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Los romanos construyeron lugares públicos masivos, obras de ingeniería civil,y templos no públicos que
fueron responsables de desarrollos significativos en la vivienda y la higiene pública, por ejemplo, sus baños
y letrinas públicos y privados, calefacción por suelo radiante en forma de hipocausto, acristalamiento de
mica (ejemplos en Ostia Antica), y agua caliente y fría entubada (ejemplos en Pompeya y Ostia)(etc).
Índice
Historia
Orígenes
Innovaciones técnicas
La renovación urbana de Augusto
Auge arquitectónico Puente romano de Córdoba (España)
Decadencia
Los tres principios de Vitruvio
Materiales
Piedra y mármol
Ladrillo romano
Hormigón romano
Estuco
Órdenes de la arquitectura romana
Diseño urbano
Tipos de construcciones
Foro
Basílica
Termas
Teatro
Anfiteatro
Circo romano
Templo romano
Vivienda
Estructuras decorativas
Arcos triunfales
Obeliscos
Infraestructura
Calzadas romanas
Acueductos
Otras construcciones
Arquitectos
Influencia posterior
Véase también
Referencias
Bibliografía
Enlaces externos
Historia
Orígenes
En el 144 a. C., Grecia pasó a ser una provincia romana, y muchos Reconstrucción del templo etrusco
artistas griegos, reducidos a la esclavitud, pasaron a trabajar a de Alatri, Italia.
Roma. También contribuyeron al avance del gusto artístico en
Roma el triunfo de Lucio Emilio Paulo Macedónico en la Batalla
de Pidna, de donde extrajo muchos tesoros artísticos, además de los saqueos de Lucio Cornelio Sila Félix a
los templos de Delfos, Olimpia y Epidauro, los tesoros extraídos por Octavio de Alejandría y el asalto de
Publio Cornelio Dolabela a muchos templos de Asia. Todos esos tesoros fueron a parar a Roma, dando
lugar a un refinamiento del gusto artístico como no se había conocido antes. El primer templo en mármol
que se construyó en Roma fue edificado por orden del cónsul Quinto Cecilio Metelo Pío, con los
arquitectos lacedemonios Sauro y Batraco4 .
Innovaciones técnicas
Gracias a los desarrollos técnicos de los romanos para la construcción de arcos y bóvedas, se pudo superar
la concepción griega básica, en la que las columnas y los arquitrabes eran necesarios para soportar vigas
pesadas y techos, pasando a ser, en la mayoría de los casos, meros elementos decorativos. Los romanos no
se sintieron restringidos por las preocupaciones estéticas griegas e hicieron uso de los órdenes clásicos con
considerable libertad. En su máximo esplendor, demostraron una gran fecundidad de invención, una
concepción monumental del espacio y un claro sentido de los grandes volúmenes5 .
La innovación comenzó en el siglo III o II a. C. con el desarrollo del hormigón romano como un
complemento disponible o sustituto de la piedra y el ladrillo. Los edificios comenzaron a integrar grandes
pilares que sostenían amplios arcos y cúpulas. La libertad dada por el hormigón también inspiró el
desarrollo de la arcada y de la columnata, una fila de columnas puramente decorativas frente a un muro de
carga. En una arquitectura de menor escala, la resistencia del
hormigón romano liberó el plano de piso de celdas rectangulares a
un ambiente de flujo libre.
Los edificios romanos, según su uso, podían ser muy sobrios o muy
suntuosos. Puentes y acueductos son austeros y funcionales,
mientras que templos y palacios son lujosos y monumentales, con Interior de la cúpula del Panteón de
un claro fin representativo. Las edificaciones más nobles se Agripa.
revestían de piedra formando órdenes, que no reflejaban la
estructura interior real. Se decoraban los muros de los edificios
suntuosos con pinturas y los pavimentos con mosaicos.
Factores como la riqueza y la alta densidad de población en las ciudades obligaron a los antiguos romanos a
descubrir nuevas soluciones arquitectónicas propias. El uso de bóvedas y arcos, junto con un sólido
conocimiento de los materiales de construcción, les permitió lograr éxitos sin precedentes en la construcción
de una infraestructura imponente para uso público. La conquista de Grecia hizo que centenares de artistas
griegos llegaran a Italia, y la pax romana auspiciada por Augusto
propició una bonanza económica sin precedentes, lo que permitió el
desarrollo de las artes, incluida la arquitectura.6
Auge arquitectónico
El auge arquitectónico del Imperio comprende, aproximadamente,
el tiempo transcurrido entre los reinados de Nerón a Constantino I
(es decir, entre los años 54 a 337), siendo especialmente notorias las
obras construidas durante los gobiernos de Tito, Trajano y
Adriano9 . Los ejemplos más destacados incluyen los acueductos
de Roma, las Termas de Diocleciano y las Termas de Caracalla, las
basílicas y el Coliseo. Estas construcciones fueron reproducidas a
menor escala en las ciudades y aldeas de todas las provincias del
Imperio. Algunas estructuras supervivientes están casi completas, Arco de Tito, en Roma.
como las murallas de la ciudad Lugo en Hispania Tarraconensis
(ahora el norte de España). La estructura administrativa y la riqueza
del Imperio hicieron posibles proyectos muy grandes, incluso en lugares alejados de los centros principales,
al igual que el uso de mano de obra esclava, tanto calificada como no calificada.
Decadencia
El período de esplendor del arte romano abarca los dos primeros siglos
del Imperio, pero ya a principios del siglo II de nuestra era se inicia
una lenta decadencia del buen gusto que se acentúa con la crisis del
siglo III y se confirma en los siglos IV y V por efecto de cierto
barroquismo o irregularidad y pesadez en los estilos, aunque aumente
el fasto y la magnitud de las obras. Sin embargo, la arquitectura, en
cuanto arte de construir, siguió desarrollándose hasta la invasión de los
bárbaros, por lo menos, en los principales centros de cultura. Pruebas
de esto son las grandes basílicas de Roma construidas en el siglo IV, El Mausoleo de Teodorico, rey de
no solo las destinadas al culto cristiano, sino también las civiles. Los los ostrogodos, en Rávena
restos de la colosal basílica civil de Constantino (también llamada de (Italia), construido hacia el 520
Majencio) que todavía se alzan en Roma, sirvieron como fuente de d.C., es un claro ejemplo de la
inspiración a los arquitectos del Renacimiento en el siglo XVI. arquitectura romana tardía, o
paleocristiana.
Se considera que con el emperador Constantino se inicia propiamente
la decadencia de la arquitectura romana, pues bajo este emperador
comienza a reciclarse mucho material antiguo para la construcción de obras nuevas, como se hizo en
Constantinopla, ciudad que se construyó en gran medida con fragmentos, esculturas, columnas y despojos
llevados de todos los rincones del Imperio. En Roma, el Arco de Constantino fue construido reciclando
materiales de edificios erigidos en tiempos de Trajano, Adriano y Marco Aurelio, sobre todo los
altorrelieves, pues ya por entonces era cada vez más difícil encontrar escultores capacitados para esculpir
obras semejantes. Sin embargo, aunque en el caso de la escultura la decadencia fue evidente en muy poco
tiempo, la arquitectura mantuvo su consistencia por más tiempo debido a que resultaba más fácil para los
arquitectos que para los escultores imitar las obras que aún les rodeaban.11
De acuerdo con Vitruvio, la alteración del equilibrio entre los tres principios de la arquitectura provoca
graves errores, tanto por defecto como por exceso. Así mismo, la omisión o hipertrofia de uno solo de los
principios hará que la obra en cuestión sea cualquier cosa, menos arquitectura. Estas reglas elementales, en
lugar de maniatar la creatividad, permiten todo un despliegue de tipologías arquitectónicas y variaciones sin
límites de los tipos básicos.
Materiales
Piedra y mármol
Los romanos eran extremadamente aficionados a los mármoles de colores importados de lujo con elegantes
vetas, y los interiores de los edificios más importantes a menudo se enlosaban con losas de estos mármoles,
que en general se han eliminado incluso donde el edificio sobrevive. Las importaciones de Grecia para este
fin comenzaron en el siglo II a. C.
Ladrillo romano
Los romanos perfeccionaron la fabricación de ladrillos durante el primer siglo del Imperio y lo utilizaron de
forma ubicua, tanto en la construcción pública como privada. Los romanos llevaron sus habilidades de
fabricación de ladrillos a los territorios conquistados, introduciendo la técnica en las poblaciones locales.
Las legiones romanas, que operaban sus propios hornos, introdujeron ladrillos en muchas partes del
Imperio; los ladrillos a menudo se sellaban con la marca de la legión que supervisó su producción. El uso
de ladrillos en el sur y el oeste de Germania romana Germania, por ejemplo, se remonta a las tradiciones ya
descritas por el arquitecto romano Vitruvio. En la Britania, la introducción del ladrillo romano fue seguida
por una brecha de 600-700 años en la producción de ladrillos.
Hormigón romano
Cuando se quitaba el marco, la nueva pared era muy fuerte, con una superficie rugosa de ladrillos o piedras.
Esta superficie podía alisarse y revestirse con un atractivo estuco o con paneles finos de mármol u otras
piedras de colores llamadas revestimiento. La construcción de concreto demostró ser más flexible y menos
costosa que la construcción de edificios de piedra sólida. Los materiales estaban disponibles y no eran
difíciles de transportar. Los marcos de madera se podían usar más de una vez, lo que permitía a los
constructores trabajar de manera rápida y eficiente. El concreto es posiblemente la contribución romana más
relevante para la arquitectura moderna.
Estuco
En las colonias romanas se usaron también los mismos órdenes pero, generalmente, con menor perfección y
con más alteraciones que en el de la metrópoli. Son muy celebrados entre otros edificios:
Diseño urbano
Los antiguos romanos empleaban estructuras ortogonales regulares sobre las que construyeron las ciudades
coloniales. Probablemente se inspiraron en ejemplos griegos y helénicos, así como en ciudades planificadas
regularmente que fueron construidas por los etruscos en Italia. Sin embargo, Roma, la capital imperial,
creció desordenadamente, por lo que existió un marcado contraste entre las ordenadas cuadrículas del
diseño de las ciudades provinciales y el caótico e irregular trazado de la capital12 .
Los romanos utilizaron un esquema consolidado de planificación urbana, desarrollado para la conveniencia
civil. El plan básico consistía en un foro central alrededor del cual se agrupaban los principales servicios de
la ciudad, rodeado de una cuadrícula compacta y rectilínea de calles. Para reducir los tiempos de viaje, dos
calles diagonales cruzaron la cuadrícula, pasando por el cuadrado central. Por lo general, un río fluía a
través de la ciudad, proporcionando agua, transporte y eliminación de aguas residuales. Cientos de pueblos
y ciudades fueron construidos por los romanos en todo el Imperio. Muchas ciudades europeas, como Turín,
preservan los restos de estos esquemas, que muestran la forma muy lógica en que los romanos diseñaron
sus ciudades. Tendrían las calles en ángulo recto, en forma de
una cuadrícula. Todos los caminos tenían el mismo ancho y
largo, excepto dos, que eran ligeramente más anchos que los
demás. Uno de ellos corría de este a oeste, el otro, de norte a
sur, y se cruzaban en el medio para formar el centro de la
cuadrícula. Todos los caminos estaban hechos con piedras de
bandera cuidadosamente instaladas y rellenos con piedras y
guijarros más pequeños y compactos. Los puentes fueron
construidos donde era necesario. Cada cuadrado marcado por
cuatro caminos se llamaba ínsula, el equivalente romano de
una manzana moderna.
Plano de Roma en época imperial.
Cada ínsula era de 80 yardas (73 m) cuadradas, con la tierra
dentro de ella dividida. A medida
que la ciudad se desarrollaba,
cada ínsula se llenaría
eventualmente con edificios de
varias formas y tamaños y se
cruzaría con caminos y
callejuelas. La mayoría de las
insulae fueron entregadas a los
primeros colonos de una ciudad
romana, pero cada persona tenía
que pagar para construir su
propia casa. Vista de Roma en época imperial (reconstrucción artística de Oreste
Betti).
Durante el Bajo Imperio, las
ciudades comenzaron a ser
rodeadas por murallas para protegerlas de los invasores y para marcar los límites de la ciudad. Las áreas
fuera de los límites de la ciudad se dejaron abiertas como tierras de cultivo. Al final de cada carretera
principal había una gran entrada con atalayas. Con el avance del declive y la decadencia urbanística, se
colocaron rastrillos en las puertas de las murallas para proteger a las ciudades en caso de caer bajo asedio
enemigo, y se construyeron torres de vigilancia adicionales a lo largo de las murallas de la ciudad.
El desarrollo de la urbanización griega y romana es relativamente conocido, ya que hay muchas fuentes
escritas y se ha prestado mucha atención al tema, ya que los romanos y los griegos son generalmente
considerados como los que dieron origen a la ciudad occidental moderna.
Tipos de construcciones
Los romanos recibieron diferentes tipologías que modificaron o adaptaron a sus gustos o necesidades,
desarrollando algunas gracias a nuevas técnicas. Entre estas podemos señalar la domus, el templo, el teatro
y los monumentos funerarios.
Foro
El foro romano era el principal espacio abierto público de un municipium romano, o de cualquier civitas,
principalmente utilizado como un mercado, junto con los edificios utilizados para las tiendas y las stoas
utilizadas para puestos abiertos. Otros edificios públicos grandes a menudo se ubicaban en los bordes o
cerca del foro. El magistrado responsable de las vías construía varios foros en ubicaciones remotas a lo
largo de una vía principal, en cuyo caso el foro era el único
asentamiento en el sitio y tenía su propio nombre, como Forum
Popilii o Forum Livii.
Augusto afirmó que «encontró la ciudad en
ladrillo y la dejó en mármol». Aunque hay muchas posibilidades de
que esto sea una exageración, hay algo que decir acerca de la
afluencia del uso del mármol en el Foro Romano desde el año
63 a. C. en adelante. Durante el reinado de Augusto, se describió
que el Foro había sido un espacio más grande y más libre que el Reconstrucción digital del Foro
Foro de los tiempos imperiales. El Foro comenzó a asumir cambios romano.
con la llegada de Julio César, quien trazó amplios planes para el
centro del mercado. Mientras que la muerte de César llegó
prematuramente, las ideas en sí mismas, así como las de Augusto
con respecto al Foro, demostraron ser las más influyentes en los
años venideros. El desvío de los negocios públicos hacia los foros
imperiales más grandes y espléndidos erigidos en las cercanías
resultó en el abandono del diseño general del Foro Romano.
En las nuevas ciudades romanas, el foro generalmente estaba ubicado en la intersección de las principales
calles norte-sur y este-oeste (el cardo y el decumanus). Por lo general, todos los foros tendrían un Templo
de Júpiter en el extremo norte, y también contendrían otros templos, así como también la basílica; expuesta
al público, se exponía una tabla de pesos y medidas públicas, para que los clientes en el mercado pudieran
asegurarse de que se les cobrara lo justo, y a menudo tendrían los baños o termas cerca.
Basílica
Termas
Teatro
Los primeros anfiteatros romanos datan de mediados del siglo I a. C., pero la mayoría se construyeron bajo
el dominio imperial, desde el período de Augusto (27 a. C.-14 d. C.) en adelante. Los anfiteatros imperiales
se construyeron en todo el imperio romano; el más grande podía acomodar de 40.000 a 60.000
espectadores, y las fachadas con arcadas más grandes, de varios pisos, estaban elaboradamente decoradas
con mármol, estuco y estatuas. Después de la prohibición de los juegos de gladiadores en el siglo V y de las
matanzas de animales en el siglo VI, la mayoría de los anfiteatros cayeron en mal estado y sus materiales
fueron extraídos o reciclados. Algunos fueron arrasados y otros convertidos en fortificaciones. Otros
continuaron siendo lugares convenientes para reuniones abiertas; en algunos de estos se realizaron reformas
para convertirlos en iglesias.
Arquitectónicamente, son típicamente un ejemplo del uso romano de los órdenes clásicos para decorar
grandes muros de concreto perforados a intervalos, donde las columnas no tienen nada que soportar.
Estéticamente, sin embargo, la fórmula es exitosa.
Circo romano
Hubo una considerable variación local en el estilo, ya que los arquitectos romanos a menudo trataban de
incorporar los elementos que la población esperaba en su arquitectura sagrada. Este fue especialmente el
caso en Egipto y el Cercano Oriente, donde las diferentes tradiciones de los grandes templos de piedra ya
tenían milenios. El templo romano-celta era un estilo simple para los pequeños templos encontrados en el
Imperio Occidental, y por lejos el tipo más común en la Bretaña romana. A menudo carecía de las
características clásicas distintivas, y puede haber tenido una considerable continuidad con los templos
prerromanos de la religión celta.
Vivienda
Domus:
Estructuras decorativas
Arcos triunfales
Un arco de triunfo es una estructura monumental en forma de arco con uno o más pasadizos arqueados, a
menudo diseñados para atravesar una calle o vía. Los orígenes del arco triunfal romano no están claros.
Había precursores del arco triunfal en el mundo romano; en Italia, los etruscos usaban arcos
elaboradamente decorados como puertas o portales para sus ciudades. Los ejemplos sobrevivientes de arcos
etruscos todavía se pueden ver en Perugia y Volterra. Los dos elementos clave del arco de triunfo, un arco
redondeado y un entablamento cuadrado, se habían utilizado durante mucho tiempo como elementos
arquitectónicos separados en la antigua Grecia.
La innovación de los romanos fue utilizar estos elementos en una
sola estructura independiente. Las columnas se convirtieron en
elementos puramente decorativos en la cara exterior del arco,
mientras que el entablamento, liberado de su papel como soporte de
construcción, se convirtió en el marco para los mensajes cívicos y
religiosos que los constructores del arco deseaban transmitir en
inscripciones. Poco se sabe acerca de cómo los romanos veían los
arcos triunfales. Plinio el Viejo, escribiendo en el siglo I d. C., fue
el único autor antiguo que escribió el respecto. Él escribió que
tenían la intención de «elevar por encima del mundo ordinario» la
imagen de una persona honrada, representada generalmente en la
forma de una estatua con una cuadriga sobre el arco.
La mayoría de los arcos triunfales romanos se construyeron durante el período imperial. En el siglo IV d. C.
había 36 arcos de este tipo en Roma, de los cuales tres han sobrevivido: el Arco de Tito (81 d. C.), el Arco
de Septimio Severo (203-205) y el Arco de Constantino (312). Numerosos arcos fueron construidos en
otras partes del Imperio romano. El arco único era el más común, pero también se construyeron muchos
arcos triples, de los cuales el Arco Triunfal de Orange (circa 21 d. C.) es el ejemplo más antiguo que se
conserva. Desde el siglo II d. C., se construyeron muchos de los llamados arcus quadrifrons, que eran arcos
cuadrados erigidos sobre un cruce, con aberturas arqueadas en los cuatro lados; esta forma de construcción
fue muy popular en el norte de África. La construcción de arcos en Roma e Italia disminuyó después de la
época de Trajano (98-117 d. C.), pero se mantuvo generalizada en las provincias durante los siglos segundo
y tercero. A menudo se erigían para conmemorar visitas imperiales.
Las inscripciones en los arcos triunfales romanos eran obras de arte en sí mismas, con letras muy finamente
cortadas, a veces doradas. La forma de cada letra y el espacio entre ellos se diseñaron cuidadosamente para
una máxima claridad y simplicidad, sin ningún tipo de florituras decorativas, enfatizando el gusto romano
por la moderación y el orden. Esta concepción de lo que más tarde se convirtió en el arte de la tipografía
sigue siendo de importancia fundamental hasta nuestros días.
Obeliscos
Infraestructura
Calzadas romanas
Acueductos
Los romanos construyeron numerosos acueductos para llevar agua de fuentes distantes a sus ciudades y
pueblos, suministrando baños públicos, letrinas, fuentes y piscinas privadas. Las aguas residuales fueron
eliminadas por complejos sistemas de alcantarillado y liberadas en cuerpos de agua cercanos, manteniendo
las ciudades limpias y libres de efluentes. Los acueductos también proporcionaron agua para operaciones
mineras, molinos, granjas y jardines.
El primer acueducto de Roma suministró una fuente de agua ubicada en el mercado de ganado de la
ciudad. En el siglo III d. C. la ciudad tenía once acueductos, lo que sostenía una población de más de un
millón de habitantes; la mayor parte del agua abastecía los numerosos baños públicos de la ciudad. Las
ciudades y municipios de todo el Imperio romano emularon este modelo y financiaron los acueductos como
objetos de interés público y orgullo cívico.
La mayoría de los acueductos romanos demostraron ser confiables y duraderos; algunos se mantuvieron en
funcionamiento en la era moderna temprana, e incluso unos pocos todavía están parcialmente funcionales.
Vitruvio señala los métodos de levantamiento y construcción de acueductos en su obra De Architectura
(siglo I a. C.). Ejemplos notables de arquitectura de acueducto incluyen los muelles de soporte del
Acueducto de Segovia y las cisternas alimentadas por acueducto de Constantinopla.
Otras construcciones
Sepulcros. Unas veces consistían sencillamente en una estela o cipos funerarios
esculpidos o una simple lápida sobre el nicho que guardaba los restos y otras sobre todo
durante el Imperio fueron suntuosos mausoleos como la mole Adriana (hoy castillo de
Santángelo) y la tumba de Cecilia Metela, en Roma. También llegaron a formarse
prolongadas series de sepulcros a lo largo de caminos como es muy de notar en la Vía Apia
y verdaderos panteones de familia y enterramientos subterráneos con nichos agrupados o
en filas que se llamaban columbarios conteniendo cada uno de éstos la urna cineraria de
barro cocido o de piedra con relieves y con la inscripción correspondiente.
Arquitectos
Vitrubio, arquitecto y tratadista que vivió en tiempos de Augusto. Fue autor de un tratado
dividido en diez libros titulado De architectura.
Rabirio. Arquitecto de tiempos de Domiciano que fue elogiado por Marcial por sus virtudes
como persona y habilidades como artista.15 Algunos autores le atribuyen el proyecto del
palacio de Domiciano.
Influencia posterior
La arquitectura romana proporcionó la influencia básica para el
desarrollo de la arquitectura prerrománica y románica, y se extendió
a través de la Europa cristiana más allá de las antiguas fronteras del
Imperio, a Irlanda y Escandinavia, por ejemplo. En Oriente, la
arquitectura bizantina desarrolló nuevos estilos de iglesias, pero la
mayoría de los otros edificios permanecieron muy cerca de las
formas romanas tardías. Lo mismo puede decirse a su vez de la
arquitectura islámica , donde las formas romanas continuaron
durante mucho tiempo, especialmente en edificios privados, como Capitolio de los Estados Unidos.
casas y baños, y en la ingeniería civil, como fortificaciones y
puentes.
Véase también
Edificación pública (Roma Antigua)
Arquitectura griega
Opus (construcción)
Historia de las cúpulas romanas y bizantinas
Referencias
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1. Alonso Pereira, 2005, p. 69.
9. Brunet de Baines, 1853, p. 67.
2. Choisy, 1999, p. 9.
10. Ramallo Asensio, 2004, p. 405.
3. Brunet de Baines, 1853, p. 63.
11. Vasari, 1996, p. 53-55.
4. Brunet de Baines, 1853, p. 63-65.
12. Capel, 2002, p. 166.
5. Alonso Pereira, 2005, p. 70-71.
13. Peréx Agorreta, 1997, p. 370-372.
6. Álvarez Rodríguez, 2016, p. 604.
14. Alonso Pereira, 2005, p. 80.
7. nationalgeographic.com / Historia /
Grandes reportajes - Augusto (Consultado 15. Marcial. Epigramas, 7, 56; íbid., 10, 71.
el 7 de enero de 2018). (http://www.national
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Bibliografía
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Suetonio (1996). Vidas de los doce césares. Editorial Gredos.
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Wheeler, Mortimer: El arte y la arquitectura de Roma. Barcelona, ed. Destino, 1995.
Enlaces externos
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