Acuíferos en rocas ígneas y

metamórficas

Catedra de Hidrogeología
Incide

Introducción 2
Acuifero 2
¿Cómo se forman los acuíferos? 2
Tipos de acuíferos 3
Acuífero por meteorizacion3
Meteorización 3
Relieve 3
Grado de fracturación 3
Acuífero por fracturación 4
Orientación de las fracturas 4
Anchura y relleno 4
Perforaciones para acuíferos por fracturación 4
Flujo de agua en las hard rocks 4
Porosidad 5
Permeabilidad 5
Partes de las hard rocks 5
Corte esquemático 6
Métodos de explotación 6
Método geológico 7
Método hidrogeológico 7
Método geofísico 7
Teledetección 7
Hidrogeología y calidad del agua 8
Caudales 8
Conclusiones 9
Bibliografía 9

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Introducción:

Las rocas Plutónicas y Metamórficas o “Hard Rocks”, en su conjunto, se caracterizan por tener
una permeabilidad y porosidad primarias muy bajas (prácticamente nulas). Su capacidad de
almacenar y transmitir agua está en función del desarrollo de una porosidad y permeabilidad
secundaria ya sea por procesos de alteración, o bien por el desarrollo de “fracturas”, de forma
más o menos planar que aparecen en el macizo rocoso, independientemente de su origen
como fallas, diaclasas, grietas de descompresión, diques, etc.

Nos referimos a las hard rocks como rocas “compactas” o “densas”, excluyendo a las
carbonatadas y a las volcánicas, ya que las primeras también suelen desarrollar una porosidad
secundaria por fracturas, pero dicha porosidad suele incrementarse notablemente por
procesos de karstificación/disolución; en cuanto a los materiales de origen volcánico pueden
tener una elevada porosidad primaria, y es frecuente que los macizos volcánicos presenten
transmisividades muy altas.

Según el concepto de “acuífero” en su sentido más restringido (un medio con porosidad
intergranular, continuo y saturado en agua), las hard rocks no constituyen claros acuíferos
continuos, de forma que la aplicabilidad de la ley de Darcy es problemática. Además se trata de
medios generalmente muy heterogéneos y anisótropos, lo que dificulta aún más el estudio de
su comportamiento hidráulico. Existen dos motivos de interés sobre el comportamiento de las
aguas subterráneas en las hard rocks:

1- Su posible ubicación para el almacenamiento de sustancias altamente contaminantes,

especialmente el combustible gastado de los reactores nucleares.
2- La rocas plutónicas y metamórficas ocupan el orden de la quinta parte de los
continentes

Definición de acuífero

Un acuífero se define como una formación geológica que está constituida por una o más capas
de rocas, capaz de almacenar y ceder el agua. Se sitúa en el suelo en la zona denominada
“zona saturada”.

Los acuíferos se caracterizan por poseer una permeabilidad y una porosidad determinada, los
cuales son parámetros que definen las características hidráulicas del acuífero, es decir, el
movimiento del agua depende del tipo de rocas del suelo.

¿Cómo se forman los acuíferos?

Los acuíferos se forman gracias a las aguas pluviales que se infiltran en el suelo hasta llegar a
estratos impermeables que impidan el paso del agua y se deposite entre las rocas
subterráneas. Las aguas pluviales que se infiltran en el suelo permiten recargar de agua las
rocas porosas de los acuíferos.

Tipo de acuífero

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Las diferencias que se aprecian en los distintos tipos de rocas parecen deberse principalmente
a diferencias en su historia de meteorización y/o fracturación. Se pueden distinguir, dos tipos
de acuíferos:

 acuíferos por meteorización

 acuíferos por fracturación.

Acuíferos por Meteorización:

Son el resultado de la acción de los agentes atmosféricos sobre las rocas de la zona más
externa de la corteza terrestre, originando una serie de procesos físicos (dilataciones por
cambios de temperatura, congelación del agua de las grietas, etc.) o químicos (hidrólisis,
disolución, oxidación, etc.) en los minerales que constituyen las hard rocks, transformándolas
en fragmentos de menor tamaño o cambiando su mineralogía, quedando el sustrato plutónico-
metamórfico recubierto por una capa de materiales con porosidad intergranular. Es
característica en estos acuíferos que el manto de alteración no tenga una importante
continuidad lateral, y que se formen pequeñas cuencas individuales, separadas por
afloramientos de rocas sin alterar.

En el espesor y los parámetros hidrogeológicos de la zona alterada en las rocas plutono-

metamorficas, influyen muchos factores como ser la meteorización, relieve, grado de
fracturación, mineralogía de la roca, clima y la historia geológica de la zona.

o Meteorización

La meteorización química depende de las condiciones climáticas actuales o pasadas. Las

características litológicas tienen marcada importancia debido al amplio rango de
composiciones mineralógicas de estas rocas, lo que se refleja en una alteración diferencial
según la temperatura de cristalización de los diversos minerales constituyentes siguiendo la
serie de Bowen.

Otra reglo general es que las rocas con cristales con mayor tamaño originan acuíferos más
permeables que las de grano fino, además la meteorización será más activa al presentar los
cristales mayor superficie específica al disgregarse éstos. El cambio de mineralogía por
alteración conduce siempre a un aumento en la porosidad y, frecuentemente, también de la
permeabilidad, pero a veces los productos arcillosos pueden dar lugar a una reducción de la
permeabilidad.

La meteorización física es más intensa en zonas frías, en contraste con áreas cálidas donde
predominan los fenómenos de meteorización química o biológica. En regiones con fuertes
diferencias de temperaturas día-noche, se favorecen los procesos de destrucción de las rocas
por las sucesivas dilataciones y contracciones aumentando así la porosidad y la permeabilidad.

o Relieve

En las zonas llanas y deprimidas como valles o cañones es mayor el espesor de la zona alterada
en comparación con zonas elevadas y de fuertes pendientes como crestas y laderas. El
rendimiento de los pozos será mayor, al tener mayor espesor de acuífero.

o Grado de fracturación

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Aunque hemos diferenciado entre acuíferos por meteorización, y acuíferos por fracturación,
ambos pueden aparecer asociados espacialmente, ya que cuanto mayor es el grado de
fracturación de la roca, hay mayor superficie para producirse la meteorización. A su vez, por
procesos de meteorización se puede aumentar el tamaño de las fracturas.

Acuíferos por fracturación:

Originados por la existencia dentro del macizo rocoso de discontinuidades más o menos planas
como fracturas, fallas, diaclasas, zonas de cizalla, diques, planos de esquistosidad, de
pizarrosidad, grietas de descompresión en granitos, etc.

A veces, lo que separa los dos bloques no es un plano, sino una zona de milonita o roca
triturada. La fracturación de las rocas plutónicas y metamórficas aumenta su porosidad y
especialmente, su permeabilidad.

En este caso, los parámetros hidrogeológicos de los acuíferos por fracturación estarán en
función de la orientación de las fracturas y la anchura y relleno de las fisuras.

o Orientación de las fracturas

La disposición espacial de las fracturas condiciona notablemente la circulación de las aguas

subterráneas en las hard rocks. Las fracturas más verticales suelen ser más convenientes que
las horizontales a la hora de captar aguas subterráneas debido a su mayor probabilidad de
estar conectadas con la superficie permitiendo la recarga del acuífero.

o Anchura y relleno de fisuras

Tanto a mayor anchura como a mayor densidad de fracturas, la permeabilidad del macizo
rocoso se incrementa. Es bastante frecuente que las fisuras presenten rellenos
(mineralizaciones, relictos de la alteración de las superficies de fractura, etc.), que modifican la
permeabilidad de las fracturas, generalmente disminuyéndola.

Perforaciones para acuíferos por fracturación:

Las condiciones favorables y desfavorables para la perforación de un pozo en roca fracturada

son:

1- Condiciones favorables:
 Poca pendiente del terreno y figuración en el mismo sentido.
 En fondo de valle con elevada figuración.
 Facilidad de retención en los materiales de superficie.
2- Condiciones desfavorables:
 Fisuración contraria a la pendiente del terreno.
 Facilidad de escorrentía subterránea.
 Facilidad de escorrentía subterránea y fisuración no favorable

Flujo de agua en las fracturas de hard rocks:

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La distinción conceptual entre acuíferos por alteración y por fracturación en las hard rocks
también se apoya en las diferentes leyes que gobiernan el flujo de agua. Los acuíferos por
alteración, presentan una porosidad eficaz intergranular, siguen en principio la ley de Darcy,
no así los acuíferos por fracturación. Se debe tener en cuenta dos conceptos importas como lo
son la porosidad y permeabilidad.

Porosidad:

Davis y de Wiest (1966) señalan una porosidad total del orden del 3% y por lo general inferior
al 1% para muestras de rocas frescas y sin fracturas. Este tipo de porosidad primaria es poco
significativa para la búsqueda de aguas subterráneas, ya que lo que realmente interesa es la
porosidad efectiva del conjunto del acuífero.

Los procesos de meteorización incrementan más la porosidad que los de fracturación: el

material resultante de la primera presenta una porosidad entre 30-60%, mientras que por la
fracturación no suele aumentar más de 2-5%. Por otra parte, la influencia de la profundidad
sobre la porosidad tiene gran importancia guardando una relación inversa con respecto a la
porosidad total y efectiva.

Permeabilidad:

La permeabilidad primaria de las rocas plutónicas y metamórficas suele ser

extraordinariamente reducidas y rara vez alcanza los 10-3 o 10-4 m/día. Un fenómeno
característico de la permeabilidad de la hard rocks es su heterogeneidad vertical, en el sentido
de que, por lo general, esta propiedad disminuye al aumentar la profundidad, de modo que
son preferibles las captaciones someras.

Varias causas se pueden alegar como origen de esta disminución de la permeabilidad con la
profundidad:

a- Las zonas meteorizadas tienden al estar en superficie.

b- Las discontinuidades o fracturas del macizo rocoso tienden a cerrarse en
profundidad, al incrementarse la presión litostática.
c- Las variaciones de esfuerzos que originan las fracturas son mayores y se tienden a
dar cerca de la superficie terrestre.
d- Las grietas de descompresión en granito son mayores y más abundantes cuanto
más cerca está de la superficie terrestre.

Partes de las hard rocks

Las formaciones rocosas consolidadas suelen presentar un funcionamiento hidrogeológico

caracterizado por (imagen 1):

 Un acuífero superficial formado por el regolito de alteración.

 Un acuífero profundo desarrollado en la roca no meteorizada.

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 Imagen 1

Corte esquemático de acuífero en las hard rocks

En la figura puede apreciarse el esquema ideal de cómo se distribuyen las aguas subterráneas
en una masa granítica. Dentro del manto de alteración superficial se pueden distinguir cuatro
capas (imagen 2):

 Zona a: Arcillas arenosas y

arenas arcillosas.
Generalmente solo unos
metros, presentando alta
porosidad pero baja
permeabilidad.
 Zona b: acumulación masiva
de minerales arcillosos en la
que pueden preservarse
algunos minerales estables.
Espesor desde unos poco Imagen 2
metros hasta 30 m; presenta
alta porosidad pero baja
permeabilidad. Es el nivel donde se originan las lateritas o las costras calcáreas.
 Zona c: Capa progresivamente alterada con agregados cristalinos y fragmentos de
roca. Similar espesor que la zona b pero en cambio tiene mucha mayor permeabilidad.
 Zona d: Macizo rocoso con grietas o fisuras por las que circula el agua. El espesor
puede ser de varias decenas de metros. Esta zona y la anterior son las más
interesantes a las horas de captar aguas subterráneas.

Métodos de exploración:

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La regla básica en la prospección de aguas subterráneas en las hard rocks consiste en ubicar la
captación en el punto donde pueda cortar el mayor número posible de discontinuidades, las
de mayor tamaño y/o máximo espesor del manto de alteración. Para ello, cualquier técnica
que permita la localización de fracturas y zonas alteradas será potencialmente útil.

Métodos geológicos:

Cualquier estudio de carácter hidrogeológico parte de una cartografía geológica los más
detallada y completa posible, esta se tomará de estudios previos especialmente de las hojas
geológicas que prácticamente cubren todo el territorio nacional.

La cartografía detallada de los tipos litológicos de rocas tiene fundamental interés para
localizar fallas o fracturas. Conviene localizar primero las fallas principales y sus posibles zonas
miloníticas asociadas; después los tipos de fracturas, su orientación y distribución estadística
para deducir las direcciones preferentes. Cuando se puede disponer de fotografías aéreas, el
estudio puede realizarse con relativa rapidez y garantía. La geomorfología también puede ser
útil en casi de ser una zona poco limpia de vegetación, a través de la red de drenaje si existe un
control estructural.

Métodos hidrogeológicos:

La realización de un buen inventario de puntos de agua (información referente a pozos

excavados), será el mejor criterio para la elección de un emplazamiento en hard rocks, o al
menos servirá para conocer el rango de caudal que podrá suministrar la captación propuesta.

En este tipo de rocas no está clara la validez de los mapas del nivel piezométrico, ya que para
acuíferos por meteorización estos mapas no suelen tener una escala significativa debido a la
deficiencia en la continuidad, y en los acuíferos por fracturación la profundidad del nivel del
agua en un pozo no tiene un sentido físico claro.

Métodos geofísicos:

Las más comúnmente utilizadas la prospección geoeléctrica (resistividad) y la prospección

sísmica (refracción con un solo geófono).

El método de geoeléctrica se basa en el hecho de que las rocas sanas presentan una densidad
mucho mayor que las rocas meteorizadas o muy fracturadas. Las curvas que frecuentemente
se obtienen por sondeo eléctrico vertical son de tipo H, donde los valores iniciales de baja
resistividad se corresponden con la capa alterada superficial o fracturas y el incremento de la
densidad se debe al macizo rocoso impermeable.

La prospección sísmica se basa en que en la zona superior (meteorizada o fracturada) de los

macizos rocosos, la velocidad de transmisión de las ondas sísmicas disminuye notablemente.

Teledetección:

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Se refiere a las técnicas para analizar el terreno sin contacto físico con éste, como la
interpretación a partir de fotografías aéreas o de imágenes obtenidas por satélites. El análisis
visual del macizo rocoso a partir de estas imágenes permite identificar fracturas, diques, etc.,
cuyas orientaciones se podrán utilizar para confeccionar diagramas de rosas y así encontrar
direcciones de preferencia.

Las aguas procedentes de rocas básicas y ultrabásicas suelen contener concentraciones

moderadamente elevadas de magnesio en relación con las de calcio. Rocas tales como las
dioritas y sienitas, que tienen un contenido bajo en cuarzo, pero elevado en otros minerales
del grupo de los silicatos más solubles, pueden generar agua con cantidades variables de sílice
disueltas (25-55 ppm Sílice), mientras que las cuarcitas, mármoles, pizarras y filitas por lo
general menos de 30 ppm Sílice.

La mayor parte de las aguas subterráneas de las hard rocks son oligominerales (bajo contenido
en sólidos disueltos) y de facies hidrogeoquímica bicarbonatada cálcica o cálcica-sódica, lo cual
le conferiría un escaso tiempo de permanencia en el subsuelo, esto contrasta con aguas que
tendrían un largo tiempo de circulación a través de las fracturas del macizo rocoso,
caracterizadas por la ausencia de esta facies y una elevada mineralización.

Hidrogeoquímica y calidad del agua:

La calidad química del agua procedente de las hard rocks suele ser casi siempre excelente. Se
encuentran excepciones en el caso de acuíferos con alta salinidad en climas áridos con intensa
evaporación y en zonas costeras por influencias marinas.

Caudales:

En general los caudales de explotación son más bien bajos. Puede decirse que el caudal medio
esta entre 0,5 l/s y 1,5 l/s. Los caudales más frecuentes son, sin embargo, considerablemente
menores. Cuando las condiciones son favorables se pueden encontrar caudales medios hasta
del orden de 3 l/s. Las variaciones de caudal entre los pozos de una misma región suelen ser
muy grandes. Estas diferencias suelen responder más al alto grado de alteración y fracturación
que a las diferencias de composición mineralogía y textura de unas rocas a otras, aunque no se
puede establecer una relación clara entre los caudales medios y el tipo de roca.

Se obtienen los mayores caudales en las rocas situadas en regiones de clima húmedo que en
las de clima seco. En las regiones húmedas, el agua subterránea se encuentra generalmente a
menores profundidades que en las regiones de clima seco, saturando de este modo la parte
más permeable de las rocas, que es la más próxima a la superficie del suelo. Por otra parte, en
las regiones húmedas la circulación subterránea es más intensa, hecho que contribuye a
aumentar la permeabilidad de las rocas por efecto de su descomposición meteórica y por la
disolución de los minerales que constituyen las paredes de las fracturas.

Los pozos ubicados en las regiones de altiplanicie y en el fondo de los valles suelen
proporcionar por lo general mayores caudales que los pozos ubicados sobre las laderas de los
valles o en las crestas de las colinas. La ausencia de agua subterránea en las pendientes
escarpadas se explica por s la erosión ha barrido gran parte de la superficie de alteración
desposeyéndolas así de sus niveles porosos y permeables. En estas zonas de fuerte pendiente,

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el nivel de agua subterránea se puede encontrar además muy por debajo de la superficie del
suelo, debido a que las aguas subterráneas fluyen en profundidad hacia los puntos de descarga
natural situados en las zonas bajas contiguas. Los caudales de cada pozo están también
afectados por el tipo de captación y por los métodos de desarrollo utilizados una vez acabada
la perforación de cada pozo.

Conclusiones:

Se pueden distinguir, dos tipos de acuíferos: acuíferos por meteorización y acuíferos por
fracturación.
Acuíferos por Meteorización resultan de la acción de los agentes atmosféricos sobre las rocas
de la zona más externa de la corteza terrestre, originando una serie de procesos físicos o
químicos, transformándolas en fragmentos de menor tamaño o cambiando su mineralogía,
quedando materiales con porosidad intergranular. En el espesor y los parámetros
hidrogeológicos influyen muchos factores como ser la meteorización, relieve, grado de
fracturación, mineralogía de la roca, clima y la historia geológica de la zona.
En cambio, Acuíferos por fracturación son originados por la existencia dentro del macizo
rocoso de discontinuidades más o menos planas como fracturas, fallas, diaclasas, zonas de
cizalla, diques, planos de esquistosidad, de pizarrosidad, grietas de descompresión en granitos.
A veces los planos están separados por una zona de milonita o roca triturada. La fracturación
de las rocas plutónicas y metamórficas aumenta su porosidad y especialmente, su
permeabilidad. Los parámetros hidrogeológicos estarán en función de la orientación de las
fracturas, anchura y relleno de las fisuras.
Por otro lado, Los acuíferos por alteración presentan una porosidad eficaz intergranular,
siguiendo la ley de Darcy, pero no es lo mismo para los acuíferos por fracturación.
Los procesos de meteorización incrementan más la porosidad que los de fracturación, el
material resultante de la meteorización presenta una porosidad entre 30-60%, mientras que
por la fracturación no suele aumentar más de 2-5%. La influencia de la profundidad sobre la
porosidad guarda una relación inversa con respecto a la porosidad total y efectiva, pero La
porosidad primaria es poco significativa para la búsqueda de aguas subterráneas, ya que lo que
realmente interesa es la porosidad efectiva del conjunto del acuífero.
La permeabilidad primaria de las rocas plutónicas y metamórficas suele ser
extraordinariamente reducidas y su heterogeneidad vertical. Esta propiedad también
disminuye al aumentar la profundidad, de modo que son preferibles las captaciones someras.
Respecto a los métodos de exploración, la regla básica en la prospección de aguas
subterráneas en las hard rocks consiste en ubicar la captación en el punto donde pueda cortar
el mayor número posible de discontinuidades, las de mayor tamaño y/o máximo espesor del
manto de alteración. Para ello, cualquier técnica que permita la localización de fracturas y
zonas alteradas será potencialmente útil.
Las condiciones favorables para la perforación de un pozo en roca fracturada son: a) la poca
pendiente del terreno y figuración en el mismo sentido, b) que se realice en fondo de valle con
elevada figuración y c) la lacilidad de retención en los materiales de superficie.
En general los caudales de explotación son más bien bajos (0,5 l/s y 1,5 l/s), y la calidad
química del agua procedente de las hard rocks suele ser casi siempre excelente.

BIBLIOGRAFIA:

9
- Dr. Jorge García (2015). Clase teórica “Hard Rocks”. Fac. de Cs. Naturales e IML (UNT).
- Clase teórica “ROCAS-DURAS-PLUTONICAS-VOLCANICAS” Fac. de Cs. Naturales e IML
(UNT).
- Jorge Molinero Huguet (2005). Clase “Hidrogeología: Tipos de acuíferos”.
- ¿Qué es un acuífero? | iAgua

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