criticar a otros o para ganar algún
debate, pero no pueden realmente experimentar el propósito con el cual este Dhamma ha sido
enseñado. Estas enseñanzas, siendo erróneamente aprehendidas por ellos, les conducen al
dolor y mucho sufrimiento por largo tiempo. ¿Por qué así? Por la errónea aprehensión que
tienen de estas enseñanzas.
[11] “Pero, por otro lado, monjes, existen miembros de clan, que estudian el Dhamma –los
discursos, las narraciones, las exposiciones, los versos, las exclamaciones, los dichos, las
historias de nacimientos, los eventos asombrosos, las preguntas y respuestas- y, habiendo
estudiado el Dhamma, examinan con sabiduría el significado de estas enseñanzas. Para
aquellos que examinan con sabiduría el significado de las enseñanzas, el Dhamma puede ser
reflexivamente aceptado y, entonces, ellos no lo estudian sólo para criticar a otros o para
ganar algún debate, sino que realmente experimentan el propósito con el cual este Dhamma
ha sido enseñado. Estas enseñanzas, siendo correctamente aprehendidas por ellos, les
conducen al bienestar y gran felicidad por largo tiempo. ¿Por qué así? Por la correcta
aprehensión que tienen de estas enseñanzas.
“Imaginad, monjes, a otro hombre que necesita una serpiente, requiere de una serpiente y va
en busca de una serpiente. Y cuando visualiza a una serpiente larga, la atrapa adecuadamente,
sujetándola primero, firmemente con un palo y luego, agarrándola correctamente por la nuca.
Y aunque la serpiente quiera darse la vuelta para morder su mano, su brazo o algún otro
miembro de su cuerpo, no puede hacerlo, de manera que él no sufre la muerte ni los dolores
mortales. ¿Por qué así? Por la correcta aprehensión de la serpiente. “De manera similar, los
hijos de los nobles, que estudian el Dhamma –los discursos, las narraciones, las exposiciones,
los versos, las exclamaciones, los dichos, las historias de nacimientos, los eventos
asombrosos, las preguntas y respuestas- habiendo estudiado el Dhamma, examinan con
sabiduría el significado de estas enseñanzas. Para aquellos que examinan con sabiduría el
significado de las enseñanzas, el Dhamma puede ser reflexivamente aceptado y, entonces,
ellos no lo estudian sólo para criticar a otros o para ganar algún debate, sino que realmente
experimentan el propósito con el cual este Dhamma ha sido enseñado. Estas enseñanzas,
siendo correctamente aprehendidas por ellos, les conducen al bienestar y gran felicidad por
largo tiempo. ¿Por qué así? Por la correcta aprehensión que tienen de estas enseñanzas.
[12] “Por eso, monjes, cuando vosotros entendéis el significado de mi discurso, interpretadlo
adecuadamente y si no lo entendéis, preguntad pidiendo explicación a mí o a aquellos monjes
que son sabios.”
[Símil de la balsa]
[13] “Monjes, voy a mostraros, ahora, en qué sentido el Dhamma se parece a una barlsa cuyo
propósito es cruzar las aguas y no poseerla. Escuchad y prestad atención que voy a hablar.”
- “Sí, venerable señor”, respondieron los monjes y el Bienaventurado continuó: “Monjes,
imaginad a un hombre que estaba de viaje y visualizó una gran extensión de las aguas, siendo
la orilla cercana un lugar peligroso y temible, mientras que la otra orilla, segura y apacible.
Sin embargo, no había barco alguno ni puente que serviría para llegar a la otra orilla.
Entonces, el hombre pensó lo siguiente: ‘he aquí, una gran extensión de agua y esta orilla
cercana es un lugar peligroso y temible, mientras que la otra orilla es segura y apacible. Sin
embargo, no hay barco alguno ni puente que me serviría para llegar a la otra orilla. ¿Qué tal,
si recolecto la paja, las ramitas, los ramales y las hojas para hacer de ello una balsa, la cual
me permitiría cruzar las aguas a salvo, haciendo sólo el esfuerzo con mis manos y pies?’
Entonces, el hombre reunió la paja, las ramitas, los ramales y las hojas e hizo una balsa con
la cual cruzó las aguas y arribó a salvo a la otra orilla, haciendo sólo el esfuerzo con sus
manos y pies. Estando ya al otro lado, pensó: ‘¡Qué útil me fue esta balsa! Gracias a ella,
solamente con el esfuerzo de mis manos y pies, pude cruzar las aguas y llegar a salvo a la
otra orilla. ¿Por qué no la levanto, no la pongo sobre mis hombros y mi cabeza y la llevo por
dondequiera que vaya?’ ¿Qué pensáis monjes: haciendo esto, haría el hombre lo que
corresponde hacer con una balsa?”
“Ciertamente, no, señor”.
“Entonces, ¿qué debería hacer el hombre con la balsa, para que esto correspondiese a lo que
se debe hacer con una balsa? Suponed, monjes, que un hombre al llegar a la otra orilla dijera:
‘¡Qué útil me fue esta balsa! Gracias a ella, solamente con el esfuerzo de mis manos y pies,
pude cruzar las aguas y llegar a salvo a la otra orilla. ¿Por qué no la arrastro a la tierra firme
o la sujeto a la deriva y voy a dondequiera?’ Haciendo esto, él realmente haría lo que
corresponde hacer con una balsa.
[14] “De esta manera, monjes, el Dhamma se parece a una balsa, cuyo propósito es cruzar
las aguas y no poseerla. Monjes, al saber que el Dhamma se parece a una balsa, debéis
abandonar inclusive los dhammas [2] y, con más razón, las enseñanzas contrarias al
Dhamma.
[Los puntos de vista]
[15] “Existen estos seis puntos de vista. ¿Cuáles seis? He aquí, monjes, está el caso de una
persona ordinaria y no instruida que no tiene en consideración a los nobles y tampoco es
versada ni disciplinada en su enseñanza. No tiene en consideración a los hombres veraces y
tampoco es versada ni disciplinada en su enseñanza. Acerca de las formas asume lo siguiente:
‘Esto es mío, esto soy yo, este es mi yo’. Acerca de las sensaciones asume lo siguiente: ‘Esto
es mío, esto soy yo, este es mi yo’. Acerca de las percepciones asume lo siguiente: ‘Esto es
mío, esto soy yo, este es mi yo’. Acerca de las formaciones asume lo siguiente: ‘Esto es mío,
esto soy yo, este es mi yo’. Acerca de lo visto, oído, sentido, conocido, encontrado, buscado,
ponderado mentalmente asume lo siguiente: ‘Esto es mío, esto soy yo, este es mi yo’. Asume
este punto de vista: ‘Así como el mundo, es el ser, de manera tal que después de la muerte
seré permanente, imperecedero, eterno y no sujeto a cambios. Voy a permanecer por toda la
eternidad.’ Con esto también asume que ‘esto es mío, esto soy yo, este es mi yo’.
[16] “Por otro lado, monjes, está el caso de un noble discípulo bien instruido, que tiene en
consideración a los nobles y es versado y disciplinado en su enseñanza. Tiene en
consideración a los hombres veraces y es versado y disciplinado en su enseñanza. Acerca de
las formas asume lo siguiente: ‘Esto no es mío, esto no soy yo, este no es mi yo’. Acerca de
las sensaciones asume lo siguiente: ‘Esto no es mío, esto no soy yo, este no es mi yo’. Acerca
de las percepciones asume lo siguiente: ‘Esto no es mío, esto no soy yo, este no es mi yo’.
Acerca de las formaciones asume lo siguiente: ‘Esto no es mío, esto no soy yo, este no es mi
yo’. Acerca de lo visto, oído, sentido, conocido, encontrado, buscado, ponderado
mentalmente asume lo siguiente: ‘Esto no es mío, esto no soy yo, este no es mi yo’. No asume
este punto de vista: ‘Así como el mundo, es el ser, de manera que después de la muerte seré
permanente, imperecedero, eterno y no sujeto a cambios. Voy a permanecer por toda la
eternidad.’ Con esto también asume que ‘esto no es mío, esto no soy yo, este no es mi yo’.
[17] “Considerando las cosas de esta manera, no experimenta agitación alguna acerca de las
cosas no existentes.” [Agitación]
[18] Cuando esto fue dicho, cierto monje preguntó al Bienaventurado: “Venerable señor,
¿podría existir agitación acerca de lo que externamente es no-existente?”
“Podría, monje –respondió el Bienaventurado- Este es el caso de alguien que piensa lo
siguiente: ‘¡Oh, esto era mío! ¡Oh, esto que era mío y ya no me pertenece! ¡Ojalá, esto fuera
mío! ¡Oh, no pude obtenerlo’. Entonces, él sufre, se atormenta, se lamenta, llora y se golpea
el pecho con una angustia creciente. Es así cómo puede existir agitación acerca de lo que
externamente es no-existstente.”
[19] “Venerable señor, y ¿podría existir la ausencia de agitación acerca de lo que
externamente es no-existente?”
“Podría, monje –respondió el Bienaventurado- Este es el caso de alguien que no piensa lo
siguiente: ‘¡Oh, esto era mío! ¡Oh, esto que era mío ya no me pertenece! ¡Ojalá, esto fuera
mío! ¡Oh, no pude obtenerlo’. Pero, él no sufre, no se atormenta, no se lamenta, no llora, no
se golpea el pecho ni tampoco tiene una creciente angustia. Es así cómo puede existir la
ausencia de agitación acerca de lo que externamente es no-existstente.”
[20] “Señor, y ¿podría existir la agitación acerca de lo que internamente es no-existente?”
“Podría, monje –respondió el Bienaventurado- Este es el caso de alguien que piensa lo
siguiente: ‘Así como el mundo, es el ser, de manera que después de la muerte seré
permanente, imperecedero, eterno y no sujeto a cambios. Voy a permanecer por toda la
eternidad.’ Luego, él escucha a Tathagata o al discípulo de Tathagata, que le enseña el
Dhamma acerca de eliminar todos los puntos de vista, decisiones, obsesiones, adherencias y
tendencias subyacentes. Acerca de apaciguar todas las formaciones, renunciar a todos los
apegos, destruir la avidez, llegar a la ausencia de la pasión, al cese, al Nibbana. Entonces, él
piensa lo siguiente: ‘¡Voy a ser aniquilado! ¡Voy a perecer! ¡No voy a existir más!’ De esta
manera, sufre, se atormenta, se lamenta, llora y se golpea el pecho con una creciente angustia.
Es así cómo puede existir agitación acerca de lo que internamente es noexiststente.”
[21] “Señor, y ¿podría existir la ausencia de agitación acerca de lo que internamente es
noexistente?”
“Podría, monje –respondió el Bienaventurado- Este es el caso de alguien que no piensa lo
siguiente: ‘Así como el mundo, es el ser, de manera que después de la muerte seré
permanente, imperecedero, eterno y no sujeto a cambios. Voy a permanecer por toda la
eternidad.’ Luego, él escucha a Tathagata o al discípulo de Tathagata, que le enseña el
Dhamma acerca de eliminar todos los puntos de vista, decisiones, obsesiones, adherencias y
tendencias subyacentes. Acerca de apaciguar todas las formaciones, renunciar a todos los
apegos, destruir la avidez, llegar a ausencia de la pasión, al cese, al Nibbana. Entonces, él no
piensa lo siguiente: ‘¡Voy a ser aniquilado! ¡Voy a perecer! ¡No voy a existir más!’ De esta
manera, él no sufre, no se atormenta, no se lamenta, no llora ni se golpea el pecho ni tampoco
tiene una creciente angustia. Es así cómo puede existir la ausencia de agitación acerca de lo
que internamente es no-existente.”
[La transitoriedad y el no-yo]
[22] “Monjes, vosotros bien podríais adquirir las posesiones si fueran permanentes,
imperecederas, eternas y no sujetas a cambios. Posesiones que durarían toda la eternidad.
Pero, monjes, ¿habéis visto vosotros semejantes posesiones?” - “Ciertamente, no, venerable
señor”. - “Muy bien, monjes. Yo tampoco he visto posesiones permanentes, imperecederas,
eternas y no sujetas a cambios. Posesiones que durarían toda la eternidad.
[23] “Monjes, vosotros bien podríais apegarse a la doctrina del yo que no atrajera dolor,
lamento, pena, sufrimiento y desesperación. Pero, monjes, ¿habéis visto semejante doctrina
del yo?” - “Ciertamente, no, venerable señor”. - “Muy bien, monjes. Yo tampoco he visto
una doctrina del yo que no atrajera dolor, lamento, pena, sufrimiento y desesperación para
alguien que se apega a ella.
[24] “Monjes, vosotros bien podríais depender de algún punto de vista que no atrajera dolor,
lamento, pena, sufrimiento y desesperación. Pero, monjes, ¿habéis visto semejante punto de
vista?” -“Ciertamente, no, venerable señor”. - “Muy bien, monjes. Yo tampoco he visto un
punto de vista que no atrajera dolor, lamento, pena, sufrimiento y desesperación para alguien
que depende de él.
[25] “Monjes, si existiera un yo, ¿podría existir también el siguiente pensamiento: ‘esto
pertenece a mi yo’?” - “Sí, venerable señor”. - “O, monjes, si existiera algo perteneciente al
yo, ¿podría existir también el pensamiento: ‘mi yo’?” - “Sí, venerable señor”. - “Pero,
monjes, cuando el yo o lo perteneciente al yo no es más aprehendido como verdadero ni es
establecido, aquel pensamiento que afirma -‘Así como el mundo, es el ser, de manera tal
que después de la muerte seré permanente, imperecedero, eterno y no sujeto a cambios.
Voy a permanecer por toda la eternidad’- ¿no representa una enseñanza completamente
tonta?” - “¿Qué más podría representar, venerable señor, sino una enseñanza completamente
tonta?”
[26] “¿Qué pensáis, monjes, es la forma material permanente o transitoria?” - “Transitoria,
venerable señor”. - “Y, aquello que es transitorio, ¿es doloroso o placentero?” - “Doloroso,
venerable señor”. - “¿Es posible, entonces, que aquello que es transitorio, doloroso y sujeto
a cambios, sea considerado de la siguiente manera: ‘Esto es mío, esto soy yo, este es mi yo’?”
- “Ciertamente no, venerable señor”.
“De la misma manera, ¿es la sensación permanente o transitoria?” - “Transitoria, venerable
señor”... ¿Es la percepción permanente o transitoria?” - “Transitoria, venerable señor”...
¿Son las formaciones permanentes o transitorias?” - “Transitorias, venerable señor”... ¿Y qué
pensáis, monjes, es la conciencia permanente o transitoria?” - “Transitoria, venerable señor”.
- “Y aquello que es transitorio, ¿es doloroso o placentero?” - “Doloroso, venerable señor”. -
“¿Es posible, entonces, que aquello que es transitorio, doloroso y sujeto a cambios, sea
considerado de la siguiente manera: ‘Esto es mío, esto soy yo, este es mi yo’?” - “Ciertamente
no, venerable señor”.
[27] “Por eso, monjes, cualquier tipo de forma, sea del pasado, del futuro o del presente,
interno o externo, burdo o sutil, inferior o superior, lejano o cercano, todo tipo de forma debe
ser visto tal como realmente es, a través del recto discernimiento así: ‘Esto no es mío, esto
no soy yo, este no es mi yo’. Cualquier tipo de sensación... Cualquier tipo de percepción...
Cualquier tipo de formaciones... Cualquier tipo de conciencia, sea del pasado, del futuro o
del presente, interno o externo, burdo o sutil, inferior o superior, lejano o cercano, todo tipo
de conciencia debe ser visto como realmente es, a través del recto discernimiento así: ‘Esto
no es mío, esto no soy yo, este no es mi yo’.
[28] “Viendo de esta forma, el bien instruido noble discípulo llega a desencantarse con las
formas materiales, desencantarse con las sensaciones, desencantarse con las percepciones,
desencantarse con las formaciones y desencantarse con la conciencia.
[29] "Desencantado de esta manera, llega a ser desapasionado. A través de este
desapasionamiento, es plenamente liberado. Con la plena liberación, llega a este
conocimiento: ‘Ésta es la plena liberación’. Entonces, entiende esto: ‘El nacimiento está
vencido. La vida santa ha sido realizada. La tarea ha sido cumplida. He aquí no hay nada más
por delante en este mundo’.
[El Arahant] [30] “Monjes, este monje es llamado aquel cuyo astil ha sido levantado, cuya
trinchera ha sido rellenada, cuyo pilar ha sido arrastrado fuera, aquel cuya tranca ha sido
retraída, el noble cuya bandera ha sido bajada, cuyas cargas han sido dejadas, aquel que está
desencadenado.
[31] “Monjes, ¿Y cómo es el monje, cuyo astil ha sido levantado? Este es el caso del monje
que ha abandonado la ignorancia, la ha cortado desde sus raíces, hizo de ella como si fuera
una palmera desarraigada, la sacó afuera de tal manera que ya es imposible su futura
aparición. Es así cómo el monje se convierte en aquel cuyo astil ha sido levantado.
[32] “Monjes, ¿Y cómo es el monje, cuya trinchera ha sido rellenada? Este es el caso del
monje que ha abandonado la rueda de los nacimientos que lleva a las interminables nuevas
existencias, la ha cortado desde sus raíces, hizo de ella como si fuera una palmera
desarraigada, la sacó afuera de tal manera que ya es imposible su futura aparición. Es así
cómo el monje se convierte en aquel cuya trinchera ha sido rellenada.
[33] “Monjes, ¿Y cómo es el monje, cuyo pilar ha sido arrastrado fuera? Este es el caso del
monje que ha abandonado la avidez, la ha cortado desde sus raíces, hizo de ella como si fuera
una palmera desarraigada, la sacó afuera de tal manera que ya es imposible su futura
aparición. Es así cómo el monje se convierte en aquel cuyo pilar ha sido arrastrado fuera.
[34] “Monjes, ¿Y cómo es el monje, cuya tranca ha sido retraída? Este es el caso del monje
que ha abandonado las cinco cadenas menores, las ha cortado desde sus raíces, hizo de ellas
como si fueran unas palmeras desarraigadas, las sacó afuera de tal manera que ya es
imposible su futura aparición. Es así cómo el monje se convierte en aquel, cuya tranca ha
sido retraída.
[35] “Monjes, ¿Y cómo es el monje, cuya bandera ha sido bajada, cuyas cargas han sido
dejadas y que está desencadenado? Este es el caso del monje que ha abandonado el concepto
de ‘yo soy’, lo ha cortado desde sus raíces, hizo de él como si fuera una palmera desarraigada,
lo sacó afuera de tal manera que ya es imposible su futura aparición. Es así cómo el monje
se convierte en aquel, cuya bandera ha sido bajada, cuyas cargas han sido colocadas abajo y
que está desencadenado.
[36] “Monjes, cuando los devas, junto con Indra, Brama y Pajapati buscan al monje cuya
mente sea liberada de esta forma, no encuentran nada de lo que pudiera decirse: ‘la
conciencia del que realmente se ha ido [3] no está apoyada en esto’. ¿Por qué así? Porque
aquel que realmente se ha ido, yo declaro, es imperceptible aquí y ahora.
[Tergiversando al Tathagata]
[37] “Hablando de esta manera, monjes, enseñando esto, fui erróneamente, falsamente y
vanamente tergiversado por algunos brahmanes y ascetas, quienes decían: ‘El asceta Gotama
es uno que induce al error. Él enseña aniquilamiento, la destrucción y la exterminación de
los seres existentes.’ Pero como yo no soy así y como nunca dije esto, he sido erróneamente,
falsamente y vanamente tergiversado por estos brahmanes y ascetas quienes decían de mí:
‘El asceta Gotama es uno que induce al error. Él enseña aniquilamiento,
la destrucción y la exterminación de los seres existentes.’
[38] “Monjes, al igual que antes, así también ahora lo que yo enseño es la insatisfacción y el
cese de la insatisfacción. Cuando algunos insultan, abusan, provocan, se burlan, molestan y
hostigan al Tathagata, el Tathagata no siente odio, resentimiento ni descontento en su
corazón por causa de esto. Y cuando otros honran, respetan, reverencian y veneran al
Tathagata, el Tathagata no siente deleite, alegría o elevación del corazón por eso. Cuando
algunos honran, respetan, reverencian y veneran al Tathagata, el Tathagata tiene este
pensamiento: ‘Ellos prestan este servicio a aquello [4] que ha sido previamente plenamente
comprendido.’
[39] “Por eso, monjes, cuando algunos os insultan, abusan, provocan, se burlan de vosotros,
os molestan y hostigan, vosotros no debéis sentir el odio, resentimiento ni descontento en
vuestro corazón por causa de esto. Y cuando otros os honran, respetan, reverencian y
veneran, tampoco debéis sentir deleite, alegría o elevación del corazón por eso. Cuando
algunos os honran, respetan, reverencian y veneran debéis tener este pensamiento: ‘Ellos
prestan este servicio a aquello que ha sido previamente plenamente comprendido.’” [No
vuestro]
[40] “Por eso, monjes, todo lo que no es vuestro, abandonadlo. Cuando lo hayáis
abandonado, tendréis bienestar y felicidad por mucho tiempo. ¿Y qué es lo que no es vuestro?
La forma no es vuestra. Abandonadla. Cuando la hayáis abandonado, tendréis bienestar y
felicidad por mucho tiempo. La sensación no es vuestra. Abandonadla. Cuando la hayáis
abandonado, tendréis bienestar y felicidad por mucho tiempo. La percepción no es vuestra.
Abandonadla. Cuando la hayáis abandonado, tendréis bienestar y felicidad por mucho
tiempo. Las formaciones no son vuestras. Abandonadlas. Cuando las hayáis abandonado,
tendréis bienestar y felicidad por mucho tiempo. La conciencia no es vuestra. Abandonadla.
Cuando la hayáis abandonado, tendréis bienestar y felicidad por mucho tiempo [5]. [41]
“¿Qué opináis, monjes: si la gente juntara, en esta arboleda Jeta, pasto, ramitas, ramales y
hojas, los quemara o hiciera con ellos lo que les plazca, podríais pensar vosotros: ‘Es a
nosotros que esta gente reúne, quema o hace lo que quiere’?”
“Ciertamente, no, venerables señor. Porque estas cosas no son ‘nosotros’, no nos pertenecen
ni son nuestro yo”.
“De la misma manera, monjes, todo lo que no es vuestro, abandonadlo. Cuando lo habréis
abandonado, tendréis bienestar y felicidad por mucho tiempo. ¿Y qué es lo que no es vuestro?
La forma material no es vuestra.. La sensación no es vuestra... La percepción no es vuestra...
Las formaciones no son vuestras... La conciencia no es vuestra. Abandonadla. Cuando la
habréis abandonado, tendréis bienestar y felicidad por mucho tiempo.
[En este Dhamma]
[42] "Monjes, este Dhamma está bien proclamado por mí, es claro, abierto, evidente y libre
de parches. En este Dhamma, bien proclamado por mí, que es claro, abierto, evidente y libre
de parches, hay monjes que son unos Arahants –cuyas contaminaciones han sido destruidas,
que han vivido la vida santa y realizaron lo que hubo por hacer, que bajaron sus cargas,
alcanzaron la meta, destruyeron totalmente las cadenas, fueron liberados a través del
conocimiento final- para ellos, no hay un futuro ciclo de manifestaciones. Este es el Dhamma
bien proclamado por mí, que es claro, abierto, evidente y libre de parches. [43] “Monjes, este
Dhamma está bien proclamado por mí, es claro, abierto, evidente y libre de parches. En este
Dhamma, bien proclamado por mí, que es claro, abierto, evidente y libre de parches, hay
monjes que han abandonado las cinco cadenas menores y que, mediante una sola reaparición
espontánea [en las Moradas Puras] alcanzan el Nibbana final, sin retornar a este mundo. Este
es el Dhamma bien proclamado por mí, que es claro, abierto, evidente y libre de parches.
[44] “Monjes, este Dhamma está bien proclamado por mí, es claro, abierto, evidente y libre
de parches. En este Dhamma, bien proclamado por mí, que es claro, abierto, evidente y libre
de parches, hay monjes que han abandonado las tres cadenas y atenuaron su avidez, aversión
y la falsa ilusión y son ‘los que una vez retornan’: renacen una vez más en este mundo,
solamente para poner fin a su insatisfacción. Este es el Dhamma bien proclamado por mí,
que es claro, abierto, evidente y libre de parches.
[45] “Monjes, este Dhamma está bien proclamado por mí, es claro, abierto, evidente y libre
de parches. En este Dhamma, bien proclamado por mí, que es claro, abierto, evidente y libre
de parches, hay monjes que, habiendo abandonado las tres cadenas menores son seguidores
los que 'entraron en la corriente', que no están más sujetos a la perdición, encaminados hacia
la iluminación. Este es el Dhamma bien proclamado por mí, que claro, abierto, evidente y
libre de parches.
[46] “Monjes, este Dhamma está bien proclamado por mí, es claro, abierto, evidente y libre
de parches. En este Dhamma, bien proclamado por mí, que es claro, abierto, evidente y libre
de parches, hay monjes que son seguidores del Dhamma o seguidores por fe que están
encaminados hacia la iluminación. Este es el Dhamma bien proclamado por mí, que claro,
abierto, evidente y libre de parches.
[47] “Monjes, este Dhamma está bien proclamado por mí, es claro, abierto, evidente y libre
de parches. En este Dhamma, bien proclamado por mí, claro, abierto, evidente y libre de
parches, hay monjes que tienen tanta fe en mí y tanto amor, que van encaminados hacia el
cielo. Este es el Dhamma bien proclamado por mí, que es claro, abierto, evidente y libre de
parches.”
Esto es lo que el Bienaventurado dijo. Los monjes fueron complacidos y se deleitaron en las
palabras del Bienaventurado.

[Escenario]
[1] {146} Esto he escuchado. En una ocasión, el Bienaventurado estaba morando en una
arboleda en las afueras del lado oeste de la ciudad de Vesali.
[2] En esta ocasión, Sunakkhatta, el hijo de los licchavis, hubo abandonado recientemente
el Dhamma-y-Disciplina. Y él había pronunciado antes las siguientes palabras ante la
asamblea de Vesali: "El asceta Gotama no tiene estados sobrehumanos algunos, ninguna
distinción en el conocimiento ni la visión que fuera digna de un noble. El asceta Gotama
enseña meramente el Dhamma elaborado por el razonamiento, siguiendo su propia línea de
investigación como se le ocurre, y cuando enseña el Dhamma a alguien, lo conduce a
practicarla para la completa destrucción de la insatisfacción" [1].
[3] Entonces, el Venerabñe Sariputta se vistió de mañana temprano, tomó su cuenco y el
hábito exterior y entró a Vesali en busca de la comida de las limosnas. Y también escuchó
aquellas palabras que Sunakkhatta, el hijo de los licchavis, había pronunciado antes, ante la
asamblea de Vesali. Y cuando recorrió la ciudad de Vesali, al retornar se su habitual ronda
en busca de las la comida de las limosnas y después de haberse alimentado, se fue junto al
Bienaventurado, le rindió homenaje, se sentó a un lado y relató al Bienaventurado lo que dijo
Sunakkhatta.
[4] {147} [El Buda le respondió:] "Sariputta, este estúpido hombre Sunakkhatta esta airado
y es la ira que habla por su boca. Pensando en desacreditar al Tathagata, en realidad, lo está
alabando. Porque es una alabanza para el Tathagata cuando se dice de él: 'cuando enseña el
Dhamma a alguien, lo conduce a practicarla para la completa destrucción de la
insatisfacción'.
[5] "Sariputta, este estúpido hombre Sunakkhatta nunca va a inferir sobre mí de acuerdo al
Dhamma de esta manera: 'El Bienaventurado es realizado, plenamente iluminado, perfecto
en el conocimiento y la conducta, sublime, conocedor de los mundos, incomparable líder de
los que han de ser amansados, el maestro de los dioses y seres humanos, iluminado, bendito'.
[6] "Sariputta, además este estúpido hombre Sunakkhatta tampoco nunca va a inferir sobre
mí de acuerdo al Dhamma de esta manera: 'El Bienaventurado goza de varias clases de
poderes espirituales: habiendo sido uno, llega a ser varios; habiendo sido varios, llega a ser
uno; aparece y desaparece; pasa sin obstáculos a través de la pared, a través del cercado, a
través de la montaña, como si estuviera atravesando el espacio. Se sumerge dentro de la tierra
como si fuera agua y camina sobre el agua sin hundirse como si fuera tierra. Sentado con las
piernas cruzadas viaja por el espacio como un ave: toca y golpea con sus manos el sol y la
luna poderosa y portentosamente. Ejerce la maestría con su cuerpo hasta dónde llega el
mundo del Brahma.'
[7] "Sariputta, además este estúpido hombre Sunakkhatta tampoco nunca va a inferir sobre
mí de acuerdo al Dhamma de esta manera: 'Con el elemento del oído divino, purificado y
que supera el de los seres humanos, El Bienaventurado escucha a ambas clases de sonidos:
los divinos y los humanos, provenientes de lejos o de cerca.
[8] "Sariputta, además este estúpido hombre Sunakkhatta tampoco nunca va a inferir sobre
mí de acuerdo al Dhamma de esta manera: 'El Bienaventurado, con su propia mente, conoce
y distingue la mente de los otros seres o de otras personas. Conoce la mente afectada por la
pasión, como mente apasionada, y la mente sin pasión, como la mente liberada de la pasión.
Conoce la mente afectada por la aversión, como la mente con aversión, y la mente sin
aversión, como la mente liberada de la aversión. Conoce la mente afectada por la falsa
ilusión, como mente mal ilusionada, y la mente sin falsa ilusión, como la mente liberada de
la falsa ilusión. Discierne la mente restringida como mente restringida y sabe cuándo la
mente está dispersa. Cuando una mente está expandida, la reconoce como expandida y
cuando está estrecha, sabe que está estrecha. A una mente destacada, la reconoce como
destacada y una mente corriente reconoce como mente corriente. Cuando la mente está
concentrada, sabe que está concentrada y cuando está desconcentrada sabe que no está
concentrada; cuando la mente está liberada, discierne que es liberada y cuando no es liberada,
la reconoce como tal.'
[Diez poderes del Tathagata]
[9] {148} "Sariputta, el Tathagata tiene estos diez poderes del Tathagata, poseyendo los
cuales, demanda el lugar del líder del rebaño, rugiendo su rugido del león en medio de la
asamblea y poniendo en movimiento la Rueda del Brahma. Y, ¿cuáles son estos diez?
[10] (i) "He aquí, Sariputta, el Tathagata comprende tal como realmente es, lo posible como
posible y lo imposible como imposible. Éste es el poder del Tathagata, en virtud del cual,
demanda el lugar del líder del rebaño, rugiendo su rugido del león en medio de la asamblea
y poniendo en movimiento la Rueda del Brahma.
[11] (ii) "Además, Sariputta, el Tathagata comprende tal como realmente son, los resultados
de las acciones realizadas, del pasado, futuro y presente, con las posibilidades y con las
causas. Este también es el poder del Tathagata...
[12] (iii) "Además, Sariputta, el Tathagata comprende tal como realmente son, los caminos
que conducen a todos los destinos. Este también es el poder del Tathagata...
[13] (iv) "Además, Sariputta, el Tathagata comprende tal como realmente es, el mundo con
sus múltiples y diferentes elementos. Este también es el poder del Tathagata...
[14] (v) "Además, Sariputta, el Tathagata comprende tal como realmente es, la manera, en
la que los seres tienen diferentes inclinaciones. Este también es el poder del Tathagata...
[15] (vi) "Además, Sariputta, el Tathagata comprende tal como realmente es, la disposición
de las facultades de los otros seres y de las otras personas. Este también es el poder del
Tathagata...
[16] (vii) "Además, Sariputta, el Tathagata comprende tal como realmente es, el
impedimento, la purificación y la emergencia en relación a los jhanas, las liberaciones, las
concentraciones y los logros. Este también es el poder del Tathagata...
[17] (viii) "Además, Sariputta, el Tathagata recuerda sus múltiples vidas pasadas, por
ejemplo un nacimiento, dos nacimientos, tres nacimientos, cuatro nacimientos, cinco
nacimientos, diez nacimientos, veinte nacimientos, treinta nacimientos, cuarenta
nacimientos, cincuenta nacimientos, cien nacimientos, mil nacimientos, cien mil
nacimientos, muchos eones de contracción cósmica, muchos eones de expansión cósmica,
muchos eones de contracción y expansión cósmica: 'Allí tuve tal nombre, pertenecí a tal clan,
tuve tal apariencia. Tal era mi alimento, tal mi experiencia del placer y dolor, tal el final de
mi vida. Y falleciendo desde aquel estado, surgí de nuevo allí. Allí también tuve tal nombre,
pertenecí a tal clan, tuve tal apariencia. Tal era mi alimento, tal mi experiencia del placer y
dolor, tal el final de mi vida. Falleciendo desde aquel estado, surgí de nuevo allí'. Así recuerda
sus múltiples vidas pasadas en sus modos y detalles. Este también es el poder del Tathagata...
[18] (ix) "Además, Sariputta, por medio del ojo divino, purificado y que supera al ojo
humano, el Tathagata ve a los seres muriendo y reapareciendo, y discierne cómo son
inferiores y superiores, hermosos y feos, afortunados y desafortunados de acuerdo a su
kamma: 'Estos seres -quienes estaban dotados de una conducta inapropiada de cuerpo, habla
y mente, que insultaban a los nobles, sostenían opiniones incorrectas y emprendían acciones
bajo la influencia de opiniones incorrectas- con la desintegración del cuerpo, después de la
muerte, han reaparecido en el plano de la privación, el destino incorrecto, los reinos
inferiores, en el infierno. Pero estos seres -quienes estaban dotados de una conducta
apropiada de cuerpo, habla y mente, que no insultaban a los nobles, que sostenían opiniones
correctas y emprendían acciones bajo la influencia de opiniones correctas- con la
desintegración del cuerpo, después de la muerte, han reaparecido en buenos destinos, incluso
en el mundo celestial'. Así -por medio del ojo divino, purificado y que supera al ojo humano-
ve a los seres morir y reaparecer, y discierne cuán inferiores y superiores, hermosos y feos,
afortunados y desafortunados son de acuerdo a su kamma. Este también es el poder del
Tathagata...
[19] (x) "Además, Sariputta, al haberse realizado a sí mismo con el conocimiento directo, el
Tathagata aquí y ahora entra y permanece en la liberación de la mente y en la liberación a
través de la sabiduría, las cuales son [liberaciones] inmaculadas e implican la destrucción de
las contaminaciones. Éste también es el poder del Tathagata, en virtud del cual, demanda el
lugar del líder del rebaño, rugiendo su rugido del león en medio de la asamblea y poniendo
en movimiento la Rueda del Brahma.
[20] "El Tathagata, Sariputta, tiene estos diez poderes del Tathagata, poseyendo los cuales,
demanda el lugar del líder del rebaño, rugiendo su rugido del león en medio de la asamblea
y poniendo en movimiento la Rueda del Brahma.
[21] {149} "Sariputta, cuando yo conozco y veo de esta manera, ¿podría alguien decir de mí:
'El asceta Gotama no tiene estados sobrehumanos algunos, ninguna distinción en el
conocimiento ni la visión que fuera digna de un noble. El asceta Gotama enseña meramente
el Dhamma elaborada por el razonamiento, siguiendo su propia línea de investigación como
se le ocurre', -sin que -salvo que abandone esa aseveración y ese estado mental, y abandone
aquel punto de vista- lo lleve esto y lo ponga en el infierno para acabarlo allí? Al igual que
un monje con la virtud, la concentración y la sabiduría, podría disfrutar del conocimiento
final, de la misma manera, en este caso, digo yo -salvo que abandone esa aseveración y ese
estado mental, y abandone aquel punto de vista- esto lo llevará y lo pondrá en el infierno
para acabarlo allí.
[Cuatro clases de intrepidez]
[22] {150} "Sariputta, el Tathagata tiene estas cuatro clases de intrepidez, poseyendo las
cuales, demanda el lugar del líder del rebaño, rugiendo su rugido del león en medio de
la asamblea y poniendo en movimiento la Rueda del Brahma. Y, ¿cuáles son estas
cuatro?
[23] (i) "No veo la base, sobre la cual, algún asceta o brahmán, dios, Mara, Brahma o
quienquiera en el mundo, podría acusarme, de acuerdo al Dhamma, de la siguiente
manera: 'Mientras reclamas el Despertar pleno, no eres plenamente despierto, en
consideración a ciertas cosas.' Y no viendo la basa para esto, permanezco seguro, sin
miedo, pero con intrepidez.
[24] (ii) "No veo la base, sobre la cual, algún asceta o brahmán, dios, Mara, Brahma o
quienquiera en el mundo, podría acusarme, de acuerdo al Dhamma, de la siguiente
manera: 'Mientras reclamas haber destruido las contaminaciones, aquellas
contaminaciones no han sido destruidas por ti.' Y no viendo la basa para esto,
permanezco seguro, sin miedo, pero con intrepidez.
[25] (iii) "No veo la base, sobre la cual, algún asceta o brahmán, dios, Mara, Brahma o
quienquiera en el mundo, podría acusarme, de acuerdo al Dhamma, de la siguiente
manera: 'Aquellas cosas llamadas por ti obstrucciones, no son capaces de obstruir a
alguien que se involucra en ellas.' Y no viendo la basa para esto, permanezco seguro, sin
miedo, pero con intrepidez.
[26] (iv) "No veo la base, sobre la cual, algún asceta o brahmán, dios, Mara, Brahma o
quienquiera en el mundo, podría acusarme, de acuerdo al Dhamma, de la siguiente manera:
'Cuando enseñas a alguien el Dhamma, y cuando él lo practica, esto no le conduce a la
completa destrucción de la insatisfacción.' Y no viendo la basa para esto, permanezco seguro,
sin miedo, pero con intrepidez.
[27] "Sariputta, el Tathagata tiene estas cuatro clases de intrepidez, poseyendo las cuales,
demanda el lugar del líder del rebaño, rugiendo su rugido del león en medio de la
asamblea y poniendo en movimiento la Rueda del Brahma.
[28] "Sariputta, cuando yo conozco y veo de esta manera, ¿podría alguien decir de mí: 'El
asceta Gotama no tiene estados sobrehumanos algunos... esto lo llevará y lo pondrá en
el infierno para acabarlo allí.
[Las ocho asambleas]
[29] {151} "Sariputta, existen estas ocho asambleas. Y, ¿cuáles son estas ocho? La asamblea
de los nobles, la asamblea de los brahmanes, la asamblea de los hombres hogareños, la
asamblea de los ascetas, la asamblea de los dioses del cielo de los Cuatro Grandes Reyes, la
asamblea de los dioses de los Treinta y Tres, la asamblea del séquito del Mara, la asamblea
de los Brahmas. Poseyendo estas cuatro clases de intrepidez, el Tathagata se acerca y entra
a estas asambleas.
[30] "Sariputta, Me acuerdo haberme acercado a centenares de las asambleas de los nobles...
a centenares de las asambleas de los brahmanes... a centenares de las asambleas de los
hombres hogareños... a centenares de las asambleas de los ascetas... a centenares de las
asambleas de los dioses del cielo de los Cuatro Grandes Reyes... a centenares de las
asambleas de los dioses de los Treinta y Tres... a centenares de las asambleas del séquito del
Mara... a centenares de las asambleas de los Brahmas. A continuación, me he sentado con
ellos allí y he hablado con ellos, manteniendo las conversaciones con ellos, sin que haya
visualizado la base alguna para pensar que el miedo o la timidez pudieses apoderarse sobre
mí allí. Y no viendo la base para esto, permanezco seguro, sin miedo, pero con intrepidez.
[31] "Sariputta, cuando yo conozco y veo de esta manera, ¿podría alguien decir de mí: 'El
asceta Gotama no tiene estados sobrehumanos algunos... esto lo llevará y lo pondrá en el
infierno para acabarlo allí.
[Cuatro clases de nacimientos]
[32] {152} "Sariputta, existen estas cuatro clases de nacimientos. Y ¿cuáles son estas cuatro?
El nacimiento del huevo, el nacimiento del vientre, el nacimiento de la humedad y el
nacimiento espontáneo.
[33] "Y, ¿qué es, Sariputta, el nacimiento del huevo? He aquí, aquellos seres que nacen
mediante el rompimiento del caparazón del huevo; esto se llama el nacimiento del huevo. Y,
¿qué es el nacimiento del vientre? He aquí, aquellos seres que nacen mediante el
rompimiento de la membrana; esto se llama el nacimiento del vientre. Y, ¿qué es el
nacimiento de la humedad? He aquí, aquellos seres que nacen dentro de un pez podrido,
dentro de un cuerpo podrido, dentro de la mazmorra podrida, dentro de la sentina o dentro
de la cloaca; esto se llama el nacimiento de la humedad. Y, ¿qué es el nacimiento espontáneo?
He aquí, el caso de ciertos dioses y habitantes del infierno, también de ciertos seres humanos
y algunos seres de los reinos bajos; esto se llama el nacimiento espontáneo.
[34] "Sariputta, cuando yo conozco y veo de esta manera, ¿podría alguien decir de mí: 'El
asceta Gotama no tiene estados sobrehumanos algunos... esto lo llevará y lo pondrá en el
infierno para acabarlo allí.
[Los cinco destinos y el Nibbana]
[35] {153} "Sariputta, existen estos cinco destinos. Y, ¿cuáles son estos cinco? El infierno,
el reino animal, el reino de los espíritus, los seres humanos y los dioses.
[36] (i) "Yo entiendo el infierno, el camino y el sendero que conduce al infierno. También
entiendo cómo alguien que ha entrado en este camino, al disolverse su cuerpo después de la
muerte, va a reaparecer en el estado de privación, en el destino infeliz, en la perdición, en el
infierno.
(ii) "También entiendo el reino animal, el camino y el sendero que conduce al reino animal.
También entiendo cómo alguien que ha entrado en este camino, al disolverse su cuerpo
después de la muerte, va a reaparecer en el estado animal.
(iii) "También entiendo el reino de los espíritus, el camino y el sendero que conduce al reino
de los espíritus. También entiendo cómo alguien que ha entrado en este camino, al disolverse
su cuerpo después de la muerte, va a reaparecer en el reino de los espíritus.
(iv) "También entiendo el reino humano, el camino y el sendero que conduce al reino
humano. También entiendo cómo alguien que ha entrado en este camino, al disolverse su
cuerpo después de la muerte, va a reaparecer entre los seres humanos.
(v) "También entiendo a los dioses, el camino y el sendero que conduce al mundo de los
dioses. También entiendo cómo alguien que ha entrado en este camino, al disolverse su
cuerpo después de la muerte, va a reaparecer en un destino feliz, en el mundo celestial.
(vi) "También entiendo el Nibbana, el camino y el sendero que conduce al Nibbana.
También entiendo cómo alguien que ha entrado en este camino, a través de la autorealización,
con el conocimiento directo, aquí y ahora entra y permanece en la liberación de la mente y
en la liberación a través de la sabiduría, que es inmaculada e implica la destrucción de las
contaminaciones.
[37] {154} (i) "Al abarcar la mente con la mente, comprendo a una determinada persona de
esta manera: 'esta persona se comporta así, se conduce asimismo de esta manera, ha tomado
este camino que al disolverse su cuerpo después de la muerte, va a reaparecer en el estado de
privación, en el destino infeliz, en la perdición, en el infierno'. Entonces, más tarde, con el
ojo divino, que es purificado y sobrepasa el humano, veo que al disolverse su cuerpo después
de la muerte, esta persona realmente reapareció en el estado de privación, en el destino
infeliz, en la perdición, en el infierno y que está experimentado exclusivamente penas,
atrocidades y sensaciones punzantes. Imagina a un pozo de carbón más profundo que la
estatura de un hombre, lleno de brazas, pero sin fuego ni humo. Y entonces, un hombre
quemado y exhausto a causa del agua caliente, cansado, seco y sediento, está llegando por el
camino que se dirige directamente a ese mismo pozo de carbón. Si un hombre de buena vista
viera esto, diría lo siguiente: 'esta persona se comporta así, se conduce asimismo de esta
manera, ha tomado este camino que le conducirá a este mismo pozo de carbón'. Entonces,
más tarde, estaría viendo que aquella persona realmente haya caído dentro del pozo del
carbón, y está experimentado exclusivamente penas, atrocidades y sensaciones punzantes.
De la misma manera, al abarcar la mente con la mente... sensaciones punzantes.
[38] (ii) "Al abarcar la mente con la mente, comprendo a una determinada persona de esta
manera: 'esta persona se comporta así, se conduce asimismo de esta manera, ha tomado este
camino que al disolverse su cuerpo después de la muerte, va a reaparecer en el reino animal'.
Entonces, más tarde, con el ojo divino, que es purificado y sobrepasa el humano, veo que al
disolverse su cuerpo después de la muerte, esta persona realmente reapareció en el reino
animal y que está experimentado penas, atrocidades y sensaciones punzantes. Imagina a un
pozo negro más profundo que la estatura de un hombre, lleno de inmundicias. Y entonces,
un hombre quemado y exhausto a causa del agua caliente, cansado, seco y sediento, está
llegando por el camino que se dirige directamente a ese mismo pozo negro. Si un hombre de
buena vista viera esto, diría lo siguiente: 'esta persona se comporta así, se conduce asimismo
de esta manera, ha tomado este camino que le conducirá a este mismo pozo negro'. Entonces,
más tarde, estaría viendo que aquella persona realmente haya caído dentro del pozo negro, y
está experimentado penas, atrocidades y sensaciones punzantes. De la misma manera, al
abarcar la mente con la mente... sensaciones punzantes.
[39] (iii) "Al abarcar la mente con la mente, comprendo a una determinada persona de esta
manera: 'esta persona se comporta así, se conduce asimismo de esta manera, ha tomado este
camino que al disolverse su cuerpo después de la muerte, va a reaparecer en el reino de los
espíritus'. Entonces, más tarde, con el ojo divino, que es purificado y sobrepasa el humano,
veo que al disolverse su cuerpo después de la muerte, esta persona realmente reapareció en
el reino de los espíritus y que está experimentado muchas sensaciones penosas. Imagina a un
árbol creciendo en un terreno desigual con el follaje corto que proyecta una sombra moteada.
Y entonces, un hombre quemado y exhausto a causa del agua caliente, cansado, seco y
sediento, está llegando por el camino que se dirige directamente a ese mismo árbol. Si un
hombre de buena vista viera esto, diría lo siguiente: 'esta persona se comporta así, se conduce
asimismo de esta manera, ha tomado este camino que le conducirá a este mismo árbol'.
Entonces, más tarde, estaría viendo que aquella persona realmente se haya sentado o acostado
a la sombra de este árbol, experimentado sensaciones penosas. De la misma manera, al
abarcar la mente con la mente... sensaciones penosas.
[40] (iv) "Al abarcar la mente con la mente, comprendo a una determinada persona de esta
manera: 'esta persona se comporta así, se conduce asimismo de esta manera, ha tomado este
camino que al disolverse su cuerpo después de la muerte, va a reaparecer entre los seres
humanos'. Entonces, más tarde, con el ojo divino, que es purificado y sobrepasa el humano,
veo que al disolverse su cuerpo después de la muerte, esta persona realmente reapareció entre
los seres humanos y que está experimentado muchas sensaciones placenteras. Imagina a un
árbol creciendo en un terreno plano con el follaje abundante que proyecta una sombra
profunda. Y entonces, un hombre quemado y exhausto a causa del agua caliente, cansado,
seco y sediento, está llegando por el camino que se dirige directamente a ese mismo árbol.
Si un hombre de buena vista viera esto, diría lo siguiente: 'esta persona se comporta así, se
conduce asimismo de esta manera, ha tomado este camino que le conducirá a este mismo
árbol'. Entonces, más tarde, estaría viendo que aquella persona realmente se haya sentado o
acostado a la sombra de este árbol experimentado sensaciones placenteras. De la misma
manera, al abarcar la mente con la mente... sensaciones placenteras.
[41] (v) "Al abarcar la mente con la mente, comprendo a una determinada persona de esta
manera: 'esta persona se comporta así, se conduce asimismo de esta manera, ha tomado este
camino que al disolverse su cuerpo después de la muerte, va a reaparecer en el destino feliz,
dentro del mundo celestial'. Entonces, más tarde, con el ojo divino, que es purificado y
sobrepasa el humano, veo que al disolverse su cuerpo después de la muerte, esta persona
realmente reapareció en el destino feliz, dentro del mundo celestial y que está experimentado
exclusivamente las sensaciones placenteras. Imagina a una mansión que tiene una cámara
superior emplastada por fuera y por dentro, desconectada, asegurada por las verjas, con las
ventanas cerradas con postigos. Y dentro de ella un sofá cómodo, con alfombras, mantas y
hojas, con colcha de gamuza, con el baldaquín con alfombras carmesí de ambos lados. Y
entonces, un hombre quemado y exhausto a causa del agua caliente, cansado, seco y sediento,
está llegando por el camino que se dirige directamente a esa misma mansión. Si un hombre
de buena vista viera esto, diría lo siguiente: 'esta persona se comporta así, se conduce
asimismo de esta manera, ha tomado este camino que le conducirá a esa misma mansión'.
Entonces, más tarde, estaría viendo que aquella persona realmente se haya sentado o acostado
en esa cámara superior de la mansión, experimentado exclusivamente las sensaciones
placenteras. De la misma manera, al abarcar la mente con la mente... sensaciones placenteras.
[42] (vi) "Al abarcar la mente con la mente, comprendo a una determinada persona de esta
manera: 'esta persona se comporta así, se conduce asimismo de esta manera, ha tomado este
camino que a través de la auto-realización, con el conocimiento directo, aquí y ahora entra y
permanece en la liberación de la mente y en la liberación a través de la sabiduría, que es
inmaculada e implica la destrucción de las contaminaciones.' Entonces, más tarde, con el ojo
divino, que es purificado y sobrepasa el humano, veo que a través de la autorealización, con
el conocimiento directo, aquí y ahora realmente entra y permanece en la liberación de la
mente y en la liberación a través de la sabiduría, que es inmaculada e implica la destrucción
de las contaminaciones y que está experimentado exclusivamente las sensaciones
placenteras. Imagina a un lago limpio, agradable, con agua fresca y transparente, con orillas
llanas y deleitosas, cerca de un denso bosque. Y entonces, un hombre quemado y exhausto a
causa del agua caliente, cansado, seco y sediento, está llegando por el camino que se dirige
directamente a ese mismo lago. Si un hombre de buena vista viera esto, diría lo siguiente:
'esta persona se comporta así, se conduce asimismo de esta manera, ha tomado este camino
que le conducirá a ese mismo lago'.
Entonces, más tarde, estaría viendo que aquella persona realmente se haya sumergido dentro
del lago, se haya bañado, bebido el agua fresca, haya aliviado todas sus molestias, fatigas y
fiebre, y que haya salido y vuelto al bosque, sentado o acostado, experimentado
exclusivamente las sensaciones placenteras. De la misma manera, al abarcar la mente con la
mente... sensaciones placenteras. Estos son los cinco destinos.
[43] "Sariputta, cuando yo conozco y veo de esta manera, ¿podría alguien decir de mí: 'El
asceta Gotama no tiene estados sobrehumanos algunos, ninguna distinción en el
conocimiento ni la visión que fuera digno de un noble. El asceta Gotama enseña meramente
el Dhamma elaborada por el razonamiento, siguiendo su propia línea de investigación como
se le ocurre', -sin que -salvo que abandone esa aseveración y ese estado mental, y abandone
aquel punto de vista- lo lleve esto y lo ponga en el infierno para acabarlo allí? Al igual que
un monje la virtud, la concentración y la sabiduría, podría disfrutar del conocimiento final,
de la misma manera, en este caso, digo yo -salvo que abandone esa aseveración y ese estado
mental, y abandone aquel punto de vista- esto lo llevará y lo pondrá en el infierno para
acabarlo allí.
[Austeridades del Bodhisatta]
[44] {155} "Sariputta, recuerdo haber vivido la vida santa dotada de cuatro factores. He sido
un asceta, el asceta extremo; he sido áspero, extremadamente áspero; he sido escrupuloso,
extremadamente escrupuloso y he sido un recluso, el recluso extremo.
[45] "Tal fue mi ascetismo, Sariputta, que andaba desnudo, rechazando los
convencionalismos, lamiendo mis manos, no comiendo cuando me invitaban, no
deteniéndome cuando me lo pedían. Nunca aceptaba la comida que me traían, la comida que
preparaban especialmente para mí ni aceptaba invitaciones para comer. No recibía nada de
la olla, del cuenco, a través de un umbral, a través de la estaca, a través de majadero, de dos
comidas juntas, de una mujer embarazada, de una mujer que daba de mamar, de una mujer
que se acostaba en medio de los hombres, de una comida de la cual se anunciaba que iba a
ser distribuida, de un lugar en que un perro la estaba esperando ni del lugar donde hacían
zumbido las moscas. No aceptaba pescado ni carne, no tomaba licores, vinos ni infusiones
fermentadas. Me mantuve en una casa con un bocado; me mantuve en dos casas con dos
bocados;... Me mantuve en siete casas con siete bocados. He vivido de un platillo por día, de
dos platillos por día... de siete platillos por día. He tomado la comida una vez por día, una
vez cada dos días... una vez cada siete días; incluso, cuando tomaba la comida
quincenalmente, perseguía la práctica de tomarla cada tanto, dentro de los periodos
establecidos [más largos]. Fui uno que comía las verduras, el mijo, el arroz silvestre, los
recortes escondidos, el musgo, el salvado de arroz, la escoria de arroz, la flor de sésamo, el
pasto o el estiércol de la vaca. Vivía de las raíces silvestres y florales, y me alimentaba con
las frutas caídas. M vestía con cáñamos, cáñamos mezclados con tela, con las mortajas, con
los trapos desechos, con la corteza de los árboles, con el cuero de antílopes, con las tiras del
cuero de antílopes, con la tela del pasto kusa, con la tela de corteza, con la tela de las virutas
de madera, con la lana de pelos de la cabeza, con la lana de los animales y con las alas de los
búhos. Fui uno que se sacó los cabellos y la barba, que persistía en la práctica de sacarse los
cabellos y la barba. Fui uno que se rehusaba a sentar, permaneciendo de pie todo el tiempo.
Fui uno que su puso en cuclillas continuamente, que persistía en la práctica de permanecer
en la posición en cuclillas. Fui uno que usaba mantas de espigas y que hizo su cama de la
manta de espigas. Vivía persiguiendo la práctica de bañarme en el agua tres veces al día,
incluyendo las tardes. De esta manera, en formas muy variadas, vivía persiguiendo la práctica
de atormentar y mortificar el cuerpo. Así fue mi ascetismo.
[46] {156} "Tal fue mi asperidad, Sariputta, que, al igual que el tronco del árbol tinduka
acumula a lo largo de los años, unas especies de tortas y copos, así también, el polvo y la
mugre acumulados a lo largo de los años, hicieron en mi cuerpo unas especies de tortas y
copos. Pero jamás se me ocurrió decir: 'voy a fregar este polvo y la mugre con mis manos',
u, 'ojalá haya alguien que friegue este polvo y la mugre con sus manos'; jamás se me ocurrió
esto. Así fue mi asperidad.
[47] "Tal fue mi escrupulosidad, Sariputta, que siempre estaba atentamente consciente, al
dar pasos hacia adelante y al dar pasos para retroceder. Estaba lleno de compasión incluso
en consideración a una gota de agua, de esta manera: 'que no dañe las pequeñas creaturas
dentro de las hendeduras del suelo.' Así fue mi escrupulosidad.
[48] "Tal fue mi reclusión, Sariputta, que me hundía dentro de los bosques y vivía allí. Pero
cuando miraba y veía a un vaquero, pastor, a alguien que recolectaba el pasto o al
guardabosque, huía de allí y pasaba de arboleda a arboleda, del matorral a matorral, de cuenca
a cuenca y del montículo a montículo. Y, por qué así? Porque no quería que me vieran ni que
yo les viera a ellos. Al igual que la cría del venado del bosque, al ver a un ser humano huye
de arboleda en arboleda, del matorral en matorral, de cuenca en cuenca y del montículo en
montículo, de la misma manera, cuando miraba y veía a un vaquero, pastor... Así fue mi
reclusión.
[49] "Podría seguir adelante, Sariputta, con estos cuatro factores, hasta ir donde dormían las
vacas, cuando el vaquero sacaba el ganado afuera, y comer el estiércol de las jóvenes terneras
destetadas. Siempre que haya durado mi propio excremento y la orina, consumía mi propio
excremento y la orina. Así de grande fue la distorsión de mi alimentación.
[50] {157} "Podría hundirme, Sariputta, dentro de arboledas que inspiraban temor y vivir
allí. Eran arboledas que inspiraban tanto temor que normalmente le pondrían el pelo de punta
a un hombre, si no estuviera libre de la codicia. Cuando venía este viento frío durante las
noches de 'la escarcha del intervalo de ocho días' [2], podría permanecer al aire libre durante
la noche y en la arboleda durante el día. En el último mes de la época de calor, podría vivir
el aire libre durante el día y en la arboleda de noche. Y estando allí, llegó a mí este verso
nunca antes escuchado:
Congelado por la noche y quemado de día,
Sólo en la arboleda que inspira miedo, Desnudo,
sin fuego para sentarse al lado, El sabio sigue
persiguiendo su meta.
[51] "Podría hacer mi cama, Sariputta, en medio del cementerio, teniendo los huesos de los
muertos como almohada. Y los muchachos vaqueros venían junto a mí para disputar sobre
mí, orinar sobre mí, lanzar inmundicias sobre mí y pinchar estacas dentro de mis orejas. Y
aún así, no me acuerdo que haya surgido un mal pensamiento en contra de ellos. Así era mi
morada en la ecuanimidad.
[52] {158} "Sariputta, existen ciertos ascetas y brahmanes cuya doctrina y punto de vista es
este: 'la purificación se produce a través de la alimentación' [3]. Ellos dicen: 'vivamos de los
frutos kola'; entonces, comen los frutos kola, comen el polvo de los frutos kola, toman el
agua de los frutos kola y hacen muchas otras preparaciones de los frutos kola. Y me acuerdo,
Sariputta, haber comido una sola fruta kola al día. Quizá, Sariputta, pienses que la fruta kola,
en aquellos días era más grande, pero no deberías considerar eso así: la fruta kola en aquellos
días era de igual tamaño que ahora. Al haber comido una sola fruta kola al día, mi cuerpo
alcanzó el estado de extrema demarcación. Por comer tan poco, mis miembros se volvieron
como segmentos unidos de tallos de viña o tallos de bambú. Por comer tan poco, mi trasero
se volvió como la pezuña de un camello. Por comer tan poco la proyección de mi espina
parecía una cuerda con cuentas. Por comer tan poco mis costillas sobresalían tan delgadas
como las vigas de un viejo granero sin tejado. Por comer tan poco el reflejo de mis ojos se
hundía por debajo de sus órbitas, pareciendo el reflejo del agua que se ha hundido en la
profundidad de un pozo. Por comer tan poco mi cuero cabelludo se secó y marchitó como
una verde y amarga calabaza se seca y marchita en el viento y en el sol. Por comer tan poco,
la piel de mi vientre se adhería a mi columna vertebral; así, si tocaba la piel de mi vientre me
encontraba con mi columna, y si tocaba mi columna me encontraba con la piel de mi vientre.
Por comer tan poco, si defecaba u orinaba, me caía de bruces. Por comer tan poco, si intentaba
relajar mi cuerpo frotando mis miembros con las manos, el vello, podrido en su raíz, se caía
de mi cuerpo conforme lo frotaba.
[53-55] {159} "Sariputta, existen ciertos ascetas y brahmanes cuya doctrina y punto de vista
es este: 'la purificación se produce a través de la alimentación'. Ellos dicen: 'vivamos de las
judías... vamos a vivir del sésamo... vamos a vivir del arroz'; entonces, comen el arroz, comen
el polvo del arroz, toman el agua del arroz y hacen muchas otras preparaciones del arroz. Y
me acuerdo, Sariputta, haber comido un solo grano de arroz al día. Quizá, Sariputta, pienses
que el grano de arroz, en aquellos días era más grande, pero no deberías considerar eso así:
el grano de arroz en aquellos días era de igual tamaño que ahora. Al haber comido un solo
grano de arroz al día, mi cuerpo alcanzó el estado de extrema demarcación. Por comer tan
poco, mis miembros se volvieron como segmentos unidos de tallos de viña o tallos de bambú.
Por comer tan poco, mi trasero se volvió como la pezuña de un camello. Por comer tan poco
la proyección de mi espina parecía una cuerda con cuentas. Por comer tan poco mis costillas
sobresalían tan delgadas como las vigas de un viejo granero sin tejado. Por comer tan poco
el reflejo de mis ojos se hundía por debajo de sus órbitas, pareciendo el reflejo del agua que
se ha hundido en la profundidad de un pozo. Por comer tan poco mi cuero cabelludo se secó
y marchitó como una verde y amarga calabaza se seca y marchita en el viento y en el sol. Por
comer tan poco, la piel de mi vientre se adhería a mi columna vertebral; así, si tocaba la piel
de mi vientre me encontraba con mi columna, y si tocaba mi columna me encontraba con la
piel de mi vientre. Por comer tan poco, si defecaba u orinaba, me caía de bruces. Por comer
tan poco, si intentaba relajar mi cuerpo frotando mis miembros con las manos, el vello,
podrido en su raíz, se caía de mi cuerpo conforme lo frotaba.
[56] "Aún así, Sariputta, mediante semejante conducta, mediante semejantes prácticas,
mediante semejante ejecución de las austeridades, no he alcanzado el estado sobrehumano
alguno, tampoco el conocimiento ni visión dignos de un Noble. Y, ¿por qué así? Porque no
he alcanzado aquella noble sabiduría que, cuando es alcanzada, es noble y emancipadora y
conduce a alguien que practica conforma a ella, a la completa destrucción de la
insatisfacción.
[57] {160} "Sariputta, existen ciertos ascetas y brahmanes cuya doctrina y punto de vista es
este: 'la purificación se produce a través de la ronda de los renacimientos'. Pero no es una
tarea fácil, la de encontrar reino alguno, en el cual, no estuviera ya de paso en este largo
viaje, excepto en el de los dioses de las Moradas Puras, porque si hubiese pasado, a través de
esta ronda, como un dios en las Moradas Puras, no retornaría nunca a este mundo.
[58] "Sariputta, existen ciertos ascetas y brahmanes cuya doctrina y punto de vista es este:
'la purificación se produce a través de [un particular] renacimiento'. Pero no es una tarea fácil,
la de encontrar una clase de renacimiento, en el cual, no estuviera ya de paso en este largo
viaje, excepto en el de los dioses de las Moradas Puras, porque si hubiese pasado, a través de
esta ronda, como un dios en las Moradas Puras, no retornaría nunca a este mundo.
[59] "Sariputta, existen ciertos ascetas y brahmanes cuya doctrina y punto de vista es este:
'la purificación se produce a través de [una particular] morada'. Pero no es una tarea fácil, la
de encontrar morada alguna, en el cual, no estuviera ya de paso en este largo viaje, excepto
en el de los dioses de las Moradas Puras, porque si hubiese pasado, a través de esta ronda,
como un dios en las Moradas Puras, no retornaría nunca a este mundo.
[60] "Sariputta, existen ciertos ascetas y brahmanes cuya doctrina y punto de vista es este:
'la purificación se produce a través del sacrificio'. Pero no es una tarea fácil, la de encontrar
sacrificio alguno, que no estuviera perpetuado por mí ya de paso en este largo viaje, cuando
fui, sea un bien ungido noble rey o un rico brahmán.
[61] "Sariputta, existen ciertos ascetas y brahmanes cuya doctrina y punto de vista es este:
'la purificación se produce a través del sacrificio del fuego'. Pero no es una tarea fácil, la de
encontrar alguna clase de fuego, que no haya sido sacrificado por mí ya de paso en este largo
viaje, cuando fui, sea un bien ungido noble rey o un rico brahmán.
[62] {161} "Sariputta, existen ciertos ascetas y brahmanes cuya doctrina y punto de vista es
este: 'mientras este buen hombre es todavía joven, hombre de cabello negro dotado de la
bendición de la juventud, en la primicia de la vida, es todavía perfecto en su lúcida sabiduría.
Pero, cuando ese buen hombre llega a ser viejo, anciano, consumido por lo años, avanzado
en la edad, cuando llega a la última etapa de su vida, siendo un hombre de ochenta, noventa
o cien años, entonces la lucidez de su sabiduría se pierde'. Pero esto no se puede considerar
en relación a mí. Soy viejo, anciano, consumido por lo años, avanzado en la edad, llegué a
la última etapa de mi vida y tengo ochenta años. Imagina que tuviera cuatro discípulos de
cien años de edad, perfectos en la atención consciente, con gran capacidad de retención,
buena memoria y lucidez de sabiduría. Al igual que un hábil arquero que entrena, practica y
se somete a pruebas, es capaz de disparar una flecha luminosa a través de la sombra de una
palmera, así ellos están perfectos en la atención consciente, con gran capacidad de retención,
buena memoria y lucidez de sabiduría. E imagina, Sariputta, que ellos me preguntases
continuamente acerca de los cuatro establecimientos de la atención consciente y yo les
respondiese cada vez que me preguntaran de tal manera, que recordarían cada una de mis
respuestas y nunca preguntarían sobre cuestiones secundarias ni harían las pausas, salvo para
comer, beber, ingerir alimentos, saborearlos, orinar, defecar y descansar con el fin de
remover la somnolencia y el cansancio. Aún así, Sariputta, la exposición del Dhamma por
parte del Tathagata, su exposición de los factores del Dhamma y sus respuestas a las
preguntas, podrían no llegar a su fin, porque estos cuatro discípulos míos de la edad de cien
años, podrían haber muerto antes, al finalizar aquellos cien años. Sariputta, aún en el
momento en que me llevases a mi lecho de muerte, no estaría cambiando la lucidez de
sabiduría del Tathagata.
[63] "Rectamente hablando, Sariputta, se podría decir esto de cualquier persona: 'El ser no
sujeto a la falsa ilusión apareció en el mundo para el bienestar y felicidad de muchos, por la
compasión al mundo, para el bien, el bienestar y la felicidad de los dioses y seres humanos',
pero en realidad, esto se debería decir rectamente de mí."
[64] {162} En esta ocasión, el Venerable Nagasamala estaba de pie detrás del
Bienaventurado y lo abanicaba y, cuando esto fue dicho, el se dirigió al Bienaventurado con
estas palabras: "¡Esto es maravilloso, venerable señor, es portentoso! Al escuchar este
discurso del Dhamma, los pelos de mi cuerpo se me pusieron de punta. Venerable señor,
¿cuál es el nombre de este discurso del Dhamma?"
"Siendo así, Nagasamala, puedes recordar este discurso del Dhamma como "El discurso de
los pelos de punta".
Esto es lo que dijo el Bienaventurado y el Venerable Nagasamala fue satisfecho y se deleitó
en las palabras del Bienaventurado

[1] {288} Esto he escuchado. En una ocasión, el Bienaventurado estaba morando cerca de
Savatthi, en la Arboleda Jeta del Parque Anapathindika.

[2] En esta ocasión, al medio día, el brahmán Janussoni estaba saliendo de Savatthi en un
carruaje enteramente blanco conducido por yeguas blancas. En eso vio al asceta mendicante
Pilotika viniendo de cierta distancia y le preguntó: "¿De dónde viene el maestro Vacchayana
en pleno medio día?"

"Señor, estoy viniendo de la presencia del asceta Gotama".

"Y, ¿qué opina el maestro Vacchayana acerca de la lucidez de la sabiduría del asceta
Gotama? ¿Es él un sabio o no?"
"Señor, ¿quién soy yo para conocer la lucidez de la sabiduría del asceta Gotama? Uno tendría
que ser alguien igual a él para conocer la lucidez de la sabiduría del asceta Gotama."

"Sin embargo, el maestro Vacchaya alaba al asceta Gotama con grandes alabanzas".

"Señor, ¿quién soy yo para alabar al asceta Gotama? El asceta Gotama es alabado por los
que son alabados como el primero entre los dioses y seres humanos".

"Y ¿qué razones encuentra el maestro Vacchaya para tener esta firme confidencia en el asceta
Gotama?"

[3] "Imagine, señor, a un sabio leñador entrando al bosque de los elefantes que ve, dentro
del bosque de los elefantes, una gran huella del elefante, larga en la extensión y ancha. De
seguro, llegase a esta conclusión: 'realmente, este es un gran elefante del bosque'. De la
misma manera, cuando vi las cuatro huellas del asceta Gotama, llegue a esta conclusión: 'el
Bienaventurado está plenamente iluminado, el Dhamma está bien proclamado por el
Bienaventurado y el Sangha está practicando de la manera correcta'.

[4] {289} "¿Cuáles son estas cuatro? Señor, he visto aquí algunos instruidos nobles, que
eran inteligentes, conocedores de las doctrinas ajenas, agudos como si supieran partir el pelo
en partes. Y ellos se dedican a recorrer los caminos y demoler los puntos de vista ajenos con
sus agudos ingenios. Cuando escuchan 'el asceta Gotama va a visitar este pueblo o esta
ciudad', entonces le formulan preguntas de esta manera: 'vamos a visitar al asceta Gotama y
vamos a hacerle esta pregunta. Cuando se le pregunte de esta manera, su respuesta va a ser
como ésta, y así refutaremos su doctrina; y si se le preguntase de esta otra forma, entonces
su respuesta será ésta y, entonces, refutaremos su doctrina de esta manera'.

"Y entonces, ellos escuchan: 'el maestro Gotama ha llegado a visitar este pueblo o esta
ciudad', de modo que van junto al asceta Gotama y el asceta Gotama los instruye, insta, eleva
espiritualmente y los regocija con la plática del Dhamma. Después de que hayan sido
instruidos, instados, elevados espiritualmente y regocijados con la plática del Dhamma por
parte del asceta Gotama, no le hacen más preguntas, mucho menos pueden refutar su
doctrina; antes bien, en realidad llegan a ser sus discípulos. Cuando vi esta primera huella
del asceta Gotama, llegue a esta conclusión: 'el Bienaventurado está plenamente iluminado,
el Dhamma está bien proclamado por el Bienaventurado y el Sangha está practicando de la
manera correcta'.
[5] "Además, señor, he visto aquí algunos instruidos brahmanes, que eran inteligentes... no
le hacen más preguntas, mucho menos pueden refutar su doctrina; antes bien, en realidad
llegan a ser sus discípulos. Cuando vi esta segunda huella del asceta Gotama, llegue a esta
conclusión: 'el Bienaventurado está plenamente iluminado, el Dhamma está bien proclamado
por el Bienaventurado y el Sangha está practicando de la manera correcta'.

[6] "Además, señor, he visto aquí algunos instruidos hombres hogareños, que eran
inteligentes... no le hacen más preguntas, mucho menos pueden refutar su doctrina; antes
bien, en realidad llegan a ser sus discípulos. Cuando vi esta tercera huella del asceta Gotama,
llegue a esta conclusión: 'el Bienaventurado está plenamente iluminado, el Dhamma está bien
proclamado por el Bienaventurado y el Sangha está practicando de la manera correcta'.

[7] "Además, señor, he visto aquí algunos instruidos ascetas, que eran inteligentes... no le
hacen más preguntas, mucho menos pueden refutar su doctrina; antes bien, en realidad llegan
a pedir al asceta Gotama que les permita el renunciamiento de la vida hogareña para asumir
el estilo de vida sin hogar, y él les ofrece el permiso del renunciamiento. No mucho después
de que hayan renunciado, viven en soledad, apartados, diligentes, aplicados y resueltos, y al
liberarse a sí mismos a través del conocimiento, aquí y ahora entran y permanecen en la meta
suprema de la vida santa, por la cual, los miembros del clan, correctamente renuncian a la
vida hogareña para vivir el estilo de vida sin hogar. Y dicen esto: 'estábamos muy cerca de
la perdición, muy cerca de perecer; anteriormente nos llamábamos ascetas aunque realmente
no éramos ascetas; afirmábamos ser brahmanes, sin ser realmente brahmanes; afirmábamos
ser los arahants, sin ser realmente los arahants. Pero ahora somos ascetas, ahora somos
brahmanes y ahora somos arahants'. Cuando vi esta cuarta huella del asceta Gotama, llegue
a esta conclusión: 'el Bienaventurado está plenamente iluminado, el Dhamma está bien
proclamado por el Bienaventurado y el Sangha está practicando de la manera correcta'.

"Cuando vi estas cuatro huellas del asceta Gotama, llegue a esta conclusión: 'el
Bienaventurado está plenamente iluminado, el Dhamma está bien proclamado por el
Bienaventurado y el Sangha está practicando de la manera correcta'.

[8] {290} Cuando esto fue dicho, el brahmán Janussoni descendió de su carruaje
enteramente blanco conducido por yeguas blancas y, arreglando su hábito superior en un
hombro, extendió sus manos en un reverendo saludo hacia el Bienaventurado y proclamó
esta solemne declaración, tres veces: "¡Honor al Bienaventurado, realizado y plenamente
iluminado! ¡Honor al Bienaventurado, realizado y plenamente iluminado! ¡Honor al
Bienaventurado, realizado y plenamente iluminado! Quizá este día u otro, podremos
encontrar al maestro Gotama y tener con él una conversación".
[9] Acto seguido, el brahmán Janussoni se fue junto al Bienaventurado e intercambió con
él cordiales saludos. Cuando estas amigables y corteses palabras de bienvenida habían
terminado, se sentó a un lado y relató al Bienaventurado el contenido entero de la
conversación que tuvo con el asceta mendicante Pilotika. En eso, el Bienaventurado le dijo:
"En este punto, brahmán, el símil de la huella del elefante aún no ha sido completado con
detalles. Escucha y presta atención, brahmán, que voy a hablar sobre cómo el mismo debe
ser completado con detalles". - "Sí, venerable señor", respondió el brahmán Janussoni y el
Bienaventurado continuó:

[10] {291} "Imagina, brahmán, a un sabio leñador entrando al bosque de los elefantes que
ve, dentro del bosque de los elefantes, una gran huella del elefante, larga en la extensión y
ancha. El sabio leñador no puede llegar a la conclusión: 'realmente, este es un gran elefante
del bosque'. ¿Por qué no? Porque en el bosque de los elefantes hay también pequeñas
elefantes-hembras que dejan huellas grandes, de modo que esta huella grande podría
pertenecer a una de ellas. Imagina además, brahmán, que este sabio leñador sigue esta huella
y ve, dentro del bosque de los elefantes, una gran huella del elefante, larga en la extensión y
ancha con raspaduras altas. El sabio leñador ni aún puede llegar a la conclusión: 'realmente,
este es un gran elefante del bosque'. ¿Por qué no? Porque en el bosque de los elefantes hay
también pequeñas elefantes-hembras con dientes muy destacados y que dejan huellas
grandes, de modo que esta huella grande podría pertenecer a una de ellas. Imagina además,
brahmán, que este sabio leñador sigue esta huella y ve, dentro del bosque de los elefantes,
una gran huella del elefante, larga en la extensión y ancha con raspaduras altas y marcas
hechas por los colmillos. El sabio leñador ni aún puede llegar a la conclusión: 'realmente,
este es un gran elefante del bosque'. ¿Por qué no? Porque en el bosque de los elefantes hay
también pequeñas elefantes-hembras con colmillos y que dejan huellas grandes, de modo
que esta huella grande podría pertenecer a una de ellas. Imagina además, brahmán, que este
sabio leñador sigue esta huella y ve, dentro del bosque de los elefantes, una gran huella del
elefante, larga en la extensión y ancha con raspaduras altas, marcas hechas por los colmillos
y unas ramas rotas. Y ve al gran elefante al pie de un árbol o en un espacio libre, caminando
alrededor, sentado o recostado. Entonces, llega a la conclusión: 'realmente, este es un gran
elefante del bosque'.

[11] "De la misma manera, brahmán, el Tathagata llegó a este mundo, realizado, plenamente
iluminado, perfecto en el verdadero conocimiento y conducta, sublime, conocedor de los
mundos, inigualado conductor de las personas que han de ser domadas, el maestro de los
dioses y los seres humanos, el Iluminado, el Bendito. Él revela las cosas tanto del mundo de
los dioses, Maras y Brahmas, como del mundo de los ascetas y
brahmanes con sus príncipes y su gente, habiendo conocido todo esto mediante su propio y
directo entendimiento. El Dhamma que enseña es agradable en el comienzo, agradable en la
mitad y agradable al final. Enseña tanto su espíritu y como la letra, exhibiéndolo perfecta y
plenamente y viviendo una vida santa, rigurosa y pura.

[12] "Un hombre hogareño o su hijo, o alguien que hubo renacido desde un hogar a otro, al
escuchar este Dhamma, obtiene fe en el Tathagata reflexionando de esta manera: 'La vida
hogareña es un camino limitado y cubierto de polvo, mientras que la vida sin hogar es como
vivir al aire libre. Esta no es una tarea fácil: vivir en el hogar y practicar una vida totalmente
perfecta, totalmente pura y mantenerla brillante como una concha desvainada. ¿Qué tal si
afeito mi cabeza y mi barba, me visto con el hábito amarillo y renuncio a esta vida hogareña
para vivir el estilo de vida sin hogar?' De modo que, después de cierto tiempo efectivamente
abandona sus riquezas, pequeñas o grandes, deja el círculo de sus parientes, pequeño o
grande, afeita su cabeza y su barba, se viste con el hábito amarillo para vivir el estilo de vida
sin hogar.

[13] {292} "Y habiendo hecho este renunciamiento y poseyendo el entrenamiento y la


manera de vivir del monje, dejan de dar la muerte a los seres vivos, se mantiene distante de
la destrucción de la vida; sin garrotes o espadas, se avergüenza de la violencia. Vive
compasivo y amable con todos los seres vivos. Dejando de tomar lo que no le ha sido dado,
se mantiene distante de codiciar aquello que no es de él. Toma solamente lo que le es ofrecido
y mientras espera las limosnas, transcurre su vida en la honestidad y en la pureza del corazón.
Dejando las impurezas, vive en castidad. Se mantiene distante de las prácticas vulgares
relacionadas con los actos sexuales.

"Dejando las palabras mentirosas, se mantiene distante de la falsedad. Habla la verdad sin
dobleces, es creíble y digno de confianza; nunca quiebra su palabra. Dejando la difamación
y calumnia, se mantiene distante de la embustería. Lo que escucha aquí, no lo repite en otro
lugar, para no causar riñas con la gente de aquí; y lo que escucha en otro lugar, no lo repite
aquí, para no causar riñas con la gente de allí. Así vive él, como el reconciliador de aquellos
que están divididos, animando a los que viven en amistad, hacedor y amante de la paz,
apasionado por la causa de la paz; sus palabras son siempre pacíficas. Dejando la rudeza de
hablar, se mantiene distante del lenguaje violento. Cada una de sus palabras es intachable,
agradable, encantadora, que toca el corazón y es cortés. La gente ama su forma de hablar y
se complace en ella. Dejando las charlas frívolas, se mantiene distante de las vanas
conversaciones. Sus palabras son siempre correctas, acordes a los hechos y llenas de
significado; versan sólo sobre el Dhamma y Disciplina. Habla siempre a tiempo justo, y sus
palabras son dignas de ser escuchadas, llegan al corazón, son ilustrativas, claramente
escogidas y siempre tocan el punto.
{293} "Se abstiene de causar daños a las semillas o las plantas. Toma una sola comida al día
y nunca come por la noche, y se abstiene de comer en el horario indebido. Se abstiene de
mirar los espectáculos de entretenimiento, de danzar, cantar y escuchar la música. Se abstiene
de usar adornos, ni se embellece con guirnaldas, perfumes o ungüentos. Se abstiene de usar
grandes y cómodos lechos. Se abstiene de recibir oro y plata. Se abstiene de aceptar granos
no cocinados. Se abstiene de aceptar la comida cruda. Se abstiene de aceptar mujeres o
muchachas. Se abstiene de aceptar esclavos y esclavas. Se abstiene de aceptar ovejas y
cabras. Se abstiene de aceptar aves y cerdos. Se abstiene de aceptar elefantes, reses, caballos
y yeguas. Se abstiene de aceptar campos de cultivo y campos baldíos. Se abstiene de mandar
recados. Se abstiene de comprar y vender. Se abstiene del engaño con las falsas pesas o
medidas. Se abstiene del camino torcido de sobornos, estafas y fraudes. Se abstiene de
mutilaciones, asesinatos y aprisionamientos. Se abstiene de asaltos, robos y de la violencia.

[14] {294} "Llega a contentarse con sus hábitos que protegen su cuerpo y con la comida de
las limosnas que mantiene su estómago, y dondequiera que vaya, sólo esto es lo que lleva
consigo. Al igual que un ave, dondequiera que vaya, sólo lleva el viento como su única carga,
así también el monje, se contenta con sus hábitos que protegen su cuerpo y con la comida de
las limosnas que mantiene su estómago, y dondequiera que vaya, sólo esto es lo que lleva
consigo. Poseyendo la totalidad de la noble virtud, experimenta dentro de sí mismo la dicha
de la irreprochabilidad.

[15] {295} "Cuando mira con el ojo algún objeto visible, no se apega a él ni a alguno de sus
detalles. Porque si alguien vive sin resguardar su sentido de la vista, los malos e insalubres
estados de avaricia y dolor pueden invadirlo, de modo que, la práctica del monje consiste en
resguardar la puerta del ojo. Cuando escucha el oído algún objeto audible... Cuando huele
con la nariz algún objeto olfativo... Cuando degusta con el paladar algún objeto gustativo...
Cuando percibe con el cuerpo algún objeto táctil... Cuando conoce con la mente algún objeto
mental, no se apega a él ni a ninguno de sus detalles. Porque si alguien vive sin resguardar
su sentido de la cognición, los malos e insalubres estados de avaricia y dolor pueden
invadirlo, de modo que, la práctica del monje consiste en resguardar la puerta de la cognición.
Poseyendo la noble restricción de los sentidos, experimenta dentro de sí mismo la dicha de
la irreprochabilidad.

[16] "Cuando camina hacia adelante o cuando camina hacia atrás, lo hace con la clara
comprensión. Cuando mira hacia adelante o mira hacia atrás, lo hace con la clara
comprensión. Cuando flexiona sus miembros o cuando los extiende, lo hace con la clara
comprensión. Cuando viste la ropa interior o cuando viste el hábito externo, lo hace con la
clara comprensión. Cuando carga su tazón, lo hace con la clara comprensión. Cuando come,
bebe, mastica o saborea, lo hace con la clara comprensión. Cuando orina o cuando defeca, lo
hace con la clara comprensión. Cuando camina, cuando está de pie, cuando está sentado,
cuando se recuesta para dormir, cuando se despierta, cuando conversa o cuando permanece
en silencio, todo eso hace con la clara comprensión.

[17] {296} "Poseyendo la totalidad de la noble virtud, esta noble restricción de los sentidos
y poseyendo esta noble atención consciente y clara comprensión, concurre a las recluidos
lugares de descanso: al bosque, al pie de un árbol, la montaña, la cañada, la cueva de la
ladera, el cementerio, la espesura de la jungla, al aire libre o el montículo de paja.

[18] "Después de haberse alimentado, al haber regresado de su ronda en busca de las


limosnas, se sienta con las piernas cruzadas y, manteniendo recto su cuerpo, establece su
atención consciente enfrente. Dejando de lado la codicia por el mundo, permanece
atentamente consciente y libre de la codicia. Purifica su mente de la codicia. Dejando de lado
la animadversión y el odio, permanece atentamente consciente y libre de la animadversión,
con el amor compasivo por el bienestar de los seres vivientes. Purifica su mente de la
animadversión y del odio. Dejando de lado la pereza y apatía, permanece atentamente
consciente y libre de la pereza y apatía, percibiendo la luz atenta y conscientemente. Purifica
su mente de la pereza y apatía. Dejando de lado la preocupación y el remordimiento,
permanece imperturbable y con la mente calmada. Purifica su mente de la preocupación y el
remordimiento. Dejando de lado la duda, permanece como alguien que había traspasado las
dudas, sin perplejidad en consideración a las sanas cualidades mentales. Purifica su mente
de la duda.

[19] {297} "Habiendo abandonado estos cinco impedimentos, las imperfecciones mentales
que debilitan la sabiduría, separado de la sensualidad, separado de los insalubres estados,
entra y permanece en el primer jhana, acompañado por el pensamiento aplicado y sostenido,
con el arrobamiento y placer, nacidos de la reclusión. Esto, brahmán, se llama la huella del
Tathagata, algo con raspadura del Tathagata, algo con marcas del Tathagata, pero el noble
discípulo todavía no llega a la conclusión: 'el Bienaventurado está plenamente iluminado, el
Dhamma está correctamente proclamado por el Bienaventurado y el Sangha está practicando
de buena manera'.

[20] "Además, el monje, apaciguando el pensamiento aplicado y sostenido, entra y


permanece en el segundo jhana, que tiene la calma mental y la unificación de la mente. Lleno
de arrobamiento y placer nacidos de la reclusión y libre del pensamiento aplicado y
sostenido. Esto también, brahmán, se llama la huella del Tathagata, algo con raspadura del
Tathagata, algo con marcas del Tathagata, pero el noble discípulo todavía no llega a la
conclusión: 'el Bienaventurado está plenamente iluminado, el Dhamma está correctamente
proclamado por el Bienaventurado y el Sangha está practicando de buena manera'.

[21] "Además, el monje, al extinguirse el arrobamiento, permanece ecuánime, con la


atención consciente y clara comprensión, sensible a la sensación del placer, entra y
permanece en el tercer jhana, del cual los nobles declararon que 'feliz es aquel que mora en
la ecuanimidad y en la atención consciente'. Esto también, brahmán, se llama la huella del
Tathagata, algo con raspadura del Tathagata, algo con marcas del Tathagata, pero el noble
discípulo todavía no llega a la conclusión: 'el Bienaventurado está plenamente iluminado, el
Dhamma está correctamente proclamado por el Bienaventurado y el Sangha está practicando
de buena manera'.

[22] "Además, el monje, al abandonar tanto el placer como la pena -con la anterior
desaparición de las alegrías y las tristezas- entra y permanece en el cuarto jhana, el cual va
más allá de los placeres y las penas, purificado con la ecuanimidad y atención consciente.
Esto también, brahmán, se llama la huella del Tathagata, algo con raspadura del Tathagata,
algo con marcas del Tathagata, pero el noble discípulo todavía no llega a la conclusión: 'el
Bienaventurado está plenamente iluminado, el Dhamma está correctamente proclamado por
el Bienaventurado y el Sangha está practicando de buena manera'.

[23] {298} "Con la mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de las
impurezas, maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, direcciona e
inclina su mente hacia el conocimiento de las existencias pasadas. Se acuerda de sus
múltiples vidas pasadas: de un nacimiento, dos nacimientos, tres nacimientos, cuatro, cinco,
diez, veinte, treinta, cuarenta, cincuenta, cien, mil, cien mil nacimientos, muchos eones de
las contracciones cósmicas, muchos eones de las expansiones cósmicas, muchos eones de las
contracciones y expansiones cósmicas, recordando: 'En aquel entonces, mi nombre era así,
mi linaje era éste y provenía de ésta casta; me alimentaba de ésta clase de alimento
experimentaba ésta y aquella clase de alegrías y penas y he vivido ésta cantidad de años.
Habiendo terminado mi vida ahí, me he reconectado allá, donde mi nombre era... Habiendo
terminado mi vida ahí, me he reconectado aquí'. De esta manera, se acuerda de varias de sus
vidas pasadas, con sus condiciones y detalles. Esto también, brahmán, se llama la huella del
Tathagata, algo con raspadura del Tathagata, algo con marcas del Tathagata, pero el noble
discípulo todavía no llega a la conclusión: 'el Bienaventurado está plenamente iluminado, el
Dhamma está correctamente proclamado por el Bienaventurado y el Sangha está practicando
de buena manera'.

[24] "Con la mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de las impurezas,
maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, direcciona e inclina su
mente hacia la muerte y la reconexión de los seres. A través del ojo divino, purificado y que
sobrepasa el humano, ve la muerte de los seres y su reaparición, discerniendo si su destino
es inferior o superior, hermoso u horrible, afortunado o desafortunado, de acuerdo al kamma
de cada uno. Conoce de esta manera: 'Estos seres, que obraron mal con su cuerpo, con su
habla o con su mente, los que injuriaban a los nobles, mantenían los incorrectos puntos de
vista y asumían acciones resultantes de estos erróneos puntos de vista, al quebrarse su cuerpo,
después de la muerte, han reaparecido en el plano de las penurias, de mal destino, en los
reinos bajos, en el infierno. Pero aquellos seres, que obraron bien con su cuerpo, con su habla
o con su mente, los que no injuriaban a los nobles, mantenían los correctos puntos de vista y
asumían acciones resultantes de estos correctos puntos de vista, al quebrarse su cuerpo,
después de la muerte, han reaparecido en el buen destino, en el mundo celestial'. De esta
manera, a través del ojo divino, purificado y que sobrepasa el humano, él ve la muerte de los
seres y su reaparición, discerniendo si su destino inferior o superior, hermoso u horrible,
afortunado o desafortunado, de acuerdo a su kamma. Esto también, brahmán, se llama la
huella del Tathagata, algo con raspadura del Tathagata, algo con marcas del Tathagata, pero
el noble discípulo todavía no llega a la conclusión: 'el Bienaventurado está plenamente
iluminado, el Dhamma está correctamente proclamado por el Bienaventurado y el Sangha
está practicando de buena manera'.

[25] {299} "Con la mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de las
impurezas, maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, direcciona e
inclina su mente hacia el conocimiento del fin de las impurezas mentales. Conoce tal como
realmente es: 'Este es el sufrimiento, éste es el origen del sufrimiento, éste es el cese del
sufrimiento y éste es el sendero que lleva al cese del sufrimiento'. También conoce esto tal
como realmente es: 'Estas son las impurezas mentales, éste es el origen de las impurezas
mentales, éste es el cese de las impurezas mentales y éste es el sendero que lleva al cese de
las impurezas mentales'. Esto también, brahmán, se llama la huella del Tathagata, algo con
raspadura del Tathagata, algo con marcas del Tathagata, pero el noble discípulo todavía no
llega a la conclusión: 'el Bienaventurado está plenamente iluminado, el Dhamma está
correctamente proclamado por el Bienaventurado y el Sangha está practicando de buena
manera'; más bien, está en el proceso de llegar a esta conclusión.

[26] A través de este conocimiento y la visión, su mente es liberada de las impurezas de la


sensualidad, de las impurezas de la existencia y de las impurezas de la ignorancia. Y
entonces, el siguiente conocimiento nace en él: '¡Ésta es la liberación!' Y sabe que 'el
nacimiento está terminado, la vida santa ha sido realizada, la tarea ha culminado. No queda
más nada por delante'. Esto también, brahmán, se llama la huella del Tathagata, algo con
raspadura del Tathagata, algo con marcas del Tathagata, pero el noble discípulo todavía no
llega a la conclusión: 'el Bienaventurado está plenamente iluminado, el Dhamma está
correctamente proclamado por el Bienaventurado y el Sangha está practicando de buena
manera'. Y en este punto, brahmán, aquel símil sobre la huella del elefante ha sido
completado con detalles."

[27] Cuando esto fue dicho, el brahmán Janussoni se dirigió al Bienaventurado con estas
palabras: "¡Excelente, señor! ¡Realmente, magnífico! Es como si alguien enderezara lo que
estaba torcido, como si revelara, lo que estaba oculto, como si mostrara el camino a alguien
que estaba perdido o si encendiera una lámpara en medio de la oscuridad, para que alguien
dotado de buena vista pudiera percibir las formas. De la misma manera, el Bienaventurado
ha expuesto el Dhamma de diferentes maneras. Yo, señor, voy a tomar el refugio en el
Bienaventurado, en el Dhamma y en el Sangha. Qué el Bienaventurado me considere, de
aquí en adelante, como uno de sus seguidores laicos."

Un discurso sobre la necesidad de mantener la paciencia cuando se recibe el trato


desagradable.
[Leer en pali]
[1] {222} Esto he escuchado. En una ocasión el Bienaventurado estaba morando en Savatthi
en la arbolada Jeta del Parque de Anathapindika.
[2] En aquel tiempo, el Venerable Moliya Phagguna se estaba asociando con las monjas en
demasía [1]. Se estaba asociando tanto con las monjas, que cuando algún monje decía algo
desfavorable sobre ellas en su presencia, se enfadaba y se disgustaba por esto. De la misma
manera, aquellas monjas, cuando algún monje decía algo desfavorable sobre el Venerable
Moliya Phagguna en su presencia, ellas se enfadaban y se disgustaban por esto. Así de fuerte
era la asociación del Venerable Phagguna con las monjas.
[3] Entonces, cierto monje se fue junto al Bienaventurado y al llegar, le rindió homenaje y
se sentó a un lado. Una vez sentado ahí, le contó al Bienaventurado lo sucedido.
[4] {223} Acto seguido, el Bienaventurado se dirigió a este monje con las siguientes
palabras: “Ve, monje, y dile al monje Moliya Phagguna en mi nombre, que el Maestro lo
llama”. “Sí, venerable señor”, respondió aquel monje y se fue junto al Venerable Moliya
Phagguna. Estando ahí le dijo: “El Maestro te llama, amigo Phagguna”. “Sí, amigo”,
respondió éste y se fue junto al Bienaventurado. Al llegar, le rindió homenaje y se sentó a un
lado. Y el Bienaventurado le preguntó:
[5] “Phagguna, ¿es cierto que te estás asociando con las monjas en demasía? ¿Qué te estás
asociando tanto con las monjas, que cuando algún monje dice algo desfavorable sobre ellas
en tu presencia, te enfadas y te disgustas por esto? ¿Y que, de la misma manera, aquellas
monjas, cuando algún monje dice algo desfavorable sobre ti en su presencia, ellas se enfadan
y se disgustan por esto? ¿Es así de fuerte esta asociación tuya con las monjas como parece?”
“Sí, venerable señor”. “Phagguna, ¿no eres tú acaso un hombre hogareño que se hizo
renunciante de la vida hogareña por la fe, para vivir un estilo de vida sin hogar?” “Sí,
venerable señor”.
[6] {224} “Phagguna, no es apropiado para ti –que fuiste un hombre hogareño y que te
volviste renunciante de la vida hogareña por fe, para vivir un estilo de vida sin hogar-
asociarte con las monjas en demasía. En vez de esto, cuando alguien hable
desfavorablemente sobre ellas en tu presencia, deberías abandonar todo el deseo y todo el
pensamiento relacionado con la vida hogareña. En esto deberías ejercitarte, Phagguna: ‘Mi
mente no quedará afectada y no pronunciaré en absoluto, palabra incorrecta alguna; voy a
permanecer compasivo para su bienestar, con la mente sumergida en el amor benevolente,
sin el odio interior’. Así es cómo deberías ejercitarte, Phagguna.
“Si alguien hiciera sangrar a estas monjas con su mano, con un zoquete, con un palo o con
un cuchillo en tu presencia, igualmente deberías abandonar todo el deseo y todo el
pensamiento relacionado con la vida hogareña. Y en esto deberías ejercitarte, Phagguna: ‘Mi
mente no quedará afectada y no pronunciaré en absoluto, palabra incorrecta alguna; voy a
permanecer compasivo para su bienestar, con la mente sumergida en el amor benevolente,
sin el odio interior’. Así es cómo deberías ejercitarte, Phagguna. Además, Phagguna, cuando
alguien hable desfavorablemente sobre ti en tu presencia, deberías también abandonar todo
el deseo y todo el pensamiento relacionado con la vida hogareña. Y en esto deberías
ejercitarte, Phagguna: ‘Mi mente no quedará afectada y no pronunciaré en absoluto, palabra
incorrecta alguna; voy a permanecer compasivo para su bienestar, con la mente sumergida
en el amor benevolente, sin el odio interior’. Así es cómo deberías ejercitarte, Phagguna”. Y
si alguien te hiciera sangrar con la mano, con un zoquete, con un palo o con un cuchillo, aún
así deberías abandonar todo el deseo y todo el pensamiento relacionado con la vida hogareña.
Y en esto deberías ejercitarte, Phagguna: ‘Mi mente no quedará afectada y no pronunciaré
en absoluto, palabra incorrecta alguna; voy a permanecer compasivo para su bienestar, con
la mente sumergida en el amor benevolente, sin el odio interior’. Así es cómo deberías
ejercitarte, Phagguna”.
[7] {225} Entonces, el Bienaventurado se dirigió a los monjes con estas palabras: “Monjes,
hubo tiempo, en el cual los monjes satisfacían mi corazón. Yo les decía a los monjes esto:
‘Monjes, yo suelo comer una sola vez al día. Haciendo esto, soy libre de dolencias y
aflicciones y disfruto de la salud, fuerza y de una morada confortable’. Y no necesitaba
continuar instruyendo a estos monjes, sólo hacía surgir la atención consciente en ellos [2].
Imaginad, monjes, a un carruaje terrestre, ubicado en el cruce de las rutas, enganchado con
los caballos de pura sangre, con una aguijada lista para ser usada. De modo que un hábil
entrenador, un auriga de caballos destinados a ser domados, podría montar este carruaje y,
tomando las riendas con la mano izquierda y la aguijada, con la derecha, conducir aquel
carruaje hacia delante o hacia atrás, tomando cualquier ruta que desease. De la misma manera
yo también, monjes, no necesitaba continuar instruyendo a estos monjes, sólo hacía surgir la
atención consciente en ellos.
[8] “Por eso, monjes, abandonad lo que es perjudicial y consagraos vosotros mismos a los
saludables estados mentales; de esta manera llegaréis a desarrollaros, a crecer y a realizar
este Dhamma-y-Disciplina. Imaginad, monjes, a una gran arboleda con los árboles sala cerca
de un pueblo o una ciudad, que está siendo ahogada por las malezas de la planta de ricino, y
a un hombre que aparece ahí y es deseoso del bienestar, el bien y la protección de la arboleda.
De modo que corta y echa fuera todos los árboles torcidos inmaduros que sólo robaban la
savia, limpia el interior de la arboleda y cuida de aquellos árboles jóvenes que fueran bien
formados y fuertes, de modo que, con el tiempo, la arboleda de los árboles sala haya llegado
a desarrollarse, crecer y realizarse. De la misma manera, monjes, abandonad lo que es
perjudicial y consagraos vosotros mismos a los saludables estados mentales; de esta manera
llegaréis a desarrollaros, a crecer y a realizar este Dhamma-y-Disciplina.
[9] {226} “Antiguamente, monjes, en esta misma ciudad de Savatthi vivía una ama de casa
de nombre Vedehika. Y una muy buena referencia se propagaba acerca de la señora Vedehika
de la siguiente manera: ‘La señora Vedehika es amable, la señora Vedehika es dócil, la señora
Vedehika es tranquila’. En aquel tiempo, la señora Vedehika tenía una criada llamada Kali,
que era astuta, lista y esmerada en su trabajo. Y la criada Kali pensó así: ‘He aquí, que esta
buena referencia se propaga acerca de mi señora de la siguiente manera: «La señora Vedehika
es amable, la señora Vedehika es dócil, la señora Vedehika es tranquila» . ¿Pero cómo es
esto ahora: ¿será que cuando ella no manifiesta el enfado, es que el mismo realmente está
ausente en ella o, más bien, está presente? ¿Será que es por causa del esmero de mi trabajo
que mi señora no muestra el enfado, pero éste realmente está presente en ella? ¿Qué tal si
someto a prueba a mi señora?’
“Así que la criada Kali un día se levantó tarde. Y la señora Vedehika dijo: ‘¡Eh, Kali’ ‘Qué
pasa, mi señora?’ ‘¿Cuál es el achaque, por el cual te levantaste tan tarde?’ ‘No es nada,
señora, ningún achaque.’ ‘¡Ningún achaque y a pesar de todo te levantas tan tarde, maliciosa
muchacha!’ Y la señora Vedehika se puso enfadada, disgustada y frunció el entrecejo.
Entonces, la criada Kali pensó lo siguiente: ‘Efectivamente, es que mientras mi señora no
manifiesta el enojo, éste realmente está presente en ella y no ausente; de modo que, es por
causa del esmero de mi trabajo que mi señora no muestra el enfado. ¿Qué tal si la someto a
una prueba mayor?’
“Así que la criada Kali, el día siguiente se levantó más tarde aún. Y la señora Vedehika dijo:
‘¡Eh, Kali’ ‘Qué pasa, mi señora?’ ‘¿Cuál es el achaque, por el cual te levantaste tan tarde?’
‘No es nada, señora, ningún achaque.’ ‘¡Ningún achaque y a pesar de todo te levantaste aún
más tarde que ayer, maliciosa muchacha!’ Y la señora Veedehika se puso enfadada,
disgustada y le habló usando palabras muy desagradables. Entonces, la criada Kali pensó lo
siguiente: ‘Efectivamente, es que mientras mi señora no manifiesta el enojo, éste realmente
está presente en ella y no ausente; de modo que es por causa del esmero de mi trabajo que
mi señora no muestra el enfado. ¿Qué tal si la someto a una prueba aún mayor?’
“Así que la criada Kali, el día siguiente se levantó aún más tarde. Y la señora Vedehika dijo:
‘¡Eh, Kali’ ‘Qué pasa, mi señora?’ ‘¿Cuál es el achaque, por el cual te levantaste tan tarde?’
‘No es nada, señora, ningún achaque.’ ‘¡Ningún achaque y a pesar de todo te levantaste aún
más tarde que ayer, maliciosa muchacha!’ Y la señora Veedehika se puso enfadada,
disgustada y, tomando un rodillo de cocina, le rompió la cabeza y la hizo sangrar. “Entonces,
la criada Kali, con la cabeza desangrada, denunció a su señora en el vecindario: ‘¡Mirad
señoras, mirad la obra de la señora amable! ¡Mirad señoras, mirad la obra de la señora dócil!
¡Mirad señoras, mirad la obra de la señora tranquila! ¡Es capaz de ponerse tan furiosa sólo
porque una se levantó más tarde! ¡Es capaz, sólo por esto, de tomar un rodillo de cocina y
romperme la cabeza haciéndome sangrar!’ A causa de esto, más tarde, muy mala referencia
se propagó acerca de la señora Vedehika de la siguiente manera: ‘La señora Vedehika es
bruta, la señora Vedehika es violenta, la señora Vedehika es despiadada’. [10] “De la misma
manera, monjes, algunos monjes son extremadamente amables, extremadamente dóciles y
extremadamente tranquilos, pero sólo mientras no son tocados por la desagradable forma de
hablar. Pero, cuando la desagradable forma de hablar les toca, ahí recién se puede saber si un
monje es realmente amable, dócil y tranquilo. Yo no llamo a un monje ‘fácil de exhortar’
porque es fácil de exhortar y se hace fácil de exhortar solamente para conseguir la vestimenta,
la comida de las limosnas, el alojamiento y los requisitos medicinales. ¿Por qué así, monjes?
Porque aquel monje no es fácil de exhortar ni se hace fácil de exhortar cuando le falta la
vestimenta, la comida de las limosnas, el alojamiento o los requisitos medicinales. Pero
cuando el monje es fácil de exhortar y se hace fácil de exhortar porque honra, respeta y
reverencia el Dhamma, entonces, monjes, yo lo llamo ‘fácil de exhortar’. Por eso, monjes,
deberíais ejercitaros de esta manera: ‘Vamos a ser fáciles de exhortar y vamos a hacernos
fáciles de exhortar porque honramos, respetamos y reverenciamos el Dhamma’. Así es, cómo
deberíais ejercitaros, monjes. [11] {227} “Monjes, hay cinco formas de expresarse que los
demás pueden usar cuando se dirigen a vosotros: su hablar puede ser oportuno o inoportuno,
puede ser verdadero o falso, puede ser amable o violento, puede estar conectado con lo bueno
o con lo dañino, puede ser dicho con el amor benevolente o con el odio interior. Cuando los
demás se dirigen a vosotros, monjes, su forma de hablar puede ser oportuna o inoportuna;
cuando los demás se dirigen a vosotros, monjes, su forma de hablar puede ser verdadera o
falsa; cuando los demás se dirigen a vosotros, monjes, su forma de hablar puede ser amable
o violenta; cuando los demás se dirigen a vosotros, monjes, su forma de hablar puede estar
conectada con lo bueno o con lo dañino; cuando los demás se dirigen a vosotros, monjes, su
forma de hablar puede ser acompañada por el amor benevolente o el odio interior. Por eso,
monjes, tendríais que ejercitaros así:
‘Nuestras mentes permanecerán inafectadas, y no tendremos ni una sola palabra inapropiada;
permaneceremos compasivos por su bienestar, con la mente sumergida en el amor
benevolente, sin odio interior; vamos a impregnar a esta persona con el amor benevolente y,
a partir de él, vamos a impregnar a todo el mundo con la mente sumergida en el amor
benevolente, abundante, excelso, inconmensurable, carente de hostilidad y animadversión.’
Así es, cómo deberías ejercitaros, monjes.
[12] {228} “Imaginad, monjes, a un hombre que viniera con una azada y una canasta
diciendo: ‘voy a hacer que esta gran tierra quede sin tierra’. Entonces, imaginad que él cavase
un poquito allí, un poquito allá, esparcieseun poco de tierra ahí y un poco allá, escupiese allí
y escupiese allá, orinase allí y orinarse allá, diciendo: ‘¡Seas sin tierra, seas sin tierra!’ ¿Qué
pensáis, monjes, podría este hombre hacer que esta gran tierra quedara sin tierra?” “No,
venerable señor. ¿Por qué no? Porque esta gran tierra es profunda e inmensa; no es fácil hacer
que quede sin tierra. Finalmente, este hombre sólo podría cosechar hastío y desilusión”.
[13] “Así también, monjes, hay cinco formas de expresarse que los demás pueden usar
cuando se dirigen a vosotros... [se repite el verso 11 ] ‘Nuestras mentes permanecerán
inafectadas, y no tendremos ni una sola palabra inapropiada; permaneceremos compasivos
por su bienestar, con la mente sumergida en el amor benevolente, sin odio interior; vamos a
impregnar a esta persona con el amor benevolente y, a partir de él, vamos a impregnar a todo
el mundo con la mente que es semejante a la gran tierra, abundante, excelsa,
inconmensurable, carente de hostilidad y animadversión.’ Así es, cómo deberías ejercitaros,
monjes. [14] {229} “Imaginad, monjes, a un hombre que viniese con [la pintura] carmesí,
cúrcuma, índigo o carmín, diciendo: ‘Voy a pintar cuadros y voy a hacer aparecer cuadros
en el espacio vacío’. ¿Qué pensáis, monjes, podría este hombre pintar cuadros y hacer
aparecer cuadros en el espacio vacío?” “No, venerable señor. ¿Por qué no? Porque el espacio
vacío no tiene forma ni puede ser manifiesto; no es fácil pintar cuadros y hacer aparecer
cuadros en el espacio vacío. Finalmente, este hombre sólo podría cosechar hastío y
desilusión”. [15] “Así también, monjes, hay cinco formas de expresarse que los demás
pueden usar cuando se dirigen a vosotros... [se repite el verso 11 ] ‘Nuestras mentes
permanecerán inafectadas, y no tendremos ni una sola palabra inapropiada; permaneceremos
compasivos por su bienestar, con la mente sumergida en el amor benevolente, sin odio
interior; vamos a impregnar a esta persona con el amor benevolente y, a partir de él, vamos
a impregnar a todo el mundo con la mente que es semejante al espacio vacío, abundante,
excelsa, inconmensurable, carente de hostilidad y animadversión.’ Así es, cómo deberías
ejercitaros, monjes.
[16] {230} “Imaginad, monjes, a un hombre que viniese con una antorcha flameante con el
pasto, diciendo: ‘Voy a calentar y secar el río Ganges con esta antorcha flameante con el
pasto’. ¿Qué pensáis, monjes, podría este hombre calentar y secar el Ganges con su antorcha
flameante con el pasto?” “No, venerable señor. ¿Y por qué no? Porque el río Ganges es
profundo e inmenso; no es fácil calentar y secar el río Ganges con una antorcha flameante
con el pasto. Finalmente, este hombre sólo podría cosechar hastío y desilusión”. [17] “Así
también, monjes, hay cinco formas de expresarse que los demás pueden usar cuando se
dirigen a vosotros... [se repite el verso 11 ] ‘Nuestras mentes permanecerán inafectadas, y
no tendremos ni una sola palabra inapropiada; permaneceremos compasivos por su bienestar,
con la mente sumergida en el amor benevolente, sin odio interior; vamos a impregnar a esta
persona con el amor benevolente y, a partir de él, vamos a impregnar a todo el mundo con la
mente que es semejante al río Ganges, abundante, excelsa, inconmensurable, carente de
hostilidad y animadversión.’ Así es, cómo deberías ejercitaros, monjes.
[18] {231} “Imaginad, monjes, una bolsa de cuero del gato, frotada, muy bien frotada,
exhaustivamente frotada, suave, sedosa, libre de crujidos, libre de chicharrones y a un
hombre que viniese con una barra o con un caso, diciendo: ‘He aquí que esta bolsa de cuero
del gato, frotada, muy bien frotada, exhaustivamente frotada, suave, sedosa, libre de crujidos,
libre de chicharrones, la voy convertir en una bolsa crujida y crepitada’. ¿Qué pensáis
monjes, podría este hombre convertir una bolsa que era de cuero del gato, frotada, muy bien
frotada, exhaustivamente frotada, suave, sedosa, libre de crujidos, libre de chicharrones, en
una que fuera crujida y crepitada?” “No, venerable señor? ¿Y por qué no? Porque el cuero
de gato, cuando es frotado, muy bien frotado, exhaustivamente frotado, llega a ser suave,
sedoso, libre de crujidos, libre de chicharrones y no es fácil convertirlo en crujido y crepitado
a través de una barra o un casco. Finalmente, este hombre sólo podría cosechar hastío y
desilusión”.
[19] “Así también, monjes, hay cinco formas de expresarse que los demás pueden usar
cuando se dirigen a vosotros... [se repite el verso 11 ] ‘Nuestras mentes permanecerán
inafectadas, y no tendremos ni una sola palabra inapropiada; permaneceremos compasivos
por su bienestar, con la mente sumergida en el amor benevolente, sin odio interior; vamos a
impregnar a esta persona con el amor benevolente y, a partir de él, vamos a impregnar a todo
el mundo con la mente que es semejante al una bolsa hecho de cuero del gato, abundante,
excelsa, inconmensurable, carente de hostilidad y animadversión.’ Así es, cómo deberías
ejercitaros, monjes.
[20] {232} “Monjes, aún si unos bandidos os hubiesen cortado salvajemente miembro tras
miembro con el serrucho de doble filo, aquel que permitiera surgir en su mente el odio hacia
ellos, no podría llevar a cabo mi enseñanza. Por eso, monjes, deberíais ejercitaros de esta
manera: ‘Nuestras mentes permanecerán inafectadas, y no tendremos ni una sola palabra
inapropiada; permaneceremos compasivos por su bienestar, con la mente sumergida en el
amor benevolente, sin odio interior; vamos a impregnar a esta persona con el amor
benevolente y, a partir de él, vamos a impregnar a todo el mundo con la mente sumergida en
el amor benevolente, abundante, excelso, inconmensurable, carente de hostilidad y
animadversión.’ Así es, cómo deberías ejercitaros, monjes.
[21] {233} “Monjes, si vosotros mantenéis el consejo del símil del serrucho constantemente
en vuestras mentes, ¿hay aquí forma alguna de expresión –trivial o grosera- la cual no
pudieseis tolerar?” “No, venerable señor”. “Por eso, monjes, deberíais mantener el consejo
del símil del serrucho constantemente en vuestras mentes. Esto os conducirá al bienestar y
felicidad por largo tiempo”.
Esto es lo que dijo el Bienaventurado y los monjes fueron satisfechos y se deleitaron en las
palabras del Bienaventurado.

[1] Así lo he oído.


En cierta ocasión el Bienaventurado residía en Savatthi, en la arboleda de Jeta del Parque de
Anathapindika.
[2] Entonces, a un monje llamado Sati, hijo de un pescador, se le ocurrió la siguiente opinión
perniciosa:
"Tal y como entiendo la Enseñanza predicada por el Bienaventurado, es esta misma
conciencia, y no otra, la que transmigra por la rueda de renaceres".
[3] Muchos monjes oyeron esto y fueron adonde estaba el monje Sati, el hijo del pescador,
para preguntarle:
"No digas eso, amigo Sati, no calumnies al Bienaventurado, no es bueno hacerlo, él no
hablaría así. Amigo Sati, el Bienaventurado ha dicho de muchas maneras que la conciencia
surge dependientemente y que, sin condición, no hay surgir de la conciencia".
[4] Y aunque los monjes le inquirieron, le pidieron explicaciones e insistieron, él se mantuvo
firme y tercamente aferrado a la opinión perniciosa que se le había ocurrido. Como no
pudieron disuadirle de aquella opinión perniciosa, los monjes fueron adonde estaba el
Bienaventurado, le ofrecieron sus respetos y se sentaron a un lado. Una vez sentados, los
monjes relataron al Bienaventurado lo que había ocurrido, concluyendo:
"Venerable Señor, puesto que no conseguimos disuadir al monje Sati de esta perniciosa
opinión, hemos venido a informar al Bienaventurado".
[5] Entonces, el Bienaventurado llamando a un monje, le dijo:
"Ve adonde está el monje Sati, el hijo del pescador, y dile de mi parte que el Maestro lo
llama".
"Sí, Venerable Señor", respondió el monje al Bienaventurado. Y yendo a adonde estaba el
monje Sati, se le acercó y le dijo: "Amigo Sati, el Maestro te llama".
"De acuerdo, amigo", respondió el monje Sati y fue adonde estaba el Bienaventurado, se le
acercó, le ofreció sus respetos y se sentó a un lado. Una vez sentado, el Bienaventurado dijo
así al monje Sati:
"Sati, ¿es verdad que se te ha ocurrido la siguiente opinión perniciosa: 'Tal y como entiendo
la Enseñanza predicada por el Bienaventurado, es esta misma conciencia y no otra, la que
transmigra por la rueda de renaceres?'".
"Así es, Venerable Señor, tal y como entiendo la Enseñanza predicada por el Bienaventurado,
es esta misma conciencia, y no otra, la que transmigra por la rueda de renaceres".
"¿Qué es esa conciencia Sati?".
"Venerable Señor, es aquello que habla, siente y, aquí o allá, experimenta los buenos o malos
resultados de las acciones".
"Hombre necio, ¿me has escuchado alguna vez predicar así la Enseñanza a alguien? Hombre
necio, ¿no he dicho de muchas maneras que la conciencia surge dependientemente y que sin
condición no hay surgir de la conciencia? Sin embargo tú, hombre necio, con tu mala
interpretación, nos calumnias, te dañas a ti mismo y generas mucho demérito. Esto te
acarreará perjuicio y sufrimiento durante mucho tiempo".
[6] Entonces el Bienaventurado dijo a los monjes:
"¿Qué os parece, monjes? ¿Ha calado en el monje Sati, el hijo del pescador, la Enseñanza y
la Disciplina?".
Dicho esto, el monje Sati, el hijo del pescador, se quedó sentado en silencio, perplejo, con
los hombros caídos, cabizbajo, triste y sin palabras. Entonces el Bienaventurado, sabiendo
esto, le dijo así:
"Hombre necio, serás conocido por tu propia opinión perniciosa. Ahora preguntaré a los
monjes".
[7] Entonces, el Bienaventurado dijo a los monjes:
"Monjes, ¿entendéis la predicación de la Enseñanza tal y como lo hace el monje Sati, el hijo
del pescador, que con su mala interpretación, nos calumnia, se daña a sí mismo y genera
mucho demérito?".
"No, Venerable Señor, el Bienaventurado ha dicho de muchas maneras que la conciencia
surge dependientemente y que sin condición no hay surgir de la conciencia".
"Bien, monjes, bueno es que entendáis así la predicación de la Enseñanza, porque yo he dicho
de muchas maneras que la conciencia surge dependientemente y que sin condición no hay
surgir de la conciencia.
"Sin embargo el monje Sati, el hijo del pescador, hombre necio, con su mala interpretación
nos calumnia, se daña a sí mismo y genera mucho demérito. Esto le acarreará perjuicio y
sufrimiento durante mucho tiempo.
[8] "Monjes, la conciencia se define por la condición específica de la que surge en
dependencia. Si la conciencia surge en dependencia del ojo y las formas visibles, se
define como conciencia visual. Si la conciencia surge en dependencia del oído y los
sonidos, se define como conciencia auditiva. Si la conciencia surge en dependencia de
la nariz y los olores, se define como conciencia olfativa. Si la conciencia surge en
dependencia de la lengua y los sabores, se define como conciencia gustativa. Si la
conciencia surge en dependencia del cuerpo y los objetos tangibles, se define como
conciencia táctil. Si la conciencia surge en dependencia de la mente y los objetos
mentales, se define como conciencia mental.
"Monjes, es como el fuego, que arde y se define por la condición específica de la que surge
en dependencia: si el fuego arde en dependencia de troncos, se define como fuego de troncos;
si el fuego arde en dependencia de leña, se define como fuego de leña; si el fuego arde en
dependencia de arbustos, se define como fuego de arbustos; si el fuego arde en dependencia
de boñigas, se define como fuego de boñigas; si el fuego arde en dependencia de brozas, se
define como fuego de brozas; si el fuego arde en dependencia de desperdicios, se define
como fuego de desperdicios.
"Del mismo modo, monjes, la conciencia se define por la condición específica de la que
surge en dependencia: si la conciencia surge en dependencia del ojo y las formas visibles, se
define como conciencia visual... si la conciencia surge en dependencia de la mente y los
objetos mentales, se define como conciencia mental.
[9] "Monjes, ¿veis que: 'esto ha llegado a ser'?'.
"Sí, Venerable Señor".
"Monjes, ¿veis que: 'surge gracias a este alimento'?".
"Sí, Venerable Señor".
"Monjes, ¿veis que: 'al cesar este alimento, lo que ha llegado a ser, cesa'?".
"Sí, Venerable Señor".
[10] "Monjes, ¿hay duda cuando uno no está seguro de sí: 'esto ha llegado a ser o no'?".
"Sí, Venerable Señor".
"Monjes, ¿hay duda cuando uno no está seguro de sí: 'esto surge gracias a este alimento o
no'?".
"Sí, Venerable Señor".
"Monjes, ¿hay duda cuando uno no está seguro de sí: 'al cesar este alimento, lo que ha llegado
a ser, cesa o no'?".
"Sí, Venerable Señor".
[11] "Monjes, ¿se renuncia a la duda cuando se ve tal y como es con recta sabiduría que: 'esto
ha llegado a ser'?".
"Sí, Venerable Señor".
"Monjes, ¿se renuncia a la duda cuando se ve tal y como es con recta sabiduría que: 'surge
gracias a este alimento'?".
"Sí, Venerable Señor".
"Monjes, ¿se renuncia a la duda cuando se ve tal y como es con recta sabiduría que: 'al cesar
este alimento, lo que ha llegado a ser, cesa'?".
"Sí, Venerable Señor".
"Monjes, ¿estáis ahora libres de duda sobre: 'esto ha llegado a ser'?".
"Sí, Venerable Señor".
[12] "Monjes, ¿estáis ahora libres de duda sobre: 'surge gracias a este alimento'?".
"Sí, Venerable Señor".
"Monjes, ¿estáis ahora libres de duda sobre: 'al cesar este alimento, lo que ha llegado a ser,
cesa'?".
"Sí, Venerable Señor".
[13] "Monjes ¿veis con recta sabiduría, tal y como es en realidad, que: 'esto ha llegado a
ser'?".
"Sí, Venerable Señor".
"Monjes, ¿veis con recta sabiduría, tal y como es en realidad, que: 'surge gracias a este
alimento'?".
"Sí, Venerable Señor".
"Monjes, ¿veis con recta sabiduría, tal y como es en realidad, que: 'al cesar este alimento, lo
que ha llegado a ser, cesa'?" "Sí, Venerable Señor".
[14] "Monjes, por pura y limpia que sea esta opinión, si os apegáis a ella, os recreáis con ella,
la atesoráis y poseéis, ¿comprenderíais entonces que la Enseñanza que se os ha
predicado es como una balsa para cruzar y no para aferrarse?".
"No, Venerable Señor".
"Monjes, si no os apegáis a esta opinión tan pura y limpia, no os recreáis con ella, no la
atesoráis ni la poseéis, ¿comprenderíais entonces que la Enseñanza que se os ha predicado es
como una balsa, para cruzar y no para aferrarse?".
"Sí, Venerable Señor".
[15] "Monjes, hay cuatro alimentos para la subsistencia de los seres que han llegado a ser o
para la asistencia de los que están en vías de hacerlo, ¿cuáles?: alimento físico,
consistente o sutil, el primero; contacto el segundo; volición mental el tercero;
conciencia el cuarto.
[16] Y esos cuatro alimentos, monjes, ¿cuál es su fundamento, su origen, su nacimiento, su
principio? El deseo es el fundamento de esos cuatro alimentos, su origen, nacimiento y
principio [1].
"Y, ¿cuál es, monjes, el fundamento del deseo, su origen, nacimiento y principio?
"La sensación es el fundamento del deseo, su origen, nacimiento y principio.
"Y, ¿cuál es, monjes, el fundamento de la sensación, su origen, nacimiento y principio?
"El contacto es el fundamento de la sensación, su origen, nacimiento y principio.
"Y, ¿cuál es, monjes, el fundamento del contacto, su origen, nacimiento y principio?
"Las seis esferas de los sentidos son el fundamento del contacto, su origen, nacimiento y
principio.
"Y, ¿cuál es, monjes, el fundamento de las seis esferas de los sentidos, su origen, nacimiento
y principio?
"El organismo psicofísico es el fundamento de las seis esferas de los sentidos, su origen,
nacimiento y principio.
"Y, ¿cuál es, monjes, el fundamento del organismo psicofísico, su origen, nacimiento y
principio?
"La conciencia es el fundamento del organismo psicofísico, su origen, nacimiento y
principio.
"Y, ¿cuál es, monjes, el fundamento de la conciencia, su origen, nacimiento y principio?
"Las composiciones mentales son el fundamento de la conciencia, su origen, nacimiento y
principio.
"Y, ¿cuál es, monjes, el fundamento de las composiciones mentales, su origen, nacimiento
y principio?
"La ignorancia es el fundamento de las composiciones mentales, su origen, nacimiento y
principio.
[17] "He aquí, monjes, que, condicionadas por la ignorancia [surgen] las composiciones
mentales, condicionada por las composiciones mentales [surge] la conciencia,
condicionado por la conciencia [surge] el organismo psicofísico, condicionadas por el
organismo psicofísico [surgen] las seis esferas de los sentidos, condicionado por las seis
esferas de los sentidos [surge] el contacto, condicionada por el contacto [surge] la
sensación, condicionado por la sensación [surge] el deseo, condicionado por el deseo
[surge] el apego, condicionado por el apego [surge] el devenir, condicionado por el
devenir [surge] el nacer, condicionados por el nacer [surgen] el envejecer, el morir, la
pena, el lamento, el dolor, la aflicción y la tribulación. He aquí el origen de todo este
montón de sufrimiento.
[18] "Se ha dicho: 'Condicionados por el nacer [surgen] el envejecer y el morir'.
"Ahora bien, monjes, ¿están el envejecer y el morir condicionados por el nacer o no? ¿Es o
no es así para vosotros?".
"Condicionados por el nacer, Venerable Señor, [surgen] el envejecer y el morir; así es para
nosotros".
"Se ha dicho: 'Condicionado por el devenir [surge] el nacer'. ¿Está el nacer, monjes,
condicionado por el devenir o no? ¿Es o no es así para vosotros?".
"Condicionado por el devenir, Venerable Señor, [surge] el nacer; así es para nosotros".
"Se ha dicho: 'Condicionado por el apego [surge] el devenir'. ¿Está el devenir, monjes,
condicionado por el apego o no? ¿Es o no es así para vosotros?".
"Condicionado por el apego, Venerable Señor, [surge] el devenir; así es para nosotros". "Se
ha dicho: 'Condicionado por el deseo [surge] el apego'. ¿Está el apego, monjes,
condicionado por el deseo o no? ¿Es o no es así para vosotros?".
"Condicionado por el deseo, Venerable Señor, [surge] el apego; así es para nosotros".
"Se ha dicho: 'Condicionado por la sensación [surge] el deseo'. ¿Está el deseo, monjes,
condicionado por la sensación o no? ¿Es o no es así para vosotros?".
"Condicionado por la sensación, Venerable Señor, [surge] el deseo; así es para nosotros".
"Se ha dicho: 'Condicionada por el contacto [surge] la sensación'. ¿Está la sensación,
monjes, condicionada por el contacto o no? ¿Es o no es así para vosotros?".
"Condicionada por el contacto, Venerable Señor, [surge] la sensación; así es para nosotros".
"Se ha dicho: 'Condicionado por las seis esferas de los sentidos [surge] el contacto'. ¿Está
el contacto, monjes, condicionado por las seis esferas de los sentidos o no? ¿Es o no es así
para vosotros?".
"Condicionado por las seis esferas de los sentidos, Venerable Señor, [surge] el contacto; así
es para nosotros".
"Se ha dicho: 'Condicionadas por el organismo psicofísico [surgen] las seis esferas de los
sentidos'. ¿Están las seis esferas de los sentidos, monjes, condicionadas por el organismo
psicofísico o no? ¿Es o no es así para vosotros?".
"Condicionadas por el organismo psicofísico, Venerable Señor, [surgen] las seis esferas de
los sentidos; así es para nosotros".
"Se ha dicho: 'Condicionado por la conciencia [surge] el organismo psicofísico'. ¿Está el
organismo psicofísico, monjes, condicionado por la conciencia o no? ¿Es o no es así para
vosotros?".
"Condicionado por la conciencia, Venerable Señor, [surge] el organismo psicofísico; así es
para nosotros".
"Se ha dicho: 'Condicionada por las composiciones mentales [surge] la conciencia'. ¿Está la
conciencia, monjes, condicionada por las composiciones mentales o no? ¿Es o no es así para
vosotros?".
"Condicionada por las composiciones mentales, Venerable Señor, [surge] la conciencia; así
es para nosotros".
"Se ha dicho: 'Condicionadas por la ignorancia [surgen] las composiciones mentales'. ¿Están
las composiciones mentales, monjes, condicionadas por la ignorancia o no? ¿Es o no es así
para vosotros?".
"Condicionadas por la ignorancia, Venerable Señor, [surgen] las composiciones mentales;
así es para nosotros".
[19] "Bien, monjes. He aquí, monjes, que así decís vosotros y así digo yo también: 'Cuando
esto es, eso existe, al surgir esto, eso surge', es decir: condicionadas por la ignorancia [surgen]
las composiciones mentales, condicionada por las composiciones mentales [surge] la
conciencia, condicionado por la conciencia [surge] el organismo psicofísico, condicionadas
por el organismo psicofísico [surgen] las seis esferas de los sentidos, condicionado por las
seis esferas de los sentidos [surge] el contacto, condicionada por el contacto [surge] la
sensación, condicionado por la sensación [surge] el deseo, condicionado por el deseo [surge]
el apego, condicionado por el apego [surge] el devenir, condicionado por el devenir [surge]
el nacer, condicionados por el nacer surgen el envejecer, el morir, la pena, el lamento, el
dolor, la aflicción y la tribulación. He aquí el origen de todo este montón de sufrimiento.
[20] "Pero con el cesar y desapasionamiento completo de la ignorancia cesan las
composiciones mentales, al cesar las composiciones mentales cesa la conciencia, al cesar la
conciencia cesa el organismo psicofísico, al cesar el organismo psicofísico cesan las seis
esferas de los sentidos, al cesar las seis esferas de los sentidos cesa el contacto, al cesar el
contacto cesa la sensación, al cesar la sensación cesa el deseo, al cesar el deseo cesa el apego,
al cesar el apego cesa el devenir, al cesar el devenir cesa el nacer, al cesar el nacer cesa el
envejecer, el morir, la pena, el lamento, el dolor, la aflicción y la tribulación. He aquí el cesar
de todo este montón de sufrimiento.
[21] "Se ha dicho: 'Al cesar el nacer cesan el envejecer y el morir'. ¿Al cesar el nacer, monjes,
cesa el envejecer y el morir o no? ¿Es o no es así para vosotros?".
"Al cesar el nacer, Venerable Señor, cesan el envejecer y el morir; así es para nosotros".
"Se ha dicho: 'Al cesar el devenir cesa el nacer'. ¿Al cesar el devenir, monjes, cesa el nacer
o no? ¿Es o no es así para vosotros?".
"Al cesar el devenir, Venerable Señor, cesa el nacer; así es para nosotros".
"Se ha dicho: 'Al cesar el apego cesa el devenir'. ¿Cesa el devenir, monjes, al cesar el apego
o no? ¿Es o no es así para vosotros?.
"Al cesar el apego, Venerable Señor, cesa el devenir; así es para nosotros".
"Se ha dicho: 'Al cesar el deseo cesa el apego'. ¿Cesa el apego, monjes, al cesar el deseo o
no? ¿Es o no es así para vosotros?".
"Al cesar el deseo, Venerable Señor, cesa el apego; así es para nosotros".
"Se ha dicho: 'Al cesar la sensación cesa el deseo'. ¿Cesa el deseo, monjes, al cesar la
sensación o no? ¿Es o no es así para vosotros?".
"Al cesar la sensación, Venerable Señor, cesa el deseo; así es para nosotros".
"Se ha dicho: 'Al cesar el contacto cesa la sensación'. ¿Cesa la sensación, monjes, al cesar
el contacto o no? ¿Es o no es así para vosotros?".
"Al cesar el contacto, Venerable Señor, cesa la sensación; así es para nosotros".
"Se ha dicho: 'Al cesar las seis esferas de los sentidos cesa el contacto'. ¿Cesa el contacto,
monjes, al cesar las seis esferas de los sentidos o no? ¿Es o no es así para vosotros?".
"Al cesar las seis esferas de los sentidos, Venerable Señor, cesa el contacto; así es para
nosotros".
"Se ha dicho: 'Al cesar el organismo psicofísico cesan las seis esferas de los sentidos'. ¿Cesan
las seis esferas de los sentidos, monjes, al cesar el organismo psicofísico o no? ¿Es o no es
así para vosotros?".
"Al cesar el organismo psicofísico, Venerable Señor, cesan las seis esferas de los sentidos;
así es para nosotros".
"Se ha dicho: 'Al cesar la conciencia cesa el organismo psicofísico'. ¿Cesa el organismo
psicofísico, monjes, al cesar la conciencia o no? ¿Es o no es así para vosotros?".
"Al cesar la conciencia, Venerable Señor, cesa el organismo psicofísico; así es para
nosotros".
"Se ha dicho: 'Al cesar las composiciones mentales cesa la conciencia'. ¿Cesa la conciencia,
monjes, al cesar las composiciones mentales o no? ¿Es o no es así para vosotros?".
"Al cesar las composiciones mentales, Venerable Señor, cesa la conciencia; así es para
nosotros".
"Se ha dicho: 'Al cesar la ignorancia cesan las composiciones mentales'. ¿Cesan las
composiciones mentales, monjes, al cesar la ignorancia o no? ¿Es o no es así para vosotros?".
"Al cesar la ignorancia, Venerable Señor, cesan las composiciones mentales; así es para
nosotros".
[22] "Bien, monjes. He aquí, monjes, que así decís vosotros y así digo yo también: 'Cuando
esto no es, eso no existe; al cesar esto, eso cesa', es decir: al cesar la ignorancia cesan las
composiciones mentales, al cesar las composiciones mentales cesa la conciencia, al cesar la
conciencia cesa el organismo psicofísico, al cesar el organismo psicofísico cesan las seis
esferas de los sentidos, al cesar las seis esferas de los sentidos cesa el contacto, al cesar el
contacto cesa la sensación, al cesar la sensación cesa el deseo, al cesar el deseo cesa el apego,
al cesar el apego cesa el devenir, al cesar el devenir cesa el nacer, al cesar el nacer cesan el
envejecer, el morir, la pena, el lamento, el dolor, la aflicción y la tribulación he aquí el cesar
de todo este montón de sufrimiento.
[23] "Monjes, conociendo y viendo de este modo, os retrotraeríais al pasado pensando: '¿Fui
o no fui en el pasado?, ¿qué fui y cómo fui?, habiendo sido uno en el pasado, ¿en qué otro
me convertí?'".
"No, Venerable Señor".
"Monjes, conociendo y viendo de este modo, iríais hacia el futuro pensando: '¿Seré o no seré
en el futuro?, ¿qué seré y cómo seré?, habiendo sido algo, ¿en qué otro me convertiré?'".
"No, Venerable Señor".
"Monjes, conociendo y viendo de este modo, os preocuparéis sobre el presente en vuestro
fuero interno pensando: '¿Soy o no soy?, ¿qué soy y cómo soy?, este ser, ¿de dónde viene?,
¿adónde va?'".
"No, Venerable Señor".
[24] "Monjes, conociendo y viendo de este modo, ¿diríais: 'Respetamos a nuestro maestro y
decimos todo esto por respeto a nuestro maestro?'".
"No, Venerable Señor".
"Monjes, conociendo y viendo de este modo, ¿diríais: 'El asceta nos dice lo mismo que otros
ascetas, pero nosotros no lo diremos?'".
"No, Venerable Señor".
"Monjes, conociendo y viendo de este modo, ¿tomaríais a otro como vuestro maestro?".
"No, Venerable Señor".
"Monjes, conociendo y viendo de este modo, ¿volveríais a los ritos, celebraciones y
auspicios de los ascetas y brahmanes comunes, como si fuera eso lo esencial?".
"No, Venerable Señor".
"Monjes, ¿habláis de lo que habéis conocido por vosotros mismos, visto por vosotros
mismos y comprendido por vosotros mismos?".
"Sí, Venerable Señor",
[25] "Bien, monjes. Habéis sido guiados por mí, monjes, mediante esta Enseñanza que es
patente en este mismo mundo, inmediata, a la que se puede venir y ver, que hace progresar,
que es experimentada por los sabios por sí mismos. Es por esta razón por lo que se ha dicho:
'Monjes, la enseñanza es patente en este mismo mundo, inmediata, a la que se puede venir y
ver, que hace progresar, que es experimentada por los sabios por sí mismos'.
[26] "Monjes, se produce la concepción si se unen tres cosas: si se unen madre y padre, pero
la madre no está en período fértil y un ser pronto a renacer no está presente, entonces no se
produce la concepción. Si se unen madre y padre, la madre está en período fértil, pero no
está presente un ser pronto a renacer, entonces no se produce la concepción. Pero cuando se
unen padre y madre, la madre está en período fértil y está presente un ser pronto a renacer,
entonces, al unirse las tres cosas, se produce la concepción.
[27] "Entonces, monjes, la madre lleva al feto en el vientre durante nueve o diez meses,
agobiada por la pesada carga. Transcurridos los nueve o diez meses, la madre da a luz,
agobiada por la pesada carga. Luego nutre al ser nacido con su propia sangre, porque la leche
materna, monjes, se llama sangre en la Noble Disciplina.
[28] "Y así, monjes, el niño crece y desarrolla sus facultades, jugando con juguetes para
niños como arados, palos, aros, molinillos de viento, balanzas, carretillas, arcos.
[29] "Y así, monjes, el niño crece y desarrolla sus facultades, disfrutando de la posesión y
efecto de las cinco sogas del deseo de los sentidos, a saber, se recrea con formas visibles
conocidas por el ojo... sonidos conocidos por el oído... olores conocidos por la nariz... sabores
conocidos por la lengua... objetos tangibles conocidos por el cuerpo, deseables, apetecibles,
encantadores, seductores, acompañados por el deseo de los sentidos y conducentes a la
pasión.
[30] "Habiendo visto una forma con el ojo, si la forma es agradable se apasiona por ella, si
es desagradable la aborrece, vive así con mente limitada y sin practicar la atención al cuerpo.
No comprende tal y como es la liberación de la mente, la liberación por la sabiduría, en la
que cesan —sin dejar rastro— los estados mentales perjudiciales y malignos. Entregado de
ese modo a la aceptación y al rechazo, sea cual sea la sensación que experimente, placentera,
dolorosa o neutra, goza con esa sensación, la consiente y persiste en sujetarse a ella.
"Al gozar de la sensación, consentirla y persistir en sujetarse a ella, surge el goce y, con el
goce, el apego.
"Condicionado por el apego [surge] el devenir; condicionado por el devenir, el nacer;
condicionado por el nacer, el envejecer, el morir, la pena, el lamento, el dolor, la aflicción y
la tribulación. He aquí el origen de todo este montón de sufrimiento.
"Habiendo percibido un sonido con el oído... un olor con la nariz... un sabor con la lengua...
un objeto tangible con el cuerpo... un objeto mental con la mente, si el objeto es agradable
se apasiona por él, si es desagradable lo aborrece, vive así con la mente limitada y sin
practicar la atención al cuerpo. No comprende tal y como es la liberación de la mente, la
liberación por la sabiduría, en la que cesan —sin dejar rastro— los estados mentales
perjudiciales y malignos. Entregado de ese modo a la aceptación y al rechazo, sea cual sea
la sensación que experimente, placentera, dolorosa o neutra, goza con esa sensación, la
consiente y persiste en sujetarse a ella.
"Al disfrutar de la sensación, consentirla y persistir en sujetarse a ella, surge el deleite y, con
el deleite, el apego. Condicionado por el apego [surge] el devenir; condicionado por el
devenir, el nacer; condicionado por el nacer, el envejecer, el morir, la pena, el lamento, el
dolor, la aflicción y la tribulación. He aquí el origen de todo este montón de sufrimiento.
[31] "He aquí, monjes, que un Tathagata aparece en el mundo, Santo, completamente
iluminado, perfecto de saber y buena conducta, bien encaminado, conocedor del
universo, insuperable guía de los seres humanos por adiestrar, Maestro de dioses y seres
humanos, Iluminado, Bienaventurado.
"Éste, habiendo experimentado [el universo] por sí mismo, con conocimiento superior, da a
conocer [su enseñanza] al mundo, a sus divinidades con sus maras y brahmas, a esta
humanidad con sus ascetas y brahmanes, con sus gobernantes y plebeyos. Expone la
Enseñanza que es buena al principio, buena al medio y buena al final, tanto en la letra como
en el espíritu, proclamando la vida de santidad lograda en su integridad y completamente
pura.
[32] "Un cabeza de familia o hijo de un cabeza de hogar, o alguien nacido en cualquier clan,
escucha la Enseñanza y, al escucharla, nace en él la confianza en el Tathagata. Dotado
de esa confianza que ha nacido en él, reflexiona así: 'La vida del hogar está llena de
estorbos e impurezas. La vida sin hogar es al aire libre. No es fácil, viviendo en el hogar,
practicar la vida santa en su máxima integridad y completamente pura hasta el final,
brillante como la madreperla. ¿Y si me cortase el cabello y la barba, vistiese el hábito
anaranjado y dejase el hogar, para salir a la vida sin hogar?'.
"Y al cabo de poco tiempo, liberado de todos sus bienes y parientes —sean éstos muchos o
pocos—, se corta el cabello y la barba y, vistiendo el hábito anaranjado, da el paso de la vida
hogarareña a la vida sin hogar.
[33] "El asceta que así ha dado el paso, entra en la forma de vida y disciplina de los monjes:
"Renunciando a la muerte de seres vivientes, se abstiene de matar a seres vivientes. Dejando
a un lado el garrote y dejando a un lado la espada, humilde y bondadoso, vive benévolo y
compasivo para con todos los seres vivientes.
"Renunciando a lo que no le es dado, se abstiene de tomar lo que no le dan y sólo toma lo
que le ofrecen, con ello se contenta y, sin robar, vive con ánimo puro.
"Renunciado a la vida no casta, se consagra a la vida de castidad, apartado del mal y
absteniéndose del común trato carnal.
"Renunciando a la mentira, se abstiene de mentir, dice la verdad, es fiel a la verdad, digno
de confianza, fiable y no engaña al mundo.
"Renunciando al hablar malicioso, se abstiene de hablar maliciosamente, lo que oye aquí no
lo repite allá para no provocar disensión entre los de allá y los de acá; y lo que oye allá no lo
repite acá para no provocar disensión entre los de aquí y los de allá. Une a los que están
divididos, promueve la armonía entre los que están unidos, le divierte la concordia, la disfruta
y goza con ella diciendo palabras que tienden a fomentarla.
"Renunciando al hablar grosero, se abstiene de hablar groseramente, todo su hablar es
amistoso, agradable al oído, afable, que llega al corazón, cortés, querido y preferido por
muchos.
"Renunciando al hablar frívolo, se abstiene de hablar frívolamente, sus palabras son
oportunas, verídicas, provechosas, habla de la Enseñanza y de la Disciplina, a su debido
tiempo, dice palabras dignas de atesorarse, razonadas, moderadas y beneficiosas.
"Se abstiene de dañar semillas y plantas vivientes. Come una sola vez al día, no se alimenta
a deshora, ni por la noche.
"Se abstiene de bailes, cantos, músicas y espectáculos frívolos.
"Se abstiene del uso de guirnaldas, perfumes y cosméticos, así como de alhajas y otros
adornos personales.
"Se abstiene del uso de lechos muy altos y muy anchos.
"No acepta oro ni plata. No acepta grano sin cocer ni carne cruda. No acepta mujeres
mayores o jóvenes, no acepta esclavos ni esclavas, ni cabras, ni ovejas, ni cerdos, ni aves de
corral, ni ganado, caballos o elefantes, ni campos o terrenos.
"Se abstiene de llevar encargos o de hacer de mensajero. Se abstiene de comprar o vender.
Se abstiene del uso de medidas, metales o pesos falsos. Se abstiene de cualquier género de
corrupción, soborno, fraude o engaño. Se abstiene de cualquier acto de violencia, robo,
asalto, secuestro, asesinato o tortura.
[34] "Se contenta con un manto para proteger su cuerpo y un cuenco con el cual recibir la
comida para sustentar su estómago, y así, dondequiera que va, lleva esto consigo. Libre como
un ave que, vuele adonde vuele, no lleva otra carga más que sus alas, así va el monje por
doquier con su manto y su cuenco de comida. Dotado de este noble conjunto de virtudes,
experimenta interiormente una felicidad sin tacha.
[35] "Cuando ve una forma con la vista no se aferra ni a sus características ni a sus detalles,
ya que aquel que vive con una facultad visual descontrolada le invaden estados mentales
perjudiciales y nocivos de aflicción y avidez. Así practica el control, protege la facultad
visual y se dedica a controlar la facultad visual. Cuando oye un sonido con el oído... huele
un olor con el olfato... gusta un sabor con el gusto... toca algo tangible con el tacto... tiene
conciencia de un pensamiento con la mente, no se aferra ni a sus características ni a sus
detalles, ya que aquel que vive con una facultad mental descontrolada le invaden estados
mentales perjudiciales y nocivos de aflicción y avidez. Así practica el control, protege la
facultad mental y se dedica a controlar la facultad mental. Practicando así este noble control
de las facultades, experimenta en su interior una felicidad sin tacha.
[36] "Actúa con plena lucidez en todo lo que hace, ya sea yendo o viniendo... mirando
adelante o mirando a su alrededor... encogiéndose o estirándose... llevando el hábito, el
cuenco y el manto... comiendo, bebiendo, masticando, saboreando... defecando u orinando...
caminando, de pie, sentado, dormido, despierto, hablando o en silencio, actúa con plena
lucidez.
[37] "Dotado de este noble conjunto de virtudes, dotado de este noble control de las
facultades y dotado de esta noble atención y lucidez, se instala en un lugar de residencia
aislado, un bosque, el pie de un árbol, una colina, un barranco, una cueva de montaña, un
cementerio, una selva, una llanura, un montón de paja.
[38] "Y, de vuelta de recolectar la comida que le ofrecen, después de haber comido, se sienta
con las piernas cruzadas y, cruzado las piernas, pone su cuerpo erguido enfocando la atención
en torno a la boca.
"Renunciando a la codicia por lo mundano, permanece con una mente libre de codicia,
limpiando la mente de codicia.
"Renunciando al odio y a la malevolencia, permanece con una mente libre de malevolencia
y, limpiando la mente de odio y malevolencia, vive benévolo y compasivo para con todos los
seres vivos.
"Renunciando a la pereza y a la apatía, permanece libre de pereza y apatía, con mente
despejada, lúcida y atenta, limpiando la mente de pereza y apatía.
"Renunciando al desasosiego y a la ansiedad, permanece sereno, con paz interior en la
mente, limpiando la mente de desasosiego y ansiedad.
"Renunciando a la duda, permanece libre de duda, sin confusiones sobre lo que es
provechoso, limpiándose la mente de duda.
[39] "Renunciando a estos cinco impedimentos, impurezas de la mente que debilitan la
sabiduría, apartado del deseo de los sentidos, apartado de lo que es perjudicial, alcanza y
permanece en la primera abstracción meditativa, en la que hay gozo y felicidad nacidos del
apartamiento y va acompañada de ideación y reflexión. Luego, monjes, al cesar la ideación
y reflexión, el monje alcanza y permanece en la segunda abstracción meditativa, en la que
hay gozo y felicidad nacidos de la concentración, está libre de ideación y reflexión y va
acompañada de unificación de la mente y serenidad interior. Al desvanecerse el gozo, el
monje permanece ecuánime, atento y lúcido, experimentando con el cuerpo aquel estado de
felicidad que los Nobles llaman: "Vivir feliz, atento y ecuánime", con lo que alcanza y
permanece en la tercera abstracción meditativa. Al renunciar al placer, al renunciar al dolor,
y previa desaparición de la alegría y la aflicción, el monje alcanza y permanece en la cuarta
abstracción meditativa, sin dolor ni placer, completamente purificada por la atención y la
ecuanimidad.
[40] "Habiendo visto una forma con el ojo, no se apasiona por ella si es agradable, ni la
aborrece si es desagradable; vive así con mente ilimitada, practicando la atención al cuerpo;
comprende tal y como es la liberación de la mente, la liberación por la sabiduría, en la que
cesan —sin dejar rastro— los estados mentales perjudiciales y malignos. Habiendo
abandonado de ese modo la aceptación y el rechazo, sea cual sea la sensación que
experimente, placentera, dolorosa o neutra, no goza con esa sensación, no la consiente y no
persiste en sujetarse a ella. Al no disfrutar de la sensación, no aceptarla y no persistir en
sujetarse a ella, cesa el deleite y, con el cese del deleite, cesa el apego. Al cesar el apego cesa
el devenir, al cesar el devenir cesa el nacer, al cesar el nacer cesan el envejecer, el morir, la
pena, el lamento, el dolor, la aflicción y la tribulación. He aquí el cesar de todo este montón
de sufrimiento.
"Habiendo percibido un sonido con el oído... un olor con la nariz... un sabor con la lengua...
un objeto tangible con el cuerpo... un objeto mental con la mente, no se apasiona por el objeto
si es agradable, ni lo aborrece si es desagradable, vive así con mente ilimitada, practicando
la atención al cuerpo; comprende tal y como es la liberación de la mente, la liberación por la
sabiduría, en la que cesan —sin dejar rastro— los estados mentales perjudiciales y malignos.
Habiendo abandonado de ese modo la aceptación y el rechazo, sea cual sea la sensación que
experimente, placentera, dolorosa o neutra, no goza con esa sensación, no la consiente y no
persiste en sujetarse a ella. Al no disfrutar de la sensación, no aceptarla y no persistir en
sujetarse a ella, cesa el deleite y, con el cese del deleite, cesa el apego. Al cesar el apego cesa
el devenir, al cesar el devenir cesa el nacer, al cesar el nacer cesan el envejecer, el morir, la
pena, el lamento, el dolor, la aflicción y la tribulación. He aquí el cesar de todo este montón
de sufrimiento.
[41] "Monjes, recordad esta liberación mediante la aniquilación del deseo compendiada por
mí. Pero el monje Sati, el hijo del pescador, está enredado en la gran red del deseo, amallado
en el deseo".
Así habló el Bienaventurado, y los monjes gozaron y se complacieron con sus palabras.

Así lo he oído. En cierta ocasión, el Bienaventurado residía en Vesali, en la gran arboleda,


en la casa del pináculo.
[2] En aquella ocasión, bien abrigado, por la mañana, llevando consigo el cuenco y el manto,
se aprestaba a ir a Vesali en busca de comida.
[3] Entonces Saccaka, el hijo de los Niganthas, que estaba dando un paseo, se acercó a la
casa del pináculo, en la gran arboleda.
El venerable Ananda, lo vio venir de lejos, y dijo al Bienaventurado:
"Venerable señor, viene Saccaka, el hijo de los Niganthas, un polemista ducho en debates y
al que muchos dan su beneplácito. Venerable señor, ése quiere desprestigiar al Buddha, a la
Enseñanza ya la Comunidad de monjes. Sería bueno que, por compasión, el Bienaventurado
se sentara un momento con él."
El Bienaventurado se sentó en el asiento que le habían preparado. Entonces Saccaka, el hijo
de los Niganthas, se acercó al Bienaventurado e intercambió saludos con él. Terminada esa
charla amigable y cortés, se sentó a un lado. Una vez sentado, Saccaka, el hijo de los
Niganthas dijo así al Bienaventurado:
[4] {365} "Maestro Gotama, hay ascetas y brahmanes que dedican su vida al cultivo del
cuerpo y no al cultivo de la mente. Ésos, venerable señor, se topan con sensaciones
corporales dolorosas. En otros tiempos, al toparse con dichas sensaciones corporales
dolorosas, había a quien se le paralizaban las piernas, se le reventaba el corazón, echaba
sangre por la boca, se volvía loco y perdía la cabeza. Esto es lo que puede ocurrir si la
mente se subordina al cuerpo y es dominada por el mismo. ¿Y por qué?, pues porque no
se ha cultivado la mente.
"Maestro Gotama, hay ascetas y brahmanes que dedican su vida al cultivo de la mente y no
al cultivo del cuerpo. Ésos, venerable señor, se topan con sensaciones mentales dolorosas.
En otros tiempos, al toparse con dichas sensaciones mentales dolorosas, había a quien se le
paralizaban las piernas, se le reventaba el corazón, echaba sangre por la boca, se volvía loco
y perdía la cabeza. Esto es lo que puede ocurrir si el cuerpo se subordina a la mente y es
dominado por la misma.
"¿Y por qué?, pues porque no se ha cultivado el cuerpo.
"Me parece, maestro Gotama, que tus discípulos dedican sus vidas al cultivo de la mente
pero no al cultivo del cuerpo."
[5] {366} "Pero, Aggivessana, ¿qué sabrás tú del cultivo del cuerpo?"
"Tomemos el caso de Nanda Vaccha, Kisa Sankicca y Makkhali Gosala. Ésos van por ahí
desnudos, rechazando las convenciones sociales, chupándose los dedos, sin acudir cuando se
les llama ni deteniéndose cuando son saludados. No aceptan ofrendas de comida, ni la
preparada especialmente para ellos, ni las invitaciones para comer. No toman alimento que
provenga directamente de una olla o sartén, ni en un umbral, ni entre leña y almireces, ni de
dos que estén comiendo juntos, ni de una embarazada, ni de mujer que esté dando de mamar,
ni de mujer que se amanceba con un hombre, ni de distribuciones públicas, ni de donde haya
perros esperando o pululen moscas. No toman pescado ni carne, ni bebidas alcohólicas o
fermentadas. Son hombres de una sola casa y un solo bocado, o de dos, o de tres... o de siete
casas y siete bocados. Se sustentan con una ración, con dos... con siete raciones. Comen una
vez al día, o cada dos días, o una vez a la semana, o siguen la práctica de comer a intervalos
de quince días."
[6] "¿Se sustentan con tan poco, Aggivessana?
"No, maestro Gotama, de vez en cuando se alimentan de manjares exquisitos, sabrosos y
suculentos, o beben excelentes bebidas. Así, consiguen de nuevo fortaleza y vigor hasta
volver a engordar."
"Así pues, Aggivessana, recuperan lo que han perdido previamente, de manera que su cuerpo
disminuye primero y aumenta después. Pero, Aggivessana, ¿qué sabrás tú del cultivo de la
mente?"
Saccaka, el hijo de los Niganthas, al ser preguntado sobre este particular, no supo qué
responder.
[7] {367} Entonces el Bienaventurado le dijo:
"Aggivessana, lo que acabas de describir como cultivo del cuerpo no corresponde a lo que
es el cultivo del cuerpo en la Enseñanza y la Noble Disciplina. Aggivessana, si no sabes lo
que es el cultivo del cuerpo, ¿cómo vas a saber lo que es el cultivo de la mente? Aggivessana,
si quieres saber cómo es el que tiene el cuerpo y la mente sin cultivar, escucha con cuidadosa
atención y hablaré."
"Si, venerable señor" -contestó Saccaka, el hijo de los Niganthas.
Y el Bienaventurado dijo así:
[8] {368} "¿Cómo Aggivessana, es el que tiene el cuerpo y la mente sin cultivar?
He aquí, Aggivessana, que en un hombre común sin instruir surge una sensación de placer.
Al toparse con esa sensación de placer se aficiona y se hace adicto. La sensación de placer
cesa. Al cesar la sensación de placer surge una sensación de dolor. Al toparse con esa
sensación de dolor se apena, se aflige, se lamenta, se golpea el pecho sollozando y se abruma.
Aggivessana, cuando surge la sensación de placer se establece, apoderándose de la mente
porque el cuerpo está sin cultivar. Cuando surge la sensación de dolor se establece,
apoderándose de la mente porque la mente está sin cultivar. Aggivessana, quienquiera que
de estas dos maneras tenga sensaciones de placer o dolor, que, cuando surgen, se establecen
apoderándose de la mente, tiene el cuerpo y la mente sin cultivar.
[9] {369} "¿Y cómo es el que tiene el cuerpo y la mente cultivados?
He aquí, Aggivessana, que en un Noble Discípulo bien instruido, surge una sensación de
placer. Al toparse con esa sensación de placer no se aficiona y no se hace adicto. La sensación
de placer cesa. Al cesar la sensación de placer surge una sensación de dolor. Al toparse con
esa sensación de dolor no se apena, no se aflige, no se lamenta, no se golpea el pecho
sollozando y no se abruma. Aggivessana, cuando surge la sensación de placer no se establece
apoderándose de la mente porque el cuerpo está cultivado. Cuando surge la sensación de
dolor no se establece apoderándose de la mente porque la mente está cultivada. Aggivessana,
quienquiera que de estas dos maneras tenga sensaciones de placer o dolor, que, cuando
surgen, no se establecen apoderándose de la mente, tiene el cuerpo y la mente cultivados."
[10] {370} "Así pues tendré que creer que el maestro Gotama tiene el cuerpo y la mente
cultivados."
"Tus palabras, Aggivessana, son insultantes y descaradas. No obstante te responderé: desde
que me afeité pelo y barba, me puse el hábito amarillo y di el paso de la vida del hogar a la
vida sin hogar, no ha habido jamás sensación de placer ni de dolor que, surgida, se
estableciese apoderándose de mi mente."
[11] "¿Que no se ha dado nunca una sensación de placer o de dolor en el maestro Gotama
que, surgida, se estableciese apoderándose de su mente?"
[12] {371} "¿Por qué no ha de poder ser, Aggivessana? He aquí, Aggivessana, que antes de
mi iluminación, siendo todavía un aspirante sin iluminar, pensé: 'La vida en el hogar está
llena de estorbos e impurezas. La vida sin hogar es al aire libre. No es fácil, viviendo en
un hogar, practicar la vida de santidad en su máxima integridad y completamente pura
hasta el final, brillante como la madreperla. ¿Y si me cortase cabellos y barba, y
poniéndome el hábito anaranjado dejase el hogar para salir a la vida sin hogar?'.
[13] Al cabo de un tiempo, siendo todavía un joven pelinegro, dotado del divino tesoro de la
juventud, en la flor de la vida, aun contraviniendo la voluntad de mis padres que lloraban
y gemían, me afeité pelo y barba, me puse el hábito anaranjado y di el paso de la vida del
hogar a la vida sin hogar.
[14] "Así, habiendo dado el paso para ir tras lo beneficioso, buscando el camino supremo
hacia la paz sublime, fui adonde estaba Alara Kalama y le dije: 'Amigo KaIama, quisiera
vivir la vida de santidad en esta Enseñanza y Disciplina'.
"Monjes, dicho esto, Alara KaIama me contestó:
"'El venerable puede quedarse aquí. Esta enseñanza es tal, que un hombre sabio, después de
no mucho tiempo, siguiendo al maestro, puede realizarla por sí mismo con conocimiento
superior, alcanzarla y permanecer en ella.'
"Pronto y rápidamente aprendí esa enseñanza. Por lo que respecta a la recitación y repetición
de las doctrinas, tenía conocimiento y experiencia, pudiendo afirmar, al igual que otros que
'Conocía y veía'.
"Entonces pensé: 'Cuando Alara Kalama dice que «realizándola por sí mismo con
conocimiento superior, uno alcanza esta enseñanza y permanece en ella» no lo dice sólo
porque cree en ella sino porque debe estar seguro de su conocimiento y visión de esta
enseñanza.' Entonces fui adonde estaba Alara KaIama, me acerqué a él y le dije:
"'Amigo KaIama, ¿con qué base afirmas que, realizándola por sí mismo con conocimiento
superior, uno alcanza y permanece en esta enseñanza?'
"Monjes, dicho esto, Alara KaIama explicó que era basándose en la esfera de la nada.
"Entonces pensé: 'Alara KaIama no es el único que tiene: fe, energía, atención, concentración
y sabiduría; yo también tengo fe, energía, atención, concentración y sabiduría ¿y si me
esforzara por realizar esa enseñanza que afirma Alara KaIama y, realizándola por mí mismo
con conocimiento superior, la alcanzara y permaneciera en ella?'
"Monjes, pronto y rápidamente, realizándola por mí mismo con conocimiento superior,
alcancé esa enseñanza y permanecí en ella. Entonces fui adonde estaba Alara KaIama, me
acerqué a él y le dije:
"'Amigo KaIama, ¿es basándote en esto como, habiéndola realizado por ti mismo con
conocimiento superior, afirmas haber alcanzado esta enseñanza y permanecer en ella?' "'Así
es' -contestó Alara KaIama.
"'Pues, amigo, es basándome en eso mismo como, habiéndola realizado por mí mismo con
conocimiento superior, he alcanzado y permanezco en esta enseñanza'.
"'Amigo -prosiguió Alara Kalama-, ¡qué bendición y qué gran suerte poder ver entre nosotros
a alguien tan venerable en la vida de santidad! La enseñanza que, habiéndola realizado por
mí mismo con conocimiento superior, yo afirmo haber alcanzado y permanecer en ella, es la
misma que, habiéndola realizado por ti mismo con conocimiento superior, tú afirmas haber
alcanzado y permanecer en ella. La enseñanza que, habiéndola realizado por ti mismo con
conocimiento superior, tú afirmas haber alcanzado y permanecer en ella, es la misma que,
habiéndola realizado por mí mismo con conocimiento superior, yo afirmo haber alcanzado y
permanecer en ella. Es decir, la enseñanza que tú conoces es la que yo conozco y la enseñanza
que yo conozco es la que tú conoces. Tú eres como yo y yo soy como tú. Ven, amigo, y
encarguémonos los dos de este grupo de discípulos.'
"Monjes, de este modo mi maestro Alara Kalama me ponía a mí, su discípulo, a su mismo
nivel y me otorgaba el más alto honor. Pero entonces, monjes, me dije: 'Esta enseñanza no
conduce al desengaño, al desapasionamiento, a la cesación, al apaciguamiento, al
conocimiento superior, a la iluminación, al Nibbana, tan sólo al logro de la esfera de la nada'.
Monjes, decepcionado y desengañado con esa enseñanza, me marché.
[15] {372} "Prosiguiendo la búsqueda de lo beneficioso, buscador del camino supremo hacia
la paz sublime, fui adonde estaba Uddaka Ramaputta y le dije:
"'Amigo Rama, quisiera vivir la vida de santidad en ésta Enseñanza y Disciplina... [se repite
lo mismo pero sustituyendo la esfera de la nada por la esfera de ni percepción ni de no
percepción y concluyendo con que Uddata Ramaputta dice al Buddha]:
"'Ven, amigo, y encárgate de este grupo de discípulos.'
"Monjes, de este modo, mi compañero de vida santa Uddaka Ramaputta, me ponía a mí, su
discípulo, en posición de maestro, y me otorgaba el más alto honor. Pero entonces, monjes,
me dije: 'Esta enseñanza no conduce al desengaño, al desapasionamiento, a la cesación, al
apaciguamiento, al conocimiento superior, a la iluminación, al Nibbana; tan sólo al logro de
la esfera de ni percepción ni de no percepción'. Monjes, decepcionado y desengañado con
esta enseñanza, me marché.
[16] {373} "Prosiguiendo la búsqueda de lo beneficioso, buscador del camino supremo hacia
la paz sublime, fui caminando por Maghada hasta que llegué a Senanigama, cerca de
Uruvela. Allí vi un paraje encantador, una preciosa arboleda a la bella vera de un río de
aguas cristalinas, y, no muy lejos, una aldea para recolectar comida. Entonces pensé:
'Encantador es este paraje, preciosa la arboleda, bella la ribera, el agua del río está limpia
y cerca hay una aldea para proveerme de comida. En verdad que el lugar es idóneo para
el esfuerzo de un hijo de familia decidido a esforzarse'. De manera que, monjes, allí me
senté pensando: 'En verdad que el lugar es idóneo para el esfuerzo'.
[17] {374} "Entonces, Aggivessana, se me ocurrieron tres símiles nunca antes oídos.
Imagínate un trozo de madera verde y húmeda sumergida en el agua y un hombre que
se acercara a ella con un palo pensando: 'Encenderé un fuego y generaré calor'.
"¿Qué te parece, Aggivessana? ¿Será capaz ese hombre de encender un fuego y generar calor
frotando su palo con el trozo de madera verde y húmeda sumergida en el agua?"
"No, maestro Gotama, porque se trata de un trozo de madera verde y húmeda sumergida en
el agua. Ese hombre no hará más que cansarse y exasperarse."
"De igual modo, Aggivessana, aquellos ascetas y brahmanes que, aun viviendo con cuerpos
y mentes retirados de los placeres de los sentidos, no han renunciado y sosegado
íntegramente en su interior el deseo impulsivo, obsesivo, obnubilado, ansioso y ardiente por
los placeres de los sentidos, aunque sientan dolores penetrantes y punzantes provocados por
el esfuerzo están incapacitados para el conocimiento y la visión, la más elevada iluminación.
Este es el primer símil nunca antes oído que se me ocurrió.
[18] {375} "Luego se me ocurrió el segundo símil nunca antes oído. Imagínate un trozo de
madera verde y húmeda que está en tierra firme lejos del agua y un hombre que se
acercara a ella con un palo pensando: 'Encenderé un fuego y generaré calor'.
"¿Qué te parece, Aggivessana? ¿Será capaz ese hombre de encender un fuego y generar calor
frotando su palo con el trozo de madera verde y húmeda que está en tierra firme lejos del
agua?"
"No, maestro Gotama, porque se trata de un trozo de madera verde y húmeda, aunque esté
en tierra firme lejos del agua. Ese hombre no hará más que cansarse y exasperarse."
"De igual modo, Aggivessana, aquellos ascetas y brahmanes que no vivan con cuerpos y
mentes retirados de los placeres de los sentidos, que no hayan renunciado y sosegado
íntegramente en su interior el deseo impulsivo, obsesivo, obnubilado, ansioso y ardiente por
los placeres de los sentidos, aunque sientan dolores penetrantes y punzantes provocados por
el esfuerzo, están incapacitados para el conocimiento y la visión, la más elevada iluminación.
Éste es el segundo símil nunca antes oído que se me ocurrió.
[19] {376} "Luego se me ocurrió el tercer símil nunca antes oído. Imagínate un trozo de
madera seca y sin humedad que está en tierra firme lejos del agua y un hombre que se
acercara a ella con un palo pensando: 'Encenderé un fuego y generaré calor'. ¿Qué te
parece, Aggivessana? ¿Será capaz ese hombre de encender un fuego y generar calor
frotando su palo con el trozo de madera seca y sin humedad que está en tierra firme lejos
del agua?"
"Sí, maestro Gotama, porque se trata de un trozo de madera seca y sin humedad que, está en
tierra firme y lejos del agua."
"De igual modo, Aggivessana, aquellos ascetas y brahmanes que viven con cuerpos y mentes
retirados de los placeres de los sentidos, que han renunciado y sosegado íntegramente en su
interior el deseo impulsivo, obsesivo, obnubilado, ansioso y ardiente por los placeres de los
sentidos, tanto si sienten dolores penetrantes y punzantes como si no los sienten, ésos sí que,
están capacitados para el conocimiento y la visión, la más elevada iluminación. Éste es el
tercer símil que me vino a la cabeza y que no había oído anteriormente.
"Éstos son los tres símiles nunca antes oídos que se me ocurrieron.
[20] {377} "Entonces, Aggivessana, pensé: '¿Y si, apretando los dientes con la lengua
tocando el paladar, sometiera, subyugara y dominara la mente con la mente?', y con los
dientes apretados y la lengua tocando el paladar, sometí, subyugué y dominé la mente
con la mente. Haciendo tal esfuerzo, me corría el sudor por los sobacos. Al igual que un
hombre fuerte, agarrando por la cabeza o los hombros a un hombre débil, lo sometería,
subyugaría y dominaría, apretando los dientes con la lengua tocando el paladar, sometí,
subyugué y dominé la mente con la mente y me corría el sudor por los sobacos. Pero,
Aggivessana, a pesar de poner infatigable energía y establecer ininterrumpida atención,
mi cuerpo estaba excitado y desasosegado por el doloroso esfuerzo al que fue sometido.
Sin embargo, Aggivessana, las sensaciones de dolor surgidas no se establecieron
apoderándose de la mente.
[21] {378} "Entonces, Aggivessana, pensé: '¿Y si me concentrara en meditar sin respirar?'
De manera, Aggivessana, que dejé de inhalar y exhalar por boca y nariz. Al hacer esto
me zumbaban poderosamente los oídos como cuando sopla un fuerte viento. Como el
fuerte resuello del fuelle de un herrero, al dejar de inhalar y exhalar por boca y nariz me
zumbaban poderosamente los oídos. Pero, Aggivessana, a pesar de poner infatigable
energía y establecer interrumpida atención, mi cuerpo estaba excitado y desasosegado
por el doloroso esfuerzo al que fue sometido. Sin embargo, Aggivessana, las
sensaciones de dolor surgidas no se establecieron apoderándose de la mente.
[22] "Luego, Aggivessana pensé: '¿Y si me concentrara aún más en meditar sin respirar?' De
manera, Aggivessana, que dejé de inhalar y exhalar por boca, nariz y oídos. Al hacer
esto me zumbaba poderosamente la cabeza como cuando sopla un fuerte viento. Como
si un hombre fuerte me clavara una espada afilada en la cabeza, al dejar de inhalar y
exhalar por boca, nariz y oídos, me zumbaba poderosamente la cabeza. Pero,
Aggivessana, a pesar de poner infatigable energía y establecer ininterrumpida atención,
mi cuerpo estaba excitado y desasosegado por el doloroso esfuerzo al que fue sometido.
Sin embargo, Aggivessana, las sensaciones de dolor surgidas no se establecieron
apoderándose de la mente.
[23] "Luego, Aggivessana pensé: '¿Y si me concentrara aún más en meditar sin respirar?' De
manera,Aggivessana, que dejé de inhalar y exhalar por boca, nariz y oídos. Al hacer eso,
sufrí fuertes dolores de cabeza. Como si un hombre fuerte me estrujara la cabeza con
una correa de cuero, al dejar de inhalar y exhalar por boca, nariz y oídos sufrí fuertes
dolores de cabeza. Pero, Aggivessana, a pesar de poner infatigable energía y establecer
ininterrumpida atención, mi cuerpo estaba excitado y desasosegado por el doloroso
esfuerzo al que fue sometido. Sin embargo, Aggivessana, las sensaciones de dolor
surgidas no se establecieron apoderándose de la mente.
[24] "Luego Aggivessana pensé: '¿Y si me concentrara aún más en meditar sin respirar?' De
manera, Aggivessana, que dejé de inhalar y exhalar por boca, nariz y oídos. Al hacer
eso, fuertes zumbidos de vientos me desgarraban el vientre. Como si un carnicero
experto o su aprendiz destripasen una res con un afilado cuchillo de carnicero, al dejar
de inhalar y exhalar por boca, nariz y oídos, fuertes zumbidos de vientos me desgarraban
el vientre. Pero, Aggivessana, a pesar de poner infatigable energía y establecer
ininterrumpida atención, mi cuerpo estaba excitado y desasosegado por el doloroso
esfuerzo al que fue sometido. Sin embargo, Aggivessana, las sensaciones de dolor
surgidas no se establecieron apoderándose de la mente.
[25] "Luego Aggivessana pensé: '¿Y si me concentrara aún más en meditar sin respirar?' De
manera, Aggivessana, que dejé de inhalar y exhalar por boca, nariz y oídos. Al hacer
eso, el cuerpo me ardía intensamente. Como si dos hombres fuertes, agarrando por
ambos brazos a un hombre débil lo abrasaran sobre un pozo de carbones al rojo, al dejar
de inhalar y exhalar por boca, nariz y oídos, el cuerpo me ardía intensamente. Pero,
Aggivessana, a pesar de poner infatigable energía y establecer ininterrumpida atención,
mi cuerpo estaba excitado y desasosegado por el doloroso esfuerzo al que fue sometido.
Sin embargo, Aggivessana, las sensaciones de dolor surgidas no se establecieron
apoderándose de la mente.
[26] {379} "Entonces, Aggivessana, al verme en tal estado, algunos dioses decían: 'El asceta
Gotama ha muerto.' Otros dioses decían: 'El asceta Gotama no ha muerto pero está
moribundo.' Otros dioses decían: 'El asceta Gotama ni ha muerto ni está moribundo, el
asceta Gotama es un santo y así es como viven los santos'.
[27] "Luego, Aggivessana, pensé: '¿Y si dejara de comer del todo?' Entonces los dioses se
me acercaron y me dijeron: 'Señor, no dejéis de comer del todo. Si lo hacéis, os
alimentaremos con la comida de los dioses a través de los poros de la piel y os
sustentaréis con ella'.
"Entonces pensé: 'Si afirmo que practico la abstinencia pero los dioses me alimentan con su
comida y me sustento con ella, entonces estaré mintiendo.' De manera, Aggivessana, que
desistí diciendo a los dioses: 'Está bien'.
[28] {380} "Después, Aggivessana, pensé: '¿Y si comiera sólo un poco cada vez, una sola
cucharada de sopa de judías o de lentejas o de garbanzos o de guisantes?' Así lo hice y
mi cuerpo quedó extenuado. De comer tan poco, mis miembros parecían los tallos de
una enredadera marchita, mi trasero la pezuña de un buey, mis vértebras las cuentas de
un abalorio, mis costillas sobresalían como las canaleras de un tejado en ruinas, mis ojos
se hundían en sus órbitas como el agua en un pozo profundo, mi cuero cabelludo se
arrugaba y encogía como una calabaza verde y amarga que, arrancada antes de tiempo,
expuesta al viento y al sol, se arruga y encoge. La piel del vientre llegó a pegarse a mi
espina dorsal y, si se me ocurría tocarla, era mi espina dorsal lo que tocaba; si se me
ocurría tocar mi espina dorsal, era la piel de mi vientre lo que tocaba. Cuando tenía que
hacer mis necesidades, me caía de bruces allí mismo. Aggivessana, si trataba de
aliviarme dándome friegas, el pelo, podrido en sus raíces, se me caía a medida que iba
dando friegas.
[29] "Aggivessana, algunos hombres al verme decían: 'El asceta Gotama es negro'; otros
decían: 'El asceta Gotama no es negro sino moreno'; otros decían: 'El asceta Gotama no
es ni negro ni moreno, es amarillo'.
"Hasta ese punto, Aggivessana, el puro y limpio color de mi piel se deslució, y todo ello de
comer tan poco.
[30] {381} "Entonces pensé: 'Ha habido en el pasado, habrá en el futuro y hay también hoy
en día, ascetas y brahmanes que han experimentado dolores penetrantes y punzantes
provocados por el esfuerzo, pero no los hay que en nada superen a éstos. Sin embargo,
no he llegado a través de ellos a ningún estado sobrehumano ni a ningún conocimiento
y visión propios de los Nobles, ¿no habrá otro camino hacia la iluminación?'
[31] "Entonces, Aggivessana, recordé: 'Un día, cuando mi padre, del clan de los sakyanos,
estaba trabajando, yo me encontraba sentado tomando la fresca a la sombra de un árbol.
Allí, apartado de los deseos de los sentidos, apartado de lo que es perjudicial, alcancé y
permanecí en la primera abstracción meditativa, en la que hay gozo y felicidad nacidos
del apartamiento y va acompañada de ideación y reflexión'. ¿No podría ser ése el camino
hacia la iluminación?"
"Y, Aggivessana, a la luz de aquel recuerdo, comprendí: 'Éste es el camino hacia la
iluminación.'
[32] "Entonces, Aggivessana, pensé: '¿Por qué temer a una felicidad que no tiene nada que
ver con los placeres de los sentidos ni con lo que es perjudicial?'
"Y, Aggivessana, me dije: 'No temo a esa felicidad que no tiene nada que ver con los placeres
de los sentidos ni con lo perjudicial.'
[33] {382} "Entonces, Aggivessana, pensé: 'No es fácil lograr esa felicidad con un cuerpo
llegado a tanta extenuación, ¿y si comiera algo sólido, arroz hervido y cuajada?'
"Así que, Aggivessana, comí algo sólido, arroz hervido y cuajada. En aquella ocasión me
acompañaban cinco monjes que pensaban: 'Si el asceta Gotama logra la Enseñanza, nos lo
dirá'. Pero por tomar algo sólido, arroz y cuajada, se decepcionaron conmigo y se fueron
pensando: 'El asceta Gotama se pega la buena vida, ha dejado de lado el esfuerzo dándose a
la buena vida'.
[34] {383} "Así que, Aggivessana, tras ingerir comida sólida y haber recuperado fuerza,
apartado de los deseos de los sentidos, apartado de lo que es perjudicial, alcancé y
permanecí en la primera abstracción meditativa [1], en la que hay gozo y felicidad
nacidos del apartamiento y va acompañada de ideación y reflexión. Sin embargo,
Aggivessana, la sensación de placer surgida tampoco se estableció apoderándose de mi
mente.
[35] "Luego, al cesar la ideación y la reflexión, alcancé y permanecí en la segunda
abstracción meditativa, en la que hay gozo y felicidad nacidos de la concentración, está
libre de ideación y reflexión, y va acompañada de unificación de la mente y serenidad
interior. Sin embargo, Aggivessana, la sensación de placer surgida tampoco se
estableció apoderándose de mi mente.
[36] "Luego, al desvanecerse el gozo, permanecí ecuánime, atento y lúcido, experimentando
con el cuerpo aquel estado de felicidad que los Nobles llaman: 'Vivir feliz, atento y
ecuánime', con lo que alcancé y permanecí en la tercera abstracción meditativa. Sin
embargo, Aggivessana, la sensación de placer surgida tampoco se estableció
apoderándose de mi mente.
[37] "Luego, al renunciar al placer, al renunciar al dolor, y previa desaparición de la alegría
y la aflicción, alcancé y permanecí en la cuarta abstracción meditativa, sin dolor ni
placer, completamente purificada por la atención y la ecuanimidad. Sin embargo,
Aggivessana, la sensación de placer surgida no se estableció apoderándose de mi mente.
[38] {384} "Entonces, con la mente así concentrada, completamente purificada, nítida,
intachable, libre de impurezas, maleable, dispuesta para la acción, equilibrada,
inmutable, dirigí la mente hacia el conocimiento y recuerdo de mis vidas anteriores.
Recordé mis múltiples vidas anteriores, es decir, un nacimiento, dos, tres, cuatro, cinco,
diez, veinte, treinta, cuarenta, cincuenta, cien, mil, cien mil nacimientos, muchos ciclos
cósmicos de contracción, muchos ciclos cósmicos de expansión, muchos ciclos
cósmicos de contracción y expansión: 'Allí, así me llamaba, tal era mi familia, tal era mi
apariencia, tal era mi alimento, así experimenté placer y dolor, tanto así duró mi vida,
allí fallecí y en otra parte reaparecí, allí, así me llamaba, tal era mi familia, tal era mi
apariencia, tal era mi alimento, así experimenté placer y dolor, tanto así duró mi vida,
allí fallecí y aquí reaparecí.' "Así recordé mis múltiples vidas anteriores con sus
características y detalles.
[39] "Éste, Aggivessana, fue el primer conocimiento que logré en el primer tercio de la
noche. La ignorancia se desvaneció y el conocimiento surgió, las tinieblas se
desvanecieron y la luz surgió, como sucede cuando uno permanece alerta, constante y
diligente. Sin embargo, Aggivessana, la sensación de placer surgida no se estableció
apoderándose de mi mente.
[40] {385} "Luego, con la mente así concentrada, completamente purificada, nítida,
intachable, libre de impurezas, maleable, dispuesta para la acción, equilibrada,
inmutable, dirigí la mente hacia el conocimiento del nacer y morir de los seres. Con el
ojo divino purificado, que va más allá del humano, vi a los seres falleciendo y
reapareciendo, conocí a los seres inferiores, superiores, bellos, feos, afortunados,
desafortunados según sus acciones anteriores y supe: 'Ciertamente, los seres de mala
conducta corporal, de mala conducta verbal, de mala conducta mental, que insultan a
los Nobles, que sostienen concepciones erróneas, cuyas acciones se derivan de
concepciones erróneas, tras la muerte y descomposición del cuerpo reaparecen en la
perdición, en un mal destino, en lugares de sufrimiento, en los infiernos. Pero aquellos
seres de buena conducta corporal, de buena conducta verbal, de buena conducta mental,
que no insultan a los Nobles, que sostienen concepciones verdaderas, cuyas acciones se
derivan de concepciones verdaderas, tras la muerte y descomposición del cuerpo
reaparecen en un buen destino, en algún mundo celestial'.
"Así, con el ojo divino purificado que va más allá del humano, vi a los seres falleciendo y
reapareciendo, conocí a los seres inferiores, superiores, bellos, feos, afortunados,
desafortunados y supe que renacen según sus acciones anteriores.
[41] "Éste, Aggivessana, fue el segundo conocimiento que logré en el surgió, las tinieblas se
desvanecieron y la luz surgió, como sucede cuando uno permanece alerta, constante y
diligente. Sin embargo, Aggivessana, la sensación de placer surgida no se estableció
apoderándose de mi mente.
[42] {386} "Luego, con la mente así concentrada, completamente purificada, nítida,
intachable, libre de impurezas, maleable, dispuesta para la acción, equilibrada,
inmutable, dirigí la mente hacia el conocimiento de la aniquilación de las corrupciones.
"Supe tal y como es: 'Esto es el sufrimiento', supe tal y como es: 'Éste es el origen del
sufrimiento', supe tal y como es: 'Éste es el cesar del sufrimiento', supe tal y como es:
'Éste es el camino que lleva al cesar del sufrimiento'; supe tal y como son: 'Éstas son las
corrupciones', supe tal y como es: 'Éste es el origen de las corrupciones', supe tal y como
es: 'Éste es el cesar de las corrupciones', supe tal y como es: 'Éste es el camino que lleva
al cesar de las corrupciones'.
[43] "Cuando supe y vi así, mi mente quedó liberada de la corrupción del deseo de los
sentidos, mi mente quedó liberada de la corrupción del devenir, mi mente quedó liberada
de la corrupción de la ignorancia.
"Cuando quedé liberado, supe que estaba liberado y supe: 'Aniquilado el renacer, cumplida
la vida de santidad, hecho lo que había que por hacer, no hay ya más devenir'.
[44] "Éste, Aggivessana, fue el tercer conocimiento que logré en el último tercio de la noche.
La ignorancia se desvaneció y el conocimiento surgió, las tinieblas se desvanecieron y
la luz surgió, como sucede cuando uno permanece alerta, constante y diligente. Sin
embargo, Aggivessana, la sensación de placer surgida no se estableció apoderándose de
mi mente.
[45] {387} "Aggivessana, sé perfectamente que cuando predico la Enseñanza a un grupo de
gente, cada uno de ellos piensa: 'El asceta Gotama está predicando especialmente para
mí'. Sin embargo, Aggivessana, esto no es así: el Tathagata predica la Enseñanza para
que sea conocida por todos.
"Aggivessana, al terminar la predicación, volviendo a la misma señal de concentración de
antes, estabilizo internamente la mente, la calmo, unifico y concentro, permaneciendo
continuamente en este estado."
"Esto es creíble, ya que el maestro Gotama es un santo completamente iluminado. Pero, ¿es
que el maestro Gotama recuerda si duerme durante el día?"
[46] {388} "Sí, Aggivessana. En el último mes de la época seca, regresando de recolectar
alimentos, después de comer, tras extender mi manto plegado en cuatro partes, me
tumbo sobre el costado derecho y, atento y lúcido, me pongo a dormir."
"Pero eso, maestro Gotama, es lo que algunos ascetas y brahmanes denominan 'Estar sumido
en la ofuscación'".
"No, Aggivessana, no es en eso en lo que consiste estar ofuscado o dejar de estarlo.
Aggivessana, para saber en qué consiste la ofuscación y la no ofuscación, escucha con
cuidadosa atención y hablaré."
"Sí, señor" -contestó Saccaka, el hijo de los niganthas. Y el Bienaventurado dijo así:
[47] "Aggivessana, aquél que no ha renunciado a las corrupciones que manchan, que hacen
repetir las existencias, que crean problemas, que acaban en sufrimiento y producen
nacer, envejecer y morir futuros, a ése yo lo denomino ofuscado. Aggivessana, es por
no haber renunciado a las corrupciones por lo que alguien está ofuscado.
"Aggivessana, aquél que ha renunciado a las corrupciones que manchan, que hacen repetir
las existencias, que crean problemas, que acaban en sufrimiento y producen nacer, envejecer
y morir futuros, a ése yo lo denomino libre de ofuscación. Aggivessana, es por haber
renunciado a las corrupciones por lo que alguien está libre de ofuscación.
"Aggivessana, el Tathagata ha renunciado a las corrupciones que manchan, que hacen repetir
las existencias, que crean problemas, que acaban en sufrimiento y producen nacer, envejecer
y morir futuros, las ha arrancado de raíz y las ha dejado como el tronco de una palmera que,
una vez cortado, ya no puede volver a brotar ni a crecer de nuevo.
"Aggivessana, al igual que una palmera a la que se le cortan las ramas es incapaz de crecer
otra vez, así el Tathagata ha renunciado a las corrupciones que manchan, que hacen repetir
las existencias, que crean problemas, que acaban en sufrimiento y producen nacer, envejecer
y morir futuros, las ha arrancado de raíz y las ha dejado como el tronco de una palmera que,
una vez cortado, ya no puede volver a brotar ni a crecer de nuevo."
[48] {389} Dicho esto, Saccaka, el hijo de los niganthas, habló al Bienaventurado así:
"Maravilloso maestro Gotama, extraordinario maestro Gotama. Por más que se le hable en
términos irrespetuosos, con palabras ofensivas, el maestro Gotama no pierde la compostura.
Su piel es inmaculada y resplandeciente su rostro, como es propio de un santo completamente
iluminado. Maestro Gotama, recuerdo que, entablando debate con Purana Kassapa, con
Makkhali Gosala, con Ajita Kesakambalin, con Pakhuda Kaccayana, con Sanjaya
Belatthiputta y con el Nigantha Nataputta, me respondían con evasivas, se iban por las ramas
y daban muestras de enfado, odio y enfurruñamiento. Sin embargo, el maestro Gotama, por
más que se le hable en términos irrespetuosos y con palabras ofensivas, no pierde la
compostura. Su piel es inmaculada y resplandeciente su rostro, como es propio de un santo
completamente iluminado. Bueno, maestro Gotama, ahora nos despedimos. Tenemos
muchas obligaciones y mucho por hacer."
"Aprovecha el tiempo, Aggivessana para lo que tengas que hacer".
Y Saccaka, el hijo de los niganthas, habiéndose complacido y gozado con las palabras del
Bienaventurado, se levantó de su asiento y se marchó.

Así he oído. Estaba el Bienaventurado viviendo en el parque de Anathapindika en el bosque


de Jeta, en Savatthi. Allí se dirigió a los bhikkhus diciendo: "Bhikkhus." - "Sí, venerable",
respondieron éstos. El Bienaventurado dijo así:
[2] "Bhikkhus, ¿recuerdan cómo he enseñado los cinco grilletes inferiores?" A lo que el
venerable Malunkyaputta respondió:
"Venerable señor, yo recuerdo los cinco grilletes inferiores como Vd. los ha enseñado".
"Y ¿de qué manera recuerda Malunkyaputta los cinco grilletes inferiores como yo los ha
enseñado?"
"Venerable señor, recuerdo el concepto de identidad como un grillete inferior enseñado por
el Bienaventurado. Recuerdo la duda como un grillete inferior enseñado por el
Bienaventurado. Recuerdo el apego a normas y a las prácticas como un grillete inferior
enseñado por el Bienaventurado. Recuerdo el deseo sensorial como un grillete inferior
enseñado por el Bienaventurado. Recuerdo el rencor como un grillete inferior enseñado por
el Bienaventurado".
[3] "Malunkyaputta, ¿a quién recuerdas que yo haya enseñado estos cinco grilletes
inferiores de este modo? ¿No podrían los seguidores de otras sectas refutar esto con el símil
del bebé? Porque un recién nacido acostado no tiene siquiera la noción 'identidad', así que
¿cómo podría el concepto de identidad aparecer en él? Y aún así la tendencia al concepto de
identidad reside en él. Un recién nacido acostado no tiene siquiera la noción 'enseñanzas', así
que ¿cómo podría la duda sobre las enseñanzas aparecer en él? Y aún así la tendencia a la
duda reside en él. Un recién nacido acostado no tiene siquiera la noción 'normas', así que
¿cómo podría el apego a las normas y a las prácticas aparecer en él? Y aún así la tendencia a
apegarse a las normas y a las prácticas reside en él. Un recién nacido acostado no tiene
siquiera la noción 'placeres sensoriales', así que ¿cómo podría el deseo sensorial aparecer en
él? Y aún así la tendencia al deseo sensorial reside en él. Un recién nacido acostado no tiene
siquiera la noción 'seres', así que ¿cómo podría el rencor hacia los seres aparecer en él? Y
aún así la tendencia al rencor reside en él. ¿No refutarían esto los seguidores de otras sectas
con el símil del bebé?"
[4] Acto seguido el venerable Ananda dijo: "Es el momento, Bienaventurado, es el
momento, Sublime, de que el Bienaventurado enseñe los cinco grilletes inferiores. Los
monjes, habiendo escuchado al Bienaventurado, lo recordarán".
"Entonces escucha, Ananda, y atiende atentamente a lo que voy a decir".
"Si, venerable señor", respondió el venerable Ananda.
El Bienaventurado dijo así:
[5] {130} "He aquí, Ananda, que una persona ordinaria, sin instrucción, sin consideración
por los nobles, incompetente e indisciplinado en su Dhamma, que no tiene consideración por
los hombres verdaderos y que es incompetente e indisciplinado en su Dhamma, vive con una
mente obsesionada y esclavizada por el concepto de identidad, y no entiende tal y como es
el escape del concepto de identidad surgido; y cuando esta visión se ha hecho habitual y no
ha sido erradicada, es un grillete inferior. Vive con una mente obsesionada y esclavizada por
la duda... por la adherencia a reglas y prácticas... por deseo sensual... por rencor, y no
entiende tal y como es el escape del rencor surgido; y cuando este rencor se ha hecho habitual
y no ha sido erradicada, es un grillete inferior".
[6] {131} "Un noble discípulo, bien educado, considerado para con los nobles, competente
y disciplinado en su Dhamma, considerado para con los hombres verdaderos, competente y
disciplinado en su Dhamma, no vive con una mente obsesionada y esclavizada por el
concepto de identidad; él entiende tal y como es el escape del surgido concepto de identidad
y este concepto de identidad, junto con la tendencia subyacente hacia él, son abandonados
por él. Él no vive con una mente obsesionada y esclavizada por la duda... por la adherencia
a reglas y prácticas... por deseo sensual... por rencor, y no entiende tal y como es el escape
del rencor surgido; él entiende tal y como es el escape del rencor surgido y este rencor, junto
con la tendencia subyacente hacia él, son abandonados por él".
[7] {132} "Hay un sendero, Ananda, un camino para abandonar los cinco grilletes
inferiores; No es posible para nadie que no siga este sendero, este camino, conocer o ver o
abandonar los cinco grilletes inferiores. Así como no es posible talar el duramen de un gran
árbol sin cortar antes su corteza y su albura, no es posible para nadie que no siga este sendero,
este camino, conocer o ver o abandonar los cinco grilletes inferiores".
"Hay un sendero, Ananda, un camino para abandonar los cinco grilletes inferiores; es posible
para alguien que siga este sendero, este camino, conocer o ver o abandonar los cinco grilletes
inferiores. Así como es posible talar el duramen de un gran árbol cortando antes su corteza
y su albura, es posible para alguien que siga este sendero, este camino, conocer o ver o
abandonar los cinco grilletes inferiores".
[8] "Supón, Ananda, que el río Ganges estuviera lleno de agua hasta el borde de manera
que los cuervos pudieran beber de él y que un hombre débil llegara pensando: 'Cruzaré la
corriente nadando con mis brazos y llegaré a salvo a la otra orilla de este río Ganges', pero
este hombre no sería capaz de llegar a salvo a la otra orilla. Así también, cuando el Dhamma
se enseña a alguien para que cese la personalidad, si su mente no entra en el Dhamma y
adquiere confianza, firmeza y determinación, entonces podemos considerar a este hombre
como al hombre débil .
"Supón, Ananda, que el río Ganges estuviera lleno de agua hasta el borde de manera que los
cuervos pudieran beber de él y que un hombre fuerte llegara pensando: 'Cruzaré la corriente
nadando con mis brazos y llegaré a salvo a la otra orilla de este río Ganges', y este hombre
sería capaz de llegar a salvo a la otra orilla. Así también, cuando el Dhamma se enseña a
alguien para que cese la personalidad, si su mente entra en el Dhamma y adquiere confianza,
firmeza y determinación, entonces podemos considerar a este hombre como al hombre fuerte.
[9] {133} "Y ¿cuál, Ananda, es el sendero, el camino al abandono de los cinco grilletes
inferiores? He aquí, separado de lo adquirido, abandonando los estados malsanos, con la
completa tranquilización de la inercia corporal, separado de los placeres sensoriales,
separado de los estados malsanos, un bhikkhu entra y reside en el primer jhana, el cual está
acompañado de pensamiento aplicado y sostenido, con rapto y placer nacidos de la
separación.
"Cualquier cosa que haya ahí de forma material, sentimiento, percepción, formaciones y
conciencia, él ve estos estados como impermanentes, como sufrimiento, una enfermedad, un
tumor, un anzuelo, una calamidad, un dolor, como separado, desintegrándose, vacío, como
no yo. Él aleja su mente de estos estados y la dirige hacia el elemento inmortal de esta
manera: 'Esto es lo pacífico, esto es lo sublime: la pacificación de todas las formaciones, la
renuncia a todos los apegos, la destrucción del ansia, el desapasionamiento, el cese, el
Nibbana'. Si es persistente en esto, él logrará la destrucción de las impurezas. Pero si no logra
la destrucción de las impurezas por su deseo por el Dhamma y su deleite en el Dhamma,
entonces, con la destrucción de los cinco grilletes inferiores, se convierte en alguien que
aparecerá espontáneamente en las Moradas Puras y allí logrará el Nibbana final, no
regresando jamás de aquel mundo. Este es el camino al abandono de los cinco grilletes
inferiores.
[10-12] "Y otra vez, al calmar el pensamiento aplicado y el pensamiento sostenido, el
bhikkhu entra y reside en el segundo jhana... Otra vez, al disiparse también el rapto, el
bhikkhu... entra y reside en el tercer jhana... Otra vez, al abandonar el placer y el dolor... el
bhikkhu entra y reside en el cuarto jhana, en el cual no hay ni dolor ni placer y posee atención
pura gracias a la ecuanimidad.
"Cualquier cosa que haya ahí de forma material, sentimiento, percepción, formaciones y
conciencia, él ve estos estados como impermanentes...como no yo. Él aleja su mente de estos
estados y la dirige hacia el elemento inmortal...Este es el camino al abandono de los cinco
grilletes inferiores.
[13] "Otra vez, al remontar completamente la percepción de la forma, al desaparecer la
percepción de los impulsos sensoriales, no prestando atención a la percepciones de
diversidad, consciente a 'el espacio es infinito', el bhikkhu entra y reside en la base del espacio
infinito".
"Cualquier cosa que haya ahí de forma material, sentimiento, percepción, formaciones y
conciencia, él ve estos estados como impermanentes...como no yo. Él aleja su mente de estos
estados y la dirige hacia el elemento inmortal...Este es el camino al abandono de los cinco
grilletes inferiores".
[14] "Otra vez, al remontar completamente la base del espacio infinito, consciente a 'la
consciencia es infinita', el bhikkhu entra y reside en la base de la consciencia infinita.
"Cualquier cosa que haya ahí de forma material, sentimiento, percepción, formaciones y
conciencia, él ve estos estados como impermanentes...como no yo. Él aleja su mente de estos
estados y la dirige hacia el elemento inmortal...Este es el camino al abandono de los cinco
grilletes inferiores.
[15] "Otra vez, al remontar completamente la base de la consciencia infinita, consciente a
'no hay nada', el bhikkhu entra y reside en la base de la nada.
"Cualquier cosa que haya ahí de forma material, sentimiento, percepción, formaciones y
conciencia, él ve estos estados como impermanentes, como sufrimiento, una enfermedad, un
tumor, un anzuelo, una calamidad, un dolor, como separado, desintegrándose, vacío, como
no yo. Él aleja su mente de estos estados y la dirige hacia el elemento inmortal de esta
manera: 'Esto es lo pacífico, esto es lo sublime: la pacificación de todas las formaciones, la
renuncia a todos los apegos, la destrucción del ansia, el desapasionamiento, el cese, el
Nibbana'. Si es persistente en esto, él logrará la destrucción de las impurezas. Pero si no logra
la destrucción de las impurezas por su deseo por el Dhamma y su deleite en el Dhamma,
entonces, con la destrucción de los cinco grilletes inferiores, se convierte en alguien que
aparecerá espontáneamente en las Moradas Puras y allí logrará el Nibbana final, no
regresando jamás de aquel mundo. Este es el camino al abandono de los cinco grilletes
inferiores".
[16] "Venerable señor, si este es el sendero, el camino para abandonar los cinco grilletes
inferiores, entonces ¿cómo es que algunos bhikkhus logran la liberación de la mente y
algunos logran la liberación a través de la sabiduría?"
"La diferencia aquí, Ananda, está en sus facultades, digo".
Esto es lo que el Bienaventurado dijo. El venerable Ananda quedó satisfecho y se deleitó en
las palabras del Bienaventurado.

1.1] Esto he escuchado:


En una ocasión, el Bienaventurado estaba morando entre los malla, en una de sus ciudades
de nombre Anupiya. Estando allí, una mañana temprano, el Bienaventurado se vistió, tomó
su cuenco y hábito amarillo para entrar a Anupiya, en busca de la comida de las limosnas.
Entonces, le surgió este pensamiento: “Es demasiado temprano todavía para entrar a Anupiya
en busca de la comida de las limosnas. ¿Qué tal si visito antes el lugar donde moran los
ascetas errantes [que practican] bajo Bhaggavagotta?”. Acto seguido, hizo esto.
[1.2] Entonces el asceta errante Bhaggavagotta dijo: “¡Que venga el Bienaventurado, sea
bienvenido, Venerable Señor! Hace mucho tiempo desde que el Bienaventurado vino aquí.
Tome asiento, Venerable Señor, en el asiento que está preparado para él”.
Entonces, el Bienaventurado se sentó en el asiento que estaba preparado para él, mientras
que Bhaggavagotta tomó un asiento más bajo, se sentó a un lado y dijo: “Hace unos días,
Venerable Señor, el licchavi Sunakkhatta se acercó a mí y me dijo: ‘He dejado al
Bienaventurado, Venerable Bhaggava, no estoy más sujeto a sus reglas’. ¿Es esto cierto,
Venerable Señor?”.
“Sí, es cierto, Bhaggava.
[1.3] “Hace unos día, Bhaggava, el licchavi Sunakkhatta se acercó a mí, me saludó, se sentó
a un lado y me dijo: ‘Venerable Señor, estoy dejando al Bienaventurado, no estaré más sujeto
a sus reglas’. Entonces le dije:
“’Pero, Sunakkhatta, ¿alguna vez te dije: «Bien, Sunakkhatta, ven y estate sujeto a mis
reglas»?’. — ‘No, Venerable Señor’. — ‘O acaso tú, ¿alguna vez me dijiste: «Venerable
Señor, voy a estar sujeto a sus reglas»?’. — ‘No, Venerable Señor’. — ‘Entonces,
Sunakkhatta, puesto que ni yo te dije aquello ni tú me dijiste esto, ¿quién eres tú y quién soy
yo, hombre tonto, para decirme que me estás dejando? Considera, hombre tonto, lo grande
que es tu falta’.
[1.4] “’Bien, Venerable Señor, lo que pasa es que usted no realiza milagro alguno que
sobrepase el poder de una persona común y corriente’. — ‘Pero, ¿alguna vez te dije: «—
Ven, estate sujeto a mis reglas y voy a hacer milagros?’. — ‘No, Venerable Señor’. —‘O
acaso tú, ¿alguna vez me dijiste: «Venerable Señor, voy a estar sujeto a sus reglas si es que
realiza milagros»?’. — ‘No, Venerable Señor’. — ‘Entonces, Sunakkhatta, puesto que ni yo
te di semejante promesa ni tú me pusiste semejante condición, ¿quién eres tú, hombre tonto,
para decirme que me estás dejando?’.
“’¿Qué opinas, Sunakkhatta? Sea que los milagros se realicen o no, ¿es el propósito de mi
Dhamma conducir a cualquiera que lo practique a la completa destrucción de la
insatisfacción?’. — ‘Este es el propósito, Venerable Señor’. ‘Entonces, puesto que el
propósito de mi Dhamma es conducir a cualquiera que lo practique a la completa destrucción
de la insatisfacción, sea que los milagros se realicen o no, ¿qué propósito tendría realizar los
milagros? Considera, hombre tonto, lo grande que es tu falta’.
[1.5] “’Bien, Venerable Señor, pero lo que pasa es que usted no enseña sobre el primer
comienzo de todas las cosas’. — ‘Pero, ¿alguna vez te dije: «Ven, estate sujeto a mis reglas
y voy a enseñarte sobre el primer comienzo de todas las cosas?’ — ‘No, Venerable Señor’.
— ‘O acaso tú, ¿alguna vez me dijiste: «Venerable Señor, voy a estar sujeto a sus reglas si
me enseña sobre el primer comienzo de todas las cosas»?’. — ‘No, Venerable Señor’. —
‘Entonces, Sunakkhatta, puesto que ni yo te di semejante promesa ni tú me pusiste semejante
condición, ¿quién eres tú, hombre tonto, para decirme que me estés dejando?’. [1.6]
“’Sunakkhatta, de muchas maneras has hablado alabanzas de mí entre los vajjianes de esta
manera: «El Bienaventurado es un Arahant perfectamente iluminado, consumado en el
conocimiento verdadero y la conducta, afortunado, conocedor del mundo, insuperable
preparador de personas que han de ser amansadas, maestro de los devas y seres humanos, un
Iluminado, un Bendito». También, de muchas maneras has hablado alabanzas entre los
vajjianes del Dhamma de esta manera: «El Dhamma está bien expuesto por el
Bienaventurado, es directamente visible, inmediato e invita a uno a venir, es aplicable y
personalmente experimentable por el sabio». También, de muchas maneras has hablado
alabanzas del Sangha de los monjes entre los vajjianes de esta manera: «El Sangha de los
discípulos del Bienaventurado practica de buena manera, practica de manera recta, practica
de manera verdadera, practica de manera apropiada; es decir, los cuatro pares de personas,
las ocho clases de individuos; este Sangha de los discípulos del Bienaventurado es digno de
recibir ofrendas, digno de hospitalidad, digno de donativos, digno de reverenciales saludos
y es un inigualable campo de méritos para el mundo».
“’De estas muchas maneras, Sunakkhatta, has hablado alabanzas de mí, del Dhamma y el
Sangha entre los vajjianes, pero yo declaro de ti que habrá aquellos que dirán de ti: «El
licchavi Sunakkhatta no fue capaz de mantener la vida santa bajo el asceta Gotama, abandonó
el entrenamiento y regresó a la vida ordinaria»’. Entonces, Bhaggava, al escuchar mis
palabras, Sunakkhatta dejó este Dhamma y Disciplina como alguien que se condena a sí
mismo al infierno.
[1.7] “Una vez, Bhaggava, estuve morando entre los khulus, en una de sus ciudades de
nombre Uttaraka. Un día me vestí por la mañana temprano, tomé mi cuenco y hábito exterior,
y entré a Uttaraka con mi asistente Sunakkhatta en búsqueda de la comida de las limosnas.
Entonces, el asceta desnudo Korakkhattiya, el ‘hombre perro’, se comportaba como un perro,
caminando con las cuatro extremidades, acostándose en el suelo, tomando y comiendo
solamente con su boca. Cuando Sunakkhatta lo vio, pensó así: ‘Qué admirable es este
hombre, realmente este es un verdadero Arahant, que camina con las cuatro extremidades,
se acuesta en el suelo, tomando y comiendo solamente con su boca’. Entonces yo,
conociendo su pensamiento con mi propia mente, le dije:

“‘¡Qué hombre tonto eres! ¿Pretendes aún llamarte el seguidor de los sakias?’.
“‘¿Qué significa esta pregunta, Venerable Señor?’.
“’¿Acaso no pensaste, Sunakkhatta, cuando viste a aquel asceta desnudo Korakkhattiya,
caminando con las cuatro extremidades, acostándose en el suelo, tomando y comiendo
solamente con su boca: «Qué admirable es este hombre, realmente este es un verdadero
Arahant»?’.
“’Sí, Venerable Señor, lo pensé. Pero, ¿acaso el Bienaventurado envidia el arahantado de
otros?’. “’¡No estoy envidiando el arahantado de otros, hombre tonto! Es sólo porque en ti
surgió este pernicioso punto de vista. Abandónalo porque esto será para ti de dolor e
infelicidad por mucho tiempo. Este asceta desnudo Korakkhattiya, a quien consideras un
Arahant, va a morir en siete días de una indigestión y, cuando muera, reaparecerá entre los
asuras kalakanjas, que es el más bajo estado de los asuras. Y una vez muerto, será echado al
montículo de la hierba birana en el cementerio. Si quieres, puedes preguntarle si conoce su
destino y a ver si te responde: «Sí, conozco mi destino, amigo Sunakkhatta, he aquí existen
esos asuras kalakanjas, que es el estado más bajo de los asuras, ahí voy a renacer»’.
[1.8] “Entonces, Bhaggava, el licchavi Sunakkhatta se acercó al asceta desnudo
Korakkhattiya y el dijo: ‘Amigo Korakkhattiya, he aquí el asceta Gotama dijo… [repite la
predicción del Buda, agregando:] Por eso, amigo Korakkhattiya, ten mucho cuidado con lo
que vas a comer o beber, porque las palabras del asceta Gotama apuntan a un mal’. “’Pero
Sunakkhatta no creyó en las palabras del Tathagata y contaba los siete días uno tras otro;
pero sin embargo, en el séptimo día Korakkhattiya murió de una indigestión y, cuando murió,
reapareció entre los asuras kalakanjas, que es el más bajo estado de los asuras. Y una vez
muerto, fue echado al montículo de la hierba birana en el cementerio.
[1.9] “Y cuando Sunakkhatta lo escuchó, Bhaggava, fue al cementerio donde yacía el cuerpo
de Korakkhattiya y lo golpeó tres veces con su mano, diciendo: ‘Amigo Korakkhattiya,
¿conoces ahora cuál ha sido tu destino?’. Entonces Korakkhattiya, frotándose su espalda con
la mano, se sentó y dijo: ‘Sí, conozco, amigo Sunakkhatta, cuál es mi destino. He renacido
entre los asuras kalakanja, el más bajo estado de los asuras’. Y diciendo esto, cayó de vuelta
hacia atrás.
[1.10] “Acto seguido, Bhaggava, el licchavi Sunakkhatta se acercó a mí, me rindió homenaje
y se sentó a un lado. Cuando estaba sentado allí, le dije: ‘¿Qué me dices, Sunakkhatta?
¿Ocurrió con el asceta desnudo Korakkhattiya lo que declaré de él o no?’.
“’Ocurrió lo que el Bienaventurado declaró de él’.
“’Y, ¿ qué opinas, Sunakkhata? Siendo así, ¿se produjo un milagro que va más allá del poder
de una persona común y corriente?’.
“’Ciertamente, siendo así, se produjo un milagro que va más allá del poder de una persona
común y corriente’.
“’Entonces, aún así, hombre tonto, después de haber realizado semejante milagro, ¡seguirás
diciendo que no realizo milagro alguno que va más allá del poder de alguien común y
corriente! Considera, hombre tonto, lo grande que es tu falta’. Entonces, Bhaggava, al
escuchar mis palabras, Sunakkhatta dejó este Dhamma y Disciplina como alguien que se
condena a sí mismo al infierno.
[1.11] “Una vez, Bhaggava, estuve morando en el salón con el techo de dos aguas, en el Gran
Bosque, cerca de Vesali. En aquel tiempo vivía en Vesali un asceta desnudo, de nombre
Kandaramasuka, que tenía muchas ganancias y una gran fama en la capital de los vajjianes.
Él se sometía a las siete reglas de la práctica: ‘Mientras viva, seré un asceta desnudo y no
voy a ponerme ropa alguna; mientras viva, seré devoto a la castidad y me abstendré de las
relaciones sexuales; mientras viva, subsistiré mediante bebidas fuertes y la carne; mientras
viva, no comeré arroz hervido ni leche cuajada; mientras viva, nunca cruzaré más allá del
santuario de Udena, al este de Vesali, el santuario Gotamaka al sur, el santuario Sattamba al
oeste y el santuario Bahaputta al norte’. Fue mediante el cumplimiento de estos siete votos,
que tuvo muchas ganancias y mucha fama en la capital de los vajjianes.
[1.12] “Entonces, Bhaggava, el licchavi Sunakkhatta se fue junto a Kandaramasuka y le
preguntó sobre este asunto. Pero Kandaramasuka no sólo no le respondió, sino que se mostró
ofuscado, disgustado e irascible. Pero Sunakkhatta pensó: ‘He causado una ofensa a un
verdadero asceta-Arahant; que no ocurra nada malo ni desafortunado para nosotros por eso’.
[1.13] “Acto seguido, Bhaggava, el licchavi Sunakkhatta se acercó a mí, me rindió homenaje
y se sentó a un lado. Cuando estaba sentado allí, le dije: ‘¡Qué hombre tonto eres! ¿Pretendes
llamarte aún el seguidor de los sakia?’.
“‘¿Qué significa esta pregunta, Venerable Señor?’.
“’¿Acaso no fuiste junto a Kandaramasuka… que se mostró ofuscado, disgustado e irascible
y pensaste: «He causado una ofensa a un verdadero asceta-Arahant; que no ocurra nada malo
ni desafortunado para nosotros por eso»?’.
“’Sí, Venerable Señor, así fue. Pero, ¿acaso el Bienaventurado envidia el arahantado de
otros?’. “’¡No estoy envidiando el arahantado de otros, hombre tonto! Es sólo porque en ti
surgió este pernicioso punto de vista. Abandónalo porque esto será para ti de dolor e
infelicidad por mucho tiempo. Este asceta desnudo Kandaramasuka, a quien consideras un
Arahant, en poco tiempo estará vestido y casado, alimentándose del arroz hervido y leche
cuajada. Se irá más allá de los límites de los santuarios de Vesali, y su fama y reputación se
van a terminar por completo’.
“Y, efectivamente, no mucho tiempo después aquel asceta desnudo se vistió y se casó, se
alimentaba de arroz hervido y leche cuajada. También iba más allá de los límites de los
santuarios de Vesali, y su fama y reputación terminaron por completo.
[1.14] “Y cuando escuchó lo que pasó, Bhaggava, el licchavi Sunakkhatta se acercó a mí, me
rindió homenaje y se sentó a un lado. Cuando estaba sentado allí, le dije: ‘¿Qué me dices,
Sunakkhatta? ¿Ocurrió con el asceta desnudo Kandaramasuka lo que declaré de él o no?’.
“’Ocurrió lo que el Bienaventurado declaró de él’.
“’Y, ¿qué opinas, Sunakkhata? Siendo así, ¿se produjo un milagro que va más allá del poder
de una persona común y corriente?’.
“’Ciertamente, siendo así, se produjo un milagro que va más allá del poder de una persona
común y corriente’.
“’Entonces, aún así, hombre tonto, después de haber realizado semejante milagro, ¡seguirás
diciendo que no realizo milagro alguno que va más allá del poder de alguien común y
corriente! Considera, hombre tonto, lo grande que es tu falta’. Entonces, Bhaggava, al
escuchar mis palabras, Sunakkhatta dejó este Dhamma y Disciplina como alguien que se
condena a sí mismo al infierno.
[1.15] “Una vez, Bhaggava, estuve morando en el salón con el techo de dos aguas, en el Gran
Bosque, cerca de Vesali. En ese tiempo vivía en Vesali un asceta desnudo, de nombre
Pathikaputta, que tuvo muchas ganancias y una gran fama en la capital de los vajjianes.
Entonces, él hizo esta declaración en medio de la asamblea en Vesali: ‘El asceta Gotama dice
ser un hombre de gran conocimiento y yo proclamo lo mismo. Es correcto que el hombre de
gran conocimiento lo demuestre haciendo milagros. Si el asceta Gotama viene a mi encuentro
a la mitad del camino, yo haré lo propio. Entonces ambos podremos hacer milagros: si el
asceta Gotama hace un milagro, yo haré dos; si el asceta Gotama hace dos milagros, yo haré
cuatro; si el asceta Gotama hace cuatro milagros, yo haré ocho. Cualquier cantidad de
milagros que haga el asceta Gotama, yo haré el doble’.
[1.16] “Entonces, Bhaggava, el licchavi Sunakkhatta se acercó a mí, me rindió homenaje y
me reportó lo sucedido con el asceta desnudo Pathikaputta. Entonces le respondí: ‘El asceta
desnudo Pathikaputta no es capaz de encontrarse conmigo, cara a cara, sin que renuncie a
estas palabras, abandone este pensamiento y deje este punto de vista. Y si piensa de otra
forma, su cabeza explotará en pedazos’.
[1.17] “’Venerable Señor, que el Bienaventurado tenga cuidado con lo que dice. Tenga
cuidado, Venerable Señor, con lo que dice’. “’¿Qué quieres decirme con eso, Sunakkhatta?’.
“’Qué el Bienaventurado tenga cuidado con lo que dice, que el Bendito tenga cuidado con lo
que dice. Es que el Bienaventurado podría decir algo de una manera absoluta sobre lo que le
sucedería a Pathikaputta y a él, sin embargo, podría sucederle otra cosa y falsaría de este
modo las palabras del Bienaventurado’.
[1.18] “’Pero entonces, Sunakkhatta, ¿crees que el Tathagata podría tener una forma de
hablar tan ambigua? ¿Podría alguien alterar su forma de tal manera que hiciera las palabras
del Tathagata falsas?’.
“’Venerable Señor, ¿conoce el Bienaventurado la suerte de Pathikaputta con su propia mente
o algún deva se lo ha revelado?’. “’Sunakkhatta, yo lo conozco con mi propia mente, pero
también me lo ha revelado un deva. Fue de parte de Ajita, el general de los licchavis, quien
murió el otro día y renació en el cielo de los Treinta y Tres Dioses. Él llegó junto a mí y me
dijo: ‘Venerable Señor, el asceta desnudo Pathikaputta es un impúdico mentiroso. Él declaró
esto de mí en la capital de los vajjianes: ‘El general de los licchavis, Ajita, renació en el Gran
Infierno. Pero yo no renací allí, Venerable Señor, renací en el cielo de los Treinta y Tres
Dioses. El asceta desnudo Pathikaputta es un impúdico mentiroso. No es capaz de
encontrarse con el asceta Gotama, cara a cara, sin que renuncie a estas palabras, abandone
este pensamiento y deje este punto de vista. Y si piensa de otra forma, su cabeza explotará
en pedazos’. De esta manera, Sunakkhatta, yo conozco esto con mi propia mente, pero
también me lo ha revelado un deva: que el asceta desnudo Pathikaputta no es capaz de
encontrarse conmigo, cara a cara, sin que renuncie a estas palabras, abandone este
pensamiento y deje este punto de vista. Y si piensa de otra forma, su cabeza explotará en
pedazos.
“’Ahora, Sunakkhatta, cuando me vaya a Vesali para buscar la comida de las limosnas, y
después de volver y almorzar, iré al parque de Pathikaputta: entonces dile lo que mejor te
parezca’. [1.19] “Acto seguido, Bhaggava, me vestí por la mañana temprano, tomé mi
cuenco y hábito exterior, y entré a Vesali en búsqueda de la comida de las limosnas. Y cuando
retorné de esta mi habitual ronda en busca de la comida de las limosnas, almorcé y fui al
parque de Pathikaputta, para pasar allí el tiempo de la siesta. Mientras tanto, el licchavi
Sunakkhatta se apresuró a entrar a Vesali y visitar a todos los licchavi más distinguidos para
decirles: ‘Amigos, el Bienaventurado ha entrado a Vesali en busca de la comida de las
limosnas y luego de retornar de esta habitual ronda y almorzar, se fue al parque de
Pathikaputta para pasar allí el tiempo de la siesta. ¡Venid pues también, amigos, que estos
dos grandes ascetas van a hacer allí [una competencia de] milagros!’. Luego fue a visitar a
otros eminentes y ricos brahmanes y hombres hogareños, y a aquellos que se volvieron
ascetas y brahmanes de diferentes credos, y les dijo lo mismo. De modo que ellos también
pensaron eso: ‘Los dos grandes ascetas van a hacer [una competencia de] milagros: vayamos
a verlo’.
“Acto seguido, todos estos distinguidos licchavis y ricos brahmanes, los hombres hogareños
y aquellos que se volvieron ascetas y brahmanes de diferentes credos, fueron al parque de
Pathikaputta, de manera que se reunieron allí cientos de miles de personas. [1.20] “Entonces,
Bhaggava, Pathikaputta escuchó que todas estas personas irían a su parque y hasta el mismo
asceta Gotama lo haría durante la siesta, y al escucharlo se llenó de miedo y temor, y sus
cabellos se pusieron de punta. Y así, atemorizado y con miedo, salió hacia la morada de
Tinduka, al parque de los ascetas errantes. Y cuando aquella asamblea escuchó que
Pathikaputta se fue allí, instruyeron a cierto hombre para que fuera detrás de él y le dijera:
‘Preséntate aquí, Pathikaputta: todos los distinguidos licchavis y ricos brahmanes, los
hombres hogareños y aquellos que se volvieron ascetas y brahmanes de diferentes credos,
fueron a tu parque Pathikaputta, y hasta el mismo asceta Gotama llegó allí para pasar el
tiempo de la siesta. Es que tú, amigo Pathikaputta, has declarado esto en medio de la
asamblea en Vesali: «El asceta Gotama dice ser un hombre con gran conocimiento y yo
proclamo lo mismo. Es correcto que el hombre de gran conocimiento lo demuestre haciendo
milagros. Si el asceta Gotama viniese a mi encuentro a la mitad del camino, yo haré lo propio.
Entonces, ambos podremos hacer milagros: si el asceta Gotama hace un milagro, yo haré
dos; si el asceta Gotama hace dos milagros, yo haré cuatro; si el asceta Gotama hace cuatro
milagros, yo haré ocho. Cualquier cantidad de milagros que haga el asceta Gotama, yo haré
el doble». Haz ahora la mitad del camino que dijiste que harías, pues el asceta Gotama ya
hizo su mitad y está sentado en tu parque para pasar allí el tiempo de la siesta’.
[1.21] “’Sí, señores’, respondió aquel hombre, Bhaggava, y fue a la morada de Tinduka, en
el parque de los ascetas errantes, encontró al asceta desnudo Pathikaputta y le entregó el
mensaje. Al escucharlo, Pathikaputta respondió: ‘Ya voy, ya voy’, retorciéndose en la silla
de un lado a otro, pero sin poder levantarse de su asiento. Entonces aquel hombre le dijo:
‘¿Qué pasó, amigo Pathikaputta? ¿Tu trasero se ha pegado al asiento o el asiento se ha pegado
a tu trasero? Dijiste: «Ya voy, ya voy», pero no haces más que retorcerte en la silla de un
lado a otro’. Pero aún con todo lo que dijo aquel hombre, el asceta desnudo Pathikaputta
solamente repetía ‘Ya voy, ya voy’, y seguía retorciéndose en la silla de un lado a otro, sin
poder levantarse.
[1.22] “Entonces, Bhaggava, cuando aquel hombre se dio cuenta que Pathikaputta no podía
ayudarse a sí mismo, al escuchar sus palabras y ver su desconcierto, regresó junto a la
asamblea y les dijo: ‘El asceta desnudo Pathikaputta está desconcertado. Él dice: «Ya voy,
ya voy», pero solo se retuerce en la silla de un lado a otro, sin poder levantarse de su asiento’.
“Entonces yo les dije esto: ‘El asceta desnudo Pathikaputta no es capaz de encontrarse
conmigo, cara a cara, sin que renuncie a sus palabras, abandone su pensamiento [pernicioso]
y deje este punto de vista. Y si hiciese lo contrario y viniese a encontrarse conmigo, su cabeza
explotaría en pedazos’. [Fin de la primera serie de recitación].
[2.1] “Entonces, Bhaggava, un cierto ministro de los licchavi se levantó de su asiento y dijo:
‘Bien, señores, esperadme un momento, mientras iré yo a ver si puedo traer a este asceta
desnudo Pathikaputta a esta asamblea’.
“Acto seguido, fue a la morada de Tinduka, en el parque de los ascetas errantes, encontró al
asceta desnudo Pathikaputta y le dijo: ‘Ven, Pathikaputta, es mejor para ti que vengas: todos
los distinguidos licchavis y ricos brahmanes… y hasta el mismo asceta Gotama llegó allí
para pasar el tiempo de la siesta. Es que tú, amigo Pathikaputta, has declarado esto en medio
de la asamblea en Vesali: «El asceta Gotama dice ser un hombre con gran conocimiento y
yo proclamo lo mismo… Cualquier cantidad de milagros que haga el asceta Gotama, yo haré
el doble». Haz ahora la mitad del camino que dijiste que harías, pues el asceta Gotama ya
hizo su mitad y está sentado en tu parque para la siesta. Si vienes, te haremos ganar y haremos
que el asceta Gotama pierda’.
[2.2] Al escucharlo, Pathikaputta respondió: ‘Ya voy, ya voy’, retorciéndose en la silla de un
lado a otro, pero sin poder levantarse de su asiento. Entonces aquel ministro le dijo: ‘¿Qué
pasó, amigo Pathikaputta?...’.
[2.3] “Entonces, Bhaggava, cuando aquel ministro se dio cuenta que Pathikaputta no podía
ayudarse a sí mismo, al escuchar sus palabras y ver su desconcierto, regresó junto a la
asamblea… Entonces yo les dije esto: ‘El asceta desnudo Pathikaputta no es capaz de
encontrarse conmigo, cara a cara, sin que renuncie a sus palabras, abandone su pensamiento
[pernicioso] y deje este punto de vista. Y si hiciese lo contrario y viniese a encontrarse
conmigo, su cabeza explotaría en pedazos’.
[2.4] “Entonces, Bhaggava, un discípulo con el cuenco de madera, de nombre Jaliya, se
levantó de su asiento y dijo: ‘Bien, señores, esperadme un momento, mientras iré yo a ver si
puedo traer a este asceta desnudo Pathikaputta a esta asamblea’. Acto seguido, fue a la
morada de Tinduka… ‘Si vienes, te haremos ganar y haremos que el asceta Gotama pierda’.
[2.5] Al escucharlo, Pathikaputta respondió: ‘Ya voy, ya voy’, retorciéndose en la silla de un
lado a otro, pero sin poder levantarse de su asiento. Entonces aquel discípulo le dijo: ‘¿Qué
pasó, amigo Pathikaputta?...’.
[2.6] “Entonces, Bhaggava, cuando Jaliya, el discípulo con el cuenco de madera, se dio
cuenta que Pathikaputta no podía ayudarse a sí mismo, al escuchar sus palabras y ver su
desconcierto, le dijo: ‘Una vez, Pathikaputta, se le ocurrió este pensamientos al león, el rey
de las bestias: «¿Qué tal si estableciera mi guarida cerca de una cierta selva? Entonces, podría
emerger allí al anochecer, bostezar, examinar los cuatro puntos cardinales, rugir mi rugido
de león tres veces e ir luego hacia los pastos del ganado. Luego, podría escoger la mejor
presa, matarla y, después de haberme alimentado con la carne fresca, volver a mi guarida».
Acto seguido, lo hizo así.
[2.7] “’Pero entonces, amigo Pathikaputta, había por allí un viejo chacal que continuamente
se satisfacía de los restos de la comida que dejaba el león, que era fuerte y fornido, y que se
le ocurrió este pensamiento: «¿Qué diferencia hay entre este león, el rey de las bestias, y yo?
¿Qué tal si yo también estableciera mi guarida cerca de una cierta selva? Entonces, podría
emerger allí al anochecer… y, después de haberme alimentado con la carne fresca, volver a
mi guarida». Acto seguido, lo hizo así: emergió allí al anochecer, bostezó, examinó los cuatro
puntos cardinales, y pensó así: «Voy a rugir ahora el rugido de león tres veces», sin embargo,
dio el grito propio de su especie, un aullido de chacal. ¿Qué tiene en común un aullido de
chacal con el rugido de un león? De la misma manera tú, amigo Pathikaputta, viviendo sin
alcanzar los logros de un Bienaventurado Señor, viviendo de las sobras de un Bienaventurado
Señor, te imaginas que puedes ponerte al lado de los Tathagatas, Arahants, Budas Plenamente
Iluminados. Pero, ¿qué tienen en común con ellos los miserables Pathikaputtas como tú?’.
[2.8] “Entonces, Bhaggava, ni siquiera con la ayuda de esta parábola, Pathikaputta fue capaz
de levantarse de su asiento, por lo cual Jaliya pronunció este verso:
“‘Pensando que es un león, el chacal dice:
«¡Soy un león! ¡Soy el rey de las bestias!», Y trató de rugir El rugido
del león, pero sólo un aullido le salió.
El león es el león y el chacal sigue siendo chacal.
“’De la misma manera tú, amigo Pathikaputta, viviendo sin alcanzar los logros de un
Bienaventurado Señor, viviendo de las sobras de un Bienaventurado Señor, te imaginas que
puedes ponerte al lado de los Tathagatas, Arahants, Budas Plenamente Iluminados. Pero,
¿qué tienen en común con ellos los miserables Pathikaputtas como tú?’.
[2.9] “Entonces, Bhaggava, como ni siquiera con la ayuda de esta parábola, Pathikaputta fue
capaz de levantarse de su asiento, Jaliya pronunció este [otro] verso:

“’Siguiendo las huellas de otros, alimentándose


De los restos, el chacal se olvida de su naturaleza,
Pensando: «Soy un tigre», trata de rugir
Un poderoso rugido, pero sólo un aullido sale en su lugar. El
león es el león y el chacal sigue siendo chacal.
“’De la misma manera tú, amigo Pathikaputta… ¿qué tienen en común con ellos los
miserables Pathikaputtas como tú?’.
[2.10] “Entonces, Bhaggava, como ni siquiera con la ayuda de esta parábola, Pathikaputta
fue capaz de levantarse de su asiento, Jaliya pronunció este [otro] verso:
“’Alimentado de ranas y ratas de granero,
De los cuerpos de al lado del cementerio,
Estando en soledad del gran bosque, el chacal pensó:
«Soy el rey de las bestias», y trató de rugir
El rugido del león, pero sólo un aullido salió en su lugar. El león
es el león y el chacal sigue siendo chacal.
De la misma manera tú, amigo Pathikaputta… ¿qué tienen en común con ellos los miserables
Pathikaputtas como tú?’.
[2.11] “Entonces, Bhaggava, cuando Jaliya se dio cuenta de que Pathikaputta no podía
ayudarse a sí mismo, ni siquiera al escuchar esta parábola, y vio su desconcierto, regresó
junto a la asamblea y les dijo: ‘El asceta desnudo Pathikaputta está desconcertado. Él dice:
«Ya voy, ya voy», pero solo se retuerce en la silla de un lado a otro, sin poder levantarse de
su asiento’. [2.12] “Entonces, yo les dije esto, Bhaggava: ‘El asceta desnudo Pathikaputta
no es capaz de encontrarse conmigo, cara a cara, sin que renuncie a sus palabras, abandone
su pensamiento y deje este punto de vista. Y si hiciese lo contrario y viniese a encontrarse
conmigo, su cabeza explotaría en pedazos. Incluso si a los amigos licchavi se les ocurriese:
«Tomemos las correas y arrastrémoslo hasta aquí, usando carros con yugos», el asceta
desnudo Pathikaputta sería capaz de romper estas correas. El asceta desnudo Pathikaputta no
es capaz de encontrarse conmigo, cara a cara, sin que renuncie a sus palabras, abandone su
pensamiento y deje este punto de vista. Y si hiciese lo contrario y viniese a encontrarse
conmigo, su cabeza explotaría en pedazos’.
[2.13] “Entonces, Bhaggava, instruí, inspiré, elevé y deleité a aquella asamblea, con una
plática del Dhamma y, habiéndolo hecho, la dejé libre de la gran esclavitud, rescatando
ochenta y cuatro mil seres del camino de la gran perdición. Entonces, entré en el elemento
de la meditación del fuego y me elevé en el aire a la altura equivalente a unas siete palmeras,
proyectando la flama del fuego a la altura equivalente a otras siete palmeras, brillando y
resplandeciendo, para luego reaparecer en el salón con el techo de dos aguas, en el Gran
Bosque.
“Acto seguido, se acercó a mí el licchavi Sunakkhatta, me rindió homenaje, se sentó a un
lado y yo le dije: ‘¿Qué piensas de eso, Sunakkhatta? ¿Ocurrió con el asceta desnudo
Katikaputta lo que declaré de él o no?’.
“’Ocurrió lo que el Bienaventurado declaró de él’.
“’¿Qué opinas, Sunakkhata? Siendo así, ¿se produjo un milagro que va más allá del poder de
una persona común y corriente?’.
“’Ciertamente, siendo así, se produjo un milagro que va más allá del poder de una persona
común y corriente’.
“’Entonces, aún así, hombre tonto, después de haber realizado semejante milagro, ¡seguirás
diciendo que no realizo milagro alguno que va más allá del poder de alguien común y
corriente! Considera, hombre tonto, lo grande que es tu falta’. Entonces, Bhaggava, al
escuchar mis palabras, Sunakkhatta dejó este Dhamma y Disciplina como alguien que se
condena a sí mismo al infierno.
[2.14] “Yo conozco, Bhaggava, el primer comienzo de las cosas y conozco no solamente eso,
sino mucho más. Y, conociéndolo así, no lo pervierto. Y, no habiéndolo pervertido, conozco
en mí esta paz mediante cuyo descubrimiento el Tathagata no cae en el error. “He aquí,
Bhaggava, algunos ascetas y brahmanes que declaran que, según su doctrina tradicional,
aquel primer comienzo de las cosas fue obra de un poderoso señor, el Brahma. Y a ellos yo
les pregunto: ‘¿Es cierto, venerables señores, que vosotros declaráis que, según vuestra
doctrina tradicional, el primer comienzo de las cosas fue obra de un poderoso señor, el
Brahma?’. A lo que ellos me responden: ‘Sí’.
“Entonces les pregunto: ‘En este caso, ¿cómo declaran los venerables señores que el
poderoso señor Brahma lo produjo?’. Y cuando se les pregunta así, no son capaces de ofrecer
una respuesta ni tampoco hacer una contra-pregunta.
[2.15] “Sin embargo, cuando a mí se me pregunta acerca de este asunto, yo respondo así:
‘Ahora viene el tiempo, señores, cuando tarde o temprano, después de un periodo muy largo,
sucederá que el mundo se va a contraer. En este momento de la contracción del mundo, la
mayoría de los seres renacerán en el Mundo Resplandeciente, donde aparecerán
mentalmente, alimentándose de la dicha, emitiendo la luz de sí mismos, atravesando los aires
y continuando en la gloria; y así permanecerán por muy largo tiempo.
“’Pero después, señores, vendrá tarde o temprano, el tiempo cuando después de un período
muy largo, el mundo se volverá a expandir. En este mundo expandido aparecerá el vacío
Palacio del Brahma. Entonces, algunos seres, exhaustos por haber pasado su tiempo de
existencia —o gracias a sus méritos—, caerán del Mundo Resplandeciente al vacío Palacio
del Brahma, donde aparecerán mentalmente, alimentándose de la dicha, emitiendo la luz de
sí mismo, atravesando los aires y continuando en la gloria; y así permanecerán por muy largo
tiempo.
[2.16] “’Entonces, señores, aquel ser que apareció ahí primero y estuvo sólo por largo tiempo,
llegó a estar descontento y pensó: ‘¡Oh, si tan sólo los otros seres hubiesen llegado a este
lugar!’. Entonces, los otros seres, exhaustos por haber pasado su tiempo de existencia —o
gracias a sus méritos—, cayeron del Mundo Resplandeciente al vacío Palacio del Brahma,
donde aparecieron como la compañía de aquel primer ser, después de lo cual moraron ahí
mentalmente, alimentándose de la dicha, emitiendo luz de sí mismos, atravesando los aires
y continuando en la gloria; y así permanecieron por muy largo tiempo.
“’Entonces, señores, aquel ser que renació primero ahí, pensó de esta manera: «Yo soy el
Brahma, soy el Gran Brahma, el Supremo, el Omnisciente, Todopoderoso, el Gobernador, el
Señor de todo, el Hacedor, el Creador, el Padre de todo lo que existe y lo que puede llegar a
existir. Todos estos seres fueron creados por mí. ¿Por qué? Porque fui yo quien tuvo este
pensamiento: ‘¡Oh, si tan sólo los otros seres hubiesen llegado a este lugar!’. Este fue mi
deseo y luego todos estos seres llegaron a existir». Por otro lado, aquellos seres que llegaron
después, pensaron lo siguiente: «Éste, amigos, es el Brahma, el Gran Brahma, el Supremo,
el Omnisciente, Todopoderoso, el Gobernador, el Señor de todo, el Hacedor, el Creador, el
Padre de todo lo que existe y lo que puede llegar a existir. ¿Por qué? Porque hemos visto que
él estaba aquí primero y nosotros aparecimos después de él».
[2.17] “’Y este primer ser, señores, es más longevo, más hermoso y más poderoso de todos.
Y podría suceder que algún ser cayera de aquel reino y apareciera en este mundo. Una vez
renacido aquí, pudo haber renunciado a la vida hogareña y escogido el estilo de vida sin
hogar. Entonces, a través del correcto esfuerzo, la aplicación, la diligencia y la recta
reflexión, pudo haber alcanzado un cierto grado de concentración que permite recordar la
última existencia pasada, pero nada más que esto. De ahí, que este ser habrá pensado: «Este
Brahma, el Gran Brahma, el Supremo, el Omnisciente, Todopoderoso, el Gobernador, el
Señor de todo, el Hacedor, el Creador, el Padre de todo lo que existe y lo que puede llegar a
existir, nos creó a nosotros, y él es permanente, estable, eterno, no sujeto a cambio; es el
mismo por toda la eternidad. Pero nosotros, que fuimos creados por este Brahma, no somos
permanentes, ni estables y llegamos a este mundo con una duración limitada de vida». Así
es cómo llegó a suceder lo que vosotros, venerables señores, declaráis como lo que ha sido
creado por un poderoso señor, el Brahma’.
“Entonces, Bhaggava, me dicen: ‘Hemos escuchado, maestro Gotama, lo que nos has
enseñado’. Pero yo conozco, Bhaggava, el primer comienzo de las cosas y conozco no
solamente eso, sino mucho más. Y conociéndolo así, no lo pervierto. Y, no habiéndolo
pervertido, conozco en mí esta paz mediante cuyo descubrimiento el Tathagata no cae en el
error. [2.18] “Además, Bhaggava, hay otros ascetas y brahmanes que declaran que, según su
doctrina tradicional, aquel primer comienzo de las cosas se produjo a través de la corrupción
del placer. Y a ellos yo les pregunto: ‘¿Es cierto, venerables señores, que vosotros declaráis
que, según vuestra doctrina tradicional, el primer comienzo de las cosas se produjo a través
de la corrupción del placer?’. A lo que ellos me responden: ‘Sí’. “Entonces les pregunto: ‘En
este caso, ¿cómo declaran los venerables señores que se produjo este primer comienzo de
todas las cosas a través de la corrupción del placer?’. Y cuando se les pregunta así, no son
capaces de ofrecer una respuesta ni tampoco hacer una contra-pregunta. “Sin embargo,
cuando a mí se me pregunta acerca de este asunto, yo respondo así: ‘Señores, existen algunos
devas, llamados «Corrompidos por el Placer», los cuales dedican un excesivo tiempo al
regocijo, al juego y al disfrute de los placeres, hasta el punto en que se vuelven adictos a
ellos. Por esa razón, la atención consciente de estos devas se disipa y, a causa de la disipación
de la atención consciente, caen de aquel mundo y renacen en éste.
“’Entonces, puede suceder que algún ser entre ellos, habiendo caído de aquel estado y
habiendo renacido en este mundo pudo haber renunciado a la vida hogareña y escogido el
estilo de vida sin hogar. De este modo, a través del correcto esfuerzo, la aplicación, la
diligencia y la recta reflexión, pudo haber alcanzado el grado de concentración que permite
recordar la última existencia pasada, pero nada más que esto.
“’De ahí, que este ser pensó: «Aquellos venerables devas que no son corrompidos por el
placer, que no dedican un excesivo tiempo al regocijo, al juego y al disfrute de los placeros,
y no son adictos a ellos, estos devas no tienen la atención consciente disipada y, a causa de
la atención consciente no disipada, no caen de aquel mundo. Estos devas son permanentes,
estables, eternos, no sujetos a cambio, son los mismos por toda la eternidad. Pero nosotros,
que somos corrompidos por el placer, que dedicamos un excesivo tiempo al regocijo, al juego
y al disfrute de los placeres, y somos adictos a ellos, nuestra atención consciente se disipó y,
a causa de la disipación de nuestra atención consciente, caímos de aquel estado; no somos
permanentes ni estables y llegamos a este mundo con una duración limitada de vida». Así es
cómo llegó a suceder lo que vosotros, venerables señores, declaráis como lo que ha sido
creado mediante la corrupción del placer’.
“Entonces, Bhaggava, me dicen: ‘Hemos escuchado, maestro Gotama, lo que nos has
enseñado’. Pero yo conozco, Bhaggava, el primer comienzo de las cosas y conozco no
solamente eso, sino mucho más. Y conociéndolo así, no lo pervierto. Y, no habiéndolo
pervertido, conozco en mí esta paz mediante cuyo descubrimiento el Tathagata no cae en el
error. [2.19] “Además, Bhaggava, hay otros ascetas y brahmanes que declaran que, según su
doctrina tradicional, aquel primer comienzo de las cosas se produjo a través de la corrupción
de la mente. Y a ellos yo les pregunto: ‘¿Es cierto, venerables señores, que vosotros declaráis
que, según vuestra doctrina tradicional, el primer comienzo de las cosas se produjo a través
de la corrupción de la mente?’. A lo que ellos me responden: ‘Sí’. “Entonces les pregunto:
‘En este caso, ¿cómo declaran los venerables señores que se produjo este primer comienzo
de todas las cosas a través de la corrupción de la mente?’. Y cuando se les pregunta así, no
son capaces de ofrecer una respuesta ni tampoco hacer una contra-pregunta.
“Sin embargo, cuando a mí se me pregunta acerca de este asunto, yo respondo así: ‘Señores,
existen algunos devas, llamados «Corrompidos de la Mente», los cuales dedican un excesivo
tiempo a considerarse uno al otro con envidia. Por esa razón, su mente se corrompe y, a causa
de la mente corrompida, llegan a estar agotados y cansados corporal y mentalmente y,
finalmente, caen de aquel mundo y renacen en éste.
“’Entonces, puede suceder que algún ser entre ellos, habiendo caído de aquel estado,
habiendo renacido en este mundo pudo haber renunciado a la vida hogareña y escogido el
estilo de vida sin hogar. De este modo, a través del correcto esfuerzo, la aplicación, la
diligencia y la recta reflexión, alcanzó el grado de concentración que permite recordar la
última existencia pasada, pero nada más que esto.
“’De ahí, que este ser pensó: «Aquellos venerables devas que no son corrompidos en su
mente, que no dedican un excesivo tiempo a considerarse uno al otro con envidia, estos
devas, al no tener una mente corrompida, no se agotan ni se cansan corporal ni mentalmente,
por lo cual, no caen de aquel mundo. Estos devas son permanentes, estables, eternos, no
sujetos a cambio, son los mismos por toda la eternidad. Pero nosotros, que somos
corrompidos de la mente, dedicamos un excesivo tiempo a considerarnos los unos a los otros
con envidia, siendo corrompida nuestra mente, llegamos a estar agotados y cansados corporal
y mentalmente y, finalmente, caímos de aquel estado, no somos permanentes ni estables y
llegamos a este mundo con una duración limitada de vida». Así es cómo llegó a suceder lo
que vosotros, venerables señores, declaráis como lo que ha sido creado mediante la
corrupción de la mente’.
“Entonces, Bhaggava, me dicen: ‘Hemos escuchado, maestro Gotama, lo que nos has
enseñado’. Pero yo conozco, Bhaggava, el primer comienzo de las cosas y conozco no
solamente eso, sino mucho más. Y conociéndolo así, no lo pervierto. Y, no habiéndolo
pervertido, conozco en mí esta paz mediante cuyo descubrimiento el Tathagata no cae en el
error.
[2.20] “Además, Bhaggava, hay otros ascetas y brahmanes que declaran que, según su
doctrina tradicional, aquel primer comienzo de las cosas se produjo por casualidad. Y a ellos
yo les pregunto: ‘¿Es cierto, venerables señores, que vosotros declaráis que, según vuestra
doctrina tradicional, el primer comienzo de las cosas se produjo por casualidad?’. A lo que
ellos me responden: ‘Sí’.
“Entonces les pregunto: ‘En este caso, ¿cómo declaran los venerables señores que se produjo
este primer comienzo de todas las cosas por casualidad?’. Y cuando se les pregunta así, no
son capaces de ofrecer una respuesta ni tampoco hacer una contrapregunta. “Sin embargo,
cuando a mí se me pregunta acerca de este asunto, yo respondo así: ‘Existen, señores, ciertos
devas llamados «No-perceptivos». Tan pronto les llega alguna percepción, estos devas caen
de aquel plano de la existencia [y no recuerdan nada]. Entonces, puede suceder que alguno
de estos seres que haya caído de aquel plano y apareció en este mundo, pudo haber
renunciado a la vida hogareña y escogido el estilo de vida sin hogar. Entonces, a través del
correcto esfuerzo, la aplicación, la diligencia y la recta reflexión, alcanzó el grado de
concentración que permite recordar la última existencia pasada, pero nada más que esto.
Entonces, pensaría lo siguiente: «El yo y el mundo han aparecido casualmente. ¿Por qué?
Porque antes, no existía y ahora existo. Habiendo no existido, llegué a existir». Así es cómo
llegó a suceder lo que vosotros, venerables señores, declaráis como lo que ha sido creado
mediante la casualidad’.
“Entonces, Bhaggava, me dicen: ‘Hemos escuchado, maestro Gotama, lo que nos has
enseñado’. Pero yo conozco, Bhaggava, el primer comienzo de las cosas y conozco no
solamente eso, sino mucho más. Y conociéndolo así, no lo pervierto. Y, no habiéndolo
pervertido, conozco en mí esta paz mediante cuyo descubrimiento el Tathagata no cae en el
error. [2.21] “Y entonces, Bhaggava, yo que enseño estas cosas, soy acusado por ciertos
ascetas y brahmanes que —falsa, injustificada y maliciosamente— dicen de mí: ‘El asceta
Gotama está equivocado y sus monjes también están equivocados. Él dice: «Cualquiera que
haya alcanzado el estado de la liberación conocido como Lo Bello, considera todas las cosas
como repulsivas»’. Pero yo, Bhaggava, nunca dije esto. Lo que yo dije es: ‘Cualquiera que
haya alcanzado el estado de la liberación conocido como Lo Bello, es consciente que esto es
bello’”.
“Pero entonces, Venerable Señor, están todos equivocados los que imputan al
Bienaventurado y a sus monjes semejante error. Yo me he deleitado con el Venerable Señor
y he pensado que el Bienaventurado es capaz de enseñarme a alcanzar el estado conocido
como Lo Bello, y a permanecer en él”.
“Es difícil para ti, Bhaggava, que sostienes diferentes puntos de vista, que tienes diferentes
inclinaciones, que estas sujeto a diferentes influencias, que sigues una diferente Disciplina y
tienes a un diferente maestro, alcanzar el estado conocido como Lo Bello y permanecer en
él. Para eso, Bhaggava, tienes que esforzarte mucho y poner tu confianza en mí”. “Venerable
Señor, por más que sostuve diferentes puntos de vista, que tuve diferentes inclinaciones, que
estuve sujeto a diferentes influencias, que seguí una diferente Disciplina y tuve a un diferente
maestro —y por eso me será difícil alcanzar el estado conocido como Lo Bello y permanecer
en él—, aún así me esforzaré mucho y pondré mi confianza en el Bienaventurado”. Esto es
lo que dijo el Bienaventurado y el asceta errante, Bhaggavagotta, fue complacido y se deleitó
en las palabras del Bienaventurado.

sto he escuchado. En una ocasión, el Bienaventurado estaba morando en la Arboleda Jeta del
Parque de Anathapindika cerca de Savatthi.

[2] Entonces, de mañana temprano, el Bienaventurado se vistió y, tomando se hábito


exterior y el cuenco, entró a Savatthi en busca de la comida de las limosnas. Al mismo
tiempo, un grupo de monjes se fue junto al Venerable Ananda y, llegando allí, le dijeron:
"Amigo Ananda, hace mucho tiempo que no hemos escuchado una plática del Dhamma de
labios del Bienaventurado. Sería bueno que pudiésemos escuchar una plática del Dhamma
de labios del Bienaventurado, amigo Ananda". - "Entonces, que los venerables señores vayan
a la ermita del brahmán Rammaka. Quizá estando allí, podréis escuchar una plática del
Dhamma de labios del Bienaventurado." - "Sí, amigo", respondieron.

[3] Después, una vez que el Bienaventurado haya recorrido el Savatthi en busca de las
comidas de las limosnas, haya retornado de su habitual ronda y haya comido, se dirigió al
Venerable Ananda con estas palabras: "Vayamos al Parque del Este, al palacio de la madre
de Migara, para la morada diurna".
{273} Entonces, cuando pasó la tarde, el Bienaventurado emergió de la meditación y se
dirigió al Venerable Ananda: "Vayamos al lugar de los Baños del Este para bañarnos". - "Sí,
venerable señor", respondió el Venerable Ananda. Acto seguido, el Bienaventurado, junto
con el Venerable Ananda, fue al lugar de los Baños del Este para bañarse. Cuando hubo
terminado, salió del agua y se paró sobre una manta para secarse. Entonces, el Venerable
Ananda dijo al Bienaventurado: "Venerable señor, la ermita del brahmán Rammaka está
cerca. Aquella ermita es agradable y encantadora. Venerable señor, sería bueno que el
Bienaventurado fuera ahí por su gran compasión". Y el Bienaventurado consintió en silencio.
[4] Entonces, el Bienaventurado fue a la ermita del brahmán Rammaka. En esta ocasión, un
grupo de monjes estaba sentado allí, discutiendo sobre el Dhamma. Y el Bienaventurado se
paró afuera frente a la puerta principal esperando hasta que terminase su discusión. Cuando
supo que la misma se había terminado, tosió y golpeó la puerta, y los monjes se la abrieron.
Cuando entró, el Bienaventurado tomó el asiento que estaba preparado para él y se dirigió a
los monjes con estas palabras: "Monjes, sobre qué era la discusión del Dhamma que tuvisteis
mientras estabais sentados aquí, qué discusión os ha sido interrumpida?"

"Venerable señor, nuestra discusión del Dhamma que nos ha sido interrumpida fue acerca
del Bienaventurado mismo. Entonces, el Bienaventurado ha llegado".

"Bien, monjes. Es apropiado para vosotros, miembros de los clanes que habéis renunciado
por fe a la vida hogareña para asumir el estilo de vida son hogar, estar sentados juntos y
hablar sobre el Dhamma. Cuando estéis sentados juntos, monjes, deberías hacer una de estas
dos cosas: mantener una discusión sobre el Dhamma o mantener el noble silencio [1].

[Dos clases de búsqueda]

[5] {274} "Monjes: existen dos clases de búsqueda: la búsqueda noble y la búsqueda
innoble. Y, ¿qué es la búsqueda innoble? He aquí, alguien, siendo él mismo sujeto al
nacimiento, busca aquello que también está sujeto al nacimiento; siendo él mismo sujeto a la
vejez, busca aquello que también está sujeto a la vejez; siendo él mismo sujeto a la
enfermedad, busca aquello que también está sujeto a la enfermedad; siendo él mismo sujeto
a la muerte, busca aquello que también está sujeto a la muerte; siendo él mismo sujeto a la
pena, busca aquello que también está sujeto a la pena; siendo él mismo sujeto a las impurezas,
busca aquello que también está sujeto a las impurezas.

[6] "Y, ¿qué se puede decir, monjes, acerca de lo que está sujeto al nacimiento? La mujer y
los hijos están sujetos al nacimiento, esclavos y esclavas, las cabras y las ovejas, las aves y
los cerdos, los elefantes, el ganado, los caballos, las yeguas, el oro y la plata están sujetos al
nacimiento. Estas adquisiciones están sujetas al nacimiento, y alguien que está atado a estas
cosas, encaprichado con ellas y totalmente entregado a ellas, es alguien que, siendo él mismo
sujeto al nacimiento, busca aquello que también está sujeto al nacimiento.

[7] "Y, ¿qué se puede decir, monjes, acerca de lo que está sujeto a la vejez? La mujer y los
hijos están sujetos a la vejez, esclavos y esclavas, las cabras y las ovejas, las aves y los cerdos,
los elefantes, el ganado, los caballos, las yeguas, el oro y la plata están sujetos a la vejez.
Estas adquisiciones están sujetas a la vejez, y alguien que está atado a estas cosas,
encaprichado con ellas y totalmente entregado a ellas, es alguien que, siendo él mismo sujeto
a la vejez, busca aquello que también está sujeto a la vejez.

[8] "Y, ¿qué se puede decir, monjes, acerca de lo que está sujeto a la enfermedad? La mujer
y los hijos están sujetos a la enfermedad, esclavos y esclavas, las cabras y las ovejas, las aves
y los cerdos, los elefantes, el ganado, los caballos, las yeguas están sujetas a la enfermedad.
Estas adquisiciones están sujetas a la enfermedad, y alguien que está atado a estas cosas,
encaprichado con ellas y totalmente entregado a ellas, es alguien que, siendo él mismo sujeto
a la enfermedad, busca aquello que también está sujeto a la enfermedad.

[9] "Y, ¿qué se puede decir, monjes, acerca de lo que está sujeto a la muerte? La mujer y
los hijos están sujetos a la muerte, esclavos y esclavas, las cabras y las ovejas, las aves y los
cerdos, los elefantes, el ganado, los caballos, las yeguas están sujetas a la muerte. Estas
adquisiciones están sujetas a la muerte, y alguien que está atado a estas cosas, encaprichado
con ellas y totalmente entregado a ellas, es alguien que, siendo él mismo sujeto a la muerte,
busca aquello que también está sujeto a la muerte.

[10] "Y, ¿qué se puede decir, monjes, acerca de lo que está sujeto a la pena? La mujer y los
hijos están sujetos a la pena, esclavos y esclavas, las cabras y las ovejas, las aves y los cerdos,
los elefantes, el ganado, los caballos, las yeguas están sujetas a la pena. Estas adquisiciones
están sujetas a la pena, y alguien que está atado a estas cosas, encaprichado con ellas y
totalmente entregado a ellas, es alguien que, siendo él mismo sujeto a la pena, busca aquello
que también está sujeto a la pena.

[11] "Y, ¿qué se puede decir, monjes, acerca de lo que está sujeto a las impurezas? La mujer
y los hijos están sujetos a las impurezas, esclavos y esclavas, las cabras y las ovejas, las aves
y los cerdos, los elefantes, el ganado, los caballos, las yeguas, el oro y la plata están sujetos
a las impurezas. Estas adquisiciones están sujetas a las impurezas, y alguien que está atado a
estas cosas, encaprichado con ellas y totalmente entregado a ellas, es alguien que, siendo él
mismo sujeto a las impurezas, busca aquello que también está sujeto a las impurezas. Ésta
es, monjes, la búsqueda innoble.

[12] {275} Y, ¿qué es la noble búsqueda? He aquí, alguien, siendo él mismo sujeto al
nacimiento, habiendo comprendido el peligro de lo que está sujeto al nacimiento, busca lo
no nacido, la suprema seguridad de la esclavitud, el Nibbana; siendo él mismo sujeto a la
vejez, habiendo comprendido el peligro de lo que está sujeto a la vejez, busca la no vejez, la
suprema seguridad de la esclavitud, el Nibbana; siendo él mismo sujeto a la enfermedad,
habiendo comprendido el peligro de lo que está sujeto a la enfermedad, busca lo no enfermo,
la suprema seguridad de la esclavitud, el Nibbana; siendo él mismo sujeto a la muerte,
habiendo comprendido el peligro de lo que está sujeto a la muerte, busca lo inmortal, la
suprema seguridad de la esclavitud, el Nibbana; siendo él mismo sujeto a la pena, habiendo
comprendido el peligro de lo que está sujeto a la pena, busca el sosiego, la suprema seguridad
de la esclavitud, el Nibbana; siendo él mismo sujeto a las impurezas, habiendo comprendido
el peligro de lo que está sujeto a las impurezas, busca lo puro, la suprema seguridad de la
esclavitud, el Nibbana. Ésta es, monjes, la noble búsqueda.

[La búsqueda del Despertar]

[13] {276} "Monjes, antes de mi Despertar, cuando todavía era un Bodhisatta no iluminado,
yo también, siendo yo mismo sujeto al nacimiento, estaba buscando aquello que también
estaba sujeto al nacimiento; siendo yo mismo sujeto a la vejez, a la enfermedad, a la muerte,
a la pena y a las impurezas, estaba buscando aquello que también estaba sujeto a la vejez, a
la muerte, a la pena y a las impurezas. Entonces, consideré esto: '¿Por qué, siendo yo mismo
sujeto al nacimiento, estoy buscando aquello que también estaba sujeto al nacimiento? ¿Por
qué, siendo yo mismo sujeto a la vejez, a la enfermedad, a la muerte, a la pena y a las
impurezas, estoy buscando aquello que también estaba sujeto a la vejez, a la muerte, a la
pena y a las impurezas? ¿Qué tal, si, siendo yo mismo sujeto al nacimiento, habiendo
comprendido el peligro de lo que está sujeto al nacimiento, buscaré lo no nacido, la suprema
seguridad de la esclavitud, el Nibbana? ¿Qué tal si, siendo yo mismo sujeto a la vejez, a la
enfermedad, a la muerte, a la pena y a las impurezas, habiendo comprendido el peligro de lo
que está sujeto a la vejez, a la enfermedad, a la muerte, a la pena y las impurezas, buscaré lo
no nacido, la no vejez, lo no enfermo, lo inmortal, el sosiego, lo puro, la suprema seguridad
de la esclavitud, el Nibbana.'

[14] {277} "Más tarde, cuando era joven, un hombre de cabello negro dotado de la bendición
de la juventud, en la primicia de la vida, aunque mi madre y padre desearon otra cosa y
derramaron lágrimas, afeité mi cabeza y la barba, me puse el hábito amarillo y salí de la casa
para una vida sin hogar.
[15] "Habiendo renunciado, monjes, en busca de lo que es saludable, buscando el estado
supremo de la de paz sublime, fui junto a Alara Kalama y le dije: 'Amigo Kalama, quiero
llevar la vida santa en este Dhamma-y-Disciplina'. Alara Kalama contestó: 'El venerable
señor se puede quedar aquí. Este Dhamma es tal que un hombre sabio puede entrar pronto y
morar en él, alcanzando por sí mismo a través del conocimiento directo la doctrina de su
maestro'. Y así, pronto aprendí aquel Dhamma. En cuanto a la mera recitación y enumeración
[de los puntos] de su enseñanza, podía hablar con conocimiento y seguridad; entonces,
afirmé: 'conozco y veo' -y hubieron otros que hicieron lo mismo.

"Entonces, consideré esto: 'No es solamente a través de la mera fe Alara Kalama declara:
«Alcanzándolo por mí mismo con conocimiento directo, entro y permanezco en este
Dhamma». Ciertamente Alara Kalama permanece conociendo y viendo este Dhamma'.
Entonces fui junto a Alara Kalama y le pregunté: 'Amigo Kalama, ¿de qué forma declaras
que, alcanzándolo por ti mismo con el conocimiento directo entras y permaneces en este
Dhamma?' Y contestando, declaró la base de la nada.

"Entonces, consideré esto: 'No solamente Alara Kalama tiene la fe, la energía, la atención
consciente, la concentración y la sabiduría. Yo también tengo la fe, la energía, la atención
consciente, la concentración y la sabiduría. ¿Qué tal si me esfuerzo por alcanzar el Dhamma
en el que Alara Kalama declara que entra y permanece, alcanzándolo por sí mismo con el
conocimiento directo?'

"Y así, pronto entré y moré en ese Dhamma, alcanzándolo por mí mismo con el conocimiento
directo. Entonces fui junto a Alara Kalama y le pregunté: 'Amigo Kalama, ¿es de esta manera
que declaras que entras y moras en este Dhamma habiéndolo alcanzado por ti mismo con el
conocimiento directo?' - 'Esa es la manera, amigo' - 'Es de esta manera, amigo, que yo
también entro y resido en este Dhamma, habiéndolo alcanzado por mí mismo con el
conocimiento directo' - 'Es una ganancia para nosotros, amigo, una gran ganancia para
nosotros, que tengamos al semejante venerable señor como compañero en la vida santa. Así
que el Dhamma en el que yo declaro que entro y permanezco, habiéndolo alcanzado por mí
mismo, con el conocimiento directo, es el Dhamma en el que también tú entras y permaneces,
habiéndolo alcanzado por ti mismo con el conocimiento directo. Y el Dhamma en el que tú
entras y permaneces, habiéndolo alcanzado por ti mismo con el conocimiento directo, es el
mismo Dhamma en el que yo declaro que también entro y permanezco, habiéndolo alcanzado
por mí mismo, con el conocimiento directo. Así pues, conoces el Dhamma que yo conozco
y yo conozco el Dhamma que tú conoces. Así como soy yo, eres tú; y como eres tú, soy yo.
Ven, amigo, dirijamos esta comunidad juntos.'
"De esta manera, Alara Kalama, mi maestro, me puso a mí, su alumno, en el mismo nivel
que él y me otorgó el honor más elevado. Pero se me ocurrió esto: 'Este Dhamma no conduce
al desencanto, al desapasionamiento, al ces, a la paz, al conocimiento directo, al Despertar,
al Nibbana, sino solo a la reaparición en la base de la nada'. No estando satisfecho con ese
Dhamma, decepcionado, me marché.

[16] {278} "Siguiendo con la búsqueda de lo que es saludable, buscando el estado supremo
de la de paz sublime, fui junto a Uddaka Ramaputta y le dije: 'Amigo, quiero llevar la vida
santa en este Dhamma-y-Disciplina'. Uddaka Ramaputta contestó: 'El venerable señor se
puede quedar aquí. Este Dhamma es tal que un hombre sabio puede entrar pronto y
permanecer en él, alcanzando por sí mismo a través del conocimiento directo la doctrina de
su maestro'. Así que pronto aprendí ese Dhamma. En cuanto a la mera recitación y
enumeración [de los puntos] de su enseñanza, podía hablar con conocimiento y seguridad;
entonces, afirmé esto: 'conozco y veo' -y hubieron otros que hicieron lo mismo.

"Entonces, consideré esto: 'No fue solamente a través de la mera fe que Rama declaró:
«Alcanzado por mí mismo con conocimiento directo, entro y permanezco en este Dhamma».
Ciertamente Rama permanece conociendo y viendo este Dhamma'. Entonces fui junto a
Uddaka Ramaputta y le pregunté: 'Amigo, ¿de qué forma declaró Rama que, alcanzado por
él mismo con el conocimiento directo entró y permaneció en este Dhamma?' Y contestando,
Uddaka Ramaputta declaró la base de ni-percepción-ni-no-percepción. "Entonces, consideré
esto: 'No solamente Rama tenía la fe, la energía, la atención consciente, la concentración y
la sabiduría. Yo también tengo la fe, la energía, la atención consciente, la concentración y la
sabiduría. ¿Qué tal si me esfuerzo por alcanzar el Dhamma en el que Rama declaró que entró
y permaneció, alcanzándolo por sí mismo con el conocimiento directo?'

"Y así, pronto entré y permanecí en ese Dhamma, alcanzándolo por mí mismo con el
conocimiento directo. Entonces fui junto a Uddaka Ramaputta y le pregunté: 'Amigo, ¿es de
esta manera que Rama declaró que entró y permaneció en este Dhamma alcanzándolo por sí
mismo con el conocimiento directo?' - 'Esa es la manera, amigo' - 'Es de esta manera, amigo,
que yo también entro y permanezco en este Dhamma, alcanzándolo por mí mismo con el
conocimiento directo' - 'Es una ganancia para nosotros, amigo, una gran ganancia para
nosotros, que tengamos al semejante venerable señor como compañero en la vida santa. Así
que el Dhamma en el que Rama declaró que entró y permaneció, alcanzándolo por sí mismo
con el conocimiento directo, es el mismo Dhamma en el que tú entras y permaneces,
habiéndolo alcanzado por ti mismo con el conocimiento directo. Y el Dhamma en el que tú
entras y permaneces, alcanzándolo por ti mismo con el conocimiento directo, es el Dhamma
en el que Rama declaró que entró y permaneció alcanzándolo por mí mismo con el
conocimiento directo. Así pues, conoces el Dhamma que conoció Rama, y Rama conoció el
Dhamma que conoces tú. Como fue Rama, eres tú; como eres tú, fue Rama. Ven, amigo,
dirige ahora tú esta comunidad'.

"De esta manera, Uddaka Ramaputta, mi compañero en la vida santa, me puso en la posición
de un maestro y me concedió el honor más elevado. Pero se me ocurrió esto: 'Este Dhamma
no lleva al desencanto, al desapasionamiento, al cese, a la paz, al conocimiento directo, al
Despertar, al Nibbana, sino solo a la reaparición en la base de ni-percepción-nino percepción'.
No estando satisfecho con ese Dhamma, decepcionado, me marché.

[17] {279} "Siguiendo con la búsqueda, monjes, de lo que es saludable, buscando el estado
supremo de la de paz sublime, recorrí por partes el país de Magadha, hasta que finalmente
llegué a Uruvela en Senanigama. Allí vi un terreno agradable, un bosque encantador con un
río de aguas claras con agradables y suaves riberas, que estaba cerca de un pueblo donde
obtener la comida de las limosnas. Entonces, consideré esto: 'Este es un terreno agradable,
este es un bosque encantador con un río de aguas claras con agradables y suaves riberas, que
está cerca del pueblo donde obtener la comida de la limosnas. Esto será apropiado para que
el hijo del clan haga el esfuerzo, que intente esforzarse'. Y me senté allí pensando: 'Esto será
apropiado para hacer el esfuerzo'

[El Despertar]

[18] {280} "Entonces, monjes, siendo yo mismo sujeto al nacimiento, habiendo


comprendido el peligro de lo que está sujeto al nacimiento, buscando lo no nacido, la suprema
seguridad de la esclavitud, el Nibbana, alcancé lo no nacido, la suprema seguridad de la
esclavitud, el Nibbana; siendo yo mismo sujeto a la vejez, habiendo comprendido el peligro
de lo que está sujeto a la vejez, buscando la no vejez, la suprema seguridad de la esclavitud,
el Nibbana, alcancé la no vejez, la suprema seguridad de la esclavitud, el Nibbana; siendo yo
mismo sujeto a la enfermedad, habiendo comprendido el peligro de lo que está sujeto a la
enfermedad, buscando lo no enfermo, la suprema seguridad de la esclavitud, el Nibbana,
alcancé lo no enfermo, la suprema seguridad de la esclavitud, el Nibbana; siendo yo mismo
sujeto a la muerte, habiendo comprendido el peligro de lo que está sujeto a la muerte,
buscando lo inmortal, la suprema seguridad de la esclavitud, el Nibbana, alcancé lo inmortal,
la suprema seguridad de la esclavitud, el Nibbana; siendo yo mismo sujeto a la pena,
habiendo comprendido el peligro de lo que está sujeto a la pena, buscando el sosiego, la
suprema seguridad de la esclavitud, el Nibbana, alcancé el sosiego, la suprema seguridad de
la esclavitud, el Nibbana; siendo yo mismo sujeto a las impurezas, habiendo comprendido
el peligro de lo que está sujeto a las impurezas, buscando lo puro, la suprema seguridad de
la esclavitud, el Nibbana, alcancé lo puro, la suprema seguridad de la esclavitud, el Nibbana.
Y surgió en mí este conocimiento y visión: 'Mi liberación es inamovible; este es mi último
nacimiento; he aquí, no hay futura renovación de la existencia'.

[19] {281} "Entonces, consideré esto: 'Este Dhamma alcanzado por mí es profundo, difícil
de ver, difícil de entender, apacible, excelso, que trasciende la dialéctica, sutil, inteligible
para aprender. Sin embargo, esta generación se deleita en los placeres sensuales, se habitúa
deleitarse en los placeres sensuales y se regocija en los placeres sensuales. Y para una
generación que se deleita en los placeres sensuales, se habitúa deleitarse en los placeres
sensuales y se regocija en los placeres sensuales, sería un asunto muy difícil el de ver la
verdad, o sea, la condicionalidad y el surgimiento dependiente. También sería un asunto muy
difícil de ver, el de calmar las formaciones mentales, renunciar a todos los apegos, destruir
la avidez, alcanzar el desapasionamiento, el cese, el Nibbana. De modo que, si yo enseñara
este Dhamma a otros y ellos no me entendieran, esto podría llegar a ser una fatiga para mí,
podría llegar a ser una vejación para mí'. Y más adelante, surgieron de mí estos versos, nunca
antes escuchados en el pasado:

Esto lo he ganado mediante una gran fatiga.

¡Suficiente! ¿Por qué debería darlo a conocer?

Para la gente consumida por la codicia y el odio,

este Dhamma es incomprensible.

Yendo en contra de la corriente,

sutil, profundo, difícil de ver y delicado,

oculto detrás de la esclavitud de las pasiones:

[invisible para los que] están encapotados por las tinieblas de la ignorancia. [2]

{282} "Considerando esto, mi mente se inclinó más bien hacia la inactividad y no hacia la
enseñanza del Dhamma.

[20] "Entonces, al Brahma Sahampati, al haber conocido en su mente esta forma mía de
razonar, se le ocurrió este pensamiento: '¡Ay, el mundo está perdido! ¡Ay, el mundo está
destruido, en la medida que la mente del Tathagata, el Arahant plenamente despierto, se
inclina más hacia la inactividad antes que hacia la enseñanza del Dhamma.' Acto seguido,
tan rápido como un fuerte hombre estira su brazo recogido o tan rápido como lo recoge
estirado, el Brahma Sahampati, despareciendo del mundo del Brahma, se manifestó enfrente
de mí. Entonces, habiendo arreglado su vestimenta exterior sobre uno de sus hombros,
extendió sus manos en un reverencial saludo hacia mí, dijo: 'Venerable señor, que el
Bienaventurado enseñe el Dhamma, que Tathagata enseñe el Dhamma. He aquí, hay seres
con poco polvo en sus ojos, quienes, al no escuchar el Dhamma, están decayendo, pero si a
ellos se les enseñara el Dhamma, acrecentarían su imperfecto conocimiento. Así habló el
Brahma Sahampati, y, habiendo dicho esto, agregó luego estos versos:

He aquí, ha aparecido en Magadha antes de ti,

un Dhamma no claro, divisado por las mentes impuras.

Abre esta puerta a lo inmortal y hazles escuchar

el Dhamma que es sin mancha y conduce al Despertar.

Como un hombre que estuviera parado en la cima de una montaña,

Pudiendo observar la gente abajo aunque estuviera muy lejos,

asimismo hazlo tú, ¡oh, poseedor de la preciosa sabiduría!,

¡Oh, tú que ves todo desde la terraza más alta de la verdad!

Mira hacia abajo, desde la liberación del dolor, hacia la gente

Hundida en el dolor, oprimida por el nacimiento y la vejez.

¡Levántate, héroe! ¡Conquistador de la batalla!

Tú, que eres liberado sin resto alguno, el Hombre de la Caravana,

que camina delante del mundo;


Qué el Bienaventurado Enseñe el Dhamma.

[21] {283} "Entonces, habiendo entendido la súplica del Brahma, a causa de la compasión
hacia los seres, inspeccioné el mundo con la vista de un Despierto. Y cuando inspeccioné el
mundo con la vista de un Despierto, he visto a los seres con poco polvo en sus ojos, he visto
a los seres con mucho polvo en sus ojos, seres con sus facultades perspicaces y seres con
facultades adormecidas, seres con buena predisposición y seres con mala predisposición,
seres dóciles y seres indómitos, pocos, que vieran el temor en las faltas y en los mundos
venideros. Al igual que en un estanque de agua de lotos azules, o en un estanque de agua de
lotos rojos, o en un estanque de agua de lotos blancos, pocos son los lotos azules, rojos o
blancos que, al nacer en el agua y al crecer en el agua, no emergen del agua y, sin embargo
florecen mientras estén completamente sumergidos; y pocos son también los lotos azules,
rojos o blancos que, al nacer en el agua y al crecer en el agua, alcanzan la superficie del agua;
y pocos son también los lotos azules, rojos o blancos que, al nacer en el agua y al crecer en
el agua, se levantan emergiendo del agua, purificados por el agua. De la misma manera,
cuando inspeccioné el mundo con la vista de un Despierto, he visto a los seres con poco
polvo en sus ojos, he visto a los seres con mucho polvo en sus ojos, seres con sus facultades
perspicaces y seres con facultades adormecidas, seres con buena predisposición y seres con
mala predisposición, seres dóciles y seres indómitos, pocos, que vieran el temor en las faltas
y en los mundos venideros. Y viendo al Brahma Sahampati, me dirigí a él con este verso:

Abiertas están, para aquellos que escuchen, las puertas de lo inmortal;

hagámosles renunciar a su fe.

Pensando en la inútil fatiga, no he predicado, Brahma,

Este sublime y excelso Dhamma a los hombres.

"Entonces, el Brahma Sahampati pensó: 'La oportunidad ha sido dada por mí para que el
Bienaventurado enseñe el Dhamma.' Y, saludándome, desapareció de ahí, manteniéndome a
mí siempre a su lado derecho.

[22] {284} "Entonces, consideré esto: '¿A quién podría enseñar el Dhamma primero? ¿Quién
podrá entender este Dhamma rápidamente?' Entonces, se me ocurrió lo siguiente:
"Ciertamente, este Alara Kalama es instruido, experimentado, sabio y, por mucho tiempo,
ha tenido poco polvo en sus ojos. ¿Qué tal, si le enseño este Dhamma primero a Alara
Kalama? Él lo entenderá rápidamente'. Pero entonces, unos devas me anunciaron esto:
'Venerable señor, Alara Kalama ha muerto hace siete días'. Y así, surgió el conocimiento en
mí de que Alara Kalama había muerto hace siete días. Y pené esto: 'Alara Kalama era muy
inteligente. Si él escuchara este Dhamma, lo comprendería rápidamente.'

[23] "Entonces, consideré esto: '¿A quién podría enseñar el Dhamma primero? ¿Quién podrá
entender este Dhamma rápidamente?" Entonces, se me ocurrió lo siguiente: 'Ciertamente,
este Uddaka Ramaputta es instruido, experimentado, sabio y, por mucho tiempo, ha tenido
poco polvo en sus ojos. ¿Qué tal, si le enseño este Dhamma primero a Uddaka Ramaputta?
Él lo entenderá rápidamente'. Pero entonces, unos devas me anunciaron esto: "Venerable
señor, Uddaka Ramaputta ha muerto anoche'. Y así, surgió el conocimiento en mí de que
Uddaka Ramaputta había muerto anoche. Y pensé esto: 'Uddaka Ramaputta era muy
inteligente. Si él escuchara este Dhamma, lo comprendería rápidamente.'

[24] "Entonces, consideré esto: '¿A quién podría enseñar el Dhamma primero? ¿Quién podrá
entender este Dhamma rápidamente?' Entonces, se me ocurrió lo siguiente: 'Para aquel grupo
de los cinco monjes que me han esperado cuando resolví a esforzarme, esto sería muy útil.
¿Qué tal, si les enseño este Dhamma primero al grupo de los cinco monjes?' Acto seguido,
se me ocurrió esto: 'Pero, ¿dónde estará morando este grupo de los cinco monjes ahora?'
Entonces, con el ojo divino, purificado y que sobrepasa el humano, visualicé el grupo de los
cinco monjes morando cerca de Benares en Isipatana en el Parque de los Venados.

[Enseñanza del Dhamma]

[25] {285} "Entonces, monjes, cuando consideré que mi estadía en Uruvela era suficiente,
partí de ahí y me dirigí hacia Benares. En esta ocasión, mientras caminaba a lo largo de la
ruta que va desde Gaya al Árbol de la Iluminación, me vio el Ajivaka Upaka en el camino y
viéndome, me habló de esta manera: 'Amigo, tus órganos sensoriales son realmente puros,
tu tez, brillante y muy clara. ¿Quién es tu maestro? ¿De quién es el Dhamma que profesas?'
Entonces, respondí a Ajivaka Upaka en verso:

Victorioso sobre todo, conocedor de todo, soy yo,

entre todas las cosas incorruptibles,

dejando todo, libre de la muerte y la avidez,

conociendo por mí mismo, ¿a quién podría yo seguir?


Para mí, no hay maestro,

uno como yo, no existe,

en este mundo con sus devas,

no hay nadie igual a mí.

Desde que soy perfecto en el mundo,

el maestro supremo soy yo.

Yo sólo soy el Despierto a todo,

llegué a estar sereno, a alcanzar el Nibbana.

Para poner en movimiento la rueda del Dhamma,

voy a la ciudad de Kasi,

tocando el tambor de la inmortalidad,

en el mundo que llegó a enceguecer.

[Upaka dijo:] "De acuerdo a lo que reclamas, amigo, deberías ser el victorioso de lo
interminable."

Como yo, son los victoriosos, realmente,

quien ha conseguido destruir las impurezas;

desvanecidas fueron por mí, todas las cosas perjudiciales,

así que, soy yo, Upaka, el victorioso.


"Cuando esto fue dicho, Upaka, el asceta desnudo, habiendo dicho: 'Esto puede ser, amigo',
sacudió la cabeza y se fue por otro camino.

[26] {286} "Entonces, monjes, recorriendo a los estados, finalmente llegué Benares, al
Parque de los Venados en Isipatana, donde estaba el grupo de los cinco monjes y me acerqué
a ellos. En este momento, el grupo de los cinco monjes me vio venir desde cierta distancia.
Y viéndome, se pusieron de acuerdo entre sí de esta manera: 'Amigos, este asceta Gotama
está viniendo; él vive ahora en abundancia, está vacilando en su esfuerzo y ha vuelto a la
vida abundante. Él no debería ser saludado, ni deberíamos ponernos de pie, ni debería ser
recibido su cuenco ni su hábito amarillo; sin embargo, el asiento pude ser puesto y él puede
sentarse, si lo desea. Sin embargo, mientras me acercaba, aquellos monjes se encontraron
con que no fueron capaces de adherirse a su propio acuerdo previo; pues uno salió a
recibirme, otro tomó mi cuenco y el hábito exterior, otro me preparó el asiento y otro trajo el
agua para lavar mis pies. Sin embargo, se dirigían a mí por mi nombre, usando el epíteto
'amigo'.

[27] "Por eso les dije: 'No os dirijáis, monjes, al Tathagata por su nombre, usando el epíteto
«amigo». El Tathagata, monjes, es un Arahant, perfectamente despierto. Prestad atención,
monjes, lo inmortal ha de ser hallado. Voy a instruiros y voy a enseñaros el Dhamma.
Haciendo recorrido acorde a lo que debe ser disfrutado, realizado pronto aquí y ahora por
vuestro propio conocimiento: la meta suprema de la vida santa por la cual, el joven hombre
hogareño correctamente renuncia a la vida hogareña, para vivir el estilo de vida sin hogar'.

"Cuando esto fue dicho, el grupo de los cinco monjes se dirigió a mí con estas palabras: 'Pero
tú, amigo Gotama, no alcanzaste el estado del hombre superior, la eminencia de la visión del
verdadero noble conocimiento, la perfección de la conducta mediante su curso de la práctica
de austeridades. ¿Cómo puedes tú llegar al estado del hombre superior, a la eminencia de la
visión del verdadero noble conocimiento, mientras vivas en abundancia, estés vacilando en
tu esfuerzo y hayas vuelto a la vida abundante?' Cuando esto fue dicho, me dirigí al grupo
de los cinco monjes con estas palabras: 'El Tathagata, monjes, no vive en abundancia, no está
vacilando en su esfuerzo ni ha vuelto a la vida abundante. El Tathagata, monjes, es un
Arahant perfectamente iluminado. Prestad atención, monjes, lo inmortal ha de ser hallado.
Voy a instruiros y voy a enseñaros el Dhamma. Haciendo recorrido acorde a lo que debe ser
disfrutado, realizado pronto aquí y ahora por vuestro propio conocimiento: la meta suprema
de la vida santa por la cual, el joven hombre hogareño correctamente abandona la forma de
vida hogareña, para vivir el estilo de vida sin hogar'.
"Y por segunda vez, el grupo de los cinco monjes se dirigió a mí con estas palabras: 'Pero tú,
amigo Gotama, no alcanzaste el estado del hombre superior...' y por segunda vez me dirigí
al grupo de los cinco monjes con estas palabras: 'El Tathagata, monjes, no vive en
abundancia...' Y por tercera vez, el grupo de los cinco monjes se dirigió a mí con estas
palabras: 'Pero tú, amigo Gotama, no alcanzaste el estado del hombre superior... ¿Cómo
puedes tú llegar al estado del hombre superior, a la eminencia de la visión del verdadero
noble conocimiento, mientras vivas en abundancia, estés vacilando en tu esfuerzo y hayas
vuelto a la vida abundante?'

[28] "Cuando esto fue dicho, les pregunté a los cinco monjes: '¿Aceptáis, monjes, que nunca
antes he hablado a vosotros de esta manera?' - 'No lo hiciste, venerable señor'. - 'El Tathagata,
monjes, es un Arahant plenamente iluminado. Prestad atención, monjes, lo inmortal ha de
ser hallado. Voy a instruiros y voy a enseñaros el Dhamma. Haciendo recorrido acorde a lo
que debe ser disfrutado, realizado pronto aquí y ahora por vuestro propio conocimiento: la
meta suprema de la vida santa por la cual, el joven hombre hogareño correctamente abandona
la forma de vida hogareña, para vivir el estilo de vida sin hogar.

[29] "Entonces, supe convencer al grupo de los cinco monjes. Después de esto sucedió que,
algunas veces instruía a dos monjes, mientras los otros tres salían en busca de la comida de
las limosnas y el sexto de nosotros se alimentaba de lo que aquellos tres monjes traían de las
limosnas. Otras veces instruía a tres monjes, mientras los otros dos salían en busca de la
comida de las limosnas y el sexto de nosotros se alimentaba de lo que aquellos dos monjes
traían de las limosnas.

[30] "Entonces, aquellos monjes del grupo de los cinco, enseñados así por mí e instruidos,
siendo ellos mismos sujetos al nacimiento, habiendo comprendido el peligro de lo que está
sujeto al nacimiento, buscando lo no nacido, la suprema seguridad de la esclavitud, el
Nibbana, alcanzaron lo no nacido, la suprema seguridad de la esclavitud, el Nibbana; siendo
ellos mismos sujetos a la vejez, habiendo comprendido el peligro de lo que está sujeto a la
vejez, buscando la no vejez, la suprema seguridad de la esclavitud, el Nibbana, alcanzaron
la no vejez, la suprema seguridad de la esclavitud, el Nibbana; siendo ellos mismos sujetos
a la enfermedad, habiendo comprendido el peligro de lo que está sujeto a la enfermedad,
buscando lo no enfermo, la suprema seguridad de la esclavitud, el Nibbana, alcanzaron lo no
enfermo, la suprema seguridad de la esclavitud, el Nibbana; siendo ellos mismos sujetos a
la muerte, habiendo comprendido el peligro de lo que está sujeto a la muerte, buscando lo
inmortal, la suprema seguridad de la esclavitud, el Nibbana, alcanzaron lo inmortal, la
suprema seguridad de la esclavitud, el Nibbana; siendo ellos mismos sujetos a la pena,
habiendo comprendido el peligro de lo que está sujeto a la pena, buscando el sosiego, la
suprema seguridad de la esclavitud, el Nibbana, alcanzaron el sosiego, la suprema seguridad
de la esclavitud, el Nibbana; siendo ellos mismos sujetos a las impurezas, habiendo
comprendido el peligro de lo que está sujeto a las impurezas, buscando lo puro, la suprema
seguridad de la esclavitud, el Nibbana, alcanzaron lo puro, la suprema seguridad de la
esclavitud, el Nibbana. Y surgió en ellos este conocimiento y visión: 'Nuestra liberación es
inamovible; este es nuestro último nacimiento; he aquí, no hay futura renovación de la
existencia'.

[Los placeres sensuales]

[31] {287} "Monjes, he aquí estas cinco cuerdas de los placeres sensuales [3]. ¿Cuáles son
estas cinco? Las formas cognoscibles a través del ojo: codiciables, deseables, agradables y
atractivas. Conectadas con los deseos sensuales y tentadoras. Los sonidos cognoscibles a
través del oído... Los olores cognoscibles a través de la nariz... Los sabores cognoscibles a
través de la lengua... Las sensaciones tangibles cognoscibles a través del cuerpo: codiciables,
deseables , agradables y atractivas. Conectadas con los deseos sensuales y tentadoras. Éstas
son, monjes, las cinco cuerdas de los placeres sensuales.

[32] "De los ascetas y brahmanes que están atados a esas cinco cuerdas de los placeres
sensuales, encaprichados con ellas y totalmente entregados a ellas, que no ven el peligro de
ellas ni comprenden el escape de ellas, puede comprenderse esto: 'ellos van a encontrar la
calamidad, van a encontrar el desastre, el Malvado puede hacer con ellos lo que quiera'.
Imaginad a un venado en el bosque atrapado por un montón de trampas, de tal manera que
se pueda comprender de él: 'él va a encontrar la calamidad, va a encontrar el desastre, el
cazador puede hacer con él lo que quiera y cuando llegue el cazador, ya no podrá ir adonde
desea'. De la misma manera, de los ascetas y brahmanes que están atados a esas cinco cuerdas
de los placeres sensuales, encaprichados con ellas y totalmente entregados a ellas, que no
ven el peligro de ellas ni comprenden el escape de ellas, puede comprenderse esto: 'ellos van
a encontrar la calamidad, van a encontrar el desastre, el Malvado puede hacer con ellos lo
que quiera'.

[33] "Pero de los otros ascetas y brahmanes que no están atados a esas cinco cuerdas de los
placeres sensuales, tampoco están encaprichados con ellas ni entregados totalmente a ellas,
que ven el peligro de ellas y comprenden el escape de ellas, puede comprenderse esto: 'ellos
no van a encontrar la calamidad, no van a encontrar el desastre y el Malvado no puede hacer
con ellos lo que quiera'. Imaginad a un venado en el bosque que no está atrapado por un
montón de trampas, de tal manera que se pueda comprender de él: 'él no va a encontrar la
calamidad, no va a encontrar el desastre, el cazador no podrá hacer con él lo que quiera y
cuando llegue el cazador, él podrá ir adonde desea'. De la misma manera, de los ascetas y
brahmanes que no están atados a esas cinco cuerdas de los placeres sensuales, tampoco están
encaprichados con ellas ni entregados totalmente a ellas, que ven el peligro de ellas y
comprenden el escape de ellas, puede comprenderse esto: 'ellos no van a encontrar la
calamidad, no van a encontrar el desastre y el Malvado no puede hacer con ellos lo que
quiera'.

[34] "Monjes, imaginad a un venado del bosque que recorre el bosque: camina
confiadamente, se para confiadamente, se sienta confiadamente y se recuesta confiadamente.
Y, ¿por qué así? Porque está fuera del alcance del cazador. Así también, totalmente apartado
de los placeres sensuales, apartado de los perjudiciales estados mentales, el monje entra y
permanece en el primer jhana, el cual está acompañado por el pensamiento aplicado y
sostenido, el arrobamiento y felicidad, nacidos de la reclusión. De este monje se dice que ha
enceguecido al Mara, que se ha hecho invisible para el Malvado y que ha privado los ojos
del Mara de su oportunidad.

[35] "Además, al calmar el pensamiento aplicado y sostenido, entra y permanece en el


segundo jhana, que se caracteriza por la tranquilidad interior y unificación de la mente; libre
del pensamiento aplicado y sostenido, lleno de arrobamiento y felicidad nacidos de la
concentración. De este monje se dice que ha enceguecido al Mara, que se ha hecho invisible
para el Malvado y que ha privado los ojos del Mara de su oportunidad.

[36] "Además, con la desaparición del arrobamiento, permanece ecuánime, con la atención
consciente y clara comprensión, experimentando la felicidad en su cuerpo; entra y permanece
en el tercer jhana, del cual los nobles declararon: 'es ecuánime, atentamente consciente; es
alguien que encontró una morada placentera.' De este monje se dice que ha enceguecido al
Mara, que se ha hecho invisible para el Malvado y que ha privado los ojos del Mara de su
oportunidad.

[37] "Además, con el abandono del placer y la pena, con la previa desaparición de la alegría
y el displacer, entra y permanece en el cuarto jhana, que no es doloroso ni placentero y se
caracteriza por la purificación de la atención consciente a través de la ecuanimidad. De este
monje se dice que ha enceguecido al Mara, que se ha hecho invisible para el Malvado y que
ha privado los ojos del Mara de su oportunidad.

[38] "Además, trascendiendo completamente las percepciones de las formas sensoriales, con
la desaparición de la percepción de la resistencia, no atendiendo a las percepciones de la
diversidad, pensando 'el espacio infinito', entra y permanece en la esfera del espacio infinito.
De este monje se dice que ha enceguecido al Mara, que se ha hecho invisible para el Malvado
y que ha privado los ojos del Mara de su oportunidad.
[39] "Además, trascendiendo completamente la esfera del espacio infinito, pensando 'la
conciencia infinita', entra y permanece en la esfera de la conciencia infinita. De este monje
se dice que ha enceguecido al Mara, que se ha hecho invisible para el Malvado y que ha
privado los ojos del Mara de su oportunidad.

[40] "Además, trascendiendo completamente la esfera de la conciencia infinita, pensando 'no


hay nada', entra y permanece en la esfera de la nada. De este monje se dice que ha
enceguecido al Mara, que se ha hecho invisible para el Malvado y que ha privado los ojos
del Mara de su oportunidad.

[41] "Además, trascendiendo completamente la esfera de la nada, entra y permanece en la


esfera de la ni-percepción-ni-la-no-percepción. De este monje se dice que ha enceguecido al
Mara, que se ha hecho invisible para el Malvado y que ha privado los ojos del Mara de su
oportunidad.

[42] "Además, trascendiendo completamente la esfera de la ni-percepción-ni-lanopercepción


el monje entra y permanece en el cese de la percepción y la sensación. Y sus contaminaciones
están destruidas gracias a su forma de ver con sabiduría. De este monje se dice que ha
enceguecido al Mara, que se ha hecho invisible para el Malvado, que ha privado los ojos del
Mara de su oportunidad y que ha trascendido las ataduras del mundo. Él camina
confiadamente, se para confiadamente, se sienta confiadamente y se recuesta confiadamente.
Y, ¿por qué así? Porque está fuera del alcance del Malvado.

Esto es lo que dijo el Bienaventurado y los monjes fueron satisfechos y se deleitaron en las
palabras del Bienaventurado.

“Monjes, antes de mi Iluminación, cuando todavía era un bodhisatta, alguien no plenamente


iluminado, pensé lo siguiente: ‘Ahora, ¿qué es la sensación? ¿Cuál es el origen de la
sensación? ¿Cuál es el cese de la sensación? ¿Cuál es el sendero que conduce al cese de la
sensación? ¿Cuál es la gratificación en la sensación? ¿Cuál es el peligro? ¿Cuál es el
escape?’. “Entonces, monjes, se me ocurrió esto: ‘He aquí hay estas tres sensaciones:
sensación placentera, sensación dolorosa y sensación ni-dolorosa-ni-placentera. Con el
surgimiento del contacto hay surgimiento de la sensación. Con el cese del contacto hay cese
de la sensación. Este Óctuple Noble Sendero es el camino que conduce al cese de la
sensación, es decir, el recto punto de vista, la recta intención, la recta forma de hablar, la
recta acción, el recto medio de vida, el recto esfuerzo, la recta atención consciente y la recta
concentración. El placer y la alegría que surgen en dependencia de la sensación: esta es la
gratificación en la sensación. Como aquella sensación es transitoria, insatisfactoria y está
sujeta a cambio: este es el peligro en la sensación. Y la remoción y el abandono del deseo y
la codicia por la sensación: este es el escape de la sensación’”. [6.1.] {216} En esta ocasión,
el Bienaventurado se dirigió al Venerable Ananda con estas palabras: "Puede ser, Ananda,
que te asalte este pensamiento: 'Se ha terminado la enseñanza del Maestro. ¡No tenemos más
al Maestro entre nosotros!' Pero, no es así, Ananda, cómo debería considerarse esto. Pues
aquello que yo he proclamado y he dado a conocer como el Dhamma-y-Disciplina, esto será
tu Maestro cuando no esté aquí.
[6.2.] "Y aunque ahora, Ananda, los monjes se dirigen uno al otro con el nombre de "amigo",
esto no seguirá así después de que no esté aquí, Ananda. El monje mayor, deberá dirigirse al
joven subalterno por su nombre; por su nombre de pila o usando el término 'amigo'. Pero los
monjes jóvenes, deben dirigirse a sus mayores como 'venerable señor' o 'su reverencia'.
[6.3.] "Si así lo deseáis, Ananda, el Sangha puede abolir las reglas menores y de menor
importancia, cuando no esté aquí.
[6.4.] "Ananda, cuando no esté aquí, sobre el monje Channa [1], debe imponerse la alta
penalidad".
"¿Pero, cuál es, señor, la alta penalidad?"
"El monje Channa, Ananda, puede decir lo que necesita o lo que desa pero los monjes no
deben conversar con él, ni exhortarle ni amonestarle".
[6.5.] {217} Entonces, el Bienaventurado se dirigió a los monjes con estas palabras: "Puede
ser, monjes, que alguno de vosotros tuviera alguna duda o incertidumbre acerca del Buda, el
Dhamma o el Sangha. Quizá, acerca del sendero o de la práctica. ¡Preguntad, entonces,
monjes! No sea, que alguno de vosotros tenga después remordimientos, pensando: 'El
Maestro estaba delante de nosotros, cara a cara, y nosotros fallamos en preguntarle'".
Pero cuando esto fue dicho, los monjes permanecieron en silencio. Y por segunda y por
tercera vez, el Bienaventurado dijo a los monjes: "Puede ser, monjes, que alguno de vosotros
tenga alguna duda o incertidumbre acerca del Buda, el Dhamma o el Sangha. Quizá, acerca
del sendero o de la práctica. ¡Preguntad, entonces, monjes! No sea, que alguno tenga después
remordimientos, pensando: 'El Maestro estaba delante de nosotros, cara a cara y nosotros
fallamos en preguntarle'".
Sin embargo, por segunda y por tercera vez, los monjes permanecieron en silencio. Entonces,
el Bienaventurado dijo: "Puede ser, monjes, que es por causa del respeto a su Maestro que
no hacéis preguntas. ¡Entonces, que sea como si los amigos hablasen con el amigo!" Pero
aún así, los monjes permanecieron en silencio.
[6.6.] Y fue el Venerable Ananda quien habló en esta ocasión, diciendo: "¡Esto es
maravilloso, Venerable Señor, es asombroso! ¡La fe que tiene esta comunidad de los monjes!
Yo percibo, Venerable Señor, que aquí no hay ni un solo monje que tenga dudas o
incertidumbres acerca del Buda, el Dhamma y el Sangha. Tampoco, acerca del sendero o de
la práctica".
"Por la fe, Ananda, dices esto. Pero el Tathagata, Ananda, sabe con certeza que entre estos
monjes realmente no hay ni uno solo que tenga dudas o incertidumbres acerca del Buda, el
Dhamma o el Sangha. Tampoco, acerca del Sendero o de la práctica. Aún el más pequeño
entre estos quinientos monjes, Ananda, es el-que-entra-en-la-corriente, que escapó de la
ruina, está seguro y saltó hacia el Despertar".
[6.7.] {218} Y el Bienaventurado se dirigió a los monjes, diciendo: "Ahora, monjes, os
declaro esto: todas las cosas condicionadas, están destinadas a desaparecer. ¡Sed vigilantes
y esforzaos para completar la tarea!"
Y estas fueron las últimas palabras del Tathagata.
36. Parinibbutakatha - Historia del Parinibbana [Leer en pali]
[6.8.] {219} Acto seguido, el Bienaventurado entró en el primer jhana. Dejando el primer
jhana, entró en el segundo jhana. Dejando el segundo jhana, entró en el tercer jhana. Dejando
el tercer jhana, entró en el cuarto jhana. Dejando el cuatro jhana, entró en la esfera del espacio
infinito. Dejando la esfera del espacio infinito, entró en la esfera de la conciencia infinita.
Dejando la esfera de la conciencia infinita, entró en la esfera de la nada. Dejando la esfera
de la nada, entró en la esfera de la ni-percepción-ni-la-nopercepción. Dejando la esfera de la
ni-percepción-ni-la-no-percepción, alcanzó el cese de la percepción y de las sensaciones.
Y el Venerable Ananda dijo al Venerable Anuruddha: "Venerable Anuruddha, el
Bienaventurado ha fallecido".
"No, amigo Ananda, el Bienaventurado no falleció: él entró en el estado del cese de la
percepción y las sensaciones".
[6.9.] Después, el Bienaventurado dejó el cese de la percepción y de las sensaciones y entró
en la esfera de la ni-percepción-ni-la-no-percepción. Dejando la esfera de la nipercepciónni-
la-no-percepción, entró en la esfera de la nada. Dejando la esfera de la nada, entró en la esfera
de la conciencia infinita. Dejando la esfera de la conciencia infinita, entró en la esfera del
espacio infinito. Dejando la esfera del espacio infinito, entró en el cuatro jhana. Dejando el
cuarto jhana, entró en el tercer jhana. Dejando el tercer jhana, entró en el segundo jhana.
Dejando el segundo jhana, entró en el primer jhana. Dejando el primer jhana, entró en el
segundo jhana. Dejando el segundo jhana, entró en el tercer jhana. Dejando el tercer jhana,
entró en el cuarto jhana. Dejando el cuatro jhana, el Bienaventurado inmediatamente falleció.
[6.10.] {220} Y cuando el Bienaventurado falleció, simultáneamente con su Parinibbana, se
escuchó un tremendo terremoto, terrible y temible, acompañado por truenos que rodaban
desde los cielos.
También cuando el Bienaventurado falleció, simultáneamente con su Parinibbana, el Brahma
Sahampati pronunció este verso:
Todos tienen que partir - todos los seres con vida
Tienen que quitarse estas formas compuestas. Sin dudas, inclusive él,
El Maestro inigualable, el incomparable ser,
Poderoso en sabiduría, el Despierto, ha fallecido.
{221} También cuando el Bienaventurado falleció, simultáneamente con su Parinibbana, el
Sakka, el rey de las divinidades, pronunció este verso:
Efímeras son todas las cosas condicionadas,
Sujetas a surgir y perecer,
Habiendo llegado a esta existencia, tienen que desaparecer, Buena es
la paz, cuando hay cese.
{222} También cuando el Bienaventurado falleció, simultáneamente con su Parinibbana, el
Venerable Anuruddha pronunció este verso:
Sin la respiración, pero con el corazón inquebrantable,
Libre de anhelos y en paz - así el sabio
Llega a su fin. Inconmovible por las penas mortales
Su mente, como la flama se ha extinguido y ha encontrado la libertad.
{223} También cuando el Bienaventurado falleció, simultáneamente con su Parinibbana, el
Venerable Ananda pronunció este verso:
Fue un terrible terremoto, un temible momento, cuando él, El Plenamente
Realizado, el Buda, ha fallecido.
{224} En esta ocasión, cuando el Bienaventurado falleció, algunos monjes que aún no
estaban completamente liberados de las pasiones, levantaron sus manos en alto y lloraron;
otros, echándose a sí mismo al suelo, se arrastraban de un lado a otro, lamentándose de esta
manera: "¡Demasiado pronto, el Bienaventurado entra en su Parinibbana! ¡Demasiado
pronto, el Bienhechor entra en su Parinibbana! ¡Demasiado pronto el Ojo del Mundo ha
desparecido!" Pero los monjes que ya eran libres de sus pasiones, conscientemente atentos y
con clara compresión, reflexionaban de esta forma: "Todas las cosas condicionadas son
impermanentes. ¿Cómo iba a poder suceder de otra manera?"
[6.11.] {225} Entonces, el Venerable Anuruddha se dirigió a los monjes con estas palabras:
"Es suficiente ya, amigos. ¡No sufráis más ni os lamentéis! ¿Acaso no declaró el
Bienaventurado que todo lo querido y bien amado está destinado a sufrir cambios, separación
y ruptura? De todo lo nacido, de lo que llegó a existir, de lo compuesto y sujeto a decadencia
¿cómo uno podrá decir: '¡que esto no se desintegre!'? Las deidades, amigos, se sienten
ofendidos".
"Pero, Venerable Señor, ¿qué clase de deidades el venerable Anuruddha percibe?"
"Aquí hay deidades, amigo Ananda, en el espacio y en la tierra, de una mentalidad terrenal,
quienes lloran y rasgan sus cabellos, quienes levantan sus brazos y lloran; se arrojan sobre el
suelo y, arrastrándose de un lado a otro, se lamentan: '¡Demasiado pronto el Bienaventurado
pasa a su Parinibbana! ¡Demasiado pronto el Bienhechor pasa a su Parinibbana! ¡Demasiado
pronto el Ojo del Mundo desaparece!' Pero aquellas de las deidades que están liberadas de
las pasiones, conscientemente atentas y con clara comprensión, reflexionan de este modo:
'Impermanentes son todas las cosas compuestas. ¿Qué más se puede esperar?'"
[6.12.] {226} Entonces, el Venerable Anuruddha y el Venerable Ananda pasaron el resto de
la noche conversando sobre el Dhamma. Después, el Venerable Anuruddha dijo al Venerable
Ananda: "Ve, amigo Ananda, a Kusinara y anuncia a los mallas: 'vasetthas, El
Bienaventurado falleció. Es hora que hagáis lo que os parezca saludable".
"Así sea, Venerable Señor", respondió el Venerable Ananda y, vistiéndose muy de mañana,
tomando su cuenco y el hábito externo, se fue acompañado a Kusinara.
En esta ocasión, los mallas estaban reunidos en el salón del concilio donde trataban sus
asuntos públicos. Y el Venerable Ananda se acercó a ellos y les anunció lo siguiente:
"Vasetthas, El Bienaventurado, ha fallecido. Es hora que hagáis lo que os parezca
conveniente". Y cuando escucharon las palabras pronunciadas por el Venerable Ananda, los
mallas, sus hijos, sus mujeres y las mujeres de sus hijos, fueron intensamente entristecidos,
afligidos en sus corazones y profundamente apenados. Algunos de ellos, con su cabello
despeinado y con las manos alzadas, lloraban desesperados. Otros, arrojándose al suelo y
arrojándose de un lugar a otro, se lamentaban diciendo: "¡Demasiado pronto pasa el
Bienaventurado a su Parinibbana! ¡Demasiado pronto el Bienhechor pasa a su Parinibbana!
¡Demasiado pronto se apaga la vista del Ojo del Mundo!"
37. Buddhasarirapuja - Veneración de los restos del cuerpo del Buda [Leer en pali]
[6.13.] {227} En esta ocasión, los mallas de Kusinara ordenaron a sus hombres: "reunid ahora
todos los perfumes, todas las guirnaldas de flores, los músicos y a todos los que están en
Kusinara". Y los mallas, provistos de los perfumes, las guirnaldas de flores y quinientas
piezas de vestimenta, fueron a su arboleda, al parque de recreación, donde se acercaron al
cuerpo del Bienaventurado. Y habiéndose acercado, le rindieron homenaje con danzas,
canciones, guirnaldas de flores y perfumes y, erigiendo doseles y pabellones, pasaron allí el
día mostrando respeto, honra y veneración al cuerpo del Bienaventurado. Después, surgió
entre ellos este pensamiento: "Hoy sería demasiado temprano incinerar el cuerpo del
Bienaventurado: hagámoslo mañana".
Igualmente, el segundo día, el tercero, cuarto, quinto y sexto, rindieron homenaje al cuerpo
del Bienaventurado con danzas, canciones, guirnaldas de flores y perfumes y, erigiendo
doseles y pabellones pasaron allí el día mostrando respeto, honra y veneración al cuerpo del
Bienaventurado.
[6.14.] Pero el séptimo día pensaron lo siguiente: "Hemos rendido homenaje al cuerpo del
Bienaventurado con danzas, canciones, guirnaldas de flores y perfumes y hemos mostrando
respeto, honra y veneración al cuerpo del Bienaventurado. Vamos a llevarlo ahora hacia el
sur, a la parte meridional de las afueras de la ciudad y vamos a incinerar el cuerpo del
Bienaventurado hacia la parte sur de la ciudad".
{228} Y ocho de los mallas de las familias más importantes, lavaron sus cabezas y vistieron
nuevas ropas, pensando: "Vamos a levantar ahora el cuerpo del Bienaventurado". Acto
seguido, trataron de hacerlo, pero no pudieron. Entonces lo mallas hablaron al Venerable
Anuruddha, diciendo: "¿Cuál es la causa, venerable Anuruddha, cuál es la razón, por la cual
estos ocho mallas de las familias más importantes, al lavar sus cabezas, vestir las nuevas
ropas y pensar: 'Vamos a levantar ahora el cuerpo del Bienaventurado', no pueden hacerlo?"
"Vosotros, vasetthas, tenéis un propósito y las deidades, otro"
[6.15.] "¿Y cuál es, venerable señor, el propósito de las deidades?
"Vasetthas, vuestro propósito es este: 'hemos rendido homenaje al cuerpo del Bienaventurado
con danzas, canciones, guirnaldas de flores y perfumes y hemos mostrando respeto, honra y
veneración al cuerpo del Bienaventurado. Vamos a llevar ahora el cuerpo del Bienaventurado
hacia el sur, a la parte meridional de las afueras de la ciudad y vamos a incinerar el cuerpo
del Bienaventurado hacia la parte sur de la ciudad'. Pero el propósito de las deidades,
vasetthas, es este: ''Hemos rendido homenaje al cuerpo del Bienaventurado con danzas y
canciones celestiales, con celestes guirnaldas de flores y perfumes y hemos mostrando
respeto, honra y veneración al cuerpo del Bienaventurado. Vamos a llevar ahora el cuerpo
del Bienaventurado hacia el norte, a la parte septentrional de la ciudad. Una vez atravesada
la puerta del norte, entremos con el cuerpo del Bienaventurado hacia el centro de la ciudad
y de allí vayamos hacia el este de las afueras de la ciudad y, saliendo por la puerta del este,
llevemos el cuerpo del Bienaventurado hacia el santuario de Makutabandhana para
incinerarlo ahí".
"Venerable, señor, si éste es el deseo de las divinidades, lo haremos de esta forma".
[6.16.] {228} Acto seguido, todo el Kusinara, incluyendo los montículos de polvo y las pilas
de la basura acumulada, se cubrió de una capa de flores celestiales de mandarava, que llegaba
hasta las rodillas. Y se rindió homenaje al cuerpo del Bienaventurado, tanto por parte de las
divinidades, como por parte de los mallas de Kusinara. Con danzas, canciones, guirnaldas de
flores y perfumes -tanto humanos, como celestiales- se ha mostrado respeto, honra y
veneración al cuerpo del Bienaventurado.
Entonces, se llevó el cuerpo del Bienaventurado hacia el norte, a la parte septentrional de la
ciudad. Una vez atravesada la puerta del norte, entraron con el cuerpo del Bienaventurado
hacia el centro de la ciudad y de allí fueron hacia el este, a las afueras de la ciudad saliendo
por la puerta del este. Después, llevaron el cuerpo del Bienaventurado hacia el santuario de
Makuta-bandhana y lo colocaron abajo.
[6.17.] {230} Estando allí, los mallas de Kusinara hablaron al Venerable Ananda con estas
palabras: "¿Cómo debería realizarse, venerable Ananda, el acto de respeto hacia el cuerpo
del Tathagata?"
"Al igual que en caso de un Monarca Universal, vasetthas".
"Pero, ¿cómo, venerable señor, debería ser respetado el cuerpo de un monarca universal?"
"El cuerpo del monarca universal, vasetthas, primeramente se envuelve en una nueva ropa
blanca hecha de lino y, luego, se lo cubre con una pieza de lana de algodón, y así se repite
esto quinientas veces, después de lo cual, el cuerpo del monarca universal se pone en un
recipiente de oro, lubricado con perfumes del bosque y se lo cubre con otro recipiente de oro.
De esta menera, el cuerpo del monarca universal es quemado en la pira funeral y se levanta
una stupa en el cruce de los caminos para guardar sus restos. Esto es lo que se hace, Vasetthas,
con el cuerpo del monarca universal y esto se debe hacer con el cuerpo del Tathagata: en el
cruce de los caminos, también se debe levantar una stupa para el Tathagata. Y cualquiera que
traiga a este lugar guirnaldas, incienso o perfume de sándalo, o rinda homenaje, estando su
mente calmada, mientras lo hace, tendrá el bienestar y la felicidad por largo tiempo".
[6.18.] Entonces, los Mallas procedieron a hacerlo todo, de acuerdo a estas instrucciones.
38. Mahakassapapattheravatthu - Narración con la aspiración de Mahakassapa [Leer
en pali]
[6.19.] {231} En esta ocasión, el Venerable Maha Kassapa estaba viajando desde Pava hacia
Kusinara, junto con un numeroso grupo de quinientos monjes. Durante el viaje, el Venerable
Maha Kassapa, salió del camino principal para sentarse debajo del árbol.
Y cierto integrante de la secta de los ajivakas que se dirigía a Pava, llevaba en sus manos las
flores celestiales de mandarava que había tomado en Kusinara. Y el Venerable Maha Kassapa
divisó a aquel ajivaka viniendo desde cierta distancia y, cuando ya estaba cerca, le preguntó:
"¿Sabes algo, amigo, de nuestro Maestro?"
"Sí, amigo, sé: hoy hace siete días desde que el asceta Gotama falleció. Desde ahí llevo estas
flores celestiales de mandarava".
En este momento, algunos de los monjes que aún no estaban completamente liberados de las
pasiones, levantaron sus manos en alto y lloraron; otros, echándose a sí mismo al suelo, se
arrastraban de un lado a otro, lamentándose de esta manera: "¡Demasiado pronto, el
Bienaventurado entra en su Parinibbana! ¡Demasiado pronto, el Bienhechor entra en su
Parinibbana! ¡Demasiado pronto el Ojo del Mundo ha desparecido!" Pero aquellos de los
monjes que estaban liberados de las pasiones, conscientemente atentos y con clara
comprensión, reflexionan de este modo: "Impermanentes son todas las cosas compuestas.
¿Qué más se puede esperar?"
[6.20.] {232} Entonces, alguien de nombre Subhadda, quien renunció la vida del mundo
recién en su anciana edad, estaba sentado dentro de la asamblea y se dirigió a los monjes de
esta manera: "Suficiente amigos, no sufráis ni os lamentéis más. Nos hemos librado de este
gran asceta. Por mucho tiempo, amigos, hemos sido oprimidos por él, porque nos decía 'esto
es apropiado para ti, esto no es apropiado para ti'. Ahora, finalmente, podremos hacer lo que
queramos, y lo que no queremos hacer, no lo haremos".
Pero el Venerable Maha Kassapa dijo a los monjes: "Es suficiente ya, amigos. ¡No sufráis
más ni os lamentéis! ¿Acaso no declaró el Bienaventurado que todo lo que es querido y bien
amado está destinado a sufrir cambios, separación y ruptura? De todo lo nacido, de lo que
llegó a existir, de lo compuesto y sujeto a decadencia ¿cómo uno podrá decir: '¡que esto no
se desintegre!'?"
[6.21.] {233} En esta ocasión, cuatro de los mallas de las familias más importantes, lavaron
sus cabezas y vistieron nuevas ropas, pensando: "nosotros vamos a hacer arder ahora la pira
del Bienaventurado". Acto seguido, trataron de hacerlo, pero no pudieron. Entonces lo mallas
hablaron al Venerable Anuruddha, diciendo: "¿Cuál es la causa, venerable Anuruddha, cuál
es la razón, por la cual estos cuatro mallas de las familias más importantes, al lavar sus
cabezas, vestir las nuevas ropas y pensar: "Vamos a hacer arder ahora la pira del
Bienaventurado", no pueden hacerlo?" "Vosotros, vasetthas, tenéis un propósito y las
deidades, otro"
"¿Y cuál es, venerable señor, el propósito de las deidades?"
"El propósito de las deidades, vasetthas, es este: 'El Venerable Maha Kassapa está viniendo
a Kusinara desde Pava con un numeroso grupo de quinientos monjes. Que no arda la pila del
Bienaventurado hasta que el Venerable Maha Kassapa rinda homenaje a los pies del
Bienaventurado".
"Si éste es el deseo de las divinidades, así será hecho".
[6.22.] {234} Entonces llegó el Venerable Maha Kassapa y se acercó a la pira del
Bienaventurado, al santuario de los mallas de Makuta-bandhana en Kusinara. Y arreglando
su hábito externo, lo puso sobre uno de sus hombros y, con las manos juntadas en un saludo,
caminó tres veces alrededor de la pira, teniendo siempre el cuerpo del Bienaventurado a su
derecha. Después, rindió homenaje a los pies del Bienaventurado. Y así mismo procedieron
los quinientos monjes que le acompañaban.
Finalmente, cuando se realizó el homenaje del Venerable Maha Kassapa y de los quinientos
monjes, la pira del Bienaventurado ardió en llamas por sí sola.
[6.23.] {235} Y cuando el cuerpo del Bienaventurado haya sido consumido por las llamas,
desapareció todo lo que era la piel, los tejidos, la carne, los tendones y los fluidos: ni siquiera
quedaron cenizas de estas partes del cuerpo. Solamente permanecieron los huesos [2]. Al
igual que cuando se quema la mantequilla o el aceite, no quedan partículas algunas ni cenizas,
así tampoco, cuando fue quemado el cuerpo del Bienaventurado, se vieron las cenizas ni
partículas algunas, de lo que era la piel, los tejidos, la carne, los tendones y los fluidos.
Solamente los huesos permanecieron. De las quinientos piezas de lino, que envolvían el
cuerpo del Bienaventurado, solamente dos no fueron consumidas por el fuego: la más
recóndita y la exterior.
Después, cuando el cuerpo del Bienaventurado fue consumido por las llamas, el agua de la
lluvia que cayó del cielo, apagó la pira del Bienaventurado, también llegó el agua desde la
arboleda y los mallas de Kusinara trajeron el agua perfumada de diversos aromas, con la cual
también apagaron la pira del Bienaventurado.
Finalmente, los mallas de Kusinara, llevaron las reliquias del Bienaventurado a su sala de
concilio, donde las rodearon de rejas de jabalinas y separaron mediante una pared de huesos.
Después, durante una semana, rindieron homenaje a las reliquias del Bienaventurado con
danzas, canciones, música, guirnaldas de flores y perfumes. Mostraron respeto, honra y
veneración a las reliquias del Bienaventurado.
39. Sariradhatuvibhajana - Distribución de las reliquias de los elementos del cuerpo
[Leer en pali]
[6.24.] {236} En esta ocasión, Ajatasattu Videhiputta, el rey de Maghada, escuchó que el
Bienaventurado falleció en Kusinara. Entonces, envió mensajeros a los mallas de Kusinara
diciendo: "El Bienaventurado provenía de la casta de los guerreros, al igual que yo. Por eso,
soy digno de recibir una porción de las reliquias del Bienaventurado. Voy a erguir una stupa
para sus reliquias y voy a ofrecer un festival en su honor".
Por otro lado, los licchavis de Vesali también supieron que el Bienaventurado falleció en
Kusinara. Entonces, enviaron mensajeros a los mallas de Kusinara diciendo: "El
Bienaventurado provenía de la casta de los guerreros, al igual que nosotros. Por eso, somos
dignos de recibir una porción de las reliquias del Bienaventurado. Vamos a erguir una stupa
para sus reliquias y vamos a ofrecer un festival en su honor".
También los sakyas de Kapilavatthu supieron que el Bienaventurado falleció en Kusinara.
Entonces, enviaron mensajeros a los mallas de Kusinara diciendo: "El Bienaventurado
provenía de la casta de los guerreros, al igual que nosotros. Por eso, somos dignos de recibir
una porción de las reliquias del Bienaventurado. Vamos a erguir una stupa para sus reliquias
y vamos a ofrecer un festival en su honor".
También los bulis de Allakappa supieron que el Bienaventurado falleció en Kusinara.
Entonces, enviaron mensajeros a los mallas de Kusinara diciendo: "El Bienaventurado
provenía de la casta de los guerreros, al igual que nosotros. Por eso, somos dignos de recibir
una porción de las reliquias del Bienaventurado. Vamos a erguir una stupa para sus reliquias
y vamos a ofrecer un festival en su honor".
También los kolis de Ramagama supieron que el Bienaventurado falleció en Kusinara.
Entonces, enviaron mensajeros a los mallas de Kusinara diciendo: "El Bienaventurado
provenía de la casta de los guerreros, al igual que nosotros. Por eso, somos dignos de recibir
una porción de las reliquias del Bienaventurado. Vamos a erguir una stupa para sus reliquias
y vamos a ofrecer un festival en su honor".
También el brahmán Vethadipa supo que el Bienaventurado falleció en Kusinara. Entonces,
envió mensajeros a los mallas de Kusinara diciendo: "El Bienaventurado provenía de la casta
de los guerreros, al igual que yo, el brahmán. Por eso, soy digno de recibir una porción de
las reliquias del Bienaventurado. Voy a erguir una stupa para sus reliquias y voy ofrecer un
festival en su honor".
También los mallas de Pava supieron que el Bienaventurado falleció en Kusinara. Entonces,
enviaron mensajeros a los mallas de Kusinara diciendo: "El Bienaventurado provenía de la
casta de los guerreros, al igual que nosotros. Por eso, somos dignos de recibir una porción de
las reliquias del Bienaventurado. Vamos a erguir una stupa para sus reliquias y vamos a
ofrecer un festival en su honor".
[6.25] Pero cuando los mallas de Kusinara escucharon todos estos mensajes, dijeron: "el
Bienaventurado, falleció en nuestra ciudad. Por eso, no vamos a compartir sus reliquias con
nadie".
{237} En este momento el brahmán Dona tomó la palabra y dijo:
Escuchad señores, una palabra mía, un ruego de mi parte; Nuestro Buda
nos enseñó la tolerancia.
Impropio sería crear conflictos,
O crear sangrientas guerras, por la custodia
De los restos, del que fue mejor entre los hombres.
Pongámonos todos, señores, de común acuerdo,
Para compartir las ocho porciones - a lo largo y lo ancho
Las stupas pueden, entonces, erguirse, para que al verlas, los seres humanos, Tengan fe
en el Plenamente Despierto.
{238} "Pues, así sea, brahmán: divide tú mismo las reliquias en ocho partes iguales"
Y el brahmán Dona respondió a la asamblea: "Así sea, señores" y dividió en forma justa y
equitativa las reliquias del Bienaventurado en ocho porciones. Hecho esto, dijo a la asamblea:
"que se acerque aquí la urna, señores. Sobre ella, voy a erguir la stupa en honor al
Bienaventurado y voy a ofrecer el festival". Y se llevó la urna junto al brahmán Dona.
[6.26.] En esta ocasión, también los moriyas de Pipphalivana supieron que el Bienaventurado
falleció en Kusinara. Entonces, enviaron mensajeros a los mallas de Kusinara diciendo: "El
Bienaventurado provenía de la casta de los guerreros, al igual que nosotros. Por eso, somos
dignos de recibir una porción de las reliquias del Bienaventurado. Vamos a erguir una stupa
para sus reliquias y vamos a ofrecer un festival en su honor".
"No quedan más porciones de las reliquias del Bienaventurado; sus reliquias ya han sido
divididas. Pero tomad algo de estas cenizas". Y ellos tomaron una parte de las cenizas.
40. Dhatuthupapuja - Veneración de las reliquias [Leer en pali]
[6.27.] {239} Después, Ajatasattu Videhuputta, el rey de Maghada, erigió la stupa sobre las
reliquias del Bienaventurado en Rajagaha y ofreció un festival en su honor. También los
kicchavis de Vesala erigieron la stupa sobre las reliquias del Bienaventurado en Vesali y
ofrecieron un festival en su honor. Por otro lado, los sakyas de Kapilavatthu erigieron la
stupa sobre las reliquias del Bienaventurado en Kapilavatthu y ofrecieron un festival en su
honor. También, los bulis de Allakappa erigieron la stupa sobre las reliquias del
Bienaventurado en Allakappa y ofrecieron un festival en su honor. Y los kolis de Ramagama
erigieron la stupa sobre las reliquias del Bienaventurado en Ramagama y ofrecieron un
festival en su honor. El brahmán Vethadipa también erigió la stupa sobre las reliquias del
Bienaventurado en Vethadipa y ofreció un festival en su honor. También los mallas de Pava
erigieron la stupa sobre las reliquias del Bienaventurado en Pava y ofrecieron un festival en
su honor. Asimismo, los mallas de Kusinara erigieron la stupa sobre las reliquias del
Bienaventurado en Kusinara y ofrecieron un festival en su honor. Y el brahmán Dona erigió
la stupa sobre la urna y ofreció un festival en su honor. Finalmente, los moriyas de
Pipphalivana erigieron la stupa sobre las cenizas del Bienaventurado en Pipphalivana y
ofrecieron un festival en su honor.
De esta manera, llegaron a ser ocho las estupas erguidas con las reliquias, la novena fue
erguida sobre la urna y la décima, sobre las cenizas.
Esto es lo que pasó en aquellos antiguos días [3].
[6.28.] {239} Ocho porciones de reliquias quedaron de él,
Del Vidente. De ellas, siete permanecieron
En Jumbudipa con honores. El octavo,
En Ramagama, llevado por el rey de los nagas. Un
diente había sido llevado por los Treinta Dioses, El rey
de Kalinga tiene uno y los nagas, dos.
Ellos se despojaron de su gloria sobre la tierra fructífera Y así
el Vidente ha sido honrado con el honor.
Los devas y los nagas, los reyes y los hombres más nobles,
Juntan las manos en homenaje, porque es difícil
Encontrar a alguien semejante en sinfín de los eones .
1. Kevattagahapatiputtavatthu – Porción con el hombre hogareño Kevaddha [1] Esto
he escuchado:

En una ocasión el Bienaventurado estaba morando en la arboleda de los mangos de Pavarika,


cerca de Nalanda. Entonces, el hombre hogareño Kevaddha se acercó al Bienaventurado, le
rindió homenaje y se sentó a un lado. Acto seguido dijo: “Venerable Señor, esta [ciudad de]
Nalanda es rica y próspera; populosa y llena de gente que tiene fe en el Bienaventurado. Sería
bueno que por la orden del Bienaventurado alguno de los monjes realizara prodigios
sobrehumanos y milagros. De esta manera, Nalanda tendría aún más fe en el
Bienaventurado”.
Y el Bienaventurado respondió: “Esta no es la manera en la cual yo enseño el Dhamma,
Kevaddha, diciendo a los monjes: ‘Id, monjes, y haced prodigios sobrehumanos y milagros
para los laicos vestidos de blanco’”.
[2] Y por segunda vez Kevaddha dijo al Bienaventurado: “Venerable Señor, esta [ciudad de]
Nalanda es rica y próspera… De esta manera, Nalanda tendría aún más fe en el
Bienaventurado”.
Y por segunda vez el Bienaventurado respondió: “Esta no es la manera en la cual yo enseño
el Dhamma, Kevaddha, diciendo a los monjes: ‘Id, monjes, y haced prodigios sobrehumanos
y milagros para los laicos vestidos de blanco’”.
[3] Y por tercera vez Kevaddha dijo al Bienaventurado: “Venerable Señor, esta [ciudad de]
Nalanda es rica y próspera… De esta manera, Nalanda tendría aún más fe en el
Bienaventurado”.

2. Iddhipatihariyam – El milagro del poder espiritual


“Kevaddha, he aquí tres clases de milagros que he declarado, habiéndolos descubierto por
mí mismo con el conocimiento directo. Y, ¿cuáles son esos tres? El milagro del poder
espiritual, el milagro de la lectura de la mente y el milagro de la instrucción.
[4] “Y, ¿qué es, Kevaddha, el milagro del poder espiritual? He aquí, el monje despliega
varios poderes espirituales de diferentes maneras: siendo uno, se convierte en muchos, y
siendo muchos, se convierte en uno. Aparece y desaparece. Sin impedimento alguno traspasa
paredes, terraplenes y montañas, como si fueran aire. Se zambulle dentro de la tierra como
si fuera agua. Camina sobre el agua, sin hundirse, como si fuera tierra seca. Sentado, con las
piernas cruzadas, atraviesa los aires como si fuera un pájaro sobre el viento. Con su mano
toca y da palmadas al sol y la luna, así es de imponente y poderoso. Ejercita la influencia de
su cuerpo hasta el mundo del Brahma.

Entonces, uno que tiene fe y confianza puede verlo haciendo estas cosas…
[5] …y contárselo a alguien que no tiene fe, diciendo: ‘Esto es asombroso, es magnífico el
gran poder y la habilidad de este asceta que siendo uno, se convierte en muchos… Ejercita
la influencia de su cuerpo hasta el mundo del Brahma’. Pero entonces, aquel hombre podría
decir: ‘Amigo, existe algo que se llama el encantamiento de Gandhara. Es por eso que el
monje siendo uno, se convierte en muchos… Ejercita la influencia de su cuerpo hasta el
mundo del Brahma’. ¿Qué opinas, Kevaddha, podría el hombre que no tiene fe decir eso al
que cree?”.
“Podría decirlo, Venerable Señor”.
“Y es por eso, Kevaddha, que, viendo el peligro en semejantes milagros, los mismos me
disgustan, los rechazo y los desprecio”.

3. Adesanapatihariyam – El milagro de la lectura de la mente


[6] “Y, ¿qué es, Kevaddha, el milagro de la lectura de la mente? He aquí, el monje lee la
mente de otros seres, de otra gente; lee sus estados mentales, sus pensamientos y
ponderaciones, diciendo: ‘Así es cómo está tu mente, así es hacia dónde se inclina, así es
cómo está tu corazón’.
Entonces, uno que tiene fe y confianza puede verlo haciendo estas cosas…
[7] …y contárselo a alguien que no tiene fe, diciendo: ‘Esto es asombroso, es magnífico el
gran poder y la habilidad de este asceta que lee la mente de otros seres… diciendo: ‘Así es
cómo está tu mente, así es hacia dónde se inclina, así es cómo está tu corazón’. Pero entonces
aquel hombre podría decir: ‘Amigo, existe algo que se llama el encantamiento de
Manika. Es por eso que el monje lee la mente de otros seres… diciendo: «Así es cómo está
tu mente, así es hacia dónde se inclina, así es cómo está tu corazón»’. ¿Qué opinas,
Kevaddha, podría el hombre que no tiene fe decir eso al que cree?”.
“Podría decirlo, Venerable Señor”.
“Y es por eso, Kevaddha, que, viendo el peligro en semejantes milagros, los mismos me
disgustan, los rechazo y los desprecio”.

4. Anusapatihariyam – El milagro de la instrucción


[8] “Y, ¿qué es, Kevaddha, el milagro de la instrucción? He aquí, el monje se instruye así:
‘Considéralo de esta manera, no lo consideres así; direcciona tu mente de esta manera, no
direcciones tu mente así; regala aquello, gana esto y persevera en eso’. Esto, Kevaddha, se
llama el milagro de la instrucción.
[9] “Este es el caso, Kevaddha, en el cual el Tathagata aparece en el mundo, un Arahant,
un Buda plenamente iluminado, perfecto en conocimiento y conducta, el Bienhechor, el
Conocedor de los mundos, inigualado domador de hombres que han de ser domados, el
Maestro de dioses y seres humanos, el Buda, el Bienaventurado Señor. El Dhamma que
enseña es agradable en el comienzo, agradable en la mitad y agradable al final. Él enseña su
espíritu y su letra, exhibiéndolo perfecta y plenamente, viviendo una vida santa, rigurosa y
pura.
[10] “Un hombre hogareño o su hijo, o alguien que ha renacido de un hogar a otro, al
escuchar este Dhamma, obtiene fe en el Tathagata reflexionando de esta manera: ‘La vida
hogareña es un camino limitado y cubierto de polvo, mientras que la vida sin hogar es como
vivir al aire libre. Esta no es una tarea fácil: vivir en el hogar y practicar una vida totalmente
perfecta, totalmente pura y mantenerla brillante como una concha desvainada. ¿Qué tal si
afeito mi cabeza y mi barba, me visto con el hábito amarillo y dejo esta vida hogareña para
vivir el estilo de vida sin hogar?’.
[11] “De modo que, después de cierto tiempo, él efectivamente abandona sus riquezas,
pequeñas o grandes, deja el círculo de sus parientes, pequeño o grande, afeita su cabeza y
su barba, y se viste con el hábito amarillo para vivir el estilo de vida sin hogar.
“Y viviendo así, se restringe a sí mismo mediante el código de las reglas monásticas, teniendo
cuidado de no cometer la menor falta con su cuerpo, con sus acciones o palabras, enteramente
entregado a purificar su vida, a la virtud, guardando las puertas de sus sentidos,
conscientemente atento y contento.
[12] “¿Y cómo, Kevaddha, el monje perfecciona la virtud? Dejando de dar muerte a los seres
vivos, se mantiene distante de la destrucción de la vida; sin garrotes o espadas, se avergüenza
de la violencia. Vive compasivo y amable con todos los seres vivos. Así se perfecciona en la
virtud. “Dejando de tomar lo que no le ha sido dado, se mantiene distante de codiciar aquello
que no es de él. Toma solamente lo que le es ofrecido y mientras espera las limosnas,
transcurre su vida en la honestidad y en la pureza de corazón. De esta manera, también se
perfecciona en la virtud. “Dejando las impurezas, vive en castidad. Se mantiene distante de
las prácticas vulgares relacionadas con los actos sexuales. De esta manera, también se
perfecciona en la virtud. [13] “Dejando las palabras mentirosas, se mantiene distante de la
falsedad. Habla la verdad sin dobleces, es creíble y digno de confianza; nunca quiebra su
palabra. De esta manera, también se perfecciona en la virtud.
“Dejando la difamación y la calumnia, se mantiene distante del embuste. Lo que escucha
aquí, no lo repite en otro lugar, para no causar riñas con la gente de aquí; y lo que escucha
en otro lugar, no lo repite aquí, para no causar riñas con la gente de allí. Así vive él, como el
reconciliador de aquellos que están divididos, animando a los que viven en amistad, hacedor
y amante de la paz, apasionado por la causa de la paz; sus palabras son siempre pacíficas. De
esta manera, también se perfecciona en la virtud.
“Dejando la rudeza al hablar, se mantiene distante del lenguaje violento. Cada una de sus
palabras es intachable, agradable, encantadora, toca al corazón y es cortés. La gente ama su
forma de hablar y se complace en ella. De esta manera, también se perfecciona en la virtud.
“Dejando las charlas frívolas, se mantiene distante de las vanas conversaciones. Sus palabras
son siempre correctas, acordes a los hechos y llenas de significado; versan sólo sobre el
Dhamma y Disciplina. Habla siempre a tiempo justo y, sus palabras, son dignas de ser
escuchadas, llegan al corazón, son ilustrativas, claramente escogidas y siempre tocan el
punto. De esta manera, el monje se perfecciona en la virtud.
[14] “Se abstiene de causar daños a las semillas o las plantas,
“Toma una sola comida al día y nunca come por la noche, y se abstiene de comer en el horario
indebido,
“Se abstiene de mirar los espectáculos de entretenimiento,
“Se abstiene de danzar, cantar y escuchar música,
“Se abstiene de usar adornos, ni se embellece con guirnaldas, perfumes o ungüentos,

“Se abstiene de usar grandes y cómodos lechos,


“Se abstiene de recibir oro y plata,
“Se abstiene de aceptar granos no cocinados,

“Se abstiene de aceptar comida cruda,


“Se abstiene de aceptar mujeres o muchachas,
“Se abstiene de aceptar esclavos y esclavas,

“Se abstiene de aceptar ovejas y cabras,


“Se abstiene de aceptar aves y cerdos,

“Se abstiene de aceptar elefantes, reses, caballos y yeguas,


“Se abstiene de aceptar campos de cultivo y campos baldíos,
“Se abstiene de mandar recados,
“Se abstiene de comprar y vender,
“Se abstiene del engaño con falsas pesas o medidas,
“Se abstiene del camino torcido de los sobornos, estafas y fraudes,
“Se abstiene de mutilaciones, asesinatos y aprisionamientos, “Se abstiene
de asaltos, robos y violencia.
“Todo esto, también forma parte de su perfeccionamiento en la virtud.
[15] “Mientras algunos ascetas y brahmanes, aunque se sostienen de la comida provista por
sus seguidores, siguen siendo adictos a dañar los semilleros y a todo tipo de plantas en
crecimiento: propagadas desde las raíces, tallos, recortes, articulaciones y simientes; él se
mantiene distante de este tipo de daño hecho a los semilleros y a las plantas en crecimiento.
De esta manera, también se perfecciona en la virtud.
[16] “Mientras algunos ascetas y brahmanes, aunque se sostienen de la comida provista por
sus seguidores, siguen siendo adictos a acumular bienes: acumular comida, bebida,
vestimentas, equipajes, camas, perfumes o condimentos; él se mantiene distante de semejante
uso de cosas acumuladas. De esta manera, también se perfecciona en la virtud. [17] “Mientras
algunos ascetas y brahmanes, aunque se sostienen de la comida provista por sus seguidores,
siguen siendo adictos a visitar los espectáculos de entretenimiento, como la danza, las
canciones, la música instrumental, las ferias, los romances, el manualismo, los cánticos de
los bardos, los conciertos de las percusiones, el teatro de hadas, las acrobáticas hazañas de
los Candalas, el combate de los elefantes, búfalos, toros, cabras, carneros, gallos y
codornices, las luchas con duelas, el boxeo, las peleas, las luchas fingidas, los desfiles, las
maniobras y los exámenes militares; él se mantiene distante de visitar semejantes
espectáculos de entretenimiento. De esta manera, también se perfecciona en la virtud. [18]
“Mientras algunos ascetas y brahmanes, aunque se sostienen de la comida provista por sus
seguidores, siguen siendo adictos a juegos y recreaciones, como los juegos de tabla con ocho
o diez hileras de cuadrados, estos mismos juegos jugados imaginariamente en tablas del aire,
las rayuelas, removiendo piezas del montón y poniéndolas de vuelta, lanzando dados,
golpeando el palo corto con el largo, haciendo “dibujos de la mano”, jugando con pelotas,
soplando a través de juguetes de hojas, surcando con juguetes arados, girando en un trapecio,
jugando con juguetes-molinos de viento hechos de hojas de bambú, jugando con los juguetes-
medidas hechos con hojas de bambú, jugando con juguetes-carros o con juguetes que se
inclinan, adivinando el contenido de las cartas trazadas en el aire o en la espalda del otro
jugador, adivinando los pensamientos del otro jugador e imitando las deformaciones; él se
mantiene distante de semejantes juegos y recreaciones. De esta manera, también se
perfecciona en la virtud.
[19] “Mientras algunos ascetas y brahmanes, aunque se sostienen de la comida provista por
sus seguidores, siguen siendo adictos al uso de altos y lujosos sofás, es decir: sofás
movedizos, altos de seis pies de altura, divanes con figuras de los animales esculpidos en los
soportes, cobertores de pieles de cabras del largo vellón, coloridos retazos cristalinos, mantas
blancas, cobertores de lana bordados con flores, edredones rellenados de lana de algodón,
cobertores bordados con figuras de leones, tigres y otros animales, alfombras con pelaje de
ambos lados, alfombras con pelaje de un solo lado, cobertores bordados con piedras
preciosas, cobertores de seda, alfombras de gran tamaño, sufrientes para dieciséis bailarinas,
alfombras con elefantes, caballos y carros, alfombras hechas de las pieles de antílopes,
cosidas juntas, alfombras hechas de antílopes machos, alfombras con toldos y sofás con
almohadas rojas en la cabecera y en los pies; él se mantiene distante de semejantes altos y
lujosos sofás. De esta manera, también se perfecciona en la virtud. [20] “Mientras algunos
ascetas y brahmanes, aunque se sostienen de la comida provista por sus seguidores, siguen
siendo adictos a adornarse y embellecerse, es decir: frotando sus cuerpos con polvos
perfumados, limpiando y lavándolos en espumas, dando golpecitos a sus miembros con
cachiporras como lo hacen los luchadores, usando espejos, ungüentos de ojos, guirnaldas,
coloretes, cosméticos, pulseras, collares, bastones de adorno, lengüetas para sus perros,
estoques, sombrillas, pantuflas adornadas, turbantes, diademas, colas batidas de los yak y
largos flecos bordeados en sus vestidos; él se mantiene distante de semejantes adornos y
formas de embellecimiento. De esta manera, también se perfecciona en la virtud.
[21] “Mientras algunos ascetas y brahmanes, aunque se sostienen de la comida provista por
sus seguidores, siguen siendo adictos a las bajas conversaciones, como estas: los cuentos
sobre reyes, ladrones, ministros del estado, cuentos de guerra, de terror y de batallas, charlas
acerca de comidas, bebidas, vestimenta, camas, guirnaldas y perfumes, pláticas sobre las
relaciones, viajes, pueblos, ciudades, poblados y países, charlas sobre las mujeres y sobre los
héroes, chismorreo en las esquinas de las calles o en lugares donde se busca el agua, historias
de espíritus, conversaciones desganadas, especulaciones acerca de la creación de la tierra o
del mar, o sobre la existencia o la no existencia; él se mantiene distante de semejantes
conversaciones bajas. De esta manera, también se perfecciona en la virtud.
[22] “Mientras algunos ascetas y brahmanes, aunque se sostienen de la comida provista por
sus seguidores, siguen siendo adictos a usar frases reñidas, como por ejemplo: ‘Tú no
entiendes este Dhamma-y-Disciplina, yo sí la entiendo… ¿Cómo sería posible que
conocieras este Dhamma-y-Disciplina?’… ‘Has caído en un punto de vista falso, soy yo el
que mantiene el punto de vista correcto’… ‘Yo estoy hablando sobre el punto, tú divagas’…
‘Pusiste al final lo que debería ir primero, pusiste primero lo que debería ir al final’… ‘Lo
que creías cierto por tanto tiempo, ya ha sido refutado’… ‘Tu desafío ha sido tomado’… ‘Tú
mismo probaste estar equivocado’… ‘Trabaja para aclarar tu punto de vista’ o ‘Desenrédate
tú mismo, si puedes’; él se mantiene distante de usar semejantes frases reñidas. De esta
manera, también se perfecciona en la virtud.
[23] “Mientras algunos ascetas y brahmanes, aunque se sostienen de la comida provista por
sus seguidores, siguen siendo adictos a mandar mensajes, enviando recados, haciendo de
mensajeros, ofreciendo servicios de inteligencia a los reyes, ministros de estado, a los
khattiyas, brahmanes o a los jóvenes, diciendo: ‘Ve allá, ven aquí, toma a éste contigo, trae
esto desde allí’; él se mantiene distante de semejantes ocupaciones serviles. De esta manera,
también se perfecciona en la virtud.
[24] “Mientras algunos ascetas y brahmanes, aunque se sostienen de la comida provista por
sus seguidores, siguen siendo embaucadores: parásitos asalariados de palabras santas,
adivinos y exorcistas, sedientos de acumular sus ganancias; él se mantiene distante de
semejante engaño y golpeteo. De esta manera, también se perfecciona en la virtud.
[25] “Mientras algunos ascetas y brahmanes, aunque se sostienen de la comida provista por
sus seguidores, se ganan la vida de manera incorrecta, mediante el desarrollo de artes bajas,
como por ejemplo: profetizando una larga vida o prosperidad a través de la quiromancia,
leyendo las marcas de las manos o pies de los niños, etc.; haciendo adivinanzas de los agüeros
o signos, prediciendo augurios de los rayos u otros objetos celestiales, interpretando sueños,
leyendo el futuro de las marcas del cuerpo, prediciendo augurios de las marcas que dejan los
roedores en la ropa, haciendo sacrificios a Agni, ofreciendo oblaciones de la cuchara,
haciendo ofrendas a las divinidades de la cáscara, haciendo ofrendas de granos
descascarillados listos para ser hervidos, haciendo ofrendas de miel y aceite, haciendo
sacrificios que consisten en echar las semillas de mostaza y otras desde su propia boca al
fuego, derramando sangre de su rodilla derecha como sacrificio a los dioses, mirando los
nudillos y otras partes del cuerpo para —luego de refunfuñar un encanto— adivinar si el
hombre en cuestión posee un buen nacimiento, o si tiene suerte o carece de ella; aconsejando
sobre las reglas tradicionales, invocando demonios en el cementerio, invocando espíritus,
usando los encantamientos para alojarse en una casa de tierra, encantando a la serpiente,
haciendo arte de los venenos, arte de los escorpiones, arte de los ratones, arte de las aves y
arte del cuervo; prediciendo el número de años que van a vivir los hombres, haciendo
encantos para rechazar las flechas y haciendo ruedas de los animales; él se mantiene distante
de semejantes artes bajas.
[26] “Mientras algunos ascetas y brahmanes, aunque se sostienen de la comida provista por
sus seguidores, se ganan la vida de la manera incorrecta, mediante el desarrollo de artes bajas,
como por ejemplo, desarrollando el conocimiento sobre las buenas y las malas cualidades de
la gente, sobre sus riquezas y su suerte, a través de los siguientes elementos: el ingenio, las
piedras preciosas, las astas, las prendas de vestir, las espadas, las flechas, los lazos y otros
tipos de armamentos, a través de las mujeres, los hombres, los muchachos, las muchachas,
los eslavos, las eslavas, los elefantes, los caballos, los búfalos, los toros, los bueyes, las
cabras, las ovejas, las aves de corral, las codornices, las iguanas, las ratas de bambú, las
tortugas y otros animales; él se mantiene distante de semejantes artes bajas. [27] “Mientras
algunos ascetas y brahmanes, aunque se sostienen de la comida provista por sus seguidores,
se ganan la vida de la manera incorrecta, mediante el desarrollo de artes bajas, como cuando
hacen este tipo de predicciones: ‘Los líderes marcharán adelante… los líderes retrocederán…
nuestros líderes atacarán, mientras los líderes de los enemigos, retrocederán… los líderes de
los enemigos atacarán, mientras nuestros líderes retrocederán… nuestros líderes obtendrán
la victoria, mientras los otros líderes sufrirán la derrota… los otros líderes obtendrán la
victoria, mientras los nuestros sufrirán la derrota… la victoria será para este grupo, la derrota
para aquel’; él se mantiene distante de semejantes artes bajas.
[28] “Mientras algunos ascetas y brahmanes, aunque se sostienen de la comida provista por
sus seguidores, se ganan la vida de la manera incorrecta, mediante el desarrollo de artes bajas,
como cuando hacen esta otra clase de predicciones: ‘Va a haber un eclipse de la
Luna… va a haber un eclipse del Sol… va a haber un eclipse de una estrella… va a haber
una anomalía en el Sol o en la Luna… el Sol o la Luna retornarán por su vía habitual… va a
haber una caída de meteoros… va a haber un fuego en la jungla… va a haber un terremoto…
el dios va a tronar… va a haber un levantamiento o una posición determinados del Sol, de la
Luna o de las estrellas, una claridad y una disminución de ellas’, y con eso predicen para
cada uno de estos quince fenómenos, algún determinado tipo de resultado’; él se mantiene
distante de semejantes artes bajas.
[29] “Mientras algunos ascetas y brahmanes, aunque se sostienen de la comida provista por
sus seguidores, se ganan la vida de la manera incorrecta, mediante el desarrollo de artes bajas
como estas: prediciendo la abundancia o la escasez de las lluvias, prediciendo una buena
cosecha o una escasez de alimentos, prediciendo tranquilidad o disturbios, prediciendo la
pestilencia o tiempos saludables, contando con los dedos o sin la utilización de los dedos,
sumando grandes números, componiendo romances y poesías, haciendo casuística y
sofistería; él se mantiene distante de semejantes artes bajas.
[30] “Mientras algunos ascetas y brahmanes, aunque se sostienen de la comida provista por
sus seguidores, se ganan la vida de la manera incorrecta, mediante el desarrollo de artes bajas
como estas: disponiendo de fechas felices para realizar matrimonios, en los cuales el novio
o la novia están llevados a casa; disponiendo de fechas felices para realizar matrimonios, en
los cuales el novio o la novia están llevados afuera; fijando un tiempo feliz para la realización
de tratados de paz [o usando los encantamientos para procurar la armonía]; fijando tiempos
felices para el comienzo de las hostilidades [o usando los encantamientos para procurar la
discordia]; fijando tiempos felices para las deudas [o usando los encantamientos para aventar
exitosamente en los dados]; fijando tiempos felices para gastar el dinero [o usando los
encantamientos para traer mala suerte al oponente en los dados]; usando encantamientos para
hacer a la gente feliz, usando encantamientos para hacer a la gente infeliz, usando
encantamientos para provocar el aborto, haciendo conjuros para enmudecer a alguien,
haciendo conjuros para mantener fija la mandíbula de alguien, haciendo conjuros para estirar
la mano de alguien, haciendo conjuros para ensordecer a alguien, obteniendo respuestas de
los oráculos, como la del espejo mágico; obteniendo respuestas de los oráculos por medio de
la muchacha poseída, obteniendo respuestas de los oráculos de parte de la divinidad,
adorando al Sol, adornado al Gran Ser, sacando fuegos de su propia boca e invocando a Siri,
la diosa de la buena fortuna; él se mantiene distante de semejantes artes bajas.
[31] “Mientras algunos ascetas y brahmanes, aunque se sostienen de la comida provista por
sus seguidores, se ganan la vida de la manera incorrecta, mediante el desarrollo de artes bajas
como estas: jurando regalos a la divinidad si se garantiza cierto determinado beneficio,
pagando estos votos, repitiendo encantamientos mientras se trasladan a las casas de la tierra,
causando virilidad, haciendo impotente al hombre, fijando sitios felices para la morada,
consagrando los sitios, haciendo ceremonias de los meses, haciendo baños rituales,
ofreciendo sacrificios, administrando vomitivos y purgativos, purgando a la gente para
aliviar sus cabezas, engrasar las orejas de la gente, satisfaciendo los ojos de la gente,
administrando drogas a través de la nariz, aplicando colirio a los ojos, ofreciendo pomadas
medicinales para los ojos, practicando como oculistas, practicando como cirujanos,
practicando como pediatras, administrando drogas y raíces, o administrando medicinas de
manera rotativa; él se mantiene distante de semejantes artes bajas.
“Todo esto, también forma parte de su perfeccionamiento en la virtud.
[32] “El monje que ha perfeccionado la virtud, no ve peligro alguno en nada que ayude a sus
restricciones a través de la virtud. Al igual que un noble guerrero ungido, que ha derrotado a
sus enemigos, no ve peligro alguno por parte de ellos, así también el monje que ha
perfeccionado la virtud, no ve peligro alguno en nada que ayude a sus restricciones a través
de la virtud. Envuelto en la noble totalidad de la virtud, él es internamente sensible al placer
que deriva de ser intachable. Así es, Kevaddha, cómo el monje se perfecciona en la virtud”.
[33] “¿Y de qué manera el monje guarda las puertas de sus sentidos? Cuando mira con sus
ojos algún objeto visible, no se apega a él ni a alguno de sus detalles. Porque si alguien vive
sin resguardar su sentido de la vista, le sobresaltan la avaricia y el pesar, de modo que la
práctica del monje consiste en resguardar la puerta del ojo. Cuando escucha con sus oídos
algún objeto audible no se apega a él ni a alguno de sus detalles. Porque si alguien vive sin
resguardar su sentido de la audición, le sobresaltan la avaricia y el pesar, de modo que la
práctica del monje consiste en resguardar la puerta del oído. Cuando huele con su nariz algún
objeto olfativo no se apega a él ni a alguno de sus detalles. Porque si alguien vive sin
resguardar su sentido del olfato, le sobresaltan la avaricia y el pesar, de modo que la práctica
del monje consiste en resguardar la puerta de la nariz. Cuando degusta con su paladar algún
objeto gustativo... Cuando percibe con su cuerpo algún objeto táctil... Cuando conoce con su
intelecto algún objeto mental, no se apega a él ni a alguno de sus detalles. Porque si alguien
vive sin resguardar su sentido de la cognición, le sobresaltan la avaricia y el pesar, de modo
que la práctica del monje consiste en resguardar la puerta de la cognición.
Dotado de esta noble restricción de las puertas de los sentidos, el monje se vuelve
internamente sensible del placer proveniente de ser intachable. Es así como el monje guarda
las puertas de sus sentidos. [34] “¿Y de qué manera el monje practica la atención consciente
y clara comprensión? Cuando camina hacia adelante o cuando camina hacia atrás, lo hace
claramente consciente. Cuando mira hacia adelante o mira hacia atrás, lo hace claramente
consciente. Cuando flexiona sus miembros o cuando los extiende, lo hace claramente
consciente. Cuando viste la ropa interior o cuando viste el hábito externo, lo hace claramente
consciente. Cuando carga su tazón, lo hace claramente consciente. Cuando come, bebe,
mastica o saborea, lo hace claramente consciente. Cuando orina o cuando defeca, lo hace
claramente consciente. Cuando camina, cuando está parado, cuando está sentado, cuando se
recuesta para dormir, cuando se despierta, cuando conversa o cuando permanece en silencio,
todo eso lo hace claramente consciente. Es así como el monje practica la atención consciente
y clara comprensión.
[35] “¿Y de qué manera el monje permanece contento? El monje está satisfecho con la
vestimenta que cubre su cuerpo y está satisfecho con las limosnas de comida que le quitan el
hambre. Dondequiera que vaya, toma solamente aquello que es necesario para satisfacer sus
necesidades básicas.
“Como un pájaro que vuela de acá para allá, no llevando más carga que su propio vuelo,
satisfecho con lo que tiene, de la misma manera el monje permanece contento”.
[36] “Dotado de la totalidad de la noble virtud, de esta noble restricción de los sentidos, de
esta noble atención consciente y clara comprensión, y de este noble contentamiento, el monje
busca una morada solitaria: en el bosque, al pie de un árbol, en la cueva de una montaña, en
el cementerio, en la arboleda de la jungla, al aire libre o sobre una pila de paja. Después de
haberse alimentado, al haber regresado de su ronda en busca de las limosnas de comida, se
sienta con las piernas cruzadas y, manteniendo recto su cuerpo, establece su atención
consciente enfrente.
[37] “Dejando de lado las codicias mundanas permanece atentamente consciente y libre de
la codicia. Limpia su mente de la codicia. Dejando de lado la maldad y el enojo permanece
atentamente consciente y libre de la maldad, con amor compasivo hacia el bienestar de los
seres vivientes. Limpia su mente de la maldad y del enojo. Dejando de lado la pereza y el
letargo permanece atentamente consciente, libre de la pereza y del letargo, percibiendo la luz
atenta y conscientemente. Limpia su mente de la pereza y del letargo. Dejando de lado la
agitación y la ansiedad permanece imperturbable y con la mente calmada. Limpia su mente
de la agitación y la ansiedad. Dejando de lado la incertidumbre permanece como alguien que
hubo traspasado las dudas, sin perplejidad en consideración de las sanas cualidades mentales.
Limpia su mente de la incertidumbre.
[38] “Supón que un hombre, al tomar un préstamo, lo invierte en asuntos de negocios y sus
negocios le van bien, devuelve toda la vieja deuda y con el resto mantiene a su esposa,
pensando así: ‘Al tomar el préstamo, lo invertí en asuntos de negocios y mis negocios han
ido bien; ahora, devolví toda la vieja deuda y con el resto puedo mantener a mi esposa’. A
causa de esto, puede experimentar alegría y felicidad.
[39] “Supón también que un hombre hubiese caído enfermo. Y su enfermedad era grave y
dolorosa, no podía disfrutar más de los alimentos y no sentía fuerza alguna en su cuerpo. Al
pasar el tiempo, finalmente se recuperó de su enfermedad y volvió a disfrutar de sus comidas,
como también volvió a sentir fuerza en su cuerpo, pensando así: ‘Al caer enfermo estuve
grave y dolorosamente dolido, no podía disfrutar más de mis alimentos y no sentía fuerza
alguna en mi cuerpo. Al pasar el tiempo, finalmente me recuperé de mi enfermedad y volví
a disfrutar de mis comidas, como también volví a sentir fuerza en mi cuerpo’. A causa de
esto, puede experimentar alegría y felicidad.
[40] “Supón también que un hombre estaba encerrado en una prisión. Al pasar el tiempo,
finalmente fue liberado de este cautiverio, seguro y salvo sin haber perdido sus bienes.
Entonces, podría pensar así: ‘Antes estaba encerrado en una prisión. Al pasar el tiempo,
finalmente fui liberado de este cautiverio, ahora estoy seguro y salvo sin haber perdido mis
bienes’. A causa de esto, puede experimentar alegría y felicidad.
[41] “Supón también que un hombre esclavo, sujeto a la voluntad de otros, no siendo dueño
de sí mismo, incapaz de hacer lo que desea, finalmente, al pasar el tiempo, es liberado de
esta esclavitud, dueño de sí mismo, no más sujeto a la voluntad ajena, libre y capaz de hacer
lo que desea. Entonces, podría pensar así: ‘Antes era un hombre esclavo, sujeto a la voluntad
de otros, no siendo dueño de mí mismo, incapaz de hacer lo que deseaba; finalmente, al pasar
el tiempo, fui liberado de esta esclavitud, ahora soy dueño de mí mismo, no más sujeto a la
voluntad ajena, libre y capaz de hacer lo que deseo’. A causa de esto, puede experimentar la
alegría y la felicidad.
[42] “Supón también que un hombre, portando dinero y bienes, está viajando a lo largo de
los caminos de un desolado país. Al pasar el tiempo, finalmente sale de este país desolado,
seguro y salvo, sin haber perdido sus bienes. Entonces, él podría pensar así: ‘Estaba portando
dinero y bienes, viajando a lo largo de los caminos de un desolado país. Pero finalmente salí
de él, ahora estoy seguro y salvo, sin haber perdido mis bienes’. A causa de esto, él puede
experimentar alegría y felicidad.
[43] “De la misma manera, Kevaddha, cuando estos cinco obstáculos aún no son
abandonados por uno mismo, el monje es como si tuviera deudas, enfermedades, como si
fuera prisionero o esclavo, o como si viajara por los caminos de un desolado país.
Pero cuando estos cinco obstáculos son abandonados, el monje es como si pagara todas sus
deudas, como si recuperara su salud y libertad, o como si saliera de un lugar inseguro.
Cuando se da cuenta de que estos cinco obstáculos fueron abandonados en su interior, nace
en él la alegría que produce arrobamiento. Su cuerpo se vuelve tranquilo y sensible a este
placer, cuya sensación —a su vez—, produce la concentración de su mente.
[44] “Y estando así, separado de la sensualidad, separado de los insanos estados mentales,
entra y permanece en el primer jhana, acompañado por el pensamiento aplicado y el
pensamiento sostenido, lleno de arrobamiento y placer nacidos de la reclusión. Y todo su
cuerpo está impregnado, bañado y colmado de este arrobamiento y placer nacidos de la
reclusión, de manera tal que no queda lugar alguno en todo su cuerpo que no esté impregnado
por el arrobamiento y placer nacidos de la reclusión.
[45] “Como un hábil especialista en preparar baños, o su aprendiz, se adiestra en verter el
polvo de baño dentro de la cuenca de latón, amasándolo una y otra vez con el agua, creando
una bola de polvo de baño, saturada, suficientemente húmeda e impregnada por fuera y por
dentro, sin que caiga de ella una sola gota; así también el monje impregna, baña y colma su
cuerpo con el arrobamiento y placer nacidos de la reclusión, de manera tal que no queda
lugar alguno en todo su cuerpo que no esté impregnado por el arrobamiento y placer nacidos
de la reclusión.
[46] “Y otra vez, el monje, apaciguando el pensamiento aplicado y el pensamiento sostenido,
logrando la calma mental y la unificación de la mente, entra y permanece en el segundo
jhana. Lleno de arrobamiento y placer nacidos de la reclusión, libre del pensamiento aplicado
y pensamiento sostenido. Todo su cuerpo está impregnado, bañado y colmado de este
arrobamiento y placer nacidos de la reclusión, de manera tal que no queda lugar alguno en
todo su cuerpo que no esté impregnado por el arrobamiento y placer nacidos de la reclusión.
[47] “Como un lago con aguas manantiales, sin afluentes del Este ni del Oeste, del Norte ni
del Sur, cuando recibe abundantes lluvias, sus aguas que brotan desde adentro, se mezclan
con estas aguas frescas, de manera tal que las mismas impregnan e invaden todo el lago, sin
que quede una sola parte no impregnada por las aguas frescas; así también el monje,
impregna, baña y colma su cuerpo con el arrobamiento y placer nacidos de la reclusión, de
manera tal que no queda lugar alguno en todo su cuerpo, que no esté impregnado por el
arrobamiento y placer, nacidos de la reclusión.
[48] “Y otra vez, el monje, al extinguirse el arrobamiento, permanece ecuánime, con la
atención consciente y clara comprensión, sensible a la sensación del placer entra y permanece
en el tercer jhana, del cual los Nobles declararon que ‘feliz es aquel que mora en la
ecuanimidad y en la atención consciente’. Todo su cuerpo está impregnado, bañado y
colmado de este placer despojado del arrobamiento.
[49] “Como una laguna que tiene flores de loto azules, rojas y blancas que han nacido del
agua, han crecido en el agua y no hay ni una sola flor que haya crecido fuera del agua, de
modo que todas estas flores de loto azules, rojas y blancas están impregnadas, bañadas y
colmadas por las aguas frescas; así también el monje, impregna, baña y colma su cuerpo con
el placer despojado del arrobamiento, de manera tal que no queda lugar alguno en todo su
cuerpo que no esté impregnado por este placer despojado del arrobamiento.
[50] “Y otra vez, el monje, al abandonar tanto el placer como la pena —con la anterior
desaparición de las alegrías y las tristezas— entra y permanece en el cuarto jhana, el cual va
más allá de los placeres y las penas, purificado con la ecuanimidad y atención consciente.
Impregna su cuerpo con la pureza mental y clara conciencia, de manera tal que no queda
lugar alguno en todo su cuerpo que no esté impregnado por esta ecuanimidad y clara
conciencia.
[51] “Como si un hombre estuviera sentado cubierto de pies a cabeza con una manta blanca,
de tal manera que no quedara parte alguna de su cuerpo al descubierto. Así también, el monje
permanece sentado cubriendo completamente su cuerpo con la pureza mental y clara
conciencia, no quedando lugar alguno en todo su cuerpo que no esté cubierto por esta pureza
mental y clara conciencia.
[52] “Con la mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de impurezas,
maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, direcciona e inclina su
mente hacia el conocimiento y la visión. Entonces, discierne así: ‘Este cuerpo mío es
material, compuesto de los cuatro elementos primarios, nacido de padre y madre, nutrido con
arroz y avena, es transitorio, fraccionado, sujeto a disolución y dispersión. Y ésta, mi
conciencia, está ligada a este cuerpo y depende de él’.
[53] “Como si se tratara de una piedra preciosa, perfectamente pulida de sus ocho lados,
clara, brillante, sin defecto, admirable en todos los aspectos, colgada de un cordón azul,
amarillo, rojo, blanco o anaranjado. Si algún hombre, dotado de buena vista, la tomara en su
mano y la inspeccionara, diría lo siguiente: ‘Esta piedra preciosa está perfectamente pulida
de sus ocho lados, es clara, brillante, sin defecto y admirable en todos los aspectos. Está
colgada de un cordón azul, amarillo, rojo, blanco o anaranjado’. De la misma manera, el
monje con la mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de impurezas,
maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, direcciona e inclina su
mente hacia el conocimiento y la visión. Entonces, discierne así: ‘Este cuerpo mío es
material, compuesto de los cuatro elementos primarios, nacido de padre y madre, nutrido con
arroz y avena, es impermanente, fraccionado, sujeto a disolución y dispersión. Y ésta, mi
conciencia, está ligada a este cuerpo y depende de él’.
[54] “Con la mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de impurezas,
maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, direcciona e inclina su
mente hacia la creación del cuerpo mental. A partir de este cuerpo, crea otro cuerpo, dotado
de forma, hecho por la mente, completo en todas sus partes, con ninguna de sus facultades
inferior a éste. [55] “Como si un hombre desvainara un junco y dijera: ‘Éste es el junco y
ésta es la vaina. El junco es una cosa y la vaina otra, aunque el junco haya salido de la vaina’.
O, como si un hombre desenvainara su espada de la funda y dijera: ‘Ésta es la espada y ésta
es la funda. La espada es una cosa y la funda otra, aunque la espada haya salido de la funda’.
O, como si un hombre sacara a una serpiente de su vieja piel y dijera: ‘Ésta es la serpiente y
ésta es su vieja piel. La serpiente es una cosa y la vieja piel otra, aunque la serpiente haya
salido de su vieja piel’. De la misma manera, el monje con la mente concentrada, purificada
y brillante, intachable, libre de impurezas, maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la
imperturbabilidad, direcciona e inclina su mente hacia la creación del cuerpo mental. A partir
de este cuerpo, crea otro cuerpo, dotado de forma, hecho por la mente, completo en todas sus
partes, con ninguna de sus facultades inferior a éste.
[56] “Con la mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de impurezas,
maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, direcciona e inclina su
mente hacia varios poderes sobrenaturales. Siendo uno, se convierte en muchos; y siendo
muchos, se convierte en uno. Aparece y desaparece. Sin impedimento alguno, traspasa las
paredes, terraplenes y montañas, como si fueran aire. Se zambulle dentro de la tierra, como
si fuera agua. Camina sobre el agua sin hundirse, como si fuera tierra seca. Sentado con las
piernas cruzadas, atraviesa los aires como si fuera un pájaro sobre el viento. Con su mano
toca y hasta da palmadas al sol y la luna, así es de imponente y poderoso. Ejercita la
influencia de su cuerpo hasta los mundos del Brahma.
[57] “Como un hábil alfarero, o su aprendiz, sabe dar muchas formas a la arcilla bien
preparada y convertirla en diferentes clases de recipientes cerámicos de acuerdo a sus deseos;
o como un hábil tallista de marfil, o su aprendiz, sabe trabajar el marfil bien preparado de
acuerdo a sus deseos; o como un hábil orfebre, o su aprendiz, sabe hacer de oro bien
preparado los artículos de acuerdo a sus deseos. Así también, el monje con su mente
concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de las impurezas, maleable, flexible,
firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, direcciona e inclina su mente hacia varios
poderes sobrenaturales. Siendo uno solo, se convierte en muchos... Ejercita la influencia de
su cuerpo hasta los mundos del Brahma.
[58] “Con la mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de impurezas,
maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, direcciona e inclina su
mente hacia el oído divino. Con el oído divino, purificado y que supera el de los seres
humanos, escucha ambas clases de sonidos: los divinos y los humanos, provenientes de lejos
o de cerca.
[59] “Como un hombre que viajando a lo largo de la carretera, puede escuchar los sonidos
de los timbales, pequeños tambores, conchas, címbalos e instrumentos de percusión, y
discernir: ‘Éste es el sonido de los timbales, éste de los pequeños tambores, éste de las
conchas, éste de los címbalos y éste de los instrumentos de percusión’. De la misma manera,
el monje con la mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de impurezas,
maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, direcciona e inclina su
mente hacia el oído divino. Con el oído divino, purificado y que supera el de los seres
humanos, escucha ambas clases de sonidos: los divinos y los humanos, provenientes de lejos
o de cerca.
[60] “Con la mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de impurezas,
maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, direcciona e inclina su
mente hacia la lectura de otras mentes. Con su propia mente conoce y distingue la mente de
otros seres o de otras personas. Conoce la mente afectada por la pasión, como mente
apasionada, y la mente sin pasión, como la mente liberada de la pasión. Conoce la mente
afectada por la aversión, como la mente con aversión, y la mente sin aversión, como la mente
liberada de aversión. Conoce la mente afectada por la falsa ilusión, como mente mal
ilusionada, y la mente sin falsa ilusión, como la mente liberada de la falsa ilusión. Discierne
la mente restringida como tal y sabe cuándo la mente está dispersa. Cuando una mente está
expandida, la reconoce como expandida y cuando está estrecha, sabe que está estrecha. A
una mente destacada, la reconoce como destacada y a una mente corriente la reconoce como
tal. Sabe cuándo la mente está concentrada y cuando no lo está, en ambos casos lo discierne
correctamente, como también cuando la mente está liberada y cuando no.
[61] “Como una mujer, un hombre o un muchacho preocupado por su apariencia, examina
cuidadosamente el reflejo de su propio rostro en un brillante espejo, o en un tazón con agua
pura, sabiendo discernir lunares o pecas de las partes libres de manchas; así también, el monje
con la mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de impurezas, maleable,
flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, direcciona e inclina su mente hacia
la lectura de las otras mentes. Con su propia mente, conoce y distingue la mente de otros
seres o de otras personas... Sabe cuándo la mente está concentrada y cuando no lo es, en
ambos casos lo discierne correctamente, como también cuando la mente está liberada y
cuando no.
[62] “Con la mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de las impurezas,
maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, direcciona e inclina su
mente hacia el conocimiento de las existencias pasadas. Se acuerda de sus múltiples vidas
pasadas: de un nacimiento, dos nacimientos, tres nacimientos, cuatro, cinco, diez, veinte,
treinta, cuarenta, cincuenta, cien, mil, cien mil nacimientos, muchos eones de contracciones
cósmicas, muchos eones de expansiones cósmicas, muchos eones de contracciones y
expansiones cósmicas, recordando: ‘En aquel entonces, mi nombre era así, mi linaje era éste
y provenía de ésta casta; me alimentaba de ésta clase de alimento experimentaba ésta y
aquella clase de alegrías y penas, he vivido ésta cantidad de años. Habiendo terminado mi
vida ahí, me he reconectado allá, donde mi nombre era... Habiendo terminado mi vida ahí,
me he reconectado acá’. De esta manera, se acuerda de varias de sus vidas pasadas, con sus
condiciones y detalles.
[63] “Como si un hombre saliera de su pueblo para irse a otro, y luego saliera de aquel para
irse a uno nuevo y diferente, y finalmente volviera a su casa. Entonces, podría tener este
pensamiento: ‘Salí de mi pueblo natal y me fui a este otro pueblo. Ahí estuve parado de esta
manera, estuve sentado así, hablé de esta forma y permanecí en silencio de esta manera. Salí
de este pueblo y me fui a aquel otro pueblo diferente, donde estuve parado de esta manera,
estuve sentado así, hablé de esta forma y permanecí en silencio de esta manera. Finalmente,
salí de aquel otro pueblo diferente y volví a casa’. De esta misma manera, el monje con la
mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de impurezas, maleable, flexible,
firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, direcciona e inclina su mente hacia el
conocimiento de las existencias pasadas. Se acuerda de sus múltiples vidas pasadas: de un
nacimiento... se acuerda de varias de sus vidas pasadas, con sus condiciones y detalles.
[64] “Con la mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de impurezas,
maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, él direcciona e inclina su
mente hacia la muerte y la reconexión de los seres. A través del ojo divino, purificado y que
sobrepasa al humano, ve la muerte de los seres y su reaparición, discerniendo si su destino
es inferior o superior, hermoso u horrible, afortunado o desafortunado, de acuerdo al kamma
de cada uno. Conoce de esta manera: ‘Estos seres, que obraron mal con su cuerpo, con su
habla o con su mente, los que injuriaban a los Nobles, mantenían incorrectos puntos de vista
y asumían acciones resultantes de estos erróneos puntos de vista, al quebrarse su cuerpo,
después de la muerte, han reaparecido en el plano de las penurias, del mal destino, en los
reinos bajos, en el infierno. Pero aquellos seres que obraron bien con su cuerpo, con su habla
o con su mente, los que no injuriaban a los Nobles, mantenían correctos puntos de vista y
asumían acciones resultantes de estos correctos puntos de vista, al quebrarse su cuerpo,
después de la muerte, han reaparecido en el buen destino, en el mundo celestial’. De esta
manera, a través del ojo divino, purificado y que sobrepasa el humano, él ve la muerte de los
seres y su reaparición, discerniendo su destino inferior o superior, hermoso u horrible,
afortunado o desafortunado, de acuerdo a su kamma. [65] “Como si un hombre, que tuviera
una buena vista, estuviera parado en la cima de un edificio en el centro de su ciudad y
observara a la gente entrando en sus casas y saliendo de ella, caminando a lo largo de la calle
y gente sentada en la plaza central. Entonces podría tener este pensamiento: ‘Esta gente entra
y sale de sus casas, camina a lo largo de la calle y está sentada en la plaza central’. De la
misma manera, el monje con la mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre
de impurezas, maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, direcciona
e inclina su mente hacia la muerte y la reconexión de los seres. A través del ojo divino,
purificado y que sobrepasa el humano, ve la muerte de los seres y su reaparición,
discerniendo si su destino es inferior o superior, hermoso u horrible, afortunado o
desafortunado, de acuerdo a su kamma.
[66] “Con la mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de impurezas,
maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, direcciona e inclina su
mente hacia el conocimiento del fin de las impurezas mentales. Él conoce tal como realmente
es: ‘Este es el sufrimiento, éste es el origen del sufrimiento, éste es el cese del sufrimiento y
éste es el sendero que lleva al cese del sufrimiento’. También conoce tal como realmente es:
‘Estas son las impurezas mentales, éste es el origen de las impurezas mentales, éste es el cese
de las impurezas mentales y éste es el sendero que lleva al cese de las impurezas mentales’.
A través de este conocimiento y visión, su mente es liberada de las impurezas de la
sensualidad, de las impurezas de la existencia y de las impurezas de la ignorancia. Y entonces
el siguiente conocimiento nace en él: ‘¡Ésta es la liberación!’. Y sabe que ‘el nacimiento está
terminado, la vida santa ha sido realizada, la tarea ha culminado y no queda más nada por
delante’.
“Esto es, Kevaddha, lo que se llama el milagro de la instrucción.
[67] “Y yo, Kevaddha, he experimentado estas tres clases de milagros con mi propio
conocimiento directo”.

5. Bhutanirodhesakabhikkhuvatthu – Porción sobre el cese definitivo de los grandes


elementos
“Una vez, Kevaddha, en este Sangha de monjes se le ocurrió un pensamiento a cierto monje:
‘Me pregunto, ¿dónde los cuatro grandes elementos —el elemento de la tierra, el elemento
del agua, el elemento del fuego y el elemento del aire— cesan definitivamente?’. “Y aquel
monje alcanzó tal estado mental de concentración que apareció delante de él el camino a los
mundos de los devas.
[68] “Entonces, llegando al reino de los devas de los Cuatro Grandes Reyes, preguntó a
aquellos devas: ‘Amigos, ¿dónde los cuatro grandes elementos —el elemento de la
tierra, el elemento del agua, el elemento del fuego y el elemento del aire— cesan
definitivamente?’. Al ser preguntados así, los devas del reino de los Cuatro Grandes
Reyes le respondieron: ‘Monje, nosotros no sabemos dónde los cuatro grandes
elementos —el elemento de la tierra, el elemento del agua, el elemento del fuego y el
elemento del aire— cesan definitivamente. Pero los Cuatro Grandes Reyes son más
elevados y más sabios que nosotros: ellos podrían saber dónde los cuatro grandes
elementos —el elemento de la tierra, el elemento del agua, el elemento del fuego y el
elemento del aire— cesan definitivamente’.
[69] “Entonces, llegando a los Cuatro Grandes Reyes, les preguntó: ‘Amigos, ¿dónde los
cuatro grandes elementos… cesan definitivamente?’. Al ser preguntados… le
respondieron: ‘Monje, nosotros no sabemos dónde… Pero los Treinta y Tres Dioses…
podrían saber dónde los cuatro grandes elementos —el elemento de la tierra, el elemento
del agua, el elemento del fuego y el elemento del aire— cesan definitivamente’.
[70] “Entonces, llegando a los Treinta y Tres Dioses, les preguntó: ‘Amigos, ¿dónde los
cuatro grandes elementos… cesan definitivamente?’. Al ser preguntados… le
respondieron: ‘Monje, nosotros no sabemos dónde… Pero Sakka, el rey de los devas…
podría saber dónde los cuatro grandes elementos —el elemento de la tierra, el elemento
del agua, el elemento del fuego y el elemento del aire— cesan definitivamente’.
[71] “Entonces, llegando a Sakka… Pero los devas de Yama… podrían saber…’.
[72] “Entonces, llegando al reino de los devas de Yama… Pero Suyama, el hijo de los
devas… podría saber…’.
[73] “Entonces, llegando a Suyama, el hijo de los devas… Pero los devas de Tusita… podrían
saber…’.
[74] “Entonces, llegando a los devas de Tusita… Pero Santusita, el hijo de los devas… podría
saber…’.
[75] “Entonces, llegando a Santusita, el hijo de los devas… Pero los devas de Nimmanarati…
podrían saber…’.
[76] “Entonces, llegando a los devas de Nimmanarati… Pero Sunimmita, el hijo de los
devas… podría saber…’.
[77] “Entonces, llegando a Sunimmita, el hijo de los devas… Pero los devas de
ParanimmitaVasavatti… podrían saber…’.
[78] “Entonces, llegando a los devas de Paranimmita-Vasavatti… Pero Vasavatti, el hijo de
los devas… podría saber…’.
[79] “Entonces, Vasavatti, el hijo de los devas… Pero los devas de séquito de Brahma…
podrían saber…’.
[80] “Entonces, aquel monje, mediante la apropiada concentración, hizo que apareciera
delante de él el camino al mundo del Brahma. Acto seguido se acercó a los devas del
séquito de Brahma y les preguntó: ‘Amigos, ¿dónde los cuatro grandes elementos —el
elemento de la tierra, el elemento del agua, el elemento del fuego y el elemento del
aire— cesan definitivamente?’. Al ser preguntados así, los devas del séquito de Brahma
respondieron: ‘Monje, nosotros no sabemos dónde los cuatro grandes elementos —el
elemento de la tierra, el elemento del agua, el elemento del fuego y el elemento del
aire— cesan definitivamente. Pero aquí está el Brahma, el Gran Brahma, el
Conquistador, el Invicto, el que todo lo ve, el Todopoderoso, el Soberano, el que designa
y ordena, el Padre de todo que ha sido y será. Él es más elevado y más sabio que
nosotros: él podría saber dónde los cuatro grandes elementos —el elemento de la tierra,
el elemento del agua, el elemento del fuego y el elemento del aire— cesan
definitivamente’. ‘Y ¿dónde está ahora, amigos, este Gran Brahma?’. ‘Monje, nosotros
no sabemos cuándo, cómo y dónde el Brahma va a aparecer. Pero cuando se ven los
signos —cuando la luz aparece y brilla el resplandor—, entonces el Brahma va a
aparecer. Estos signos indican que va a aparecer’.
[81] “Entonces, no mucho tiempo después, apareció el Gran Brahma y aquel monje se le
acercó y le dijo: ‘Amigo, ¿dónde los cuatro grandes elementos —el elemento de la tierra,
el elemento del agua, el elemento del fuego y el elemento del aire— cesan
definitivamente?’. Al ser preguntado así, el Brahma respondió: ‘Monje, yo soy el
Brahma, el Gran Brahma, el Conquistador, el Invicto, el que todo lo ve, el
Todopoderoso, el Soberano, el que designa y ordena, el Padre de todo que ha sido y
será’.
[82] “Y por segunda vez aquel monje le dijo al Brahma: ‘Amigo, ¿dónde los cuatro grandes
elementos —el elemento de la tierra, el elemento del agua, el elemento del fuego y el
elemento del aire— cesan definitivamente?’.
“Y por segunda vez, al ser preguntado así, el Brahma respondió: ‘Monje, yo soy el Brahma,
el Gran Brahma, el Conquistador, el Invicto, el que todo lo ve, el Todopoderoso, el Soberano,
el que designa y ordena, el Padre de todo que ha sido y será’.
[83] “Entonces aquel monje dijo al Brahma: ‘Amigo, yo no te pregunto eso. Yo pregunté
sobre dónde los cuatro grandes elementos —el elemento de la tierra, el elemento del
agua, el elemento del fuego y el elemento del aire— cesan definitivamente’. Acto
seguido,
Kevaddha, el Gran Brahma tomó a aquel monje del brazo, le apartó a un lado y le dijo:
‘Monje, estos devas de aquí creen que no hay nada que el Brahma no vea, nada que no
conozca, nada de lo que no sea consciente. Es por eso que yo no hablo frente a ellos. Pero
monje, yo no sé dónde los cuatro grandes elementos —el elemento de la tierra, el elemento
del agua, el elemento del fuego y el elemento del aire— cesan definitivamente. Por eso,
monje, has actuado mal, has actuado incorrectamente yendo más allá del Bienaventurado,
buscando la respuesta a tu pregunta en otra parte. Ahora, monje, simplemente tienes que ir
junto al Bienaventurado y poner esta pregunta delante de él y aceptar cualquier respuesta que
te dé’.
[84] “Entonces, aquel monje, tan rápido como un hombre fuerte flexiona su brazo extendido
o lo extiende cuando esta flexionado, desapareció del mundo del Brahma y apareció en
mi presencia. Acto seguido se postró delante de mí, se sentó a un lado y me dijo:
‘Venerable Señor, ¿dónde los cuatro grandes elementos —el elemento de la tierra, el
elemento del agua, el elemento del fuego y el elemento del aire— cesan
definitivamente?’.

6. Tiradassisakumupama – El pájaro que veía la costa


[85] “Entonces le respondí así: ‘Monje, un tiempo atrás había unos mercaderes marineros
que cuando zarpaban al océano tomaban consigo a un pájaro que veía la costa. Cuando ya no
podían ver la costa por ellos mismos, liberaban a aquel pájaro. Y el pájaro volaba al este y
oeste, al norte y sur; volaba hacia el cenit y a los puntos intermedios de la brújula. Si veía
alguna tierra firme, volaba allí. Pero si no veía tierra firme alguna, retornaba al barco. De la
misma manera, monje, te fuiste tan lejos que llegaste hasta el mundo del Brahma en búsqueda
de la respuesta a tu pregunta, la cual no encontraste. Y ahora vuelves a mí, monje,
preguntándote de esta manera: ‘¿Dónde los cuatro grandes elementos —el elemento de la
tierra, el elemento del agua, el elemento del fuego y el elemento del aire— cesan
definitivamente?’.

“En vez de eso, así es cómo deberías plantear la pregunta:


’¿Dónde la tierra, el agua, el fuego y el aire no encuentran fundamento alguno?
¿Dónde están lo largo y lo corto, lo pequeño y lo grande, lo bueno y lo malo?
¿Dónde está el nombre-y-forma completamente destruido?’. Y ésta
es la respuesta:
‘Cuando la consciencia está unificada, ilimitada y luminosa,
Ahí es donde la tierra, el agua, el fuego y el aire no encuentran fundamento alguno,
Ahí hay ambos: lo largo y lo corto, lo pequeño y lo grande, lo bueno y lo malo. Ahí
es donde el nombre-y-forma está completamente destruido.
Con el cese de la consciencia, todo eso queda destruido’”.
Esto es lo que dijo el Bienaventurado, y el hombre hogareño Kevaddha se deleitó y regocijó
en sus palabras.

1. Rajamaccakatha - Porción con el rey


[1] Esto he escuchado:
En una ocasión, el Bienaventurado estaba en Rajagaha, en la Arboleda de los Mangos de
Jivaka Komarabhacca, con un numeroso grupo de monjes, unos mil doscientos cincuenta
monjes. Esta día era el día de Uposatha, la noche de la luna llena, de la época de las azucenas,
del cuarto mes de las lluvias, llamado Komudi. Esta noche, el rey Ajatasattu de Magadha,
hijo de la reina Videha, estaba sentado en la terraza de su palacio rodeado por sus ministros.
En un momento dado, sintió una inspiración y exclamó: “¡Qué maravillosa, amigos, es esta
noche iluminada por la luna! ¡Qué hermosa! ¡Qué encantadora! ¡Qué auspiciosa es esta
noche iluminada por la luna! ¿A cuál de los ascetas o brahmanes podríamos visitar esta
noche, para que trajera paz a nuestra mente?”.
[2] Cuando esto fue dicho, uno de los ministros se dirigió al rey con estas palabras: “He aquí,
Su Majestad, está Purana Kassapa que tiene numerosos seguidores y es maestro de
muchos. Tiene buena fama y es honrado. Además es avanzado en edad, de una larga
trayectoria en la vida ascética y se encuentra en la última fase de su vida. Su Majestad
debería visitarlo a él. Quizá esta visita traería paz a su mente”. Cuando esto fue dicho, el
rey permaneció en silencio.
[3] Entonces, otro ministro se dirigió al rey con estas palabras: “He aquí, Su Majestad, está
Makkhali Gosala que tiene numerosos seguidores y es maestro de muchos. Tiene buena
fama y es honrado. Además es avanzado en edad, de una larga trayectoria en la vida
ascética y se encuentra en la última fase de su vida. Su Majestad debería visitarlo a él.
Quizá esta visita traería paz a su mente”.
Cuando esto fue dicho, el rey permaneció en silencio.
[4] He aquí está Ajita Kesakambalin...
[5] He aquí está Pakudha Kaccayana...
[6] He aquí está Sañjaya Belatthaputta...
[7] He aquí, Su Majestad, está Nigantha Nataputta, que tiene numerosos seguidores y es
maestro de muchos. Tiene buena fama y es honrado. Además, es avanzado en edad, de
una larga trayectoria en la vida ascética y se encuentra en la última fase de su vida. Su
Majestad debería visitarlo a él. Quizá esta visita traería paz a su mente”. Cuando esto fue
dicho, el rey permaneció en silencio.
2. Komarabhaccajivakakatha - Porción con Jivaka Komarabhacca
[8] Mientras tanto, todo ese tiempo Jivaka Kombarabhacca estaba sentado en silencio, no
muy lejos del rey. Así que el rey se dirigió a él con estas palabras: “Amigo Jivaka, ¿por qué
permaneces en silencio?”.
“Su Majestad, he aquí que el Bienaventurado, el Arahant, el plenamente despierto Buda, está
en mi Arboleda de los Mangos con un numeroso grupo de los monjes, unos mil doscientos
cincuenta monjes. En referencia al Bienaventurado se ha difundido este admirable informe:
‘Ciertamente, el Bienaventurado es un Arahant, un Buda plenamente despierto, dotado de
sabiduría y buena conducta, el Sublime, el Conocedor de los mundos, incomparable maestro
de los hombres que han de ser amansados. Maestro de los devas y seres humanos, despierto
y Bienaventurado’. Su Majestad debería visitar al Bienaventurado. Quizá esta visita traería
paz a su mente”.
“En este caso, amigo Jivaka, que se prepare a los elefantes para que sean montados”.
[9] “Así sea, señor”, respondió Jivaka y preparó a quinientas elefantas, listas para ser
montadas y al real elefante personal. Después de lo cual, dijo al rey: “Su Majestad, sus
elefantas están listas. Proceda Su Majestad de acuerdo con sus deseos”.
Entonces, el rey Ajatasattu, habiendo colocado a cada una de sus quinientas esposas en una
de las quinientas elefantas, montó su elefante personal y emprendió el camino desde la
capital, a lo largo de su estado, acompañado con el séquito que llevaba las antorchas, rumbo
a la Arboleda de los Mangos de Jivaka Komarabhacca.
[10] Sin embargo, una vez que el rey Ajatasattu arribó a las cercanías de la Arboleda de los
Mangos, sintió como si sus cabellos se le pararan de miedo y temor. Y así agitado y aterrado,
con el pelo parado dijo a Jivaka Komarabhacca: “Amigo Jivaka, ¿tú no me engañaste,
verdad? ¿Verdad, que no me traicionaste? ¿No me entregaste a mis enemigos? ¿Cómo puede
ser que en este lugar haya un numeroso grupo de monjes –el mil doscientos cincuenta, en
total- y que no se escuche sonido alguno, ni siquiera un estornudo o una tos?”. “No tenga
miedo, Su Majestad. No tema. Yo no le engañé, no le traicioné, ni le entregué a sus enemigos.
Siga adelante, Su Majestad, siga adelante. Hacia aquellos fuegos que se queman en la entrada
del pabellón”.
3. Samannphalapuccha - Preguntas sobre los frutos de la vida contemplativa
[11] Entonces, el rey procedió montado en su elefante personal, hasta donde se lo permitió
el camino, después de lo cual, se acercó a pie a la puerta de la entrada del pabellón. Al llegar
ahí, preguntó a Jivaka: “Amigo Jivaka, ¿Dónde está el Bienaventurado?” “Éste es el
Bienaventurado, Su Majestad, el que está sentado al lado opuesto del pilar central, con el
rostro dirigido al este y rodeado por el Sangha de los monjes”.
[12] Entonces, el rey se acercó a donde estaba el Bienaventurado y se paró a un lado. Después
de lo cual, observó cómo el grupo de los monjes continuaba en silencio, como si fuera un
lago transparente y despejado, y exclamó: “¡Si tan sólo el príncipe Udayabhadda estuviera
dotado de semejante calma, que el Sangha de los monjes!”
[El Bienaventurado dijo, entonces:] “¿Está hablando, Su Majestad, de alguien que le es muy
querido?”
“Señor, el príncipe Udayabhadda es muy querido para mí. ¡Si tan sólo estuviera dotado de
semejante calma, que el Sangha de los monjes!”
[13] Entonces, inclinándose frente al Bienaventurado, saludó al Sangha de los monjes y con
sus manos juntadas sobre su corazón, se sentó a un lado. Una vez sentado, se dirigió al
Bienaventurado con estas palabras: “Quisiera preguntar al Bienaventurado sobre un asunto,
si me lo permite”. “Pregunte, Su Majestad, lo que desee”.
[14] “Venerable Señor, he aquí que existen estos diferentes artesanos: los entrenadores de
los elefantes, los entrenadores de caballos, los aurigas, los arqueros, los abanderados, los
mariscales de campo, los oficiales paladines, los altos oficiales reales, los comandos, los
héroes militares, los guerreros vestidos de armaduras, los guerreros vestidos de cuero, los
esclavos domésticos, los pasteleros, los peluqueros, los encargados de los baños, los
cocineros, los fabricantes de guirnaldas, los lavanderos, los tejedores, los fabricantes de
cestas, los alfareros, los contadores y especialistas en cálculos, y otros muchos semejantes
artesanos. Todos ellos viven del fruto de sus artes, los cuales son visibles aquí y ahora. Sus
artes les proporcionan la felicidad y el placer a ellos mismos y a sus padres, esposas e hijos,
como también a sus amigos y compañeros. Con el fruto de sus artes, mantienen a los ascetas
y brahmanes asegurándose a ellos mismos, de esta manera, un feliz y celestial destino en los
futuros renacimientos. ¿Sería posible, Venerable Señor, señalar un fruto similar en caso de
la vida contemplativa, un fruto que fuera visible aquí y ahora?”
[15] “¿Su Majestad recuerda haber planteado esta misma pregunta a otros ascetas y
brahmanes?”
“Sí, lo recuerdo, Venerable Señor”.
“Si no sería difícil, ¿podría Su Majestad, decirme cómo le respondieron?”
“No, no es difícil. Siempre que el Bienaventurado o alguien parecido me lo permita”. “Pues,
cuéntelo, Su Majestad”.

3.1. Puranakassapavada - Teoría de Purana Kassapa


[16] “En una ocasión, Venerable Señor, me acerqué a Purana Kassapa. Al intercambiar con
él cordiales saludos, me senté a un lado y pregunté lo siguiente: ‘Venerable Kassapa, he aquí
que existen estos diferentes artesanos: los entrenadores de elefantes... (sigue igual que en el
verso 14)… ¿Sería posible, Venerable Kassapa, señalar un fruto similar en caso de la vida
contemplativa que fuera visible aquí y ahora?’
[17] “Cuando dije esto, Purana Kassapa me respondió: ‘Su Majestad, para alguien que hace
cosas o instiga a otros a hacerlas, para alguien que mutila o instiga a otros que mutilen, para
alguien que quema o instiga a otros que quemen, para alguien que inflige penas o instiga a
otros que las inflijan, para alguien que atormenta o instiga a otros que atormenten, para
alguien que intimide o instiga a otros que intimiden, para alguien que mata, que irrumpe
dentro de las casas, saquea las riquezas, comete asaltos, hace emboscadas, comete adulterio,
habla falsamente –no existe mal que podría ser hecho. Si alguien con una navaja bien afilada
convirtiera a todos los seres vivos de la tierra en un montículo de carne, no habría mal alguno
que pudiera venir como resultado de estas acciones. Si alguien estuviera caminando a lo largo
del río Ganges, matando e instando a matar a otros, mutilando o instigando a otros que
mutilaran, quemando o instigando a otros que quemaran, no habría mal que pudiera venir
como resultado de estas acciones. Si alguien estuviera caminando a lo largo del río Ganges,
regalando cosas e instando a otros que las regalaran, haciendo sacrificios e instando a otros
que hicieran sacrificios, no habría mérito alguno que pudiera venir como resultado de estas
acciones. En la generosidad, en el autocontrol, en el correcto hablar, no hay mérito alguno
que podría venir como resultado de estas acciones’.
[18] “De esta manera, Venerable Señor, Purana Kassapa, al ser preguntado por los frutos de
la vida contemplativa, visibles aquí y ahora, me habló de la no-acción. Es como si alguien,
al ser indagado acerca del mango, respondiera acerca del fruto del árbol del pan; o alguien
indagado acerca del fruto del árbol del pan, respondiera acerca del mango. De la misma
manera, Venerable Señor, Purana Kassapa, cuando fue preguntado acerca de los frutos de la
vida contemplativa, visibles aquí y ahora, respondió acerca de la no-acción.
Entonces, se me ocurrió el siguiente pensamiento: ‘¿Cómo podría alguien hacer que se
menospreciara a algún asceta o brahmán que vive dentro de su territorio?’ Entonces, aunque
no me haya deleitado en las palabras de Purana Kassapa, tampoco las rechacé. Sin deleitarme
y sin rechazarlas, me quedé insatisfecho. Sin deleitarme y sin rechazarlas, me levanté de mi
asiento y me retiré.
3.2. Makkhaligosalavada - Teoría de Makkhali Gosala
[19] “En otra ocasión, Venerable Señor, me acerqué a Makkhali Gosala. Al intercambiar con
él cordiales saludos, me senté a un lado y pregunté lo siguiente: ‘Venerable Gosala, he aquí
que existen estos diferentes artesanos: los entrenadores de elefantes... (sigue igual que en el
verso 14) ¿Sería posible, Venerable Gosala, señalar un fruto similar en caso de la vida
contemplativa, que fuera visible aquí y ahora?’.
[20] “Cuando dije esto, Makkhali Gosala me respondió: ‘Su Majestad, he aquí que no hay
causas ni condiciones de las impurezas de los seres. Los seres están corrompidos sin causas
y sin condiciones. Tampoco hay, Su Majestad, causas ni condiciones de la purificación de
los seres. Los seres están siendo purificados sin causas y sin condiciones. He aquí que no
existe poder de uno mismo, poder de otros ni poder humano alguno. No hay fuerza alguna,
vigor, energía ni esfuerzo posible. Todos los seres vivientes, todos los tipos de vida, todos
los seres, todas las almas, carecen de fuerza, no tienen poder, ni pueden realizar esfuerzo
alguno. Solamente, están destinados a los cambios del destino y de la naturaleza, sin poder
oponer resistencia a la continua sucesión de penas y placeres del séxtuple renacimiento. “’He
aquí, que hay un millón cuatrocientos seis mil seiscientos modos de origen. Quinientas
formas del kamma, cinco formas y tres formas. Pleno kamma y medio kamma. He aquí, que
hay sesenta y dos senderos, sesenta y dos eones intermedios, seis grandes clases de
renacimientos, ocho clases de hombres, cuatro mil novecientas ocupaciones humanas, cuatro
mil novecientas clases de ascetas mendicantes, cuatro mil novecientas moradas de los nagas,
dos mil facultades, tres mil infiernos, treinta y seis reinos de polvo, siete esferas de seres
conscientes, siete esferas de seres inconscientes, siete clases de seres ‘libres de ataduras’,
siete grados de los devas, siete grados de los seres humanos, siete grados de los demonios,
siete grandes lagos, siete grandes nudos, setecientos grandes precipicios, setecientos
precipicios menores, setecientos grandes sueños, setecientos sueños menores, ochenta y
cuatro mil grandes eones, durante los cuales tanto los tontos como los sabios recorren la
interminable rueda, hasta poner fin a sus sufrimientos.
“’De modo que, aunque alguien pensara: «a través de mi moralidad, a través de mis prácticas,
a través de la austeridad o a través de la vida santa voy a madurar el kamma aún no maduro
y voy a eliminar el kamma ya maduro siempre que me toque hacerlo» - esto sería imposible.
Los placeres y las penas están en su justa medida y todo está fijado dentro de sus límites. Es
imposible acortarlo ni alargarlo, imposible acelerarlo y desacelerarlo. Al igual que cuando
se lanza una pelota envuelta con un cordón, la misma se para recién cuando se desenrolla el
cordón, así también, sólo llegando al fin de su trasmigración, tanto el tonto como el sabio,
llega al fin de sus penas’.
[21] “De esta manera, Venerable Señor, Makkhali Gosala, al ser preguntado por los frutos
de la vida contemplativa, visibles aquí y ahora, me habló de la purificación mediante la vida
errabunda. Es como si alguien, al ser indagado acerca del mango, respondiera acerca del fruto
del árbol del pan; o alguien indagado acerca del fruto del árbol del pan, respondiera acerca
del mango. De la misma manera, Venerable Señor, Makkhali Gosala cuando fue preguntado
acerca de los frutos de la vida contemplativa, visibles aquí y ahora, respondió acerca de la
purificación mediante la vida errabunda. Entonces, se me ocurrió el siguiente pensamiento:
‘¿Cómo podría alguien hacer que se menospreciara a algún asceta o brahmán que vive dentro
de su territorio?’ Entonces, aunque no me haya deleitado en las palabras de Makkhali Gosala,
tampoco las rechacé. Sin deleitarme y sin rechazarlas, me quedé insatisfecho. Sin deleitarme
y sin rechazarlas, me levanté de mi asiento y me retiré.
3.3. Ajitakesakambalavada - Teoría de Ajita Kesakambala
[22] “En otra ocasión, Venerable Señor, me acerqué a Ajita Kesakambali. Al intercambiar
con él cordiales saludos, me senté a un lado y pregunté lo siguiente: ‘Venerable Ajita, he
aquí que existen estos diferentes artesanos: los entrenadores de elefantes... (sigue igual que
en verso 14) ¿Sería posible, Venerable Ajita, señalar un fruto similar en caso de la vida
contemplativa, que fuera visible aquí y ahora?’.

[23] “Cuando dije esto, Makkhali Gosala me respondió: ‘Se Majestad, he aquí que no hay
nada dado, nada ofrecido, ni nada sacrificado. No existen frutos o resultados tanto de las
buenas como de las malas acciones. No existe ni este mundo ni el venidero. No hay madre
ni padre, ni tampoco renacimientos espontáneos de los seres. No hay ascetas ni brahmanes,
los cuales, habiendo practicado correctamente, alcanzaran la meta directamente, mediante su
propio descubrimiento, y que proclamaran este mundo o el venidero. Los seres humanos se
componen de los cuatro elementos primarios. Al morir, la parte de la tierra retorna a su estado
anterior y se funde con la sustancia de la tierra. La parte del fuego retorna a su estado anterior
y se funde con la sustancia del fuego. La parte líquida retorna a su estado anterior y se funde
con la sustancia líquida. La parte del viento retorna a su estado anterior y se funde con la
sustancia del viento. Las facultades sensoriales se esparcen por el espacio. Los cuatro
hombres con las andas, cargan el cadáver como si fuera una quinta persona. Se escuchan sus
pasos hasta el cementerio. Luego, los huesos se ponen blancos y el sacrificio termina con las
cenizas. La generosidad, es la enseñanza de los idiotas. Las palabras de aquellos que hablan
de la existencia después de la muerte, son como un parloteo falso y vacío. Con la destrucción
del cuerpo, tanto el sabio como el tonto son aniquilados por igual y destruidos. Ya nadie
existe después de la muerte’.
[24] “De esta manera, Venerable Señor, Ajita Kesakambalin, al ser preguntado por los frutos
de la vida contemplativa, visibles aquí y ahora, me habló sobre la aniquilación. Es como si
alguien, al ser indagado acerca del mango, respondiera acerca del fruto del árbol del pan; o
alguien indagado acerca del fruto del árbol del pan, respondiera acerca del mango. De la
misma manera, Venerable Señor, Ajita Kesakambalin, cuando fue preguntado acerca de los
frutos de la vida contemplativa, visibles aquí y ahora, me habló sobre la aniquilación.
Entonces, se me ocurrió el siguiente pensamiento: ‘¿Cómo podría alguien hacer que se
menospreciara a un asceta o brahmán que vive dentro de su territorio?’ Entonces, aunque no
me haya deleitado en las palabras de Ajita Kesakambalin, tampoco las rechacé. Sin
deleitarme y sin rechazarlas, me quedé insatisfecho. Sin deleitarme y sin rechazarlas, me
levanté de mi asiento y me retiré.
3.4. Pakudhakaccayanavada - Teoría de Pakudha Kaccayana
[25] “En otra ocasión, Venerable Señor, me acerqué a Pakudha Kaccayana. Al intercambiar
con él cordiales saludos, me senté a un lado y pregunté lo siguiente: ‘Venerable Pakudha, he
aquí que existen estos diferentes artesanos: los entrenadores de elefantes... (sigue igual que
en el verso 14) ¿Sería posible, Venerable Pakudha, señalar un fruto similar en caso de la vida
contemplativa, que fuera visible aquí y ahora?’.
[26] “Cuando dije esto, Pakudha Kaccayana me respondió: ‘Su Majestad, he aquí que existen
estas siete sustancias –no hechas, irreducibles, no creadas, no producidas, estériles, firmes
como el pico de la montaña y estables como un pilar- sustancias que no se alteran, no
cambian, no interfieren una en la otra, incapaces de causar a las otras placer, pena, ni ambas
cosas. ¿Cuáles son estas siete sustancias? Sustancia de la tierra, sustancia líquida, sustancia
del fuego, sustancia del viento, placer, pena y el alma. Éstas son las siete sustancias –no
hechas, irreducibles, no creadas, no producidas, estériles, firmes como el pico de la montaña
y estables como un pilar- sustancias que no se alteran, no cambian, no interfieren una en la
otra, incapaces de causar a las otras el placer, la pena, ni ambas cosas.
“’Entre estas sustancias no hay asesino alguno ni alguien que podría causar la muerte, no hay
oyente, ni alguien que podría causar la audición, no hay conocedor ni alguien que podría
causar la cognición. Cuando alguien corta la cabeza [de otra persona], en realidad no existe
el asesino. Simplemente, la espada atraviesa el espacio existente entre estas siete sustancias’.
[27] “De esta manera, Venerable Señor, Pakudha Kaccayana, al ser preguntado por los frutos
de la vida contemplativa, visibles aquí y ahora, me habló sobre el norelacionamiento. Es
como si alguien, al ser indagado acerca del mango, respondiera acerca del fruto del árbol del
pan; o alguien indagado acerca del fruto del árbol del pan, respondiera acerca del mango. De
la misma manera, Venerable Señor, Pakudha Kaccayana, cuando fue preguntado acerca de
los frutos de la vida contemplativa, visibles aquí y ahora, me habló sobre el
norelacionamiento. Entonces, se me ocurrió el siguiente pensamiento: ‘¿Cómo podría
alguien hacer que se menospreciara a un asceta o brahmán que vive dentro de su territorio?’
Entonces, aunque no me haya deleitado en las palabras de Pakudha Kaccayana, tampoco las
rechacé. Sin deleitarme y sin rechazarla, me quedé insatisfecho. Sin deleitarme y sin
rechazarlas, me levanté de mi asiento y me retiré.
3.5. Niganthanataputtavada - Teoría de Nigantha Nataputta
[28] “En otra ocasión, Venerable Señor, me acerqué a Nigantha Nataputta. Al intercambiar
con él cordiales saludos, me senté a un lado y pregunté lo siguiente: ‘Venerable Nigantha,
he aquí que existen estos diferentes artesanos: los entrenadores de elefantes... (sigue igual
que en el verso 14) ¿Sería posible, venerable Nigantha, señalar un fruto similar en caso de la
vida contemplativa, que fuera visible aquí y ahora?’.
[29] “Cuando dije esto, Nigantha Nataputta me respondió: ‘Su Majestad, he aquí que en caso
de Nigantha –el de los nudos desatados- él vive restringido por cuatro tipos de restricciones.
¿Y cómo es que Nigantha vive restringido por cuatro tipos de restricciones? En este caso,
Nigantha está restringido en lo que respecta a todas las aguas, puede evitar a todos los males,
está purificado al haber evitado todos los males y está impregnado con la prevención de todos
los males. Es así como Nigantha vive restringido por cuatro tipos de restricciones. Cuando
Nigantha –el de los nudos desatados- vive refrenado de esta manera por cuatro tipos de
restricciones, se convierte en Desatado [Nigantha], hijo de Nata [Nataputta], el perfecto por
sí mismo, controlado por sí mismo y establecido por sí mismo’. [30] “De esta manera,
Venerable Señor, Nigantha Nataputta, al ser preguntado por los frutos de la vida
contemplativa, visibles aquí y ahora, me habló sobre la cuádruple restricción. Es como si
alguien, al ser indagado acerca del mango, respondiera acerca del fruto del árbol del pan; o
alguien indagado acerca del fruto del árbol del pan, respondiera acerca del mango. De la
misma manera, Venerable Señor, Nigantha Nataputta, cuando fue preguntado acerca de los
frutos de la vida contemplativa, visibles aquí y ahora, me habló sobre la cuádruple
restricción. Entonces, se me ocurrió el siguiente pensamiento: ‘¿Cómo podría alguien hacer
que se menospreciara a un asceta o brahmán que vive dentro de su territorio?’ Entonces,
aunque no me haya deleitado en las palabras de Nigantha Nataputta, tampoco las rechacé.
Sin deleitarme y sin rechazarlas, me quedé insatisfecho. Sin deleitarme y sin rechazarlas, me
levanté de mi asiento y me retiré.
3.6. Sankayabelatthaputtavada - Teoría de Sankaya Belatthaputta
[31] “En otra ocasión, Venerable Señor, me acerqué a Sanjaya Belatthaputta. Al intercambiar
con él cordiales saludos, me senté a un lado y pregunté lo siguiente: ‘Venerable Sañjaya,
he aquí que existen estos diferentes artesanos: los entrenadores de elefantes... (sigue
igual que en el verso 14) ¿Sería posible, Venerable Sañjaya, señalar un fruto similar en
caso de la vida contemplativa, un que fuera visible aquí y ahora?’.
[32] “Cuando dije esto, Sañjaya Belatthaputta me respondió: ‘Si me preguntases:
A. 1. «¿Existe el mundo más allá?», y si yo pensase que existiese tal mundo, podría declararte
«existe un mundo más allá». Pero yo no digo «esto es de esta manera», ni «esto es de tal
manera» ni «esto se otra manera». No digo «esto no es así» ni tampoco digo «no es cierto
que esto no es así».

“‘Y si me preguntases:
A. 2. «¿no existe el mundo más allá?»…
3. «¿sea que ambas cosas son ciertas: que existe y que no existe el mundo más allá?»…

4. «¿sea que ninguno es cierto: que ni existe ni no existe el mundo más allá?»…
B. 1. «¿hay seres que han tomado el renacimiento?»…
2. «¿no hay seres que han tomado el renacimiento?»…
3. «¿sea que ambas cosas son ciertas: que hay seres que han tomado el renacimiento y que
no hay seres que han tomado el renacimiento?»…
4. «¿sea que ninguno es cierto: que ni hay seres que han tomado el renacimiento y no hay
seres que han tomado el renacimiento?»…
C. 1. «¿existen los frutos y los resultados de las buenas acciones?»…
2. «¿no existen los frutos y los resultados de las buenas acciones?»…
3. «¿sea que ambas cosas son ciertas: que existen los frutos y los resultados de las buenas
acciones y que no existen los frutos y los resultados de las buenas acciones?»…
4. «¿sea que ninguno es cierto: que ni existen los frutos y los resultados de las buenas
acciones ni no existen los frutos y los resultados de las buenas acciones?»…
D. 1. «¿existe el Tathagata después de la muerte?»…
2. «¿no existe el Tathagata después de la muerte?»…
3. «¿sea que ambas cosas son ciertas: que existe el Tathagata después de la muerte y que no
existe el Tathagata después de la muerte?»…
4. «¿sea que ninguno es cierto: que ni existe el Tathagata después de la muerte ni no existe
el Tathagata después de la muerte?» y si yo pensase esto podría declararte «esto es asís».
Pero yo no digo «esto es de esta manera», ni «esto es de tal manera» ni «esto se otra
manera». No digo «esto no es así» ni tampoco digo «no es cierto que esto no es así». [33]
“De esta manera, Venerable Señor, Sanjaya Belatthaputta, al ser preguntado por los frutos
de la vida contemplativa, visibles aquí y ahora, me habló con evasivas. Es como si alguien,
al ser indagado acerca del mango, respondiera acerca del fruto del árbol del pan; o alguien
indagado acerca del fruto del árbol del pan, respondiera acerca del mango. De la misma
manera, Venerable Señor, Sanjaya Belatthaputta, cuando fue preguntado acerca de los
frutos de la vida contemplativa, visibles aquí y ahora, me habló con evasivas. Y se me
ocurrió este pensamiento: ‘Entre todos estos ascetas y brahmanes, ¡éste es, sin lugar a
dudas, el más estúpido de todos! ¿Cómo es posible que alguien siendo preguntado por los
frutos de la vida contemplativa, visibles aquí y ahora, me hable con evasivas?’ Pero
también, se me ocurrió el siguiente pensamiento: ‘¿Cómo podría alguien hacer que se
menospreciara a un asceta o brahmán que vive dentro de su territorio?’ Entonces, aunque
no me haya deleitado en las palabras de Sanjaya Belatthaputta, tampoco las rechacé. Sin
deleitarme y sin rechazarlas, me quedé insatisfecho. Sin deleitarme y sin rechazarlas, me
levanté de mi asiento y me retiré.
4. Samannaphala - Los frutos de la vida contemplativa
4.1. Pathamasanditthikasamannaphala - El primer fruto visible de la vida
contemplativa
[34] “Es por todo eso, Venerable Señor, que me dirijo ahora al Bienaventurado con esta
pregunta: he aquí que existen estos diferentes artesanos: los entrenadores de elefantes, los
entrenadores de caballos, los aurigas, los arqueros, los abanderados, los mariscales de campo,
los oficiales paladines, los altos oficiales reales, los comandos, los héroes militares, los
guerreros vestidos de armaduras, los guerreros vestidos de cuero, los esclavos domésticos,
los pasteleros, los peluqueros, los encargados de los baños, los cocineros, los fabricantes de
guirnaldas, los lavanderos, los tejedores, los fabricantes de cestas, los alfareros, los
contadores y especialistas en cálculos, y otros muchos semejantes artesanos. Todos ellos
viven del fruto de sus artes, los cuales son visibles aquí y ahora. Sus artes les proporcionan
la felicidad y el placer a ellos mismos y a sus padres, esposas e hijos, como también a sus
amigos y colegas. Con el fruto de sus artes, mantienen a los ascetas y brahmanes
asegurándose, de esta manera,a sí mismos, un feliz y celestial destino en los futuros
renacimientos. ¿Sería posible, señor, señalar un fruto similar en caso de la vida
contemplativa, un fruto que fuera visible aquí y ahora?”.
“Así es, Su Majestad, lo puedo señalar. Pero primero, en consideración a esto, quisiera
hacerle unas contra-preguntas.
[35] Que Su Majestad responda, según su parecer. Suponga que tiene en su entorno a uno de
sus hombres, un esclavo o un obrero, que siempre se levanta más temprano que Usted, se
acuesta tarde sólo después de que Usted se hubo retirado, siempre obedece sus órdenes, actúa
conforme a sus deseos, habla bien de Usted y trabaja siempre en su presencia. Y que un día
se le ocurre este pensamiento: ‘¿No es esto maravilloso? ¿No son realmente asombrosos, el
destino y los resultados de las acciones meritorias? He aquí que este rey Ajatasattu es un ser
humano, al igual que yo. Sin embargo, el rey Ajatasattu disfruta por sí mismo el suministro
de todo lo que puede ser alcanzado por los sentidos, como si fuera un deva, mientras que yo
soy un esclavo que trabaja siempre en su presencia. ¿Qué tal si yo también emprendo algunas
acciones meritorias? ¿Qué tal si afeito mi cabeza y mi barba, me visto con el hábito amarillo
y renuncio a esta vida hogareña para vivir el estilo de vida sin hogar?’. “De modo que,
después de cierto tiempo efectivamente afeita su cabeza y la barba, se viste con el hábito
amarillo y renuncia a la vida hogareña para vivir el estilo de vida sin hogar. Y viviendo así,
restringe su cuerpo, su manera de hablar y su mente, se contenta con la comida simple y con
la vivienda sencilla y se deleita en la soledad. Suponga entonces, que otro de sus hombres le
informa de esto: ‘Su Majestad debe saber que un hombre de su entorno, un esclavo... que
trabaja siempre en su presencia... renunció a la vida hogareña para vivir el estilo de vida sin
hogar... se contenta ahora con la comida simple y con la vivienda sencilla, se deleita en la
soledad.’ Después de semejante informe, ¿podría Su
Majestad decir: ‘Tráigase a este hombre de vuelta! ¡Qué vuelva a trabajar en mi presencia!’?”
[36] “De ninguna manera, Venerable Señor. Por el contrario, me acercaría a él e inclinaría
respetuosamente mi cabeza delante de él y le invitaría a sentarse conmigo. Le invitaría a
recibir de mí las vestimentas, los donativos de la comida, el alojamiento y los requisitos
medicinales para su salud. Le proveería seguridad, defensa y protección”.
“Entonces, ¿qué piensa Usted, Su Majestad: en este caso, hay algún fruto visible de la vida
contemplativa o no?”
“Sí, Venerable Señor. En este caso, ciertamente, hay un fruto visible de la vida
contemplativa”.
“Este es, Su Majestad, el primer fruto de la vida contemplativa, visible aquí y ahora, que
puedo señalar para Usted”.
4.2. Dutiyasanditthikasamannaphala - El segundo fruto visible de la vida
contemplativa
[37] “Pero, Venerable Señor, ¿sería posible que el Bienaventurado señale algún otro fruto de
la vida contemplativa que fuera visible aquí y ahora?”.
“Así es, Su Majestad, lo puedo señalar. Pero primero, en consideración a esto, quisiera
hacerle unas contra-preguntas. Que Su Majestad me responda, según su parecer. Suponga
que, en su entorno, tiene a uno de sus hombres, un agricultor, un hombre hogareño, un
contribuyente que engrosa su tesoro real. Y que un día, se le ocurre este pensamiento: ‘¿No
es esto maravilloso? ¿No son realmente asombrosos, el destino y los resultados de las
acciones meritorias? He aquí que este rey Ajatasattu es un ser humano, al igual que yo. Sin
embargo, el rey Ajatasattu disfruta por sí mismo el suministro de todo lo que puede ser
alcanzado por los sentidos, como si fuera un deva, mientras que yo soy un agricultor, un
hombre hogareño, un contribuyente que engrosa su tesoro real. ¿Qué tal si yo también
emprendo algunas acciones meritorias? ¿Qué tal si afeito mi cabeza y barba, me visto con el
hábito amarillo y renuncio a esta vida hogareña para vivir el estilo de vida sin hogar?’. “De
modo que, después de cierto tiempo, efectivamente afeita su cabeza y su barba, se viste con
el hábito amarillo y renuncia a la vida hogareña para vivir el estilo de vida sin hogar. Y
viviendo así, restringe su cuerpo, su manera de hablar y su mente, se contenta con la comida
simple y con la vivienda sencilla y se deleita en la soledad. Suponga entonces, que otro de
sus hombres le informa de esto: ‘Su Majestad debe saber que un hombre de su entorno, un
agricultor, un hombre hogareño, un contribuyente que engrosa sus tesoros reales... dejó la
vida hogareña para vivir el estilo de vida sin hogar... se contenta ahora con la comida simple
y con la vivienda sencilla y se deleita en la soledad’. Después de semejante informe, ¿podría
Su Majestad decir: ‘Tráigase a este hombre de vuelta! ¡Qué vuelva a ser agricultor, hombre
hogareño, contribuyente que engrosa mis tesoros reales’?”. [38] “De ninguna manera,
Venerable Señor. Por el contrario, me acercaría a él e inclinaría respetuosamente mi cabeza
delante de él y le invitaría a sentarse conmigo. Le invitaría a recibir de mí las vestimentas,
los donativos de comida, el alojamiento y los requisitos medicinales para su salud. Le
proveería seguridad, defensa y protección”.
“Entonces, ¿qué piensa Usted, Su Majestad: en este caso, hay algún fruto visible de la vida
contemplativa o no?”
“Sí, Venerable Señor. En este caso, ciertamente, hay un fruto visible de la vida
contemplativa”.
“Este es, Su Majestad, el segundo fruto de la vida contemplativa, visible aquí y ahora, que
puedo señalar para Usted”.
4.3. Panitatarasamannaphala - Los frutos superiores de la vida contemplativa [39]
Pero Venerable Señor, ¿sería posible, que el Bienaventurado señale algún otro fruto de la
vida contemplativa que fuera visible aquí y ahora?”
“Así es, gran rey, lo puedo señalar. Preste atención, su majestad, que voy a hablar”. “Así sea,
Venerable Señor”, respondió el rey Ajatasattu y el Bienaventurado continuó:
[40] “Este es el caso, gran rey, en el cual el Tathagata aparece en el mundo, un Arahant, un
Buda plenamente iluminado, perfecto en conocimiento y conducta, el Sublime, el
Conocedor de los mundos, inigualado maestro de han de ser amansados, el maestro de los
devas y los seres humanos, el Buda, el Bienaventurado. El Dhamma que enseña es agradable
en el comienzo, agradable en el medio y agradable al final. Enseña tanto su espíritu como la
letra, exhibiéndolo perfecta y plenamente y viviendo una vida santa, rigurosa y pura.
[41] “Un hombre hogareño o el hijo del hombre hogareño, o alguien que hubo renacido desde
un hogar a otro, al escuchar este Dhamma, obtiene fe en el Tathagata reflexionando de esta
manera: ‘La vida hogareña es un camino limitado y cubierto de polvo, mientras que la vida
sin hogar es como vivir al aire libre. Esta no es una tarea fácil: vivir en el hogar y practicar
una vida totalmente perfecta, totalmente pura y mantenerla brillante como una concha
desvainada. ¿Qué tal si afeito mi cabeza y mi barba, me visto con el hábito amarillo y dejo
esta vida hogareña para vivir el estilo de vida sin hogar?’
[42] “De modo que, después de cierto tiempo efectivamente abandona sus riquezas,
pequeñas o grandes, deja el círculo de sus parientes, pequeño o grande, afeita su cabeza y su
barba, se viste con el hábito amarillo para vivir el estilo de vida sin hogar.
“Y viviendo así, se restringe a sí mismo mediante el Patimokkha, teniendo cuidado de no
cometer la menor falta con su cuerpo, con sus acciones o palabras, enteramente entregado a
purificar su vida, a la virtud, guardando las puertas de sus sentidos, dotado de la atención
consciente y clara atención, estando además contento”.
4.3.1. Sila – Moralidad
4.3.1.1. Culasila - Sección menor de la moral
[43] “¿Y cómo, Su Majestad, el monje perfecciona la virtud? Dejando de dar la muerte a los
seres vivos, se mantiene distante de la destrucción de la vida; sin garrotes o espadas, se
avergüenza de la violencia. Vive compasivo y amable con todos los seres vivos. Así se
perfecciona en la virtud.
“Dejando de tomar lo que no le ha sido dado, se mantiene distante de codiciar aquello que
no es de él. Toma solamente lo que le es ofrecido y mientras espera las limosnas, transcurre
su vida en la honestidad y en la pureza del corazón. De esta manera, también se perfecciona
en la virtud. “Dejando la vida sin celibato, vive en castidad. Se mantiene distante de las
prácticas vulgares relacionadas con los actos sexuales. De esta manera, también se
perfecciona en la virtud. [44] “Dejando las palabras mentirosas, se mantiene distante de la
falsedad. Habla la verdad sin dobleces, es creíble y digno de confianza; nunca quiebra su
palabra. De esta manera, también se perfecciona en la virtud.
“Dejando la difamación y calumnia, se mantiene distante de la embustería. Lo que escucha
aquí, no lo repite en otro lugar, para no causar riñas con la gente de aquí; y lo que escucha
en otro lugar, no lo repite aquí, para no causar riñas con la gente de allí. Así vive él, como el
reconciliador de aquellos que están divididos, animando a los que viven en amistad, hacedor
y amante de la paz, apasionado por la causa de la paz; sus palabras son siempre pacíficas. De
esta manera, también se perfecciona en la virtud.
“Dejando la rudeza de hablar, se mantiene distante del lenguaje violento. Cada una de sus
palabras es intachable, agradable, encantadora, que toca el corazón y es cortés. La gente ama
su forma de hablar y se complace en ella. De esta manera, también se perfecciona en la virtud.
“Dejando las charlas frívolas, se mantiene distante de las vanas conversaciones. Sus palabras
son siempre correctas, acordes a los hechos y llenas de significado; versan sólo sobre el
Dhamma y Disciplina. Habla siempre a tiempo justo, y sus palabras son dignas de ser
escuchadas, llegan al corazón, son ilustrativas, claramente escogidas y siempre tocan el
punto. De esta manera, el monje se perfecciona en la virtud.

[45] “Se abstiene de causar daños a las semillas o las plantas,


“Toma una sola comida al día y nunca come por la noche, y se abstiene de comer en el horario
indebido,
“Se abstiene de mirar los espectáculos de entretenimiento,
“Se abstiene de danzar, cantar y escuchar la música,
“Se abstiene de usar adornos, ni se embellece con guirnaldas, perfumes o ungüentos,
“Se abstiene de usar grandes y cómodos lechos,
“Se abstiene de recibir oro y plata,
“Se abstiene de aceptar granos no cocinados,
“Se abstiene de aceptar la comida cruda,

“Se abstiene de aceptar mujeres o muchachas,


“Se abstiene de aceptar esclavos y esclavas,
“Se abstiene de aceptar ovejas y cabras,
“Se abstiene de aceptar aves y cerdos,
“Se abstiene de aceptar elefantes, reses, caballos y yeguas,
“Se abstiene de aceptar campos de cultivo y campos baldíos,
“Se abstiene de mandar recados,
“Se abstiene de comprar y vender,
“Se abstiene del engaño con las falsas pesas o medidas,
“Se abstiene del camino torcido de sobornos, estafas y fraudes,
“Se abstiene de mutilaciones, asesinatos y aprisionamientos, “Se abstiene
de asaltos, robos y de la violencia.

“Todo esto, también forma parte de su perfeccionamiento en la virtud”.


4.3.1.2. Majjhimasila - Sección mediana de la moral
[46] “Mientras algunos ascetas y brahmanes, aunque se sostienen de la comida provista por
sus seguidores, siguen siendo adictos a dañar los semilleros y a todo tipo de plantas en
crecimiento: propagadas desde las raíces, tallos, recortes, articulaciones y simientes –él se
mantiene distante de este tipo de daño hecho a los semilleros y a las plantas en crecimiento.
De esta manera, también se perfecciona en la virtud.
[47] “Mientras algunos ascetas y brahmanes, aunque se sostienen de la comida provista por
sus seguidores, siguen siendo adictos a acumular bienes: acumular comida, bebida,
vestimentas, equipajes, camas, perfumes o condimentos –él se mantiene distante de
semejante uso de cosas acumuladas. De esta manera, también se perfecciona en la virtud.
[48] “Mientras algunos ascetas y brahmanes, aunque se sostienen de la comida provista por
sus seguidores, siguen siendo adictos a visitar los espectáculos de entretenimiento, como la
danza, las canciones, la música instrumental, las ferias, los romances, el manualismo, los
cánticos de los bardos, los conciertos de las percusiones, el teatro de hadas, las acrobáticas
hazañas de los Candalas, el combate de los elefantes, búfalos, toros, cabras, carneros, gallos
y codornices, las luchas con duelas, el boxeo, las peleas, las luchas fingidas, los desfiles, las
maniobras y los exámenes militares –él se mantiene distante de visitar semejantes
espectáculos de entretenimiento. De esta manera, también se perfecciona en la virtud. [49]
“Mientras algunos ascetas y brahmines, aunque se sostienen de la comida provista por sus
seguidores, siguen siendo adictos a juegos y recreaciones, como los juegos de tabla con ocho
o diez hileras de cuadrados, estos mismos juegos jugados imaginariamente en tablas del aire,
las rayuelas, removiendo piezas del montón y poniéndolas de vuelta, lanzando dados,
golpeando palo corto con el largo, haciendo “dibujos de la mano”, jugando con pelotas,
soplando a través de juguetes de hojas, surcando con juguetes arados, girando en un trapecio,
jugando con juguetes-molinos de viento hechos de hojas de bambú, jugando con los juguetes-
medidas hechos con hojas de bambú, jugando con juguetes-carros o con juguetes que se
inclinan, adivinando el contenido de las cartas trazadas en el aire o en la espalda del otro
jugador, adivinando los pensamientos del otro jugador e imitando las deformaciones – él se
mantiene distante de semejantes juegos y recreaciones. De esta manera, también se
perfecciona en la virtud.
[50] “Mientras algunos ascetas y brahmanes, aunque se sostienen de la comida provista por
sus seguidores, siguen siendo adictos al uso de altos y lujosos sofás; es decir: sofás
movedizos, altos de seis pies de altura, divanes con figuras de los animales esculpidos en los
soportes, cobertores de pieles de cabras del largo vellón, coloridos retazos cristalinos, mantas
blancas, cobertores de lana bordados con flores, edredones rellenados de lana de algodón,
cobertores bordados con figuras de leones, tigres y otros animales, alfombras con pelaje de
ambos lados, alfombras con pelaje de un solo lado, cobertores bordados con piedras
preciosas, cobertores de seda, alfombras de gran tamaño, sufrientes para dieciséis bailarinas,
alfombras con elefantes, caballos y carros, alfombras hechas de las pieles de antílopes,
cosidas juntas, alfombras hechas de los antílopes machos, alfombras con toldos y sofás con
almohadas rojas en la cabecera y en los pies –él se mantiene distante de semejantes altos y
lujosos sofás. De esta manera, también se perfecciona en la virtud.
[51] “Mientras algunos ascetas y brahmanes, aunque se sostienen de la comida provista por
sus seguidores, siguen siendo adictos a adornarse y embellecerse; es decir, frotando sus
cuerpos con polvos perfumados, limpiando y lavándolos en espumas, dando golpecitos a sus
miembros con cachiporras como lo hacen los luchadores, usando espejos, ungüentos de ojos,
guirnaldas, coloretes, cosméticos, pulseras, collares, bastones de adorno, lengüetas para sus
perros, estoques, sombrillas, pantuflas adornadas, turbantes, diademas, colas batidas de los
yak y largos flecos bordeados en sus vestidos –él se mantiene distante de semejantes adornos
y formas de embellecimiento. De esta manera, también se perfecciona en la virtud.
[52] “Mientras algunos ascetas y brahmanes, aunque se sostienen de la comida provista por
sus seguidores, siguen siendo adictos a las bajas conversaciones, como estas: los cuentos
sobre reyes, ladrones, ministros del estado, cuentos de guerra, de terror y de batallas, charlas
acerca de comidas y bebidas, vestimenta, camas, guirnaldas, perfumes; pláticas sobre las
relaciones, viajes, pueblos, ciudades, poblados y países; charlas sobre las mujeres y sobre los
héroes, chismorreo en las esquinas de las calles o en lugares donde se busca el agua; historias
de espíritus, conversaciones desganadas, especulaciones acerca de la creación de la tierra o
del mar, o sobre la existencia o la no existencia –él se mantiene distante de semejantes
conversaciones bajas. De esta manera, también se perfecciona en la virtud. [53] “Mientras
algunos ascetas y brahmanes, aunque se sostienen de la comida provista por sus seguidores,
siguen siendo adictos a usar las frases reñidas, como por ejemplo: «Tú no entiendes este
Dhamma-y-Disciplina, yo sí, la entiendo; ¿Cómo sería posible que conocieras este
Dhammay-Disciplina?»; «Has caído en un punto de vista falso. Soy yo, el que mantiene el
punto de vista correcto»; «Yo estoy hablando sobre el punto, tú divagas»; «Pusiste al final,
lo que debería ir primero; pusiste primero, lo que debería ir al final»; «Lo que creías cierto
por tanto tiempo, ya ha sido refutado»; «Tu desafío ha sido tomado»; «Tú mismo probaste
estar equivocado»; «Trabaja para aclarar tu punto de vista» o «Desenrédate tú mismo, si
puedes» –él se mantiene distante de usar semejantes frases reñidas. De esta manera, también
se perfecciona en la virtud.
[54] “Mientras algunos ascetas y brahmanes, aunque se sostienen de la comida provista por
sus seguidores, siguen siendo adictos a mandar mensajes, enviando recados, haciendo de
mensajeros, ofreciendo servicios de inteligencia a los reyes, ministros del estado, a los
khattiyas, brahmanes o a los jóvenes, diciendo: «Ve allá, ven aquí, toma a éste contigo, trae
esto desde allí» –él se mantiene distante de semejantes ocupaciones serviles. De esta manera,
también se perfecciona en la virtud.
[55] “Mientras algunos ascetas y brahmanes, aunque se sostienen de la comida provista por
sus seguidores, siguen siendo embaucadores, parásitos asalariados de palabras santas,
adivinos y exorcistas, sedientos de acumular sus ganancias –él se mantiene distante de
semejante engaño y golpeteo. De esta manera, también se perfecciona en la virtud.
4.3.1.3. Mahasila - Gran sección de la moral
[56] “Mientras algunos ascetas y brahmanes, aunque se sostienen de la comida provista por
sus seguidores, se ganan la vida de manera incorrecta, mediante el desarrollo de los artes
bajos, como por ejemplo, profetizando una larga vida o prosperidad a través de la
quiromancia, leyendo las marcas de las manos o pies de los niños, etc.; haciendo adivinanzas
de los agüeros o signos; prediciendo augurios de los rayos u otros objetos celestiales,
interpretando sueños, leyendo el futuro de las marcas del cuerpo, prediciendo augurios de las
marcas que dejan los roedores en la ropa, haciendo sacrificios a Agni, ofreciendo oblaciones
de la cuchara, haciendo ofrendas a las divinidades de la cáscara, haciendo ofrendas de granos
descascarillados listos para ser hervidos, haciendo ofrendas de miel y aceite; haciendo
sacrificios que consisten en echar las semillas de mostaza y otras, desde su propia boca al
fuego, derramando sangre de su rodilla derecha como sacrificio a los dioses, mirando los
nudillos y otras partes del cuerpo para, luego de refunfuñar el encanto, adivinar si el hombre
en cuestión posee un buen nacimiento, o si tiene la suerte o carece de ella; aconsejando sobre
las reglas tradicionales, invocando demonios en el cementerio, invocando espíritus, usando
los encantamientos para alojarse en una casa de tierra, encantando a la serpiente, haciendo
arte de los venenos, arte de los escorpiones, arte de los ratones, arte de las aves y arte del
cuervo; prediciendo el número de años que van a vivir los hombres, haciendo encantos para
rechazar las flechas y haciendo ruedas de los animales –él se mantiene distante de semejantes
artes bajos.
[57] “Mientras algunos ascetas y brahmanes, aunque se sostienen de la comida provista por
sus seguidores, se ganan la vida de la manera incorrecta, mediante el desarrollo de los artes
bajos, como por ejemplo, desarrollando el conocimiento sobre las buenas y las malas
cualidades de la gente, sobre sus riquezas y su suerte, a través de los siguientes elementos:
el ingenio, las piedras preciosas, las astas, las prendas de vestir, las espadas, las flechas, los
lazos, otros tipos de armamentos, a través de las mujeres, los hombres, los muchachos, las
muchachas, los eslavos, las eslavas, los elefantes, los caballos, los búfalos, los toros, los
bueyes, las cabras, las ovejas, las aves de corral, las codornices, las iguanas, las ratas de
bambú, las tortugas y otros animales –él se mantiene distante de semejantes artes bajos. [58]
“Mientras algunos ascetas y brahmanes, aunque se sostienen de la comida provista por sus
seguidores, se ganan la vida de la manera incorrecta, mediante el desarrollo de los artes bajos,
como cuando hacen este tipo de predicciones: «Los líderes marcharán adelante; los líderes
retrocederán; nuestros líderes atacarán, mientras los líderes de los enemigos, retrocederán;
los líderes de los enemigos atacarán, mientras nuestros líderes retrocederán; nuestros líderes
obtendrán la victoria, mientras los otros líderes sufrirán la derrota; los otros líderes obtendrán
la victoria, mientras los nuestros sufrirán la derrota; la victoria será para este grupo, la derrota
para aquel» –él se mantiene distante de semejantes artes bajos.
[59] “Mientras algunos ascetas y brahmanes, aunque se sostienen de la comida provista por
sus seguidores, se ganan la vida de la manera incorrecta, mediante el desarrollo de los artes
bajos, como cuando hacen esta otra clase de predicciones: «Va a haber un eclipse de la Luna;
Va a haber un eclipse del Sol; Va a haber un eclipse de una estrella; Va a haber una anomalía
en el Sol o en la Luna; El Sol o la Luna retornarán por su vía habitual; Va a haber una caída
de los meteoros; Va a haber un fuego en la jungla; Va a haber un terremoto; El dios va a
tronar; Va a haber un levantamiento o una posición determinados del Sol, de la Luna o de las
estrellas, una claridad y una disminución de ella. Y con eso, predicen para cada uno de estos
quince fenómenos, algún determinado tipo de resultado» –él se mantiene distante de
semejantes artes bajos.
[60] “Mientras algunos ascetas y brahmanes, aunque se sostienen de la comida provista por
sus seguidores, se ganan la vida de la manera incorrecta, mediante el desarrollo de los artes
bajos, como estos: prediciendo la abundancia o la escasez de las lluvias; prediciendo una
buena cosecha o una escasez de alimentos; prediciendo la tranquilidad o los disturbios;
prediciendo la pestilencia o tiempos saludables; contando con los dedos o sin la utilización
de los dedos; sumando grandes números, componiendo romances y poesías; haciendo
casuística y sofistería –él se mantiene distante de semejantes artes bajos.
[61] “Mientras algunos ascetas y brahmanes, aunque se sostienen de la comida provista por
sus seguidores, se ganan la vida de la manera incorrecta, mediante el desarrollo de los artes
bajos, como estos: disponiendo de fechas felices para realizar matrimonios, en los cuales el
novio o la novia están llevados a casa; disponiendo de fechas felices para realizar
matrimonios, en los cuales el novio o la novia están llevados afuera; fijando un tiempo feliz
para la realización de tratados de paz [o usando los encantamientos para procurar la armonía];
fijando tiempos felices para el comienzo de las hostilidades [o usando los encantamientos
para procurar la discordia]; fijando tiempos felices para las deudas [o usando los
encantamientos para aventar exitosamente en los dados]; fijando tiempos felices para gastar
el dinero [o usando los encantamientos para traer mala suerte al oponente en los dados];
usando encantamientos para hacer la gente feliz, usando encantamientos para hacer la gente
infeliz, usando encantamientos para provocar el aborto, haciendo conjuros para enmudecer
a alguien, haciendo conjuros para mantener fija la mandíbula de alguien, haciendo conjuros
para estirar la mano de alguien, haciendo conjuros para ensordecer a alguien, obteniendo
respuestas de los oráculos, como la del espejo mágico; obteniendo respuestas de los oráculos
por medio de la muchacha poseída, obteniendo respuestas de los oráculos de parte de la
divinidad, adorando al Sol, adornado al Gran Ser, sacando fuegos de su propia boca e
invocando a Siri, la diosa de la buena fortuna –él se mantiene distante de semejantes artes
bajos.
[62] “Mientras algunos ascetas y brahmanes, aunque se sostienen de la comida provista por
sus seguidores, se ganan la vida de la manera incorrecta, mediante el desarrollo de los artes
bajos, como estos: jurando regalos a la divinidad si se garantice cierto determinado beneficio,
pagando estos votos, repitiendo encantamientos mientras se trasladan a las casas de la tierra,
causando virilidad, haciendo impotente al hombre, fijando sitios felices para la morada,
consagrando los sitios, haciendo ceremonias de los meses, haciendo baños rituales,
ofreciendo sacrificios, administrando vomitivos y purgativos, purgando la gente para aliviar
sus cabezas, engrasar las orejas de la gente, satisfaciendo los ojos de la gente, administrando
drogas a través de la nariz, aplicando colirio a los ojos, ofreciendo pomadas medicinales para
los ojos, practicando como oculistas, practicando como cirujanos, practicando como
pediatras, administrando drogas y raíces y administrando medicinas de manera rotativa –él
se mantiene distante de semejantes artes bajos.

“Todo esto, también forma parte de su perfeccionamiento en la virtud.


[63] “El monje que ha perfeccionado la virtud, no ve peligro alguno en nada que ayuda a sus
restricciones a través de la virtud. Al igual que un noble guerrero ungido que ha derrotado a
sus enemigos, no ve peligro alguno por parte de ellos, así también el monje que ha
perfeccionado la virtud, no ve peligro alguno en nada que ayuda a sus restricciones a través
de la virtud. Envuelto en la noble totalidad de la virtud, él es internamente sensible al placer
que deriva de ser intachable. Así es, Su Majestad, cómo el monje se perfecciona en la virtud”.
4.3.2. Samaddhi - Concentración
4.3.2.1. Indriyasamvara - Restricción de los sentidos
[64] “¿Y de qué manera el monje guarda las puertas de sus sentidos? Cuando mira con sus
ojos algún objeto visible, no se apega a él ni a alguno de sus detalles. Porque si alguien vive
sin resguardar su sentido de la vista, le sobresaltan la avaricia y el pesar, de modo que, la
práctica del monje consiste en resguardar la puerta del ojo. Cuando escucha con sus oídos
algún objeto audible no se apega a él ni a alguno de sus detalles. Porque si alguien vive sin
resguardar su sentido de la audición, le sobresaltan la avaricia y el pesar, de modo que, la
práctica del monje consiste en resguardar la puerta del oído. Cuando huele con su nariz algún
objeto olfativo no se apega a él ni a alguno de sus detalles. Porque si alguien vive sin
resguardar su sentido del olfato, le sobresaltan la avaricia y el pesar, de modo que, la práctica
del monje consiste en resguardar la puerta de la nariz. Cuando degusta con su paladar algún
objeto gustativo... Cuando percibe con su cuerpo algún objeto táctil... Cuando conoce con su
intelecto algún objeto mental, no se apega a él ni a alguno de sus detalles. Porque si alguien
vive sin resguardar su sentido de la cognición, le sobresaltan la avaricia y el pesar, de modo
que, la práctica del monje consiste en resguardar la puerta de la cognición.
Dotado de esta noble restricción de las puertas de los sentidos, el monje se vuelve
internamente sensible del placer proveniente de ser intachable. Es así, cómo el monje guarda
las puertas de sus sentidos.
4.3.2.2. Satisampajanna - Atención consciente y clara comprensión [65] “¿Y
de qué manera el monje practica la atención consciente y clara comprensión? Cuando camina
hacia adelante o cuando camina hacia atrás, lo hace claramente consciente. Cuando mira
hacia adelante o mira hacia atrás, lo hace claramente consciente. Cuando flexiona sus
miembros o cuando los extiende, lo hace claramente consciente. Cuando viste la ropa interior
o cuando viste el hábito externo, lo hace claramente consciente. Cuando carga su tazón, lo
hace claramente consciente. Cuando come, bebe, mastica o saborea, lo hace claramente
consciente. Cuando orina o cuando defeca, lo hace claramente consciente.
Cuando camina, cuando está parado, cuando está sentado, cuando se recuesta para dormir,
cuando se despierta, cuando conversa o cuando permanece en silencio, todo eso hace
claramente consciente. Es así, cómo el monje practica la atención consciente y clara
comprensión.
4.3.2.3. Santosa - Contentamiento
[66] “¿Y de qué manera el monje permanece contento? El monje está satisfecho con la
vestimenta que cubre su cuerpo y está satisfecho con las limosnas de comida que le quitan el
hambre. Dondequiera que vaya, toma solamente aquello que es necesario para satisfacer sus
necesidades básicas.
“Como un pájaro que vuela de acá para allá, no llevando más carga que su propio vuelo,
satisfecho con lo que tiene, de la misma manera, el monje, permanece contento”.
4.3.2.4. Nivaranappahana - Abandono de los obstáculos
[67] “Dotado de la totalidad de la noble virtud, de esta noble restricción de los sentidos, de
esta noble atención consciente y clara comprensión y de este noble contentamiento, el monje
busca una morada solitaria: en el bosque, al pie de un árbol, en la cueva de una montaña, en
el cementerio, en la arboleda de la jungla, al aire libre o en una pila de paja. Después de
haberse alimentado, al haber regresado de su ronda en busca de las limosnas de comida, se
sienta con las piernas cruzadas y, manteniendo recto su cuerpo, establece su atención
consciente enfrente.
[68] “Dejando de lado las codicias mundanas, permanece atentamente consciente y libre de
la codicia. Limpia su mente de la codicia. Dejando de lado la maldad y el enojo, permanece
atentamente consciente y libre de la maldad, con el amor compasivo hacia el bienestar de los
seres vivientes. Limpia su mente de la maldad y del enojo. Dejando de lado la pereza y el
letargo, permanece atentamente consciente y libre de la pereza y del letargo, percibiendo la
luz atenta y conscientemente. Limpia su mente de la pereza y del letargo. Dejando de lado la
agitación y la ansiedad, permanece imperturbable y con la mente calmada. Limpia su mente
de la agitación y ansiedad. Dejando de lado la incertidumbre, permanece como alguien que
hubo traspasado las dudas, sin perplejidad en consideración de las sanas cualidades mentales.
Limpia su mente de la incertidumbre.
[69] “Suponga Usted, que un hombre, al tomar un préstamo, lo invierte en asuntos de
negocios y sus negocios le van bien: devuelve toda la vieja deuda y con el resto mantiene a
su esposa, pensando así: ‘Al tomar el préstamo, lo invertí en asuntos de negocios y mis
negocios me han ido bien; ahora, devolví toda la vieja deuda y con el resto puedo mantener
a mi esposa’. A causa de esto, puede experimentar la alegría y felicidad.
[70] “Suponga también, que un hombre hubo caído enfermo. Y su enfermedad era grave y
dolorosa: no podía disfrutar más de los alimentos y no sentía fuerza alguna en su cuerpo. Al
pasar el tiempo, finalmente se recuperó de su enfermedad y volvió a disfrutar de sus comidas,
como también volvió a sentir fuerza en su cuerpo, pensando así: ‘al caer enfermo, estuve
grave y dolorosamente dolido: no podía disfrutar más de mis alimentos y no sentía fuerza
alguna en mi cuerpo. Al pasar el tiempo, finalmente me recuperé de mi enfermedad y volví
a disfrutar de mis comidas, como también volví a sentir fuerza en mi cuerpo’. A causa de
esto, puede experimentar la alegría y felicidad.
[71] “Suponga también, que un hombre estaba encerrado en una prisión. Al pasar el tiempo,
finalmente fue liberado de este cautiverio, seguro y salvo sin haber perdido sus bienes.
Entonces, podría pensar así: ‘Antes, estaba encerrado en una prisión. Al pasar el tiempo,
finalmente fui liberado de este cautiverio y ahora estoy seguro y salvo sin haber perdido mis
bienes’. A causa de esto, puede experimentar la alegría y felicidad.
[72] “Suponga también, que un hombre esclavo, sujeto a la voluntad de otros, no siendo
dueño de sí mismo, incapaz de hacer lo que desea, finalmente, al pasar el tiempo, es liberado
de esta esclavitud, dueño de sí mismo, no más sujeto a la voluntad ajena, libre y capaz de
hacer lo que desea. Entonces, podría pensar así: ‘Antes, era un hombre esclavo, sujeto a la
voluntad de otros, no siendo dueño de mí mismo, incapaz de hacer lo que deseaba;
finalmente, al pasar el tiempo, fui liberado de esta esclavitud, ahora soy dueño de mi mismo,
no más sujeto a la voluntad ajena, libre y capaz de hacer lo que deseo’. A causa de esto,
puede experimentar la alegría y la felicidad.
[73] “Suponga también, que un hombre, portando el dinero y los bienes, está viajando a lo
largo de los caminos de un desolado país. Al pasar el tiempo, finalmente sale de este país
desolado, seguro y salvo, sin haber perdido sus bienes. Entonces, él podría pensar así: ‘Estaba
portando el dinero y los bienes, viajando a lo largo de los caminos de un desolado país. Pero
finalmente salí de él y ahora estoy seguro y salvo, sin haber perdido mis bienes’. A causa de
esto, él puede experimentar la alegría y felicidad.
[74] “De la misma manera, señor, cuando estos cinco obstáculos aún no son abandonados
por uno mismo, el monje es como si tuviera deudas, enfermedades, como si fuera prisionero
o esclavo, o como si viajara por los caminos de un desolado país.
Pero cuando estos cinco obstáculos son abandonados, el monje es como si pagara todas sus
deudas, como si recuperara su salud y libertad, o como si saliera de un lugar inseguro.
Cuando él se da cuenta de que estos cinco obstáculos hubieron sido abandonados en su
interior, nace en él la alegría que produce arrobamiento. Su cuerpo se vuelve tranquilo y
sensible a este placer, cuya sensación a su vez, produce la concentración de su mente”.
4.3.2.5. Pathamajhana - El primer jhana
[75] “Y estando así, separado de la sensualidad, separado de los insanos estados mentales,
entra y permanece en el primer jhana, acompañado por el pensamiento aplicado y el
pensamiento sostenido, lleno de arrobamiento y placer, nacidos de la reclusión. Y todo su
cuerpo está impregnado, bañado y colmado de este arrobamiento y placer nacidos de la
reclusión, de manera tal que no queda lugar alguno en todo su cuerpo, que no fuera
impregnado por el arrobamiento y placer, nacidos de la reclusión.
[76] “Como un hábil especialista en preparar baños o su aprendiz, se adiestra en verter el
polvo del baño dentro de la cuenca del latón, amasándolo una y otra vez con el agua, creando
una bola de polvo del baño, saturada, suficientemente húmeda e impregnada por fuera y por
dentro, sin que caiga de ella una sola gota, así también el monje, impregna, baña y colma su
cuerpo con el arrobamiento y placer nacidos de la reclusión, de manera tal que no queda
lugar alguno en todo su cuerpo, que no fuera impregnado por el arrobamiento y placer,
nacidos de la reclusión.
“Este es, señor, otro fruto de la vida contemplativa visible aquí y ahora, pero más sublime y
más perfecto que los anteriores.
4.3.2.6. Dutiyajhana - El segundo jhana
[77] “Y otra vez, el monje, apaciguando el pensamiento aplicado y el pensamiento sostenido,
logrando la calma mental y la unificación de la mente, entra y permanece en el segundo
jhana. Lleno de arrobamiento y placer nacidos de la reclusión y libre del pensamiento
aplicado y pensamiento sostenido. Todo su cuerpo está impregnado, bañado y colmado de
este arrobamiento y placer nacidos de la reclusión, de manera tal que no queda lugar alguno
en todo su cuerpo, que no fuera impregnado por el arrobamiento y placer, nacidos de la
reclusión.
[78] “Como un lago con aguas manantiales, sin afluentes del Este ni del Oeste, del Norte ni
del Sur, cuando recibe abundantes lluvias, sus aguas que brotan desde adentro, se mezclan
con estas aguas frescas, de manera tal que las mismas impregnan e invaden todo el lago, sin
que quede una sola parte no impregnada por las aguas frescas, así también el monje,
impregna, baña y colma su cuerpo con el arrobamiento y placer nacidos de la reclusión, de
manera tal que no queda lugar alguno en todo su cuerpo, que no fuera impregnado por el
arrobamiento y placer, nacidos de la reclusión.
“Este es, señor, otro fruto de la vida contemplativa visible aquí y ahora, pero más sublime y
más perfecto que los anteriores.
4.3.2.7. Tatiyajhana - El tercer jhana
[79] “Y otra vez, el monje, al extinguirse el arrobamiento, permanece ecuánime, con la
atención consciente y clara comprensión, sensible a la sensación del placer entra y permanece
en el tercer jhana, del cual los Nobles declararon que “feliz es aquel que mora en la
ecuanimidad y en la atención consciente”. Todo su cuerpo está impregnado, bañado y
colmado de este placer despojado del arrobamiento.
[80] “Como una laguna que tiene flores de loto azules, rojas y blancas que han nacido del
agua, han crecido en el agua y no hay ni una sólo flor que había crecido fuera del agua, de
modo que todas estas flores de loto azules, rojas y blancas están impregnadas, bañadas y
colmadas con las aguas frescas, así también el monje, impregna, baña y colma su cuerpo con
el placer despojado del arrobamiento, de manera tal que no queda lugar alguno en todo su
cuerpo, que no fuera impregnado por este placer despojado del arrobamiento.
“Este es, señor, otro fruto de la vida contemplativa visible aquí y ahora, pero más sublime y
más perfecto que los anteriores.
4.3.2.8. Catutthajhana - El cuarto jhana
[81] “Y otra vez, el monje, al abandonar tanto el placer como la pena –con la anterior
desaparición de las alegrías y las tristezas- entra y permanece en el cuarto jhana, el cual va
más allá de los placeres y las penas, purificado con la ecuanimidad y atención consciente.
Impregna su cuerpo con la pureza mental y clara conciencia de manera tal, que no queda
lugar alguno en todo su cuerpo, que no fuera impregnado por esta ecuanimidad y clara
conciencia. [82] “Como si un hombre estuviera sentado cubierto de pie a cabeza con una
ropa blanca, de tal manera que no quedara parte alguna de su cuerpo al descubierto. Así
también, el monje permanece sentado cubriendo completamente su cuerpo con la pureza
mental y clara conciencia, no quedando lugar alguno en todo su cuerpo que no fuera cubierto
por esta pureza mental y clara conciencia.
“Este es, señor, otro fruto de la vida contemplativa visible aquí y ahora, pero más sublime y
más perfecto que los anteriores.
4.3.3. Atthananna - Los ocho conocimientos
4.3.3.1. Vipassananana - Conocimiento perspicaz
[83] “Con la mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de las impurezas,
maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, direcciona e inclina su
mente hacia el conocimiento y la visión. Entonces, discierne así: ‘Este cuerpo mío es
material, compuesto de los cuatro elementos primarios, nacido de padre y madre, nutrido con
arroz y avena, es transitorio, friccionado, sujeto a disolución y dispersión. Y esta mi
conciencia está ligada a este cuerpo y depende de él’.
[84] “Como si se tratara de una piedra preciosa perfectamente pulida de sus ocho lados, clara,
brillante, sin defecto, admirable en todos los aspectos, colgada de un cordón azul, amarillo,
rojo, blanco o anaranjado. Si algún hombre, dotado de buena vista, la tomara en su mano y
la inspeccionara diría lo siguiente: ‘Esta piedra preciosa está perfectamente pulida de sus
ocho lados, es clara, brillante, sin defecto y admirable en todos los aspectos. Está colgada de
un cordón azul, amarillo, rojo, blanco o anaranjado.’ De la misma manera, el monje, con la
mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de impurezas, maleable, flexible,
firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, direcciona e inclina su mente hacia el
conocimiento y la visión. Entonces, discierne así: ‘Este cuerpo mío es material, compuesto
de los cuatro elementos primarios, nacido de padre y madre, nutrido con arroz y avena, es
transitorio, friccionado, sujeto a disolución y dispersión. Y esta mi conciencia está ligada a
este cuerpo y depende de él’.
“Este es, señor, otro fruto de la vida contemplativa visible aquí y ahora, pero más sublime y
más perfecto que los anteriores”.
4.3.3.2. Manomayiddhinana - El cuerpo hecho por la mente
[85] “Con la mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de las impurezas,
maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, direcciona e inclina su
mente hacia la creación del cuerpo mental. A partir de este cuerpo, crea otro cuerpo, dotado
de forma, hecho por la mente, completo en todas sus partes, con ninguna de sus facultades
inferior a éste.
[86] “Como si un hombre desvainara un junco y dijera: ‘Éste es el junco y ésta es la vaina.
El junco es una cosa y la vaina otra, aunque el junco haya salido de la vaina’. O, como si un
hombre desvainara su espada de la funda y dijera: ‘Ésta es la espada y ésta es la funda. La
espada es una cosa y la funda otra, aunque la espada haya salido de la funda’. O, como si un
hombre sacara a una serpiente de su vieja piel y dijera: ‘Ésta es la serpiente y ésta es su vieja
piel. La serpiente es una cosa y la vieja piel otra, aunque la serpiente haya salido de su vieja
piel’. De la misma manera, el monje, con la mente concentrada, purificada y brillante,
intachable, libre de las impurezas, maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la
imperturbabilidad, direcciona e inclina su mente hacia la creación del cuerpo mental. A partir
de este cuerpo, crea otro cuerpo, dotado de forma, hecho por la mente, completo en todas sus
partes, con ninguna de sus facultades inferior a éste.
“Este es, señor, otro fruto de la vida contemplativa visible aquí y ahora, pero más sublime y
más perfecto que los anteriores”.
4.3.3.3. Iddhividhanana - Varios poderes espirituales
[87] “Con la mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de las impurezas,
maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, direcciona e inclina su
mente hacia varios poderes sobrenaturales. Siendo uno, se convierte en muchos y siendo
muchos, se convierte en uno. Aparece y desaparece. Sin impedimento alguno, traspasa las
paredes, terraplenes y montañas, como si fueran aire. Se zambulle dentro de la tierra, como
si fuera agua. Camina sobre el agua sin hundirse, como si fuera tierra seca. Sentado con
piernas cruzadas, atraviesa los aires como si fuera un pájaro sobre el viento. Con su mano
toca y, hasta da palmadas al sol y la luna, así es de imponente y poderoso. Ejercita la
influencia de su cuerpo hasta los mundos del Brama.
[88] “Como un hábil alfarero o su aprendiz, sabe dar muchas formas a la arcilla bien
preparada y convertirla en diferentes clases de recipientes cerámicos de acuerdo a sus deseos;
o como un hábil tallista de marfil o su aprendiz, sabe trabajar el marfil bien preparado de
acuerdo a sus deseos; o como un hábil orfebre o su aprendiz, sabe hacer de oro bien preparado
los artículos que de acuerdo a sus deseos –así también, el monje, con su mente concentrada,
purificada y brillante, intachable, libre de las impurezas, maleable, flexible, firme y que ha
alcanzado la imperturbabilidad, direcciona e inclina su mente hacia varios poderes
sobrenaturales. Siendo uno sólo, se convierte en muchos... Ejercita la influencia de su cuerpo
hasta los mundos del Brama.
“Este es, señor, otro fruto de la vida contemplativa visible aquí y ahora, pero más sublime y
más perfecto que los anteriores”.
4.3.3.4. Dibbasotanana - El oído divino
[89] “Con la mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de las impurezas,
maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, direcciona e inclina su
mente hacia el oído divino. Con el oído divino, purificado y que supera el de los seres
humanos, escucha a ambas clases de sonidos: los divinos y los humanos, provenientes de
lejos o de cerca.
[90] “Como un hombre viajando a lo largo de la carretera, puede escuchar los sonidos de los
timbales, pequeños tambores, conchas, címbalos e instrumentos de percusión, y discernir:
‘Éste es el sonido de los timbales, éste de los pequeños tambores, éste de conchas, éste de
címbalos y éste de los instrumentos de percusión’. De la misma manera el monje, con la
mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de las impurezas, maleable,
flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, direcciona e inclina su mente hacia
el oído divino. Con el oído divino, purificado y que supera el de los seres humanos, escucha
a ambas clases de sonidos: los divinos y los humanos, provenientes de lejos o de cerca.
“Este es, señor, otro fruto de la vida contemplativa visible aquí y ahora, pero más sublime y
más perfecto que los anteriores”.
4.3.3.5. Cetopariyanana - Lectura de la mente
[91] “Con la mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de las impurezas,
maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, direcciona e inclina su
mente hacia la lectura de otras mentes. Con su propia mente, conoce y distingue la mente de
los otros seres o de otras personas. Conoce la mente afectada por la pasión, como mente
apasionada, y la mente sin pasión, como la mente liberada de la pasión. Conoce la mente
afectada por la aversión, como la mente con aversión, y la mente sin aversión, como la mente
liberada de aversión. Conoce la mente afectada por la falsa ilusión, como mente mal
ilusionada, y la mente sin falsa ilusión, como la mente liberada de la falsa ilusión. Discierne
la mente restringida como tal y sabe cuándo la mente está dispersa. Cuando una mente está
expandida, la reconoce como expandida y cuando está estrecha, sabe que está estrecha. A
una mente destacada, la reconoce como destacada y una mente corriente reconoce como tal.
Sabe cuándo la mente está concentrada y cuando no lo es, en ambos casos lo discierne
correctamente, como también cuando la mente está liberada y cuando no.
[92] “Como una mujer, un hombre o un muchacho preocupado por su apariencia, examina
cuidadosamente el reflejo de su propio rostro en el brillante espejo o en el tazón con agua
pura, sabiendo discernir lunares o motas de las partes libres de manchas, así también, el
monje, con la mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de las impurezas,
maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, direcciona e inclina su
mente hacia la lectura de las otras mentes. Con su propia mente, conoce y distingue la mente
de los otros seres o de otras personas... Sabe cuándo la mente está concentrada y cuando no
lo es, en ambos casos lo discierne correctamente, como también cuando la mente está
liberada y cuando no.
“Este es, señor, otro fruto de la vida contemplativa visible aquí y ahora, pero más sublime y
más perfecto que los anteriores”.
4.3.3.6. Pubbenivasanussatinana - Recuerdos de las vidas pasadas
[93] “Con la mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de las impurezas,
maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, direcciona e inclina su
mente hacia el conocimiento de las existencias pasadas. Se acuerda de sus múltiples vidas
pasadas: de un nacimiento, dos nacimientos, tres nacimientos, cuatro, cinco, diez, veinte,
treinta, cuarenta, cincuenta, cien, mil, cien mil nacimientos, muchos eones de las
contracciones cósmicas, muchos eones de las expansiones cósmicas, muchos eones de las
contracciones y expansiones cósmicas, recordando: ‘En aquel entonces, mi nombre era así,
mi linaje era éste y provenía de ésta casta; me alimentaba de ésta clase de alimento
experimentaba ésta y aquella clase de alegrías y penas y he vivido ésta cantidad de años.
Habiendo terminado mi vida ahí, me he reconectado allá, donde mi nombre era... Habiendo
terminado mi vida ahí, me he reconectado aquí’. De esta manera, se acuerda de varias de sus
vidas pasadas, con sus condiciones y detalles.

[94] “Como si un hombre saliera de su pueblo para irse al otro, y luego saliera de aquel para
irse a uno nuevo y diferente y finalmente volviera a su casa. Entonces, podría tener este
pensamiento: ‘Salí de mi pueblo natal y me fui a este otro pueblo. Ahí estuve parado de esta
manera, estuve sentado así, hablé de esta forma y permanecí en silencio de esta manera. Salí
de este pueblo y me fui a aquel otro pueblo diferente, donde estuve parado de esta manera,
estuve sentado así, hablé de esta forma y permanecí en silencio de esta manera. Finalmente,
salí de aquel otro pueblo diferente y volví a casa’. De esta misma manera, el monje, con la
mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de las impurezas, maleable,
flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, direcciona e inclina su mente hacia
el conocimiento de las existencias pasadas. Se acuerda de sus múltiples vidas pasadas: de un
nacimiento... se acuerda de varias de sus vidas pasadas, con sus condiciones y detalles.
“Este es, señor, otro fruto de la vida contemplativa visible aquí y ahora, pero más sublime y
más perfecto que los anteriores”.
4.3.3.7. Dibbacakkunana - Ojo divino
[95] “Con la mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de las impurezas,
maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, él direcciona e inclina su
mente hacia la muerte y la reconexión de los seres. A través del ojo divino, purificado y que
sobrepasa el humano, ve la muerte de los seres y su reaparición, discerniendo si su destino
es inferior o superior, hermoso u horrible, afortunado o desafortunado, de acuerdo al kamma
de cada uno. Conoce de esta manera: ‘Estos seres, que obraron mal con su cuerpo, con su
habla o con su mente, los que injuriaban a los nobles, mantenían los incorrectos puntos de
vista y asumían acciones resultantes de estos erróneos puntos de vista, al quebrarse su cuerpo,
después de la muerte, han reaparecido en el plano de las penurias, de mal destino, en los
reinos bajos, en el infierno. Pero aquellos seres, que obraron bien con su cuerpo, con su habla
o con su mente, los que no injuriaban a los nobles, mantenían los correctos puntos de vista y
asumían acciones resultantes de estos correctos puntos de vista, al quebrarse su cuerpo,
después de la muerte, han reaparecido en el buen destino, en el mundo celestial’. De esta
manera, a través del ojo divino, purificado y que sobrepasa el humano, él ve la muerte de los
seres y su reaparición, discerniendo si su destino inferior o superior, hermoso u horrible,
afortunado o desafortunado, de acuerdo a su kamma. [96] “Como si un hombre, que tuviera
una buena vista, estuviera parado en la cima de un edificio en el centro de su ciudad y
observara la gente entrando en la casa y saliendo de ella, caminando a lo largo de la calle y
gente sentada en la plaza entral. Entonces, podría tener este pensamiento: ‘esta gente entra y
sale de la casa, camina a lo largo de la calle y está sentada en la plaza central’. De la misma
manera, el monje, con la mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de las
impurezas, maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, direcciona e
inclina su mente hacia la muerte y la reconexión de los seres. A través del ojo divino,
purificado y que sobrepasa el humano, ve la muerte de los seres y su reaparición,
discerniendo si su destino es inferior o superior, hermoso u horrible, afortunado o
desafortunado, de acuerdo a su kamma.
“Este es, señor, otro fruto de la vida contemplativa visible aquí y ahora, pero más sublime y
más perfecto que los anteriores”.
4.3.3.8. Asavakkhayanana - Fin de las impurezas
[97] “Con la mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de las impurezas,
maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, direcciona e inclina su
mente hacia el conocimiento del fin de las impurezas mentales. Él conoce tal como realmente
es: ‘Este es el sufrimiento, éste es el origen del sufrimiento, éste es el cese del sufrimiento y
éste es el sendero que lleva al cese del sufrimiento’. También conoce esto tal como realmente
es: ‘Estas son las impurezas mentales, éste es el origen de las impurezas mentales, éste es el
cese de las impurezas mentales y éste es el sendero que lleva al cese de las impurezas
mentales’. A través de este conocimiento y la visión, su mente es liberada de las impurezas
de la sensualidad, de las impurezas de la existencia y de las impurezas de la ignorancia. Y
entonces, el siguiente conocimiento nace en él: ‘¡Ésta es la liberación!’ Y sabe que ‘el
nacimiento está terminado, la vida santa ha sido realizada, la tarea ha culminado. No queda
más nada por delante’.
[98] “Como si un hombre, con una buena vista, se acercara a la orilla de un cristalino, limpio
e impoluto lago en medio de las montañas y, estando ahí, observara las conchas, la grava, los
guijarros, como también el cardumen de los peces que nadan y descansan. Entonces, podría
tener este pensamiento: ‘Este lago es cristalino, limpio e impoluto; hay en él las conchas, la
grava, los guijarros, como también el cardumen de los peces que nadan y descansan’. De la
misma manera, el monje, con la mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre
de las impurezas, maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad,
direcciona e inclina su mente hacia el conocimiento del fin de las impurezas mentales. Él
conoce tal como realmente es: ‘Este es el sufrimiento, éste es el origen del sufrimiento, éste
es el cese del sufrimiento y éste es el sendero que lleva al cese del sufrimiento’. También
conoce esto, tal como realmente es: ‘Estas son las impurezas mentales, éste es el origen de
las impurezas mentales, éste es el cese de las impurezas mentales y éste es el sendero que
lleva al cese de las impurezas mentales’. A través de este conocimiento y la visión, su mente
es liberada de las impurezas de la sensualidad, de las impurezas de la existencia y de las
impurezas de la ignorancia. Y entonces, el siguiente conocimiento nace en él: ‘¡Ésta es la
liberación!’ Y él sabe que ‘el nacimiento está terminado, la vida santa ha sido realizada, la
tarea ha culminado. No queda más nada por delante’. “Este es, señor, otro fruto de la vida
contemplativa visible aquí y ahora, el más sublime y más perfecto que los anteriores. Y no
existe otro fruto de la vida contemplativa visible aquí y ahora, que fuera más sublime que
éste”.
5. Ajatasattuutupasakattapativedana - La conversión de Ajatasattu en un seguidor laico
[99] Cuando esto fue dicho, el rey Ajatasattu se dirigió al Bienaventurado con estas
palabras: “¡Excelente, Venerable Señor! ¡Realmente, magnífico! Es como si
alguien enderezara lo que estaba torcido, como si revelara, lo que estaba oculto,
como si mostrara el camino a alguien que estaba perdido o si encendiera una
lámpara en medio de la oscuridad, para que alguien dotado de buena vista pudiera
percibir las formas. De la misma manera, el Bienaventurado ha expuesto el
Dhamma de diferentes maneras. Yo, señor, voy a tomar el refugio en el
Bienaventurado, en el Dhamma y en el Sangha. Qué el Bienaventurado me
considere, de aquí en adelante, como uno de sus seguidores laicos. “Sin embargo,
Venerable Señor, me pesa mi trasgresión que cometí, cuando, para conseguir el
trono, por ser tonto, confundido y malvado, privé de la vida a mi padre, quien era
un buen hombre y un rey justo. Que el Bienaventurado acepte mi confesión de
esta mala acción para que pueda contenerme en el futuro.”
[100] “Sí, Su Majestad, la trasgresión se apoderó de Usted, cuando, siendo tonto,
confundido y malvado, privó de la vida a su propio padre, quien fue un buen
hombre y un rey justo. Pero, ya que ha reconocido su trasgresión como tal y la
confesó, según el Dhamma, nosotros aceptamos esta confesión. Alguien que
quiere crecer en el Dhamma y Disciplina, cuando comete alguna trasgresión, debe
reconocerla como tal y confesarla, para poder contenerse en el futuro”.
[101] Cuando esto fue dicho, el rey Ajatasattu se dirigió al Bienaventurado con estas
palabras: “Que el Venerable Señor ahora permita marcharme. Son muchas mis
ocupaciones y responsabilidades”.
“Haga, Su Majestad, de acuerdo con sus deseos”.
Entonces, el rey Ajatasattu, al deleitarse y regocijarse en las palabras del Bienaventurado, se
levantó de su asiento, saludó al Bienaventurado con reverencia y se retiró, cuidando por
respeto, que el Bienaventurado quedara siempre a su lado derecho.
[102] No mucho tiempo después de que el rey Ajatasattu se hubo retirado, el
Bienaventurado de dirigió a los monjes con estas palabras: “El rey fue profundamente
afectado, monjes, fue tocado en su corazón. Si no fuera porque hubo asesinado a su padre,
quien fue un buen hombre y un rey justo, el puro e impecable ojo del Dhamma podría haber
surgido en él, mientras estaba aquí sentado”.
Esto es lo que el Bienaventurado dijo y los monjes se alegraron y se deleitaron en las palabras
del Bienaventurado. Esto he escuchado:
En una ocasión, el Bienaventurado estaba morando en el Parque de los Venados de
Kannakatthala, cerca de Urunna. Entonces un asceta desnudo, de nombre Kassapa, se acercó
al Bienaventurado e intercambió con él cordiales saludos. Cuando terminaron estas amables
palabras de bienvenida y cordiales saludos, se quedó a un lado y le dijo:
[2] “Amigo Gotama, yo había escuchado esto: ‘El asceta Gotama desaprueba toda clase de
austeridades, censurando y reprochando a todos aquellos que llevan una vida dura y austera.
Ahora bien, los que emiten semejantes afirmaciones, ¿lo hacen de acuerdo con lo que dijo el
maestro Gotama, o lo malinterpretan con algo que es contrario a los hechos? ¿Lo explican
de acuerdo con el Dhamma, de tal modo que no incurren [en algo que daría pie] a una crítica
razonable ni proporcionan las bases para la censura? No quisiéramos incurrir en una falsa
acusación en contra del maestro Gotama”.
[3] “Kassapa, aquellos que emiten semejantes afirmaciones no dicen la verdad, sino que,
por el contrario, malinterpretan mis palabras con algo que es contrario a los hechos. “He
aquí, Kassapa, yo miro al que practica austeridades con el ojo divino, que es purificado y ve
más allá del ojo humano, y veo que, después de la disolución del cuerpo, después de la
muerte, uno renace en un mal destino, en el mundo bajo, incluso en el infierno, mientras que
otro, que también practica las austeridades, después de la disolución del cuerpo, después de
la muerte, renace en un buen destino, en el mundo celestial. También, Kassapa, miro al que
practica las austeridades en menor escala, y veo que, después de la disolución del cuerpo,
después de la muerte, uno renace en un mal destino, en el mundo bajo, incluso en el infierno,
mientras que otro, que también practica las austeridades en menor escala, renace en un buen
destino, en el mundo celestial. ¿Cómo entonces, podría yo desaprobar toda clase de
austeridades, censurando y reprochando a todos aquellos que llevan una vida dura y austera?
[4] “He aquí, Kassapa, hay ascetas y brahmanes que son sabios, hábiles, experimentados
en las disputas, tan agudos que saben dividir un pelo en partes, que se desplazan hábilmente
a través de los senderos de los puntos de vista. Algunas veces, sus puntos de vista concuerdan
con los míos y, otras veces, no. Algunas de esas cosas que ellos aprueban, también las
aprobamos nosotros. Y otras de esas cosas, que ellos desaprueban, también los desaprobamos
nosotros. Algunas de esas cosas, que ellos aprueban, las desaprobamos nosotros. Y otras de
estas cosas, que ellos desaprueban, las aprobamos nosotros. Algunas de esas cosas, que
aprobamos nosotros, ellos también las aprueban. Y otras de esas cosas, que desaprobamos
nosotros, también las desaprueban ellos. Algunas de esas cosas, que aprobamos nosotros,
ellos las desaprueban. Y también otras de esas cosas, que desaprobamos nosotros, ellos las
aprueban.
[5] “Y yo, cuando me acerco a ellos les digo: ‘En cuanto a estas cosas, amigos, en las cuales
no estamos de acuerdo, dejémoslas de lado. Y en cuanto a las cosas, en las que estamos de
acuerdo, pongámonos a discutir acerca de ellas, razonemos acerca de ellas, tanto con sus
maestros como con sus discípulos, diciendo: «En cuanto a los malos y perjudiciales estados,
señores, que son censurables y conectados con lo perjudicial, que no conducen a la
iluminación, y están contados entre lo no beneficioso, ¿quién es aquel que ha abandonado
totalmente tales cosas: el asceta Gotama u otros venerables maestros?»’. [6] “Entonces,
Kassapa, el sabio, preguntado de esta manera, respondería esto: ‘El asceta Gotama se
conduce a sí mismo como alguien que ha abandonado totalmente estas cosas, mientras que
los venerables señores, maestros de las otras escuelas, lo han hecho sólo parcialmente’. Así
respondería el sabio, Kassapa, si se le preguntase de esta manera. Los sabios, Kassapa, en
este caso nos darían la mayoría de los elogios.
[7] “Además, Kassapa, les digo… ‘«En cuanto a los buenos y beneficiosos estados, señores,
que son intachables y conectados con lo beneficioso, que conducen a la iluminación, y están
contados entre lo beneficioso, ¿quién es aquel que ha adquirido un dominio total sobre estas
cosas: el asceta Gotama u otros venerables maestros?»’.
[8] “Entonces, Kassapa, el sabio, preguntado de esta manera, respondería esto: ‘El asceta
Gotama se conduce a sí mismo como alguien que ha adquirido un dominio total sobre estas
cosas, mientras que los venerables señores, maestros de las otras escuelas, lo han hecho sólo
parcialmente’. Así respondería el sabio, Kassapa, si se le preguntase de esta manera. Los
sabios, Kassapa, en este caso nos darían la mayoría de los elogios.
[9-12] [Igual que los versos 5-8 con la diferencia que “asceta Gotama u otros venerables
maestros” se reemplaza por “los discípulos del asceta Gotama o los discípulos de otros
venerables maestros”].
[13] “He aquí, Kassapa, un sendero, he aquí un método que conduce, a aquel que lo sigue, a
conocer y ver por sí mismo así: ‘El asceta Gotama es alguien que predica un
DhammayDisciplina que es recto y beneficioso’.
“Y, ¿cuál es, Kassapa, este sendero, este método que conduce, a aquel que lo sigue, a conocer
y ver por sí mismo así? Este es el Noble Óctuple Sendero, es decir, el recto punto de vista,
la recta intención, la recta forma de hablar, la recta acción, la recta forma de vida, el recto
esfuerzo, la recta atención consciente y la recta concentración. Este es el sendero, Kassapa,
el método que conduce, a aquel que lo sigue, a conocer y ver por sí mismo así: ‘El asceta
Gotama es alguien que predica un Dhamma-y-Disciplina que es recto y beneficioso’”.
[14] Cuando se dijo esto, el asceta desnudo Kassapa dijo al Bienaventurado [1]: “Maestro
Gotama, algunos ascetas y brahmanes siguen ciertas prácticas de auto-mortificación que, en
su opinión, conducen a la meta del ascetismo y a la menta del brahmanismo: alguien va por
ahí desnudo, rechazando las convenciones sociales, chupándose los dedos, sin acudir cuando
se le llama ni deteniéndose cuando se le saluda. No acepta ofrendas de comida, ni la
preparada especialmente para él, ni las invitaciones para comer. No toma alimento que
provenga directamente de una olla o sartén, ni en un umbral, ni entre leña y almireces, ni de
dos que estén comiendo juntos, ni de una embarazada, ni de mujer que esté dando de mamar,
ni de mujer que se amancebe con un hombre, ni de distribuciones públicas, ni de donde haya
perros esperando o pululen las moscas. No toma pescado ni carne, ni bebidas alcohólicas o
fermentadas. Es hombre de una sola casa y un solo bocado, o de dos, o de tres... o de siete
casas y siete bocados. Se sustenta con una ración, con dos... con siete raciones.
"Come una vez al día, o cada dos días, o una vez a la semana, o sigue la práctica de comer a
intervalos de quince días. Se alimenta de verduras, mijo, arroz silvestre, pellejos, musgo,
cáscaras de arroz, restos de arroz, harina de semillas, hierba, boñiga de vaca. Vive de raíces
y frutos silvestres, come frutas caídas. Se viste de arpillera, tela de estopa, mortajas, harapos,
corteza de árbol, con piel de ciervo, con retazos de piel de ciervo, con tela hecha de la hierba
kusa, de cortezas, de virutas, de pelo humano, de pelo animal o de plumas de lechuza. Se
arranca el pelo de la cabeza y de la barba, dedicándose a esta práctica. Permanece siempre
de pie y se niega a sentarse. Permanece siempre en cuclillas y se dedica a estar continuamente
en cuclillas. Se hace una cama de pinchos y duerme en ella. Vive dedicado a bañarse tres
veces al día, una de ellas por la noche”.
[15] “Kassapa, si el practicante de la auto-mortificación anduviese desnudo, rechazase las
convenciones sociales, chupándose los dedos e hiciese todas estas cosas con todos los
detalles, se alimentase conforme estas reglas en intervalos regulares, incluso de hasta medio
mes, pero no practicase ni lograse la realización en la conducta, en la mente y la sabiduría,
realmente estaría lejos de la meta del ascetismo y la meta del brahmanismo. Pero, Kassapa,
cuando el monje desarrolla una mente libre de odio y animadversión, una mente llena de
amor benevolente, abandonando las contaminaciones, entra y permanece en la inmaculada
liberación de la mente, liberación a través de la sabiduría, habiéndola descubierto por sí
mismo con el conocimiento directo, en esta presente vida, entonces aquel monje es un
verdadero asceta y un verdadero brahmán.
[16] Cuando se dijo esto, el asceta desnudo Kassapa dijo al Bienaventurado: “Qué difícil
entonces, maestro Gotama, tiene que ser, ser un asceta, y qué difícil, tiene que ser, ser un
brahmán”. “Es común, Kassapa, escuchar que en el mundo se diga: ‘Qué difícil, tiene que
ser, ser un asceta, y qué difícil, tiene que ser, ser un brahmán’. Si un asceta anduviese
desnudo, rechazase las convenciones sociales… [sigue como en el verso 14]… si el hecho
de hacer todas estas cosas fuera la medida de la dificultad de esta práctica, la gran dificultad
de ser un asceta o un brahmán, aún así no sería correcto decir: ‘Qué difícil tiene que ser, ser
un asceta, y qué difícil, tiene que ser, ser un brahmán’. Y, ¿por qué así? Porque, Kassapa,
cualquier hombre hogareño o hijo de hombre hogareño ―incluso una esclava que extrae el
agua―, podría decir: ‘Ahora bien, voy a andar desnudo, voy a rechazar las convenciones
sociales… [sigue como en el verso 14]… Pero, Kassapa, puesto que existe una muy diferente
clase de ascetismo, que trasciende aquel, es correcto decir: ‘Qué difícil, tiene que ser, ser un
asceta, y qué difícil, tiene que ser, ser un brahmán’. Kassapa, cuando el monje desarrolla una
mente libre de odio y animadversión, una mente llena de amor benevolente, abandonando
las contaminaciones, entra y permanece en la inmaculada liberación de la mente, liberación
a través de la sabiduría, habiéndola descubierto por sí mismo con el conocimiento directo,
en esta presente vida, entonces aquel monje es un verdadero asceta y un verdadero brahmán.
[17] Cuando se dijo esto, el asceta desnudo Kassapa dijo el Bienaventurado: “Qué difícil es,
maestro Gotama, reconocer a un verdadero asceta y qué difícil es reconocer a un verdadero
brahmán”.
“Es común, Kassapa, escuchar que en el mundo se diga esto: ‘Qué difícil es reconocer a un
verdadero asceta y qué difícil es reconocer a un verdadero brahmán’. Si un asceta anduviese
desnudo, rechazase las convenciones sociales… [sigue como en el verso 14]… si el hecho
de hacer todas estas cosas fuera la medida de la dificultad de esta práctica, la gran dificultad
de reconocer a un verdadero asceta o un verdadero brahmán, aún así no sería correcto decir:
‘Qué difícil es reconocer a un verdadero asceta y qué difícil es reconocer a un verdadero
brahmán’. Y, ¿por qué así? Porque, Kassapa, cualquier hombre hogareño o hijo de hombre
hogareño ―incluso una esclava que extrae el agua―, podría decir: ‘Ahora bien, voy a andar
desnudo, voy a rechazar las convenciones sociales… [sigue como en el verso 14]… Pero,
Kassapa, puesto que existe una muy diferente clase de ascetismo, que trasciende aquel, es
correcto decir: ‘Qué difícil es reconocer a un verdadero asceta y qué difícil es reconocer a un
verdadero brahmán’. Kassapa, cuando el monje desarrolla una mente libre de odio y
animadversión, una mente llena de amor benevolente, abandonando las contaminaciones,
entra y permanece en la inmaculada liberación de la mente, liberación a través de la sabiduría,
habiéndola descubierto por sí mismo con el conocimiento directo, en esta presente vida,
entonces aquel monje es un verdadero asceta y un verdadero brahmán.
[18-20] Cuando se dijo esto, el asceta desnudo Kassapa dijo el Bienaventurado: “Maestro
Gotama, ¿en qué consiste el desarrollo de la moral, de la mente y de la sabiduría?”. “He aquí,
Kassapa, el Tathagata surgió en el mundo, un Arahant, un Perfectamente Iluminado,
realizado en el verdadero conocimiento y la conducta, el Afortunado, el conocedor del
mundo, incomparable líder de los que han de ser amansados, el maestro de los devas y los
seres humanos, el Iluminado, el Bienaventurado. Él, habiéndolo descubierto por sí mismo
con el conocimiento directo, lo proclama en este mundo con sus devas, Maras y Brahmas,
sus príncipes y la gente común. Enseña el Dhamma que es agradable en el principio,
agradable en el medio y agradable al final, tanto en su contenido como en la forma, y
despliega una vida santa completamente purificada y perfecta.
“Un hombre hogareño o hijo de hombre hogareño, o alguien que ha renacido desde un hogar
a otro, al escuchar este Dhamma, obtiene la fe en el Tathagata… [se repite la porción del
DN 2,41-63]. En esto consiste, Kassapa, la perfección de la moral.
“Además, Kassapa, él guarda las puertas de sus sentidos… Y, apartado de los placeres
sensuales, apartado de los perjudiciales estados mentales, entra y permanece en el primer
jhana… segundo jhana… tercer jhana… cuatro jhana… [igual que en DN 2,64-82]. En esto
consiste, Kassapa, la perfección de la mente.
“Además, Kassapa, con la mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de las
contaminaciones, maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad,
direcciona e inclina su mente hacia el conocimiento y la visión… [igual que en DN 2,8398].
En esto consiste, Kassapa, la perfección de la sabiduría. Y he aquí, Kassapa, que no hay nada
más perfecto que esta perfección de la moral, de la mente y de la sabiduría. [21] “He aquí,
Kassapa, algunos ascetas y brahmanes enseñan la moral y profieren elogios sobre la moral.
Pero en cuanto a la superior moral aria, Kassapa, no veo otra alguna que la sobrepase, y yo
soy el supremo en consideración a ella.
“Además, Kassapa, algunos ascetas y brahmanes enseñan el ascetismo y la austeridad, y
profieren elogios sobre el ascetismo y la austeridad. Pero en cuanto al superior ascetismo y
la austeridad arios, Kassapa, no veo otro ascetismo ni austeridad algunos que los sobrepase,
y yo soy el supremo en consideración a ellos.
“Además, Kassapa, algunos ascetas y brahmanes enseñan la sabiduría, y hablan elogios sobre
la sabiduría. Pero en cuanto a la superior sabiduría aria, Kassapa, no veo otra sabiduría alguna
que la sobrepase, y yo soy el supremo en consideración a ella.
“Además, Kassapa, algunos ascetas y brahmanes enseñan la liberación y profieren elogios
sobre la liberación. Pero en cuanto a la superior liberación aria, Kassapa, no veo otra
liberación alguna que la sobrepase, y yo soy el supremo en consideración a ella.
[22] “He aquí, Kassapa, pueden haber ascetas errantes de otras escuelas que digan: ‘El asceta
Gotama ruge su rugido de león, pero lo hace en soledad, no en medio de una asamblea’. Si
fuera el caso, se tendría que responderles así: ‘No digáis así, señores: el asceta Gotama ruge
su rugido de león, pero también lo hace en medio de la asamblea'. “También, Kassapa,
pueden haber ascetas errantes de otras escuelas que digan: ‘El asceta Gotama ruge su rugido
de león también en la asamblea, pero lo que ruge no es de plena confianza… pero la gente
no le hace preguntas… pero él no las responde… pero sus respuestas no son satisfactorias…
pero los hombres no consideran que sus opiniones son dignas de ser escuchadas… pero los
hombres no experimentan convicción hacia ellas… pero los hombres no muestran signos
exteriores de su fe… pero los hombres no llegan a la verdad’. “Si fuera el caso, Kassapa, se
tendría que responderles así: ‘No digáis esto, señores: el asceta Gotama ruge su rugido de
león, pero también lo hace en medio de la asamblea y lo que ruge es de plena confianza, la
gente le hace preguntas y él las responde, sus respuestas son satisfactorias y los hombres
consideran que sus opiniones son dignas de ser escuchadas, los hombres experimentan
convicción hacia ellas y muestran signos exteriores de su fe, y también los hombres penetran
la verdad y, habiéndose asido a ella, son capaces de transmitirla a otros’. Esto es, Kassapa,
lo que se debe responderles.
[23] “Una vez, Kassapa, estuve morando en el Parque de los Buitres, cerca de Rajagaha,
cuando un cierto practicante de la mortificación, de nombre Nigrodha, me consultó acerca
de la práctica superior de la austeridad. Y habiéndome preguntado, le expuse este asunto. Y
cuando escuchó la respuesta, estuvo muy complacido y tuvo una gran alegría”.
“Y, ¿quién no estuviera complacido, Venerable Señor, de escuchar el Dhamma del
Bienaventurado y no tuviera una gran alegría? Yo también, Venerable Señor, al escuchar el
Dhamma del Bienaventurado estoy muy complacido y tengo una gran alegría. “¡Excelente,
maestro Gotama! ¡Excelente, maestro Gotama! El maestro Gotama esclareció el Dhamma de
diferentes maneras, como si enderezara lo que estaba torcido, revelara lo que estaba oculto,
mostrara el camino a los que estaban perdidos o sostuviera una lámpara, en medio de la
oscuridad, de manera tal que los de buena vista pudieran ver las formas. Así la verdad ha
sido explicada por el Bienaventurado de diferentes maneras. ¡Que pueda recibir del
Bienaventurado el renunciamiento y la plena ordenación”.
[24] “Kassapa, cualquiera que ha sido miembro de otras escuelas, previamente, y quiere
hacer el renunciamiento e iniciarse en este Dhamma-y-Disciplina, debe pasar por un periodo
de prueba de cuatro meses. Y al culminar este periodo, establecido en la mente, recibe el
renunciamiento y la ordenación plena como monje. Aunque reconozco que, en estos casos,
pueden haber diferencias individuales”.
“En este caso, Venerable Señor, puedo pasar por un periodo de prueba de hasta cuatro años
y, al culminar este periodo, establecido en la mente, recibiré el renunciamiento y la
ordenación plena como monje”.
Entonces, el asceta desnudo Kassapa recibió el renunciamiento y la ordenación plena del
Bienaventurado. Entonces, el Venerable Kassapa, morando en soledad, recluido, atento,
ardiente y resuelto, no mucho tiempo después, descubrió por sí mismo con el conocimiento
directo, en esta presente vida, aquella insuperable realización de la vida santa, en aras de la
cual el hombre de familia correctamente renuncia a la vida hogareña y escoge el estilo de
vida sin hogar, y una vez entrado, permanece en ella. Y conoció directamente esto: “El
nacimiento está destruido, la vida santa ha sido vivida, lo que se tenía que hacer, fue realizado
y, he aquí, no hay futuras vueltas a los estados de existencia”. Y el Venerable Kassapa llegó
a ser uno de los Arahants.

"Monjes, antes de mi despertar, cuando todavía era un bodhisatta, alguien aún no


perfectamente despierto, se me ocurrió este pensamiento: '¿Qué es la gratificación, cuál es
su peligro y cuál es el escape en el caso del elemento tierra? ¿Qué es la gratificación, cuál es
su peligro y cuál es el escape en el caso del elemento agua? ¿Qué es la gratificación, cuál es
su peligro y cuál es el escape en el caso del elemento calor? ¿Qué es la gratificación, cuál es
su peligro y cuál es el escape en el caso del elemento aire?'.

"Entonces, monjes, esto se me ocurrió: 'El placer y el gozo que surge en dependencia del
elemento tierra: esta es la gratificación en el caso del elemento tierra. El elemento tierra no
es permanente ni satisfactorio y está sujeto a cambios: este es el peligro en el caso del
elemento tierra. La remoción y el abandono del deseo y de la codicia por el elemento tierra:
este es el escape del elemento tierra'.

"'El placer y el gozo que surge en dependencia del elemento agua... del elemento calor... del
elemento aire: esta es la gratificación en el caso del aire. El elemento aire no es permanente
ni satisfactorio y está sujeto a cambios: este es el peligro en el caso del elemento aire. La
remoción y el abandono del deseo y de la codicia por el elemento aire: este es el escape del
elemento aire'.

"Monjes, hasta tanto no hube conocido directamente cómo realmente es la gratificación, el


peligro y el escape en caso de estos cuatro elementos, no pretendí estar despierto a la
insuperable y perfecta iluminación en este mundo con sus devas, Mara y Brahma, en esta
generación con sus ascetas y brahmanes, con sus devas y seres humanos. Pero cuando los
hube conocido a todos directamente, tal como realmente son, consideré estar despierto a la
insuperable y perfecta iluminación en este mundo con sus devas, Mara y Brahma, en esta
generación con sus ascetas y brahmanes, con sus devas y seres humanos.

"Entonces, este conocimiento y esta visión surgieron en mí: 'Inamovible es mi liberación


mental; éste es mi último nacimiento; he aquí no habrá más futuras existencias'".
Esto he escuchado:
En una ocasión, el Bienaventurado estaba morando en el Parque de los Venados de
Kannakatthala, cerca de Urunna. Entonces un asceta desnudo, de nombre Kassapa, se acercó
al Bienaventurado e intercambió con él cordiales saludos. Cuando terminaron estas amables
palabras de bienvenida y cordiales saludos, se quedó a un lado y le dijo:
[2] “Amigo Gotama, yo había escuchado esto: ‘El asceta Gotama desaprueba toda clase de
austeridades, censurando y reprochando a todos aquellos que llevan una vida dura y austera.
Ahora bien, los que emiten semejantes afirmaciones, ¿lo hacen de acuerdo con lo que dijo el
maestro Gotama, o lo malinterpretan con algo que es contrario a los hechos? ¿Lo explican
de acuerdo con el Dhamma, de tal modo que no incurren [en algo que daría pie] a una crítica
razonable ni proporcionan las bases para la censura? No quisiéramos incurrir en una falsa
acusación en contra del maestro Gotama”.
[3] “Kassapa, aquellos que emiten semejantes afirmaciones no dicen la verdad, sino que,
por el contrario, malinterpretan mis palabras con algo que es contrario a los hechos. “He
aquí, Kassapa, yo miro al que practica austeridades con el ojo divino, que es purificado y ve
más allá del ojo humano, y veo que, después de la disolución del cuerpo, después de la
muerte, uno renace en un mal destino, en el mundo bajo, incluso en el infierno, mientras que
otro, que también practica las austeridades, después de la disolución del cuerpo, después de
la muerte, renace en un buen destino, en el mundo celestial. También, Kassapa, miro al que
practica las austeridades en menor escala, y veo que, después de la disolución del cuerpo,
después de la muerte, uno renace en un mal destino, en el mundo bajo, incluso en el infierno,
mientras que otro, que también practica las austeridades en menor escala, renace en un buen
destino, en el mundo celestial. ¿Cómo entonces, podría yo desaprobar toda clase de
austeridades, censurando y reprochando a todos aquellos que llevan una vida dura y austera?
[4] “He aquí, Kassapa, hay ascetas y brahmanes que son sabios, hábiles, experimentados
en las disputas, tan agudos que saben dividir un pelo en partes, que se desplazan hábilmente
a través de los senderos de los puntos de vista. Algunas veces, sus puntos de vista concuerdan
con los míos y, otras veces, no. Algunas de esas cosas que ellos aprueban, también las
aprobamos nosotros. Y otras de esas cosas, que ellos desaprueban, también los desaprobamos
nosotros. Algunas de esas cosas, que ellos aprueban, las desaprobamos nosotros. Y otras de
estas cosas, que ellos desaprueban, las aprobamos nosotros. Algunas de esas cosas, que
aprobamos nosotros, ellos también las aprueban. Y otras de esas cosas, que desaprobamos
nosotros, también las desaprueban ellos. Algunas de esas cosas, que aprobamos nosotros,
ellos las desaprueban. Y también otras de esas cosas, que desaprobamos nosotros, ellos las
aprueban.
[5] “Y yo, cuando me acerco a ellos les digo: ‘En cuanto a estas cosas, amigos, en las cuales
no estamos de acuerdo, dejémoslas de lado. Y en cuanto a las cosas, en las que estamos de
acuerdo, pongámonos a discutir acerca de ellas, razonemos acerca de ellas, tanto con sus
maestros como con sus discípulos, diciendo: «En cuanto a los malos y perjudiciales estados,
señores, que son censurables y conectados con lo perjudicial, que no conducen a la
iluminación, y están contados entre lo no beneficioso, ¿quién es aquel que ha abandonado
totalmente tales cosas: el asceta Gotama u otros venerables maestros?»’. [6] “Entonces,
Kassapa, el sabio, preguntado de esta manera, respondería esto: ‘El asceta Gotama se
conduce a sí mismo como alguien que ha abandonado totalmente estas cosas, mientras que
los venerables señores, maestros de las otras escuelas, lo han hecho sólo parcialmente’. Así
respondería el sabio, Kassapa, si se le preguntase de esta manera. Los sabios, Kassapa, en
este caso nos darían la mayoría de los elogios.
[7] “Además, Kassapa, les digo… ‘«En cuanto a los buenos y beneficiosos estados, señores,
que son intachables y conectados con lo beneficioso, que conducen a la iluminación, y están
contados entre lo beneficioso, ¿quién es aquel que ha adquirido un dominio total sobre estas
cosas: el asceta Gotama u otros venerables maestros?»’.
[8] “Entonces, Kassapa, el sabio, preguntado de esta manera, respondería esto: ‘El asceta
Gotama se conduce a sí mismo como alguien que ha adquirido un dominio total sobre estas
cosas, mientras que los venerables señores, maestros de las otras escuelas, lo han hecho sólo
parcialmente’. Así respondería el sabio, Kassapa, si se le preguntase de esta manera. Los
sabios, Kassapa, en este caso nos darían la mayoría de los elogios.
[9-12] [Igual que los versos 5-8 con la diferencia que “asceta Gotama u otros venerables
maestros” se reemplaza por “los discípulos del asceta Gotama o los discípulos de otros
venerables maestros”].
[13] “He aquí, Kassapa, un sendero, he aquí un método que conduce, a aquel que lo sigue, a
conocer y ver por sí mismo así: ‘El asceta Gotama es alguien que predica un
DhammayDisciplina que es recto y beneficioso’.
“Y, ¿cuál es, Kassapa, este sendero, este método que conduce, a aquel que lo sigue, a conocer
y ver por sí mismo así? Este es el Noble Óctuple Sendero, es decir, el recto punto de vista,
la recta intención, la recta forma de hablar, la recta acción, la recta forma de vida, el recto
esfuerzo, la recta atención consciente y la recta concentración. Este es el sendero, Kassapa,
el método que conduce, a aquel que lo sigue, a conocer y ver por sí mismo así:
‘El asceta Gotama es alguien que predica un Dhamma-y-Disciplina que es recto y
beneficioso’”.
[14] Cuando se dijo esto, el asceta desnudo Kassapa dijo al Bienaventurado [1]: “Maestro
Gotama, algunos ascetas y brahmanes siguen ciertas prácticas de auto-mortificación que, en
su opinión, conducen a la meta del ascetismo y a la menta del brahmanismo: alguien va por
ahí desnudo, rechazando las convenciones sociales, chupándose los dedos, sin acudir cuando
se le llama ni deteniéndose cuando se le saluda. No acepta ofrendas de comida, ni la
preparada especialmente para él, ni las invitaciones para comer. No toma alimento que
provenga directamente de una olla o sartén, ni en un umbral, ni entre leña y almireces, ni de
dos que estén comiendo juntos, ni de una embarazada, ni de mujer que esté dando de mamar,
ni de mujer que se amancebe con un hombre, ni de distribuciones públicas, ni de donde haya
perros esperando o pululen las moscas. No toma pescado ni carne, ni bebidas alcohólicas o
fermentadas. Es hombre de una sola casa y un solo bocado, o de dos, o de tres... o de siete
casas y siete bocados. Se sustenta con una ración, con dos... con siete raciones.
"Come una vez al día, o cada dos días, o una vez a la semana, o sigue la práctica de comer a
intervalos de quince días. Se alimenta de verduras, mijo, arroz silvestre, pellejos, musgo,
cáscaras de arroz, restos de arroz, harina de semillas, hierba, boñiga de vaca. Vive de raíces
y frutos silvestres, come frutas caídas. Se viste de arpillera, tela de estopa, mortajas, harapos,
corteza de árbol, con piel de ciervo, con retazos de piel de ciervo, con tela hecha de la hierba
kusa, de cortezas, de virutas, de pelo humano, de pelo animal o de plumas de lechuza. Se
arranca el pelo de la cabeza y de la barba, dedicándose a esta práctica. Permanece siempre
de pie y se niega a sentarse. Permanece siempre en cuclillas y se dedica a estar continuamente
en cuclillas. Se hace una cama de pinchos y duerme en ella. Vive dedicado a bañarse tres
veces al día, una de ellas por la noche”.
[15] “Kassapa, si el practicante de la auto-mortificación anduviese desnudo, rechazase las
convenciones sociales, chupándose los dedos e hiciese todas estas cosas con todos los
detalles, se alimentase conforme estas reglas en intervalos regulares, incluso de hasta medio
mes, pero no practicase ni lograse la realización en la conducta, en la mente y la sabiduría,
realmente estaría lejos de la meta del ascetismo y la meta del brahmanismo. Pero, Kassapa,
cuando el monje desarrolla una mente libre de odio y animadversión, una mente llena de
amor benevolente, abandonando las contaminaciones, entra y permanece en la inmaculada
liberación de la mente, liberación a través de la sabiduría, habiéndola descubierto por sí
mismo con el conocimiento directo, en esta presente vida, entonces aquel monje es un
verdadero asceta y un verdadero brahmán.
[16] Cuando se dijo esto, el asceta desnudo Kassapa dijo al Bienaventurado: “Qué difícil
entonces, maestro Gotama, tiene que ser, ser un asceta, y qué difícil, tiene que ser, ser un
brahmán”. “Es común, Kassapa, escuchar que en el mundo se diga: ‘Qué difícil, tiene que
ser, ser un asceta, y qué difícil, tiene que ser, ser un brahmán’. Si un asceta anduviese
desnudo, rechazase las convenciones sociales… [sigue como en el verso 14]… si el hecho
de hacer todas estas cosas fuera la medida de la dificultad de esta práctica, la gran dificultad
de ser un asceta o un brahmán, aún así no sería correcto decir: ‘Qué difícil tiene que ser, ser
un asceta, y qué difícil, tiene que ser, ser un brahmán’. Y, ¿por qué así? Porque, Kassapa,
cualquier hombre hogareño o hijo de hombre hogareño ―incluso una esclava que extrae el
agua―, podría decir: ‘Ahora bien, voy a andar desnudo, voy a rechazar las convenciones
sociales… [sigue como en el verso 14]… Pero, Kassapa, puesto que existe una muy diferente
clase de ascetismo, que trasciende aquel, es correcto decir: ‘Qué difícil, tiene que ser, ser un
asceta, y qué difícil, tiene que ser, ser un brahmán’. Kassapa, cuando el monje desarrolla una
mente libre de odio y animadversión, una mente llena de amor benevolente, abandonando
las contaminaciones, entra y permanece en la inmaculada liberación de la mente, liberación
a través de la sabiduría, habiéndola descubierto por sí mismo con el conocimiento directo,
en esta presente vida, entonces aquel monje es un verdadero asceta y un verdadero brahmán.
[17] Cuando se dijo esto, el asceta desnudo Kassapa dijo el Bienaventurado: “Qué difícil es,
maestro Gotama, reconocer a un verdadero asceta y qué difícil es reconocer a un verdadero
brahmán”. “Es común, Kassapa, escuchar que en el mundo se diga esto: ‘Qué difícil es
reconocer a un verdadero asceta y qué difícil es reconocer a un verdadero brahmán’. Si un
asceta anduviese desnudo, rechazase las convenciones sociales… [sigue como en el verso
14]… si el hecho de hacer todas estas cosas fuera la medida de la dificultad de esta práctica,
la gran dificultad de reconocer a un verdadero asceta o un verdadero brahmán, aún así no
sería correcto decir:
‘Qué difícil es reconocer a un verdadero asceta y qué difícil es reconocer a un verdadero
brahmán’. Y, ¿por qué así? Porque, Kassapa, cualquier hombre hogareño o hijo de hombre
hogareño ―incluso una esclava que extrae el agua―, podría decir: ‘Ahora bien, voy a andar
desnudo, voy a rechazar las convenciones sociales… [sigue como en el verso 14]… Pero,
Kassapa, puesto que existe una muy diferente clase de ascetismo, que trasciende aquel, es
correcto decir: ‘Qué difícil es reconocer a un verdadero asceta y qué difícil es reconocer a un
verdadero brahmán’. Kassapa, cuando el monje desarrolla una mente libre de odio y
animadversión, una mente llena de amor benevolente, abandonando las contaminaciones,
entra y permanece en la inmaculada liberación de la mente, liberación a través de la sabiduría,
habiéndola descubierto por sí mismo con el conocimiento directo, en esta presente vida,
entonces aquel monje es un verdadero asceta y un verdadero brahmán.
[18-20] Cuando se dijo esto, el asceta desnudo Kassapa dijo el Bienaventurado: “Maestro
Gotama, ¿en qué consiste el desarrollo de la moral, de la mente y de la sabiduría?”.
“He aquí, Kassapa, el Tathagata surgió en el mundo, un Arahant, un Perfectamente
Iluminado, realizado en el verdadero conocimiento y la conducta, el Afortunado, el
conocedor del mundo, incomparable líder de los que han de ser amansados, el maestro de los
devas y los seres humanos, el Iluminado, el Bienaventurado. Él, habiéndolo descubierto por
sí mismo con el conocimiento directo, lo proclama en este mundo con sus devas, Maras y
Brahmas, sus príncipes y la gente común. Enseña el Dhamma que es agradable en el
principio, agradable en el medio y agradable al final, tanto en su contenido como en la forma,
y despliega una vida santa completamente purificada y perfecta.
“Un hombre hogareño o hijo de hombre hogareño, o alguien que ha renacido desde un hogar
a otro, al escuchar este Dhamma, obtiene la fe en el Tathagata… [se repite la porción del
DN 2,41-63]. En esto consiste, Kassapa, la perfección de la moral.
“Además, Kassapa, él guarda las puertas de sus sentidos… Y, apartado de los placeres
sensuales, apartado de los perjudiciales estados mentales, entra y permanece en el primer
jhana… segundo jhana… tercer jhana… cuatro jhana… [igual que en DN 2,64-82]. En esto
consiste, Kassapa, la perfección de la mente.
“Además, Kassapa, con la mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de las
contaminaciones, maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad,
direcciona e inclina su mente hacia el conocimiento y la visión… [igual que en DN 2,8398].
En esto consiste, Kassapa, la perfección de la sabiduría. Y he aquí, Kassapa, que no hay nada
más perfecto que esta perfección de la moral, de la mente y de la sabiduría. [21] “He aquí,
Kassapa, algunos ascetas y brahmanes enseñan la moral y profieren elogios sobre la moral.
Pero en cuanto a la superior moral aria, Kassapa, no veo otra alguna que la sobrepase, y yo
soy el supremo en consideración a ella.
“Además, Kassapa, algunos ascetas y brahmanes enseñan el ascetismo y la austeridad, y
profieren elogios sobre el ascetismo y la austeridad. Pero en cuanto al superior ascetismo y
la austeridad arios, Kassapa, no veo otro ascetismo ni austeridad algunos que los sobrepase,
y yo soy el supremo en consideración a ellos.
“Además, Kassapa, algunos ascetas y brahmanes enseñan la sabiduría, y hablan elogios sobre
la sabiduría. Pero en cuanto a la superior sabiduría aria, Kassapa, no veo otra sabiduría alguna
que la sobrepase, y yo soy el supremo en consideración a ella.
“Además, Kassapa, algunos ascetas y brahmanes enseñan la liberación y profieren elogios
sobre la liberación. Pero en cuanto a la superior liberación aria, Kassapa, no veo otra
liberación alguna que la sobrepase, y yo soy el supremo en consideración a ella.
[22] “He aquí, Kassapa, pueden haber ascetas errantes de otras escuelas que digan: ‘El asceta
Gotama ruge su rugido de león, pero lo hace en soledad, no en medio de una asamblea’. Si
fuera el caso, se tendría que responderles así: ‘No digáis así, señores: el asceta Gotama ruge
su rugido de león, pero también lo hace en medio de la asamblea'. “También, Kassapa,
pueden haber ascetas errantes de otras escuelas que digan: ‘El asceta Gotama ruge su rugido
de león también en la asamblea, pero lo que ruge no es de plena confianza… pero la gente
no le hace preguntas… pero él no las responde… pero sus respuestas no son satisfactorias…
pero los hombres no consideran que sus opiniones son dignas de ser escuchadas… pero los
hombres no experimentan convicción hacia ellas… pero los hombres no muestran signos
exteriores de su fe… pero los hombres no llegan a la verdad’. “Si fuera el caso, Kassapa, se
tendría que responderles así: ‘No digáis esto, señores: el asceta Gotama ruge su rugido de
león, pero también lo hace en medio de la asamblea y lo que ruge es de plena confianza, la
gente le hace preguntas y él las responde, sus respuestas son satisfactorias y los hombres
consideran que sus opiniones son dignas de ser escuchadas, los hombres experimentan
convicción hacia ellas y muestran signos exteriores de su fe, y también los hombres penetran
la verdad y, habiéndose asido a ella, son capaces de transmitirla a otros’. Esto es, Kassapa,
lo que se debe responderles.
[23] “Una vez, Kassapa, estuve morando en el Parque de los Buitres, cerca de Rajagaha,
cuando un cierto practicante de la mortificación, de nombre Nigrodha, me consultó acerca
de la práctica superior de la austeridad. Y habiéndome preguntado, le expuse este asunto. Y
cuando escuchó la respuesta, estuvo muy complacido y tuvo una gran alegría”.
“Y, ¿quién no estuviera complacido, Venerable Señor, de escuchar el Dhamma del
Bienaventurado y no tuviera una gran alegría? Yo también, Venerable Señor, al escuchar el
Dhamma del Bienaventurado estoy muy complacido y tengo una gran alegría. “¡Excelente,
maestro Gotama! ¡Excelente, maestro Gotama! El maestro Gotama esclareció el Dhamma de
diferentes maneras, como si enderezara lo que estaba torcido, revelara lo que estaba oculto,
mostrara el camino a los que estaban perdidos o sostuviera una lámpara, en medio de la
oscuridad, de manera tal que los de buena vista pudieran ver las formas. Así la verdad ha
sido explicada por el Bienaventurado de diferentes maneras. ¡Que pueda recibir del
Bienaventurado el renunciamiento y la plena ordenación”.
[24] “Kassapa, cualquiera que ha sido miembro de otras escuelas, previamente, y quiere
hacer el renunciamiento e iniciarse en este Dhamma-y-Disciplina, debe pasar por un periodo
de prueba de cuatro meses. Y al culminar este periodo, establecido en la mente, recibe el
renunciamiento y la ordenación plena como monje. Aunque reconozco que, en estos casos,
pueden haber diferencias individuales”.
“En este caso, Venerable Señor, puedo pasar por un periodo de prueba de hasta cuatro años
y, al culminar este periodo, establecido en la mente, recibiré el renunciamiento y la
ordenación plena como monje”.
Entonces, el asceta desnudo Kassapa recibió el renunciamiento y la ordenación plena del
Bienaventurado. Entonces, el Venerable Kassapa, morando en soledad, recluido, atento,
ardiente y resuelto, no mucho tiempo después, descubrió por sí mismo con el conocimiento
directo, en esta presente vida, aquella insuperable realización de la vida santa, en aras de la
cual el hombre de familia correctamente renuncia a la vida hogareña y escoge el estilo de
vida sin hogar, y una vez entrado, permanece en ella. Y conoció directamente esto: “El
nacimiento está destruido, la vida santa ha sido vivida, lo que se tenía que hacer, fue realizado
y, he aquí, no hay futuras vueltas a los estados de existencia”. Y el Venerable Kassapa llegó
a ser uno de los Arahants.
“Monjes, la concentración a través de la atención consciente en la respiración, cuando se la
cultiva y desarrolla, trae muchos frutos y beneficios. ¿Y cómo, monjes, es la concentración
a través de la atención consciente en la respiración, que cuando se la cultiva y desarrolla, trae
muchos frutos y beneficios?

“He aquí, monjes, el monje, habiendo ido al bosque, al pie de un árbol o a una choza vacía,
se sienta. Habiendo cruzando las piernas, con el cuerpo erecto, pone su atención consciente
enfrente, y siempre consciente, inhala y siempre consciente, exhala.

“[i] Inhalando largo, él entiende: ‘Estoy inhalando largo’ o exhalando largo, entiende
‘Estoy exhalando largo’. [ii] Cuando inhala corto, él entiende ‘Estoy inhalando corto’ o
cuando exhala corto, entiende ‘Estoy exhalando corto’. [iii] Y él se entrena así: ‘Voy a inhalar
experimentado el cuerpo entero’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar experimentado el cuerpo
entero’. [iv] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar calmando las formaciones corporales’ y se
entrena así: ‘Voy a exhalar, calmando las formaciones corporales’.

“[v] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar experimentando la alegría’ y se entrena así: ‘Voy a
exhalar, experimentando la alegría’. [vi] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar experimentando el
placer’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, experimentando el placer’. [vii] Él se entrena así:
‘Voy a inhalar experimentando las formaciones mentales’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar,
experimentando las formaciones mentales’. [viii] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar calmando
las formaciones mentales’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, calmando las formaciones
mentales’.

“[ix] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar experimentando la mente’ y se entrena así: ‘Voy a
exhalar, experimentando la mente’. [x] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar llenando de gozo la
mente’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, llenando de gozo la mente’. [xi] Él se entrena así:
‘Voy a inhalar concentrando la mente’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, concentrando la
mente’. [xii] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar liberando la mente’ y se entrena así: ‘Voy a
exhalar, liberando la mente’.

“[xiii] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar contemplando la impermanencia’ y se entrena así:


‘Voy a exhalar, contemplando la impermanencia’. [xiv] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar
contemplando el desvanecimiento’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, contemplando el
desvanecimiento’. [xv] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar contemplando el cese’ y se entrena
así: ‘Voy a exhalar, contemplando el cese’. [xvi] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar
contemplando el renunciamiento’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, contemplando el
renunciamiento’.
“Ésta es, monjes, la concentración a través de la atención consciente en la respiración, que
cuando se la cultiva y desarrolla, trae muchos frutos y beneficios.

“Yo también, monjes, antes de mi despertar, mientras aún era el bodhisatta, todavía no
plenamente despierto, generalmente permanecía en esta morada. Mientras que generalmente
permanecía en esta morada, ni mi cuerpo ni los ojos llegaron a fatigarse y mi mente, a través
del no-apego, podría ser liberada de las impurezas.

“Por lo tanto, monjes, cuando el monje desea ‘que ni mi cuerpo ni los ojos lleguen a fatigarse
y mi mente, a través del no-apego, pueda ser liberada de las impurezas’, esa misma
concentración a través de la atención consciente en la respiración, también debería ser
alcanzada de cerca.

“Por lo tanto, monjes, cuando el monje desea ‘que los recuerdos y las intenciones
relacionadas con la vida hogareña sean abandonadas por mi’, esa misma concentración a
través de la atención consciente en la respiración, también debería ser alcanzada de cerca.

“Por lo tanto, monjes, cuando el monje desea ‘que permanezca percibiendo lo repulsivo
como no repulsivo’, esa misma concentración a través de la atención consciente en la
respiración, también debería ser alcanzada de cerca.

“Por lo tanto, monjes, cuando el monje desea ‘que permanezca percibiendo lo no repulsivo
como repulsivo’, esa misma concentración a través de la atención consciente en la
respiración, también debería ser alcanzada de cerca.

“Por lo tanto, monjes, cuando el monje desea ‘que permanezca percibiendo lo repulsivo en
lo no repulsivo y lo repulsivo’, esa misma concentración a través de la atención consciente
en la respiración, también debería ser alcanzada de cerca.

“Por lo tanto, monjes, cuando el monje desea ‘que permanezca percibiendo lo no repulsivo
en lo repulsivo y lo no repulsivo’, esa misma concentración a través de la atención consciente
en la respiración, también debería ser alcanzada de cerca.

“Por lo tanto, monjes, cuando el monje desea ‘evitando a ambos, lo no repulsivo y lo


repulsivo, que permanezca ecuánime, atentamente consciente y comprendiendo claramente’,
esa misma concentración a través de la atención consciente en la respiración, también debería
ser alcanzada de cerca.

“Por lo tanto, monjes, cuando el monje desea ‘que, recluido de los placeres sensuales,
recluido de los insalubres estados mentales, entre y permanezca en el primer jhana,
acompañado por el pensamiento aplicado y el pensamiento sostenido, con arrebatamiento y
felicidad surgidos de la reclusión’, esa misma concentración a través de la atención
consciente en la respiración, también debería ser alcanzada de cerca.

“Por lo tanto, monjes, cuando el monje desea ‘que, con el aquietamiento del pensamiento
aplicado y el pensamiento sostenido, entre y permanezca en el segundo jhana, con la
confidencia interior y unificación de la mente, pero sin el pensamiento aplicado y el
pensamiento sostenido, con arrobamiento y felicidad nacidos de la concentración’, esa
misma concentración a través de la atención consciente en la respiración, también debería
ser alcanzada de cerca.

“Por lo tanto, monjes, cuando el monje desea ‘que, con el desvanecimiento del arrobamiento,
permanezca ecuánime, conscientemente atento y comprendiendo claramente, pueda
experimentar la felicidad con mi cuerpo y pueda entrar y permanecer en el tercer jhana, del
cual los nobles declaran: «él es ecuánime, conscientemente atento y uno que mora en la
felicidad»’, esa misma concentración a través de la atención consciente en la respiración,
también debería ser alcanzada de cerca.

“Por lo tanto, monjes, cuando el monje desea ‘que, con el abandono del placer y dolor, y con
la previa desaparición del gozo y displacer, entre y permanezca en el cuarto jhana, el cual no
es ni doloroso ni placentero, e incluye la purificación de la atención consciente a través de la
ecuanimidad’, esa misma concentración a través de la atención consciente en la respiración,
también debería ser alcanzada de cerca.

“Por lo tanto, monjes, cuando el monje desea ‘que, al trascender completamente la


percepción de las formas, con la desaparición de de la percepción del impacto sensorial, con
la no-atención de la percepción de la diversidad, consciente que «el espacio es infinito», entre
y permanezca en la base de la infinidad del espacio’, esa misma concentración a través de la
atención consciente en la respiración, también debería ser alcanzada de cerca. “Por lo tanto,
monjes, cuando el monje desea ‘que, al trascender completamente la base de la infinidad del
espacio, consciente que «la conciencia es infinita», entre y permanezca en la base de la
infinidad de la conciencia’, esa misma concentración a través de la atención consciente en la
respiración, también debería ser alcanzada de cerca.
“Por lo tanto, monjes, cuando el monje desea ‘que, al trascender completamente la base de
la infinidad de la conciencia, consciente que «aquí no hay nada», entre y permanezca en la
base de la nada’, esa misma concentración a través de la atención consciente en la respiración,
también debería ser alcanzada de cerca.

“Por lo tanto, monjes, cuando el monje desea ‘que, al trascender completamente la base de
la nada, entre y permanezca en la base de ni-percepción-ni-no-percepción’, esa misma
concentración a través de la atención consciente en la respiración, también debería ser
alcanzada de cerca.
“Monjes, cuando la concentración a través de la atención consciente en la respiración ha sido
desarrollada y cultivada de esta manera, cuando él experimenta alguna sensación placentera,
entiende que ‘esto no es permanente’; entiende que ‘esto no es [algo] para ser considerado’;
entiende que ‘esto no es [algo] en qué deleitarse’. Cuando experimenta alguna sensación
dolorosa, entiende que ‘esto no es permanente’; entiende que ‘esto no es [algo] para ser
considerado’; entiende que ‘esto no es [algo] en qué deleitarse’.

“Cuando experimenta alguna sensación placentera, siente que la misma está suelta; cuando
experimenta alguna sensación dolorosa, siente que la misma está suelta; cuando experimenta
alguna sensación ni placentera ni dolorosa, siente que la misma está suelta.

“Cuando experimenta alguna sensación que termina con el cuerpo, entiende que ‘estoy
experimentando una sensación que termina con el cuerpo’. Cuando experimenta alguna
sensación que termina con la vida, entiende que ‘estoy experimentando una sensación que
termina con la vida’. Y entiende así: ‘con la disolución del cuerpo, seguido por la extenuación
de la vida, y siendo que todo lo que es sentido, no ha sido objeto de deleite, llegará la frescura
aquí mismo.’

“Monjes, al igual que una lámpara arde dependiendo del aceite y la mecha, y con la
extenuación del aceite y la mecha, se extingue por falta de combustible, de la misma manera,
monjes, cuando el monje experimenta alguna sensación que termina con el cuerpo, entiende
que ‘estoy experimentando una sensación que termina con el cuerpo’. Cuando experimenta
alguna sensación que termina la vida, entiende que ‘estoy experimentando una sensación que
termina con la vida’. Y entiende así: ‘con la disolución del cuerpo, seguido por la extenuación
de la vida, y siendo que todo lo que es sentido, no ha sido objeto de

deleite, llegará la frescura aquí mismo.’”

Separado de los placeres sensuales, separado de los perjudiciales estados mentales, entra y
permanece en el primer jhana: el arrobamiento y la felicidad nacidos de la reclusión,
acompañados por el pensamiento aplicado y el pensamiento sostenido. Así permanece,
habiendo experimentando su cuerpo en las esferas que pueda alcanzar y comprendiendo esto
con sabiduría. Este es el alcance, amigo, de la declaración: ‘liberación de ambas formas’,
hecha por el Bienaventurado con la secuela.

“Además, amigo, con la desaparición del pensamiento aplicado y el pensamiento sostenido,


él entra y permanece en el segundo jhana: el arrobamiento y la felicidad nacidos de la
concentración, la unificación mental y la tranquilidad interior, libre del pensamiento aplicado
y el pensamiento sostenido. Así permanece, habiendo experimentando su cuerpo en las
esferas que pueda alcanzar y comprendiendo esto con sabiduría. Este también es el alcance,
amigo, de la declaración: ‘liberación de ambas formas’, hecha por el Bienaventurado con la
secuela. “Además, amigo, con la desaparición del arrobamiento, él mora con la
desapasionada ecuanimidad, atentamente consciente y con clara comprensión,
experimentando corporalmente la felicidad, y así entra y permanece en el tercer jhana, del
cual los Nobles declararon: ‘Ecuánime y atentamente consciente, él permanece feliz en una
morada apacible’. Así permanece, habiendo experimentando su cuerpo en las esferas que
pueda alcanzar y comprendiendo esto con sabiduría. Este también es el alcance, amigo, de la
declaración: ‘liberación de ambas formas’, hecha por el Bienaventurado con la secuela.
“Además, amigo, con el abandono, tanto de la felicidad como del dolor, y con la previa
desaparición de lo placentero y lo displicente, él entra y permanece en el cuarto jhana: en la
morada apacible de la ecuanimidad y atención consciente purificadas, sin felicidad ni dolor.
Así permanece, habiendo experimentando su cuerpo en las esferas que pueda alcanzar y
comprendiendo esto con sabiduría. Este también es el alcance, amigo, de la declaración:
‘liberación de ambas formas’, hecha por el Bienaventurado con la secuela. “Además, amigo,
trascendiendo totalmente la percepción de las formas, con la desaparición de la percepción
de la resistencia, no atendiendo a la diversidad y pensando ‘el espacio infinito’, él entra y
permanece en la esfera del espacio infinito. Así permanece, habiendo experimentando su
cuerpo en las esferas que pueda alcanzar y comprendiendo esto con sabiduría. Este también
es el alcance, amigo, de la declaración: ‘liberación de ambas formas’, hecha por el
Bienaventurado con la secuela.
“Además, amigo, trascendiendo totalmente la esfera del espacio infinito, pensando: ‘la
conciencia infinita’, él entra y permanece en la esfera de la conciencia infinita. Así
permanece, habiendo experimentando su cuerpo en las esferas que pueda alcanzar y
comprendiendo esto con sabiduría. Este también es el alcance, amigo, de la declaración:
‘liberación de ambas formas’, hecha por el Bienaventurado con la secuela.
“Además, amigo, trascendiendo totalmente la esfera de la conciencia infinita, pensando: ‘he
aquí no hay nada’, él entra y permanece en la esfera de la nada. Así permanece, habiendo
experimentando su cuerpo en las esferas que pueda alcanzar y comprendiendo esto con
sabiduría. Este también es el alcance, amigo, de la declaración: ‘liberación de ambas formas’,
hecha por el Bienaventurado con la secuela.
“Además, amigo, trascendiendo totalmente la esfera de la nada, él entra y permanece en la
esfera de la ni percepción ni la no percepción. Así permanece, habiendo experimentando su
cuerpo en las esferas que pueda alcanzar y comprendiendo esto con sabiduría. Este también
es el alcance, amigo, de la declaración: ‘liberación de ambas formas’, hecha por el
Bienaventurado con la secuela.
Además, amigo, trascendiendo totalmente la esfera de la ni percepción ni la no percepción,
él entra y permanece en el cese de la percepción y la sensación.

En una ocasión, el Bienaventurado estaba morando en Kosambi, en el Parque de Ghosita.

Entonces, por la mañana temprano, el Bienaventurado se vistió y, tomando su tazón y el


hábito exterior, entró en Kosambí en búsqueda de limosnas. Cuando hubo caminado en
búsqueda de limosnas y hubo retornado de su habitual ronda de la búsqueda de limosnas,
después de la comida, ordenó su propio alejamiento, tomó su tazón y el hábito exterior, y sin
informar a sus ayudantes personales, sin haberse despedido del Sangha de los Bhikkhus,
emprendió un viaje solitario, sin compañía [1].

Entonces, no mucho tiempo después de que el Bienaventurado se haya apartado, cierto monje
se acercó al Venerable Ananda y le dijo: “Amigo Ananda, el Bienaventurado ordenó su
propio alejamiento, tomó su tazón y el hábito exterior, y sin informar a sus ayudantes
personales, sin haberse despedido del Sangha de los Monjes, emprendió un viaje solitario,
sin compañía.”

“Amigo, siempre que el Bienaventurado actúa de esta manera, significa que desea morar en
soledad. En estas ocasiones, el Bienaventurado no debe ser seguido por nadie”.

Entonces, el Bienaventurado, atravesando regiones, arribó a Palileyya. Allá, en Palileyya, el


Bienaventurado moró al pie de un auspicioso árbol sala.

En ese tiempo, un numeroso grupo de monjes se acercó al Venerable Ananda e intercambió


con él cordiales saludos. Cuando han concluido estas salutaciones y amables charlas de
bienvenida, se sentaron a un lado y dijeron al Venerable Ananda: “He aquí que pasó mucho
tiempo desde que hemos escuchado una exposición del Dhamma en presencia del
Bienaventurado. Nos gustaría escuchar la exposición del Dhamma en presencia del
Bienaventurado, amigo Ananda”.

Entonces, el Venerable Ananda, junto con el grupo de aquellos monjes, se acercó al


Bienaventurado, al pie del auspicioso árbol sala. Habiéndose acercado, rindieron homenaje
al Bienaventurado y se sentaron a un lado. Entonces, el Bienaventurado instruyó, exhortó,
inspiró y regocijó a aquellos monjes con la plática del Dhamma.

En esta ocasión, en la mente de cierto monje surgió esta reflexión: “¿Cómo debería uno
conocer, cómo debería uno ver, para que ocurriera inmediatamente la destrucción de las
impurezas? [2]”
El Bienaventurado, habiendo conocido con su propia mente la reflexión que surgió en la
mente de aquel monje, se dirigió a los monjes con estas palabras:

“Monjes, este Dhamma ha de ser enseñando por mí discriminadamente [3]. Los cuatro
establecimientos de la atención consciente han de ser enseñados por mí discriminadamente.

Los cuatro rectos esfuerzos… las cuatro bases del poder espiritual… Las cinco facultades
espirituales… Los cinco poderes… Los siete factores de iluminación… El Noble Óctuple
Sendero ha de ser enseñado por mí discriminadamente. Monjes, en relación al Dhamma que
ha sido enseñando por mí, en la mente de cierto monje surgió esta reflexión: ‘¿Cómo debería
uno conocer, cómo debería uno ver, para que ocurriera inmediatamente la destrucción de las
impurezas?’

“¿Y cómo, monjes, uno debería conocer, cómo uno debería ver, para que ocurriera
inmediatamente la destrucción de las impurezas?

“He aquí, monjes, alguien que es mundano y no instruido, que no dirige su mirada hacia los
nobles, inepto y no disciplinado en su Dhamma, que no dirige su mirada hacia las personas
superiores, inepto y no disciplinado en su Dhamma, considera la forma como el ser. Este tipo
de consideración, monjes, es formación. ¿Y cuál es la fuente, cuál el origen, de qué nace y
se produce esta formación? Cuando alguien que es mundano y no instruido entra en contacto
a través de la sensación surgida de la ignorancia del contacto, surge la avidez: de ahí que
surge aquella formación. Monjes, cuando uno conoce y ve esto, ocurre la inmediata
destrucción de las impurezas.

“Monjes, puede que él no considere la forma como el ser, pero considera al ser como algo
que posee forma. Este tipo de consideración, monjes, es formación… (sigue como en el
párrafo anterior).

“Monjes, puede que él no considere la forma como el ser ni al ser como algo que posee
forma, pero considera la forma como en el ser. Este tipo de consideración, monjes, es
formación… (sigue como más arriba).

“Monjes, puede que él no considere la forma como el ser ni al ser como algo que posee forma
ni la forma como en el ser, pero considera el ser como en la forma. Este tipo de consideración,
monjes, es formación… (sigue como más arriba).

“Monjes, puede que él no considere la forma como el ser ni al ser como algo que posee forma
ni la forma como en el ser ni el ser como en la forma, pero considera la sensación como el
ser… la sensación como algo que posee forma… la sensación como en el ser… el ser como
en la sensación. Este tipo de consideración, monjes, es formación… (sigue como más arriba).
“Monjes, puede que él no considere la forma como el ser ni al ser como algo que posee forma
ni la forma como en el ser ni el ser como en la forma ni la sensación como el ser ni la
sensación como algo que posee forma ni la sensación como en el ser ni el ser como en la
sensación, pero considera la percepción como el ser… la percepción como algo que posee
forma… la percepción como en el ser… el ser como en la percepción. Este tipo de
consideración, monjes, es formación… (sigue como más arriba).

“Monjes, puede que él no considere la forma como el ser ni al ser como algo que posee forma
ni la forma como en el ser ni el ser como en la forma ni la sensación como el ser ni la
sensación como algo que posee forma ni la sensación como en el ser ni el ser como en la
sensación ni la percepción como el ser ni la percepción como algo que posee forma ni la
percepción como en el ser ni el ser como en la percepción. Pero considera las formaciones
mentales como el ser… las formaciones mentales como algo que posee forma… las
formaciones mentales como en el ser… el ser como en las formaciones mentales. Este tipo
de consideración, monjes, es formación… (sigue como más arriba).

“Monjes, puede que él no considere la forma como el ser ni al ser como algo que posee forma
ni la forma como en el ser ni el ser como en la forma ni la sensación como el ser ni la
sensación como algo que posee forma ni la sensación como en el ser ni el ser como en la
sensación ni la percepción como el ser ni la percepción como algo que posee forma ni la
percepción como en el ser ni el ser como en la percepción ni las formaciones mentales como
el ser, ni las formaciones mentales como algo que posee forma ni las formaciones mentales
como en el ser, ni el ser como en las formaciones mentales. Pero considera los estados de
conciencia como el ser… los estados de consciencia como algo que posee forma… los
estados de conciencia como en el ser… el ser como en los estados de conciencia. Este tipo
de consideración, monjes, es formación. ¿Y cuál es la fuente, cuál el origen, de qué nace y
se produce esta formación? Cuando alguien que es mundano y no instruido entra en contacto
a través de la sensación surgida de la ignorancia del contacto, surge la avidez: de ahí que
surge aquella formación. Monjes, cuando uno conoce y ve esto, ocurre la inmediata
destrucción de las impurezas.

“Monjes, puede que él no considere la forma como el ser… el ser como en los estados de
conciencia. Pero, él mantiene el siguiente punto de vista: ‘así cómo es el ser, así es el mundo;
habiendo pasado a la otra vida, seré así: permanente, estable, eterno, no sujeto a cambios’.
Este tipo de punto de vista eternalista, monjes, es formación. ¿Y cuál es la fuente, cuál el
origen, de qué nace y se produce esta formación? Cuando alguien que es mundano y no
instruido entra en contacto a través de la sensación surgida de la ignorancia del contacto,
surge la avidez: de ahí que surge aquella formación. Monjes, cuando uno conoce y ve esto,
ocurre la inmediata destrucción de las impurezas.
“Monjes, puede que él no considere la forma como el ser… ni mantiene el siguiente punto
de vista: ‘así cómo es el ser, así es el mundo; habiendo pasado a la otra vida, seré así:
permanente, estable, eterno, no sujeto a cambios’. Pero, él mantiene el siguiente punto de
vista: ‘yo podría no ser y esto podría no ser para mí; así que yo no seré ni esto será para mí.’
Este tipo de punto de vista aniquilacionsita, monjes, es formación. ¿Y cuál es la fuente, cuál
el origen, de qué nace y se produce esta formación? Cuando alguien que es mundano y no
instruido entra en contacto a través de la sensación surgida de la ignorancia del contacto,
surge la avidez: de ahí que surge aquella formación. Monjes, cuando uno conoce y ve esto,
ocurre la inmediata destrucción de las impurezas.

“Monjes, puede que él no considere la forma como el ser… ni mantiene el siguiente punto
de vista: ‘yo podría no ser y esto podría no ser para mí; así que yo no seré ni esto será para
mí.’ Pero él está perplejo, dubitativo indeciso en relación al verdadero Dhamma. Esta
perplejidad, duda e indecisión acerca del verdadero Dhamma, monjes, es formación. ¿Y cuál
es la fuente, cuál el origen, de qué nace y se produce esta formación? Cuando alguien que es
mundano y no instruido entra en contacto a través de la sensación surgida de la ignorancia
del contacto, surge la avidez: de ahí que surge aquella formación.

“Así que, monjes, aquella formación no es permanente, es condicionada y surgida en forma


dependiente; aquella avidez no es permanente, es condicionada y surgida en forma
dependiente; aquella sensación no es permanente, es condicionada y surgida en forma
dependiente; aquel contacto no es permanente, es condicionado y surgido en forma
dependiente; aquella ignorancia no es permanente, es condicionada y surgida en forma
dependiente.

Tabla I: Los siete conjuntos i. Los Cuatro Fundamentos de la Atención Consciente


(satipatthana)

1. Permanecer enfocado en el cuerpo como cuerpo –con ardor, alerta y conscientemente


atento- dejando atrás la codicia y la aflicción por el mundo.
2. Permanecer enfocado en las sensaciones como sensaciones –con ardor, alerta y
conscientemente atento- dejando atrás la codicia y la aflicción por el mundo.
3. Permanecer enfocado en la mente como mente –con ardor, alerta y conscientemente
atento- dejando atrás la codicia y la aflicción por el mundo.
4. Permanecer enfocado en los fenómenos mentales como fenómenos mentales –con
ardor, alerta y conscientemente atento- dejando atrás la codicia y la aflicción por el
mundo.
ii. Los Cuatro Rectos Esfuerzos (sammappadhana)

1. Realizar el continuo esfuerzo, generar el deseo, la intención y la energía, para que no


aparezcan las cualidades mentales no deseables e insanas que aún no aparecieron.
2. Realizar el continuo esfuerzo, generar el deseo, la intención y la energía, para
abandonar las cualidades mentales no deseables e insanas que ya aparecieron.
3. Realizar el continuo esfuerzo, generar el deseo, la intención y la energía, para que
aparezcan las cualidades mentales deseables y sanas que aún no aparecieron.
4. Realizar el continuo esfuerzo, generar el deseo, la intención y la energía, para que
permanezcan, se acrecienten, desarrollen y lleguen a su plenitud las cualidades
mentales deseables y sanas que ya aparecieron.

iii. Las Cuatro Bases del Poder Espiritual (iddhipada)

1. Desarrollar la base del poder espiritual dotado de concentración apoyada en el deseo


y en los efectos del esfuerzo.
2. Desarrollar la base del poder espiritual dotado de concentración apoyada en la energía
y en los efectos del esfuerzo.
3. Desarrollar la base del poder espiritual dotado de concentración apoyada en la
resolución y en los efectos del esfuerzo.
4. Desarrollar la base del poder espiritual dotado de concentración apoyada en el
reconocimiento y en los efectos del esfuerzo.

iv. Las Cinco Facultades (indriya)

1. Facultad de la confianza (saddha)


2. Facultad de la energía (viriya)
3. Facultad de la atención consciente (sati)
4. Facultad de la concentración (samadhi) 5. Facultad del discernimiento (pañña)

v. Las Cinco Fortalezas (bala)

1. Fortaleza de la confianza (saddha)


2. Fortaleza de la energía (viriya)
3. Fortaleza de la atención consciente (sati)
4. Fortaleza de la concentración (samadhi) 5. Fortaleza del discernimiento (pañña)

vi. Los Siete Factores de Iluminación (bojjhanga)

1. Atención consciente como factor de Iluminación (satisambojjhanga)


2. Análisis de fenómenos como factor de Iluminación (dhammavicayasambojjhanga)
3. Energía como factor de Iluminación (viriyasambojjhanga)
4. Arrobamiento como factor de Iluminación (pitisambojjhanga)
5. Tranquilidad como factor de Iluminación (passaddhisambojjhanga)
6. Concentración como factor de Iluminación (samadhisambojjhanga) 7. Ecuanimidad
como factor de Iluminación (upekkhasambojjhanga)

vii. El Óctuple Noble Sendero (ariyamagga)

1. Recta visión (sammaditthi)


2. Recta intención (sammasankappa)
3. Recta forma de hablar (sammavaca)
4. Recta acción (sammakammanta)
5. Recta forma de vida (sammaajiva)

6. Recto esfuerzo (sammavayama)


7. Recta atención consciente (sammasati)
8. Recta concentración (sammasamadhi)

Tabla II: Los factores de los siete conjuntos clasificados bajo el principio de las Cinco
Facultades

Recta forma de hablar (Noble Sendero)

Recta acción (Noble Sendero)


Fe
Recta forma de vida (Noble Sendero)

Deseo (Bases del Poder Espiritual)

Recto esfuerzo (Noble Sendero)

Cuatro rectos esfuerzos


Energía
Energía (Bases del Poder Espiritual)

Energía (Factores de Iluminación)


Cuatro fundamentos de la atención consciente

Recta atención consciente (Noble Sendero)


Atención consciente
Resolución (Bases del Poder Espiritual)

Atención consciente (Factores de Iluminación)

Cuatro bases del poder espiritual

Recta concentración (Noble Sendero)

Concentración Arrobamiento (Factores de Iluminación)

Tranquilidad (Factores de Iluminación)

Concentración (Factores de Iluminación)

Ecuanimidad (Factores de Iluminación)


Recta visión (Noble Sendero)

Recta intención (Noble Sendero)

Discernimiento Análisis de los fenómenos (Factores de Iluminación)

Reconocimiento (Bases del Poder Espiritual)

Ecuanimidad Factores de Iluminación)

{1} “Monjes, antes de mi auto-despertar, cuando aun era un Bodhisatta no-despierto, se me


ocurrió el pensamiento: ‘¿Por qué no sigo dividiendo mi pensamiento en dos tipos?’ Así hice
del pensamiento impregnado de sensualidad, del pensamiento impregnado de mala voluntad
y del pensamiento impregnado de lo pernicioso una tipo, y del pensamiento impregnado de
renunciación, del pensamiento impregnado de buena voluntad y del pensamiento
impregnado de lo beneficioso otro tipo.

Y cuando permanecía así diligente, fervoroso y resoluto, el pensamiento impregnado de


sensualidad surgió. Percibí que ‘El pensamiento impregnado en sensualidad ha surgido en
mi; y que eso lleva a mi propia aflicción o a la aflicción de otros o a la aflicción de ambos.
Obstruye el discernimiento, promueve la contrariedad y no lleva a la Liberación.’
“Cuando me di cuenta de que llevaba a mi propia aflicción, aminoró. Cuando me di cuenta
de que llevaba a la aflicción de otros… a la aflicción de ambos… que obstruye el
discernimiento, que promueve la contrariedad y que no lleva a la Liberación, aminoró. Cada
vez que un pensamiento impregnado de sensualidad hubo surgido, simplemente lo
abandonaba, lo destruía, lo disipaba, lo eliminaba de la existencia.

Y cuando permanecía así diligente, fervoroso y resoluto, el pensamiento impregnado de mala


voluntad surgió. Percibí que ‘El pensamiento impregnado de mala voluntad ha surgido en
mi; y que eso lleva a mi propia aflicción o a la aflicción de otros o a la aflicción de ambos.
Obstruye el discernimiento, promueve la contrariedad y no lleva a la Liberación.’ “Cuando
me di cuenta de que llevaba a mi propia aflicción, aminoró. Cuando me di cuenta de que
llevaba a la aflicción de otros… a la aflicción de ambos… que obstruye el discernimiento,
que promueve la contrariedad y que no lleva a la Liberación, aminoró. Cada vez que un
pensamiento impregnado de mala voluntad hubo surgido, simplemente lo abandonaba, lo
destruía, lo disipaba, lo eliminaba de la existencia.

Y cuando permanecía así diligente, fervoroso y resoluto, el pensamiento impregnado de lo


pernicioso surgió. Percibí que ‘El pensamiento impregnado de lo pernicioso ha surgido en
mi; y que eso lleva a mi propia aflicción o a la aflicción de otros o a la aflicción de ambos.
Obstruye el discernimiento, promueve la contrariedad y no lleva a la Liberación.’

“Cuando me di cuenta de que llevaba a mi propia aflicción, aminoró. Cuando me di cuenta


de que llevaba a la aflicción de otros… a la aflicción de ambos… que obstruye el
discernimiento, que promueve la contrariedad y que no lleva a la Liberación, aminoró. Cada
vez que un pensamiento impregnado de lo pernicioso hubo surgido, simplemente lo
abandonaba, lo destruía, lo disipaba, lo eliminaba de la existencia.

“Lo que un monje sigue buscando con su pensamiento y su reflexión, eso se convierte en la
inclinación de su consciencia. Si un monje sigue buscando el pensamiento impregnado de
sensualidad, abandonando el pensamiento impregnado de renunciación, su mente está
doblegada por ese pensamiento impregnado de sensualidad. Si un monje sigue buscando el
pensamiento impregnado de mala voluntad, abandonando el pensamiento impregnado de
buena voluntad, su mente está doblegada por ese pensamiento impregnado de mala voluntad.
Si un monje sigue buscando el pensamiento impregnado de lo pernicioso, abandonando el
pensamiento impregnado en lo beneficioso, su mente está doblegada por ese pensamiento
impregnado de lo pernicioso.

“Al igual que en el último mes de las Lluvias, en la estación de otoño cuando los cultivos
están madurando, un pastor cuidaría de sus vacas: las dirigiría, guiaría y dominaría con un
palo hacia este lado y a aquél. ¿Por qué? Porque prevé que latigazos o encarcelamiento o una
multa o la censura pública surge de aquello [si permite que sus vacas deambulen por los
cultivos]. De la misma manera yo preví en las cualidades poco hábiles inconvenientes,
degradación y corrupción, y preví en las cualidades hábiles recompensas relacionadas con la
renunciación y que promovían la purificación.

“Y cuando permanecía así diligente, fervoroso y resoluto, el pensamiento impregnado de


renunciación surgió. Percibí que ‘El pensamiento impregnado de renunciación ha surgido en
mi; y que eso no me lleva ni a mi aflicción ni a la aflicción de otros ni a la aflicción de ambos.
Fomenta el discernimiento, promueve la falta de contrariedad y lleva a la Liberación. Si yo
fuese a pensar y reflexionar en esa línea durante una noche... durante un día... durante un día
y una noche, no imagino ningún peligro que pudiera venir de ello, excepto que pensar y
reflexionar durante mucho tiempo cansaría el cuerpo. Cuando un cuerpo está cansado, la
mente está inquieta; y una mente inquieta está lejos de la concentración.’ Así pues calmé mi
mente internamente, la tranquilicé, la unifiqué y la concentré. ¿Para qué? Para que mi mente
no estuviera inquieta.

“Y cuando permanecía así diligente, fervoroso y resoluto, el pensamiento impregnado de


buena voluntad surgió. Percibí que ‘El pensamiento impregnado de buena voluntad ha
surgido en mi; y que eso no me lleva ni a mi aflicción ni a la aflicción de otros ni a la aflicción
de ambos. Fomenta el discernimiento, promueve la falta de contrariedad y lleva a la
Liberación. Si yo fuese a pensar y reflexionar en esa línea durante una noche... durante un
día... durante un día y una noche, no imagino ningún peligro que pudiera venir de ello,
excepto que pensar y reflexionar durante mucho tiempo cansaría el cuerpo. Cuando un
cuerpo está cansado, la mente está inquieta; y una mente inquieta está lejos de la
concentración.’ Así pues calmé mi mente internamente, la tranquilicé, la unifiqué y la
concentré. ¿Para qué? Para que mi mente no estuviera inquieta.

“Y cuando permanecía así diligente, fervoroso y resoluto, el pensamiento impregnado de lo


beneficioso surgió. Percibí que ‘El pensamiento impregnado de lo beneficioso ha surgido en
mi; y que eso no me lleva ni a mi aflicción ni a la aflicción de otros ni a la aflicción de ambos.
Fomenta el discernimiento, promueve la falta de contrariedad y lleva a la Liberación. Si yo
fuese a pensar y reflexionar en esa línea durante una noche... durante un día... durante un día
y una noche, no imagino ningún peligro que pudiera venir de ello, excepto que pensar y
reflexionar durante mucho tiempo cansaría el cuerpo. Cuando un cuerpo está cansado, la
mente está inquieta; y una mente inquieta está lejos de la concentración.’ Así pues calmé mi
mente internamente, la tranquilicé, la unifiqué y la concentré. ¿Para qué? Para que mi mente
no estuviera inquieta.

“Lo que un monje sigue buscando con su pensamiento y su reflexión, eso se convierte en la
inclinación de su consciencia. Si un monje sigue buscando el pensamiento impregnado de
renunciación, abandonando el pensamiento impregnado de sensualidad, su mente está
doblegada por ese pensamiento impregnado de renunciación. Si un monje sigue buscando el
pensamiento impregnado de buena voluntad, abandonando el pensamiento impregnado de
mala voluntad, su mente está doblegada por ese pensamiento impregnado de buena voluntad.
Si un monje sigue buscando el pensamiento impregnado de lo beneficioso, abandonando el
pensamiento impregnado de lo pernicioso, su mente está doblegada por ese pensamiento
impregnado de lo beneficioso.

“Al igual que en el último mes de la estación de calor, cuando todas las cosechas han sido
recogidas en el pueblo, un pastor cuidaría de sus vacas: Mientras estuvieran descansando a
la sombra de un árbol o en el cielo abierto, él simplemente permanece atento a 'aquellas
vacas'. De la misma manera, yo simplemente permanecí atento a aquellas 'cualidades
mentales'.

“Una persistencia inagotable surgió en mí, y se estableció una atención nítida. Mi cuerpo
estaba calmado e indiferente, mi mente concentrada y unificada. Apartado de la sensualidad,
apartado de las cualidades mentales poco hábiles, entré y permanecí en el primer jhana: rapto
y placer nacidos del apartamiento, acompañado de pensamiento dirigido y evaluación. Con
el apaciguamiento de los pensamientos dirigidos y las evaluaciones, entré y permanecí en el
segundo jhana: rapto y placer nacidos de la compostura, la unificación de la consciencia libre
del pensamiento dirigido y evaluación – seguridad interna. Con el desvanecimiento del rapto,
permanecí en la ecuanimidad, atento, alerta, y físicamente sensible al placer. Entré y
permanecí en el tercer jhana, de los cuales los Nobles declaran, 'Ecuánime y atento, él tiene
una morada agradable. Con el abandono del placer y el dolor – como con la anterior
desaparición de la euforia y el sufrimiento – entré y permanecí en el cuarto jhana: pureza de
ecuanimidad y atención, sin placer ni dolor.

“Cuando la mente estaba así concentrada, purificada, radiante, sin mácula, libre de
corrupción, flexible, maleable, firme y hubo alcanzado la imperturbabilidad, la dirigí al
conocimiento del recuerdo de mis vidas pasadas . Recordé mis múltiples vidas pasadas, esto
es, un nacimiento, dos... cinco, diez... cincuenta, cien, mil, cien mil, muchos eones de
contracción cósmica, muchos eones de expansión cósmica, muchos eones de contracción y
expansión cósmica: 'Allí tuve tal nombre, pertenecí a tal clan, tuve tal apariencia. Tal fue mi
alimento, tal mi experiencia de placer y dolor, tal el final de mi vida. Muriendo en este estado,
resurgí allí. Allí también tuve tal nombre, pertenecí a tal clan, tuve tal apariencia. Tal fue mi
alimento, tal mi experiencia de placer y dolor, tal el final de mi vida. Muriendo en ese estado,
resurgí aquí.' Así recordé mis múltiples vidas pasadas en sus modos y detalles.

“Este fue el primer conocimiento que obtuve en la primera vigilia de la noche. La ignorancia
fue destruida; el conocimiento había surgido; la oscuridad fue destruida; la luz había surgido
– como ocurre en uno que es diligente, fervoroso y resoluto.
“Cuando la mente estaba así concentrada, purificada, radiante, sin mácula, libre de
corrupción, flexible, maleable, firme y hubo alcanzado la imperturbabilidad, la dirigí al
conocimiento de fallecimiento y reaparición de los seres . Vi – por medio del ojo divino,
purificado y que supera al humano – seres falleciendo y reapareciendo, y observé cómo eran
inferiores y superiores, hermosos y feos, afortunados y desafortunados según su kamma:
'Estos seres – dotados de mala conducta de cuerpo, palabra y mente, que injuriaron a los
Nobles, que mantuvieron opiniones erróneas y realizaron acciones bajo la influencia de las
opiniones erróneas – con la descomposición del cuerpo, tras la muerte, han reaparecido en el
plano de la privación, en el destino malo, en los reinos inferiores, en el infierno. Pero estos
seres – dotados de buena conducta de cuerpo, palabra y mente, que no injuriaron a los Nobles,
que mantuvieron opiniones correctas y realizaron acciones bajo la influencia de las opiniones
correctas – con la descomposición del cuerpo, tras la muerte, han reaparecido en los destinos
buenos, en mundo celestial'. Así – por medio del ojo divino, purificado y que supera al
humano – vi seres falleciendo y reapareciendo, y observé cómo eran inferiores y superiores,
hermosos y feos, afortunados y desafortunados según su kamma.

“Este fue el segundo conocimiento que obtuve en la segunda vigilia de la noche. La


ignorancia fue destruida; el conocimiento había surgido; la oscuridad fue destruida; la luz
había surgido – como ocurre en uno que es diligente, fervoroso y resoluto.

“Cuando la mente estaba así concentrada, purificada, radiante, sin mácula, libre de
corrupción, flexible, maleable, firme y hubo alcanzado la imperturbabilidad, la dirigí al
conocimiento de la finalización de las corrupciones mentales . Observé, como había llegado
a ser, que 'Esto es estrés... Esto es el origen del estrés... Esta es la cesación del estrés... Esta
es el camino que lleva a la cesación del estrés... Estas son las corrupciones... Este es el origen
de las corrupciones... Esta es la cesación de las corrupciones... Este es el camino que lleva a
la cesación de las corrupciones.' Mi corazón, sabiendo así, viendo así, fue liberado de la
corrupción de la sensualidad, liberado de la corrupción del devenir, liberado de la corrupción
de la ignorancia. Con la liberación, hubo el conocimiento 'Liberado'. Observé que 'El
nacimiento ha terminado, la vida santa se ha cumplido, la tarea realizada. No hay nada más
para este mundo.' “Este fue el tercer conocimiento que obtuve en la tercera vigilia de la
noche. La ignorancia fue destruida; el conocimiento había surgido; la oscuridad fue
destruida; la luz había surgido – como ocurre en uno que es diligente, fervoroso y resoluto.

MN 19

{2} Los Kālāmās de Kesamutta, sentados a un lado, dijeron esto al Sublime:

"Venerable Señor, hay algunos ascetas y brahmanes que vienen a Kesamutta. Ellos explican
y elucidan solamente sus propias doctrinas, pero menosprecian, desprecian, repudian,
degradan las doctrinas de otros. También después, Venerable Señor, algunos otros ascetas y
brahmanes vienen a Kesamutta y ellos también explican y elucidan solamente sus propias
doctrinas, pero menosprecian, desprecian, repudian, degradan las doctrinas de otros.
Venerable Señor, existe perplejidad en nosotros acerca de ellos, existe la duda: ¿Quién de
esos respetables ascetas y brahmanes dice la verdad, quién dice falsedad?"

"Kālāmās, es pertinente que vosotros estéis perplejos, es pertinente dudar. La duda ha surgido
en vosotros con relación a algo que genera perplejidad.

"Venid vosotros Kālāmās. No aceptéis por tradición oral, no por linaje de la enseñanza, no
por rumores, no por colección de escrituras, no a causa de la lógica, no a causa de la
inferencia, no por consideración de causas, no por aceptación reflexiva de una idea, no por
la competencia [del maestro], no porque el asceta es nuestro maestro. Pero, Kālāmās, cuando
vosotros comprendáis en vosotros mismos: 'Estas cosas son insanas, estas cosas son
reprochables, estas cosas son censuradas por los sabios, estas cosas, cuando aceptadas y
practicadas, conducen al sufrimiento y perjuicio. Entonces, Kālāmās, vosotros deberíais
abandonarlas.

"¿Qué pensáis de esto Kālāmās? ¿El deseo, surgiendo dentro de un hombre, surge para su
beneficio o para su perjuicio?" "Para su perjuicio, Venerable Señor." "Kālāmās, el individuo
codicioso, poseído por el deseo, con mente subyugada por el deseo, destruye la vida, toma
lo no dado, va con la esposa de otro, dice falsedades, y también instiga a otro a hacer esto.
¿Es esto para su sufrimiento y perjuicio por largo tiempo?" "Sí, Venerable Señor.

(De manera semejante, se trata de la aversión y falsa ilusión)

"¿Qué pensáis de esto Kālāmās? ¿Son estas cosas sanas o insanas?" "Insanas, Venerable
Señor." "¿Reprochables o irreprochables?" "Reprochables, Venerable Señor." "¿Censuradas
por los sabios o elogiadas por los sabios?" "Censuradas por los sabios, Venerable Señor."
"¿Aceptadas y practicadas, conducen al sufrimiento y perjuicio o no? ¿O cómo es aquí?"
"Venerable Señor, [estas cosas] aceptadas y practicadas conducen al sufrimiento y perjuicio.
Así pensamos nosotros aquí.

"Kālāmās, fue por esto que dijimos: 'Venid vosotros Kālāmās. No aceptéis por tradición oral,
no por linaje de la enseñanza, no por rumores, no por colección de escrituras, no a causa de
la lógica, no a causa de la inferencia, no por consideración de causas, no por aceptación
reflexiva de una idea, no por la competencia [del maestro], no porque el asceta es nuestro
maestro. Pero, Kālāmās, cuando vosotros comprendáis en vosotros mismos: 'Estas cosas son
insanas, estas cosas son reprochables, estas cosas son censuradas por los sabios, estas cosas,
cuando aceptadas y practicadas, conducen al sufrimiento y perjuicio, entonces, Kālāmās,
vosotros deberíais abandonarlas'. Por esta razón esto fue dicho.
"¿Qué pensáis de esto Kālāmās? ¿El no-deseo, surgiendo dentro de un hombre, surge para
su beneficio o para su perjuicio?" "Para su beneficio, Venerable Señor." "Kālāmās, el
individuo no codicioso, no poseído por el deseo, con mente no subyugada por el deseo, no
destruye la vida, no toma lo no dado, no va con la esposa de otro, no dice falsedades, y
tampoco instiga a otro a hacer esto. ¿Es esto para su felicidad y beneficio por largo tiempo?"
"Sí, Venerable Señor."

(De manera semejante, se trata de la no-aversión y la ausencia de falsa ilusión)

"¿Qué pensáis de esto Kālāmās? ¿Son estas cosas sanas o insanas?" "Sanas, Venerable
Señor." "¿Reprochables o irreprochables?" "Irreprochables, Venerable Señor." "¿Censuradas
por los sabios o elogiadas por los sabios?" Elogiadas por los sabios, Venerable Señor."
"¿Aceptadas y practicadas, conducen a la felicidad y beneficio o no? ¿O cómo es aquí?"
"Venerable Señor, [estas cosas] aceptadas y practicadas conducen a la felicidad y beneficio.
Así pensamos nosotros aquí."

AN 3,66

{3} "¿Y qué es, amigos, lo malsano, cuál es la raíz de lo malsano, qué es lo sano, cuál es la
raíz de lo sano? Matar seres vivientes es malsano; tomar lo que no es dado es malsano;
conducta incorrecta con respecto a placeres sensoriales es malsano; el lenguaje falso es
malsano; el lenguaje malicioso es malsano; el lenguaje rudo es malsano; el chismorreo es
malsano; la codicia es malsana; la mala voluntad es malsana; el entendimiento incorrecto es
malsano. Esto es lo que se denomina lo malsano.

"¿Y cuál es la raíz de lo malsano? El deseo es una raíz de lo malsano; el odio es una raíz de
lo malsano; la ofuscación es una raíz de lo malsano. Esto es lo que se denomina la raíz de lo
malsano.

"¿Y qué es lo sano? El abstenerse de matar seres vivientes es sano; el abstenerse de tomar lo
que no es dado es sano; el abstenerse de conducta incorrecta con respecto a placeres
sensoriales es sano; el abstenerse de lenguaje falso es sano; el abstenerse de lenguaje
malicioso es sano; el abstenerse de lenguaje rudo es sano; el abstenerse de chismorreo es
sano; lo opuesto de la codicia es sano; lo opuesto del odio es sano; el entendimiento correcto
es sano. Esto es lo que se denomina lo sano.

"¿Y cuál es la raíz de lo sano? Lo opuesto del deseo es una raíz de lo sano; lo opuesto al odio
es una raíz de lo sano; lo opuesto a la ofuscación es una raíz de lo sano. Esto es lo que se
denomina la raíz de lo sano.

MN 9
{4} Dos enseñanzas del Dhamma de Tathagata –el Arahant, plenamente iluminado- fueron
predicadas una tras otra. ¿Cuáles dos? “Considera el mal como el mal”, fue la primera de las
enseñanzas del Dhamma. “Habiendo considerado el mal como el mal, desilusiónate,
purifícate y libérate de él”, fue la segunda enseñanza del Dhamma...
Observa estas dos predicaciones...

La primera: estar desapasionado frente al mal,

Luego, con la mente desapasionada, Poner fin

al sufrimiento.

Iti 2,39

{5} Monjes, abandonad lo perjudicial (insaludable). Es posible abandonar lo perjudicial. Si


no fuera posible abandonar lo perjudicial, yo no os hubiese dicho: ‘Abandonad lo
perjudicial’. Pero como es posible abandonar lo perjudicial, os dije: ‘Abandonad lo
perjudicial’. Si el abandono de lo perjudicial condujera a más pena y dolor, yo no os hubiese
dicho: ‘Abandonad lo perjudicial’. Pero, como el abandono de lo perjudicial conduce a
beneficio y satisfacción, os dije: ‘Abandonad lo perjudicial’.

Monjes, desarrollad lo saludable. Es posible desarrollar lo saludable. Si no fuera posible


desarrollar lo saludable, yo no os hubiese dicho: ‘Desarrollad lo saludable’. Pero como es
posible desarrollar lo saludable, os dije: ‘Desarrollad lo saludable’. Si el desarrollo de lo
saludable condujera a más pena y dolor, yo no os hubiese dicho: ‘Desarrollad lo saludable’.
Pero, como el desarrollo lo saludable conduce a beneficio y satisfacción, os dije: ‘Desarrollad
lo saludable’.

AN 2,19

{6} [El Buda:] "Qué piensas Rahula: ¿Para qué es un espejo?"

"Para reflejar, señor."

"En la misma forma Rahula, las acciones corporales, las acciones verbales y las acciones
mentales deben ser realizadas con reflexión repetida."

"Siempre que quieras realizar una acción corporal debes reflexionar en ello: '¿Esta acción
corporal que quiero realizar- conducirá a auto-aflicción, a aflicción de otros o a ambas? ¿Se
tratará de una acción corporal indigna, con consecuencias dolorosas, resultados dolorosos?'
Si, en tu reflexión, sabes que conducirá a auto-aflicción, a aflicción de otros, o de ambos;
será un acto indigno con consecuencias dolorosas, resultados dolorosos; entonces, cualquier
acción corporal de ese tipo es absolutamente inadecuada para que tú la realices. Pero si en tu
reflexión sabes que no causaría aflicción... se trataría de una acción corporal digna con
consecuencias placenteras, resultados placenteros; entonces cualquier acción corporal de ese
tipo es adecuada para que tú la realices.

(De manera similar, se tratan las acciones verbales y mentales )

"Mientras realizas una acción corporal debes reflexionar en ello: '¿Esta acción corporal que
estoy realizando conduce a auto-aflicción, a aflicción de otros o a ambas? ¿Se trata de una
acción corporal indigna, con consecuencias dolorosas, resultados dolorosos?' Si, en tu
reflexión, sabes que conduce a auto-aflicción, a aflicción de otros, o de ambos; es un acto
indigno con consecuencias dolorosas, resultados dolorosos; entonces, debes abandonar la
acción. Pero si en tu reflexión sabes que no causaría aflicción... se trataría de una acción
corporal digna con consecuencias placenteras, resultados placenteros; entonces puedes
continuar con ella.

(De manera similar, se tratan las acciones verbales y mentales )

Habiendo realizado una acción corporal debes reflexionar en ello: 'Esta acción corporal que
realicé- ¿condujo a auto-aflicción, a aflicción de otros o a ambas? ¿Se trató de una acción
corporal indigna, con consecuencias dolorosas, resultados dolorosos?' Si, en tu reflexión,
sabes que condujo a auto-aflicción, a aflicción de otros, o de ambos; era un acto indigno con
consecuencias dolorosas, resultados dolorosos; entonces, debes confesarlo, revelarlo,
exponerlo abiertamente al Maestro o a algún compañero reconocido en la vida santa. Pero si
en tu reflexión sabes que no causó aflicción... se trató de una acción corporal digna con
consecuencias placenteras, resultados placenteros; entonces debes permanecer
mentalmente en calma y gozoso, entrenando día y noche en cualidades meritorias.

(De manera similar, se tratan las acciones verbales y mentales )

"Rahula, todos aquellos brahmanes y contemplativos en el curso del pasado que han
purificado sus acciones, sus acciones corporales, acciones verbales y acciones mentales, lo
hicieron mediante la reflexión repetida de sus acciones corporales, acciones verbales y
acciones mentales justamente de esta manera.

"Todos los brahmanes y contemplativos en el curso del futuro, que purificarán sus acciones
corporales, acciones verbales y acciones mentales, lo harán mediante la reflexión repetida de
sus acciones corporales, acciones verbales y acciones mentales justamente de esta manera.

"Todos los brahmanes y contemplativos en el presente, que purifican sus acciones corporales,
acciones verbales y acciones mentales, lo hacen mediante la reflexión repetida de sus
acciones corporales, acciones verbales y acciones mentales justamente de esta manera.
"De esta manera, Rahula, debes entrenarte a ti mismo: 'Purificaré mis acciones corporales a
través de la reflexión repetida. Purificaré mis acciones verbales a través de la reflexión
repetida. Purificaré mis acciones mentales a través de la reflexión repetida.' De esa manera
es como debes entrenarte a ti mismo.

Eso es lo que El Bendito dijo. Gratificado, el venerable Rahula se deleitó en las palabras de
El Bendito.

Pasajes del Canon Pali {8-17}

{8} Todos los estados encuentran su origen en la mente. La mente es su fundamento y son
creaciones de la mente. Si uno habla o actúa con un pensamiento impuro, entonces el
sufrimiento le sigue de la misma manera que la rueda sigue la pezuña del buey.

Todos los estados encuentran su origen en la mente. La mente es su fundamento y son


creaciones de la mente. Si uno habla o actúa con un pensamiento puro, entonces la felicidad
le sigue como una sombra que jamás le abandona.

Dhp 1,1-2

{9} Los seres son dueños de sus propias acciones, son herederos de sus propias acciones.
Fueron originados por sus acciones, están ligados a ellas y sus acciones son su refugio. Es
la acción la que hace distinción entre los seres inferiores y superiores...

He aquí, existen hombres o mujeres que matan a los seres vivientes; son sangrientos asesinos,
portadores de terror y violencia, sin piedad hacia los seres vivos. Por realizar semejantes
actos y comprometerse con ellos, una vez disuelto su cuerpo después de la muerte, reaparecen
en un estado de privación, teniendo un destino infeliz, la perdición y el infierno. Pero, si al
disolverse su cuerpo después de la muerte, ellos no reaparecen en un estado de privación,
teniendo un destino infeliz, la perdición y el infierno, sino que de vuelta llegan al plano
humano, dondequiera que renazcan, su vida es corta. De modo que, éste es el camino,
estudiante, que lleva a una vida corta: matar a los seres vivientes...

Pero también existen hombres o mujeres que abandonaron la matanza de los seres vivientes
y se abstienen de matar a los seres vivos. Los que desecharon sus vástagos y puñales y tratan
con gentileza, amabilidad y compasión a todos los seres vivos. Por realizar semejantes actos
y comprometerse con ellos, una vez disuelto su cuerpo después de la muerte, reaparecen en
un estado de felicidad, en el plano celestial. Pero, si al disolverse su cuerpo después de la
muerte, ellos no reaparecen en un estado de felicidad, en el plano celestial, sino que de vuelta
llegan al plano humano, dondequiera que renazcan, su vida es larga. De modo que, éste es el
camino, estudiante, que lleva a una vida larga: abandonar la matanza de los seres vivientes...

También existen hombres o mujeres que hacen daño a los seres vivientes: con sus propias
manos, con zopencos, varas o puñales. Por realizar semejantes actos y comprometerse con
ellos, una vez disuelto su cuerpo después de la muerte, reaparecen en un estado de privación,
teniendo un destino infeliz, la perdición y el infierno. Pero, si al disolverse su cuerpo después
de la muerte, ellos no reaparecen en un estado de privación... dondequiera que renazcan, su
vida es enfermiza. De modo que, éste es el camino, estudiante, que lleva a una vida
enfermiza: hacer daño a los seres vivientes...

Pero también existen hombres o mujeres que abandonaron la práctica de hacer daño a los
seres vivientes: no lo hacen ni con sus propias manos, ni con zopencos, ni con varas ni con
puñales... ste es el camino, estudiante, que lleva a una vida saludable: abandonar la práctica
de hacer daño a los seres vivientes...

Además existen hombres o mujeres que tienen un carácter furioso e irritable. Hasta cuando
reciben la más mínima crítica, se ofenden, se vuelven irritados, resentidos, hostiles, enojados
y amargados. Por realizar semejantes actos y comprometerse con ellos, una vez disuelto su
cuerpo después de la muerte, reaparecen en un estado de privación, teniendo un destino
infeliz, la perdición y el infierno. Pero, si al disolverse su cuerpo después de la muerte, ellos
no reaparecen en un estado de privación... renacen siendo feos. De modo que, éste es el
camino, estudiante, que lleva a la fealdad: tener un carácter furioso e irritable...

Pero también existen hombres o mujeres que no tienen un carácter furioso ni irritable.
Cuando reciben la crítica, no se ofenden, no se vuelven irritados, resentidos, hostiles,
enojados ni amargados... ste es el camino, estudiante, que lleva a la belleza...

Además existen hombres o mujeres envidiosos, que envidian a otros cuando éstos reciben
ganancias, honor, respeto, saludos, reverencia o veneración. Por realizar semejantes actos y
comprometerse con ellos, una vez disuelto su cuerpo después de la muerte, reaparecen en un
estado de privación, teniendo un destino infeliz, la perdición y el infierno. Pero, si al
disolverse su cuerpo después de la muerte, ellos no reaparecen en un estado de privación...
dondequiera que renazcan, no tienen prominencia alguna. De modo que, éste es el camino,
estudiante, que lleva a la falta de prominencia: ser envidioso...

Pero también existen hombres o mujeres no envidiosos, que no envidian a otros cuando éstos
reciben ganancias, honor, respeto, saludos, reverencia o veneración.... éste es el camino,
estudiante, que lleva a la prominencia: no ser envidioso...

Además existen hombres o mujeres que no ofrecen comida, ni bebida ni otro tipo de
donativos, como vestimentas, coches, guirnaldas, perfumes, ungüentos, camas, alojamiento
o lámparas, a los ascetas y brahmines. Por no realizar semejantes actos ni comprometerse
con ellos, una vez disuelto su cuerpo después de la muerte, reaparecen en un estado de
privación, teniendo un destino infeliz, la perdición y el infierno. Pero, si al disolverse su
cuerpo después de la muerte, ellos no reaparecen en un estado de privación.... dondequiera
que renazcan, son pobres. De modo que, éste es el camino, estudiante, que lleva a la
pobreza... no ofrecer comida, ni bebida ni otro tipo de donativos, como vestimentas, coches,
guirnaldas, perfumes, ungüentos, camas, alojamiento o lámparas, a los ascetas y brahmines.

Pero también existen hombres o mujeres que ofrecen comida, bebida y otro tipo de donativos,
como vestimentas, coches, guirnaldas, perfumes, ungüentos, camas, alojamiento o lámparas
a los ascetas y brahmines... de modo que éste es el camino, estudiante, que lleva a la riqueza...

Además existen hombres o mujeres obstinados y arrogantes, quienes no rinden homenaje a


los que merecen ser homenajeados, no se levantan frente a aquellos, en cuya presencia hay
que levantarse, no ofrecen el asiento a quienes se debe hacerlo, no abren camino para quienes
se debería abrirlo, no honran, no respetan, no reverencian ni veneran a quienes merecen la
honra, el respeto, la reverencia y la veneración. Por no realizar semejantes actos ni
comprometerse con ellos, una vez disuelto su cuerpo después de la muerte, reaparecen en un
estado de privación, teniendo un destino infeliz, la perdición y el infierno. Pero, si al
disolverse su cuerpo después de la muerte, ellos no reaparecen en un estado de privación...
son de bajo nacimiento. De modo que, éste es el camino, estudiante, que lleva al bajo
nacimiento: ser obstinado y arrogante...

Pero también existen hombres o mujeres no obstinados ni arrogantes, quienes rinden


homenaje a los que merecen ser homenajeados, se levantan frente a aquellos, en cuya
presencia hay que levantarse, ofrecen el asiento a quienes se debe hacerlo, abren camino para
quienes se debería abrirlo, honran, respetan, reverencian y veneran a quienes merecen la
honra, el respeto, la reverencia y la veneración... éste es el camino, estudiante, que lleva al
nacimiento alto: no ser obstinado ni arrogante...

Además existen hombres o mujeres que no visitan a los ascetas ni brahmines preguntando:
‘¿Qué es, venerable señor, lo saludable? ¿Qué es lo perjudicial? ¿Qué es lo censurable? ¿Qué
es lo inocente? ¿Qué debería ser cultivado? ¿Qué debería ser abandonado? ¿Qué clase de
acciones producen pena y sufrimiento por largo tiempo? ¿Qué clase de acciones producen
bienestar y felicidad por largo tiempo?’ Por no realizar semejantes actos ni comprometerse
con ellos, una vez disuelto su cuerpo después de la muerte, reaparecen en un estado de
privación, teniendo un destino infeliz, la perdición y el infierno. Pero, si al disolverse su
cuerpo después de la muerte, ellos no reaparecen en un estado de privación... dondequiera
que renazcan, son estúpidos. De modo que, éste es el camino, estudiante, que lleva a la
insensatez: no visitar a los ascetas ni brahmines...
Pero también existen hombres o mujeres que visitan a los ascetas y brahmines preguntando...
éste es el camino, estudiante, que lleva a la sabiduría: visitar a los ascetas y brahmines
preguntando...

Los seres son dueños de sus propias acciones, son herederos de sus propias acciones. Fueron
originados por sus acciones, están ligados y ellas y sus acciones son su refugio. Es la acción
la que hace distinción entre los seres inferiores y superiores.

MN 135

{10} Monjes, el kamma debe ser conocido La causa, por la cual el kamma llega a operar,
debe ser conocida. La diversidad del kamma debe ser conocida. Los resultados del kamma
deben ser conocidos. El cese del kamma debe ser conocido. El sendero que lleva al cese del
kamma debe ser conocido.

“Monjes, ¿y cómo, el kamma, la causa, por la cual el kamma llega a operar, la diversidad del
kamma, el resultado del kamma, el cese del kamma y el sendero que lleva al cese del kamma,
deben ser conocidos?

“Monjes, yo digo que la intención es el kamma. Decidiendo intencionalmente uno realiza el


kamma a través del cuerpo, el habla y la mente.

“¿Y qué es la causa, por la cual el kamma llega a operar? El contacto, monjes, es la causa,
por la cual el kamma llega a operar.

“¿Y qué es la diversidad del kamma? Existe el kamma a ser experimentado en el infierno,
otro experimentado en el reino animal, otro experimentado en el plano de los espíritus
hambrientos, otro experimentado en el mundo humano y otro experimentado en el mundo de
los devas. Esto es, monjes, lo que se llama ‘la diversidad del kamma’.

“¿Y qué es el resultado del kamma? Yo digo, existen estas tres clases de resultados del
kamma: el que acontece aquí y ahora, el que acontece más tarde y el que acontece en otro
tiempo. Esto es, monjes, lo que se llama ‘el resultado del kamma’.

“¿Y qué es el cese del kamma? El fin de la ignorancia es el cese del kamma. Y éste óctuple
noble sendero –recta visión, recta resolución, recta forma de hablar, recta acción, recta forma
de vida, recto esfuerzo, recta atención consciente y recta concentración- es el camino que
lleva al cese del kamma.

“Ahora bien, cuando el noble discípulo conoce el kamma de esta manera, conoce la causa,
por la cual el kamma llega a operar de esta manera, conoce la diversidad del kamma de esta
manera, conoce el resultado del kamma de esta manera, conoce el cese del kamma de esta
manera y conoce el sendero que lleva al cese del kamma de esta manera, entonces su
conocimiento penetra esta vida santa del cese del kamma.

“Monjes, es por eso que el kamma debe ser conocido, la causa, por la cual el kamma llega a
operar, debe ser conocida, la diversidad del kamma debe ser conocida, los resultados del
kamma deben ser conocidos, el cese del kamma debe ser conocido y el sendero que lleva al
cese del kamma debe ser conocido.

AN 6,63

{11} Existen estas cuatro clases de personas que pueden ser halladas en el mundo. ¿Cuáles
cuatro?

He aquí el caso, en el que cierta persona mata a los seres vivos, toma lo que no le ha sido
dado, se entrega a las relaciones sexuales ilícitas, miente, habla maliciosa y duramente, se
presta a las charlas frívolas. Además, es codiciosa, tiene una mente hostil y sostiene
equivocados puntos de vista. Esta persona, al quebrarse su cuerpo, después de la muerte tiene
un mal destino: reaparece en el plano de miseria, en los reinos bajos, en el infierno.

Pero también está el caso, en el que cierta persona mata a los seres vivos... sostiene
equivocados puntos de vista, y aún así, al quebrarse su cuerpo, después de la muerte tiene un
buen destino: reaparece en el mundo celestial.

También está el caso, en el que cierta persona se abstiene de matar a los seres vivos, se
abstiene de tomar lo que no le ha sido dado... no es codiciosa, no tiene una mente hostil y
sostiene correctos puntos de vista. Esta persona, al quebrarse su cuerpo, después de la muerte
tiene un buen destino: reaparece en el mundo celestial.

Pero también está el caso, en el que cierta persona se abstiene de matar a los seres vivos, se
abstiene de tomar lo que no le ha sido dado... no es codiciosa, no tiene una mente hostil y
sostiene correctos puntos de vista, y aún así, esta persona, al quebrarse su cuerpo, después
de la muerte tiene un mal destino: reaparece en el plano de miseria, en los reinos bajos, en el
infierno.

En caso de la persona que mata a los seres vivos... y aún así, al quebrarse su cuerpo, después
de la muerte tiene este buen destino, que es reaparecer en el mundo celestial: Puede ser que
esta persona hubo efectuado el buen kamma anteriormente lo que la hace sentir
agradablemente, o hubo efectuado el buen kamma más tarde lo que la hace sentir
agradablemente, o –a la hora de la muerte- ella adquirió y adoptó la correcta visión. Es por
eso que, al quebrarse su cuerpo, después de la muerte, ella tiene un buen destino: reaparece
en el mundo celestial. Sin embargo, los resultados de matar a los seres vivos... sostener los
equivocados puntos de vista, los va a sentir tanto aquí y ahora, como después o en otro
tiempo.

En caso de la persona que se abstiene de matar a los seres vivos... y aún así, al quebrarse su
cuerpo, después de la muerte tiene este mal destino, que es reaparecer en el plano de miseria,
en los reinos bajos, en el infierno: Puede ser que esta persona hubo efectuado el mal kamma
anteriormente lo que la hace sentir dolorosamente, o hubo efectuado el buen kamma más
tarde lo que la hace sentir dolorosamente, o –a la hora de la muerte- ella adquirió y adoptó
los equivocados puntos de vista. Es por eso que, al quebrarse su cuerpo, después de la muerte,
ella tiene un mal destino: reaparece en el plano de miseria, en los reinos bajos, en el infierno.
Sin embargo, los resultados de abstenerse de matar a los seres vivos... sostener la correcta
visión, los va a sentir tanto aquí y ahora, como después o en otro tiempo.

MN 136

{12} Estos cuatro impensables, oh monjes, no deberían ser pensados; pensando en éstos, uno
experimentaría aflicción y locura. ¿Cuáles son estos cuatro? La esfera (del conocimiento) de
los Buddhas... La esfera de las absorciones meditativas (jhanas)... El resultado de las acciones
(kamma)... Pensar acerca del (origen) del mundo, oh monjes, es un impensable que no
debería ser pensado; pensando en esto, uno experimentaría aflicción y locura. Estos cuatro
impensables, oh monjes, no deberían ser pensados; pensando en éstos, uno experimentaría
aflicción y locura.

AN 4,77

{13} “Monjes, para cualquiera que diga: ‘Cuando una persona realiza el kamma de alguna
forma, de la misma manera la va a experimentar’, no existe una vida santa, ni la oportunidad
de poner fin al sufrimiento. Pero, para cualquiera que diga: ‘Cuando una persona realiza el
kamma a ser sentida de una determinada forma, es así cómo va a experimentar sus
resultados’, existe una vida santa y la oportunidad de poner fin al sufrimiento.

“Está el caso del individuo, cuya insignificante mala acción lo lleva directamente al infierno,
mientras que a otro individuo, esta misma insignificante mala acción, lo lleva a experimentar
sus consecuencias aquí y ahora, y apenas por un momento.

“Ahora bien, ¿qué clase de individuo es aquel, cuya insignificante mala acción lo lleva
directamente al infierno? Este es el caso, monjes, de alguien que no cultiva la contemplación
del cuerpo, no desarrolla la virtud ni la mente. No tiene discernimiento y su vida es limitada,
miserable y dolorosa. Ésta es la clase de individuo, monjes, cuya insignificante mala acción
lo lleva directamente al infierno.

“Y, ¿qué clase de individuo es aquel, cuya insignificante mala acción lo lleva a experimentar
sus consecuencias aquí y ahora, y apenas por un momento? Este es el caso, monjes, de
alguien que cultiva la contemplación del cuerpo, desarrolla la virtud y la mente. Tiene
discernimiento, es de gran corazón y su vida es inconmensurable. Ésta es la clase de
individuo, monjes, cuya insignificante mala acción lo lleva a experimentar sus consecuencias
aquí y ahora, y apenas por un momento.

“Suponed, monjes, que un hombre echara un cristal de la sal en un diminuto vaso de agua.
¿Qué pensáis: podría el agua contenida en el pequeño vaso llegar a ser salada y no apta para
beber?”

“Sí, venerable señor”.

“¿Por qué?”

“Por la pequeña cantidad del agua contenida en un diminuto vaso, venerable señor, un cristal
de la sal podría hacer salada el agua y no apta para beber”.

“Ahora suponed, monjes, que un hombre echara un cristal de la sal al río Ganges. ¿Qué
pensáis: podría el agua contenida en el río Ganges llegar a ser salada y no apta para beber?”
“No, venerable señor”.

“¿Por qué?”

“Por la gran masa del agua contenida en el río Ganges, venerable señor, un cristal de la sal
no podría hacer salada el agua ni hacerla no apta para beber”.

“De la misma manera, monjes, una insignificante mala acción lleva a un individuo
directamente al infierno, mientras que a otro individuo, esta misma insignificante mala
acción, lo lleva a experimentar sus consecuencias aquí y ahora, y apenas por un momento.

AN 3,101

{14} Moliyasivaka: “Maestro Gotama, hay por ahí algunos ascetas y brahmanes que
sostienen la siguiente doctrina: ‘Cualquier cosa que experimenta una persona –sea
placentera, dolorosa o ni placentera ni dolorosa- todo esto ha sido causado por lo que la
misma ha hecho en el pasado’. ¿Cuál es el punto de vista del maestro Gotama sobre este
punto?”

El Buda: “Algunas sensaciones, Sivaka, se originan por causa del desorden de la bilis: el
hecho de que algunas sensaciones se originen por causa del desorden de la bilis, uno lo puede
comprobar por sí mismo y esto está reconocido como verdadero en todo el mundo. Ahora
bien, cuando aquellos ascetas y brahmanes sostienen la doctrina que ‘Cualquier cosa que
experimenta una persona –sea placentera, dolorosa o ni placentera ni dolorosa- todo esto ha
sido causado por lo que la misma ha hecho en el pasado’, pasan por alto lo que uno puede
comprobar por sí mismo y pasan por alto lo que está reconocido como verdadero en todo el
mundo. Por consiguiente, yo digo que estos ascetas y brahmanes están equivocados.

“Algunas sensaciones, Sivaka, se originan por causa del desorden de la flema… Algunas
sensaciones, Sivaka, se originan por causa del desorden del bajo vientre… Algunas
sensaciones, Sivaka, son consecuencia de la falta del balanceo [entre estos tres]… Algunas
sensaciones, Sivaka, se originan por causa de los cambios climáticos… Algunas sensaciones,
Sivaka, se originan por causa del desorden de una conducta descuidada… Algunas
sensaciones, Sivaka, se originan por causa de las agresiones… Algunas sensaciones, Sivaka,
se originan como resultado del kamma: el hecho de que algunas sensaciones se originen
como resultado del kamma, uno lo puede comprobar por sí mismo y esto está reconocido
como verdadero en todo el mundo. Así que, cuando aquellos ascetas y brahmanes sostienen
la doctrina que ‘Cualquier cosa que experimenta una persona –sea placentera, dolorosa o ni
placentera ni dolorosa- todo esto ha sido causado por lo que la misma ha hecho en el pasado’,
pasan por alto lo que uno puede comprobar por sí mismo y pasan por alto lo que está
reconocido como verdadero en todo el mundo. Por consiguiente, yo digo que estos ascetas y
brahmanes están equivocados.”

SN 36,21

{15} “¿Y qué es, monjes, el viejo kamma? El ojo es el viejo kamma, en cuanto generado y
fabricado por la volición, capaz de experimentar las sensaciones. El oído es el viejo kamma…
La nariz es el viejo kamma… La lengua es el viejo kamma… El cuerpo es el viejo kamma…
La mente es el viejo kamma, en cuanto generada y fabricada por la volición, capaz de
experimentar las sensaciones. Esto es el viejo kamma.

“¿Y qué es, monjes, el nuevo kamma? Cualquier acción que uno haga ahora a través del
cuerpo, del habla o de la mente. Esto es el nuevo kamma.
“¿Y qué es, monjes, la cesación del kamma? Cuando uno llega a la liberación a través del
cese de las acciones corporales, de las acciones verbales y de las acciones mentales. Esto es
la cesación del kamma.

“¿Y cuál es, monjes, el camino que lleva a la cesación del kamma? El Noble Óctuple
Sendero: el correcto punto de vista, la correcta intención, el correcto habla, la correcta acción,
la correcta forma de vida, el correcto esfuerzo, la correcta atención consciente y la correcta
concentración. Este es el camino que lleva a la cesación del kamma.

SN 35,146

{16} “Monjes, existen estos cuatro tipos del kamma que han sido descubiertos, conocidos y
comprendidos por mí. ¿Cuáles cuatro? He aquí, está el kamma que es oscuro con el resultado
oscuro; el kamma que es brillante con el resultado brillante; el kamma que es oscuro y
brillante con el resultado oscuro y brillante; el kamma que no es ni escuro ni brillante con el
resultado ni oscuro ni brillante, que lleva al fin del kamma. Éstos son, monjes, los cuatro
tipos del kamma que han sido descubiertos, conocidos y comprendidos por mí. “¿Y en qué
consiste, monjes, el kamma que es oscuro con el resultado oscuro? Este es el caso, monjes,
de alguien que efectúa acciones corporales perjudiciales… acciones verbales perjudiciales…
acciones mentales perjudiciales. Al efectuar estas acciones perjudiciales, él reaparece en el
mundo perjudicial donde se ve afectado por los contactos perjudiciales, experimentando las
sensaciones que son exclusivamente dolorosas, al igual que los seres del infierno. En esto
consiste, monjes, el kamma que es oscuro con el resultado oscuro.

“¿Y en qué consiste, monjes, el kamma que es brillante con el resultado brillante? Este es el
caso, monjes, de alguien que efectúa acciones corporales no perjudiciales… acciones
verbales no perjudiciales… acciones mentales no perjudiciales. Al efectuar estas acciones no
perjudiciales, él reaparece en el mundo no perjudicial donde se ve influido por los contactos
son perjudiciales, experimentando las sensaciones que son exclusivamente placenteras, como
aquellos Siempre-radiantes devas. En esto consiste, monjes, el kamma que es brillante con
el resultado brillante.

“¿Y en qué consiste, monjes, el kamma que es oscuro y brillante con el resultado oscuro y
brillante? Este es el caso, monjes, de alguien que efectúa acciones corporales perjudiciales
y no perjudiciales… acciones verbales perjudiciales y no perjudiciales… acciones mentales
perjudiciales y no perjudiciales. Al efectuar estas acciones perjudiciales y no perjudiciales,
él reaparece en el mundo perjudicial y no perjudicial donde se ve influido tanto por los por
contactos perjudiciales como por los no perjudiciales, experimentando las sensaciones que
son una mezcla de dolor y placer, al igual que los seres del mundo humano, del de algunos
devas y de ciertos seres de los planos más bajos. En esto consiste, monjes, el kamma que es
oscuro y brillante con el resultado oscuro y brillante.

“¿Y en qué consiste, monjes, el kamma que no es ni oscuro ni brillante con el resultado ni
oscuro ni brillante, que lleva al fin del kamma? Este es el caso, monjes, de alguien con la
intención de abandonar el kamma oscuro con el resultado oscuro, con la intención de
abandonar el kamma brillante con el resultado brillante y con la intención de abandonar el
kamma oscuro y brillante con el resultado oscuro y brillante. En esto consiste, monjes, el
kamma que no es oscuro ni brillante con el resultado ni oscuro ni brillante, que lleva al fin
del kamma.

AN 4,232

Otro discurso relacionado con éste, repite la mayor parte del contenido del anterior,
definiendo el kamma oscuro con el resultado oscuro a través del siguiente ejemplo: “He aquí
el caso de alguien que mata a los seres vivos, toma lo que no le ha sido dado, está atraído por
el sexo ilícito, dice mentiras y toma bebidas fermentadas y licores que producen la
desatención” y definiendo el kamma brillante con el resultado brillante a través del siguiente
ejemplo: “He aquí el caso de alguien que se abstiene de matar a los seres vivos, se abstiene
de toma lo que no le ha sido dado, se abstiene de involucrarse en el sexo ilícito, se abstiene
de decir mentiras y se abstiene de tomar las bebidas fermentadas y licores que producen la
desatención”

AN 4,234

{17} “¿Y en qué consiste, monjes, el kamma que no es ni oscuro ni brillante con el resultado
ni oscuro ni brillante, que lleva al fin del kamma? En el correcto punto vista, en la correcta
intención, en la correcta forma de hablar, en la correcta acción, en la correcta forma de vida,
en el correcto esfuerzo, en la correcta atención consciente y en la correcta concentración”.

AN 4,235

[El discurso que sigue inmediatamente a éste es idéntico, excepto que los factores del Noble
Óctuple Sendero son reemplazados por los siguientes siete factores del Despertar: la atención
consciente como factor del Despertar, el análisis de las cualidades… la energía… el
arrobamiento… la tranquilidad… la concentración… y la ecuanimidad como factor del
Despertar.]

A. El tesoro de la Enseñanza
Pasajes del Canon Pali {18-25}

{18} "Paharada, al igual que el gran océnao posee muchos diversos tesoros -las perlas, los
zafires, lapislázulis, conchas, el cuarzo, los corales, el oro, los rubíes y los esmeraldas– así
también, este Dhamma-Vinaya (Enseñanza y Disciplina) posee muchos y diversos tesoros:
Los Cuatro Fundamentos de la Atención Consciente, los Cuatro Rectos Esfuerzos, l as
Cuatro Bases del Poder Espiritual, l as Cinco Facultades, las Cinco Fortalezas, los Siete
Factores de Iluminación y el Óctuple Noble Sendero. Ésta es la séptima asombrosa maravilla
en este Dhamma-Vinaya que el monje debe contemplar una y otra vez y deleitarse en ella.”

AN 8,19
{19} El Bienaventurado entró en el auditorio y tomó el asiento preparado para él y exhortó
a los monjes con estas palabras: “Monjes, aquellas enseñanzas que yo había descubierto y
proclamado, deben ser bien aprendidas por vosotros; deben ser practicadas, desarrolladas y
cultivadas, de manera tal, que esta santa vida perdure por largo tiempo, para el beneficio y la
felicidad de las multitudes, por causa de la compasión por el mundo, para el beneficio de los
seres humanos y de los devas.

“¿Y cuáles son estas enseñanzas? Los cuatro fundamentos de la atención consciente... Los
cuatro correctos esfuerzos... Las cuatro bases del poder espiritual... Las cinco facultades...
Los cinco poderes... Los siete factores de iluminación... El Óctuple Noble Sendero. Monjes,
estas son las enseñanzas que yo he descubierto y proclamado, y que deben ser bien
aprendidas por vosotros; deben ser practicadas, desarrolladas y cultivadas, de manera tal, que
esta santa vida perdure por largo tiempo, para el beneficio y la felicidad de las multitudes,
por causa de la compasión por el mundo, para el beneficio de los seres humanos y de los
devas”. Después, el Bienaventurado dijo esto a los monjes: “Monjes, esto es lo que os
exhorto: Todas las cosas condicionadas tienen naturaleza perecedera. Esforzaos
incansablemente. No demorará mucho tiempo para que el Tataghata alcance su Nibbana
final. No más que en tres meses, el Tataghata habrá alcanzado el Parinibbana”.

Y cuando dijo estas palabras, el Bienaventurado, el Maestro, una vez más se dirigió a los
monjes:

Mis años han alcanzado la plena madurez, el espacio vital que me queda, es corto.

Estoy partiendo de vosotros, poniendo la única confianza en mí mismo.

Seáis, pues, fervientes, oh monjes, seáis conscientes y puros.

Con firme resolución, guardad vuestra propia mente. Quienes incansablemente siguen al
Dhamma y la Disciplina

Traspasarán el interminable ciclo de nacimientos y pondrán fin al sufrimiento.


DN 16

{20} “Suponed, monjes, que una gallina tuviera ocho huevos, diez o doce huevos. Si ella no
los cubriera correctamente, no los calentara correctamente o no los empollara correctamente,
entonces aunque tuviera el siguiente deseo: ‘Oh, que estos mis polluelos rompan la cáscara
del huevo con las puntas de sus garras o con sus picos y salgan afuera a salvo’ –aún así sería
imposible que estos polluelos rompieran la cáscara del huevo con las puntas de sus garras o
con sus picos y salieran afuera a salvo. ¿Por qué? Porque la gallina no los cubrió
correctamente, no los calentó correctamente o no los empolló correctamente. De la misma
manera, aunque el monje que no se dedica a desarrollarse a sí mismo tuviera el siguiente
deseo ‘Oh, que mi mente sea liberada de las impurezas mediante el desapego’ –aún así sería
imposible que su mente fuera liberada de las impurezas mediante el desapego’. ¿Por qué?
Por la falta de desarrollo, debería decirse. ¿Falta de desarrollo de qué? De las cuatro formas
de establecer la atención consciente, de los cuatro correctos esfuerzos, de las cuatro bases del
poder, de las cinco facultades, de las cinco fortalezas, de los siete factores de iluminación,
del noble óctuple sendero…

“Pero, suponed, monjes, que una gallina tuviera ocho huevos, diez o doce huevos y los
cubriera correctamente, los calentara correctamente y los empollara correctamente; entonces,
si tuviera el siguiente deseo: ‘Oh, que estos mis polluelos rompan la cáscara del huevo con
las puntas de sus garras o con sus picos y salgan afuera a salvo’ –ciertamente sería posible
que estos polluelos rompieran la cáscara del huevo con las puntas de sus garras o con sus
picos y salieran afuera a salvo. ¿Por qué? Porque la gallina los cubrió correctamente, los
calentó correctamente y los empolló correctamente. De la misma manera, si el monje que se
dedica a desarrollarse a sí mismo tuviera el siguiente deseo ‘Oh, que mi mente sea liberada
de las impurezas mediante el desapego’ –ciertamente sería posible que su mente fuera
liberada de las impurezas mediante el desapego’. ¿Por qué? Por el desarrollo, debería decirse.
¿Desarrollo de qué? De las cuatro formas de establecer la atención consciente, de los cuatro
correctos esfuerzos, de las cuatro bases del poder, de las cinco facultades, de las cinco
fortalezas, de los siete factores de iluminación, del noble óctuple sendero…
“Así cuando el carpintero o su aprendiz, ve las marcas de sus dedos o de su pulgar en el
mango de su azuela, pero no sabe esto: ‘Hoy el mango de mi azuela se desgastó tanto, o ayer
el mango de mi azuela se desgastó tanto, o anteayer el mango de mi azuela se desgastó tanto’,
de la misma manera el monje que vive dedicado a desarrollarse a sí mismo y tampoco sabe
esto: ‘Hoy mis impurezas disminuyeron tanto, o ayer mis impurezas disminuyeron tanto, o
anteayer mis impurezas disminuyeron tanto’, sin embargo él sabe que realmente sus
impurezas se están acabando mientras [trabaja para] su disminución.

“Así como un barco en el océano abierto, aparejado con mástiles y estancas, cuando ha
dejado la orilla y, gracias al viento, pasó seis meses en las aguas abiertas, sus estancas, que
se corrosionaron por el calor y el viento, se humedecieron por las nubes de la época lluviosa,
fácilmente se atrofian y se pudren, de la misma manera, cuando el monje vive dedicado a
desarrollarse a sí mismo, sus grillos fácilmente se atrofian y se pudren.” AN 7,68 {21} En
una ocasión, cierto monje se acercó a su preceptor y le dijo:

“Siento, señor, como si mi cuerpo estuviera drogado. He perdido la orientación. Veo


confusas las cosas. La somnolencia y la apatía se apoderan de mi mente todo el tiempo. No
soy feliz llevando esta vida santa y tengo dudas acerca de los fenómenos mentales.

Entonces, el preceptor llevó a este monje en la presencia del Bienaventurado (y le relató lo


ocurrido).

Entonces, el Bienaventurado respondió con estas palabras: “Monje, esto siempre ocurre así.
Cuando uno mora con las puertas de los sentidos desguarnecidas, con falta de moderación
en la comida, no inclinándose hacia la atención, no buscando lo que es recto y no
desarrollando, día tras día, las cualidades mentales que llevan a la Iluminación, entonces uno
siente como si su cuerpo estuviera drogado, como si haya perdido la orientación. Ve confusas
las cosas. La somnolencia y la apatía se apoderan de su mente todo el tiempo. No es feliz
llevando esta vida santa y tiene dudas acerca de los fenómenos mentales.

“De modo que, monje, entrénate a ti mismo así:

“Voy a guardar las puertas de los sentidos con mayor ahínco, voy a ser moderado en la
comida e inclinado hacia la atención. Voy a buscar lo que es recto y, día tras día, voy a
desarrollar las cualidades mentales que llevan a la Iluminación. Entrénate de esta manera,
monje.

Y no mucho tiempo después, morando en soledad, recluido, con ardiente y firme resolución,
este monje alcanzó la suprema meta de la vida santa, por la que rectamente, un dueño de casa
la abandona para vivir un estilo de vida sin hogar, y permaneció en ella. Él supo: “El
nacimiento está destruido, la vida santa ha sido vivida, la tarea está hecha. He aquí, que no
hay nada más qué hacer en referencia a este mundo.” Y aquel monje llegó a acrecentar el
número de los arahants.

AN 5,56

{22} Monjes, un monje con el fundamento de estas tres cosas sigue el método seguro desde
el principio con el esfuerzo despierto para la destrucción de los deseos. ¿Cuáles son? Aquí
un monje controla sus facultades mentales, discierne la medida correcta para participar [en
la comida] y está despierto.
Monjes, ¿cómo es un monje que controla sus facultades mentales? Aquí un monje viendo
una forma no se adhiere a sus indicios o a sus características debido a que quien reside con
la facultad mental de la visión sin controlar le pueden surgir pensamientos de avidez y de
infelicidad; así él controla la facultad mental de la visión (de manera similar se trata el oído,
el olfato, el gusto, el tacto y la mente).

¿De qué manera conoce un monje la medida correcta para participar [en la comida]? Aquí
un monje sabio no considera el alimento ni para diversión, ni para intoxicación o para parecer
bello. Él participa del alimento pensando: Yo participo de esto para el mantenimiento del
cuerpo sin ataduras a los gustos, como una ayuda para realizar la vida gloriosa. Participando
de este alimento soy libre de las primeras sensaciones y no se originan otras nuevas. Estaré
con faltas y con una residencia feliz. De esta manera un monje conoce la medida correcta
para participar [en la comida].

Monjes, ¿cómo es un monje despierto? Aquí un monje depura la mente de cosas obstructivas
durante el día sentado en alguna parte. Durante la primera vigilia de la noche depura también
la mente de cosas obstructivas. En la vigilia de la mitad de la noche se estira tumbado hacia
su lado derecho cogiendo la misma postura en la cual un león duerme. Colocando un pie
sobre el otro logra estar libre de la percepción del despertar. Levantándose la última vigilia
de la noche depura la mente de las cosas obstructivas. Así un monje logra estar despierto.
Monjes, un monje con el fundamento de estas tres cosas sigue el método seguro desde el
principio con el esfuerzo despierto para la destrucción de los deseos.

AN 3,16

{23} “Monjes, si los ascetas de las otras sectas os preguntaran: ‘Amigos, ¿cuáles son los
prerrequisitos para desarrollar las cualidades mentales que llevan a la auto-iluminación?’
Vosotros deberíais responder así: ‘He aquí el caso del monje que tiene admirables amigos,
admirables compañeros y admirables camaradas. Este es el primer prerrequisito para
desarrollar las cualidades mentales que llevan a la auto-iluminación.

“’Además, el monje es virtuoso. Él mora restringiéndose de acuerdo al Patimokkha, siendo


su conducta y sus actividades intachables. Se entrena a sí mismo habiendo asumido las reglas
del entrenamiento, viendo el peligro en las más mínimas faltas. Este es el segundo
prerrequisito para desarrollar las cualidades mentales que llevan a la auto-iluminación.
“’Además, el monje consigue a voluntad, fácilmente y sin dificultad, a hablar sólo lo que es
veraz y lo que conduce a la apertura hacia el despertar, o sea, habla sobre la modestia,
contentamiento, la reclusión, sobre lo que no es enredado, lo que suscita a la persistencia,
sobre la virtud, la concentración, el discernimiento, la liberación y sobre el conocimiento y
la visión de la liberación. Este es el tercer prerrequisito para desarrollar las cualidades
mentales que llevan a la auto-iluminación.
“’Además, él se mantiene persistente en abandonar a los estados mentales perjudiciales y a
tener aquellos que son saludables. Él es categórico y rotundo en este esfuerzo, no rehuye a
sus tareas referentes a los saludables estados mentales. Este es el cuarto prerrequisito para
desarrollar las cualidades mentales que llevan a la auto-iluminación.

“’Además, él es criterioso, dotado del discernimiento sobre lo que aparece y deja de ser – un
discernimiento noble, penetrante, que lleva al pleno fin del sufrimiento. Este es el quinto
prerrequisito para desarrollar las cualidades mentales que llevan a la autoiluminación.’
“Monjes, cuando el monje tiene admirables amigos, admirables compañeros y admirables
camaradas, entonces es de esperar que él será virtuoso, que morará restringiéndose de
acuerdo al Patimokkha, que su conducta y sus actividades serán intachables, que se entrenará
a sí mismo habiendo asumido las reglas del entrenamiento y viendo el peligro en las más
mínimas faltas.

“Monjes, cuando el monje tiene admirables amigos, admirables compañeros y admirables


camaradas, entonces es de esperar que él consiga a voluntad, fácilmente y sin dificultad, a
hablar sólo lo que es veraz y lo que conduce a la apertura hacia el despertar, o sea, hablará
sobre la modestia, contentamiento, la reclusión, sobre lo que no es enredado, lo que suscita
a la persistencia, sobre la virtud, la concentración, el discernimiento, la liberación y sobre el
conocimiento y la visión de la liberación.

“Monjes, cuando el monje tiene admirables amigos, admirables compañeros y admirables


camaradas, entonces es de esperar que él se mantendrá persistente en abandonar a los estados
mentales perjudiciales y a tener los que son saludables. Él será categórico y rotundo en este
esfuerzo, no rehuirá a sus tareas referentes a los saludables estados mentales.

“Monjes, cuando el monje tiene admirables amigos, admirables compañeros y admirables


camaradas, entonces es de esperar que él sea criterioso, dotado del discernimiento sobre lo
que aparece y deja de ser –un discernimiento noble, penetrante, que lleva al pleno fin del
sufrimiento. “Y finalmente, monjes, cuando el monje se establece en estas cinco cualidades,
he aquí que cuatro cualidades adicionales deberían desarrollarse: él debería desarrollar la
contemplación de asquerosidad para que, de esta manera, abandone la lujuria. Debería
desarrollar la bondad para que, de esta manera, abandone la maldad. Debería desarrollar la
atención consciente en la respiración para que, de esta manera, abandone las distracciones.
Debería desarrollar la percepción de la impermanencia para que, de esta manera, desarraigue
la presunción del ‘yo’. Para el monje que percibe la impermanencia, la percepción del ‘no-
yo’ se vuelve firme. Y alguien que percibe al ‘no-yo’ y desarraiga la presunción del ‘yo’,
alcanza el Nibbana aquí y ahora.”

AN 9,1
{24} “Monjes, entre los devas se emiten tres clases de divinos sonidos en ocasiones
apropiadas. ¿Cuáles tres? Monjes, cuando un discípulo del noble afeita su cabeza y su barba,
se viste con el hábito amarillo y predispone su mente para abandonar su casa y empezar un
estilo de vida sin hogar, en esta ocasión se emite el siguiente divino sonido entre los devas:
‘Este discípulo del noble, predispuso su mente para batallar con el Mara’. Esta es, monjes, la
primera ocasión apropiada, en la cual se emite el divino sonido entre los devas.

“Monjes, cuando un discípulo del noble desarrolla con devoción los siete grupos de las
cualidades mentales que llevan a la Iluminación, en esta ocasión se emite el siguiente divino
sonido entre los devas: ‘Este discípulo del noble, está batallando con el Mara’. Esta es,
monjes, la segunda ocasión apropiada, en la cual se emite el divino sonido entre los devas.

“Monjes, cuando un discípulo del noble, mediante la destrucción de las impurezas, mora en
la liberación del despertar y discierne la liberación que lo hace libre de las impurezas,
habiéndola conocido y hecho manifiesta ya en esta vida, en esta ocasión se emite el siguiente
divino sonido entre los devas: ‘Este discípulo del noble ha ganado la batalla, él mora ahora
victorioso’. Esta es, monjes, la tercera ocasión apropiada, en la cual se emite el divino sonido
entre los devas.

Iti 3,82

{25} “Monjes, el monje que es admirable en virtud, que manifiesta admirables cualidades y
posee admirable sabiduría, en este Dhamma y Disciplina es llamado ‘Aquel que está
completo, realizado y el mejor’.

“Monjes, ¿y cómo el monje es admirable en virtud? He aquí el caso del monje que es
virtuoso. Él mora restringido de acuerdo al Patomokha, irreprochable en su conducta y sus
actos. Se entrena a sí mismo, habiendo asumido las reglas del entrenamiento, viendo el
peligro en las más mínimas faltas. De esta forma, monjes, el monje es admirable en virtud.
Es así como su conducta es admirable.

“Monjes, ¿y cómo el monje manifiesta admirables cualidades? He aquí el caso del monje
que mora desarrollando con devoción los siete grupos de las cualidades mentales que llevan
a la Iluminación [1]. De esta forma, monjes, el monje manifiesta admirables cualidades. Es
así como él es admirable en virtud y manifiesta admirables cualidades.

“Monjes, ¿y cómo el monje posee admirable sabiduría? He aquí el caso del monje que,
mediante la destrucción de las impurezas, mora en la liberación del despertar y discierne esta
liberación que lo hace libre de las impurezas, habiéndola conocido y hecho manifiesta por sí
mismo, ya en esta vida. De esta forma, monjes, el monje posee admirable sabiduría. Es así
como él es admirable en virtud, manifiesta admirables cualidades y posee admirable
sabiduría. En este Dhamma y Disciplina él es llamado ‘Aquel que está completo, realizado
y el mejor’”.

Evitando hacer el mal

En pensamiento, palabra o hecho,

Él es llamado ‘admirable en virtud’:

El monje plenamente consciente.

Sus cualidades bien desarrolladas,

Lo llevan a alcanzar la auto-iluminación,

Él es llamado ‘aquel que manifiesta admirables cualidades’:

El monje que no disimula.

Discierne por sí mismo y en sí mismo

El fin del sufrimiento

Él es llamado ‘aquel que posee admirable sabiduría’:

El monje sin impurezas.

Consumado en estas cualidades,

Sin vacilación, con las dudas desarraigadas,

Desapegado de todo lo que hay en el mundo,

Es llamado ‘aquel que todo ha abandonado’.

Pasajes del Canon Pali {26-48}

{26} “Monjes, imaginad a un árbol carente de ramas y hojas: sus capullos no llegan a
madurar, su corteza no llega a madurar, su savia no llega a madurar, su duramen no llega a
madurar. De la misma manera, cuando la atención consciente y el auto-dominio están
ausentes, el sentido de la consciencia y el temor de la culpa se echan a perder en alguien que
carece de la atención consciente y el auto-dominio… el control de los sentidos se echa a
perder… la práctica de la moral se echa a perder… la recta concentración se echa a perder…
la práctica de la moral se echa a perder… el verdadero conocimiento y la visión se echan a
perder… la aversión [por el mundo] y el desapasionamiento se echan a perder… el
conocimiento liberador y la visión se echan a perder en alguien que carece de la aversión
[por el mundo] y el desapasionamiento [...]

“Monjes, imaginad ahora a un árbol abundante en ramas y hojas: sus capullos llegan a
madurar, su corteza llega a madurar, su savia llega a madurar, su duramen llega a madurar.

De la misma manera, cuando la atención consciente y el auto-dominio están presentes, el


sentido de la consciencia y el temor de culpa tienen una causa eficiente en la presencia de la
atención consciente y el auto-dominio… el control de los sentidos tiene una causa eficiente…
la práctica de la moral tiene una causa eficiente… la recta concentración tiene una causa
eficiente… el verdadero conocimiento y la visión tienen una causa eficiente… la aversión
[por el mundo] y el desapasionamiento tienen una causa eficiente… el conocimiento
liberador y la visión tienen una causa eficiente en la aversión [por el mundo] y el
desapasionamiento.”

AN 8,81

{27} “Venerable señor, sería bueno que el Bienanturado me enseñara el Dhamma de manera
breve, de tal manera que, al haber escuchado la enseñanza del Dhamma de los labios del
Bienaventurado, podría morar en soledad, recluido, diligente, ferviente y resuelto.” El Buda:
“Entonces, Uttiya, primero, debes comenzar con lo que es fundamental para [lograr] los
saludables estados mentales. ¿Y qué es lo fundamental para [lograr] los saludables estados
mentales? La virtud bien purificada y el firme entendimiento. Entonces, Uttiya, cuando tu
virtud está bien purificada y tu entendimiento firme, sobre la base de la virtud, establecido
en la virtud, debes desarrollar los cuatro fundamentos de la atención consciente… Y cuando,
Uttiya, sobre la base de la virtud y establecido en la virtud, desarrollarás los cuatro
fundamentos de la atención consciente, podrás ir más allá del reino de la muerte.”
SN 47,16

{28} Atención consciente y clara comprensión. “Monjes, el monje debe morar atentamente
consciente y con una clara comprensión. Éstas son nuestras instrucciones para vosotros. “¿Y
cómo, monjes, el monje está atentamente consciente? He aquí, el monje mora contemplando
el cuerpo en el cuerpo -ardiente, comprendiendo claramente y atentamente consciente-
dejando atrás los deseos y las aversiones concernientes al mundo. Él mora contemplando las
sensaciones en las sensaciones… la mente en la mente… los fenómenos mentales en los
fenómenos mentales, -ardiente, comprendiendo claramente y atentamente consciente-
dejando atrás los deseos y las aversiones concernientes al mundo. Es así, monjes, cómo el
monje está atentamente consciente.
“¿Y cómo, monjes, el monje ejercita la clara comprensión? He aquí, monjes, el monje sabe
cuándo aparecen las sensaciones, sabe cuando ellas están presentes y sabe cuándo terminan.
Él sabe cuándo aparecen los pensamientos, sabe cuando ellos están presentes y sabe cuándo
terminan. Él sabe cuándo aparecen las percepciones, sabe cuando ellas están presentes y sabe
cuándo terminan. Es así, monjes, cómo el monje ejercita la clara comprensión.

“Monjes, el monje debe morar atentamente consciente y con una clara comprensión. Éstas
son nuestras instrucciones para vosotros.”

SN 47,35

{29} Análisis. “Monjes, voy a enseñaros el fundamento de la atención consciente, el


desarrollo del fundamento de la atención consciente y el camino que lleva al desarrollo del
fundamento de la atención consciente. Escuchad, que voy a hablar.

“Y ¿cómo es, monjes, el fundamento de la atención consciente? He aquí, monjes, el monje


mora contemplando el cuerpo en el cuerpo -ardiente, comprendiendo claramente y
atentamente consciente- dejando atrás los deseos y las aversiones concernientes al mundo.
Él mora contemplando las sensaciones en las sensaciones… la mente en la mente… los
fenómenos mentales en los fenómenos mentales, -ardiente, comprendiendo claramente y
atentamente consciente- dejando atrás los deseos y las aversiones concernientes al mundo.
Es así, monjes, cómo el monje está atentamente consciente. A esto se le llama el ‘fundamento
de la atención consciente’.

“Y ¿cómo es, monjes, el desarrollo del fundamento de la atención consciente? He aquí,


monjes, el monje mora contemplando la naturaleza del origen del cuerpo; mora
contemplando la naturaleza del desvanecimiento del cuerpo; mora contemplando la
naturaleza del origen y el desvanecimiento del cuerpo -ardiente, comprendiendo claramente
y atentamente consciente- dejando atrás los deseos y las aversiones concernientes al mundo.

“Él mora contemplando la naturaleza del origen de las sensaciones... la naturaleza del origen
de la mente... a naturaleza del origen de los fenómenos mentales; mora contemplando la
naturaleza del desvanecimiento de los fenómenos mentales; mora contemplando la
naturaleza del origen y el desvanecimiento de los fenómenos mentales ardiente,
comprendiendo claramente y atentamente consciente- dejando atrás los deseos y las
aversiones concernientes al mundo. A esto se le llama el ‘desarrollo del fundamento de la
atención consciente’.

“ Y ¿cómo es, monjes, el camino que lleva al desarrollo del fundamento de la atención
consciente? Es el Noble Óctuple Sendero: el correcto entendimiento, correcta intención,
correcta forma de hablar, correcta acción, correcta forma de vida, correcto esfuerzo, correcta
atención consciente y correcta concentración. A esto se le llama el ‘el camino que lleva al
desarrollo del fundamento de la atención consciente’.

SN 47,40

{30} En detalle. "Monjes, el único camino para la purificación de los seres, para la
superación de la pena y las lamentaciones, para la destrucción del dolor y de la aflicción,
para alcanzar el recto sendero, para la realización del Nibbana, es éste: Los Cuatro
Fundamentos de la Atención. ¿Cuáles son esos cuatro?

He aquí que (en esta enseñanza) un monje vive practicando la contemplación del cuerpo en
el cuerpo, fervoroso, comprendiendo claramente y atento, superando la codicia y la aflicción
inherentes al mundo; vive practicando la contemplación de las sensaciones en las
sensaciones, fervoroso, comprendiendo claramente y atento, superando la codicia y la
aflicción inherentes al mundo; vive contemplando la conciencia en la conciencia, fervoroso,
comprendiendo claramente y atento, superando la codicia y la aflicción inherentes al mundo;
vive contemplando los objetos mentales en los objetos mentales', fervoroso, comprendiendo
claramente y atento, superando la codicia y la aflicción inherentes al mundo.

CUERPO

Y ¿cómo vive un monje contemplando el cuerpo en el cuerpo? Monjes, he aquí que un monje
va al bosque, al pie de un árbol o a un lugar solitario, se sienta con las piernas cruzadas,
mantiene su cuerpo erguido y su Atención. alerta.

Atento aspira y atento espira. Al hacer una aspiración larga, sabe: «hago una aspiración
larga». Al hacer una espiración larga, sabe: «hago una espiración larga». Al hacer una
aspiración corta, sabe: «hago una aspiración corta». Al hacer una espiración corta, sabe:
«hago una espiración corta». «Consciente de todo el cuerpo respiración aspiraré» así se
ejercita. «Consciente de todo el cuerpo respiración espiraré», así se ejercita. «Calmando la
función corporal, aspiraré». Así se ejercita. «Calmando la función corporal, espiraré» así se
ejercita.

De la misma manera que un tornero experto o su aprendiz sabe al labrar una voluta grande:
«estoy labrando una voluta grande», o al labrar una voluta corta sabe: «estoy labrando una
voluta corta», así el monje, al hacer una aspiración larga, sabe «hago una aspiración larga».

Al hacer una espiración larga, sabe: «hago una espiración larga».

Al hacer una aspiración corta, sabe: «hago una aspiración corta».

Al hacer una espiración corta, sabe:«Hago una respiración corta». «Consciente de todo el
cuerpo respiración aspiraré». Así se ejercita.
«Consciente de todo el cuerpo respiración espiraré». Así se ejercita.

«Calmando la actividad corporal respiración aspiraré». Así se ejercita.

«Calmando la actividad del cuerpo respiración espiraré». Así se ejercita.

Así vive contemplando el cuerpo en el cuerpo internamente, o vive contemplando el cuerpo


en el cuerpo externamente, o vive contemplando el cuerpo interna y externamente. Vive
contemplando los factores del origen del cuerpo, o vive contemplando los factores de
disolución en el cuerpo, o vive contemplando tanto los factores del origen como los de
disolución del cuerpo. O tiene conciencia de que «hay un cuerpo» en el grado necesario para
el conocimiento y la atención, y vive con independencia, sin apegarse a nada en el mundo.
Monjes, así es como un monje vive contemplando el cuerpo en el cuerpo.

Asimismo, monjes cuando un monje camina, sabe: «estoy caminando»; cuando permanece
en pie, sabe: «estoy en pie»; cuando está sentado, sabe: «estoy sentado»; cuando se tumba,
sabe: «estoy tumbado», y también tiene conciencia de cualquier otra posición del cuerpo. Así
vive contemplando el cuerpo en el cuerpo internamente, o vive contemplando el cuerpo en
el cuerpo externamente, o vive contemplando el cuerpo en el cuerpo interna y externamente.
Vive contemplando los factores del origen del cuerpo, o vive contemplando los factores de
disolución del cuerpo, o vive contemplando los factores del origen y de disolución del
cuerpo. O tiene conciencia de que «hay un cuerpo» en el grado necesario para el
conocimiento y la Atención. y vive desapegado, sin apegarse a nada en el mundo. Monjes,
así es como el monje medita practicando la contemplación del cuerpo en el cuerpo.

Asimismo, monjes, un monje aplica la clara comprensión al avanzar y al retroceder; al mirar


hacia delante y al mirar alrededor, aplica la clara comprensión al extender y encoger los
miembros, aplica la clara comprensión al vestir la ropa y al llevar el bol de limosnas, aplica
la clara comprensión; al comer, al beber, masticar y saborear, aplica la clara comprensión; al
andar, permanecer de pie, sentarse, dormirse, al despertar, al hablar y al callar,. aplica la clara
comprensión.

Así vive contemplando el cuerpo en el cuerpo...

Asimismo, monjes, un monje reflexiona sobre su propio cuerpo, envuelto en la piel y lleno
de impurezas, de la planta de los pies hacia arriba y de la coronilla hacia abajo, y piensa así:
«Hay en este cuerpo: pelo en la cabeza, vello en el cuerpo, uñas, dientes, piel, carne,
tendones, huesos, tuétanos, riñones, corazón, hígado, pleura, bazo, pulmones, intestino,
mesenterio, estómago, heces, bilis, flemas, pus, sangre, sudor, grasa sólida, lágrimas, grasas
líquidas, saliva, mocos, fluido sinovial, orina».
Es como tener un saco de provisiones, de aquellos con dos aberturas, lleno de diversas clases
de grano, tales como: arroz de montaña, arroz corriente, alubias, guisantes, sésamo, arroz
perlado, y un hombre que tiene buenos ojos lo abre, lo examina y dice: «Esto es arroz de
montaña, esto es arroz corriente, esto son alubias, esto son guisantes, esto es sésamo, esto es
arroz perlado». De la misma manera, un monje reflexiona sobre su propio cuerpo de las
plantas de los pies hacia arriba y de la coronilla hacia abajo, envuelto en la piel y lleno de
impurezas: «En este cuerpo hay pelo de la cabeza, vello en el cuerpo, uñas, dientes, piel,
carne, tendones, huesos, tuétano, riñones, corazón, hígado, pleura, bazo, pulmones,
intestinos, mesenterio, estómago, heces, bilis, flemas, pus, sangre, sudor, grasa sólida,
lágrimas, grasas liquidas, saliva, mocos, fluido sinovial, orina».

Así vive contemplando el cuerpo en el cuerpo...

Asimismo, monjes, un monje reflexiona sobre su propio cuerpo, en cualquier lugar o posición
en que se encuentre, pensando en sus elementos materiales: «En este cuerpo hay el elemento
tierra, el elemento agua, el elemento fuego, el elemento aire».

Como si un carnicero experto o su aprendiz que, tras sacrificar a una vaca y dividirla en
partes, se ponen a venderla en el cruce de cuatro carreteras, de la misma manera el monje
reflexiona sobre su propio cuerpo en cualquier lugar o posición que se encuentre, pensando
en sus elementos primarios: «en este cuerpo hay el elemento tierra, agua, fuego y aire».

Así vive contemplando el cuerpo en el cuerpo...

Asimismo, monjes, como cuando un monje ve un cuerpo que lleva un día muerto, o dos días
muerto, o tres días muerto, hinchado, amoratado y putrefacto, tirado en el osario, aplica esta
percepción a su propio cuerpo de esta manera: «En verdad que este cuerpo mío tiene también
la misma naturaleza, se volverá igual y no Escapará a ello».

Así vive contemplando el cuerpo en el cuerpo internamente, o vive contemplando el cuerpo


en el cuerpo externamente, o vive contemplando el cuerpo en el cuerpo interna y
externamente. Vive contemplando los factores del origen del cuerpo, o vive contemplando
los factores de disolución del cuerpo, o vive contemplando los factores del origen y de
disolución del cuerpo. O tiene conciencia de que «hay un cuerpo» en el grado necesario para
el conocimiento y la atención, y vive independiente, sin apegarse a nada en el mundo. Así
es, monjes, como el monje vive contemplando el cuerpo en el cuerpo.

Asimismo, como cuando un monje ve un cuerpo tirado en el osario, que está siendo devorado
por los cuervos, los gavilanes, los buitres, los perros, los chacales o por distintas clases de
gusanos, aplica esta percepción a su propio cuerpo de esta manera: «En verdad que también
mi cuerpo tiene la misma naturaleza, se volverá igual y no escapará a ello». Así vive
contemplando el cuerpo en el cuerpo...
Asimismo, monjes, como cuando un monje ve un cuerpo tirado en el osario, reducido a un
esqueleto unido tan sólo por los tendones y con algo de carne y de sangre adherido a él...

Asimismo, monjes, como cuando un monje ve un cuerpo tirado en el osario, reducido a un


esqueleto unido tan solo por los tendones, embadurnado en sangre y sin carne...

Asimismo, monjes, como cuando un monje ve un cuerpo tirado en el osario y reducido a un


esqueleto sin carne y sin sangre, unido tan sólo por los tendones...

Asimismo, monjes, como cuando un monje ve un cuerpo tirado en el osario y reducido a


huesos sueltos esparcidos en todas direcciones: aquí los huesos de la mano, allí los de los
pies, los huesos de las espinillas, los de los muslos, la pelvis, las vértebras, el cráneo...

Asimismo, monjes, como cuando un monje ve un cuerpo tirado en el osario, reducido a


huesos blanqueados como una concha...

Asimismo, monjes, como cuando un monje ve un cuerpo tirado en el osario, reducido a


huesos de más de un año, amontonados...

Asimismo, monjes, como cuando un monje ve un cuerpo tirado en el osario, reducido a


huesos podridos, reducido a polvo, entonces aplica esta percepción a su propio cuerpo de
esta manera: «En verdad que también mi cuerpo tiene la misma naturaleza, se volverá igual
y no escapara a ello».

Así vive contemplando el cuerpo en el cuerpo internamente, o vive contemplando el cuerpo


en el cuerpo externamente, o vive contemplando el cuerpo en el cuerpo interna y
externamente. Vive contemplando los factores del origen del cuerpo, o vive contemplando
los factores de disolución del cuerpo, o vive contemplando los factores del origen y de
disolución del cuerpo. O tiene conciencia de que «hay un cuerpo» en el grado necesario para
el conocimiento y la Atención. y vive desapegado, sin aferrarse a nada en el mundo. Monjes,
así es como un monje vive contemplando el cuerpo en el cuerpo.

SENSACIONES

Monjes, ¿cómo vive un monje contemplando las sensaciones en las sensaciones?

Monjes, un monje, al experimentar una sensación agradable, sabe: «experimento una


sensación agradable»; cuando experimenta una sensación dolorosa, sabe: «experimento una
sensación dolorosa»; cuando experimenta una sensación ni agradable ni dolorosa, sabe:
«experimento una sensación que no es ni agradable ni dolorosa»; cuando experimenta una
sensación mundanal agradable, sabe: «experimento una sensación mundanal agradable»;
cuando experimenta una sensación espiritual agradable, sabe: «experimento una sensación
espiritual agradable»; cuando experimenta una sensación mundanal dolorosa, sabe:
«experimento una sensación mundanal dolorosa»; cuando experimenta una sensación
espiritual dolorosa, sabe: «experimento una sensación espiritual dolorosa»; cuando
experimenta una sensación mundanal que no es ni dolorosa ni no dolorosa, sabe:
«experimento una sensación mundanal que no es ni dolorosa ni no dolorosa»; cuando
experimenta una sensación espiritual que no es ni dolorosa ni no dolorosa, sabe:
«experimento una sensación espiritual que no es ni dolorosa ni no dolorosa.»

Así vive contemplando las sensaciones en las sensaciones internamente, o vive


contemplando las sensaciones en las sensaciones externamente, o vive contemplando las
sensaciones en las sensaciones interna y externamente. Vive contemplando los factores del
origen de las sensaciones, o vive contemplando los factores de disolución de las sensaciones,
o vive contemplando tanto los factores del origen como los de la disolución de las
sensaciones. O tiene conciencia de que «hay sensaciones» en el grado necesario para el
conocimiento y la atención, y vive desapegado, sin aferrarse a nada en el mundo. Monjes,
así es como un monje vive contemplando las sensaciones en las sensaciones.

MENTE

Monjes, ¿cómo vive un monje contemplando la conciencia en la conciencia?

Monjes, he aquí que un monje, cuando hay pasión en la conciencia, sabe que hay pasión y
cuando no hay pasión en la conciencia, sabe que no la hay; cuando hay odio en la conciencia,
sabe que hay odio, y cuando no hay odio en la conciencia, sabe que no lo hay; cuando hay
ignorancia en la conciencia, sabe que hay ignorancia, y cuando no hay ignorancia en la
conciencia, sabe que no la hay; cuando la conciencia está disminuida, sabe que está
disminuida cuando la conciencia está distraída, sabe que está distraída; cuando la conciencia
está desarrollada, sabe que está desarrollada; cuando la conciencia no está desarrollada, sabe
que no está desarrollada; cuando la conciencia está en un estado con otro estado mental
superior a ella, sabe que hay un estado mentalmente superior; cuando no hay un estado
mental superior, sabe que no hay un estado mental superior; cuando la conciencia está
concentrada, sabe que está concentrada, y cuando la conciencia no está concentrada, sabe
que no lo está; cuando la conciencia está liberada, sabe que está liberada, y cuando no está
liberada, sabe que no lo está.

Así vive contemplando la conciencia en la conciencia internamente, o vive contemplando la


conciencia en la conciencia externamente, o vive contemplando la conciencia en la
conciencia interna y externamente. Vive contemplando los factores del origen de la
conciencia, o vive contemplando los factores de disolución de la conciencia, o vive
contemplando tanto los factores del origen como los de la disolución de la conciencia, o sabe
que «hay conciencia» en el grado necesario para el conocimiento y la Atención. y vive
desapegado, sin aferrarse a nada en el mundo. Monjes, así es como el monje vive
contemplando la conciencia en la conciencia.
CUALIDADES MENTALES

Monjes, ¿cómo vive un monje contemplando los objetos mentales en los objetos mentales?

He aquí que un monje vive contemplando los objetos mentales en los objetos mentales
constituidos por los cinco obstáculos.

Monjes, ¿cómo vive un monje contemplando los objetos mentales en los objetos mentales
constituidos por los cinco obstáculos?

He aquí, monjes, que cuando el apetito sensual está presente en él, el monje sabe: «hay apetito
sensual en mí»; cuando el apetito sensual está ausente, sabe: «no hay apetito sensual en mí».
Sabe cómo surge el apetito sensual que ha surgido y sabe cómo ya no vuelve a surgir en el
futuro el apetito sensual que se ha rechazado.

Cuando la ira está presente, el monje sabe: «hay ira en mí», y cuando la ira está ausente,
sabe: «no hay ira en mí». Sabe cómo surge la ira que no existía previamente; sabe cómo se
rechaza la ira que ha surgido y sabe cómo ya no vuelve a surgir en el futuro la ira rechazada.

Cuando la pereza y el sopor están presentes en él, el monje sabe: «hay pereza y sopor en mí»;
cuando la pereza y el sopor están ausentes, sabe: «no hay pereza ni sopor en mí». Sabe cómo
surgen la pereza y el sopor que no existían previamente, sabe cómo se rechazan la pereza y
el sopor surgidos y sabe cómo ya no vuelven a surgir en el futuro la pereza y el sopor
rechazados.

Cuando el desasosiego y la ansiedad están presentes en él, sabe: «hay desasosiego y ansiedad
en mí»; cuando el desasosiego y la ansiedad están ausentes, sabe: «no hay desasosiego ni
ansiedad en mí». Sabe cómo surgen el desasosiego y la ansiedad que no existían previamente,
sabe cómo se rechazan el desasosiego y la ansiedad surgidos y sabe cómo ya no vuelven a
surgir en el futuro el desasosiego y la ansiedad rechazados.

Cuando la duda está presente en él, el monje sabe: «hay duda en mí»; cuando la duda está
ausente, sabe: «no hay duda en mí». Sabe cómo surge la duda que no existía previamente,
sabe cómo se rechaza la duda surgida y sabe cómo ya no vuelve a surgir en el futuro la duda
rechazada.

Así vive contemplando los objetos mentales en los objetos mentales internamente, o vive
contemplando los objetos mentales en los objetos mentales constantemente, o vive
contemplando los objetos mentales en los objetos mentales tanto interna como externamente.
Vive contemplando los factores del origen de los objetos mentales, o vive contemplando los
factores de disolución de los objetos mentales, o vive contemplando tanto los factores del
origen como los de la disolución de los objetos mentales. O tiene conciencia de que «hay
objetos mentales» en el grado necesario para el conocimiento y la Atención. y vive
desapegado, sin aferrarse a nada en el mundo. Así es, monjes, como el monje vive
practicando la contemplación de los objetos mentales en los objetos mentales constituidos
por los cinco obstáculos.

Asimismo, monjes, un monje vive contemplando los objetos mentales en los objetos
mentales constituidos por los cinco agregados del apego.

Monjes, ¿cómo vive un monje contemplando los objetos mentales en los objetos mentales
constituidos por los cinco agregados del apego?

Monjes, he aquí que un monje piensa: «Así es la forma material, así surge la forma material,
así desaparece la forma material; así es la sensación, así surge la sensación así desaparece la
sensación así es la Percepción, así surge la percepción así desaparece la percepción así son
las formaciones mentales, así surgen las formaciones mentales, así desaparecen las
formaciones mentales; así es la conciencia, así surge la conciencia, así desaparece la
conciencia».

Así vive contemplando los objetos mentales en los objetos mentales internamente, o vive
contemplando los objetos mentales en los objetos mentales externamente, o vive
contemplando los objetos mentales en los objetos mentales interna y externamente. Vive
contemplando los factores del origen de los objetos mentales, o vive contemplando los
factores de la disolución de los objetos mentales, o vive contemplando tanto los factores del
origen como los de la disolución de los objetos mentales. O tiene conciencia de que «hay
objetos mentales» en el grado necesario para el conocimiento y la Atención. y vive
desapegado, sin aferrarse a nada en el mundo. Monjes, así es corro un monje vive
contemplando los objetos mentales en los objetos mentales constituidos por los cinco
agregados del apego.

Asimismo, monjes, un monje vive contemplando los objetos mentales en los objetos
mentales constituidos por las seis esferas internas y las seis externas de los sentidos.

Monjes, ¿cómo vive un monje contemplando los objetos mentales en los objetos mentales
formados por las seis esferas internas y las seis externas de los sentidos?

Monjes, he aquí que un monje conoce el ojo y las formas visuales y la atadura que surge
dependiendo de ambos (del ojo y de las formas); sabe cómo surge la atadura que no existía
previamente, sabe cómo se rechaza la atadura surgida y sabe cómo ya no vuelve a surgir en
el futuro la atadura rechazada. Conoce el oído y los sonidos.... la nariz y los olores.... la
lengua y los sabores..., el cuerpo y los objetos táctiles..., la mente y los objetos mentales y
conoce las ataduras que dependen de ellos; sabe cómo surgen las ataduras que no existían
previamente, sabe cómo se rechazan las ataduras surgidas y sabe cómo ya no vuelven a surgir
en el futuro las ataduras rechazadas.
Monjes, así vive el monje contemplando los objetos mentales en los objetos mentales
internamente, o vive contemplando los objetos mentales en los objetos mentales
externamente, o vive contemplando los objetos mentales en los objetos mentales interna y
externamente. Vive contemplando los factores del origen de los objetos mentales, o vive
contemplando los factores de disolución de los objetos mentales, o vive contemplando tanto
los factores del origen como los de disolución de los objetos mentales'. O tiene conciencia
de que «hay objetos mentales» en el grado necesario para el conocimiento y la Atención. y
vive desapegado, sin aferrarse a nada en el mundo. Monjes, así es como un monje vive
contemplando los objetos mentales en los objetos mentales formados por las seis esferas
internas y las seis externas de los sentidos.

Monjes, asimismo, un monje vive contemplando los objetos mentales en los objetos mentales
constituidos por los siete factores de la iluminación.

Monjes, ¿como vive un monje contemplando los objetos mentales constituidos por los siete
factores de la iluminación?

Monjes, he aquí que cuando la atención que es factor de iluminación está presente en él, el
monje sabe: «hay en mí la Atención, que es factor de iluminación», cuando la atenc16n que
es factor de iluminación está ausente, sabe: «no hay en mí la Atención, que es factor de
iluminación», y sabe cómo surge la Atención. que es factor de iluminación que no existía
previamente, y cómo se produce la perfección en el desarrollo de la Atención. surgida que es
factor de iluminación.

Cuando la investigación de los objetos mentales que es factor de iluminación está presente,
el monje sabe: «hay en mí la investigación de los objetos mentales que es factor de
iluminación», cuando la investigación de los objetos mentales que es factor de iluminación
está ausente, sabe: «no hay en mi la investigación de los objetos mentales que es factor de
iluminación», y sabe cómo surge la investigación de los objetos mentales que es factor de
iluminación que no existía previamente, y como se produce la perfecci6n en el desarrollo de
la investigación de los objetos mentales surgida que es factor de iluminación.

Cuando la energía que es factor de iluminación está presente, sabe: «hay en mi la energía
que es factor de iluminación»; cuando la energía que es factor de iluminación está ausente,
sabe: «no hay en mi la energía que es factor de iluminación», y sabe c6mo surge la energía
que es factor de iluminación que no existía previamente, y sabe cómo se produce la
perfección en el desarrollo de la energía surgida que es factor de iluminación.

Cuando la alegría que es factor de iluminación está presente, el monje sabe: «hay en mí la
alegría que es factor de iluminación»; cuando la alegría que es factor de iluminación está
ausente, sabe: «no hay en mi la alegría que es factor de iluminación», y sabe cómo surge la
alegría que es factor de iluminación que no existía previamente, y cómo se produce la
perfecci6n en el desarrollo de la alegría surgida que es factor de iluminación.

Cuando la tranquilidad que es factor de iluminación está presente, sabe: «hay en mi la


tranquilidad que es factor de iluminación»; cuando la tranquilidad que es factor de
iluminación está ausente, sabe: «no hay en mí la tranquilidad que es factor de iluminación»,
y sabe cómo surge la tranquilidad que es factor de iluminación que no existía previamente,
y cómo se produce la perfección en el desarrollo de la tranquilidad que es factor de
iluminación.

Cuando la concentración que es factor de iluminación está presente en él, sabe: «hay en mí
la concentración que es factor de iluminación»; cuando la concentración que es factor de
iluminación está ausente, sabe: «no hay en mí la concentración que es factor de iluminación»,
y sabe cómo surge la concentración que es factor de iluminación que no existía previamente,
y cómo se produce la perfección en el desarrollo de la concentración que es factor de
iluminación.

Cuando la ecuanimidad que es factor de iluminación está presente, sabe: «hay en mí la


ecuanimidad que es factor de lluminación»; cuando la ecuanimidad que es factor de
iluminación está ausente, sabe: «no hay en mí la ecuanimidad que es factor de iluminación»,
y sabe cómo surge la ecuanimidad que es factor de iluminación que no existía previamente,
y cómo se produce la perfección en el desarrollo de la ecuanimidad que es factor de
iluminación.

Así vive contemplando los objetos mentales en los objetos mentales internamente, o vive
contemplando los objetos mentales en los objetos mentales externamente, o vive
contemplando los objetos mentales en los objetos mentales interna y externamente. Vive
contemplando los factores del origen de los objetos mentales, o vive contemplando los
factores de disolución de los objetos mentales, o vive contemplando tanto los factores del
origen como los de la disolución de los objetos mentales. 0 tiene conciencia de que «hay
objetos mentales» en el grado necesario para el conocimiento y la atención, y vive
desapegado, sin aferrarse a nada en el mundo. Monjes, así es como un monje vive
contemplando los objetos mentales en los objetos mentales constituidos por los siete factores
de la iluminación.

Asimismo, monjes, un monje vive contemplando los objetos mentales en los objetos
mentales constituidos por las Cuatro Nobles Verdades.

Monjes, ¿cómo vive un monje contemplando los objetos mentales en los objetos mentales
constituidos por las Cuatro Nobles Verdades?
Monjes, he aquí que un monje sabe: esto es sufrimiento según la realidad; éste es el origen
del sufrimiento, sabe según la realidad; ésta es la cesación del sufrimiento, sabe según la
realidad; éste es el sendero que conduce a la cesación del sufrimiento.

Así vive contemplando los objetos mentales en los objetos mentales internamente, o vive
contemplando los objetos mentales en los objetos mentales externamente, o vive
contemplando los objetos mentales en los objetos mentales interna y externamente. Vive
contemplando los factores del origen de los objetos mentales, o vive contemplando los
factores de disolución de los objetos mentales, o vive contemplando los factores del origen
y los factores de la disolución de los objetos mentales. O tiene conciencia de que «hay objetos
mentales» en el grado necesario para el conocimiento y la Atención. y vive desapegado, sin
aferrarse a nada en el mundo. Monjes, así vive un monje contemplando los objetos mentales
en los objetos menales constituidos por las Cuatro Nobles Verdades.

En verdad, monjes, que aquél que practique estos cuatro Fundamentos de la Atención. de
esta manera durante siete años puede esperar que se produzca en él uno de estos dos
resultados: el Conocimiento Supremo aquí y ahora o, si aún le quedara un resto de apego, el
estado Sin Vuelta.

Monjes, ni siquiera siete años. Si una persona practicara estos cuatro Fundamentos de la
Atención. de esta manera durante seis años... cinco años... cuatro años... tres años... dos
años... durante un año, entonces podría esperar que se produzca en él uno de estos dos
resultados: el Conocimiento Supremo aquí y ahora o, si aún le quedara un resto de apego, el
estado Sin Vuelta.

Monjes, ni siquiera un año. Si una persona practicara estos cuatro Fundamentos de la


Atención. de esta manera durante siete meses... seis meses... cinco meses... cuatro meses...
tres meses... dos meses... un mes... durante medio mes, podría esperar que se produzca en él
uno de estos dos resultados: el Conocimiento Supremo aquí y ahora o, si aún le quedara un
resto de apego, el estado Sin Vuelta.

Monjes, ni siquiera medio mes. Si una persona practicara estos cuatro Fundamentos de la
Atención. de esta manera durante una semana, podría esperar que se produzca en él uno de
estos dos resultados: el Conocimiento Supremo aquí y ahora o, si aún le quedara un resto de
apego, el estado Sin Vuelta.

Por esto se ha dicho: «Monjes, éste es el único camino para la purificación de los seres, para
la superación de la pena y las lamentaciones, para la destrucción del dolor y la aflicción, para
alcanzar el recto sendero, para la realización del Nibbana: los Cuatro Fundamentos de la
Atención».

Así habló el Bienaventurado. Los monjes acogieron con satisfacción sus palabras.
MN 10

{31} En la práctica. “Y ahora, monjes, cuando la atención consciente en la respiración es


desarrollada y cultivada ¿cómo realiza las cuatro formas de atención consciente?

“Monjes, en cualquier ocasión, cuando el monje inhala largo, entiende: ‘Estoy inhalando
largo’ o, cuando exhala largo, entiende: ‘Estoy exhalando largo’; cuando inhala corto,
entiende: ‘Estoy inhalando corto’ y cuando exhala corto, entiende: ‘Estoy exhalando corto’.
Él se entrena de esta manera: ‘Voy a inhalar experimentado el cuerpo entero’ y se entrena
así: ‘Voy a exhalar, experimentado el cuerpo entero’. Él se entrena de esta manera: ‘Voy a
inhalar tranquilizando las formaciones corporales’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar,
tranquilizando las formaciones corporales’ –en esta ocasión, el monje permanece
contemplando el cuerpo como un cuerpo, fervorosamente, plenamente atento y consciente,
habiendo dejado atrás la codicia y el pesar por el mundo. Yo digo, monjes, que la inhalación
y la exhalación son una especie de cuerpo entre los cuerpos. Por esta razón, el monje, en esta
ocasión, permanece contemplando el cuerpo como un cuerpo, fervorosamente, plenamente
atento y consciente, habiendo dejado atrás la codicia y el pesar por el mundo.

“Monjes, en cualquier ocasión el monje se entrena de esta manera: ‘Voy a inhalar


experimentando la alegría’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, experimentando la alegría’. Él
se entrena de esta manera: ‘Voy a inhalar experimentando el placer’ y se entrena así: ‘Voy a
exhalar, experimentando el placer’. Él se entrena de esta manera: ‘Voy a inhalar
experimentando las formaciones mentales’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, experimentando
las formaciones mentales’. Él se entrena de esta manera: ‘Voy a inhalar tranquilizando las
formaciones mentales’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, tranquilizando las formaciones
mentales’ –en esta ocasión, el monje permanece contemplando las sensaciones como unas
sensaciones, fervorosamente, plenamente atento y consciente, habiendo dejado atrás la
codicia y el pesar por el mundo. Yo digo, monjes, que la inhalación y la exhalación es una
especie de sensación entre las sensaciones. Por esta razón, el monje, en esta ocasión,
permanece contemplando las sensaciones como unas sensaciones, fervorosamente,
plenamente atento y consciente, habiendo dejado atrás la codicia y el pesar por el mundo.

“Monjes, en cada ocasión el monje se entrena de esta manera: ‘Voy a inhalar experimentando
la mente’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, experimentando la mente’. Él se entrena de esta
manera: ‘Voy a inhalar llenando de gozo la mente’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, llenando
de gozo la mente’. Él se entrena de esta manera: ‘Voy a inhalar concentrando la mente’ y se
entrena así: ‘Voy a exhalar, concentrando la mente’. Él se entrena de esta manera: ‘Voy a
inhalar liberando la mente’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, liberando la mente’ –en esta
ocasión, el monje permanece contemplando la mente como una mente, fervorosamente,
plenamente atento y consciente, habiendo dejado atrás la codicia y el pesar por el mundo. Yo
no digo, monjes, que el desarrollo de la atención consciente en la respiración es para alguien
que es olvidadizo, ni para alguien que no está plenamente atento. Por esta razón, el monje,
en esta ocasión, permanece contemplando la mente como una mente, fervorosamente,
plenamente atento y consciente, habiendo dejado atrás la codicia y el pesar por el mundo.

“Monjes, en cualquier ocasión el monje se entrena de esta manera: ‘Voy a inhalar


contemplando la impermanencia’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, contemplando la
impermanencia’. Él se entrena de esta manera: ‘Voy a inhalar contemplando el
desvanecimiento’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, contemplando el desvanecimiento’. Él se
entrena de esta manera: ‘Voy a inhalar contemplando el cese’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar,
contemplando el cese’. Él se entrena de esta manera: ‘Voy a inhalar contemplando el
renunciamiento’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, contemplando el renunciamiento’ –en esta
ocasión, el monje permanece contemplando los objetos mentales como unos objetos
mentales, fervorosamente, plenamente atento y consciente, habiendo dejado atrás la codicia
y el pesar por el mundo. Habiendo visto con sabiduría el abandono de la codicia y del pesar,
él observa de cerca con ecuanimidad. Por esta razón, el monje, en esta ocasión, permanece
contemplando los objetos mentales como unos objetos mentales, fervorosamente,
plenamente atento y consciente, habiendo dejado atrás la codicia y el pesar por el mundo.
“Monjes, de esta manera la atención consciente en la respiración, cuando es desarrollada y
cultivada, realiza las cuatro formas de atención consciente.
MN 118

{32} Interna y externamente. “He aquí, el monje mora contemplando internamente el


cuerpo en el cuerpo de sí mismo -ardiente, comprendiendo claramente y atentamente
consciente- dejando atrás los deseos y las aversiones concernientes al mundo. Y cuando
permanece contemplando así internamente el cuerpo en el cuerpo de sí mismo, llega a ser
correctamente concentrado ahí y lúcido. Estando correctamente concentrado ahí y lúcido,
alcanza externamente el conocimiento y la visión de los cuerpos de otros.

“Él mora contemplando internamente las sensaciones en las sensaciones de sí mismo


ardiente, comprendiendo claramente y atentamente consciente- dejando atrás los deseos y las
aversiones concernientes al mundo. Y cuando permanece contemplando así internamente las
sensaciones en las sensaciones de sí mismo, llega a ser correctamente concentrado ahí y
lúcido. Estando correctamente concentrado ahí y lúcido, alcanza externamente el
conocimiento y la visión de las sensaciones de otros.

“Él mora contemplando internamente la mente en la mente de sí mismo -ardiente,


comprendiendo claramente y atentamente consciente- dejando atrás los deseos y las
aversiones concernientes al mundo. Y cuando permanece contemplando así internamente la
mente en la mente de sí mismo, llega a ser correctamente concentrado ahí y lúcido. Estando
correctamente concentrado ahí y lúcido, alcanza externamente el conocimiento y la visión
de la mente de otros.

“ Él mora contemplando internamente las cualidades mentales en las cualidades mentales de


sí mismo -ardiente, comprendiendo claramente y atentamente consciente- dejando atrás los
deseos y las aversiones concernientes al mundo. Y cuando permanece contemplando así
internamente las cualidades mentales en las cualidades mentales de sí mismo, llega a ser
correctamente concentrado ahí y lúcido. Estando correctamente concentrado ahí y lúcido,
alcanza externamente el conocimiento y la visión de las cualidades mentales de otros.”

DN 18

{33} Atención consciente y concentración. “Habiendo abandonado los cinco obstáculos –


las imperfecciones de la consciencia que debilitan el discernimiento- el monje mora
contemplando el cuerpo en el cuerpo -ardiente, comprendiendo claramente y atentamente
consciente- dejando atrás los deseos y las aversiones concernientes al mundo. Él mora
contemplando las sensaciones… la mente… las cualidades mentales en las cualidades
mentales -ardiente, comprendiendo claramente y atentamente consciente- dejando atrás los
deseos y las aversiones concernientes al mundo. Al igual que un entrenador de elefantes
coloca un poste en la tierra al cual ata al elefante del bosque por la nuca, con el fin de erradicar
de él los hábitos boscosos, sus recuerdos y resoluciones boscosas, sus distracciones, la fatiga
y la fiebre causadas por su salida del bosque y ayudarle a encontrar deleite en la ciudad e
inculcarle hábitos que congenien con los seres humanos, de la misma manera estos cuatro
fundamentos de la atención consciente atan la consciencia del discípulo del noble, erradican
de él los hábitos del dueño de casa, sus recuerdos y resoluciones del dueño de casa, sus
distracciones, la fatiga y la fiebre causadas por su abandono de la vida del dueño de casa y
le ayudan a alcanzar el método correcto para la realización del Nibbana.

“Entonces, el Tathagata lo entrena más adelante así: ‘Ven, monje, y permanece


contemplando el cuerpo en el cuerpo, pero no concibas ningún pensamiento conectado con
el cuerpo. Permanece contemplando las sensaciones en las sensaciones, pero no concibas
ningún pensamiento conectado con las sensaciones. Permanece contemplando la mente en la
mente, pero no concibas ningún pensamiento conectado con la mente. Permanece
contemplando las cualidades mentales en las cualidades mentales, pero no concibas ningún
pensamiento conectado con las cualidades mentales.”

MN 125

{34} “Monjes, aquellos monjes que son nuevos, los que no hace mucho tiempo abandonaron
[el estilo de vida hogareño], los que recientemente llegaron a ese Dhamma y Disciplina,
deberían ser exhortados, animados y alentados por vosotros, para que desarrollen los cuatro
fundamentos de la atención consciente. ¿De qué manera?
“[Diciendo:] ‘Venid, amigos, permaneced contemplando el cuerpo en el cuerpo,
ardientemente, con clara comprensión y con la mente unificada, clara, concentrada y
enfocada en un solo punto, con el fin de conocer el cuerpo tal como realmente es.
Permaneced contemplado las sensaciones en las sensaciones… Permaneced contemplando
la mente en la mente… Permaneced contemplando los fenómenos mentales en los fenómenos
mentales, ardientemente, con clara comprensión y con la mente unificada, clara, concentrada
y enfocada en un solo punto, con el fin de conocer los fenómenos mentales tal como
realmente son’.

“Monjes, también los monjes que ya están entrenados, pero que aún no han alcanzado la
meta final, los que moran aspirando [todavía] la insuperable seguridad de la esclavitud, ellos
también deberían permanecer contemplando el cuerpo en el cuerpo, ardientemente, con clara
comprensión y con la mente unificada, clara, concentrada y enfocada en un solo punto, con
el fin de conocer el cuerpo tal como realmente es. Deberían permanecer contemplado las
sensaciones en las sensaciones… contemplando la mente en la mente… contemplando los
fenómenos mentales en los fenómenos mentales, ardientemente, con clara comprensión y
con la mente unificada, clara, concentrada y enfocada en un solo punto, con el fin de conocer
los fenómenos mentales tal como realmente son.

“Monjes, aún aquellos monjes que ya son los arahants, cuyas impurezas han sido destruidas,
los que vivieron la vida santa, realizaron lo que estaba por hacerse, echaron abajo la carga,
alcanzaron la meta última, definitivamente destruyeron las cadenas que los ligaban a las
futuras existencias y se liberaron completamente a través del conocimiento final, aún ellos,
monjes, también deberían permanecer contemplando el cuerpo en el cuerpo, ardientemente,
con clara comprensión y con la mente unificada, clara, concentrada y enfocada en un solo
punto, desprendidos del cuerpo. Deberían permanecer contemplado las sensaciones en las
sensaciones… contemplando la mente en la mente… contemplando los fenómenos mentales
en los fenómenos mentales, ardientemente, con clara comprensión y con la mente unificada,
clara, concentrada y enfocada en un solo punto, desprendidos de los fenómenos mentales.

“Así que, monjes, aquellos monjes que son nuevos, los que no hace mucho tiempo
abandonaron [el estilo de vida hogareño], los que recientemente llegaron a ese Dhamma y
Disciplina, deberían ser exhortados, animados y alentados por vosotros, para que desarrollen
los cuatro fundamentos de la atención consciente.”

SN 47,4

{35} Tomando notas. “Monjes, suponed que un tonto, incompetente e inexperto cocinero
se presentó frente del rey o frente de alguno de sus ministros con varias clases de
condimentos: predominantemente agrios, predominantemente amargos, predominantemente
picantes, predominantemente dulces, alcalinos y no alcalinos, salados y sosos.
“Pero, este tonto, incompetente e inexperto cocinero no tomó notas de su maestro sobre lo
que es conveniente en cada caso, pensando: ‘Hoy, este condimento sería preferido por mi
maestro o, él trataría de tomar este otro o aquel o, él tomaría mucho de éste o, él hablaba muy
bien de aquel otro o, este condimento predominantemente agrio sería preferido por mi
maestro o, él trataría de tomar este condimento predominantemente agrio o, él tomaría mucho
de este condimento predominantemente agrio o, él hablaba muy bien de este condimento
predominantemente agrio o, este condimento predominantemente amargo sería preferido por
mi maestro… o, este condimento predominantemente picante sería preferido por mi
maestro… o, este condimento predominantemente dulce sería preferido por mi maestro… o,
este condimento alcalino sería preferido por mi maestro… o, este condimento no alcalino
sería preferido por mi maestro… o, este condimento salado sería preferido por mi maestro…
o, este condimento soso sería preferido por mi maestro… él hablaba muy bien de este
condimento soso’.

“Este tonto, incompetente e inexperto cocinero no ganará regalos de vestimentas, salarios ni


bonificaciones. ¿Y cuál es la razón? Porque este tonto, incompetente e inexperto cocinero no
tomó notas de su maestro sobre lo que es conveniente en cada caso.

“De la misma manera, monjes, un tonto, incompetente e inexperto monje, mora


contemplando el cuerpo en el cuerpo, ardientemente, con clara comprensión,
conscientemente atento, habiendo abandonado la codicia y el desagrado concernientes al
mundo. Mientras permanece contemplando el cuerpo en el cuerpo, su mente no se concentra
y sus obstáculos no son abandonados, pues él no tomó notas sobre lo que es conveniente en
cada caso. Él permanece contemplando las sensaciones en las sensaciones… la mente en la
mente… los fenómenos mentales en los fenómenos mentales, ardientemente, con clara
comprensión, conscientemente atento, habiendo abandonado la codicia y el desagrado
concernientes al mundo. Mientras permanece contemplando los fenómenos mentales en los
fenómenos mentales, su mente no se concentra y sus obstáculos no son abandonados, pues
él no tomó notas sobre lo que es conveniente en cada caso.

“De esta manera, monjes, este tonto, incompetente e inexperto monje no alcanza una
placentera morada en esta vida, tampoco obtiene la atención consciente ni clara comprensión.
¿Y cuál es la razón? Porque este tonto, incompetente e inexperto monje no tomó notas sobre
lo que es conveniente en cada caso.

“Ahora suponed, monjes, que un sabio, competente y experto cocinero se presentó frente del
rey o frente de alguno de sus ministros con varias clases de condimentos: predominantemente
agrios, predominantemente amargos, predominantemente picantes, predominantemente
dulces, alcalinos y no alcalinos, salados y sosos.
“Este sabio, competente y experto cocinero tomó notas de su maestro sobre lo que es
conveniente en cada caso, pensando: ‘Hoy, este condimento sería preferido por mi maestro
[…] él hablaba muy bien de este condimento soso’.

“Este sabio, competente y experto cocinero ganará regalos de vestimentas, salarios y


bonificaciones. ¿Y cuál es la razón? Porque este sabio, competente y experto cocinero tomó
notas de su maestro sobre lo que es conveniente en cada caso.

“De la misma manera, monjes, un sabio, competente y experto monje, mora contemplando
el cuerpo en el cuerpo, ardientemente, con clara comprensión, conscientemente atento,
habiendo abandonado la codicia y el desagrado concernientes al mundo. Mientras permanece
contemplando el cuerpo en el cuerpo, su mente se concentra y sus obstáculos son
abandonados, pues él tomó notas sobre lo que es conveniente en cada caso. Él permanece
contemplando las sensaciones en las sensaciones… la mente en la mente… los fenómenos
mentales en los fenómenos mentales, ardientemente, con clara comprensión,
conscientemente atento, habiendo abandonado la codicia y el desagrado concernientes al
mundo. Mientras permanece contemplando los fenómenos mentales en los fenómenos
mentales, su mente se concentra y sus obstáculos son abandonados, pues él tomó notas sobre
lo que es conveniente en cada caso.

“De esta manera, monjes, este sabio, competente y experto monje alcanza una placentera
morada en esta vida, también obtiene la atención consciente y clara comprensión. ¿Y cuál es
la razón? Porque este sabio, competente y experto monje tomó notas de lo que es conveniente
en cada caso.

SN 47,8

{36} Mente direccionada y no direccionada. “Así es, Ananda, es así mismo: Es de esperar,
Ananda, que cualquiera –sea monje o monja- que permanezca con su mente bien establecida
en los cuatro fundamentos de la atención consciente, perciba los estados de distinción cada
vez más elevados. ¿Cuáles cuatro?

“Este es el caso, Ananda, del monje que mora contemplando el cuerpo en el cuerpo,
ardientemente, con clara comprensión, conscientemente atento, habiendo abandonado la
codicia y el desagrado concernientes al mundo. Mientras permanece contemplando el cuerpo
en el cuerpo, aparecen en él –sobre la base del cuerpo- la fiebre dentro de su cuerpo o el
letargo en su mente, o su mente se vuelve distraída por las cosas externas. Entonces, él debe
enfocar su mente hacia algún tema [de meditación] inspiracional. Cuando él enfoca su mente
hacia algún tema [de meditación] inspiracional, nace en él la alegría. Cuando él es alegre,
nace en él el arrobamiento. Cuando la mente es elevada por el arrobamiento, el cuerpo llega
a serenarse. Alguien, cuyo cuerpo es sereno, experimenta felicidad. La mente de alguien que
es feliz, llega a ser concentrada. Entonces, él reflexiona de esta manera: ‘El propósito por el
cual he enfocado la mente ha sido alcanzado. Voy a retractarme ahora de él’. De modo que
retractada su mente [del tema inspiracional de meditación], deja el pensamiento aplicado y
el pensamiento sostenido. Él entiende esto: ‘sin el pensamiento aplicado y sin el pensamiento
sostenido, internamente consciente y atento, soy feliz’.

“Además, Ananda, el monje mora contemplando las sensaciones en las sensaciones… la


mente en la mente… los fenómenos mentales en los fenómenos mentales, ardientemente, con
clara comprensión, conscientemente atento, habiendo abandonado la codicia y el desagrado
concernientes al mundo. Mientras permanece contemplando los fenómenos mentales en los
fenómenos mentales, aparecen en él –sobre la base de los fenómenos mentales- la fiebre
dentro de su cuerpo o el letargo en su mente, o su mente se vuelve distraída por las cosas
externas. Entonces, él debe enfocar su mente hacia algún tema [de meditación] inspiracional.
Cuando él enfoca su mente hacia algún tema [de meditación] inspiracional, nace en él la
alegría… Él entiende esto: ‘sin el pensamiento aplicado y sin el pensamiento sostenido,
internamente consciente y atento, soy feliz’. Así es, Ananda, el desarrollo mediante el
direccionamiento.

“¿Y cómo es, Ananda, el desarrollo sin el direccionamiento? Este es el caso del monje quien,
no direccionando la mente externamente, entiende esto: ‘Mi mente no está direccionada
externamente’. Además, él entiende: ‘Mi mente está descomprimida adelante y atrás,
liberada y no direccionada’. Entonces, él entiende también esto: ‘Estoy contemplando el
cuerpo en el cuerpo, ardientemente, con clara comprensión y conscientemente atento; soy
feliz’.

“También, Ananda, el monje, no direccionando la mente externamente, entiende esto: ‘Mi


mente no está direccionada externamente’. Además, él entiende: ‘Mi mente está
descomprimida adelante y atrás, liberada y no direccionada’. Entonces, él entiende también
esto: ‘Estoy contemplando las sensaciones en las sensaciones… la mente en la mente… los
fenómenos mentales en los fenómenos mentales, ardientemente, con clara comprensión y
conscientemente atento; soy feliz’. Así es, Ananda, el desarrollo sin el direccionamiento. “De
esta manera, Ananda, yo he enseñando el desarrollo mediante el direccionamiento y el
desarrollo sin direccionamiento. Ananda, todo lo que un maestro podría hacer por sus
discípulos, movido por la compasión por ellos y procurando su bienestar, yo he hecho por
vosotros. He allí, la raíz de un árbol y allá una casa vacía. Practica jhanas, Ananda, no seas
negligente; no sea que, más tarde, te arrepientas. Estas son nuestras instrucciones para ti”.

Cuando esto fue dicho por el Bienaventurado, el Venerable Ananda se elevó y se deleitó en
las palabras del Bienaventurado.

SN 47,8
{37} Dominio propio 1. "Bhikkhus, una vez en el pasado un halcón se lanzó súbitamente y
agarró a una codorniz. Después, bhikkhus, mientras estaba siendo llevada por el halcón, la
codorniz se lamentó así: 'Nosotros somos desafortunados; nosotros tenemos poco mérito;
nosotros hemos andado fuera de nuestro dominio, en el dominio de otros. Si hoy nosotros
hubiéramos andado en nuestro dominio, en nuestro dominio ancestral, este halcón no hubiese
podido en esta batalla'. '¿Codorniz, cuál es tu propio dominio, tu dominio ancestral?' 'Los
intersticios entre los terrones de tierra en los campos arados'. Después, bhikkhus, el halcón,
confiado de su propia fuerza, orgulloso de su propia fuerza, liberó a la codorniz. 'Ve tú
codorniz, aun en ese lugar no te escapas de mí'.

"Después, bhikkhus, la codorniz, habiendo ido a los intersticios entre los terrones de tierra
en los campos arados, se subió a un gran terrón y estando allí parada le dijo al halcón: 'Ven
ahora por mí halcón; ven ahora por mí halcón'. Después, bhikkhus, ese halcón, confiado de
su propia fuerza, orgulloso de su propia fuerza, habiendo plegado ambas alas, se lanzó
súbitamente hacia la codorniz. Cuando bhikkhus, la codorniz comprendió, 'este halcón está
cerca', desapareció dentro de ese mismo terrón de tierra. Entonces, bhikkhus, el halcón se
estrelló con su pecho allí mismo. De la misma manera, bhikkhus, le ocurre a aquel que anda
fuera de su dominio, en el dominio de otros.

"Por lo tanto, bhikkhus, no andéis fuera de vuestro domino, en el dominio de otros.


Bhikkhus, Māra tendrá una oportunidad hacia aquellos que andan fuera de su dominio, en el
dominio de otros; Māra obtendrá un objeto. ¿Y cuál, bhikkhus, no es el dominio de un
bhikkhu sino el dominio de otros? Estas cinco cuerdas de la sensualidad. ¿Cuáles cinco? Las
formas cognoscibles por el ojo que son deseables, deleitables, agradables, atrayentes,
satisfacientes, seductoras. Los sonidos cognoscibles por el oído... Los olores cognoscibles
por la nariz... Los sabores cognoscibles por la lengua... Los tactos cognoscibles por el cuerpo
que son deseables, deleitables, agradables, atrayentes, satisfacientes, seductores. Éste,
bhikkhus, no es el dominio de un bhikkhu sino el dominio de otros.

"Bhikkhus, andad en vuestro propio dominio, en vuestro dominio ancestral. Bhikkhus, Māra
no tendrá una oportunidad hacia aquellos que andan en su propio dominio, en su dominio
ancestral; Māra no obtendrá un objeto. ¿Y cuál, bhikkhus, es el propio dominio de un
bhikkhu, su dominio ancestral? Estos cuatro establecimientos de la atención. ¿Cuáles cuatro?
Aquí, bhikkhus, un bhikkhu mora contemplando el cuerpo en el cuerpo, enérgico,
comprendiendo claramente y atento, removiendo la codicia y la pena en el mundo. Mora
contemplando las sensaciones... Mora contemplando la conciencia... Mora contemplando los
dhammas en los dhammas, enérgico, comprendiendo claramente y atento, removiendo la
codicia y la pena en el mundo. Éste, bhikkhus, es el dominio del bhikkhu, su dominio
ancestral".

SN 47,6
{38} Dominio propio 2. "Hay, bhikkhus, en el Himalaya, el rey de las montañas, lugares
escabrosos, inaccesibles, donde ni los monos ni los humanos andan. Hay, bhikkhus, en el
Himalaya, el rey de las montañas, lugares escabrosos, inaccesibles, donde los monos andan,
no los humanos. Hay, bhikkhus, en el Himalaya, el rey de las montañas, lugares parejos,
deliciosos, donde tanto los monos como los humanos andan. Allí, bhikkhus, en los lugares
frecuentados por los monos, los cazadores colocan trampas con pegamento resinoso.

"Allí, bhikkhus, esos monos que no son ni estúpidos ni codiciosos, habiendo visto ese
pegamento resinoso, se mantienen alejados del mismo. Pero el mono que es estúpido y
codicioso, habiéndose acercado al pegamento resinoso, lo agarra con una mano. Él ahí se
queda pegado. Pensando, 'liberaré mi mano', lo agarra con la segunda mano. Él ahí se queda
pegado. Pensando, 'liberaré ambas manos', lo agarra con la pata. Él ahí se queda pegado.
Pensando, 'liberaré ambas manos y la pata', lo agarra con la segunda pata. Él ahí se queda
pegado. Pensando, 'liberaré ambas manos y patas', lo agarra con el hocico. Él ahí se queda
pegado. De esta manera, bhikkhus, este mono, atrapado en cinco lugares, yace chillando; ha
caído en el infortunio y la desgracia, quedando a la merced de los deseos del cazador.
"Bhikkhus, este cazador, habiéndolo espetado, lo asa en un fuego de leña y va a donde quiere.
De la misma manera, bhikkhus, es para aquel que anda fuera de su dominio, en el dominio
de otros...

SN 47,7

{39} Atención consciente en el cuerpo. “¿Y qué es, monjes, la falta de restricción? Este es
el caso del monje que, habiendo visto las formas con los ojos se obsesiona con las formas
placenteras y se repele con las formas repulsivas. Él mora sin establecer la atención
consciente en el cuerpo, con la mente limitada y sin entender cómo es la verdadera liberación
de la mente, liberación a través de la sabiduría, en la cual aquellos malos e insaludables
estados mentales cesan por completo. Habiendo escuchado los sonidos con los oídos…
Habiendo olido los olores con la nariz… Habiendo degustado los sabores con la lengua…
Habiendo sentido las sensaciones táctiles con el cuerpo… Habiendo conocido las
construcciones mentales con la mente, se obsesiona con las construcciones mentales
placenteras y se repele con las construcciones mentales repulsivas. Él mora sin establecer la
atención consciente en el cuerpo, con la mente limitada y sin entender cómo es la verdadera
liberación de la mente, liberación a través de la sabiduría, en la cual aquellos malos e
insaludables estados mentales cesan por completo.

“Suponed, monjes, que un hombre capturó seis animales de diferentes especies y


provenientes de los diferentes hábitat, y los ató con una fuerte soga. Capturó a una serpiente,
un cocodrilo, un pájaro, un perro, un jacal y un mono, y a cada uno de ellos los ató con una
fuerte soga. Habiendo echo esto, juntó las sogas de cada animal e hizo un nudo en el medio,
dejándolos libres.
“Entonces, estos seis animales de diferentes especies, provenientes de diferentes hábitat,
empezaron a empujar, cada uno hacia su propio dominio y su propio hábitat. La serpiente
empujaba pensando: ‘Voy a ir hacia el hormiguero’. El cocodrilo emulaba hacia otro lado
pensando: ‘Voy a entrar en al agua’. El pájaro empujaba pensando: ‘Voy a volar en el aire’.
El perro empujaba pensando: ‘Voy a entrar en el pueblo’. El jacal empujaba pensando: ‘Voy
a entrar en el cementerio’. El mono empujaba pensando: ‘Voy a entrar al bosque’. Entonces,
estos seis animales pronto estarían exhaustos y agotados, de modo que tendrían que
someterse al dominio de aquel de ellos que fuera el más fuerte.

“De la misma manera, monjes, cuando el monje no practica ni desarrolla la atención


consciente en el cuerpo, sus ojos lo empujan a desear la formas agradables y repeler las
formas desagradables; sus oídos lo empujan a desear los sonidos agradables y repeler los
sonidos desagradables; la nariz lo empuja a desear los aromas agradables y repeler los olores
desagradables; la lengua lo empuja a desear los sabores agradables y repeler los sabores
desagradables; el cuerpo lo empuja a desear las sensaciones táctiles agradables y repeler las
sensaciones táctiles desagradables; la mente lo empuja a desear las construcciones mentales
agradables y repeler las construcciones mentales desagradables. Esto es, monjes, la falta de
restricción.

“¿Y qué es, monjes, la restricción? Este es el caso del monje que, habiendo visto las formas
con los ojos no se obsesiona con las formas placenteras ni se repele con las formas repulsivas.
Él mora, habiendo establecido la atención consciente en el cuerpo, con la mente ilimitada,
entendiendo cómo es la verdadera liberación de la mente, liberación a través de la sabiduría,
en la cual aquellos malos e insaludables estados mentales cesan por completo. Habiendo
escuchado los sonidos con los oídos… Habiendo olido los olores con la nariz…
Habiendo degustado los sabores con la lengua… Habiendo sentido las sensaciones táctiles
con el cuerpo… Habiendo conocido las construcciones mentales con la mente, no se
obsesiona con las construcciones mentales placenteras ni se repele con las construcciones
mentales repulsivas. Él mora, habiendo establecido la atención consciente en el cuerpo, con
la mente ilimitada, entendiendo cómo es la verdadera liberación de la mente, liberación a
través de la sabiduría, en la cual aquellos malos e insaludables estados mentales cesan por
completo.

“Suponed, monjes, que un hombre capturó seis animales de diferentes especies y


provenientes de los diferentes hábitat, y los ató con una fuerte soga. Capturó a una serpiente,
un cocodrilo, un pájaro, un perro, un jacal y un mono, y a cada uno de ellos los ató con una
fuerte soga. Habiendo echo esto, juntó las sogas de cada animal y los ató a un fuerte poste o
pilar.

“Entonces, estos seis animales de diferentes especies, provenientes de diferentes hábitat,


empezaron a empujar, cada uno hacia su propio dominio y su propio hábitat. La serpiente
empujaba pensando: ‘Voy a ir hacia el hormiguero’. El cocodrilo emulaba hacia otro lado
pensando: ‘Voy a entrar en al agua’. El pájaro empujaba pensando: ‘Voy a volar en el aire’.
El perro empujaba pensando: ‘Voy a entrar en el pueblo’. El jacal empujaba pensando: ‘Voy
a entrar en el cementerio’. El mono empujaba pensando: ‘Voy a entrar al bosque’. Entonces,
estos seis animales pronto estarían exhaustos y agotados, de modo que tendrían que sentarse
ahí, no pudiendo salir de este lugar.

“De la misma manera, monjes, cuando el monje practica y desarrolla la atención consciente
en el cuerpo, sus ojos no lo empujan a desear la formas agradables ni repeler las formas
desagradables; sus oídos no lo empujan a desear los sonidos agradables ni repeler los sonidos
desagradables; la nariz no lo empuja a desear los aromas agradables ni repeler los olores
desagradables; la lengua no lo empuja a desear los sabores agradables ni repeler los sabores
desagradables; el cuerpo no lo empuja a desear las sensaciones táctiles agradables ni repeler
las sensaciones táctiles desagradables; la mente no lo empuja a desear las construcciones
mentales agradables ni repeler las construcciones mentales desagradables. Esto es, monjes,
la restricción.

“Monjes, con la figura del ‘fuerte poste o pilar’ se designa aquí la atención consciente en el
cuerpo. De modo que, monjes, deberíais entrenaros de esta manera: ‘Vamos a practicar y
desarrollar la atención consciente en el cuerpo, vamos a hacer de ella nuestro vehículo, vamos
a establecernos en ella, vamos a ejercitarnos en ella y vamos a perfeccionarla
completamente’. De esta manera, deberíais entrenaros, monjes, a vosotros mismos.”
SN 35,247

{40} “Suponed, monjes, que se escuche una voz de la muchedumbre que grite: ‘¡La más
bella muchacha del país! ¡La más bella muchacha del país!’ Ahora bien, aquella muchacha
más bella del país sabe bailar y cantar exquisitamente. Entones, se escucha esto: ‘¡La más
bella muchacha del país está danzando! ¡La más bella muchacha del país está cantando!’
Después de lo cual, número de la muchedumbre reunida en este lugar se acrecienta aún.
Ahora suponed que en el mismo tiempo esté pasando por ahí un hombre que desea la vida y
no quiere morir, uno que desea ser feliz y no quiere sufrir. Y alguien se dirige a este hombre
con las siguientes palabras: ‘Buen hombre, tienes que llevar ahora este tazón lleno de aceite
sobre tu cabeza entre esta muchedumbre reunida para ver la muchacha más bella del país.
He aquí que un hombre con la espada desvainada caminará detrás de ti, y cuando tú derrames,
aunque sea una gota de aceite, te cortará la cabeza’.

“¿Qué pensáis, monjes, dejaría este hombre a atender el tazón lleno de aceite puesto en su
cabeza para distraerse y mirar a algo externo?” “No, venerable señor”. “Yo os ofrecí este
símil, monjes, para conduciros a que descubráis su significado que es este: el tazón lleno de
aceite significa la atención consciente en el cuerpo. De modo que, monjes, deberíais
entrenaros de esta manera: ‘Vamos a practicar y desarrollar la atención consciente en el
cuerpo, vamos a hacer de ella nuestro vehículo, vamos a establecernos en ella, vamos a
ejercitarnos en ella y vamos a perfeccionarla completamente’. De esta manera, deberíais
entrenaros, monjes, a vosotros mismos.”

SN 47,20

{41} Con la atención consciente inmersa en el cuerpo

Bien establecida,

Restringiendo la séxtuple base de los sentidos,

Siempre concentrado,

El monje puede alcanzar el Nibbana por sí mismo.

Ud 3,5

{42} El que domina el gran océano su conocimiento abarca cualquier río que fluye hacia el
océano. De la misma manera, cualquiera que desarrolla y lleva a cabo la atención consciente
inmersa en el cuerpo abarca cualquier cualidad saludable que pueda haber en el lado de la
clara comprensión.

Cuando se practica una cosa y se la llueva a cabo, el cuerpo se calma, la mente se calma, el
pensar y evaluar se para y todas las cualidades mentales por el lado de la clara compresión
se dirigen hacia la culminación de su desarrollo. Y, ¿cuál es esta cosa? La atención consciente
sumergida en el cuerpo.

Cuando se practica una cosa y se la llueva a cabo, se abandona la ignorancia, surge la clara
comprensión, el concepto de "yo soy" es abandonado, las obsesiones se desarraigan y se
abandona las cadenas. Y, ¿cuál es esta cosa? La atención consciente sumergida en el cuerpo.

Aquellos que no gustaron la atención consciente en el cuerpo, no gustaron lo Inmortal.


Aquellos que gustaron la atención consciente en el cuerpo, gustaron lo Inmortal.

Aquellos que son negligentes en la atención consciente en el cuerpo son negligentes con lo
Inmortal.

Aquellos que comprenden la atención consciente en el cuerpo comprenden lo Inmortal.

AN 1.225, 227, 230, 235, 239, 245


{43} “Monjes, he aquí los cuatro fundamentos de la atención consciente. ¿Cuáles cuatro?
Este es el caso, monjes, del monje que mora contemplando el cuerpo en el cuerpo –
ardientemente, con clara comprensión, atentamente consciente- habiendo abandonado tanto
la codicia como la repulsión concernientes al mundo. Mientras él permanece así,
contemplando el cuerpo en el cuerpo, cualquier deseo que hubiese tenido previamente con
respecto al cuerpo, desaparece. Al abandonar el deseo concerniente al cuerpo, él alcanza lo
Inmortal.

“Además, monjes, el mora contemplando las sensaciones en las sensaciones… la mente en


la mente… las construcciones mentales en las construcciones mentales -ardientemente, con
clara comprensión, atentamente consciente- habiendo abandonado tanto la codicia como la
repulsión concernientes al mundo. Mientras él permanece así, contemplando las
construcciones mentales en las construcciones mentales, cualquier deseo que hubiese tenido
previamente con respecto a las construcciones mentales, desaparece. Al abandonar el deseo
concerniente a las construcciones mentales, él alcanza lo Inmortal.

SN 47,37

{44} “Imagina, Ananda, que en el medio del cruce de caminos hay un gran montículo de
tierra, de modo que si un carro o un carruaje llegara ahí del este, oeste, norte o sur, podría
allanar este gran montículo de tierra. De la misma manera, Ananda, cuando el monje mora
contemplando el cuerpo en el cuerpo, las sensaciones en las sensaciones, la mente en la mente
y los fenómenos en los fenómenos, allana a los malos e insalubres estados”.
SN 54,10
{45} Mientras el Venerable Anuruddha estaba morando sólo en la reclusión, surgió en su
mente el siguiente pensamiento: “Aquellos que son negligentes en estos cuatro fundamentos
de la atención consciente, también son negligentes en el Noble Óctuple Sendero que lleva a
la completa destrucción del sufrimiento. Aquellos que están comprometidos con los cuatro
fundamentos de la atención consciente, también están comprometidos con el Noble Óctuple
Sendero que lleva a la completa destrucción del sufrimiento”.

Entonces, el Venerable Mahamoggallana, habiendo conocido con su propia mente la


reflexión que surgió en la mente del Venerable Anuruddha, rápidamente –como un hombre
fuerte que extiende su brazo o baja su brazo extendido- apareció en la presencia del
Venerable Anuruddha y le dijo:

“¿En qué grado, amigo Anuruddha, el monje debe comprometerse con estos cuatros
fundamentos de la atención consciente?”

“Este es el caso, amigo, del monje que mora contemplando la naturaza del origen del cuerpo
internamente; él mora contemplando la naturaleza del desvanecimiento del cuerpo
internamente; él mora contemplando la naturaleza del origen y del desvanecimiento del
cuerpo internamente –ardientemente, con clara comprensión, conscientemente atento-
habiendo abandonado tanto el deseo como el desagrado concernientes al mundo.

“Él mora contemplando la naturaza del origen del cuerpo externamente; él mora
contemplando la naturaleza del desvanecimiento del cuerpo externamente; él mora
contemplando la naturaleza del origen y del desvanecimiento del cuerpo externamente –
ardientemente, con clara comprensión, conscientemente atento- habiendo abandonado tanto
el deseo como el desagrado concernientes al mundo.

“Él mora contemplando la naturaza del origen del cuerpo interna y externamente; él mora
contemplando la naturaleza del desvanecimiento del cuerpo interna y externamente; él mora
contemplando la naturaleza del origen y del desvanecimiento del cuerpo interna y
externamente –ardientemente, con clara comprensión, conscientemente atento- habiendo
abandonado tanto el deseo como el desagrado concernientes al mundo.

“Si él se propusiera esto: ‘Voy a morar percibiendo lo repulsivo en lo no repulsivo’, entonces


estaría percibiendo lo repulsivo en no repulsivo. Si él se propusiera esto: ‘Voy a morar
percibiendo lo no repulsivo en lo repulsivo’, entonces estaría percibiendo lo no repulsivo en
lo repulsivo. Si él se propusiera esto: ‘Voy a morar percibiendo lo repulsivo en lo no
repulsivo y en lo repulsivo’, entonces estaría percibiendo lo repulsivo en lo no repulsivo y
en lo repulsivo. Si él se propusiera esto: ‘Voy a morar percibiendo lo no repulsivo en lo
repulsivo y en lo no repulsivo’, entonces estaría percibiendo lo no repulsivo en lo repulsivo
y en lo no repulsivo. Si él se propusiera esto: ‘Evitando a ambos –lo no repulsivo y lo
repulsivo- voy a morar ecuánime, atentamente consciente y con clara comprensión’,
entonces, estaría morando ecuánimemente, atentamente consciente y con clara comprensión.

“Él mora contemplando la naturaza del origen de las sensaciones internamente… la


naturaleza del desvanecimiento de las sensaciones internamente… la naturaleza del origen y
del desvanecimiento de las sensaciones internamente… de las sensaciones externamente…
de las sensaciones interna y externamente –ardientemente, con clara comprensión,
conscientemente atento- habiendo abandonado tanto el deseo como el desagrado
concernientes al mundo.

“Si él se propusiera esto: ‘Voy a morar percibiendo lo repulsivo en lo no repulsivo’, entonces


estaría percibiendo lo repulsivo en no repulsivo… Si él se propusiera esto: ‘Evitando a ambos
–lo no repulsivo y lo repulsivo- voy a morar ecuánime, atentamente consciente y con clara
comprensión’, entonces, estaría morando ecuánimemente, atentamente consciente y con
clara comprensión.

“Él mora contemplando la naturaza del origen de la mente internamente… la naturaleza del
desvanecimiento de la mente internamente… la naturaleza del origen y del
desvanecimiento de la mente internamente… de la mente externamente… de la mente
interna y externamente –ardientemente, con clara comprensión, conscientemente atento-
habiendo abandonado tanto el deseo como el desagrado concernientes al mundo.

“Si él se propusiera esto: ‘Voy a morar percibiendo lo repulsivo en lo no repulsivo’, entonces


estaría percibiendo lo repulsivo en no repulsivo… Si él se propusiera esto: ‘Evitando a ambos
–lo no repulsivo y lo repulsivo- voy a morar ecuánime, atentamente consciente y con clara
comprensión’, entonces, estaría morando ecuánimemente, atentamente consciente y con
clara comprensión.

“Él mora contemplando la naturaza del origen de las construcciones mentales


internamente… la naturaleza del desvanecimiento de las construcciones mentales
internamente… la naturaleza del origen y del desvanecimiento de las construcciones
mentales internamente… de las construcciones mentales externamente… de las
construcciones mentales interna y externamente –ardientemente, con clara comprensión,
conscientemente atento- habiendo abandonado tanto el deseo como el desagrado
concernientes al mundo.

“Si él se propusiera esto: ‘Voy a morar percibiendo lo repulsivo en lo no repulsivo’, entonces


estaría percibiendo lo repulsivo en no repulsivo… Si él se propusiera esto: ‘Evitando a ambos
–lo no repulsivo y lo repulsivo- voy a morar ecuánime, atentamente consciente y con clara
comprensión’, entonces, estaría morando ecuánimemente, atentamente consciente y con
clara comprensión {98, 101}.

“De esta manera, amigo, el monje debe comprometerse con estos cuatros fundamentos de la
atención consciente”.

SN 52,1

{46} “Monjes, es bueno para el monje que de tanto en tanto permanezca contemplando lo
repulsivo en presencia de lo que no es repulsivo. Es bueno para el monje que de tanto en
tanto permanezca contemplando lo no repulsivo en presencia de lo que es repulsivo. Es bueno
para el monje que de tanto en tanto permanezca contemplando lo repulsivo en presencia de
lo que no es repulsivo y lo que es repulsivo. Es bueno para el monje que de tanto en tanto
permanezca contemplando lo no repulsivo en presencia de lo que es repulsivo y de lo que no
es repulsivo. Es bueno para el monje que de tanto en tanto –en presencia de lo que es
repulsivo y lo que no es repulsivo- apartado de ambos, permanezca ecuánime, alerta y
atentamente consciente.

“Ahora bien, monjes, ¿con qué propósito debería el monje permanecer contemplando lo
repulsivo en presencia de lo que no es repulsivo? ‘Que no surja en mí la pasión en presencia
de objetos que excitan a la pasión’. Éste es el propósito, monjes, por el cual el monje debería
permanecer contemplando lo repulsivo en presencia de lo que no es repulsivo.

“¿Y con qué propósito, monjes, debería el monje permanecer contemplando lo no repulsivo
en presencia de lo que es repulsivo? ‘Que no surja en mí la aversión en presencia de objetos
que excitan a la aversión’. Éste es el propósito, monjes, por el cual el monje debería
permanecer contemplando lo no repulsivo en presencia de lo que es repulsivo.

“¿Y con qué propósito, monjes, debería el monje permanecer contemplando lo repulsivo en
presencia de lo que no es repulsivo y lo que es repulsivo? ‘Que no surja en mí la pasión en
presencia de objetos que excitan la pasión. Que no surja en mí la aversión en presencia de
objetos que excitan la aversión’. Éste es el propósito, monjes, por el cual el monje debería
permanecer contemplando lo repulsivo en presencia de lo que no es repulsivo y lo que es
repulsivo. “¿Y con qué propósito, monjes, debería el monje permanecer contemplando lo no
repulsivo en presencia de lo que es repulsivo y lo que no es repulsivo? ‘Que no surja en mí
la aversión en presencia de objetos que excitan la aversión. Que no surja en mí la pasión en
presencia de objetos que excitan la pasión’. Éste es el propósito, monjes, por el cual el monje
debería permanecer contemplando lo repulsivo en presencia de lo que no es repulsivo y lo
que es repulsivo. “¿Y con qué propósito, monjes, el monje –en presencia de lo que es
repulsivo y lo que no es repulsivo- apartado de ambos, debería permanecer ecuánime, alerta
y atentamente consciente? ‘Que no surja en mí la pasión –de ningún objeto, en ningún lugar,
de ninguna manera- en presencia de objetos que excitan la pasión. Que no surja en mí la
aversión –de ningún objeto, en ningún lugar, de ninguna manera- en presencia de objetos que
excitan la aversión. Que no surja en mí la falsa ilusión –de ningún objeto, en ningún lugar,
de ninguna manera- en presencia de objetos que excitan la falsa ilusión’. Éste es el propósito,
monjes, por el cual el monje –en presencia de lo que es repulsivo y lo que no es repulsivo-
apartado de ambos, debería permanecer ecuánime, alerta y atentamente consciente.”

AN 5,144

{47} Protegiendose a uno mismo y a otros. “Monjes, una vez en el pasado, un acróbata
levantó un poste de bambú y se dirigió a su aprendiz de nombre Medakathalika con estas
palabras: ‘Ven, querido Medakathalika, trepa al poste de bambú y colócate sobre mis
hombros’. ‘Sí, maestro’, respondió el aprendiz Medakathalika y trepó sobre el poste bambú
y se colocó sobre los hombros de su maestro.

“Entonces, el acróbata dijo al aprendiz Medakathalika: ‘Ahora, querido Medakathalika, tú


cuida de mí y yo cuidaré de ti. De esta manera, cuidándonos uno al otro, protegiéndonos uno
al otro, vamos a mostrar nuestras destrezas, vamos a recoger nuestra paga y descenderemos
a salvo del poste de bambú’.
“Cuando esto fue dicho, el aprendiz Medakathalika respondió: ‘Esta no es la manera de
hacerlo, maestro. Tú, cuídate a ti mismo, maestro y yo cuidaré de mí. De esta manera,
cuidándonos cada uno a sí mismo, protegiéndonos cada uno a sí mismo, vamos a mostrar
nuestras destrezas, vamos a recoger nuestra paga y descenderemos a salvo del poste de
bambú’. “Y éste es el método aquí”, dijo el Bienaventurado. “Es así cómo el aprendiz
Medakathalika dijo a su maestro. ‘Yo cuidaré de mi mismo’, monjes: así debe ser practicado
el fundamento de la atención consciente. ‘Yo cuidaré de otros’, monjes: así debe ser
practicado el fundamento de la atención consciente. Cuidando a uno mismo, monjes, uno
cuida de otros y cuidando de otros, uno cuida de sí mismo.

“¿Y cómo, monjes, cuando uno cuida de sí mismo, cuida también de otros? Practicando,
desarrollando y cultivando [los cuatro fundamentos de la atención consciente]. De esta
manera, monjes, cuando uno cuida de sí mismo, cuida también de otros.

“¿Y cómo, monjes, cuando uno cuida de otros, se cuida también a sí mismo? Siendo paciente,
no perjudicando a nadie, practicando el amor y la compasión. De esta manera, monjes,
cuando uno cuida de otros, se cuida también a sí mismo. “De modo que, monjes, deberíais
practicar el fundamento de la atención consciente así:
‘Voy a cuidar de mí mismo’. Y también, monjes, deberíais practicar el fundamento de la
atención consciente así: ‘Voy a cuidar de otros’. Cuidando a uno mismo, monjes, uno cuida
de otros y cuidando de otros, uno cuida de sí mismo.

SN 47,19

{48} Mientras transcurría esta temporada lluviosa, el Bienaventurado fue atacado por una
severa enfermedad, con dolores tan agudos, que parecía que estaba a punto de morir. Pero el
Bienaventurado lo enfrentó con la atención consciente y con una mente clara e impasible.

Y se le ocurrió el siguiente pensamiento: "Ciertamente, no sería apropiado que llegase ahora


mi pase final, sin que me dirija por última vez a mis seguidores y pida permiso al Sangha de
los monjes. Necesito sobreponerme a esta enfermedad con la fuerza de voluntad y determinar
la continuación del proceso vital para seguir viviendo".

Entonces hizo así y su enfermedad se disipó.

En esta ocasión, el Bienaventurado, habiéndose recuperado de su enfermedad, tan pronto se


haya sentido mejor, salió afuera y se sentó en el asiento preparado para él frente a su vivienda.
Entonces, el Venerable Ananda llegó junto a él, lo saludó respetuosamente, se sentó a un
lado y dijo: "¡Me siento muy afortunado, Venerable Señor, al ver al Bienaventurado otra vez
confortable! ¡Qué afortunado soy, al ver al Bienaventurado, recuperado! ¡Es grato, Venerable
Señor, verle otra vez aliviado! Por cierto, mientras estuve viendo al Bienaventurado enfermo,
era como si mi propio cuerpo llegara a ser débil y enredado, todas las cosas a mi alrededor
oscurecieron y mis sentidos me fallaron. Lo único confortable que tenía, era pensar que el
Bienaventurado no iba a realizar su pase final, sin antes ofrecer instrucciones al Sangha de
los monjes".

Así habló el Venerable Ananda, pero el Bienaventurado le respondió con estas palabras:
"¿Qué más puede esperar de mí el Sangha de los monjes, Ananda? Yo había enseñando el
Dhamma sin miramientos, para que nada resultara esotérico o no manifiesto: en cuanto a la
doctrina se refiere, el Tataghata nada dejó oculto, como si lo pusiera en un puño cerrado. Si
estuviera alguien que pensara: 'yo me haré cargo del Sangha' o 'el Sangha depende de mí, me
pertenece', entonces, esta persona sí, debería ofrecer las instrucciones al Sangha. Sin
embargo, Ananda, en el Tathagata, semejantes pensamientos no tienen lugar, ¿cómo
entonces, podría el Tathagata aún ofrecer las instrucciones al Sangha?

"Yo ya soy débil, Ananda, entrado en edad, envejecido y venerable; soy alguien que ha
atravesado ya el camino de la vida. He llegado al tope del espacio vital, el cual es de ochenta
años. Y, al igual que una vieja carreta se sujeta con las correas para que no se deshaga, así
también, el cuerpo del Tataghata está sujetado para que permanezca unido. Es solamente
cuando el Tataghata aparta la atención de los signos externos, cesan ciertas sensaciones y
cuando permanece en la concentración mental sin signos, este cuerpo se siente más
confortable.

"Por lo tanto, Ananda, sé tú mismo una isla para ti, sé tu propio refugio y que no haya nadie
más que sea tu refugio; con el Dhamma como tu único refugio. Y ¿cómo hace el monje
para que se convierta en una isla para sí mismo, para que sea su propio refugio y no tenga
nadie más que sea su refugio, con el Dhamma como su único refugio?

"Es cuando el monje permanece contemplando el cuerpo en el cuerpo, diligentemente,


claramente consciente, atento, habiendo dejado atrás el deseo y la pena concernientes al
mundo. Es también cuando permanece contemplando las sensaciones en las sensaciones... la
mente en la mente... las formaciones mentales en las formaciones mentales, diligentemente,
claramente consciente, atento, habiendo dejado atrás el deseo y la pena concernientes al
mundo. Es así, como el monje se hace una isla para sí mismo, se hace su propio refugio y no
tiene nadie más que sea su refugio; con el Dhamma como su único refugio.

"Aquellos monjes míos, Ananda, que ahora o después de mi partida, permanezcan como sus
propias islas, sean su propio refugio sin que tengan a nadie más que sea su refugio, con el
Dhamma como su único refugio, ellos alcanzarán lo más alto, si es que tengan deseo de
aprender".
Pasajes del Canon Pali {49-62}

{49} “Monjes, he aquí que existen estos cuatro correctos esfuerzos. ¿Cuáles cuatro? Este es
el caso, monjes, del monje que genera el deseo de que no surjan los malos y perjudiciales
estados mentales que aún no han surgido. Él genera el deseo de abandonar los malos y
perjudiciales estados mentales que ya han surgido. Él genera el deseo de que surjan los
saludables estados mentales que aún no han surgido. Él genera el deseo de que permanezcan
los saludables estados mentales que ya han surgido, que los mismos no decaigan sino que
incrementen, se expandan, lleguen a su máximo desarrollo y cumplimiento. Él hace este
esfuerzo, pone en él su energía y a él aplica su mente y su fortaleza.

“Monjes, al igual que el río Ganges se dirige, se orienta y se inclina hacia el este, así también
el monje que desarrolla y cultiva los cuatro correctos esfuerzos, se dirige, se orienta y se
inclina hacia el Nibbana."

SN 49,1

{50} “Monjes. He aquí que existen estos cuatro esfuerzos. ¿Cuáles cuatro? El esfuerzo de
restringir, el esfuerzo de abandonar, el esfuerzo de hacer surgir y el esfuerzo de cuidar.

“¿Y en qué consiste, monjes, el esfuerzo de restringir? Este es el caso del monje que viendo
un objeto con el ojo, no se apega a él, ni en su aspecto general ni en alguno de sus detalles.
Si él permaneciera con la facultad del ojo irrestricta, entonces los malos y perjudiciales
estados mentales, como la avaricia o la aversión, lo hubiesen asaltado. Pero, como él
permanece restringiendo la facultad del ojo, alcanza el control sobre ella.

Escuchando el sonido con el oído… Oliendo el olor con la nariz… saboreando el sabor con
la lengua… sintiendo la sensación táctil con el cuerpo… conociendo la construcción mental
con la mente, no se apega a ella, ni en su aspecto general ni en alguno de sus detalles. Si él
permaneciera con la facultad de la mente irrestricta, entonces los malos y perjudiciales
estados mentales, como la avaricia o la aversión, lo hubiesen asaltado. Pero, como él
permanece restringiendo la facultad de la mente, alcanza el control sobre ella. Esto es,
monjes, lo que se llama ‘el esfuerzo de restringir’.

“¿Y en qué consiste, monjes, el esfuerzo de abandonar? Este es el caso del monje que no
admite los pensamientos sensuales, sino que los abandona, los expulsa, los lleva a su fin y
no permite que reaparezcan. Él tampoco admite los pensamientos maliciosos… tampoco
admite los pensamientos crueles… no admite al malo y perjudicial estado mental alguno que
surja en él, sino que lo abandona, lo expulsa, lo lleva a su fin y no permite que reaparezca.
Esto es, monjes, lo que se llama ‘el esfuerzo de abandonar’.
“¿Y en qué consiste, monjes, el esfuerzo de hacer surgir? Este es el caso del monje que
desarrolla la atención consciente como factor de Iluminación, resultado de la reclusión,
desapasionamiento, el cese y el abandono. Él desarrolla la investigación de las cualidades
como factor de Iluminación… la energía como factor de Iluminación… el arrobamiento
como factor de Iluminación… la tranquilidad como factor de Iluminación… la concentración
como factor de Iluminación… la ecuanimidad como factor de Iluminación, resultado de la
reclusión, desapasionamiento, el cese y el abandono. Esto es, monjes, lo que se llama ‘el
esfuerzo de hacer surgir’.

“¿Y en qué consiste, monjes, el esfuerzo de cuidar? Este es el caso del monje que mantiene
el favorable objeto de concentración: la contemplación del esqueleto, la contemplación del
cuerpo carcomido, la contemplación del cuerpo lívido, la contemplación del cuerpo
descompuesto, la percepción del cuerpo inflado. Esto es, monjes, lo que se llama ‘el esfuerzo
de cuidar’.

“Éstos son, monjes, los cuatro esfuerzos”.

Restringiendo y abandonando, Haciendo

surgir y cuidando:

Éstos son los cuatro esfuerzos

Enseñados por el Pariente del Sol.

El monje que se aplica

Ardientemente a ellos

Alcanza el fin

Del sufrimiento.

AN 4,14

{51} “Monjes, yo afirmo que la destrucción de las impurezas es para alguien que conoce y
ve, no para alguien que no conoce ni tampoco ve. ¿Qué conoce y qué ve? La atención
apropiada y la atención no apropiada. Cuando uno atiende inapropiadamente, entonces las
impurezas que aún no surgieron, surgen y las que ya surgieron, se acrecientan. Pero cuando
uno atiende apropiadamente, entonces las impurezas que aún no surgieron, no surgen y las
que ya surgieron, son abandonadas. Monjes, existen impurezas que deben ser abandonadas
a través de la observación, existen impurezas que deben ser abandonadas a través de la
restricción, existen impurezas que deben ser abandonadas a través del uso, existen impurezas
que deben ser abandonadas a través del endurecimiento, existen impurezas que deben ser
abandonadas a través de la evitación, existen impurezas que deben ser abandonadas a través
de la eliminación, existen impurezas que deben ser eliminados a través del desarrollo.

“¿Y cómo, monjes, deberían ser abandonadas las impurezas a través de la observación? He
aquí, monjes, el individuo común y corriente, no instruido que no tiene en consideración a
los nobles, no es versado ni disciplinado en su Dhamma. No tiene en consideración a los
íntegros, no es versado ni disciplinado en su Dhamma. No entiende qué cosas corresponde
atender y qué cosas no corresponde atender. Siendo así, él atiende las cosas que no
corresponde atender y no atiende aquéllas que corresponde atender. ¿Y cuáles son estas cosas
que no corresponde atender y que, sin embargo, él atiende? Éstas son todas aquellas cosas
que, cuando él las atiende, las impurezas del deseo sensual que aún no han surgido, surgen y
las que ya han surgido, se incrementan; las impurezas del deseo por la existencia que aún no
han surgido, surgen y las que ya han surgido, se incrementan; las impurezas de la ignorancia
que aún no han surgido, surgen y las que ya han surgido, se incrementan. Éstas son las cosas
que no corresponde atender y que, sin embargo, él atiende. ¿Y cuáles son estas cosas que
corresponde atender y que, sin embargo, él no atiende? Éstas son todas aquellas cosas que,
cuando él las atiende, las impurezas del deseo sensual que aún no han surgido, no surgen y
las que ya han surgido, son abandonadas; las impurezas del deseo por la existencia que aún
no han surgido, no surgen y las que ya han surgido, son abandonadas; las impurezas de la
ignorancia que aún no han surgido, no surgen y las que ya han surgido, son abandonadas.
Éstas son las cosas que corresponde atender y que, sin embargo, él no atiende. Atendiendo
las cosas que no corresponde atender y no atendiendo aquéllas que corresponde atender,
ocurren ambas cosas: las impurezas que aún no han surgido, surgen y las que ya han surgido,
se incrementan. Y ésta es la manera de atender inapropiadamente: ‘¿Existía yo en el pasado?
¿No existía yo en el pasado? ¿Qué era yo en el pasado? ¿Cómo era yo en el pasado?
Habiendo sido esto, cuánto era yo en el pasado? ¿Existiré yo en el futuro? ¿No existiré yo en
el futuro? ¿Qué seré yo en el futuro? ¿Cómo seré yo en el futuro? Habiendo llegado a ser,
cuánto seré yo en el futuro?’ O, él es internamente perplejo en relación al presente, pensando:
¿Existo? ¿No existo? ¿Quién soy yo? ¿Cómo soy? ¿De dónde viene este ser? ¿Hacia dónde
va?’ Y mientras él atiende inapropiadamente de esta manera, uno de los seis siguientes
puntos de vista surge en él: El punto de vista, según el cual ‘Yo tengo el ser’ surge en él
como algo establecido y verdadero. El punto de vista, según el cual ‘Yo no tengo el ser’ surge
en él como algo establecido y verdadero. El punto de vista, según el cual ‘Yo percibo el ser
con el ser’ surge en él como algo establecido y verdadero. El punto de vista, según el cual
‘Yo percibo el no-ser con el ser’ surge en él como algo establecido y verdadero. El punto de
vista, según el cual ‘Yo percibo el ser con el no-ser’ surge en él como algo establecido y
verdadero. El punto de vista, según el cual ‘Yo percibo el no-ser con el no-ser’ surge en él
como algo establecido y verdadero. O también, él sostiene el siguiente punto de vista: ‘Es
precisamente este mi ser que habla, siente y experimenta aquí y allá el resultado de las buenas
y malas acciones; y este mi ser es permanente, perpetuo, eterno, no sujeto a cambios, que va
permanecer para siempre’. Este especulativo punto de vista se llama ‘el matorral del punto
de vista’, ‘el desierto del punto de vista’, ‘la contorsión del punto de vista’, ‘la vacilación del
punto de vista’, ‘el encadenamiento del punto de vista’. Encadenado por los grillos de su
punto de vista, el individuo común y corriente y no instruido, no se libera del nacimiento, de
la vejez ni de la muerte, del dolor, lamentación, pena, tristeza y desesperanza; no se libera
del sufrimiento, afirmo yo.

“Monjes, el bien instruido noble discípulo tiene en consideración a los nobles, es versado y
disciplinado en su Dhamma. Tiene en consideración a los íntegros, es versado y disciplinado
en su Dhamma. Entiende qué cosas corresponde atender y qué cosas no corresponde atender.
Siendo así, él atiende las cosas que corresponde atender y no atiende aquéllas que no
corresponde atender. ¿Y cuáles son estas cosas que no corresponde atender, a las cuales él
no atiende? Éstas son todas aquellas cosas que, cuando él las atiende, las impurezas del deseo
sensual que aún no han surgido, surgen [sigue igual como en el verso 6… ] las impurezas de
la ignorancia incrementan. Éstas son las cosas que no corresponde atender y que, sin
embargo, él atiende. ¿Y cuáles son estas cosas que corresponde atender y que él atiende?
Éstas son todas aquellas cosas que, cuando él las atiende, las impurezas del deseo sensual
que aún no han surgido, no surgen [sigue igual como en el verso 6… ] y las impurezas de la
ignorancia son abandonadas. Éstas son las cosas que corresponde atender y que él atiende.
No atendiendo las cosas que no corresponde atender y atendiendo aquéllas que corresponde
atender, ocurren ambas cosas: las impurezas que aún no han surgido, no surgen y las que ya
han surgido, son abandonadas. Él atiende apropiadamente: ‘Este es el sufrimiento’. Él
atiende apropiadamente: ‘Este es el origen sufrimiento’. Él atiende apropiadamente: ‘Este es
el cese del sufrimiento’. Él atiende apropiadamente: ‘Este es el camino que lleva al fin del
sufrimiento’. Y mientras él atiende apropiadamente de esta manera, estas tres cadenas son
abandonadas: el punto de visto de la identidad personal, la duda y la adherencia a los rituales
y ceremonias. De esta manera, monjes, deberían ser abandonadas las impurezas a través de
la observación.

“¿Y cómo, monjes, deberían ser abandonadas las impurezas a través de la restricción? He
aquí, monjes, el monje, reflexionando sabiamente, permanece con la facultad del ojo
restringida. Mientras que las impurezas, la irritación y la calentura pueden surgir en alguien
cuya facultad del ojo no está restringida, estas impurezas, la irritación y la calentura no surgen
en alguien que permanece con la facultad del ojo restringida. Reflexionando sabiamente, él
permanece con la facultad del oído restringida… con la facultad de la nariz restringida…
Reflexionando sabiamente, él permanece con la facultad de la lengua restringida… con la
facultad del cuerpo restringida… con la facultad de la mente restringida. Mientras que las
impurezas, la irritación y la calentura pueden surgir en alguien cuya facultad de la mente no
está restringida, estas impurezas, la irritación y la calentura no surgen en alguien que
permanece con la facultad de la mente restringida. De esta manera, monjes, deberían ser
abandonadas las impurezas a través de la restricción.

“¿Y cómo, monjes, deberían ser abandonadas las impurezas a través del uso? He aquí,
monjes, el monje, reflexionando sabiamente, usa la vestimenta exclusivamente para
protegerse del frío, para protegerse del calor, para protegerse del contacto con las moscas y
los mosquitos, protegerse del viento, el sol y los reptiles; también, para cubrir sus partes
íntimas.

“Reflexionando sabiamente, él no usa los alimentos obtenidos de la limosna para


entretenerse, ni para embriagarse, ni para empacharse ni embellecerse, sino exclusivamente
para sobrevivir y continuar con su cuerpo, poniendo fin a la sensación de disconformidad y
poder, de esta manera, realizar la vida santa pensando así: ‘Voy a poner fin a esta vieja
sensación de disconformidad [por el hambre] sin que una nueva sensación de esta clase
aparezca; así, voy a morar saludable e intachable y tendré una vida confortable’.

“Reflexionando sabiamente, él usa su alojamiento exclusivamente para protegerse del frío,


para protegerse del calor, para protegerse del contacto con las moscas y los mosquitos,
protegerse del viento, el sol y los reptiles; también, para protegerse de las inclemencias del
tiempo y disfrutar de la reclusión.

“Reflexionando sabiamente, él usa las medicinas exclusivamente para curarse de la


enfermedad y protegerse de las sensaciones desagradables y alcanzar los beneficios de una
buena salud. “Mientras que las impurezas, la irritación y la calentura pueden surgir en
alguien que no usa las medicinas de esta forma, estas impurezas, la irritación y la calentura
no surgen en alguien que las usa así. De esta manera, monjes, deberían ser abandonadas las
impurezas a través del uso.

“¿Y cómo, monjes, deberían ser abandonadas las impurezas a través del endurecimiento? He
aquí, monjes, el monje, reflexionando sabiamente, soporta el frío y el calor, el hambre y la
sed, el contacto con las moscas y los mosquitos, el viento, el sol y los reptiles; se endurece a
las malas lenguas, a las palabras inoportunas y a las sensaciones corporales que surgen
acompañadas por el dolor, el severo tormento, las heridas penetrantes, el desagrado, la
aflicción y el peligro de muerte. Mientras que las impurezas, la irritación y la calentura
pueden surgir en alguien que no se endurece a semejantes cosas, estas impurezas, la irritación
y la calentura no surgen en alguien que se endurece a ellas. De esta manera, monjes, deberían
ser abandonadas las impurezas a través del endurecimiento.

“¿Y cómo, monjes, deberían ser abandonadas las impurezas a través del evitación? He aquí,
monjes, el monje, reflexionando sabiamente, evita al elefante salvaje, al caballo salvaje, al
perro salvaje, a la serpiente, al tocón, a la parcela de zarzamora, al abismo, al precipicio, al
pozo ciego y a la alcantarilla. Reflexionando sabiamente, él evita sentarse en los asientos
inapropiados, visitar a los lugares inapropiados y asociarse con las malas compañías, que
podrían resultar sospechosas de mala conducta para sus amigos en la vida santa. Mientras
que las impurezas, la irritación y la calentura pueden surgir en alguien que no evita
semejantes cosas, estas impurezas, la irritación y la calentura no surgen en alguien que las
evita. De esta manera, monjes, deberían ser abandonadas las impurezas a través de la
evitación.

“¿Y cómo, monjes, deberían ser abandonadas las impurezas a través del eliminación? He
aquí, monjes, el monje, reflexionando sabiamente, no tolera que surjan en él pensamientos
de sensualidad, los abandona, los destruye, los disipa y los aniquila. Él no tolera que surjan
en él pensamientos de maldad… no tolera que surjan en él pensamientos de crueldad… no
tolera que surjan en él los estados mentales perjudiciales, los abandona, los destruye, los
disipa y los aniquila. Mientras que las impurezas, la irritación y la calentura pueden surgir
en alguien que no elimina semejantes cosas, estas impurezas, la irritación y la calentura no
surgen en alguien que las elimina. De esta manera, monjes, deberían ser abandonadas las
impurezas a través de la eliminación.

“¿Y cómo, monjes, deberían ser abandonadas las impurezas a través del desarrollo? He aquí,
monjes, el monje, reflexionando sabiamente, desarrolla la atención conciente como factor de
iluminación que surge de la reclusión, el desapasionamiento y el cese, y que es fruto del
renunciamiento. Él desarrolla el análisis de los estados [mentales] como factor de
iluminación… la energía como factor de iluminación… el arrobamiento como factor de
iluminación… la tranquilidad como factor de iluminación… la concentración como factor
de iluminación… la ecuanimidad como factor de iluminación que surge de la reclusión, el
desapasionamiento y el cese, y que es fruto del renunciamiento. Mientras que las impurezas,
la irritación y la calentura pueden surgir en alguien que no desarrolla estos factores de
iluminación, estas impurezas, la irritación y la calentura no surgen en alguien que los
desarrolla. De esta manera, monjes, deberían ser abandonadas las impurezas a través del
desarrollo.

“Monjes, cuando las impurezas que deben ser abandonadas a través de la observación han
sido abandonadas por el monje a través de la observación, cuando las impurezas que deben
ser abandonadas a través de la restricción han sido abandonadas por el monje a través de la
restricción, cuando las impurezas que deben ser abandonadas a través del uso han sido
abandonadas por el monje a través del uso, cuando las impurezas que deben ser abandonadas
a través del endurecimiento han sido abandonadas por el monje a través del endurecimiento,
cuando las impurezas que deben ser abandonadas a través de la evitación han sido
abandonadas por el monje a través de la evitación, cuando las impurezas que deben ser
abandonadas a través de la eliminación han sido abandonadas por el monje a través de la
eliminación, cuando las impurezas que deben ser eliminadas a través del desarrollo han sido
abandonadas por el monje a través del desarrollo –entonces, él es llamado el monje que
permanece restringido de todas las impurezas. Él ha subyugado la avaricia, rompió las
cadenas y, mediante la completa penetración del engreimiento, puso fin al sufrimiento.”

MN 2

{52} "Monjes, estos son los cinco factores del correcto esfuerzo. ¿Cuáles cinco?

[1] “He aquí, monjes, el monje tiene fe y cree en la Iluminación del Tathagata: ‘Realmente,
el Bienaventurado es puro, plenamente iluminado, perfecto en conocimiento y conducta,
completo, experto en relación al mundo, el insuperable amansador de aquella gente que es
calificada para ser dócil, el maestro de las divinidades y de los seres humanos, despierto y
bendito’.

[2] “Él mora libre de enfermedades y disconformidades, goza de buena digestión, mora con
no demasiado frío ni demasiado calor, siempre moderado, es idóneo para realizar el
[correcto] esfuerzo.

[3] “Él no es fraudulento ni deshonesto. Se manifiesta asimismo al maestro o a sus sabios


amigos en la vida santa tal como realmente es.

[4] “Él mantiene la energía que le permite abandonar los perjudiciales estados mentales y
retener los estados mentales saludables. Mora con la firme resolución, es sólido en su
esfuerzo y no elude sus responsabilidades concernientes a los saludables estados mentales.

[5] “Él discierne a través de un perspicaz conocimiento que lleva al surgimiento de la meta
final: conocimiento noble, penetrante, que conduce al fin del sufrimiento.

AN 5,53

{53} “Monjes, en consideración al monje que aún es un aprendiz, que todavía no ha


alcanzado la meta final a la perfección, pero que mora aspirando la liberación de la
esclavitud, yo no veo ninguna otra que cosa singular que mejor pueda ayudarle que la
atención apropiada de la mente. Monjes, el monje que practica la atención apropiada,
abandona lo perjudicial y hace que surja lo saludable.” Apropiada atención, como la cualidad
del monje que se entrena: Nada más
le ayudará mejor para alcanzar

la meta suprema.

El monje que se esfuerza correctamente, alcanza el

fin del sufrimiento.

{54} “Monjes, en consideración al monje que aún es un aprendiz, que todavía no ha


alcanzado la meta final a la perfección, pero que mora aspirando la liberación de la
esclavitud, yo no veo ninguna otra que cosa singular que mejor pueda ayudarle que la
compañía de los amigos admirables. Monjes, el monje que hace amistades con personas
admirables, abandona lo perjudicial y hace que surja lo saludable.” El monje con admirables
personas como amigos

-que es reverente, respetuoso, haciendo caso

a los consejos de sus amigos-

conscientemente atento y siempre alerta,

alcanza, paso a paso, la ruptura de todas las

cadenas.

Iti 1,16-17

{55} “Monjes, el monje que carece del fervor y es inescrupuloso, es incapaz de


desarrollar el conocimiento perspicaz y no puede alcanzar el Nibbana, la perfecta
liberación de la esclavitud. Pero el monje que es fervoroso y tiene escrúpulos
[concernientes a las malas acciones] sí, es capaz de desarrollar el conocimiento perspicaz
y puede alcanzar el Nibbana, la perfecta liberación de la esclavitud. Con falta de fervor,
inescrupuloso, el perezoso y falto de energía, somnoliento y aletargado, el desvergonzado
e irreverente, un monje como éste, es incapaz de alcanzar el supremo conocimiento
perspicaz. Pero quien está siempre atento, experto en jhanas, fervoroso, escrupuloso y
entusiasta, rompiendo
las cadenas del nacimiento y la vejez, un monje

como éste, es capaz de alcanzar el supremo

conocimiento perspicaz.

Iti 2,34

{56} Sariputta: “Amigo, está dicho que quien carece del fervor y quien es imprudente en
relación a la maldad, no es capaz de ser iluminado, no es capaz del Nibbana ni es capaz de
alcanzar la insuperable liberación de la esclavitud. Pero alguien que tiene el fervor y quien
es prudente en relación a la maldad, sí es capaz de ser iluminado, es capaz del Nibbana y es
capaz de alcanzar la insuperable liberación de la esclavitud. ¿De qué manera esto es así,
amigo?” Mahakassapa: “He aquí, amigo, el caso del monje que no genera el fervor pensando
‘Si los malos y perjudiciales estados mentales que aún no han apercibo en mi, aparezcan,
esto me causará daño’; tampoco piensa: ‘Si los malos y perjudiciales estados mentales que
ya han apercibo en mi, no sean abandonados, esto me causará daño’; ni piensa: ‘Si los buenos
y saludables estados mentales que aún no han apercibo en mi, no aparezcan, esto me causará
daño’; ni tampoco piensa: ‘Si los buenos y saludables estados mentales que ya han apercibo
en mi, cesen, esto me causará daño’. Así es alguien que carece de fervor.

“¿Y cómo es, amigo, alguien imprudente en relación a la maldad? He aquí, amigo, el caso
del monje que no tiene prudencia en relación a este pensamiento: ‘Si los malos y perjudiciales
estados mentales que aún no han apercibo en mi, aparezcan, esto me causará daño’… ni
tampoco piensa: ‘Si los buenos y saludables estados mentales que ya han apercibo en mi,
cesen, esto me causará daño’. Así es alguien imprudente en relación a la maldad. “De esta
manera, amigo, quien carece del fervor y quien es imprudente en relación a la maldad, no es
capaz de ser iluminado, no es capaz del Nibbana ni es capaz de alcanzar la insuperable
liberación de la esclavitud.

“¿Y cómo es amigo alguien que tiene fervor? He aquí, amigo, el caso del monje que genera
el fervor pensando ‘Si los malos y perjudiciales estados mentales que aún no han apercibo
en mi, aparezcan, esto me causará daño’… también piensa: ‘Si los buenos y saludables
estados mentales que ya han apercibo en mi, cesen, esto me causará daño’. Así es alguien
que tiene fervor.

“¿Y cómo es, amigo, alguien prudente en relación a la maldad? He aquí, amigo, el caso del
monje que tiene prudencia en relación a este pensamiento: ‘Si los malos y perjudiciales
estados mentales que aún no han apercibo en mi, aparezcan, esto me causará daño’… y
también piensa: ‘Si los buenos y saludables estados mentales que ya han apercibo en mi,
cesen, esto me causará daño’. Así es alguien prudente en relación a la maldad.

“De esta manera, amigo, quien tiene el fervor y quien es prudente en relación a la maldad, es
capaz de ser iluminado, es capaz del Nibbana y es capaz de alcanzar la insuperable liberación
de la esclavitud.”

SN 16,2

{57} "Imagina un plato de bronce traído del mercado o de la casa del herrero, manchado y
cubierto de mugre. Y el propietario no lo usa ni lo limpia sino que lo tira a un polvoriento
depósito. ¿Podría, en este caso, el plato de bronce volverse aún más manchado y mugroso?”
“Sí, amigo”. “Así también, amigo, cuando una persona con imperfección no entiende esto tal
cual es: ‘Yo tengo imperfección dentro de mí’, es de esperar que ella no producirá el fervor,
no hará esfuerzo ni generará la energía para abandonar dicha imperfección, de modo que esta
persona morirá con avidez, maldad y falsa ilusión, con la imperfección y con la mente
corrompida...

“Imagina un plato de bronce traído del mercado o de la casa del herrero, manchado y cubierto
de mugre. Pero el propietario lo usa y lo limpia y no lo tira a un polvoriento depósito. ¿Podría,
en este caso, el plato de bronce volverse más limpio y más brilloso con el tiempo?” “Sí,
amigo”. “Así también, amigo, cuando una persona con imperfección entiende esto tal cual
es: ‘Yo tengo imperfección dentro de mí’, es de esperar que ella producirá el fervor, hará
esfuerzo y generará la energía para abandonar dicha imperfección, de modo que esta persona
morirá sin avidez, sin la maldad ni falsa ilusión, sin la imperfección y con la mente no
corrompida. “Imagina un plato de bronce traído del mercado o de la casa del herrero, limpio
y brillante.

Pero el propietario no lo usa ni lo limpia sino que lo tira a un polvoriento depósito. ¿Podría,
en este caso, el plato de bronce volverse con el tiempo manchado y mugroso?” “Sí, amigo”.
“Así también, amigo, cuando una persona sin imperfección no entiende esto tal cual es: ‘Yo
no tengo imperfección dentro de mí’, es de esperar que ella preste atención al signo de la
belleza, por lo cual la avidez infectará su mente de modo que esta persona morirá con avidez,
maldad y falsa ilusión, con la imperfección y con la mente corrompida. “Imagina un plato de
bronce traído del mercado o de la casa del herrero, limpio y brillante. Además el propietario
lo usa y lo limpia y no lo tira a un polvoriento depósito. ¿Podría, en este caso, el plato de
bronce volverse aún más limpio y más brilloso con el tiempo? “Sí, amigo”. “Así también,
amigo, cuando una persona sin imperfección entiende esto tal cual es: ‘Yo no tengo
imperfección dentro de mí’, es de esperar que ella no preste atención al signo de la belleza,
por lo cual la avidez no infectará su mente, de modo que esta persona morirá sin avidez, sin
la maldad ni falsa ilusión, sin la imperfección y con la mente no corrompida. “Ésta es la
causa, amigo, y la razón, por la cual entre estas dos personas con imperfección, una es
llamada inferior y la otra superior. También es la causa y la razón, por la cual entre las dos
personas sin imperfección, una es llamada inferior y la otra superior.

“’Imperfección, imperfección’ se ha dicho, amigo. ¿Pero qué es lo que denota esta palabra
‘imperfección’? ‘Imperfección’, amigo, es el término que hace referencia a las esferas de los
malos y perjudiciales deseos.

MN 5

{58} “Monjes, aunque el monje no tenga habilidad en las maneras de las mentes de otros,
debe entrenarse a sí mismo: ‘Voy a adquirir la habilidad de leer mi propia mete’.

“¿Y cómo, monjes, el monje se entrena en la habilidad de leer su propia mente? Imaginad a
una mujer joven (u hombre) aficionada a los adornos, que examina su propio rostro en un
brillante y limpio espejo o en un tazón de agua limpia: cuando ella descubra alguna suciedad
o alguna mancha, tratará de eliminarla. Y si ella no descubra suciedad o mancha alguna,
estará contenta con la resolución de estar satisfecha: ‘¡Qué afortunada soy! ¡Qué limpia soy!’
De igual manera, monjes, el monje se examina a sí mismo en materia de de los buenos y
saludables estados mentales: ‘Usualmente, ¿permanezco con la codicia o no? Usualmente,
¿permanezco con pensamientos de animadversión o no? ¿Me vence a menudo la pereza y el
letargo o no? ¿Me vence a menudo la intranquilidad o no? Usualmente, ¿permanezco con las
dudas e incertidumbres o generalmente los supero? Usualmente, ¿permanezco enfadado o
no? Usualmente, ¿permanezco con pensamientos sucios o con pensamiento limpios?
Usualmente, ¿permanezco con el cuerpo apasionado o no? Usualmente, ¿permanezco
vagante o lleno de energía? Usualmente, ¿permanezco concentrado o desconcentrado?
“Monjes, si el monje, al haberse examinado se encuentra así: ‘Usualmente permanezco con
la codicia, usualmente permanezco con pensamientos de animadversión, a menudo me vence
la pereza y el letargo, a menudo me vence la intranquilidad, usualmente permanezco con las
dudas e incertidumbres, usualmente permanezco enfadado, usualmente, permanezco con los
pensamientos sucios, usualmente permanezco con el cuerpo apasionado, usualmente
permanezco vagante, usualmente, permanezco desconcentrado’ – entonces, aquel monje
debería emplear un fuerte deseo, esfuerzo, diligencia, empeño, atención consciente no
dividida y vigilancia con el fin de abandonar estos malos y perjudiciales estados mentales.
Al igual que alguien con un turbante en llamas sobre su cabeza, debería emplear un fuerte
deseo, esfuerzo, diligencia, empeño, la atención consciente no dividida y vigilancia con el
fin de abandonar estos malos y perjudiciales estados mentales.
“Pero, monjes, si el monje, al haberse examinado se encuentra así: ‘Usualmente permanezco
sin la codicia, usualmente permanezco sin los pensamientos de animadversión, no me vence
a menudo la pereza ni el letargo, no me vence a menudo la intranquilidad, usualmente supero
las dudas e incertidumbres, usualmente supero el enfado, usualmente permanezco con los
pensamientos limpios, usualmente permanezco con el cuerpo no apasionado, usualmente
permanezco lleno de energía, usualmente permanezco concentrado’ –entonces, aquel monje
debería establecerse en estos saludables estados mentales y, alcanzado aún mayor nivel de
ellos, poner fin a las impurezas.”

AN 10,51

{59} “¿Y de qué manera, monjes, el esfuerzo no es en vano y las decisiones son fructíferas?
He aquí, monjes, el monje no se deja abrumar por el sufrimiento ni tampoco se abruma a sí
mismo con el sufrimiento; él no abandona los placeres que están de acuerdo al Dhamma,
pero tampoco se enamora de ellos locamente. Él entiende así: ‘Cuando me esfuerzo con
determinación, esta particular fuente del sufrimiento se desvanece en mí por causa de este
esfuerzo hecho con determinación. Y mientras que yo la miro con ecuanimidad, esta
particular fuente del sufrimiento se desvanece en mi por causa del desarrollo de la
ecuanimidad.’ Entonces, él se esfuerza con determinación en relación a esta particular fuente
del sufrimiento, la cual se desvanece en él por causa de este esfuerzo hecho con
determinación. Y él desarrolla la ecuanimidad, en relación a esta particular fuente del
sufrimiento, la cual se desvanece en él por causa del desarrollo de la ecuanimidad. Y cuando
él se esfuerza con determinación, ésta y aquélla fuente del sufrimiento se desvanecen en él
por causa de este esfuerzo hecho con determinación, hasta que dicho sufrimiento se agota en
él por completo. Y cuando él mira con ecuanimidad, ésta y aquélla fuente del sufrimiento se
desvanecen en él por causa del desarrollo de la ecuanimidad, hasta que dicho sufrimiento se
agota en él por completo.

“Suponed, monjes, que un hombre está enamorado en una mujer con su mente ligada a ella
por medio de un intenso deseo y pasión. Y suponed que él viera a esta mujer estando con
otro hombre, cantando, jugando y riéndose. ¿Qué pensáis monjes: podría el pesar, el lamento,
la pena, el dolor y la desesperanza surgir en este hombre cuando viera a aquella mujer estando
con otro hombre, cantando, jugando y riéndose?”

“Sí, venerable señor...”

“Entonces, monjes, en este hombre podría surgir el siguiente pensamiento: ‘Yo estoy
enamorado de esta mujer con mi mente ligada a ella por medio de un intenso deseo y pasión;
por eso, el pesar, el lamento, la pena, el dolor y la desesperanza surgen en mí cuando la veo
estando con otro hombre, cantando, jugando y riéndose. ¿Qué tal si abandono mi deseo y mi
pasión por esta mujer?’ Y entonces, él abandona su deseo y su pasión por esta mujer.
Suponed, monjes, qué más tarde en otra ocasión él viera otra vez a esta mujer estando con
otro hombre, cantando, jugando y riéndose. ¿Qué pensáis monjes: podría ahora el pesar, el
lamento, la pena, el dolor y la desesperanza surgir en este hombre cuando viera a aquella
mujer estando con otro hombre, cantando, jugando y riéndose?” “No, venerable señor...”
“De la misma manera, monjes, cuando el monje no se deja abrumar por el sufrimiento ni
tampoco se abruma a sí mismo con el sufrimiento… ésta y aquélla fuente del sufrimiento se
desvanecen en él por causa del desarrollo de la ecuanimidad, hasta que dicho sufrimiento se
agota en él por completo. De esta manera, monjes, el esfuerzo no es en vano y las decisiones
son fructíferas.

“Además, monjes, el monje considera esto: ‘Mientras vivo satisfaciendo mis placeres, los
perjudiciales estados mentales crecen en mí y los saludables estados mentales, disminuyen.
Pero, cuando me ejercito en lo que es doloroso, los perjudiciales estados mentales
disminuyen en mí y los saludables estados mentales, crecen. ¿Qué tal si me ejercito a mí
mismo en lo que es doloroso?’ Entonces él se ejercita a sí mismo en lo que es doloroso y los
perjudiciales estados mentales disminuyen en él y los saludables estados mentales, crecen.
Pero entonces, más adelante, en otra ocasión, él ya no se ejercita más en lo que es doloroso.
¿Por qué? Porque el propósito, por el cual el monje se ejercitaba en lo que es doloroso ha
sido alcanzado. Es por eso que, más adelante, en otra ocasión, él ya no se ejercita más en lo
que es doloroso.

“Suponed, monjes, que el productor de flechas estuviera calentando y enardeciendo la punta


de una flecha entre dos fuegos, haciéndola recta y moldeada. Una vez que la punta de la
flecha, al ser calentada y enardecida entre dos fuegos, estuviera suficientemente recta y
moldeada, entonces más adelante, en otra ocasión, él ya no la estaría calentando y
enardeciendo entre dos fuegos para que sea recta y moldeada. ¿Por qué? Porque el propósito,
por el cual el productor de flechas estaba calentando y enardeciendo la punta de la flecha, ha
sido alcanzado.... De la misma manera, monjes, el monje considera esto: ‘Mientras vivo
satisfaciendo mis placeres, los perjudiciales estados mentales crecen… Es por eso que, más
adelante, en otra ocasión, él ya no se ejercita más en lo que es doloroso. De esta manera
también, monjes, el esfuerzo no es en vano y las decisiones son fructíferas.

MN 101

{60} “Udayin, estas cuatro clases de individuos pueden ser halladas en el mundo. ¿Cuáles
cuatro? He aquí, Udayin, hay individuos que practican el camino del abandono de las
adquisiciones y de la liberación de las adquisiciones. Cuando un individuo de éstos, practica
este camino, los recuerdos y las intenciones asociados a las adquisiciones, lo asaltan. Pero él
los tolera, no los abandona, no los destruye, no los disipa ni los aniquila. Yo llamo a este
individuo ‘un encadenado’, Udayin, no lo llamo ‘un no-encadenado’. ¿Por qué así? Porque
conozco la diversidad particular de las facultades de esta clase de individuos.

“He aquí también, Udayin, hay individuos que practican el camino del abandono de las
adquisiciones y de la liberación de las adquisiciones. Cuando un individuo de éstos, practica
este camino, los recuerdos y las intenciones asociados a las adquisiciones, lo asaltan. Pero él
no los tolera, los abandona, los destruye, los disipa y los aniquila. Yo también llamo a este
individuo ‘un encadenado’, Udayin, no lo llamo ‘un no-encadenado’. ¿Por qué así? Porque
conozco la diversidad particular de las facultades de esta clase de individuos.

“He aquí, Udayin, hay individuos que practican el camino del abandono de las adquisiciones
y de la liberación de las adquisiciones. Cuando un individuo de éstos, practica este camino,
los recuerdos y las intenciones asociados a las adquisiciones, lo asaltan –ahora y después- a
través de pequeños lapsos de la atención consciente. Puede que su atención consciente surja
despacio, pero él rápidamente abandona [a los recuerdos y las intenciones asociados a las
adquisiciones que lo asaltan], los destruye, los disipa y los aniquila. Es como si un hombre
echara dos o tres gotas del agua a un plato de metal caliente que durante todo el día estaba
expuesto al sol; puede que las gotas caigan despacio, pero se desvanecerán y desaparecerán
rápidamente. Al igual que cuando la persona que practica el camino del abandono de las
adquisiciones… Puede que su atención consciente surja despacio, pero él rápidamente
abandona [a los recuerdos y las intenciones asociados a las adquisiciones que lo asaltan], los
destruye, los disipa y los aniquila. Yo también llamo a este individuo ‘un encadenado’,
Udayin, no lo llamo ‘un no-encadenado’. ¿Por qué así? Porque conozco la diversidad
particular de las facultades de esta clase de individuos. “He aquí, Udayin, hay individuos
que entienden que la adquisición es la raíz del sufrimiento. [Cuando un individuo de éstos lo
entienda], se auto-despoja de las adquisiciones y queda liberado en medio de la destrucción
de las adquisiciones. Yo llamo a este individuo ‘un noencadenado’, Udayin, no lo llamo ‘un
encadenado’ ¿Por qué así? Porque conozco la diversidad particular de las facultades de esta
clase de individuos.

MN 66

{61} Mientras tanto, el carpintero Pañcakanga se acercó a Uggahamana e intercambió con


él cordiales saludos. Cuando estos cordiales saludos y las amables palabras de bienvenida
llegaron a su fin, se sentó a un lado y el asceta errante Uggahamana le dijo:

“Carpintero, cuando un hombre posee estas cuatro cualidades, yo lo considero como a


alguien que se ha auto-realizado en lo que es saludable, que es perfecto en lo que es saludable,
como a un asceta que es invencible y que ha alcanzado el supremo logro. ¿Cuáles son estas
cuatro cualidades? Este es el caso del individuo que no realiza las malas acciones a través de
su cuerpo, no se expresa a través de un lenguaje incorrecto, no tiene malas intenciones y no
se gana la vida de mala manera. Cuando un hombre posee estas cuatro cualidades, yo lo
considero como a alguien que se ha auto-realizado en lo que es saludable, que es perfecto en
lo que es saludable, como a un asceta que es invencible y que ha alcanzado el supremo logro.”

Entonces, el carpintero Pañcakanga, no aprobó ni desaprobó las palabras del asceta errante
Uggahamana. Sin haber aprobado ni tampoco desaprobado las palabras del asceta errante
Uggahamana, se levantó de su asiento y salió de ahí pensando: “Voy a aprender el significado
de este discurso en presencia del Bienaventurado”.

Entonces se fue junto al Bienaventurado y, después de rendirle homenaje, se sentó a un lado


y relató al Bienaventurado todo lo ocurrido con el asceta errante Uggahamana. Acto seguido,
el Bienaventurado dijo:

“Si esto fuera así, carpintero, un joven y tierno párvulo acostado boca abajo sería alguien que
se ha auto-realizado en lo que es saludable, que es perfecto en lo que es saludable, sería un
asceta invencible que ha alcanzado el supremo logro, según el discurso del asceta errante
Uggahamana. Pues para un joven y tierno párvulo acostado boca abajo, ni siquiera existe
todavía la noción del ‘cuerpo’, así que ¿cómo podría él realizar alguna mala acción a través
del cuerpo más allá del mero hecho de menearse? Para un joven y tierno párvulo acostado
boca abajo, ni siquiera existe todavía la noción del ‘habla’, de modo que ¿cómo podría él
expresarse a través de un lenguaje incorrecto más allá del mero balbuceo? Para un joven y
tierno párvulo acostado boca abajo, ni siquiera existe todavía la noción de la ‘intención’, de
modo que ¿cómo podría él tener malas intenciones más allá del mero enfurruñamiento? Para
un joven y tierno párvulo acostado boca abajo, ni siquiera existe todavía la noción del ‘modo
de ganarse la vida’, de modo que ¿cómo podría él ganarse la vida de mala manera más allá
del mero succionar el pecho materno? Si esto fuera así, carpintero, un joven y tierno párvulo
acostado boca abajo sería alguien que se ha autorealizado en lo que es saludable, que es
perfecto en lo que es saludable, sería un asceta invencible que ha alcanzado el supremo logro,
según el discurso del asceta errante Uggahamana.

“Cuando un hombre posee estas cuatro cualidades, carpintero, yo no lo considero como a


alguien que se ha auto-realizado en lo que es saludable, ni que es perfecto en lo que es
saludable, ni como a un asceta que es invencible y que ha alcanzado el supremo logro, sino
como a alguien que está al mismo nivel de un joven y tierno párvulo acostado boca abajo.
¿Cuáles son estas cuatro cualidades? Este es el caso del individuo que no realiza las malas
acciones a través de su cuerpo, no se expresa a través de un lenguaje incorrecto, no tiene
malas intenciones y no se gana la vida de mala manera. Cuando un hombre posee estas cuatro
cualidades, carpintero, yo no lo considero como a alguien que se ha autorealizado… sino
como a alguien que está al mismo nivel de un joven y tierno párvulo acostado boca abajo.

"Carpintero, cuando un hombre posee estas diez cualidades, yo lo considero como a alguien
que se ha auto-realizado en lo que es saludable, que es perfecto en lo que es saludable, como
a un asceta que es invencible y que ha alcanzado el supremo logro. [Pero antes que nada,] yo
digo que esto tiene que ser comprendido así: ‘Estas costumbres son perjudiciales’; y así
‘Estas son las causas de las costumbres perjudiciales’; y así: ‘Las costumbres perjudiciales
cesan por completo aquí’; y así: ‘Uno que practica en este camino, está practicando el camino
del cese de las costumbres perjudiciales’. Y también yo digo que esto tiene que ser
comprendido así: ‘Estas costumbres son saludables’; y así ‘Estas son las causas de las
costumbres saludables’; y así: ‘Las costumbres saludables cesan por completo aquí’; y así:
‘Uno que practica en este camino, está practicando el camino del cese de las costumbres
saludables’. Además yo digo que esto también tiene que ser comprendido así: ‘Estas
intenciones son perjudiciales’; y así ‘Estas son las causas de las intenciones perjudiciales’; y
así: ‘Las intenciones perjudiciales cesan por completo aquí’; y así: ‘Uno que practica en este
camino, está practicando el camino del cese de las intenciones perjudiciales’. Finalmente, yo
digo que esto también tiene que ser comprendido así: ‘Estas intenciones son saludables’; y
así ‘Estas son las causas de las intenciones saludables’; y así: ‘Las intenciones saludables
cesan por completo aquí’; y así: ‘Uno que practica en este camino, está practicando el camino
del cese de las intenciones saludables’.

“¿Y qué son las costumbres perjudiciales? Las acciones perjudiciales realizadas a través del
cuerpo, las acciones perjudiciales verbales y las perjudiciales formas de ganarse la vida. Éstas
son las costumbres perjudiciales.

“¿Y cómo se originan estas costumbres perjudiciales? Su origen se ha revelado: debería


decirse que se originan en la mente. ¿En qué clase de la mente? Aunque la mente es múltiple,
variada y de diferentes aspectos, aquí se trata de la mente afectada por la avidez, el odio y la
falsa ilusión. Así se originan estas costumbres perjudiciales.

“¿Y dónde estas costumbres perjudiciales cesan por completo? Su cese se ha revelado: es
aquí donde el monje abandona la conducta perjudicial realizada a través del cuerpo y
desarrolla la conducta saludable a través del cuerpo; él abandona las acciones verbales que
son perjudiciales y desarrolla las acciones verbales saludables; él abandona la conducta
perjudicial a través de la mente y desarrolla la conducta mental saludable; él abandona las
perjudiciales formas de ganarse la vida y se gana la vida rectamente. Es aquí, dónde estas
costumbres perjudiciales cesan por completo.

“¿Y cómo, él que practica en este camino, está practicando el camino del cese de las
costumbres perjudiciales? Es el caso del monje, que genera el deseo para que no surjan en él
los perjudiciales estados mentales que aún no surgieron; se esfuerza en esto, persiste en esto,
lo intenta de todas formas y se mantiene firme en este intento. También, él genera el deseo
de abandonar los perjudiciales estados mentales que ya surgieron… Él genera el deseo para
que surjan los saludables estados mentales que aún no surgieron… Él genera el deseo para
que permanezcan, continúen, no desaparezcan, se incrementen y se desarrollen los saludables
estados mentales que ya surgieron; se esfuerza en esto, persiste en esto, lo intenta de todas
formas y se mantiene firme en este intento. Él que practica en este camino así, está
practicando el camino del cese de las costumbres perjudiciales.

“¿Y qué son las costumbres saludables? Las acciones saludables realizadas a través del
cuerpo, las acciones saludables verbales y las saludables formas de ganarse la vida. Éstas son
las costumbres saludables.

“¿Y cómo se originan estas costumbres saludables? Su origen se ha revelado: debería decirse
que se originan en la mente. ¿En qué clase de la mente? Aunque la mente es múltiple, variada
y de diferentes aspectos, aquí se trata de la mente no afectada por la avidez, el odio ni la falsa
ilusión. Así se originan estas costumbres saludables.

“¿Y dónde estas costumbres saludables cesan por completo? Su cese se ha revelado: es aquí
donde el monje es virtuoso, pero él no se identifica con su virtud, y él la entiende tal cual
realmente es: como la liberación de la mente y la liberación a través de la sabiduría. Es aquí,
dónde estas costumbres saludables cesan por completo.

“¿Y cómo, él que practica en este camino, está practicando el camino del cese de las
costumbres saludables? Es el caso del monje, que genera el deseo para que no surjan en él
los perjudiciales estados mentales que aún no surgieron… Él genera el deseo de abandonar
los perjudiciales estados mentales que ya surgieron… Él genera el deseo para que surjan los
saludables estados mentales que aún no surgieron… Él genera el deseo para que
permanezcan, continúen, no desaparezcan, se incrementen y se desarrollen los saludables
estados mentales que ya surgieron; se esfuerza en esto, persiste en esto, lo intenta de todas
formas y se mantiene firme en este intento. Él que practica en este camino así, está
practicando el camino del cese de las costumbres saludables.

“¿Y qué son las intenciones perjudiciales? Las intenciones de los deseos sensuales,
intenciones de animadversión e intenciones de crueldad. Éstas son las intenciones
perjudiciales.

“¿Y cómo se originan estas intenciones perjudiciales? Su origen se ha revelado: debería


decirse que se originan en la percepción. ¿Qué clase de percepción? Aunque la percepción
es múltiple, variada y de diferentes aspectos, aquí se trata de la percepción de los deseos
sensoriales, percepción de la animadversión y percepción de la crueldad. Así se originan
estas intenciones perjudiciales.

“¿Y dónde estas intenciones perjudiciales cesan por completo? Su cese se ha revelado: es
aquí donde el monje, aislado de los placeres sensuales, aislado de los perjudiciales estados
mentales, entra y permanece en el primer jhana, el cual está acompañado por el pensamiento
aplicado y el pensamiento sostenido, con el arrobamiento y el placer nacidos del aislamiento.
Es aquí, dónde estas intenciones perjudiciales cesan por completo. “¿Y cómo, él que practica
en este camino, está practicando el camino del cese de las intenciones perjudiciales? Es el
caso del monje, que genera el deseo para que no surjan en él los perjudiciales estados
mentales que aún no surgieron… Él genera el deseo de abandonar los perjudiciales estados
mentales que ya surgieron… Él genera el deseo para que surjan los saludables estados
mentales que aún no surgieron… Él genera el deseo para que permanezcan, continúen, no
desaparezcan, se incrementen y se desarrollen los saludables estados mentales que ya
surgieron; se esfuerza en esto, persiste en esto, lo intenta de todas formas y se mantiene firme
en este intento. Él que practica en este camino así, está practicando el camino del cese de las
intenciones perjudiciales.

“¿Y qué son las intenciones saludables? Las intenciones del renunciamiento, intenciones de
la no-animadversión e intenciones de la no-crueldad. Éstas son las intenciones saludables.

“¿Y cómo se originan estas intenciones saludables? Su origen se ha revelado: debería decirse
que se originan en la percepción. ¿Qué clase de percepción? Aunque la percepción es
múltiple, variada y de diferentes aspectos, aquí se trata de la percepción del renunciamiento,
percepción de la no-animadversión y percepción de la no-crueldad. Así se originan estas
intenciones saludables.

“¿Y dónde estas intenciones saludables cesan por completo? Su cese se ha revelado: es aquí
donde el monje, al calmar el pensamiento aplicado y pensamiento sustentado, entra y
permanece en el segundo jhana, el cual se caracteriza por la auto-confianza y la unificación
de la mente, sin el pensamiento aplicado y el pensamiento sustentado, pero con el
arrobamiento y el placer nacidos de la concentración. Es aquí, dónde estas intenciones
saludables cesan por completo.

“¿Y cómo, él que practica en este camino, está practicando el camino del cese de las
intenciones saludables? Es el caso del monje, que genera el deseo para que no surjan en él
los perjudiciales estados mentales que aún no surgieron… Él genera el deseo de abandonar
los perjudiciales estados mentales que ya surgieron… Él genera el deseo para que surjan los
saludables estados mentales que aún no surgieron… Él genera el deseo para que
permanezcan, continúen, no desaparezcan, se incrementen y se desarrollen los saludables
estados mentales que ya surgieron; se esfuerza en esto, persiste en esto, lo intenta de todas
formas y se mantiene firme en este intento. Él que practica en este camino así, está
practicando el camino del cese de las intenciones saludables.

“Ahora bien, carpintero, ¿cuáles son estas diez cualidades que un individuo debe poseer, para
que yo lo considere como a alguien que se ha auto-realizado en lo que es saludable, que es
perfecto en lo que es saludable, como a un asceta que es invencible y que ha alcanzado el
supremo logro? Es el caso del monje que posee el recto entendimiento de alguien que está
más allá de la instrucción [1] , la recta intención de alguien que está más allá de la instrucción,
la recta forma de hablar de alguien que está más allá de la instrucción, la recta acción de
alguien que está más allá de la instrucción, la recta forma de vida de alguien que está más
allá de la instrucción, el recto esfuerzo de alguien que está más allá de la instrucción, la recta
atención consciente de alguien que está más allá de la instrucción, la recta concentración de
alguien que está más allá de la instrucción, el recto conocimiento de alguien que está más
allá de la instrucción y la recta liberación de alguien que está más allá de la instrucción. A
éste, yo lo considero como a alguien que se ha autorealizado en lo que es saludable, que es
perfecto en lo que es saludable, como a un asceta que es invencible y que ha alcanzado el
supremo logro.”

Esto es lo que fue dicho por el Bienaventurado y el carpintero Pañcakanga fue satisfecho y
se alegró en las palabras del Bienaventurado.

MN 78

{62} Deva: “¿Cómo, querido señor, has cruzado las aguas crecidas?”

Buda: “Sin detenerme, amigo, y sin forzarme crucé las aguas crecidas”.

Deva: “Pero, ¿cómo es esto, querido amigo, que no deteniéndote y no forzándote cruzaste
las aguas crecidas?”

Buda: “Cuando estaba parado en un sitio, me sumía en él, y cuando me veía empujado [de
algún lugar], me erradicaba de él. De esta manera, amigo, sin detenerme y sin forzarme,
crucé las aguas crecidas”.

El deva: “Después de largo tiempo, finalmente veo

A un brahmín que está plenamente saciado,

El cual, sin detenerse y sin forzarse,

Cruzó por encima de los apegos del mundo”.

Pasajes del Canon Pali {63-68}

{63} “Monjes, aquellos que son negligentes con las cuatro bases del poder espiritual, también
son negligentes con el Óctuple Noble Sendero que conduce a la completa destrucción del
sufrimiento. Aquellos que están comprometidos con las cuatro bases del poder espiritual,
también se comprometen con el Óctuple Noble Sendero que conduce a la completa
destrucción del sufrimiento. ¿Cuáles cuatro?
“Monjes, este es el caso del monje que desarrolla la base del poder espiritual dotada de la
concentración debido al deseo y la formación volitiva del esfuerzo. Él desarrolla la base del
poder espiritual dotada de la concentración debido a la energía y la formación volitiva del
esfuerzo. Él desarrolla la base del poder espiritual dotada de la concentración debido a la
mente y la formación volitiva del esfuerzo. Él desarrolla la base del poder espiritual dotada
de la concentración debido a la investigación y la formación volitiva del esfuerzo.

“Monjes, aquellos que son negligentes con estas cuatro bases del poder espiritual... Aquellos
que están comprometidos con estas cuatro bases del poder espiritual, también se
comprometen con el Óctuple Noble Sendero que conduce a la completa destrucción del
sufrimiento.”

SN 51,2

{64} Ananda: “Venerable señor, ¿qué es el poder espiritual? ¿Qué es la base del poder
espiritual? ¿Cómo se desarrollan las bases del poder espiritual? ¿Cuál es el camino que
conduce al desarrollo de las bases del poder espiritual?”

El Buda: "Este es el caso, Ananda, del monje que siendo uno, se convierte en muchos y
siendo muchos, se convierte en uno. Aparece y desaparece. Sin impedimento alguno, traspasa
las paredes, terraplenes y montañas, como si fueran aire. Se zambulle dentro de la tierra,
como si fuera agua. Camina sobre el agua sin hundirse, como si fuera tierra seca. Sentado
con piernas cruzadas, atraviesa los aires como si fuera un pájaro sobre el viento. Con su mano
toca y, hasta da palmadas al sol y la luna, así es de imponente y poderoso. Ejercita la
influencia de su cuerpo hasta los mundos del Brama. [Como un hábil alfarero o su aprendiz,
sabe dar muchas formas a la arcilla bien preparada y convertirla en diferentes clases de
recipientes cerámicos de acuerdo a sus deseos; o como un hábil tallista de marfil o su
aprendiz, sabe trabajar el marfil bien preparado de acuerdo a sus deseos; o como un hábil
orfebre o su aprendiz, sabe hacer de oro bien preparado los artículos que de acuerdo a sus
deseos –así también, el monje, con su mente concentrada, purificada y brillante, intachable,
libre de las impurezas, maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad,
direcciona e inclina su mente hacia varios poderes sobrenaturales. Siendo uno sólo, se
convierte en muchos... Ejercita la influencia de su cuerpo hasta los mundos del Brama.]

“Con el oído divino, purificado y que supera el de los seres humanos, él escucha a ambas
clases de sonidos: los divinos y los humanos, provenientes de lejos o de cerca. [Como un
hombre viajando a lo largo de la carretera, puede escuchar los sonidos de los timbales,
pequeños tambores, conchas, címbalos e instrumentos de percusión, y discernir: ‘Éste es el
sonido de los timbales, éste de los pequeños tambores, éste de conchas, éste de címbalos y
éste de los instrumentos de percusión’. De la misma manera el monje, con la mente
concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de las impurezas, maleable, flexible,
firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, direcciona e inclina su mente hacia el oído
divino. Con el oído divino, purificado y que supera el de los seres humanos, escucha a ambas
clases de sonidos: los divinos y los humanos, provenientes de lejos o de cerca.] “Con su
propia mente, él conoce y distingue la mente de los otros seres o de otras personas. Conoce
la mente afectada por la pasión, como mente apasionada, y la mente sin pasión, como la
mente liberada de la pasión. Conoce la mente afectada por la aversión, como la mente con
aversión, y la mente sin aversión, como la mente liberada de aversión. Conoce la mente
afectada por la falsa ilusión, como mente mal ilusionada, y la mente sin falsa ilusión, como
la mente liberada de la falsa ilusión. Discierne la mente restringida como tal y sabe cuándo
la mente está dispersa. Cuando una mente está expandida, la reconoce como expandida y
cuando está estrecha, sabe que está estrecha. A una mente destacada, la reconoce como
destacada y una mente corriente reconoce como tal. Sabe cuándo la mente está concentrada
y cuando no lo es, en ambos casos lo discierne correctamente, como también cuando la mente
está liberada y cuando no. [Como una mujer, un hombre o un muchacho preocupado por su
apariencia, examina cuidadosamente el reflejo de su propio rostro en el brillante espejo o en
el tazón con agua pura, sabiendo discernir lunares o motas de las partes libres de manchas,
así también, el monje, con la mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de
las impurezas, maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, direcciona
e inclina su mente hacia la lectura de las otras mentes. Con su propia mente, conoce y
distingue la mente de los otros seres o de otras personas... Sabe cuándo la mente está
concentrada y cuando no lo es, en ambos casos lo discierne correctamente, como también
cuando la mente está liberada y cuando no.]

“Él se acuerda de sus múltiples vidas pasadas: de un nacimiento, dos nacimientos, tres
nacimientos, cuatro, cinco, diez, veinte, treinta, cuarenta, cincuenta, cien, mil, cien mil
nacimientos, muchos eones de las contracciones cósmicas, muchos eones de las expansiones
cósmicas, muchos eones de las contracciones y expansiones cósmicas, recordando: ‘En aquel
entonces, mi nombre era así, mi linaje era éste y provenía de ésta casta; me alimentaba de
ésta clase de comida, experimentaba ésta y aquella clase de alegrías y penas y he vivido ésta
cantidad de años. Habiendo terminado mi vida ahí, me he reconectado allá, donde mi nombre
era... Habiendo terminado mi vida ahí, me he reconectado aquí’. De esta manera, se acuerda
de varias de sus vidas pasadas, con sus condiciones y detalles. [Como si un hombre saliera
de su pueblo para irse al otro, y luego saliera de aquel para irse a uno nuevo y diferente y
finalmente volviera a su casa. Entonces, podría tener este pensamiento: ‘Salí de mi pueblo
natal y me fui a este otro pueblo. Ahí estuve parado de esta manera, estuve sentado así, hablé
de esta forma y permanecí en silencio de esta manera. Salí de este pueblo y me fui a aquel
otro pueblo diferente, donde estuve parado de esta manera, estuve sentado así, hablé de esta
forma y permanecí en silencio de esta manera. Finalmente, salí de aquel otro pueblo diferente
y volví a casa’. De esta misma manera, el monje, con la mente concentrada, purificada y
brillante, intachable, libre de las impurezas, maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la
imperturbabilidad, direcciona e inclina su mente hacia el conocimiento de las existencias
pasadas. Se acuerda de sus múltiples vidas pasadas: de un nacimiento... se acuerda de varias
de sus vidas pasadas, con sus condiciones y detalles.]

“A través del ojo divino, purificado y que sobrepasa el humano, ve la muerte de los seres y
su reaparición, discerniendo si su destino es inferior o superior, hermoso u horrible,
afortunado o desafortunado, de acuerdo al kamma de cada uno. Conoce de esta manera:
‘Estos seres, que obraron mal con su cuerpo, con su habla o con su mente, los que injuriaban
a los nobles, mantenían los incorrectos puntos de vista y asumían acciones resultantes de
estos erróneos puntos de vista, al quebrarse su cuerpo, después de la muerte, han reaparecido
en el plano de las penurias, de mal destino, en los reinos bajos, en el infierno. Pero aquellos
seres, que obraron bien con su cuerpo, con su habla o con su mente, los que no injuriaban a
los nobles, mantenían los correctos puntos de vista y asumían acciones resultantes de estos
correctos puntos de vista, al quebrarse su cuerpo, después de la muerte, han reaparecido en
el buen destino, en el mundo celestial’. De esta manera, a través del ojo divino, purificado y
que sobrepasa el humano, él ve la muerte de los seres y su reaparición, discerniendo si su
destino inferior o superior, hermoso u horrible, afortunado o desafortunado, de acuerdo a su
kamma. [Como si un hombre, que tuviera una buena vista, estuviera parado en la cima de un
edificio en el centro de su ciudad y observara la gente entrando en la casa y saliendo de ella,
caminando a lo largo de la calle y gente sentada en la plaza central. Entonces, podría tener
este pensamiento: ‘esta gente entra y sale de la casa, camina a lo largo de la calle y está
sentada en la plaza central’. De la misma manera, el monje, con la mente concentrada,
purificada y brillante, intachable, libre de las impurezas, maleable, flexible, firme y que ha
alcanzado la imperturbabilidad, direcciona e inclina su mente hacia la muerte y la reconexión
de los seres. A través del ojo divino, purificado y que sobrepasa el humano, ve la muerte de
los seres y su reaparición, discerniendo si su destino es inferior o superior, hermoso u
horrible, afortunado o desafortunado, de acuerdo a su kamma.]

“¿Y qué es la base del poder espiritual? Es el camino y la práctica que conduce a ganar el
poder espiritual, a obtener el poder espiritual. Ésta es la base del poder espiritual.

“¿Y cómo el monje desarrolla las bases del poder espiritual? Este es el caso del monje que
desarrolla la base del poder espiritual dotada de la concentración debido al deseo y la
formación volitiva del esfuerzo. Él desarrolla la base del poder espiritual dotada de la
concentración debido a la energía y la formación volitiva del esfuerzo. Él desarrolla la base
del poder espiritual dotada de la concentración debido a la mente y la formación volitiva del
esfuerzo. Él desarrolla la base del poder espiritual dotada de la concentración debido a la
investigación y la formación volitiva del esfuerzo. Así desarrolla el monje las bases del poder
espiritual.
“¿Y cuál es el camino que conduce al desarrollo de las bases del poder espiritual? Este es el
Noble Óctuple Sendero: el recto entendimiento, recta intención, recta forma de hablar, recta
acción, recta forma de vivir, recto esfuerzo, recta atención consciente y recta
concentración. Éste es el camino que conduce al desarrollo de las bases del poder
espiritual.

SN 51,27 [DN 2 ]

{65} “Monjes, cuando el monje alcanza la unificación de la mente, cuando gana la


unificación de la mente basada en el deseo, la misma se llama ‘concentración a través del
deseo’. Él genera el deseo de que no surjan los malos y perjudiciales estados mentales que
aún no han surgido: hace este esfuerzo, pone en él su energía y a él aplica su mente y su
fortaleza. Él genera el deseo de abandonar los malos y perjudiciales estados mentales que ya
han surgido: hace este esfuerzo, pone en él su energía y a él aplica su mente y su fortaleza.
Él genera el deseo de que surjan los saludables estados mentales que aún no han surgido:
hace este esfuerzo, pone en él su energía y a él aplica su mente y su fortaleza. Él genera el
deseo de que permanezcan los saludables estados mentales que ya han surgido, que los
mismos no decaigan sino que incrementen, se expandan, lleguen a su máximo desarrollo y
cumplimiento: hace este esfuerzo, pone en él su energía y él aplica su mente y su fortaleza.
A éstos se les llama ‘formaciones volitivas del esfuerzo’. Este es el deseo y ésta es la
concentración a través del deseo, y éstas son las formaciones volitivas del esfuerzo. Esto se
llama ‘la base del poder espiritual dotada de la concentración debido al deseo y la
formaciones volitivas del esfuerzo’.

“Monjes, cuando el monje alcanza la unificación de la mente, cuando gana la unificación de


la mente basada en la energía...

“Monjes, cuando el monje alcanza la unificación de la mente, cuando gana la unificación de


la mente basada en la mente...

“Monjes, cuando el monje alcanza la unificación de la mente, cuando gana la unificación de


la mente basada en la investigación, la misma se llama ‘concentración a través de la
investigación’. Él genera el deseo de que no surjan los malos y perjudiciales estados
mentales… Él genera el deseo de que permanezcan los saludables estados mentales que ya
han surgido, que los mismos no decaigan sino que incrementen, se expandan, lleguen a su
máximo desarrollo y cumplimiento: hace este esfuerzo, pone en él su energía y él aplica su
mente y su fortaleza. A éstos se les llama ‘formaciones volitivas del esfuerzo’. Esta es la
investigación y ésta es la concentración a través de la investigación, y éstas son las
formaciones volitivas del esfuerzo. Esto se llama ‘la base del poder espiritual dotada de la
concentración debido a la investigación y la formaciones volitivas del esfuerzo’.
SN 51,13

{66} “Monjes, cuando estas cuatro bases del poder espiritual se desarrollan y se cultivan,
traen mucho fruto y son de gran beneficio.

“¿Y cómo, monjes, estas cuatro bases del poder espiritual deben ser desarrolladas y
cultivadas, para que traigan mucho fruto y sean de gran beneficio?

“He aquí, monjes, el monje desarrolla la base del poder espiritual dotada de la concentración
debido al deseo y las formaciones volitivas del esfuerzo, pensando: ‘Este mi deseo no será
ni demasiado flojo ni demasiado tenso; no será demasiado restringido internamente ni
demasiado distraído externamente’. Y él permanece percibiendo antes y después: ‘Así antes,
como después; así después, como antes; así abajo, como arriba; así arriba, como abajo; así
de día, como de noche; así de noche, como de día’. Con la mente abierta y no envuelta, él
desarrolla la mente imbuida con luminosidad.

“Él desarrolla la base del poder espiritual dotada de la concentración debido a la energía…
Él desarrolla la base del poder espiritual dotada de la concentración debido a la mente… Él
desarrolla la base del poder espiritual dotada de la concentración debido a la investigación,
pensando: ‘Esta mi investigación no será ni demasiada floja ni demasiado tensa; no será
demasiado restringida internamente ni demasiado distraída externamente’. Y él permanece
percibiendo antes y después: ‘Así antes, como después; así después, como antes; así abajo,
como arriba; así arriba, como abajo; así de día, como de noche; así de noche, como de día’.
De esta manera, con la mente abierta y no envuelta, él desarrolla la mente imbuida con la
luminosidad.

“¿Y de qué manera, monjes, el deseo es demasiado flojo? Es cuando el deseo está
acompañado por la lasitud, cuando está asociado con la lasitud. De esta manera, el deseo es
demasiado flojo.

“¿Y de qué manera, monjes, el deseo es demasiado tenso? Es cuando el deseo está
acompañado por la intranquilidad, cuando está asociado con la intranquilidad. De esta
manera, el deseo es demasiado tenso.

“¿Y de qué manera, monjes, el deseo es demasiado restringido internamente? Es cuando el


deseo está acompañado por la pereza y el letargo, cuando está asociado con la pereza y el
letargo. De esta manera, el deseo es demasiado restringido internamente.

“¿Y de qué manera, monjes, el deseo es demasiado distraído externamente? Es cuando el


deseo es repetidamente distraído externamente, cuando es repetidamente perturbado por
cuenta de las cinco cuerdas de los placeres sensuales. De esta manera, el deseo es demasiado
distraído externamente.

“¿Y de qué manera, monjes, el monje permanece percibiendo antes y después: ‘Así antes,
como después; así después como antes’? He aquí, monjes, la percepción del antes y después
está bien cogida por el monje, bien atendida, bien considerada y bien penetrada con sabiduría.
De esta manera, monjes, el monje permanece percibiendo antes y después: ‘Así antes, como
después; así después como antes’.
“¿Y de qué manera, monjes, el monje permanece ‘así abajo, como arriba; así arriba, como
abajo’? He aquí, monjes, el monje revisa este cuerpo hacia arriba desde los pies, y hacia
abajo desde la punta de los cabellos, revisa todo lo que está envuelto por la piel, como algo
que está lleno de diferentes clases de impurezas: cabellos, vellos, uñas, dientes, piel, carne,
tendones, huesos, médula ósea, riñones, corazón, hígado, membrana, bazo, pulmones,
intestinos, mesenterio, comida sin digerir, excremento, cerebro, bilis, flema, pus, sangre,
sudor, grasa, lágrimas, linfa, saliva, moco, sinovia y orín. De esta manera, monjes, el monje
permanece ‘así abajo, como arriba; así arriba, como abajo’.

“¿Y de qué manera, monjes, el monje permanece ‘a sí de día, como de noche; así de noche,
como de día’? He aquí, monjes, cuando el monje desarrolla de noche la base del poder
espiritual dotada de la concentración debido al deseo y las formaciones volitivas del esfuerzo,
de la misma manera, [desarrollando] las mismas cualidades, los mismos rasgos y los mismos
aspectos, que cuando desarrolla la base del poder espiritual durante el día. O, cuando el monje
desarrolla de día la base del poder espiritual dotada de la concentración debido al deseo y las
formaciones volitivas del esfuerzo, de la misma manera, [desarrollando] las mismas
cualidades, los mismos rasgos y los mismos aspectos, que cuando desarrolla la base del poder
espiritual durante la noche. De esta manera, monjes, el monje permanece ‘a sí de día, como
de noche; así de noche, como de día’.

“¿Y de qué manera, monjes, con la mente abierta y no envuelta, el monje desarrolla la mente
imbuida con la luminosidad? He aquí, monjes, la percepción de la luz está bien cogida por
el monje; él está bien resuelto en relación a la percepción del día. De esta manera, monjes,
con la mente abierta y no envuelta, el monje desarrolla la mente imbuida con la luminosidad.

[De manera semejante se desarrolla el análisis de las demás bases ]

“Monjes, cuando estas cuatro bases del poder espiritual se desarrollan y se cultivan de esta
manera, el monje ejerce varias clases del poder espiritual... Con el oído divino, purificado y
que supera el de los seres humanos, él escucha a ambas clases de sonidos: los divinos y los
humanos, provenientes de lejos o de cerca. .. Con su propia mente, él conoce y distingue la
mente de los otros seres o de otras personas... Él se acuerda de sus múltiples vidas pasadas...
A través del ojo divino, purificado y que sobrepasa el humano, ve la muerte de los seres y su
reaparición...

“Monjes, cuando estas cuatro bases del poder espiritual se desarrollan y se cultivan de esta
manera, el monje , con la destrucción de las impurezas mentales, ya en esta vida, el monje
entra y permanece en la mente liberada de las impurezas mentales, en la liberación mediante
la sabiduría, descubriendo por sí mismo el conocimiento directo.

“De esta manera, monjes, cuando estas cuatro bases del poder espiritual se desarrollan y se
cultivan, traen muchos frutos y son de gran beneficio.”

SN 51,20

{67} Esto he oído. En una ocasión, el Venerable Ananda estaba en Kosambi, en el parque
Ghosita. Allí, un brahmín de nombre Unnabha fue a visitar al Venerable Ananda y, al llegar,
intercambió con él cordiales saludos. Cuando concluyó la amable charla de bienvenida, el
brahmín Unnabha se sentó a un lado y se dirigió al Venerable Ananda con estas palabras:
“Maestro Ananda, ¿con qué propósito se vive esta vida santa bajo el asceta Gotama?”

“Brahmín, esta vida santa bajo el asceta Gotama, se vive con el propósito de abandonar el
deseo”.

“Pero, maestro Ananda, ¿existe algún camino, existe la manera de abandonar el deseo?”

“Sí, brahmín, existe el camino y existe la manera de abandonar el deseo.”

“Entonces, maestro Ananda, ¿cuál es el camino y cuál es la manera de abandonar el deseo.

“Brahmín, es el caso del monje que desarrolla la base del poder espiritual dotado de
concentración en el deseo y en las formaciones volitivas del esfuerzo. Él desarrolla la base
del poder espiritual dotado de concentración en la energía y en las formaciones volitivas del
esfuerzo. Él desarrolla la base del poder espiritual dotado de concentración en la resolución
y en las formaciones volitivas del esfuerzo. Él desarrolla la base del poder espiritual dotado
de concentración en la investigación y en las formaciones volitivas del esfuerzo. Éste es el
camino, brahmín, ésta es la manera de abandonar el deseo.”

“Si esto es así, maestro Ananda, entonces se trata de un camino sinfín, de un camino que no
se termina. Es, pues, imposible que alguien pueda abandonar el deseo con el propio deseo.”
“En este caso, brahmín, déjame hacerte una pregunta sobre este tópico. Responda como
mejor te parezca. ¿Qué te parece, brahmín, tuviste o no, previamente un deseo pensando así:
‘Voy a ir al parque’, y cuando llegaste al parque, ha sido este deseo particular disipado?”

“Sí, señor.”

“¿Y no tuviste también, previamente, la energía pensando así: ‘Voy a ir al parque’, y cuando
llegaste al parque, ha sido esta energía particular disipada?”

“Sí, señor.”

“¿Y no tuviste también, previamente, la resolución pensando así: ‘Voy a ir al parque’, y


cuando llegaste al parque, ha sido esta resolución particular disipada?” “Sí, señor.”

“¿Y, previamente brahmín, no estuviste también investigando pensando así: ‘Voy a ir al


parque’, y cuando llegaste al parque, ha sido esta investigación particular disipada?” “Sí,
señor.” “Y es exactamente así también, en caso de un monje que ha llegado a ser un arahant:
que puso fin a las impurezas mentales, vivió una vida santa, concluyó la tarea, bajó sus
cargas, alcanzó la meta suprema, destruyó por completo las cadenas de las futuras existencias
y fue completamente liberado a través del conocimiento final. Él también, previamente, tuvo
el deseo de alcanzar el estado de arahant. Y cuando alcanzó el estado de arahant, este deseo
fue disipado. También, previamente, tuvo la energía para alcanzar el estado de arahant. Y
cuando alcanzó el estado de arahant, esta energía fue disipada. También, previamente, tuvo
la resolución de alcanzar el estado de arahant. Y cuando alcanzó el estado de arahant, esta
resolución fue disipada. También, previamente, estuvo investigando para alcanzar el estado
de arahant. Y cuando alcanzó el estado de arahant, esta investigación fue disipada.

“Entonces, brahmín, ¿qué opinas: es este camino sinfín o es un camino que termina?”

“Estás en lo cierto, maestro Ananda. Este camino es un camino que tiene fin y no un camino
sinfín.

SN 51,15

{68} El Venerable Ananda se acercó al Bienaventurado y, después de rendirle homenaje, se


sentó a un lado y dijo: “Venerable señor, ¿recuerda el Bienaventurado haber ido alguna vez
al mundo del Brama, a través del poder espiritual, con el cuerpo hecho por la mente?
“Sí, Ananda, recuerdo haber ido alguna vez al mundo del Brama, a través del poder espiritual,
con el cuerpo hecho por la mente.”

“Pero, venerable señor, y ¿recuerda el Bienaventurado haber ido alguna vez al mundo del
Brama, a través del poder espiritual, con este cuerpo compuesto de los cuatro grandes
elementos?”

“Sí, Ananda, recuerdo haber ido alguna vez al mundo del Brama, a través del poder espiritual,
con este cuerpo compuesto de los cuatro grandes elementos”.

“El hecho de que el Bienaventurado sea capaz de ir al mundo del Brama a través del poder
espiritual con el cuerpo hecho por la mente y que sea capaz también ir al mundo del Brama
a través del poder espiritual con este cuerpo compuesto de los cuatro grandes elementos, es
un hecho maravilloso y asombroso, venerable señor, por parte del Bienaventurado.” “Los
Tathagatas, Ananda son maravillosos y poseen cualidades maravillosas; los Tathagatas,
Ananda son asombrosos y poseen cualidades asombrosas.

“Ananda, cuando el Tathagata sumerge el cuerpo en la mente y la mente en el cuerpo, y


cuando permanece en la dichosa percepción y en la boyante percepción con respecto al
cuerpo, entonces el cuerpo del Tathagata llega a ser más flotante, maleable, manejable y
luminoso. “Al igual que una bola de hierro, Ananda, calentada todo el día, llega a ser más
flotante, maleable, manejable y luminosa, así también cuando el Tathagata sumerge el cuerpo
en la mente y la mente en el cuerpo, y cuando permanece en la dichosa percepción y en la
boyante percepción con respecto al cuerpo, su cuerpo llega a ser más flotante, maleable,
manejable y luminoso. “Ananda, cuando el Tathagata sumerge el cuerpo en la mente y la
mente en el cuerpo, y
cuando permanece en la dichosa percepción y en la boyante percepción con respecto al
cuerpo, entonces el cuerpo del Tathagata se eleva sin dificultad desde la tierra hacia los aires
y él ejerce varias clases del poder espiritual: s iendo uno, se convierte en muchos y siendo
muchos, se convierte en uno. Aparece y desaparece. Sin impedimento alguno, traspasa las
paredes, terraplenes y montañas, como si fueran aire. Se zambulle dentro de la tierra, como
si fuera agua. Camina sobre el agua sin hundirse, como si fuera tierra seca. Sentado con
piernas cruzadas, atraviesa los aires como si fuera un pájaro sobre el viento.
Con su mano toca y, hasta da palmadas al sol y la luna, así es de imponente y poderoso.
Ejercita la influencia de su cuerpo hasta el mundo del Brama.

“Al igual, Ananda, que un copo de algodón o [un pelo lanoso] del capoc, siendo liviano, es
sostenido por el viento y se eleva sin dificultad desde la tierra hacia los aires, así también
cuando el Tathagata sumerge el cuerpo en la mente y la mente en el cuerpo, y cuando
permanece en la dichosa percepción y en la boyante percepción con respecto al cuerpo, se
eleva sin dificultad desde la tierra hacia los aires y ejerce varias clases del poder espiritual: s
iendo uno, se convierte en muchos… Ejercita la influencia de su cuerpo hasta el mundo del
Brama.”

{69} Monjes, existen estas cinco facultades. ¿Cuáles cinco? La facultad de la fe, la facultad
de la energía, la facultad de la atención consciente, la facultad de la concentración y la
facultad de la sabiduría.

“¿Y dónde, monjes, la facultad de la fe puede ser vista? La facultad de la fe puede ser vista
aquí en los cuatro factores de la entrada en la corriente.

“¿Y dónde, monjes, la facultad de la energía puede ser vista? La facultad de la energía puede
ser vista aquí en los cuatro rectos esfuerzos.

“¿Y dónde, monjes, la facultad de la atención consciente puede ser vista? La facultad de la
atención consciente puede ser vista aquí en los cuatro fundamentos de la atención consciente.

“¿Y dónde, monjes, la facultad de la concentración puede ser vista? La facultad de la


concentración puede ser vista aquí en los cuatro jhanas.

“¿Y dónde, monjes, la facultad de la sabiduría puede ser vista? La facultad de la sabiduría
puede ser vista aquí en las Cuatro Nobles Verdades.

SN 48,8

{70} Factores de la emtrada en la corriente. “Asociarse con las personas de carácter superior,
es el factor de la entrada en la corriente; escuchar el verdadero Dhamma, es el factor de la
entrada en la corriente; poseer una cuidadosa atención, es el factor de la entrada en la
corriente; practicar de acuerdo al Dhamma, es el factor de la entrada en la corriente.

SN 55,5

{71} “¿Y cuáles son los cuatro factores de la entrada a la corriente?

“Este es el caso, dueño de casa, del discípulo del noble que posee una fe inquebrantable en
el Bienaventurado de esta manera: ‘Realmente, el Bienaventurado es un Arahant
perfectamente Iluminado, perfecto en sus acciones y el conocimiento, el Bienhechor, el
conocedor del mundo, insuperable preparador de hombres que han de ser entrenados.
Maestro de los devas y los seres humanos, el Buda, el Bienaventurado’.
“También, él posee una fe inquebrantable en el Dhamma de esta manera: ‘Este Dhamma está
bien expuesto por el Bienaventurado, puede ser conocido aquí y ahora, no está limitado por
el tiempo, sino que puede ser verificado, llevado a la práctica y el sabio lo puede realizar por
sí mismo’. “También, él posee una fe inquebrantable en el Sangha de esta manera: ‘El
Sangha de los discípulos del Bienaventurado practica bien, progresando hacia delante,
practica bien metódicamente, practica bien diligentemente. Es decir, el Sangha de los
discípulos del Bienaventurado se compone de cuatro pares de individuos, de ocho clases de
individuos, por lo cual, el Sangha de los discípulos del Bienaventurado es digno de recibir
dádivas, digno de recibir hospitalidad, digno de recibir ofrendas, digno de ser respetado y se
convierte en un incomparable campo de méritos para el mundo’.
“Él posee las virtudes que son apreciadas por los nobles: es inquebrantable, sin manchas, sin
impurezas, liberado, ponderado por los sabios, conducente hacia la concentración.

AN 10,92

{72} Análisis. “¿Y en qué consiste, monjes, la facultad de la fe? Este es el caso, monjes, del
discípulo de un noble que tiene fe en la Iluminación del Tathagata de esta manera:
‘Realmente, el Bienaventurado es un Arahant perfectamente Iluminado, perfecto en sus
acciones y el conocimiento, el Bienhechor, el conocedor del mundo, insuperable preparador
de hombres que han de ser entrenados. Maestro de los devas y los seres humanos, el Buda,
el Bienaventurado’. Ésta es, monjes, la facultad de la fe.

“¿Y en qué consiste, monjes, la facultad de la energía? Este es el caso, monjes, del discípulo
de un noble que genera el deseo de abandonar a los perjudiciales estados mentales y adquirir
los estados mentales saludables. Él es fuerte en esto, sólido en su esfuerzo, no eludiendo su
tarea concerniente al cultivo de los saludables estados mentales. Él genera el deseo de que
no surjan los malos y perjudiciales estados mentales que aún no han surgido; hace este
esfuerzo, pone en él su energía y a él aplica su mente y su fortaleza. Él genera el deseo de
abandonar los malos y perjudiciales estados mentales que ya han surgido; hace este esfuerzo,
pone en él su energía y a él aplica su mente y su fortaleza. Él genera el deseo de que surjan
los saludables estados mentales que aún no han surgido; hace este esfuerzo, pone en él su
energía y a él aplica su mente y su fortaleza. Él genera el deseo de que permanezcan los
saludables estados mentales que ya han surgido, que los mismos no decaigan sino que
incrementen, se expandan, lleguen a su máximo desarrollo y cumplimiento; hace este
esfuerzo, pone en él su energía y a él aplica su mente y su fortaleza. Ésta es, monjes, la
facultad de la energía.

“¿Y en qué consiste, monjes, la facultad de la atención consciente? Este es el caso, monjes,
del discípulo de un noble que es atento, poseedor de la suprema circunspección, que es capaz
de recordar lo que ha sido dicho o hecho en tiempo muy remoto. Él permanece contemplando
el cuerpo en el cuerpo –ardientemente, con clara compresión y concientemente atento-
habiendo abandonado tanto el deseo como la aversión con respecto al mundo. Él permanece
contemplando las sensaciones en las sensaciones… la mente en la mente… las
construcciones mentales en las construcciones mentales –ardientemente, con clara
compresión y concientemente atento- habiendo abandonado tanto el deseo como la aversión
con respecto al mundo. Ésta es, monjes, la facultad de la atención consciente.

“¿Y en qué consiste, monjes, la facultad de la concentración? Este es el caso, monjes, del
discípulo de un noble que alcanza la concentración que le permite dejar atrás su objeto,
alcanza la unificación de la mente. Separado de la sensualidad, separado de los perjudiciales
estados mentales, entra y permanece en el primer jhana, acompañado por el pensamiento
inicial y analítico, lleno del arrobamiento y placer, nacidos de la reclusión. De esta manera
también, monjes, el esfuerzo no es en vano y las decisiones son fructíferas. A paciguando el
pensamiento inicial y analítico, logrando la calma mental y la unificación de la mente, entra
y permanece en el segundo jhana. Lleno de arrobamiento y placer nacidos de la
concentración, posee la confianza y la unificación de la mente libre del pensamiento inicial
y analítico. Al extinguirse el arrobamiento, permanece ecuánime, con atención consciente y
clara comprensión, sensible a la sensación del placer, del cual los Nobles declararon que
‘Feliz es aquel que mora en la ecuanimidad y en la atención consciente’ y, de esta manera,
entra y permanece en el tercer jhana. Al abandonar tanto el placer como la pena –con la
anterior desaparición de las alegrías y las tristezas- entra y permanece en el cuarto jhana, el
cual va más allá de los placeres y las penas, purificado con la ecuanimidad y atención
consciente. Ésta es, monjes, la facultad de la concentración.

“¿Y en qué consiste, monjes, la facultad de la sabiduría? Este es el caso, monjes, del discípulo
de un noble que es sabio, que posee la sabiduría dirigida hacia el surgir y cesar [de los
fenómenos] –una sabiduría noble, penetrante, que lleva correctamente al fin del sufrimiento.
Él lo conoce tal como realmente es: ‘Este es el sufrimiento, éste es el origen del sufrimiento,
éste es el cese del sufrimiento y éste es el sendero que lleva al cese del sufrimiento’. Ésta es,
monjes, la facultad de la sabiduría.

SN 48,10

{73} M onjes, al igual que la ciudadela real debe poseer un pilar profundamente incrustado,
bien excavado, inamovible y estable -para la protección de sus habitantes y para la
advertencia de los intrusos- el discípulo de un noble debe poseer la fe: él tiene fe en la
Iluminación del Tathagata de esta manera: ‘Realmente, el Bienaventurado es un Arahant
perfectamente Iluminado, perfecto en sus acciones y el conocimiento, el Bienhechor, el
conocedor del mundo, insuperable preparador de hombres que han de ser entrenados.
Maestro de los devas y los seres humanos, el Buda, el Bienaventurado’. Con la fe como su
pilar, el discípulo de un noble abandona los caminos equivocados y toma los correctos;
abandona lo que es censurable y desarrolla lo irreprochable. Él se dirige a sí mismo con
pureza. Ésta es la primera cosa, monjes, de la cual el discípulo de un noble debe estar bien
provisto. “Monjes, al igual que la ciudadela real debe ser rodeada por una fosa profunda y
ancha para la protección de sus habitantes y para la advertencia de los intrusos- el discípulo
de un noble debe permanecer consciente: se avergüenza de la conducta inapropiada realizada
a través de las acciones, palabras o pensamientos; se avergüenza de los caminos torcidos e
incorrectos. Con la conciencia como su fosa, el discípulo de un noble abandona los caminos
equivocados y toma los correctos; abandona lo que es censurable y desarrolla lo
irreprochable. Él se dirige a sí mismo con pureza. Ésta es la segunda cosa, monjes, de la cual
el discípulo de un noble debe estar bien provisto.

“Monjes, al igual que la ciudadela real debe tener una ruta alrededor de ella -para la
protección de sus habitantes y para la advertencia de los intrusos- el discípulo de un noble
debe tener el temor de cometer error: él teme de tener una conducta equivocada en sus
acciones, palabras o pensamientos; él teme a los caminos torcidos e incorrectos. Con el temor
de cometer error como su ruta, el discípulo de un noble abandona los caminos equivocados
y toma los correctos; abandona lo que es censurable y desarrolla lo irreprochable. Él se dirige
a sí mismo con pureza. Ésta es la tercera cosa, monjes, de la cual el discípulo de un noble
debe estar bien provisto.

“Monjes, al igual que la ciudadela real debe tener un gran arsenal de lanzas y espadas -para
la protección de sus habitantes y para la advertencia de los intrusos- el discípulo de un noble
debe escuchar mucho, retener mucho y almacenar mucho las enseñanzas del Dhamma que
es agradable en el principio, agradable en el medio y agradable al final. Debe exponer su
significado en detalle, cumplirlo a cabalidad mediante la vida santa, purificándola a la
perfección, para que aquellos que fueran enseñados por él, sean resueltos a hacer [esta
enseñanza] familiar, meditar en ella y penetrarla mediante el recto entendimiento. Con la
enseñanza como su arsenal, el discípulo de un noble abandona los caminos equivocados y
toma los correctos; abandona lo que es censurable y desarrolla lo irreprochable. Él se dirige
a sí mismo con pureza. Ésta es la cuarta cosa, monjes, de la cual el discípulo de un noble
debe estar bien provisto.

“Monjes, al igual que la ciudadela real debe tener un gran cuerpo de tropas estacionadas
dentro de la ciudadela, como los cuidadores de elefantes, los jinetes, los aurigas, los arqueros,
los portadores de estandartes, oficiales de acantonamiento, cuerpos de solados reservistas,
notables hijos del rey, tropas de asalto, hombres valientes como los poderosos nagas,
hombres valerosos, guerreros con la coraza y los esclavos nacidos en casa -para la protección
de sus habitantes y para la advertencia de los intrusos- el discípulo de un noble debe
permanecer ejercitando la energía para abandonar los perjudiciales estados mentales y
permanecer en los estados mentales saludables; él es fuerte en esto, sólido en su esfuerzo, no
eludiendo su tarea concerniente al cultivo de los saludables estados mentales. Con la energía
como su gran cuerpo de tropas, el discípulo de un noble abandona los caminos equivocados
y toma los correctos; abandona lo que es censurable y desarrolla lo irreprochable. Él se dirige
a sí mismo con pureza. Ésta es la quinta cosa, monjes, de la cual el discípulo de un noble
debe estar bien provisto.

“Monjes, al igual que la ciudadela real debe tener un guardia de la entrada, inteligente, sabio
y atento quien rehúsa la entrada a los desconocidos y permite entrar solamente a los que
conoce -para la protección de sus habitantes y para la advertencia de los intrusos- el discípulo
de un noble debe estar conscientemente atento y poseer los altos grados de la atención
consciente y discernimiento; él es capaz de recordar en su mente las cosas que fueron hechas
y dichas aún en los tiempos muy remotos. Con la atención consciente como su guardia, el
discípulo de un noble abandona los caminos equivocados y toma los correctos; abandona lo
que es censurable y desarrolla lo irreprochable. Él se dirige a sí mismo con pureza. Ésta es
la sexta cosa, monjes, de la cual el discípulo de un noble debe estar bien provisto.

“Monjes, al igual que la ciudadela real debe tener una muralla alta y ancha, cubierta con una
capa de yeso –para la protección de sus habitantes y para la advertencia de los intrusos- el
discípulo de un noble debe tener la sabiduría con la cual se dirige hacia el surgir y cesar [de
los fenómenos] –una sabiduría noble, penetrante, que lleva correctamente al fin del
sufrimiento. Con la sabiduría como su muralla cubierta con la capa de yeso, el discípulo de
un noble abandona los caminos equivocados y toma los correctos; abandona lo que es
censurable y desarrolla lo irreprochable. Él se dirige a sí mismo con pureza. Ésta es la séptima
cosa, monjes, de la cual el discípulo de un noble debe estar bien provisto.

“Éstas son, monjes, las siete cosas de las cuales el discípulo de un noble debe estar bien
provisto.

“¿Y cuáles son, monjes, los cuatro jhanas que ofrecen al discípulo de un noble una
confortable morada aquí y ahora, y que deben ser obtenidos fácilmente y a voluntad?
“Monjes, al igual que en la ciudadela real debe haber gran cantidad de víveres, pastos, madera
y agua, para la conveniencia de sus habitantes, para su confort, para su bienestar y para la
advertencia de los intrusos, así también, monjes, el discípulo de un noble, separado de la
sensualidad, separado de los perjudiciales estados mentales, entra y permanece en el primer
jhana, acompañado por el pensamiento inicial y analítico, lleno del arrobamiento y placer,
nacidos de la reclusión –para su conveniencia, para su confort, para su bienestar y para poder
dirigirse hacia el Nibbana.

“Monjes, al igual que en la ciudadela real debe haber una gran cantidad de arroz y granos
para la conveniencia de sus habitantes, para su confort, para su bienestar y para la advertencia
de los intrusos, así también, monjes, el discípulo de un noble, a paciguando el pensamiento
inicial y analítico, logrando la calma mental y la unificación de la mente, entra y permanece
en el segundo jhana. Lleno de arrobamiento y placer nacidos de la concentración, posee la
confianza y la unificación de la mente libre del pensamiento inicial y analítico –para su
conveniencia, para su confort, para su bienestar y para poder dirigirse hacia el Nibbana.
“Monjes, al igual que en la ciudadela real debe haber una gran cantidad de sésamo, frijoles,
arvejas y cereales para la conveniencia de sus habitantes, para su confort, para su bienestar
y para la advertencia de los intrusos, así también, monjes, el discípulo de un noble, al
extinguirse el arrobamiento, permanece ecuánime, con atención consciente y clara
comprensión, sensible a la sensación del placer, del cual los Nobles declararon que ‘Feliz es
aquel que mora en la ecuanimidad y en la atención consciente’ y, de esta manera, entra y
permanece en el tercer jhana –para su conveniencia, para su confort, para su bienestar y para
poder dirigirse hacia el Nibbana.

“Monjes, al igual que en la ciudadela real debe haber una gran cantidad de medicinas, como
la manteca, manteca fresca, aceite, miel, azúcar y sal, para la conveniencia de sus habitantes,
para su confort, para su bienestar y para la advertencia de los intrusos, así también, monjes,
el discípulo de un noble, al abandonar tanto el placer como la pena –con la anterior
desaparición de las alegrías y las tristezas- entra y permanece en el cuarto jhana, el cual va
más allá de los placeres y las penas, purificado con la ecuanimidad y atención consciente –
para su conveniencia, para su confort, para su bienestar y para poder dirigirse hacia el
Nibbana.

“Éstos son, monjes, los cuatro jhanas que ofrecen al discípulo de un noble una confortable
morada aquí y ahora, y que deben ser obtenidos fácilmente y a voluntad.

“Monjes, cuando el discípulo de un noble está bien provisto de estas siete cosas y puede
obtener fácilmente y a voluntad estos cuatro jhanas que le ofrecen una confortable morada
aquí y ahora, se dice que el discípulo de un noble no puede ser desecho por el Mara, no puede
ser desecho por el Malvado.”

AN 7,63

{74} [El Buda:] “Dime, Saruputta, ¿es posible que el discípulo de un noble que esté
completamente dedicado al Tathagata y posea plena confianza en él, albergue alguna
perplejidad o duda con respecto al Tathagata o su enseñanza?”

[Sariputta:] “No, venerable señor: es imposible que el discípulo de un noble que esté
completamente dedicado al Tathagata y posea plena confianza en él, albergue alguna
perplejidad o duda con respecto al Tathagata o su enseñanza. Por el contrario, es de esperar,
venerable señor, que el discípulo de un noble que posea la fe, permanezca esforzándose para
abandonar los perjudiciales estados mentales y adquirir los estados mentales saludables. Que
sea fuerte en esto, sólido en su esfuerzo, no eludiendo su tarea concerniente al cultivo de los
saludables estados mentales. De esta manera, venerable señor, su energía se convierte para
él, en la facultad de la energía.

“Es de esperar también, venerable señor, que el discípulo de un noble que posea la fe y
permanezca esforzándose, sea conscientemente atento, posea la suprema circunspección y
sea capaz de recordar lo que ha sido dicho o hecho en tiempo muy remoto. De esta manera,
venerable señor, su atención consciente se convierte para él, en la facultad de la atención
consciente. “Es de esperar también, venerable señor, que el discípulo de un noble que posea
la fe, permanezca esforzándose y esté conscientemente atento, esté bien concentrado y
alcance la unificación mental. De esta manera, venerable señor, su concentración se convierte
para él, en la facultad de la concentración.

“Es de esperar también, venerable señor, que el discípulo de un noble que posea la fe,
permanezca esforzándose, esté conscientemente atento y bien concentrado, tenga este
discernimiento: ‘Éste samsara carece de algún comienzo cognoscible. No es evidenciable el
punto de partida, en el cual los seres, obstruidos por la ignorancia y encadenados por la
avidez, empezaron a recorrer este camino de interminables nacimientos. Pero con la total
desaparición y el cese de la ignorancia, [el cese] de toda esta masa de oscuridad, surge un
estado de la paz exquisita, un estado sublime que calma todas las formaciones, que libera de
todas las adquisiciones y destruye la avidez; un estado desapasionado del cese, el Nibbana’.
De esta manera, venerable señor, su sabiduría se convierte para él, en la facultad de la
sabiduría.

“Finalmente, venerable señor, cuando el discípulo de un noble continuamente se esfuerza de


esta manera, cuando continuamente se recuerda de esta manera, continuamente concentra su
mente de esta manera y continuamente discierne con sabiduría de esta manera, entonces,
venerable señor, este discípulo de un noble alcanza una fe inquebrantable de la siguiente
manera: ‘Mientras que anteriormente yo solo conocía estas cosas de oídas, ahora yo puedo
permanecer conectado con ellas a través de mi cuerpo, puedo penetrarlos con mi
entendimiento, puedo ver’. De esta manera, venerable señor, su fe se convierte para él, en la
facultad de la fe”.

SN 48,50

{75 } “Esto es igual que con una casa [en construcción], monjes: mientras que las viseras del
techo aún no están puestas en su lugar, las vigas no pueden ser estables ni firmes. Pero una
vez que las viseras del techo sean colocadas en su lugar, las vigas se vuelven estables y
firmes. De la misma manera, monjes, mientras que el noble conocimiento no surja en el
discípulo de un noble, las otras cuatro facultades no pueden ser estables ni firmes. Pero,
cuando el noble conocimiento surge en el discípulo de un noble, las otras cuatro facultades
se vuelven estables y firmes."

SN 48,52

{76} “Monjes, al desarrollar y cultivar dos facultades, el monje que ha destruido las
impurezas mentales declara su conocimiento final. ¿Cuáles dos? La noble sabiduría y la
noble liberación. Para él, la noble sabiduría es la facultad de sabiduría y la noble liberación
es la facultad de concentración."

SN 48,46

{77} “Monjes, al igual que entre los durámenes, el sándalo rojo es declarado como el
principal, así también, entre los estados que conducen a la Iluminación, la facultad de la
sabiduría es declarada como la principal; es así, cuando se refiere al alcance de la
Iluminación.

“¿Y cuáles son, monjes, las otras facultades que conducen a la Iluminación? La facultad de
la fe es la facultad que conduce a la Iluminación, la facultad de la energía… facultad de la
atención consciente y la facultad de la concentración es la facultad que conduce a la
Iluminación”.

SN 48,55

{78} “Monjes, cuando el monje está firmemente establecido en una sola cosa, las cinco
facultades están desarrolladas y bien desarrolladas en él. ¿Y qué es esta cosa, monjes? Es la
diligencia. “¿Y en qué consiste monjes, la diligencia? He aquí, monjes, el monje resguarda
su mente de las contaminaciones y de los estados mentales contaminados. Mientras él
resguarda su mente de esta manera, la facultad de la fe llega a desarrollarse plenamente en
él; mientras él resguarda su mente de esta manera, la facultad de la energía… la facultad de
la atención consciente… la facultad de la concentración llega a desarrollarse plenamente en
él.

“De esta manera, monjes, cuando el monje está firmemente establecido en una sola cosa, las
cinco facultades están desarrolladas y bien desarrolladas en él.
SN 48,56 {79} “Monjes, al igual que las huellas de toda clase de animales con patas pueden
ser abarcadas por la huella de un elefante y la huella del elefante es reconocida como la
principal entre ellas, así también todos los saludables estados mentales están enraizados en
la vigilancia, unidos a la vigilancia y la vigilancia es reconocida como el principal [estado
mental] entre ellos...

“Monjes, al igual que la luz de las constelaciones no se iguala ni a la decimosexta parte de la


luz de la Luna, y la luz de la Luna es reconocida como la principal entre ellas, así también
todos los saludables estados mentales están enraizados en la vigilancia, unidos a la vigilancia
y la vigilancia es reconocida como el principal [estado mental] entre ellos."

AN 10,15

{80} "La atención es el camino hacia la inmortalidad; la inatención es el sendero hacia la


muerte. Los que están atentos no mueren; los inatentos son como si ya hubieran muerto."

Dhp 21

{81} “No revivas el pasado

Ni vivas espectando el futuro;

Deja atrás el pasado

El futuro, aún no ha llegado.

Pero mira claramente

A cada uno de los estados que surgen en el presente.

Que te sean conocidos tal cual son y que estés seguro de ellos; Pero que

seas, [en relación a ellos], invencible e inamovible.

Hoy el esfuerzo debe ser hecho:

Mañana llegará la muerte, ¿quién sabe?

No regateando con lo que es mortal,

Mandando fuera sus hordas,


Alguien que mora ardientemente

No aflojando de día ni de noche,

Es llamado por el Pacífico Sabio

‘Uno que ha tenido un día auspicioso’

MN 131

{82} “Monjes, la atención consciente puesta en la muerte, cuando se la desarrolla y


perfecciona, es muy fructífera y beneficiosa. Se fusiona con la inmortalidad y la inmortalidad
es su consumación. De modo que, debéis practicar la atención consciente puesta en la
muerte”.

Cuando esto fue dicho, cierto monje se dirigió al Bienaventurado y dijo: “Venerable señor,
yo practico ya la atención consciente puesta en la muerte”.

“Y de qué manera practicas tú la atención consciente puesta en la muerte?”

“Yo pienso: ‘Oh, si yo viviese un día y una noche, atendiendo las palabras del
Bienaventurado, podría conseguir la realización de la gran meta.’ Así yo practico la
atención consciente puesta en la muerte”.

Entonces, otro monje se dirigió al Bienaventurado y dijo: “Venerable señor, yo también


practico ya la atención consciente puesta en la muerte”.

“Y de qué manera practicas tú la atención consciente puesta en la muerte?”

“Yo pienso: ‘Oh, si yo viviese un día, atendiendo las palabras del Bienaventurado, podría
conseguir la realización de la gran meta.’ Así yo practico la atención consciente puesta en la
muerte”.

Luego, otro monje se dirigió al Bienaventurado y dijo: “Venerable señor, yo también practico
ya la atención consciente puesta en la muerte”.

“Y de qué manera practicas tú la atención consciente puesta en la muerte?”

“Yo pienso: ‘Oh, si yo viviese por el intervalo que dura consumir una comida, atendiendo
las palabras del Bienaventurado, podría conseguir la realización de la gran meta.’ Así yo
practico la atención consciente puesta en la muerte”.
Después, otro monje se dirigió al Bienaventurado y dijo: “Venerable señor, yo también
practico ya la atención consciente puesta en la muerte”.

“Y de qué manera practicas tú la atención consciente puesta en la muerte?”

“Yo pienso: ‘Oh, si yo viviese por el intervalo que dura tragar y masticar cuatro bocados de
comida, atendiendo las palabras del Bienaventurado, podría conseguir la realización de la
gran meta.’ Así yo practico la atención consciente puesta en la muerte”.

Entonces, otro monje se dirigió al Bienaventurado y dijo: “Venerable señor, yo también


practico ya la atención consciente puesta en la muerte”.

“Y de qué manera practicas tú la atención consciente puesta en la muerte?”

“Yo pienso: ‘Oh, si yo viviese por el intervalo que dura tragar y masticar un sólo bocado de
comida, atendiendo las palabras del Bienaventurado, podría conseguir la realización de la
gran meta.’ Así yo practico la atención consciente puesta en la muerte”.

Luego, otro monje se dirigió al Bienaventurado y dijo: “Venerable señor, yo también practico
ya la atención consciente puesta en la muerte”.

“Y de qué manera practicas tú la atención consciente puesta en la muerte?”

“Yo pienso: ‘Oh, si yo viviese por el intervalo que dura una inhalación del aire después de
la exhalación o una exhalación después de la inhalación, atendiendo las palabras del
Bienaventurado, podría conseguir la realización de la gran meta.’ Así yo practico la atención
consciente puesta en la muerte”.

Cuando esto fue dicho, el Bienaventurado se dirigió a los monjes con estas palabras:
“Cualquiera de practica la atención consciente puesta en la muerte pensando: ‘Oh, si yo
viviese un día y una noche... Oh, si yo viviese un día... Oh, si yo viviese por el intervalo que
dura consumir una comida... Oh, si yo viviese por el intervalo que dura tragar y masticar
cuatro bocados de comida, podría conseguir la realización de la gran meta’ – practica
descuidadamente y el desarrollo de la atención consciente puesta en la muerte, sólo muy
lentamente le servirá para poner fin a las impurezas.

“Pero aquel que practica la atención consciente puesta en la muerte pensando: ‘Oh, si yo
viviese por el intervalo que dura tragar y masticar un sólo bocado de comida... Oh, si yo
viviese por el intervalo que dura una inhalación del aire después de la exhalación o una
exhalación después de la inhalación, podría conseguir la realización de la gran meta’ –
practica atentamente y el desarrollo de la atención consciente puesta en la muerte,
plenamente le servirá para poner fin a las impurezas.
Así que, monjes, debéis practicar de esta manera: ‘Vamos a morar en la atención. Vamos a
desarrollar la atención consciente plenamente, para poner fin a las impurezas.’ De esta forma
debéis practicar”

AN 6,19

{83} Y el Bienaventurado se dirigió a los monjes, diciendo: “Ahora, monjes, os declaro esto:
todas las cosas condicionadas, están destinadas a desparecer. ¡Esforzaos fervientemente!” Y
estas fueron las últimas palabras del Tathagata.

DN 16 {84} “Monjes, existen estas cuatro maneras de progresar. ¿Cuáles cuatro? La manera
penosa de progresar con la intuición lenta. La manera penosa de progresar con la intuición
rápida. La manera placentera de progresar con la intuición lenta y la manera placentera de
progresar con la intuición rápida.

“¿Y cómo es, monjes, la manera penosa de progresar con la intuición lenta? Este es el caso
de alguien, cuya naturaleza es intensamente apasionada. Entonces, él experimenta
continuamente la pena y el desaliento a causa de la pasión. Igualmente, es el caso de alguien,
cuya naturaleza es intensamente aborrecedora. Entonces, él experimenta continuamente la
pena y el desaliento a causa del aborrecimiento. Igualmente, es el caso de alguien, cuya
naturaleza es intensamente enceguecida. Entonces, él experimenta continuamente la pena y
el desaliento a causa de la falsa ilusión. En tal individuo, las cinco facultades –la facultad de
la fe, la facultad de la energía, la facultad de la atención consciente, la facultad de la
concentración y la facultad de la sabiduría- son débiles e inactivas. Debido a la debilidad de
las cinco facultades, sus logros, que llevan a poner fin de las impurezas mentales, son lentos.
Ésta es, monjes, la manera penosa de progresar con la intuición lenta.

“¿Y cómo es, monjes, la manera penosa de progresar con la intuición rápida? Este es el caso
de alguien, cuya naturaleza es intensamente apasionada. Entonces, él experimenta
continuamente la pena y el desaliento a causa de la pasión. Igualmente, es el caso de alguien,
cuya naturaleza es intensamente aborrecedora. Entonces, él experimenta continuamente la
pena y el desaliento a causa del aborrecimiento. Igualmente, es el caso de alguien, cuya
naturaleza es intensamente enceguecida. Entonces, él experimenta continuamente la pena y
el desaliento a causa de la falsa ilusión. Pero, en este individuo, las cinco facultades –la
facultad de la fe, la facultad de la energía, la facultad de la atención consciente, la facultad
de la concentración y la facultad de la sabiduría- son agudas. Debido a la agudeza de las
cinco facultades, sus logros, que llevan a poner fin de las impurezas mentales, son rápidos.
Ésta es, monjes, la manera penosa de progresar con la intuición rápida.

“¿Y cómo es, monjes, la manera placentera de progresar con la intuición lenta? Este es el
caso de alguien, cuya naturaleza no es intensamente apasionada. Entonces, él no experimenta
continuamente ni pena ni el desaliento a causa de la falta de pasión. Igualmente, es el caso
de alguien, cuya naturaleza no es intensamente aborrecedora. Entonces, él no experimenta
continuamente ni pena ni el desaliento a causa de la falta del aborrecimiento. Igualmente, es
el caso de alguien, cuya naturaleza no es intensamente enceguecida. Entonces, él no
experimenta continuamente ni pena ni el desaliento a causa de la ausencia de falsa ilusión.
En tal individuo, las cinco facultades –la facultad de la fe, la facultad de la energía, la facultad
de la atención consciente, la facultad de la concentración y la facultad de la sabiduría- son
débiles e inactivas. Debido a la debilidad de las cinco facultades, sus logros, que llevan a
poner fin de las impurezas mentales, son lentos. Ésta es, monjes, la manera placentera de
progresar con la intuición lenta.

“¿Y cómo es, monjes, la manera placentera de progresar con la intuición rápida? Este es el
caso de alguien, cuya naturaleza no es intensamente apasionada. Entonces, él no experimenta
continuamente ni pena ni el desaliento a causa de la falta de pasión. Igualmente, es el caso
de alguien, cuya naturaleza no es intensamente aborrecedora. Entonces, él no experimenta
continuamente ni pena ni el desaliento a causa de la falta del aborrecimiento. Igualmente, es
el caso de alguien, cuya naturaleza no es intensamente enceguecida. Entonces, él no
experimenta continuamente ni pena ni el desaliento a causa de la ausencia de la falsa ilusión.
Además, en este individuo, las cinco facultades –la facultad de la fe, la facultad de la energía,
la facultad de la atención consciente, la facultad de la concentración y la facultad de la
sabiduría- son agudas. Debido a la agudeza de las cinco facultades, sus logros, que llevan a
poner fin a las impurezas mentales, son rápidos. Ésta es, monjes, la manera placentera de
progresar con la intuición rápida.

“Éstas son, monjes, las cuatro maneras de progresar.”

AN 4,162

{85} “Monjes, existen estas cuatro maneras de progresar. ¿Cuáles cuatro? La manera penosa
de progresar con la intuición lenta. La manera penosa de progresar con la intuición rápida.
La manera placentera de progresar con la intuición lenta y la manera placentera de progresar
con la intuición rápida.

“¿Y cómo es, monjes, la manera penosa de progresar con la intuición lenta? Este es caso del
monje que permanece contemplando lo repulsivo en relación al cuerpo. Él permanece atento
a lo repulsivo en relación a la comida, atento al desencanto producido por todas las cosas
mundanas, atento a la impermanencia de todos los fenómenos surgidos. La contemplación
de la muerte está firmemente establecida en él. Su vida depende de estas cinco fortalezas:
fortaleza de la confianza, fortaleza de la modestia, fortaleza de la autorestricción, fortaleza
de la persistencia y fortaleza de la sabiduría. Además, las cinco facultades –la facultad de la
fe, la facultad de la energía, la facultad de la atención consciente, la facultad de la
concentración y la facultad de la sabiduría- son débiles e inactivas. Debido a la debilidad de
las cinco facultades, sus logros, que llevan a poner fin de las impurezas mentales, son lentos.
Ésta es, monjes, la manera penosa de progresar con la intuición lenta.

“¿Y cómo es, monjes, la manera penosa de progresar con la intuición rápida? Este es caso
del monje que permanece contemplando lo repulsivo en relación al cuerpo. Él permanece
atento a lo repulsivo en relación a la comida, atento al desencanto producido por todas las
cosas mundanas, atento a la impermanencia de todos los fenómenos surgidos. La
contemplación de la muerte está firmemente establecida en él. Su vida depende de estas cinco
fortalezas: fortaleza de la confianza, fortaleza de la modestia, fortaleza de la autorestricción,
fortaleza de la persistencia y fortaleza de la sabiduría. Sin embargo, las cinco facultades –la
facultad de la fe, la facultad de la energía, la facultad de la atención consciente, la facultad
de la concentración y la facultad de la sabiduría- son agudas. Debido a la agudeza de las
cinco facultades, sus logros, que llevan a poner fin de las impurezas mentales, son rápidos.
Ésta es, monjes, la manera penosa de progresar con la intuición rápida.

“¿Y cómo es, monjes, la manera placentera de progresar con la intuición lenta? Este es el
caso del monje que, aislado de los placeres sensuales, aislado de los perjudiciales estados
mentales, entra y permanece en el primer jhana... entra y permanece en el segundo jhana...
entra y permanece en el tercer jhana... entra y permanece en el cuarto jhana... Además, s u
vida depende de estas cinco fortalezas: fortaleza de la confianza, fortaleza de la modestia,
fortaleza de la auto-restricción, fortaleza de la persistencia y fortaleza de la sabiduría. Sin
embargo, las cinco facultades –la facultad de la fe, la facultad de la energía, la facultad de la
atención consciente, la facultad de la concentración y la facultad de la sabiduría- son débiles
e inactivas. Debido a la debilidad de las cinco facultades, sus logros, que llevan a poner fin
de las impurezas mentales, son lentos. Ésta es, monjes, la manera placentera de progresar
con la intuición lenta.

“¿Y cómo es, monjes, la manera placentera de progresar con la intuición rápida? Este es el
caso del monje que, aislado de los placeres sensuales, aislado de los perjudiciales estados
mentales, entra y permanece en el primer jhana… entra y permanece en el segundo jhana…
entra y permanece en el tercer jhana… entra y permanece en el cuarto jhana… Además, s u
vida depende de estas cinco fortalezas: fortaleza de la confianza… fortaleza de la sabiduría.
Además, las cinco facultades –la facultad de la fe, la facultad de la energía, la facultad de la
atención consciente, la facultad de la concentración y la facultad de la sabiduría- son agudas.
Debido a la agudeza de las cinco facultades, sus logros, que llevan a poner fin de las
impurezas mentales, son rápidos. Ésta es, monjes, la manera placentera de progresar con la
intuición rápida.
“Éstas son, monjes, las cuatro maneras de progresar.”

AN 4,163

{86} He escuchado que en una ocasión el Bienaventurado estaba morando cerca de Rajagaha
en la montaña Pico de Buitre. Al mismo tiempo, el Venerable Sona también estaba morando
cerca de Rajagaha en un bosque fresco. Entonces, el Venerable Sona, mientras estaba
meditando en la reclusión, tuvo este pensamiento que surgió en su mente: “Entre los
discípulos del Bienaventurado que han activado la energía, ciertamente soy uno de ellos;
pero, sin embargo, mi mente no ha sido liberada de las impurezas ni está libre del apego.
Ahora bien, mi familia tiene muchas riquezas y yo podría disfrutar de ellas haciendo el bien
al mismo tiempo. ¿Qué tal si renuncio a mis votos y retorno a la vida más baja para disfrutar
de las riquezas y, al mismo tiempo, hacer el bien?”

“Entonces, el Bienaventurado, tan pronto como hubo percibido este pensamiento del
Venerable Sona a través de su propia mente –al igual que un hombre fuerte dobla su mano
extendida o extiende su mano doblada- despareció de la montaña Pico de Buitre y apareció
en el bosque fresco justo frente del Venerable Sona. Estando ahí, tomó el asiento que estaba
preparado para él, mientras que el Venerable Sona homenajeó al Bienaventurado y se sentó
a un lado. Estando sentado ahí, el Bienaventurado dijo:

“Sona, al estar meditando hace un rato en la reclusión, ¿has tenido este pensamiento que
surgió en tu mente: ‘Entre los discípulos del Bienaventurado que han activado la energía,
ciertamente soy uno de ellos; pero, sin embargo, mi mente no ha sido liberada de las
impurezas ni está libre del apego. Ahora bien, mi familia tiene muchas riquezas y yo podría
disfrutar de ellas haciendo el bien al mismo tiempo. ¿Qué tal si renuncio a mis votos y retorno
a la vida más baja para disfrutar de las riquezas y, al mismo tiempo, hacer el bien?’”

“Sí, señor”.

“Ahora, ¿es cierto, Sona, que antes, cuando eras todavía un hombre hogareño, tuviste la
habilidad de tocar el laúd?”

“Sí, señor”

“Entonces dime, Sona: ¿cuando las cuerdas de tu laúd estaban demasiado estiradas, estaba
tu laúd afinado y sonaba bien?” “No, señor”.
“Y dime otra cosa, Sona: ¿cuando las cuerdas de tu laúd estaban demasiado flojas, estaba tu
laúd afinado y sonaba bien?” “No, señor”.

“Entonces, ¿es cierto, Sona, que cuando las cuerdas de tu laúd no estaban demasiado
estiradas ni tampoco estaban demasiado flojas, sino que estaban bien establecidas en el tono
medio, estaba tu laúd afinado y sonaba bien?”

“Sí, señor”.

“De la misma manera, Sona, cuando se suscita la energía en exceso, se termina con la
intranquilidad, mientras que la energía excesivamente floja lleva a la pereza. Por eso, Sona,
debes establecer un término medio de la energía, procurar afinarla con [el resto de las cinco]
facultades y entender su valor real.

“Sí, señor”, respondió el Venerable Sona al Bienaventurado.

Entonces, al haber ofrecido esta exhortación al Venerable Sona, el Bienaventurado –al que
un hombre fuerte dobla su mano extendida o extiende su mano doblada- despareció del
bosque freso y apareció en la montaña Pico de Buitre.

Después de esto, el Venerable Sona estableció el término medio para su energía, afinó su
energía con [el resto de las cinco] facultades y entendió su valor real. Y morando solo,
recluido, atento, ardiente y resuelto, en poco tiempo, alcanzó la meta suprema de la vida
santa y permaneció en ella; la meta, por la cual los hombres de sociedad, correctamente,
abandonan la vida hogareña para vivir el estilo de vida sin hogar, conociendo y
descubriéndola por sí mismo aquí y ahora. Él supo: “El nacimiento ha terminado, la vida
santa ha sido vivida, la tarea ha sido hecha y he aquí que no hay nada más qué hacer en este
mundo”. De esta manera, el Venerable Sona llegó a ser uno de los arahants.

AN 6,55

{87} “Monjes, pues sí existe el método a través del cual el monje que es un aprendiz, que
está en el plano del aprendizaje, pueda discernir: ‘Soy un aprendiz’, mientras que el monje
que trascendió el aprendizaje, que es uno que está más allá del aprendizaje, pueda discernir:
‘soy uno que está más allá del aprendizaje’.

“¿Y cuál es, monjes, el método a través del cual el monje que es un aprendiz, que está en el
plano del aprendizaje, pueda discernir: ‘Soy un aprendiz’?
“He aquí, monjes, el caso del monje que es un aprendiz y discierne tal cual es lo siguiente:
‘Esto es el sufrimiento’; él discierne tal cual es lo siguiente: ‘Este es el origen sufrimiento’;
él discierne tal cual es lo siguiente: ‘Este es el cese del sufrimiento’ y él discierne tal cual es
lo siguiente: ‘Este es el camino que conduce al cese del sufrimiento’. Este es el método,
monjes, a través del cual el monje que es un aprendiz, que está en el plano del aprendizaje,
pueda discernir: ‘Soy un aprendiz’.

“Además, monjes, el monje que es un aprendiz, considera esto: ‘¿Existe fuera de esto [2]
otro asceta o brahmín que enseñe el Dhamma de una manera tan real, verdadera y efectiva
como lo hace el Bienaventurado?’ Entonces, él discierne esto: ‘Realmente, fuera de esto, no
hay otro asceta o brahmín que enseñe el Dhamma de manera tan real, verdadera y efectiva
como lo hace el Bienaventurado’. Este también, monjes, es un otro método a través del cual
el monje que es un aprendiz, que está en el plano del aprendizaje, pueda discernir: ‘Soy un
aprendiz’. “Además, monjes, el monje que es un aprendiz, discierne las cinco facultades
espirituales: facultad de la fe, facultad de la energía, facultad de la atención consciente,
facultad de la concentración y facultad de la sabiduría. Él divisó ya y vio claramente su
destino, su culminación, su fruto, su meta última, pero todavía no ha tocado esto con el
cuerpo. Este también, monjes, es un otro método a través del cual el monje que es un
aprendiz, que está en el plano del aprendizaje, pueda discernir: ‘Soy un aprendiz’.

“¿Y cuál es, monjes, el método a través del cual el monje que trascendió el aprendizaje, que
es uno que está más allá del aprendizaje, pueda discernir: ‘soy uno que está más allá del
aprendizaje’? “He aquí, monjes, el caso del monje que es uno que está más allá del
aprendizaje, discierne las cinco facultades espirituales: facultad de la fe… facultad de la
sabiduría. Él divisó ya y vio claramente su destino, su culminación, su fruto, su meta última.
Pero también, monjes, él permanece tocando esto con el cuerpo. Este es, monjes, el método
a través del cual el monje que trascendió el aprendizaje, que es uno que está más allá del
aprendizaje, pueda discernir: ‘Soy uno que está más allá del aprendizaje’.

“Además, monjes, el monje que es uno que está más allá del aprendizaje, discierne las seis
facultades: facultad del ojo, facultad del oído, facultad de la nariz, facultad de la lengua,
facultad del cuerpo y facultad de la mente. Él discierne de esta manera: ‘Estas seis facultades
van a cesar por completo, totalmente y sin residuos; y ningunas otras seis facultades van a
surgir en ninguna parte y de ninguna manera’. Este también, monjes, es otro método a través
del cual el monje que trascendió el aprendizaje, que es uno que está más allá del aprendizaje,
pueda discernir: ‘Soy uno que está más allá del aprendizaje’”.

SN 48,53
{88} Monjes, cuando el discípulo de un noble discierne tal cual son estas cinco facultades
espirituales –su origen y su desaparición, su atracción y su peligro, como también la
liberación de ellas- él es llamado el discípulo de un noble que ha ganado la entrada en la
corriente, uno que no está más sujeto a la perdición, seguro de su destino que es la
Iluminación […] Monjes, habiendo discernido tal cual son estas cinco facultades –su origen
y su desaparición, su atracción y su peligro, como también la liberación de ellas- el monje es
liberado a través del no-apego, entonces él es llamado el monje que es un arahant… " SN
48, 3.5 {89} “Sariputta, ¿tienes fe en que, cuando la facultad de la fe es cultivada y
desarrollada, tiene lo Inmortal como fundamento, lo Inmortal como destino y lo Inmortal
como meta final? ¿Tienes fe en que, cuando la facultad de la energía… la facultad de la
atención consciente… la facultad de la concentración… la facultad de la sabiduría es
cultivada y desarrollada, tiene lo Inmortal como fundamento, lo Inmortal como destino y lo
Inmortal como meta final?

“Venerable señor, no es por fe en el Bienaventurado que, cuando la facultad de la fe es


cultivada y desarrollada, tiene lo Inmortal como fundamento, lo Inmortal como destino y lo
Inmortal como meta final. No es por fe en el Bienaventurado que, cuando la facultad de la
energía… la facultad de la atención consciente… la facultad de la concentración… la
facultad de la sabiduría es cultivada y desarrollada, tiene lo Inmortal como fundamento, lo
Inmortal como destino y lo Inmortal como meta final. Aquellos, para los cuales esto no ha
sido conocido, no ha sido visto, no ha sido discernido, no ha sido realizado ni ha sido
penetrado con sabiduría, pueden tomarlo por fe en otros, que cuando la facultad de la fe es
cultivada y desarrollada, tiene lo Inmortal como fundamento, lo Inmortal como destino y lo
Inmortal como meta final. Que, cuando la facultad de la energía… la facultad de la atención
consciente… la facultad de la concentración… la facultad de la sabiduría es cultivada y
desarrollada, tiene lo Inmortal como fundamento, lo Inmortal como destino y lo Inmortal
como meta final. Sin embargo, aquellos para los cuales esto ha sido conocido, ha sido visto,
ha sido discernido, ha sido realizado y ha sido penetrado con sabiduría, no tienen
incertidumbre ni dudas sobre que, cuando la facultad de la fe es cultivada y desarrollada,
tiene lo Inmortal como fundamento, lo Inmortal como destino y lo Inmortal como meta final.
Que, cuando la facultad de la energía… la facultad de la atención consciente… la facultad
de la concentración… la facultad de la sabiduría es cultivada y desarrollada, tiene lo Inmortal
como fundamento, lo Inmortal como destino y lo Inmortal como meta final.

{90} “Monjes, existen estos cinco poderes. ¿Cuáles cinco? El poder de la fe, el poder de la
energía, el poder de la atención consciente, el poder de la concentración y el poder de la
sabiduría. Éstos son, monjes, los cinco poderes.
“Al igual que el río Ganges fluye hacia el este, se inclina hacia el este, ladea hacia el este, de
la misma manera, el monje que cultiva y desarrolla estos cinco poderes fluye, se inclina y
ladea hacia el Nibbana.

“¿Y cómo, monjes, el monje cultiva y desarrolla estos cinco poderes, para que fluya, se
incline y ladee hacia el Nibbana?

“He aquí, monjes, el monje desarrolla el poder de la fe originado en la reclusión, en el


desapacionamiento, en el cese y en el renunciamiento. Él desarrolla el poder de la energía…
el poder de la atención consciente… el poder de la concentración… el poder de la sabiduría
originado en la reclusión, en el desapacionamiento, en el cese y en el renunciamiento.

“De esta manera, monjes, el moje cultiva y desarrolla estos cinco poderes, para que fluya, se
incline y ladee hacia el Nibbana.”

SN 50,1

{91} “Monjes, pues sí existe la manera de considerar las cinco facultades como si fueran lo
mismo que los cinco poderes y los cinco poderes como si fueran lo mismo que las cinco
facultades. ¿Y cuál es esta manera?

“Que lo que es la facultad de la fe, es el poder de la fe y lo que es el poder de la fe, es la


facultad de la fe. También, que lo que es la facultad de la energía, es el poder de la energía y
lo que es el poder de la energía, es la facultad de la energía. También, que lo que es la facultad
de la atención consciente, es el poder de la atención consciente y lo que es el poder de la
atención consciente, es la facultad de la atención consciente. También, que lo que es la
facultad de la concentración, es el poder de la concentración y lo que es el poder de la
concentración, es la facultad de la concentración. También, que lo que es la facultad de la
sabiduría, es el poder de la sabiduría y lo que es el poder de la sabiduría, es la facultad de la
sabiduría.

“Imaginad, monjes, a un río que fluye, se inclina y ladea hacia el este con una isla en el
medio. En este caso, hay una manera de considerar este río como él de una sola corriente y
hay otra manera de considerar este río como él de dos corrientes.

“¿Y cuál es la manera, monjes, de considerar este río como él de una sola corriente?
Considerando el agua que rodea a la isla por el lado este y el agua que rodea a la isla por el
lado oeste. Ésta es la manera, monjes, de considerar este río como él de una sola corriente.
“¿Y cuál es la manera, monjes, de considerar este río como él de dos corrientes?
Considerando el agua que rodea a la isla por el lado norte y el agua que rodea a la isla por el
lado sur. Ésta es la manera, monjes, de considerar este río como él de dos corrientes.

“De la misma manera, monjes, lo que es la facultad de la fe, es el poder de la fe y lo que es


el poder de la fe, es la facultad de la fe… También, lo que es la facultad de la sabiduría, es
el poder de la sabiduría y lo que es el poder de la sabiduría, es la facultad de la sabiduría.

Pasajes del Canon Pali {92-100}

{92} En una ocasión, el Bienaventurado estaba morando en Saketa en el parque de los


Venados de la arboleda Añjana. Entonces, un asceta errante de nombre Kundaliya se acercó
al Bienaventurado e intercambió con él cordiales saludos. Cuando concluyeron sus amigables
palabras de bienvenida, el asceta errante Kundaliya se dirigió al Bienaventurado con estas
palabras:

“Maestro Gotama, yo soy uno de los que frecuenta a las asambleas en los parques. Después
de comer, cuando termino mi desayuno, tengo la costumbre de vagar y recorrer de un parque
a otro o de un jardín a otro. Allí veo a algunos ascetas y brahmines ocupados en discusiones
que tienen por objeto defender sus propios dogmas y condenar los dogmas de otros. Pero,
¿cuál es el beneficio de la vida del maestro Gotama?”

“Kundaliya, el Tathagata vive para el beneficio y el fruto del verdadero conocimiento y


liberación”.

“Pero, maestro Gotama, ¿cuáles son las cosas que, cuando son cultivadas y desarrolladas,
conducen a la realización del verdadero conocimiento y liberación?”

“Kundaliya, los siete factores de Iluminación, cuando son cultivados y desarrollados,


conducen a la realización del verdadero conocimiento y liberación.”

“Pero, maestro Gotama, ¿cuáles son las cosas que, cuando son cultivadas y desarrolladas,
conducen a la realización de los siete factores de Iluminación?”

“Kundaliya, los cuatro fundamentos de la atención consciente, cuando son cultivados y


desarrollados, conducen a la realización de los siete factores de Iluminación.”

“Pero, maestro Gotama, ¿cuáles son las cosas que, cuando son cultivadas y desarrolladas,
conducen a la realización de los cuatro fundamentos de la atención consciente?”

“Kundaliya, las tres clases de la conducta correcta, cuando son cultivadas y desarrolladas,
conducen a la realización de los cuatro fundamentos de la atención consciente.”
“Pero, maestro Gotama, ¿cuáles son las cosas que, cuando son cultivadas y desarrolladas,
conducen a la realización de las tres clases de la conducta correcta?”

“Kundaliya, la restricción de las facultades sensoriales, cuando es cultivada y desarrollada,


conduce a la realización de las tres clases de la conducta correcta.

“¿Y cómo es, Kundaliya, la restricción de las facultades sensoriales que, cuando es cultivada
y desarrollada, conduce a la realización de las tres clases de la conducta correcta? He aquí,
Kundaliya, el monje, habiendo visto alguna forma agradable a través del ojo, no la anhela,
no se excita por ella ni genera por ella pasión. Su cuerpo permanece firme y su mente
permanece firme, y él permanece bien compuesto y bien liberado para sus adentros. Pero,
por otro lado, habiendo visto alguna forma desagradable a través del ojo, él no se desmaya
por esto, no se intimida, no se desanima, permanece sin animadversión. Su cuerpo permanece
firme y su mente permanece firme, y él permanece bien compuesto y bien liberado para sus
adentros. “Además, Kundaliya, el monje, habiendo escudado algún sonido agradable a través
del oído… habiendo olfateado algún aroma agradable a través de la nariz… habiendo
degustado algún sabor agradable a través de la lengua… habiendo percibido alguna agradable
sensación táctil a través del cuerpo… habiendo conocido algún fenómeno mental agradable
a través de la mente, no lo anhela, no se excita por él ni genera por él pasión. Su cuerpo
permanece firme y su mente permanece firme, y él permanece bien compuesto y bien
liberado para sus adentros. Pero, por otro lado, habiendo escuchado algún sonido
desagradable a través del oído… habiendo olfateado algún olor desagradable a través de la
nariz… habiendo probado algún sabor desagradable a través de la lengua… habiendo
percibido alguna desagradable sensación táctil a través del cuerpo… habiendo conocido
algún fenómeno mental desagradable a través de la mente, él no se desmaya por esto, no se
intimida, no se desanima, permanece sin animadversión. Su cuerpo permanece firme y su
mente permanece firme, y él permanece bien compuesto y bien liberado para sus adentros.

“Kundaliya, cuando el monje, después de haber visto la forma a través del ojo, logra que su
cuerpo permanezca firme y su mente permanezca firme, y que él permanezca bien compuesto
y bien liberado para sus adentros tanto cuando se trata de las formas agradables como
desagradables; cuando el monje, después de haber escudado el sonido a través del oído…
después de haber olfateado el aroma a través de la nariz… después de haber probado el sabor
a través de la lengua… después de haber percibido la sensación táctil a través del cuerpo…
después de haber conocido el fenómeno mental a través de la mente, logra que su cuerpo
permanezca firme y su mente permanezca firme, y que él permanezca bien compuesto y bien
liberado para sus adentros tanto cuando se trata de los fenómenos mentales agradables como
desagradables, entonces, su restricción de las facultades sensoriales ha sido cultivada y
desarrollada de tal manera, que él realiza las tres clases de la conducta correcta.
“¿Y cómo son, Kundaliya, las tres clases de la conducta correcta que, cuando son cultivadas
y desarrolladas, conducen a la realización de los cuatro fundamentos de la atención
consciente? He aquí, Kundaliya, el monje, habiendo abandonado la conducta incorrecta del
cuerpo, desarrolla, a través de su cuerpo, una conducta correcta. Además, habiendo
abandonado la conducta incorrecta del habla, desarrolla, a través de su habla, una conducta
correcta. También, habiendo abandonado la conducta incorrecta de la mente, desarrolla, a
través de su mente, una conducta correcta. Entonces, sus tres clases de la conducta correcta
han sido cultivadas y desarrolladas de tal manera, que él realiza los cuatro fundamentos de
la atención consciente.

“¿Y cómo son, Kundaliya, los cuatro fundamentos de la atención consciente que, cuando son
cultivados y desarrollados, conducen a la realización de los siete factores de Iluminación?

[“Monjes, en cualquier ocasión, el monje permanece contemplando el cuerpo como un


cuerpo, fervorosamente, plenamente atento y consciente, habiendo dejado atrás la codicia y
el pesar por el mundo –en esta ocasión, se establece en él, una incesante atención consciente.
En cualquier ocasión, cuando se establece en el monje, esta incesante atención consciente,
en esta misma ocasión, despierta en él la atención consciente, como factor de iluminación.
El monje lo desarrolla y, mediante este desarrollo, experimenta su realización.

"Permaneciendo así, consciente, el monje investiga y examina este estado con sabiduría y se
embarca en averiguar su totalidad –en esta ocasión, despierta en él la investigación de los
estados mentales, como factor de iluminación. El monje lo desarrolla y, mediante este
desarrollo, experimenta su realización.

“En alguien que investiga y examina este estado mental con sabiduría y se embarca en
averiguar su totalidad, despierta una inagotable energía. En cualquier ocasión, en la cual esta
inagotable energía despierta en el monje que investiga y examina este estado mental con
sabiduría y se embarca en averiguar su totalidad –en esta ocasión, despierta en él la energía
como factor de iluminación. El monje lo desarrolla y, mediante este desarrollo, experimenta
su realización.

“En alguien, en quien despertó la energía, despierta también un arrobamiento supramundano.


En cualquier ocasión, en la cual este arrobamiento supramundano haya despertado en el
monje, en el cual despertó la energía –en esta ocasión, despierta en él el arrobamiento como
factor de iluminación. El monje lo desarrolla y, mediante este desarrollo, experimenta su
realización. “En alguien, que es arrebatado, el cuerpo y la mente llegan a tranquilizarse. En
cualquier ocasión, en la cual el cuerpo y la mente del monje alegre se hayan tranquilizado –
en esta ocasión, despierta en él la tranquilidad como factor de iluminación. El monje lo
desarrolla y, mediante este desarrollo, experimenta su realización. “En alguien, cuyo cuerpo
es tranquilo y que siente el placer, la mente llega a concentrarse. En cualquier ocasión, en la
cual la mente del monje, cuyo cuerpo es tranquilo que siente placer, se haya concentrado –
en esta ocasión, despierta en él la concentración como factor de iluminación. El monje lo
desarrolla y, mediante este desarrollo, experimenta su realización.

“Entonces, él observa esta mente así concentrada de cerca y con ecuanimidad. En cualquier
ocasión, en la cual el monje observa de cerca y con ecuanimidad, la mente así concentrada –
en esta ocasión, despierta en él la ecuanimidad como factor de iluminación. El monje lo
desarrolla y, mediante este desarrollo, experimenta su realización."]

(De forma similar se hace el análisis de los restantes tres fundamentos de la atención
consciente ) “¿Y cómo son, Kundaliya, los siete factores de Iluminación que, cuando son
cultivados y desarrollados, conducen al verdadero conocimiento y liberación? He aquí,
Kundaliya, el monje, desarrolla la atención consciente como factor de Iluminación, a través
de la reclusión, desapasionamiento, el cese y la madurez de la liberación. Él desarrolla la
discriminación de los estados mentales como factor de Iluminación… la energía como factor
de Iluminación… el arrobamiento como factor de Iluminación… la tranquilidad como factor
de Iluminación… la concentración como factor de Iluminación… la ecuanimidad como
factor de Iluminación, a través de la reclusión, desapasionamiento, el cese y la madurez de
la liberación.”

Cuando esto fue dicho, el asceta errante Kundaliya dijo al Bienaventurado: “¡Magnífico,
maestro Gotama! ¡Excelente, maestro Gotama! El Dhamma ha sido esclarecido de diferentes
maneras por el maestro Gotama. Es como si algo torcido se hubo enderezado, como si algo
escondido se hubo revelado, como si a alguien que estaba perdido se hubo mostrado el
camino, como si a alguien que estaba en tinieblas con ojos sanos se hubo encendido una
lámpara. Yo voy por refugio al maestro Gotama, al Dhamma y al Sangha de los monjes.
Desde este día en adelante, que el maestro Gotama se recuerde de mí como a uno de sus
seguidores laicos, que se ha ido por refugio de por vida”.

SN 46,6 [MN 118 ]

{93} “¿Y de qué manera, monjes, la atención consciente en la respiración, cuando es


cultivada y desarrollada, es muy fructífera y beneficiosa?

“He aquí, monjes, el monje, desarrolla la atención consciente como factor de Iluminación
acompañado por la atención consciente en la respiración, a través de la reclusión,
desapasionamiento, el cese y la madurez de la liberación. Él desarrolla la discriminación de
los estados mentales como factor de Iluminación acompañado por la atención consciente en
la respiración… la energía como factor de Iluminación acompañado por la atención
consciente en la respiración… el arrobamiento como factor de Iluminación acompañado por
la atención consciente en la respiración… la tranquilidad como factor de Iluminación
acompañado por la atención consciente en la respiración… la concentración como factor de
Iluminación acompañado por la atención consciente en la respiración… la ecuanimidad
como factor de Iluminación acompañado por la atención consciente en la respiración, a través
de la reclusión, desapasionamiento, el cese y la madurez de la liberación.”

“De esta manera, monjes, la atención consciente en la respiración, cuando es cultivada y


desarrollada, es muy fructífera y beneficiosa.”

SN 54,2

{94} “¿Y cuál es, monjes, el método de exposición, por medio del cual los siete factores de
iluminación llegan a ser catorce?

“Toda atención consciente puesta en las cosas internas es la atención consciente como factor
de iluminación y toda atención consciente puesta en las cosas externas, también es la atención
consciente como factor de iluminación. Así es cómo, hablando concisamente, la atención
consciente como factor de iluminación, por medio de este método de exposición, llega a ser
doble.

“Cada vez que uno investiga, examina y escruta las cosas internamente con sabiduría, esto
es el análisis de los estados mentales como factor de iluminación y cada vez que uno
investiga, examina y escruta las cosas externamente con sabiduría, esto también es el análisis
de los estados mentales como factor de iluminación. Así es cómo, hablando concisamente,
el análisis de los estados mentales como factor de iluminación, por medio de este método de
exposición, llega a ser doble.

“Toda energía corporal es la energía como factor de iluminación y toda energía mental,
también es la energía como factor de iluminación. Así es cómo, hablando concisamente, la
energía como factor de iluminación, por medio de este método de exposición, llega a ser
doble. “Todo arrobamiento acompañado por el pensamiento aplicado y el pensamiento
sostenido es el arrobamiento como factor de iluminación y todo arrobamiento sin el
pensamiento aplicado y el pensamiento sostenido, también es el arrobamiento como factor
de iluminación [6]. Así es cómo, hablando concisamente, el arrobamiento como factor de
iluminación, por medio de este método de exposición, llega a ser doble.

“Toda tranquilidad corporal es la tranquilidad como factor de iluminación y toda tranquilidad


mental, también es la tranquilidad como factor de iluminación. Así es cómo, hablando
concisamente, la tranquilidad como factor de iluminación, por medio de este método de
exposición, llega a ser doble.
“Toda concentración acompañada por el pensamiento aplicado y el pensamiento sostenido
es la concentración como factor de iluminación y toda concentración sin el pensamiento
aplicado y el pensamiento sostenido, también es la concentración como factor de
iluminación. Así es cómo, hablando concisamente, la concentración como factor de
iluminación, por medio de este método de exposición, llega a ser doble.

“Toda ecuanimidad referente a las cosas internas es la ecuanimidad como factor de


iluminación y toda ecuanimidad referente a las cosas externas, también es la ecuanimidad
como factor de iluminación. Así es cómo, hablando concisamente, la ecuanimidad como
factor de iluminación, por medio de este método de exposición, llega a ser doble.

“Éste es, monjes, el método de exposición, por medio del cual los siete factores de
iluminación llegan a ser catorce.”

{95} Monjes, no conozco ninguna otra cosa que sea más favorable para el no-surgir de los
factores de la iluminación no surgidos y para el no-desarrollo y no-finalización de los factores
de la iluminación surgidos que la atención incorrecta. Monjes, cualquiera que piense
sabiamente origina los factores de la iluminación no surgidos y desarrolla y finaliza los
factores de la iluminación surgidos.

Monjes, no conozco ninguna otra cosa que sea más favorable para el surgir de los factores
de la iluminación no surgidos y para el desarrollo y finalización de los factores de la
iluminación surgidos que la correcta atención. Monjes, cualquiera que piense sabiamente
origina los factores de la iluminación no surgidos y desarrolla y finaliza los factores de la
iluminación surgidos.

AN 1,75-76

{96} “Monjes, voy a enseñaros el nutrimento y la desnutrición en respecto a los cinco


impedimentos y los siete factores de iluminación. Escuchad y prestad atención que voy a
hablar”... [El nutrimento de los impedimentos] “¿Y cuál es, monjes, el nutrimento que hace
surgir los deseos sensuales que aún no han surgido e incrementa y expande aquéllos que ya
han surgido? Este es, monjes, el signo de la belleza: cuando frecuentemente se fija en él una
atención descuidada, el mismo se convierte en nutrimento que hace surgir los deseos
sensuales que aún no han surgido e incrementa y expande aquéllos que ya han surgido. “¿Y
cuál es, monjes, el nutrimento que hace surgir la animadversión que aún no ha surgido e
incrementa y expande aquélla que ya ha surgido? E ste es, monjes, el signo de asquerosidad:
cuando frecuentemente se fija en él una atención descuidada, el mismo se convierte en
nutrimento que hace surgir la animadversión que aún no ha surgido e incrementa y expande
aquélla que ya ha surgido.
“¿Y cuál es, monjes, el nutrimento que hace surgir la pereza y el letargo que aún no han
surgido e incrementa y expande aquéllos que ya han surgido? Este es, monjes, el descontento,
la apatía, el flojo esfuerzo, la somnolencia después de la comida y la lentitud mental: cuando
frecuentemente se fija en ellos una atención descuidada, los mismos se convierten en
nutrimento que hace surgir la pereza y el letargo que aún no han surgido e incrementa y
expande aquéllos que ya han surgido.

“¿Y cuál es, monjes, el nutrimento que hace surgir la inquietud y el remordimiento que aún
no ha surgido e incrementa y expande aquéllos que ya han surgido? Esta es, monjes, la
inquietud mental: cuando frecuentemente se fija en ella una atención descuidada, la misma
se convierte en nutrimento que hace surgir la inquietud y el remordimiento que aún no han
surgido e incrementa y expande aquéllos que ya han surgido.

“¿Y cuál es, monjes, el nutrimento que hace surgir la duda que aún no ha surgido e
incrementa y expande aquélla que ya ha surgido? E stas son, monjes, las cosas que forman
parte de la base de la duda: cuando frecuentemente se fija en ellas una atención descuidada,
las mismas se convierten en nutrimento que hace surgir la duda que aún no ha surgido e
incrementa y expande aquélla que ya ha surgido.

[ii. El nutrimento de los factores de iluminación] “¿Y cuál es, monjes, el nutrimento que hace
surgir la atención consciente como factor de iluminación que aún no ha surgido y lleva al
desarrollo y realización, la atención consciente que ya ha surgido? E stas son, monjes, las
cosas que forman parte de la base de la atención consciente como factor de iluminación:
cuando frecuentemente se fija en ellas una atención cuidadosa, las mismas se convierten en
nutrimento que hace surgir la atención consciente como factor de iluminación que aún no ha
surgido y lleva al desarrollo y realización, la atención consciente que ya ha surgido. “¿Y
cuál es, monjes, el nutrimento que hace surgir la investigación de los estados mentales como
factor de iluminación que aún no ha surgido y lleva al desarrollo y realización, la
investigación de los estados mentales que ya ha surgido? Estos son, monjes, los saludables y
los insanos estados mentales, estados mentales culpables y libres de culpa, estados inferiores
y superiores, estados oscuros y brillantes con sus contrapartes: cuando frecuentemente se fija
en ellos una atención cuidadosa, los mismos se convierten en nutrimento que hace surgir la
investigación de los estados mentales como factor de iluminación que aún no ha surgido y
lleva al desarrollo y realización, la investigación de los estados mentales que ya ha surgido.

“¿Y cuál es, monjes, el nutrimento que hace surgir la energía como factor de iluminación
que aún no ha surgido y lleva al desarrollo y realización la energía que ya ha surgido? Estos
son, monjes, el elemento del despertar, el elemento del esfuerzo y el elemento de la fortaleza:
cuando frecuentemente se fija en ellos una atención cuidadosa, los mismos se convierten en
nutrimento que hace surgir la energía como factor de iluminación que aún no ha surgido y
lleva al desarrollo y realización la energía que ya ha surgido.
“¿Y cuál es, monjes, el nutrimento que hace surgir el arrobamiento como factor de
iluminación que aún no ha surgido y lleva al desarrollo y realización el arrobamiento que ya
ha surgido? Estas son, monjes, las cosas que forman parte de la base del arrobamiento como
factor de iluminación: cuando frecuentemente se fija en ellas una atención cuidadosa, las
mismas se convierten en nutrimento que hace surgir el arrobamiento como factor de
iluminación que aún no ha surgido y lleva al desarrollo y realización el arrobamiento que ya
ha surgido. “¿Y cuál es, monjes, el nutrimento que hace surgir la tranquilidad como factor
de iluminación que aún no ha surgido y lleva al desarrollo y realización la tranquilidad que
ya ha surgido? Estas son, monjes, la calma mental y la tranquilidad del cuerpo: cuando
frecuentemente se fija en ellas una atención cuidadosa, las mismas se convierten en
nutrimento que hace surgir la tranquilidad como factor de iluminación que aún no ha surgido
y lleva al desarrollo y realización la tranquilidad que ya ha surgido.
“¿Y cuál es, monjes, el nutrimento que hace surgir la concentración como factor de
iluminación que aún no ha surgido y lleva al desarrollo y realización la concentración que ya
ha surgido? Estos son, monjes, el signo de la serenidad y el signo de la no-dispersión: cuando
frecuentemente se fija en ellos una atención cuidadosa, los mismos se convierten en
nutrimento que hace surgir la concentración como factor de iluminación que aún no ha
surgido y lleva al desarrollo y realización la concentración que ya ha surgido.

“¿Y cuál es, monjes, el nutrimento que hace surgir la ecuanimidad como factor de
iluminación que aún no ha surgido y lleva al desarrollo y realización la ecuanimidad que ya
ha surgido? Estas son, monjes, las cosas que forman parte de la base de la ecuanimidad como
factor de iluminación: cuando frecuentemente se fija en ellas una atención cuidadosa, las
mismas se convierten en nutrimento que hace surgir la ecuanimidad como factor de
iluminación que aún no ha surgido y lleva al desarrollo y realización la ecuanimidad que ya
ha surgido. [iii. La desnutrición de los impedimentos] “¿Y qué es, monjes, la desnutrición
que previene el surgimiento de los deseos sensuales que aún no han surgido e impide el
incremento la expansión de aquéllos que ya han surgido? Este es, monjes, el signo de
asquerosidad: cuando frecuentemente se fija en él una atención cuidadosa, el mismo se
convierte en desnutrición que previene el surgimiento de los deseos sensuales que aún no
han surgido e impide el incremento la expansión de aquéllos que ya han surgido .

“¿Y qué es, monjes, la desnutrición que previene el surgimiento de la animadversión que aún
no ha surgido e impide el incremento la expansión de aquélla que ya ha surgido? Esta es,
monjes, la liberación de la mente a través del amor benevolente: cuando frecuentemente se
fija en ella una atención cuidadosa, la mismo se convierte en desnutrición que previene el
surgimiento de la animadversión que aún no ha surgido e impide el incremento la expansión
de aquélla que ya ha surgido .
“¿Y qué es, monjes, la desnutrición que previene el surgimiento de la pereza y el letargo que
aún no han surgido e impide el incremento la expansión de aquéllos que ya han surgido?
Estos son, monjes, el elemento del despertar, el elemento del esfuerzo y el elemento de la
fortaleza: cuando frecuentemente se fija en ellos una atención cuidadosa, los mismos se
convierten en desnutrición que previene el surgimiento de la pereza y el letargo que aún no
han surgido e impide el incremento la expansión de aquéllos que ya han surgido . “¿Y qué
es, monjes, la desnutrición que previene el surgimiento de la inquietud y el remordimiento
que aún no han surgido e impide el incremento la expansión de aquéllos que ya han surgido?
Esta es, monjes, la tranquilidad mental: cuando frecuentemente se fija en ella una atención
cuidadosa, la misma se convierte en desnutrición que previene el surgimiento de la inquietud
y el remordimiento que aún no han surgido e impide el incremento la expansión de aquéllos
que ya han surgido .
“¿Y qué es, monjes, la desnutrición que previene el surgimiento de la duda que aún no ha
surgido e impide el incremento la expansión de aquélla que ya ha surgido? Estos son, monjes,
los saludables y los insanos estados mentales, estados mentales culpables y libres de culpa,
estados inferiores y superiores, estados oscuros y brillantes con sus contrapartes: cuando
frecuentemente se fija en ellos una atención cuidadosa, los mismos se convierten en
desnutrición que previene el surgimiento de la duda que aún no ha surgido e impide el
incremento la expansión de aquélla que ya ha surgido .

[iv. La desnutrición de los factores de iluminación] “¿Y qué es, monjes, la desnutrición que
evita el surgimiento de la atención consciente como factor de iluminación que aún no ha
surgido e impide el desarrollo y realización de la atención consciente que ya ha surgido? E
stas son, monjes, las cosas que forman parte de la base de la atención consciente como factor
de iluminación: el no fijar en ellas frecuentemente una atención cuidadosa, es la desnutrición
que evita el surgimiento de la atención consciente como factor de iluminación que aún no ha
surgido e impide el desarrollo y realización de la atención consciente que ya ha surgido.

“¿Y qué es, monjes, la desnutrición que evita el surgimiento de la investigación de los estados
mentales como factor de iluminación que aún no ha surgido e impide el desarrollo y
realización de la investigación de los estados mentales que ya ha surgido? Estos son, monjes,
los saludables y los insanos estados mentales, estados mentales culpables y libres de culpa,
estados inferiores y superiores, estados oscuros y brillantes con sus contrapartes: el no fijar
en ellos frecuentemente una atención cuidadosa, es la desnutrición que evita el surgimiento
de la investigación de los estados mentales como factor de iluminación que aún no ha surgido
e impide el desarrollo y realización de la investigación de los estados mentales que ya ha
surgido.

“¿Y qué es, monjes, la desnutrición que evita el surgimiento de la energía como factor de
iluminación que aún no ha surgido e impide el desarrollo y realización de la energía que ya
ha surgido? Estos son, monjes, el elemento del despertar, el elemento del esfuerzo y el
elemento de la fortaleza: el no fijar en ellos frecuentemente una atención cuidadosa, es la
desnutrición que evita el surgimiento de la energía como factor de iluminación que aún no
ha surgido e impide el desarrollo y realización de la energía que ya ha surgido.

“¿Y qué es, monjes, la desnutrición que evita el surgimiento del arrobamiento como factor
de iluminación que aún no ha surgido e impide el desarrollo y realización del arrobamiento
que ya ha surgido? Estas son, monjes, las cosas que forman parte de la base del arrobamiento
como factor de iluminación: el no fijar en ellas frecuentemente una atención cuidadosa, es la
desnutrición que evita el surgimiento del arrobamiento como factor de iluminación que aún
no ha surgido e impide el desarrollo y realización del arrobamiento que ya ha surgido.

“¿Y qué es, monjes, la desnutrición que evita el surgimiento de la tranquilidad como factor
de iluminación que aún no ha surgido e impide el desarrollo y realización de la tranquilidad
que ya ha surgido? Estas son, monjes, la calma mental y la tranquilidad del cuerpo: el no fijar
en ellas frecuentemente una atención cuidadosa, es la desnutrición que evita el surgimiento
de la tranquilidad como factor de iluminación que aún no ha surgido e impide el desarrollo
y realización de la tranquilidad que ya ha surgido.

“¿Y qué es, monjes, la desnutrición que evita el surgimiento de la concentración como factor
de iluminación que aún no ha surgido e impide el desarrollo y realización de la concentración
que ya ha surgido? Estos son, monjes, el signo de la serenidad y el signo de la no-dispersión:
el no fijar en ellos frecuentemente una atención cuidadosa, es la desnutrición que evita el
surgimiento de la concentración como factor de iluminación que aún no ha surgido e impide
el desarrollo y realización de la concentración que ya ha surgido.

“¿Y qué es, monjes, la desnutrición que evita el surgimiento de la ecuanimidad como factor
de iluminación que aún no ha surgido e impide el desarrollo y realización de la ecuanimidad
que ya ha surgido? Estas son, monjes, las cosas que forman parte de la base de la ecuanimidad
como factor de iluminación: el no fijar en ellas frecuentemente una atención cuidadosa, es la
desnutrición que evita el surgimiento de la ecuanimidad como factor de iluminación que aún
no ha surgido e impide el desarrollo y realización de la ecuanimidad que ya ha surgido.”

SN 46,51

{97} “En ocasión, monjes, cuando la mente llega a ser perezosa, no es oportuno desarrollar
la tranquilidad como factor de iluminación, la concentración como factor de iluminación ni
la ecuanimidad, como factor de iluminación. ¿Por qué? Porque la mente es perezosa, monjes,
y es difícil despertarla mediante estos factores.
“Es como un hombre que quiere encender un pequeño fuego. Si él lanzara ahí el pasto
mojado, el estiércol de vaca mojado, la madera mojada y lo rociara todo con el agua y
esparciera la tierra encima, ¿sería capaz de encender el pequeño fuego?”

“No, venerable señor”.

“De la misma manera, monjes, en ocasión, cuando la mente llega a ser perezosa, no es
oportuno desarrollar la tranquilidad como factor de iluminación, la concentración como
factor de iluminación ni la ecuanimidad, como factor de iluminación. ¿Por qué? Porque la
mente es perezosa, monjes, y es difícil despertarla mediante estos factores.

“En ocasión, monjes, cuando la mente llega a ser perezosa, es oportuno desarrollar el análisis
de los fenómenos como factor de iluminación, la energía como factor de iluminación y el
arrobamiento, como factor de iluminación. ¿Por qué? Porque la mente es perezosa, monjes,
y es fácil despertarla mediante estos factores.

“Es como un hombre que quiere encender un pequeño fuego. Si él lanzara ahí el pasto seco,
el estiércol de vaca seco, la madera seca y soplara sobre todo y no esparciera la tierra encima,
¿sería capaz de encender el pequeño fuego?”

“Sí, venerable señor”.

“De la misma manera, monjes, en ocasión, cuando la mente llega a ser perezosa, es oportuno
desarrollar el análisis de los fenómenos como factor de iluminación, la energía como factor
de iluminación y el arrobamiento, como factor de iluminación. ¿Por qué? Porque la mente es
perezosa, monjes, y es fácil despertarla mediante estos factores.

“En ocasión, monjes, cuando la mente llega a estar agitada, no es oportuno desarrollar el
análisis de los fenómenos como factor de iluminación, la energía como factor de iluminación
y el arrobamiento, como factor de iluminación. ¿Por qué? Porque la mente está agitada,
monjes, y es difícil calmarla mediante estos factores.

“Es como un hombre que quiere apagar una gran hoguera. Si él lanzara ahí el pasto seco, el
estiércol de vaca seco, la madera seca y soplara sobre todo y no esparciera la tierra encima,
¿sería capaz de apagar la gran hoguera?” “No, venerable señor”.

“De la misma manera, monjes, en ocasión, cuando la mente llega a estar agitada, no es
oportuno desarrollar el análisis de los fenómenos como factor de iluminación, la energía
como factor de iluminación y el arrobamiento, como factor de iluminación. ¿Por qué? Porque
la mente está agitada, monjes, y es difícil calmarla mediante estos factores.

“En ocasión, monjes, cuando la mente llega a estar agitada, es oportuno desarrollar la
tranquilidad como factor de iluminación, la concentración como factor de iluminación y la
ecuanimidad, como factor de iluminación. ¿Por qué? Porque la mente está agitada, monjes,
y es fácil calmarla mediante estos factores.

“Es como un hombre que quiere apagar una gran hoguera. Si él lanzara ahí el pasto mojado,
el estiércol de vaca mojado, la madera mojada y rociara todo con el agua y esparciera la tierra
encima, ¿sería capaz de apagar la gran hoguera?”

“Sí, venerable señor”.

“De la misma manera, monjes, en ocasión, monjes, cuando la mente llega a estar agitada, es
oportuno desarrollar la tranquilidad como factor de iluminación, la concentración como
factor de iluminación y la ecuanimidad, como factor de iluminación. ¿Por qué? Porque la
mente está agitada, monjes, y es fácil calmarla mediante estos factores.

“Pero la atención consciente, monjes –yo declaro- es útil en todo momento"

SN 46,53

{98} “¿Y cómo es, monjes, la liberación de la mente a través del amor benevolente? ¿Cuál
es su destino, su culminación, su fruto y su meta final? He aquí, monjes, el monje desarrolla
la atención consciente como factor de iluminación acompañado por el amor benevolente,
establecido en la reclusión, desapasionamiento, el cese y la madurez de la liberación. Él
desarrolla el análisis de los fenómenos como factor de iluminación… la energía como factor
de iluminación… la tranquilidad como factor de iluminación… la concentración como factor
de iluminación… la ecuanimidad como factor de iluminación acompañado por el amor
benevolente, establecido en la reclusión, desapasionamiento, el cese y la madurez de la
liberación. Si él desea: ‘que more percibiendo lo repulsivo en lo no es repulsivo’, entonces,
percibirá lo repulsivo de esta manera. Si desea: ‘que more percibiendo lo no repulsivo en lo
repulsivo’, entonces percibirá lo no repulsivo de esta manera. Si desea: ‘que more
percibiendo lo repulsivo en lo no repulsivo y en lo repulsivo’, entonces percibirá lo repulsivo
de esta manera. Si desea: ‘que more percibiendo lo no repulsivo en lo repulsivo y en lo no
repulsivo’, entonces percibirá lo no repulsivo de esta manera. Finalmente, si él desea:
‘evitando a ambos, tanto a lo repulsivo como a lo no repulsivo, que more ecuánime,
atentamente consciente y con clara comprensión’, entonces morará de esta manera. O más,
él puede entrar y permanecer en la belleza de la liberación. Monjes, la liberación de la mente
a través del amor benevolente tiene la belleza como su culminación –yo declaro- para un
monje sabio que no ha penetrado liberación superior. “¿Y cómo es, monjes, la liberación de
la mente a través de la compasión? ¿Cuál es su destino, su culminación, su fruto y su meta
final? He aquí, monjes, el monje desarrolla la atención consciente como factor de
iluminación acompañado por la compasión, establecida en la reclusión, desapasionamiento,
el cese y la madurez de la liberación. Él desarrolla el análisis de los fenómenos como factor
de iluminación… la energía como factor de iluminación… la tranquilidad como factor de
iluminación… la concentración como factor de iluminación… la ecuanimidad como factor
de iluminación acompañado por la compasión, establecida en la reclusión,
desapasionamiento, el cese y la madurez de la liberación. Si él desea: ‘que more percibiendo
lo repulsivo en lo no es repulsivo’, entonces, percibirá lo repulsivo de esta manera. Si desea:
‘que more percibiendo lo no repulsivo en lo repulsivo’, entonces percibirá lo no repulsivo de
esta manera. Si desea: ‘que more percibiendo lo repulsivo en lo no repulsivo y en lo
repulsivo’, entonces percibirá lo repulsivo de esta manera. Si desea: ‘que more percibiendo
lo no repulsivo en lo repulsivo y en lo no repulsivo’, entonces percibirá lo no repulsivo de
esta manera. Finalmente, si él desea: ‘evitando a ambos, tanto a lo repulsivo como a lo no
repulsivo, que more ecuánime, atentamente consciente y con clara comprensión’, entonces
morará de esta manera. O más, al trascender completamente la percepción de las formas, con
la desaparición de la percepción sensorial de la resistencia, con la no atención a la percepción
de la diversidad, consciente de que ‘el espacio es infinito’, entra y permanece en la base del
espacio infinito. Monjes, la liberación de la mente a través de la compasión tiene la base del
espacio infinito como su culminación –yo declaro- para un monje sabio que no ha penetrado
liberación superior.

“¿Y cómo es, monjes, la liberación de la mente a través de la dicha altruista? ¿Cuál es su
destino, su culminación, su fruto y su meta final? He aquí, monjes, el monje desarrolla la
atención consciente como factor de iluminación acompañado por la dicha altruista,
establecida en la reclusión, desapasionamiento, el cese y la madurez de la liberación. Él
desarrolla el análisis de los fenómenos como factor de iluminación… la energía como factor
de iluminación… la tranquilidad como factor de iluminación… la concentración como factor
de iluminación… la ecuanimidad como factor de iluminación acompañado por la dicha
altruista, establecida en la reclusión, desapasionamiento, el cese y la madurez de la
liberación. Si él desea: ‘que more percibiendo lo repulsivo en lo no es repulsivo’, entonces,
percibirá lo repulsivo de esta manera. Si desea: ‘que more percibiendo lo no repulsivo en lo
repulsivo’, entonces percibirá lo no repulsivo de esta manera. Si desea: ‘que more
percibiendo lo repulsivo en lo no repulsivo y en lo repulsivo’, entonces percibirá lo repulsivo
de esta manera. Si desea: ‘que more percibiendo lo no repulsivo en lo repulsivo y en lo no
repulsivo’, entonces percibirá lo no repulsivo de esta manera. Finalmente, si él desea:
‘evitando a ambos, tanto a lo repulsivo como a lo no repulsivo, que more ecuánime,
atentamente consciente y con clara comprensión’, entonces morará de esta manera. O más,
al trascender completamente la base del espacio infinito, consciente de que ‘la conciencia es
infinita’, entra y permanece en la base de la conciencia infinita. Monjes, la liberación de la
mente a través de la compasión tiene la base de la conciencia infinita como su culminación
–yo declaro- para un monje sabio que no ha penetrado liberación superior.

“¿Y cómo es, monjes, la liberación de la mente a través de la ecuanimidad? ¿Cuál es su


destino, su culminación, su fruto y su meta final? He aquí, monjes, el monje desarrolla la
atención consciente como factor de iluminación acompañado por la ecuanimidad, establecida
en la reclusión, desapasionamiento, el cese y la madurez de la liberación. Él desarrolla el
análisis de los fenómenos como factor de iluminación… la energía como factor de
iluminación… la tranquilidad como factor de iluminación… la concentración como factor
de iluminación… la ecuanimidad como factor de iluminación acompañado por la
ecuanimidad, establecida en la reclusión, desapasionamiento, el cese y la madurez de la
liberación. Si él desea: ‘que more percibiendo lo repulsivo en lo no es repulsivo’, entonces,
percibirá lo repulsivo de esta manera. Si desea: ‘que more percibiendo lo no repulsivo en lo
repulsivo’, entonces percibirá lo no repulsivo de esta manera. Si desea: ‘que more
percibiendo lo repulsivo en lo no repulsivo y en lo repulsivo’, entonces percibirá lo repulsivo
de esta manera. Si desea: ‘que more percibiendo lo no repulsivo en lo repulsivo y en lo no
repulsivo’, entonces percibirá lo no repulsivo de esta manera. Finalmente, si él desea:
‘evitando a ambos, tanto a lo repulsivo como a lo no repulsivo, que more ecuánime,
atentamente consciente y con clara comprensión’, entonces morará de esta manera. O más,
al trascender completamente la base de la conciencia infinita, consciente de que ‘no hay
nada’, entra y permanece en la base de la nada. Monjes, la liberación de la mente a través de
la compasión tiene la base de la nada como su culminación –yo declaro- para un monje sabio
que no ha penetrado liberación superior.

SN 46,54

{99} “En este caso, amigo Uttiya, te voy a dar un símil, ya que en muchas ocasiones, las
personas inteligentes pueden entender el significado de algo a través de un símil. Imagina las
fronteras de una ciudad real fuertemente aseguradas por muros y torres con una sola entrada.
A través ella, un inteligente, competente e idóneo portero deja entrar a los que conoce, pero
prohíbe la entrada de aquellos que no conoce. Recorriendo el camino que rodea la ciudad, él
no ve quebradura alguna ni abertura en la muralla, suficientemente grande, como para
permitir la entrada, ni siquiera a un gato. Aunque él no podría saber: ‘conque muchas
criaturas entran y salen de la ciudad’, sin embargo sabría esto: ‘cualquier criatura grande que
entra y sale de esta ciudad, solamente entra y sale a través de esta puerta’.
“De la misma manera, el Tathagata no se empeña en tener todo el mundo, o la mitad de él o
su tercera parte conducida a la liberación a través de su Dhamma. Pero él conoce esto:
‘Todos aquellos que han sido conducidos, estás siendo conducidos o serán conducidos a la
liberación del mundo, lo han hecho, lo están haciendo o lo harán después de haber
abandonado los cinco impedimentos –aquellas impurezas de la conciencia que disminuyen
el discernimiento- después de haber establecido bien sus mentes en los cuatro fundamentos
de la atención consciente y después de haber desarrollado plenamente los siete factores de
iluminación. Así que, esta pregunta que le formulaste al Bienaventurado, ya ha sido
previamente formulada de otra manera. Es por eso que el Bienaventurado no te ha
respondido”.
AN 10,95

{100} Aquellos que perfeccionan sus mentes en los Factores de Iluminación, sin ataduras,
deleitándose en el abandono de la avidez, esos, libres de corrupción, esclarecidos, alcanzan
el Nibbana incluso en este mundo.

Pasajes del Canon Pali {101-114}

{101} “Monjes, la ignorancia es el líder en el logro de la conducta inexperta, seguida por la


carencia de consciencia y por la carencia de preocupación. En una persona ignorante, sumida
en la ignorancia, el punto de vista erróneo surge. En el punto de vista erróneo de uno, la
solución errónea surge... En la solución errónea, el habla errónea surge... En el habla errónea,
la acción errónea surge... En la acción errónea, el modo de vida erróneo surge... En el modo
de vida erróneo, el esfuerzo erróneo surge... En el esfuerzo erróneo, la atención errónea
surge... En la atención errónea, la concentración errónea surge.

“El conocimiento claro es el líder del logro de la conducta diestra, seguido por la consciencia
y la preocupación. En una persona bien informada, inmersa en el conocimiento claro, el
punto de vista correcto surge. En el punto de vista correcto de uno, la solución correcta surge.
En la solución correcta de uno, el habla correcta surge... En el habla correcta, la acción
correcta surge... En la acción correcta, el modo de vida correcto surge... En el modo de vida
correcto, el esfuerzo correcto surge... En el esfuerzo correcto, la atención correcta surge... En
la atención correcta, la concentración correcta surge.

SN 45,1
{102} Análisis del camino. El Bendito dijo: “Y, ¿cuál, monjes, es el Óctuple Noble
Sendero?” Recto entendimiento, recta intención, recta forma de hablar, recta acción, recto
modo de vida, recto esfuerzo, recta atención, recta concentración.

“Y, ¿qué, monjes, es el recto entendimiento? Conocimiento en referencia al sufrimiento,


conocimiento en referencia al origen del sufrimiento, conocimiento en referencia al cese del
sufrimiento, conocimiento en referencia al camino que lleva al fin del sufrimiento: esto,
monjes, se llama recto entendimiento.

“Y ¿qué es la recta intención? Estar decidido a renunciar, a liberarse de la mala voluntad, a


no hacer daño: esto se llama recta intención.

“Y ¿qué es la recta forma de hablar? Abstenerse de mentir, abstenerse de hablar de forma


divisiva, abstenerse de hablar de forma insultante, abstenerse de la charla banal: esto, monjes,
se llama recta forma de hablar.

“Y, ¿qué, monjes, es la recta acción? Abstenerse de quitar vidas, abstenerse de robar,
abstenerse de la lujuria: esto, monjes, se llama recta acción.

“Y, ¿qué, monjes, es el recto modo de vida? Se da el caso donde un discípulo de los nobles,
habiendo abandonado un modo de vida deshonesto, mantiene su vida yendo con recto modo
de vida: esto, monjes, se llama recto modo de vida.

“Y, ¿qué, monjes, es el recto esfuerzo? (i) Se da el caso donde un monje genera deseo, se
esfuerza, activa la persistencia, mantiene y afana su propósito por el bien de la noaparición
de cualidades malas y poco hábiles que no han aparecido todavía. (ii) Él genera deseo, se
esfuerza, activa la persistencia, mantiene y afana su propósito por el bien de la no-aparición
de cualidades malas y poco hábiles que han aparecido. (iii) Él genera deseo, se esfuerza,
activa la persistencia, mantiene y afana su propósito por el bien de la aparición de cualidades
hábiles que no han aparecido todavía. (iv) Él genera deseo, se esfuerza, activa la persistencia,
mantiene y afana su propósito por el mantenimiento, no-confusión, incremento, plenitud,
desarrollo y culminación de cualidades hábiles que han aparecido: esto, monjes, se llama
recto esfuerzo.

“Y, ¿qué, monjes, es la recta atención? (i) Se da el caso donde un monje permanece centrado
en el cuerpo en y de sí mismo, fervoroso, consciente y atento, apartando la codicia y la
aflicción en referencia al mundo. (ii) Permanece centrado en las sensaciones en y de sí
mismas, fervoroso, consciente y atento, apartando la codicia y la aflicción en referencia al
mundo. (iii) Permanece centrado en la mente en y de sí misma, fervoroso, consciente y atento,
apartando la codicia y la aflicción en referencia al mundo. (iv) Permanece centrado en las
cualidades mentales en y de sí mismas, fervoroso, consciente y atento, apartando la codicia
y la aflicción en referencia al mundo. Esto, monjes, se llama recta atención.
“Y, ¿qué, monjes, es la recta concentración? (i) Se da el caso donde un monje, retraído de la
sensualidad, retraído de las cualidades mentales poco hábiles, entra y permaneces en el
primer jhana: éxtasis y placer nacidos de la renuncia, acompañados de pensamiento dirigido
y evaluación. (ii) Con el apaciguamiento de los pensamiento dirigidos y las evaluaciones,
entra y permanece en el segundo jhana: éxtasis y placer nacidos de la concentración,
unificación de la consciencia libre del pensamiento dirigido y la evaluación; seguridad
interna. (iii) Con el desvanecimiento del éxtasis, permanece ecuánime, está atento y alerta, y
siente placer con el cuerpo. Entra y permanece en el tercer jhana, del que los Nobles declaran:
“Ecuánime y atento, tiene una morada placentera”. (iv) Con el abandono del placer y el dolor
– como con la anterior desaparición de la euforia y la aflicción – entra y permanece en el
cuarto jhana: la pureza de la ecuanimidad y la atención, ni placer ni dolor. Esto, monjes, se
llama recta concentración.”
SN 45,8

{103} Más sobre la acción correcta y correcta forma de hablar. Habiendo abandonado así [el
estilo de vida hogareño] y habiendo entrado bajo la manera de vivir que sigue el
entrenamiento de los monjes, abandonando el tomar la vida, él se abstiene de matar. Mora
con su vara tirada, con su cuchillo tirado, escrupuloso, misericordioso, compasivo por el
bienestar de todos los seres vivos. Abandonando el tomar lo que no le es dado, se abstiene
de tomar lo que no se le ha dado. Toma solamente lo que se le ofrece, acepta sólo lo que le
es dado, vive no por cautela sino por medio del ser que ha llegado a la pureza. Abandonando
la no-castidad, vive una vida célibe, apartada, absteniéndose de los actos sexuales propios de
la manera [de vivir] del pueblo.

Abandonando el lenguaje falso, se abstiene de hablar falsamente. Habla la verdad, guarda la


verdad, está firme, digno de confianza, no engañoso. Abandonando el lenguaje calumnioso,
se abstiene de calumniar. Lo que escucha aquí, no lo repite allá para causar discordias. Lo
que escucha allá, no lo repite aquí para causar discordias. Así, reconciliando aquello que ha
sido roto y cementando lo que ha sido unido, ama la concordia, se deleita en la concordia,
disfruta la concordia y habla cosas que fomentan la concordia. Abandonando el lenguaje
abusivo, se abstiene de hablar abusivamente. Pronuncia palabras que suenan dulces al oído,
que son afectuosas, que se dirigen al corazón, que son amables, atractivas y placenteras para
la gran parte de la gente. Abandonando las murmuraciones, se abstiene de murmurar. Habla
en el momento correcto, dice lo que está de acuerdo con la meta, con el Dhamma y
Disciplina. Pronuncia palabras dignas de ser atesoradas, oportunas, razonables, circunscritas
y conectadas con la meta.

AN 10,99
{104} Más sobre la acción correcta y correcta forma de hablar para los laicos. Abandonando
la conducta sensual errada, se abstiene de conducirse erráticamente. No se involucra en
relaciones sexuales con quienes viven bajo la protección de sus madres, padres, hermanos,
hermanas, parientes o el Dhamma; con aquellas que tienen esposos, con las que [la relación
sexual] implica castigo, e inclusive con las que han sido coronadas con flores por otros
hombres.

Abandonando la manera de hablar falsa, se abstiene de hablar falsamente. Cuando es llamado


a una reunión en la ciudad, a una reunión de grupo, al encuentro con los parientes, su cofradía,
o por la realeza, y se le pide que sea testigo, diciendo: “Ven y dinos, buen hombre, ¿qué es
lo que sabes?”, entonces si él no sabe, dice: “No sé”. Si sabe, dice: “Lo sé”. Si no vio, dice:
“No he visto”. Si vio, dice: “Lo he visto”. De esta manera, conscientemente nunca dice
mentiras ni por el motivo propio, ni por el motivo ajeno, ni para recibir recompensa alguna.

AN 10,176

{105} Visakha: ¿Es el noble óctuple sendero compuesto o no es compuesto?

Sister Dhammadinna: Es el noble óctuple sendero es compuesto.

Visakha: Y los tres componentes [de la virtud, la concentración y el discernimiento] ¿están


incluidos en el noble óctuple sendero o el noble ócuple sendero está incluido en los tres
componentes?

Sister Dhammadinna: los tres componentes no están incluidos en el noble óctuple sendero,
sino que el noble ócuple sendero está incluido en los tres componentes. La recta forma de
hablar, la recta acción y la recta forma de vida, caen bajo el componente de la virtud. El recto
esfuerzo, la recta atención consciente y la recta concentración, caen bajo el componente de
la concentración. El recto entendimiento y la recta intención, caen bajo el componente del
discernimiento.

MN 44

{106} “¿Qué es, bhikkhus, la noble concentración correcta con sus requisitos y soportes, es
decir, entendimiento correcto, intención correcta, lenguaje correcto, acción correcta, modo
de subsistencia correcto, esfuerzo correcto, y atención correcta? La unificación de la mente
equipada con estos siete factores es lo que se llama la noble concentración correcta con sus
requisitos y soportes.

"Allí, bhikkhus, el entendimiento correcto viene primero. ¿Y cómo es que el entendimiento


correcto viene primero? Uno entiende el entendimiento incorrecto como entendimiento
incorrecto y el entendimiento correcto como entendimiento correcto: Esto es el propio
entendimiento correcto.

“¿Y qué, bhikkhus, es el entendimiento incorrecto? ‘No hay lo dado, ni lo ofrecido, ni lo


sacrificado; no hay fruto o resultado de las acciones buenas y malas; no existe este mundo ni
el otro mundo; no hay madre, no hay padre [hacia los cuales hay deuda y obligaciones
morales]; no hay seres que renacen espontáneamente; no hay reclusos y religiosos buenos y
virtuosos en el mundo que, habiéndose dado cuenta por sí mismos, mediante conocimiento
directo, declaran este mundo y el otro mundo’. Esto es el entendimiento incorrecto.
“¿Y qué, bhikkhus, es el entendimiento correcto? El entendimiento correcto, lo digo, es de
dos tipos: Existe el entendimiento correcto que es afectado por las corrupciones, el cual
participa de mérito, fructificando del lado del apego [en el ámbito de la existencia]; y existe
el entendimiento correcto que es noble, libre de corrupciones, supramundano, un factor de la
vía.

“¿Y qué, bhikkhus, es el entendimiento correcto que es afectado por las corrupciones, el cual
participa de mérito, fructificando del lado del apego?

“Hay lo dado y lo que es ofrecido y lo que es sacrificado; hay fruto y resultado de las acciones
buenas y malas; existe este mundo y el otro mundo; hay madre y padre; hay seres que renacen
espontáneamente; hay reclusos y religiosos buenos y virtuosos en el mundo que, habiéndose
dado cuenta por sí mismos, mediante conocimiento directo, declaran este mundo y el otro
mundo.” Éste es el entendimiento correcto afectado por las corrupciones, el cual participa de
mérito, fructificando del lado del apego.

“¿Y qué, bhikkhus, es el entendimiento correcto que es noble, libre de corrupciones,


supramundano, un factor de la vía? La sabiduría, la facultad de sabiduría, el poder de
sabiduría, el factor de la iluminación investigación-de-estados, el factor de la vía
entendimiento correcto en aquella persona cuya mente es noble, cuya mente está libre de
corrupciones, que posee la vía noble y se encuentra desarrollando la vía noble: Éste es el
entendimiento correcto que es noble, libre de corrupciones, supramundano, un factor de la
vía.“Uno se esfuerza por abandonar el entendimiento incorrecto y por entrar en el
entendimiento correcto: Esto es el propio esfuerzo correcto. Con atención plena uno
abandona el entendimiento incorrecto, con atención plena uno entra y permanece en el
entendimiento correcto: Ésta es la propia atención correcta. De manera que estos tres estados
funcionan y circulan en derredor del entendimiento correcto, esto es, entendimiento correcto,
esfuerzo correcto, y atención correcta.

"Allí, bhikkhus, el entendimiento correcto viene primero. ¿Y cómo es que el entendimiento


correcto viene primero? Uno entiende la intención incorrecta como intención incorrecta y la
intención correcta como intención correcta. Esto es el propio entendimiento correcto.

“¿Y qué, bhikkhus, es la intención incorrecta? La intención de deseo sensorial, la intención


de mala voluntad [aversión], y la intención de crueldad. Esto es la intención incorrecta.“¿Y
qué, bhikkhus, es la intención correcta? La intención correcta, lo digo, es de dos tipos: Existe
la intención correcta que es afectada por las corrupciones, la cual participa de mérito,
fructificando del lado del apego [en el ámbito de la existencia], y existe la intención correcta
que es noble, libre de corrupciones, supramundana, un factor de la vía noble.“¿Y qué,
bhikkhus, es la intención correcta que es afectada por las corrupciones, la cual participa de
mérito, fructificando del lado del apego? La intención de renuncia, la intención de
noaversión, y la intención de no-crueldad: Ésta es la intención correcta afectada por las
corrupciones...del lado del apego.“¿Y qué, bhikkhus, es la intención correcta que es noble,
libre de corrupciones, supramundana, un factor de la vía? El pensar, pensamiento, intención,
absorción mental, fijación mental, dirección de la mente, formación verbal en aquella
persona cuya mente es noble, cuya mente esta libre de corrupciones, que posee la vía noble
y se encuentra desarrollando la vía noble: Ésta es la intención correcta que es noble...un
factor de la vía. “Uno se esfuerza por abandonar la intención incorrecta y por entrar en la
intención correcta: Esto es el propio esfuerzo correcto. Con atención plena uno abandona la
intención incorrecta: Ésta es la propia atención correcta. De manera que estos tres estados
funcionan y circulan en derredor de la intención correcta, esto es, entendimiento correcto,
esfuerzo correcto, y atención correcta.

"Allí, bhikkhus, el entendimiento correcto viene primero. ¿Y cómo es que el entendimiento


correcto viene primero? Uno entiende el lenguaje incorrecto como lenguaje incorrecto y el
lenguaje correcto como lenguaje correcto: Esto es el propio entendimiento correcto. “¿Y
qué, bhikkhus, es el lenguaje incorrecto? Lenguaje falso, lenguaje malicioso, lenguaje rudo,
y chismorreo: Esto es el lenguaje incorrecto.

"Y qué, bhikkhus, es el lenguaje correcto? El lenguaje correcto, lo digo, es de dos tipos: Hay
lenguaje correcto que es afectado por las corrupciones, el cual participa de mérito,
fructificando del lado del apego [en el ámbito de la existencia]; y existe el lenguaje correcto
que es noble, libre de corrupciones, supramundano, un factor de la vía.“¿Y qué, bhikkhus, es
el lenguaje correcto que es afectado por las corrupciones, el cual participa de mérito,
fructificando del lado del apego? La abstinencia de lenguaje falso, la abstinencia de lenguaje
malicioso, la abstinencia de lenguaje rudo, la abstinencia de chismorreo: Esto es el lenguaje
correcto que es afectado por las corrupciones...del lado del apego."¿Y qué, bhikkhus, es el
lenguaje correcto que es noble, libre de corrupciones, supramundano, un factor de la vía? El
desistir de los cuatro tipos de conducta verbal incorrecta, el abstenerse, el refrenarse, la
abstinencia de ellos en una persona cuya mente es noble, cuya mente está libre de
corrupciones, que posee la vía noble y se encuentra desarrollando la vía noble: Éste es el
lenguaje correcto que es noble...un factor de la vía."Uno se esfuerza por abandonar el
lenguaje incorrecto y por entrar en el lenguaje correcto: Esto es el propio esfuerzo correcto.
Con atención plena uno abandona el lenguaje incorrecto, con atención plena uno entra y
permanece en el lenguaje correcto: Esto es la propia atención correcta. De manera que estos
tres estados funcionan y circulan en derredor del lenguaje correcto, esto es, entendimiento
correcto, esfuerzo correcto, y atención correcta. “Allí, bhikkhus, el entendimiento correcto
viene primero. ¿Y cómo es que el entendimiento correcto viene primero? Uno entiende la
acción incorrecta como acción incorrecta y la acción correcta como acción correcta: Esto es
el propio entendimiento correcto."¿Y qué, bhikkhus, es la acción incorrecta? El matar seres
vivientes, el tomar lo que no es otorgado y la mala conducta respecto a placeres sensoriales:
Esto es la acción incorrecta.

“¿Y qué, bhikkhus, es la acción correcta? La acción correcta, lo digo, es de dos tipos: Existe
la acción correcta que es afectada por las corrupciones, la cual participa de mérito,
fructificando del lado del apego [en el ámbito de la existencia]; y existe la acción correcta
que es noble, libre de corrupciones, un factor de la vía.

“¿Y qué, bhikkhus, es la acción correcta que es afectada por las corrupciones, la cual
participa de mérito, fructificando del lado del apego? El abstenerse de matar seres vivientes,
el abstenerse de tomar lo que no es otorgado, el abstenerse de mala conducta respecto a
placeres sensoriales: Esto es la acción correcta que es afectada por las corrupciones...del lado
del apego.

“¿Y qué, bhikkhus, es la acción correcta que es noble, libre de corrupciones, supramundana,
un factor de la vía noble? El desistir de los tres tipos de conducta corporal incorrecta, el
abstenerse, el refrenarse, la abstinencia de ellos en una persona cuya mente es noble, cuya
mente esta libre de corrupciones, que posee la vía noble y se encuentra desarrollando la vía
noble: Ésta es la acción correcta que es noble...un factor de la vía.

“Uno se esfuerza por abandonar la acción incorrecta y por entrar en la acción correcta: Esto
es el propio esfuerzo correcto. Con atención plena uno abandona la acción incorrecta, con
atención plena uno entra en la acción correcta: Esto es la propia atención correcta. De manera
que estos tres estados funcionan y circulan en derredor de la acción correcta, esto es,
entendimiento correcto, esfuerzo correcto y atención correcta.

“Allí, bhikkhus, el entendimiento correcto viene primero. ¿Y cómo es que el entendimiento


correcto viene primero? Uno entiende el modo de subsistencia incorrecto como modo de
subsistencia incorrecto y el modo de subsistencia correcto como modo de subsistencia
correcto: Esto es el propio entendimiento correcto.

“¿Y qué, bhikkhus, es el modo de subsistencia incorrecto? El tramar, el tomar, el insinuar, el


[hacer o dar] menos de lo debido, el perseguir la ganancia con la ganancia: Esto es el modo
de subsistencia incorrecto.

“¿Y qué, bhikkhus, es el modo de subsistencia correcto? El modo de subsistencia correcto,


lo digo, es de dos tipos: Existe el modo de subsistencia correcto que es afectado por las
corrupciones, el cual participa de mérito, fructificando del lado del apego [en el ámbito de la
existencia]; y existe el modo de subsistencia correcto que es noble, libre de corrupciones,
supramundano, un factor de la vía.

“¿Y qué, bhikkhus, es el modo de subsistencia correcto que es afectado por las corrupciones,
el cual participa de mérito, fructificando del lado del apego? Aquí, bhikkhus, un discípulo
noble abandona el modo de subsistencia incorrecto y gana su sustento mediante el modo de
subsistencia correcto: Éste es el modo de subsistencia correcto que es afectado por las
corrupciones...del lado del apego.

“¿Y qué, bhikkhus, es el modo de subsistencia correcto que es noble, libre de corrupciones,
supramundano, un factor de la vía? El desistir del modo de subsistencia incorrecto, el
abstenerse, el refrenarse, la abstinencia de ello en una persona cuya mente es noble, cuya
mente esta libre de corrupciones, que posee la vía noble y se encuentra desarrollando la vía
noble: Éste es el modo de subsistencia correcto que es noble... un factor de la vía.

“Uno se esfuerza por abandonar el modo de subsistencia incorrecto y por entrar en el modo
de subsistencia correcto: Esto es el propio esfuerzo correcto. Con atención plena uno
abandona el modo de subsistencia incorrecto, con atención plena uno entra en el modo de
subsistencia correcto: Esto es la propia atención correcta. De manera que estos tres estados
funcionan y circulan en derredor del modo de subsistencia correcto, esto es, entendimiento
correcto, esfuerzo correcto, y atención correcta.

“Allí, bhikkhus el entendimiento correcto viene primero. ¿Y cómo es que el entendimiento


correcto viene primero? En una persona de entendimiento correcto surge la intención
correcta; en una persona de intención correcta surge el lenguaje correcto; en una persona de
lenguaje correcto surge la hacino correcta; en una persona de acción correcta surge el modo
de subsistencia correcto; en una persona de modo de subsistencia correcto surge el esfuerzo
correcto; en una persona de esfuerzo correcto surge la atención correcta, en una persona de
atención correcta surge la concentración correcta; en una persona de concentración correcta
surge el conocimiento correcto; en una persona de conocimiento correcto surge la libración
correcta. En esta forma, bhikkhus, la vía del discípulo en entrenamiento superior posee ocho
factores, el Arahant posee diez factores.
“Allí, bhikkhus, el entendimiento correcto viene primero. ¿Y cómo es que el entendimiento
correcto viene primero? En una persona de entendimiento correcto el entendimiento
incorrecto es abolido y los numerosos y malignos estados malsanos que se originan con el
entendimiento incorrecto como condición son abolidos también y los numerosos estados
sanos que se originan con el entendimiento correcto como condiciona llegan a satisfacerse
mediante su desarrollo.

MN 117

{107} “Sariputta, se ha dicho ‘el factor de la entrada en la corriente, el factor de la entrada


en la corriente’. Ahora bien, Sariputta, ¿qué es el factor de la entrada en la corriente?”
“Asociarse con las personas de carácter superior, es el factor de la entrada en la corriente;
escuchar el verdadero Dhamma, es el factor de la entrada en la corriente; poseer una
cuidadosa atención, es el factor de la entrada en la corriente; practicar de acuerdo al Dhamma,
es el factor de la entrada en la corriente.

“¡Muy bien, Sariputta, muy bien! Asociarse con las personas de carácter superior, es el factor
de la entrada en la corriente; escuchar el verdadero Dhamma, es el factor de la entrada en la
corriente; poseer una cuidadosa atención, es el factor de la entrada en la corriente; practicar
de acuerdo al Dhamma, es el factor de la entrada en la corriente.

“Sariputta, también se ha dicho ‘la corriente, la corriente’. Ahora bien, Sariputta, ¿qué es la
corriente?” “Este Noble Óctuple Sendero, venerable señor, es la corriente. El recto
entendimiento, recta intención, recta forma de hablar, recta acción, recta forma de de vida,
recto esfuerzo, recta atención consciente y recta concentración.”

“¡Muy bien, Sariputta, muy bien! Este Noble Óctuple Sendero, es la corriente. El recto
entendimiento, recta intención, recta forma de hablar, recta acción, recta forma de de vida,
recto esfuerzo, recta atención consciente y recta concentración.”

“Sariputta, también se ha dicho ‘el que entró en la corriente, el que entró en la corriente’.
Ahora bien, Sariputta, ¿quién es el que entró en la corriente?”

“Él que posee, venerable señor, este Noble Óctuple Sendero, es alguien que puede ser
llamado ‘uno que entró en la corriente’: alguien con este y este nombre, de esta y esta
familia.” “¡Muy bien, Sariputta, muy bien! Él que posee este Noble Óctuple Sendero, es
alguien que puede ser llamado ‘uno que entró en la corriente’: alguien con este y este nombre,
de esta y esta familia.”
SN 55,5

{108} "Monjes, al igual que el bote sin un sostén es fácil volcar y el bote con el sostén es
dificil volcar, así también la mente sin el sostén es fácil volcar y la mente con el sostén es
dificil volcar. ¿Y qué es, monjes, el sosten de la mente? El Noble Óctuple Sendero."

SN 45,27

{109} “Monjes, imaginad una espiga de arroz o una espiga de cebada rectamente
direccionada que está presionada por la mano o por el pie. Siendo así, perforaría la mano o
el pie derramando la sangre por esta única razón. ¿Cuál razón? Por estar rectamente
direccionada. Así también, monjes, el monje cuyo entendimiento está rectamente
direccionado, quien desarrolla rectamente el camino, puede perforar la ignorancia, obtener
el verdadero conocimiento y alcanzar el Nibbana por esta razón. ¿Cuál razón? Porque su
entendimiento está rectamente direccionado.

“¿Y cómo, monjes, el monje direcciona rectamente su entendimiento y desarrolla rectamente


el camino, de manera tal que pueda perforar la ignorancia, obtener el verdadero conocimiento
y alcanzar el Nibbana? Es el caso del monje que desarrolla el recto punto de vista valiéndose
de la reclusión, del desapasionamiento, del cese y de la madurez en dejar ir las cosas. Él
desarrolla la recta intención… la recta forma de hablar… la recta acción… la recta forma de
vida… el recto esfuerzo… la recta atención consciente… la recta concentración valiéndose
de la reclusión, del desapasionamiento, del cese y de la madurez en dejar ir las cosas. Es así,
cómo, monjes, el monje direcciona rectamente su entendimiento y desarrolla rectamente el
camino, de manera tal que pueda perforar la ignorancia, obtener el verdadero conocimiento
y alcanzar el Nibbana.”

SN 45,154

{110} “Monjes, así como varios vientos soplan en el cielo –viento del este y viento del oeste,
viento del sur y viento del norte, viento polvoriento y viento limpio, viento frío y viento
caliente, viento suave y viento fuerte- así también, cuando el monje cultiva y desarrolla el
Noble Óctuple Sendero, entonces para él, los cuatro fundamentos de la atención consciente
llegan a su pleno cumplimiento, los cuatro correctos esfuerzos llegan a su pleno
cumplimiento, las cuatro bases del poder espiritual llegan a su pleno cumplimiento, las cinco
facultades espirituales llegan a su pleno cumplimiento, los cinco poderes llegan a su pleno
cumplimiento y los siete factores de iluminación llegan a su pleno cumplimiento."

SN 45,155

{111} "Cuando uno no conoce ni ve el oído como es realmente... Cuando uno no conoce ni
ve la nariz como es realmente... Cuando uno no conoce ni ve la lengua como es realmente...
Cuando uno no conoce ni ve el cuerpo como es realmente... Cuando uno no conoce ni ve la
mente como es realmente... uno experimenta sufrimiento corporal y mental. “Bhikkhus,
cuando uno conoce y ve el ojo como es realmente, cuando uno conoce y ve las formas
como son realmente, cuando uno conoce y ve la consciencia visual como es realmente,
cuando uno conoce y ve el contacto visual como es realmente, cuando uno conoce y ve
como es realmente [la sensación] sentida como agradable o dolorosa o ni dolorosa ni
agradable que surge con el contacto visual como condición, entonces uno no está ardiente
por el deseo por el ojo, por las formas, por la consciencia visual, por el contacto visual, por
[la sensación] sentida como agradable o dolorosa o ni dolorosa ni agradable que surge con
el contacto visual como condición.

“Cuando uno no permanece ardiente por el deseo, desencadenado, no se encapricha,


contemplando el peligro, entonces los cinco agregados afectados por el apego disminuyen
para uno mismo en el futuro; y el apetito de uno – el cual conlleva la renovación del ser, es
acompañada por el deleite y el deseo, y se deleita en esto y en aquello – es abandonado.
Los problemas corporales y mentales de uno son abandonados, los tormentos corporales y
mentales de uno son abandonados, las fiebres corporales y mentales de uno son
abandonadas, y uno experimenta placer corporal y mental.

“La opinión de tal persona es la opinión correcta. Su intención es la intención correcta, su


esfuerzo es el esfuerzo correcto, su atención es la atención correcta, su concentración es la
concentración correcta. Pero su acción corporal, su acción verbal y su forma de vida ya han
sido totalmente purificadas con anterioridad. Así este Noble Camino Óctuple se cumple en
él a través de su desarrollo; los cuatro fundamentos de la atención también se cumplen en él
a través de su desarrollo; los cuatro tipos de esfuerzos correctos también se cumplen en él a
través de su desarrollo; las cuatro bases para el poder espiritual también se cumplen en él a
través de su desarrollo; las cinco facultades también se cumplen en él a través de su
desarrollo; los cinco poderes también se cumplen en él a través de su desarrollo; los siete
factores para la iluminación también se cumplen en él a través de su desarrollo. Estas dos
cosas -la serenidad y la visión profunda- se dan en él en armoniosa unión. Comprende
totalmente a través del conocimiento directo estas cosas que deberían ser comprendidas
totalmente a través del conocimiento directo. Abandona a través del conocimiento directo
aquellas cosas que deberían ser abandonadas a través del conocimiento directo. Desarrolla a
través del conocimiento directo aquellas cosas que deberían ser desarrolladas a través del
conocimiento directo. Logra a través del conocimiento directo aquellas cosas que deberían
ser logradas a través del conocimiento directo.

“¿Y qué cosas deberían ser totalmente comprendidas a través del conocimiento directo? La
respuesta es: los cinco agregados afectados por el apego, es decir, el agregado de la forma
material afectado por el apego, el agregado de la sensación afectado por el apego, el agregado
de la percepción afectado por el apego, el agregado de las formaciones afectado por el apego,
el agregado de la consciencia afectado por el apego. Estas son las cosas que deben ser
comprendidas totalmente a través del conocimiento directo.

“¿Y qué cosas deberían ser abandonadas a través del conocimiento directo? La ignorancia y
el deseo de ser. Estas son las cosas que deberían ser abandonadas a través del conocimiento
directo.

“¿Y qué cosas deberían ser desarrolladas a través del conocimiento directo? La serenidad y
la visión profunda. Estas son las cosas que deberían ser desarrolladas a través del
conocimiento directo.

“¿Y qué cosas deberían ser logradas a través del conocimiento directo? El verdadero
conocimiento y la liberación. Estas son las cosas que deberían ser logradas a través del
conocimiento directo.

“Cuando uno conoce y ve el oído como es realmente... Estas son las cosas que deberían ser
logradas a través del conocimiento directo.

“Cuando uno conoce y ve la nariz como es realmente... Estas son las cosas que deberían ser
logradas a través del conocimiento directo.

“Cuando uno conoce y ve la lengua como es realmente... Estas son las cosas que deberían
ser logradas a través del conocimiento directo.

“Cuando uno conoce y ve el cuerpo como es realmente... Estas son las cosas que deberían
ser logradas a través del conocimiento directo.

“Cuando uno conoce y ve la mente como es realmente... Estas son las cosas que deberían ser
logradas a través del conocimiento directo.

MN 149
{112} “Monjes, Imaginad un hospedaje: la gente viene del este, del oeste, del norte y del sur
para hospedarse ahí. Los khatiyas, los brahmanes, los vessas y los suddas vienen para
hospedarse ahí. Así también, monjes, cuando el monje cultiva y desarrolla el Noble Óctuple
Sendero, a través de un conocimiento directo, comprende plenamente aquellas cosas que han
de ser comprendidas a través de un conocimiento directo; a través de un conocimiento
directo, abandona aquellas cosas que han de ser abandonadas a través de un conocimiento
directo; a través de un conocimiento directo, realiza aquellas cosas que han de ser realizadas
a través de un conocimiento directo; a través de un conocimiento directo, cultiva aquellas
cosas que han de ser cultivadas a través de un conocimiento directo.

SN 45,159

{113} “Monjes, suponed que un hombre estaba de viaje y visualizó una gran extensión de
las aguas, siendo la orilla cercana un lugar peligroso y temible, mientras que la otra orilla,
segura y apacible. Sin embargo, no había barco alguno ni puente que serviría para llegar a la
otra orilla. Entonces, el hombre pensó lo siguiente: ‘he aquí, una gran extensión de agua y
esta orilla cercana es un lugar peligroso y temible, mientras que la otra orilla es segura y
apacible. Sin embargo, no hay barco alguno ni puente que me serviría para llegar a la otra
orilla. ¿Qué tal, si recolecto la paja, las ramitas, los ramales y las hojas para hacer de ello una
barca, la cual me permitiría cruzar las aguas a salvo, haciendo sólo el esfuerzo con mis manos
y pies?’ Entonces, el hombre reunió la paja, las ramitas, los ramales y las hojas e hizo una
barca con la cual cruzó las aguas y arribó a salvo a la otra orilla, haciendo sólo el esfuerzo
con sus manos y pies. Estando ya al otro lado, pensó: ‘¡Qué útil me fue esta barca! Gracias
a ella, solamente con el esfuerzo de mis manos y pies, pude cruzar las aguas y llegar a salvo
a la otra orilla. ¿Por qué no la levanto, no la pongo sobre mis hombros y mi cabeza y la llevo
por dondequiera que vaya?’ ¿Qué pensáis monjes: haciendo esto, haría el hombre lo que
corresponde hacer con una barca?” “Ciertamente, no, señor”.

“Entonces, ¿qué debería hacer el hombre con la barca, para que esto corresponda a lo que se
debe hacer con una barca? Suponed, monjes, que un hombre al llegar a la otra orilla dijera:
‘¡Qué útil me fue esta barca! Gracias a ella, solamente con el esfuerzo de mis manos y pies,
pude cruzar las aguas y llegar a salvo a la otra orilla. ¿Por qué no la arrastro a la tierra firme
o la sujeto a la deriva y voy a dondequiera?’ Haciendo esto, él realmente haría lo que
corresponde hacer con una barca.

“De esta manera, monjes, el Dhamma se parece a una barca, cuyo propósito es cruzar las
aguas y no poseerla. Monjes, al saber que el Dhamma se parece a una barca, debéis abandonar
inclusive los dhammas y, con más razón, las enseñanzas contrarias al Dhamma.

MN 22
{114} “’La gran expansión del agua’ representa a los cuatro flujos: el flujo de la sensualidad,
el flujo de la existencia, el flujo de las opiniones y el flujo de la ignorancia.
’La orilla cercana, sospechosa y peligrosa’ representa a la identidad. ’La orilla lejana, segura
y libre de peligro’ representa al Nibbana. ’La balsa’ representa al Noble Óctuple Sendero: el
recto entendimiento, la recta intención, la recta forma de hablar, la recta acción, la recta
forma de vida, el recto esfuerzo, la recta atención consciente y la recta concentración. ’Hacer
el esfuerzo con sus manos y pies’ representa el surgimiento de la energía."

Pasajes del Canon Pali

{115} Una vez se sentó allí, el Venerable Ananda le dijo al Bendito, "Esto es la mitad de la
vida santa, señor: amistad admirable, compañerismo admirable, camaradería admirable".

"No diga esto, Ananda. No lo diga. La amistad admirable, el compañerismo admirable, la


camaradería admirable es en la actualidad la totalidad de la vida santa. Cuando un monje
tiene personas admirables como amigos, compañeros y camaradas, se puede esperar que él
desarrolle y persiga el noble óctuple sendero .

"¿Y cómo un monje que tiene personas admirables como amigos, compañeros y camaradas,
desarrolla y persigue el noble óctuple sendero ? Existe el caso donde un monje desarrolla la
correcta visión dependiente del aislamiento, dependiente del desapasionamiento,
dependiente de la cesación, resultando en el abandono. Él desarrolla la correcta resolución
dependiente del aislamiento, dependiente del desapasionamiento, dependiente de la cesación,
resultando en el abandono. Él desarrolla el correcto discurso dependiente del aislamiento,
dependiente del desapasionamiento, dependiente de la cesación, resultando en el abandono.
Él desarrolla la acción correcta dependiente del aislamiento, dependiente del
desapasionamiento, dependiente de la cesación, resultando en el abandono. Él desarrolla el
sustento correcto dependiente del aislamiento, dependiente del desapasionamiento,
dependiente de la cesación, resultando en el abandono. Él desarrolla el correcto esfuerzo
dependiente del aislamiento, dependiente del desapasionamiento, dependiente de la cesación,
resultando en el abandono. Él desarrolla la atención correcta dependiente del aislamiento,
dependiente del desapasionamiento, dependiente de la cesación, resultando en el abandono.
Él desarrolla la correcta concentración dependiente del aislamiento, dependiente del
desapasionamiento, dependiente de la cesación, resultando en el abandono. Así es como un
monje que tiene personas admirables como amigos, compañeros, y camaradas desarrolla y
persigue el noble óctuple sendero.

"Y por esta línea de razonamiento uno puede conocer cómo la amistad admirable, el
compañerismo admirable, la camaradería admirable son en realidad la totalidad de la vida
santa: Dependiendo de mí, como amigo admirable, los seres sujetos al nacimiento han
ganado la liberación del nacimiento, los seres sujetos al envejecimiento, han ganado la
liberación del envejecimiento, los seres sujetos a la muerte, han ganado la liberación de la
muerte, los seres sujetos a la pena, lamentación, dolor, angustia y desesperación, han ganado
la liberación de la pena, lamentación, dolor, angustia y desesperación. Es por esta línea de
razonamiento que uno puede conocer cómo la amistad admirable, el compañerismo
admirable, la camaradería admirable son en realidad la totalidad de la vida santa”.

SN 45,2

{116} “Venerable señor, he aquí que podrían surgir diferentes asuntos concernientes al
Dhamma. Podría suceder que el Bienaventurado tomara una posición y el Sangha de los
monjes, otra. Pero cualquiera que fuese la posición del Bienaventurado, yo tomaría la misma.
Recuérdese el Bienaventurado de mí como de alguien que posee semejante fe en el
Bienaventurado. “Venerable señor, he aquí que podrían surgir diferentes asuntos
concernientes al Dhamma.

Podría suceder que el Bienaventurado tomara una posición y el Sangha de los monjes y el
Sangha de las monjas, otra… el Sangha de los monjes, el Sangha de las monjas y los
seguidores laicos, otra… el Sangha de los monjes, el Sangha de las monjas, los segadores
laicos y las seguidoras laicas, otra. Pero cualquiera que fuese la posición del Bienaventurado,
yo tomaría la misma. Recuérdese el Bienaventurado de mí como de alguien que posee
semejante fe en el Bienaventurado. “Venerable señor, he aquí que podrían surgir diferentes
asuntos concernientes al Dhamma. Podría suceder que el Bienaventurado tomara una
posición y el Sangha de los monjes, el Sangha de las monjas, los segadores laicos, las
seguidoras laicas y el mundo entero con sus devas, Mara y Brama, esta generación con sus
ascetas y brahmines, sus devas y seres humanos, otra. Pero cualquiera que fuese la posición
del Bienaventurado, yo tomaría la misma. Recuérdese el Bienaventurado de mí como de
alguien que posee semejante fe en el Bienaventurado.”

[Entonces, el Bienaventurado dijo:] “Cuando él se expresa de esta manera, Godha, ¿qué


podrías decir acerca del sakya Mahanama?”

“Cuando él se expresa de esta manera, venerable señor, nada puedo decir acerca de
Mahanama excepto que esto es bueno y favorable”

SN 55,23
{117} Consejo a los laicos. “Y, ¿qué son las buenas amistades? Aquí, Vyagghapajja , en
cualquier pueblo o mercado que un cabeza de familia resida, él se asocia, dialoga, se
relaciona con cabezas de familia o hijos de cabezas de familia, sean jóvenes de buena cultura,
o mayores de buena cultura, llenos de fe (saddha ), llenos de virtud (sila ), llenos de caridad
(caga), llenos de sabiduría (pañña ). Actúa siempre de acuerdo con la fe de los fieles, con la
virtud de los virtuosos, con la caridad de los caritativos, con de la sabiduría de los sabios.
Éstas son las buenas amistades.”

AN 8,54

{118} "El amigo dotado de tres cualidades es digno de para que uno se asocie con él. ¿Cuáles
tres? Él regala lo que es dificil de regalar, hace lo que es dificil de hacer y soporta lo que es
dificl de soportar. El amigo que esté dotado de estas tres cualidades es digno de para que uno
se asocie con él."

AN 3,130

{119} Monjes, estos tres son señalados por los grandes hombres sabios. ¿Cuáles son?
Monjes, hacer ofrendas es señalado por los grandes hombres sabios. Monjes, irse y
abandonar el hogar es señalado por los grandes hombres sabios. Monjes, atender a la madre
y al padre es señalado por los grandes hombres sabios. Estos tres son señalados por los
grandes hombres sabios.

AN 3,45

{120} “¿Y en qué consiste, monjes, el tesoro de la generosidad? Este es el caso, monjes, del
discípulo de un noble que viviendo en el hogar, con la conciencia purificada de la mancha
de la tacañería, con la generosidad liberadora y con la mano abierta, se deleita en ser
magnánimo, es sensible a los ruegos y se deleita en repartir limosnas En esto consiste,
monjes, el tesoro de la generosidad.

AN 7,6

{121} “Monjes, si los seres conocieran, como yo conozco, los frutos de dar y de compartir,
no estarían disfrutando de la comida sin compartirla, ni tampoco la mancha de la tacañería
obsesionaría sus corazones. Aún si se tratara del último trozo, del último bocado, ellos no
comerían sin haberlo compartido, si es que habría alguien [que necesitara] recibirlo. Sin
embargo, monjes, siendo que los seres no conocen, como yo conozco, los frutos de dar y de
compartir, entonces ellos disfrutan de la comida sin compartirla y la mancha de la tacañería
obsesiona sus corazones.”

Iti 1,26

{122} “Monjes, los brahmines y los hombres hogareños son muy provechosos para vosotros,
ya que os proveen los hábitos amarillos y los cuencos, la comida de las limosnas, el
alojamiento y los requisitos de la medicina en vuestras enfermedades. Y vosotros, monjes,
también sois muy provechosos a los brahmines y los hombres hogareños, ya que los enseñáis
el Dhamma admirable desde el principio, admirable en el medio y admirable al final –tanto
la forma como el espíritu- proclamando la plenitud de la vida santa completamente pura. De
esta manera, monjes, la vida santa es vivida en esta mutua dependencia, con el fin de cruzar
las torrentes y poner, completamente, fin al sufrimiento”.

Los hombres hogareños y los renunciantes, ambos de la misma forma,

Dependiendo uno del otro, alcanzan

El verdadero Dhamma, la insuperable liberación del cautiverio.

De los hombres hogareños, los renunciantes reciben El hábito

amarillo, los medios de vida, la cama y el asiento, La

protección de las inclemencias.

Mientras, dependiendo de estos renunciantes, los hombres hogareños, amantes del hogar,

Tienen fe en el discernimiento de los nobles Arahants,

Absortos en jhana, practicantes del Dhamma,

Y [de esta manera] recorren el camino que lleva a buen destino:

Al deleite en el mundo de los devas, al regocijo de los placeres sensuales.

Iti 4,107
{123} "Monjes, os quiero explicar el no Gran Hombre y el Gran Hombre, escuchad con
mucha atención. Monjes, ¿Quién es el no Gran Hombre? Es desagradecido y desconsiderado.
Monjes, debería comprenderse perfectamente que el desagradecimiento y la
desconsideración son menospreciables. Es completamente la esfera del no Gran Hombre.
Monjes, ¿Quién es el Gran Hombre? Es agradecido y posee consideración hacia los otros.
Monjes, debería comprenderse perfectamente que ser agradecido y considerado hacia los
otros es noble. Es completamente la esfera del Gran Hombre.

"Monjes, os digo que no podéis recompensar a dos personas. ¿Cuáles son? Son la madre y el
padre. Monjes, si hubierais llevado a vuestro padre y a vuestra madre en vuestra espalda y
vivido cien años y mientras tanto hubierais limpiado y realizado masajes en sus cuerpos
mientras ellos pierden orines y excrementos, no les hubierais retornado aún toda la gratitud
que ellos os mostraron. Aunque les ofrecierais toda la riqueza y los convirtierais en
gobernantes de la tierra, tampoco entonces no les hubierais retornado la gratitud mostrada
hacia vosotros porque ellos os han dado mucho más. Ellos os alimentaron cuando no podíais
caminar y os mostraron el mundo. Si vuestra madre y vuestro padre no poseen la fe y vosotros
se la infundís, si son miserables y los convertís en benevolentes y si nos son sabios y los
hacéis sabios, habréis mostrado gratitud a vuestra madre y a vuestro padre, es más que
suficiente."

AN 2,33-34

{124} “Monjes, aquellas familias, cuyas madres y cuyos padres son venerados en el hogar
por los hijos, son consideradas como si vivieran con el Brama. Las familias, cuyas madres y
cuyos padres son venerados en el hogar por los hijos, son consideradas como si vivieran con
los devas. Las familias, cuyas madres y cuyos padres son venerados en el hogar por los hijos,
son consideradas como si vivieran con los mejores maestros. Las familias, cuyas madres y
cuyos padres son venerados en el hogar por los hijos, son consideradas como si vivieran con
los que son dignos de donativos. El nombre de ‘Brama’, monjes, se designa a su padre y a su
madre. El nombre de ‘deva’, monjes, se designa a su padre y a su madre. El nombre de ‘mejor
maestro’, monjes, se designa a su padre y a su madre. El nombre de ‘digno de donativos’,
monjes, se designa a su padre y a su madre. ¿Y por qué razón? Porque, monjes, la madre y
el padre son muy provechosos para sus hijos: los cuidan, los nutren y los introducen al
mundo”.

Madre y padre son llamados “Brama”, “el mejor maestro”,

“Digno de donativos”; son compasivos

Hacia sus familias y sus hijos. Por eso el sabio


Debe venerarlos y rendirles honores,

Proveerles comida y bebida, la vestimenta y la cama, Ungir sus

cuerpos, bañar y lavar sus pies.

Ofreciendo estos servicios a sus padres,

El sabio es alabado ya en esta vida

Y después de la muerte, se regocija en el cielo.

Iti 4,106

{125} “Monjes, aquel primer punto de la ignorancia no es evidente, así que uno podría decir:
‘la ignorancia no estaba antes; ella llegó a ser’. Ésta declaración ha sido hecha, monjes. Sin
embargo, esto sí es evidente, monjes: la ignorancia está condicionada, teniendo su origen en
esto o aquello. La ignorancia, monjes, yo declaro, tiene su nutrimento. Ella no está sin
nutrimento. ¿Y cuál es, monjes, el nutrimento de la ignorancia? ‘Los cinco obstáculos’, debe
ser la respuesta. Yo declaro, monjes, que los cinco obstáculos también tienen su nutrimento
y ellos no están sin nutrimento. ¿Y cuál es, monjes, el nutrimento de los cinco obstáculos?
‘Las tres incorrectas formas de práctica’, debe ser la respuesta. Yo declaro, monjes, que las
tres incorrectas formas de práctica también tienen su nutrimento y ellas no están sin
nutrimento. ¿Y cuál es, monjes, el nutrimento de las tres incorrectas formas de práctica? ‘La
no restricción de los facultades sensoriales’, debe ser la respuesta. Yo declaro, monjes, que
la no restricción de las facultades sensoriales también tiene su nutrimento y ella no está sin
nutrimento. ¿Y cuál es, monjes, el nutrimento de la no restricción de las facultades
sensoriales? ‘La falta de un atento discernimiento’, debe ser la respuesta. Yo declaro, monjes,
que la falta de un atento discernimiento también tiene su nutrimento y ella no está sin
nutrimento. ¿Y cuál es, monjes, el nutrimento de la falta de un atento discernimiento? ‘La
inapropiada consideración’, debe ser la respuesta. Yo declaro, monjes, que la inapropiada
consideración también tiene su nutrimento y ella no está sin nutrimento. ¿Y cuál es, monjes,
el nutrimento de la inapropiada consideración? ‘La incredulidad’, debe ser la respuesta. Yo
declaro, monjes, que la incredulidad también tiene su nutrimento y ella no está sin
nutrimento. ¿Y cuál es, monjes, el nutrimento de la incredulidad? ‘El hecho de no escuchar
el verdadero Dhamma’, debe ser la respuesta. Yo declaro, monjes, que el hecho de no
escuchar el verdadero Dhamma también tiene su nutrimento y esto no está sin nutrimento.
¿Y cuál es, monjes, el nutrimento del hecho de no escuchar el verdadero Dhamma? ‘El hecho
de no servir al recto hombre’, debe ser la respuesta.
“Así monjes, cuando el hecho de no servir al recto hombre se realiza, se realiza también el
hecho de no escuchar el verdadero Dhamma. Cuando se realiza el hecho de no escuchar el
verdadero Dhamma, se realiza también la incredulidad. Cuando se realiza la incredulidad, se
realiza también la inapropiada consideración. Cuando se realiza la inapropiada
consideración, se realiza también la falta de un atento discernimiento. Cuando se realiza la
falta de un atento discernimiento, se realiza también la no restricción de las facultades
sensoriales. Cuando se realiza la no restricción de las facultades sensoriales, se realizan
también las tres incorrectas formas de práctica. Cuando se realizan las tres incorrectas formas
de práctica, se realizan también los cinco obstáculos. Cuando se realizan los cinco obstáculos,
se realiza también la ignorancia. Este es el nutrimento de la ignorancia, monjes, ésta su
realización.

“Al igual, monjes, que cuando una copiosa lluvia cae sobre la montaña, el agua corre hacia
abajo por las pendientes, llenando primero las fisuras de la montaña, sus grietas y
hendeduras, y cuando éstos rebosan, llenan luego los pequeños charcos, y cuando éstos
rebosan, llenan a los estanques más grandes, los cuales, cuando rebosan, llenan a los
pequeños ríos, y cuándo éstos rebosan, llenan a los ríos grandes, para que finalmente, estos
grandes ríos rebosantes, llenen el mar, el gran océano –siendo éste el nutrimento del gran
océano y su realización- de la misma manera, monjes, cuando el hecho de no servir al recto
hombre se realiza, se realiza también el hecho de no escuchar el verdadero Dhamma...
Cuando se realizan los cinco obstáculos, se realiza también la ignorancia. Este es el
nutrimento de la ignorancia, monjes, ésta su realización.

“La liberación a través del conocimiento, monjes, yo declaro, tiene su nutrimento. Ella no
está sin nutrimento. ¿Y cuál es monjes, el nutrimento de la liberación a través del
conocimiento? ‘Los siete factores de iluminación’, debe ser la respuesta. Yo declaro, monjes,
que los siete factores de iluminación también tienen su nutrimento y ellos no están sin
nutrimento. ¿Y cuál es, monjes, el nutrimento de los siete factores de iluminación? ‘Los
cuatro fundamentos de la atención consciente’, debe ser la respuesta. Yo declaro, monjes,
que los cuatro fundamentos de la atención consciente también tienen su nutrimento y ellos
no están sin nutrimento. ¿Y cuál es, monjes, el nutrimento de los cuatro fundamentos de la
atención consciente? ‘Las tres rectas formas de práctica’, debe ser la respuesta. Yo declaro,
monjes, que las tres rectas formas de práctica también tienen su nutrimento y ellas no están
sin nutrimento. ¿Y cuál es, monjes, el nutrimento de las tres rectas formas de práctica? ‘El
control de las facultades sensoriales’, debe ser la respuesta. Yo declaro, monjes, que el
control de las facultades sensoriales también tiene su nutrimento y él no está sin nutrimento.
¿Y cuál es, monjes, el nutrimento del control de las facultades sensoriales? ‘El atento
discernimiento’, debe ser la respuesta. Yo declaro, monjes, que el atento discernimiento
también tiene su nutrimento y él no está sin nutrimento. ¿Y cuál es, monjes, el nutrimento
del atento discernimiento? ‘La apropiada consideración’, debe ser la respuesta. Yo declaro,
monjes, que la apropiada consideración también tiene su nutrimento y ella no está sin
nutrimento. ¿Y cuál es, monjes, el nutrimento de la apropiada consideración? ‘La fe’, debe
ser la respuesta. Yo declaro, monjes, que la fe también tiene su nutrimento y ella no está sin
nutrimento. ¿Y cuál es, monjes, el nutrimento de la fe? ‘El hecho de escuchar el verdadero
Dhamma’, debe ser la respuesta. Yo declaro, monjes, que el hecho de escuchar el verdadero
Dhamma también tiene su nutrimento y esto no está sin nutrimento. ¿Y cuál es, monjes, el
nutrimento del hecho de escuchar el verdadero Dhamma? ‘El hecho de servir al recto
hombre’, debe ser la respuesta.

“Así monjes, cuando el hecho de servir al recto hombre se realiza, se realiza también el hecho
de escuchar el verdadero Dhamma. Cuando se realiza el hecho de escuchar el verdadero
Dhamma, se realiza también la fe. Cuando se realiza la fe, se realiza también la apropiada
consideración. Cuando se realiza la apropiada consideración, se realiza también el atento
discernimiento. Cuando se realiza el atento discernimiento, se realiza también la restricción
de las facultades sensoriales. Cuando se realiza la restricción de las facultades sensoriales, se
realizan también las tres rectas formas de práctica. Cuando se realizan las tres rectas formas
de práctica, se realizan también los cuatro fundamentos de la atención consciente. Cuando se
realizan los cuatro fundamentos de la atención consciente, se realizan también los siete
factores de iluminación. Cuando se realizan los siete factores de iluminación, se realiza
también la liberación a través del conocimiento. Este es el nutrimento de la liberación a través
del conocimiento, monjes, ésta su realización.

“Al igual, monjes, que cuando una copiosa lluvia cae sobre la montaña, el agua corre hacia
abajo por las pendientes, llenando primero las fisuras de la montaña, sus grietas y
hendeduras, y cuando éstos rebosan, llenan luego los pequeños charcos, y cuando éstos
rebosan, llenan a los estanques más grandes, los cuales, cuando rebosan, llenan a los
pequeños ríos, y cuándo éstos rebosan, llenan a los ríos grandes, para que finalmente, estos
grandes ríos rebosantes, llenen el mar, el gran océano –siendo éste el nutrimento del gran
océano y su realización- de la misma manera, monjes, cuando el hecho de servir al recto
hombre se realiza, se realiza también el hecho de escuchar el verdadero Dhamma... Cuando
se realizan los siete factores de iluminación, se realiza también la liberación a través del
conocimiento. Este es el nutrimento de la liberación a través del conocimiento, monjes, ésta
su realización.

AN 10,61

{126} “Monjes, existen estas ocho condiciones, ocho causas que conducen a la adquisición
de la sabiduría aún no conquistada, que es la base de la vida santa, y, al haberla conquistado,
conducen a su desarrollo aún más alto, a la abundancia y su realización completa. ¿Cuáles
ocho?
“Monjes, este es el caso del monje que mora en cercanías del Maestro como su aprendiz, o
al lado de algún respetable compañero en la vida santa, en el cual ha sido establecido un
fuerte sentido de la conciencia, el miedo de culpa, el amor y el respeto. Esta es, monjes, la
primera condición, la primera causa que conduce a la adquisición de la sabiduría aún no
conquistada, que es la base de la vida santa, y, al haberla conquistado, conduce a su desarrollo
aún más alto, a la abundancia y su realización completa.

[ “¿Y en qué consiste, monjes, el tesoro del avergonzamiento? Este es el caso, monjes, del
discípulo de un noble que siente vergüenza de obrar mal, siente vergüenza de hablar mal y
siente vergüenza de pensar mal. En esto consiste, monjes, el tesoro del avergonzamiento.

“¿Y en qué consiste, monjes, el tesoro del temor de obrar mal? Este es el caso, monjes, del
discípulo de un noble que siente temor de obrar mal, siente temor de hablar mal y siente
temor de pensar mal. En esto consiste, monjes, el tesoro del temor de obrar mal.]

“Morando en cercanías del Maestro como su aprendiz o al lado de algún respetable


compañero en la vida santa, en el cual ha sido establecido un fuerte sentido de la conciencia,
el miedo de culpa, el amor y el respeto, él se acerca de tanto en tanto a su maestro
preguntando e inquiriendo de él de esta manera: '¿Cuál es el significado de esto?' Por lo cual,
estos venerables señores le revelan lo que es oculto, le explican lo que es oscuro y disipan
sus dudas en muchas de las cuestiones perplejas. Esta es, monjes, la segunda condición, la
segunda causa que conduce a la adquisición de la sabiduría aún no conquistada, que es la
base de la vida santa, y, al haberla conquistado, conduce a su desarrollo aún más alto, a la
abundancia y su realización completa.

“Habiendo escuchado el Dhamma, él se esfuerza practicando dos clases de reclusión: la


reclusión del cuerpo y la reclusión de la mente. Esta es, monjes, la tercera condición, la
tercera causa que conduce a la adquisición de la sabiduría aún no conquistada, que es la base
de la vida santa, y, al haberla conquistado, conduce a su desarrollo aún más alto, a la
abundancia y su realización completa.

“Luego, él practica la virtud y la vida restringida de acuerdo al Patimokkha; es perfecto en


su conducta y en sus costumbres, viendo el peligro de la falta aún más pequeña. Se somete y
se entrena a sí mismo en la práctica de los preceptos. Esta es, monjes, la cuarta condición, la
cuarta causa que conduce a la adquisición de la sabiduría aún no conquistada, que es la base
de la vida santa, y, al haberla conquistado, conduce a su desarrollo aún más alto, a la
abundancia y su realización completa.
“Él es muy docto, retiene lo que aprende y escucha, acumula el saber sagrado. Cualquier
enseñanza que es hermosa desde el comienzo, hermosa en el medio, hermosa al final -tanto
en su forma como en el significado- que proclama la vida santa y que es entera y
completamente pura, él la escucha con frecuencia, la retiene y la considera cuidadosamente,
la acumula, la examina en su mente y llega a profundo entendimiento de esta teoría. Esta es,
monjes, la quinta condición, la quinta causa que conduce a la adquisición de la sabiduría aún
no conquistada, que es la base de la vida santa, y, al haberla conquistado, conduce a su
desarrollo aún más alto, a la abundancia y su realización completa.

“Viviendo con determinación, persistentemente abandona las acciones demeritorias y cultiva


las buenas. Es firme, sólido en su esfuerzo, productivo en su deber correspondiente a las
acciones meritorias. Esta es, monjes, la sexta condición, la sexta causa que conduce a la
adquisición de la sabiduría aún no conquistada, que es la base de la vida santa, y, al haberla
conquistado, conduce a su desarrollo aún más alto, a la abundancia y su realización completa.

“Además, en medio del Sangha no se ocupa de parloteo ni habla de cosas infantiles; más
bien, habla él mismo del Dhamma o pregunta a otros sobre la doctrina; tampoco es negligente
con el noble silencio. Esta es, monjes, la séptima condición, la séptima causa que conduce a
la adquisición de la sabiduría aún no conquistada, que es la base de la vida santa, y, al haberla
conquistado, conduce a su desarrollo aún más alto, a la abundancia y su realización completa.

“Además, permanece contemplando el surgimiento y el declive de los cinco componentes (


khandhas ) del apego, pensando: 'tal es la forma, tal es su surgimiento, tal es su declive; tal
es la sensación, tal es su surgimiento, tal es su declive; tal es la percepción, tal es su
surgimiento, tal es su declive; tal es la construcción mental, tal es su surgimiento, tal es su
declive; tal es el estado de la conciencia, tal es su surgimiento, tal es su declive'. Esta es,
monjes, la octava condición, la octava causa que conduce a la adquisición de la sabiduría aún
no conquistada, que es la base de la vida santa, y, al haberla conquistado, conduce a su
desarrollo aún más alto, a la abundancia y su realización completa.

AN 8,2 [AN 7,6 ]

{127} Si uno encuentra un hombre sabio, quien como un

descubridor de tesoros te señala tus defectos y te llama la atención

sobre los mismos, debe asociarse con tal persona.

Uno irá bien y no mal en la compañía de esta persona.


Dhp 76

{128} “Monjes, existen cinco gratificaciones, producto de la fe, que un hombre laico
proveniente de buena familia puede esperar. ¿Cuáles cinco?

“Monjes, cuando la gente buena y sabia del mundo muestra compasión a alguien, la muestra,
en primer lugar, a personas que tienen fe y no a las que carecen de ella. Cuando visitan las
casas, en primer lugar, visitan a las personas que tienen fe y no a las que carecen de ella.
Cuando aceptan las ofrendas, en primer lugar, las aceptan de las personas que tienen fe y no
de las que carecen de ella. Cuando enseñan el Dhamma, la enseñan primero a las personas
que tienen fe y no a las que carecen de ella. Las personas que tienen fe, al desintegrarse sus
cuerpos, después de la muerte, resurgirán en el lugar de buen destino, en el plano de felicidad.

“Éstas son, monjes, las cinco gratificaciones, producto de la fe, que un hombre laico
proveniente de buena familia puede esperar.

“Al igual que una gran higuera que se eleva por encima del suelo de una agradable campiña,
es como el cielo para todas las aves del alrededor, así también, un hombre laico proveniente
de buena familia que tiene fe, es como el cielo para muchos: para los monjes, monjas,
seguidores laicos y segadoras laicas.”

Una majestuosa higuera, cuyas ramas

Abundan en frutos y hojas verdes,

Con tronco y raíces sólidos,

Sirve para que las aves encuentren el reposo.

En este deleitoso lugar, hacen sus nidos. Aquellos

que buscan la sombra, la encuentran Y los que

buscan frutos, hallan el alimento.

Lo mismo sucede con la persona realizada en la virtud y la fe, La que

es modesta, sensible, amable, amigable y apacible.

A ella llegan los que están libres de las contaminaciones,


Los que fueron liberados de la pasión, de la aversión y falsa ilusión; Los que

constituyen el inconmensurable campo de méritos para el mundo.

Ellos la enseñan el Dhamma que disipa todo el sufrimiento. Y

cuando lo entienda, queda libre de las contaminaciones, Alcanza el

parinibbana.

AN 5,38

{129} “Monjes, cuando una mujer, discípula de un noble, crece en las cinco áreas del
crecimiento, adquiere lo esencial, adquiere lo mejor y adquiere la excelencia del cuerpo.
¿Cuáles cinco? Ella crece en la fe, en la virtud, en el aprendizaje, en la generosidad y en la
sabiduría. Cuando una mujer, monjes, discípula de un noble, crece en estas cinco áreas del
crecimiento, adquiere lo esencial, adquiere lo mejor y adquiere la excelencia del cuerpo.”

Creciendo en la fe y en la virtud,

En la sabiduría, generosidad y aprendizaje,

La virtuosa discípula laica,

Adquiere aquí y ahora,

Lo esencial, dentro de sí misma.

SN 37,34

{130} Para el discípulo que tiene fe en el mensaje del Maestro y vive penetrándolo, es propio
este principio: 'El Bienaventurado es el Maestro, yo soy el discípulo. Él es el que sabe, no
yo'. Para el discípulo que tiene fe en el mensaje del Maestro y vive penetrándolo, el mensaje
del Maestro lo nutre y le da salud. Para el discípulo que tiene fe en el mensaje del Maestro y
vive penetrándolo, es propio este principio: 'Con alegría podría dejar que se seque la carne y
la sangre de mi cuerpo, dejando solamente la piel, los tendones y los huesos, pero si no
alcanzo lo que debe ser alcanzado mediante la firmeza humana, humana persistencia y
humano esfuerzo, entonces no habrá descanso para mí'. Para el discípulo que tiene fe en el
mensaje del Maestro y vive penetrándolo, uno de estos dos frutos puede ser esperado: el
conocimiento penetrante aquí y ahora o -si aún le quedara algún remanente del apego- el
noretorno.

Pasajes del Canon Pali

{131} El Bendito dijo: “Estos cincos, son los obstáculos o impedimentos que aplastan y
reducen la atención y debilitan el discernimiento. ¿Cuáles son esos cincos?

“El deseo sensual es un obstáculo, un impedimento que aplasta o reduce la atención y debilita
el discernimiento. La voluntad enfermiza... la indolencia y el letargo... la impaciencia y la
ansiedad... y la incredulidad o inseguridad o incertidumbre son los obstáculos, o
impedimentos que aplastan y reducen la atención y debilitan el discernimiento. De nuevo
dijo que estos son los cinco obstáculos o impedimentos que aplastan y reducen la atención y
debilitan el discernimiento. Y cuando un monje no abandona esos cinco obstáculos, o
impedimentos que reducen y aplastan la atención y debilitan el discernimiento, cuando él
está sin fuerza y es débil en discernimiento: para él entender lo que es para su propio
beneficio, y entender lo que es para el beneficio de los demás, para entender lo que es para
el beneficio de ambos: la comprensión de un estado humano superior, una distinción y visión
en conocimiento verdaderamente noble: eso es imposible.

Supongan que hay un río, fluyendo desde las montañas – yendo lejos, su corriente es rápida
arrastrándolo todo con ella – entonces supongamos que un hombre abre canales para desviar
su corriente hacia ambos lados, de manera que la corriente en el medio del río se disperse,
aminore y disipe; ese río no iría muy lejos, su corriente no sería rápida y no arrastraría todo
a su paso. De la misma forma, cuando un monje no ha abandonado esos cinco obstáculos,
impedimentos que aplastan y disminuyen la atención y debilitan el discernimiento; cuando
no tiene fuerza y su discernimiento es débil, para entender lo que es beneficioso para él y
entender lo que es beneficioso para los demás, para entender lo que es beneficioso para
ambos y lograr un estado superior humano: una distinción en conocimiento y visión
verdaderamente noble: eso es imposible.

“Ahora bien, cuando un monje ha abandonado esos cinco obstáculos, impedimentos que
aplastan y reducen la atención y debilitan el discernimiento, cuando es fuerte en su
discernimiento, para entender lo que es beneficioso para él y entender lo que es beneficioso
para los demás, para entender lo que es beneficioso para ambos y lograr un estado superior
humano: una distinción en conocimiento y visión verdaderamente noble: eso es posible.

“Supongan que hay un río, fluyendo desde las montañas – yendo lejos, su corriente es rápida
llevándoselo todo en ella – entonces supongamos que un hombre cierra los canales que
desvían su corriente hacia ambos lados, de manera que la corriente en el medio del río no se
disperse, no aminore y no se disipe; ese río irá muy lejos, su corriente será rápida y arrastrará
todo a su paso. De la misma forma, cuando un monje ha abandonado esos cinco obstáculos,
impedimentos que aplastan y reducen la atención y debilitan el discernimiento, cuando es
fuerte en su discernimiento: para él entender lo que es para su propio beneficio y para el
beneficio de los demás, entender lo que es beneficioso para ambos y lograr un estado superior
humano: una distinción en conocimiento y visión verdaderamente noble: eso es posible.

AN 5,51

{132} Cuando el oro es degradado a causa de las cinco impurezas, no es flexible, maleable
ni luminoso. Es quebradizo, no listo para ser trabajado. ¿Cuáles cinco? El hierro, el cobre, el
tarro, el plomo y la plata […] Pero, cuando el oro no es degradado a causa de estas cinco
impurezas, es flexible, maleable y luminoso. No es quebradizo y está listo para ser trabajado.
Por eso, cuando uno tiene en mente cualquier clase de ornamento -sea un cinto, un aro, un
collar o una cadena de oro- el mismo debe servir para este propósito.

De igual manera, cuando la mente está degradada por estas cinco impurezas, no es flexible,
maleable ni luminosa. Es frágil y no concentrada correctamente como poner fin a las
contaminaciones. ¿Cuáles cinco? Los deseos sensoriales, la animadversión, la pereza y el
letargo, la inquietud e intranquilidad y la duda. Pero, cuando la mente no está degradada por
estas cinco impurezas, es flexible, maleable y luminosa. No es frágil y es concentrada
correctamente como poner fin a las contaminaciones. Entonces, cualquiera de los seis altos
conocimientos {64} puede dirigir la mente hacia el conocimiento y la realización, y uno
puede ser testigo de esto por sí mismo, siempre que haya una apertura.

AN 5,23

{133} Símiles sobre los obstáculos. “Imagina, braman, a un cuenco de agua mezclada con
laca, cúrcuma, colorante azul o colorante carmesí. Si un hombre con buena vista estuviese
examinando su reflejo facial en ella, no podría ni conocer ni ver cómo el mismo realmente
es. Así también, braman, cuando uno mora con la mente obsesionada por las pasiones
sensuales, abrumado por las pasiones sensuales y no entiende cuál es el verdadero escape de
las pasiones sensuales surgidas, entonces uno no conoce ni ve lo que es su propio bien, el
bien del otro ni el bien de ambos....
“Imagina, braman, a un cuenco de agua caliente puesto sobre fuego, hirviendo y
burbujeando. Si un hombre con buena vista estuviese examinando su reflejo facial en ella,
no podría ni conocer ni ver cómo el mismo realmente es. Así también, braman, cuando uno
mora con la mente obsesionada por la animadversión, abrumado por la animadversión y no
entiende cuál es el verdadero escape de la animadversión surgida, entonces uno no conoce
ni ve lo que es su propio bien, el bien del otro ni el bien de ambos...
“Imagina, braman, a un cuenco de agua cubierta con algas y plantas. Si un hombre con buena
vista estuviese examinando su reflejo facial en ella, no podría ni conocer ni ver cómo el
mismo realmente es. Así también, braman, cuando uno mora con la mente obsesionada por
la pereza y sopor, abrumado por la pereza y sopor y no entiende cuál es el verdadero escape
de la pereza y sopor surgidos, entonces uno no conoce ni ve lo que es su propio bien, el bien
del otro ni el bien de ambos...
“Imagina, braman, a un cuenco de agua agitada por el viento, ondulada, remolida y agitada
por las olas. Si un hombre con buena vista estuviese examinando su reflejo facial en ella, no
podría ni conocer ni ver cómo el mismo realmente es. Así también, braman, cuando uno mora
con la mente obsesionada por la inquietud e intranquilidad, abrumado por la inquietud e
intranquilidad y no entiende cuál es el verdadero escape de la inquietud e intranquilidad
surgidas, entonces uno no conoce ni ve lo que es su propio bien, el bien del otro ni el bien de
ambos... “Imagina, braman, a un cuenco de agua turbia, sucia, fangosa y puesta en oscuridad.
Si un hombre con buena vista estuviese examinando su reflejo facial en ella, no podría ni
conocer ni ver cómo el mismo realmente es. Así también, braman, cuando uno mora con la
mente obsesionada por la duda y no entiende cuál es el verdadero escape de la duda surgida,
entonces uno no conoce ni ve lo que es su propio bien, el bien del otro ni el bien de ambos...
SN 46,55

{134} “Imaginad, monjes, a un hombre que toma un préstamo y se dedica a su negocio y su


negocio prospera de manera tal que puede devolver todo el dinero y aún le queda para
mantener a su esposa. Entonces, cuando lo considera, está contento y lleno de alegría.

O, imaginad, monjes, a un hombre afligido por una grave enfermedad, sufriendo, no


encontrando sabor en la comida, con su cuerpo debilitado, pero que después, se recupera de
la aflicción, saborea la comida y su cuerpo vuelve a ser fuerte. Entonces, cuando lo considera,
está contento y lleno de alegría.

O, imaginad, monjes, a un hombre preso, encarcelado en la prisión, que luego sale libre de
la prisión, salvo y seguro, y sin haber perdido sus propiedades. Entonces, cuando lo
considera, está contento y lleno de alegría.

O, imaginad, monjes, a un hombre esclavo, que no siendo independiente sino dependiente


de otros, incapaz hacer lo que quiera, recupera luego si libertad, se vuelve independiente, no
dependiendo de los demás, se convierte en un hombre libre que puede ir dondequiera.
Entonces, cuando lo considera, está contento y lleno de alegría.

O, imaginad, monjes, a un hombre con muchas riquezas y posesiones que sigue un camino
que atraviesa el desierto, pero que luego cruza el desierto, salvo y seguro, sin haber perdido
sus propiedades. Entonces, cuando lo considera, está contento y lleno de alegría.
De la misma manera, monjes, mientras que estos cinco obstáculos no están abandonados
dentro de uno mismo, el monje los ve como la deuda, la enfermedad, la prisión, la esclavitud
y la ruta que atraviesa el desierto, respectivamente. Pero, cuando estos cinco obstáculos están
abandonados dentro de uno mismo, el monje los ve como la liberación de la deuda, la salud,
la liberación de la prisión, la liberación de la esclavitud y el lugar seguro.

MN 39

{135} Deseo sensual. Esto he escuchado. En una ocasión el Bienaventurado estaba morando
cerca de Savatthi, en la arboleda Jeta del parque de Anathapindika. En esta ocasión, el
Bienaventurado estaba sentado al aire libre, en la oscuridad de la noche, con una lámpara de
aceite encendida.

Y en este momento muchas polillas estaban rodando la lámpara de aceite y


desafortunadamente caían adentro, apresuradamente caían adentro, desafortunada y
apresuradamente caían adentro. Y el Bienaventurado observaba las polillas cómo estaban
rodando la lámpara de aceite y cómo desafortunadamente caían adentro, apresuradamente
caían adentro, desafortunada y apresuradamente caían adentro.

Entonces el Bienaventurado, habiendo penetrado este tema, elevó en este momento la


siguiente exclamación (Udana):

Ellos rondan apresuradamente, pero yerran lo esencial, Creando cada

vez nuevas cadenas.

Al igual que las polillas caen dentro del fuego,

Algunos sólo se empeñan en lo que ven u oyen.

Ud 6,9

{136} Apegados a los deseos sensuales, atados por la sensualidad,

No percibiendo las cadenas de sus faltas,

Aquellos que están atados y encadenados,

Nunca cruzarán las aguas crecidas, grandes y extensas.

Ud 7,3
{137} “Monjes, voy a enseñaros un discurso del Dhamma acerca del ligamento y falta de
ligamento. Escuchad y prestad atención que voy a hablar. “Sí, venerable señor”, respondieron
los monjes y el Bienaventurado continuó:

“Monjes, la mujer se ocupa interiormente de los rasgos de su feminidad: de su gesticulación


femenina, estilo femenino, poses femeninas, impulsos femeninos, femenina manera de
hablar y los encantos femeninos, y ésto la excita y se deleita en esto.

“Habiendo sido excitada y habiéndose deleitado en esto, ella se ocupa exteriormente de los
rasgos de la masculinidad: de la gesticulación masculina, estilo masculino, poses masculinas,
impulsos masculinos, masculina manera de hablar y los encantos masculinos, y ésto la excita
y se deleita en esto.

“Habiendo sido excitada y habiéndose deleitado en esto, ella desea estar ligada a lo que es
externo a ella, desea cualquier placer o felicidad vinculado a este ligamento. Así, monjes,
encontrando deleite en esto y cautivada por su feminidad, la mujer va ligándose a lo
masculino. Es así, cómo la mujer no trasciende su feminidad.

“Monjes, el hombre se ocupa interiormente de los rasgos de su masculinidad: de su


gesticulación masculina, estilo masculino, poses masculinas, impulsos masculinos,
masculina manera de hablar y los encantos masculinos, y ésto lo excita y se deleita en esto.

“Habiendo sido excitado y habiéndose deleitado en esto, él se ocupa exteriormente de los


rasgos de la feminidad: de la gesticulación femenina, estilo femenino, poses femeninas,
impulsos femeninos, femenina manera de hablar y los encantos femeninos, y ésto lo excita y
se deleita en esto.

“Habiendo sido excitado y habiéndose deleitado en esto, él desea estar ligado a lo que es
externo a él, desea cualquier placer o felicidad vinculado a este ligamento. Así, monjes,
encontrando deleite en esto y cautivado por su masculinidad, el hombre va ligándose a lo
femenino. Es así, cómo el hombre no trasciende su masculinidad.

“¿Y cómo, monjes, es la falta de ligamento?

“Monjes, la mujer no se ocupa interiormente de los rasgos de su feminidad: de su


gesticulación femenina... ni de los encantos femeninos, de modo que ésto no la excita ni se
deleita en esto.

“No habiendo sido excitada ni habiéndose deleitado en esto, ella no se ocupa exteriormente
de los rasgos de la masculinidad: de la gesticulación masculina... ni de los encantos
masculinos, de modo que ésto no la excita ni se deleita en esto.
“No habiendo sido excitada ni habiéndose deleitado en esto, ella no desea estar ligada a lo
que es externo a ella, no desea placer alguno ni felicidad vinculado a este ligamento. Así,
monjes, no encontrando deleite en esto ni siendo cautivada por su feminidad, la mujer no va
ligándose a lo masculino. Es así, cómo la mujer trasciende su feminidad.

“Monjes, el hombre no se ocupa interiormente de los rasgos de su masculinidad: de su


gesticulación masculina... ni de los encantos masculinos, y ésto no lo excita ni se deleita en
esto. “No habiendo sido excitado ni habiéndose deleitado en esto, él no se ocupa
exteriormente de los rasgos de la feminidad: de la gesticulación femenina... ni de los encantos
femeninos, y ésto no lo excita ni se deleita en esto.

“No habiendo sido excitado ni habiéndose deleitado en esto, él no desea estar ligado a lo que
es externo a él, no desea placer alguno ni felicidad vinculado a este ligamento. Así, monjes,
no encontrando deleite en esto ni siendo cautivado por su masculinidad, el hombre no va
ligándose a lo femenino. Es así, cómo el hombre trasciende su masculinidad.

“Ésta es la falta de ligamento y éste es el discurso del Dhamma acerca ligamento y falta de
ligamento."

AN 7,51

{138} “Hombre hogareño, imagina a un perro vencido por hambre y debilidad, esperando en
la puerta de una carnicería. Y un hábil carnicero o su aprendiz, tira al perro unos huesos sin
carne, bien cortados, limpios, pero manchados de sangre. ¿Qué opinas, hombre hogareño?
¿Podría este perro lograr a liberarse de su hambre y debilidad royendo semejantes huesos sin
carne, bien cortados, limpios, pero manchados de sangre?”

“No, venerable señor. Y ¿por qué no? Porque éstos son unos huesos sin carne, bien cortados,
limpios, pero manchados de sangre. Finalmente, este perro cosecharía hastío y decepción.”
“De la misma manera, hombre hogareño, el noble discípulo considera esto: ‘Los placeres
sensuales han sido comparados con unos huesos, por el Bienaventurado. Los mismos,
suministran aún más sufrimiento, más desesperanza, mientras el peligro de ellos es muy
grande.’ Habiendo visto eso, tal como realmente es con la sabiduría apropiada, él evita la
ecuanimidad diversificada, basada en diversidad y desarrolla la ecuanimidad unificada,
basada en unidad, donde el apego a las cosas materiales del mundo cesa por completo sin
residuos. “Hombre hogareño, imagina a un buitre, una garza o un halcón que incautó un
pedazo de carne y se fue volando. Entonces, otros buitres, garzas o halcones lo persiguieron
y lo clavaron. ¿Qué opinas, hombre hogareño? Si este buitre, garza o halcón no suelta
rápidamente su pedazo de carne, ¿se expone a la muerte o al sufrimiento mortal por eso?”
“Sí, venerable señor.”
“De la misma manera, hombre hogareño, el noble discípulo considera esto: ‘Los placeres
sensuales han sido comparados con el pedazo de carne, por el Bienaventurado. El mismo,
suministra aún más sufrimiento, más desesperanza, mientras el peligro de ellos es muy
grande.’ Habiendo visto eso, tal como realmente es con la sabiduría apropiada, él evita la
ecuanimidad diversificada, basada en diversidad y desarrolla la ecuanimidad unificada,
basada en unidad, donde el apego a las cosas materiales del mundo cesa por completo sin
residuos. “Hombre hogareño, imagina a un hombre que tomó una antorcha ardiente con paja
y se fue en contra del viento. ¿Qué opinas, hombre hogareño? Si este hombre no suelta
rápidamente su antorcha ardiente con paja, ¿puede el fuego de la antorcha con paja quemar
su mano, brazo o alguna otra parte del cuerpo y exponerlo a la muerte o al sufrimiento mortal
por eso?”

“Sí, venerable señor.”

“De la misma manera, hombre hogareño, el noble discípulo considera esto: ‘Los placeres
sensuales han sido comparados con la antorcha con paja, por el Bienaventurado. El mismo,
suministra aún más sufrimiento, más desesperanza, mientras el peligro de ellos es muy
grande.’ Habiendo visto eso, tal como realmente es con la sabiduría apropiada, él evita la
ecuanimidad diversificada, basada en diversidad y desarrolla la ecuanimidad unificada,
basada en unidad, donde el apego a las cosas materiales del mundo cesa por completo sin
residuos. “Hombre hogareño, imagina a un pozo de carbón más profundo que la estatura de
un hombre, lleno de brazas sin fuego ni humo. E imagina a un hombre que desea la vida y
no la muerte, que busca lo placentero y no lo penoso, y otros dos hombres fuertes sujetándolo
de los brazos lo arrastran a aquel pozo de carbón. ¿Qué opinas, hombre hogareño? Estaría
este hombre retorciendo su cuerpo de una manera u otra?”

“Sí, venerable señor. ¿Y por qué sí? Porque este hombre sabe que va a caer dentro de un
pozo de carbón, lo cual lo expone a la muerte o al sufrimiento mortal por eso”

“De la misma manera, hombre hogareño, el noble discípulo considera esto: ‘Los placeres
sensuales han sido comparados con el pozo de carbón, por el Bienaventurado. El mismo,
suministra aún más sufrimiento, más desesperanza, mientras el peligro de ellos es muy
grande.’ Habiendo visto eso, tal como realmente es con la sabiduría apropiada, él evita la
ecuanimidad diversificada, basada en diversidad y desarrolla la ecuanimidad unificada,
basada en unidad, donde el apego a las cosas materiales del mundo cesa por completo sin
residuos.

“Hombre hogareño, imagina a un hombre soñando con unos hermosos parques, hermosas
arboledas, hermosas praderas y hermosos lagos, que al despertarse deja de ver todo eso. De
la misma manera, hombre hogareño, el noble discípulo considera esto: ‘Los placeres
sensuales han sido comparados con el sueño por el Bienaventurado. Los mismos, suministran
aún más sufrimiento, más desesperanza, mientras el peligro de ellos es muy grande.’
Habiendo visto eso, tal como realmente es con la sabiduría apropiada, él evita la ecuanimidad
diversificada, basada en diversidad y desarrolla la ecuanimidad unificada, basada en unidad,
donde el apego a las cosas materiales del mundo cesa por completo sin residuos.

“Hombre hogareño, imagina a un hombre que haya tomado prestado muchos bienes –un
carruaje de lujo y unos pendientes de joyería fina- y, precedido por estas cosas prestadas,
fuera al mercado. Entonces, la gente al verlo diría ‘¡Señores, mirad a este rico hombre! ¡Es
así cómo los ricos disfrutan de sus riquezas!’ Pero los propietarios, dondequiera que lo
visualizaran, tomarían de vuelta sus cosas. ¿Qué opinas, hombre hogareño? ¿Sería esto
suficiente para este hombre para que estuviera abatido?”

“Sí, venerable señor. ¿Y por qué sí? Porque los propietarios se llevaron de vuelta sus cosas.”
“De la misma manera, hombre hogareño, el noble discípulo considera esto: ‘Los placeres
sensuales han sido comparados con las cosas prestadas por el Bienaventurado. El mismo,
suministra aún más sufrimiento, más desesperanza, mientras el peligro de ellos es muy
grande.’ Habiendo visto eso, tal como realmente es con la sabiduría apropiada, él evita la
ecuanimidad diversificada, basada en diversidad y desarrolla la ecuanimidad unificada,
basada en unidad, donde el apego a las cosas materiales del mundo cesa por completo sin
residuos. “Hombre hogareño, imagina a una densa arboleda cerca de un pueblo o una ciudad,
dentro de cual había un árbol cargado de frutas, pero ninguna de las cuales se haya caído al
cielo. E imagina a un hombre que llegó a necesitar las frutas, deseoso de las frutas, que
estuviera caminando en búsqueda de las frutas entrando en la arboleda y visualizando el árbol
cargado de frutas. En eso, él estuviera pensando: ‘Este árbol está cargado de frutas, pero
ninguna de ellas ha caído al suelo. Y siendo yo sé cómo trepar a la cima del árbol, así que
treparé a este árbol, comeré tantas frutas que pueda y llenaré mi barriga’. Y así lo hiciera.
Luego, imagina a otro hombre que llegó a necesitar las frutas, deseoso de las frutas, que
estuviera caminando en búsqueda de las frutas entrando en la arboleda y visualizando el árbol
cargado de frutas. En eso, él también estuviera pensando: ‘Este árbol está cargado de frutas,
pero ninguna de ellas ha caído al suelo. Y siendo yo sé cómo trepar a la cima del árbol, así
que treparé a este árbol, comeré tantas frutas que pueda y llenaré mi barriga’. Y así lo hiciera.
¿Qué opinas, hombre hogareño? Si este primer hombre que trepó a la cima del árbol no bajara
rápidamente, cuando el árbol cayera, ¿podría él quebrarse su mano, brazo o alguna otra parte
del cuerpo y exponerse a la muerte o al sufrimiento mortal por eso?”

“Sí, venerable señor.”

“De la misma manera, hombre hogareño, el noble discípulo considera esto: ‘Los placeres
sensuales han sido comparados con los frutos en el árbol el Bienaventurado. El mismo,
suministra aún más sufrimiento, más desesperanza, mientras el peligro de ellos es muy
grande.’ Habiendo visto eso, tal como realmente es con la sabiduría apropiada, él evita la
ecuanimidad diversificada, basada en diversidad y desarrolla la ecuanimidad unificada,
basada en unidad, donde el apego a las cosas materiales del mundo cesa por completo sin
residuos.

MN 54

{139} “Imagina, Magandiya, a un leproso cubierto de llagas y lleno de ampollas en sus


miembros, siendo devorado por los gusanos, rascándose las costras de las aberturas de las
heridas con las uñas, tratando de cicatrizar, estando encima del carbón ardiente. Entonces sus
amigos y compañeros, parientes cercanos y lejanos, podrían traerle a un médico para que lo
tratara. El médico, podría preparar la medicina para él y, gracias a ella, el hombre podría
curarse de su lepra y llegar a estar bien y contento, independiente, maestro de sí mismo, capaz
de irse adonde le plazca. Entonces, dos hombres fuertes podrían agarrarle de ambos brazos
y arrastrarlo hacia el carbón ardiente. ¿Qué opinas, Magandiya, estaría este hombre
retorciéndose a uno y otro lado?”

“Sí, maestro Gotama. ¿Y por qué sí? Porque realmente es doloroso tocar el fuego, caliente y
abrasador.”

“¿Y qué opinas, Magandiya, es solamente ahora que es doloroso tocar el fuego, que es
caliente y abrasador o ya previamente era doloroso tocar el fuego, que ya antes era caliente
y abrasador?” “Maestro Gotama, es tanto ahora que es doloroso tocar el fuego, que es
caliente y abrasador, como también ya previamente era doloroso tocar el fuego, que ya antes
era caliente y abrasador. Para cuando este hombre era leproso cubierto de llagas y lleno de
ampollas en sus miembros, siendo devorado por los gusanos, rascándose las costras de las
aberturas de las heridas con las uñas, sus facultades fueron dañadas; por eso, aunque el fuego
realmente es doloroso al ser tocado, él ha adquirido una percepción equivocada sobre él,
percibiéndolo como algo placentero”.

“Así también, Magandiya, en el pasado los placeres sensuales eran dolorosos, calientes y
abrasadores; en el futuro los placeres sensuales serán dolorosos, calientes y abrasadores; y
ahora, en el momento presente, los placeres sensuales son dolorosos, calientes y abrasadores.

Pero aquellos seres que no son libres del deseo descontrolado por los placeres sensuales, que
son devorados por la avidez de los placeres sensuales, que están quemados por la fiebre de
los deseos sensuales, tienen sus facultades dañadas; por eso, aunque los placeres sensuales
son realmente dolorosos, al ser experimentados, ellos han adquirido una percepción
equivocada sobre ellos, percibiéndolos como algo placentero”.

“Imagina, Magandiya, a un leproso cubierto de llagas y lleno de ampollas en sus miembros,


siendo devorado por los gusanos, rascándose las costras de las aberturas de las heridas con
las uñas, tratando de cicatrizar, estando encima del carbón ardiente, que mientras más se
rasca las costras y más trata de cicatrizar su cuerpo, se vuelve peor, más maloliente y las
aberturas de sus heridas llegan a ser más infectadas, pero aún así, él podría encontrar cierta
medida de satisfacción y regocijo rasgando las costras de sus heridas. Así también,
Magandiya, aquellos seres que no son libres del deseo descontrolado por los placeres
sensuales, que son devorados por la avidez de los placeres sensuales, que están quemados
por la fiebre de los deseos sensuales, todavía se empeñan en los placeres sensuales. Y
mientras más se empeñan en los placeres sensuales, mayor es su avidez por los placeres
sensuales y más les quema la fiebre por los placeres sensuales, pero aún así ellos encuentran
cierta medida de satisfacción y regocijo en la dependencia de las cinco cuerdas de los placeres
sensuales.

“¿Qué opinas, Magandiya, has visto alguna vez o has escuchado del rey alguno o ministro
del rey, regocijándose a sí mismo, equipado y empeñado con las cinco cuerdas de los placeres
sensuales quien, sin haber abandonado la avidez por los placeres sensuales, sin haberse
liberado de la fiebre de los placeres sensuales, fuera capaz de morar libre de la sed, con una
mente internamente apacible, o es capaz o será capaz de morar de esta manera?”

“No, maestro Gotama”.

“Bien, Magandiya, pues yo tampoco nunca he visto ni he escuchado del rey alguno o ministro
del rey, regocijándose a sí mismo, equipado y empeñado con las cinco cuerdas de los placeres
sensuales quien, sin haber abandonado la avidez por los placeres sensuales, sin haberse
liberado de la fiebre de los placeres sensuales, fuera capaz de morar libre de la sed, con una
mente internamente apacible, ni es capaz ni será capaz de morar de esta manera. Por el
contrario, Magandiya, aquellos ascetas o brahmines que han morado, moran o van a morar
libres de la sed, con una mente internamente apacible, todos lo hacen posible después de
haber entendido cómo realmente es el origen, la desaparición, la gratificación, el peligro y el
escape de los placeres sensuales y es recién después de haber abandonado la avidez por los
placeres sensuales, después de haberse liberado de la fiebre de los placeres sensuales, que
eran capaces, o son capaces o serán capaces de morar libres de la sed, con una mente
internamente apacible.”

MN 74

{140} Contemplad este bello cuerpo,

masa de dolores, montón de grumos,trastornado, en el

que nada dura, nada persiste. Este cuerpo es una

ciudadela hecha de huesos cubiertos de carne y


sangre en donde se almacenan el envejecimiento y la

muerte, el orgullo y el engaño.

Dhp 147. 150

{141} Ni un torrente de monedas de oro hace la felicidad

levantando placeres sensuales.

De pequeñas dulzuras y penas son los placeres sensuales.

Conociendo esto, el hombre sabio no encuentra felicidad

ni siquiera en placeres celestiales. El discípulo del Todo

Iluminado se deleita en la aniquilación del apego.

Dhp 186-187 {142} Un pícaro obstruía el camino de la monja Subha mientras ésta

caminaba Por el deleitoso bosque Jivakamba; Subha le dijo:

“¿Qué mal te he hecho para que obstruyas mi camino?

No es apropiado, amigo, que un hombre toque a una mujer que ha abandonado el hogar.

Cuyo entrenamiento ha sido enseñado por el Bienhechor, en las severas enseñanzas de mi


maestro.

¿Por qué te pones a obstruirme el camino, siendo mi estado purificado y sin reproche?

¿Por qué, con mente perturbada y con pasión, te pones a obstruirme,

Siendo yo imperturbable, con pasiones apartadas, sin reproche, con la mente perfectamente
liberada en respecto a todo?”

“Eres joven y nada fea; ¿qué te hace el haber abandonado el hogar?

Tira fuera tu hábito amarillo y ven, deleitémonos en el floreado bosque.

Los encumbrados árboles expiden un dulce aroma en todas las direcciones con el polen de
las flores;

El comienzo de la primavera es una feliz época; ven, deleitémonos en el floreado bosque.


Al mismo tiempo, los árboles con las florecientes crestas lloran, cuando están sacudidos por
el viento.

¿Qué deleite puede haber aquí para ti si estás hundida aquí dentro del bosque?

Deseas entrar sin compañía al solitario, aterrador y gran bosque,

Frecuentado por manadas de bestias de presa, perturbado por elefantes-hembras y excitado


por los elefantes machos.

Tú podrás caminar por ahí como una muñeca dorada, como una ninfa en jardines celestiales.

Oh incomparable, vas a brillar con hermosas prendas de fina muselina, con excelentes telas.

Podría estar a tu servicio si morásemos dentro de la arboleda;

He aquí no hay creatura más querida para mí, que tú, oh kinnari de placentera vista.

Si cumples con lo que te pido, haciéndome feliz y vienes a habitar la casa, Morarás en

la calma del palacio, y las mujeres te atenderán.

Vestirás prendas de fina muselina, te pondrás guirnaldas y ungüentos;

Y yo haré una gran variedad de adornos para ti, del oro, piedras preciosas y perlas.

Subirás al lecho con sobrecama bien lavada de polvo, hermosa, con colcha de lana expandida,

Nueva, costosa, decorada con madera de sándalo, expidiendo un excelente aroma.

Al igual que un loto azul florece hermosamente de las aguas frecuentadas por los espíritus
del agua,

Así también tú, que vives la vida santa, llegarás a la vejez, no siendo tocada por el hombre.”
“Lo que tú asumes como esencial aquí en el cuerpo, el cual está lleno de corporeidad, relleno
de cementerio, destinado a quebrarse;

¿Qué es lo que ves en mí cuando me miras, tú que estás fuera de tu mente?”

“Tus ojos realmente son como aquellos de Turi, como aquellos de kinnari dentro de las
montañas;

Habiendo contemplado tus ojos, mi deleite en los placeres sensuales se ha incrementado.


Habiendo visto tus ojos en tu rostro, lo podría comparar con el capullo del loto azul, dorado
y sin mancha;

Mi deleite en los placeres sensuales se ha incrementado.

Aún si te fueras lejos, te recordaría, oh tú de pestañas largas, oh tú de la mirada pura;

No hay ojos más queridos para mí, que los tuyos, oh kinnari de mirada placentera.”

“Tú deseas ir por el camino equivocado; quieres la luna como si fuera juguete; Quieres saltar

por encima del monte Meru, tú que persigues a la hija del Buda.

Porque para mí ahora, en ninguna parte del mundo, junto con los devas, existe el objeto de
deseo alguno.

Ni siquiera sé cuál sea esto, pues todo ha sido cortado de raíces por el Camino.

Esto ha sido diseminado como las moscas de la fosa llena del carbón ardiente; ha sido
considerado como un tazón de veneno.

Ni siquiera he visto cuál sea esto, pues todo ha sido cortado de raíces por el Camino. Trate

de seducir a alguien que no lo ha observado, o a alguien cuyo maestro no ha servido, Pero

al haber seducido a alguien que conoce, vas a sufrir angustia.

Mi atención consciente está establecida en el medio de ambos: injuria y alabanza, felicidad


y dolor.

Sabiendo que las cosas condicionadas son repugnantes, mi mente no se apega absolutamente
a nada.

Soy discípula del Bienhechor, viajando en el óctuple vehículo, el cual es el Camino.

Con mi dardo sacado afuera, sin las intoxicaciones, habiendo ido a una casa vacía, lo estoy
disfrutando.

Como títeres bien pintados o muñecas, han de ser vistos por mi,

Pegados por cuerdas y adhesivos, ejecutan las danzas de diferentes maneras.

Cuando se les quitan las cuerdas y los adhesivos, se desparraman, se mutilan y se esparcen,
No pueden ser hallados, quebrados en piezas pequeñas, ¿cómo una podría fijar en eso la
mente?

Este pequeño cuerpo, siendo de semejante clase, no existe sin estos fenómenos;

Siendo que no existe sin estos fenómenos, ¿cómo uno puede fijar su mente en él?

Al igual si vieras un cuadro pintado en la pared manchado con el oropimente amarillo, tu


vista está confusa

Así también, la sabiduría humana es inútil.

Oh hombre ciego, estás siguiendo a una cosa vacía, como una ilusión puesta frente de ti.

Como un árbol dorado en el fin del sueño, como títeres de un espectáculo en el medio de la
gente.

[El ojo es] como una pequeña pelota puesta en un hueco, teniendo las burbujas en el medio,
con lágrimas;

Las secreciones del ojo, también se originan aquí: varias partes del ojo están enrollados
dentro todos juntos de diferentes maneras.”

Alejada de eso, la señora de la agradable mirada, teniendo una mente no apegada, no se apegó
a eso.

“Ven, toma este ojo para ti”. Y enseguida lo ofreció a aquel hombre.

Y enseguida su pasión cesó y suplicó su perdón.

“Llega a ser entera otra vez, tú que vives la vida santa. Semejante cosa no se repetirá de
nuevo.

Habiendo herido semejante persona, era como si fuera un fuego flamante y abrasador, Como

incautar una serpiente venenosa. Llega a ser entera otra vez y perdóname.

Y entonces, aquella monja, fue en la presencia del excelso Buda.

Y habiendo visualizado las marcas de su excelso mérito, su ojo volvió a ser como antes.

Thi 14,1
{143} Animadversión. “Monjes, he aquí, las cinco maneras de abandonar el odio, para que,
cuando el odio surja en el monje, el monje lo pueda abandonar por completo. ¿Cuáles cinco?
“Monjes, cuando en uno surge el odio hacia un individuo, uno debería desarrollar el amor
benevolente hacia este individuo. De esta manera uno puede abandonar el odio.

“Monjes, cuando en uno surge el odio hacia un individuo, uno debería desarrollar la
compasión hacia este individuo. De esta manera uno puede abandonar el odio.

“Monjes, cuando en uno surge el odio hacia un individuo, uno debería desarrollar la
ecuanimidad hacia este individuo. De esta manera uno puede abandonar el odio.

“Monjes, cuando en uno surge el odio hacia un individuo, uno debería conscientemente dejar
de prestarle atención, para no ser provocado. De esta manera uno puede abandonar el odio.
“Monjes, cuando en uno surge el odio hacia un individuo, uno debería dirigir su mente hacia
el hecho, de que este ser es el producto de sus acciones de esta manera: ‘Este venerable señor
es el hacedor de sus propias acciones, es nacido de sus propias acciones, emparentado con
sus propias acciones, y sus acciones son sus jueces. Cualquier acción que haga, sea buena o
mala, se convertirá en su herencia’. De esta manera uno puede abandonar el odio.

“Monjes, éstas son las cinco maneras de abandonar el odio, para que, cuando el odio surja
en el monje, el monje lo pueda abandonar por completo.

AN 5,161

{144} [Sariputta:] “Amigos, he aquí, las cinco maneras de abandonar el odio, para que,
cuando el odio surja en el monje, el monje lo pueda abandonar por completo. ¿Cuáles cinco?

“Este es el caso, amigos, cuando ciertos individuos son impuros en su conducta corporal,
pero son puros en su conducta verbal. El odio hacia esta clase de personas ha de ser
abandonado.

“Este es otro caso, amigos, cuando ciertos individuos son impuros en su conducta verbal,
pero son puros en su conducta corporal. El odio hacia esta clase de personas ha de ser
abandonado.

“Este es otro caso, amigos, cuando ciertos individuos son impuros tanto en su conducta
corporal como en su conducta verbal, pero periódicamente experimentan la claridad mental
y calma. El odio hacia esta clase de personas ha de ser abandonado.

“Este es otro caso, amigos, cuando ciertos individuos son impuros tanto en su conducta
corporal como en su conducta verbal, pero no experimentan periódicamente la claridad
mental y calma. El odio hacia esta clase de personas ha de ser abandonado.
“Este es otro caso, amigos, cuando ciertos individuos son puros tanto en su conducta corporal
como en su conducta verbal, y experimentan periódicamente la claridad mental y calma. El
odio hacia esta clase de personas ha de ser abandonado.

“Ahora, bien, ¿en qué manera debería ser abandonado el odio hacia la persona cuya conducta
corporal es impura, pero cuya conducta verbal es pura? Al igual, cuando el monje que hace
uso de las cosas tiradas mira el andrajo en el camino: sujetándolo con su pie izquierdo y
tendiéndolo con el derecho, puede quedarse con la mejor parte y llevársela consigo. De la
misma manera, cuando algún individuo es impuro en su conducta corporal, pero puro en su
conducta verbal, uno al mismo tiempo, no debería prestar atención a la impureza de su
conducta corporal, sino en vez de eso, poner atención en la pureza de su conducta verbal. De
esta manera, el odio hacia él debería ser abandonado.

“¿Y en qué manera debería ser abandonado el odio hacia la persona cuya conducta verbal es
impura, pero cuya conducta corporal es pura? Al igual, cuando un estanque de agua está
descuidado con limo y plantas acuáticas y un individuo camina a lo largo, acalorado, cubierto
de sudor, exhausto, tembloroso y sediento. Él debería entrar en el estanque, apartar el limo y
las plantas acuáticas y luego, juntando ambas manos, tomar el agua y seguir su camino. De
la misma manera, cuando algún individuo es impuro en su conducta verbal, pero puro en su
conducta corporal, uno al mismo tiempo, no debería prestar atención a la impureza de su
conducta verbal, sino en vez de eso, poner atención en la pureza de su conducta corporal. De
esta manera, el odio hacia él debería ser abandonado.

“¿Y en qué manera debería ser abandonado el odio hacia la persona cuya conducta, tanto
verbal como corporal, es impura, pero que periódicamente experimenta la claridad mental y
calma? Al igual, cuando un pequeño charco está dentro de la huella de una vaca y un
individuo camina por ahí, acalorado, cubierto de sudor, exhausto, tembloroso y sediento.
Entonces, él podría pensar esto: ‘he aquí, un pequeño charco está dentro de la huella de una
vaca. Si trato de tomar el agua usando mis manos o la taza, podría disturbarla, revolverla y
hacerla no apta para beber. ¿Qué tal si me acerco a cuatro patas, como una vaca, para sorber
el agua?’ Entonces, él se acerca a cuatro patas, como una vaca, para sorber el agua y luego
sigue su camino. De la misma manera, cuando una persona es impura, tanto en su conducta
verbal como corporal, pero periódicamente experimenta la claridad mental y calma, uno al
mismo tiempo, no debería prestar atención a la impureza de su conducta verbal ni tampoco
prestar atención a su conducta corporal, sino en vez de eso, poner atención en el hecho, según
el cual, esta persona periódicamente experimenta la claridad mental y calma. De esta manera,
el odio hacia él debería ser abandonado.

“¿Y en qué manera debería ser abandonado el odio hacia la persona cuya conducta, tanto
verbal como corporal, es impura, y que además, no experimenta periódicamente la claridad
mental y calma? Al igual, cuando un hombre enfermo –penosa y seriamente enfermo- está
viajando a lo largo del camino, lejos del anterior pueblo y lejos del siguiente, incapaz de
conseguir la comida que necesita, incapaz de conseguir la medicina que necesita, incapaz de
conseguir la asistencia necesaria e incapaz de conseguir a nadie que le ofrezca una habitación
humana. E imaginad a otra persona que lo ve caminando a lo largo del camino. Él haría lo
que pudiera por la compasión, lástima y simpatía por este hombre, pensando: ‘oh, que este
hombre consiga la comida que necesita, la medicina que necesita, la asistencia que necesita
y a alguien que lo ofrezca una habitación humana. ¿Por qué así? Para que no caiga dentro de
la ruina justo aquí’. De la misma manera, cuando una persona tiene una conducta impura,
tanto verbal como corporal, y que además, no experimenta periódicamente la claridad mental
y calma, uno debería hacer lo que pudiera por compasión, lástima y simpatía por este hombre,
pensando: ‘oh, que esta persona abandone la incorrecta conducta verbal y desarrolle la
conducta verbal correcta; que abandone la incorrecta conducta corporal y desarrolle la
conducta corporal correcta. ¿Por qué así? Porque al disolverse este cuerpo, después de la
muerte, él puede caer dentro de un estado de privación, en el mal destino, en un reino bajo,
en el infierno. De esta manera, el odio hacia él debería ser abandonado.

“¿Y en qué manera debería ser abandonado el odio hacia la persona cuya conducta, tanto
verbal como corporal, es pura y que experimenta periódicamente la claridad mental y calma?
Al igual, cuando un estanque está lleno de agua pura –dulce, fresca y limpia, con suaves
pendientes y sombras en todos lados de árboles de toda clase, y un individuo camina por ahí,
acalorado, cubierto de sudor, exhausto, tembloroso y sediento. Entonces, habiéndose
hundido dentro del estanque, habiéndose bañado y bebido, vuelve y se sienta o recuesta justo
ahí, a la sombra de los árboles. De la misma manera, cuando una persona tiene conducta
pura, tanto verbal como corporal, y experimenta periódicamente la claridad mental y calma,
uno debería, al mismo tiempo, prestar atención a la pureza de su conducta verbal y prestar
atención a la pureza de su conducta corporal, y poner atención en el hecho, según el cual,
esta persona periódicamente experimenta la claridad mental y calma. De esta manera, el odio
hacia él debería ser abandonado. Un individuo enteramente inspirador, puede hacer que la
mente crezca en serenidad.

“Estas son las cinco maneras de abandonar el odio, para que, cuando el odio surja en el
monje, el monje lo pueda abandonar por completo.”

AN 5,162

{145} “Monjes, he aquí, existen estas diez maneras de abandonar el odio. ¿Cuáles diez?
Pensando, ‘él me ha hecho daño, ¿pero qué debería esperar?’, uno abandona el odio.
Pensando, ‘él me está haciendo daño, ¿pero qué debería esperar?’, uno abandona el odio.
Pensando, ‘él me va a hacer daño, ¿pero qué debería esperar?’, uno abandona el odio.
Pensando, ‘él ha hecho daño a la gente que quiero y aprecio, ¿pero qué debería esperar?’,
uno abandona el odio. Pensando, ‘él está haciendo daño a la gente que quiero y aprecio, ¿pero
qué debería esperar?’, uno abandona el odio. Pensando, ‘él va a hacer daño a la gente que
quiero y aprecio, ¿pero qué debería esperar?’, uno abandona el odio. Pensando, ‘él ha
prestado ayuda a la gente que no quiero ni aprecio, ¿pero qué debería esperar?’, uno abandona
el odio. Pensando, ‘él está prestando ayuda a la gente que no quiero ni aprecio, ¿pero qué
debería esperar?’, uno abandona el odio. Pensando, ‘él va a prestar ayuda a la gente que no
quiero ni aprecio, ¿pero qué debería esperar?’, uno abandona el odio. Uno no es molesto sin
fundamento. Estas son las diez maneras de abandonar el odio.”

AN 10,80

{146} "Él abusó de mí, me maltrató, me derrotó

y me saqueó";

alguien que lleva semejante pensamiento no

puede disipar el odio. "Él abusó de mí, me

maltrató, me derrotó y me saqueó"; alguien que

no lleva semejante pensamiento, puede disipar

el odio.

La enemistad nunca puede ser disipada por medio

de la enemistad; sólo puede ser disipada por

medio de la bondad.

Ésta es la ley eterna.

Dhp 3-5

{147} Pereza y somnolencia. En una oportunidad, el Bienaventurado estaba morando entre


los Bhaggas, en el Parque de los Venados de la arboleda Bhesakala, cerca de la guarida de
los cocodrilos. En este mismo instante, el venerable Maha Moggallana estaba sentado
cabeceando cerca del pueblo de Kallavalaputta en Magadha. Y el Bienaventurado, con su
ojo divino, que es purificado y superior al humano, vio al venerable Maha Moggallana
cuando estaba sentado cabeceando cerca de pueblo de Kallavalaputta en Magadha. Tan
pronto como vio esto, al igual que un hombre fuerte extiende su brazo o lo dobla cuando está
extendido, desapareció de entre los Bhaggas, del Parque de los Venados de la arboleda
Bhesakala, cerca de la guarida de los cocodrilos y reapareció cerca del pueblo de
Kallavalaputta en Magadha, justo enfrente del venerable Maha Moggallana. Estando ahí, se
sentó en el asiento preparado para él. Una vez sentado ahí, el
Bienaventurado dijo esto al venerable Maha Moggallana: “¿estás cabeceando, Moggallana,
estás cabeceando?”

“Sí, venerable señor”.

“Entonces, bien, Moggallana, cualquier percepción que tengas en la mente cuando la


somnolencia desciende sobre ti, no atiendas esta percepción ni la persigas. Es posible que
haciendo esto, puedas sacudirte de tu somnolencia.

“Pero, si haciendo esto, no puedes sacudirte de tu somnolencia, entonces haz volver tu


conciencia del Dhamma, tal como lo habías escuchado y memorizado; examínala y
reflexiona sobre ella en tu mente. Es posible que haciendo esto, puedas sacudirte de tu
somnolencia.

“Pero, si haciendo esto, no puedes sacudirte de tu somnolencia, entonces repite en voz alta
el Dhamma tal como lo habías escuchado y memorizado. Es posible que haciendo esto,
puedas sacudirte de tu somnolencia.

“Pero, si haciendo esto, no puedes sacudirte de tu somnolencia, entonces estira a ambos


lóbulos de tus orejas y friegues tus miembros con tus manos. Es posible que haciendo esto,
puedas sacudirte de tu somnolencia.

“Pero, si haciendo esto, no puedes sacudirte de tu somnolencia, entonces levántate de tu


asiento y, después de lavar tus ojos con el agua, mira alrededor en todas las direcciones y
hacia arriba, hacia las estrellas y constelaciones mayores. Es posible que haciendo esto,
puedas sacudirte de tu somnolencia.

“Pero, si haciendo esto, no puedes sacudirte de tu somnolencia, entonces atiende la


percepción de la luz, resuelve fijar tu atención en el tiempo diurno, morando de noche como
si fuera de día, y de día como si fuera de noche. Por causa de esta conciencia, así abierta y
libre de obstáculos, se desarrolla una mente luminosa. Es posible que haciendo esto, puedas
sacudirte de tu somnolencia.

“Pero, si haciendo esto, no puedes sacudirte de tu somnolencia, entonces –percibiendo lo que


se encuentra enfrente y atrás- ponte a una distancia para hacer la meditación caminando hacia
atrás y adelante, con tus sentidos inmersos en el interior, no permitiendo que tu mente se
extravíe hacia lo externo. Es posible que haciendo esto, puedas sacudirte de tu somnolencia.
“Pero, si haciendo esto, no puedes sacudirte de tu somnolencia, entonces –reclinándote sobre
tu lado derecho- toma la postura del león, puesto un pie sobre el otro, consciente, alerta, con
tu mente puesta en levantarse. Tan pronto como te despiertes, levántate rápidamente con este
pensamiento: ‘no voy a consentirme en el placer de seguir recostado ni en el placer de la
somnolencia’. Así es cómo deberías entrenarte a ti mismo.

Pasajes del Canon Pali

{148} Vithaka: "Ahora bien, ¿qué es la concentración, qué cualidades son sus temas, qué
cualidades son sus requisitos y qué es su desarrollo?"

Hermana Dhammadinna: "La unificación de la mente es la concentración; los cuatro


establecimientos de la atención conciente son sus temas; los cuatros rectos esfuerzos son sus
requisitos; el cultivo, el desarrollo y la persecución es su desarrollo."

MN 44

{149} “Monjes, he aquí que existen estas cuatro formas de desarrollar la concentración.
¿Cuáles cuatro?

“Existe el desarrollo de la concentración tal, que cuando es desarrollado y perseguido,


conduce a las moradas placenteras aquí y ahora. Existe el desarrollo de la concentración tal,
que cuando es desarrollado y perseguido, conduce al logro del conocimiento y la visión.
Existe el desarrollo de la concentración tal, que cuando es desarrollado y perseguido,
conduce a la atención consciente y vigilancia. Existe el desarrollo de la concentración tal,
que cuando es desarrollado y perseguido, conduce al fin de las impurezas.

“¿Y cuál es el desarrollo de la concentración que, cuando es desarrollado y perseguido,


conduce a las moradas placenteras aquí y ahora? Este es el caso, en que el monje –
enteramente separado de la sensualidad, separado de los perjudiciales estados- entra y
permanece en el primer jhana: arrobamiento y felicidad nacidos de la reclusión,
acompañados por el pensamiento dirigido y pensamiento sostenido. Con el aquietamiento
del pensamiento dirigido y pensamiento sostenido, él entra y permanece en el segundo jhana:
arrobamiento y felicidad nacidos de la serenidad, unificación mental, libre del pensamiento
dirigido y pensamiento sostenido, seguridad interior. Con la desaparición del arrobamiento,
él permanece ecuánime, consciente y atento, sintiendo felicidad con el cuerpo. Entra y
permanece en el tercer jhana, del cual los Nobles declaran: ‘ecuánime y consciente, él tiene
una morada placentera’. Con el abandono del placer y el dolor –con la previa desaparición
del placer y el dolor, entra y permanece en el cuarto jhana: la pureza de la ecuanimidad y
atención consciente, ni placer ni dolor. Éste es el desarrollo de la concentración que, cuando
es desarrollado y perseguido, conduce a las moradas placenteras aquí y ahora. “¿Y cuál es el
desarrollo de la concentración que, cuando es desarrollado y perseguido, conduce al logro
del conocimiento y la visión? Este es el caso en que el monje atiende la percepción de la luz
y resuelve fijar tu atención en el tiempo diurno, morando de noche como si fuera de día, y de
día como si fuera de noche. Por causa de esta conciencia, así abierta y libre de obstáculos, se
desarrolla una mente luminosa. Éste es es el desarrollo de la concentración que, cuando es
desarrollado y perseguido, conduce al logro del conocimiento y la visión.

“¿Y cuál es el desarrollo de la concentración que, cuando es desarrollado y perseguido,


conduce a la atención consciente y vigilancia? Este es el caso, en que las sensaciones son
conocidas por el monje cuando surgen, son conocidas cuando persisten y son conocidas
cuando desaparecen. Las percepciones son conocidas por el monje cuando surgen, son
conocidas cuando persisten y son conocidas cuando desaparecen. Los pensamientos son
conocidos por el monje cuando surgen, son conocidos cuando persisten y son conocidos
cuando desaparecen. Éste es el desarrollo de la concentración que, cuando es desarrollado y
perseguido, conduce a la atención consciente y vigilancia.

“¿Y cuál es el desarrollo de la concentración que, cuando es desarrollado y perseguido,


conduce al fin de las impurezas. Este es el caso en que el monje permanece enfocando en el
surgimiento y desaparición de los cinco componentes del apego de esta manera: ‘así es la
forma, así su surgimiento y así su desaparición. Así es la sensación, así su surgimiento y así
su desaparición. Así es la percepción, así su surgimiento y así su desaparición. Así son las
producciones mentales, así su surgimiento y así su desaparición. Así son los estados de
consciencia, así su surgimiento y así su desaparición. Éste es el desarrollo de la concentración
que, cuando es desarrollado y perseguido, conduce al fin de las impurezas.

“Éstas son las cuatro formas de desarrollar la concentración.

AN 4,41

{150} La recta noble concentración. Esto he oído. En una ocasión el Bienaventurado estaba
en Savatthi, en el Bosquecillo de Jeta en el monasterio de Anathapindika. Allí se dirigió a
los monjes con estas palabras: “Monjes, voy a enseñaros los cinco elementos de la noble y
recta concentración. Escuchad y prestad atención que voy a hablar”.

“Así sea, señor” respondieron los monjes.

Y el Bienaventurado dijo: “¿Y cuáles son, monjes, los cinco elementos de la noble y recta
concentración? Es el caso, monjes, del monje que, separado de la sensualidad, separado de
los insanos estados mentales, entra y permanece en el primer jhana, acompañado con el
pensamiento inicial y analítico, lleno de arrobamiento y placer, nacidos de la reclusión. Y
todo su cuerpo está impregnado, bañado y colmado de este arrobamiento y placer nacidos de
la reclusión, de manera tal que no queda lugar alguno en todo su cuerpo, que no fuera
impregnado por el arrobamiento y placer, nacidos de la reclusión.
“Como un hábil especialista en preparar baños o su aprendiz, se adiestra en verter el polvo
del baño dentro de la cuenca del latón, amasándolo una y otra vez con el agua, creando una
bola de polvo del baño, saturada, suficientemente húmeda e impregnada por fuera y por
dentro, sin que caiga de ella una sola gota, así también el monje, impregna, baña y colma su
cuerpo con el arrobamiento y placer nacidos de la reclusión, de manera tal que no queda
lugar alguno en todo su cuerpo, que no fuera impregnado por el arrobamiento y placer,
nacidos de la reclusión.

“Éste es, monjes, el primer elemento de la noble y recta concentración.

“Además, monjes, apaciguando el pensamiento inicial y analítico, logrando la calma mental


y la unificación de la mente, el monje entra y permanece en el segundo jhana. Lleno de
arrobamiento y placer nacidos de la reclusión y libre del pensamiento inicial y analítico. Todo
su cuerpo está impregnado, bañado y colmado de este arrobamiento y placer nacidos de la
reclusión, de manera tal que no queda lugar alguno en todo su cuerpo, que no fuera
impregnado por el arrobamiento y placer, nacidos de la reclusión.

“Como un lago con aguas manantiales, sin afluentes del este ni oeste, del norte ni sur, cuando
recibe abundantes lluvias, sus aguas que brotan desde adentro, se mezclan con estas aguas
frescas, de manera tal que las mismas impregnan e invaden todo el lago, sin que quede una
sola parte no impregnada por las aguas frescas, así también el monje, impregna, baña y colma
su cuerpo con el arrobamiento y placer nacidos de la reclusión, de manera tal que no queda
lugar alguno en todo su cuerpo, que no fuera impregnado por el arrobamiento y placer,
nacidos de la reclusión.

“Éste es, monjes, el segundo elemento de la noble y recta concentración.

“Además, monjes, al extinguirse el arrobamiento, el monje permanece ecuánime, con


atención consciente y clara comprensión, sensible a la sensación del placer, del cual los
Nobles declararon que “Feliz es aquel que mora en la ecuanimidad y en la atención
consciente” y, de esta manera, entra y permanece en el tercer jhana. Todo su cuerpo está
impregnado, bañado y colmado de este placer despojado del arrobamiento.

“Como una laguna que tiene flores de loto azules, rojas y blancas que han nacido del agua,
han crecido en el agua y no hay ni una sólo flor que hubo crecido fuera del agua, de modo
que todas estas flores de loto azules, rojas y blancas están impregnadas, bañadas y colmadas
con las aguas frescas, así también el monje, impregna, baña y colma su cuerpo con el placer
despojado del arrobamiento, de manera tal que no queda lugar alguno en todo su cuerpo, que
no fuera impregnado por este placer despojado del arrobamiento.

“Éste es, monjes, el tercer elemento de la noble y recta concentración.


“Además, monjes, al abandonar tanto el placer como la pena –con la anterior desaparición
de las alegrías y las tristezas- el monje entra y permanece en el cuarto jhana, el cual va más
allá de los placeres y las penas, purificado con la ecuanimidad y atención consciente.
Impregna su cuerpo con la pureza mental y clara conciencia de manera tal, que no queda
lugar alguno en todo su cuerpo, que no fuera impregnado por esta ecuanimidad y clara
conciencia. “Como si un hombre estuviera sentado cubierto de pie a cabeza con una ropa
blanca, de tal manera que no quedara parte alguna de su cuerpo al descubierto. Así también,
el monje permanece sentado cubriendo completamente su cuerpo con la pureza mental y
clara conciencia, no quedando lugar alguno en todo su cuerpo que no fuera cubierto por esta
pureza mental y clara conciencia.

“Éste es, monjes, el cuarto elemento de la noble y recta concentración.

“Además, monjes, el monje tiene bien sujetado el signo de su meditación. Mediante la


penetración perspicaz está atento a él, reflexiona sobre él y lo tiene en consideración.

“Como cuando una persona reflexiona sobre la otra; o una persona que está de pie, observa
a otra que está sentada; o una persona que está sentada, observa a otra que está acostada. Así
es cómo el monje tiene bien sujetado el signo de su meditación. Mediante la penetración
perspicaz está atento a él, reflexiona sobre él y lo tiene en consideración.

“Éste es, monjes, el quinto elemento de la noble y recta concentración.

“Cuando el monje, monjes, desarrolla así y persigue los cinco elementos de la noble y recta
concentración, puede dirigir su mente hacia la realización de cualquiera de los seis altos
conocimientos y llegar a ser el propio testigo de ellos, en todas sus dimensiones.

“Imaginad, monjes, un gran bote lleno de agua colocado en un sitio y un cuervo que quiere
tomar de él el agua. Entonces, si un hombre fuerte inclinara este bote hacia uno u otro lado,
¿podría el agua derramarse?”

“Sí, señor” “De la misma manera, cuando el monje desarrolla y persigue los cinco elementos
de la noble y recta concentración, puede dirigir su mente hacia la realización de cualquiera
de los seis altos conocimientos y llegar a ser el propio testigo de ellos, en todas sus
dimensiones.

“Imaginad también, monjes, un depósito rectangular del agua ubicado al nivel de la tierra,
rodeado de diques, rebosante del agua de modo que un cuervo podría fácilmente tomar de él
el agua. Entonces, si un hombre fuerte se pusiera a remover los diques de un lugar a otro,
¿podría el agua derramarse?” “Sí, señor”.
“De la misma manera, cuando el monje desarrolla y persigue los cinco elementos de la noble
y recta concentración, puede dirigir su mente hacia la realización de cualquiera de los seis
altos conocimientos y llegar a ser el propio testigo de ellos, en todas sus dimensiones.
“Imaginad además, monjes, un carro de guerra ubicado el nivel de la tierra en la encrucijada
de cuatro caminos, con cuatro caballos de pura raza enjaezados, con el látigo listo para ser
usado. Siendo así, un hábil conductor de carros, un entrenador de caballos indomados, podría
fácilmente montar dicho carro de guerra y –tomando las riendas con su mano izquierda y el
látigo con su mano derecha- conducirlo hacia delante o hacia atrás, a cualquier lugar y por
cualquiera de los caminos, según su deseo. De la misma manera, monjes, cuando el monje
desarrolla y persigue los cinco elementos de la noble y recta concentración, puede dirigir su
mente hacia la realización de cualquiera de los seis altos conocimientos y llegar a ser el
propio testigo de ellos, en todas sus dimensiones.

AN 5,28
{151} Meditación en la respiración. En Savatthi. Estando ahí, el Bienaventurado dijo:
“Una cosa, monjes, cuando es desarrollada y cultivada, es beneficiosa y fructífera. ¿Qué
cosa? La atención consciente en la respiración. Pero, ¿de qué manera –monjes- la atención
consciente en la respiración debe ser desarrollada y cultivada para que sea tan fructífera y
beneficiosa? “He aquí el monje, yendo al bosque, debajo del árbol o en una choza vacía, se
sienta. Cruzando las piernas y enderezando su cuerpo, pone su atención consciente enfrente,
siempre consciente de que inhala y consciente de que exhala.

“[i] Inhalando largo, él entiende: ‘Estoy inhalando largo’ o exhalando largo, entiende ‘Estoy
exhalando largo’. [ii] Cuando inhala corto, él entiende ‘Estoy inhalando corto’ o cuando
exhala corto, entiende ‘Estoy exhalando corto’. [iii] Y él se entrena así: ‘Voy a inhalar
experimentado el cuerpo entero’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar experimentado el cuerpo
entero’. [iv] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar calmando las formaciones corporales’ y se
entrena así: ‘Voy a exhalar, calmando las formaciones corporales’.

“[v] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar experimentando la alegría’ y se entrena así: ‘Voy a
exhalar, experimentando la alegría’. [vi] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar experimentando el
placer’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, experimentando el placer’. [vii] Él se entrena así:
‘Voy a inhalar experimentando las formaciones mentales’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar,
experimentando las formaciones mentales’. [viii] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar calmando
las formaciones mentales’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, calmando las formaciones
mentales’.
“[ix] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar experimentando la mente’ y se entrena así: ‘Voy a
exhalar, experimentando la mente’. [x] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar llenando de gozo la
mente’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, llenando de gozo la mente’. [xi] Él se entrena así:
‘Voy a inhalar concentrando la mente’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, concentrando la
mente’. [xii] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar liberando la mente’ y se entrena así: ‘Voy a
exhalar, liberando la mente’.

“[xiii] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar contemplando la impermanencia’ y se entrena así:


‘Voy a exhalar, contemplando la impermanencia’. [xiv] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar
contemplando el desvanecimiento’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, contemplando el
desvanecimiento’. [xv] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar contemplando el cese’ y se entrena
así: ‘Voy a exhalar, contemplando el cese’. [xvi] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar
contemplando el renunciamiento’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, contemplando el
renunciamiento’.

“Es de manera manera –monjes- que la atención consciente en la respiración, cuando es


desarrollada y cultivada, es fructífera y beneficiosa.”

SN 54,1

{152} Vissakara: En una ocasión, maestro Ananda, el maestro Gotama estaba morando en
Vesali, en la sala con el techo de dos aguas, en el Gran Bosque. En esta ocasión, me acerqué
junto al maestro Gotama y él ofreció una charla acerca de la meditación en diferentes
maneras. El maestro Gotama fue un meditador, cultivó la meditación y alabó toda clase de
meditación."

Ananda: "En realidad, brahmán, el Bienaventurado no alabó toda clase de meditación ni


tampoco condenó a toda clase de meditación. ¿Y qué clase de meditación, brahmán, el
Bienaventurado no alabó? He aquí, brahmán, hay quien permanece con su mente obsesionada
por las pasiones sensuales, siendo presa de las pasiones sensuales y no sabiendo cómo
escaparse efectivamente de las pasiones sensuales. Y mientras que abriga las pasiones
sensuales adentro, medita, considera, pondera y mal-medita. Y hay quien, brahmán,
permanece con su mente obsesionada por la animadversión, siendo presa de la
animadversión... con su mente obsesionada por la pereza y la apatía, siendo presa de la pereza
y apatía... con su mente obsesionada por la preocupación y el remordimiento, siendo presa
de la preocupación y el remordimiento... con su mente obsesionada por la duda, siendo presa
de la duda y no sabiendo cómo escaparse efectivamente de la duda. Y mientras que abriga la
duda adentro, medita, considera, pondera y mal-medita. Ésta es la clase de meditación,
brahmán, que el Bienaventurado no alabó.

"¿Y qué clase de meditación, brahmán, el Bienaventurado alabó? He aquí, brahmán, el


monje, aislado de los placeres sensuales, aislado de los perjudiciales estados mentales, entra
y permanece en el primer jhana, el cual está acompañado por el pensamiento aplicado y el
pensamiento sostenido, por el arrobamiento y felicidad, nacidos del aislamiento. Además, al
calmar el pensamiento aplicado y el pensamiento sostenido, él entra y permanece en el
segundo jhana, que posee la tranquilidad interior y la unificación de la mente; libre del
pensamiento aplicado y el pensamiento sostenido, lleno de arrobamiento y felicidad nacidos
de la concentración. Además, con la desaparición del arrobamiento, él permanece ecuánime,
atentamente consciente y con la comprensión clara, experimentando la felicidad a través de
su cuerpo; él entra y permanece en el tercer jhana, del cual los nobles declararon: 'Él es
ecuánime, atentamente consciente, uno que encontró una morada placentera.' Además, con
el abandono del placer y de la pena, con la previa desaparición de la alegría y el desplacer,
él entra y permanece en el cuarto jhana, que es ni doloroso ni placentero y que comprende la
purificación de la atención consciente a través de la ecuanimidad. Ésta es la clase de
meditación, brahmán, que el Bienaventurado alabó."

Vissakaara: "Parece, maestro Ananda, que el maestro Gotama censuró la clase de meditación
que debería ser censurada y alabó aquella que debería ser alabada. Y ahora, maestro Ananda,
vamos a retirarnos que tenemos muchas ocupaciones."

MN 108

{153} "He aquí, monjes, el monje no puede resistir [el impacto del] objeto visible, no puede
resistir [el impacto del] sonido, no puede resistir [el impacto del] olor, no puede resistir [el
impacto del] sabor, no puede resistir [el impacto de] la sensación táctil. Monjes, el monje
que posee estas cinco cualidades no es capaz de entrar y permanecer en la recta
concentración...

"He aquí, monjes, el monje puede resistir [el impacto del] objeto visible, puede resistir [el
impacto del] sonido, puede resistir [el impacto del] olor, puede resistir [el impacto del] sabor,
puede resistir [el impacto de] la sensación táctil. Monjes, el monje que posee estas cinco
cualidades no es capaz de entrar y permanecer en la recta concentración.

AN 5,113

{154} "Monjes, si no se abandonan las seis cosas, uno no puede entrar y permanecer en el
primer jhana. Y, ¿cuáles son, monjes, estas seis cosas? Los deseos sensoriales, la
animadversión, la pereza y la apatía, la preocupación y el remordimiento, la duda y no verlos
claramente y con discernimiento cuando están presentes." `[...]

"Monjes, si no se abandonan las seis cosas, uno no puede entrar y permanecer en el primer
jhana. Y, ¿cuáles son, monjes, estas seis cosas? Pensamientos sobre la sensualidad,
pensamientos sobre la animadversión, pensamientos sobre la violencia, percepción de la
sensualidad, percepción de la animadversión y percepción de la violencia.
AN 6,73-74

{155} "Monjes, cuando el monje tiene estas seis características, es capaz de dominar el poder
de la concentración. ¿Cuáles son estas seis?

"Es el caso, monjes, cuando el monje es hábil en alcanzar la concentración, es hábil en


mantener la concentración, es hábil de emerger de la concentración, lo hace deliberadamente,
preserva en la concentración y es susceptible a ella.

AN 6,72

{156} "Monjes, el monje dotado de seis cosas puede penetrar dentro de Himalaya, el rey de
las montañas, algo que jamás puede decir alguien de la miserable ignorancia. Y, ¿cuáles
son estas seis?

"Es el caso, monjes, cuando el monje es hábil en alcanzar la concentración, es hábil en


mantener la concentración, es hábil de emerger de la concentración, es hábil en la preparación
para la concentración, hábil en el rango de la concentración y es aplicado a ella.

"Monjes, el monje dotado de seis cosas puede penetrar dentro de Himalaya, el rey de las
montañas, algo que jamás puede decir alguien de la miserable ignorancia."

AN 6,24

{157} “Imagina un gran charco de agua, al cual llega un gran elefante que mide siete o siete
y medio cúbicos. Entonces, este pensamientos se le podría ocurrir: ‘¿qué tal si me sumerjo
dentro de este charco de agua para divertirme lanzando chorritos de agua dentro de mis orejas
y sobre el cuello, y bañándome luego y tomando el agua, y saliendo y entrando como me
plazca?’ Así que él se sumergió dentro de este charco de agua y se divirtió lanzando chorritos
de agua dentro de sus orejas y sobre el cuello, y bañándose luego y tomando el agua, y
saliendo y entrando como le placía. Y, ¿por qué esto? Porque su gran cuerpo encontraba
apoyo en la profundidad.

“Imagina ahora a un conejo o gato paseándose allí y pensando: ‘¿Qué diferencia hay entre
yo y este gran elefante? ¿Qué tal si me sumerjo también dentro de este charco de agua para
divertirme lanzando chorritos de agua dentro de mis orejas y sobre el cuello, y bañándome
luego y tomando el agua, y saliendo y entrando como me plazca?’ Así que también se
sumergió imprudentemente en el charco de lagua sin reflexionar, y entonces, sólo podría
esperarse de él que se hundiera en lo más abajo o flotara en la superficie. Y, ¿por qué esto?
Porque su cuerpo es pequeño y no encontró apoyo en la profundidad.
“De la misma manera, si alguien dijese ‘sin haber alcanzado la concentración voy a vivir
recluido, en un lugar solitario y silvestre’, sólo se podría esperar de él que se hundiera en lo
más abajo o flotara en la superficie. “

AN 10,99

{158} "Monjes, existen estas cinco ventajas de meditación hecha caminando. ¿Cuáles son
estas cinco? El poder soportar largos viajes, poder hacer grandes esfuerzos, estar saludable,
tener buena digestión después de que uno haya comido o bebido, masticado o crujido, y la
concentración obtenida con la meditación hecha caminando, permanece por mucho tiempo."

AN 5,29

{159} Pensamientos distractores. "Cuando un monje está concentrado en la mente elevada,


hay cinco temas a los que debería atender en el momento adecuado. ¿Qué cinco?"

"Se puede dar el caso de que ciertos pensamientos inútiles, malos (compuestos de deseo,
repugnancia e ilusión) aparezcan en la mente de un monje mientras éste se halle refiriéndose
y atendiendo a un tema en particular. Él debería apartarse de este tema y atender a otro que
sea útil. Cuando esté atendiendo a este otro tema, apartado del otro, en relación con lo que
es útil, entonces los pensamientos malos e inútiles (compuestos de deseo, repugnancia e
ilusión) son abandonados y cesan. Con el abandono, él aquieta su mente desde dentro, la
calma, la unifica y la concentra. De la misma forma que un carpintero o su aprendiz usarían
una pequeña estaca para extraer, expulsar y sacar una grande, así si ciertos pensamientos
inútiles, malos (compuestos de deseo, repugnancia e ilusión) aparecen en la mente de un
monje mientras éste se halle refiriéndose y atendiendo a un tema en particular, él debería
apartarse de este tema y atender a otro que sea útil. Cuando esté atendiendo a este otro tema,
apartado del otro, en relación con lo que es útil, entonces los pensamientos malos e inútiles
(compuestos de deseo, repugnancia e ilusión) son abandonados y cesan. Con el abandono, él
aquieta su mente desde dentro, la calma, la unifica y la concentra.

"Si ciertos pensamientos inútiles, malos (compuestos de deseo, repugnancia e ilusión) aún
aparecen en la mente de un monje mientras éste se halle atendiendo a este otro tema que sea
útil, debería examinar los inconvenientes de esos pensamientos: 'En verdad que estos
pensamientos míos son inútiles, estos pensamientos míos son dignos de censura, estos
pensamientos míos traerán sufrimiento'. Y mientras examina los inconvenientes de estos
pensamientos, estos malos e inútiles pensamientos (compuestos de deseo, repugnancia e
ilusión) son abandonados y cesan. Con el abandono, él aquieta su mente desde dentro, la
calma, la unifica y la concentra. Así como una mujer (o un hombre) aficionada a los adornos,
estaría horrorizada, humillada y disgustada si la piel de una serpiente o de un perro o de un
ser humano fuera colgado de su cuello, así también, si en la mente de un monje que esté
atendiendo a este otro tema relacionado con lo que es útil aparecieran pensamientos malos e
inútiles (compuestos de deseo, repugnancia e ilusión), él debería examinar los inconvenientes
de tales pensamientos: 'En verdad que estos pensamientos míos son inútiles, estos
pensamientos míos son dignos de censura, estos pensamientos míos traerán sufrimiento'. Y
mientras examina los inconvenientes de estos pensamientos estos malos e inútiles
pensamientos (compuestos de deseo, repugnancia o ilusión) son abandonados y cesan. Con
el abandono, él aquieta su mente desde dentro, la calma, la unifica y la concentra.

"Si ciertos pensamientos inútiles, malos (compuestos de deseo, repugnancia o ilusión) aún
aparecen en la mente de un monje mientras éste se halle examinando los inconvenientes de
estos pensamientos, no debería hacerles caso ni debería prestarles atención. Al no hacerles
caso ni prestarles atención, tales pensamientos malos e inútiles son abandonados y
desaparecen. Con el abandono, él aquieta su mente desde dentro, la calma, la unifica y la
concentra. Es como cuando un hombre con buenos ojos no quiere ver formas que estén al
alcance de su vista y cierra los ojos o mira a otro lado. De la misma forma si ciertos
pensamientos inútiles, malos (compuestos de deseo, repugnancia o ilusión) aún aparecen en
la mente de un monje mientras éste se halle examinando los inconvenientes de estos
pensamientos, no debería hacerles caso ni debería prestarles atención. Al no hacerles caso ni
prestarles atención, tales pensamientos malos e inútiles son abandonados y desaparecen. Con
el abandono, él aquieta su mente desde dentro, la calma, la unifica y la concentra.

"Si ciertos pensamientos inútiles, malos (compuestos de deseo, repugnancia o ilusión) aún
aparecen en la mente de un monje aunque éste preste atención a estos pensamientos, debería
relajar el proceso de fabricación de estos pensamientos. Al relajar el proceso de fabricación
de estos pensamientos, tales pensamientos malos e inútiles son abandonados y desaparecen.
Con el abandono, él aquieta su mente desde dentro, la calma, la unifica y la concentra. Así
como a un hombre que estuviera caminando rápidamente pensara "¿Por qué estoy caminando
rápidamente? ¿Por qué no camino despacio?" Y caminara despacio; y pensara "¿Por qué
estoy caminando despacio? ¿Por qué me paro?" Y se parara; y pensara "¿Por qué estoy
parado? ¿Por qué no me siento?" Y se sentara; y pensara "¿Por qué estoy sentado? ¿Por qué
no me tumbo?" y se sentara. De este modo, abandonando la postura más grosera, adoptara la
más refinada. De la misma forma, si ciertos pensamientos inútiles, malos (compuestos de
deseo, repugnancia o ilusión) aún aparecen en la mente de un monje aunque éste preste
atención a estos pensamientos, debería relajar el proceso de fabricación de estos
pensamientos. Al relajar el proceso de fabricación de estos pensamientos, tales pensamientos
malos e inútiles son abandonados y desaparecen. Con el abandono, él aquieta su mente desde
dentro, la calma, la unifica y la concentra.

"Si ciertos pensamientos inútiles, malos (compuestos de deseo, repugnancia o ilusión) aún
aparecen en la mente de un monje aunque éste se halle relajando el proceso de fabricación
de estos pensamientos, entonces, apretando los dientes y presionando la lengua contra el
paladar, debería aplastar, doblegar y machacar estos pensamientos con su conciencia. Al,
aplastar, doblegar y machacar estos pensamientos con su conciencia, apretando los dientes y
presionando la lengua contra el paladar, tales pensamientos malos e inútiles son abandonados
y desaparecen. Con el abandono, él aquieta su mente desde dentro, la calma, la unifica y la
concentra. Como un hombre fuerte que levantara a un hombre más débil por la cabeza, la
garganta o los hombros, podría derribarle, doblegarle y aplastarle; de la misma forma, si
ciertos pensamientos inútiles, malos (compuestos de deseo, repugnancia o ilusión) aún
aparecen en la mente de un monje aunque éste se halle relajando el proceso de fabricación
de estos pensamientos, entonces, apretando los dientes y presionando la lengua contra el
paladar, debería aplastar, doblegar y machacar estos pensamientos con su conciencia. Al
aplastar, doblegar y machacar estos pensamientos con su conciencia, apretando los dientes y
presionando la lengua contra el paladar, tales pensamientos malos e inútiles son abandonados
y desaparecen. Con el abandono, él aquieta su mente desde dentro, la calma, la unifica y la
concentra.

"Así, cuando un monje... prestando atención a otro tema... investigando los inconvenientes
de estos pensamientos... no haciéndoles caso ni prestándoles atención... relajando el proceso
de fabricación de pensamientos... derribando, doblegando y aplastando su mente con su
conciencia... aquieta su mente desde dentro, la calma, la unifica y la concentra: de él se dice
que es un monje con dominio sobre las formas del proceso de pensamiento. Piensa lo que
quiera y abandona el pensamiento que no quiera. Ha cortado el ansia, se ha despojado de los
grilletes y (penetrando correctamente la vanidad) ha acabado con el sufrimiento y el estrés".

MN 20

{160} "Existen estas impurezas en el oro: arena sucia, gravilla y polvo. El limpiador de la
suciedad, o su aprendiz, habiendo colocado el oro en una cuba, lo lava una y otra vez hasta
que se las lleva por completo.

"Cuando se ha deshecho de ellas, quedan impurezas moderadas: arena gruesa y polvillo fino.
Él lava el oro una y otra vez hasta que se las lleva por completo.

"Cuando se ha deshecho de ellas, quedan impurezas finas: arena fina y polvo negro. El
limpiador de la suciedad, o su aprendiz, habiendo colocado el oro en una cuba, lo lava una y
otra vez hasta que se las lleva por completo.

"Cuando se ha deshecho de ellas, solo queda el polvo de oro. El orfebre o su aprendiz,


habiéndolo colocado en un crisol, lo golpea una y otra vez para deshacerse de la escoria. El
oro, hasta que no se le golpea una y otra vez hasta el punto en el que ya no hay impurezas,
hasta que no está refinado y libre de escoria, no es flexible, maleable o luminoso. Es
quebradizo y no está listo para ser trabajado. Pero llega un punto en el que el orfebre o su
aprendiz lo han golpeado una y otra vez hasta que se deshacen de la escoria. El oro, habiendo
sido golpeado una y otra vez hasta que ya no hay impurezas, está entonces refinado, libre de
escoria, flexible, maleable y luminoso. No es quebradizo, y está listo para ser trabajado.
Entonces, cualquier adorno que se le ocurra, ya sea un cinturón, un pendiente, un collar o
una cadena dorada, el oro servirá a sus propósitos.

"De la misma manera, existen estas impurezas burdas en un monje resuelto en elevar su
mente: mala conducta corporal, verbal y mental. Estas el monje, consciente y capaz por
naturaleza, las abandona, destruye, disipa y borra de la existencia. Cuando se ha deshecho de
ellas, permanecen en él impurezas moderadas: pensamientos de sensualidad, animadversión
y crueldad. Estas las abandona, destruye, disipa y borra de la existencia. Cuando se ha
deshecho de ellas, permanecen en él impurezas finas: pensamientos sobre su casta,
pensamientos sobre su barrio, pensamientos relacionados con no querer ser despreciado.
Estas las abandona, destruye, disipa y borra de la existencia.

"Cuando se ha deshecho de ellas, solo quedan pensamientos del Dhamma. Su concentración


no es tranquila ni refinada, no ha alcanzado todavía la serenidad ni la unidad, y se mantiene
por la aplicación de una fuerte restricción. Pero llega un punto en el que su mente se vuelve
firme internamente, se estabiliza, se unifica y concentra. Su concentración es tranquila y
refinada, ha alcanzado la serenidad y la unidad, y ya se mantiene por la aplicación de una
fuerte restricción.

AN 3,100

{161} "Venerable señor, viviendo diligentes, fervorosos y resueltos, percibimos luces y


vemos formas. Al poco tiempo, las luces y la visión de formas se desvanecen pero no
comprendemos lo que significa."

"Anuruddha, tenéis que comprender lo que significa. Anuruddha, antes de mi iluminación,


siendo todavía un aspirante a la iluminación, yo también percibía luces y veía formas. Pronto
las luces y la visión de formas se desvanecían. Y pensé: '¿Cuál es la causa, cuál es la razón
por las que se desvanecen las luces y la visión de las formas?'.

"Entonces pensé: 'La duda ha surgido en mí y a causa de la duda, pierdo la concentración, y


al perderla, se desvanecen las luces y la visión de las formas. Así que obraré de manera que
la duda no surja de nuevo'.

"Así, Anuruddha, permaneciendo diligente, fervoroso y resuelto, volví a percibir luces ya ver
formas. Y de nuevo, no mucho después, se desvanecieron las luces y la visión de formas. Y
pensé: '¿Cuál es la causa, cuál es la razón por las que se desvanecen las luces y la visión de
las formas?'
"Entonces pensé: 'La falta de atención ha surgido en mí y a causa de la falta de atención,
pierdo la concentración, y al perderla, se desvanecen las luces y la visión de las formas. Así
que obraré de manera que ni la duda ni la falta de atención surjan de nuevo'.

"Así, Anuruddha, permaneciendo diligente, fervoroso y resuelto, volví a percibir luces y a


ver formas. Y de nuevo... Entonces pensé: 'La pereza y la apatía han surgido en mí... Así que
obraré de manera que ni la duda ni la falta de atención ni la pereza y la apatía surjan de
nuevo'.

"Así, Anuruddha, permaneciendo diligente, fervoroso y resuelto, volví a percibir luces y a


ver formas. Y de nuevo... Entonces pensé: 'El miedo ha surgido en mí...'

"Anuruddha, es como un hombre que fuera de camino y le asaltaran asesinos por ambos
lados, y le entra un gran miedo, así, Anuruddha, surgió en mí el miedo y a causa del miedo
perdí la concentración y al perderla, se desvanecieron las luces y la visión de las formas. 'Así
que obraré de manera que ni la duda, ni la falta de atención, ni la pereza y la apatía, ni el
miedo surjan de nuevo'.

"Así, Anuruddha, permaneciendo diligente, fervoroso y resuelto, volví a percibir luces y a


ver formas. Y de nuevo... Entonces pensé: 'La exultación ha surgido en mí...'

"Anuruddha, al igual que un hombre que fuera en busca del acceso a un tesoro oculto y
encontrara cinco entradas a la vez, a causa de ello surgiría en él la exultación, así, Anuruddha,
la exultación surgió en mí y a causa de la exultación perdí la concentración y al perderla, se
desvanecieron las luces y la visión de las formas. 'Así que obraré de manera que ni la duda,
ni la falta de atención... ni el miedo ni la exultación surjan de nuevo'.

"Así, Anuruddha, permaneciendo diligente, fervoroso y resuelto, volví a percibir luces y a


ver formas... Y de nuevo... Entonces pensé: 'La malignidad ha surgido en mi... Así que obraré
de manera que ni la duda, ni la falta de atención... ni la exultación ni la malignidad surjan de
nuevo'.

"Así, Anuruddha, permaneciendo diligente, fervoroso y resuelto, volví a percibir luces y a


ver formas. Y de nuevo... Entonces pensé: 'El exceso de energía ha surgido en mí...'
Anuruddha, al igual que un hombre que agarrase fuertemente una codorniz con ambas manos
la mataría, así, Anuruddha, el exceso de energía surgió en mí y a causa del exceso de energía
perdí la concentración y, al perderla, se desvanecieron las luces y la visión de las formas..
Así que obraré de manera que ni la duda, ni la falta de atención... ni la malignidad ni el exceso
de energía surjan de nuevo.

"Así, Anuruddha, permaneciendo diligente, fervoroso y resuelto, volví a percibir luces y a


ver formas. Y de nuevo... Anuruddha, al igual que un hombre que agarrase una codorniz pero
sin hacer fuerza, se le escaparía de las manos, así, Anuruddha, la falta de energía surgió en
mí y a causa de la falta de energía perdí la concentración y, al perderla, se desvanecieron las
luces y la visión de las formas... 'Así que obraré de manera que ni la duda, ni la falta de
atención... ni el exceso ni la falta de energía surjan de nuevo".

"Así, Anuruddha, permaneciendo diligente, fervoroso y resuelto, volví a percibir luces y a


ver formas. Y de nuevo... Entonces pensé: 'El anhelo ha surgido en mi... 'Así que obraré de
manera que ni la duda, ni la falta de atención... [se repite lo mismo]... ni la falta de energía
ni el anhelo surjan de nuevo'.

"Así, Anuruddha, permaneciendo diligente, fervoroso y resuelto, volví a percibir luces y a


ver formas. Y de nuevo... Entonces pensé: 'La percepción de la multiplicidad ha surgido en
mí... 'Así que obraré de manera que ni la duda, ni la falta de atención.... ni el anhelo ni la
percepción de la multiplicidad surjan de nuevo.'

"Así, Anuruddha, permaneciendo diligente, fervoroso y resuelto, volví a percibir luces y a


ver formas. Y de nuevo, no mucho después, se desvanecieron las luces y la visión de formas.
Y pensé: '¿Cuál es la causa, cuál es la razón por las que se desvanecen las luces y la visión
de las formas?'

"Entonces pensé: 'Demasiada contemplación de las formas ha surgido en mí y a causa de ello


pierdo la concentración, y al perderla se desvanecen las luces y la visión de las formas. Así
que obraré de manera que ni la duda, ni la falta de atención... ni la percepción de la
multiplicidad ni demasiada contemplación de las formas surjan de nuevo'.

"Así, Anuruddha, sabiendo que la duda es una impureza de la mente, renuncié a la duda que
es una impureza de la mente; sabiendo que la falta de atención... la pereza y la apatía... el
miedo... la exultación... la malignidad... el exceso de energía... la falta de energía... el
anhelo... la percepción de la multiplicidad... y la demasiada contemplación de las formas, son
impurezas de la mente, renuncié a la falta de atención... la pereza y la apatía... el miedo... la
exultación... la malignidad... el exceso de energía... la falta de energía... el anhelo... la
percepción de la multiplicidad... y la demasiada contemplación de las formas.

"Así, Anuruddha, permaneciendo diligente, fervoroso y resuelto, percibía luces pero no veía
formas, o bien veía formas pero no percibía luces, y esto durante todo un día, o toda una
noche, o todo un día y una noche.

"Entonces, Anuruddha, pensé: '¿Cuál es la causa, cuál es la razón por la que percibo luces
pero no veo formas o bien veo formas pero no percibo luces, yeso durante todo un día, o toda
una noche, o todo un día y una noche?' Y entonces, Anuruddha, pensé: 'Percibo las luces
pero no veo las formas cuando no prestando atención a la señal de las formas, la presto a la
señal de las luces; veo las formas pero no percibo las luces, cuando, no prestando atención a
la señal de las luces, la presto a la señal de las formas, y eso, durante todo un día, o toda una
noche, o todo un día y una noche'.

"Así, Anuruddha, permaneciendo diligente, fervoroso y resuelto, percibía luces limitadas y


veía formas limitadas, o bien veía formas ilimitadas y percibía luces ilimitadas, yeso durante
todo un día, o toda una noche, o todo un día y una noche. Entonces, Anuruddha, pensé: '¿Cuál
es la causa, cuál es la razón por la que percibo luces limitadas y veo formas limitadas, o bien
veo formas ilimitadas y percibo luces ilimitadas, yeso, durante todo un día, o toda una noche,
o todo un día y una noche?'

"Y entonces, Anuruddha, pensé: 'Cuando la concentración es limitada, entonces la visión es


limitada; así que con visión limitada percibo luces limitadas y veo formas limitadas. Cuando
la concentración es ilimitada, entonces la visión es ilimitada; así que con visión ilimitada
percibo luces ilimitadas y veo formas ilimitadas, yeso durante todo un día, o toda una noche,
o todo un día y una noche'.

"Así, Anuruddha, sabiendo que la duda es una impureza de la mente, renuncié a la duda que
es una impureza de la mente; sabiendo que la falta de atención... la pereza y la apatía... el
miedo... la exultación... la malignidad... el exceso de energía... la falta de energía... anhelo...
la percepción de la multiplicidad... y la demasiada contemplación de las formas, son
impurezas de la mente, renuncié a la falta de atención... la pereza y la apatía... el miedo... la
exultación... la malignidad... el exceso de energía... la falta de energía... anhelo... la
percepción de la multiplicidad... y la demasiada contemplación de las formas.

"Entonces pensé: 'He renunciado a estas impurezas de la mente y ahora voy a dedicarme de
tres maneras al cultivo de la concentración'. Así, cultivé la concentración con ideación y la
reflexión; cultivé la concentración sin ideación pero con reflexión; cultivé la concentración
sin ideación y sin reflexión; cultivé la concentración con gozo; cultivé la concentración sin
gozo; cultivé la concentración acompañada de contento y cultivé la concentración
acompañada de ecuanimidad.

"Así, Anuruddha, cultivada la concentración con ideación y reflexión; cultivada la


concentración sin ideación pero con reflexión; cultivada la concentración sin ideación y sin
reflexión; cultivada la concentración con gozo; cultivada la concentración sin gozo; cultivada
la concentración acompañada de contento y cultivada la concentración acompañada de
ecuanimidad, el conocimiento y la visión surgieron en mí: 'Mi liberación es inconmovible,
éste es mi último nacimiento, no hay ya más devenir.'"

Así habló el Bienaventurado, y el venerable Anuruddha gozó y se complació con sus


palabras.
Pasajes del Canon Pali

{165} “Monjes, puede haber cuatro tipo de individuos en el mundo. ¿Cuáles son estos
cuatro?

“He aquí, monjes, hay individuo que adquirió la calma mental pero no, un agudo
discernimiento perspicaz dentro de los fenómenos. Hay también, monjes, individuo que
adquirió un agudo discernimiento perspicaz dentro de los fenómenos, pero no adquirió la
calma mental. Hay también, monjes, individuo que no adquirió ni la calma mental, ni un
agudo discernimiento perspicaz dentro de los fenómenos, como también hay el individuo
que adquirió a ambos: tanto la calma mental, como el agudo discernimiento perspicaz dentro
de los fenómenos. Monjes, estos son los cuatro tipos de individuos que se pueden encontrar
en el mundo.

“Monjes, aquel individuo que adquirió la calma mental pero no adquirió un agudo
discernimiento perspicaz dentro de los fenómenos, debería acercarse a otro individuo que sí,
lo adquirió y dirigirse a él con estas palabras: ‘Venerable señor, ¿cómo deberían considerarse
los fenómenos? ¿Cómo deberían ser investigados? ¿Cómo deberían ser vistos con
perspicacia?’ “Entonces, el otro individuo le expondría lo que el mismo hubo visto y
experimentado, así: ‘Venerable señor, así deberían considerarse los fenómenos, así deberían
ser investigados y así deberían ser vistos con perspicacia.’

“De esta manera, monjes, en algún tiempo futuro, él será un individuo que habrá alcanzado
tanto la calma mental, como el agudo discernimiento perspicaz dentro de los fenómenos.

“Monjes, aquel individuo que adquirió un agudo discernimiento perspicaz dentro de los
fenómenos, pero no adquirió la calma mental, debería acercarse a otro individuo que sí, la
adquirió y dirigirse a él con estas palabras: ‘Venerable señor, ¿cómo debería tranquilizar la
mente? ¿Cómo debería unificarla? ¿Cómo debería concentrar la mente?’

“Entonces, el otro individuo le expondría lo que el mismo hubo visto y experimentado, así:
‘Venerable señor, así debería tranquilizar la mente, así debería unificarla y así debería
concentrar la mente.’

“De esta manera, monjes, en algún tiempo futuro, él será un individuo que habrá alcanzado
tanto la calma mental, como el agudo discernimiento perspicaz dentro de los fenómenos.

“Monjes, aquel individuo que no adquirió ni la calma mental ni un agudo discernimiento


perspicaz dentro de los fenómenos, debería acercarse a otro individuo que adquirió a ambos
estados y dirigirse a él con estas palabras: ‘Venerable señor, ¿cómo debería tranquilizar la
mente? ¿Cómo debería unificarla? ¿Cómo debería concentrar la mente?’ Y también: ‘¿cómo
deberían considerarse los fenómenos? ¿Cómo deberían ser investigados? ¿Cómo deberían
ser vistos con perspicacia?’ “Entonces, el otro individuo le expondría lo que el mismo hubo
visto y experimentado, así: ‘Venerable señor, así debería tranquilizar la mente, así debería
unificarla y así debería concentrar la mente.’ Y también: ‘Así deberían considerarse los
fenómenos, así deberían ser investigados y así deberían ser vistos con perspicacia.’

“De esta manera, monjes, en algún tiempo futuro, él será un individuo que habrá alcanzado
tanto la calma mental, como el agudo discernimiento perspicaz dentro de los fenómenos.
“Finalmente, monjes, aquel individuo que adquirió tanto la calma mental como el agudo
discernimiento perspicaz dentro de los fenómenos, debería fortalecer estos provechos estados
y, de esta manera, destruir las impurezas.”

AN 9,94

{166} El Venerable Ananda dijo: “Amigos, quienquiera -ya sea monje o monja- que declara
el logro del estado de arahant en mi presencia, todos lo hacen mediante uno de estos cuatro
caminos. ¿Qué cuatro? “Se da el caso en el que un monje ha desarrollado la visión clara
precedida por la tranquilidad. A medida que desarrolla la visión clara precedida por la
tranquilidad, el camino nace. Sigue ese camino, lo desarrolla, lo continúa. A medida que
sigue el camino, desarrollándolo y continuándolo, sus trabas son abandonadas, sus
obsesiones destruidas.

“Entonces se da el caso en el que un monje ha desarrollado la tranquilidad precedida por la


visión clara. A medida que desarrolla la tranquilidad precedida por la visión clara, el camino
nace. Sigue ese camino, lo desarrolla, lo continúa. A medida que sigue el camino,
desarrollándolo y continuándolo, sus trabas son abandonadas, sus obsesiones destruidas.

“Entonces se da el caso en el que un monje ha desarrollado la tranquilidad en tándem con la


visión clara. A medida que desarrolla la tranquilidad en tándem con la visión clara, el camino
nace. Sigue ese camino, lo desarrolla, lo continúa. A medida que sigue el camino,
desarrollándolo y continuándolo, sus trabas son abandonadas, sus obsesiones destruidas.
“Entonces se da el caso en el que en la mente de un monje tiene su inquietud respecto al
Dhamma [Comentario: las corrupciones de la visión clara] bien bajo control. Llega un
momento en que su mente se vuelve firme interiormente, se calma, y se hace unificada y
concentrada. En él, el camino nace. Sigue ese camino, lo desarrolla, lo continúa. A medida
que sigue el camino, desarrollándolo y continuándolo, sus trabas son abandonadas, sus
obsesiones destruidas.

“Quienquiera -ya sea monje o monja- que declara el logro del estado de arahant en mi
presencia, todos lo hacen mediante uno de estos cuatro caminos.”
AN 4,170

{167} (En breve)

AN 3,128

{168} (En breve)

MN 70

{169} (En breve)

SN 56,1

{170} "Monjes, desarrollad la concentración. El monje que es concentrado entiende las cosas
tal como realmente son.

"Y ¿qué es, monjes, lo que él entiende tal como realmente es? El origen y la desaparición de
la forma; el origen y la desaparición de la sensación; el origen y la desaparición de la
percepción; el origen y la desaparición de las formaciones mentales; el origen y la
desaparición de la conciencia.

"Y ¿cuál es, monjes, el origen de la forma? ¿Cuál es el origen de la sensación? ¿Cuál es el
origen de la percepción? ¿Cuál es el origen de las formaciones mentales? ¿Cuál es el origen
de la conciencia?

"He aquí, monjes, uno mira el deleite, uno da la bienvenida y uno se apropia. Y ¿en qué cosa
uno mira el deleite, a qué da la bienvenida y de qué se apropia? Uno mira el deleite en la
forma, le da la bienvenida y se apropia de ella. Como consecuencia de esto, surge el deleite
en la forma. Deleite en la forma es el apego. Con el apego de uno como condición, la
existencia [llega a ser]; con la existencia como condición, el nacimiento; con el nacimiento
como condición, el envejecimiento y la muerte, el pesar, la lamentación, la pena, el displacer
y la desesperanza. Este es el origen de esta gran masa de sufrimiento."

(De manera similar se trata a sensación, la percepción, las formaciones mentales y la


conciencia.)

SN 22,5

{171} No hay concentración para el que no tiene sabiduría; no hay sabiduría para el que no
se concentra. En aquel que hay concentración y sabiduría, ése verdaderamente está
próximo al Nibbana .
Dhp 372

{172} (En breve)

MN 111

{173} “En verdad, monjes, os digo que la destrucción de las impurezas mentales depende
del primer jhana. En verdad, monjes, os digo que la destrucción de las impurezas mentales
depende del segundo jhana… del tercer jhana… del cuarto jhana… de la esfera del espacio
infinito… de la esfera de la conciencia infinita… de la esfera de la nada. En verdad, monjes,
os digo que la destrucción de las impurezas mentales depende de la esfera de la ni percepción
ni la no-percepción.

“Monjes, esto ha sido dicho: ‘la destrucción de las impurezas mentales depende del primer
jhana’. ¿En referencia a qué se ha dicho esto? Es el caso del monje que, apartado de la
sensualidad, apartado de los perjudiciales estados mentales, entra y permanece en el primer
jhana: el arrobamiento y la felicidad nacidos de la reclusión, acompañados del pensamiento
aplicado y el pensamiento sostenido. Él considera a cualquier fenómeno que ahí ocurra y sea
conectado con la forma, la sensación, la percepción, las construcciones mentales y la
conciencia, como impermanente, doloroso, penoso, canceroso, angustiante, como una saeta,
una aflicción, algo ajeno, desintegrado, vacío y carente del ser. Entonces, aparta su mente de
estos fenómenos y habiéndolo hecho esto, inclina su mente hacia lo propiamente inmortal:
‘Ésta es la paz, esto es lo excelso: la desactivación de todas las construcciones mentales, el
renunciamiento de todo lo adquirido, el fin de la avidez, el desapasionamiento, el cese, el
Nibbana.

“Monjes, suponed que un arquero o un aprendiz del arquero practicara sobre un hombre de
paja o arcilla; de esta manera, después de un tiempo, estaría capaz de disparar de larga
distancia, asestar acertadamente sus disparos en rápida sucesión y perforar una grana masa.
De la misma manera, monjes, éste es el caso del monje que, apartado de la sensualidad,
apartado de los perjudiciales estados mentales, entra y permanece en el primer jhana: el
arrobamiento y la felicidad nacidos de la reclusión, acompañados del pensamiento aplicado
y el pensamiento sostenido. Él considera a cualquier fenómeno que ahí ocurra y sea
conectado con la forma, la sensación, la percepción, las construcciones mentales y la
conciencia, como impermanente, doloroso, penoso, canceroso, angustiante, como una saeta,
una aflicción, algo ajeno, desintegrado, vacío y carente del ser. Entonces, aparta su mente de
estos fenómenos y habiéndolo hecho esto, inclina su mente hacia lo propiamente inmortal:
‘Ésta es la paz, esto es lo excelso: la desactivación de todas las construcciones mentales, el
renunciamiento de todo lo adquirido, el fin de la avidez, el desapasionamiento, el cese, el
Nibbana. “Permaneciendo justo ahí, alcanza el fin de las impurezas mentales. Y si no fuera
así, entonces –a través de esta real pasión por el Dhamma, este real deleite en el Dhamma-
hace desaparecer totalmente los cinco grilletes menores para, de esta manera, renacer [en las
Moradas Puras] donde será totalmente liberado y nunca más retornará a este mundo.

“En verdad, monjes, esto ha sido dicho: ‘la destrucción de las impurezas mentales depende
del primer jhana’ y esto se ha dicho en referencia a esto.

“Monjes, esto también ha sido dicho: ‘la destrucción de las impurezas mentales depende del
segundo jhana… del tercer jhana… del cuarto jhana… de la esfera del espacio infinito… de la
esfera de la conciencia infinita… de la esfera de la nada’. ¿En referencia a qué ha sido dicho
esto? [Se repite, de manera similar lo mismo con cada uno de los niveles del jhana y logros
superiores ]

“Así, monjes, hasta donde llegan los logros alcanzados con la percepción, llega la
penetración del conocimiento. Pero en cuanto a estas dos esferas, yo declaro, -el logro de la
esfera de la ni percepción ni la no-percepción y el logro del cese de las sensaciones y de la
percepción- esto debe ser correctamente dado a conocer a los meditadores hábiles en alcanzar
a los logros, hábiles en emerger de los logros, después de que hubieron alcanzado los logros
y emergido de ellos.”

Pasajes del Canon Pali

{181} "¿Cómo, Ananda, en la disciplina de los nobles se desarrolla la incomparable


enseñanza del desarrollo de las facultades? Se da el caso en el que, cuando el monje ve la
forma con el ojo, le resulta agradable, desagradable o agradable y desagradable al mismo
tiempo. El discierne: 'este objeto visual ha surgido en mí y es agradable, desagradable o
agradable y desagradable al mismo tiempo'. Y discierne, que esta forma que ha surgido es
compuesta, burda y surgida de manera dependiente. Pero el noble discípulo queda en paz,
sereno y ecuánime ante el objeto visual. De este modo la sensación cesa y surge la
ecuanimidad. Como el hombre con buena vista, conociendo su facultad, abre los ojos y ve;
o teniéndolos abiertos, cierra sus ojos y deja de ver, así de rápido, así de veloz, así de sencillo,
no importando si la sensación es agradable, desagradable o agradable y desagradable al
mismo tiempo, la sensación cesa y surge la ecuanimidad. En la disciplina del Noble, así
llamamos al incomparable desarrollo de las facultades para el reconocimiento de los objetos
visuales.

"Del mismo modo, cuando el monje escucha el sonido con su oído, surge en el monje la
sensación agradable, desagradable o agradable y desagradable al mismo tiempo. El discierne:
'este objeto auditivo ha surgido en mí y es agradable, desagradable o agradable y
desagradable al mismo tiempo'. Y discierne, que este sonido que ha surgido es compuesto,
burdo y surgido de manera dependiente. Pero el noble discípulo queda en paz, sereno y
ecuánime ante el objeto auditivo. De este modo la sensación cesa y surge la ecuanimidad.
Como un hombre fuerte puede fácilmente chasquear sus dedos, así de rápido, así de veloz,
así de sencillo, no importando si la sensación es agradable, desagradable o agradable y
desagradable al mismo tiempo, la sensación cesa y surge la ecuanimidad. En la disciplina del
Noble, así llamamos al incomparable desarrollo de las facultades para el reconocimiento de
los objetos auditivos.

"Del mismo modo, cuando el monje huele el aroma con la nariz, surge en el monje la
sensación agradable, desagradable o agradable y desagradable al mismo tiempo. El discierne:
'este objeto olfativo ha surgido en mí y es agradable, desagradable o agradable y desagradable
al mismo tiempo'. Y discierne, que este olor que ha surgido es compuesto, burdo y surgido
de manera dependiente. Pero el noble discípulo queda en paz, sereno y ecuánime ante el
objeto olfativo. De este modo la sensación cesa y surge la ecuanimidad. Como las gotas de
agua resbalan por la hoja inclinada de un loto y no permanecen allí, así de rápido, así de
veloz, así de sencillo, no importando si la sensación es agradable, desagradable o agradable
y desagradable al mismo tiempo, la sensación cesa y surge la ecuanimidad. En la disciplina
del Noble, así llamamos al incomparable desarrollo de las facultades para el reconocimiento
de los objetos auditivos.

"Del mismo modo, cuando un monje gusta el sabor con la lengua, surge en el monje la
sensación agradable, desagradable o agradable y desagradable al mismo tiempo. El discierne:
'este objeto gustativo ha surgido en mí y es agradable, desagradable o agradable y
desagradable al mismo tiempo'. Y discierne, que esta sensación gustativa que ha surgida es
compuesta, burda y surgida de manera dependiente. Pero el noble discípulo queda en paz,
sereno, lúcido y ecuánime ante el objeto gustativo. De este modo la sensación cesa y surge
la ecuanimidad. Como un hombre que puede escupir una gota de saliva colocada en la punta
de su legua, así de rápido, así de veloz, así de sencillo, no importando si la sensación es
agradable, desagradable o agradable y desagradable al mismo tiempo, la sensación cesa y
surge la ecuanimidad. En la disciplina del Noble, así llamamos al incomparable desarrollo
de las facultades para el reconocimiento de los objetos gustativos.

"Del mismo modo, cuando un monje tiene una sensación táctil con el cuerpo, surge en el
monje la sensación agradable, desagradable o agradable y desagradable al mismo tiempo. El
discierne: 'este objeto táctil ha surgido en mí y es agradable, desagradable o agradable y
desagradable al mismo tiempo.' Y discierne, esta sensación táctil que ha surgido es
compuesta, burda y surgida de manera dependiente. Pero el noble discípulo queda en paz,
sereno y ecuánime ante el objeto táctil. De este modo la sensación cesa y surge la
ecuanimidad. Como un hombre fuerte puede fácil y rápidamente flexionar sus piernas o sus
brazos, así de rápido, así de veloz, así de sencillo, no importando si la sensación es agradable,
desagradable o agradable y desagradable al mismo tiempo, la sensación cesa y surge la
ecuanimidad. En la disciplina del Noble, así llamamos al incomparable desarrollo de las
facultades para el reconocimiento de los objetos táctiles.

"Del mismo modo, cuando el monje reconoce una idea con el intelecto, surge en el monje la
sensación agradable, desagradable o agradable y desagradable al mismo tiempo. El discierne:
'este objeto mental ha surgido en mí y es agradable, desagradable o agradable y desagradable
al mismo tiempo'. Y discierne, que esta sensación mental que ha surgido es compuesta, burda
y surgida de manera dependiente'. Pero el noble discípulo queda en paz, sereno y ecuánime
ante el objeto mental. De este modo la sensación cesa y surge la ecuanimidad. Como un
hombre fuerte podría dejar caer dos o tres gotas de sudor en un caldero de hierro un día muy
caluroso, así de rápido, así de veloz, así de sencillo, no importando si la sensación es
agradable, desagradable o agradable y desagradable al mismo tiempo, la sensación cesa y
surge la ecuanimidad. En la disciplina del Noble, así llamamos al incomparable desarrollo
de las facultades para el reconocimiento de los objetos mentales.

"Y ¿cómo se conoce el comportamiento de un aprendiz, un seguidor del sendero? Se da el


caso en el que viendo la forma con el ojo, en el monje surge una sensación agradable,
desagradable o agradable y desagradable al mismo tiempo. Entonces se siente horrorizado,
humillado, disgustado ante la sensación surgida, ya sea agradable, desagradable o agradable
y desagradable al mismo tiempo.

"Cuando escucha el sonido con su oído... Cuando saborea el sabor con la lengua... Cuando
huele el aroma con la nariz... Cuando tiene la sensación táctil con el cuerpo... Cuando
reconoce el objeto mental con el intelecto, en el monje surge una sensación agradable,
desagradable o agradable y desagradable al mismo tiempo. Entonces se siente horrorizado,
humillado, disgustado, ante la sensación surgida, ya sea agradable, desagradable o agradable
y desagradable al mismo tiempo. De este modo se reconoce a un aprendiz, a un seguidor del
sendero.

"Y ¿cómo se conoce el comportamiento del noble con facultades desarrolladas? Se da el caso
en el que viendo la forma con el ojo, en el monje surge la sensación agradable, desagradable
o agradable y desagradable al mismo tiempo. Si se propone 'voy a morar percibiendo lo no
repulsivo en lo repulsivo', permanece percibiendo lo no repulsivo en lo repulsivo. Si se
propone 'voy a morar percibiendo lo repulsivo en lo no repulsivo', permanece percibiendo lo
repulsivo en lo no repulsivo. Si se propone 'voy a morar percibiendo lo no repulsivo tanto en
lo repulsivo como en lo no repulsivo', permanece percibiendo lo no repulsivo en aquello. Si
se propone 'voy a morar percibiendo lo repulsivo tanto en lo no repulsivo como en lo
repulsivo', permanece percibiendo lo repulsivo en aquello. Si se propone 'voy a evitar a
ambos, tanto lo repulsivo como lo no repulsivo, permanece ecuánime, alerta y atentamente
consciente.
"Cuando escucha el sonido con su oído... Cuando saborea el sabor con la lengua... Cuando
huele el aroma con la nariz... Cuando tiene la sensación táctil con el cuerpo... Cuando
reconoce la idea con el intelecto... en el monje surge la sensación agradable, desagradable o
agradable y desagradable al mismo tiempo. Si se propone 'voy a morar percibiendo lo no
repulsivo en lo repulsivo'... Si se propone 'voy a evitar a ambos, tanto lo repulsivo como lo
no repulsivo, permanece ecuánime, alerta y atentamente consciente. De este modo se
reconoce al noble con facultades desarrolladas.

MN 152

{182} “De esta manera, [al haber alcanzado el cuarto nivel del jhana] lo único que queda es
la ecuanimidad, pura y brillante, maleable, flexible y radiante. Imagina, monje, a un orfebre
o al aprendiz de un orfebre que prepara el horno, calienta el crisol y, sujetando el oro con un
par de pinzas, lo coloca dentro del crisol. De vez en cuando sopla sobre él, de vez en cuando
lo rocía con agua y de vez en cuando lo examina, hasta que el oro llega a ser refinado, bien
refinado, completamente refinado, impecable, libre de escoria, flexible, maleable y radiante.
Después de esto, si desease producir cualquier clase de adorno que tuviera en su mente fuera
éste un cinturón, una pendiente, un collar o una cadena de oro- fácilmente, podría lograrlo.
De la misma manera, monje, lo único que queda es la ecuanimidad, pura y brillante,
maleable, flexible y radiante.

“Y entonces, discierne esto: 'Si dirigiese esta ecuanimidad, pura y brillante, hacia la base del
espacio infinito y desarrollase mi mente adecuadamente, entonces, esta mi ecuanimidad, con
el soporte en la base del espacio infinito, ligada a ella, permanecería por el espacio del tiempo
muy largo. Y si yo dirigiese esta ecuanimidad, pura y brillante, hacia la base de la conciencia
infinita... hacia la base de la nada... hacia la base de la ni percepción ni la no-percepción y la
desarrollase mi mente adecuadamente, entonces, esta mi ecuanimidad, con el soporte en la
base de la ni percepción ni la no-percepción, ligada a ella, permanecería por el espacio del
tiempo muy largo.' “Además, discierne esto: 'Si yo dirigiese esta ecuanimidad, pura y
brillante, hacia la base del espacio infinito y desarrollase mi mente adecuadamente, entonces,
esto sería algo condicionado. Y si yo dirigiese esta ecuanimidad, pura y brillante, hacia la
base de la conciencia infinita... hacia la base de la nada... hacia la base de la ni percepción ni
la nopercepción y desarrollase mi mente adecuadamente, entonces, esto sería algo
condicionado.' De modo que no produce condicionamiento alguno ni tampoco genera
ninguna volición tendiente hacia el ser ni hacia el no-ser. Siendo que no produce
condicionamientos ni genera voliciones tendientes hacia el ser ni hacia el no-ser, no se apega
a nada en este mundo. Y cuando no tiene apego, su corazón no se agita. Y cuando no está
agitado, personalmente alcanza el Nibbana. Entonces, entiende esto: 'El nacimiento está
destruido, la vida santa ha sido vivida, lo que habría que hacer, ha sido realizado, y no hay
nada más qué hacer en este mundo'".
Pasajes del Canon Pali

{184} "Monjes, no conozco ninguna otra cosa que sea más favorable para el surgir de los
pensamientos demeritorios no surgidos y para el desarrollo de los pensamientos demeritorios
surgidos que una visión incorrecta. Monjes, los pensamientos demeritorios no surgidos se
originan y los pensamientos demeritorios surgidos se desarrollan en aquel que posee una
visión incorrecta.

"Monjes, no conozco ninguna otra cosa que sea más favorable para el surgir de los
pensamientos meritorios no surgidos y para el desarrollo de los pensamientos meritorios
surgidos que una visión correcta. Monjes, los pensamientos meritorios no surgidos se
originan y los pensamientos meritorios surgidos se desarrollan y completan en aquel que
posee una visión correcta.

Monjes, en una persona con una visión incorrecta sus acciones físicas, verbales y mentales
son guiadas de acuerdo con la norma del logro de la visión, igualmente también sus
intenciones, deseos, aspiraciones y determinaciones. Estas son inadecuadas, insatisfactorias
y conducen a la infelicidad. ¿Cuál es la razón de esto? Es por su visión incorrecta. Monjes,
así como una semilla del nimba, una semilla del kosataki o una semilla amarga mezcladas en
la tierra húmeda producen una esencia en la tierra y el agua y toda esta esencia es amarga;
igualmente las acciones físicas, verbales y mentales, las intenciones, los deseos, las
aspiraciones y las determinaciones de una persona con una visión incorrecta son guiadas con
la norma del logro de su visión y son inadecuadas, desagradables y conducen a la infelicidad.

Monjes, en una persona con una visión correcta sus acciones físicas, verbales y mentales son
guiadas de acuerdo con la norma de su visión, igualmente también sus intenciones, deseos,
aspiraciones y determinaciones. ¿Cuál es la razón de esto? Es por la visión correcta. Monjes,
así como una semilla de caña de azúcar, una semilla de arroz o una semilla de parra
mezcladas en la tierra húmeda producen una esencia en la tierra y el agua y toda esta esencia
no se mezcla y es dulce; igualmente sus acciones físicas, verbales y mentales, las intenciones,
los deseos, las aspiraciones y las determinaciones de una persona con una visión correcta son
guiadas de acuerdo con la norma del logro de su visión y son adecuadas, satisfactorias y
conducen a la infelicidad.

AN 1,181-182.189-190 (AN 1,296-297.304-305)

{185} (En breve)

AN 5,25
{186} “'Recta visión, recta visión' se ha dicho, venerable señor. ¿En respecto a qué, venerable
señor, se ha dicho 'recta visión'?”

“Este mundo, Kaccana, es concebido por la mayoría, en términos de dualidad: bajo la noción
de la existencia o bajo la noción de la no-existencia. Pero para alguien que ve el origen del
mundo tal como realmente es, con el recto conocimiento, no existe la noción de la existencia
con respecto al mundo. Y para alguien que ve el cese del mundo tal como realmente es, con
el recto conocimiento, no existe la noción de la existencia con respecto al mundo.

“La mayoría de este mundo, Kaccana, está engrillada por los compromisos, el apego y la
adhesión. Pero aquel que no llega a involucrarse ni ligarse a estos compromisos, apegos,
adhesiones, puntos de vista ni tendencias suybacentes, no adopta posición alguna acerca de
'mi ser'. No tiene perplejidad ni duda de que lo que surge sólo origina el sufrimiento, y lo que
cesa, sólo es el cese del sufrimiento. Su conocimiento de esto es independiente del
conocimiento de los demás. Respecto a eso, Kaccana, se ha dicho 'recta visión'.

SN 12,15

{187} Entonces, el hombre hogareño Anathapindika salió de Savatthi en las primeras horas
de la mañana para visitar al Bienaventurado. Pero después se le ocurrió el siguiente
pensamiento: “Éste aún no es el tiempo apropiado para ver al Bienaventurado, pues todavía
él está recluido. Tampoco éste es el tiempo apropiado para ver a los monjes que son dignos
de estima, pues ellos también todavía están recluidos. ¿Qué tal si voy al parque, en el cual
moran los ascetas errantes que sostienen otros puntos de vista?”.

Así que el hombre hogareño Anathapindika se fue hacia parque, en el cual moran los ascetas
errantes que sostienen otros puntos de vista.

En esta ocasión, los ascetas errantes que sostenían otros puntos de vista estaban sentados
juntos en una gran asamblea, haciendo un enorme griterío, hablando fuerte y ruidosamente
sobre temas pueriles. Pero, cuando ellos visualizaron al hombre hogareño Anathapindika
acercándose a este lugar, se aquietaron unos a otros de la siguiente manera: “Señores, por
favor, aquietaos. Señores, por favor, no hagáis tanto ruido. He aquí, que viene acercándose a
este lugar el hombre hogareño Anathapindika, quien es el discípulo del asceta Gotama, uno
de sus discípulos laicos vestidos de blanco que viven en Savatthi. A estos venerables señores
les gusta la quietud, ellos se disciplinan en la quietud y recomiendan la quietud. Quizá, si él
encuentra a esta asamblea quieta, se le ocurra unirse a ella”. Entonces, estos ascetas errantes
llegaron a callarse.

Mientras tanto, el hombre hogareño Anathapindika se acercó a los ascetas errantes que
sostenían otros puntos de vista e intercambió con ellos cordiales saludos. Cuando estos
cordiales saludos y las amables palabras de bienvenida llegaron a su fin, se sentó a un lado y
los ascetas errantes le dijeron:

“Dinos, hombre hogareño, ¿cuáles son los puntos de vista que sostiene el asceta Gotama?”

“Venerables señores, en realidad yo no conozco enteramente los puntos de vista que sostiene
el Bienaventurado”.

“Bueno, tú dices que no conoces enteramente los puntos de vista que sostiene el asceta
Gotama. Dinos, entonces, ¿cuáles son los puntos de vista que sostienen los monjes?”

“Venerables señores, en realidad yo tampoco conozco enteramente los puntos de vista que
sostienen los monjes”.

“Bueno, tú dices que no conoces enteramente los puntos de vista que sostiene el asceta
Gotama y dices que tampoco conoces enteramente los puntos de vista que sostienen los
monjes. Dinos, entonces, ¿cuáles son los puntos de vista que tú sostienes?”

“Esto, en realidad, no sería una tarea difícil, la de exponer a los venerables señores mis puntos
de vista. Sin embargo, sería bueno que primero los venerables señores me expongan a mí sus
propios puntos de vista. De esta manera, no me será una tarea difícil exponer después, a los
venerables señores, mis puntos de vista.”

Cuando esto fue dicho, uno de los ascetas errantes dijo al hombre hogareño Anathapindika
lo siguiente: “El mundo es eterno; solamente ésta es la verdad y ningún otro punto de vista
tiene valor alguno. Este es el punto de vista que yo sostengo”.

Y otro de los ascetas errantes dijo al hombre hogareño Anathapindika lo siguiente: “El
mundo no es eterno; solamente ésta es la verdad y ningún otro punto de vista tiene valor
alguno. Este es el punto de vista que yo sostengo”.

Y otro de los ascetas errantes dijo al hombre hogareño Anathapindika lo siguiente: “El
mundo es finito… El mundo es infinito… El alma y el cuerpo son lo mismo… El alma es
una cosa y el cuerpo, otra… El Tathagata existe después de la muerte… El Tathagata no
existe después de la muerte… Después de la muerte, ocurren ambas cosas: el Tathagata existe
y no existe… Después de la muerte, no ocurre ninguna de estas dos cosas: el Tathagata ni
existe ni no existe; solamente ésta es la verdad y ningún otro punto de vista tiene valor
alguno. Este es el punto de vista que yo sostengo”.

Cuando esto fue dicho, el hombre hogareño Anathapindika tomó la palabra y se dirigió a los
ascetas errantes de esta manera:
“Cuando aquel venerable señor dijo: ‘El mundo es eterno; solamente ésta es la verdad y
ningún otro punto de vista tiene valor alguno. Este es el punto de vista que yo sostengo’, éste
su punto de vista surgió a causa de su inapropiada atención o por la influencia de alguien
más. Un punto de vista como éste, llega a existir como algo inventado, producido y originado
en dependencia de algo externo. Y todo aquello que llega a existir porque fue inventado,
producido y originado en dependencia de algo externo, no es permanente. Lo que no es
permanente es doloroso. Por eso, aquel venerable señor se apegó a lo que doloroso, este
venerable señor se entregó a lo que es doloroso.

“Igualmente, cuando el otro venerable señor dijo: ‘El mundo no es eterno… El mundo es
finito… El mundo es infinito… El alma y el cuerpo son lo mismo… El alma es una cosa y
el cuerpo, otra… El Tathagata existe después de la muerte… El Tathagata no existe después
de la muerte… Después de la muerte, ocurren ambas cosas: el Tathagata existe y no existe…
Después de la muerte, no ocurre ninguna de estas dos cosas: el Tathagata ni existe ni no
existe; solamente ésta es la verdad y ningún otro punto de vista tiene valor alguno. Este es el
punto de vista que yo sostengo, éste su punto de vista surgió a causa de su inapropiada
atención o por la influencia de alguien más. Un punto de vista como éste, llega a existir como
algo inventado, producido y originado en dependencia de algo externo. Y todo aquello que
llega a existir porque fue inventado, producido y originado en dependencia de algo externo,
no es permanente. Lo que no es permanente es doloroso. Por eso, aquel venerable señor se
apegó a lo que doloroso, este venerable señor se entregó a lo que es doloroso.”

Cuando esto fue dicho, los ascetas errantes se dirigieron al hombre hogareño Anathapindika
con estas palabras:

“Bien, hombre hogareño, todos nosotros hemos expresado nuestros respectivos puntos de
vista. Dinos ahora, ¿cuáles son tus propios puntos de vista?”

“Todo lo que ha llegado a existir fue inventado, producido y originado en dependencia de


algo externo. Y todo aquello que llega a existir inventado, producido y originado en
dependencia de algo externo, no es permanente. Lo que no es permanente es doloroso. Lo
que es doloroso no es mío, esto no soy yo, ni esto es mi ser. Este es el punto de vista que yo
sostengo”. “Pero, entonces, hombre hogareño, cuando tú dices que ‘Todo lo que ha llegado
a existir fue inventado… Lo que no es permanente es doloroso’, también tú te apegas a lo
que es doloroso y te entregas a lo que es doloroso.”

“Venerables señores, -todo lo que ha llegado a existir fue inventado, producido y originado
en dependencia de algo externo. Y todo aquello que llega a existir inventado, producido y
originado en dependencia de algo externo, no es permanente. Lo que no es permanente es
doloroso. Lo que es doloroso no es mío, esto no soy yo, ni esto es mi ser- habiendo visto esto
con el recto discernimiento, así cómo realmente es, yo también discierno el último escape de
esto, así cómo realmente es”.
Cuando esto fue dicho, los ascetas errantes guardaron silencio, permanecieron
desconcertados, sentados cabizbajos y con hombros caídos, decepcionados, sin encontrar
palabra alguna para responder.

Entonces, el hombre hogareño Anathapindika, viendo que los ascetas errantes guardaron
silencio, permanecieron desconcertados, sentados cabizbajos y con hombros caídos,
decepcionados, sin encontrar palabra alguna para responder, se levantó de ahí y fue junto al
Bienaventurado.
Pasajes del Canon Pali

{188} En una ocasión, el Bienaventurado estaba morando en la arboleda con los árboles
simsapa cerca de Kosambi. Entonces, el Bienaventurado tomó en su mano unas cuantas hojas
de simsapa y dijo a los monjes: "¿Qué os parece, monjes, qué es lo más numeroso: estas
pocas hojas de simsapa que tengo en mi mano o aquellas que tenemos encima en esta
arboleda con los árboles simsapa?"

"Venerable señor, las hojas de simsapa que el Bienaventurado tiene en su mano son muy
pocas, mientras que las hojas que tenemos encima en esta arboleda con los árboles simsapa
son muy numerosas".

"De la misma manera, monjes, las cosas que he conocido directamente pero que no las he
enseñado son muy numerosas, mientras que las cosas que he enseñado a vosotros son pocas.
Y, ¿por qué, monjes, no he enseñando aquellas cosas numerosas? Porque no son
beneficiosas, son irrelevantes como fundamento para la vida santa y no conducen a la
repugnancia, al desapasionamiento, al cese, a la paz, al conocimiento directo, al despertar y
al Nibbana. Por eso, monjes, no he enseñando aquellas cosas numerosas.

"Y, ¿qué es monjes, lo que he enseñado? He enseñando: 'Esto es la insatisfacción'; he


enseñando: 'Este es el origen de la insatisfacción'; he enseñando: 'Este es el cese de la
insatisfacción'; he enseñando: 'Este es el Sendero que conduce al cese de la insatisfacción'.
Y, ¿por qué, monjes, no he enseñando esto? Porque esto es beneficioso, relevante como
fundamento para la vida santa y conducente a la repugnancia, al desapasionamiento, al cese,
a la paz, al conocimiento directo, al despertar y al Nibbana. Por eso, monjes, he enseñando
esto.

"Por eso, monjes, debéis hacer un esfuerzo para comprender esto: 'Esto es la insatisfacción';
debéis hacer un esfuerzo para comprender esto: 'Este es el origen de la insatisfacción'; debéis
hacer un esfuerzo para comprender esto: 'Este es el cese de la insatisfacción'; debéis hacer
un esfuerzo para comprender esto: 'Este es el Sendero que conduce al cese de la
insatisfacción.'"

SN 56,31
{189} “Monjes, ¿y cómo, el sufrimiento, la causa, por la cual el sufrimiento llega a operar,
la diversidad del sufrimiento, el resultado del sufrimiento, el cese del sufrimiento y el sendero
que lleva al cese del sufrimiento, deben ser conocidos?

“El nacimiento es doloroso, la vejez es dolorosa y la muerte es dolorosa. La pena,


lamentación, tristeza, angustia y desesperanza son dolorosas. Asociarse con lo que no es
querido es doloroso. Separarse de lo querido es doloroso. No obtener lo deseable es doloroso.
En resumen, los cinco componentes del apego (khandhas ), son dolorosos.

“¿Y qué es la causa, por la cual el sufrimiento llega a operar? La avidez, monjes, es la causa,
por la cual el sufrimiento llega a operar.

“¿Y qué es la diversidad del sufrimiento? Hay sufrimiento mayor y menor. Hay sufrimiento
que cambia pronto y el que dura mucho tiempo para cambiar. Esto es, monjes, lo que se llama
‘la diversidad del sufrimiento’.

“¿Y qué es el resultado del sufrimiento? Este es el caso de alguien que, vencido por el dolor,
con su mente exhausta, sufre, llora, se lamenta y, golpeando su pecho, queda perplejo. O, es
el caso de alguien que, vencido por el dolor, con su mente exhausta, emprende una búsqueda
exterior: ‘¿Quién conoce el camino para poner fin a este dolor?’ Yo digo, monjes, que el
resultado del sufrimiento se experimenta tanto en la perplejidad como en la búsqueda. “¿Y
qué es el cese del sufrimiento? El fin de la avidez es el cese del kamma. Y éste óctuple noble
sendero –recta visión, recta resolución, recta forma de hablar, recta acción, recta forma de
vida, recto esfuerzo, recta atención consciente y recta concentración- es el camino que lleva
al cese del sufrimiento.

“Ahora bien, cuando el noble discípulo conoce el sufrimiento de esta manera, conoce la
causa, por la cual el sufrimiento llega a operar de esta manera, conoce la diversidad del
sufrimiento de esta manera, conoce el resultado del sufrimiento de esta manera, conoce el
cese del sufrimiento de esta manera y conoce el sendero que lleva al cese del sufrimiento de
esta manera, entonces su conocimiento penetra esta vida santa del cese del sufrimiento.
“Monjes, es por eso que el sufrimiento debe ser conocido, la causa, por la cual el sufrimiento
llega a operar, debe ser conocida, la diversidad del sufrimiento debe ser conocida, los
resultados del sufrimiento deben ser conocidos, el cese del sufrimiento debe ser conocido y
el sendero que lleva al cese del sufrimiento debe ser conocido."

AN 6,63

{195} "Ésta es la Noble Verdad del Sufrimiento. Así, oh monjes, con relación a cosas
desconocidas por mi anteriormente, surgió la visión, surgió el entendimiento, surgió la
sabiduría, surgió la penetración y surgió la luz. Ésta Noble Verdad del Sufrimiento debe ser
completamente comprendida.... Ésta Noble Verdad del Sufrimiento ha sido completamente
comprendida... Ésta es la Noble Verdad del Origen del Sufrimiento.... Ésta Noble Verdad del
Origen del Sufrimiento debe ser erradicada... Ésta Noble Verdad del Origen del Sufrimiento
ha sido erradicada... Ésta es la Noble Verdad de la Cesación del Sufrimiento... Ésta Noble
Verdad de la Cesación del Sufrimiento debe ser realizada... Ésta Noble Verdad de la
Cesación del Sufrimiento ha sido realizada... Ésta es la Noble Verdad del Sendero que
conduce a la Cesación del Sufrimiento... Ésta Noble Verdad del Sendero que conduce a la
Cesación del Sufrimiento debe ser desarrollada... Ésta Noble Verdad del Sendero que
conduce a la Cesación del Sufrimiento ha sido desarrollada...

Mientras, oh monjes, el entendimiento y la visión con respecto a estas Cuatro Nobles


Verdades de acuerdo con la realidad bajo sus tres modos y doce aspectos no fue totalmente
puro en mí, no admití al mundo con sus divinidades, Maras y Brahmas, a la humanidad con
sus ascéticos, brahmanes y hombres, que había realizado correctamente por mí mismo la
incomparable iluminación. Cuando, oh monjes, el entendimiento y la visión con respecto a
estas Cuatro Nobles Verdades de acuerdo con la realidad bajo sus tres modos y doce aspectos
fue totalmente puro en mí, entonces admití al mundo con sus divinidades, Maras y Brahmas,
a la humanidad con sus ascéticos, brahmanes y hombres, que había realizado correctamente
por mí mismo la incomparable iluminación. Y surgió en mí el entendimiento y la visión:
‘Inconmovible es mi liberación. Éste es el último nacimiento. Ahora no hay nueva
existencia’".

Pasajes del Canon Pali

{196} "¿Y cuál es, monjes, la noble verdad del sufrimiento? Esto debería decirse: las seis
base internas de los sentidos. ¿Cuáles seis? La base del ojo, la base del oído, la base de la
lengua, la base del olfato, la base del tacto y la base de la lengua. Ésta es, monjes, la noble
verdad del sufrimiento.

SN 56,14

{197} “Monjes, todo está ardiendo. ¿Y qué es este “todo” que está ardiendo?

“El ojo está ardiendo, las formas están ardiendo, la conciencia del ojo está ardiendo, el
contacto del ojo está ardiendo, también toda la sensación placentera o penosa o la que no es
ni placentera ni penosa dependiente del ojo como su condición indispensable, está ardiendo.
¿Ardiendo con qué? Ardiendo con el fuego de la avidez, con el fuego del aborrecimiento,
con el fuego de la falsa ilusión. Os digo, está ardiendo con el nacimiento, con la vejez y la
muerte, con las penas, lamentaciones y dolores, con angustia y desesperación.

“El oído está ardiendo...


“La nariz está ardiendo…

“La lengua está ardiendo...

“El cuerpo está ardiendo...

“La mente está ardiendo, las ideas están ardiendo, la conciencia de la mente está ardiendo,
el contacto de la mente está ardiendo, también toda la sensación placentera o penosa o la que
no es ni placentera ni penosa dependiente de la mente como su condición indispensable, está
ardiendo. ¿Ardiendo con qué? Ardiendo con el fuego de la avidez, con el fuego del
aborrecimiento, con el fuego de la falsa ilusión. Os digo, está ardiendo con el nacimiento,
con la vejez y la muerte, con las penas, lamentaciones y dolores, con angustia y
desesperación.

SN 35,28

{198} "¿Y qué es, monjes, la noble verdad del sufrimiento? El nacimiento es sufrimiento, la
vejez es sufrimiento, la muerte es sufrimiento; la pena, la lamentación, el dolor, la aflicción
y la desesperanza es el sufrimiento. La asociación con algo que a uno no le gusta, es
sufrimiento, la disociación con algo que a uno le gusta, es sufrimiento, no obtener lo que uno
quiere es sufrimiento. En breve, los cinco cúmulos del apego son sufrimiento.

"¿Y qué es el nacimiento, monjes? El nacimiento de los seres dentro de las varias clases de
seres, su llegada al nacimiento, la precipitación [hacia el útero], el engendramiento, la
manifestación de los cinco cúmulos y la obtención de las bases para el contacto -esto es
llamado nacimiento.

"¿Y qué es la vejez, monjes? La vejez de los seres dentro de las varias clases de seres, su
edad senil, la caída de los dientes, la aparición de la canicie, las arrugas de la piel, el declive
de la vida y el debilitamiento de las facultades -esto es llamado vejez.

"¿Y qué es la muerte, monjes? El paso de los seres fuera de las varias clases de seres, su
fallecimiento, la disolución, la desaparición, la agonía, la terminación del tiempo, la
disolución de los cinco cúmulos y la deposición del cuerpo -esto es llamado muerte.

"¿Y qué es, monjes, el pesar? El pesar, la congoja, el tormento, el pesar interno, pesadumbre
interior de alguien que se encontró con algún infortunio o ha sido afectado por algún estado
penoso -esto se llama pesar.

"¿Y qué es, amigos, la lamentación? La queja y el lamento, quejarse y lamentarse, el clamor
y la lamentación de alguien que se encontró con algún infortunio o ha sido afectado por
algún estado lamentable -esto se llama lamentación.
"¿Y qué es, amigos, el dolor? El dolor corporal, el malestar corporal desagradable, una
sensación dolorosa producida por el contacto del cuerpo -esto se llama dolor.

"¿Y qué es, amigos, la aflicción? Aflicción mental, el malestar mental desagradable, una
sensación de aflicción producida por el contacto de la mente -esto se llama aflicción.

"¿Y qué es, monjes, la desesperanza? La angustia y el desespero, la tribulación y la


desesperación, de alguien que se encontró con algún infortunio o ha sido afectado por algún
estado penoso -esto se llama desesperanza.

"¿Y qué es, monjes, 'la asociación con algo que a uno no le gusta'? Dondequiera y siempre
que uno encuentre desplacientes, desagradables e indeseables objetos de la vista, el sonido,
el olfato, el sabor, el tacto y objetos mentales, o dondequiera y siempre que uno encuentre
quienes le desean mala fortuna a uno, el daño, las dificultades o la inseguridad; si uno se
asocia, encuentra, entra en contacto o se une a ellos, esto se llama, monjes, 'la asociación con
algo que a uno no le gusta'.

"¿Y qué es, monjes, 'la disociación con algo que a uno le gusta'? Dondequiera y siempre que
uno encuentre placenteros, agradables y deseables objetos de la vista, el sonido, el olfato, el
sabor, el tacto y objetos mentales, o dondequiera y siempre que uno encuentre quienes le
desean buena fortuna a uno, la prosperidad, el confort o la seguridad como si fuera la propia
madre o el padre, como hermano o hermana, como el amigo, colega o pariente; si uno se
asocia, encuentra, entra en contacto o se une a ellos, esto se llama, monjes, 'la disociación
con algo que a uno le gusta'.

"¿Y qué es, monjes, 'no obtener lo deseado es sufrimiento'? A los seres sujetos al nacimiento
llega este deseo: 'Ojalá no estuviéramos sujetos al nacimiento. Sería bueno que aquel
nacimiento no nos llegara'. Pero esto no es algo que se obtiene deseando y el no obtener algo
que uno quiere, es sufrimiento. A los seres sujetos a la vejez... sujetos a la enfermedad...
sujetos a la muerte... sujetos al pesar, la lamentación, el dolor, la aflicción y la desesperanza
llega este deseo: 'Ojalá no estuviéramos sujetos al pesar, la lamentación, el dolor, la aflicción
y la desesperanza. Sería bueno que aquel pesar, la lamentación, el dolor, la aflicción y la
desesperanza no nos llegaran'. Pero esto no es algo que se obtiene deseando y el no obtener
algo que uno quiere, es sufrimiento.

"¿Y qué es, monjes, 'los cinco cúmulos del apego, en breve, son sufrimiento'? He aquí hay
el cúmulo de las formas materiales afectado por el apego, el cúmulo de las sensaciones
afectado por el apego, el cúmulo de las percepciones afectado por el apego, el cúmulo de las
formaciones mentales afectado por el apego, el cúmulo de los estados de consciencia
afectado por el apego. Esto es, monjes, 'los cinco cúmulos del apego, en breve, son
sufrimiento'. Esta es, monjes, la noble verdad del sufrimiento.
DN 22

{199} "Es así, monje, estos cinco conjuntos están sujetos al apego, monje, es decir, el
conjunto de las formas sujeto al apego, el conjunto de las sensaciones sujeto al apego, el
conjunto de las percepciones sujeto al apego, el conjunto de las formaciones mentales sujeto
al apego y el conjunto de los estados de consciencia sujeto al apego."

Diciendo "Muy bien, venerable señor", aquel monje se deleitó y se regocijó en las palabras
del Bienaventurado, después de lo cual se dirigió al Bienaventurado con otra pregunta:
"Pero, venerable señor, ¿en qué se arraigan estos cinco conjuntos sujetos al apego?" "Estos
cinco conjuntos sujetos al apego se arraigan en el deseo, monje".

"Venerable señor, ¿es aquel apego lo mismo que los cinco conjuntos sujetos al apego o, el
apego es algo diferente de los cinco conjuntos sujetos al apego?"

"Monje, aquel apego no es lo mismo que los cinco conjuntos sujetos al apego pero tampoco
el apego es algo diferente de los cinco conjuntos sujetos al apego. Más bien, el deseo
excitante por ellos, es el apego aquí."

Diciendo "Muy bien, venerable señor", aquel monje se deleitó y se regocijó en las palabras
del Bienaventurado, después de lo cual se dirigió al Bienaventurado con otra pregunta:

"Pero, venerable señor, ¿puede haber una diversidad de estos deseos excitantes por los cinco
conjuntos sujetos al apego?"

"Puede haberlos, monje", respondió el Bienaventurado. "He aquí, monje, esto puede
ocurrírsele a alguien: 'Que tenga ésta forma en el futuro. Que tenga ésta sensación en el
futuro. Que tenga ésta percepción en el futuro. Que tenga éstas formaciones mentales en el
futuro. Que tenga éstos estados de conciencia en el futuro.' De esta manera, monje, puede
haber una diversidad de los deseos excitantes por los cinco conjuntos sujetos al apego."

MN 109

{200} "Y ¿por qué, monjes, lo llamáis forma? 'Esto es deformado', monjes, por lo tanto se
llama forma. Y deformado ¿por qué? Deformado por el frío, deformado por el calor,
deformado por el hambre, deformado por la sed, deformado por el contacto con las moscas,
los mosquitos, el viento, el sol y las serpientes. 'Esto es deformado', monjes, por lo tanto se
llama forma.
"Y ¿por qué, monjes, lo llamáis sensación? 'Se siente', monjes, por lo tanto se llama
sensación. Y ¿qué es lo que se siente? Se siente placer, se siente pena y se siente ni-
penaniplacer. 'Se siente', monjes, por lo tanto se llama sensación.

"Y ¿por qué, monjes, lo llamáis percepción? 'Se percibe', monjes, por lo tanto se llama
sensación. Y ¿qué es lo que se percibe? Se percibe el azul, se percibe el amarillo, se percibe
el rojo, se percibe el blanco. 'Se percibe', monjes, por lo tanto se llama percepción.

"Y ¿por qué, monjes, les llamáis formaciones mentales? 'Ellas construyen lo condicionado',
monjes, por lo tanto se llaman formaciones mentales. Y ¿qué es lo condicionado que
construyen? Construyen la forma condicionada como forma; construyen la sensación
condicionada como sensación; construyen la percepción condicionada como percepción;
construyen las formaciones mentales condicionadas como formaciones mentales; construyen
el estado de conciencia como estado de conciencia. 'Ellas construyen lo condicionado',
monjes, por lo tanto se llaman formaciones mentales.

"Y ¿por qué, monjes, lo llamáis conciencia? 'Se llega a conocer', monjes, por lo tanto se llama
conciencia. Y ¿qué es lo que se llega a conocer? Se llega a conocer lo agrio; se llega a conocer
lo amargo; se llega a conocer lo picante; se llega a conocer lo dulce, se llega a conocer lo
blando; se llega a conocer salado; se llega a conocer lo templado. 'Se llega a conocer', monjes,
por lo tanto se llama conciencia.

SN 22,7

{201} (En breve)

MN 43

{202} Forma. [Sariputta:] "Y, ¿qué es, amigos, el cúmulo del apego de la forma? Son los
cuatro grandes elementos y las formas derivadas de estos cuatro elementos.

"Y, ¿cuáles son estos cuatro grandes elementos? Estos son: el elemento de la tierra, el
elemento del agua, el elemento del fuego y el elemento del aire.

"Y, ¿qué es, amigos, el elemento de la tierra? El elemento de la tierra puede ser tanto interno
como externo. Y, ¿qué es el elemento interno de la tierra? Todo lo que internamente,
perteneciendo a uno mismo, es sólido, solidificado o adherido, es decir, cabellos, vellos,
uñas, dientes, piel, carne, tendones, huesos, riñones, corazón, hígado, membrana, bazo,
pulmones, intestinos, mesenterio, comida sin digerir, excremento o cualquier otra cosa que
internamente, perteneciendo a uno mismo, es sólida, solidificada o adherida: todo esto se
llama el elemento interno de la tierra. Ahora bien, ambos -el elemento interno de la tierra y
el elemento externo de la tierra- se constituyen simplemente en el elemento de la tierra. Y
éste debería ser visto tal como realmente es con la correcta sabiduría así: 'esto no es mío, esto
no soy yo, esto no es mi yo'. Cuando uno ve esto tal como realmente es con la correcta
sabiduría, uno llega a estar desencantado con el elemento de la tierra y hace que su mente
sea desapasionada hacia el elemento de la tierra...

"Y, ¿qué es, amigos, el elemento del agua? El elemento del agua puede ser tanto interno
como externo. Y, ¿qué es el elemento interno del agua? Todo lo que internamente,
perteneciendo a uno mismo, es líquido, aguado o adherido, es decir, bilis, flema, pus, sangre,
sudor, grasa, lágrimas, linfa, saliva, moco, sinovia, orín o cualquier otra cosa que
internamente, perteneciendo a uno mismo, es líquida, aguada o adherida: todo esto se llama
el elemento interno del agua. Ahora bien, ambos -el elemento interno del agua y el elemento
externo del agua- se constituyen simplemente en el elemento del agua. Y éste debería ser
visto tal como realmente es con la correcta sabiduría así: 'esto no es mío, esto no soy yo, esto
no es mi yo'. Cuando uno ve esto tal como realmente es con la correcta sabiduría, uno llega
a estar desencantado con el elemento del agua y hace que su mente sea desapasionada hacia
el elemento del agua...

"Y, ¿qué es, amigos, el elemento del fuego? El elemento del fuego puede ser tanto interno
como externo. Y, ¿qué es el elemento interno del fuego? Todo lo que internamente,
perteneciendo a uno mismo, es fuego, flameante o adherido, es decir, aquello por lo cual uno
está caliente, envejecido y consumado, y aquello por lo cual, aquello que se come bebe y
consume, aquello que se saborea, llega a estar completamente digerido, o cualquier otra cosa
que internamente, perteneciendo a uno mismo, es fuego, flameante o adherida: todo esto se
llama el elemento interno del fuego. Ahora bien, ambos -el elemento interno del fuego y el
elemento externo del fuego- se constituyen simplemente en el elemento del fuego. Y éste
debería ser visto tal como realmente es con la correcta sabiduría así: 'esto no es mío, esto no
soy yo, esto no es mi yo'. Cuando uno ve esto tal como realmente es con la correcta sabiduría,
uno llega a estar desencantado con el elemento del fuego y hace que su mente sea
desapasionada hacia el elemento del fuego...

"Y, ¿qué es, amigos, el elemento del aire? El elemento del aire puede ser tanto interno como
externo. Y, ¿qué es el elemento interno del aire? Todo lo que internamente, perteneciendo a
uno mismo, es aire, aireado o adherido, es decir, los vientos que se elevan, los vientos que
bajan, los vientos en el vientre, los vientos en los intestinos, los vientos que atraviesan a los
miembros, la inhalación, la exhalación, o cualquier otra cosa que internamente,
perteneciendo a uno mismo, es aire, aireado o adherida: todo esto se llama el elemento interno
del aire. Ahora bien, ambos -el elemento interno del aire y el elemento externo del aire- se
constituyen simplemente en el elemento del aire. Y éste debería ser visto tal como realmente
es con la correcta sabiduría así: 'esto no es mío, esto no soy yo, esto no es mi yo'. Cuando
uno ve esto tal como realmente es con la correcta sabiduría, uno llega a estar desencantado
con el elemento del aire y hace que su mente sea desapasionada hacia el elemento del aire.
MN 28

{203} [Sariputta:] "Ahora bien, llega el tiempo, en el cual el elemento del agua se ve
perturbado. Entonces, arrastra consigo pueblos, aldeas, ciudades, distritos y países. Llega el
tiempo, en el cual el elemento del agua del gran océano se hunde a cien leguas, a doscientas
leguas, a trescientas leguas, a cuatrocientas leguas, a quinientas leguas a seiscientas leguas y
a setecientas leguas. Llega el tiempo, en el cual el elemento del agua del gran océano se eleva
a siete palmas de profundidad, a seis... a dos palmas de profundidad, a una sola palma de
profundidad. Llega el tiempo, en el cual el elemento del agua del gran océano se eleva a siete
brazas de profundidad, a seis... a dos brazas de profundidad, a una sola braza de profundidad.
Llega el tiempo, en el cual el elemento del agua del gran océano se eleva a media braza de
profundidad, a seis... a dos tallas de profundidad, sólo a una talla de profundidad, sólo a una
rodilla de profundidad, sólo a un tobillo de profundidad. Llega el tiempo, en el cual el
elemento del agua del gran océano no es suficiente ni siquiera para mojar un dedo. Siendo
que hasta este elemento externo del agua -así de grande como es- se manifiesta como
impermanente, sujeto a la destrucción, desaparición y el cambio, ¿cuánto más este cuerpo,
que está sujeto por la codicia y dura sólo un momento? Esto no puede ser considerado como
'yo', 'mío' o 'yo soy'...

"Ahora bien, llega el tiempo, en el cual el elemento del fuego se ve perturbado. Entonces,
quema a los pueblos, las aldeas, las ciudades, los distritos y los países. Se extingue por falta
de combustible solamente cuando llega a los pastos verdes, al camino, a las rocas, al agua o
al espacio libre. Llega el tiempo, en el cual se esfuerzan para hacer fuego incluso para los
asuntos de cocina o de una mondadura cubierta. Siendo que hasta este elemento externo del
fuego -así de grande como es- se manifiesta como impermanente, sujeto a la destrucción,
desaparición y el cambio, ¿cuánto más este cuerpo, que está sujeto por la codicia y dura sólo
un momento? Esto no puede ser considerado como 'yo', 'mío' o 'yo soy'.

MN 28

{204} Sensación. [Hermana Dhammadinna:] "Hay tres clases de sensación: sensación


placentera, sensación dolorosa y sensación ni-placentera-ni-dolorosa... todo lo que es
sentido, corporal o mentalmente, como placentero y confortable, es sensación placentera.
Todo lo que es sentido, corporal o mentalmente, como penoso y doloroso, es sensación
dolorosa. Todo lo que es sentido, corporal o mentalmente, ni como placentero y ni como
doloroso, es sensación ni-placentera-ni-dolorosa... la sensación placentera es placentera
cuando la misma persiste y dolorosa cuando cambia. La sensación dolorosa es dolorosa
cuando la misma persiste y placentera cuando cambia. La sensación ni-placentera-nidolorosa
es placentera cuando hay conocimiento y dolorosa, cuando se carece del conocimiento."

MN 44
{205} "Y ¿qué son, monjes, las formaciones mentales? He aquí, monjes, existen estas seis
clases de volición: la volición en relación a las formas, la volición en relación a los sonidos,
la volición en relación a los olores, la volición en relación a los sabores, la volición en
relación a los objetos táctiles y la volición en relación a los objetos mentales. Esto se llama
las formaciones mentales.

Pasajes del Canon Pali

{208} De la misma forma que un árbol cortado crece de nuevo si sus raíces están firmes e
intactas, de igual modo, cuando permanecen las raíces del deseo sin haber sido destruidas, el
sufrimiento surge una y otra vez.

Dhp 338

{209} (En breve)

SN 42,11

{210} Codicia y su cese. "¿Y qué es, monjes, la noble verdad del origen sufrimiento? Es la
avidez, la cual trae la renovación de los seres, acompañada por deleite y lujuria, que hace
deleitarse en esto y aquello, es decir, la avidez por los placeres sensuales, la avidez por la
existencia, la avidez por la no-existencia.

"¿Y de dónde surge esta avidez, monjes, cuando se establece? Siempre que en el mundo haya
algo apetecible y agradable surge la avidez para establecerse.

"Y ¿qué es aquello que en el mundo es apetecible y agradable? El ojo es apetecible y


agradable en el mundo; es de ahí que surge la avidez y se establece; el oído.. la nariz... la
lengua... el cuerpo... la mente es apetecibley agradable en el mundo; es de ahí que surge la
avidez y se establece.

"Las formas son apetecibles y agradables en el mundo; es de ahí que surge la avidez y se
establece; los sonidos.. los olores... los sabores... los objetos tangibles... los objetos mentales
son apetecibles y agradables en el mundo; es de ahí que surge la avidez y se establece.

"Los estados de consciencia del ojo son apetecibles y agradables en el mundo; es de ahí que
surge la avidez y se establece; los estados de consciencia del oído... los estados de
consciencia de la nariz... los estados de consciencia de la lengua... los estados de consciencia
del cuerpo... los estados de consciencia de la mente son apetecibles y agradables en el mundo;
es de ahí que surge la avidez y se establece.
"El contacto del ojo es apetecible y agradable en el mundo; es de ahí que surge la avidez y
se establece; el contacto del oído... el contacto de la nariz... el contacto de la lengua... el
contacto del cuerpo... el contacto de la mente es apetecible y agradable en el mundo; es de
ahí que surge la avidez y se establece.

"La sensación surgida del contacto del ojo es apetecible y agradable en el mundo; es de ahí
que surge la avidez y se establece; la sensación surgida del el contacto del oído... del contacto
de la nariz... del contacto de la lengua... del contacto del cuerpo... del el contacto de la mente
es apetecible y agradable en el mundo; es de ahí que surge la avidez y se establece.

"La percepción surgida del contacto del ojo es apetecible y agradable en el mundo; es de ahí
que surge la avidez y se establece; la percepción surgida del el contacto del oído... del
contacto de la nariz... del contacto de la lengua... del contacto del cuerpo... del el contacto de
la mente es apetecible y agradable en el mundo; es de ahí que surge la avidez y se establece.

"La intención en relación a las formas es apetecible y agradable en el mundo; es de ahí que
surge la avidez y se establece; la intención en relación a los sonidos.. a los olores... a los
sabores... a los objetos tangibles... a los objetos mentales es apetecible y agradable en el
mundo; es de ahí que surge la avidez y se establece.

"La avidez por las formas es apetecible y agradable en el mundo; es de ahí que surge la avidez
y se establece; la avidez por los sonidos.. por los olores... por los sabores... por los objetos
tangibles... por los objetos mentales es apetecible y agradable en el mundo; es de ahí que
surge la avidez y se establece.

"La conceptualización de las formas es apetecible y agradable en el mundo; es de ahí que


surge la avidez y se establece; la conceptualización de los sonidos.. por los olores... por los
sabores... por los objetos tangibles... por los objetos mentales es apetecible y agradable en el
mundo; es de ahí que surge la avidez y se establece.

"La ponderación de las formas es apetecible y agradable en el mundo; es de ahí que surge la
avidez y se establece; la ponderación de los sonidos.. por los olores... por los sabores... por
los objetos tangibles... por los objetos mentales es apetecible y agradable en el mundo; es de
ahí que surge la avidez y se establece. Esta es, monjes, la noble verdad del origen del
sufrimiento.

"¿Y qué es, monjes, la noble verdad del cese del sufrimiento? Es el desvanecimiento
completo y el cese, el abandono, el renunciamiento, el dejar ir y el rechazo de esta misma
avidez.

"¿Y cómo, monjes, la avidez llega a ser abandonada y erradicada? Siempre que en el mundo
haya algo tentador y agradable, la avidez por eso llega a ser abandonada y erradicada.
"Y ¿qué es aquello que en el mundo es tentador y agradable? El ojo es tentador y agradable
en el mundo; la avidez por él llega a ser abandonada y erradicada; el oído.. la nariz... la
lengua... el cuerpo... la mente es tentadora y agradable en el mundo; la avidez por ella llega
a ser abandonada y erradicada.

"Las formas son tentadoras y agradables en el mundo; la avidez por ellas llega a ser
abandonada y erradicada; los sonidos.. los olores... los sabores... los objetos tangibles... los
objetos mentales con tentadores y agradables en el mundo; la avidez por ellos llega a ser
abandonada y erradicada.

"Los estados de consciencia del ojo son tentadores y agradables en el mundo; la avidez por
ellos llega a ser abandonada y erradicada; los estados de consciencia del oído... los estados
de consciencia de la nariz... los estados de consciencia de la lengua... los estados de
consciencia del cuerpo... los estados de consciencia de la mente son tentadores y agradables
en el mundo; la avidez por ellos llega a ser abandonada y erradicada..

"El contacto del ojo es tentador y agradable en el mundo; la avidez por él llega a ser
abandonada y erradicada; el contacto del oído... el contacto de la nariz... el contacto de la
lengua... el contacto del cuerpo... el contacto de la mente es tentador y agradable en el mundo;
la avidez por él llega a ser abandonada y erradicada.

"La sensación surgida del contacto del ojo es tentadora y agradable en el mundo; la avidez
por ella llega a ser abandonada y erradicada; la sensación surgida del el contacto del oído...
del contacto de la nariz... del contacto de la lengua... del contacto del cuerpo... del el contacto
de la mente es tentadora y agradable en el mundo; la avidez por ella llega a ser abandonada
y erradicada..

"La percepción surgida del contacto del ojo es tentadora y agradable en el mundo; la avidez
por ella llega a ser abandonada y erradicada; la percepción surgida del el contacto del oído...
del contacto de la nariz... del contacto de la lengua... del contacto del cuerpo... del el contacto
de la mente es tentadora y agradable en el mundo; la avidez por ella llega a ser abandonada
y erradicada.

"La intención en relación a las formas es tentadora y agradable en el mundo; la avidez por
ella llega a ser abandonada y erradicada.; la intención en relación a los sonidos.. a los olores...
a los sabores... a los objetos tangibles... a los objetos mentales es tentadora y agradable en el
mundo; la avidez por ella llega a ser abandonada y erradicada.

"La avidez por las formas es tentadora y agradable en el mundo; esta avidez llega a ser
abandonada y erradicada; la avidez por los sonidos.. por los olores... por los sabores... por
los objetos tangibles... por los objetos mentales es tentadora y agradable en el mundo; esta
avidez llega a ser abandonada y erradicada..
"La conceptualización de las formas es tentadora y agradable en el mundo; la avidez por ella
llega a ser abandonada y erradicada; la conceptualización de los sonidos.. por los olores...
por los sabores... por los objetos tangibles... por los objetos mentales es tentadora y agradable
en el mundo; la avidez por ella llega a ser abandonada y erradicada.

"La ponderación de las formas es tentadora y agradable en el mundo; la avidez por ella llega
a ser abandonada y erradicada.; la ponderación de los sonidos.. por los olores... por los
sabores... por los objetos tangibles... por los objetos mentales es tentadora y agradable en el
mundo; la avidez por ella llega a ser abandonada y erradicada. Esta es, monjes, la noble
verdad del cese del sufrimiento.

DN 22

{211} “¿Y cuál es el método de los nobles que ha de ser visualizado correctamente y bien
penetrado?

“Este es el caso, hombre hogareño, del noble discípulo que reflexiona así: ‘Cuando esto es,
aquello es. Con el surgimiento de esto, surge aquello. Cuando esto no es, aquello no es. Con
el cese de esto, cesa aquello’.

“Es decir, con la ignorancia como condición, surgen las formaciones mentales; con las
formaciones mentales como condición, surge la conciencia; con la conciencia como
condición, surge el nombre y la forma; con el nombre y la forma como condición, surge la
séxtuple base de los sentidos; con la séxtuple base de los sentidos, surge el contacto; con el
contacto como condición, surge la sensación; con la sensación como condición, surge avidez;
con la avidez como condición, surge el apego; con el apego como condición, surge la
existencia; con la existencia como condición, surge el nacimiento; con el nacimiento como
condición, surge la vejez y la muerte, la pena, el lamento, el dolor, el pesar y la desesperanza.
Éste es el origen de toda esta masa del sufrimiento.

“Pero con la total desaparición y el cese de la ignorancia, llega el cese de las formaciones
mentales; con el cese de las formaciones mentales, llega el cese de la conciencia; con el cese
de la conciencia, llega el cese del nombre y la forma; con el cese del nombre y la forma, llega
el cese de la séxtuple base de los sentidos; con el cese de la séxtuple base de los sentidos,
llega el cese del contacto; con el cese del contacto, llega el cese de la sensación; con el cese
de la sensación, llega el cese de la avidez; con el cese de la avidez, llega el cese del apego;
con el cese del apego, llega el cese de la existencia; con el cese de la existencia, llega el cese
del nacimiento; con el cese del nacimiento, llega el cese de la vejez y la muerte, la pena, el
lamento, el dolor, el pesar y la desesperanza. Éste es el cese de toda esta masa del sufrimiento.

“Este es el método de los nobles que ha de ser visualizado correctamente y bien penetrado.
AN 10,92

{212} (En breve)

SN 35,107

{213} En esta ocasión, cierto monje se acercó al Bienaventurado, le rindió homenaje, se


sentó a un lado y le dijo:

"Venerable señor, se dijo 'el mundo, el mundo'. ¿De qué manera, venerable señor, se dijo 'el
mundo?'"

"Porque es desintegración, monje, se llama el mundo. Y, ¿qué es, monje, la desintegración?


El ojo, monje, es desintegración, las formas son desintegración, la conciencia del ojo es
desintegración, el contacto del ojo es desintegración y cualquier sensación que surge con el
contacto del ojo como condición -sea placentera, dolorosa o ni placentera ni dolorosa- esto
también es desintegración.

"El oído, monje, es desintegración... La nariz es desintegración... La lengua es


desintegración... El cuerpo es desintegración... La mente es desintegración, los objetos
mentales son desintegración, la conciencia de la mente es desintegración, el contacto de la
mente es desintegración y cualquier sensación que surge con el contacto de la mente como
condición -sea placentera, dolorosa o ni placentera ni dolorosa- esto también es
desintegración. Porque es desintegración, monje, se llama el mundo."

SN 35,82

{214} [Ananda:] "Amigos, cuando el Bienaventurado se levantó de su asiento y entró en su


morada después de haberos ofrecido la breve síntesis sin exponeros el significado en detalle
de 'Monjes, declaro que el fin del mundo no puede ser conocido, visto ni alcanzado a través
de un viaje. Aún así, monjes, también declaro que sin llegar al fin del mundo, no se puede
poner el fin del sufrimiento', yo entiendo que el significado en detalle de esta breve síntesis
es la siguiente: aquello en el mundo, mediante el cual uno es el perceptor del mundo, que
concibe el mundo, se llama el mundo en la Disciplina de un Noble. Y, ¿qué es amigos,
aquello en el mundo, mediante el cual uno es el perceptor del mundo, que concibe el mundo?
El ojo es aquello en el mundo, mediante el cual uno es el perceptor del mundo, que concibe
el mundo. El oído... La nariz... La lengua... El cuerpo... La mente es aquello en el mundo,
mediante el cual uno es el perceptor del mundo, que concibe el mundo. Esto en el mundo,
mediante el cual uno es el perceptor del mundo, que concibe el mundo, es lo que se llama el
mundo en la Disciplina de un Noble."
SN 35,116

{215} (En breve)

SN 12,33

{216} [Sariputta:] Ahora bien, esto ha sido dicho por el Bienaventurado: 'alguien que ve el
origen dependiente, ve el Dhamma; alguien que ve le Dhamma, ve el origen dependiente'

MN 28

{217} (En breve)

SN 12,20

{218} “¿Y qué es, monjes, la existencia? He aquí, hay tres clases de existencia: la existencia
en la esfera de los sentidos, la existencia en la esfera de las formas y la existencia en la esfera
sin formas. Todo esto es llamado ‘la existencia’.

“¿Y qué es, monjes, el apego? He aquí, hay cuatro clases de apego: apego a los placeres
sensuales, apego a los puntos de vista, apego a preceptos y prácticas, apego a la doctrina del
alma. Todo esto es llamado ‘el apego’.

“¿Y qué es, monjes, la avidez? He aquí, hay seis clases de avidez: avidez por las formas,
avidez por los sonidos, avidez por los olores, avidez por los sabores, avidez por los objetos
táctiles, avidez por los fenómenos mentales. Todo esto es llamado ‘la avidez’.

“¿Y qué es, monjes, la sensación? He aquí, hay seis clases de sensación: sensación que surge
por el contacto con el ojo, sensación que surge por el contacto con el oído, sensación que
surge por el contacto con la nariz, sensación que surge por el contacto con la lengua,
sensación que surge por el contacto con el cuerpo, sensación que surge por el contacto con
la mente. Todo esto es llamado ‘la sensación’.

“¿Y qué es, monjes, el contacto? He aquí, hay seis clases de contacto: contacto del ojo,
contacto del oído, contacto de la nariz, contacto de la lengua, contacto del cuerpo, contacto
de la mente. Todo esto es llamado ‘el contacto’.

“¿Y qué es, monjes, la séxtuple base? La base del ojo, la base del oído, la base de la nariz, la
base de la lengua, la base del cuerpo, la base de la mente. Todo esto es llamado ‘la séxtuple
base’.

“¿Y qué son, monjes, el nombre y la forma? La sensación, la percepción, la volición, el


contacto y la atención: Todo esto es llamado ‘el nombre’. Los cuatro grandes elementos y
las formas que derivan de ellos, son llamados ‘forma’. Este nombre, en conjunto con esta
forma, son llamados ‘el nombre y la forma’.

“¿Y qué es, monjes, la conciencia? He aquí, hay seis clases de conciencia: conciencia del
ojo, conciencia del oído, conciencia de la nariz, conciencia de la lengua, conciencia del
cuerpo, conciencia de la mente. Todo esto es llamado ‘la conciencia’.

“¿Y qué son, monjes, las formaciones volitivas? He aquí, hay tres clases de formaciones
volitivas: formaciones volitivas corporales, formaciones volitivas verbales y formaciones
volitivas mentales. Todo esto es llamado ‘las formaciones volitivas’.

“¿Y qué es, monjes, la ignorancia? No conocer el sufrimiento, no conocer el origen del
sufrimiento, no conocer el cese del sufrimiento y no conocer el sendero que conduce al cese
del sufrimiento. Todo esto es llamado ‘la ignorancia’".

SN 12,2

{219} (En breve)

SN 12,19

{220} (En breve)

AN 3,76

{221} He aquí lo que yo he oído decir. Cierta vez el bhagavant se encontraba en la localidad
de Uruvela, en la orilla del río Nerañjara, bajo el árbol de la Iluminación, habiendo recién
alcanzado la condición de buddha. En aquella ocasión el bhagavant estuvo sentado durante
una semana en una misma postura pallanka experimentando la felicidad de la Liberación.

Y el bhagavant, al fin de esa semana, habiendo salido de aquel samadhi, contempló el


mundo con su mirada de buddha, vio a los seres torturados por numerosos sufrimientos,
consumiéndose en numerosos fuegos nacidos de la pasión, del odio, del error.

El bhagavant, comprendiendo el sentido, dijo en aquella ocasión este udana:

Este mundo sumido en el sufrimiento, dominado por la sensualidad, proclama

que su ser es dolor.

De cualquier manera que uno imagine algo

eso resulta diferente. El mundo es


inestable, sujeto a la existencia dominado

por la existencia, goza con la existencia.

Lo que lo hace gozar, es para él fuente de temor,

aquello por lo que teme es fuente de sufrimiento.

La vida religiosa es practicada para librarse de la

existencia.

Yo os digo que no se han liberado de la existencia ninguno de aquellos samanes o brahmanes


que han sostenido que la liberación de la existencia se produce mediante la existencia.
También digo que no han escapado de la existencia ninguno de aquellos samanes o
brahmanes que han sostenido que con la cesación de la vida se escapa a la existencia.

Este sufrimiento se produce a causa del apego. El sufrimiento no se produce una vez
destruido todo apego. Mira este mundo. La mayor parte de los seres están dominados por la
ignorancia, gozan con las manifestaciones de la existencia, no se han liberado. Toda
existencia en todo respecto, totalmente, es impermanente, dolorosa, sometida al cambio.
Cesa el deseo por la existencia, en aquel que, mediante el correcto conocimiento, ve esto de
acuerdo con la verdad y no se regocija con la cesación de la vida. Con la completa
destrucción de los deseos se produce la total eliminación de las pasiones, la cesación, el
nirvana.

No existe reencarnación para el bhikkhu

que, desapegándose de todo, ha

alcanzado el nirvana: Ha vencido a

Mara, ganó la batalla y escapó a toda

existencia.

Ud 3,10

{222} (En breve)

Iti 49
{223} [Visakha] "Pero, ¿por qué, señora, la inhalación y la exhalación es la formación
corporal? ¿Por qué el pensamiento aplicado y sostenido es la formación verbal? Y, ¿por qué
la percepción y la sensación constituyen la formación mental?"

[Hermana Dhammadinna] "Amigo Visakha, la inhalación y la exhalación son [elementos]


corporales, son estados ligados al cuerpo; es por eso que la inhalación y la exhalación es la
formación corporal. Primero uno aplica el pensamiento y sostiene el pensamiento, y
consecuentemente, uno irrumpe en el habla; es por eso que el pensamiento aplicado y
sostenido es la formación verbal. La percepción y la sensación son estados ligados a la mente;
es por eso que la percepción y la sensación constituyen la formación mental."

MN 44

{224} (En breve)

SN 12,25

{225} (En breve)

SN 12,51

{226} "Monjes, lo que uno intenta, lo que uno planifica y todo aquello hacia lo cual uno
tiende, llega a convertirse en base para la conservación de la conciencia. Cuando existe esta
base, existe el soporte para el establecimiento de la conciencia. Cuando la conciencia está
establecida y llega a expandirse, se produce la futura renovación de la existencia, el futuro
nacimiento y la vejez y la muerte, el dolor, el lamento, la pena, el displacer y la desesperanza
llegan a existir. Así se origina toda esta masa del sufrimiento.

"Monjes, y si uno no intenta y si uno no planifica pero aún tiende hacia algo, esto llega a
convertirse en base para la conservación de la conciencia. Cuando existe esta base, existe el
soporte para el establecimiento de la conciencia. Cuando la conciencia está establecida y
llega a expandirse, se produce la futura renovación de la existencia, el futuro nacimiento y la
vejez y la muerte, el dolor, el lamento, la pena, el displacer y la desesperanza llegan a existir.
Así se origina toda esta masa del sufrimiento.

"Pero, monjes, cuando uno no intenta, cuando uno no planifica y tampoco tiende hacia algo,
no existe la base para la conservación de la conciencia. Cuando no existe esta base, tampoco
existe el soporte para el establecimiento de la conciencia. Cuando la conciencia no está
establecida ni llega a expandirse, no se produce la futura renovación de la existencia ni futuro
nacimiento y la vejez y la muerte, el dolor, el lamento, la pena, el displacer y la desesperanza,
cesan. Así cesa toda esta masa del sufrimiento."
SN 12,38

{227} "¿Y qué es la ignorancia, cuál es el origen de la ignorancia, cuál es el cese de la


ignorancia y cuál es la vía que conduce al cese de la ignorancia? El no saber acerca del
sufrimiento, el no saber acerca del origen del sufrimiento, el no saber acerca del cese del
sufrimiento y el no saber acerca de la vía que conduce al cese del sufrimiento - a esto se le
llama ignorancia. Con el surgimiento de las corrupciones se da el origen de la ignorancia.
Con el cese de las corrupciones se da el cese de la ignorancia. La vía que conduce al cese de
la ignorancia no es más que este Noble Óctuple Sendero; éste es, entendimiento correcto ...
concentración correcta.

"Cuando un discípulo noble ha entendido así la ignorancia, el origen de la ignorancia, el cese


de la ignorancia y la vía que conduce al cese de la ignorancia ... él, aquí y ahora pone fin al
sufrimiento. De esa forma también un discípulo noble es de entendimiento correcto ... y ha
llegado a este Dhamma verdadero...

"¿Y qué son las corrupciones, cuál es el origen de las corrupciones, cuál es el cese de las
corrupciones y cuál es la vía que conduce al cese de las corrupciones? Existen tres
corrupciones: la corrupción del deseo sensorial, la corrupción de la existencia y la corrupción
de la ignorancia. Con el surgimiento de la ignorancia se da el origen de las corrupciones. Con
el cese de la ignorancia se da el cese de las corrupciones. La vía que conduce al cese de las
corrupciones no es más que este Noble Óctuple Sendero; éste es, entendimiento correcto,
intención correcta, lenguaje correcto, acción correcta, modo de subsistencia correcto,
esfuerzo correcto, atención correcta y concentración correcta.

"Cuando un discípulo noble ha entendido así las corrupciones, el origen de las corrupciones,
el cese de las corrupciones y la vía que conduce al cese de las corrupciones, abandona por
completo la tendencia subyacente a la sensualidad, anula la tendencia subyacente a la
aversión, extirpa la tendencia subyacente a la opinión y presunción ‘yo soy’, abandonando
la ignorancia y haciendo surgir el verdadero conocimiento, él, aquí y ahora pone fin al
sufrimiento. De esa forma también un discípulo noble es el entendimiento correcto, cuyo
entendimiento es recto, que posee perfecta confianza en el Dhamma y ha llegado a este
Dhamma verdadero."

MN 9

{228} "¿Cómo es eso, amigo Sariputta: es la vejez-y-muerte creada por uno mismo o es
creada por otro, creada por ambos, por uno mismo y por otro, o surge fortuitamente no siendo
creada ni por uno mismo ni por otro?"

"Amigo Kotthita, la vejez-y-muerte no es creada por uno mismo ni es creada por otro, no es
creada por ambos, por uno mismo y por otro, y tampoco surge fortuitamente no siendo creada
ni por uno mismo ni por otro. Más bien, con el nacimiento como condición, la vejez-y-muerte
[llega a ser].

"Y, ¿cómo es eso, amigo Sariputta: es la existencia... el apego... la avidez... la sensación... el


contacto... la séxtuple base de los sentidos... el nombre-y-forma creado por uno mismo o es
creado por otro, creado por ambos, por uno mismo y por otro, o surge fortuitamente no siendo
creado ni por uno mismo ni por otro?"

"Amigo Kotthita, el nombre-y-forma no es creado por uno mismo ni es creado por otro, no
es creado por ambos, por uno mismo y por otro, y tampoco surge fortuitamente no siendo
creado ni por uno mismo ni por otro. Más bien, con la conciencia como condición, el
nombrey-forma [llega a ser].

"Y, ¿cómo es eso, amigo Sariputta: es la conciencia creada por uno mismo o es creada por
otro, creada por ambos, por uno mismo y por otro, o surge fortuitamente no siendo creada ni
por uno mismo ni por otro?"

"Amigo Kotthita, la conciencia no es creada por uno mismo ni es creada por otro, no es
creada por ambos, por uno mismo y por otro, y tampoco surge fortuitamente no siendo creada
ni por uno mismo ni por otro. Más bien, con el nombre-y-forma como condición, la
conciencia [llega a ser].

"Ahora bien, nosotros entendemos la declaración del Venerable Sariputta así: 'el
nombreyforma no es creado por uno mismo... Más bien, con la conciencia como condición,
el nombre-y-forma [llega a ser].' También entendemos la declaración del Venerable Sariputta
así: 'la conciencia no es creada por uno mismo... Más bien, con el nombre-y-forma como
condición, la conciencia [llega a ser]. Pero, ¿cómo, amigo Sariputta, debería ser visto el
significado de esta declaración?"

"Bien, amigo, entonces voy a hacer un símil para ti, ya que la gente inteligente comprende
el significado de la declaración a través del símil. Al igual que dos gavillas de juncos pueden
estar inclinados uno hacia el otro, así también con el nombre-y-forma como condición, la
conciencia [llega a ser]; con la conciencia como condición, el nombre-yforma [llega a ser];
con el nombre-y-forma como condición, la séxtuple base de los sentidos [llega a ser]; con la
séxtuple base de los sentidos, el contacto... Así es el origen de todo ese montón de
insatisfacción.

"Si alguien, amigo, removiera una de estas gavillas de juncos, la otra caería; y si alguien
removiera la otra, caería la primera. Así también con el cese del nombre-y-forma llega el
cese de la conciencia; con el cese de la conciencia llega el cese del nombre-y-forma; con el
cese del nombre-y-forma llega el cese de la séxtuple base de los sentidos; con el cese de la
séxtuple base de los sentidos llega el cese del contacto... Así es el cese de todo ese montón
de insatisfacción."

SN 12,67

{229} La humanidad está encadenada a la idea


'yo soy el que actúa”; está
adherida a la idea 'otro es
el que actúa'.
No se han dado cuenta

ni han visto que esa es la espina. Pero


no existe:
'yo soy el que actúa” ni 'otro
es el que actúa', para aquel
que, cautamente, ha visto
esta espina.

La humanidad está llena de vanidad,


atada por la vanidad, encadenada por la
vanidad; y utilizando airadas palabras en
la defensa de sus doctrinas no escapa al
ciclo de las reencarnaciones.

Ud 6,6

{230} "Monjes, con la ignorancia como condición, [llegan a ser] las formaciones mentales,
con las formaciones mentales como condición, los estados de conciencia, con los estados de
conciencia como condición, el nombre y la forma, con el nombre y la forma como condición,
la séxtuple base de los sentidos, con la séxtuple base de los sentidos como condición, el
contacto, con el contacto como condición, la sensación, con la sensación como condición, la
avidez, con la avidez como condición, el apego, con el apego como condición, la existencia,
con la existencia como condición, el nacimiento, con el nacimiento como condición, la vejez
y la muerte, lamentación y dolor, pena, angustia y desesperanza. Éste es el origen de toda
esta masa del sufrimiento."

Cuando esto fue ducho, cierto monje dijo al Bienaventurado: "Y ¿qué es, venerable señor, la
vejez y la muerte, para quién es la vejez y la muerte?"

"No es una pregunta válida", respondió el Bienaventurado. Monje, sea que uno diga '¿qué es
la vejez y la muerte, para quién es la vejez y la muerte?' o que diga 'la vejez y la muerte es
una cosa y alguien para quien es la vejez y la muerte, otra', ambas aserciones tienen el mismo
significado y sólo difieren en la letra. Cuando existe el punto de vista, [según el cual] 'el alma
y el cuerpo son lo mismo', no se está viviendo la vida santa; y cuando existe el punto de vista,
[según el cual] 'el alma es una cosa y el cuerpo, otra', tampoco se está viviendo la vida santa.
Sin haber girado hacia ninguno de estos extremos, el Tathagata enseña el Dhamma del
medio: 'con el nacimiento como condición [llega a ser] la vejez y la muerte'".

"Y ¿qué es, venerable señor, el nacimiento, para quién es el nacimiento?"

"No es una pregunta válida", respondió el Bienaventurado. Monje, sea que uno diga '¿qué es
el nacimiento, para quién es el nacimiento?' o que diga 'el nacimiento es una cosa y alguien
para quien es el nacimiento, otra', ambas aserciones tienen el mismo significado y sólo
difieren en la letra. Cuando existe el punto de vista, [según el cual] 'el alma y el cuerpo son
lo mismo', no se está viviendo la vida santa; y cuando existe el punto de vista, [según el cual]
'el alma es una cosa y el cuerpo, otra', tampoco se está viviendo la vida santa. Sin haber
girado hacia ninguno de estos extremos, el Tathagata enseña el Dhamma del medio: 'con la
existencia como condición [llega a ser] el nacimiento'".

"Y ¿qué es, venerable señor, la existencia, para quién es la existencia?... ¿Qué es el apego,
para quién es el apego?... ¿Qué es la avidez, para quién es la avidez?... ¿Qué es la sensación,
para quién es la sensación?... ¿Qué es el contacto, para quién es el contacto?... ¿Qué son las
seis bases de los sentidos, para quién son las seis bases de los sentidos?... ¿Qué es la
conciencia, para quién es la conciencia?... ¿Qué es el nombre y la forma, para quién es el
nombre y la forma?... ¿Qué son las formaciones mentales, para quién son las formaciones
mentales?"

"No es una pregunta válida", respondió el Bienaventurado. Monje, sea que uno diga '¿qué
son las formaciones mentales, para quién son las formaciones mentales?' o que diga 'las
formaciones mentales son una cosa y alguien para quien son las formaciones mentales, otra',
ambas aserciones tienen el mismo significado y sólo difieren en la letra. Cuando existe el
punto de vista, [según el cual] 'el alma y el cuerpo son lo mismo', no se está viviendo la vida
santa; y cuando existe el punto de vista, [según el cual] 'el alma es una cosa y el cuerpo, otra',
tampoco se está viviendo la vida santa. Sin haber girado hacia ninguno de estos extremos, el
Tathagata enseña el Dhamma del medio: 'con la ignorancia como condición [llegan a ser] las
formaciones mentales'".

(De manera similar se tratan los requisitos neserarios para hacer desvanecer las formaciones.)

SN 12,35

{231} [Ananda:] “¡Esto es maravilloso, venerable señor, esto es asombroso, venerable señor!
¡Qué profundo es este surgimiento dependiente y qué profunda apariencia tiene! Y aún así,
¡con qué claridad puedo percibirlo!”

“No digas esto, Ananda. No digas así. Es profundo este surgimiento dependiente y tiene una
apariencia profunda. Pero, es por falta del entendimiento y penetración del Dhamma, que
esta generación se parece a una enredada maraña, a un nudo de la bola de cordeles, a unas
cañas y juncos enmarañados, que no puede traspasar el samsara, los planos de privaciones,
los planos de aflicción y el mal destino.

“Si alguien preguntara, Ananda, ‘¿hay aquí algún requisito para el surgimiento de la vejez y
la muerte?’, debería respondérsele: ‘Sí, lo hay’.

“Y si alguien preguntara: ‘¿Cuál es el requisito que hace surgir la vejez y la muerte?’, debería
respondérsele: ‘el nacimiento es el requisito para que surja la vejez y la muerte’.

“Si alguien preguntara, Ananda, ‘¿hay aquí algún requisito para el surgimiento del
nacimiento?’, debería respondérsele: ‘Sí, lo hay’.

“Y si alguien preguntara: ‘¿Cuál es el requisito que hace surgir el nacimiento?’, debería


respondérsele: ‘la existencia es el requisito para que surja el nacimiento’.

“Si alguien preguntara, Ananda, ‘¿hay aquí algún requisito para el surgimiento de la
existencia?’, debería respondérsele: ‘Sí, lo hay’.

“Y si alguien preguntara: ‘¿Cuál es el requisito que hace surgir la existencia?’, debería


respondérsele: ‘el apego es el requisito para que surja la existencia’.

“Si alguien preguntara, Ananda, ‘¿hay aquí algún requisito para el surgimiento del apego?’,
debería respondérsele: ‘Sí, lo hay’.

“Y si alguien preguntara: ‘¿Cuál es el requisito que hace surgir el apego?’, debería


respondérsele: ‘la avidez es el requisito para que surja el apego’.

“Si alguien preguntara, Ananda, ‘¿hay aquí algún requisito para el surgimiento de la avidez?’,
debería respondérsele: ‘Sí, lo hay’.

“Y si alguien preguntara: ‘¿Cuál es el requisito que hace surgir la avidez?’, debería


respondérsele: ‘la sensación es el requisito para que surja la avidez’.

“Si alguien preguntara, Ananda, ‘¿hay aquí algún requisito para el surgimiento de la
sensación?’, debería respondérsele: ‘Sí, lo hay’.
“Y si alguien preguntara: ‘¿Cuál es el requisito que hace surgir la sensación?’, debería
respondérsele: ‘el contacto es el requisito para que surja la sensación’.

“Si alguien preguntara, Ananda, ‘¿hay aquí algún requisito para el surgimiento del
contacto?’, debería respondérsele: ‘Sí, lo hay’.

“Y si alguien preguntara: ‘¿Cuál es el requisito que hace surgir el contacto?’, debería


respondérsele: ‘lel nombre y la forma es el requisito para que surja el contacto’.

“Si alguien preguntara, Ananda, ‘¿hay aquí algún requisito para el surgimiento del nombre
y la forma?’, debería respondérsele: ‘Sí, lo hay’.

“Y si alguien preguntara: ‘¿Cuál es el requisito que hace surgir el nombre y la forma?’,


debería respondérsele: ‘el estado de conciencia es el requisito para que surja el nombre y la
forma’.

“Si alguien preguntara, Ananda, ‘¿hay aquí algún requisito para el surgimiento del estado de
conciencia?’, debería respondérsele: ‘Sí, lo hay’.

“Y si alguien preguntara: ‘¿Cuál es el requisito que hace surgir el estado de conciencia?’,


debería respondérsele: ‘el nombre y la forma es el requisito para que surja el esyado de
conciencia’.

“De esta manera, Ananda, del nombre y la forma como requisito, surge el estado de
conciencia; del estado de conciencia como requisito, surge el nombre y la forma; del nombre
y la forma como requisito, surge el contacto; del contacto como requisito, surge la sensación;
de la sensación como requisito, surge la avidez; de la avidez como requisito, surge el apego;
del apego como requisito, surge la existencia; de la existencia como requisito, surge el
nacimiento; del nacimiento como requisito, surge la vejez, la muerte, la pena, el dolor, el
lamento, la aflicción y la desesperanza. Éste es el origen de toda esta masa del sufrimiento.

DN 15

{232} "Monjes, la conciencia llega a ser en dependencia del elemento bivalente. Y ¿cómo,
monjes, la conciencia llega a ser en dependencia del elemento bivalente? En dependencia del
ojo y las formas surge la conciencia del ojo. El ojo es impermanente, cambiante y se convierte
en otra cosa; las formas son impermanentes, cambiantes y se convierten en otra cosa. Así,
este elemento bivalente es movedizo y tambaleante, impermanente, cambiante y se convierte
en otra cosa.

"La conciencia del ojo es impermanente, cambiante y se convierte en otra cosa. La causa y
la condición del surgimiento de la conciencia del ojo también es impermanente, cambiante y
se convierte en otra cosa. Monjes, cuando la conciencia del ojo surge a partir de una
condición que es impermanente, ¿cómo podría ser permanente?

[De manera similar se trata el oído, la nariz, la lengua, el cuerpo y la mente.]

SN 35,93

{233} "Monjes, alguien que está ocupado no está liberado y alguien que se desocupa, se
libera. El estado de conciencia, monjes, mientras existe, puede estar ocupado con la forma;
basado sobre la forma, establecido sobre la forma, salpicado con el deleite, podría madurar,
incrementar y expandirse. Además, el estado de conciencia, mientras existe, puede estar
ocupado con la sensación... ocupado con la percepción... ocupado con las formaciones
mentales; basado sobre las formaciones mentales, establecido sobre las formaciones
mentales, salpicado con el deleite, podría madurar, incrementar y expandirse.

"Monjes, aunque alguien dijera: 'a parte de la forma, a parte de la sensación, a parte de la
percepción, a parte de las formaciones mentales puedo conocer el llegar y el desaparecer del
estado de conciencia, su fin, su renacimiento, su maduración, su incremento y su expansión'
-esto es imposible.

"Monjes, si el monje hubo abandonado la codicia por el elemento de la forma, con el


abandono de la codicia, está cortada la base: no existe el soporte para establecer un estado
de conciencia. Además, si él hubo abandonado la codicia por el elemento de la sensación...
por el elemento de la percepción... por el elemento de las formaciones mentales... por el
elemento del estado de conciencia, con el abandono de la codicia, está cortada la base: no
existe el soporte para establecer un estado de conciencia.

"Cuando no se establece el estado de conciencia, no hay maduración ni generación alguna,


sólo liberación. Siendo liberado, está firme; estando firme, está contento y no agitado; no
estando agitado, personalmente alcanza el Nibbana, y entiende: 'el nacimiento está destruido,
la vida santa ha sido vivida, lo que estaba por hacer se ha realizado, y he aquí no hay más
futuros estados de existencia'".

SN 22,53

{234} "Monjes, he aquí que existen estas cuatro clases de nutrientes para la conservación de
los seres que ya llegaron a existir y la asistencia de aquellos que aún están por llegar a existir.
Y ¿cuáles son estas cuatro? El nutriente del comestible de la comida, ordinaria y refinada;
segundo, el contacto; tercero, la volición mental y cuarto, la conciencia. Éstas son, monjes,
las cuatro clases de nutrientes para la conservación de los seres que ya llegaron a existir y la
asistencia de aquellos que aún están por llegar a existir.
"Monjes, si existe la codicia por el nutriente del comestible de la comida, si existe el deleite
y si existe la codicia, la conciencia llega a establecerse y llega a expandirse. Siempre que la
conciencia llega a establecerse y llega a expandirse, descienden el nombre y la forma. Donde
descienden el nombre y la forma, se expanden las formaciones mentales. Donde se expanden
las formaciones mentales, está la producción de la futura renovada existencia. Donde está la
producción de la futura renovada existencia, está el futuro nacimiento, la vejez y la muerte.
Donde está el futuro nacimiento, la vejez y la muerte -yo declaro- esto está acompañado por
el dolor, la angustia y la desesperanza.

"Imaginad, monjes a un artista o pintor que esté usando el tinte, la laca, la cúrcuma, el índigo
o el carmesí para crear la figura de un hombre o de una mujer completo en todos los detalles
en una tabla bien pulida, en la pared o en un lienzo. De la misma manera, si existe la codicia
por el nutriente del comestible de la comida, por el nutriente del contacto, por el nutriente de
la volición mental y o por el nutriente de la conciencia, si existe el deleite y si existe la
codicia, la conciencia llega a establecerse y llega a expandirse. Siempre que la conciencia
llega a establecerse y llega a expandirse, descienden el nombre y la forma. Donde descienden
el nombre y la forma, se expanden las formaciones mentales. Donde se expanden las
formaciones mentales, está la producción de la futura renovada existencia. Donde está la
producción de la futura renovada existencia, está el futuro nacimiento, la vejez y la muerte.
Donde está el futuro nacimiento, la vejez y la muerte -yo declaro- esto está acompañado por
el dolor, la angustia y la desesperanza.

"Monjes, si no existe la codicia por el nutriente del comestible de la comida, o por el nutriente
del contacto, o por el nutriente de la volición mental o por el nutriente de la conciencia, si no
existe el deleite ni si existe la codicia, la conciencia no llega a establecerse ni llega a
expandirse. Cuando la conciencia no llega a establecerse ni llega a expandirse, no descienden
el nombre y la forma. Donde no descienden el nombre y la forma, no se expanden las
formaciones mentales. Donde se expanden las formaciones mentales, no está la producción
de la futura renovada existencia. Donde no está la producción de la futura renovada
existencia, no está el futuro nacimiento, la vejez ni la muerte. Donde no está el futuro
nacimiento, la vejez ni la muerte -yo declaro- esto está sin el dolor, sin la angustia y sin la
desesperanza.

"Imaginad, monjes, a una casa o una sala con el techo de dos aguas y con las ventanas abiertas
hacia el lado norte, este y oeste. Cuando se levanta el sol y el rayo de luz entra por la ventana,
¿dónde llega a establecerse?"

"En la pared del lado occidental, Venerable Señor".

"Pero, y si no habría la pared del lado occidental, ¿dónde llegaría a establecerse?" "En la

tierra, Venerable Señor".


"Y si allí no habría tierra, ¿dónde llegaría a establecerse?" "En el

agua, Venerable Señor".

"Y si allí no habría agua, ¿dónde llegaría a establecerse?" "No se

establecería en ninguna parte, Venerable Señor".

"De la misma manera, monjes, "Monjes, si no existe la codicia por el nutriente del comestible
de la comida, o por el nutriente del contacto, o por el nutriente de la volición mental o por el
nutriente de la conciencia, si no existe el deleite ni si existe la codicia, la conciencia no llega
a establecerse ni llega a expandirse. Cuando la conciencia no llega a establecerse ni llega a
expandirse, no descienden el nombre y la forma. Donde no descienden el nombre y la forma,
no se expanden las formaciones mentales. Donde se expanden las formaciones mentales, no
está la producción de la futura renovada existencia. Donde no está la producción de la futura
renovada existencia, no está el futuro nacimiento, la vejez ni la muerte. Donde no está el
futuro nacimiento, la vejez ni la muerte -yo declaro- esto está sin el dolor, sin la angustia y
sin la desesperanza."

SN 12,64

{235} (En breve)

DN 11

{236}

Donde el agua, la tierra, el fuego, el aire no encuentran donde

posarse, Allí no brilla estrella alguna, no se muestra ningún sol allí,

Allí no reluce ninguna luna, no se ve allí oscuridad. Luego cuando el

sabio, el brahmán, por la sabiduría de su propio ser ha penetrado (en

la verdad), de la forma y de la no-forma, del placer y del dolor él está

libre.

Ud 1,10

{237} Entonces, el Venerable Ananda, junto con el grupo de aquellos monjes, se acercó al
Bienaventurado, al pie del auspicioso árbol sala. Habiéndose acercado, rindieron homenaje
al Bienaventurado y se sentaron a un lado. Entonces, el Bienaventurado instruyó, exhortó,
inspiró y regocijó a aquellos monjes con la plática del Dhamma.

En esta ocasión, en la mente de cierto monje surgió esta reflexión: “¿Cómo debería uno
conocer, cómo debería uno ver, para que ocurriera inmediatamente la destrucción de las
impurezas?”

El Bienaventurado, habiendo conocido con su propia mente la reflexión que surgió en la


mente de aquel monje, se dirigió a los monjes con estas palabras:

“Monjes, este Dhamma ha de ser enseñando por mí discriminadamente. Los cuatro


establecimientos de la atención consciente han de ser enseñados por mí discriminadamente.
Los cuatro rectos esfuerzos… las cuatro bases del poder espiritual… Las cinco facultades
espirituales… Los cinco poderes… Los siete factores de iluminación… El Noble Óctuple
Sendero ha de ser enseñado por mí discriminadamente. Monjes, en relación al Dhamma que
ha sido enseñando por mí, en la mente de cierto monje surgió esta reflexión: ‘¿Cómo debería
uno conocer, cómo debería uno ver, para que ocurriera inmediatamente la destrucción de las
impurezas?’

“¿Y cómo, monjes, uno debería conocer, cómo uno debería ver, para que ocurriera
inmediatamente la destrucción de las impurezas?

“He aquí, monjes, alguien que es mundano y no instruido, que no dirige su mirada hacia los
nobles, inepto y no disciplinado en su Dhamma, que no dirige su mirada hacia las personas
superiores, inepto y no disciplinado en su Dhamma, considera la forma como el ser. Este tipo
de consideración, monjes, es formación. ¿Y cuál es la fuente, cuál el origen, de qué nace y
se produce esta formación? Cuando alguien que es mundano y no instruido entra en contacto
a través de la sensación surgida de la ignorancia del contacto, surge la avidez: de ahí que
surge aquella formación. Monjes, cuando uno conoce y ve esto, ocurre la inmediata
destrucción de las impurezas.

“Monjes, puede que él no considere la forma como el ser, pero considera al ser como algo
que posee forma. Este tipo de consideración, monjes, es formación… (sigue como en el
párrafo anterior).

“Monjes, puede que él no considere la forma como el ser ni al ser como algo que posee
forma, pero considera la forma como en el ser. Este tipo de consideración, monjes, es
formación… (sigue como más arriba).

“Monjes, puede que él no considere la forma como el ser ni al ser como algo que posee forma
ni la forma como en el ser, pero considera el ser como en la forma. Este tipo de consideración,
monjes, es formación… (sigue como más arriba).
“Monjes, puede que él no considere la forma como el ser ni al ser como algo que posee forma
ni la forma como en el ser ni el ser como en la forma, pero considera la sensación como el
ser… la sensación como algo que posee forma… la sensación como en el ser… el ser como
en la sensación. Este tipo de consideración, monjes, es formación… (sigue como más arriba).

“Monjes, puede que él no considere la forma como el ser ni al ser como algo que posee forma
ni la forma como en el ser ni el ser como en la forma ni la sensación como el ser ni la
sensación como algo que posee forma ni la sensación como en el ser ni el ser como en la
sensación, pero considera la percepción como el ser… la percepción como algo que posee
forma… la percepción como en el ser… el ser como en la percepción. Este tipo de
consideración, monjes, es formación… (sigue como más arriba).

“Monjes, puede que él no considere la forma como el ser ni al ser como algo que posee forma
ni la forma como en el ser ni el ser como en la forma ni la sensación como el ser ni la
sensación como algo que posee forma ni la sensación como en el ser ni el ser como en la
sensación ni la percepción como el ser ni la percepción como algo que posee forma ni la
percepción como en el ser ni el ser como en la percepción. Pero considera las formaciones
mentales como el ser… las formaciones mentales como algo que posee forma… las
formaciones mentales como en el ser… el ser como en las formaciones mentales. Este tipo
de consideración, monjes, es formación… (sigue como más arriba).

“Monjes, puede que él no considere la forma como el ser ni al ser como algo que posee forma
ni la forma como en el ser ni el ser como en la forma ni la sensación como el ser ni la
sensación como algo que posee forma ni la sensación como en el ser ni el ser como en la
sensación ni la percepción como el ser ni la percepción como algo que posee forma ni la
percepción como en el ser ni el ser como en la percepción ni las formaciones mentales como
el ser, ni las formaciones mentales como algo que posee forma ni las formaciones mentales
como en el ser, ni el ser como en las formaciones mentales. Pero considera los estados de
conciencia como el ser… los estados de consciencia como algo que posee forma… los
estados de conciencia como en el ser… el ser como en los estados de conciencia. Este tipo
de consideración, monjes, es formación. ¿Y cuál es la fuente, cuál el origen, de qué nace y
se produce esta formación? Cuando alguien que es mundano y no instruido entra en contacto
a través de la sensación surgida de la ignorancia del contacto, surge la avidez: de ahí que
surge aquella formación. Monjes, cuando uno conoce y ve esto, ocurre la inmediata
destrucción de las impurezas.

“Monjes, puede que él no considere la forma como el ser… el ser como en los estados de
conciencia. Pero, él mantiene el siguiente punto de vista: ‘así cómo es el ser, así es el mundo;
habiendo pasado a la otra vida, seré así: permanente, estable, eterno, no sujeto a cambios’.
Este tipo de punto de vista eternalista, monjes, es formación. ¿Y cuál es la fuente, cuál el
origen, de qué nace y se produce esta formación? Cuando alguien que es mundano y no
instruido entra en contacto a través de la sensación surgida de la ignorancia del contacto,
surge la avidez: de ahí que surge aquella formación. Monjes, cuando uno conoce y ve esto,
ocurre la inmediata destrucción de las impurezas.

“Monjes, puede que él no considere la forma como el ser… ni mantiene el siguiente punto
de vista: ‘así cómo es el ser, así es el mundo; habiendo pasado a la otra vida, seré así:
permanente, estable, eterno, no sujeto a cambios’. Pero, él mantiene el siguiente punto de
vista: ‘yo podría no ser y esto podría no ser para mí; así que yo no seré ni esto será para mí.’
Este tipo de punto de vista aniquilacionsita, monjes, es formación. ¿Y cuál es la fuente, cuál
el origen, de qué nace y se produce esta formación? Cuando alguien que es mundano y no
instruido entra en contacto a través de la sensación surgida de la ignorancia del contacto,
surge la avidez: de ahí que surge aquella formación. Monjes, cuando uno conoce y ve esto,
ocurre la inmediata destrucción de las impurezas.

{240} En esta ocasión, un asceta errante de nombre Subhadda estaba en Kusinara. Y


Subhadda, el asceta errante escuchó lo siguiente: "Hoy, durante la tercera parte de la noche,
el asceta Gotama pasará a su Parinibbana".

Entonces este pensamiento surgió en él: "Escuché, por parte de los ancianos y los venerables
ascetas errantes, maestros de los maestros, que la aparición de los Tathagatas, de los Arahants
plenamente despiertos, acontece en muy contadas ocasiones. Y este mismo día, durante la
última parte de la noche, va a ocurrir el Parinibbana del asceta Gotama. Ahora mismo, surgió
una duda en mi corazón, y estoy seguro que el asceta Gotama, al enseñarme el Dhamma,
podría disipar esta duda de mi corazón".

Entonces, el asceta errante Subhadda fue a la arboleda, al parque de recreación de los mallas
y se acercó al Venerable Ananda para compartir con él su pensamiento. Le habló así: "Amigo
Ananda, sería de gran provecho si me permitieras entrar en la presencia del asceta Gotama".

Pero el Venerable Ananda, le respondió con estas palabras: "Suficiente, amigo Subhadda.
No importunes al Tathagata. El Bienaventurado está cansado".

Pero, por segunda y por tercera vez el asceta ambulante Subhadda pidió al Venerable Ananda
lo mismo, y por segunda y por tercera vez, el Venerable Ananda se lo negó.

Y el Bienaventurado, al escuchar la conversación entre el Venerable Ananda y el asceta


ambulante Subhadda, hizo llamar al Venerable Ananda y le dijo: "¡Basta ya, Ananda! No
rehúses más a Subhadda. A Subhadda, Ananda, debe ser permitido entrar en la presencia del
Tathagata. Todo lo que él va a preguntarme, será hecho con el propósito de buscar el
despertar y no para molestar al Tathagata. Y todo lo que el Tathagata le responda, será para
su pronta comprensión".
Entonces, el Venerable Ananda dijo al asceta errante Subhadda: "Ven, amigo Subhadda, el
Bienaventurado te otorga el permiso".

Acto seguido, el asceta errante Subhadda se acercó al Bienaventurado y lo saludó


respetuosamente. Habiendo intercambiado con él los saludos de cortesía, el asceta errante
Subhadda, se sentó a un lado y se dirigió al Bienaventurado con estas palabras: "Venerable
Gotama. Existen varios ascetas y brahmanes que son cabezas de numerosas comunidades de
discípulos, que tienen grandes séquitos, que son líderes de escuelas, bien conocidos y
renombrados, tenidos en gran estima por las multitudes, maestros como Purana Kassapa,
Makkhali Gosala, Ajita Kesakambali, Pakudha Kaccayana, Sañjaya Belatthiputta, Nigantha
Nataputta. ¿Todos ellos, señor, han alcanzado la realización, tal como cada uno de ellos lo
hace creer, o, más bien, ninguno de ellos la alcanzó o, quizá, algunos la alcanzaron y otros,
no?"

"¡Suficiente, Subhadda! Deja estos temas sin importancia sobre si han alcanzado todos ellos
la realización o ninguno de ellos o, si algunos la alcanzaron y otros, no. Yo te enseñaré el
Dhamma, Subhadda; escucha y presta bien la atención, que voy a hablar".

"Así sea, Venerable Señor".

Y el Bienaventurado tomó la palabra diciendo: "En cualquier Dhamma-y-Disciplina,


Subhadda, en que no se encuentra el Noble Óctuple Sendero, tampoco se va a poder encontrar
a un verdadero asceta, en ninguno de los cuatro grados de santidad. Pero, Subhadda, en
cualquier Dhamma-y-Disciplina, en que se encuentre el Noble Óctuple Sendero, también se
va a poder encontrar a un verdadero asceta, tanto de primero, segundo, tercero como de
cuarto grado de santidad. Ahora bien, en éste Dhamma-y-Disciplina, se encuentra el Noble
Óctuple Sendero, por eso también, se encuentran en él los verdaderos ascetas tanto de
primero, segundo, tercero como de cuarto grado de santidad. Sin embargo, los sistemas de
los otros maestros carecen de los verdaderos ascetas. Pero si en este sistema, Subhadda, los
monjes tan sólo vivieran rectamente, el mundo no estaría privado de los arahants.

Tenía veintinueve años,

Cuando renuncié al mundo para buscar el bien.

Cincuenta y un años pasaron, desde entonces.

Y en todo este tiempo permanecí en la vida errante,

En el reino de la virtud y la verdad, Fuera del


cual, no hay ascetas verdaderos, [de cualquiera de

los cuatro grados].

Otras escuelas se ven privadas de ellos,

Pero si los monjes vivieran rectamente,

El mundo no estaría privado de los arahants".

Cuando esto fue dicho, el asceta errante Subhadda se dirigió al Bienaventurado con estas
palabras: "¡Excelente, venerable señor, realmente asombroso, venerable señor! Esto fue,
como si el Bienaventurado enderezara lo que estaba torcido, o como si revelara lo oculto, o
como si mostrara el camino a alguien que estaba extraviado, o como si prendiera una lámpara
en la oscuridad para que aquellos que tienen ojos, puedan ver; es así, como el Bienaventurado
expone el Dhamma de diferentes formas. Es por eso, que yo tomo el refugio en el
Bienaventurado, en el Dhamma y en el Sangha. Que el Bienaventurado me acepte, por favor,
dentro del Sangha y me conceda la alta ordenación".

"Cualquiera, Subhadda, que anteriormente fue un seguidor de algún otro credo y pretende
ser admitido para recibir la alta ordenación en este Dhamma-y-Disciplina, debe pasar por un
tiempo de prueba por el periodo de cuatro meses. Al terminar el cuarto mes, si los monjes
estén satisfechos con él, le conceden la admisión y la alta ordenación como monje. Pero en
este caso, Subhadda, reconozco que puede haber distinción entre distintos casos de
personas".

"Señor, si es que cualquiera que anteriormente fuera el seguidor de otros credos y que
pretendiera ser admitido para recibir la alta ordenación en este Dhamma-y-Disciplina,
debiera pasar por un tiempo de prueba por el periodo de cuatro meses y al terminar el cuarto
mes, se le concediera la admisión y la alta ordenación como monje, si los monjes estuvieran
satisfechos con él -en tal caso, yo pasaré por el tiempo de prueba por el periodo de cuatro
años. Y al terminar el cuarto año, si los monjes están satisfechos conmigo, me concederán la
admisión y la alta ordenación como monje".

Pero el Bienaventurado, llamó al Venerable Ananda y le dijo: "Ananda, admite a Subhadda


dentro del Sangha". "Así sea", respondió el Venerable Ananda.

Entonces, el asceta errante Subhadda dijo al Venerable Ananda: "Amigo Ananda, esto es un
gran beneficio para vosotros y bendición, que hayáis recibido la consagración como
discípulos en la misma presencia del Maestro".

Y aconteció, que también el asceta ambulante Subhadda, fue admitido y recibió la alta
ordenación en la presencia del Bienaventurado. Una vez ordenado, el Venerable Subhadda
permaneció en soledad, recluido, atento, ferviente y resuelto. Y en poco tiempo alcanzó la
meta suprema, por la cual el personaje ilustre abandona correctamente la vida hogareña, para
vivir sin hogar, habiendo realizado la vida santa y el alto conocimiento por sí mismo. Supo:
"Destruido está el nacimiento; la vida santa, ha sido vivida; no hay nada más por hacer ,y
más allá de esta vida, nada más queda". Así, el Venerable Subhadda llegó a ser uno entre los
arahants, y fue el último discípulo convertido por el mismo Bienaventurado.

984} “Monjes, la concentración a través de la atención consciente en la respiración, cuando


se la cultiva y desarrolla, trae muchos frutos y beneficios. ¿Y cómo, monjes, es la
concentración a través de la atención consciente en la respiración, que cuando se la cultiva y
desarrolla, trae muchos frutos y beneficios?

“He aquí, monjes, el monje, habiendo ido al bosque, al pie de un árbol o a una choza vacía,
se sienta. Habiendo cruzando las piernas, con el cuerpo erecto, pone su atención consciente
enfrente, y siempre consciente, inhala y siempre consciente, exhala.

“[i] Inhalando largo, él entiende: ‘Estoy inhalando largo’ o exhalando largo, entiende ‘Estoy
exhalando largo’. [ii] Cuando inhala corto, él entiende ‘Estoy inhalando corto’ o cuando
exhala corto, entiende ‘Estoy exhalando corto’. [iii] Y él se entrena así: ‘Voy a inhalar
experimentado el cuerpo entero’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar experimentado el cuerpo
entero’. [iv] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar calmando las formaciones corporales’ y se
entrena así: ‘Voy a exhalar, calmando las formaciones corporales’.

“[v] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar experimentando la alegría’ y se entrena así: ‘Voy a
exhalar, experimentando la alegría’. [vi] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar experimentando el
placer’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, experimentando el placer’. [vii] Él se entrena así:
‘Voy a inhalar experimentando las formaciones mentales’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar,
experimentando las formaciones mentales’. [viii] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar calmando
las formaciones mentales’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, calmando las formaciones
mentales’.

“[ix] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar experimentando la mente’ y se entrena así: ‘Voy a
exhalar, experimentando la mente’. [x] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar llenando de gozo la
mente’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, llenando de gozo la mente’. [xi] Él se entrena así:
‘Voy a inhalar concentrando la mente’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, concentrando la
mente’. [xii] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar liberando la mente’ y se entrena así: ‘Voy a
exhalar, liberando la mente’.

“[xiii] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar contemplando la impermanencia’ y se entrena así:


‘Voy a exhalar, contemplando la impermanencia’. [xiv] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar
contemplando el desvanecimiento’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, contemplando el
desvanecimiento’. [xv] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar contemplando el cese’ y se entrena
así: ‘Voy a exhalar, contemplando el cese’. [xvi] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar
contemplando el renunciamiento’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, contemplando el
renunciamiento’.

“Ésta es, monjes, la concentración a través de la atención consciente en la respiración, que


cuando se la cultiva y desarrolla, trae muchos frutos y beneficios.

“Yo también, monjes, antes de mi despertar, mientras aún era el bodhisatta, todavía no
plenamente despierto, generalmente permanecía en esta morada. Mientras que generalmente
permanecía en esta morada, ni mi cuerpo ni los ojos llegaron a fatigarse y mi mente, a través
del no-apego, podría ser liberada de las impurezas.

“Por lo tanto, monjes, cuando el monje desea ‘que ni mi cuerpo ni los ojos lleguen a fatigarse
y mi mente, a través del no-apego, pueda ser liberada de las impurezas’, esa misma
concentración a través de la atención consciente en la respiración, también debería ser
alcanzada de cerca.

“Por lo tanto, monjes, cuando el monje desea ‘que los recuerdos y las intenciones
relacionadas con la vida hogareña sean abandonadas por mi’, esa misma concentración a
través de la atención consciente en la respiración, también debería ser alcanzada de cerca.

“Por lo tanto, monjes, cuando el monje desea ‘que permanezca percibiendo lo repulsivo
como no repulsivo’, esa misma concentración a través de la atención consciente en la
respiración, también debería ser alcanzada de cerca.

“Por lo tanto, monjes, cuando el monje desea ‘que permanezca percibiendo lo no repulsivo
como repulsivo’, esa misma concentración a través de la atención consciente en la
respiración, también debería ser alcanzada de cerca.

“Por lo tanto, monjes, cuando el monje desea ‘que permanezca percibiendo lo repulsivo en
lo no repulsivo y lo repulsivo’, esa misma concentración a través de la atención consciente
en la respiración, también debería ser alcanzada de cerca.

“Por lo tanto, monjes, cuando el monje desea ‘que permanezca percibiendo lo no repulsivo
en lo repulsivo y lo no repulsivo’, esa misma concentración a través de la atención consciente
en la respiración, también debería ser alcanzada de cerca.

“Por lo tanto, monjes, cuando el monje desea ‘evitando a ambos, lo no repulsivo y lo


repulsivo, que permanezca ecuánime, atentamente consciente y comprendiendo
claramente’, esa misma concentración a través de la atención consciente en la respiración,
también debería ser alcanzada de cerca.
“Por lo tanto, monjes, cuando el monje desea ‘que, recluido de los placeres sensuales,
recluido de los insalubres estados mentales, entre y permanezca en el primer jhana,
acompañado por el pensamiento aplicado y el pensamiento sostenido, con arrebatamiento y
felicidad surgidos de la reclusión’, esa misma concentración a través de la atención
consciente en la respiración, también debería ser alcanzada de cerca.

“Por lo tanto, monjes, cuando el monje desea ‘que, con el aquietamiento del pensamiento
aplicado y el pensamiento sostenido, entre y permanezca en el segundo jhana, con la
confidencia interior y unificación de la mente, pero sin el pensamiento aplicado y el
pensamiento sostenido, con arrobamiento y felicidad nacidos de la concentración’, esa
misma concentración a través de la atención consciente en la respiración, también debería
ser alcanzada de cerca.

“Por lo tanto, monjes, cuando el monje desea ‘que, con el desvanecimiento del arrobamiento,
permanezca ecuánime, conscientemente atento y comprendiendo claramente, pueda
experimentar la felicidad con mi cuerpo y pueda entrar y permanecer en el tercer jhana, del
cual los nobles declaran: «él es ecuánime, conscientemente atento y uno que mora en la
felicidad»’, esa misma concentración a través de la atención consciente en la respiración,
también debería ser alcanzada de cerca.

“Por lo tanto, monjes, cuando el monje desea ‘que, con el abandono del placer y dolor, y con
la previa desaparición del gozo y displacer, entre y permanezca en el cuarto jhana, el cual no
es ni doloroso ni placentero, e incluye la purificación de la atención consciente a través de la
ecuanimidad’, esa misma concentración a través de la atención consciente en la respiración,
también debería ser alcanzada de cerca.

“Por lo tanto, monjes, cuando el monje desea ‘que, al trascender completamente la


percepción de las formas, con la desaparición de de la percepción del impacto sensorial, con
la no-atención de la percepción de la diversidad, consciente que «el espacio es infinito», entre
y permanezca en la base de la infinidad del espacio’, esa misma concentración a través de la
atención consciente en la respiración, también debería ser alcanzada de cerca. “Por lo tanto,
monjes, cuando el monje desea ‘que, al trascender completamente la base de la infinidad del
espacio, consciente que «la conciencia es infinita», entre y permanezca en la base de la
infinidad de la conciencia’, esa misma concentración a través de la atención consciente en la
respiración, también debería ser alcanzada de cerca.

“Por lo tanto, monjes, cuando el monje desea ‘que, al trascender completamente la base de
la infinidad de la conciencia, consciente que «aquí no hay nada», entre y permanezca en la
base de la nada’, esa misma concentración a través de la atención consciente en la respiración,
también debería ser alcanzada de cerca.
“Por lo tanto, monjes, cuando el monje desea ‘que, al trascender completamente la base de
la nada, entre y permanezca en la base de ni-percepción-ni-no-percepción’, esa misma
concentración a través de la atención consciente en la respiración, también debería ser
alcanzada de cerca.

“Monjes, cuando la concentración a través de la atención consciente en la respiración ha sido


desarrollada y cultivada de esta manera, cuando él experimenta alguna sensación placentera,
entiende que ‘esto no es permanente’; entiende que ‘esto no es [algo] para ser considerado’;
entiende que ‘esto no es [algo] en qué deleitarse’. Cuando experimenta alguna sensación
dolorosa, entiende que ‘esto no es permanente’; entiende que ‘esto no es [algo] para ser
considerado’; entiende que ‘esto no es [algo] en qué deleitarse’.

“Cuando experimenta alguna sensación placentera, siente que la misma está suelta; cuando
experimenta alguna sensación dolorosa, siente que la misma está suelta; cuando experimenta
alguna sensación ni placentera ni dolorosa, siente que la misma está suelta.

“Cuando experimenta alguna sensación que termina con el cuerpo, entiende que ‘estoy
experimentando una sensación que termina con el cuerpo’. Cuando experimenta alguna
sensación que termina con la vida, entiende que ‘estoy experimentando una sensación que
termina con la vida’. Y entiende así: ‘con la disolución del cuerpo, seguido por la extenuación
de la vida, y siendo que todo lo que es sentido, no ha sido objeto de deleite, llegará la frescura
aquí mismo.’

“Monjes, al igual que una lámpara arde dependiendo del aceite y la mecha, y con la
extenuación del aceite y la mecha, se extingue por falta de combustible, de la misma manera,
monjes, cuando el monje experimenta alguna sensación que termina con el cuerpo, entiende
que ‘estoy experimentando una sensación que termina con el cuerpo’. Cuando experimenta
alguna sensación que termina la vida, entiende que ‘estoy experimentando una sensación que
termina con la vida’. Y entiende así: ‘con la disolución del cuerpo, seguido por la extenuación
de la vida, y siendo que todo lo que es sentido, no ha sido objeto de deleite, llegará la frescura
aquí mismo.’”

Alimento de los impedimentos

“Monjes, al igual que el cuerpo se mantiene gracias a los alimentos, subsiste dependiendo de
los alimentos y no puede sobrevivir sin los alimentos, de la misma manera los cinco
impedimentos se mantienen gracias a sus alimentos, subsisten dependiendo de estos
alimentos y no pueden sobrevivir sin estos alimentos.

“¿Y cuál es, monjes, el alimento que produce la aparición de los deseos sensuales que aún
no han aparecido, e incrementa y expande aquellos que ya surgieron?
“Este es, monjes, el signo de la belleza. Cuando frecuentemente se pone una descuidada
atención, el mismo se convierte en el alimento que produce la aparición de los deseos
sensuales que aún no han aparecido, e incrementa y expande aquellos que ya surgieron.

“¿Y cuál es, monjes, el alimento que produce la aparición de la malicia que aún no ha
aparecido, e incrementa y expande aquélla que ya surgió?

“Este es, monjes, el signo de la repugnancia. Cuando frecuentemente se pone una descuidada
atención, el mismo se convierte en alimento que produce la aparición de la malicia que aún
no ha aparecido, e incrementa y expande aquélla que ya surgió.

“¿Y cuál es, monjes, el alimento que produce la aparición de la pereza y el letargo que aún
no han aparecido, e incrementa y expande la pereza y el letargo que ya surgieron?

“Este es, monjes, el descontento, la apatía, el flojo esfuerzo, la somnolencia después de la


comida y la lentitud mental. Cuando frecuentemente se pone una descuidada atención, los
mismos se convierten en alimento que produce la aparición de la pereza y el letargo que aún
no han aparecido, e incrementa y expande la pereza y el letargo que ya surgieron.

“¿Y cuál es, monjes, el alimento que produce la aparición de la inquietud y el remordimiento
que aún no han aparecido, e incrementa y expande la inquietud y el remordimiento que ya
surgieron?

“Este es, monjes, la inquietud mental. Cuando frecuentemente se pone una descuidada
atención, la misma se convierte en alimento que produce la aparición de la inquietud y el
remordimiento que aún no han aparecido, e incrementa y expande la inquietud y el
remordimiento que ya surgieron.

“¿Y cuál es, monjes, el alimento que produce la aparición de la duda que aún no ha aparecido,
e incrementa y expande aquélla que ya surgió?

“Este es, monjes, las bases del surgimiento de la duda. Cuando frecuentemente se pone una
descuidada atención, las mismas se convierten en alimento que produce la aparición de la
duda que aún no han aparecido, e incrementa y expande aquélla que ya surgió.

“Monjes, al igual que el cuerpo se mantiene gracias a los alimentos, subsiste dependiendo de
los alimentos y no puede sobrevivir sin los alimentos, de la misma manera los cinco
impedimentos se mantienen gracias a sus alimentos, subsisten dependiendo de estos
alimentos y no pueden sobrevivir sin estos alimentos.
Alimento de los factores de iluminación

“Monjes, al igual que el cuerpo se mantiene gracias a los alimentos, subsiste dependiendo de
los alimentos y no puede sobrevivir sin los alimentos, de la misma manera los siete factores
de iluminación se mantienen gracias a sus alimentos, subsisten dependiendo de estos
alimentos y no pueden sobrevivir sin estos alimentos.

“¿Y cuál es, monjes, el alimento que produce la aparición de la atención consciente como
factor de iluminación que aún no ha aparecido, e incrementa y expande aquélla que ya
surgió? “Este es, monjes, las cosas que sirven de base para la atención consciente como
factor de iluminación [1]. Cuando frecuentemente se pone una cuidadosa atención, las
mismas se convierten en alimento que produce la aparición de la atención consciente como
factor de iluminación que aún no ha aparecido, e incrementa y expande aquélla que ya surgió.
“¿Y cuál es, monjes, el alimento que produce la aparición de la investigación de las
cualidades como factor de iluminación que aún no ha aparecido, e incrementa y expande
aquélla que ya surgió?

“Este es, monjes, los estados mentales saludables e insanos, los estados mentales culpables
y libres de culpa, los estados mentales inferiores y superiores, los estados mentales oscuros
y sus contrapartes brillantes. Cuando frecuentemente se pone una cuidadosa atención, los
mismos se convierten en alimento que produce la aparición de la investigación de las
cualidades como factor de iluminación que aún no ha aparecido, e incrementa y expande
aquella que ya surgió.

“¿Y cuál es, monjes, el alimento que produce la aparición de la energía como factor de
iluminación que aún no ha aparecido, e incrementa y expande aquélla que ya surgió? “Este
es, monjes, el elemento del despertar, el elemento del esfuerzo y el elemento de la fortaleza.
Cuando frecuentemente se pone una cuidadosa atención, los mismos se convierten en
alimento que produce la aparición de la energía como factor de iluminación que aún no ha
aparecido, e incrementa y expande aquélla que ya surgió.

“¿Y cuál es, monjes, el alimento que produce la aparición del arrobamiento como factor de
iluminación que aún no ha aparecido, e incrementa y expande aquél que ya surgió? “Este es,
monjes, las cosas que sirven de base para el arrobamiento como factor de iluminación.
Cuando frecuentemente se pone una cuidadosa atención, las mismas se convierten en
alimento que produce la aparición del arrobamiento como factor de iluminación que aún no
ha aparecido, e incrementa y expande aquél que ya surgió.

“¿Y cuál es, monjes, el alimento que produce la aparición de la tranquilidad como factor de
iluminación que aún no ha aparecido, e incrementa y expande aquélla que ya surgió? “Este
es, monjes, la calma mental y la tranquilidad del cuerpo. Cuando frecuentemente se pone una
cuidadosa atención, las mismas se convierten en alimento que produce la aparición de la
tranquilidad como factor de iluminación que aún no ha aparecido, e incrementa y expande
aquélla que ya surgió.

“¿Y cuál es, monjes, el alimento que produce la aparición de la concentración como factor
de iluminación que aún no ha aparecido, e incrementa y expande aquélla que ya surgió?

“Este es, monjes, el signo de la serenidad y el signo de la no-dispersión. Cuando


frecuentemente se pone una cuidadosa atención, los mismos se convierten en alimento que
produce la aparición de la concentración como factor de iluminación que aún no ha
aparecido, e incrementa y expande aquélla que ya surgió.

“¿Y cuál es, monjes, el alimento que produce la aparición de la ecuanimidad como factor de
iluminación que aún no ha aparecido, e incrementa y expande aquélla que ya surgió? “Este
es, monjes, las cosas que sirven de base para la ecuanimidad como factor de iluminación.
Cuando frecuentemente se pone una cuidadosa atención, las mismas se convierten en
alimento que produce la aparición de la ecuanimidad como factor de iluminación que aún no
ha aparecido, e incrementa y expande aquélla que ya surgió. “Monjes, al igual que el cuerpo
se mantiene gracias a los alimentos, subsiste dependiendo de los alimentos y no puede
sobrevivir sin los alimentos, de la misma manera, los siete factores de iluminación se
mantienen gracias a sus alimentos, subsisten dependiendo de estos alimentos y no pueden
sobrevivir sin estos alimentos".

En Savatthi. “Monjes, voy a enseñaros el origen dependiente y voy a analizarlo para vosotros.
Escuchad y prestad atención, que voy a hablar”.

“Sí, venerable señor”, respondieron los monjes y el Bienaventurado continuó: “Y ¿cuál es


el origen dependiente? Con ignorancia como condición, surgen las formaciones volitivas.
Con las formaciones volitivas como condición, surge la conciencia. Con la conciencia
como condición, surgen el nombre y la forma. Con el nombre y la forma como condición,
surge la séxtuple base de los sentidos. Con la séxtuple base de los sentidos como condición,
surge el contacto. Con el contacto como condición, surge la sensación. Con la sensación
como condición, surge la avidez. Con la avidez como condición, surge el apego. Con el
apego como condición, surge la existencia. Con la existencia como condición, surge el
nacimiento. Con el nacimiento como condición, surge la vejez y la muerte, el dolor, el
lamento, la pena, la angustia y la desesperanza. Todo aquello, origina esta gran masa del
sufrimiento.

“¿Y qué es, monjes, la vejez y la muerte? La vejez de varios seres y varios grupos de seres,
su envejecimiento, la pérdida de sus dientes, la blancura de sus cabellos, las arrugas de su
piel, el declive de su vitalidad, la degradación de sus facultades: todo esto es llamado ‘la
vejez’. La muerte de varios seres y varios grupos de seres, su fallecimiento, su defunción,
su expiración, la mortalidad, la muerte, el fin de sus días, la extinción de los componentes
[khandas ], la caída de la carcasa: todo esto es llamado ‘muerte’. Esta vejez, en conjunto con
esta muerte, son llamados ‘la vejez y la muerte’.

“¿Y qué es, monjes, el nacimiento? El nacimiento de varios seres y varios grupos de seres,
su llegar a nacer, su descenso [al útero materno], su llegar a existir, la aparición de los
componentes [khandas ], la obtención de la base de los sentidos: todo esto es llamado ‘el
nacimiento’. “¿Y qué es, monjes, la existencia? He aquí, hay tres clases de existencia: la
existencia en la esfera de los sentidos, la existencia en la esfera de las formas y la
existencia en la esfera sin formas. Todo esto es llamado ‘la existencia’.

“¿Y qué es, monjes, el apego? He aquí, hay cuatro clases de apego: apego a los placeres
sensuales, apego a los puntos de vista, apego a preceptos y prácticas, apego a la doctrina
del alma. Todo esto es llamado ‘el apego’.

“¿Y qué es, monjes, la avidez? He aquí, hay seis clases de avidez: avidez por las formas,
avidez por los sonidos, avidez por los olores, avidez por los sabores, avidez por los objetos
táctiles, avidez por los fenómenos mentales. Todo esto es llamado ‘la avidez’.

“¿Y qué es, monjes, la sensación? He aquí, hay seis clases de sensación: sensación que
surge por el contacto con el ojo, sensación que surge por el contacto con el oído, sensación
que surge por el contacto con la nariz, sensación que surge por el contacto con la lengua,
sensación que surge por el contacto con el cuerpo, sensación que surge por el contacto con
la mente. Todo esto es llamado ‘la sensación’.

“¿Y qué es, monjes, el contacto? He aquí, hay seis clases de contacto: contacto del ojo,
contacto del oído, contacto de la nariz, contacto de la lengua, contacto del cuerpo, contacto
de la mente. Todo esto es llamado ‘el contacto’.

“¿Y qué es, monjes, la séxtuple base? La base del ojo, la base del oído, la base de la nariz,
la base de la lengua, la base del cuerpo, la base de la mente. Todo esto es llamado ‘la
séxtuple base’.

“¿Y qué son, monjes, el nombre y la forma? La sensación, la percepción, la volición, el


contacto y la atención: Todo esto es llamado ‘el nombre’. Los cuatro grandes elementos y
las formas que derivan de ellos, son llamados ‘forma’. Este nombre, en conjunto con esta
forma, son llamados ‘el nombre y la forma’.

“¿Y qué es, monjes, la conciencia? He aquí, hay seis clases de conciencia: conciencia del
ojo, conciencia del oído, conciencia de la nariz, conciencia de la lengua, conciencia del
cuerpo, conciencia de la mente. Todo esto es llamado ‘la conciencia’.
“¿Y qué son, monjes, las formaciones volitivas? He aquí, hay tres clases de formaciones
volitivas: formaciones volitivas corporales, formaciones volitivas verbales y formaciones
volitivas mentales. Todo esto es llamado ‘las formaciones volitivas’.

“¿Y qué es, monjes, la ignorancia? No conocer el sufrimiento, no conocer el origen del
sufrimiento, no conocer el cese del sufrimiento y no conocer el sendero que conduce al
cese del sufrimiento. Todo esto es llamado ‘la ignorancia’. “Así es, monjes, como con la
ignorancia como condición, surgen las formaciones volitivas. Con las formaciones volitivas
como condición, surge la conciencia. Con la conciencia como condición, surgen el nombre
y la forma. Con el nombre y la forma como condición, surge la séxtuple base de los
sentidos. Con la séxtuple base de los sentidos como condición, surge el contacto. Con el
contacto como condición, surge la sensación. Con la sensación como condición, surge la
avidez. Con la avidez como condición, surge el apego. Con el apego como condición, surge
la existencia. Con la existencia como condición, surge el nacimiento. Con el nacimiento
como condición, surge la vejez y la muerte, el dolor, el lamento, la pena, la angustia y la
desesperanza. Todo aquello, origina esta gran masa del sufrimiento.

“Pero, con la disminución y el cese definitivo de la ignorancia, llega el cese de las


formaciones volitivas. Con el cese de las formaciones volitivas, llega el cese de la
conciencia. Con el cese de la conciencia, llega el cese del nombre y de la forma. Con el
cese del nombre y de la forma, llega el cese de la séxtuple base de los sentidos. Con el cese
de la séxtuple base de los sentidos, llega el cese del contacto. Con el cese del contacto,
llega el cese de la sensación. Con el cese de la sensación, llega el cese de la avidez. Con el
cese de la avidez, llega el cese del apego. Con cese del apego, llega el cese de la existencia.
Con el cese de la existencia, llega el cese del nacimiento. Con el cese del nacimiento,
también cesa la vejez y la muerte, el dolor, el lamento, la pena, la angustia y la
desesperanza. Cesa todo aquello, que origina esta gran masa del sufrimiento.

Monjes, en cualquier grado que lo desee, recluido de los placeres sensuales, recluido de los
perjudiciales estados mentales, entro y permanezco en el primer jhana, que consiste en el
arrobamiento y felicidad nacidos de la reclusión, acompañado por el pensamiento aplicado
y sostenido. Kassapa también, monjes, en cualquier grado que lo desee, recluido de los
placeres sensuales, recluido de los perjudiciales estados mentales, entra y permanece en el
primer jhana.

“Monjes, en cualquier grado que lo desee, al calmarse el pensamiento aplicado y sostenido,


entro y permanezco en el segundo jhana, el cual tiene la placidez interior y la unificación
mental, y consiste en el arrobamiento y felicidad nacidos de la concentración, sin el
pensamiento aplicado y sostenido. Kassapa también, monjes, en cualquier grado que lo
desee, al calmarse el pensamiento aplicado y sostenido, entra y permanece en el segundo
jhana. “Monjes, en cualquier grado que lo desee, al desaparecer el arrobamiento,
permanezco ecuánime, con atención consciente y clara comprensión, y experimento la
felicidad en mi cuerpo; entonces, entro y permanezco en el tercer jhana, del cual los nobles
declararon: ‘Él es ecuánime, atentamente consciente y es alguien que tiene una morada feliz’.
Kassapa también, monjes, en cualquier grado que lo desee, al desaparecer el arrobamiento,
permanece ecuánime, con atención consciente y clara comprensión, y experimenta la
felicidad en su cuerpo; entonces, entra y permanece en el tercer jhana.

“Monjes, en cualquier grado que lo desee, al abandonar la felicidad y la pena, con la previa
desaparición de la alegría y el abatimiento, entro y permanezco en el cuarto jhana, ni penoso
ni placentero, el cual tiene la purificación de la atención consciente mediante la ecuanimidad.
Kassapa también, monjes, en cualquier grado que lo desee, al abandonar la felicidad y la
pena, con la previa desaparición de la alegría y el abatimiento, entra y permanece en el cuarto
jhana.

“Monjes, en cualquier grado que lo desee, con la completa superación de las percepciones
de las formas, con la desaparición de la afectación sensorial, con la desatención a la
percepción de la diversidad, [percibiendo:] ‘el espacio es infinito’, entro y permanezco en la
base de la infinitud del espacio. Kassapa también, monjes, en cualquier grado que lo desee,
entra y permanece en la base de la infinitud del espacio.

“Monjes, en cualquier grado que lo desee, con la completa superación de la base de la


infinitud del espacio, [percibiendo:] ‘la conciencia es infinita’, entro y permanezco en la base
de la infinitud de la conciencia. Kassapa también, monjes, en cualquier grado que lo desee,
entra y permanece en la base de la infinitud de la conciencia.

“Monjes, en cualquier grado que lo desee, con la completa superación de la base de la


infinitud de la conciencia, [percibiendo:] 'he aquí, no hay nada', entro y permanezco en la
base de la nada. Kassapa también, monjes, en cualquier grado que lo desee, entra y
permanece en la base de la nada.

“Monjes, en cualquier grado que lo desee, con la completa superación de la base de la nada,
entro y permanezco en la base de la ni-percepción-ni-no-percepción. Kassapa también,
monjes, en cualquier grado que lo desee, entra y permanece en la base de la nipercepciónni-
no-percepción.

“Monjes, en cualquier grado que lo desee, con la completa superación de la base de la


nipercepción-ni-no-percepción, entro y permanezco en el cese de la percepción y sensación.
Kassapa también, monjes, en cualquier grado que lo desee, entra y permanece en la base del
cese de la percepción y sensación. “Monjes, en cualquier grado que lo desee, ejerzo varias
clases de poderes espirituales: habiendo sido uno, llego a ser varios; habiendo sido varios,
llego a ser uno; aparezco y desaparezco; traspaso sin obstáculos una pared, un cerco, una
montaña como si traspasara el espacio; me zambullo en la tierra, como si fuera agua; camino
sobre el agua sin hundirme, como si fuera tierra; sentado, con las piernas cruzadas, viajo por
el espacio como un ave; con mis manos toco y acaricio la luna y el sol, poderosa y
majestuosamente; ejerzo mi dominio corporal incluso hasta donde llega el mundo del
Brahma. Kassapa también, monjes, en cualquier grado que lo desee, ejerce varias clases de
poderes espirituales.

“Monjes, en cualquier grado que lo desee, con el elemento del oído divino, que es purificado
y sobrepasa el humano, escucho ambas clases de sonidos: los divinos y los humanos, aquellos
que se generan lejos al igual que los que están cerca. Kassapa también, monjes, en cualquier
grado que lo desee, con el elemento del oído divino, que es purificado y sobrepasa el humano,
escucha a ambas clases de sonidos.

“Monjes, en cualquier grado que lo desee, entiendo las mentes de otros seres y personas,
habiéndolas abarcado con mi propia mente. Entiendo la mente con pasión, como mente con
pasión, y la mente sin pasión, como mente liberada de la pasión; la mente con odio, como
mente con odio, y la mente sin odio, como mente liberada del odio; la mente con falsa ilusión,
como mente con falsa ilusión, y la mente sin falsa ilusión, como mente liberada de la falsa
ilusión; la mente contraída, como mente contraída, y la mente distraída, como mente
distraída; la mente exaltada, como mente exaltada, y la mente no exaltada, como mente no
exaltada; la mente superable, como mente superable, y la mente insuperable, como mente
insuperable; la mente concentrada, como mente concentrada, y la mente desconcentrada,
como mente desconcentrada; la mente liberada, como mente liberada, y la mente no liberada,
como mente no liberada. Kassapa también, monjes, en cualquier grado que lo desee, entiende
las mentes de otros seres y personas, habiéndolas abarcado con su propia mente.

“Monjes, en cualquier grado que lo desee, cuando mi mente está así concentrada, purificada,
radiante, sin mácula, libre de corrupción, flexible, maleable, firme y ha alcanzado la
imperturbabilidad, la dirijo al conocimiento de mis moradas pasadas. Recuerdo mis
múltiples moradas pasadas, esto es, un nacimiento, dos nacimientos, cinco nacimientos, diez
nacimientos, cincuenta nacimientos, cien nacimientos, mil nacimientos, cien mil
nacimientos, muchos eones de contracción cósmica, muchos eones de expansión cósmica,
muchos eones de contracción y expansión cósmica así: 'Allí tuve tal nombre, pertenecí a tal
clan, tuve tal apariencia; tal fue mi alimento, tal mi experiencia de placer y dolor, tal el final
de mi vida. Muriendo en este estado, renací allí. Ahí tuve tal nombre, pertenecí a tal clan,
tuve tal apariencia; tal fue mi alimento, tal mi experiencia de placer y dolor, tal el final de mi
vida. Muriendo en ese estado, renací aquí'. Así conozco mis múltiples moradas pasadas con
sus aspectos y detalles. Kassapa también, monjes, en cualquier grado que lo desee, conoce
sus múltiples moradas pasadas con sus aspectos y detalles.

“Monjes, en cualquier grado que lo desee, cuando mi mente está así concentrada, purificada,
radiante, sin mácula, libre de corrupción, flexible, maleable, firme y ha alcanzado la
imperturbabilidad, la dirijo al conocimiento del fallecimiento y renacimiento de los seres.
Veo †•por medio del ojo divino, purificado y que supera al humano†• seres falleciendo y
renaciendo, inferiores y superiores, hermosos y feos, afortunados y desafortunados según su
kamma, así: 'Estos seres †•involucrados con la mala conducta de cuerpo, palabra y mente,
que injuriaron a los Nobles, que mantuvieron opiniones erróneas y realizaron acciones bajo
la influencia de las opiniones erróneas†• con la descomposición del cuerpo, tras la muerte,
han renacido en el plano de la privación, en el destino malo, en los reinos inferiores, en el
infierno. Pero estos seres †•dotados de buena conducta de cuerpo, palabra y mente, que no
injuriaron a los Nobles, que mantuvieron opiniones correctas y realizaron acciones bajo la
influencia de las opiniones correctas†• con la descomposición del cuerpo, tras la muerte,
han reaparecido en los destinos buenos, en mundo celestial'. Así †•por medio del ojo divino,
purificado y que supera al humano†•, veo seres falleciendo y reapareciendo, inferiores y
superiores, hermosos y feos, afortunados y desafortunados según su kamma.
Kassapa también, monjes, en cualquier grado que lo desee, ve †•por medio del ojo divino,
purificado y que supera al humano†• seres falleciendo y renaciendo, inferiores y superiores,
hermosos y feos, afortunados y desafortunados según su kamma.

“Monjes, mediante la destrucción de las contaminaciones, en esta presente vida, entro y


permanezco en la inmaculada liberación de la mente, liberación a través de la sabiduría,
descubriéndolo por mí mismo con el conocimiento directo. Kassapa también, mediante la
destrucción de las contaminaciones, en esta presente vida, entra y permanece en la
inmaculada liberación de la mente, liberación a través de la sabiduría, descubriéndolo por él
mismo con el conocimiento directo”.

En cierta ocasión un monje se acercó al Bienaventurado, le rindió homenaje, se sentó a un


lado y le dijo: “He aquí, Venerable Señor, mientras estuve solo en reclusión, una reflexión
surgió en mi mente de esta manera: ‘Tres sensaciones han sido declaradas por el
Bienaventurado: la sensación placentera, la sensación dolorosa y la sensación ni-dolorosani-
placentera. Estas tres sensaciones han sido declaradas por el Bienaventurado. Pero el
Bienaventurado ha dicho: «Todo lo que se siente está incluido en la insatisfacción». Ahora
bien, ¿en referencia a qué cosa el Bienaventurado hizo esta declaración?’”.

“¡Bien, muy bien, monje! Estas tres sensaciones han sido declaradas por mí: la sensación
placentera, la sensación dolorosa y la sensación ni-dolorosa-ni-placentera. Estas tres
sensaciones han sido declaradas por mí. Y también dije: ‘Todo lo que se siente está incluido
en la insatisfacción’. Aquello ha sido declarado por mí en referencia a la transitoriedad de
las formaciones. Aquello ha sido declarado por mí en referencia a las formaciones sujetas a
la destrucción… a las formaciones sujetas al desvanecimiento… a las formaciones sujetas a
desaparecer… a las formaciones sujetas al cese… a las formaciones sujetas al cambio.
“Entonces, monje, he enseñado el sucesivo cese de las formaciones. Para alguien que ha
alcanzado el primer jhana, ha cesado el discurso. Para alguien que ha alcanzado el segundo
jhana, ha cesado el pensamiento aplicado y sostenido. Para alguien que ha alcanzado el tercer
jhana, ha cesado el arrobamiento. Para alguien que ha alcanzado el cuarto jhana, ha cesado
la inhalación y la exhalación. Para alguien que ha alcanzado la base de la infinitud del
espacio, ha cesado la percepción de la forma. Para alguien que ha alcanzado la base de la
infinitud de la conciencia, ha cesado la percepción perteneciente a la base de la infinitud del
espacio. Para alguien que ha alcanzado la base de la nada, ha cesado la percepción
perteneciente a la base de la infinitud de la conciencia. Para alguien que ha alcanzado la base
de la ni-percepción-ni-no-percepción, ha cesado la percepción perteneciente a la base de la
nada. Para alguien que ha alcanzado el cese de la percepción y la sensación, ha cesado la
percepción y la sensación. Para un monje, cuyas contaminaciones son destruidas, cesa la
codicia, cesa el odio y cesa la falsa ilusión.

“También, monje, he enseñado la sucesiva calma de las formaciones. Para alguien que ha
alcanzado el primer jhana, ha cesado el discurso… Para alguien que ha alcanzado el cese de
la percepción y la sensación, ha cesado la percepción y la sensación. Para un monje, cuyas
contaminaciones son destruidas, ha cesado la codicia, ha cesado el odio y ha cesado la falsa
ilusión.

“He aquí, monje, hay esas seis clases de calma. Para alguien que ha alcanzado el primer
jhana, se ha calmado el discurso. Para alguien que ha alcanzado el segundo jhana, se ha
calmado el pensamiento aplicado y sostenido. Para alguien que ha alcanzado el tercer jhana,
se ha calmado el arrobamiento. Para alguien que ha alcanzado el cuarto jhana, se han calmado
la inhalación y la exhalación. Para alguien que ha alcanzado el cese de la percepción y la
sensación, se ha calmado la percepción y la sensación. Para un monje, cuyas contaminaciones
son destruidas, se ha calmado la codicia, se ha calmado el odio y se ha calmado la falsa
ilusión”.

Monjes, cuando estas cuatro bases del poder espiritual se desarrollan y se cultivan, traen
mucho fruto y son de gran beneficio. ”

“¿Y cómo, monjes, estas cuatro bases del poder espiritual deben ser desarrolladas y
cultivadas, para que traigan mucho fruto y sean de gran beneficio? ”

“He aquí, monjes, el monje desarrolla la base del poder espiritual dotada de la concentración
debido al deseo y las formaciones volitivas del esfuerzo, pensando: ‘Este mi deseo no será
ni demasiado flojo ni demasiado tenso; no será demasiado restringido internamente ni
demasiado distraído externamente’. Y él permanece percibiendo antes y después: ‘Así antes,
como después; así después, como antes; así abajo, como arriba; así arriba, como abajo; así
de día, como de noche; así de noche, como de día’. Con la mente abierta y no envuelta, él
desarrolla la mente imbuida con luminosidad. ”

“Él desarrolla la base del poder espiritual dotada de la concentración debido a la energía…
Él desarrolla la base del poder espiritual dotada de la concentración debido a la mente… Él
desarrolla la base del poder espiritual dotada de la concentración debido a la investigación,
pensando: ‘Esta mi investigación no será ni demasiada floja ni demasiado tensa; no será
demasiado restringida internamente ni demasiado distraída externamente’. Y él permanece
percibiendo antes y después: ‘Así antes, como después; así después, como antes; así abajo,
como arriba; así arriba, como abajo; así de día, como de noche; así de noche, como de día’.
De esta manera, con la mente abierta y no envuelta, él desarrolla la mente imbuida con la
luminosidad. ”

i. Análisis del deseo como base del poder espiritual

“¿Y de qué manera, monjes, el deseo es demasiado flojo? Es cuando el deseo está
acompañado por la lasitud, cuando está asociado con la lasitud [1] . De esta manera, el deseo
es demasiado flojo. ”

“¿Y de qué manera, monjes, el deseo es demasiado tenso? Es cuando el deseo está
acompañado por la intranquilidad, cuando está asociado con la intranquilidad. De esta
manera, el deseo es demasiado tenso. ”

“¿Y de qué manera, monjes, el deseo es demasiado restringido internamente? Es cuando el


deseo está acompañado por la pereza y el letargo, cuando está asociado con la pereza y el
letargo. De esta manera, el deseo es demasiado restringido internamente. ”

“¿Y de qué manera, monjes, el deseo es demasiado distraído externamente? Es cuando el


deseo es repetidamente distraído externamente, cuando es repetidamente perturbado por
cuenta de las cinco cuerdas de los placeres sensuales. De esta manera, el deseo es demasiado
distraído externamente. ”

“¿Y de qué manera, monjes, el monje permanece percibiendo antes y después: ‘Así antes,
como después; así después como antes’? He aquí, monjes, la percepción del antes y después
está bien cogida por el monje, bien atendida, bien considerada y bien penetrada con sabiduría.
De esta manera, monjes, el monje permanece percibiendo antes y después: ‘Así antes, como
después; así después como antes’ [2] .

“¿Y de qué manera, monjes, el monje permanece ‘así abajo, como arriba; así arriba, como
abajo’? He aquí, monjes, el monje revisa este cuerpo hacia arriba desde los pies, y hacia
abajo desde la punta de los cabellos, revisa todo lo que está envuelto por la piel, como algo
que está lleno de diferentes clases de impurezas: cabellos, vellos, uñas, dientes, piel, carne,
tendones, huesos, médula ósea, riñones, corazón, hígado, membrana, bazo, pulmones,
intestinos, mesenterio, comida sin digerir, excremento, cerebro, bilis, flema, pus, sangre,
sudor, grasa, lágrimas, linfa, saliva, moco, sinovia y orín. De esta manera, monjes, el monje
permanece ‘así abajo, como arriba; así arriba, como abajo’.

“¿Y de qué manera, monjes, el monje permanece ‘a sí de día, como de noche; así de noche,
como de día’? He aquí, monjes, cuando el monje desarrolla de noche la base del poder
espiritual dotada de la concentración debido al deseo y las formaciones volitivas del esfuerzo,
de la misma manera, [desarrollando] las mismas cualidades, los mismos rasgos y los mismos
aspectos, que cuando desarrolla la base del poder espiritual durante el día. O, cuando el monje
desarrolla de día la base del poder espiritual dotada de la concentración debido al deseo y las
formaciones volitivas del esfuerzo, de la misma manera, [desarrollando] las mismas
cualidades, los mismos rasgos y los mismos aspectos, que cuando desarrolla la base del poder
espiritual durante la noche. De esta manera, monjes, el monje permanece ‘a sí de día, como
de noche; así de noche, como de día’.

“¿Y de qué manera, monjes, con la mente abierta y no envuelta, el monje desarrolla la mente
imbuida con la luminosidad? He aquí, monjes, la percepción de la luz está bien cogida por
el monje; él está bien resuelto en relación a la percepción del día [3] . De esta manera, monjes,
con la mente abierta y no envuelta, el monje desarrolla la mente imbuida con la luminosidad.

ii. Análisis de la energía como base del poder espiritual

“¿Y de qué manera, monjes, la energía es demasiado floja? Es cuando la energía está
acompañada por la lasitud, cuando está asociada con la lasitud. De esta manera, la energía es
demasiado floja.”

“¿Y de qué manera, monjes, la energía es demasiado tensa? Es cuando la energía está
acompañada por la intranquilidad, cuando está asociada con la intranquilidad. De esta
manera, la energía es demasiado tensa. ”

“¿Y de qué manera, monjes, la energía es demasiado restringida internamente? Es cuando la


energía está acompañada por la pereza y el letargo, cuando está asociada con la pereza y el
letargo. De esta manera, la energía es demasiado restringida internamente. ”

“¿Y de qué manera, monjes, la energía es demasiado distraída externamente? Es cuando la


energía es repetidamente distraída externamente, cuando es repetidamente perturbada por
cuenta de las cinco cuerdas de los placeres sensuales. De esta manera, la energía es
demasiado distraída externamente… (sigue igual que en el análisis del deseo )…
“De esta manera, monjes, con la mente abierta y no envuelta, el monje desarrolla la mente
imbuida con la luminosidad. ”

iii. Análisis de la mente como base del poder espiritual

“¿Y de qué manera, monjes, la mente es demasiado floja? Es cuando la mente está
acompañada por la lasitud, cuando está asociada con la lasitud. De esta manera, la mente es
demasiado floja ”

“¿Y de qué manera, monjes, la mente es demasiado tensa? Es cuando la mente está
acompañada por la intranquilidad, cuando está asociada con la intranquilidad. De esta
manera, la mente es demasiado tensa. ”

“¿Y de qué manera, monjes, la mente es demasiado restringida internamente? Es cuando la


mente está acompañada por la pereza y el letargo, cuando está asociada con la pereza y el
letargo. De esta manera, la mente es demasiado restringida internamente. ”

“¿Y de qué manera, monjes, la mente es demasiado distraída externamente? Es cuando la


mente es repetidamente distraída externamente, cuando es repetidamente perturbada por
cuenta de las cinco cuerdas de los placeres sensuales. De esta manera, la mente es demasiado
distraída externamente… (sigue igual que en el análisis del deseo y de la energía )…

“De esta manera, monjes, con la mente abierta y no envuelta, el monje desarrolla la mente
imbuida con la luminosidad. ”

iv. Análisis de la investigación como base del poder espiritual

“¿Y de qué manera, monjes, la investigación es demasiado floja? Es cuando la investigación


está acompañada por la lasitud, cuando está asociada con la lasitud. De esta manera, la
investigación es demasiado floja. ”

“¿Y de qué manera, monjes, la investigación es demasiado tensa? Es cuando la investigación


está acompañada por la intranquilidad, cuando está asociada con la intranquilidad. De esta
manera, la investigación es demasiado tensa. ”

“¿Y de qué manera, monjes, la investigación es demasiado restringida internamente? Es


cuando la investigación está acompañada por la pereza y el letargo, cuando está asociada
con la pereza y el letargo. De esta manera, la investigación es demasiado restringida
internamente. ”

“¿Y de qué manera, monjes, la investigación es demasiado distraída externamente? Es


cuando la investigación es repetidamente distraída externamente, cuando es repetidamente
perturbada por cuenta de las cinco cuerdas de los placeres sensuales. De esta manera, la
investigación es demasiado distraída externamente… (sigue igual que en el análisis del deseo
y de la energía )…

“De esta manera, monjes, con la mente abierta y no envuelta, el monje desarrolla la mente
imbuida con la luminosidad. ”

“Monjes, cuando estas cuatro bases del poder espiritual se desarrollan y se cultivan de esta
manera, traen muchos frutos y son de gran beneficio. ”

“Monjes, cuando estas cuatro bases del poder espiritual se desarrollan y se cultivan de esta
manera, el monje ejerce varias clases del poder espiritual: s iendo uno, se convierte en
muchos y siendo muchos, se convierte en uno. Aparece y desaparece. Sin impedimento
alguno, traspasa las paredes, terraplenes y montañas, como si fueran aire. Se zambulle dentro
de la tierra, como si fuera agua. Camina sobre el agua sin hundirse, como si fuera tierra seca.
Sentado con piernas cruzadas, atraviesa los aires como si fuera un pájaro sobre el viento. Con
su mano toca y, hasta da palmadas al sol y la luna, así es de imponente y poderoso. Ejercita
la influencia de su cuerpo hasta los mundos del Brama. ”

“Con el oído divino, purificado y que supera el de los seres humanos, él escucha a ambas
clases de sonidos: los divinos y los humanos, provenientes de lejos o de cerca. ” “Con su
propia mente, él conoce y distingue la mente de los otros seres o de otras personas. Conoce
la mente afectada por la pasión, como mente apasionada, y la mente sin pasión, como la
mente liberada de la pasión. Conoce la mente afectada por la aversión, como la mente con
aversión, y la mente sin aversión, como la mente liberada de aversión. Conoce la mente
afectada por la falsa ilusión, como mente mal ilusionada, y la mente sin falsa ilusión, como
la mente liberada de la falsa ilusión. Discierne la mente restringida como tal y sabe cuándo
la mente está dispersa. Cuando una mente está expandida, la reconoce como expandida y
cuando está estrecha, sabe que está estrecha. A una mente destacada, la reconoce como
destacada y una mente corriente reconoce como tal. Sabe cuándo la mente está concentrada
y cuando no lo es, en ambos casos lo discierne correctamente, como también cuando la mente
está liberada y cuando no. ”

“Él se acuerda de sus múltiples vidas pasadas: de un nacimiento, dos nacimientos, tres
nacimientos, cuatro, cinco, diez, veinte, treinta, cuarenta, cincuenta, cien, mil, cien mil
nacimientos, muchos eones de las contracciones cósmicas, muchos eones de las expansiones
cósmicas, muchos eones de las contracciones y expansiones cósmicas, recordando: ‘En aquel
entonces, mi nombre era así, mi linaje era éste y provenía de ésta casta; me alimentaba de
ésta clase de comida, experimentaba ésta y aquella clase de alegrías y penas y he vivido ésta
cantidad de años. Habiendo terminado mi vida ahí, me he reconectado allá, donde mi nombre
era... Habiendo terminado mi vida ahí, me he reconectado aquí’. De esta manera, se acuerda
de varias de sus vidas pasadas, con sus condiciones y detalles. ”
“A través del ojo divino, purificado y que sobrepasa el humano, ve la muerte de los seres y
su reaparición, discerniendo si su destino es inferior o superior, hermoso u horrible,
afortunado o desafortunado, de acuerdo al kamma de cada uno. Conoce de esta manera:
‘Estos seres, que obraron mal con su cuerpo, con su habla o con su mente, los que injuriaban
a los nobles, mantenían los incorrectos puntos de vista y asumían acciones resultantes de
estos erróneos puntos de vista, al quebrarse su cuerpo, después de la muerte, han reaparecido
en el plano de las penurias, de mal destino, en los reinos bajos, en el infierno. Pero aquellos
seres, que obraron bien con su cuerpo, con su habla o con su mente, los que no injuriaban a
los nobles, mantenían los correctos puntos de vista y asumían acciones resultantes de estos
correctos puntos de vista, al quebrarse su cuerpo, después de la muerte, han reaparecido en
el buen destino, en el mundo celestial’. De esta manera, a través del ojo divino, purificado y
que sobrepasa el humano, él ve la muerte de los seres y su reaparición, discerniendo si su
destino inferior o superior, hermoso u horrible, afortunado o desafortunado, de acuerdo a su
kamma. ” “Monjes, cuando estas cuatro bases del poder espiritual se desarrollan y se cultivan
de esta manera, el monje , con la destrucción de las impurezas mentales, ya en esta vida, el
monje entra y permanece en la mente liberada de las impurezas mentales, en la liberación
mediante la sabiduría, descubriendo por sí mismo el conocimiento directo. ”

“De esta manera, monjes, cuando estas cuatro bases del poder espiritual se desarrollan y se
cultivan, traen muchos frutos y son de gran beneficio.”

En este sutta, el Buda, instruye al Venerable Ananda sobre la práctica que lleva a “entrar
dentro de la vacuidad”, que es la entrada a la liberación.

[Leer en pali]

He oído que en una ocasión el Bendito estaba en Savattthi en el Monasterio del Este, en el
Palacio de la Madre de Migara. Luego en la noche, el Venerable Ananda, saliendo de su
retiro, se dirigió al Bendito y, a su llegada, después de haberse postrado ante él, se sentó a
un lado. Una vez sentado allí, le dijo al Bendito: “En una ocasión, cuando el Bendito estaba
entre los Shakyas en un pueblo de los Shakya llamado Nagaraka, allí –junto con el
Bendito- he escuchado esto, aprendido esto: ‘Ahora permanezco completamente en una
morada vacía’. ¿Lo escuché correctamente, lo aprendí correctamente, le presté atención
correctamente, lo recordé correctamente?”
[El Buddha]: “Sí, Ananda, lo escuchó correctamente, lo comprendió correctamente, le
prestó la atención correcta, lo ha recordado correctamente. Ahora, así como antes,
permanezco plenamente en una morada vacía. Así como este Palacio de la Madre de
Migara está vacío de elefantes, ganado, y yeguas, vacío de oro y plata, vacío de asambleas
de mujeres y hombres, y sólo existe este no-vacío – la unidad basada en la comunidad de
monjes-; aún así, Ananda, un monje –sin prestar atención a la percepción [1] de la aldea,
sin prestar atención a la percepción del ser humano- presta atención a la unidad basada en
la percepción de la naturaleza. Su mente se complace, encuentra satisfacción, calma, y
complacencia en sus percepciones de la naturaleza”.

“Él entiende que ‘Independientemente de las perturbaciones que existiesen basadas en la


percepción de la aldea, no están presentes. Independientemente de las perturbaciones que
existiesen basadas en la percepción del ser humano, no están presentes. Sólo existe este
mínimo de perturbación: la unidad basada en la percepción de la naturaleza’. Él entiende
que: ‘Este modo de percepción está vacío de la percepción de la aldea. Este modo de
percepción está vacío de la percepción del ser humano. Sólo existe este no-vacío: la unidad
basada en la percepción de la naturaleza’. Así lo considera vacío de lo que no está ahí. Lo
que quede, él lo entiende como presente: ‘Existe esto’. Así pues, su entrada al vacío, está
de acuerdo con la realidad, está sin distorsión de significado, y es pura”.

La Percepción de la tierra

“De nuevo, Ananda, el monje –que no presta atención a la percepción del ser humano, que
no presta atención a la percepción de la naturaleza- presta atención a la unidad basada en la
percepción de la tierra. Su mente se complace, encuentra satisfacción, calma, y
complacencia en su percepción de la tierra. Tal como la piel de un toro se estira libre de
arrugas con cientos de estacas, aún así –sin prestar atención a todas las arrugas y los
huecos, a los barrancos de los ríos, a las zonas de tocones y espinas, las irregularidades
escarpadas de esta tierra- él presta atención a la unidad basada en la percepción de la tierra.
Su mente se complace, encuentra satisfacción, calma, y complacencia en su percepción de
la tierra”.

“Él entiende que: ‘Independientemente de las perturbaciones que podrían existir basadas en
la percepción del ser humano, no están presentes. Sin importar las percepciones que
podrían existir basadas en la percepción de la naturaleza, no están presentes. Sólo existe
este mínimo de perturbación: la unidad basada en la percepción de la tierra’. Él entiende
que ‘Este modo de percepción está vacío de la percepción del ser humano. Este modo de
percepción está vacío de la percepción de la naturaleza. Sólo existe este no-vacío: la unidad
basada en la percepción de la tierra. Así lo considera como vacío de lo que no está ahí. De
lo que permanece, él entiende que: ‘Existe esto’. Así pues, su entrada al vacío, está de
acuerdo con la realidad, está sin distorsión de significado, y es pura”.
La Infinidad del Espacio

“De nuevo, Ananda, el monje –no presta atención a la percepción de la naturaleza, que no
presta atención a la percepción de la tierra- presta atención en la unidad basada en la
percepción de la dimensión de la infinidad del espacio. Su mente se complace, encuentra
satisfacción, calma, y complacencia en su percepción de la dimensión de la infinidad del
espacio”.
“Él entiende que: ‘Independientemente de las perturbaciones que podrían existir basadas en
la percepción de la naturaleza, no están presentes. Independientemente de las
perturbaciones que podrían existir basadas en la percepción de la tierra, no están presentes.
Sólo existe este mínimo de perturbación: la unidad basada en la percepción de la dimensión
de la infinidad del espacio’. Él entiende que: ‘Este modo de percepción está vacío de la
percepción de la naturaleza. Este modo de percepción está vacío de la percepción de la
tierra. Sólo existe este no-vacío: la unidad basada en la percepción de la dimensión de la
infinidad del espacio’. Así lo considera como vacío de lo que no está ahí.
De lo que permanece, él entiende como presente: ‘Existe esto’. Así pues, su entrada al vacío,
está de acuerdo con la realidad, está sin distorsión de significado, y es pura”.

La Infinidad de la Conciencia

“De nuevo, Ananda, el monje –que no presta atención a la percepción de la tierra, que no
presta atención a la percepción de la dimensión de la infinidad del espacio- presta atención
a la unidad basada en la percepción de la dimensión de la infinidad de la conciencia. Su
mente se complace, encuentra satisfacción, calma, y complacencia en su percepción de la
dimensión de la infinidad de la conciencia”.

“Él entiende que: ‘Independientemente de las perturbaciones que podrían existir basadas en
la percepción de la tierra, no están presentes. Independientemente de las perturbaciones que
podrían existir basadas en la percepción de la infinidad del espacio, no están presentes.
Sólo existe un mínimo de perturbación: la unidad basada en la percepción de la dimensión
de la infinidad de la conciencia’. Él entiende que: ‘Este modo de percepción está vacío de
la percepción de la tierra. Este modo de percepción está vacío de la percepción de la
dimensión de la infinidad del espacio. Sólo existe este no-vacío: la unidad basada en la
percepción de la dimensión de la infinidad de la conciencia’. Así lo considera como vacío
de lo que no está ahí. De lo que permanece, él entiende como presente: ‘Existe esto’. Así
pues, su entrada al vacío, está de acuerdo con la realidad, está sin distorsión de significado,
y es pura”.

La Nada

“De nuevo, Ananda, el monje –que no presta atención a la percepción de la dimensión de la


infinidad del espacio, que no presta atención a la percepción de la dimensión de la infinidad
de la conciencia- presta atención a la unidad basada en la percepción de la dimensión de la
nada. Su mente se complace, encuentra satisfacción, calma, y complacencia en su
percepción de la dimensión de la nada”.

“Él entiende que: ‘Independientemente de las perturbaciones que podrían existir basadas en
la percepción de la dimensión de la infinidad del espacio, no están presentes.
Independientemente de las perturbaciones que podrían existir basadas en la percepción de
la dimensión de la infinidad de la conciencia, no están presentes. Sólo existe un mínimo de
perturbación: la unidad basada en la percepción de la dimensión de la nada’. Él entiende
que: ‘Este modo de percepción está vacío de la percepción de la dimensión de la infinidad
del espacio. Este modo de percepción está vacío de la percepción de la dimensión de la
infinidad de la conciencia. Sólo existe este no-vacío: la unidad basada en la percepción de
la dimensión de la nada’. Así lo considera como vacío de lo que no está ahí. De lo que
permanece, él entiende como presente: ‘Existe esto’. Así pues, su entrada al vacío, está de
acuerdo con la realidad, está sin distorsión de significado, y es pura”.

Ni percepción ni no-percepción

“De nuevo, Ananda, el monje –que no presta atención a la percepción de la dimensión de la


infinidad de la conciencia, que no presta atención a la percepción de la dimensión de la
nada- presta atención a la unidad basada en la dimensión de ni percepción ni nopercepción.
Su mente se complace, encuentra satisfacción, calma, y complacencia en la dimensión de ni
percepción ni no-percepción”.

“Él entiende que: ‘Independientemente de las perturbaciones que podrían existir basadas en
la percepción de la infinidad de la conciencia, no están presentes. Independientemente de
las perturbaciones que podrían existir basadas en la percepción de la dimensión del vacío,
no están presentes. Sólo existe un mínimo de perturbación: la unidad basada en la
percepción de ni percepción ni no-percepción’. Él entiende que: ‘Este modo de percepción
está vació de la percepción de la dimensión de la infinidad de la conciencia. Este modo de
percepción está vacío de la percepción de la dimensión de la nada. Sólo existe este novacío:
la unidad basada en la dimensión de ni percepción ni no-percepción’. Así lo considera
como vacío de lo que no está ahí. De lo que permanece, él entiende como presente: ‘Existe
esto’. Así pues, su entrada al vacío, está de acuerdo con la realidad, está sin distorsión de
significado, y es pura”.

Concentración sin señal

“De nuevo, Ananda, el monje –que no presta atención a la percepción de la dimensión de la


nada, que no presta atención a la percepción de la dimensión de ni percepción ni
nopercepción- presta atención a la unidad basada en la concentración sin señal de la
atención. Su mente se complace, encuentra satisfacción, calma, y complacencia en su
concentración sin señal de la atención”.

“Él entiende que: ‘Independientemente de las perturbaciones que podrían existir basadas en
la percepción de la dimensión de la nada, no están presentes. Independientemente de las
perturbaciones que podrían existir basadas en la percepción de la dimensión de ni
percepción ni no-percepción, no están presentes. Sólo existe un mínimo de perturbación:
esa conectada con las seis esferas sensoriales, dependiente de este mismo cuerpo con vida
como de su condición’. Él entiende que: ‘Este modo de percepción está vacío de la
dimensión de la nada. Este modo de percepción está vacío de la percepción de la dimensión
de ni percepción ni no-percepción. Sólo existe este no-vacío: ese conectado con las seis
esferas sensoriales, dependiente de este mismo cuerpo con vida como su condición’. Así lo
considera como vacío de lo que no está ahí. De lo que permanece, él entiende como
presente: ‘Existe esto’. Así pues, su entrada al vacío, está de acuerdo con la realidad, está
sin distorsión de significado, y es pura”.

La Liberación

“De nuevo, Ananda, el monje –que no presta atención a la percepción de la dimensión de la


nada, que no presta atención a la percepción de la dimensión de ni percepción ni de
nopercepción- presta atención a la unidad basada en la concentración sin señal de la
atención. Su mente se complace, encuentra satisfacción, calma, y complacencia en su
concentración sin señal de la atención”.

“Él entiende que: ‘Esta concentración sin señal de la atención es producida y creada
mentalmente’. Y entiende que: ‘Lo que es producido y creado mentalmente es
nopermanente y está sujeto a la cesación’. Para él –conociendo así, viendo así- la mente es
liberada de la contaminación la sensualidad, de la contaminación del ser, de la
contaminación de la ignorancia. Con la liberación, existe el conocimiento, ‘Está liberado’.
Él entiende que ‘El nacimiento se ha agotado, la vida santa se ha realizado, el cometido se
ha alcanzado. Ya no hay algo más para este mundo’.

“Él entiende que: ‘Independientemente de las perturbaciones que podrían existir basadas en
la contaminación de la sensualidad, de la contaminación del ser, de la contaminación de la
ignorancia, no están presentes. Y sólo existe este mínimo de perturbación: el que está unido
con las seis esferas sensoriales, dependiente de este mismo cuerpo con vida como su
condición’. Él entiende que: ‘Este modo de percepción está vacío de la contaminación de la
sensualidad, de la contaminación del ser, de la contaminación de la ignorancia. Y sólo
existe este no-vacío: el que está unido a las seis esferas sensoriales, dependiente de este
mismo cuerpo con vida como su condición’. Así lo considera como vacío de lo que no está
ahí. Lo que permanece, él lo entiende como presente: ‘Existe esto’. Así pues, su entrada al
vacío, está de acuerdo con la realidad, está sin distorsión de significado, y es pura – elevada
y sin par”.

“Ananda, independientemente de los meditadores y sacerdotes que hayan entrado en el


pasado y permanecido en un vacío que era puro, elevado, y sin par, todos entraron y
permanecieron en este mismo vacío que es puro, elevado, y sin par. Independientemente de
los meditadores y monjes que en el futuro entrarán y permanecerán en un vacío que será
puro, elevado, y sin par, todos ellos entrarán y permanecerán en este mismo vacío que es
puro, elevado, y sin par. Independientemente de los meditadores y monjes que actualmente
entran y permanecen en un vacío que es puro, elevado, y sin par, todos ellos entran y
permanecen en este mismo vacío que es puro, elevado, y sin par”.

“Por lo tanto, Ananda, ustedes deberían entrenarse: ‘Nosotros entraremos y permaneceremos


en el vacío que es puro, superior, e insuperable’”.

Esto es lo que el Bendito dijo. Agradecido, el Venerable Ananda se regocijó en las palabras
del Bendito.

“Monjes, si el monje gana la concentración, si gana la unidireccionalidad de la mente basada


en el deseo, esto se llama la concentración a través del deseo. Entonces genera el deseo de
que no surjan los malos y perjudiciales estados que aún no han surgido: hace el esfuerzo,
despierta la energía, aplica su mente y esfuerzos. Además, genera el deseo de abandonar los
malos y perjudiciales estados que ya han surgido: hace el esfuerzo, despierta la energía,
aplica su mente y esfuerzos. Además, genera el deseo de que surjan los saludables estados
que aún no han surgido: hace el esfuerzo, despierta la energía, aplica su mente y esfuerzos.
Además, genera el deseo de que permanezcan los saludables estados mentales que ya han
surgido, que los mismos no decaigan sino que se incrementen, se expandan, lleguen a su
máximo desarrollo y cumplimiento: hace el esfuerzo, despierta la energía, aplica su mente y
esfuerzos. Estos se llaman las formaciones volitivas del esfuerzo. Este es el deseo y ésta es
la concentración a través del deseo, y éstas son las formaciones volitivas del esfuerzo. Esto
se llama la base para el poder espiritual dotada de la concentración debido al deseo y la
formaciones volitivas del esfuerzo’.

“Monjes, si el monje gana la concentración, si gana la unidireccionalidad de la mente


basada en la energía… basada en la mente… basada en la investigación, esto se llama la
concentración a través de la investigación. Entonces genera el deseo de que no surjan los
malos y perjudiciales estados que aún no han surgido: hace el esfuerzo, despierta la
energía, aplica su mente y esfuerzos. Además, genera el deseo de abandonar los malos y
perjudiciales estados que ya han surgido: hace el esfuerzo, despierta la energía, aplica su
mente y esfuerzos. Además, genera el deseo de que surjan los saludables estados que aún
no han surgido: hace el esfuerzo, despierta la energía, aplica su mente y esfuerzos. Además,
genera el deseo de que permanezcan los saludables estados mentales que ya han surgido,
que los mismos no decaigan sino que se incrementen, se expandan, lleguen a su máximo
desarrollo y cumplimiento: hace el esfuerzo, despierta la energía, aplica su mente y
esfuerzos. Estos se llaman las formaciones volitivas del esfuerzo. Esta es la investigación y
ésta es la concentración a través de la investigación, y éstas son las formaciones volitivas
de la investigación. Esto se llama la base para el poder espiritual dotada de la concentración
debido a la investigación y la formaciones volitivas del esfuerzo’.
Channovada Sutta} [1] {389} Esto he escuchado:

En una ocasión, el Bienaventurado estaba morando en Rajagaha, en la Arboleda de los


Bambúes, donde van las ardillas en busca de comida.

[2] Al mismo tiempo, el Venerable Sariputta, el Venerable Mahacunda y el Venerable


Channa estaban morando en el monte Pico de Buitre.

[3] En esta ocasión el Venerable Channa estaba aquejado, afligido y gravemente enfermo.
Entonces, cuando llegó la tarde, el Venerable Sariputta emergió del retiro, se acercó al
Venerable Mahacunda y le dijo: "Ven, amigo Cunda, acerquémonos al Venerable Channa e
indaguemos acerca de su enfermedad".

"Sí, amigo", respondió el Venerable Mahacunda.

[4] Entonces, el Venerable Sariputta y el Venerable Mahacunda se acercaron al Venerable


Channa e intercambiaron en él cordiales saludos, después de lo cual se sentaron en los
asientos preparados para ellos. Y el Venerable Sariputta dijo luego al Venerable
Channa: "Espero que lo estés soportando bien, amigo Channa, espero que te encuentres
mejor. Espero que tu sensación penosa esté disminuyendo y no incrementándose, y que
esta disminución sea la que se pueda discernir y no su incremento."

[5] "Amigo Sariputta, no lo estoy soportando bien ni me encuentro mejor. Una fuerte
sensación penosa se está incrementando en mí y no disminuyendo, y este incremento es
el que se puede discernir y no su disminución. Es como si un fuerte hombre partiera mi
cabeza abriéndola con una afilada espada, así también de violentos son los vientos que
atraviesan mi cabeza. Por eso no lo estoy soportando bien... Es como si un fuerte
hombre estirara una resistente correa de cuero alrededor de mi cabeza como una venda,
así también de violentos son los dolores en mi cabeza. Por eso no lo estoy soportando
bien... Es como si un hábil carnicero o su aprendiz estuviera abriendo el vientre del
buey con un afilado cuchillo, así también de violentos son los vientos que cortan mi
vientre. Por eso no lo estoy soportando bien... Es como si dos fuertes hombres sujetaran
a uno débil por los dos brazos asándolo sobre un pozo lleno de carbón ardiente, así

también de violenta es la quemadura que tengo dentro de mi cuerpo. Por eso no lo estoy
soportando bien ni me encuentro mejor. Una fuerte sensación penosa está aumentando
en mí y no está disminuyendo, y este incremento es el que se puede discernir y no su
disminución. Quiero usar el cuchillo [1], amigo Sariputta, no tengo deseo de seguir
viviendo."
[6] {390} "Que el venerable Channa no use el cuchillo. Que el venerable Channa siga
viviendo. Nosotros queremos al venerable Channa con vida. Si el venerable Channa
carece de la comida apropiada, voy a ir en busca de la comida apropiada para él; si el
venerable Channa carece de la apropiada medicina, voy a ir en busca de la apropiada
medicina para él; si el venerable Channa carece del asistente personal, yo voy a ser el
asistente personal para él. Pero que el venerable Channa no use el cuchillo. Que el
venerable Channa siga viviendo. Nosotros queremos al venerable Channa con vida."

[7] "Amigo Sariputta, he aquí, no hay carencia de la comida apropiada; yo tengo la comida
apropiada. No hay carencia de la apropiada medicina; yo tengo la apropiada medicina.
No hay carencia del asistente personal; tengo el asistente personal. No obstante, amigo,
por largo tiempo he servido al Maestro de manera agradable, no de manera
desagradable. Es apropiado para el discípulo, servir al Maestro de manera agradable y
no de manera desagradable. Recuerda esto, amigo Sariputta: el bhikkhu Channa va a
usar el cuchillo sin censura [2]."

[8] "Nosotros quisiéramos preguntar al venerable Channa acerca de un punto, si es que el


venerable Channa quisiera otorgarnos el favor de respondernos." "Pregunta, amigo
Sariputta, cuando lo escuche voy a saber".

[9] {391} "Amigo Channa, ¿consideras el ojo, la conciencia del ojo y las cosas
cognoscibles a través de la consciencia del ojo de esta manera: 'esto es mío, esto soy yo,
esto es mi ser'? ¿Consideras el oído, la conciencia del oído y las cosas cognoscibles a
través de la consciencia del oído de esta manera: 'esto es mío, esto soy yo, esto es mi
ser'? ¿Consideras la mente, la conciencia de la mente y las cosas cognoscibles a través
de la consciencia de la mente de esta manera: 'esto es mío, esto soy yo, esto es mi ser'?"

"Amigo Sariputta, yo considero el ojo, la conciencia del ojo y las cosas cognoscibles a
través de la consciencia del ojo de esta manera: 'esto no es mío, esto no soy yo, esto no es
mi ser'. Además considero el oído, la conciencia del oído y las cosas cognoscibles a través
de la consciencia del oído de esta manera: 'esto no es mío, esto no soy yo, esto no es mi
ser'. Y también considero la mente, la conciencia de la mente y las cosas cognoscibles a
través de la consciencia de la mente de esta manera: 'esto no es mío, esto no soy yo, esto no
es mi ser'."

[10] {392} "Amigo Channa, ¿qué es lo que ves y conoces directamente en el ojo, en la
conciencia del ojo y en las cosas cognoscibles a través de la consciencia del ojo cuando
lo consideras de esta manera: 'esto no es mío, esto no soy yo, esto no es mi ser'? ¿Qué
es lo que ves y conoces directamente en el oído, en la conciencia del oído y en las cosas
cognoscibles a través de la consciencia del oído cuando lo consideras de esta manera:
'esto no es mío, esto no soy yo, esto no es mi ser'. ¿Qué es lo que ves y conoces
directamente en la mente, en la conciencia de la mente y en las cosas cognoscibles a
través de la consciencia de la mente cuando lo consideras de esta manera: 'esto no es
mío, esto no soy yo, esto no es mi ser'."

"Amigo Sariputta, es porque veo y conozco directamente el cese en el ojo, en la conciencia


del ojo y en las cosas cognoscibles a través de la consciencia del ojo, que lo considero de
esta manera: 'esto no es mío, esto no soy yo, esto no es mi ser'. Es porque veo y conozco
directamente el cese en el oído, en la conciencia del oído y en las cosas cognoscibles a
través de la consciencia del oído, que lo considero de esta manera: 'esto no es mío, esto no
soy yo, esto no es mi ser'. Es porque veo y conozco directamente el cese en la mente, en la
conciencia de la mente y en las cosas cognoscibles a través de la consciencia de la mente,
que lo considero de esta manera: 'esto no es mío, esto no soy yo, esto no es mi ser'."

[11] {393} Cuando esto fue dicho el Venerable Mahacunda dijo al Venerable Channa: "Por
lo tanto, amigo Channa, a esta enseñanza del Bienaventurado se debe prestar atención
continuamente: 'para alguien que es dependiente existe vacilación; para alguien que es
independiente no existe tal vacilación. Cuando no hay vacilación, hay tranquilidad.
Cuando hay tranquilidad, no existe inclinación. Cuando no existe inclinación, no hay ir
y venir. Cuando no hay ir y venir, no hay fallecimientos y renacimientos. Cuando no
existen fallecimientos y renacimientos, no hay aquí y más allá ni nada entre los dos.
Esto en sí mismo es el fin de la insatisfacción."

[12] {394} Entonces, cuando el Venerable Sariputta y el Venerable Mahacunda ofrecieron


al Venerable Channa esta exhortación, se levantaron de sus asientos y partieron de allí.
Entonces, no mucho después de que se hayan ido, el Venerable Channa usó el cuchillo.

[13] Seguidamente, el Venerable Sariputta se acercó al Bienaventurado, le rindió


homenaje, se sentó a un lado y dijo: "Venerable señor, el venerable Channa usó el
cuchillo. ¿Cuál será su destino? ¿Cuál es su futuro nacimiento?"

"Sariputta, ¿no ha declarado el bhikkhu Channa la ausencia de lo censurable en tu propia


presencia? [3]"

"Venerable señor, allí está el pueblo de los vajjianos de nombre Pubbavijjhana. Ahí el
venerable Channa tuvo sus familiares amigos, íntimos familiares y familiares que lo
hospedaban [4]."

"El venerable Channa, Sariputta, realmente tuvo estos familiares amigos, íntimos familiares
y familiares que lo hospedaban; pero yo no digo que por esto uno se hace censurable.
Sariputta, cuando uno recuesta este cuerpo y toma otro cuerpo, entonces yo digo que uno se
vuelve censurable. Pero esto no sucedió en el caso del bhikkhu Channa. El bhikkhu Channa
ha usado el cuchillo sin ser censurable. Esto es, Sariputta, lo que deberías recordar".
Esto es lo que dijo el Bienaventurado y el Venerable Sariputta fue satisfecho y se deleitó en
las palabras del Bienaventurado.

Escenario]

[1] Esto he escuchado. En una ocasión, el Bienaventurado estaba morando entre los kurus,
donde había uno de sus pueblos de nombre Kammasadamma. Estando allí, el
Bienaventurado se dirigió a los monjes con estas palabras: "Monjes." - "Venerable Señor",
contestaron los monjes y el Bienaventurado continuó:

Uddesa - Indicación

"Monjes, este es el camino directo para la purificación de los seres, para la superación de la
pena y las lamentaciones, para la desaparición del dolor y de la aflicción, para alcanzar el
recto sendero, para la realización del Nibbana, es decir, los cuatro establecimientos de la
atención consciente.

"¿Cuáles son esos cuatro? He aquí, monjes, el monje mora contemplando el cuerpo como
cuerpo, ardiente, plenamente atento y consciente, habiendo dejado atrás la codicia y la
aflicción por el mundo. Él mora contemplando las sensaciones como sensaciones, ardiente,
plenamente atento y consciente, habiendo dejado atrás la codicia y la aflicción por el
mundo. Él mora contemplando la mente como mente, ardiente, plenamente atento y
consciente, habiendo dejado atrás la codicia y la aflicción por el mundo. Él mora
contemplando los objetos mentales como objetos mentales, ardiente, plenamente atento y
consciente, habiendo dejado atrás la codicia y la aflicción por el mundo.

1. Kayanupassana - Contemplación del cuerpo


1.1. Kayanupassanaanapanapabba - Sección con la contemplación del cuerpo a través
de inhalación y exhalación

[2] "Y ¿cómo, monjes, el monje mora contemplando el cuerpo como cuerpo? He aquí,
monjes, el monje va al bosque, al pie de un árbol o a una choza vacía y se sienta; habiendo
cruzado las piernas, pone su cuerpo erguido y establece su atención consciente enfrente.
Siempre conscientemente atento inhala y conscientemente atento exhala. Cuando hace una
inhalación larga, entiende: 'mi inhalación es larga'; o cuando hace una exhalación larga,
entiende: 'mi exhalación es larga'. Cuando hace una inhalación corta, entiende: 'mi
inhalación es corta'; o cuando hace una exhalación corta, entiende: 'mi exhalación es corta'.
Y se entrena así: 'Voy a inhalar experimentando el cuerpo enetro'; y se entrena así: 'Voy a
exhalar experimentando el cuerpo enetro'. Y se entrena así: 'Voy a inhalar calmando las
formaciones corporales'; y se entrena así: 'Voy a exhalar calmando las formaciones
corporales'. Al igual que un hábil tornero o su aprendiz, al hacer un gran giro entiende:
'estoy haciendo un giro grande'; o al hacer un giro pequeño entiende: 'estoy haciendo un
giro pequeño', de la misma manera, monjes, el monje, cuando hace una inhalación larga,
entiende: 'mi inhalación es larga'... y se entrena así: 'Voy a exhalar calmando las
formaciones corporales'.

"De esta manera mora contemplando el cuerpo como cuerpo internamente, o mora
contemplando el cuerpo como cuerpo externamente, o mora contemplando el cuerpo como
cuerpo de ambas formas: interna y externamente. Mora contemplando la naturaleza del
surgimiento en el cuerpo, o mora contemplando la naturaleza del cese en el cuerpo, o mora
contemplando ambas cosas: la naturaleza del surgimiento y la naturaleza del cese en el
cuerpo. O, estando consciente de que 'he aquí el cuerpo', simplemente se establece en él en
la medida necesaria para un conocimiento descubierto y la atención consciente. Y mora con
independencia, no apegado a nada en el mundo. Es así, monjes, cómo el monje mora
contemplando el cuerpo como cuerpo.

1.2. Kayanupassanairiyapathapabba - Sección con la contemplación del cuerpo a través


de las cuatro posturas

[3] "Además, monjes, cuando el monje camina, entiende: 'estoy caminando'; cuando está de
pie, entiende: 'estoy de pie'; cuando está sentado, entiende: 'estoy sentado'; cuando se
recuesta, entiende: 'estoy recostado'; o entiende cualquier otra postura que asume su cuerpo.
"De esta manera mora contemplando el cuerpo como cuerpo internamente, o mora
contemplando el cuerpo como cuerpo externamente, o mora contemplando el cuerpo como
cuerpo de ambas formas: interna y externamente... Y mora con independencia, no apegado
a nada en el mundo. Es así también, monjes, cómo el monje mora contemplando el cuerpo
como cuerpo.

1.3. Kayanupassanasampajanapabba - Sección con la contemplación del cuerpo a través


del discernimiento

[4] "Además, monjes, el monje es uno que actúa con discernimiento cuando camina hacia
adelante y cuando retorna; que actúa con discernimiento cuando mira hacia adelante y
cuando mira hacia otro lado; que actúa con discernimiento cuando recoge y cuando
extiende sus miembros; que actúa con discernimiento cuando viste su hábito y cuando lleva
su hábito exterior y el cuenco; que actúa con discernimiento cuando come, bebe, mastica y
saborea; que actúa con discernimiento cuando camina, está de pie, cuando se sienta o se
acuesta a dormir, cuando se despierta, cuando habla o cuando permanece en silencio.

"De esta manera mora contemplando el cuerpo como cuerpo internamente, o mora
contemplando el cuerpo como cuerpo externamente, o mora contemplando el cuerpo como
cuerpo de ambas formas: interna y externamente... Y mora con independencia, no apegado
a nada en el mundo. Es así también, monjes, cómo el monje mora contemplando el cuerpo
como cuerpo.

1.4. Kayanupassanapatikulamanasikarapabba - Sección con la contemplación del


cuerpo a través de la repugnancia de sus partes

[5] "Además, monjes, el monje revisa este mismo cuerpo desde la planta de los pies hacia
arriba y desde la punta de la coronilla hacia abajo, envuelto en piel y lleno de diferentes
clases de impurezas, de esta manera: 'He aquí que en este cuerpo hay cabellos, vellos, uñas,
dientes, piel, carne, tendones, huesos, médula ósea, riñones, corazón, hígado, membrana,
bazo, pulmones, intestinos, mesenterio, comida no digerida, excremento, bilis, flema, pus,
sangre, sudor, grasa, lágrimas, linfa, saliva, moco, sinovia y orín'. Al igual que un saco de
provisiones con la abertura en ambos extremos, lleno de diversas clases de grano, tales
como el arroz de la colina, arroz rojo, frijoles, guisantes, mijo y arroz blanco, estuviera
siendo examinando por un hombre con buena vista de esta manera: 'este es el arroz de la
colina, arroz rojo, frijoles, guisantes, mijo y arroz blanco'; de la misma manera, monjes, el
monje revisa este mismo cuerpo... lleno de diferentes clases de impurezas de esta manera:
'He aquí que en este cuerpo hay cabellos... orín'.

"De esta manera mora contemplando el cuerpo como cuerpo internamente, o mora
contemplando el cuerpo como cuerpo externamente, o mora contemplando el cuerpo como
cuerpo de ambas formas: interna y externamente... Y mora con independencia, no apegado
a nada en el mundo. Es así también, monjes, cómo el monje mora contemplando el cuerpo
como cuerpo.

1.5. Kayanupassanadhatumanasikarapabba - Sección con la contemplación del cuerpo a


través de los elementos

[6] "Además, monjes, el monje revisa este mismo cuerpo, en cualquier lugar o posición en
que se encuentre, como consistente en los elementos de esta manera: 'He aquí, en este
cuerpo están: el elemento de la tierra, el elemento del agua, el elemento del fuego y el
elemento del aire'. Al igual que un hábil carnicero o su aprendiz, que mata a una vaca y,
dividiéndola en partes, se sienta con ellas en el cruce de los caminos, de la misma manera
el monje revisa este mismo cuerpo, en cualquier lugar o posición en que se encuentre,
como consistente en los elementos de esta manera: 'He aquí, en este cuerpo están: el
elemento de la tierra, el elemento del agua, el elemento del fuego y el elemento del aire'.

"De esta manera mora contemplando el cuerpo como cuerpo internamente, o mora
contemplando el cuerpo como cuerpo externamente, o mora contemplando el cuerpo como
cuerpo de ambas formas: interna y externamente... Y mora con independencia, no apegado
a nada en el mundo. Es así también, monjes, cómo el monje mora contemplando el cuerpo
como cuerpo.
1.6. Kayanupassanananavasivathikarapabba - Sección con las nueve formas de
contemplación del cuerpo en el cementerio

[7] "Además, monjes, el monje compara este mismo cuerpo con el cuerpo arrojado al
suelo del cementerio, muerto desde hace un día, o dos días, o tres días; hinchado, lívido y
putrefacto de esta manera: 'Este cuerpo mío tiene la misma naturaleza, alguna vez será
igual a aquel cuerpo y no está exento de este destino' (1).

"De esta manera mora contemplando el cuerpo como cuerpo internamente, o mora
contemplando el cuerpo como cuerpo externamente, o mora contemplando el cuerpo como
cuerpo de ambas formas: interna y externamente... Y mora con independencia, no apegado
a nada en el mundo. Es así también, monjes, cómo el monje mora contemplando el cuerpo
como cuerpo.

[8] "Además, monjes, el monje compara este mismo cuerpo con el cuerpo arrojado al
suelo del cementerio devorado por los cuervos, halcones, buitres, perros, chacales o por las
distintas clases de gusanos de esta manera: 'Este cuerpo mío tiene la misma naturaleza,
alguna vez será igual a aquel cuerpo y no está exento de este destino'.

"...Es así también, monjes, cómo el monje mora contemplando el cuerpo como cuerpo (2).

[9] "Además, monjes, el monje compara este mismo cuerpo con el cuerpo arrojado al
suelo del cementerio, reducido a un esqueleto con algo de carne y sangre, unido tan sólo
por los tendones... (3) ...reducido a un esqueleto sin carne y manchado por sangre, unido
tan solo por los tendones... (4) ...reducido a un esqueleto sin carne ni sangre, unido tan sólo
por los tendones... (5) ...reducido a huesos sueltos esparcidos en todas direcciones -aquí el
hueso de la mano, allí el hueso del pie, aquí la espina dorsal, allí el hueso del muslo, aquí la
pelvis, allí el hueso de la espalda, aquí el hueso del brazo, allí el hueso del hombro, aquí el
hueso del cuello, allí la mandíbula, aquí el diente, allí el cráneo- de esta manera: 'Este
cuerpo mío tiene la misma naturaleza, alguna vez será igual a aquel cuerpo y no está exento
de este destino'.

"...Es así también, monjes, cómo el monje mora contemplando el cuerpo como cuerpo (6).
[10] "Además, monjes, el monje compara este mismo cuerpo con el cuerpo arrojado al
suelo del cementerio reducido a huesos blanqueados, de color blanco como el de una
concha... (7) ...reducido a huesos amontonados de más de un año... (8) ...reducido a huesos
rotos y desmoronados y hechos polvo, - de esta manera: 'Este cuerpo mío tiene la misma
naturaleza, alguna vez será igual a aquel cuerpo y no está exento de este destino'.

"De esta manera mora contemplando el cuerpo como cuerpo internamente, o mora
contemplando el cuerpo como cuerpo externamente, o mora contemplando el cuerpo como
cuerpo de ambas formas: interna y externamente. Mora contemplando la naturaleza del
surgimiento en el cuerpo, o mora contemplando la naturaleza del cese en el cuerpo, o mora
contemplando ambas cosas: la naturaleza del surgimiento y la naturaleza del cese en el
cuerpo. O, siendo consciente de que 'he aquí el cuerpo', simplemente se establece en él en
la medida necesaria para un conocimiento descubierto y la atención consciente. Y mora con
independencia, no apegado a nada en el mundo. Es así también, monjes, cómo el monje
mora contemplando el cuerpo como cuerpo.

2. Vedanupassana - Contemplación de las sensaciones

[11] "Y ¿cómo, monjes, el monje mora contemplando las sensaciones como sensaciones?
He aquí, monjes, cuando el monje siente una sensación agradable, entiende así: 'siento una
sensación agradable'; cuando siente una sensación dolorosa, entiende así: 'siento una
sensación dolorosa'; cuando siente una sensación que no es agradable ni dolorosa, entiende
así: 'siento una sensación que no es agradable ni dolorosa'. Cuando siente una sensación
agradable mundana, entiende así: 'siento una sensación agradable mundana'; cuando siente
una sensación agradable espiritual, entiende así: 'siento una sensación agradable espiritual';
cuando siente una sensación dolorosa mundana, entiende así: 'siento una sensación
dolorosa mundana'; cuando siente una sensación dolorosa espiritual, sabe: 'siento una
sensación dolorosa espiritual'; cuando siente una sensación mundana que no es dolorosa ni
agradable, entiende así: 'siento una sensación mundana que no es dolorosa ni agradable';
cuando siente una sensación espiritual que no es dolorosa ni agradable, entiende así: 'siento
una sensación espiritual que no es dolorosa ni agradable'.
"De esta manera mora contemplando las sensaciones como sensaciones internamente, o
mora contemplando las sensaciones como sensaciones externamente, o mora contemplando
las sensaciones como sensaciones de ambas formas: interna y externamente. Mora
contemplando la naturaleza del surgimiento en las sensaciones, o mora contemplando la
naturaleza del cese en las sensaciones, o mora contemplando ambas cosas: la naturaleza del
surgimiento y la naturaleza del cese en las sensaciones. O, siendo consciente de que 'he
aquí las sensaciones', simplemente se establece en ellas en la medida necesaria para un
conocimiento descubierto y la atención consciente. Y mora con independencia, no apegado
a nada en el mundo. Es así, monjes, cómo el monje mora contemplando las sensaciones
como sensaciones.

3. Cittanupassana - Contemplación de la mente

[12] "Y ¿cómo, monjes, el monje mora contemplando la mente como mente? He aquí,
monjes, el monje entiende la mente afectada por la lujuria, como mente afectada por la
lujuria y la mente no afectada por la lujuria, como mente no afectada por la lujuria. Él
entiende la mente afectada por el odio como mente afectada por el odio y la mente no
afectada por el odio como mente no afectada por el odio. Él entiende la mente afectada por
la falsa ilusión como mente afectada por la falsa ilusión y la mente no afectada por la falsa
ilusión como mente no afectada por la falsa ilusión. Él entiende la mente contraída como
mente contraída y la mente distraída como mente distraída. Él entiende la mente exaltada
como mente exaltada y la mente no exaltada como mente no exaltada. Él entiende la mente
superada como mente superada y la mente no superada como mente no superada. Él
entiende la mente concentrada como mente concentrada y la mente desconcentrada como
mente desconcentrada. Él entiende la mente liberada como mente liberada y la mente no
liberada como mente no liberada.

"De esta manera mora contemplando la mente como mente internamente, o mora
contemplando la mente como mente externamente, o mora contemplando la mente como
mente de ambas formas: interna y externamente. Mora contemplando la naturaleza del
surgimiento en la mente, o mora contemplando la naturaleza del cese en la mente, o mora
contemplando ambas cosas: la naturaleza del surgimiento y la naturaleza del cese en la
mente. O, siendo consciente de que 'he aquí la mente', simplemente se establece en ella en
la medida necesaria para un conocimiento descubierto y la atención consciente. Y mora con
independencia, no apegado a nada en el mundo. Es así, monjes, cómo el monje mora
contemplando la mente como mente.
4. Dhammanupassana - Contemplación de los objetos mentales

[13] "Y ¿cómo, monjes, el monje mora contemplando los objetos mentales como objetos
mentales?

4.1. Dhammanupassananivaranapabba - Sección con la contemplación de los objetos


mentales a través de los cinco obstáculos

"He aquí, monjes, el monje mora contemplando los objetos mentales como objetos
mentales en términos de los cinco obstáculos. Y ¿cómo, monjes, el monje mora
contemplando los objetos mentales como objetos mentales en términos de los cinco
obstáculos? He aquí, monjes, cuando hay un deseo sensual en el monje, él entiende así:
'hay un deseo sensual en mí'; o cuando no hay deseo sensual en él, entiende así: 'no hay
deseo sensual en mí'. Y también entiende cómo llega a ser el surgimiento del deseo sensual
no surgido, y entiende cómo llega a ser el abandono del deseo sensual surgido, y entiende
cómo llega a ser el futuro no surgimiento del deseo sensual abandonado (1).

"Además, monjes, cuando hay animadversión en el monje (2)... indolencia y letargo (3)...
preocupación y remordimiento (4)... la duda en el monje, entiende así: 'hay duda en mí'; o
cuando no hay duda en él, entiende así: 'no hay duda en mí'. Y también entiende cómo llega
a ser el surgimiento de la duda no surgida, y entiende cómo llega a ser el abandono de la
duda surgida, y entiende cómo llega a ser el futuro no surgimiento de la duda abandonada
(5).

"De esta manera mora contemplando los objetos mentales como objetos mentales
internamente, o mora contemplando los objetos mentales como objetos mentales
externamente, o mora contemplando los objetos mentales como objetos mentales de ambas
formas: interna y externamente. Mora contemplando la naturaleza del surgimiento en los
objetos mentales, o mora contemplando la naturaleza del cese en los objetos mentales, o
mora contemplando ambas cosas: la naturaleza del surgimiento y la naturaleza del cese en
los objetos mentales. O, siendo consciente de que 'he aquí los objetos mentales',
simplemente se establece en ellos en la medida necesaria para un conocimiento descubierto
y la atención consciente. Y mora con independencia, no apegado a nada en el mundo. Es
así, monjes, cómo el monje mora contemplando los objetos mentales como objetos
mentales en términos de los cinco obstáculos.

4.2. Dhammanupassanakhandhapabba - Sección con la contemplación de los objetos


mentales a través de los cinco cúmulos

[14] "Además, monjes, el monje mora contemplando los objetos mentales como objetos
mentales en términos de los cinco cúmulos del apego. Y ¿cómo, monjes, el monje mora
contemplando los objetos mentales como objetos mentales en términos de los cinco
cúmulos del apego? He aquí, monjes, el monje entiende esto: 'Ésta es la forma material,
éste es su origen y ésta es su desaparición; ésta es la sensación, éste es su origen y ésta es
su desaparición; ésta es la percepción, éste es su origen y ésta es su desaparición; éstas son
las formaciones mentales, éste es su origen y ésta es su desaparición; ésta es la conciencia,
éste es su origen y ésta es su desaparición.

"De esta manera mora contemplando los objetos mentales como objetos mentales
internamente, o mora contemplando los objetos mentales como objetos mentales
externamente, o mora contemplando los objetos mentales como objetos mentales de ambas
formas: interna y externamente... Y mora con independencia, no apegado a nada en el
mundo. Es así, monjes, cómo el monje mora contemplando los objetos mentales como
objetos mentales en términos de los cinco cúmulos.

4.3. Dhammanupassanaayatanapabba - Sección con la contemplación de los objetos


mentales a través de las bases de los sentidos

[15] "Además, monjes, el monje mora contemplando los objetos mentales como objetos
mentales en términos de las seis internas y externas bases de los sentidos. Y ¿cómo,
monjes, el monje mora contemplando los objetos mentales como objetos mentales en
términos de las seis internas y externas bases de los sentidos? He aquí, monjes, el monje
entiende el ojo, entiende las formas y entiende la atadura que surge dependiendo de ambos;
además, entiende también cómo llega a ser el surgimiento de la atadura no surgida, cómo
llega a ser el abandono de la atadura surgida y cómo llega a ser el futuro no surgimiento de
la atadura abandonada.

"Además, monjes, el monje entiende el oído, entiende los sonidos... entiende la nariz,
entiende los olores... entiende la lengua, entiende los sabores... entiende el cuerpo, entiende
las sensaciones táctiles... entiende la mente, entiende los objetos mentales y entiende la
atadura que surge dependiendo de ambos; además, entiende también cómo llega a ser el
surgimiento de la atadura no surgida, cómo llega a ser el abandono de la atadura surgida y
cómo llega a ser el futuro no surgimiento de la atadura abandonada.

"De esta manera él mora contemplando los objetos mentales como objetos mentales
internamente, o mora contemplando los objetos mentales como objetos mentales
externamente, o mora contemplando los objetos mentales como objetos mentales de ambas
formas: interna y externamente... Y mora con independencia, no apegado a nada en el
mundo. Es así, monjes, cómo el monje mora contemplando los objetos mentales como
objetos mentales en términos de las seis internas y externas bases de los sentidos.

4.4. Dhammanupassanabojjhangapabba - Sección con la contemplación de los objetos


mentales a través de los factores del despertar

[16] "Además, monjes, el monje mora contemplando los objetos mentales como objetos
mentales en términos de los siete factores del despertar. Y ¿cómo, monjes, el monje mora
contemplando los objetos mentales como objetos mentales en términos de los siete factores
del despertar? He aquí, monjes, estando el factor del despertar de la atención consciente
presente en él, el monje entiende esto: 'he aquí que el factor del despertar de la atención
consciente está presente en mí'; o, estando el factor del despertar de la atención consciente
ausente en él, el monje entiende esto: 'he aquí que el factor del despertar de la atención
consciente está ausente en mí'; además, entiende también cómo llega a ser el surgimiento
del factor del despertar de la atención consciente surgido y cómo el factor del despertar de
la atención consciente surgido llega a su pleno desarrollo.

"Además, monjes, estando el factor del despertar de la investigación de los estados presente
en él... estando el factor del despertar de la energía presente en él... estando el factor del
despertar del arrobamiento presente en él... estando el factor del despertar de la tranquilidad
presente en él... estando el factor del despertar de la concentración presente en él... estando
el factor del despertar de la ecuanimidad presente él, el monje entiende esto: 'he aquí que el
factor del despertar de la ecuanimidad está presente en mí'; o, estando el factor del
despertar de la ecuanimidad ausente en él, el monje entiende esto: 'he aquí que el factor del
despertar de la ecuanimidad está ausente en mí'; además, entiende también cómo llega a ser
el surgimiento del factor del despertar de la ecuanimidad surgido y cómo el factor del
despertar de la ecuanimidad surgido llega a su pleno desarrollo.

"De esta manera él mora contemplando los objetos mentales como objetos mentales
internamente, o mora contemplando los objetos mentales como objetos mentales
externamente, o mora contemplando los objetos mentales como objetos mentales de ambas
formas: interna y externamente... Y mora con independencia, no apegado a nada en el
mundo. Es así, monjes, cómo el monje mora contemplando los objetos mentales como
objetos mentales en términos de los siete factores del despertar.

4.5. Dhammanupassanasaccapabba - Sección con la contemplación de los objetos


mentales a través de las Verdades

[17] "Además, monjes, el monje mora contemplando los objetos mentales en los objetos
mentales en términos de las Cuatro Nobles Verdades. Y ¿cómo, monjes, el monje mora
contemplando los objetos mentales en los objetos mentales en términos de las Cuatro
Nobles Verdades? He aquí, monjes, el monje entiende tal como realmente es: 'este es el
sufrimiento'; entiende tal como realmente es: 'este es el origen del sufrimiento'; entiende tal
como realmente es: 'este es el cese del sufrimiento' y entiende tal como realmente es: 'este
es el sendero que conduce al cese del sufrimiento'.

4.5.1. Dukkhasaccaniddesa - Descripción de la Verdad del Sufrimiento

[18] "¿Y qué es, monjes, la noble verdad del sufrimiento? El nacimiento es sufrimiento, la
vejez es sufrimiento, la muerte es sufrimiento; la pena, la lamentación, el dolor, la aflicción
y la desesperanza es el sufrimiento. La asociación con algo que a uno no le gusta, es
sufrimiento, la disociación con algo que a uno le gusta, es sufrimiento, no obtener lo que
uno quiere es sufrimiento. En breve, los cinco cúmulos del apego son sufrimiento.
"¿Y qué es el nacimiento, monjes? El nacimiento de los seres dentro de las varias clases de
seres, su llegada al nacimiento, la precipitación [hacia el útero], el engendramiento, la
manifestación de los cinco cúmulos y la obtención de las bases para el contacto. Esto es
llamado nacimiento.

"¿Y qué es la vejez, monjes? La vejez de los seres dentro de las varias clases de seres, su
edad senil, la caída de los dientes, la aparición de la canicie, las arrugas de la piel, el
declive de la vida y el debilitamiento de las facultades. Esto es llamado vejez.

"¿Y qué es la muerte, monjes? El paso de los seres fuera de las varias clases de seres, su
fallecimiento, la disolución, la desaparición, la agonía, la terminación del tiempo, la
disolución de los cinco cúmulos y la deposición del cuerpo. Esto es llamado muerte. "¿Y
qué es, monjes, el pesar? El pesar, la congoja, el tormento, el pesar interno, pesadumbre
interior de alguien que se encontró con algún infortunio o ha sido afectado por algún estado
penoso. Esto se llama pesar.

"¿Y qué es, amigos, la lamentación? La queja y el lamento, quejarse y lamentarse, el


clamor y la lamentación de alguien que se encontró con algún infortunio o ha sido afectado
por algún estado lamentable. Esto se llama lamentación.

"¿Y qué es, amigos, el dolor? El dolor corporal, el malestar corporal desagradable, una
sensación dolorosa producida por el contacto del cuerpo. Esto se llama dolor.

"¿Y qué es, amigos, la aflicción? Aflicción mental, el malestar mental desagradable, una
sensación de aflicción producida por el contacto de la mente. Esto se llama aflicción.

"¿Y qué es, monjes, la desesperanza? La angustia y el desespero, la tribulación y la


desesperación, de alguien que se encontró con algún infortunio o ha sido afectado por algún
estado penoso. Esto se llama desesperanza.
"¿Y qué es, monjes, 'la asociación con algo que a uno no le gusta'? Dondequiera y siempre
que uno encuentre desplacientes, desagradables e indeseables objetos de la vista, el sonido,
el olfato, el sabor, el tacto y objetos mentales, o dondequiera y siempre que uno encuentre
quienes le desean mala fortuna a uno, el daño, las dificultades o la inseguridad; si uno se
asocia, encuentra, entra en contacto o se une a ellos, esto se llama, monjes, 'la asociación
con algo que a uno no le gusta'.

"¿Y qué es, monjes, 'la disociación con algo que a uno le gusta'? Dondequiera y siempre
que uno encuentre placenteros, agradables y deseables objetos de la vista, el sonido, el
olfato, el sabor, el tacto y objetos mentales, o dondequiera y siempre que uno encuentre
quienes le desean buena fortuna a uno, la prosperidad, el confort o la seguridad como si
fuera la propia madre o el padre, como hermano o hermana, como el amigo, colega o
pariente; si uno se asocia, encuentra, entra en contacto o se une a ellos, esto se llama,
monjes, 'la disociación con algo que a uno le gusta'.

"¿Y qué es, monjes, 'no obtener lo deseado es sufrimiento'? A los seres sujetos al
nacimiento llega este deseo: 'Ojalá no estuviéramos sujetos al nacimiento. Sería bueno que
aquel nacimiento no nos llegara'. Pero esto no es algo que se obtiene deseando y el no
obtener algo que uno quiere, es sufrimiento. A los seres sujetos a la vejez... sujetos a la
enfermedad... sujetos a la muerte... sujetos al pesar, la lamentación, el dolor, la aflicción y
la desesperanza llega este deseo: 'Ojalá no estuviéramos sujetos al pesar, la lamentación, el
dolor, la aflicción y la desesperanza. Sería bueno que aquel pesar, la lamentación, el dolor,
la aflicción y la desesperanza no nos llegaran'. Pero esto no es algo que se obtiene deseando
y el no obtener algo que uno quiere, es sufrimiento.

"¿Y qué es, monjes, 'los cinco cúmulos del apego, en breve, son sufrimiento'? He aquí hay
el cúmulo de las formas materiales afectado por el apego, el cúmulo de las sensaciones
afectado por el apego, el cúmulo de las percepciones afectado por el apego, el cúmulo de
las formaciones mentales afectado por el apego, el cúmulo de los estados de consciencia
afectado por el apego. Esto es, monjes, 'los cinco cúmulos del apego, en breve, son
sufrimiento'. Esta es, monjes, la noble verdad del sufrimiento.

4.5.2. Samudayasaccaniddesa - Descripción de la Verdad del Origen del Sufrimiento


[19] "¿Y qué es, monjes, la noble verdad del origen sufrimiento? Es la avidez, la cual trae la
renovación de los seres, acompañada por deleite y lujuria, que hace deleitarse en esto y
aquello, es decir, la avidez por los placeres sensuales, la avidez por la existencia, la avidez
por la no-existencia.

"¿Y de dónde surge esta avidez, monjes, cuando se establece? Siempre que en el mundo haya
algo apetecible y agradable surge la avidez para establecerse.

"Y ¿qué es aquello que en el mundo es apetecible y agradable? El ojo es apetecible y


agradable en el mundo; es de ahí que surge la avidez y se establece; el oído.. la nariz... la
lengua... el cuerpo... la mente es apetecibley agradable en el mundo; es de ahí que surge la
avidez y se establece.

"Las formas son apetecibles y agradables en el mundo; es de ahí que surge la avidez y se
establece; los sonidos.. los olores... los sabores... los objetos tangibles... los objetos
mentales son apetecibles y agradables en el mundo; es de ahí que surge la avidez y se
establece.

"Los estados de consciencia del ojo son apetecibles y agradables en el mundo; es de ahí que
surge la avidez y se establece; los estados de consciencia del oído... los estados de
consciencia de la nariz... los estados de consciencia de la lengua... los estados de
consciencia del cuerpo... los estados de consciencia de la mente son apetecibles y
agradables en el mundo; es de ahí que surge la avidez y se establece.

"El contacto del ojo es apetecible y agradable en el mundo; es de ahí que surge la avidez y
se establece; el contacto del oído... el contacto de la nariz... el contacto de la lengua... el
contacto del cuerpo... el contacto de la mente es apetecible y agradable en el mundo; es de
ahí que surge la avidez y se establece.

"La sensación surgida del contacto del ojo es apetecible y agradable en el mundo; es de ahí
que surge la avidez y se establece; la sensación surgida del el contacto del oído... del
contacto de la nariz... del contacto de la lengua... del contacto del cuerpo... del el contacto
de la mente es apetecible y agradable en el mundo; es de ahí que surge la avidez y se
establece.

"La percepción surgida del contacto del ojo es apetecible y agradable en el mundo; es de
ahí que surge la avidez y se establece; la percepción surgida del el contacto del oído... del
contacto de la nariz... del contacto de la lengua... del contacto del cuerpo... del el contacto
de la mente es apetecible y agradable en el mundo; es de ahí que surge la avidez y se
establece.

"La intención en relación a las formas es apetecible y agradable en el mundo; es de ahí que
surge la avidez y se establece; la intención en relación a los sonidos.. a los olores... a los
sabores... a los objetos tangibles... a los objetos mentales es apetecible y agradable en el
mundo; es de ahí que surge la avidez y se establece.

"La avidez por las formas es apetecible y agradable en el mundo; es de ahí que surge la
avidez y se establece; la avidez por los sonidos.. por los olores... por los sabores... por los
objetos tangibles... por los objetos mentales es apetecible y agradable en el mundo; es de
ahí que surge la avidez y se establece.

"La conceptualización de las formas es apetecible y agradable en el mundo; es de ahí que


surge la avidez y se establece; la conceptualización de los sonidos.. por los olores... por los
sabores... por los objetos tangibles... por los objetos mentales es apetecible y agradable en
el mundo; es de ahí que surge la avidez y se establece.

"La ponderación de las formas es apetecible y agradable en el mundo; es de ahí que surge
la avidez y se establece; la ponderación de los sonidos.. por los olores... por los sabores...
por los objetos tangibles... por los objetos mentales es apetecible y agradable en el mundo;
es de ahí que surge la avidez y se establece. Esta es, monjes, la noble verdad del origen del
sufrimiento.

4.5.3. Niroddhasaccaniddesa - Descripción de la Verdad del Cese del Sufrimiento


[20] "¿Y qué es, monjes, la noble verdad del cese del sufrimiento? Es el desvanecimiento
completo y el cese, el abandono, el renunciamiento, el dejar ir y el rechazo de esta misma
avidez.

"¿Y cómo, monjes, la avidez llega a ser abandonada y erradicada? Siempre que en el
mundo haya algo tentador y agradable, la avidez por eso llega a ser abandonada y
erradicada.

"Y ¿qué es aquello que en el mundo es tentador y agradable? El ojo es tentador y agradable
en el mundo; la avidez por él llega a ser abandonada y erradicada; el oído.. la nariz... la
lengua... el cuerpo... la mente es tentadora y agradable en el mundo; la avidez por ella llega
a ser abandonada y erradicada.

"Las formas son tentadoras y agradables en el mundo; la avidez por ellas llega a ser
abandonada y erradicada; los sonidos.. los olores... los sabores... los objetos tangibles... los
objetos mentales con tentadores y agradables en el mundo; la avidez por ellos llega a ser
abandonada y erradicada.

"Los estados de consciencia del ojo son tentadores y agradables en el mundo; la avidez por
ellos llega a ser abandonada y erradicada; los estados de consciencia del oído... los estados
de consciencia de la nariz... los estados de consciencia de la lengua... los estados de
consciencia del cuerpo... los estados de consciencia de la mente son tentadores y agradables
en el mundo; la avidez por ellos llega a ser abandonada y erradicada..

"El contacto del ojo es tentador y agradable en el mundo; la avidez por él llega a ser
abandonada y erradicada; el contacto del oído... el contacto de la nariz... el contacto de la
lengua... el contacto del cuerpo... el contacto de la mente es tentador y agradable en el
mundo; la avidez por él llega a ser abandonada y erradicada.

"La sensación surgida del contacto del ojo es tentadora y agradable en el mundo; la avidez
por ella llega a ser abandonada y erradicada; la sensación surgida del el contacto del oído...
del contacto de la nariz... del contacto de la lengua... del contacto del cuerpo... del el
contacto de la mente es tentadora y agradable en el mundo; la avidez por ella llega a ser
abandonada y erradicada..

"La percepción surgida del contacto del ojo es tentadora y agradable en el mundo; la avidez
por ella llega a ser abandonada y erradicada; la percepción surgida del el contacto del
oído... del contacto de la nariz... del contacto de la lengua... del contacto del cuerpo... del el
contacto de la mente es tentadora y agradable en el mundo; la avidez por ella llega a ser
abandonada y erradicada.

"La intención en relación a las formas es tentadora y agradable en el mundo; la avidez por
ella llega a ser abandonada y erradicada.; la intención en relación a los sonidos.. a los
olores... a los sabores... a los objetos tangibles... a los objetos mentales es tentadora y
agradable en el mundo; la avidez por ella llega a ser abandonada y erradicada.

"La avidez por las formas es tentadora y agradable en el mundo; esta avidez llega a ser
abandonada y erradicada; la avidez por los sonidos.. por los olores... por los sabores... por
los objetos tangibles... por los objetos mentales es tentadora y agradable en el mundo; esta
avidez llega a ser abandonada y erradicada..

"La conceptualización de las formas es tentadora y agradable en el mundo; la avidez por


ella llega a ser abandonada y erradicada; la conceptualización de los sonidos.. por los
olores... por los sabores... por los objetos tangibles... por los objetos mentales es tentadora y
agradable en el mundo; la avidez por ella llega a ser abandonada y erradicada.

"La ponderación de las formas es tentadora y agradable en el mundo; la avidez por ella
llega a ser abandonada y erradicada.; la ponderación de los sonidos.. por los olores... por
los sabores... por los objetos tangibles... por los objetos mentales es tentadora y agradable
en el mundo; la avidez por ella llega a ser abandonada y erradicada. Esta es, monjes, la
noble verdad del cese del sufrimiento.
4.5.4. Maggasaccaniddesa - Descripción de la Verdad del Sendero

[21] "¿Y qué es, amigos, la noble verdad del sendero que conduce al cese del sufrimiento?
Es el Noble Óctuple Sendero. Es decir, el recto punto de vista, la recta intención, la recta
forma de hablar, la recta acción, la recta forma de vida, el recto esfuerzo, la recta atención
consciente y la recta concentración.

"¿Y qué es, monjes, el recto punto de vista? El conocimiento sobre el sufrimiento, el
conocimiento sobre el origen del sufrimiento, el conocimiento sobre el cese del sufrimiento
y el conocimiento sobre el sendero que conduce al cese del sufrimiento. Esto se llama el
recto punto de vista.

"¿Y qué es, monjes, la recta intención? La intención del renunciamiento, intención del agrado
e intención de afabilidad. Esto se llama la recta intención.

"¿Y qué es, monjes, la recta forma de hablar? Abstenerse de hablar falsamente, abstenerse
de hablas maliciosamente, abstenerse de hablar áspera y duramente y abstenerse del
chismorreo. Esto se llama la recta forma de hablar.

"¿Y qué es, monjes, la recta acción? Abstenerse de matar a los seres vivos, abstenerse de
tomar aquellosque no ha sido dado y abstenerse de la conducta inadecuada en relación a los
placeres sensuales. Esto se llama la recta acción.

"¿Y qué es, monjes, la recta forma de vida? He aquí, el noble discípulo, tras haber
abandonado la incorrecta forma de vida, se gana la vida de la forma correcta. Esto se llama
la recta forma de vida.

"¿Y qué es, monjes, el recto esfuerzo? He aquí, el monje despierta en sí el celo por no
permitir que surjan los perjudiciales estados mentales que aún no han surgido; hace
esfuerzo, agrega energía, ejercita su mente y se esfuerza. Él despierta en sí el celo por
abandonar los perjudiciales estados mentales que ya han surgido; hace esfuerzo, agrega
energía, ejercita su mente y se esfuerza. Él despierta en sí el celo para hacer que surjan los
saludables estados mentales que aún no han surgido; hace esfuerzo, agrega energía, ejercita
su mente y se esfuerza. Él despierta en sí el celo por no permitir que desparezcan los
saludables estados mentales que ya han surgido sino que se desarrollen hasta alcanzar su
plenitud; hace esfuerzo, agrega energía, ejercita su mente y se esfuerza. Esto se llama el
recto esfuerzo.

"¿Y qué es, monjes, la recta atención consciente? He aquí, el monje mora contemplando el
cuerpo como cuerpo, vehementemente, plenamente consciente y atento, dejando atrás tanto
la codicia como el disgusto por el mundo. Él mora contemplando las sensaciones como
sensaciones, vehementemente, plenamente consciente y atento, dejando atrás tanto la
codicia como el disgusto por el mundo. Él mora contemplando la mente como mente,
vehementemente, plenamente consciente y atento, dejando atrás tanto la codicia como el
disgusto por el mundo. Él mora contemplando los objetos mentales como objetos mentales,
vehementemente, plenamente consciente y atento, dejando atrás tanto la codicia como el
disgusto por el mundo. Esto de llama la recta atención consciente.

"¿Y qué es, monjes, la recta concentración? He aquí, el monje que, separado de la
sensualidad, separado de los insanos estados mentales, entra y permanece en el primer
jhana, acompañado con el pensamiento inicial y el pensamiento sostenido, lleno de
arrobamiento y placer, nacidos de la reclusión. Logrando la calma mental y la unificación
de la mente, el monje entra y permanece en el segundo jhana, el que se caracteriza por la
auto-confianza y la unificación mental, lleno de arrobamiento y placer nacidos de la
reclusión, pero libre del pensamiento inicial y el pensamiento sostenido. Al extinguirse el
arrobamiento, el monje permanece ecuánime, con atención consciente y clara comprensión,
sensible a la sensación del placer, del cual los Nobles declararon que "feliz es aquel que
mora en la ecuanimidad y en la atención consciente" y, de esta manera, entra y permanece
en el tercer jhana y todo su cuerpo está impregnado, bañado y colmado de este placer
despojado del arrobamiento. Además, al abandonar tanto el placer como la pena —con la
anterior desaparición de las alegrías y las tristezas— el monje entra y permanece en el
cuarto jhana, el cual va más allá de los placeres y las penas, purificado con la ecuanimidad
y atención consciente. Esto se llama la recta concentración. Ésta es, monjes, la Noble
Verdad del sendero que conduce al cese del sufrimiento.

"De esta manera mora contemplando los objetos mentales como objetos mentales
internamente, o mora contemplando los objetos mentales como objetos mentales
externamente, o mora contemplando los objetos mentales como objetos mentales de ambas
formas: interna y externamente. Mora contemplando la naturaleza del surgimiento en los
objetos mentales, o mora contemplando la naturaleza del cese en los objetos mentales, o
mora contemplando ambas cosas: la naturaleza del surgimiento y la naturaleza del cese en
los objetos mentales. O, siendo consciente de que 'he aquí los objetos mentales',
simplemente se establece en ellos en la medida necesaria para un conocimiento descubierto
y la atención consciente. Y mora con independencia, no apegado a nada en el mundo. Es
así, monjes, cómo el monje mora contemplando los objetos mentales como objetos
mentales en términos de las Cuatro Nobles Verdades.

[Conclusión]

[22] "Monjes, cualquiera que desarrollase estos cuatro establecimientos de la atención


consciente de esta manera durante siete años, podría esperar uno de estos dos frutos: el
conocimiento final aquí y ahora o, si aún quedara rastro del apego alguno, el no-retorno.
"Aún si no fueran siete años, monjes. Cualquiera que desarrollase estos cuatro
establecimientos de la atención consciente de esta manera durante seis años... cinco años...
cuatro años... tres años... dos años... un año, podría esperar uno de estos dos frutos: el
conocimiento final aquí y ahora o, si aún quedara rastro del apego alguno, el no-retorno.

"Aún si no fuera un año, monjes. Cualquiera que desarrollase estos cuatro establecimientos
de la atención consciente de esta manera durante los siete meses... seis meses... cinco
meses... cuatro meses... tres meses... dos meses... un mes... la mitad del mes, podría esperar
uno de estos dos frutos: el conocimiento final aquí y ahora o, si aún quedara rastro del
apego alguno, el no-retorno.

"Aún si no fuera la mitad del mes, monjes. Cualquiera que desarrollase estos cuatro
establecimientos de la atención consciente de esta manera durante siete días, podría esperar
uno de estos dos frutos: el conocimiento final aquí y ahora o, si aún quedara rastro del
apego alguno, el no-retorno.

"Y fue con referencia a esto que se ha dicho: 'Monjes, este es el camino directo para la
purificación de los seres, para la superación de la pena y las lamentaciones, para la
desaparición del dolor y de la aflicción, para alcanzar el recto sendero, para la realización
del Nibbana, es decir, los cuatro establecimientos de la atención consciente'."

Esto fue lo que dijo el Bienaventurado y los monjes fueron satisfechos y se deleitaron en las
palabras del Bienaventurado.

El Buda explica en qué consiste el supremo desarrollo del control sobre las facultades y el
dominio de un arahant sobre las percepciones.

[Leer en pali]

[1] {453} Así lo he oído: en cierta ocasión el Bienaventurado residía en Kajangala en la


Arboleda de Bambúes.

[2] El joven brahmán Uttara, discípulo de Parasiri, visitó al Bienaventurado: se le acercó y


le mostró sus respetos, después se sentó a un lado. Allí sentados, el Bienaventurado le dijo:
"Uttara, ¿es cierto que el brahamán Parasiri enseña a sus seguidores el desarrollo de las
facultades?"

"Sí, maestro Gotama, así es, el brahmán Parasiri enseña a sus seguidores el desarrollo de las
facultades."

"Y, ¿cómo enseña a sus seguidores el desarrollo de las facultades el brahmán Parasiri?"

"Se da el caso, maestro Gotama, en donde uno no ve formas con el ojo ni oye sonidos con
el oído. Así es cómo el brahmán Parasiri enseña a sus seguidores le desarrollo de las
facultades."

"Entonces, Uttara, de acuerdo con las palabras del brahmán Parasiri, dado que un ciego no
ve formas con el ojo y un sordo no escucha sonidos con el oído, de ambos podría decirse
que tienen facultades desarrolladas."

Cuando el Bienaventurado dijo esto, el joven brahmaín Uttara quedo en silencio y abatido,
con los hombros caídos, cabizbajo y sin palabras.

[3] El Bienaventurado - viendo que Uttara estaba sentado en silencio y abatido, con los
hombros caídos, cabizbajo y sin palabras - dijo al venerable Ananda: "Ananda, el
desarrollo de las facultades que enseña el brahmán Parasiri a sus seguidores es limitado,
pero la enseñanza del desarrollo de las facultades de un Noble discípulo no tiene
comparación."
"Ha llegado la hora, oh Bienaventurado. Es el momento, oh Bienhechor, de mostrar la
incomparable enseñanza del desarrollo de las facultades de los Nobles discípulos.
Habiéndola escuchado, los monjes la recordarán."

"En este caso, Ananda, escuchad y prestad recta atención. Voy a hablar." "Le escucho,

señor" respondió el venerable Ananda al Bienaventurado.

[4] {454} "¿Cómo, Ananda, en la disciplina de los nobles se desarrolla la incomparable


enseñanza del desarrollo de las facultades? Se da el caso en el que, cuando el monje ve la
forma con el ojo, le resulta agradable, desagradable o agradable y desagradable al mismo
tiempo. El discierne: 'este objeto visual ha surgido en mí y es agradable, desagradable o
agradable y desagradable al mismo tiempo'. Y discierne, que esta forma que ha surgido es
compuesta, burda y surgida de manera dependiente. Pero el noble discípulo queda en paz,
sereno y ecuánime ante el objeto visual. De este modo la sensación cesa y surge la
ecuanimidad. Como el hombre con buena vista, conociendo su facultad, abre los ojos y ve;
o teniéndolos abiertos, cierra sus ojos y deja de ver, así de rápido, así de veloz, así de
sencillo, no importando si la sensación es agradable, desagradable o agradable y
desagradable al mismo tiempo, la sensación cesa y surge la ecuanimidad. En la disciplina
del Noble, así llamamos al incomparable desarrollo de las facultades para el
reconocimiento de los objetos visuales.

[5] {455} "Del mismo modo, cuando el monje escucha el sonido con su oído, surge en el
monje la sensación agradable, desagradable o agradable y desagradable al mismo tiempo.
El discierne: 'este objeto auditivo ha surgido en mí y es agradable, desagradable o
agradable y desagradable al mismo tiempo'. Y discierne, que este sonido que ha surgido es
compuesto, burdo y surgido de manera dependiente. Pero el noble discípulo queda en paz,
sereno y ecuánime ante el objeto auditivo. De este modo la sensación cesa y surge la
ecuanimidad. Como un hombre fuerte puede fácilmente chasquear sus dedos, así de rápido,
así de veloz, así de sencillo, no importando si la sensación es agradable, desagradable o
agradable y desagradable al mismo tiempo, la sensación cesa y surge la ecuanimidad. En la
disciplina del Noble, así llamamos al incomparable desarrollo de las facultades para el
reconocimiento de los objetos auditivos.

[6] {456} "Del mismo modo, cuando el monje huele el aroma con la nariz, surge en el
monje la sensación agradable, desagradable o agradable y desagradable al mismo tiempo.
El discierne: 'este objeto olfativo ha surgido en mí y es agradable, desagradable o agradable
y desagradable al mismo tiempo'. Y discierne, que este olor que ha surgido es compuesto,
burdo y surgido de manera dependiente. Pero el noble discípulo queda en paz, sereno y
ecuánime ante el objeto olfativo. De este modo la sensación cesa y surge la ecuanimidad.
Como las gotas de agua resbalan por la hoja inclinada de un loto y no permanecen allí, así
de rápido, así de veloz, así de sencillo, no importando si la sensación es agradable,
desagradable o agradable y desagradable al mismo tiempo, la sensación cesa y surge la
ecuanimidad. En la disciplina del Noble, así llamamos al incomparable desarrollo de las
facultades para el reconocimiento de los objetos auditivos.

[7] {457} "Del mismo modo, cuando un monje gusta el sabor con la lengua, surge en el
monje la sensación agradable, desagradable o agradable y desagradable al mismo tiempo.
El discierne: 'este objeto gustativo ha surgido en mí y es agradable, desagradable o
agradable y desagradable al mismo tiempo'. Y discierne, que esta sensación gustativa que
ha surgida es compuesta, burda y surgida de manera dependiente. Pero el noble discípulo
queda en paz, sereno, lúcido y ecuánime ante el objeto gustativo. De este modo la
sensación cesa y surge la ecuanimidad. Como un hombre que puede escupir una gota de
saliva colocada en la punta de su legua, así de rápido, así de veloz, así de sencillo, no
importando si la sensación es agradable, desagradable o agradable y desagradable al mismo
tiempo, la sensación cesa y surge la ecuanimidad. En la disciplina del Noble, así llamamos
al incomparable desarrollo de las facultades para el reconocimiento de los objetos
gustativos.

[8] {458} "Del mismo modo, cuando un monje tiene una sensación táctil con el cuerpo,
surge en el monje la sensación agradable, desagradable o agradable y desagradable al
mismo tiempo. El discierne: 'este objeto táctil ha surgido en mí y es agradable,
desagradable o agradable y desagradable al mismo tiempo.' Y discierne, esta sensación
táctil que ha surgido es compuesta, burda y surgida de manera dependiente. Pero el noble
discípulo queda en paz, sereno y ecuánime ante el objeto táctil. De este modo la sensación
cesa y surge la ecuanimidad. Como un hombre fuerte puede fácil y rápidamente flexionar
sus piernas o sus brazos, así de rápido, así de veloz, así de sencillo, no importando si la
sensación es agradable, desagradable o agradable y desagradable al mismo tiempo, la
sensación cesa y surge la ecuanimidad. En la disciplina del Noble, así llamamos al
incomparable desarrollo de las facultades para el reconocimiento de los objetos táctiles.

[9] {459} "Del mismo modo, cuando el monje reconoce una idea con el intelecto, surge
en el monje la sensación agradable, desagradable o agradable y desagradable al mismo
tiempo. El discierne: 'este objeto mental ha surgido en mí y es agradable, desagradable o
agradable y desagradable al mismo tiempo'. Y discierne, que esta sensación mental que ha
surgido es compuesta, burda y surgida de manera dependiente'. Pero el noble discípulo
queda en paz, sereno y ecuánime ante el objeto mental. De este modo la sensación cesa y
surge la ecuanimidad. Como un hombre fuerte podría dejar caer dos o tres gotas de sudor
en un caldero de hierro un día muy caluroso, así de rápido, así de veloz, así de sencillo, no
importando si la sensación es agradable, desagradable o agradable y desagradable al mismo
tiempo, la sensación cesa y surge la ecuanimidad. En la disciplina del Noble, así llamamos
al incomparable desarrollo de las facultades para el reconocimiento de los objetos mentales.
[10] {460} "Y ¿cómo se conoce el comportamiento de un aprendiz, un seguidor del
sendero? Se da el caso en el que viendo la forma con el ojo, en el monje surge una
sensación agradable, desagradable o agradable y desagradable al mismo tiempo. Entonces
se siente horrorizado, humillado, disgustado ante la sensación surgida, ya sea agradable,
desagradable o agradable y desagradable al mismo tiempo.

"Cuando escucha el sonido con su oído... Cuando saborea el sabor con la lengua... Cuando
huele el aroma con la nariz... Cuando tiene la sensación táctil con el cuerpo... Cuando
reconoce el objeto mental con el intelecto, en el monje surge una sensación agradable,
desagradable o agradable y desagradable al mismo tiempo. Entonces se siente horrorizado,
humillado, disgustado, ante la sensación surgida, ya sea agradable, desagradable o
agradable y desagradable al mismo tiempo.

"De este modo se reconoce a un aprendiz, a un seguidor del sendero.

[11-16] {461} "Y ¿cómo se conoce el comportamiento del noble con facultades
desarrolladas? Se da el caso en el que viendo la forma con el ojo, en el monje surge la
sensación agradable, desagradable o agradable y desagradable al mismo tiempo. Si se
propone 'voy a morar percibiendo lo no repulsivo en lo repulsivo', permanece percibiendo
lo no repulsivo en lo repulsivo. Si se propone 'voy a morar percibiendo lo repulsivo en lo
no repulsivo', permanece percibiendo lo repulsivo en lo no repulsivo. Si se propone 'voy a
morar percibiendo lo no repulsivo tanto en lo repulsivo como en lo no repulsivo',
permanece percibiendo lo no repulsivo en aquello. Si se propone 'voy a morar percibiendo
lo repulsivo tanto en lo no repulsivo como en lo repulsivo', permanece percibiendo lo
repulsivo en aquello. Si se propone 'voy a evitar a ambos, tanto lo repulsivo como lo no
repulsivo, permanece ecuánime, alerta y atentamente consciente.

"Cuando escucha el sonido con su oído... Cuando saborea el sabor con la lengua... Cuando
huele el aroma con la nariz... Cuando tiene la sensación táctil con el cuerpo... Cuando
reconoce la idea con el intelecto... en el monje surge la sensación agradable, desagradable o
agradable y desagradable al mismo tiempo. Si se propone 'voy a morar percibiendo lo no
repulsivo en lo repulsivo'... Si se propone 'voy a evitar a ambos, tanto lo repulsivo como lo
no repulsivo, permanece ecuánime, alerta y atentamente consciente.

"De este modo se reconoce al noble con facultades desarrolladas.

[17] {462} "Por lo que, Ananda, he mostrado la incomparable enseñanza sobre el


desarrollo de las facultades en la disciplina de los Nobles; he mostrado cómo se reconoce a
un aprendiz seguidor del sendero y cómo a un noble con facultades desarrolladas.

[18] {463} Lo que un maestro hace por sus discípulos - buscando su bienestar, por
compasión hacia ellos - yo lo he hecho por ti. Allí, hay raíces de árboles; allá, viviendas
vacías. Practica jhanas, Ananda. No te demores porque te vas a arrepentir luego. Este es mi
mensaje para ti."

Esto es lo que dijo el Bienaventurado. El venerable Ananda, agradecido, se deleitó con las
palabras del bienaventurado.

En cierta ocasión el Bienaventurado moraba entre los koliyas, en una de sus ciudades de
nombre Haliddavasana. Entonces, una mañana, un grupo de los monjes se vistió y,
tomando sus cuencos y hábitos externos, entró a Haliddavasana para mendigar comida.
Pero luego se les ocurrió esto:

“Todavía es demasiado temprano para mendigar comida en Savathi. Vayamos al parque de


los ascetas errantes de los otros credos”.

Acto seguido estos monjes fueron al parque de los ascetas errantes de otros credos y allí
intercambiaron cordiales saludos con ellos. Una vez concluidos los saludos y amables
palabras de bienvenida, se sentaron a un lado. Entonces los ascetas errantes les dijeron:

“Amigos, el asceta Gotama enseña el Dhamma a sus discípulos de la siguiente manera:


‘Venid, monjes, abandonad los cinco impedimentos, las corrupciones mentales que
debilitan la sabiduría y permaneced impregnando un cuarto [1] con la mente imbuida de
amor benevolente. De la misma forma, el segundo, tercero y cuarto cuadrante, tanto por
encima como por debajo, alrededor y en todas partes, para todos como a sí mismo,
permaneced impregnando el mundo entero con la mente imbuida de amor benevolente,
abundante, exaltada, inconmensurable, sin hostilidad ni animadversión. Además,
permaneced impregnando un cuarto con la mente imbuida de compasión… con la mente
imbuida del gozo altruista… con la mente imbuida de ecuanimidad. De la misma forma, el
segundo, tercero y cuarto cuadrante, tanto por encima como por debajo, alrededor y en
todas partes, para todos como a sí mismo, permaneced impregnando el mundo entero con la
mente imbuida de amor benevolente, abundante, exaltada, inconmensurable, sin hostilidad
ni animadversión'.

“Nosotros también, amigos, enseñamos el Dhamma a nuestros discípulos de la misma


manera: ‘Venid, monjes, abandonad los cinco impedimentos, las corrupciones mentales que
debilitan la sabiduría y permaneced impregnando un cuarto con la mente imbuida de amor
benevolente … [sigue como en el párrafo anterior]… la compasión… la alegría altruista…
la ecuanimidad… libre de hostilidad y animadversión’. Así que, amigos, ¿cuál es la
diferencia, cuál la distinción y divergencia entre el asceta Gotama y nosotros, en
consideración a la enseñanza de un Dhamma y otro, o en consideración a un forma de
instrucción u otra?”.
Entonces aquellos monjes, sin haberse deleitado en las palabras de los ascetas errantes, ni
tampoco haberlas rechazado, se levantaron de sus asientos y salieron de allí pensando:

“Vamos a aprender el significado de esta declaración en presencia del Bienaventurado”.

Acto seguido, luego de que aquellos monjes hubiesen mendigado la comida en


Haliddavasana y retornado de su habitual ronda de pedir limosnas, se alimentaron y se
acercaron al Bienaventurado. Después de rendirle homenaje, se sentaron a un lado y le
relataron toda la discusión que tuvieron con los ascetas de otros credos.

[Entonces el Bienaventurado les dijo:]

“Monjes, cuando los ascetas de otras sectas hablan de esta manera, debería preguntárseles
así: ‘Amigos, ¿y cómo se logra la liberación de la mente a través del desarrollo del amor
benevolente? ¿Cuál es su destino, su culminación, su fruto y su meta final? ¿Cómo se logra
la liberación de la mente a través del desarrollo de la compasión? ¿Cuál es su destino, su
culminación, su fruto y su meta final? ¿Cómo se logra la liberación de la mente a través del
desarrollo de la alegría altruista? ¿Cuál es su destino, su culminación, su fruto y su meta
final? ¿Cómo se logra la liberación de la mente a través del desarrollo de la ecuanimidad?
¿Cuál es su destino, su culminación, su fruto y su meta final?’. Siendo preguntados de esta
manera, aquellos ascetas errantes no serían capaces de responder y hasta podrían
contrariarse. ¿Por qué? Porque eso no está dentro de su dominio. Yo no veo a nadie,
monjes, en este mundo con sus devas, Mara y Brahma, en esta generación con sus ascetas y
brahmanes, con sus devas y seres humanos, que pueda responder satisfactoriamente a estas
preguntas, excepto el Tathagata, un discípulo del Tathagata o alguien que haya escuchado
[esta enseñanza] de ellos.

“¿Y cómo es, monjes, el desarrollo de la liberación de la mente a través del amor
benevolente? ¿Cuál es su destino, su culminación, su fruto y su meta final? Monjes, he aquí
que el monje desarrolla el factor de iluminación de la atención consciente acompañado por
el amor benevolente… desarrolla el factor de la investigación de los fenómenos… el factor
de la energía… del arrobamiento… de la tranquilidad… de la concentración… desarrolla el
factor de iluminación de la ecuanimidad acompañado por el amor benevolente, establecido
en la reclusión, desapasionamiento, el cese, madurando en la liberación. Si desea esto:
‘Que permanezca percibiendo lo repulsivo en lo no repulsivo’, entonces, permanece
percibiendo lo repulsivo de esta manera. Si desea: ‘Que permanezca percibiendo lo no
repulsivo en lo repulsivo’, entonces, permanece percibiendo lo no repulsivo de esta manera.
Si desea: ‘Que permanezca percibiendo lo repulsivo en lo no repulsivo y en lo repulsivo’,
entonces permanece percibiendo lo repulsivo de esta manera. Si desea: ‘Que permanezca
percibiendo lo no repulsivo en lo repulsivo y en lo no repulsivo’, entonces permanece
percibiendo lo no repulsivo de esta manera. Si desea: ‘Evitando a ambos, tanto lo repulsivo
como lo no repulsivo, que permanezca ecuánime, atentamente consciente y con clara
comprensión’, entonces permanece de esta manera: ecuánime, atentamente consciente y
con clara comprensión. O más, puede entrar y permanecer en la liberación de la hermosura.
Monjes —lo declaro yo†•, la liberación de la mente a través del amor benevolente tiene a
la hermosura como su culminación para un monje sabio que aún no ha penetrado la
liberación superior. “¿Y cómo es, monjes, el desarrollo de la liberación de la mente a
través de la compasión? ¿Cuál es su destino, su culminación, su fruto y su meta final?
Monjes, he aquí que el monje desarrolla la atención consciente como factor de iluminación
acompañado por la compasión… desarrolla el factor de la investigación de los
fenómenos… el factor de la energía… del arrobamiento… de la tranquilidad… de la
concentración… desarrolla el factor de la iluminación de la ecuanimidad acompañado por
la compasión, establecido en la reclusión, desapasionamiento, el cese, madurando en la
liberación. Si desea esto: ‘Que permanezca percibiendo lo repulsivo en lo no repulsivo’,
entonces, permanece percibiendo lo repulsivo de esta manera. Si desea: ‘Que permanezca
percibiendo lo no repulsivo en lo repulsivo’, entonces, permanece percibiendo lo no
repulsivo de esta manera. Si desea: ‘Que permanezca percibiendo lo repulsivo en lo no
repulsivo y en lo repulsivo’, entonces permanece percibiendo lo repulsivo de esta manera.
Si desea: ‘Que permanezca percibiendo lo no repulsivo en lo repulsivo y en lo no
repulsivo’, entonces permanece percibiendo lo no repulsivo de esta manera. Si desea:
‘Evitando a ambos, tanto lo repulsivo como lo no repulsivo, que permanezca ecuánime,
atentamente consciente y con clara comprensión’, entonces permanece de esta manera:
ecuánime, atentamente consciente y con clara comprensión. O más, al trascender
completamente la percepción de las formas, con la desaparición de la percepción sensorial
de la resistencia, con la no-atención a la percepción de la diversidad, consciente de que ‘el
espacio es infinito’, entra y permanece en la base del espacio infinito. Monjes —lo declaro
yo†•, la liberación de la mente a través de la compasión tiene a la base del espacio
infinito como su culminación para un monje sabio que aún no ha penetrado la liberación
superior.

“¿Y cómo es, monjes, la liberación de la mente a través de la dicha altruista? ¿Cuál es su
destino, su culminación, su fruto y su meta final? Monjes, he aquí que el monje desarrolla
la atención consciente como factor de iluminación acompañado por la dicha altruista...
desarrolla el análisis de los fenómenos como factor de iluminación… la energía como
factor de iluminación… el arrobamiento como factor de iluminación… la tranquilidad
como factor de iluminación… la concentración como factor de iluminación… la
ecuanimidad como factor de iluminación acompañado por la dicha altruista, establecido en
la reclusión, desapasionamiento, el cese, madurando en la liberación. Si desea esto: ‘Que
permanezca percibiendo lo repulsivo en lo no repulsivo’, entonces, permanece percibiendo
lo repulsivo de esta manera. Si desea: ‘Que permanezca percibiendo lo no repulsivo en lo
repulsivo’, entonces, permanece percibiendo lo no repulsivo de esta manera. Si desea: ‘Que
permanezca percibiendo lo repulsivo en lo no repulsivo y en lo repulsivo’, entonces
permanece percibiendo lo repulsivo de esta manera. Si desea: ‘Que permanezca
percibiendo lo no repulsivo en lo repulsivo y en lo no repulsivo’, entonces permanece
percibiendo lo no repulsivo de esta manera. Si desea: ‘Evitando a ambos, tanto lo repulsivo
como lo no repulsivo, que permanezca ecuánime, atentamente consciente y con clara
comprensión’, entonces permanece de esta manera: ecuánime, atentamente consciente y
con clara comprensión. O más, al trascender completamente la base del espacio infinito,
consciente de que ‘la conciencia es infinita’, entra y permanece en la base de la conciencia
infinita. Monjes —lo declaro yo†•, la liberación de la mente a través de la dicha altruista
tiene a la base de la conciencia infinita como su culminación para un monje sabio que aún
no ha penetrado la liberación superior.

“¿Y cómo es, monjes, la liberación de la mente a través de la ecuanimidad? ¿Cuál es su


destino, su culminación, su fruto y su meta final? Monjes, he aquí que el monje desarrolla
la atención consciente como factor de iluminación acompañado por la ecuanimidad…
desarrolla el análisis de los fenómenos como factor de iluminación… la energía como
factor de iluminación… el arrobamiento como factor de iluminación… la tranquilidad
como factor de iluminación… la concentración como factor de iluminación… la
ecuanimidad como factor de iluminación acompañado por la ecuanimidad, establecido en
la reclusión, desapasionamiento, el cese, madurando en la liberación. Si desea esto: ‘Que
permanezca percibiendo lo repulsivo en lo no repulsivo’, entonces, permanece percibiendo
lo repulsivo de esta manera. Si desea: ‘Que permanezca percibiendo lo no repulsivo en lo
repulsivo’, entonces, permanece percibiendo lo no repulsivo de esta manera. Si desea: ‘Que
permanezca percibiendo lo repulsivo en lo no repulsivo y en lo repulsivo’, entonces
permanece percibiendo lo repulsivo de esta manera. Si desea: ‘Que permanezca
percibiendo lo no repulsivo en lo repulsivo y en lo no repulsivo’, entonces permanece
percibiendo lo no repulsivo de esta manera. Si desea: ‘Evitando a ambos, tanto lo repulsivo
como lo no repulsivo, que permanezca ecuánime, atentamente consciente y con clara
comprensión’, entonces permanece de esta manera: ecuánime, atentamente consciente y
con clara comprensión. O más, al trascender completamente la base de la conciencia
infinita, consciente de que ‘nada hay’, entra y permanece en la base de la nada. Monjes —
lo declaro yo†•, la liberación de la mente a través de la compasión tiene a la base de la
nada como su culminación para un monje sabio que no ha penetrado la liberación superior.

En verdad, monjes, os digo que la destrucción de las impurezas mentales depende del
primer jhana. En verdad, monjes, os digo que la destrucción de las impurezas mentales
depende del segundo jhana… del tercer jhana… del cuarto jhana… de la esfera del espacio
infinito… de la esfera de la conciencia infinita… de la esfera de la nada. En verdad,
monjes, os digo que la destrucción de las impurezas mentales depende de la esfera de la ni
percepción ni la no-percepción.
“Monjes, esto ha sido dicho: ‘la destrucción de las impurezas mentales depende del primer
jhana’. ¿En referencia a qué se ha dicho esto? Es el caso del monje que, apartado de la
sensualidad, apartado de los perjudiciales estados mentales, entra y permanece en el primer
jhana: el arrobamiento y la felicidad nacidos de la reclusión, acompañados del pensamiento
aplicado y el pensamiento sostenido. Él considera a cualquier fenómeno que ahí ocurra y
sea conectado con la forma, la sensación, la percepción, las construcciones mentales y la
conciencia, como impermanente, doloroso, penoso, canceroso, angustiante, como una
saeta, una aflicción, algo ajeno, desintegrado, vacío y carente del ser. Entonces, aparta su
mente de estos fenómenos y habiéndolo hecho esto, inclina su mente hacia lo propiamente
inmortal: ‘Ésta es la paz, esto es lo excelso: la desactivación de todas las construcciones
mentales, el renunciamiento de todo lo adquirido, el fin de la avidez, el desapasionamiento,
el cese, el Nibbana.

“Monjes, suponed que un arquero o un aprendiz del arquero practicara sobre un hombre de
paja o arcilla; de esta manera, después de un tiempo, estaría capaz de disparar de larga
distancia, asestar acertadamente sus disparos en rápida sucesión y perforar una grana masa.
De la misma manera, monjes, éste es el caso del monje que, apartado de la sensualidad,
apartado de los perjudiciales estados mentales, entra y permanece en el primer jhana: el
arrobamiento y la felicidad nacidos de la reclusión, acompañados del pensamiento aplicado
y el pensamiento sostenido. Él considera a cualquier fenómeno que ahí ocurra y sea
conectado con la forma, la sensación, la percepción, las construcciones mentales y la
conciencia, como impermanente, doloroso, penoso, canceroso, angustiante, como una
saeta, una aflicción, algo ajeno, desintegrado, vacío y carente del ser. Entonces, aparta su
mente de estos fenómenos y habiéndolo hecho esto, inclina su mente hacia lo propiamente
inmortal: ‘Ésta es la paz, esto es lo excelso: la desactivación de todas las construcciones
mentales, el renunciamiento de todo lo adquirido, el fin de la avidez, el desapasionamiento,
el cese, el Nibbana.

“Permaneciendo justo ahí, alcanza el fin de las impurezas mentales. Y si no fuera así,
entonces –a través de esta real pasión por el Dhamma, este real deleite en el Dhamma- hace
desaparecer totalmente los cinco grilletes menores [1] para, de esta manera, renacer [en las
Moradas Puras] donde será totalmente liberado y nunca más retornará a este mundo.

“En verdad, monjes, esto ha sido dicho: ‘la destrucción de las impurezas mentales depende
del primer jhana’ y esto se ha dicho en referencia a esto.

“Monjes, esto también ha sido dicho: ‘la destrucción de las impurezas mentales depende
del segundo jhana… del tercer jhana… del cuarto jhana… de la esfera del espacio
infinito… de la esfera de la conciencia infinita… de la esfera de la nada’. ¿En referencia a
qué ha sido dicho esto? [Se repite, de manera similar lo mismo con cada uno de los niveles
del jhana y logros superiores ]
“Así, monjes, hasta donde llegan los logros alcanzados con la percepción, llega la
penetración del conocimiento. Pero en cuanto a estas dos esferas, yo declaro, -el logro de la
esfera de la ni percepción ni la no-percepción y el logro del cese de las sensaciones y de la
percepción- esto debe ser correctamente dado a conocer a los meditadores [2] hábiles en
alcanzar a los logros, hábiles en emerger de los logros, después de que hubieron alcanzado
los logros y emergido de ellos.”

El Buda examina la tesis jainista, según la cual, la liberación se obtiene a través de la


automortificación y propone una forma diferente de hacer efectivos los esfuerzos.

[Leer en pali]

[1] He escuchado que en una ocasión el Bienaventurado estaba morando en el país de los
Sakyas, donde estaba una de sus ciudades llamada Devadaha. Allí, el Bienaventurado se
dirigió a los monjes con estas palabras: “Monjes”. “Sí, venerable señor”, respondieron los
monjes y el Bienaventurado continuó:

[2] “Monjes, he aquí, existen algunos ascetas y brahmanes que sostienen el siguiente
punto de vista: ‘Todo lo que una persona experimenta, sea esto placentero, doloroso o ni
placentero ni doloroso, todo esto está causado por lo que ha sido hecho en el pasado [1] .
De modo que, aniquilando, a través de las prácticas ascéticas, las acciones pasadas y no
realizando acciones nuevas, no habrá consecuencias en el futuro. Al no haber
consecuencias en el futuro, ocurre la destrucción de la acción. Con la destrucción de la
acción, ocurre la destrucción del sufrimiento. Con la destrucción del sufrimiento, ocurre la
destrucción de la sensación. Con la destrucción de la sensación, todo el sufrimiento se
agota’. Así hablan los Naganthas, monjes.
[3] “Entonces, yo voy junto a los Naganthas que hablan de esta forma y los pregunto así:
‘Amigos Naganthas, ¿es cierto que vosotros sostenéis el siguiente punto de vista: «Todo lo
que una persona experimenta, sea esto placentero, doloroso o ni placentero ni doloroso…
Con la destrucción de la sensación, todo el sufrimiento se agota»?’ Cuando los Naganthas,
interrogados de esta manera, admiten esto y responden: ‘Sí’, entonces yo les digo:

[4] “’Pero amigos, ¿vosotros sabéis que es cierto que habéis existido en el pasado y que
no es cierto que no habéis existido?’ ‘No, amigo’. ‘Y, amigos, ¿vosotros sabéis que en el
pasado habíais cometido malas acciones y que no os habíais abstenido de ellas?’ ‘No,
amigo’. ‘Y, amigos, ¿vosotros sabéis que en el pasado habíais cometido tales y tales males
acciones?’ ‘No, amigo’. ‘Y, amigos, vosotros sabéis que tanto sufrimiento ya ha sido
agotado, o que tanto sufrimiento aún queda por agotarse, o que cuando tanto sufrimiento
será agotado, entonces la totalidad del sufrimiento será agotada?’ ‘No, amigo’. Y, amigos,
¿vosotros sabéis lo que significa abandonar los perjudiciales estados mentales y lo que
significa cultivar los saludables estados mentales aquí y ahora?’ ‘No, amigo’.

[5] “’De modo que, amigos, parece que vosotros no sabéis si es cierto que habéis existido
en el pasado y que no es cierto que no habéis existido; no sabéis si en el pasado habíais
cometido malas acciones y que no os habías abstenido de ellas; no sabéis si en el pasado
habíais cometido tales y tales males acciones; no sabéis si tanto sufrimiento ya ha sido
agotado, o que tanto sufrimiento aún queda por agotarse, o que cuando tanto sufrimiento
será agotado, entonces la totalidad del sufrimiento será agotada; no sabéis lo que significa
abandonar los perjudiciales estados mentales y lo que significa cultivar los saludables
estados mentales. Siendo así, no es adecuado que los venerables Niganthas declaren: «Todo
lo que una persona experimenta, sea esto placentero, doloroso o ni placentero ni doloroso…
Con la destrucción de la sensación, todo el sufrimiento se agota».

[6] “’Amigos Nighantas, si vosotros supiereis que es cierto que habéis existido en el
pasado y que no es cierto que no habríais existido; si supiereis que en el pasado habéis
cometido malas acciones y que no os habéis abstenido de ellas; si supiereis que en el
pasado habéis cometido tales y tales males acciones; si supiereis que tanto sufrimiento ya
ha sido agotado, o que tanto sufrimiento aún queda por agotarse, o que cuando tanto
sufrimiento será agotado, entonces la totalidad del sufrimiento será agotada; si supiereis lo
que significa abandonar los perjudiciales estados mentales y lo que significa cultivar los
saludables estados mentales, entonces sí, sería adecuado que los venerables Niganthas
declaren: «Todo lo que una persona experimenta, sea esto placentero, doloroso o ni
placentero ni doloroso… Con la destrucción de la sensación, todo el sufrimiento se agota».

[7] “’Amigos Nighantas, imaginad a un hombre traspasado por una flecha densamente
untada con el veneno, a causa lo cual él experimenta dolorosas, espantosas y punzantes
sensaciones. Entonces, sus amigos y compañeros, los compueblanos y parientes lo llevan a
un cirujano. El cirujano hace un corte alrededor de la herida abriéndola con su bisturí,
examina la flecha y sondea [su profundidad], saca la flecha hacia afuera y aplica la
medicina cicatrizante sobre la herida abierta. Y a cada paso, el hombre herido experimenta
dolorosas, espantosas y punzantes sensaciones. Más adelante, cuando la herida ya ha sido
curada y cubierta con la piel, este hombre estaría otra vez bien y feliz, independiente,
dueño de sí mismo, pudiendo irse dondequiera. Entonces, estaría pensando así:
«Anteriormente fui traspasado con una flecha densamente untada con el veneno, a causa de
lo cual experimenté dolorosas, espantosas y punzantes sensaciones. Entonces, mis amigos y
compañeros, mis compueblanos y parientes me llevaron al cirujano quien hizo un corte
alrededor de mi herida abriéndola con su bisturí, examinó la flecha y sondeó [su
profundidad], sacó la flecha hacia afuera y aplicó la medicina cicatrizante sobre mi herida
abierta. Y a cada paso, he experimentado dolorosas, espantosas y punzantes sensaciones.
Pero ahora, cuando mi herida ya ha sido curada y cubierta con la piel, estoy otra vez bien y
feliz, independiente, dueño de mí mismo, pudiendo irme dondequiera.»

[8] “’De la misma manera, amigos Niganthas, si vosotros supiereis que es cierto que
habéis existido en el pasado y que no es cierto que no habéis existido… si supiereis lo que
significa abandonar los perjudiciales estados mentales y lo que significa cultivar los
saludables estados mentales, entonces sí, sería adecuado que los venerables Niganthas
declaren: «Todo lo que una persona experimenta, sea esto placentero, doloroso o ni
placentero ni doloroso… Con la destrucción de la sensación, todo el sufrimiento se agota».

[9] “’Pero, amigos Niganthas, siendo que vosotros no sabéis si es cierto que habéis
existido en el pasado y que no es cierto que no habéis existido… no sabéis lo que significa
abandonar los perjudiciales estados mentales y lo que significa cultivar los saludables
estados mentales, no es adecuado que los venerables Niganthas declaren: «Todo lo que una
persona experimenta, sea esto placentero, doloroso o ni placentero ni doloroso… Con la
destrucción de la sensación, todo el sufrimiento se agota».’
[10] “Cuando esto fue dicho, los Niganthas me dijeron: ‘Amigo, el Nigantha Nataputta es
omnisciente, que ve todo y reclama poseer el completo conocimiento y la visión, de esta
manera: «Tanto cuando estoy caminando como cuando estoy parado, mientras duermo o
estoy despierto, el conocimiento y la visión están continua e interrumpidamente presentes
dentro de mí.» Y es él quien dice esto: «Niganthas, vosotros habéis efectuado malas
acciones en el pasado; agotadlas mediante la realización de las punzantes austeridades. Y
cuando tendréis restringido, aquí y ahora, su cuerpo, su habla y su mente, no haréis más
malas acciones para el futuro. Así que, mediante la aniquilación de las acciones pasadas a
través del ascetismo y no realizando las acciones nuevas, no habrá consecuencias en el
futuro. Al no haber consecuencias en el futuro, ocurre la destrucción de la acción. Con la
destrucción de la acción, ocurre la destrucción del sufrimiento. Con la destrucción del
sufrimiento, ocurre la destrucción de la sensación. Con la destrucción de la sensación, todo
el sufrimiento se agota.» Nosotros aprobamos y aceptamos esto y así estamos satisfechos’.
[11] “Cuando esto fue dicho, yo dije a los Niganthas: ‘Amigos, he aquí hay cinco cosas que
se pueden producir, aquí y ahora, de dos diferentes maneras. ¿Cuáles cinco? La fe, la
aprobación, la tradición oral, el razonamiento cognitivo y la aceptación reflexiva del
entendimiento. Estas cinco cosas pueden ser producidas, aquí y ahora, de dos diferentes
maneras. Así que ¿qué clase de fe tienen los venerables Niganthas en el maestro que habla
sobre el pasado? ¿Qué clase de aprobación, qué clase de tradición oral, qué clase de
razonamiento cognitivo y qué clase de aceptación reflexiva del entendimiento?’ Hablando
así, monjes, yo no he visto defensa legítima alguna de la posición sostenida por los
Niganthas.

[12] “Además, monjes, he dicho a los Niganthas: ‘¿Qué opináis, amigos Niganthas?
Cuando realizáis un máximo y excesivo esfuerzo, ¿experimentáis las sensaciones
dolorosas, espantosas y punzantes debidas a este excesivo esfuerzo? Y cuando no realizáis
el máximo y excesivo esfuerzo, ¿no experimentáis las sensaciones dolorosas, espantosas y
punzantes debidas a este excesivo esfuerzo?’ ‘Cuando realizamos el máximo y excesivo
esfuerzo, amigo Gotama, experimentamos las sensaciones dolorosas, espantosas y
punzantes debidas a este excesivo esfuerzo, mientras que cuando no realizamos el máximo
y excesivo esfuerzo, no experimentamos las sensaciones dolorosas, espantosas y punzantes
debidas a este excesivo esfuerzo’.

[13] “’De modo que, amigos Niganthas, parece que cuando realizáis el máximo y excesivo
esfuerzo, experimentáis las sensaciones dolorosas, espantosas y punzantes debidas a este
excesivo esfuerzo, mientras que cuando no realizáis el máximo y excesivo esfuerzo, no
experimentáis las sensaciones dolorosas, espantosas y punzantes debidas a este excesivo
esfuerzo. Siendo así, no es adecuado que los venerables Niganthas declaren: «Todo lo que
una persona experimenta, sea esto placentero, doloroso o ni placentero ni doloroso, todo
esto está causado por lo que ha sido hecho en el pasado. De modo que, aniquilando, a
través de las prácticas ascéticas, las acciones pasadas y no realizando acciones nuevas, no
habrá consecuencias en el futuro. Al no haber consecuencias en el futuro, ocurre la
destrucción de la acción. Con la destrucción de la acción, ocurre la destrucción del
sufrimiento. Con la destrucción del sufrimiento, ocurre la destrucción de la sensación. Con
la destrucción de la sensación, todo el sufrimiento se agota.»

[14] “’Amigos Niganthas, si fuera el caso que al realizar el máximo y excesivo esfuerzo,
experimentaríais las sensaciones dolorosas, espantosas y punzantes debidas a este excesivo
esfuerzo, y al no realizar el máximo y excesivo esfuerzo, aún así continuaríais
experimentando las sensaciones dolorosas, espantosas y punzantes debidas a este excesivo
esfuerzo, entonces sería adecuado que los venerables Niganthas declaren: «Todo lo que una
persona experimenta… todo el sufrimiento se agota.»

[15] “’Sin embargo, amigos Niganthas, el hecho es que al realizar el máximo y excesivo
esfuerzo, experimentáis las sensaciones dolorosas, espantosas y punzantes debidas a este
excesivo esfuerzo, mientras que al no realizar este máximo y excesivo esfuerzo, no
experimentáis las sensaciones dolorosas, espantosas y punzantes debidas a este excesivo
esfuerzo. Por lo tanto, vosotros experimentáis estas sensaciones dolorosas, espantosas y
punzantes por causa de su auto-impuesto esfuerzo, y es por la ignorancia, por falta de
conocimiento y por la falsa ilusión que erróneamente declaráis: «Todo lo que una persona
experimenta… todo el sufrimiento se agota.»’ Hablando así, monjes, yo no he visto
defensa legítima alguna de la posición sostenida por los Niganthas.

[16] “Además, monjes, he dicho a los Niganthas: ‘¿Qué opináis, amigos Niganthas: es
posible que las acciones [cuyos resultados] se experimentan aquí y ahora, mediante el
esfuerzo y la voluntad, se conviertan en acciones [cuyos resultados] se experimenten en la
próxima vida?’ ‘No, amigo’. ¿Y es posible que las acciones [cuyos resultados] se
experimentarán en la próxima vida, mediante el esfuerzo y la voluntad, se conviertan en
acciones [cuyos resultados] se experimenten aquí y ahora?’ ‘No, amigo’.
[17] “‘¿Y qué opináis, amigos Niganthas: es posible que las acciones [cuyos resultados] se
experimentan como placenteros, mediante el esfuerzo y la voluntad, se conviertan en
acciones [cuyos resultados] se experimenten como dolorosos?’ ‘No, amigo’. ¿Y es posible
que las acciones [cuyos resultados] se experimentan como dolorosos, mediante el esfuerzo
y la voluntad, se conviertan en acciones [cuyos resultados] se experimenten como
placenteros?’ ‘No, amigo’.

[18] “‘¿Y qué opináis, amigos Niganthas: es posible que las acciones [cuyos resultados] se
experimentan como maduros, mediante el esfuerzo y la voluntad, se conviertan en acciones
[cuyos resultados] se experimenten como inmaduros?’ ‘No, amigo’. ¿Y es posible que las
acciones [cuyos resultados] se experimentan como inmaduros, mediante el esfuerzo y la
voluntad, se conviertan en acciones [cuyos resultados] se experimenten como maduros?’
‘No, amigo’.

[19] “‘¿Y qué opináis, amigos Niganthas: es posible que las acciones [cuyos resultados] se
experimentan en gran medida, mediante el esfuerzo y la voluntad, se conviertan en
acciones [cuyos resultados] se experimenten en pequeña medida?’ ‘No, amigo’. ¿Y es
posible que las acciones [cuyos resultados] se experimentan en pequeña medida, mediante
el esfuerzo y la voluntad, se conviertan en acciones [cuyos resultados] se experimenten en
gran medida?’ ‘No, amigo’.

[20] “‘¿Y qué opináis, amigos Niganthas: es posible que las acciones [cuyos resultados] se
experimentan, mediante el esfuerzo y la voluntad, se conviertan en acciones [cuyos
resultados] no se experimenten?’ ‘No, amigo’. ¿Y es posible que las acciones [cuyos
resultados] no se experimentan, mediante el esfuerzo y la voluntad, se conviertan en
acciones [cuyos resultados] se experimenten?’ ‘No, amigo’.

[21] “’Siendo así, amigos Niganthas, parece que es imposible que las acciones [cuyos
resultados] se experimentan aquí y ahora, mediante el esfuerzo y la voluntad, se conviertan
en acciones [cuyos resultados] se experimenten en la próxima vida; y es imposible que las
acciones [cuyos resultados] se experimentarán en la próxima vida, mediante el esfuerzo y
la voluntad, se conviertan en acciones [cuyos resultados] se experimenten aquí y ahora; es
imposible que las acciones [cuyos resultados] se experimentan como placenteros, mediante
el esfuerzo y la voluntad, se conviertan en acciones [cuyos resultados] se experimenten
como dolorosos; es imposible que las acciones [cuyos resultados] se experimentan como
dolorosos, mediante el esfuerzo y la voluntad, se conviertan en acciones [cuyos resultados]
se experimenten como placenteros; es imposible que las acciones [cuyos resultados] se
experimentan como maduros, mediante el esfuerzo y la voluntad, se conviertan en acciones
[cuyos resultados] se experimenten como inmaduros; es imposible que las acciones [cuyos
resultados] se experimentan como inmaduros, mediante el esfuerzo y la voluntad, se
conviertan en acciones [cuyos resultados] se experimenten como maduros; es imposible
que las acciones [cuyos resultados] se experimentan en gran medida, mediante el esfuerzo
y la voluntad, se conviertan en acciones [cuyos resultados] se experimenten en pequeña
medida; es imposible que las acciones [cuyos resultados] se experimentan en pequeña
medida, mediante el esfuerzo y la voluntad, se conviertan en acciones [cuyos resultados] se
experimenten en gran medida; es imposible que las acciones [cuyos resultados] se
experimentan, mediante el esfuerzo y la voluntad, se conviertan en acciones [cuyos
resultados] no se experimenten; es imposible que las acciones [cuyos resultados] no se
experimentan, mediante el esfuerzo y la voluntad, se conviertan en acciones [cuyos
resultados] se experimenten. Siendo las cosas de esta manera, todo el esfuerzo sería en
vano y cada decisión solícita, infructuosa.’

[22] “Así hablan los Niganthas, monjes. Y por causa de esta su forma de hablar, existen
diez legítimas deducciones que se podrían hacer a partir de sus aseveraciones que van en su
contra:

(i) “si el placer y el dolor que sienten los seres es causado por lo que ha sido hecho en el
pasado, entonces los Niganthas seguramente habrán tenido que cometer malas acciones en
el pasado, para tener que experimentar ahora las sensaciones tan dolorosas, espantosas y
punzantes;

(ii) “si el placer y el dolor que sienten los seres es causado por un acto creativo de un Dios
Supremo, entonces los Niganthas seguramente habrán tenido que ser creados por un Dios
Supremo malvado, para tener que experimentar ahora la sensaciones tan dolorosas,
espantosas y punzantes;

(iii) “si el placer y el dolor que sienten los seres es causado por las circunstancias o la
naturaleza, entonces los Niganthas seguramente habrán tenido que tener muy mala suerte,
para tener que experimentar ahora las sensaciones tan dolorosas, espantosas y punzantes;
(iv) “si el placer y el dolor que sienten los seres es causado por una determinada clase [de
nacimiento], entonces los Niganthas seguramente habrán tenido que pertenecer a la clase
baja, para tener que experimentar ahora las sensaciones tan dolorosas, espantosas y
punzantes;

(v) “si el placer y el dolor que sienten los seres es causado por el esfuerzo realizado aquí y
ahora, entonces los Niganthas seguramente habrán tenido que esforzarse mal aquí y ahora,
para tener que experimentar ahora las sensaciones tan dolorosas, espantosas y punzantes;

(vi) “si el placer y el dolor que sienten los seres es causado por lo que fue hecho en el
pasado, entonces los Niganthas tendrían que ser censurados, y si no fuera así, igualmente
los Niganthas tendrían que ser censurados;

(vii) “si el placer y el dolor que sienten los seres es causado por el acto creativo de un Dios
Supremo, entonces los Niganthas tendrían que ser censurados, y si no fuera así, igualmente
los Niganthas tendrían que ser censurados;

(viii) “si el placer y el dolor que sienten los seres es causado por el azar, entonces los
Niganthas tendrían que ser censurados, y si no fuera así, igualmente los Niganthas tendrían
que ser censurados;

(ix) “si el placer y el dolor que sienten los seres es causado por la clase [de nacimiento],
entonces los Niganthas tendrían que ser censurados, y si no fuera así, igualmente los
Niganyhas tendrían que ser censurados;

(x) “si el placer y el dolor que sienten los seres es causado por el esfuerzo realizado aquí y
ahora, entonces los Niganthas tendrían que ser censurados, y si no fuera así, igualmente los
Niganthas tendrían que ser censurados;
“Así hablan los Niganthas, monjes. Y por causa de esta su forma de hablar, existen estas
diez legítimas deducciones que se pueden hacer a partir de sus aseveraciones que van en su
contra. Por eso, todo su esfuerzo es en vano y toda decisión, infructuosa.

[23] “¿Y de qué manera, monjes, el esfuerzo no es en vano y las decisiones son fructíferas?
He aquí, monjes, el monje no se deja abrumar por el sufrimiento ni tampoco se abruma a sí
mismo con el sufrimiento; él no abandona los placeres que están de acuerdo al Dhamma,
pero tampoco se enamora de ellos locamente. Él entiende así: ‘Cuando me esfuerzo con
determinación, esta particular fuente del sufrimiento se desvanece en mí por causa de este
esfuerzo hecho con determinación. Y mientras que yo la miro con ecuanimidad, esta
particular fuente del sufrimiento se desvanece en mi por causa del desarrollo de la
ecuanimidad.’ Entonces, él se esfuerza con determinación en relación a esta particular
fuente del sufrimiento, la cual se desvanece en él por causa de este esfuerzo hecho con
determinación. Y él desarrolla la ecuanimidad, en relación a esta particular fuente del
sufrimiento, la cual se desvanece en él por causa del desarrollo de la ecuanimidad. Y
cuando él se esfuerza con determinación, ésta y aquélla fuente del sufrimiento se
desvanecen en él por causa de este esfuerzo hecho con determinación, hasta que dicho
sufrimiento se agota en él por completo. Y cuando él mira con ecuanimidad, ésta y aquélla
fuente del sufrimiento se desvanecen en él por causa del desarrollo de la ecuanimidad,
hasta que dicho sufrimiento se agota en él por completo.

[24] “Suponed, monjes, que un hombre está enamorado en una mujer con su mente ligada a
ella por medio de un intenso deseo y pasión. Y suponed que él viera a esta mujer estando
con otro hombre, cantando, jugando y riéndose. ¿Qué pensáis monjes: podría el pesar, el
lamento, la pena, el dolor y la desesperanza surgir en este hombre cuando viera a aquella
mujer estando con otro hombre, cantando, jugando y riéndose?”

“Sí, venerable señor. ¿Y por qué? Porque este hombre está enamorado de aquella mujer
con su mente ligada a ella por medio de un intenso deseo y pasión; es por eso que el pesar,
el lamento, la pena, el dolor y la desesperanza podría surgir en él cuando viera a aquella
mujer estando con otro hombre, cantando, jugando y riéndose.”

[25] “Entonces, monjes, en este hombre podría surgir el siguiente pensamiento: ‘Yo estoy
enamorado de esta mujer con mi mente ligada a ella por medio de un intenso deseo y
pasión; por eso, el pesar, el lamento, la pena, el dolor y la desesperanza surgen en mí
cuando la veo estando con otro hombre, cantando, jugando y riéndose. ¿Qué tal si
abandono mi deseo y mi pasión por esta mujer?’ Y entonces, él abandona su deseo y su
pasión por esta mujer. Suponed, monjes, qué más tarde en otra ocasión él viera otra vez a
esta mujer estando con otro hombre, cantando, jugando y riéndose. ¿Qué pensáis monjes:
podría ahora el pesar, el lamento, la pena, el dolor y la desesperanza surgir en este hombre
cuando viera a aquella mujer estando con otro hombre, cantando, jugando y riéndose?”

“No, venerable señor. ¿Y por qué? Porque este hombre ya no está más enamorado de
aquella mujer; es por eso que el pesar, el lamento, la pena, el dolor y la desesperanza ya no
podrían surgir en él cuando viera a aquella mujer estando con otro hombre, cantando,
jugando y riéndose.”

[26] “De la misma manera, monjes, cuando el monje no se deja abrumar por el sufrimiento
ni tampoco se abruma a sí mismo con el sufrimiento… (sigue igual que en el verso 23 )
ésta y aquélla fuente del sufrimiento se desvanecen en él por causa del desarrollo de la
ecuanimidad, hasta que dicho sufrimiento se agota en él por completo. De esta manera,
monjes, el esfuerzo no es en vano y las decisiones son fructíferas.

[27] “Además, monjes, el monje considera esto: ‘Mientras vivo satisfaciendo mis placeres,
los perjudiciales estados mentales crecen en mí y los saludables estados mentales,
disminuyen. Pero, cuando me ejercito en lo que es doloroso, los perjudiciales estados
mentales disminuyen en mí y los saludables estados mentales, crecen. ¿Qué tal si me
ejercito a mí mismo en lo que es doloroso?’ Entonces él se ejercita a sí mismo en lo que es
doloroso y los perjudiciales estados mentales disminuyen en él y los saludables estados
mentales, crecen [2] . Pero entonces, más adelante, en otra ocasión, él ya no se ejercita más
en lo que es doloroso. ¿Por qué? Porque el propósito, por el cual el monje se ejercitaba en
lo que es doloroso ha sido alcanzado. Es por eso que, más adelante, en otra ocasión, él ya
no se ejercita más en lo que es doloroso.

[28] “Suponed, monjes, que el productor de flechas estuviera calentando y enardeciendo la


punta de una flecha entre dos fuegos, haciéndola recta y moldeada. Una vez que la punta de
la flecha, al ser calentada y enardecida entre dos fuegos, estuviera suficientemente recta y
moldeada, entonces más adelante, en otra ocasión, él ya no la estaría calentando y
enardeciendo entre dos fuegos para que sea recta y moldeada. ¿Por qué? Porque el
propósito, por el cual el productor de flechas estaba calentando y enardeciendo la punta de
la flecha, ha sido alcanzado. Es por eso que, más adelante, en otra ocasión, él ya no la
calienta ni enardece más para que sea recta y moldeada.

[29] “De la misma manera, monjes, el monje considera esto: ‘Mientras vivo satisfaciendo
mis placeres, los perjudiciales estados mentales crecen… (sigue igual que en el verso 27 )
Es por eso que, más adelante, en otra ocasión, él ya no se ejercita más en lo que es
doloroso. De esta manera también, monjes, el esfuerzo no es en vano y las decisiones son
fructíferas.

[30] “He aquí, monjes, el Tathagata llegó a este mundo, un Arahant, un Buda plenamente
iluminado, perfecto en conocimiento y conducta, el Bienhechor, el Conocedor de los
mundos, inigualado adiestrador de hombres que han de ser domados, el maestro de los
dioses y los humanos, el Buda, el Bienaventurado Señor. Él revela las cosas tanto del
mundo de los dioses, maras y brahmas, como del mundo de los ascetas y brahmanes con
sus príncipes y su gente, habiendo conocido todo esto mediante su propio entendimiento. El
Dhamma que él enseña es agradable en el comienzo, agradable en la mitad y agradable al
final. Él enseña su espíritu y su letra, exhibiéndolo perfecta y plenamente y viviendo una
vida santa, rigurosa y pura.

[31] “Un hombre hogareño o el hijo del hombre hogareño, o alguien que renació desde un
hogar a otro, al escuchar este Dhamma, obtiene fe en el Tathagata reflexionando de esta
manera: ‘La vida hogareña es un camino limitado y cubierto de polvo, mientras que la vida
sin hogar es como vivir al aire libre. Esta no es una tarea fácil: vivir en el hogar y practicar
una vida totalmente perfecta, totalmente pura y mantenerla brillante como una concha
desvainada. ¿Qué tal si afeito mi cabeza y mi barba, me visto con el hábito amarillo y dejo
esta vida hogareña para vivir el estilo de vida sin hogar?’ De modo que, después de cierto
tiempo él efectivamente abandona sus riquezas, pequeñas o grandes, deja el círculo de sus
parientes, pequeño o grande, afeita su cabeza y su barba, se viste con el hábito amarillo
para vivir el estilo de vida sin hogar.

[32] “Habiendo salido de esta manera y siguiendo la forma de vida de los monjes, dejando
de dar la muerte a los seres vivos, él se mantiene distante de la destrucción de la vida; sin
garrotes o espadas, se avergüenza de la violencia. Vive compasivo y amable con todos los
seres vivos. Dejando de tomar lo que no le ha sido dado, él se mantiene distante de codiciar
aquello que no es de él. Toma solamente lo que le es ofrecido y mientras espera las
limosnas, transcurre su vida en la honestidad y en la pureza del corazón. Dejando las
impurezas, él vive en castidad. Se mantiene distante de las prácticas vulgares relacionadas
con los actos sexuales.

“Dejando las palabras mentirosas, él se mantiene distante de la falsedad. Habla la verdad


sin dobleces, es creíble y digno de confianza; nunca quiebra su palabra. Dejando la
difamación y calumnia, él se mantiene distante de la embustería. Lo que escucha aquí, no
lo repite en otro lugar, para no causar riñas con la gente de aquí; y lo que escucha en otro
lugar, no lo repite aquí, para no causar riñas con la gente de allá. Así vive él, como un
reconciliador de aquellos que están divididos, animando a los que viven en amistad,
hacedor y amante de la paz, apasionado por la causa de la paz; sus palabras son siempre
pacíficas. Dejando la rudeza de hablar, él se mantiene distante del lenguaje violento. Cada
una de sus palabras es intachable, agradable, encantadora, toca el corazón y es cortés. La
gente ama su forma de hablar y se complace en ella.Dejando las charlas frívolas, él se
mantiene distante de las vanas conversaciones. Sus palabras son siempre correctas, acordes
a los hechos y llenas de significado; versan sólo sobre el Dhamma y la Disciplina. Él habla
siempre a tiempo justo, y sus palabras son dignas de ser escuchadas, llegan al corazón, son
ilustrativas, claramente escogidas y siempre tocan el punto.

“Él se abstiene de causar daño a las semillas o las plantas. Toma una sola comida al día y
nunca come por la noche y se abstiene de comer en el horario indebido. Se abstiene de
mirar los espectáculos de entretenimiento. Se abstiene de danzar, cantar y escuchar música.
Se abstiene de usar adornos y no se embellece con guirnaldas, perfumes o ungüentos. Se
abstiene de usar grandes y cómodos lechos. Se abstiene de recibir oro y plata. Se abstiene
de aceptar granos no cocinados. Se abstiene de aceptar la comida cruda. Se abstiene de
aceptar mujeres o muchachas. Se abstiene de aceptar esclavos y esclavas. Se abstiene de
aceptar ovejas y cabras. Se abstiene de aceptar aves y cerdos. Se abstiene de aceptar
elefantes, reses, caballos y yeguas. Se abstiene de aceptar campos de cultivo y campos
baldíos. Se abstiene de mandar recados. Se abstiene de comprar y vender. Se abstiene del
engaño con las falsas pesas o medidas. Se abstiene del camino torcido de los sobornos, las
estafas y los fraudes. Se abstiene de las mutilaciones, los asesinatos y los aprisionamientos.
Se abstiene de los asaltos, robos y de la violencia.
[33] “Él permanece contento con la ropa que protege su cuerpo y con la comida de las
limosnas que llena su estómago, y dondequiera que vaya, se dispone a tomar solamente
esto con él. Al igual que un pájaro, dondequiera que vuele, lleva solamente las alas como
su carga, así también el monje, permanece contento con la ropa que protege su cuerpo y
con la comida de las limosnas que llena su estómago, y dondequiera que vaya, se dispone a
tomar solamente esto con él. Poseyendo esta característica de la virtud, él experimenta
dentro de sí mismo la dicha que es irreprochable.

[34] “ Cuando mira con sus ojos algún objeto visible, no se apega a él ni a alguno de sus
detalles. Porque si alguien vive sin resguardar su sentido de la vista, le sobresaltan los
perjudiciales estados mentales de la avaricia y el pesar, de modo que, el monje practica el
camino de la restricción, resguarda su sentido de la vista y se compromete a restringirlo.
Cuando escucha con sus oídos algún objeto audible… Cuando huele con su nariz algún
objeto olfativo… Cuando degusta con su paladar algún objeto gustativo… Cuando percibe
con su cuerpo algún objeto táctil… Cuando conoce con su intelecto algún objeto mental, no
se apega a él ni a alguno de sus detalles. Porque si alguien vive sin resguardar su sentido de
la cognición, le sobresaltan los perjudiciales estados mentales de la avaricia y el pesar, de
modo que, el monje practica el camino de la restricción, resguarda su sentido de la
cognición y se compromete a restringirlo. Poseyendo esta noble restricción de los sentidos,
él experimenta dentro de sí mismo la dicha que es inmaculada.

[35] “Él permanece como alguien que actúa plenamente consciente c uando camina hacia
adelante o cuando camina hacia atrás; actúa plenamente consciente cuando mira hacia
adelante o cuando mira hacia atrás; actúa plenamente consciente cuando recoge sus
miembros o cuando los extiende; actúa plenamente consciente cuando viste el hábito o
cuando lleva la ropa exterior o el tazón; actúa plenamente consciente cuando come, bebe,
mastica o saborea; actúa plenamente consciente cuando orina o cuando defeca; actúa
plenamente consciente cuando camina, cuando está parado, cuando está sentado, cuando se
acuesta a dormir, cuando se despierta, cuando conversa o cuando permanece en silencio.

[36] “Dotado de la cualidad de la noble virtud, de la noble restricción de los sentidos, y


dotado de la noble atención consciente y clara comprensión, el monje busca una morada
solitaria: en el bosque, al pie de un árbol, en la cueva de una montaña, en el cementerio, en
la arbolada de la jungla, al aire libre o en una pila de paja.
[37] “Y después de haberse alimentado, al haber regresado de su ronda en busca de las
limosnas de comida, se sienta con los pies cruzados y, manteniendo recto su cuerpo,
establece su atención consciente enfrente.Dejando de lado las codicias mundanas,
permanece atentamente consciente y libre de la codicia. Limpia su mente de la codicia.
Dejando de lado la maldad y el enojo, permanece atentamente consciente y libre de la
maldad, con el amor compasivo hacia el bienestar de los seres vivientes. Limpia su mente
de la maldad y el enojo. Dejando de lado la pereza y el letargo, permanece atentamente
consciente y libre de la pereza y del letargo, percibiendo la luz atenta y conscientemente.
Limpia su mente de la pereza y el letargo. Dejando de lado la agitación y la ansiedad,
permanece imperturbable y con la mente calmada. Limpia su mente de la agitación y la
ansiedad. Dejando de lado la incertidumbre, permanece como alguien que hubo traspasado
las dudas, sin perplejidad en consideración de las sanas cualidades mentales. Limpia su
mente de la incertidumbre.

[38] “Y habiendo, así, abandonado a estos cinco obstáculos, las imperfecciones de la mente
que debilitan la sabiduría, separado de la sensualidad, separado de los perjudiciales estados
mentales, entra y permanece en el primer jhana, acompañado con el pensamiento inicial y
analítico, lleno del arrobamiento y el placer, nacidos de la reclusión. De esta manera
también, monjes, el esfuerzo no es en vano y las decisiones son fructíferas.

[39] “Y otra vez, monjes, el monje, apaciguando el pensamiento inicial y analítico,


logrando la calma mental y la unificación de la mente, entra y permanece en el segundo
jhana. Lleno de arrobamiento y placer nacidos de la concentración, posee la confianza y la
unificación de la mente libre del pensamiento inicial y analítico. De esta manera también,
monjes, el esfuerzo no es en vano y las decisiones son fructíferas.

[40] “Y otra vez, monjes, el monje, al extinguirse el arrobamiento, permanece ecuánime,


con atención consciente y clara comprensión, sensible a la sensación del placer, del cual los
Nobles declararon que “Feliz es aquel que mora en la ecuanimidad y en la atención
consciente” y, de esta manera, entra y permanece en el tercer jhana. De esta manera
también, monjes, el esfuerzo no es en vano y las decisiones son fructíferas.

[41] “Y otra vez, monjes, el monje, al abandonar tanto el placer como la pena –con la
anterior desaparición de las alegrías y las tristezas- entra y permanece en el cuarto jhana, el
cual va más allá de los placeres y las penas, purificado con la ecuanimidad y atención
consciente. De esta manera también, monjes, el esfuerzo no es en vano y las decisiones son
fructíferas.

[42] “Con la mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de las impurezas,
maleable, flexible, firme y alcanzando la imperturbabilidad, él direcciona e inclina su
mente hacia el conocimiento de las existencias pasadas. Se acuerda de sus múltiples vidas
pasadas: de un nacimiento, dos nacimientos, tres nacimientos, cuatro, cinco, diez, veinte,
treinta, cuarenta, cincuenta, cien, mil, cien mil nacimientos, muchos eones de las
contracciones cósmicas, muchos eones de las expansiones cósmicas, muchos eones de las
contracciones y expansiones cósmicas, recordando: ‘En aquel entonces, mi nombre era así,
mi linaje era éste y provenía de ésta casta; me alimentaba de ésta clase de comida,
experimentaba ésta y aquella clase de alegrías y penas y he vivido ésta cantidad de años.
Habiendo terminado mi vida ahí, me he reconectado allá, donde mi nombre era…
Habiendo terminado mi vida ahí, me he reconectado aquí’. De esta manera, se acuerda de
varias de sus vidas pasadas, con sus condiciones y detalles. De esta manera también,
monjes, el esfuerzo no es en vano y las decisiones son fructíferas.

[43] “Con la mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de las impurezas,
maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, él direcciona e inclina su
mente hacia la muerte y la reconexión de los seres. A través del ojo divino, purificado y
que sobrepasa el humano, ve la muerte de los seres y su reaparición, discerniendo si su
destino es inferior o superior, hermoso u horrible, afortunado o desafortunado, de acuerdo
al kamma de cada uno. Conoce de esta manera: ‘Estos seres, que obraron mal con su
cuerpo, con su habla o con su mente, los que injuriaban a los nobles, mantenían los
incorrectos puntos de vista y asumían las acciones resultantes de estos erróneos puntos de
vista, al quebrarse su cuerpo, después de la muerte, han reaparecido en el plano de las
penurias, de mal destino, en los reinos bajos, en el infierno. Pero aquellos seres, que
obraron bien con su cuerpo, con su habla o con su mente, los que no injuriaban a los
nobles, mantenían los correctos puntos de vista y asumían las acciones resultantes de estos
correctos puntos de vista, al quebrarse su cuerpo, después de la muerte, han reaparecido en
el buen destino, en el mundo celestial’. De esta manera, a través del ojo divino, purificado
y que sobrepasa el humano, él ve la muerte de los seres y su reaparición, discerniendo si su
destino es inferior o superior, hermoso u horrible, afortunado o desafortunado, de acuerdo a
su kamma. De esta manera también, monjes, el esfuerzo no es en vano y las decisiones son
fructíferas.
[44] “Con la mente concentrada, purificada y brillante, intachable, libre de las impurezas,
maleable, flexible, firme y que ha alcanzado la imperturbabilidad, él direcciona e inclina su
mente hacia el conocimiento del fin de las impurezas mentales. Él conoce tal como
realmente es: ‘Este es el sufrimiento, éste es el origen del sufrimiento, éste es el cese del
sufrimiento y éste es el sendero que lleva al cese del sufrimiento’.

[45] “Cuando él ve y conoce esto tal como realmente es, su mente es liberada de las
impurezas de la sensualidad, de las impurezas de la existencia y de las impurezas de la
ignorancia. Y entonces, el siguiente conocimiento nace en él: ‘¡Ésta es la liberación!’ Y él
sabe que ‘el nacimiento está terminado, la vida santa ha sido realizada, la tarea ha
culminado. No queda más nada por delante’. De esta manera también, monjes, el esfuerzo
no es en vano y las decisiones son fructíferas.

[46] “Así es, monjes, cómo habla el Tathagata. Y por causa de esta su forma de hablar,
existen diez legítimas deducciones que se podrían hacer a partir de sus aseveraciones que
van a su favor:

(i) “si el placer y el dolor que sienten los seres es causado por lo que ha sido hecho en el
pasado, entonces el Tathagata seguramente habrá tenido que realizar buenas acciones
en el pasado, para poder experimentar ahora sensaciones tan inmaculadas y
placenteras;

(ii) “si el placer y el dolor que sienten los seres es causado por un acto creativo de un Dios
Supremo, entonces el Tathagata seguramente habrá tenido que ser creado por un Dios
Supremo bueno, para poder experimentar ahora sensaciones tan inmaculadas y placenteras;

(iii) “si el placer y el dolor que sienten los seres es causado por las circunstancias o la
naturaleza, entonces el Tathagata seguramente habrá tenido que tener muy buena
suerte, para poder experimentar ahora sensaciones tan inmaculadas y placenteras;
(iv) “si el placer y el dolor que sienten los seres es causado por una determinada clase [de
nacimiento], entonces el Tathagata seguramente habrá tenido que pertenecer a la clase
alta, para poder experimentar ahora sensaciones tan inmaculadas y placenteras;

(v) “si el placer y el dolor que sienten los seres es causado por el esfuerzo realizado aquí y
ahora, entonces el Tathagata seguramente habrá tenido que esforzarse bien aquí y
ahora, para poder experimentar ahora sensaciones tan inmaculadas y placenteras;

(vi) “si el placer y el dolor que sienten los seres es causado por lo que fue hecho en el
pasado, entonces el Tathagata tendría que ser alabado, y si no fuera así, igualmente el
Tathagata tendrían que ser alabado;

(vii) “si el placer y el dolor que sienten los seres es causado por el acto creativo de un Dios
Supremo, entonces el Tathagata tendría que ser alabado, y si no fuera así, igualmente el
Tathagata tendrían que ser alabado;

(viii) “si el placer y el dolor que sienten los seres es causado por el azar, entonces el
Tathagata tendría que ser alabado, y si no fuera así, igualmente el Tathagata tendrían
que ser alabado;

(ix) “si el placer y el dolor que sienten los seres es causado por la clase [de nacimiento],
entonces el Tathagata tendría que ser alabado, y si no fuera así, igualmente el
Tathagata tendrían que ser alabado;

(x) “si el placer y el dolor que sienten los seres es causado por el esfuerzo realizado aquí y
ahora, entonces el Tathagata tendría que ser alabado, y si no fuera así, igualmente el
Tathagata tendrían que ser alabado;

“Así es, monjes, cómo habla el Tathagata. Y por causa de esta su forma de hablar, existen
estas diez legítimas deducciones que se podrían hacer a partir de sus aseveraciones que van
a su favor.”
Esto es lo que fue dicho por el Bienaventurado y los monjes fueron satisfechos y se deleitaron
en las palabras del Bienaventurado.

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