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didácticos
Módulo 1
Introducción
01
Los avances en el tratamiento del cáncer de pulmón en los últimos años han sido
extraordinarios, y en gran parte debido a la revolución acaecida en el ámbito de la genética.
De hecho, los conocimientos derivados de las investigaciones en este campo y las
tecnologías desarrolladas en consecuencia permiten hoy día estratificar las patologías desde
un nuevo prisma, determinando factores predictivos y pronósticos en función del tipo de
mutación o alteración genética y haciendo posible, en función de ello, escoger los fármacos
más adecuados en cada caso.
Objetivos didácticos
02
Los objetivos didácticos del módulo 1 del programa son:
Jessica J. Lin, Viola W. Zhu, Satoshi Yoda, Beow Y. Yeap, Alexa B. Schrock, Ibiayi
Dagogo-Jack, Nicholas A. Jessop, Ginger Y. Jiang, Long P. Le, Kyle Gowen, Philip J.
Stephens, Jeffrey S. Ross, Siraj M. Ali, Vincent A. Miller, Melissa L. Johnson, Christine
M. Lovly, Aaron N. Hata, Justin F. Gainor, Anthony J. Iafrate, Alice T. Shaw y Sai-Hong
Ignatius Ou
Introducción
01
Los reordenamientos del gen de la cinasa del linfoma anaplásico (ALK) codifican
oncoproteínas de fusión impulsoras (drivers) que se detectan en alrededor del 5% de los
carcinomas de pulmón no microcíticos (CPNM)1. A partir de la aprobación del crizotinib2-5,
se han desarrollado varios inhibidores de la tirosina cinasa (TKI) de ALK de segunda
generación (p. ej., ceritinib, alectinib, brigatinib)6-14 y de tercera generación (p. ej.,
lorlatinib)15 para pacientes con CPNM ALK-positivo, todos ellos con mayor potencia y
penetración en el sistema nervioso central (SNC) que el crizotinib. Aunque estos
inhibidores de ALK han ampliado enormemente el arsenal terapéutico para el CPNM ALK-
positivo, los resultados clínicos son variables debido a mecanismos biológicos aún no
determinados. Además, en algún momento, prácticamente todos los pacientes presentan una
recurrencia durante el tratamiento con TKI a causa de la resistencia adquirida a estos
fármacos1,4,5. La elucidación de los mecanismos de resistencia es indispensable para la
selección racional del tratamiento subsiguiente1,16.
Nuevos datos indican que las variantes del gen de fusión ALK pueden tener repercusiones
biológicas y clínicas en el cáncer de pulmón ALK-positivo. La fusión de ALK con el gen
que codifica la proteína asociada a microtúbulos de equinodermo 4 (EML4) es la más
frecuente en el CPNM17,18. Entre las más de 15 variantes de EML4-ALK identificadas hasta
la fecha, las más frecuentes son la variante 1 (v1; fusión del exón 13 de EML4 con el exón
20 de ALK [E13;A20]) y la variante 3a/b (v3a/b: fusión del exón 6a/b de EML4 con el exón
20 de ALK [E6a/b;A20])17,19-22. Todas las variantes retienen el dominio tirosina cinasa
completo de ALK y la región N-terminal en hélice superenrollada de EML4, una condición
necesaria y suficiente para la dimerización y la activación constitutiva de ALK17. Las
diferentes variantes pueden conferir diferente estabilidad a la proteína, algo que influye en
la sensibilidad al crizotinib in vitro23-26.
En estudios recientes se ha sugerido que la respuesta al crizotinib difiere según la variante
de ALK presente27,28. Por ejemplo, se observaron respuestas más prolongadas en pacientes
con la v1 que con variantes no-v127 y con variantes no-v3 que con v328; sin embargo en
otros dos estudios no se identificaron diferencias en la respuesta clínica al crizotinib según
la variante de ALK, algo que pone de relieve la necesidad de continuar las
investigaciones29,30. Tampoco se examinó el efecto potencial de las variantes de ALK sobre
la eficacia de TKI de ALK de última generación o el desarrollo de mecanismos de
resistencia, que pueden influir en las respuestas a tratamientos posteriores. Se evaluó la
frecuencia y el espectro de mutaciones de resistencia en ALK según la variante de fusión en
pacientes con CPNM ALK-positivo con resistencia adquirida a TKI y los resultados clínicos
de los pacientes que recibieron inhibidores de ALK de varias generaciones.
Pacientes y métodos
02
Población del estudio
Entre enero de 2008 y enero de 2017, se identificó a 129 pacientes con CPNM ALK-
positivo y una variante conocida de ALK en el Massachusetts General Hospital
(MGH; n = 113) y en la Universidad de California, Irvine (n = 16). El estudio fue aprobado
por el comité de ética para la investigación de cada centro.
También se analizó la frecuencia y la distribución de las mutaciones de resistencia
en ALK en otro grupo de 577 pacientes con CPNM ALK-positivo que tenían una variante
conocida de ALK identificada durante la atención médica habitual desde agosto de 2012
hasta diciembre de 2016. Este grupo se analizó mediante secuenciación de última
generación (SUG) con la plataforma FoundationOne en la compañía estadounidense de
análisis genómicos Foundation Medicine. El estudio de esta cohorte fue aprobado por el
comité de ética para la investigación de Western Institutional Review Board (WIRB)
(protocolo N.º 20152817).
Análisis estadístico
La descripción detallada de los métodos estadísticos se presenta en el Suplemento de datos
del artículo original. Las curvas de SLP y de SG se estimaron con el método de Kaplan-
Meier y el hazard ratio (HR) de las diferencias en la SLP y la SG entre grupos de variantes
se calculó con el modelo de regresión de riesgos proporcionales de Cox. Los análisis
estadísticos se efectuaron con el programa SAS versión 9.4 (SAS Institute, Cary, Carolina
del Norte, Estados Unidos).
Resultados
03
Características de los pacientes
Las características basales de los pacientes se presentan en la Tabla 1. La mayoría de los
pacientes habían recibido crizotinib (121 de 129 [94%]; 67 [52%] en primera línea, 31
[24%] en segunda línea y 23 [18%] en tercera línea o como tratamiento más avanzado). En
el transcurso de la enfermedad, 45 pacientes (35%) recibieron dos inhibidores de ALK y 56
(43%), tres o más inhibidores de ALK.
De los 129 pacientes, 123 (95%) tenían un gen de fusión EML4-ALK. Las variantes más
frecuentes de EML4-ALK fueron v1 en 55 pacientes (43%) y v3 en 51 pacientes
(40%; Figura 1). No se detectaron diferencias clinicopatológicas entre los pacientes con v1
y v3 (Tabla 1). Las restantes fusiones de EML4-ALK correspondían a v2 (6% [E20;A20]),
v59 (4% [E18;A20]), v5 (2% [E2;A20]) y v7 (1% [E14;A20]). Se detectaron otras fusiones
de ALK en seis pacientes (5%), con los genes HIP1 (n = 3)37-
39, KIF5B (n = 1)40, PRKAR1A (n = 1)41 y MTA3 (n = 1; datos no informados anteriormente).
Las características basales eran similares en los grupos con estas variantes.
Publicaciones influyentes
Módulo 1
Toor OM, Ahmed Z, Bahaj W, Boda U, Cummings LS, McNally ME, Kennedy KF,
Pluard TJ, Hussain A, Subramanian J, Masood A. Correlación de las alteraciones
genómicas somáticas detectadas mediante secuenciación de última generación en
muestras tisulares y en ADNtc: análisis de cánceres de pulmón y
gastrointestinales. Mol Cancer Ther 2018;17:1123-32.
La secuenciación de última generación (SUG) en tejidos tumorales se realiza con
frecuencia creciente para identificar alteraciones genómicas somáticas que podrían guiar las
decisiones terapéuticas. Sin embargo, debido a la heterogeneidad de los tumores, es posible
que la arquitectura genómica completa no se refleje en una única biopsia de tejido. El ADN
tumoral circulante (ADNtc) es un método no invasivo sólido para detectar y vigilar las
alteraciones genómicas en sangre en tiempo real. Se analizaron 28 SUG de muestras de
tejido y ADNtc emparejadas de cáncer gastrointestinal y de pulmón para determinar la
concordancia de las alteraciones genómicas somáticas, las controladoras y las accionables.
Seis pacientes (21%) tenían al menos una mutación concordante entre la secuenciación
tisular y la del ADNtc. De las 104 mutaciones detectadas mediante secuenciación en
muestras tejido y de sangre, ocho (7,7%) eran concordantes. La secuenciación identificó
mutaciones conductoras en el 60% de las muestras tisulares y en el 64% de las muestras de
ADNtc. Se observó una elevada discordancia entre la evaluación tisular y del ADNtc, en
especial para las alteraciones conductoras y las accionables. La SUG detectó alteraciones
accionables en el 25% de los pacientes en ambos tipos de muestras. Cuando se combinaron
las alteraciones somáticas identificadas por cada prueba, el número total de pacientes con
mutaciones accionables aumentó al 32%. Los datos obtenidos demuestran una discordancia
significativa entre la SUG en muestras tisulares y el análisis del ADNtc. Estos resultados
sugieren que la SUG tisular y la del ADNtc son enfoques complementarios y no
mutuamente excluyentes. El hecho de que ambas técnicas puedan pasar por alto
alteraciones conductoras tratables, sugiere que ambas se deberían incorporar a la práctica
para mejorar la tasa de detección de mutaciones. Se necesitan estudios prospectivos a
mayor escala para comprender mejor este nuevo panorama de la oncología de precisión.
Lee JK, Lee J, Kim S, Kim S, Youk J, Park S, An Y, Keam B, Kim DW, Heo DS,
Kim YT, Kim JS, Kim SH, Lee JS, Lee SH, Park K, Ku JL, Jeon YK, Chung DH,
Park PJ, Kim J, Kim TM, Ju YS. Historia clonal y predictores genéticos de la
transformación del adenocarcinoma de pulmón en carcinoma microcítico. J Clin
Oncol 2017;35:3065-74.
OBJETIVO: La transformación histológica del adenocarcinoma de pulmón (ACP)
con EGFR mutado en carcinoma de pulmón microcítico (CPM) es uno de los principales
mecanismos de resistencia a los inhibidores de la tirosina cinasa (TKI) del receptor del
factor de crecimiento epidérmico (EGFR). Sin embargo, la patogénesis molecular de esta
transformación aún no se ha esclarecido. MÉTODOS: Se estudió a 21 pacientes con ACP
avanzado con EGFR mutado transformado en CPM resistente a TKI del EGFR. Se realizó
secuenciación del genoma completo en nueve tumores, desarrollados en distintos puntos
temporales, de cuatro pacientes con el objetivo de reconstruir su evolución clonal y detectar
predictores genéticos de transformación microcítica. Los resultados se validaron mediante
análisis inmunohistoquímico en 210 muestras tisulares de cáncer de
pulmón. RESULTADOS: Se observó que los ACP resistentes a TKI del EGFR y los CPM
comparten un origen clonal común y siguen diferentes trayectorias evolutivas. La
divergencia clonal de células progenitoras del CPM a partir de las células del ACP era
anterior a los primeros tratamientos con TKI del EGFR; además, los
genes RB1 y TP53 estaban completamente inactivados en los ACP en estadio inicial
analizados mediante secuenciación. El presente estudio expandió los resultados mediante el
análisis inmunohistoquímico de los tejidos de ACP en estadio inicial de 75 pacientes
tratados con TKI del EGFR; la inactivación de las proteínas Rb y p53 era mucho más
frecuente en el grupo con transformación microcítica que en el grupo sin esta
transformación (82% frente a 3%; odds ratio [OR]: 131; IC del 95%: 19,9-859). En los
pacientes registrados en una cohorte predefinida (n = 65), el riesgo de transformación
microcítica de un ACP con EGFR mutado y Rb y p53 completamente inactivadas era 43
veces más alto (riesgo relativo: 42,8; IC del 95%: 5,88-311). El análisis de la firma
mutacional de una rama específica reveló que la hipermutación inducida por polipéptidos
catalíticos de la enzima editora del ARNm de la apolipoproteína B (APOBEC) era
frecuente en los tumores que sufrieron transformación microcítica. CONCLUSIÓN: Los
CPM resistentes a TKI del EGFR se diferencian en un estadio temprano de los clones del
ACP que albergan los genes RB1 y TP53 completamente inactivados. La evaluación del
estado de RB1 y TP53 en los ACP tratados con TKI del EGFR aporta información que
permite predecir transformación microcítica.
Estudios clínicos
relevantes
Módulo 1
OBJETIVO
Los reordenamientos en ROS1 definen un subgrupo de cáncer de pulmón no microcítico
(CPNM) con características moleculares específicas. Se investigó la eficacia y la seguridad
del ceritinib en pacientes con CPNM con reordenamientos en ROS1.
PACIENTES Y MÉTODOS
Se seleccionaron 32 pacientes con CPNM avanzado con reordenamientos
en ROS1 detectados mediante hibridación fluorescente in situ. El ceritinib se administró
una vez al día en dosis de 750 mg. El criterio de valoración principal fue la tasa de
respuesta objetiva. Los criterios de valoración secundarios fueron la tasa de control de la
enfermedad; la duración de la respuesta; la supervivencia libre de progresión; la
supervivencia global; la toxicidad y la concordancia entre la hibridación fluorescente in
situ, el análisis inmunohistoquímico y la secuenciación de última generación.
RESULTADOS
El cribado de ROS1 realizado entre el 7 de junio de 2013 y el 1 de febrero de 2016 en 404
pacientes identificó a 32 con reordenamientos en ROS1. Todos los pacientes, excepto dos,
eran naïve al crizotinib. En la fecha del corte de datos, la mediana del seguimiento era de
14,0 meses y 18 pacientes (56%) habían suspendido el tratamiento. La respuesta se pudo
evaluar en 28 pacientes mediante revisión radiológica independiente. La tasa de respuesta
objetiva fue del 62% (intervalo de confianza [IC] del 95%: 45-77%), una respuesta
completa y 19 parciales; la duración de la respuesta fue de 21,0 meses (IC del 95%: 17-25
meses), y la tasa de control de la enfermedad fue del 81% (IC del 95%: 65-91%). La
mediana de la supervivencia libre de progresión fue de 9,3 meses (IC del 95%: 0-22 meses)
en la población total del estudio y de 19,3 meses (IC del 95%: 1-37 meses) en los sujetos
que no habían recibido crizotinib previamente. La mediana de la supervivencia global fue
de 24 meses (IC del 95%: 5-43 meses). De los ocho pacientes con metástasis cerebrales,
cinco alcanzaron el control de la enfermedad intracraneal (63%; IC del 95%: 31-86%). Los
eventos adversos más frecuentes (la mayoría de grado 1 o 2) fueron diarrea (78%), náuseas
(59%) y anorexia (56%) en todos los pacientes tratados.
CONCLUSIONES
El ceritinib demostró una actividad clínica potente en pacientes con CPNM con
reordenamientos en ROS1 que habían recibido tratamiento intensivo con varias líneas de
quimioterapia.
REFERENCIA
J Clin Oncol 2017;35:2613-8.
02
AUTORES
Yang JJ, Yu D, Takata Y, Smith-Warner SA, Blot W, White E, Robien K, Park Y, Xiang
YB, Sinha R, Lazovich D, Stampfer M, Tumino R, Aune D, Overvad K, Liao L, Zhang X,
Gao YT, Johansson M, Willett W, Zheng W, Shu XO.
OBJETIVO
El consumo de grasas dietéticas podría contribuir a la carcinogénesis pulmonar, pero esta
hipótesis no se ha comprobado en estudios epidemiológicos. En el presente análisis
agrupado de 10 estudios prospectivos de cohortes de Estados Unidos, Europa y Asia se
evaluaron las asociaciones entre la ingesta de grasas totales y específicas y el riesgo de
cáncer de pulmón.
MÉTODOS
Los hazard ratios (HR) y sus intervalos de confianza (IC) del 95% se estimaron mediante
regresión de Cox en cada cohorte. Las estimaciones de los riesgos específicos del estudio se
agruparon en metaanálisis de efectos aleatorios o fijos. Los primeros dos años de
seguimiento se excluyeron para abordar la influencia potencial de los cambios alimentarios
anteriores al diagnóstico.
RESULTADOS
En 1.445.850 participantes se identificaron 18.822 casos incidentes (media de seguimiento:
9,4 años). La ingesta elevada de grasas totales y saturadas se asoció a un aumento del riesgo
de cáncer de pulmón (quintil más alto frente al más bajo: HR: 1,07 y 1,14, respectivamente;
IC del 95%: 1,00-1,15 y 1,07-1,22, respectivamente; p para la tendencia < 0,001 en ambos
quintiles). La asociación con la ingesta de grasas saturadas fue más evidente en los
fumadores actuales (HR: 1,23; IC del 95%: 1,13-1,35; p para la tendencia < 0,001) que en
los exfumadores o no fumadores (p para la interacción = 0,004) y con los carcinomas
escamoso y microcítico (HR: 1,61 y 1,40, respectivamente; IC del 95%: 1,38-1,88 y 1,17-
1,67, respectivamente; p para la tendencia < 0,001 para ambos) que con otros tipos
histológicos (p para la heterogeneidad < 0,001). En cambio, una ingesta elevada de grasas
poliinsaturadas se asoció a una disminución del riesgo de cáncer de pulmón (HR: 0,92; IC
del 95%: 0,87-0,98 para el quintil más alto frente al más bajo; p para la tendencia = 0,02).
La sustitución del 5% de la energía procedente de grasas saturadas por grasas
poliinsaturadas se asoció a un riesgo 16-17% más bajo de carcinoma microcítico y
escamoso. No se detectaron asociaciones con las grasas monoinsaturadas.
CONCLUSIÓN
Los resultados del análisis de este gran consorcio de cohortes internacionales sugieren que
la modificación de la ingesta de grasas (sustitución de grasas saturadas por poliinsaturadas)
puede reducir el riesgo de cáncer de pulmón, sobre todo de los carcinomas escamoso y
microcítico y en los fumadores.
REFERENCIA
J Clin Oncol 2017;35(26):3055-64.