Es la libertad del hombre Terrestre, que Solari Parravicini advirtió para los muy pocos,

diciendo … “Hijo: verán a Dios, pues cruzarán la

tribulación y la oscura noche. Jesús les dará Luz y morarán en la Verdad. Ya no resta
tiempo y no lo habrá. La Bestia trepa y moverá nación contra nación. Llega la niebla de las
nieblas. El acusador –Salomón 666- marchará iracundo contra Cristo y su rebaño, la
Congregación sufrirá heridas de muerte, más sobrevivirá para entregar la paz al hombre
salvado luego de la grande prueba. ¡Cristo llega! ¡Mahanarata!
sobre los endurecidos oídos de la hora. ¡Necesario es! Todo aquel que no
escuchare, condenado será. Todo aquel que atendiera y entendiera verá y repetirá en fe:
¡Cristo llega! Es ya la hora. Es ya la Hora de la Verdad. Porque el azote caerá sobre el hijo
de la ira, sobre el ciego. El Padre Sin Fin toleró su libertad desmedida, su baja entrega a
la materia, a los dineros, a la ambición del poder, a la falacia. El silencio ante su palabra
mentida, ante su sucia mentalidad, su criminalidad, su petulancia, su cinismo. El Padre
Innominado ya colmado fue en su paciencia. Él otorgó. Él enseño. Él envío a Su Hijo en
redención y el bien no fructificó. El hombre camina su falsa verdad, anda la senda de las
tinieblas y caerá al profundo precipicio de la aflicción y allí quedará. Ese consentido rey,
hombre-dios, hombre invencible, hombre sapiente, ¡hombre-hombre!”.

…Redención que se forja en porque son separados los

cabritos de las ovejas; a quienes Isaías 5:20-30 advirtió de la hora final y llegada: “¡Ay de
los sabios en sus propios ojos, y de los que son prudentes delante de sí mismos!
¡Ay de los que son valientes para beber vino, y hombres fuertes para mezclar bebida; los que
justifican al impío mediante cohecho, y al justo quitan su derecho!
Por tanto, como la lengua del fuego consume el rastrojo, y la llama devora la paja, así será
su raíz como podredumbre, y su flor se desvanecerá como polvo; porque desecharon la ley
de Shielho, y abominaron Por esta causa se encendió el
furor contra el pueblo de pecado, y extendió contra él su mano, y le hirió; y se estremecieron
los montes, y sus cadáveres fueron arrojados en medio de las calles. Con todo esto no ha
cesado su furor, sino que todavía su mano está extendida.
Alzará pendón a naciones lejanas, y silbará al que está en el extremo de la Tierra; y
he aquí que vendrá pronto y velozmente. No habrá entre ellos cansado, ni quien tropiece;
ninguno se dormirá, ni le tomará sueño; a ninguno se le desatará el cinto de los lomos, ni se
le romperá la correa de sus sandalias. Sus saetas estarán afiladas, y todos sus arcos
entesados; los cascos de sus caballos parecerán como de pedernal, y las ruedas de sus carros
como torbellino. Su rugido será como de león; rugirá a manera de leoncillo, crujirá los
dientes, y arrebatará la presa; se la llevará con seguridad, y nadie se la quitará. Y bramará
sobre él en aquel día como bramido del mar; entonces mirará hacia la Tierra, y he aquí
tinieblas de tribulación, y en sus cielos se oscurecerá la luz.

Esto es lo anunciado, pero silenciado por aquellos que interpretaron la Profecía a su

interés del terror de guerra de Jehová, como el Profeta Joel 2 lo advirtió: “Tocad trompeta
en Sion, y dad alarma en mi santo monte; tiemblen todos los moradores de la Tierra, porque
viene el día de Jehová, porque está cercano. Día de tinieblas y de oscuridad, día de nube y
de sombra; como sobre los montes se extiende el alba, así vendrá un pueblo grande y fuerte;
semejante a él no lo hubo jamás, ni después de él lo habrá en años de muchas generaciones.
Delante de él consumirá fuego, tras de él abrasará llama; como el huerto del Edén será la
tierra delante de él, y detrás de él como desierto asolado; ni tampoco habrá quien de él
escape. Su aspecto, como aspecto de caballos, y como gente de a caballo correrán. Como
estruendo de carros saltarán sobre las cumbres de los montes; como sonido de llama de
fuego que consume hojarascas, como pueblo fuerte dispuesto para la batalla. Delante de él
temerán los pueblos; se pondrán pálidos todos los semblantes.
Como valientes correrán, como hombres de guerra subirán el muro; cada cual marchará
por su camino, y no torcerá su rumbo. Ninguno estrechará a su compañero, cada uno irá
por su carrera; y aun cayendo sobre la espada no se herirán. Irán por la ciudad, correrán
por el muro, subirán por las casas, entrarán por las ventanas a manera de ladrones. Delante
de él temblará la tierra, se estremecerán los cielos; el sol y la luna se oscurecerán,
”.

Y este pueblo de persecución de naciones ha llegado: son las hordas infernales de la

Globalización, los demonios de la rebelión del Apocalipsis 12:3,4, usando cuerpos humanos
para asesinar y quemar a todas las naciones de la Tierra, son las carnes y mentes de los
EE:UU, Inglaterra, Alemania, Francia, España, Italia y Portugal; el cuerpo de los aliados, la
Bestia de Siete cabezas y Diez reinos o naciones Europeas, ahora unidas en la OTAN de Israel,
la Bestia que trepa la Tierra e invade nación por nación…

Pero a la par llega el día de Isaías 13 que no es de Lucifer-Jehová, como las tinieblas
engañando, quisieron impostar al momento llegado: “Estruendo de multitud en los montes,
como de mucho pueblo; estruendo de ruido de reinos, de naciones reunidas;

para destruir toda la

tierra de maldad. vendrá como asolamiento del
Todopoderoso de Días. Por tanto, toda mano culpable se debilitará, y desfallecerá todo
corazón de hombre maldito, y se llenarán de terror; angustias y dolores se apoderarán de
ellos; tendrán dolores como mujer de parto; se asombrará cada cual al mirar a su
compañero; sus rostros, rostros de llamas. terrible, y de
indignación y ardor de Ira de las Potencias de Shielho, para convertir la Tierra –del Orden-
en soledad, y raer de ella a sus pecadores.

Por lo cual las Estrellas de los Cielos y sus luceros no darán su luz; y el sol se
oscurecerá al nacer, y la luna no dará su resplandor. Y castigaré –Dice el Señor- al mundo
por su maldad, y a los impíos por su iniquidad; y haré que cese la arrogancia de los
soberbios, y abatiré la altivez de los fuertes. Haré más precioso que el oro fino al varón,

en la indignación del Todopoderoso, y en el día del ardor de su Ira...

Y Babilonia-Zión esparcida como imperio del mundo y donde esté, hermosura de
reinos y ornamento de la grandeza de los caldeos, será como Sodoma y Gomorra,
Nunca más será habitada, ni se morará en ella de generación en generación;
ni levantará allí tienda el árabe, ni pastores tendrán allí majada; sino que dormirán allí las
fieras del desierto, y sus casas se llenarán de hurones; allí habitarán avestruces, y allí
saltarán las cabras salvajes. En sus palacios aullarán hienas, y chacales en sus casas de
deleite; y cercano a llegar está su tiempo, y sus días no se alargarán”.

Es llegada la destrucción de Zión-Babilonia sobre la Tierra y no es Jehová su

destructor, porque Sion es su pueblo elegido; no es Yahvé que lo reduce a polvo, porque
Babilonia es el Imperio del ocultismo que gobierna con muerte a las naciones; no es Jehová,
porque es la Bestia que trepa y no puede mover las estrellas de los cielos, y mucho menos,
castigar a los pecadores que son sus demonios de rebelión, que han hecho del mundo un
desierto… no es Yahvé como los manipuladores le adjudicaron este texto, porque la maldad,
los impíos, los inicuos, los arrogantes y soberbios, los altivos y fuertes gobiernan a las
naciones con su globalización:
termina; porque es el Cumplimiento advertido:
y entonces lamentarán todas las tribus de la Tierra,
”.

“Los justos Oran, Imploran y

Esperan:
. Es cuando se levanta el Carnicero; bebe sangre, se embriaga y marca a sus
seguidores que hacen su voluntad, es al tiempo del Anticristo” … pero cuando estas cosas
comiencen a suceder: “erguíos y levantad vuestra cabeza, porque vuestra Redención está
cerca”, dijo Nuestro Señor, para que en esta confiemos en ÉL.

Esta es consumando el imperio de la rebelión sobre la Tierra.

El Sembrador de la Luz Eterna.

América del Sur, 13 de abril del 2020

(Oíd pequeña manada de Cristo. Entréguese libremente por todos los medios a la Humanidad final del planeta)