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Tema 9
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k. El hombre tiene una síntesis pasiva (elementos biológicos, genéticos, culturales, etc.), que son el
punto de partida sobre el que se desarrolla la libertad.
l. En la libertad trascendental es donde la persona toma conciencia de la perfección a la que se puede
encaminar. La libertad es la tarea de realizarse a sí mismo a partir de un ser y naturaleza dados.
3. LIBERTAD DE ELECCIÓN: LIBERTAD Y DETERMINISMO
a. Este sentido se puede definir como una propiedad de la voluntad en virtud de la cual ésta se
autodetermina hacia algo que la inteligencia le presenta como bueno.
b. La libertad es más que la capacidad de elegir, es la capacidad de autodeterminarse al bien.
c. 3.1 LA AUTODETERMINACIÓN DE LA VOLUNTAD:
i. La voluntad tiene como objeto el bien, pero ningún bien finito puede determinar la infinitud
de la voluntad; por eso se dice que la voluntad está determinada al bien en general, pero
indeterminada para los bienes concretos.
ii. Lo propio de la libertad es la autodeterminación hacia fines. Por eso no es pura
indeterminación o autonomía de la voluntad porque siempre se dirige al bien presentado.
iii. En las concepciones modernas, ser libre significa total indeterminación, como si la libertad
fuera un fin en sí mismo y no como una posibilidad necesaria de alcanzar el bien.
iv. En el proceso deliberativo es necesario un acto de la voluntad para cerrarlo, una decisión.
v. La voluntad sigue siempre el último juicio práctico de la razón (práctica), pero determinar cuál
es el último juicio depende de la voluntad.
vi. De esta manera se muestra que los factores externos no determinan. Es cierto que el hombre
siempre sigue la razón más fuerte, pero determinar cuál es la razón más fuerte, lo hace la
voluntad.
vii. No obstante, la libertad es más que la mera capacidad de elegir, porque si se reduce a eso, sólo
habría libertad si hay opciones entre las que elegir. La libertad es también compromiso.
viii. Toda elección viene precedida por unas preferencias libremente asumidas de modo jerárquico.
ix. En la elección se manifiesta la jerarquía de valores y de amores. No solo se elige algo exterior
sino también qué tipo de persona moral quiero ser. Voy configurando mi personalidad moral.
x. La decisión es libre en cuanto que la voluntad no está determinada desde fuera. Pero el obrar
libre nunca es un obrar inmotivado o caprichoso, aunque desde fuera se ve como una elección
ciega.
xi. Conviene recordar que la libertad real no siempre coincide con la sensación de libertad. La
libertad no es la ausencia de vínculos o compromisos, sino la capacidad de contraer los vínculos
que yo quiero: sin compromisos, el hombre no utiliza la libertad.
xii. Vivir la libertad es “gastarla”. No comprometerse ya es un modo de vivir la libertad, aunque no
es el modo más humano. Si no me determino yo a fines, me determinarán factores externos.
xiii. Emplear la libertad comporta un riesgo al fracaso, pero asumir ese riesgo es vivir la vida como
una aventura valiosa e interesante.
xiv. Al ejercer la libertad, somos autores de nuestra existencia, aunque como la libertad no es
ilimitada, no es algo que me propongo sino algo que se me ha encomendado.
d. 3.2 DIVERSAS CONCEPCIONES DE LA LIBERTAD DE ELECCIÓN:
i. El determinismo:
1. Es la tesis filosófica según la cual dado el pasado real y dadas las leyes de la naturaleza,
psicológicas, económicas o sociales el futuro está unívocamente determinado.
2. Tiene que distinguirse del principio de causalidad, porque este no es determinista. La
libertad implica que la causa no es necesaria, no que no tenga causa.
3. Es importante distinguir también la determinación y el condicionamiento. Porque la
libertad siempre tiene condicionamientos en los que se desenvuelve.
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Javier Pastor Marina
4. Un tipo de determinismo es que el hombre no tiene libertad, sino que tiene sensación de
ella, de manera que desconoce los mecanismos que determinan su actuar. Pero esto no
explica el arrepentimiento y enmienda de los errores libremente cometidos.
ii. Concepción liberal:
1. La libertad se entiende como mera elección, y como un fin en sí mismo.
2. Basta la mera elección para ser libre, y da igual el bien o mal elegidos.
3. Tiene dos principios: cada uno es libre de elegir lo que quiera, pero sin perjudicar a nadie.
4. Para ellos basta que el hombre elija para que se realice, no importan si es bueno.
5. Tiene varias objeciones:
a. Supone la bondad de todas las acciones espontáneas y libres del hombre.
b. Niega valores objetivos y el único valor es la autenticidad: subjetivismo moral que
sólo exige coherencia.
c. No se conoce el límite de mi libertad respecto de la de los demás.
iii. Concepción aristotélica:
1. Algunas acciones son fruto de la libertad de elección (no todas ni ninguna).
2. Podemos elegir el bien o el mal. Necesitamos criterios objetivos.
3. Hay que tener en cuenta la responsabilidad y por tanto la repercusión sobre nosotros y la
sociedad.
4. LIBERTAD MORAL:
a. Nace del buen uso del libre albedrío y consiste en el fortalecimiento y ampliación de la virtud.
b. Es adquirida por el hombre, que se va configurando moralmente de un modo determinado.
c. Consiste en la realización de la libertad fundamental a lo largo del tiempo según un proyecto vital.
d. La realización consiste en las decisiones libres para los proyectos personales.
e. La realización de un proyecto vital propio, libremente decidido y realizado es lo que da autenticidad
y sentido a la vida.
f. La opción fundamental es la elección por la que cada hombre decide la dirección global de su vida,
el tipo de hombre que quiere ser.
g. La opción fundamental no es determinante porque siempre se puede decidir de forma diversa, pero
es dominante sobre las elecciones particulares.
h. Pero no basta con una única acción concreta para una realización personal.
i. Las acciones concretas pueden cambiar la opción fundamental de amor de Dios a su rechazo, pero
aunque no lo hiciesen, pueden ser en sí mismas malas.
j. El buen uso de la libertad no está garantizado. Y las personas virtuosas son las que poseen facilidad
para obrar bien.
k. Obrar bien significa obrar por lo que la inteligencia me presenta como bueno, por encima de las
pasiones y tendencias naturales.
l. Por tanto, la libertad moral es la capacidad de querer realmente bienes arduos, difíciles de
conseguir a través de un esfuerzo. Es decir, la fuerza de voluntad.
m. Se llama libertad porque supone un autodominio y no ser esclavo de las tendencias.
n. La virtud supone la superación de la desarmonía entre lo que me pide el cuerpo y la inteligencia, a
través del esfuerzo voluntario hacia el bien verdadero captado por la razón.
o. La virtud es además de la armonía, una facilidad para hacer buen uso de la libertad. Es un
incremento de la libertad, mientras que los vicios son debilitamiento de ella.
p. La libertad moral es un autodominio adquirido con dos vertientes: domino de las pasiones y
elevación al bien común (a diferencia de los animales, que están esclavizados por el bien propio).
q. El autodominio de los instintos hace posible la apertura al bien común, la libertad social.
5. LA LIBERTAD SOCIAL:
a. Cosiste en que los propios proyectos vitales puedan llevarse a cabo, a nivel personal, familiar, etc.
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Javier Pastor Marina
b. Una sociedad será más libre cuantos más proyectos sean promocionados (y posibles).
c. La liberación es el proceso a través del cual los individuos de una sociedad alcanzan la libertad
removiendo los obstáculos que se oponen a ella (escasez económica, social, jurídica…)
d. La libertad social ha de ser conquistada, y eso implica la conformación de unos ámbitos exentos de
coacción y que permitan la participación en los asuntos públicos.
e. Para que la libertad social sea efectiva se precisa la integración entre la autoridad y la libertad
personal. la autoridad política supone tratar a los súbditos como personas libres y responsables.
f. Los defectos de la libertad social son:
i. La autoridad puede caer en el permisivismo. La tolerancia es permitir aquello que no es lícito
o bueno, sin aprobarlo expresamente. El permisivismo es negar los criterios objetivos propios
del orden social.
ii. También se puede caer en el autoritarismo, que consiste en considerar la autoridad por encima
de la libertad para evitar que los ciudadanos hagan mal uso de su libertad. Parece que es algo
que garantiza el bien común, pero, como no tiene en cuenta la libertad de la persona, cuando
dejan de garantizar el bien común, se favorece a unos pocos.