Ayuntamiento de Madrid

CHISPA CHIS

T E MA S M I L I T A R E S
El módulo de fuego para los distintos materiales es de\

Municionamiento •00 disparos para el cañón del 7,5: 150, para el obús del'
10.5: i 50, para el obús del 15.5 y 50, para la actillería\^
antiaérea.
Parques Divisionarios.— Este problema es de capital im­ Para la artillería ligera se necesita en el parque divi-\
portancia. debido al gran consumo de municiones que la sionario 12 carros para 7,5 y 25 camiones de cuatro (onela-\
guerra moderna exige y que alcanza cifras tan enormes das; cuatro carros para 10.5; 8 carros de parque para eí|
como la de 700.000 disparos lanzados por los alemanes mismo y 16 camiones de cuatro toneladas.
en cuatro horas sobre la plaza de Prezsunyls. cantidad que El grupo pesado no llevará ningún disparo en las ba­
antes se calculaba suficiente para un sitio de seis meses: y terías. no existiendo hoy día modelo especial para su mu­
la de cuatro a cinco millones de disparos de artillería lan­ nicionamiento. pero estando dotado este material de trac­
zados durante una semana sobre Verdún. ción mecánica, indicaremos el número de camiones necesa-
Los parques divisionarios tienen que atender al muni­ lios para transportar los dos módulos de fuego, que es de i
cionamiento de las fuerzas divisionarios y a la reposición 55 camiones de cuatro toneladas.
y arreglo del material. La artillería antiaérea lleva 54 disparos por pieza, porl
Considerando que el fuego es uno de los medios de ac­ lo que consideramos suficiente que lleve un segundo escúf-j
ción de la Infantería y el único por el que actúa la A rti­ '.ón por batería.
llería. se comprende que el problema del municionamien­ Com o resumen vemos que solamente para el e.scalónl
to es uno de los fundamentales que debe tener en cuenta el pesado de artillería hay que agregar a lo indicado por eí]
Mando al organizar sus unidades: toda vez que sin muni­ primer .subgrupo 24 camiones de cuatro toneladas. vue
ciones o con una organización defectuosa de este servicio, C om o para llevar el completo las municiones de infan­ tror
las armas no pueden llevar a cabo su misión o la realizan tería se necesitarán unos 1 50 camiones más. mac
en malas condiciones, con lo que difícilmente se podrá al­
TORRANO alee
canzar la victoria.
Si. a más de esto, tenemos en cuenta que para facilitar zas
el municionamiento se habrán organizado los centros de ten i
entrega, y clasificado los elementos de manera que a tes,
cada unidad subordinado se le envíen las municiones y no creamos que es más
especiales que requieran con perfecto orden: y que en A r­ Coniejoi guerrero el que más cartu­
nes
tillería es de enorme importancia para las baterías y grupos su t
La fabricación de muni- chos dispara; lo es el que|
el que las municiones, sean del mismo lote y de la misma
cíase de pólvora: justifican la necesidad de dotar de ma­ ciones es mucho más costosa mejor las emplea y más cui­
deci
terial abundante a los parques, ya que nada, se conseguiría de lo que nos figuramos, dado tiene de ellas.
Vi la escasez del mismo obliga a desorganizar lo clasifica­ Por ello, siempre que el fuer
compañeros, y por ello, nos­
do en los depósitos. capitán de una compañía o ré L
otros que somos los encar­
Por las misiones que tiene que cumplir el parque divi­ y oc
gados de consumirlas he­ el que haga sus veces dé la
sionario se compondrá de las secciones siguientes:
mos de procurar por todos voz de: ;alto el fuego 1 se le
/.” Un escalón ligero de Infantería.
los medios sacarles el ma­ debe obedecer ciegamente, y
2. " Un escalón ligero de Artillería
3. " Un escalón pesado de Artillería. yor rendimitno p o s i b l e . pensando siempre en que lo'
4. " Un escalón pesado de separaciones. ^Cómo? N o disparando sin dice en beneficio de la cau­
Los escalones ligeros de Infantería y Artillería tienen necesidad, no derrochándo­ sa.
que tener condiciones de movilidad suficientes para poder las tontamente y recogiendo En los momentos
circular por el campo, por lo que estará dotado de tracción todos los casquillos. sin de­ atravesamos no se debe ti­
hipomóvil. El escalón pesado, que lleva indistintamente rar un cartucho y sí vigilar
jar uno solo, con lo que La
municiones de una u otra arma, está destinado al trans­
ayudaremos a la economía sin descanso todos los moví pira y
porte por carretra o camino desde los centros de entrega
del escalón superior a los depósitos divisionarios y a veces de la República, y adelan­ mientos del enemigo, tenien­ íu/rr?ü l
hasta los centros de entrega a las columnas de municiona­ do preparadas las municio­ Mes. z
taremos el trabajo y al mis­
miento de los grupos, por lo que estará dotado de camiones. A ll
mo tiempo la victoria. Esta nes y limpio el armamento
^^rmosi
El escalón de Infantería está servido por personal de debe ser la preocupación para hacer uso de ellos ¿n ’^ás tei
esta Arma por lo que han hecho su estudio nuestros com ­ las ocasiones en que sean '■ordo.,,!
constante de todo luchador
pañeros del subgrupo perteneciente a dicha arma, los cua­ '■trs alas
antifascista. necesarios, con lo que se ten­
les ya han indicado la escasez de elementos que están do­
tados. Las municiones se quie­ drá la seguridad de que se
Aunque el número de municiones que se gastan en un ren para la guerra, pero hay emplean en defensa de h
combate es muy variable, según las circunstancias y carác­ que saber emplearlas en ella. causa y de nosotros mismos-
ter del mismo, habiendo llegado en muchos casos a supe­ <Qué
rar todos los cálculos: nuestros reglamentos marcan que ^ el hi
toda "gran unidad" debe de disponer de dos módulos de De

¡BIEN POR ÁSTURIÁi!

municionamiento o municiones para dos combates por lo ’-an al I
i ' / lenos, contándose para constituirlos con las municiones '^ncilio.
que llevan ¡as unidades.

Ayuntamiento de Madrid
^ XL
 CHISPA CHISPA

RAFAEL R E G A T E R O SALVADOR GABARRO

El cam arada Re- A l hacerme cargo
?riales es de\ catero nuestro que­
el obús de/j del Com isariado de
rido Comisario, h a la Brigada, me d irijo
la artillerkl
sido trasladado para a todos, ta n to a jefes
>arque divi- ejercer su cargo en y oficiales como co­
atro tonela- una División. misarios y Delegados
que para el A ntes de m archar f
Políticos , clases y
nos dejó estas c u a rti­ soldados y os digo:
) en las bo­
yara su mu- llas para su p u b lica ­
ción, He aceptado el ho­
■{al de trac-
ones necesa- Su paso por nues­ nor d e ocupar este
■), que es de tra Brigada será re­ puesto cum pliendo ó r­
cordado siempre con denes superiores, p r i­
r pieza, por m ero por discip lin a y
•gundo esca- profundo cariño.
segundo porque tengo
« 4«
a el escalón la certeza y la convic­
He sentido en el trascurso de mi actuación a ción plena, de que todos los que pertenecéis a esa
icado por el
idas. vuestro lado, la inmensa alegría de ver la honda gloriosa y abnegada Brigada estáis capacitados de
>es de infon transform ación en el tondo y en la form a en la la envergadura, dureza y sig nificació n de esta gue­
m agnífica unidad que hoy constituís, y he sentido rra, desencadenada por todos ios elementos reac­
RRANO alegría porque al veros, comprendía que las fu e r­ cionarios traidores a su p a tria y por esa razón sé no
zas de los traidores, como lo dem ostrasteis, nada ha de fa lta rm e , vuestra ayuda, vuestra colabora­
tenían que hacer fre n te a vosotros, j Erais su ficie n ­ ción valiosa, para seguir y si es posible desarrollar,
tes, sobrados, pora los tanques, para los "g a v ila ­ la labor tan e fica z y práctica, que nos ha legado
que es mas nes negros"! j Erais Iberia defendiendo enfurecida nuestro querido Com isario "R ecar" con la sana ideo
más cartu-
su terreno hollado! de m ejorar, m ilita r y po líticam e nte nuestro E jérci­
o es el que to Popular.
Hoy, me separo de vosotros. M e separo hay que
a y más cui
decir, pero yo quisiera encontrar o tra palabra que Soldados de la 23 Brigada ai mismo tiem po que
lias.
fuera más suave, puesto que yo siempre me senti­ agradezco vuestra buena acogida, espero de vos­
mpre que el
ré unido a vosotros en lo que a amor a la causa otros y os pido, que redobléis los esfuerzos en el
compañía o
cu m p lim ie n to del deber, que os disciplinéis y obe­
5 veces dé la y odio al invasor se refiere,
dezcáis al mando, porque ese es el cam ino más
fuego! se le Salud, pues, camaradas de la 23 Brigada,
corto para conseguir la vic to ria que todos deseamos.
iegamente, y
re en que lo
0 de la cau-

imentos que
RECUERDO
Dedicado al Mayor D. Antonio Sicilia Serrano. Contemplo las sombras, calculo el vacío, me fundo en
1 se debe ti- Con respeto y cariño. lus sombras, y entre ellas sonrío: y por el sendero que guía
) y sí vigilar a la cumbre dirijo mis pasos. Se ve de una lumbre las lla­
La noche es oscura., no se oye ni un tiro: la brisa sus­
los lo.s moví pira y es leve el suspiro, Por entre jorobas de montes en mas rojizas lanzar sus destellos, y allá en lontananza los
migo, tenien- ^olma la luna gatea, se asoma, ve el alma: y por los tri­ faros de un coche, muy lejos... muy lejos...
las municio bales. zarzas y tomillos, dan su sinfonía chicharras y grillos. ¡Qué bella es la noche'.
1 armamento Allá en las alturas no surgen querellas. ¡Qué paz más Sentados en corro, ¡os hombres escuchan do un disco
aermosa! Luceros... estrellas... Y en el campamento ni el la copla: Se olvidan que luchan. Y que tras los montes y
■ de ellos eit
tenue ruido. T od o está en reposo. Marte se ha dor- IOS olivares, la muerte vigila de pie en los altares.
en que sean ^'^^do. .Susurran las auras amores al viento, y el viento en
¡La muerte'., ¿qué importa? La muerte es la vida. ¿Sa­
lo que se ten '•as alas, recoge un lamento. brá alguno el punto de nuestra partida?
id de que se Que fué a un arroyo a beber Saludo en silencio. La copla, un desgarro. Me ofrecen
efensa de la yo he visto a una paloma. un sitio y enciendo un cigarro. Y escucho con ellos, del
■)tros mismos cante las notas, que van por el valle, perdiéndose rotas.
<Qué nota en los aires, sus notas desgarra? ¿Quién rom- Las aves lo van diciendo
^ e/ hechizo?... Ya sé: la guitrra.. ^ por el valle y ¡a cañada:
De un cerro, en la cumbre, alegres canciones despier- A mí no me importa nada

RIAS! 'y al Eco. sin otras razones. Y el Eco curioso, travieso y

'^tycillo. prolonga los tercios de aquel fandanguillo.
Que fué a un arroyo a bebeeeer.
si he de morir combatiendo
con la 23 Brigada.

F. D A F A U C E

Ayuntamiento de Madrid
 La de nuestra Brigada se puede decir que ha cubierto ^ T
torea
a meta de su cometido.
moyo
Cuando en los díg$ de febrero, sus hombres se mul- Ef
Hplicaban, iban de allá aquí; se vieron los frutos de su rnismi
Si los combatientes de nuestro Ejército no supieran
Trons
do la labor gigantesca de nuestra Sanidad, sería imposi­ capacidad. Incluso scídados de otras Brigadas supieron

ble que pudieran dar el enorme rendimiento dado en de sus cuidados. pleno
cuantos momentos fuá necesario su salvador esfuerzo. A
Merecen una mención especial al hablar de sanita­
Pero sabed que cuentan con una Sanidad abnegada, ligenc
rios los hombres de los puestos de socorro de los batallo­ ¡B
terviente, capaz, que en caso de necesidad recibirán
nes, los cuales en los sitios de mayor poliegro, a escasa
prestamente sus auxilios eficacísimos.
distancias de la primera línea de fuego, cumplen su co­
En esta cruel guerra, la Sanidad ha llegado al máxi­
mo de su rendimiento, siempre con éxito, siempre opor­
metido a perfección.
¡Salud, camaradas de Sanidad de nuestra Brigada!
Ti*a
tuna.
de
Un
arrollo
las de
mada ]
frente,
desarre
nocimi
fructífi

Com pañía
ww

A\o<lclo
Un combatiente, un soldado de nuestra "Compañía
M odelo". El simboliza en su imagen arrogante, fuerte,
e! nervio, la bizarra rebeldía de un pueblo vital que no
admite imposiciones nefastas en los caminos que la His­

toria le marcó.
Para las gestas sublimes los hados sintieron siempre
predilección por España, a ella le ha tocado en esta ho
ra histórica plantar la bandera de la libertad en las cús­
pides del ideal, a despecho de los pueblos que no quieren
dorse cuenta del momento de realidades que vivimos..
Por eso, contra la brutalidod de un Ejército mvo
sor cuya base y sostén es el exterminio, oponemos nues­
tro vigoroso Ejército día a día superado, fortalecido.
Así nuestra "Compañía M odelo", condensa nuestro
aspiración de formor el Batallón, más: la Brigada Mo

délo".

Ayuntamiento de Madrid
 CHISPA

ranimíiíonei
factor principal en la batalla
3 cubierto Transmisiones. Orgullo de nuestro Ejército. En esta
torea colectiva que significa nuestra lucha, uno de los
mayores factores para el triunfo.
!S se mul- En la guerra, en nuestra guerra, a todos nos guía el
itos de su mismo afán. Todos salimos a defender la misma causa.
s supieron Transmisiones, pues, se encarga de ponernos en contacto.
Nuestras transmisiones carburan a fondo, actúan a
pleno rendimiento, cumplen a perfección su cometido.
de sanita- A su cargo, el teniente Ferragut, improvisación, inte­
ligencia.
Ds batallo-
¡Bien por las Transmisiones de nuestra Brigada!
1, a escaso
si
lien su co-

2 Brigada! Trantmíiíonei
Je nueitra Brigada
Un vivo ejemplo de des­
arrollo en transmisiones, son
las de nuestra Brigada. For­
mada poco antes de venir al
frente, adquirió (para su
desarrollo en la lucha) co-
nocimie n t o s preliminares,
fructífero resultado de unos
"Compoñía
inte, fuerte,
/ital que no
que la His-
pocos días de escuela y del
interés de sus soldados.
Hoy ya, después de siete
meses en el frente, podemos
decir que en ningún momen­
to han faltado las comuni­
caciones a nuestra Brigada, hoy hemos respondido, res­
y que lo mismo, que hasta ponderemos de las comuni­
caciones, mientras quede un
soldado de transmisiones
Conocemos todos los re­
sortes adaptables (técnica y
materialmente) para el com­
pleto funcionamiento de las
comunicaciones.
Dan buena cuenta del
buen funcionamiento de las
transmisiones, las comuni­
caciones en la victoriosa
ofensiva de nuestra Briga­
da, en el frente del Jarama.
Cuando nuestra Brigada
contuvo al fascismo, cuan­
do nuestros bravos sol­
dados. dirigidos por nues­
tros capaces y técnicos jefes
(algunos caídos en la lu ch aj,
avanzaban haciendo retro­
ceder al enemigo y perder
importantes posiciones. De­
trás de ellos, íbamos los sol­
dados de transmisiones pa­
ra que no faltaran las comu­
nicaciones.
También se ve a las trans­
misiones. cuando el cnemi-
p.,JÍ ' »•
go bate nuestras líneas,
cuando inicia algún ataque,
cuando los morteros cortan
nuestras líneas cuando se
tienden líneas peligrosas, allí
donde hacen falta, donde
peligran las comunicaciones,
están siempre los soldados
de transmisiones cumplien­
do con su deber de antifas­
cistas.
Aprovecho estas líneas
para desde aquí enviar un
un cordial saludo a los je­
fes de la Brigada, en prueba
de agradecimiento, por su
valiosa ayuda para el des­
arrollo de las transmisiones.
Al mismo tiempo hago ex­
tensivo el saludo a nuestros
queridos jefes de transmisio­
nes. teniente Ferragut. y
nuestro Delegado político
Dafauce, forjadore.s ambos
de nuestros conocimientos,
unidad y equivalencia.
Paco V A R IL L A S
Soldado de Transmisiones.

halla vencer o morir.-Negrín

Ayuntamiento de Madrid
 CHISPA cms
------------ -V

La munición en
el combate

El com bate está en to­

do su apogeo. Constante­
.4 mente se reciben llamadas
apremiantes en el puesto

4 de mando que reclaman

munición.
Hay un servicio perfec­
tamente montado para las
necesidades de las batallas.
>
'^^ZC- Unos hombres conscientes
de su responsabilidad--com-
•
”«»•.1 batientes un poco olvidados-,
-
--que dedican sus afanes a
K
la tarea del abastecimiento
de las municiones.
Parte raudo a los pues­
tos el camión; antes, los
'N,
soldados, le cargaron anhe­
lantes, ansiosos, y ahora al
remontar las cuestas, pare­
ce la carga liviana, se diría conq
>k que hasta el coche quisiera
subir más presto aún, paro
antes hacer morder el polvo
al enemigo.
Luego, nuevamente, o
por munición, al puesto,
una vez, otra, hasta que e!
com bate finaliza.
t>í.. \V » La recogida de vainas va­
cías, para su nueva utiliza­
^ >«
ción es otra de las labores
importantes del puesto de
municionamieno.
Al frente de estos hom­
bres, uno todo modestia--el
capitán Torrano--que pone
de manifiesto en cada mo­
Vi
mento sus cualidades admi­
rables para el puesto que
s.
j í ,-/ ocupa.
Sí^ Estos son nuestros solda­ ¡2ap
- ^ dos, incansables, aguerri­ loiíibres
b soldc
dos. Estos son los hombres
hoy
‘T«^ de municionamiento. isrcio p
^^ÍQdo.

•■-i
Ayuntamiento de Madrid
r
:hispa chispa
' ^ ..................

infante, ponéis vuestro entusiasmo, vuestra vida al ser­

vicio de la causa de los pobres del mundo.
en En nadie com o en vosotros están condensados los
matices más fuertes de los trabajadores. Con vuestro
pico, vuestra pala vais tejiendo a lo largo del solar es-
poñol la tupida red que hará que el enemigo se nos ten­
ga que doblegar.
Nadie pues, os despreciará, soldados del Ejército p o­
pular, sino muy al contrario, os venerará y en el monu­
mento de !a Historio, tendrá que figurar con rasgos bien
acusados la imagen viril del fortificador.
’t'i Sio Si
Al frente de la Sección de Fortificación de nuestra
Brigada, se encuenra el teniente Angel Lazareno (cuya
foto sentimos no publicar) el cual, en su labor merece
los mayores elogios, pero todos se condensan en el mismo
que es aplicable para sus hombres; en un so ld a d o --u n
buen soldado— del Ejército popular.

Fortificación, baie de la victoria

Aunque no sea militar de
profesión y hoy esté encua­
drado en nuestro glorioso
Ejército popular, daré mi
pequeña opinión de los ca­
te son necesarias las armas
de fuego, sino el pico y la
pala: para hacer el diminu­
to hoyo y poder guarecerse
de la metralla fascista y de

F o r t if ic a c ió n torce meses de lucha con­

tra el enemigo común.
En los primeros momen-
la tormenta mortífera que le
pueda coger en el fragor del
combate. También necesita­
mentos de la sublevación mos una fuerte fortificación,
Como defensa de las posiciones fascista, los trabajos de for­ con sus correspondientes ni­
tificación no se efectuaban dos de ametralladoras, pues­
conquistadas en parte del terreno leal, pe­ tos de antitanquistas y ni­
ro h oy en día que contamos dos de engaño para tanques
Lq guerra moderna cuenta en la fortificación como con un Ejército disciplina­ y otros trabajos más útiles
ijna de las armas principales para su desarrollo. do y conscientes de sus de­ en la guerra que sostenemos.
Fácilmente se comprende que entre dos contendien- beres. con jefes honrados del Por eso la fortificación es el
ss que se hostigan, que se tantean de trinchera a trin- Ejército antiguo y los sali­ arma de la victoria.
practican (o que en la conflagración mundial dos del pueblo, nos damos Angel L A Z A R E N O
j , de topos", lleve las mayores probabili- perfecta cuenta que para o b ­ Teniente jefe de ¡a Sección
aodes de éxito aquel que, aprovechando las condicio- tener la victoria no solamen­ Zapadores.
« d e l terreno, o supliéndolas cuando le sean adversas,
puente con una más potente fortificación.
Al principio de la sublevación, cuando no éramos
íinas va- I nos que el pueblo en armas, cuando no poseíamos el
1 utiliza- ,ercito que hoy componemos, no se le dió a la fortifica-
ion todo el valor que merecía.
i labores Así nos encontrábamos que posiciones que habían
jesto de -ao conquistadas tras cruentos com bates y a fuerza de
^ heroísm o---toda nuestra guerra es una epopeya
L¡ ^®^0'sn^o--eran perdidas en un momento de vacila-
ataque, a veces no muy potente del ene-

Al transformarse nuestras milicias en Ejército tué

ondo se comprendió le eficacia de una buena fortifi-
j ion en posiciones conquistadas. Una línea de trinche-
l ■Simplemente, un buen resguardo para una ametra-
r aora, nos han demostrado hasta la saciedad el estrago
enemigas y el beneficio en
I •propias.

Brigada! Nuestros zapodores

priores abnegados, conscientes de su honroso com eti-
rs o ld a d o s también— y éste es el mejor calificativo
I noy puede tener y ostentar todo buen español---del
’abor no es, no puede ser des-
°9a. Sabéis de la metralla enemiga lo mismo que el

Ayuntamiento de Madrid
 CMISPá
8 CHIS

PII

PpoccJimientol Jcl cncm¡9o

Un dibujo de la formidable colección del gran artis­
ta Castelao.
El recoge crudamente la realidad de la vida--de la
m uerte--en la España negra. En él se nos habla de las
vejaciones a la mujer por los que blasonaban en sus
propagandas de amantes de la familia. '\
El siniestro "¡arriba España!" en esa puerta que da
la impresión de franquear la entrada a su España, o la
oue ellos quieren; sangrienta--de sangre obrera--tern- y'
ble. Mirad, los coágulos en el suelo, mirad, la huella de
una mano criminal en la pared. Hubo lucha... la .lucha fridí
del macho depravado, salvaje por poseer la flor prole­ repa
'7 ^ - . T
taria. Girones en la ropa, la silla caída,, la figura ensan­ dios
grentada, nos dicen que los criminales soltaron su presa
tev
después de ahitos.
Lucha épica, desigual, en la cual, la mujer resulta
enaltecida por ese UHP que los bandidos le pusieron s-i- Wr-
1 'i
en su cabeza, afeitada para mayor escarnio.
--¡C obardes! ¡Asesinos! Esta es vuestra España, es- Cokorddí I
ras vuestras obras.

SILUETAS DE NUESTRA LUCHA

’ w.
X
^
EL CAMPESINO
% El campo español. El campesino. En nuestra lucho,
rí* ?
el máximo anhelo es capacitarle, hacerle apto, elevarle
l I o la categoría de hombre, de la bestia en que nuestro
secular enemigo le tenía sumido.
El Gobierno del Frente Popular contemporizando,
adaptando su política al campo, ha logrado encauzor
, I
sabiamente las aspiraciones del campesino, producien­
do la Reforma Agraria, los Institutos obreros, las Es­
cuelas de capacitación profesional.
Paréceles a nuestros campesinos que han nacidc
o una vida nueva. Ya no tendrán que mirar con odio o
los tractores, a las máquinas agrícolas; para ellos, poi'O
su beneficio se construirán y podrán decir que se emon
f:r /* V uparon por completo, cuando no haya más arados ro
^ i. . ■

manos que labren sus campos.

Ayuntamiento de Madrid
 CHISPA
CHISPA
M K C E LflD flS
Aun hoy, a pesar de las
duras lecciones recibidas, el
nefasto dúo Hitler-Musso-
lini, conspira para desqui­
ciar la paz de Europa: éste
en su loca ambición que le
Venda los ojos, no puede
comprender que el compa-
tar a España con Abisinia
a un juego peligroso: aquél,
aim resentido del duro cas­
tigo sufrido durante los
añc's transcurridos del 14 al
l8i intenta febrilmente re­
sarcirse de las pérdidas su­
fridas, y para conseguirlo no
repara en los medios: me­
dios crittlinales, violentos,
que tiñen en sangre sus ma­
nos de vesánico, pero me­
dios, al fin, que. por su mis­
ma naturaleza, han de de­
rrumbar su labor como frá­
IlAttúncl! gil castillo de naipes azota­
do por el viento.
Los sociólogos afirman
í}ue las naciones nacen, vi-
'’ín y mueren como cual­
quier ser organizado; pen­
sando en esto comprendere-
isaos fácilmente que España
ístá lo suficientemente capa-
otada para no necesitar ya
preceptores: la España de
f^rona. Zaragoza, dcl 2 de
Mayo y de tantos otros cé-
^^iares episodios, nuestra Es­
paña de hoy no puede ad-
tiitir en su seno a los nue-
jestra lucha,
'’Os imitadores de opereta de
pto, elevarlel
^onapartc: por una vez
que nuestrol
"tas, sabrá demostrar al
"tundo que no nació para
ímporizando,
^^dava. sino para dar su
do encauzar
t'^a a pueblos que hoy,
), producien*
^sacias a ella, viven en un
eros, las Es-j ambiente de cultura
■ un alto nivel social.
han nocidc
La España de la indepen-
ir con odio o
sigue en pie: hoy la
■Q ellos, po''‘^l
.dienta, q u i z á , distintos
^ue se etnaP-
't^^aies. pero persigue el mis-
]s orados ro-
("to objetivo: la índependen-
de la patria, y el pueblo
hpañol sabrá defender, tam­
bién hoy, sus conquistas, sus
anhelos, y no consentirá que
la planta extranjera profa­
ne las tumbas de sus ma­
yores...
La hora decisiva c.stá so­
nando en Europa: los pue­
blos gimen oprimidos por
las espuelas de esos dictado­
res sin conciencia, pero el
torrente de la libertad si­
gue aumentando su caudal
y el dique está próxim o a
saltar, amenazando, al des­
bordarse. arrastrar entre sus
aguas dos peleles que se per­
derán en el lejano recuerdo
de un pueblo libre que mi­
ra con odio a! pasado...
E. PACH ECO
Lo que ei la Sección
de Tranimiiionei
Compuesta de hombres
valientes y abnegados en la
lucha, que salieron para el
frente para aplastar al fas­
cismo.
N o ha habido un m o­
mento que hayan faltado
las comunicaciones a su Bri­
gada. En ataque cada uno
está en su puesto, como así
lo exige el Ejército del pue­
blo.
Los telefonistas, atentos
a sus comunicaciones, lia
man. atienden rápidamente,
porque saben que de ellos
depende que salgan bien las
operaciones.
Los obreros de línea,
siempre dispuestos esperan­
do órdenes de sus jefes para
salir donde haya avería.
Clases y soldados de in­
fantería: tus transmisiones
os saludan por vuestra ab­
negación en el frente del Ja-
rama.
J. M. M . E.
Cabo.
Ayuntamiento de Madrid
La invaiíón parda y negra
El suelo ibero, teatro de
la más intensa lucha que ja­
más vivió pueblo alguno, so­
bre todo en el aspecto ideo­
lógico y social, fué alevosa­
mente invadido por las más
variadas razas que habitan
cl planeta, entre ellos por
ejércitos pretorianos que
arastran tras de sí el lastre
de su crueldad y sus instin­
tos sanguinarios, por el cual
esa raza de ejércitos felones,
quieren pisar nuestro invic­
to suelo sin haber pasado tal
vez por el sufrimiento y pa­
decimiento, porque ha pa­
sado el pueblo hispano, en
esta tierra calcinada por un
sol, el cual nos imprime
agudas rebeldías para poder
luchar contra ejércitos de
una talla moral y material
cual lo es el ejército italo-
alemán.
Aunque por el mayor em­
puje de las huestes invasoras
de Hitler y Mussolini, nun­
ca podrán amilanar, nues­
tro empuje arrollador para
el mayor triunfo del G o­
bierno y aún más hoy cuan­
do nos asiste la razón y ade­
más combatimos por la in­
justicia que quieren impo­
nernos. a causa de que el
glorioso 18 de julio pudi­
mos quitarnos la venda que
nos cubría los ojos.
Recordaremos i a m b i én
aquel levantamiento nacio­
nal que .sufrimos el pueblo,
en el cual se sublevaron ab­
yectos militares y curas tra­
bucaires. y por medio de la
gran influencia que existe
entre von Franko y los de­
más fascistas es por lo que
ya se ha convertido en una
guerra de invasión o guerra
de independencia, pero hoy
el pueblo puede estar orgu­
lloso-de que tiene un G o­
bierno y ese Gobierno pue­
de también estar orgulloso
porque cuenta también con
un Ejército disciplinado, un
Ejército lleno de cultura y
un Ejército lleno de valor,
cuyo lema es atacar.
Este es el verdadero pue­
blo español que lucha con­
tra la opresión, por el bien­
estar de sus hijos y por la
paz y justicia.
Por cl triunfo del G o ­
bierno y por la causa del
obrero oprimido.
Antonio Sánchez Nieto
Soldado de Zapadores.
n mu com p an erof
La Sección de Transmi­
siones de esta Brigada, bajo
la sabia dirección de nues­
tro querido y respetado T e ­
niente-jefe de esta Sección,
Ferragut, se siente orgu-
llosa y dispuesta a luchar
sin descanso hasta vencer
a la hiena del fascismo,
que con su diente canceroso,
siembra el dolor en esta Es­
paña. que no ha cometido
más delito que el querer ser
libre. Pero nosotros, los tra-
jadores, hoy encuadrados
dentro del Ejército popular
preferimos la muerte antes
de que España sea invadida
por esas mesnadas de hienas
hambrientas, al servicio dcl
capitalismo, r e p r e sentado
por esos dos piratas llama­
dos Hitler y Mussolini.
¡Viva la República!
¡Viva el Ejército popu­
lar!
Juan L E G A Z
Soldado de Transmisiones
de la 23 Brigada.
¡Obediencia
a lof mandoi!
 CHISPA
CHI
10

SECCION INTERNACIONAL SA

supo, en armas, en política, nos sucesores del inmortal

¡Por nueitra libertad! en letras, dar ley al mundo. Cervantes. ,
Será respetado un pueblo,
lo mucho que ama a su pa­ Cuando hayamos derro­
Recorriendo las páginas que al ver a su patria holla­
tria, cuando ve a esta atro­ tado al fascismo tendremos
de un libro leí al azar este da por las botas extranjeras,
pellada, invadida por ex­ una época análoga a aquella;
título que se adapta perfec­ supo vencer y conquistarse
tranjeros. por las armas habremos re­
tamente a la actual guerra. una época de paz y bienestar.
¡Nuestro suelo! conquistado nuestra inde­
“N o se puede saber cuan­ ¡Por la patria invadida,
Por él luchamos denoda­ pendencia y nuestra querida
to ama uno a su madre, si­ empuñamos las armas! ^
damente y de él arrojaremos patria será respetada: con
no sobreviviéndola como ¡Por la patria escarneci­
al vil invasor que quiere es­ nuestra cultura (que ahora
por ley natural se la sobre­ da. venceremos!
clavizarnos. más que nunca se intensifi­
vive. ca en la línea de fu eg o), se­ E. G O N ZA LE Z
A esto podemos agregar: Hubo un tiempo feliz
remos admirados como dig- 89 Batallón. Plana Mayor.
se da uno cuenta perfecta de para nuestra patria, en que

por
dter(

en

poi
^ le d¡.
de |(

lo hei
tenío
niom,
•ellos hi
vino p
estropeo
-■*e.

cornor

Ayuntamiento de Madrid
 CHISPA
CHISPA
11
entonces qu e sabe lo que es es­
t a r h e rid o , sin serlo.

* * *
¿Poi* qué el loléado de nuei-
S A N I T A R I O S
Sucedido..,
Héroes
C o rría
olvidados.
fe b re ro . N uestros ca­
tro Ejército debe ler culto?
el inmortal
Fué en los dios en que el J a - m ille ro s se co n fu n d e n en las p r i­ El solidado del joven y ya
¡Cuánto tendríamos que
) un pueblo,
' romo ero el " fr e n te de m o d a ". m eros , líneas con los fusiles. Se glorioso Ejército de la Re­ agradecer a la guerra si en
patria bolla-
El E jército invasor chocaba c ru e n ­ d ió orden de a v a n z o r y a vonzan . pública está obligado a ser
un mañana glorioso nos en­
extranjeras,
tamente con nuestros regulares, Los oyes la stim eros de un h e r i­ un hombre culto. Ya no
contramos con que había­
conquistarse
y nuestra B rigada, lo p rtm era, do re d o m ó n su asistencia. queremos que en las filas de mos sabido vencer a las dos
: y bienestar,
porobo en seco el in te n to , su - " C h ir ic h i" , n u e stro hercúleo nuestro querido Ejército lacras más graves que hacían
ia invadida,
peróndose a sí m ism a en lucha C h iric h i" , corre presuroso, a c u ­ tenga asiento el monstruo presa en el pueblo: la escla­
épico, c o n tin u o , en la que todos de, y ¡o h sorpresa!, la boca n e ­ de la incultura.
armas! ^ vitud férrea y moral y la
sus hom bres y servicios rayoron g ro de u n fu s il a com paña do de Nosotros, soldados, de­
ia escarneci- incultura!
o a ltu ra s inconm ensurables. una voz p o te n te le d e tie n e n : bemos de ser cultos porque Y no olvidéis, camaradas,
La S onidod tra b a jó m ucho. ¡ ¡¡P ris io n e ro !!! Palidece, enne­
N ZA L E Z aspiramos a ser hombres li­ que en un pueblo culto ja-
Todavio parece que va a oirse en grece, ta rta m u d e o (la n a tu ra le ­
lana Mayor bres y la verdadera libertad rnás podrá hacer presa el fas­
cualquier noche oscura o q u e llo za se m o stró así con é l) se hace sólo se puede obtener me­ cismo, ya que las mejores
llamada o nuestra S anidad : un taco, y en el n a tu ra l a tu r u - diante la cultura, pues de lo armas que éste esgrime son
--...¿ S anidad de la 2 3 ? --q u e llo m ie n to de) q ue no sobe lo que contrario seríamos esclavos la de ia barbarie organizada,
por barrancos y crestas o p re n ­ le sucede e x c la m o :
ÍU de nuestra miope ignorancia. que jamás por razones de
dieron ta n to s cam aradas que o - - ¡ A y , Dios m ío, que no sé L o precisamos, también, pa­ índoles moral e histórica p o ­
nuestro lodo lu ch a b o n y por donde e stoy!
ra comprender el grandioso drá^ abatir a la cultura, la
nuestra S anidad fu e ro n inca n sa ­ --¡C o n q u e , Dios m ío, eh, so papel que la historia nos ha razón y la justicia.
blemente atendid os. fascisto.P --(e co n te sta n .
encomendado y nos haga­ Nosotros, los maestros
Nuestros soldados ya lo sa­ Recados, consultas, teléfonos mos dignos de él haciendo pertenecientes a este nuevo
blón, ju n to a una c u n e ta , cerca a c la ra n lo sucedido a nuestro hasta lo imposible por obte­ y ya glorioso Ejército de la
de las linees, su se rv ic io de c i- p o p u la r san i to rio .
ner una rápida y ejemplar Cultura, nos prometemos
fugia de u rg e n cia , se co b ijo b a D ecirle que os lo cu e n te ... tres victoria contra la facción solemnemente luchar sin tre­
«o sus coches y día y noche así horas y cu a rto .
trobojó.
criminal y antipatriótica. La gua ni descanso hasta conse­
* * * cultura, finalmente, será el guir la ansiada victoria. Es­
Un día c u a lq u ie ra la a via ció n
arma con la que, una vez peramos que en nuestra 23
enemiga a p o re ció con va rio s a p a ­
Un ve n d o va l h o rrib le osolo los terminada la guerra, sabre­ Brigada, heroica cien veces
ntes sobre la vega. En el coche puestos de socorro. U no racha se mos reconstruir a nuestro en los combates, no lo sea
<Wirofono. in a c tiv o en o quello s in f ilt r a y hace triz a s el a p a ra to amado país, levantando so­ menos en los emprendidos
Am entos de m e d io d ia , com ío el de lu z. E xclam aciones, b la s fe ­ bre las cenizas en que yace contra la incultura.
personal té cn ico del puesto de m ias. U na v o z : --E s to es im p o ­ sumida nuestra España, a Nuestro mayor blasón y
»corro. Lo voz d e ; ¡¡a v io n e s o sible sin luz no se puede tra b a ­ otra más justa y más hu­ orgullo sería el poder decir
'P v is to !!, c o in c id ió con el ra p i­ ja r. U no lla m a d o te le fó n ic o : mana. basada en la equidad que en nuestra gloriosa Bri­
dísimo descenso de los a p a ra to s
--C o n sum o u rg e n cia ... un y la justicia. gada se habría estirpado de
er^emigos, que, o escasísimo a l- P etro m a x...
y to m a n d o b la n co en el
;Adelante. pues, soldados raíz el analfabetismo.
Se a tie n d e y ró p id o m e n te p o r­
de nuestro grandioso Ejér­
o m e tra llo ro n con un d i- te un enlace lle vo n d o un a p a ra ­ Miliciano de Cultura
|''vio de balas el e m p la z a m ie n - cito! Un esfuerzo más v el
to de a ce ite . N u e stro c o m a n d o n -
menstruo de la incultura Sección de Transmisiones de
’o. El personol en p le n o del q u i-
d o n te a d v ie rte que es necesario la 23 Brigada.
"“fcno, com o un solo hom bre habrá desaparecido de los
el o p o rtu n o va le paro lo e n tre ­
hierrizó en m a g n ífico s y sucesi- ámbitos de nuestro suelo y
go. Y se recibe el s ig u ie n te :
Pfongeones en el ú n ico s itio
con él, el fascismo.
V o lé por un fo ro l que no vale.
^ o f r e c í a aspecto de re fu g io :
N o ta .--C o n tin u o m o s con el
Frente a los bárbaros que
l ' ^ j o del m ism o coche. A l h o - d o lo r de cabezo. gritan en contra de todo lo
co m a n d o n te , s in tió que sea mejoramiento cultu­
“ do de espanto, que un te - * * * ral alcemos, nosotro.s, glo­ Terminados ¡os números
hilo de líq u id o caía sobre riosa e invicta siempre la
B ic ic le ta ... B ic ic le ta ... de nuestro periódico dedica
y le em pezó un su - bandera de la cultura. Ella
D u ra n te las épocos m ás duras,
I frío (en fe b re ro ) a l co m p ro - nos llevará segura y con pa­ dos a unidades, desde el
de m ós in te n sivo tro b o jo , B ic i-
P que to d o el tra je se le e n - so firme a la ansiada victo­
l'®l^ÍQ poco Q poco. •
c ie rta ha lle va d o su a m b u la n c io ria. próxim o comenzaremos a
por todas los ru ta s buenas y m a ­
le d ió tie m p o o pensar más; publicarle en general.
las de e vo cu a ció n , se ha hecho
^ de los O ficióles e sta lla n d o Tenemos en proyecto de­
condu cie n d o su coche y sólo e lo ­
Ql ve r su gesto, descu- que le s u p lirá m ie n tro s él o b tie ­
gios ho m erecido su tro b o jo . El dicarle varias secciones espe­
Q herido, la b o ta je re z a n o ne su títu lo . A los c in c o m in u ­
G obierno dispone que puede co -
^ f®nro en lo m ano bebiendo, tos de su m archo el te lé fo n o ciales. una de ellas muy in­
® m om ento de la a la rm a uno
b ro r una g ro tific o c ió n de con­
a v is a : II
d u c to r. B icicle ta , n o tie n e el e xa ­ teresante. al deporte.
plogeon con él, --¿Es S anidad de lo 23?
m en o fic ia l q ue o to rg a el c a r­
^ '"n o prensodo fu é a a ca b o r -S í...
n et. L ó g ica m e n te , a la p rim e ­
J«fropear el tra je del c o m o n - --O ig a ... lo a m b u la n c ia n ú m e ­
ra ocosión se le o to rg a el p e rm i­
so y B ic íc le to m o rch a o e n tre ­
ro X ha chocado con u n á rb o l...
¿Bicicleta.?... sí... sano... ¿La a m ­
Un pacto; Extermi­
com andante asegura desde
g ar el coche a o tro com pañero.
b u la n c ia ? .., en las rom os...
nar al enemigo
Ayuntamiento de Madrid
Ayuntamiento de Madrid