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FESTIVIDAD DE LA CANDELARIA
La ciudad de Puno era un modesto poblado de indios
hasta que el Virrey Conde de Lemos Paucarcolla, el 4
de noviembre de 1668, esta festividad de la Virgen de
la Candelaria es la festividad más grande e importante
del Perú, ya que se declaró Patrimonio Cultural de la
nación por el ministerio de Cultura y Patrimonio
Cultural Inmaterial de la humanidad por la UNESCO.
La festividad de la virgen de la Candelaria de Puno es
una manifestación cultural de Perú. La fiesta de la
Virgen de la Candelaria de Puno es una de las
manifestaciones de la república del Perú y de la región
andina esta se debe a su gran presencia de
expresiones religiosas y artísticas de diversas
tradiciones folclóricas.
Su origen proviene desde hace muchos años cuando la
ciudad estuvo bajo el asedio de las tropas de Túpac
Amaru ya que los habitantes temerosos de un ataque
de los invasores españoles en la noche decidieron
sacar una estatua de la virgen con velas encendidas
acompañados por grupos de Sikuris (sopladores de
zampoña), situación que provoco que los militares
españoles se vieran obligados a alejarse de la zona por
temor a ser puneños atribuyeron su salvación a un
milagro y nombraron a la virgen de la Candelaria como
su patrona.
La parte medular de la festividad es la expresión
religiosa, festiva y cultural como danza, música y artes
y diversas costumbres y expresiones, organizada por
la federación regional de folklore y cultura de Puno,
que convoca la presencia de más de 180 conjuntos,
entre “danzas” que proceden de las comunidades y
parcialidades de Puno y los andes peruanos, y los
conjuntos de danzas organizados en los distritos,
barrios de la ciudad de Puno, en su mayoría
denominados “danzas con traje de luces" donde
participan 100 mil danzarines y unos 10 mil músicos,
sumando su participación indirecta unas 35 mil
personas más entre directivos Alferados, bordadores,
artesanos en la confección de caretas, botas y zapatos,
cascabeles y otros elementos.
Esta fiesta de la Virgen de la Candelaria de Puno se
celebra los primeros días del mes de febrero de cada
año; en el primer día se realizan las albas de fiestas, se
realiza igualmente una misa de albas, entrada de cirios
y misa de vísperas; en este rito a la Virgen se ofrecen
licores, rezos y se detonan petardos para despertar al
Pueblo Puneño. Al despertar el alba, “la pandilla”
(quienes realizan la ceremonia en el cerro) desciende
bailando dirigiéndose hasta la iglesia San Juan
Bautista, donde se ubica el santuario de la virgen de la
Candelaria; este acto comienza muy temprano, a las
tres de la mañana, cuando el Alferado (responsable de
la festividad sube a la cima del cerro Azoguini en los
alrededores de la ciudad acompañado de unos cuantos
músicos. A las 6:00 horas tiene lugar a la misa de albas.
Para la tarde es la entrada de cirios, el Alferado y la
alferada salen de su hogar portando la imagen del niño
Jesús seguidos por las autoridades y allegados en
devota marcha hacia la iglesia de San Juan. Por la
noche son las misas de vísperas y después los fuegos
artificiales que iluminan con su resplandor el cielo del
altiplano puneño. La virgen ingresa en la Catedral de la
ciudad y los diferentes grupos que la acompañan bailan
y tocan en veneración de su patrona. Es un anticipo de
lo que será mañana, el día central de las fiestas con la
misa y procesión de la virgen de la Candelaria en Puno.
El segundo día de febrero, día de la santísima Virgen de
la Candelaria, sobre las 14:00 tiene lugar a una de las
manifestaciones más emotivas de la fiesta de la
Candelaria. Tras la misa la imagen de la Virgen es
llevada en procesión por las principales calles de la
ciudad. Esta celebración religiosa tiene su origen en
los ritos prehispánicos de la siembra y la cosecha.
Construye mezcla entre la respetuosa alegría Aymara
y la gravedad ancestral Quechua.
Los fieles y las confraternidades folclóricas
acompañan a la Mamacha Candelaria danzando y
cantando. Por el recorrido elaboran coloridas
alfombras de flores, aserrín y yeso.
Una multitud que reza, agradece y pide milagros a la
Virgen.
También son arrojados papelitos llenos de plegarias, y
en las calles se preparan pequeños altares para
honrarla. Y para finalizar en el estadio Enrique Torres
Belón, se hace un gran Concurso de danzas
autóctonas, donde participan demasiados conjuntos
provenientes de los diversos pueblos y comunidades
de la región de Puno, quienes danzan bailes
tradicionales y otras danzas de tipo costumbristas,
donde los participantes devotan fe y devoción hacia la
Virgen de la Candelaria, nuestra Patrona.
En conclusión esta festividad es una de las
manifestaciones culturales más importantes de la
Región Andina y la República del Perú, donde con
mucha fe y devoción se le hace o realiza una festividad
a la “Mamacha Candelaria” donde se le deleita con
danzas en un concurso con más de cien conjuntos que
vienen de distintos lugares así como también los
barrios de esta ciudad.

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