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A QUIEN IREMOS?

Juan 6: 60-69
INTRODUCCION
A. La gente había visto y oído la obra de Cristo. Sus milagros, la
multiplicación de los panes. Cómo se había calmado la tormenta. Cómo
Pedro había caminado sobre el agua. Ahora le buscaban.

B. Le buscaban por un interés material. Pero cuando él les habló de su


necesidad espiritual y de su pecado y los invita a abandonarlo, le dan la
espalda a Jesús.

I.- DURA ES ESTA PALABRA


1. Trabajad por la comida que ha vida eterna permanece. Juan 6:26,27.
- Hay dos clases de hambre: Material y Espiritual.
La espiritual no puede ser satisfecha con lo material.

Un hombre puede ser tan rico como Creso y sin embargo,


experimentar esa torturante insatisfacción, ese anhelo insatisfecho
en su corazón, ese sentimiento de falta de plenitud en su vida.

En los años posteriores al 60 DC. El lujo de la sociedad romana no


tenía comparación.

Banquetes con sesos de pavos reales y lenguas de ruiseñores.


Acostumbraban vomitar entre un plato y otro para poder saborear
mejor el siguiente. Las comidas costaban miles de dólares.

Plinio relata que una mujer romana se casó con un vestido tan
ricamente bordado e incrustado con piedras que costó el equivalente
a un millón de dólares. Había un profunda insatisfacción.

- Es como si Jesús les hubiera dicho: “No podéis pensar en vuestras


almas porque estáis ocupados pensando en vuestros estómagos”.
Crisóstomo: “Los hombres están clavados a las cosas de esta vida”.
Col. 3:2.

2. El que come mi carne y bebe mi sangre. Juan 6:53-56.


- Los judíos entendían a que se refería pero se hicieron los ignorantes.
En el cordero pascual, tenían que comer la carne.

- “Comer la carne y beber la sangre de Cristo es recibirle como


salvador personal, creyendo que perdona nuestros pecados, y que
somos completos en él. Contemplando su amor, y espaciándonos en
él, absorbiéndolo, es como llegamos a ser participantes de su
naturaleza. Lo que es el alimento para el cuerpo, debe serlo Cristo
para el alma. El alimento no puede beneficiarnos a menos que lo
comamos: a menos que llegue a ser parte de nuestro ser. Así
también Cristo no tiene valor para nosotros si no le conocemos
como Salvador personal. Un conocimiento teórico no nos
beneficiará. Debemos alimentarnos de él, recibirle en el corazón, de
tal manera que su vida llegue a ser nuestra vida. Debemos
asimilarnos su amor y su gracia”. DTG. 353.

- Por su Palabra.
“Así como nuestra vida física es sostenida por el alimento, nuestra
vida espiritual es sostenida por la Palabra de Dios. Y cada alma ha
de recibir vida de la palabra de Dios para sí. Como debemos comer
por nosotros mismos a fin de recibir alimento, así hemos de recibir
la palabra por nosotros mismos. No hemos de obtenerla
simplemente por medio de otra mente, debemos estudiar
cuidadosamente la Biblia, pidiendo a Dios la ayuda del Espíritu
Santo a fin de comprender su palabra. Debemos tomar un versículo
y encontrar, concentrar el intelecto en la tarea de discernir el
pensamiento que Dios puso en ese versículo para nosotros.
Debemos espaciarnos en el pensamiento hasta que venga a ser
nuestro y sepamos lo que dice Jehová”. DTG. 354, 355.

II.- ALGUNOS NO CREEN: Juan 6:64,65


1 “Cuando la verdad penetra en el corazón, ven que su vida no está de acuerdo
con la voluntad de Dios. Ven la necesidad de un cambio completo en sí;
pero no están dispuestos a realizar esta obra de negarse a sí mismos”. DTG.
357.

III.- QUEREIS VOSOTROS IROS TAMBIEN?


1 A quién iremos?. Los maestros de Israel eran esclavos del formalismo. No
podían apartarse de las enseñanzas de Cristo.

2 Palabras de vida eterna.


No sólo una vida de duración ilimitada.
Sino la vida que Dios vive. La vida de Dios.

CONCLUSION
El único que puede darnos esa vida es Cristo. Ha ido usted a él?.

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