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Alfil
Tromboprofilaxis
Acad. Dr. Raúl Carrillo Esper
Academia Nacional de Medicina. Academia Mexicana de Cirugía.
Profesor Titular de Posgrado de Medicina del Enfermo en Estado Crítico.
Expresidente del Colegio Mexicano de Anestesiología.
Expresidente de la Asociación Mexicana de
Medicina Crítica y Terapia Intensiva.
Jefe de la UTI, Fundación Clínica Médica Sur.
ISBN 978–607–95935–5–1
Editorial Alfil, S. A. de C. V.
Insurgentes Centro 51–A, Col. San Rafael
06470 México, D. F.
Tels. 55 66 96 76 / 57 05 48 45 / 55 46 93 57
e–mail: alfil@editalfil.com
www.editalfil.com
ISBN 978–607–8283–43–9
Dirección editorial:
José Paiz Tejada
Revisión editorial:
Berenice Flores, Irene Paiz
Ilustración:
Alejandro Rentería
Diseño de portada:
Arturo Delgado
Impreso por:
Impresiones Editoriales FT, S. A. de C. V.
Calle 31 de julio de 1859 Manz. 102 Lote 1090, Col. Leyes de Reforma
09310 México, D. F.
Septiembre de 2013
Esta obra no puede ser reproducida total o parcialmente sin autorización por escrito de los editores.
COLECCIÓN MEDICINA DE EXCELENCIA
COMITÉ EDITORIAL
Fundación IMSS, A. C.
Editores
VII
VIII Envejecimiento saludable y productivo
Este año 2013 es muy especial y significativo para la medicina mexicana debido
a que se conmemoran los aniversarios de la fundación de dos insignes institucio-
nes de gran trascendencia en función de su visión, misión y objetivos: la Acade-
mia Mexicana de Cirugía y el Instituto Mexicano del Seguro Social, que cumplen
su octogésimo y septuagésimo aniversario, respectivamente, instituciones cuyo
compromiso ha sido desde siempre con el progreso y el desarrollo de México,
lo que ha permitido fortalecer la calidad y la seguridad de la medicina y, al mismo
tiempo, encauzar la contribución de los profesionales de la salud al bienestar so-
cial del país.
La Academia Mexicana de Cirugía fue fundada en 1933 por un grupo de mexi-
canos ilustres encabezados por los Doctores Gonzalo Castañeda Escobar y Ma-
nuel Manzanilla Batista. Desde su fundación esta corporación ha mantenido
ininterrumpidos sus propósitos y actividades como un foro abierto a todas las es-
pecialidades y temas médicos. Durante sus 80 años como órgano consultivo del
Gobierno Federal y asesora del Consejo de Salubridad General, además del tra-
bajo conjunto con otras instituciones, la Academia Mexicana de Cirugía ha teni-
do un papel decisivo en el diseño, la implementación y la evaluación de progra-
mas enfocados a alcanzar las metas nacionales de salud de los mexicanos, sobre
todo en estos momentos que nuestro país está viviendo los problemas asociados
a la transición epidemiológica, como son la obesidad, la diabetes, la enfermedad
cardiovascular, el síndrome metabólico, el trauma y el cáncer, entidades que ge-
neran la mayor morbimortalidad en nuestro país.
IX
X Especialidades médico–quirúrgicas: temas selectos...
XI
XII Tromboprofilaxis (Colaboradores)
Introducción . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . XVII
Francisco Javier Ochoa Carrillo, Raúl Carrillo Esper,
César Athié Gutiérrez
1. Farmacovigilancia en tromboprofilaxis . . . . . . . . . . . . . . . . . 1
Miriam Zavaleta Bustos
2. TromboAsesorR como herramienta facilitadora de la
tromboprofilaxis . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 9
David Jaimovich
3. Impacto de las guías de práctica clínica para disminuir el
riesgo tromboembólico e implementar un programa de
tromboprofilaxis . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 21
Jesús Ojino Sosa García
4. Tromboprofilaxis como indicador de seguridad en la atención
de niños críticamente enfermos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 31
Martha Patricia Márquez Aguirre, Alfredo Bobadilla Aguirre,
Patricia Zárate Castañón,
María de Lourdes González Pedroza,
J. Alfredo Hernández S.
5. Tromboprofilaxis como modelo de calidad y seguridad en
medicina . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 45
Raúl Izaguirre Ávila
XV
XVI Tromboprofilaxis (Contenido)
XVII
XVIII Tromboprofilaxis (Introducción)
1
2 Tromboprofilaxis (Capítulo 1)
Se requiere lograr este balance con la finalidad de que el único beneficiado sea
el paciente, por lo que, si bien se desglosarán las pautas generales a seguir en cada
uno de los grupos farmacológicos utilizados para la profilaxis tromboembólica,
la individualización que atienda a las condiciones específicas del paciente puede
contribuir a dicho equilibrio.
No hay que olvidar que los aspectos de efectividad y seguridad comunes para
toda profilaxis farmacológica son los clínicos; en primer lugar está la ausencia
de sintomatología que oriente a trombosis venosa profunda distal o proximal
(TVP) o tromboembolia pulmonar (TEP), y en segundo están los signos y sínto-
mas de sangrado.
Una de las ventajas de las heparinas de bajo peso molecular (HBPM) en la
tromboprofilaxis es que no requieren un monitoreo de rutina, como se requiere
con la heparina fraccionada, excepto para los pacientes obesos y aquellos con in-
suficiencia renal.4 En caso de requerirlo el parámetro de monitoreo son los nive-
les de anti--Xa, cuyo rango recomendado cuando se usa enoxaparina para profila-
xis es de 0.2 a 0.6 UI/mL.5
Otra ventaja de este grupo de fármacos es que el perfil de seguridad en su uso
a largo plazo posterior a la campaña mercadológica ha sido conocido más profun-
damente que los de dabigatrán y rivaroxabán, de manera que los lineamientos de
el American College of Chest Physicians (ACCP) 2012 colocan a las HBPM por
encima de los tratamientos orales en los pacientes ortopédicos.6
Al emplearse en pacientes con un riesgo mayor de 1% de presentar tromboci-
topenia inducida por heparinas (HIT, por sus siglas en inglés) se recomienda
agregar un conteo de plaquetas cada dos o tres días, del cuarto al decimocuarto
días o cuando finalice la terapia, lo que suceda primero, de acuerdo con las guías
de práctica clínica del ACCP.7
Si se presenta HIT resulta preferible esperar a que la plaquetas se normalicen
para iniciar con antagonistas de la vitamina K en dosis bajas (p. ej., warfarina en
dosis de 5 mg).7
En cuanto a los antagonistas de la vitamina K o cumarínicos, como la warfari-
na y el acenocumarol, no se debe olvidar que su acción máxima se observa entre
Farmacovigilancia en tromboprofilaxis 3
POBLACIONES ESPECIALES
INVOLUCRANDO AL PACIENTE
Uno de los temas que el Centro de Monitoreo de Uppsala (UMC) potenció recien-
temente dentro de la farmacovigilancia es el llamado “empoderamiento del pa-
ciente”,2 es decir, la colaboración activa del paciente en su tratamiento e incluso
en la toma de decisiones del mismo, mediante información y educación.
Se sabe que el apego a la profilaxis tromboembólica con enoxaparina es de
94% y que 45% de los pacientes que fallan en su tratamiento lo hacen por rehusar-
se a aplicárselo.20
Farmacovigilancia en tromboprofilaxis 7
CONCLUSIONES
REFERENCIAS
E Editorial Alfil. Fotocopiar sin autorización es un delito.
INTRODUCCIÓN
ción de TEV, puede esperar alrededor de 150 casos de TEV adquirido en el hospi-
tal. Aproximadamente de 50 a 75 de estos casos son potencialmente prevenibles
con la profilaxis adecuada.3
Si la trombosis es una prioridad clave de seguridad para los hospitales, ¿por
qué ha permanecido subutilizada, con tasas de cumplimiento inadecuado?4--7 Al
ser entrevistados8 los expertos están de acuerdo en que el enfoque se centra gene-
ralmente en los síntomas en lugar de terapias preventivas. El Dr. Gary Lyman,
Co--Director del Comité para las Guías Clínicas de Tromboembolismo Venoso
de la Sociedad Americana de Oncología, también reconoció que el bajo cumpli-
miento se puede atribuir en parte a “un periodo de transición entre la publicación
de las guías y cuando impactan la práctica clínica”.
9
10 Tromboprofilaxis (Capítulo 2)
Además, comenta que “Uno de los grandes determinantes del éxito del protocolo
de TEV será si el equipo puede hacer que su aplicación sea fácil y automática para
que se evalúen todos los pacientes que acuden al hospital en cualquier momento
y desde cualquier lugar”.
Demostrando la necesidad de una evaluación más sistemática de los riesgos
de TEV en pacientes que están siendo ingresados en los hospitales, en 2009 el
National Quality Forum (NQF) publicó en EUA una actualización de su informe
Prácticas de Seguridad para Mejorar la Salud,9 que incluye 34 prácticas que han
demostrado ser eficaces en la reducción de la ocurrencia de eventos adversos.
Dos de estas prácticas están relacionadas con la prevención y el tratamiento de
la TEV:
Para diseñar la mejor solución, un grupo de expertos y líderes de opinión fue con-
vocado18 para desarrollar el contenido de la herramienta electrónica y ser aseso-
res para el equipo de desarrollo. El grupo asesor fue integrado por expertos en las
especialidades de medicina de urgencia, medicina interna, cirugía, hematología
y tromboprofilaxis.
El objetivo del proyecto para el grupo de expertos fue mejorar la tasa de eva-
luación del riesgo de TEV en México, proporcionando información oportuna y
estratégica, así como orientación sobre las prácticas eficaces, políticas y normas,
lo que aumentaría el número de pacientes que reciben profilaxis y tratamiento
para la ETV. Para llegar a esta meta el grupo de expertos desarrolló protocolos
y algoritmos que pueden ser implementados y replicados en todos los hospitales
en el proyecto piloto. Los objetivos fueron delineados para:
PROGRAMA DE TROMBOASESORR
Con el fin de facilitar y fomentar el uso del documento y los algoritmos que el
grupo de expertos desarrolló para la evaluación, el tratamiento y el seguimiento
de los pacientes con riesgo de ETV, un equipo de ingenieros de informática y ex-
pertos en calidad y seguridad de la salud desarrolló el TromboAsesorR. Es una
herramienta de fácil acceso y aplicación, con seguridad encriptada que está basa-
da en la web y que se puede acceder con un ordenador o dispositivo tablet PC.
Para registrar un paciente el personal clínico completa una sección demográfica
que les permitirá regresar al registro, según sea necesario.
El TromboAsesorR tiene una serie de secciones que fueron diseñadas en base
a algoritmos que cubren áreas tales como datos demográficos del paciente (figura
2--1), información de la CIE--10 con diagnósticos relacionados, factores de riesgo
asociados y preexistentes, situaciones asociadas a la hospitalización y comorbili-
dades que incrementan el riesgo (figura 2--2). Con esta información el TromboA-
sesorR ofrece al personal clínico las diferentes combinaciones de tratamiento,
basado en las mejores prácticas para el paciente con riesgo de ETV o con ETV,
TromboAsesor Rcomo herramienta facilitadora de la tromboprofilaxis 13
Embarazo V Puerperio V
Trombosis venosa profunda previa V Obesidad IMC > 30 V
Tras 1er episodio espontáneo V
b Situaciones asociadas a la hospitalización
E Editorial Alfil. Fotocopiar sin autorización es un delito.
Insuficiencia cardiaca
Clase III de la New York Heart Association (NYHA) V
Clase IV de la New York Heart Association (NYHA) V
Dosis de medicamento
Eventos adversos
Hemorragia V Trombocitopenia V
Reacción alérgica V Reacción local V
Elevación de enzimas V Otros V
hepáticas
Duplicado
b Dosis recomendada de medicamento
Actualizar Dosis del medicamento
Actualizar y salir Alto riesgo
Enoxaparina
V Pacientes con afecciones médicas no quirúrgicas y qui-
rúrgicas 40 mg (4000 UI) 1 vez al día, iniciando desde
su internamiento. Subcutánea profunda por 6 a 14 días
V Tratamiento de trombosis venosa profunda con o sin
embolia pulmonar, 1.5 mg/kg en 1 sola inyección cada
24 horas o 1 mg/kg en 2 inyecciones diarias. Subcutá-
nea profunda por 10 días promedio
Nadroparina
V Nadroparina 0.01 UI/kg/24 horas
Dalteparina
V Dalteparina 120 UI/kg/24 horas
V Dalteparina 5 000 unidades subcutáneas diariamente
Tinzaparina 120 UI/24 horas
V Tinzaparina 4 500 UI (dosis fija) subcutánea diariamente
(debe evitarse en pacientes mayores de 70 años de
edad con insuficiencia renal)
Fondaparinux 2.5 mg/24 horas
V Fondaparinux 2.5 mg subcutáneos diariamente
Fondaparinux (está contraindicado en pacientes con
depuración de creatinina menor de 30 mL/min y debe
ser utilizado con precaución en pacientes con insufi-
ciencia renal moderada/depuración de creatinina 30 a
50 min/peso menor de 50 kg o edad > 75 años)
E Editorial Alfil. Fotocopiar sin autorización es un delito.
Eventos adversos
Cancelar
Hemorragia V Trombocitopenia V
Look Reacción alérgica V Reacción local V
Elevación de enzimas V Otros V
hepáticas
Duplicado
Actualizar Contraindicaciones
Las contraindicaciones absolutas y relativas fueron de la IPP
Actualizar y salir correspondiente a cada producto; éstas fueron aprobadas
por las autoridades sanitarias y son respaldadas por el
laboratorio de investigación de cada medicamento
Contraindicaciones absolutas para la terapia fibrinolítica:
Hemorragia interna presente
Neoplasia del SNC, malformaciones AV o aneurisma
Procedimiento en el SNC o ACV en últimos dos meses
Hipertensión severa no controlada (más de 200/130 o
complicada por enfermedad renovascular o encefalopatía)
Diátesis hemorrágica conocida
Infarto del miocardio por disección aórtica
Alergia a estreptocinasa o anistreplasa, si estreptocinasa
o anistreplasa se utilizará
Por favor, considere estas relativas contraindicaciones a la
terapia trombótica
S Edad mayor de 75 años
S Enfermedad cerebrovascular
S Embarazo o posparto temprano
S Cirugía mayor reciente (menor de 10 días), punción de
vasos sanguíneos no presionable o biopsia de órganos
S Traumatismo reciente, incluyendo RCP de más de 2 min
de duración
S Reciente hemorragia gastrointestinal o úlcera activa
(menos de 10 días)
S Pericarditis aguda o endocarditis bacteriana subaguda
S Tromboflebitis séptica
S Alta probabilidad de trombo intracardiaco izquierdo
(p. ej., estenosis mitral con fibrilación auricular)
S Defectos de la coagulación conocidos, incluyendo
terapia anticoagulante
S Disfunción hepática significante
S Condiciones asociadas con riesgo de sangrado, tales
como la retinopatía diabética
S Menstruación
S Cáncer terminal u otra enfermedad en etapa terminal
S Infección estreptocócica reciente, si la estreptocinasa
o anistreplasa se utilizará
CONCLUSIÓN
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E Editorial Alfil. Fotocopiar sin autorización es un delito.
INTRODUCCIÓN
21
22 Tromboprofilaxis (Capítulo 3)
ANTECEDENTES
4 159 dólares y para EP fue de 5 567 dólares. Otro estudio demostró que el costo
médico anualizado de pacientes durante un evento de TVP o EP o después de él
fue de 17 512 y 18 901 dólares, respectivamente.13
En 2007 se publicó un estudio en el cual se especifican los gastos económicos
por la utilización y costos médicos directos por TVP y EP, así como también la
determinación de la tasa de readmisión por TVP y EP. El costo anual por cuidados
de la salud para ETV varía de 7 594 a 16 644 dólares, dependiendo del tipo de
evento y de si el diagnóstico fue primario o secundario. La tasa de readmisión
hospitalaria por TVP o EP dentro del primer año fue de 5.3 y de 14.3% en caso
de diagnóstico primario y secundario, respectivamente. La recurrencia de TVP
se asoció a un incremento mayor de 21% en costos, en comparación con un even-
to inicial, pero no hubo diferencia en gastos por la recurrencia de EP, en compara-
ción con el evento inicial.14
24 Tromboprofilaxis (Capítulo 3)
TROMBOPROFILAXIS BASADA
EN EVIDENCIAS CIENTÍFICAS
La HBPM posee una alta biodisponibilidad (81 a 100%) y una vida media más
prolongada (1.7 a 7 h), y puede ser administrada una vez al día.28 La HBPM se
elimina por vía renal, por lo que existe riesgo de acumulación en los pacientes
con insuficiencia renal. Los pacientes con insuficiencia renal severa (depuración
de creatinina de 10 a 30 mL/min) pueden recibir tromboprofilaxis con enoxapari-
na en dosis de 30 mg/día. Los pacientes con insuficiencia renal de leve a modera-
da no requieren un ajuste de la dosis de enoxaparina.7
El fondaparinux tiene una disponibilidad de 100% y una vida media de 17 a
20 h, lo cual permite una administración diaria sin necesidad de ajustar la dosis.
El fondaparinux se elimina por vía renal y debe ser usado con precaución ante
la presencia de insuficiencia renal moderada (depuración de creatinina de 30 a
50 mL/min); está contraindicado en insuficiencia renal severa (depuración de
creatinina de 10 a 30 mL/min).28
En la mayoría de los estudios clínicos de pacientes de origen médico la dura-
ción de la tromboprofilaxis intrahospitalaria va de 6 a 14 días, por lo que se consi-
dera que representa la duración estándar.22--23
CONCLUSIONES
Las GPC son herramientas que permiten que los profesionales de la salud tomen
decisiones clínicas sustentadas en la mejor evidencia científica disponible. La
tromboprofilaxis se ha convertido en un indicador de calidad en los servicios de
salud, siendo la ETV una entidad frecuente y altamente prevenible. Sin embargo,
las GPC continúan siendo subutilizadas en la práctica médica, por lo que se re-
quieren la difusión y la implementación de las guías enfocadas en la tromboprofi-
laxis a nivel hospitalario, con la finalidad de disminuir la incidencia de la ETV
E Editorial Alfil. Fotocopiar sin autorización es un delito.
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E Editorial Alfil. Fotocopiar sin autorización es un delito.
30 Tromboprofilaxis (Capítulo 3)
4
Tromboprofilaxis como indicador de
seguridad en la atención de niños
críticamente enfermos
Martha Patricia Márquez Aguirre, Alfredo Bobadilla Aguirre,
Patricia Zárate Castañón, María de Lourdes González Pedroza,
J. Alfredo Hernández S.
nia, EUA, la obligación legal de informar a los pacientes sobre eventos adversos
y la Joint Commission publicó los primeros objetivos nacionales en relación con
la seguridad del paciente. Por su parte, dos años después la Organización Mundial
de la Salud (OMS) creó la World Alliance of Patient Safety, una colaboración in-
ternacional que tiene el propósito de coordinar, difundir y acelerar mejoras en
materia de seguridad del paciente a nivel mundial.
Se entiende como “seguridad” para el paciente “a la ausencia o disminución
al nivel mínimo aceptado del riesgo de sufrir un daño innecesario durante el pro-
ceso de la atención hospitalaria”.1 Representa el conjunto de elementos estructu-
rales, procesos, instrumentos y metodologías encaminados a minimizar el riesgo
de eventos adversos en el proceso de atención a la salud.2
31
32 Tromboprofilaxis (Capítulo 4)
Epidemiología
E Editorial Alfil. Fotocopiar sin autorización es un delito.
FACTORES DE RIESGO
Entre los factores de riesgo más importantes para presentar eventos tromboem-
bólicos se incluyen:
Entre las complicaciones más frecuentes que se presentan en los pacientes que
reciben nutrición parenteral están la trombosis relacionada con el catéter y la sep-
sis.16
La incidencia de TEV en niños que reciben nutrición parenteral de larga evolu-
E Editorial Alfil. Fotocopiar sin autorización es un delito.
ción varía de acuerdo con los reportes encontrados y oscila de 1 a 75%, ya que
en algunos estudios el diagnóstico se realizó con base en datos clínicos y en otros
con estudios de ventilación--perfusión, ecocardiografía o venografía. En dos es-
tudios se ha reportado el uso de antagonistas de la vitamina K para la profilaxis
primaria en este tipo de pacientes.8,17 Constituyen un factor relacionado con la
presencia de trombosis vascular: lesión endotelial en el momento de la inserción
del catéter, oclusión de los vasos sanguíneos, bajos flujos, turbulencias en el flu-
jo, estasis sanguínea y características propias del paciente, así como del mismo
catéter.
Diversos estudios han mostrado que el uso de heparina en los catéteres para
infundir nutrición parenteral disminuye el riesgo de trombosis y la extensión del
trombo, y ayuda a prevenir infecciones, ya que la presencia del coágulo favorece
la colonización bacteriana.18,19
36 Tromboprofilaxis (Capítulo 4)
Fibrilación auricular
Fístula de Blalock--Taussig
La fístula o derivación de Blalock--Taussig (FBT) es el procedimiento paliativo
de elección para mejorar el flujo hacia la arteria pulmonar.24 Se reporta una inci-
dencia de obstrucción de 1 a 17%, encontrando como factores de riesgo el tamaño
de la fístula, la edad del paciente y los niveles elevados de hemoglobina. No exis-
ten suficientes ensayos clínicos controlados publicados hasta el momento acerca
del uso de terapia antitrombótica en pacientes con FBT.
Las guías de práctica clínica del American College Chest Physicians reco-
miendan en los niños con FBT la administración perioperatoria de heparina no
fraccionada.17
Cirugía de Fontan
En el procedimiento de Fontan se separa la circulación sistémica de la pulmonar
en los pacientes portadores de ventrículo único. Con esta técnica se logra redirigir
todo el retorno venoso sistémico al lecho pulmonar. Los beneficios de la cirugía
de Fontan incluyen mejor oxigenación sistémica, un volumen de carga reducido
del ventrículo sistémico y disminución del riesgo de embolia paradójica a través
de las derivaciones de derecha a izquierda.24
El tromboembolismo es una de las principales causas de morbilidad y mortali-
dad precoz y tardía en el grupo de pacientes a quienes se les realizó una cirugía
tipo Fontan. La incidencia reportada varía entre 3 y 19%. El TEV puede ocurrir
en cualquier momento después de la cirugía, pero a menudo se presenta meses
o años más tarde.17
No existe consenso en la práctica clínica sobre esquemas de tratamiento anti-
trombótico para reducir estos eventos. En los niños se recomienda después de la
cirugía de Fontan el uso de heparina no fraccionada o de ácido acetilsalicílico,
seguida de antagonistas de vitamina K.17
Válvulas protésicas
Los eventos tromboembólicos en pacientes con valvulopatía cardiaca son a me-
nudo devastadores. La terapia antitrombótica puede reducir el riesgo de trombo-
embolismo, aunque el riesgo de sangrado es elevado.27
Tromboprofilaxis como indicador de seguridad en la atención... 39
Cáncer
El cáncer se presenta en aproximadamente 2.3 casos por cada 1 000 niños meno-
res de 19 años de edad. En México representa una de las causas más frecuentes
de muerte en la edad pediátrica. La sobrevida ha mejorado significativamente en
los últimos 10 años como resultado de los avances en el tratamiento integral de
estos pacientes. Sin embargo, se pueden presentar secuelas graves, incluyendo
las complicaciones tromboembólicas.30
La mayoría de los tumores frecuentemente asociados a eventos trombóticos
son los adenocarcinomas productores de mucina y el cáncer de páncreas, del sis-
E Editorial Alfil. Fotocopiar sin autorización es un delito.
tema nervioso central, de ovario y de colon. Más de 50% de los pacientes con cán-
cer y 90% de los que tienen cáncer metastásico pueden desarrollar complicacio-
nes trombóticas. El desarrollo de trombosis en niños con cáncer obedece a
diversos factores de riesgo, entre los que sobresalen la presencia de catéter veno-
so central, el empleo de agentes quimioterapéuticos —como la L--asparagina-
sa—, la inmovilización prolongada, los procedimientos quirúrgicos y la trombo-
filia inherente. La presencia de TEV en pacientes con cáncer se asocia a una
mayor morbimortalidad.31
Son pocos los estudios que evalúan la tromboprofilaxis en los pacientes con
cáncer. El estudio REVIVE, en el que 30% de los pacientes estudiados eran porta-
dores de patología oncológica, compara el uso de heparina de bajo peso molecular
vs. heparina no fraccionada, mostrando un cierto beneficio con el uso de heparina
de bajo peso molecular, aunque se observaron algunas limitaciones metodológi-
40 Tromboprofilaxis (Capítulo 4)
Quemaduras extensas
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44 Tromboprofilaxis (Capítulo 4)
5
Tromboprofilaxis como modelo de
calidad y seguridad en medicina
Raúl Izaguirre Ávila
ya que la ETV, en especial su forma más grave y con frecuencia mortal, y la trom-
boembolia pulmonar son complicaciones potencialmente evitables. Si no se em-
plea tromboprofilaxis la incidencia de trombosis venosa profunda, demostrada
por métodos objetivos de diagnóstico, varía de 10 a 40% entre los pacientes hos-
pitalizados por cirugía o enfermedades médicas. Esta cifra es mayor en el caso
de la cirugía ortopédica, en la que la complicación tromboembólica se presenta
hasta en 60% de los pacientes cuando no se emplean medidas de prevención. En
los últimos 30 años se ha acumulado una considerable cantidad de información
científica que ha demostrado irrefutablemente la utilidad de la profilaxis para evi-
tar la mortalidad a corto y mediano plazos, así como la morbilidad a largo plazo.
Los datos muestran que antes de 1980 ocurrían entre 15 y 30% de eventos trom-
45
46 Tromboprofilaxis (Capítulo 5)
cia de los nuevos anticoagulantes orales, de las HBPM, del fondaparinux, de los
AVK y de la propia AspirinaR dificultan la percepción del médico sobre los ries-
gos y la decisión del medicamento a emplear. El escenario ideal debería contar
con una escala estandarizada del riesgo de hemorragia que evite definiciones y
resultados diferentes en cada estudio, la cual debería ser objetiva y tener mayor
sensibilidad para detectar la hemorragia mayor y catalogar la hemorragia con
fines de prevención, tratamiento y pronóstico. Los diferentes criterios empleados
en los estudios de tromboprofilaxis no han mostrado una sensibilidad suficiente
para detectar diferencias clínicas importantes en términos de hemorragia y del
riesgo de que ocurra. En el caso de la cirugía ortopédica la hemorragia en el sitio
de la herida quirúrgica incrementa la posibilidad de reoperaciones, infección se-
cundaria, consecuencia de la anemia aguda, riesgos por transfusión, retraso en la
cicatrización y otros inconvenientes que pueden aumentar los gastos de la aten-
ción posquirúrgica.8
En la actualidad existen numerosos medicamentos que se pueden emplear en
la tromboprofilaxis farmacológica durante la cirugía ortopédica mayor. Las ac-
tuales guías de la ACCP (2012) recomiendan en los pacientes sometidos a artro-
plastia de cadera o rodilla la administración de tromboprofilaxis durante al menos
10 a 14 días con HBPM, fondaparinux, dosis bajas de HNF, dosis ajustadas de
AVK o algunos de los nuevos anticoagulantes orales —apixabán, dabigatrán o
rivaroxabán. A diferencia de la octava edición de 2008,9 ahora se agrega la Aspi-
rinaR, aunque no hubo acuerdo entre los miembros del consenso para haberla in-
cluido. En el caso de cirugía de fractura de cadera se recomiendan los medica-
mentos antes mencionados, excepto apixabán, dabigatrán y rivaroxabán. En esta
reciente edición la finalidad es evitar las complicaciones hemorrágicas, por lo
que se recomienda que la tromboprofilaxis con HBPM se inicie 12 h o más antes
de la cirugía o bien 12 h o más después de la cirugía, en lugar de iniciarla dentro
de las cuatro horas perioperatorias (recomendación grado IB). También se sugie-
re extender la tromboprofilaxis hasta un periodo de 30 días después de la cirugía
(grado IIB). En los pacientes con alto riesgo de hemorragia se sugiere dar com-
presión mecánica intermitente durante al menos 18 h a un día, o no administrar
profilaxis farmacológica para evitar el riesgo de hemorragia. En el caso del pa-
ciente que no desea recibir pinchazos o que es poco cooperador con esta vía de
aplicación se recomienda usar apixabán o dabigatrán. El rivaroxabán y las dosis
ajustadas de AVK son medidas alternativas que sólo se aplicarían en los casos en
que no se cuente con los medicamentos arriba mencionados.
La más reciente edición de las guías de ACCP hace un riguroso análisis com-
parativo de las diferentes modalidades de tromboprofilaxis. Algunas de sus con-
clusiones incluyen el incremento sustancial de las complicaciones hemorrágicas
cuando se emplea AVK, en comparación con las HBPM. Se enfatiza en el escaso
nivel de evidencia para comparar la AspirinaR con la HBPM y se concluye que
Tromboprofilaxis como modelo de calidad y seguridad en medicina 51
ésta tiene una eficacia relativa superior. También se concluye que el fondaparinux
parece no reducir de manera importante los eventos tromboembólicos venosos
en comparación con las HBPM y que sí puede incrementar los eventos de hemo-
rragia mayor hasta en 9 casos por cada 1 000. Al comparar el rivaroxabán con las
HBPM se encuentra un incremento de hemorragia mayor y de hemorragia que
requiere reoperación en el grupo de rivaroxabán. En los estudios RECORD 1 y
2 no se incluyó la hemorragia en el sitio quirúrgico, aparte de la que requería reo-
peración, y el descenso de la hemoglobina se calculó con el valor posoperatorio
y no con el valor basal antes de la cirugía; se estima que por cada 1 000 pacientes
tratados con rivaroxabán habrá cinco episodios menos de trombosis venosa sinto-
mática que con HBPM y se presentarán nueve eventos más de hemorragia mayor.
La conclusión de este análisis es que, debido a la posibilidad de que se incremen-
ten los eventos hemorrágicos mayores con rivaroxabán, se prefiere la inyección
de las HBPM a la administración de este inhibidor directo del factor Xa. Al com-
parar los estudios de dabigatrán con HBPM el mismo consenso concluyó que este
nuevo anticoagulante oral es similar a la HBPM en términos de eficacia y de se-
guridad, debido a que la tendencia de complicaciones hemorrágicas es la misma
con los dos anticoagulantes.
Ese análisis toma en cuenta otras consideraciones. Cuando se revisan las cau-
sas por las que los pacientes no cumplen la tromboprofilaxis durante el tiempo
recomendado después de la cirugía ortopédica es posible observar incapacidad
del paciente para aplicarse por sí mismo las inyecciones, dificultad para que los
miembros de la familia se organicen en el cumplimiento del tratamiento o la nece-
sidad de una enfermera que visite diariamente al paciente para aplicar la trombo-
profilaxis. Estas dificultades limitan el apego al tratamiento, que puede ser hasta
de 37%, lo cual significa que un considerable número de pacientes quedan des-
protegidos frente al riesgo de complicaciones tromboembólicas. El tratamiento
con los nuevos ACO facilita el apego al tratamiento, a lo que se suma el hecho
E Editorial Alfil. Fotocopiar sin autorización es un delito.
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Tromboprofilaxis como modelo de calidad y seguridad en medicina 53
55
56 Tromboprofilaxis (Capítulo 6)
sentación de los alimentos y los tiempos de espera para recibir atención serán
también motivo de valoraciones buenas o malas, dependiendo del caso.
En lo referente al acto médico, en el cuadro 6--1 se resumen las causas más fre-
cuentes de queja por parte de los usuarios de los servicios de salud. En las líneas
anteriores se puede apreciar que el usuario se enfoca más en los resultados de la
atención médica que en los medios usados para protegerlo de complicaciones.
La mayoría de los estudios que evalúan la satisfacción del paciente respecto
del acto médico se refieren a los resultados obtenidos y los ahorros en los costos
de atención; son muy pocos en los que se hace una valuación de medidas profilác-
ticas que disminuyan los efectos secundarios, y no existe uno que hable de la pre-
vención de complicaciones, como se hace con la tromboprofilaxis (cuadro 6--2).
Se puede observar que los estudios sobre la profilaxis de una determinada sin-
tomatología y la satisfacción de los usuarios son comunes, así como los que mejo-
ran los resultados, de tal suerte que es muy difícil medir la satisfacción del usuario
de los servicios de salud sobre eventos no tangibles, como la posibilidad de sufrir
una complicación tan devastadora como la enfermedad tromboembólica venosa
(ETV) y su complicación más temida: la tromboembolia pulmonar. Paradójica-
mente, las repercusiones legales de no hacer profilaxis pueden ser frecuentes,
considerando la omisión como una negligencia por parte del prestador de servi-
cios médicos. Consideremos, pues, el acto médico ortopédico. El paciente que
es tratado con cirugía para la colocación de una prótesis de rodilla o cadera tiene
una expectativa dirigida al resultado funcional de la cirugía, así como a la mejoría
del cuadro doloroso.
Tromboprofilaxis en ortopedia y calidad de la atención 57
Cuadro 6--2.
Procedimiento Proceso No. de Resultados
aplicado pacientes
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7
Tromboprofilaxis como modelo de
calidad y seguridad en obstetricia
Antonio Guerrero Hernández, Carlos Gabriel Briones Vega,
Jesús Ojino Sosa García, Manuel Antonio Díaz de León Ponce,
Jesús Carlos Briones Garduño
INTRODUCCIÓN
En México Sigler y col., del Hospital General del Centro Médico Nacional,
del Instituto Mexicano del Seguro Social, reportaron 15% de embolia pulmonar
en 1 685 estudios de autopsias, la cual fue causa directa de la muerte en 28% de
los casos e indirecta en 62%. En otro estudio de 1 032 autopsias, Sandoval y col.,
del Instituto Nacional de Cardiología “Ignacio Chávez”, registraron una inciden-
cia de 22%, con lo que representó la tercera causa de mortalidad. Estas alarmantes
cifras de pacientes hospitalizados con ETV resaltan cuando se encuentra una im-
portante brecha entre las guías nacionales e internacionales y el apropiado uso de
la profilaxis de esta enfermedad.
El estudio multinacional transversal ENDORSE mostró que la profilaxis de
la ETV en pacientes médicos o quirúrgicos es menor a la recomendada en las
61
62 Tromboprofilaxis (Capítulo 7)
guías del Colegio Americano de Médicos del Tórax (ACCP) de 2004, con mayor
profilaxis en el grupo de pacientes quirúrgicos (58.5%), en comparación con el
grupo de pacientes médicos (39.5%).1,2 A pesar de la controversia con respecto
a la relación entre la TVP asintomática y la TEP, existen estudios que sugieren
que la TVP casi siempre precede al TEP y que éste suele presentarse en el contex-
to de una TVP asintomática en la mayoría de las ocasiones. En 82% de los pacien-
tes con TEP aguda ratificada por angiografía se presenta al mismo tiempo TVP
demostrada por flebografía. En 21% de los pacientes con diagnóstico clínico de
TVP se encuentran informes de gammagrafía pulmonar con una alta posibilidad
de TEP aguda.3--5 En términos de prevención de una enfermedad, se habla de tres
niveles entendidos de la siguiente forma:
S Prevención primaria: es el conjunto de acciones que se enfocan en evitar
la presentación de una enfermedad; esto es posible cuando se conocen los
factores causales y éstos pueden ser manipulados.
S Prevención secundaria de una enfermedad: tiene el objetivo de interve-
nir cuando se presente la enfermedad en su etapa clínica; requiere el conoci-
miento de los mecanismos fisiopatológicos de la enfermedad, la disponibi-
lidad de métodos de diagnóstico temprano y de métodos de intervención,
y la corrección clínica de estos mecanismos.
S Prevención terciaria: se enfoca en el proceso de rehabilitación de las se-
cuelas producidas por una enfermedad, que tiene como objetivo mejorar la
calidad de vida.6
La calidad de la atención se debe medir por sus resultados. Los resultados desea-
bles se logran mejorando el proceso de atención médica, asignando recursos eco-
nómicos bajo una política de salud que atienda las demandas de la población.
La atención médica es un proceso que va del diagnóstico de una patología a
su tratamiento, así como la identificación de factores de riesgo para su posible
prevención, bajo un código de ética aprendido desde la escuela de medicina.
El quehacer del médico requiere información actualizada y el desarrollo de ha-
bilidades, destrezas y responsabilidades dentro de una atmósfera que mejore su
autoestima, logrando cambios en sus pacientes, lo cual se expresa mediante ma-
nifestaciones de afecto de los mismos, y obteniendo una remuneración económi-
ca digna, que represente la compensación a su esfuerzo y dedicación.7
ESTUDIOS DE DIAGNÓSTICO
S Esta prueba tiene una sensibilidad de hasta 98% en pacientes que cursan con
TVP, con un punto de corte mayor de 500 mg/L, por lo que un valor menor
descarta la presencia de un evento agudo de TVP.
S Su especificidad es baja; dependiendo del estudio puede ir de 40 a 85%, de-
bido a que su elevación se puede asociar a otras enfermedades, como el cán-
cer, los procesos infecciosos, la inflamación, la necrosis y otras alteraciones
presentes en los pacientes que ingresan a la unidad de terapia intensiva.
S Nivel 1+ NICE.
Recomendación:
Ultrasonido Doppler
Evidencia:
Recomendación:
Ecocardiograma transtorácico
Evidencia:
S Es un procedimiento no invasivo, de alta disponibilidad, rápido, sensible y
confiable.
S Este método reconoce las alteraciones en cuanto a la función ventricular de-
recha durante un evento de TEP.
S Su aplicación en la enfermedad tromboembólica está descrita a este nivel
y no como escrutinio en pacientes con factores de riesgo para un ETV en
la UCI.
S No hay evidencia sobre esta utilidad.
S Nivel 2++ NICE.
Recomendación:
S La evidencia disponible no permite recomendar este ecocardiograma como
método de escrutinio en pacientes con factores de riesgo para un ETV en
la UCI.
S Nivel D--BPP NICE.
Embarazo y puerperio
Evidencia:
Recomendación:
S Edad (la incidencia anual de ETV incrementa con cada década a partir de
los 40 años de edad).
S Embarazo y puerperio.
S Malignidad oculta o activa.
S ETV previa.
S Venas varicosas.
S Obesidad marcada.
S Inmovilidad severa prolongada (reposo en cama prolongado, inmoviliza-
ción con yeso u ortesis y limitación del movimiento como resultado de via-
jes prolongados, con la subsiguiente estasis venosa).
Tromboprofilaxis como modelo de calidad y seguridad en obstetricia 67
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68 Tromboprofilaxis (Capítulo 7)
8
Tromboprofilaxis como modelo de
calidad y seguridad en la unidad
de terapia intensiva
Carlos Alberto Peña Pérez
Durante las últimas tres décadas los cuidados intensivos han madurado hasta con-
vertirse en un campo independiente dentro de la medicina. Actualmente los esta-
dos patológicos selectos son considerados pertenecientes al expertise del intensi-
vista. El choque séptico, la lesión pulmonar aguda y los cuidados posquirúrgicos
en los pacientes de muy alto riesgo se centran en el dominio de manejo del intensi-
vista. Sin embargo, a pesar de los avances en los cuidados intensivos, el campo
sigue siendo relativamente joven.
De manera cotidiana y en todo momento de nuestro ejercicio profesional de-
ben surgir las siguientes preguntas:
1. En el campo de la medicina, ¿dónde nos encontramos con respecto a la pres-
tación de asistencia sanitaria?
2. ¿Es correcta nuestra práctica clínica dentro del marco de la seguridad, la ca-
E Editorial Alfil. Fotocopiar sin autorización es un delito.
69
70 Tromboprofilaxis (Capítulo 8)
aspectos de morbilidad. Por supuesto, valor también plantea la cuestión del valor
¿de quién? y ¿para quién?
Cualquier discusión sobre el valor, como cuestión de política en calidad, se
basa preferentemente en una apreciación basada en datos de la situación actual.
Esto es particularmente cierto en la medicina crítica. En efecto, es en la medicina
de cuidados intensivos en la que varios aspectos importantes se cruzan y que, a
su vez, hacen preguntas acerca del valor particularmente agudo. En primer lugar,
los cuidados intensivos con frecuencia se administran a los pacientes con alto
riesgo de muerte; segundo, los recursos en la unidad de cuidados intensivos
(UCI) suelen ser escasos; y tercero, la atención en la unidad de terapia intensiva
tiene un alto costo económico.
Debido a estos factores, la investigación de resultados o desenlaces clínicos
es una tarea clave en la medicina de cuidados críticos. En términos generales, la
investigación de los desenlaces describe una forma de cuidados de la salud; los
servicios de investigación abordan el resultado final de la prestación de la aten-
ción médica. En otras palabras, los resultados de la investigación clínica abordan
una cuestión fundamental, ¿qué es lo que realmente cumplimos y logramos para
nuestros pacientes en la unidad de cuidados intensivos?1
La medicina crítica ha recorrido un largo camino desde sus inicios. Los dece-
nios de 1970 y 1980 trajeron una mejor comprensión de la complejidad de la po-
blación en estado crítico y la manera de mejorar el éxito de nuestras intervencio-
nes. La década de 1990, con una verdadera avalancha de estudios positivos,
anunció una nueva era de “promesas” con el desarrollo de una base de datos rica
en formas óptimas para liberar a los pacientes de la ventilación mecánica, contro-
lar el síndrome de distrés respiratorio agudo, la sepsis y los resultados obtenidos
al administrar la terapia intensiva con insulina, lo cual ha dejado como enseñanza
el creciente conocimiento de que “más no siempre es mejor”.2--12 Estos logros in-
toxicantes en el “laboratorio” de la investigación clínica se han visto opacados
por los resultados que están surgiendo de la medicina traslacional sobre los erro-
res médicos evidenciados a la cabecera de los pacientes al poner en práctica estas
estrategias de manejo.13,14 Para agravar este preocupante panorama, está la cre-
ciente elevación de los costos de atención en el sector de atención sanitaria, con
un crecimiento anual de al menos 8%, muy por encima de la inflación global.15
El conjunto de estas condiciones debe crear un poderoso ímpetu por incrementar
el escrutinio de la evidencia científica y modificar la manera de dirigir la práctica
clínica cotidiana. Se debe llevar la vasta evidencia científica de sus empolvados
estantes a la cabecera de los pacientes.16
La evidencia reciente sugiere que se está haciendo bien la tarea de conseguir
que los pacientes en estado crítico se mantengan con vida a pesar de la gravedad
del daño. Otra prueba del éxito atribuible a los cuidados otorgados en la UCI es
la proporcionada por la ampliación de la atención y el seguimiento no únicamente
Tromboprofilaxis como modelo de calidad y seguridad en la unidad... 71
a corto plazo en los hospitales, sino hasta los resultados finales a largo plazo que,
además de evaluar la supervivencia, incorporan la funcionalidad, la cognición y
la calidad de vida de los pacientes atendidos en la UCI.17--21
Pero todo esto tiene un precio. En EUA los gastos de atención en las unidades
de cuidados intensivos representan 5% del presupuesto sanitario anual.22 Este
tipo de gasto, sobre todo en la época de restricciones financieras, es un centro de
atención particularmente para los responsables de generar las políticas económi-
cas. Aunque en el pasado se tuvo el lujo de tomar decisiones clínicas sin tomar
en consideración su precio, el conocimiento actual sobre la naturaleza limitada
de los recursos financieros, junto con el mayor conocimiento de los efectos a lar-
go plazo de la enfermedad crítica, ha agudizado nuestra atención sobre la eficien-
cia de las intervenciones de atención sanitaria.
Debido a que el mejor resultado al menor costo está implícito en la definición
de eficiencia, esta búsqueda debe necesariamente incluir tanto la eficacia como
los costos de nuestras intervenciones. Es por esto que a más y más médicos clíni-
cos se les pide participar activamente en la búsqueda y aplicación de la medicina
de atención eficiente.23
El tromboembolismo venoso es una de las principales causas de morbilidad
y mortalidad en los pacientes hospitalizados. Se estima que más de 250 000 pa-
cientes son hospitalizados anualmente en EUA por enfermedad tromboembólica
venosa (TEV)24 y que la mortalidad cruda atribuida al embolismo pulmonar (EP)
a los tres meses puede ser de hasta 17.4%.25
Los pacientes críticamente enfermos se enfrentan a un mayor riesgo de TEV.
Debido a su reserva cardiopulmonar alterada la TEV puede dar lugar a un incre-
mento significativo de la morbilidad y la mortalidad de estos pacientes. El riesgo
de TEV varía en razón de la enfermedad grave per se. Por ejemplo, la incidencia
de trombosis venosa profunda (TVP) oscila entre 28 y 32% de la población gene-
ral médico--quirúrgica y de la población en la UCI, pero puede ser tan alta como
E Editorial Alfil. Fotocopiar sin autorización es un delito.
60% en los pacientes traumatizados o incluso de 70% en los pacientes con evento
cerebrovascular isquémico agudo.26--31
De 1 a 2% de los pacientes con hemiplejía sufren EP fatal.29,30 Aunque el diag-
nóstico de TEV sigue siendo difícil en general, esto resulta particularmente aún
más complejo en el paciente críticamente enfermo. Su estado clínico (intubación,
sedación, estado mental alterado) a menudo enmascara algunos de los síntomas
comunes que pueden sugerir TEV. Confirmando esto, en los pacientes crítica-
mente enfermos 95% de las TVP son clínicamente silentes.32 Destaca el hecho
de que los pacientes más gravemente enfermos no pueden tolerar un evento de
TEV debido a su reserva fisiológica ya de por sí mermada. Al mismo tiempo, mu-
chos pacientes de la UCI no son por fuerza buenos candidatos para recibir un es-
quema de anticoagulación plena y menos aún un fibrinolítico, ante el riesgo de
hemorragia o sangrado que agrave aún más su condición clínica y su desenlace.
72 Tromboprofilaxis (Capítulo 8)
zados, incluye lograr que los hospitales asuman los mayores costos del manejo
derivado de las condiciones adquiridas durante la hospitalización que se conside-
ren “razonablemente prevenibles mediante la adherencia a las guías de trombo-
profilaxis basadas en la evidencia”. Estos esfuerzos se han basado en anteriores
medidas de calidad de la CMS en el marco del paciente quirúrgico, derivado de
las auditorías del uso perioperatorio y posoperatorio de la prevención de TEV en
el marco del Programa para el Mejoramiento del Cuidado Quirúrgico. Estas nue-
vas normas son una extensión lógica de los esfuerzos del Programa de Mejora-
miento del Cuidado Quirúrgico a los pacientes atendidos en la UCI. Además, los
CMS están requiriendo que los hospitales reporten las medidas de calidad, tales
como el uso de la profilaxis de TEV después de la cirugía o en la UCI, las contra-
indicaciones para los pacientes que no recibieron tromboprofilaxis y la inciden-
cia de TEV.
El incumplimiento de estos requisitos de información da lugar a restricciones
de reembolso. Por lo tanto, la vigilancia en la prevención de la TEV en pacientes
hospitalizados es cada vez más importante debido a que los costos acumulados
asociados con el manejo de la TEV son muy elevados. Se espera que, si bien las
complicaciones directas de la TEV y la mortalidad relacionada con EP no son
suficientes para motivar un cambio en la práctica clínica actual, las restricciones
financieras motiven a las instituciones y a los proveedores de la salud a un cambio
de actitud. Una vez más, esta evolución en los sistemas financieros resalta la ne-
cesidad de que todo el personal de salud implicado en la atención de los pacientes
en estado crítico esté familiarizado con las guías y directrices más recientes para
la prevención de la TEV.33
Cuando se habla de tromboprofilaxis en la UCI predomina la presentación de
la TVP. Sin embargo, como parte de un amplio espectro de esta enfermedad —a
saber, la TEV—, la estrecha relación entre la TVP y el EP requiere un enfoque
sistemático para prevenir su ocurrencia.35
E Editorial Alfil. Fotocopiar sin autorización es un delito.
tes. Así, los clínicos a cargo del manejo de los pacientes en la UCI deben perma-
necer alertas en la búsqueda intencionada de los signos clínicos sugestivos de
TVP y EP de manera constante durante la evaluación cotidiana de este grupo de
pacientes. Sin lugar a dudas, la mejor medida para dirigir el tratamiento de la TEV
en la UCI es a través de la prevención.47
Para comprender de manera global la magnitud de esta carga asistencial hay
que entender los gastos asociados con el desarrollo de la TEV. Las estimaciones
sugieren que el costo de desarrollar TVP y EP en el paciente hospitalizado en sala
médico--quirúrgica general añade 8 000 dólares y 14 000 dólares, respectiva-
mente, a la cuenta hospitalaria. En los casos en que se desarrollan simultánea-
mente la TVP y el EP los gastos adicionales acumulativos son aún más significa-
tivos, estimados en cerca de 28 000 dólares por caso.21 Sin embargo, estos datos
deben ser tomados con reserva, dado que estas estimaciones sólo reflejan los gas-
tos de hospitalización a corto plazo y de pacientes en salas médico--quirúrgicas
generales que desarrollan TEV, los cuales no son equiparables a lo que acontece
con un paciente críticamente enfermo. El tratamiento de la TEV está asociado
con gastos potencialmente ocultos, debido al surgimiento de complicaciones re-
lacionadas con el tratamiento anticoagulante, la recurrencia del evento trombo-
embólico o las secuelas derivadas del evento tromboembólico inicial, como es
la hipertensión pulmonar. De ahí que los gastos sean una subestimación de la rea-
lidad en torno al paciente críticamente enfermo.48,49
La tríada de Virchow describe tres principios fundamentales que predisponen
a los individuos a la formación de coágulos: el daño en el endotelio vascular, una
alternancia en la constitución de la sangre, o estado de hipercoagulabilidad, y una
perturbación en el flujo sanguíneo normal, o estasis.36
Los factores de riesgo identificados que aumentan el riesgo de TEV adquirida
en el hospital son la edad mayor de 75 años, la inmovilización, la realización de
procedimientos y la presencia de ciertas condiciones mórbidas, tales como insu-
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Ingreso a la UCI
Iniciar tromboprofilaxis
¿Existe contraindicación Sí mecánica (p. ej., medias de
para el inicio de compresión, dispositivo
anticoagulación? neumático de compresión
intermitente)
No Reevaluación diaria
No
R Sí
E Iniciar la ¿Está resuelta la
E anticoagulación contraindicación
V para iniciar la
A anticoagulación?
L Evaluación del paciente
U
A
C ¿Existe contraindicación Sí Opciones:
I para emplear HNF o tromboprofilaxis mecánica,
Ó HBPM (p. ej., TIH)? inhibidores del factor Xa
N
D No q
I
A
R
I ¿Existe contraindicación
para HBPM (IFG < 30 mL/min, Sí Iniciar con HNF subcutánea
A Heparina de 5 000 UI/12 h
necesidad de procedimiento
invasivo urgente?
No
Alta
de la
UCI Reevaluar la necesidad de
Iniciar tromboprofilaxis continuar con esquema de
con HBPM
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tromboprofilaxis
* Considerar agregar tromboprofilaxis
mecánica en pacientes de muy alto riesgo
CONCLUSIONES
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82 Tromboprofilaxis (Capítulo 8)
9
Costo--efectividad de la
tromboprofilaxis
Haidée Álvarez Quintanilla
FARMACOECONOMÍA
83
84 Tromboprofilaxis (Capítulo 9)
sobre los recursos como de efectos sobre la salud.4 El efecto social neto no es más
que la suma de dichos efectos, positivos y negativos.
La justificación de este enfoque se deriva del criterio de compensación poten-
cial; si los efectos positivos son mayores que los negativos en términos absolutos,
en términos absolutos la ganancia de los que ganan es mayor que la pérdida de
los que pierden, por lo que los primeros pueden compensar a los segundos.
Como se ha comentado, una evaluación económica significa comparar dife-
rentes alternativas en términos de costos y de beneficios. Un error muy frecuente
radica en considerar que la farmacoeconomía se restringe a estimar sólo los cos-
tos, sin considerar la eficacia, la seguridad o los cambios en la calidad de vida;
sin embargo, esto es completamente erróneo. Cuando en el campo de la farmaco-
economía se habla de costos se hace alusión a los costos de oportunidad; el costo
real de adoptar una determinada actividad es el beneficio perdido por no utilizar
esos recursos en la mejor alternativa en que podían haber sido utilizados, de modo
que, en vez de pensar que los que hacen evaluaciones económicas están interesa-
dos en costos, podríamos decir que están más interesados en los beneficios o, lo
que es lo mismo, en maximizar los beneficios del uso de los escasos recursos co-
munes; esto es a lo que se le llama eficiencia.
No se trata de gastar lo menos posible sino de hacer el mejor uso de los recursos
económicos de que se dispone. Para ello es imprescindible seleccionar bien y uti-
lizar bien los medicamentos. Para una selección adecuada es necesario conside-
rar todas las consecuencias de cada elección, incluyendo costos, eficacia, seguri-
dad, etc., para lo cual puede se de gran ayuda la farmacoeconomía. Para utilizar
bien son importantes el seguimiento, el monitoreo, la buena información al usua-
rio, etc. Por tanto, la farmacoeconomía es una herramienta útil dentro del uso ra-
cional de los medicamentos. El objetivo que se pretende con las evaluaciones
económicas es ayudar a hacer elecciones más racionales.
Los médicos, los farmacéuticos, etc., desempeñan un papel clave en el uso de
los escasos recursos, constituyendo un porcentaje muy pequeño de la población,
pero por las decisiones que toman en el cuidado de los pacientes mueven un por-
Costo--efectividad de la tromboprofilaxis 85
centaje importante del producto nacional bruto. Por lo tanto, tienen la tarea de
asegurar un buen cuidado de los pacientes y a su vez la responsabilidad social del
correcto uso de los recursos sanitarios, ya que el dinero gastado en un paciente
no estará disponible para ser utilizado en otro que podría beneficiarse más.
Las evaluaciones económicas deben servir para que el médico y el farmacéuti-
co reflexionen y tomen conciencia de las consecuencias clínicas y económicas
de sus decisiones, y para que actúen con una libertad responsable, sin perder su
capacidad de decisión. Es importante compatibilizar los principios éticos de be-
neficencia y de justicia distributiva, tratando a cada paciente con los máximos re-
cursos posibles que la sociedad pueda gastar en él.3
Cada vez son más los países que, junto con las evaluaciones clínicas conven-
cionales, recomiendan o exigen evaluaciones económicas de medicamentos que
sirvan para la posterior toma de decisiones sobre su posible financiación pública
y la difusión de su empleo. La evaluación económica se debe integrar al resto de
las áreas que estudian los medicamentos desde distintos puntos de vista. El mejor
conocimiento de todas las características positivas y negativas de los mismos
contribuirá a una utilización más racional.
Se puede argumentar que no es posible hacer una evaluación económica de
cada decisión que se va a tomar; por la misma ley no se va a hacer un ensayo clíni-
co de cada decisión a tomar, pero sí se puede priorizar y hacer algunas, y adaptar-
las a cada caso y tomar las decisiones.
Aunque los economistas y los que se dedican a evaluaciones económicas co-
nocen mucho de la metodología, necesitan en muchas ocasiones la valoración del
clínico para hacer una evaluación económica real y aplicable. Además, si se quie-
re que tras la evaluación se implemente la conclusión, a nivel clínico se ha pro-
puesto como un factor positivo el hecho de que los clínicos participen en las eva-
luaciones económicas.
Drummond6 argumenta que para que se consiga implementar los resultados
E Editorial Alfil. Fotocopiar sin autorización es un delito.
se tiene que:
1. Los deseos del ser humano son ilimitados, mientras que los recursos son
limitados. Siempre se van a dar elecciones entre diferentes actividades
compitiendo por los mismos recursos limitados.
86 Tromboprofilaxis (Capítulo 9)
De estos puntos se derivan algunas implicaciones, entre las que destacan las si-
guientes:
COSTO--EFECTIVIDAD DE LA TROMBOPROFILAXIS
de dos o más opciones. Los efectos sobre los recursos o costos se valoran en unid-
ades monetarias y los efectos sobre la salud en unidades naturales de efectividad,
que dependen de lo que se está evaluando.1
En EUA la enfermedad tromboembólica ocasiona 200 000 muertes al año y
dos millones de personas desarrollan trombosis venosa profunda, generando cos-
tos comparables con los derivados de la atención del infarto del miocardio (9 643
dólares por admisión) y superando los costos por atención de eventos cerebrovas-
culares. Son varias las razones por las cuales estas cifras se siguen manteniendo
sin cambios importantes; en primer lugar se encuentra que se trata de una enfer-
medad que se desarrolla de manera silenciosa con escasas manifestaciones clíni-
cas, lo cual es evidenciado por 59 a 83% de los diagnósticos por autopsia de em-
bolismo pulmonar fatal; en segundo lugar, es importante tener en cuenta que se
trata de una enfermedad multifactorial que determina diversos grados de riesgo.7
88 Tromboprofilaxis (Capítulo 9)
+ Costo
Dilema
No adoptar
-- 0 + Efectividad
Dilema Adoptar
--
tro medio. No existe una clara evidencia acerca de cuál de las heparinas de bajo
peso molecular —la enoxaparina, la dalteparina y la nadroparina— resulta ser
más costo--efectiva en la tromboprofilaxis temprana de los pacientes médico--
quirúrgicos que se encuentran hospitalizados.
En general existe una mayor evidencia de la efectividad y seguridad del uso
de enoxaparina en la tromboprofilaxis temprana de los pacientes de cirugía gene-
ral, neurocirugía y ortopedia, en quienes fueron encontradas.
Es primordial determinar el costo total en función del costo del tratamiento.
Oliveros y col.8 señalan que en los pacientes con un riesgo basal de eventos trom-
bóticos que va de moderado a bajo las heparinas con menor costo resultan ser más
costo--efectivas, teniendo un menor peso y una disminución de la magnitud del
riesgo de eventos trombóticos.
En un análisis sistemático realizado por Brosa y col.10 se observó que el rivaro-
xabán demostró en cuatro ensayos clínicos aleatorizados su superioridad respecto
a la enoxaparina en cuanto a la reducción del riesgo de enfermedad tromboembó-
lica venosa (ETV) en pacientes sometidos a angioplastia transluminal coronaria
(ATC) y artroplastia total de rodilla (ATR). El presente análisis mostró también
que la ventaja clínica del rivaroxabán implica, además, ahorros en los costos para
el sistema sanitario, debido a la menor incidencia de complicaciones a medio pla-
zo, con una incidencia de hemorragias similar en España.
El rivaroxabán es un anticoagulante oral, inhibidor del factor Xa, que no re-
quiere monitoreo de la coagulación ni ajuste de dosis. En los ensayos clínicos ha
demostrado una eficacia superior a la de la enoxaparina en la prevención de la
ETV tras cirugía de artroplastia total de cadera o rodilla, así como un perfil de
seguridad similar, tanto en la tasa de sangrados como en el resto de los aconteci-
mientos adversos. Es interesante destacar la mayor comodidad de administración
oral del rivaroxabán respecto a la enoxaparina. Aparte de la conveniencia de la
vía de administración del rivaroxabán, este fármaco presenta otras ventajas,
E Editorial Alfil. Fotocopiar sin autorización es un delito.
ATC (a partir del segundo año de tratamiento) como en la ATR (en todos los ca-
sos) respecto a la enoxaparina.
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10
Impacto económico de la enfermedad
tromboembólica venosa pulmonar
Carlos Jerjes Sánchez
91
92 Tromboprofilaxis (Capítulo 10)
IMPACTO ECONÓMICO
Hasta 60% de los pacientes que sufren un traumatismo desarrollan TVP, en com-
paración con entre 28 y 32% de los pacientes con padecimientos generales médi-
cos o quirúrgicos. En presencia de un evento vascular cerebral la incidencia es
de 70%, mientras que la mortalidad por TEP en pacientes con hemiplejía es de
1 a 2%.5 La estancia en la unidad de cuidados intensivos (UCI) incrementa el gra-
do de dificultad para establecer una alta sospecha de ETVP. Los síntomas se pue-
den enmascarar por las alteraciones del estado de conciencia, el uso de sedantes
y la ventilación mecánica, entre otros factores. Además, es posible que hasta 95%
de las TVP cursen sin expresión clínica. Por otra parte, los pacientes críticos con
escasa reserva fisiológica tienen mala respuesta a una TEP; la mayoría son malos
candidatos a anticoagulación y tienen poca tolerabilidad a hemorragias mayores.
Por lo tanto, todos estos factores enfatizan la necesidad de establecer medidas de
prevención primaria efectivas.5
Para entender el impacto económico en una UCI es importante saber que en
la población médica general el costo hospitalario de una TVP o una TEP es de
8 000 a 14 000 dólares. En los casos de TEP y TVP asociadas los costos acumula-
tivos son aún más imprecisos, con un cálculo aproximado de 28 000 dólares por
caso. Estos datos posiblemente subestiman el verdadero impacto económico de
una ETVP. Los estimados, por una parte, sólo aplican a pacientes de médicos ge-
nerales, pero por otra sólo reflejan la estancia hospitalaria, por lo que es posible
considerar que el costo global de la atención se asocia a otros gastos potencial-
mente ocultos.5
Un grupo que es difícil de definir durante la evolución cursa con complicacio-
nes, como hemorragias mayores, recurrencia, hipertensión arterial pulmonar per-
sistente, síndrome postrombótico y estasis venosa crónica. El costo relacionado
con los reingresos por cualquiera de estas condiciones puede ser mayor que el del
E Editorial Alfil. Fotocopiar sin autorización es un delito.
evento índice: 11 862 dólares para TVP y 14 722 dólares para TEP. Sin embargo,
esto no aplica para los pacientes que desarrollan ETVP en la UCI. Los factores
que incrementan el costo incluyen mayor estancia hospitalaria, el número de en-
fermeras por paciente y el uso de alta tecnología para llevar a cabo el monitoreo.
Los pacientes ortopédicos en estado crítico con TEP implican mayores costos
(17 114 a 18 521 dólares), en comparación con los que no presentan esta compli-
cación.
Seguimiento
Durante 30, 90 y 180 días con ECG, ecocardiografía transtorácica (ETT) y gam-
magrama. En la visita final sólo se practican ECG y ETT. Se cuenta con definicio-
nes para eventos cardiovasculares adversos, TEP de alto riesgo, inestabilidad clí-
nica, tratamiento escalado, trombólisis de rescate, retrombólisis, criterios de
reperfusión —clínicos, electrocardiográficos, ecocardiográficos y gammagráfi-
cos—, mortalidad por TEP, contraindicación absoluta para TF e INR terapéutico.6
EVALUACIÓN ECONÓMICA
Análisis estadístico
El grupo que recibió heparina no fraccionada tuvo una mayor incidencia de mor-
talidad, tratamiento escalado, tiempo de hospitalización y colocación de filtros,
96 Tromboprofilaxis (Capítulo 10)
yor recurrencia, TVP y mayor remodelación ventricular. Aunque existió una ma-
yor tendencia a la mortalidad en el grupo con heparina no fraccionada, no se ob-
servó una significancia estadística. Al analizar la mortalidad hospitalaria, y du-
rante el seguimiento, se observó una notable diferencia (0.00005) en favor de la
alteplasa y la enoxaparina. La curva de supervivencia en términos de mortalidad
HBPM (n = 40)
Mortalidad 1 10 0.009
TEP recurrente 4 8 0.17
Trombólisis de rescate 4 0 0.12
Sangrado (total) 5 5 1
Hemorragia mayor 3 3 1
Hematoma inguinal 2 1 0.78
Hematoma yugular 1 2 0.78
Hemorragia menor 2 2 1
Tratamiento escalado 1 37 < 0.001
Hospitalización (días) 6.7 1.7 16.4 8.7 < 0.001
Filtro de vena cava inferior 1 17 < 0.001
I. pulmonar percutánea 2 0 0.47
HBPM: heparina de bajo peso molecular; HNF: heparina no fraccionada; I: intervención. TEP=
tromboembolia pulmonar.
98 Tromboprofilaxis (Capítulo 10)
Evaluación económica
Evaluación farmacoeconómica
de enoxaparina. Esta heparina de bajo peso molecular fue una estrategia alterna
para prolongar y simplificar la anticoagulación tradicional a través de un mejor
efecto antitrombótico (vida media más larga, efecto sostenido, mayor acción so-
bre el factor Xa, menor interacción plaquetaria, antigenicidad, efecto de rebote
y sensibilidad) y facilidad de aplicación. La ventaja de este abordaje antitrombó-
tico se refleja por una corta estancia hospitalaria y una menor recurrencia, lo que
necesariamente reduce el costo para este sistema de salud, como se demuestra en
el cuadro 10--4. El perfil antitrombótico de enoxaparina extendió el beneficio de
la TF en la fase aguda y en el seguimiento al demostrar una mejor perfusión pul-
monar.
CONCLUSIÓN
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100 Tromboprofilaxis (Capítulo 10)
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11
Abordaje y seguimiento
extrahospitalario de la tromboprofilaxis
Verónica Zárate Vega
co, como lo documentado por Amin,1 quien reportó una incidencia de 40% en los
pacientes de ortopedia después del egreso. Esto coincide con el señalamiento de
que sólo la mitad de los individuos que murieron durante una intervención quirúr-
gica debido a ETV habían recibido algún tipo de tratamiento preventivo previo
al evento.
Actualmente se cuenta con pruebas de la eficacia del manejo profiláctico en
diversas situaciones clínicas, con un empleo aún escaso entre la comunidad médi-
ca. Por lo anterior, se impone la necesidad de evaluar la aplicación del abordaje
actual de tromboprofilaxis, en particular en el área ambulatoria, describiendo las
características que deben tener los equipos médico y paramédico que supervisen
estas acciones. Otro aspecto sobresaliente es que, a pesar de que las pautas de
101
102 Tromboprofilaxis (Capítulo 11)
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E Editorial Alfil. Fotocopiar sin autorización es un delito.
106 Tromboprofilaxis (Capítulo 11)
RMS
Revista Médica Sinergia
Tromboprofilaxis en el paciente
hospitalizado
Thromboprophylaxis in the hospitalized patient
Autores:
Dr. Olivier Chaves Duarte
Dr. Diego David Durán Zúñiga
Dra. Charlyn Fabiola Fuentes Alfaro
Indexada en:
http://revistamedicasinergia.com
CUERPO EDITORIAL
DIRECTORA
Dra. Margarita Karol Malpartida Ampudia, Médico independiente, San José, Costa Rica.
EDITOR
Dr. Esteban Sánchez Gaitán, Caja costarricense del Seguro Social, Limón, Costa Rica.
CONSEJO EDITORIAL
Dr. Cesar Vallejos Pasache, Hospital III Iquitos, Loreto, Perú.
Dra. Anais López, Hospital Nacional Edgardo Rebagliati Martins, Lima, Perú.
Dra. Ingrid Ballesteros Ordoñez, Pontificia Universidad Javeriana, Bogotá, Colombia.
Dra. Mariela Burga, Hospital Nacional Edgardo Rebagliati Martins. Lima, Perú.
Dra. Patricia Santos Carlín, Ministerio de Salud (MINSA). Lima, Perú.
Dr. Raydel Pérez Castillo, Centro Provincial de Medicina Deportiva Las Tunas, Cuba.
COMITÉ CIENTÍFICO
Dr. Zulema Berrios Fuentes, Ministerio de Salud (MINSA), Lima, Perú.
Dr. Gerardo Francisco Javier Rivera Silva, Universidad de Monterrey, Nuevo León, México.
Dr. Gilberto Malpartida Toribio, Hospital de la Solidaridad, Lima, Perú.
Dra. Marcela Fernández Brenes, Caja costarricense del Seguro Social, Limón, Costa Rica
Dr. Hans Reyes Garay, Eastern Maine Medical Center, Maine, United States.
Dr. Steven Acevedo Naranjo, Saint- Luc Hospital, Quebec, Canadá.
Dr. Luis Osvaldo Farington Reyes, Hospital regional universitario Jose Maria Cabral y Baez,
Republica Dominicana.
Dra. Caridad Maria Tamayo Reus, Hospital Pediátrico Sur Antonio María
Béguez César de Santiago de Cuba, Cuba.
Dr. Luis Malpartida Toribio, Hospital Nacional Daniel Alcides Carrión, Callao, Perú.
Dra. Allison Viviana Segura Cotrino, Médico Jurídico en Prestadora de Salud, Colombia.
EQUÍPO TÉCNICO
Msc. Meylin Yamile Fernández Reyes, Universidad de Valencia, España.
Lic. Margarita Ampudia Matos, Hospital de Emergencias Grau, Lima, Perú.
Ing. Jorge Malpartida Toribio, Telefónica del Perú, Lima, Perú.
Srta. Maricielo Ampudia Gutiérrez, George Mason University, Virginia, Estados Unidos.
1
Dr. Olivier Chaves Duarte
Investigador independiente, Puntarenas, Costa Rica
https://orcid.org/0000-0003-0578-9437
2
Dr. Diego David Durán Zúñiga
Investigador independiente, San José, Costa Rica
https://orcid.org/0000-0002-6834-1915
3
Dra. Charlyn Fabiola Fuentes Alfaro
Investigadora independiente, San José, Costa Rica
https://orcid.org/0000-0002-0902-1129
RESUMEN
La enfermedad venosa tromboembólica se posiciona dentro de las
principales causas de mortalidad en el paciente hospitalizado. Esta
condición, que incluye a la trombosis venosa profunda y el embolismo
pulmonar, puede conllevar al paciente a serias complicaciones y aumento
en los gastos de salud. Sin embargo, su prevención ha demostrado ser
efectiva y segura en disminuir los eventos tromboembólicos venosos en
pacientes con factores de riesgo. Existen varios modelos para valoración
de riesgo de estos eventos, que definen en cuáles pacientes está
indicada la tromboprofilaxis; como también, hay escalas de sangrado que
desaconsejan el uso de terapia farmacológica y recomiendan métodos
mecánicos. La evidencia recomienda cual terapia es la más adecuada
según el contexto al que el clínico se enfrenta.
1
Médicogeneral, graduado
PALABRAS CLAVE: tromboembolia venosa; factores de riesgo;
de la Universidad de Costa trombosis de la vena; embolia pulmonar .
Rica (UCR).
Cod.Med15853 ABSTRACT
olie.0911@gmail.com Thromboembolic venous disease is positioned within the main causes of
2 mortality in the hospitalized patient. This condition, which includes deep
Médico general, graduado
de la Universidad de Costa
venous thrombosis and pulmonary embolism, can lead to serious
Rica (UCR). complications and increase in health expenses. However, its prevention
Cod.MED15822 has demonstrated to be effective and safe in reducing venous
diegoddz27@gmail.com
thromboembolic events in patients with risk factors. There are several
3 models for risk assessment of these events that define which patients
Médica general, graduada
de la Universidad de Costa require thromboprophylaxis; as well as, bleeding scales that discourage
Rica (UCR). the use of pharmacological therapy and recommend mechanical methods.
Cod.MED15824
fabiola.fuentesa18@gmail.com Evidence recommends which therapy is the most appropriate according to
Revista Médica Sinergia Vol. 4 (7),Julio 2019 - ISSN:2215-4523 / e-ISSN:2215-5279
e230
http://revistamedicasinergia.com
Tromboprofilaxis en el paciente hospitalizado - Dr.Olivier Chaves Duarte; Dr.Diego David Durán Zúñiga; Dra.Charlyn Fabiola Fuentes Alfaro
TABLA 2. Modelo para la evaluación de Por otro lado, el único modelo utilizado
riesgo tromboembólico IMPROVE para valorar el riesgo de sangrado en
estos pacientes es también llamado
Factor de riesgo Puntaje
IMPROVE. Ver TABLA 3
Tromboembolismo venoso previo 3
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EDUCACIÓN SANITARIA
Traumatismos y tendinitis
de las extremidades superiores
LUIS CARLOS AGUILAR
Médico.
Las lesiones producidas tras la práctica deportiva, o causadas por otro tipo
de accidente, pueden afectar a cualquier órgano u extremidad.
En el presente trabajo se abordan aquellas lesiones que afectan al sistema
musculosquelético de las extremidades superiores, con especial atención
al diagnóstico y tratamiento de las patologías que afectan al hombro,
codo, muñeca y mano.
su grado máximo, provocar la produce una rotura de algunas inflamación y algo de alteración en
rotura tendinosa. fibras musculares. la sensibilidad local con movilidad
En el tercer factor intervienen – Hematomas. Si acontece en el normal en la exploración.
los músculos y tendones, implica- interior del músculo se denomina – Esguince de segundo grado. Hay
dos en la movilidad articular. Al «hematoma intramuscular», en el dolor con pérdida de función, ines-
igual que los ligamentos, tras una que se puede producir una pérdida tabilidad articular e inflamación.
sobrecarga se puede producir la de elasticidad muscular; si no se – Esguince de tercer grado. Es muy
rotura de algunas fibras o de un resuelve rápidamente con la pro- doloroso, con gran inestabilidad e
paquete muscular, sobre todo en ducción de la fibrosis cicatricial de inflamación. El paciente sujeta con
su unión músculo-tendinoso. la zona afectada, llega a la calcifi- la extremidad sana la extremidad
Las lesiones traumáticas se clasi- cación y a una miositis osificante. lesionada para disminuir el dolor.
fican en función de dos caracterís- En otras ocasiones, el hematoma es
ticas: el tiempo transcurrido desde intermuscular, es decir, se sitúa Los esguinces repetitivos pueden
que se produjo la lesión y el tejido por fuera de la vaina envolvente, ocasionar con el tiempo una dege-
lesionado. drenando a zonas distantes. No neración o artrosis de dicha articu-
suelen dar problemas y curan sin lación. Las articulaciones más fre-
secuelas por su reabsorción en cuentemente afectadas son las de
Lesiones traumáticas según pocos días. las extremidades inferiores, siendo
el tiempo transcurrido las de muñecas, codos y hombro
las que sufren este tipo de lesiones
Se clasifican, a su vez, en: con menor frecuencia.
Los esguinces son unas de las
– Lesiones agudas. Cuando su lesiones más frecuentes que se
duración es inferior a 2 semanas. Las lesiones traumáticas observan en los servicios de urgen-
Presentan dolor e inflamación de
bastante intensidad. se clasifican en función cias médicos como consecuencia de
la actividad deportiva.
– Lesiones subagudas. Si la dura- de dos características: El tratamiento a aplicar depen-
ción de la lesión oscila entre 2 y 6 el tiempo transcurrido primero derá del grado del esguince. Los de
semanas. y segundo grado se suelen
– Lesiones crónicas. Si su sintoma- desde que se produjo resolver con tratamiento funcional
tología disminuye en intensidad, la lesión y el tejido de la articulación, reposo e inmo-
pero su duración supera las 6 vilización con un vendaje o férula.
semanas. lesionado Los esguinces de tercer grado,
según algunos autores, requieren
siempre tratamiento quirúrgico,
Lesiones traumáticas aunque lo ideal sería la inmoviliza-
según el tejido lesionado ción durante 3-4 semanas con ven-
De la bolsa serosa daje funcional asociado a criotera-
Tendinosas – Hemobursa. Es la colección pia y la administración de AINE
– Tenosinovitis. Afecta al paraten- hemática en el interior de la bolsa (tabla 2).
dón (contenga o no sinovial). articular. Se suele producir tras
– Tendinitis. Lesión o degeneración traumatismos bruscos e intensos. Del ligamento (roturas parciales
secundaria, que afecta al tendón pro- – Bursitis por fricción. Se produce o completas del ligamento)
piamente dicho, con una reacción a causa del roce producido por Los ligamentos pueden estar some-
inflamatoria. Puede acompañarse de movimientos repetitivos de los tidos a un traumatismo muy
una tenosinovitis. tendones, ligamentos o fascias intenso que provoca su rotura
– Tendinosis. Existe una degene- sobre las bolsas serosas subyacentes completa o una fractura con arran-
ración intratendinosa. Suele cursar o microtraumatismos en bolsas camiento de la parte proximal de
de manera asintomática y proba- superficiales (prerrotuliana, olecra- inserción al hueso. Los ligamentos
blemente es el estadio final de la niana). Puede ocasionar su infla- cicatrizan muy lentamente debido
tendinitis. Se relaciona con la edad mación y la formación de líquido a su disminuido riego sanguíneo.
y microtraumas acumulados. de características inflamatorias o En ocasiones, pueden precisar
– Roturas tendinosas. Suelen apa- mecánicas. reparación quirúrgica.
recer en las zonas de inserción
óseas cuando son completas. Del ligamento (distensión o esguince) Articulares
Los esguinces se clasifican en tres – Subluxación. Es una dislocación
Musculares grados (tabla 1): parcial. Se produce cuando las
– Contusión muscular. Se produce superficies articulares están en
cuando nos damos un golpe en un – Esguince de primer grado. Se contacto pero su alineación no es
músculo. caracteriza por dolor moderado, la correcta. En ocasiones, la sublu-
– Rotura o desgarro fibrilar. La con una pérdida muy leve de la xación sólo se provoca al realizar
contusión ha sido más fuerte y se función articular, poca o nula ciertos movimientos.
OCTUBRE 2001 OFFARM 73
EDUCACIÓN SANITARIA
Tema original
* (Coordinador sección adultos) Jefe de la Unidad de Terapia, Fundación Clínica Médica Sur. Ex Presidente Colegio Mexicano de
Anestesiología.
† (Coordinadora sección de pediatría) Subdirección de Medicina Crítica. Instituto Nacional de Pediatría.
‡ Especialista en Medicina Interna y Medicina del Enfermo en Estado Crítico. Adscrito a la Unidad de Terapia Intensiva Obstétrica, Hos-
pital General de México. Coordinador de Guías de Práctica Clínica, Centro Nacional de Excelencia Tecnológica en Salud, Secretaría
de Salud.
§ Medico Internista e Intensivista. Jefe de División de Medicina Crítica, Hospital Star Médica Centro.
II Servicio de Cardiología Pediátrica del Instituto Nacional de Pediatría.
¶ Jefe de Terapia Intensiva de Ginecología y Obstetricia del Hospital General de México, OD.
** Jefe de Terapia Intensiva y Terapia Intermedia de Centro Médico Dalinde. Médico adscrito de la Unidad de trasplantes UMAE Hospital
«Gaudencio González Garza» Centro Médico «La Raza», IMSS.
†† Médico Internista-Intensivista. Médico de base de la UTI del Servicio de Trasplantes UMAE Hospital General «Dr. Gaudencio Gonzá-
*** Médico Especialista del Enfermo Adulto en Estado Crítico. Jefe de la Unidad de Terapia Intensiva «Alberto Villazón Sahagún». Hos-
pital Español de México. Ex Presidente de la Asociación Mexicana de Medicina Crítica y Terapia Intensiva.
††† Profesor Especialidad de Hematología Pediátrica, Servicio de Hematología Pediátrica del Instituto Nacional de Pediatría.
‡‡‡ Jefe de Unidad de Terapia Intensiva del Hospital Ángeles Roma. Medico Adscrito del Hospital del Hospital Ángeles Mocel. Medicina
www.medigraphic.org.mx
§§§§ Médico Internista Colegiado. Director General de Paracelsus, S. A. de C. V.
IIIIIIII Médico General Certificado. Departamento de Investigación Clínica, Paracelsus, S. A. de C. V.
¶¶¶¶ Doctor en Salud Pública. Profesor Titular. Programa de Maestría y Doctorado en Ciencias Médicas, Odontológicas y de la Salud.
228
RESUMEN SUMMARY
La enfermedad tromboembólica venosa es una de las The venous thromboembolic disease (TED) is one of
principales complicaciones en los pacientes hospitaliza- the most frequently occurring complications in hospital-
dos, comprende la trombosis venosa profunda (TVP) y el ized patients including deep venous thrombosis (DVT)
embolismo pulmonar (EP). Los enfermos hospitalizados and pulmonary embolism (PE). It has been noted that
presentan al menos un factor de riesgo para un evento in adult hospitalized patients are admitted with the risk
tromboembólico venoso (ETV), de los cuales aproximada- to develop a venous thromboembolic event of which
mente 40% presentan 3 o más factores de riesgo. Los pa- approximately 40% have one of three risk factors. Evi-
cientes con una enfermedad médica aguda tienen mayor dently patients with acute medical emergencies have
riesgo de presentar un ETV y aproximadamente entre 10 greater risk to develop an acute venous thromboembolic
a 30% de los pacientes con patología médica tiene TVP event specifically, those patients with acute medical ill-
o desarrollan EP. Estudios clínicos actuales demuestran nesses will have at least one episode of DVT and ap-
que los pacientes con patología médica presentan mayor proximately 30% of patients with medical illnesses may
riesgo de un ETV que los enfermos quirúrgicos. develop DVT or PE. Current clinical studies have dem-
La enfermedad tromboembólica venosa incrementa de onstrated that patients with medical diagnosis have a
manera significativa la morbilidad y mortalidad en los greater probability to develop a venous embolic event
pacientes con enfermedades graves. En la Unidad de that those patients admitted under a surgical diagnosis.
Terapia Intensiva (UTI) la ausencia de tromboprofilaxis Furthermore, in the Intensive Care Units, it appears that
contribuye a una incidencia de 13 a 31% de cuadros sin- the absence of application of the thromboprophylaxis
tomáticos o asintomáticos de TVP en el enfermo en es- protocol may contribute to an incidence of 13 to 31%
tado crítico. greater than when protocols to prevent the venous throm-
Objetivos: La realización de esta guía de práctica clíni- boembolic complications are implemented. It is evident
ca (GPC) tiene como finalidad homologar las prácticas that thromboembolism, as a disease, increases signifi-
de evaluación, detección y prevención de la enfermedad cantly the morbidity and the mortality of patients admitted
tromboembólica venosa en el enfermo adulto y pediátrico to general hospitals and even more so, when their medi-
graves, con el objetivo de mejorar la calidad, atención y cal condition indicates admission to critical care units.
seguridad en esta población, teniendo como objetivo ser Objectives: The proposed Guidelines for Clinical Practice
un marco de referencia para la toma de decisiones clíni- (GPC) have the objective to standardize the evaluation,
cas con base en las recomendaciones sustentadas en la detection and prevention of the venous thromboem-
mejor evidencia disponible en la actualidad. bolic phenomenon aimed to improve the quality of care
Usuarios: Esta guía de práctica clínica está dirigida a of this population, whether adults or pediatric patients
médicos intensivistas, internistas, urgenciólogos, pedia- implementing a protocol in all adult patients, potential
tras, neonatólogos y a todos aquellos involucrados en el candidates to develop this complication and in specific
manejo del paciente críticamente enfermo con riesgo de indications in underage patients. The protocol may be ap-
un evento tromboembólico en la unidad de terapia inten- plied in general, but ought to allow for clinical decisions,
siva. according to the specificity of each individual patient.
Palabras clave: Enfermedad tromboembólica venosa, Participants: This, herein proposed protocol is directed
tromboprofilaxis, tromboprofilaxis en pediatría, profilaxis, to Intensivists, Internists, Emergency Physician, special-
tromboembolia pulmonar, trombosis venosa profunda. ized Pediatricians and Neonatologists, as well as, all
medical personnel actively participating in the care of the
above noted critically ill patients with the probable risk of a
venous thromboembolic event; as noted, in these cases,
prevention is by far better than frustrated attempts to treat
this patients in more desperate condition.
Key words: Venous thromboembolism, thromboprophy-
laxis, thromboprophylaxis in children, prophylaxis, pulmo-
www.medigraphic.org.mx nary embolism, deep vein thrombosis.
229
www.medigraphic.org.mx
mal se asocian a EP clínicamente asintomático en
50%.5 Aproximadamente, entre 70 a 79% de los
médica gravemente enfermos, obteniendo una re-
ducción estadísticamente significativa de TVP de
casos de EP se acompaña de TVP.6-8 El riesgo de 63%. Estos resultados han sido corroborados en
muerte es mayor en enfermos con un evento agu- diversos metaanálisis, los cuales confirman la efi-
do o recurrente de EP comparado con pacientes cacia y seguridad de la tromboprofilaxis en los pa-
con TVP.9 Stein,10 reportó una tasa de mortalidad cientes con enfermedad médica aguda.3-14
de EP de 7 a 11%, también demostró que los epi- La evidencia actual sobre la efectividad de la
sodios de EP son tres veces más frecuentes des- tromboprofilaxis en los enfermos graves es limita-
pués de un evento inicial de EP que de una TVP da, pero se sugiere que es similar al resto de la
(aproximadamente 60% después de un EP contra población, por lo que no existe una guía de prác-
20% de una TVP). tica clínica (GPC) que aborde de manera amplia y
Rev Asoc Mex Med Crit y Ter Int 2011;25(4):227-254
230
concisa la importancia de la prevención de la ETV mos adultos y pediátricos graves con factores de
a través de la utilización razonada y segura de la riesgo.
tromboprofilaxis en los pacientes adultos y pediátri-
cos hospitalizados en la UTI. La aplicación de estos objetivos mejorará la efec-
tividad, seguridad y calidad de atención médica de
OBJETIVOS esta población. Las diferentes fases de difusión e
implementación de las recomendaciones clínicas
La Guía de práctica clínica para la tromboprofilaxis deberán ser debidamente planeadas y supervisa-
en la Unidad de Terapia Intensiva tiene como meta das por las respectivas instancias normativas y re-
ser un marco de referencia para la toma de decisio- gulatorias de la propia institución, así como de las
nes clínicas con base en las recomendaciones sus- agencias gubernamentales respectivas.
tentadas en la mejor evidencia disponible hasta la
actualidad, teniendo como finalidad homologar las c) Población objetivo
prácticas de evaluación, detección y prevención de
la ETV en el enfermo adulto y pediátrico grave con El fundamento para la prevención de la ETV es hacer
el objetivo de mejorar la calidad y la seguridad de la una evaluación y estratificación de riesgo de manera
atención en esta población. adecuada, ya que esto permitirá identificar los pacien-
tes con mayor vulnerabilidad de presentar un ETV.
USUARIOS Los participantes definieron los temas a evaluar
y las preguntas a responder por la guía con base
La GPC está dirigida a médicos intensivistas, inter- en las entidades clínicas más frecuentes en la UTI
nistas, especialistas en urgencias médico-quirúr- que por su naturaleza incrementan de manera sig-
gicas, pediatras, neonatólogos y a todos aquellos Este documento
nificativa el riesgo es
de elaborado
ETV, comopor
sonMedigraphic
la enfermedad
involucrados en el manejo del paciente críticamente pulmonar obstructiva crónica (EPOC), quemaduras,
enfermo con riesgo de ETV en la UTI. sepsis, trauma, insuficiencia cardiaca (IC), fibrila-
ción auricular (FA), embarazo y complicaciones del
METODOLOGÍA PARA EL DESARROLLO mismo, insuficiencia y cirrosis hepática, enferme-
dad neurológica (evento vascular cerebral [EVC],
a) Conformación del grupo traumatismo craneoencefálico [TCE] y neurociru-
gía), insuficiencia renal (IR), síndrome coronario
Se invitó a participar a un total de (27) médicos es- agudo (SICA), inmovilización prolongada, trombo-
pecialistas y (2) enfermeras especialistas de me- sis venosa asociada a catéteres venosos centrales
dicina crítica procedentes de diferentes hospitales (CVC), cirugía mayor, trombocitopenia inducida por
públicos y privados de la ciudad de México para la heparina y en enfermos pediátricos graves (epide-
elaboración del documento. Los invitados fueron miología, evaluación, detección y escenarios espe-
seleccionados basándose en criterios como su co- ciales).
nocimiento sobre la metodología para el desarrollo
de GPC y experiencia en el tema central de la guía. d) Desarrollo
www.medigraphic.org.mx
La GPC está dirigida a personal de segundo y ter-
cer niveles de atención de UTI con el objetivo de
obtenida de GPC internacionales, donde los crite-
rios utilizados para elegir fueron los utilizados por
homogeneizar las acciones referentes a: AGREE o ADAPTE.22
Fueron elegidas por el grupo de expertos de
• Evaluación y estratificación del riesgo tromboem- acuerdo a su calidad metodológica para su adop-
bólico en base a los factores de riesgo del enfer- ción y adaptación,22 tomando como punto de parti-
mo adulto y pediátrico graves. da las siguientes guías: American College of Chest
• Detección de la enfermedad tromboembólica veno- Physicians Evidence-Based Clinical Practice Gui-
sa con los métodos disponibles en la actualidad. delines: Antithrombotic and Thrombolytic Thera-
• Prevención de la ETV a través de medidas no py 8th ED (ACCP),23 National Health and Medical
farmacológicas y farmacológicas en los enfer- Research Council. Clinical practice guideline for
Carrillo-Esper R et al. Guía de práctica clínica para la tromboprofilaxis en la UTI
231
the prevention of venous thromboembolism (deep mendación (cuadro I). Las evidencias fueron clasi-
vein thrombosis and pulmonary embolism) in pa- ficadas de forma numérica y las recomendaciones
tients admitted to Australian hospitals (NHRMC),24 con letras, ambas en orden decreciente de acuerdo
Prophylaxis of Venous Thromboembolism, Recom- al tipo de diseño de estudio y calidad metodológica.
mendations of the Spanish society of pulmonology
and thoracic surgery (SEPAR),25 y Surviving sepsis e) Exoneración
campaing: International guidelines for management
of severe sepsis and septic shock: 2008 (SSC).26 Este documento es sólo una guía general para me-
Las evidencias y recomendaciones provenientes jorar las decisiones médicas y debe ser utilizada
de las GPC utilizadas como documentos de refe- teniendo en cuenta el criterio médico, las necesida-
rencia mantuvieron la gradación de acuerdo a la es- des y preferencias de los pacientes y la disponibi-
cala original empleada. En el caso de no contar con lidad de los medios locales. La guía está diseñada
GPC como documento de referencia, las evidencias para proporcionar información con base en la mejor
y recomendaciones fueron elaboradas a través del información científica disponible en el momento del
análisis crítico de la literatura científica (revisiones desarrollo de esta publicación. Es importante re-
sistemáticas, metaanálisis, ensayos clínicos y estu- cordar que nuevos resultados de la investigación
dios observacionales), para lo cual se utilizó la es- clínica pueden proporcionar nuevas evidencias que
cala NICE (National Institute for Clinical Excellence) hagan necesario cambiar la práctica usual, aun an-
para emitir el nivel de evidencia y grado de reco- tes de que esta guía sea actualizada.
232
www.medigraphic.org.mx
a) En pacientes hospitalizados en la UTI, ¿cuáles
rando el motivo de hospitalización (procedi-
miento quirúrgico, trauma o enfermedad médi-
son los factores de riesgo para desarrollar una ETV? ca específica).
3. Evaluar el riesgo de sangrado o contraindicacio-
Conforme aumentan el número y tipo de factores nes para la profilaxis farmacológica o mecánica,
de riesgo, se aumenta la probabilidad de desarro- considerando los factores de riesgo del cuadro III.
llar la ETV (cuadro II), sin embargo, existen pocos 4. Formular una evaluación global del riesgo (con-
estudios basados en poblaciones sobre el riesgo de siderar el riesgo-beneficio de tromboprofilaxis).
la ETV en pacientes hospitalizados, y la estimación 5. Seleccionar los métodos apropiados de trombo-
de la magnitud del riesgo es a veces contradictoria profilaxis basados en la evaluación del riesgo del
o no actualizada.24 paciente mediante un algoritmo (figura 1).
Carrillo-Esper R et al. Guía de práctica clínica para la tromboprofilaxis en la UTI
233
c) En pacientes hospitalizados en la UTI, ¿cuáles binación de estas variables y los modelos de pre-
son los factores de riesgo de sangrado? dicción clínica permiten discriminar a los pacientes
con sospecha preevaluación de EP, lo cual se ha
El riesgo de sangrado es elevado en presencia de convertido en un paso clave en todos los algoritmos
factores de riesgo y se incrementa con la realización diagnósticos para EP.1
de diversos procedimientos (cuadro III). La trombo- Los modelos de predicción clínica más fre-
profilaxis farmacológica puede incrementar el riesgo cuentemente utilizados son el de Wells y Geneva
de sangrado, por lo tanto, la evaluación individualiza- (cuadros IV y V). El modelo predictivo de Wells es
da del riesgo de sangrado es un paso esencial para sencillo y de fácil aplicación y ha sido evaluado ex-
la decisión de la tromboprofilaxis apropiada.24 tensamente. Utiliza tres categorías (baja, modera-
Por la naturaleza del mecanismo de acción, la da o de alta probabilidad clínica) y un sistema de
profilaxis farmacológica puede incrementar el ries- dos categorías (EP probable o poco probable).30 El
go de sangrado quirúrgico. En la tromboprofilaxis modelo predictivo de Geneva es simple y se basa
farmacológica el riesgo de sangrado puede estar en variables clínicas. Independientemente del mo-
influenciado por la dosis y el horario del tratamiento delo utilizado, la proporción de pacientes con EP
(especialmente el momento de la profilaxis farma- se clasifican en baja (10%), moderada (30%) y alta
cológica en relación a la cirugía).24 probabilidad clínica (65%).31 Caprini,32 desarrolló
un modelo para la evaluación del riesgo tromboem-
d) En pacientes hospitalizados en la UTI, ¿cuáles bólico en pacientes de origen médico y quirúrgico,
son las escalas de estratificación del riesgo trom- tomando en cuenta 40 factores de riesgo con una
boembólico de mayor utilidad? puntuación de 1 a 5 puntos de acuerdo a su pre-
sentación, permitiendo estratificar a los pacientes
A pesar de la baja sensibilidad y especificidad del en bajo, moderado, alto y muy alto riesgo tromboe-
cuadro clínico y de las pruebas comunes, la com- mbólico (cuadro V). El modelo de Caprini se asocia
234
• Sangrado mayor activo (definición: requerimiento de al menos dos unidades de sangre o productos sanguíneos)
• Sangrado crónico, hemorragia clínicamente significativa y cuantificable en 48 h
• Trastornos de la coagulación (ej. hemofilia)
• Sangrado reciente de sistema nervioso central (SNC)
• Lesión intracraneana o espinal
• Anormalidades de la coagulación, incluyendo coagulopatía de base o anormalidades de los factores de la coagulación
• Trombocitopenia (la profilaxis terapéutica no está recomendada en pacientes con cuenta plaquetaria < 50 000/Ul, pero en general se considera
segura en pacientes de riesgo con menor grados de trombocitopenia)
• Disfunción plaquetaria grave
• Úlcera péptica activa o enfermedad gastrointestinal ulcerativa activa
• Ictericia obstructiva o colestasis
• Cirugía mayor reciente con alto riesgo de sangrado
• Uso concomitante de medicamentos que pueden afectar el proceso de la coagulación (ej. anticoagulantes, antiagregantes plaquetarios, antiinfla-
matorios no esteroideos selectivos y no selectivos o agentes trombolíticos)
• Anestesia regional o punción lumbar reciente por cualquier motivo.
• Alto riesgo de caídas
Variable Puntos
Paciente ingresa
a la UTI Factores predisponentes
TVP o EP previa +1.5
Inmovilización o cirugía reciente +1.5
Historia clínica y exploración física Cáncer +1
Citometría hemática completa con Síntomas
cuenta plaquetaria
Tiempo de protrombina
Hemoptisis +1
Tiempo de tromboplastía parcial Signos clínicos
activado Frecuencia cardiaca (> 100 latidos/minuto) +1.5
Creatinina sérica Signos clínicos de TVP +3
Juicio clínico
Alternativa diagnóstica menos probable que EP +3
Probabilidad clínica (3 niveles) Total
Evaluación y estratificación
de riesgo tromboembólico Baja 0a1
Intermedia 2a6
Alta 7
Probabilidad clínica (2 niveles)
EP improbable 0a4
¿Factores
de riesgo
EP probable >4
No Sí
tromboembólico?
(Cuadro II)
235
Cuadro V. Modelo predictivo de Geneva b) El ultrasonido (US) doppler, ¿es de utilidad como
método de escrutinio en pacientes con factores de
Variable Puntos riesgo para un ETV en la UTI?
Factores predisponentes
Evidencia: la detección de TVP por US doppler en
Edad > 65 años +1
TVP o EP previa +3
pacientes con sospecha clínica tiene significancia
Cirugía o fractura dentro del último mes +2 en cuanto a un mayor riesgo de desarrollar EP du-
Malignidad activa +2 rante la hospitalización comparado con pacientes
Síntomas en quienes no se detectó, dato relevante al llevarlo
Dolor de extremidades inferiores unilateral +3 al escenario de la UTI donde un evento menor de
Hemoptisis +2 EP puede ser fatal. Sin embargo, la sensibilidad del
Signos clínicos US doppler en pacientes sin sospecha clínica pue-
Frecuencia cardiaca de ser de 47 a 62% (Nivel 2+ NICE).
75 a 94 latidos/minuto +3
Recomendación: no se recomienda el escrutinio
95 latidos/minuto +5
Dolor a la palpación en venas profundas
de rutina con US doppler en pacientes asintomá-
de extremidades inferiores y edema unilateral +4 ticos en tanto que puede ser una herramienta no
Probabilidad clínica Total costo-efectiva. Sin embargo, en pacientes con alto
Baja 0a3 riesgo y que no han recibido profilaxis adecuada an-
Intermedia 4 a 10 tes de su ingreso a la UTI, la realización de un US
Alta 11 doppler podría identificar a aquéllos que requieren
inicio de tratamiento para TVP o simplemente pro-
filaxis, así como también se recomienda su uso en
tanto es apropiado evaluar de manera cotidiana el caso de sospecha de un ETV sintomático de miem-
riesgo tromboembólico y de tromboprofilaxis en los bros superiores, no así en los asintomáticos o que
pacientes en la UTI (Nivel 1 NHRMC). cuenten con un catéter venoso (Grado C NICE).
Recomendación: en todos los pacientes que in-
gresan a la UTI se recomienda evaluar al menos una c) El ecocardiograma transtorácico (ETT), ¿es de
vez al día y en casos seleccionados la veces que utilidad como método de escrutinio en pacientes
sea necesario, el riesgo tromboembólico y la imple- con factores de riesgo para un ETV en la UTI?
mentación de tromboprofilaxis (Grado A NHRMC).
Evidencia: el ETT es un procedimiento no invasivo,
Estudios de diagnóstico de alta disponibilidad, rápido, sensible y confiable.
Este método reconoce las alteraciones en cuanto a
a) La determinación del dímero D (DD), ¿es de uti- la función ventricular derecha durante un evento de
lidad como método de escrutinio en pacientes con EP. Su aplicación en enfermedad tromboembólica
factores de riesgo para un ETV en la UTI? está descrita a este nivel y no como escrutinio de
pacientes con factores de riesgo para un ETV en
Evidencia: los diferentes estudios clínicos refieren que la UTI. Sin embargo, no hay evidencia sobre esta
el DD tiene una sensibilidad hasta de 98% en pacien- utilidad (Nivel 2++ NICE).
tes que cursan con TVP, con un punto de corte ma- Recomendación: la evidencia disponible no per-
yor de 500 mg/L, por lo tanto un valor menor a éste mite recomendar el ETT como método de escrutinio
www.medigraphic.org.mx
descarta la presencia de un evento agudo de TVP.
Sin embargo, su especificidad es baja y dependiendo
en pacientes con factores de riesgo para un ETV en
la UTI. (Nivel D-BPP NICE).
del estudio puede ser desde 40 hasta 85%, en parte
debido a que su elevación puede asociarse a otras d) La tomografía computada de alta resolución de
enfermedades como el cáncer, procesos infecciosos, tórax (TCAR), ¿es de utilidad como método de es-
inflamación, necrosis y otras alteraciones presentes crutinio en pacientes con factores de riesgo para un
en los pacientes que ingresan a UTI (Nivel 1+ NICE). ETV en la UTI?
Recomendación: no se recomienda la determina-
ción del DD como método de escrutinio en pacien- Evidencia: el EP se diagnostica o se excluye me-
tes con factores de riesgo para un ETV en la UTI diante la realización de tomografía helicoidal, an-
(Grado B NICE). giografía pulmonar o gammagrama de ventilación-
Rev Asoc Mex Med Crit y Ter Int 2011;25(4):227-254
236
perfusión. Una de las aplicaciones de la tomografía de TCAR no ha sido evaluado para su aplicación
helicoidal junto con la resonancia magnética en en forma rutinaria para el escrutinio de pacientes
los pacientes con sospecha de ETV, es a nivel de con factores de riesgo tromboembólico en la UTI.
miembros superiores en donde el US no es diag- Además debe considerarse tomar en cuenta que la
nóstico aunque por clínica y por factores de riesgo gravedad del paciente para movilización fuera de la
como la utilización de catéteres venosos centra- UTI puede ser impedimento para la realización de
les es sugestivo de un ETV. Sin embargo, el uso este estudio (Nivel 2+ NICE).
1 punto por cada factor presente 3 puntos por cada factor presente
( ) Edad 41 a 60 años ( ) Edad > 75 años
( ) Cirugía menor programada ( ) Historia de TVP/EP
( ) Historia de cirugía mayor previa (< 1 mes) Historia familiar de trombosis:
( ) Venas varicosas ( ) Factor V de Leiden positivo
( ) Historia de enfermedad inflamatoria intestinal ( ) Protrombina 20210A positivo
( ) Edema de piernas (reciente) ( ) Homocisteína sérica elevada
( ) Obesidad (IMC > 25) ( ) Anticoagulante lúpico positivo
( ) Infarto agudo del miocardio ( ) Anticuerpos anticardiolipina elevados
( ) Insuficiencia cardiaca congestiva (< 1 mes) ( ) Trombocitopenia inducida por heparina
( ) Sepsis (< 1 mes) ( ) Otra trombofilia presente_______________
( ) Enfermedad pulmonar grave, incluyendo neumonía (< 1 mes)
( ) Prueba de función pulmonar anormal (EPOC)
( ) Paciente con reposo en cama
( ) Ortesis o yeso en la pierna
( ) Otro factor de riesgo_________
2 puntos por cada factor presente 5 puntos por cada factor presente
( ) Edad 60 a 74 años ( ) Artroplastia mayor electiva de extremidades inferiores
( ) Cirugía artroscópica ( ) Fractura de cadera, pelvis o pierna (< 1 mes)
( ) Malignidad (presente o previa) ( ) EVC (<1 mes)
( ) Cirugía mayor (> 45 minutos) ( ) Trauma múltiple (< 1 mes)
( ) Cirugía laparoscópica (> 45 minutos) ( ) Lesión aguda de médula espinal/Parálisis (< 1 mes)
( ) Paciente confinado a cama (> 72 horas)
( ) Férula de yeso inmovilizante (< 1 mes)
( ) Acceso venoso central
HBPM (Dosis)
• 40 mg/día SC (peso corporal < 150 kg, Depuración de creatinina > 30 mL/min)
• 30 mg/día SC (peso corporal < 150 kg, Depuración de creatinina 10 a 29 mL/min)
• 30 mg cada 12 h SC (peso corporal > 150 kg, Depuración de creatinina > 30 mL/min)
Carrillo-Esper R et al. Guía de práctica clínica para la tromboprofilaxis en la UTI
237
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Recomendación: las medidas no farmacológicas
de tromboprofilaxis se recomiendan en pacientes
ves (Nivel de evidencia I A).
Recomendación: en los pacientes críticamen-
con alto riesgo de sangrado (Grado C ACCP) o te enfermos con moderado riesgo de un ETV (ej.
como complemento de las medidas farmacológicas pacientes con enfermedad médica aguda o posto-
(Grado A ACCP), dirigiendo una especial atención perados de cirugía general) se recomienda el uso
en una utilización apropiada y cumplimiento óptimo de tromboprofilaxis farmacológica con heparina de
del dispositivo mecánico (Grado C ACCP). bajo peso molecular (HBPM) o heparina no fraccio-
nada (HNF). En pacientes con alto riesgo tromboe-
2. En pacientes con factores de riesgo para un ETV, mbólico (ej. pacientes postrauma mayor o cirugía
¿son de utilidad las medidas de tromboprofilaxis ortopédica) se recomienda el uso de HBPM (Grado
farmacológica? A ACCP).
Rev Asoc Mex Med Crit y Ter Int 2011;25(4):227-254
238
3. En pacientes con factores de riesgo tromboem- uno o más factores de riesgo tromboembólico, se
bólico internados en la UTI, ¿está indicada la ad- recomienda la tromboprofilaxis con HBPM, HNF,
ministración de inhibidores directos de trombina e convencional o fonduparinux (Grado A ACCP).
inhibidores del factor X activado como medida de
tromboprofilaxis farmacológica? b) En pacientes de origen médico con contraindi-
cación para tromboprofilaxis farmacológica, ¿qué
Evidencia: actualmente no existen GPC ni es- medidas de tromboprofilaxis están indicadas?
tudios que avalen el empleo de los inhibidores
directos de trombina como medida profiláctica de Evidencia: en los pacientes con enfermedad mé-
ETV en los enfermos ingresados en la UTI (Nivel dica y factores de riesgo tromboembólico y contra-
C NICE). indicación para la tromboprofilaxis farmacológica es
Recomendación: los inhibidores directos de conveniente evaluar las medidas no farmacológicas
la trombina e inhibidores del factor X activado no de tromboprofilaxis (Nivel 1 ACCP).
deben ser utilizados como una medida de trombo- Recomendación: se recomienda el uso óptimo
profilaxis en enfermos internados en la UTI (Grado de tromboprofilaxis no farmacológica con DCM o
D-BPP NICE). MCG en pacientes con contraindicación para la
tromboprofilaxis farmacológica (Grado A ACCP).
4. En pacientes con factores de riesgo tromboem-
bólico internados en la UTI, ¿está indicada la admi- c) En pacientes con sepsis, ¿están indicadas las
nistración de inhibidores directos de trombina como medidas de tromboprofilaxis?
medida de tromboprofilaxis farmacológica?
Evidencia: los pacientes hospitalizados en la UTI
Evidencia: actualmente no existen GPC ni es- tienen riesgo para desarrollar TVP. La evidencia ac-
tudios que avalen el empleo de los inhibidores tual muestra claros beneficios de la tromboprofilaxis
directos de trombina como medida profiláctica de en pacientes internados tanto en la UTI como en
ETV en los enfermos ingresados en la UTI (Nivel salas generales de hospitalización. Los pacientes
C NICE). con sepsis grave pueden presentar los mismos fac-
Recomendación: los inhibidores directos de la tores de riesgo que el resto de enfermos críticos.
trombina no deben ser utilizados como una medida Diferentes estudios clínicos aleatorizados contro-
de tromboprofilaxis en enfermos internados en la lados con placebo sobre el uso de profilaxis para
UTI (Grado D NICE). TVP en pacientes críticamente enfermos han de-
mostrando una reducción en la incidencia de la TVP
Situaciones especiales y de la EP. La prevalencia de infección/sepsis es
de 17% en todos los estudios y de 52% en los pa-
Enfermedades de origen médico (EPOC, IC, sep- cientes de la UTI. El beneficio de la tromboprofilaxis
sis, enfermedad neurológica aguda, etc.). ha sido demostrado en diferentes metaanálisis. El
riesgo de su administración es bajo, la gravedad de
a) En pacientes en la UTI con enfermedad de ori- no administrarla es alta y el costo es bajo (Nivel 1
gen médico, ¿están indicadas las medidas de trom- SSC). De acuerdo a la evidencia los resultados con
boprofilaxis farmacológica? el uso de HBPM y HNF es equivalente en la pobla-
ción médica en general. Un metaanálisis comparó
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Evidencia: los pacientes con enfermedad médica
aguda admitidos a hospitalización con insuficiencia
la administración de HNF dos veces o tres veces al
día, demostrando que la HNF aplicada tres veces al
cardiaca congestiva (ICC) o enfermedad respirato- día produce mayor eficacia y menos sangrado que
ria grave, o quienes están confinados a una cama y la de dos veces al día. Los médicos deben evaluar
presentan uno o más factores de riesgo incluyendo el riesgo de un ETV y de sangrado de forma indivi-
cáncer, ETV previa, sepsis, enfermedad neurológi- dual y elegir la forma de administración. El costo de
ca aguda, enfermedad inflamatoria intestinal, entre la HBPM es mayor y la frecuencia de administra-
otras, se beneficiarán con el uso de la tromboprofi- ción es menor. La HNF es preferida sobre la HBPM
laxis (Nivel 1 ACCP).4 en pacientes con función renal moderada o grave
Recomendación: en los pacientes con enferme- (Nivel 1 SSC). Los métodos mecánicos (MCG o
dad médica aguda admitidos a hospitalización con DCM) se implementan cuando la anticoagulación
Carrillo-Esper R et al. Guía de práctica clínica para la tromboprofilaxis en la UTI
239
está contraindicada o como terapia adyuvante a la Evidencia: en los pacientes con lesión térmica,
anticoagulación en los pacientes con muy alto ries- las medidas de tromboprofilaxis farmacológica a
go tromboembólico (Nivel 1 SSC). En los pacientes base de HBPM o HNF se utilizan de manera tem-
con muy alto riesgo, se prefiere el uso de la HBPM prana siempre y cuando no exista contraindicación
sobre la HNF (Nivel 2 SSC). Los pacientes que reci- para su administración (Nivel 1 ACCP).
ben heparina deben ser monitorizados por el riesgo Recomendación: en los pacientes con lesión tér-
de desarrollar trombocitopenia inducida por hepari- mica sin contraindicación para la tromboprofilaxis
na (TIH). farmacológica, se recomienda la administración de
Recomendación: en los pacientes con sepsis HBPM a 1 mg/kg cada 24 horas o HNF a razón de
grave se recomienda la profilaxis para TVP con 50 UI/kg cada 12 horas (Grado C ACCP).
a) HNF administrada dos o tres veces al día, o b)
HBPM diariamente, excepto en caso de contrain- c) En el paciente quemado con contraindicación
dicación (ej. trombocitopenia, coagulopatía grave, para la tromboprofilaxis farmacológica, ¿están in-
sangrado activo, hemorragia intracerebral reciente) dicadas las medidas no farmacológicas de trombo-
(Grado A SSC). profilaxis?
En pacientes con choque séptico con contrain-
dicación para el uso de heparina, se recomienda Evidencia: en pacientes con quemaduras y alto
la tromboprofilaxis mecánica con dispositivos como riesgo de hemorragia se puede utilizar trombopro-
MCG o DCM, a menos que estén contraindicados filaxis mecánica, hasta que disminuya el riesgo de
(Grado A SSC). En los pacientes de muy alto ries- hemorragia (Nivel 1 ACCP).
go, como los enfermos con sepsis grave e historia Evidencia: en los pacientes con quemaduras con
de TVP, trauma o cirugía ortopédica, se sugiere la factores de riesgo de sangrado está contraindicado
combinación de terapia farmacológica y mecánica, el empleo de medidas de tromboprofilaxis farmaco-
a menos que esté contraindicada o no sea prácti- lógica, en cuyo caso las medidas mecánicas a base
ca (Grado C SSC). En los pacientes con muy alto de DCM y MCG son de utilidad hasta que disminu-
riesgo, se sugiere el uso de HBPM sobre la HNF, ya el riesgo de sangrado (Nivel 1 ACCP).
ya que ha demostrado ser superior en este tipo de Recomendación: en los pacientes quemados con
enfermos (Grado C SSC). alto riesgo de sangrado se recomienda utilizar las
medidas de tromboprofilaxis mecánica hasta que
Quemaduras disminuya el riesgo de hemorragia (Grado A ACCP).
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portador de catéter venoso femoral e inmovilidad
prolongada, para determinar el inicio de trombopro-
tores de riesgo independientes para TVP: edad ma-
yor (OR: 1.05 por año de edad; IC 95% 1.03-1.06),
filaxis (Nivel 1 ACCP). transfusión (1.74, IC 95% 1.03-2.93), cirugía (OR
Recomendación: en los pacientes quemados se 2.3, IC 95% 1.08-4.89), fractura de fémur o tibia (OR
recomienda la evaluación y estratificación de riesgo 4.82 IC 95% 2.79-8.33) y lesión del médula espinal
tromboembólico con base en los factores de riesgo (OR 8.59, IC 95% 2.92-25.28) (Nivel 1 ACCP).
para determinar la implementación de tromboprofi- Recomendación: la tromboprofilaxis se recomien-
laxis (Grado A ACCP). da en todos los pacientes con trauma mayor (Grado
A ACCP). En ausencia de una contraindicación, se
b) En el paciente quemado, ¿están indicadas las recomienda la tromboprofilaxis temprana con HBPM
medidas de tromboprofilaxis farmacológica? (Grado A ACCP). Una alternativa aceptable es la
Rev Asoc Mex Med Crit y Ter Int 2011;25(4):227-254
240
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en pacientes con trauma sin evidencia de ETV es
profiláctica, sin embargo, su indicación es contro-
el riesgo de trombosis. La disrupción endotelial de
los vasos pélvicos puede ocurrir durante el parto
vertida (Nivel 1 ACCP). y principalmente por interrupción por vía cesárea.
Recomendación: en pacientes con trauma, no se Otros factores de riesgo de trombosis incluyen la
recomienda el uso de filtro de VCI como método de inmovilización, la cirugía, la hiperestimulación ová-
tromboprofilaxis (Grado C ACCP). rica por el uso de gonadotropina para la fertilización
in vitro, trauma, neoplasias, estados de hipercoa-
Fibrilación auricular (FA) gulabilidad hereditarios o adquiridos. Los estados
de hipercoagulabilidad incluyen deficiencia de an-
a). En pacientes con FA que requieren cardioversión titrombina, proteína C o S, resistencia a la proteí-
de emergencia, ¿está indicada la anticoagulación? na C activada secundaria a mutación del factor V
Carrillo-Esper R et al. Guía de práctica clínica para la tromboprofilaxis en la UTI
241
de Leiden, mutación del gen de la protrombina PT a eventos trombóticos por lo que no son conside-
20210A, hiperhomocisteinemia y presencia de anti- rados como pacientes autoanticoagulados.38 (Nivel
cuerpos antifosfolípidos (anticuerpos para anticoa- 3 NICE).
gulante lúpico, anticuerpos anticardiolipinas y B-2 Recomendación: en pacientes con insuficiencia
glicoproteína tipo I). Otras condiciones que incre- hepática o cirrosis hepática se recomienda evaluar
mentan el riesgo de trombosis incluyen la hiperé- la tromboprofilaxis farmacológica cuando presentan
mesis gravídica, obesidad, enfermedad inflamatoria alto riesgo tromboembólico. Sin embargo, cuando
intestinal, infección, tabaquismo y catéteres intrave- hay alto riesgo de sangrado se debe implementar
nosos.37 (Nivel 3 NICE). la tromboprofilaxis mecánica a base a MCG y/o
Recomendación: a pesar del incremento de los DCM.38 (Grado D NICE).
factores de riesgo durante el embarazo y postparto,
la mayoría de las embarazadas no requieren anti- b) En pacientes con insuficiencia o cirrosis hepáti-
coagulación. ca, ¿se debe ajustar la dosis de la tromboprofilaxis
La tromboprofilaxis se recomienda en mujeres farmacológica?
con historia de trombosis de causa no determinada,
síndrome antifosfolípido con antecedente de pérdi- Evidencia: la evidencia actual no considera el
da de embarazo como único criterio clínico, trombo- empleo de tromboprofilaxis farmacológica en pa-
filia y embarazo alto riesgo.36 (Grado D NICE). cientes con insuficiencia o cirrosis hepática. Sin
En pacientes embarazadas se sugiere el uso de embargo, ha habido una disminución de las com-
HBPM sobre las HNF para la prevención de even- plicaciones de trombosis en esta población como
tos tromboembólicos (Grado C ACCP). La dosis resultado de la implementación de tromboprofi-
recomendada de HBPM para la prevención de un laxis.38 (Nivel 3 NICE).
evento tromboembólico o prevención de pérdidas Recomendación: la HBPM es relativamente se-
de embarazos en pacientes con síndrome antifosfo- gura en pacientes con insuficiencia o cirrosis hepá-
lípido son: enoxaparina 30 mg dos veces al día o 40 tica, por lo que se recomienda su aplicación ante
mg al día; dalteparin 5,000 UI al día, tinzaparin 75 la presencia de factores de riesgo tromboembólico.
UI/kg al día o 4,500 UI al día. La dosis de HNF varía En los pacientes con insuficiencia o cirrosis hepáti-
de acuerdo al tiempo de evolución del embarazo: ca con factores de riesgo de sangrado se recomien-
5,000 UI dos veces al día en el primer trimestre, da medidas de tromboprofilaxis mecánica (DCM y/o
7,500 UI dos veces al día en el segundo trimestre y MCG).38 (Grado D NICE).
10,000 UI dos veces al día en el tercer trimestre.37
(Grado D NICE). Insuficiencia renal
Insuficiencia hepática y cirrosis hepática a). En pacientes con insuficiencia renal, ¿están in-
dicadas las medidas de tromboprofilaxis farmaco-
a) En pacientes con insuficiencia o cirrosis hepática, lógica?
¿están indicadas las medidas de tromboprofilaxis?
Evidencia: en los pacientes con insuficiencia re-
Evidencia: los pacientes con insuficiencia o cirro- nal es importante considerar la función renal para
sis hepática con pruebas de coagulación normales determinar el tipo y dosis del agente tromboprofi-
o alteración de la coagulación (alargamiento de TP láctico debido a que se eliminan por vía renal, prin-
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o INR) pueden presentar eventos trombóticos. La
trombosis de la vena porta es una complicación fre-
cipalmente en pacientes de edad avanzada, con
diabetes mellitus y aquellos con alto riesgo de san-
cuente en pacientes con cirrosis hepática, con una grado (Nivel 1 ACCP).
incidencia de 10 a 15% como resultado de factores Recomendación: se recomiendan las medidas
locales y sistémicos, incluyendo un estado de hi- de tromboprofilaxis farmacológica previa evaluación
percoagulabilidad. En los enfermos con trombosis de la función renal para elegir el tipo y ajustar la
venosa portal se ha encontrado una predisposición dosis del agente antitrombótico (Grado A ACCP).
genética de trombosis hasta de 70% de los casos
versus 8% de los que no tienen cirrosis. Por lo tan- b). En pacientes con insuficiencia renal, ¿qué me-
to, los pacientes con cirrosis hepática presentan al- didas se deben implementar con el uso de trombo-
teraciones de la coagulación que los predisponen profilaxis farmacológica?
Rev Asoc Mex Med Crit y Ter Int 2011;25(4):227-254
242
Evidencia: los agentes utilizados para la trombo- b). En pacientes con inmovilización prolongada,
profilaxis farmacológica se metabolizan por vía re- ¿cuánto tiempo se deben proporcionar las medidas
nal, por lo tanto, la vida media se prolonga y tienden de tromboprofilaxis?
a acumularse en el torrente sanguíneo. En estas
circunstancias es pertinente la determinación del Evidencia: la duración de la tromboprofilaxis far-
grado de anticoagulación a través de los niveles macológica estará indicada mientras el paciente
séricos de TTPa y Factor Xa en pacientes bajo pro- permanezca inmovilizado o confinado a la cama. La
filaxis con HNF y HBPM, respectivamente (Nivel 1 evaluación de un ETV tanto clínica como por ultra-
ACCP). sonido en la habitación del paciente pueden ser de
Recomendación: en los pacientes con insuficien- utilidad para considerar el tiempo de duración de la
cia renal se recomienda evitar el uso de anticoagu- profilaxis (Nivel 1 ACCP).
lantes bioacumulables y ajustar la dosis del agente Recomendación: en algunos casos la trombo-
antitrombótico mediante la determinación de los ni- profilaxis debe continuarse en la fase posterior al
veles séricos del TTPa y Factor Xa (Grado B ACCP). egreso hospitalario del paciente. Las medidas de
profilaxis mecánicas, tanto estáticas como diná-
Síndrome coronario agudo (SICA) micas, se recomienda que sean utilizadas durante
la estancia hospitalaria, sobre todo en la etapa de
a) En pacientes con SICA, ¿están indicadas las me- confinamiento a la cama (Grado C ACCP).
didas de tromboprofilaxis farmacológica?
Trombosis venosa asociada a catéteres venosos
Evidencia: los lineamientos actuales sobre el centrales (CVC)
manejo del SICA incluyen dosis anticoagulantes de
agentes trombolíticos y HBPM, sin embargo, existe a) En pacientes con CVC, ¿están indicadas las me-
poca información relacionada al uso de profilaxis didas de tromboprofilaxis?
con HBPM en la fase aguda del infarto del miocar-
dio (Nivel 4 NICE). Evidencia: existen guías internacionales que re-
Recomendación: no se recomienda el uso de comiendan el uso de tromboprofilaxis en enfermos
tromboprofilaxis en la fase aguda del infarto del con CVC asociado a otros factores de riesgo para
miocardio (NICE D). enfermedad tromboembólica venosa como enfermos
con esperada inmovilidad > 48 horas, historia de in-
Inmovilización prolongada suficiencia venosa periférica con o sin venas varico-
sas, historia de trombofilias, comorbilidades médicas
a). En pacientes con inmovilización prolongada, (ICC, EPOC), enfermos con cáncer y, sobre todo,
¿qué medidas de tromboprofilaxis están indicadas? recibiendo quimioterapia, uso de terapia hormonal o
anticonceptivos e IMC >30 kg/m2.39 (Nivel 1+ NICE).
Evidencia: los pacientes en UCI tienen factores Recomendación: todo enfermo ingresado a la
de riesgo inherentes a su condición, muchos de UTI con un CVC o que éste sea colocado y no exis-
ellos padecen de insuficiencia cardiaca o respira- tan otros factores de riesgo, no recibirá trombopro-
toria, y es probable que su manejo requiera el uso filaxis de rutina.39 (Grado A NICE). En caso de pre-
de ventilación mecánica y sedación farmacológica, sentar otros factores de riesgo para ETV debe ser
condicionando inmovilidad prolongada. Sin embar- evaluado de forma diaria para recibir medidas trom-
boprofilácticas (mecánicas y/o farmacológicas).39
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go, no se tiene una definición de cuántos días se
considera como inmovilización prolongada (Nivel 1 (Grado A NICE).
ACCP).
Recomendación: se recomienda una evaluación Cirugía mayor (gastrointestinal, urológica, gineco-
de rutina en todos los pacientes que ingresen a la lógica y cardiaca)
UTI para determinar el riesgo de tromboembolismo
venoso y el uso de tromboprofilaxis. Las medidas a) En pacientes sometidos a una cirugía mayor,
de profilaxis deben incluir HBPM o HNF y en caso ¿están indicadas las medidas de tromboprofilaxis?
de pacientes con riesgo elevado de sangrado, el
uso de DCM y MCG, en tanto cede el riesgo de Evidencia: los pacientes sometidos a una cirugía
sangrado (Grado A ACCP). mayor gastrointestinal, urológica, torácica y gineco-
Carrillo-Esper R et al. Guía de práctica clínica para la tromboprofilaxis en la UTI
243
lógica presentan un alto riesgo de trombosis, por parina administrada es removida de la circulación
lo que la evaluación del riesgo tromboembólico es por el mecanismo rápido saturable. Debido a esta
esencial, ya que en base al grado de riesgo se im- cinética, la respuesta anticoagulante de la heparina
plementarán las medidas de tromboprofilaxis (Nivel no es lineal, por lo que a medida que se aumenta
1 ACCP). la dosis, crece en forma desproporcionada tanto la
Recomendación: en los pacientes sometidos a intensidad como la duración de su efecto. Por ejem-
una cirugía mayor se recomienda la tromboprofi- plo, la vida media biológica aparente de la heparina
laxis mecánica y farmacológica en base al riesgo aumenta de aproximadamente 30 minutos con un
tromboembólico. En pacientes con riesgo modera- bolo IV de 25 U/kg a 60 minutos con un bolo de 100
do o alto se recomienda el uso de HBPM o HNF U/kg. Por lo tanto, por sus características farmaco-
(Grado A ACCP). lógicas la HNF debe ser suspendida 2 a 4 horas
antes del procedimiento quirúrgico, dependiendo
c) En pacientes sometidos a una cirugía mayor, de la dosis que se esté utilizando, aunque no hay
¿cuál es el periodo de tiempo recomendado para evidencia que apoye el tiempo de suspensión con
iniciar tromboprofilaxis farmacológica? respecto a la dosis (Nivel 3 NICE).
Recomendación: por sus características farma-
Evidencia: diferentes ensayos clínicos en pa- cológicas la HNF debe ser suspendida 2 a 4 horas
cientes quirúrgicos han estandarizado el empleo antes del procedimiento quirúrgico, dependiendo
de tromboprofilaxis a 12 horas antes en el periodo de la dosis que se esté utilizando, aunque no hay
perioperatorio, así como también 12 horas después evidencia que apoye el tiempo de suspensión con
del postoperatorio. Otros estudios, considerando respecto a la dosis (Grado D NICE).
que 12 horas pre y postquirúrgicas es un intervalo
muy amplio, evaluaron el empleo de medidas de e) En pacientes sometidos a un evento quirúrgico,
tromboprofilaxis dos horas antes y seis horas des- ¿cuál es el periodo de tiempo que deben recibir
pués del acto quirúrgico. Sin embargo, con base tromboprofilaxis?
en los lineamientos actuales, la implementación de
tromboprofilaxis es dos horas antes o cuatro horas Evidencia: en pacientes sometidos a un proce-
después de la cirugía en ausencia de factores de dimiento quirúrgico, la terapia tromboprofiláctica se
riesgo de sangrado (Nivel 2 SEPAR). implementará hasta que el paciente inicie la deam-
Recomendación: se recomienda iniciar la trom- bulación, aproximadamente entre el día 5 a 7 pos-
boprofilaxis farmacológica a 50% de la dosis real, teriores a la cirugía. Existen situaciones como la
dos horas antes de la cirugía y de 4 a 6 horas pos- cirugía en pacientes con cáncer, cirugía abdominal
terior al evento quirúrgico en ausencia de contrain- o cirugía pélvica donde la tromboprofilaxis se exten-
dicación, y ajustar la dosis 24 horas después de la derá hasta 28 días.39 (Nivel I NICE).
primera dosis (Grado C SEPAR). Recomendación: en pacientes sometidos a una
cirugía mayor se recomienda continuar la trombo-
d) En pacientes que serán sometidos a un proce- profilaxis hasta que el paciente inicie la deambula-
dimiento quirúrgico o reintervención, ¿cuál es el ción. En pacientes con cáncer, cirugía abdominal o
periodo de tiempo recomendado para suspender la pélvica se recomienda extender la tromboprofilaxis
tromboprofilaxis farmacológica? por 28 días.39 (Grado A NICE).
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Evidencia: la heparina en la circulación se une a
Paciente oncológico
varias proteínas plasmáticas, células endoteliales
y macrófagos, lo que contribuye a su complicada 1. En pacientes oncológicos con enfermedad mé-
farmacocinética. La heparina es depurada desde dica o quirúrgica aguda, ¿está indicada la trombo-
el plasma a través de un mecanismo rápido sa- profilaxis?
turable y otro más lento de primer orden. La fase
saturable se debe a la unión de la heparina a los Evidencia: el cáncer aumenta cuatro veces el ries-
receptores en las células endoteliales y macrófa- go de ETV y hasta seis veces cuando se someten a
gos, donde es internalizada y despolimerizada; la quimioterapia, por lo que es importante su evaluación
depuración lenta es principalmente renal. En dosis y estratificación de riesgo tromboembólico para deter-
terapéuticas, una proporción considerable de la he- minar el tipo de tromboprofilaxis (Nivel 1 ACCP).
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Recomendación: en pacientes con cáncer y una Recomendación: en los pacientes que reciben
enfermedad médica aguda, se recomienda el uso manejo con heparina y cuando el médico considera
de tromboprofilaxis de rutina como cualquier otro el riesgo de TIH, se recomienda el monitoreo pla-
paciente de alto riesgo tromboembólico a base de quetario (Grado C ACCP).
HBPM, HNF o fonduparinux (Grado A ACCP).
Evidencia: la incidencia de un ETV en pacientes b) En pacientes bajo tromboprofilaxis farmacológi-
con cáncer sometidos a cirugía se incrementa dos ca, ¿en qué situaciones se debe sospechar de TIH?
veces más con relación a los que no requieren de
un procedimiento quirúrgico (Nivel 3 NICE). Evidencia: los pacientes que reciben heparina
Recomendación: en pacientes con cáncer some- tienen un riesgo estimado de TIH de 0.1 a 1%. (Ni-
tidos a un procedimiento quirúrgico se recomienda vel 2 ACCP). La TIH puede ocurrir en pacientes que
la tromboprofilaxis con HBPM, HNF o fonduparinux están recibiendo heparina o han recibido heparina
(Grado A ACCP). en las últimas dos semanas, y que presentan una
disminución del recuento plaquetario mayor a 50%
Trombocitopenia inducida por heparina y/o presencia de evento trombótico entre los días
5 y 14 e inclusive posterior al inicio de la heparina
a) En pacientes bajo tromboprofilaxis farmacológica, resultado del estado paradójico de hipercoagulabili-
¿está indicado el monitoreo rutinario de plaquetas? dad causado por la activación plaquetaria asociada
a la generación de trombina (Nivel 1 ACCP).
Evidencia: la HNF y la HBPM son comúnmente Recomendación: se debe sospechar la TIH en pa-
utilizadas como medidas de tromboprofilaxis farma- cientes que están recibiendo o han recibido heparina
cológica en pacientes con riesgo de un ETV des- en las últimas dos semanas y presentan una dismi-
pués de una cirugía o enfermedad de origen médi- nución de más de 50% del recuento plaquetario y/o
co admitidos en hospitalización. El uso de la HNF presencia de un evento trombótico (Grado C ACCP).
y HBPM está asociado a sangrado, anafilaxia, os-
teoporosis y trombocitopenia inducida por heparina c) En pacientes con sospecha o confirmación de TIH,
(TIH), este último es el efecto adverso más grave ¿qué medidas de tromboprofilaxis están indicadas?
de estos fármacos, siendo menos frecuente con el
uso de HBPM. La TIH se presenta en > 1% de los Evidencia: en los pacientes con alta sospecha o
pacientes que reciben heparina y se clasifica en confirmación de TIH, el manejo se basa en anticoa-
dos tipos, la TIH 2 o forma inmunitaria y TIH 1 o no gulantes no heparínicos como fonduparinux sobre
inmunitaria. La TIH 2 se caracteriza por una mayor el uso de heparina no fraccionada y HBPM (Nivel
disminución del recuento plaquetario y un estado 2 ACCP).
paradójico de hipercoagulabilidad responsable de Recomendación: en los pacientes con alta sos-
la mayor morbilidad y mortalidad de estos casos. pecha o confirmación de TIH, se recomienda trata-
La TIH 2 se define como una disminución relativa miento tromboprofiláctico a base de anticoagulantes
de la cuenta plaquetaria mayor de 50% del valor ba- no heparínicos como fonduparinux sobre el uso de
sal o una disminución absoluta menor a 100 x109/L, heparina no fraccionada y HBPM (Grado C ACCP).
típicamente después de 5 a 10 días de iniciar la
administración de heparina. Si la trombocitopenia d) ¿Está indicada la transfusión profiláctica de pla-
se desarrolla dentro de las primeras 24 horas de ex- quetas en pacientes sin sangrado activo con sos-
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posición a la heparina, la TIH es considerada en pa-
cientes con exposición reciente a la heparina (100
pecha o confirmación de trombocitopenia inducida
por heparina?
días o menos) debido a la formación de anticuerpos
antiplaquetarios tipo 4 (Ac PF4). La TIH 1 se carac- Evidencia: en los pacientes con alta sospecha o
teriza por una disminución de las plaquetas entre confirmación de TIH sin evidencia de sangrado ac-
100 a 130 x109/L, siendo la forma más común de tivo, no está justificada la transfusión profiláctica de
presentación, habitualmente dentro de los primeros plaquetas (Nivel 2 ACCP).
cuatro días de administración de la heparina y se Recomendación: no se recomienda la transfu-
debe a una interacción directa de la heparina con sión de plaquetas en los pacientes con fuerte sos-
las plaquetas (alteración inducida por el fármaco. pecha o confirmación de TIH sin evidencia de san-
(Nivel 1 ACCP). grado (Grado C ACCP).
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Heparina no fraccionada (HNF)
do se requiere un rápido efecto anticoagulante en
pacientes pediátricos, tanto para tromboprofilaxis
como para el tratamiento del tromboembolismo.46,47
También conocida como heparina estándar, es el Las heparinas de bajo peso molecular son un
anticoagulante natural más empleado en la pobla- grupo heterogéneo de sustancias derivadas de
ción pediátrica. La heparina presenta limitaciones la heparina clásica por despolimerización de sus
que hacen que su efecto anticoagulante sea muy cadenas mediante distintos métodos químicos
variable, y se debe a su unión específica a ciertas o enzimáticos, obteniendo fragmentos con un
células y proteínas plasmáticas que limitan su dis- peso medio molecular de 5,000 Da. Al igual que
ponibilidad para unirse a la antitrombina. Esto se la HNF, las HBPM producen su efecto anticoa-
traduce clínicamente en su escaso efecto en dosis gulante a través de su unión a la antitrombina,
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mediada por el pentasacárido específico y que es correlación entre anti-Fxa y TPT en este grupo
responsable de la inhibición del factor Xa. A dife- de pacientes (cuadro VII). Uno de los esquemas
rencia de la HNF, las HBPM poseen una mayor empleados en pediatría para la administración
capacidad de inhibición de la función anti Xa, que profiláctica de HNF propuesto por este grupo de
de la Anti-IIa, con un cociente de actividad Anti- consenso es:
Xa/Anti-IIa mayor a 1.
Un concepto importante es que las HBPM son 1. Sin bolo inicial
fármacos distintos y no intercambiables y que con 2. Infusión continua: 10 U/kg/h
cada producto varía también su capacidad anti- 3. Mantener rangos de TTPa menores a 50 seg,
trombótica (aunque posean igual actividad anti Xa) monitorizando cada 48 horas.
y su riesgo hemorrágico. Las HBPM, al acortar sus
cadenas, han adquirido una serie de propiedades Entre los efectos adversos a considerar en el
biológicas debidas todas a una menor afinidad por niño es importante mencionar:
las células endoteliales y macrófagos. Esto conlleva Hemorragia: incidencia reportada de 1.5% de los
una serie de ventajas con respecto a la HNF, que niños tratados con HNF para tratamiento de TVP y
se pueden resumir en: mayor biodisponibilidad, vida EP, y hasta 24% en niños hospitalizados en terapia
media más larga (2 a 4 h), efecto antitrombótico intensiva y que reciben heparina por diferentes in-
más eficaz y seguro y menor frecuencia de efectos dicaciones. Se requieren estudios para determinar
secundarios (trombocitopenia y osteoporosis). Esto la frecuencia real de hemorragia inducida por HNF
permite que se puedan administrar una o dos veces en pacientes pediátricos que reciben dosis terapéu-
al día y que en general no necesiten monitorización ticas adecuadas.61,63
de laboratorio.42, 48-52 Osteoporosis: hay algunos casos relacionados
La predicción del grado de anticoagulación se- con esta complicación asociada a la administra-
gún la dosis ponderal para cada paciente parece ción de heparina. En algunos de los reportes los
ser menor en niños en comparación con los adul- pacientes recibían esteroides de manera concomi-
tos.53,54 Sin embargo, los rangos terapéuticos han tante.64 Con base en los hallazgos encontrados en
sido extrapolados de sujetos adultos y están ba- pacientes adultos, donde con mayor frecuencia se
sados en los niveles plasmáticos de anti-Xa (0.5 ha encontrado la asociación HNF-osteoporosis, se
a 1 U/mL) a las 4 a 6 horas de la administración sugiere no emplear el fármaco por tiempo prolon-
subcutánea. Además, el impacto clínico no ha sido gado, principalmente si hay alternativas disponibles
establecido.55-58 para la anticoagulación.65
Trombocitopenia: complicación encontrada con
Profilaxis en trombosis venosa profunda la administración de dosis desde profilácticas hasta
supraterapéuticas en pacientes de 3 meses a 15
Heparina no fraccionada años. Hay reportes de estudios en pacientes de te-
rapia intensiva donde la complicación se presenta
En la práctica clínica pediátrica se ha hecho eviden- en 2% de los mismos.66-71
te la dificultad para ajustar la dosis terapéutica de
la HNF y se han aplicado nomogramas para su do-
sificación, mismos que han sido validados para su
Cuadro VII. Administración de heparina en pacientes
empleo en pediatría.59-62 No hay datos suficientes
pediátricos.
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para definir la dosis profiláctica óptima de HNF. La
práctica clínica pediátrica recomienda 10 U/kg/hora Minutos Vigilancia
en infusión continua. Bolo de de TTPa
La falta de certeza para el uso de TTP y FXa TTPa U/kg suspensión Porcentaje (horas)
en la definición de rangos terapéuticos en pa-
cientes pediátricos, representa un problema para < 50 50 0 +10 4
la óptima vigilancia de la heparina. Mientras no 50 a 59 0 0 +10 4
haya datos publicados para apoyar esta prácti- 60 a 85 0 0 0 24 horas después
86 a 95 0 0 -10 4
ca, muchos clínicos emplean de manera prefe-
96 a 120 0 30 -10 4
rencial anti-Fxa en niños menores de un año en > 120 0 60 -15 4
las unidades de cuidados intensivos. Hay poca
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Heparina de bajo peso molecular 2. Evitar la TVP relacionada a la presencia del caté-
ter utilizado para la alimentación parenteral pro-
La dosis profiláctica de HBPM se ajusta de acuerdo longada.
a la titulación de actividad de antifactor Xa (factor 3. Mantener la permeabilidad del catéter.
X) que debe encontrarse entre 0.35 a 0.7 U/mL.
La dosis utilizada para alcanzar esta actividad es Diversas publicaciones sugieren que la profilaxis
diferente para cada HPBM. Es necesario recordar con heparina en niños con CVC podría disminuir
que cada medicamento cuenta con un perfil farma- las complicaciones como TVP o colonización bac-
cocinético distinto, por lo que las dosis individuales teriana, sin embargo, ninguna emite recomendacio-
varían entre un producto y otro. Las dosis iniciales nes.57,61,76 En relación a la profilaxis ante la presen-
sugeridas para enoxaparina (una de las HBPM más cia del catéter, se publicó el estudio PROTEKT,55
utilizadas en México) es: en el que se seleccionó a niños mayores de tres
meses de edad a los que se administró HBPM y
Profilaxis se le comparó con otro grupo manejado sólo con
apoyo general convencional. La incidencia de TVP
• Menores de dos meses: 0.75 mg/kg cada 12 ho- asociada a catéter fue de 14.1 vs 12% del grupo
ras, subcutánea.60 control. Sin embargo, el estudio se dio por termi-
• Mayores de dos meses: 0.5 mg/kg cada 12 nado debido al bajo número de pacientes que pu-
horas. 47,60 dieron ser reclutados y no alcanzó una diferencia
• Se recomienda la monitorización de niveles anti- estadísticamente significativa (NICE 1-).
FXa en niños y recién nacidos.60 La información derivada de evidencia científica
es insuficiente para recomendar el empleo rutinario
Los efectos adversos relacionados al uso de de tromboprofilaxis en niños por la sola presencia
HPBM son similares a los de la HNF aunque en de catéter venoso central, ya que aun cuando la
recién nacidos el riesgo de hemorragia no está es- incidencia de trombosis por CVC es alta, no se ha
tablecido.72 En este grupo de pacientes candidatos podido demostrar la utilidad de la tromboprofilaxis
al empleo de anticoagulantes, deberá descartarse farmacológica por el riesgo de los medicamentos.65
a través de estudios de estudios de imagen la pre-
sencia de hemorragia intracraneana antes de ini- Catéteres para administrar de nutrición parenteral
ciar el tratamiento.73 La frecuencia de osteoporosis
y trombocitopenia es menor que con la HNF. Evidencia: En el caso de pacientes con CVC para
administración de nutrición parenteral por tiempo
PROFILAXIS ANTITROMBÓTICA PRIMARIA EN prolongado, se ha reportado incidencia hasta de
PRESENCIA DE CATÉTER VENOSO CENTRAL 35%, dependiendo del método diagnóstico emplea-
(CVC) do. La trombosis relacionada a la presencia catéter
es, junto con la sepsis, la complicación clínica más
Trombosis asociada a catéter importante que se presenta en los pacientes con
nutrición parenteral.77,78 Entre los factores asocia-
Evidencia: diversas publicaciones han mostrado dos a la génesis de la trombosis están el daño en-
de que los CVC son la causa más frecuente de dotelial durante la inserción del catéter, la oclusión
tromboembolismo en el grupo pediátrico y res- de los vasos sanguíneos, los estados de flujo bajo,
ponsables de 80% de las TVP en neonatos 122 y
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32% en niños. 74 (2b) La TVP se asocia a la sola
la estasis sanguínea, el flujo turbulento, la hipervis-
cosidad o hipercoagulabilidad, las características
presencia de catéteres, siendo más frecuente en del paciente, velocidad de infusión, así como el ma-
catéteres femorales.75 (nivel de evidencia 1 reco- terial del que está hecho el catéter.79
mendación B). El empleo de heparina en catéteres para infusión
de nutrición parenteral se fundamenta en los si-
La profilaxis en casos de presencia de CVC estaría guientes beneficios: acción anticoagulante, preven-
encaminada a: ción de la infección (trombo como nido de coloniza-
ción microbiana) y activación de la lipoproteinlipasa.
1. Evitar la TVP relacionada a la presencia del ca- En relación al riesgo desarrollo de infección, está
téter. reportado que impregnar catéteres con heparina
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a) La tromboprofilaxis ¿está recomendada en pa-
cientes pediátricos con fibrilación auricular (FA)?
gunos esquemas, más no ha demostrado diferencia
estadísticamente significativa en relación a la mor-
talidad (nivel de evidencia 2).40,65
Evidencia: La FA es una arritmia poco frecuente Recomendación: Para la profilaxis de trombosis
en la edad pediátrica, donde están presentes meca- en pacientes sometidos a cirugía para corrección
nismos tromboembólicos complejos en los que inte- de fístula de Blalock Taussig, se recomienda que
ractúan factores de riesgo relacionados con estasis en los primeros 30 días postquirúrgicos el uso de
auricular, disfunción endotelial e hipercoagulación HNF o HBPM (nivel de recomendación C). Posterior
sistémica y posiblemente local.84 a este periodo, se recomienda el uso de ácido acetil
En pacientes adultos con factores de riesgo la FA salicílico (ASA) a dosis antiagregante (nivel de re-
se presenta en 3 a 7% de los casos, y el no emplear comendación D).
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e) ¿Está recomendada la tromboprofilaxis primaria
con respecto a la duración y tipo de tratamiento (ni-
vel de recomendación C).
en pacientes pediátricos con cirugía de Fontan?
g) ¿Está recomendada la tromboprofilaxis primaria
Evidencia: El procedimiento de Fontan o su ver- en síndrome de antifosfolípidos?
sión modificada, es el tratamiento quirúrgico definiti-
vo para la mayor parte de los casos de corazón uni- Evidencia: El síndrome antifosfolípido (SAF) es
ventricular, siendo el tromboembolismo la principal una causa frecuente de trombosis, profundas o
causa de morbimortalidad temprana y tardía, con superficiales, arteriales o venosas. En un estudio
incidencias de 3 a 16%,89 aun cuando otros autores llevado a cabo por Cervera y col. en 1,000 pacien-
reportan incidencias mayores hasta de 20 a 30%.90 tes diagnosticados con SAF, 53.1% tenían la forma
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primaria de la enfermedad y el resto la tenía aso- tromboembolismo venoso, sin embargo, la limitante
ciada a otra condición inmunitaria o reumatológica. metodológica es que no se contó con grupo con-
Del total de pacientes, 51.7% tuvieron un evento trol.101,103-105
trombótico como primera manifestación de la en- Hay dos estudios relacionados exclusivamente
fermedad: 31.7% TVP, 9.1% tromboflebitis super- en pacientes con cáncer. El estudio PARKAA usó
ficial, 9% TEP y 1.9% gangrena digital. En el se- concentrado de antitrombina en niños con LLA tra-
guimiento de pacientes con SAF que habían tenido tados con L-asparaginasa.105 El estudio no fue su-
un evento trombótico, los pacientes que no tuvieron ficiente para mostrar eficacia. El segundo estudio
tromboprofilaxis presentaron una mayor frecuencia evaluó el uso de warfarina para la prevención de
de trombosis recurrentes. Por lo tanto se ha reco- trombosis asociada a catéter en niños con cáncer.
mendado la profilaxis una vez manifestado el primer Dichos estudios presentaron problemas en su cali-
evento trombótico.94-97 La profilaxis en el paciente dad metodológica por lo que sus resultados no fue-
sin evento tromboembólico previo ha sido motivo de ron concluyentes (nivel de evidencia 2-).100,106
controversia.94-97 Estudios recientes han analizado el uso de me-
La revisión de estudios de cohorte y de casos y didas mecánicas de tromboprofilaxis e indican que
controles, así como la experiencia del CGE reporta empleadas como monoterapia para la prevención
mayor seguridad con el empleo de HBPM.94-97 de ETV, reducen su frecuencia hasta 66% pero
Recomendaciones: En los pacientes con SAF sólo 33% en la frecuencia de TEP. Clagett realizó
y antecedente de un evento de trombosis, se re- un metaanálisis en el que se reportó que con el uso
comienda la profilaxis antitrombótica ya sea con de compresión neumática de las piernas se obser-
HNF o HBPM (nivel de recomendación C).94-97 En vó una disminución del tromboembolismo de 12.8%
pacientes con SAF sin antecedente de trombosis comparado con 21% del grupo control. Por lo tanto,
o con contraindicación para la administración de en pacientes en quienes no es posible proporcionar
heparina, se recomiendan medidas de profilaxis tromboprofilaxis farmacológica, puede ser usada la
no farmacológicas (nivel de recomendación C).94-97 profilaxis mecánica (nivel de evidencia 1+).109,111
Se recomienda el uso de HBPM sobre HNF para la Recomendación: La trombopofilaxis en niños
profilaxis de trombosis venosa profunda en pacien- con cáncer aún no puede estar recomendada y se
tes con SAF (nivel de recomendación D).98,99 requieren estudios multicéntricos con alto rigor me-
todológico (D).
PROFILAXIS ANTITROMBÓTICA EN PACIENTE Ya que el paciente pediátrico con cáncer presen-
CON CÁNCER ta varias condiciones de comorbilidad en la unidad
de cuidados intensivos, puede verse beneficiado
En el paciente pediátrico con cáncer se han reco- con esta estrategia profiláctica, aunque la experien-
nocido varios factores de riesgo como son: inmo- cia reportada sólo sea en pacientes adultos (nivel
vilización prolongada, presencia de CVC, sepsis, de recomendación B).109,111
uso de L asparaginasa, presencia de metástasis,
procedimientos quirúrgicos, fase de inducción de PROFILAXIS ANTITROMBÓTICA PRIMARIA EN
la enfermedad, mutaciones predisponentes y uso PRESENCIA DE QUEMADURAS
de ventilación mecánica. La experiencia publicada
hasta el momento no apoya el empleo rutinario de Evidencia: Existe poca o nula información deriva-
tromboprofilaxis en pacientes con cáncer debido a da de estudios en pacientes pediátricos quemados,
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children with acute lymphoblastic leukemia and a central E-mail: revistacma95@yahoo.com.mx
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frecuencia e importancia y continuarán aumentando en área traumatizada y a la constricción de las vénulas. Los
el futuro. cambios de la microcirculación son inducidos por media-
Cuando se produce una ruptura de la piel o de las dores químicos. Estos mediadores además aumentan la
mucosas, los microorganismos pueden pasar del medio permeabilidad capilar, con lo que los líquidos y las células
externo al interno. En un intento por localizar el agente sanguíneas pasan al espacio extravascular provocando
invasor, se produce una reacción en el tejido conectivo hinchazón y aumento de la presión local que es lo que
vascularizado que se denomina inflamación. Este com- origina el dolor.2
plejo proceso produce la acumulación de líquidos y leu-
cocitos en el espacio extravascular. La inflamación pue- Traumatismo musculoesquéletico
de originarse por factores endógenos (necrosis tisular en pediatría3
o ruptura ósea), exógenos (p. ej., lesiones por agentes
mecánicos, corte, etc.), físicos (quemaduras), químicos Los traumatismos musculoesqueléticos en la edad pe-
(corrosivos), biológicos (microorganismos) e inmuno- diátrica representan 15% de las lesiones en este grupo
lógicos (reacciones de hipersensibilidad). Aunque en al- de pacientes.
gunos casos la inflamación puede tener consecuencias Las fracturas en la edad pediátrica pueden involu-
nocivas (p. ej., en la hipersensibilidad), por lo general crar una alteración de los mecanismos de crecimien-
es una respuesta protectora que trata de restaurar los to (15% de las fracturas) por lo que el médico debe
tejidos lesionados. conocer las presentaciones más frecuentes y hacer
Tras un proceso inflamatorio puede ocurrir lo siguiente:2 un diagnóstico preciso para evitar las secuelas de la
lesión fisiaria.
1. Resolución con retorno a una estructura y función Es frecuente el diagnóstico de un esguince de muñe-
normales. ca o tobillo en niños, cuando realmente se trata de una
2. Supuración con formación de absceso. lesión fisiaria de primer grado, esto se entiende porque
3. Hinchazón con regeneración de tejido especializado la estructura biológica del ligamento a esta edad es más
o fibroso formando una cicatriz. resistente a las fuerzas de cizallamiento que el disco de
4. Persistencia del agente causante, lo cual favorece un crecimiento (especialmente en la zona hipertrófica).
proceso crónico. Debido a ello, el diagnóstico de esguince en la edad pe-
diátrica se debe confirmar después de un delicado exa-
La respuesta inflamatoria está mediada por compo- men físico y radiológico, para evitar minimizar una lesión
nentes plasmáticos, células circulantes, vasos sanguíneos mayor.
y constituyentes celulares y extracelulares del tejido Los accidentes son la principal causa de muerte y dis-
conectivo. Entre las células circulantes se incluyen los capacidad en los niños mayores de un año de edad, por
neutrófilos, monocitos, eosinófilos, linfocitos, basófilos lo que los médicos y especialmente los padres de familia
y plaquetas. Las células del tejido conectivo son los mas- deben estar informados acerca de los riesgos que exis-
tocitos, que rodean los vasos sanguíneos y los fibroblas- ten en casa y lugares de esparcimiento.
tos. La matriz extracelular consta de proteínas fibrosas Otra causa de traumatismo en niños es el síndrome del
estructurales (colágeno, elastina), glucoproteínas ad- niño maltratado, que el médico debe sospechar para involu-
herentes (fibroconectina, laminina, entactina, tenascina crar al servicio de trabajo social y a las autoridades judiciales.
y otras) y proteoglucanos. La membrana basal es un Es importante señalar otro factor de inflamación y do-
componente especializado de la matriz extracelular que lor del sistema musculoesquelético que no se deriva de
consiste en glucoproteínas adhesivas y proteoglucanos.2 un traumatismo: las epifisitis propias de la edad pediátrica.
Los cuatro signos cardinales de la inflamación descritos
por Paracelso (30 a.C. al 38 d.C.) son: Lesiones fisiarias3
La clasificación más utilizada es la de Salter y Harris • Fracturas femorales. En niños que caminan o corren, es
que divide a las lesiones fisiarias en cinco tipos: posible pensar en una caída accidental, pero cuando el
paciente no camina, la sospecha de maltrato es mayor.
I. Lesión a través de la fisis, lesión por deslizamiento. • Fractura de clavícula y escápula ipsolateral.
II. Trazo de fractura desde la metáfisis hasta la fisis (for- • Fracturas en huesos de la mano y el pie.
mación del triángulo de Thurstan Holland). • Fracturas del cráneo.
III. Trazo epifisiario-fisiario.
IV. Trazo que atraviesa la metáfisis-fisis y epífisis. Se han informado fracturas en prácticamente todos
V. Desaparición de la fisis por impactación de la misma. los huesos, por lo que la asociación de edad menor a
tres años con un cuidador que no refiere algún antece-
La incidencia de estas lesiones es mayor entre los dente traumático, y las localizaciones antes menciona-
11 y 15 años de edad, la tipo II es la más frecuente en das debe hacer surgir la sospecha de síndrome del niño
falanges de la mano, parte distal del radio distal y de maltratado.
la tibia. El tratamiento depende de la lesión, se debe informar
El cuadro clínico se caracteriza por dolor, aumento a las autoridades judiciales que seguirán el caso desde
de volumen y pérdida de la función de la zona afectada. un tribunal.
En los casos de miembros pélvicos se puede presentar
incapacidad para apoyar la extremidad. Epifisitis y apofisitis3
El tratamiento inicial son analgésicos, antiinflamato-
rios e inmovilización. La reducción cerrada con o sin Osgood-Shlatter o epifisitis de la tuberosidad
fijación interna es la primera opción para tratar dichas anterior de la tibia
lesiones. La fijación interna se puede realizar con clavos
o tornillos, haciendo énfasis en que la fijación transfisiaria Se refiere a la separación de algunos fragmentos de la
sólo se debe hacer con clavos sin rosca para evitar lesio- tuberosidad condroósea de la tibia con variabilidad en la
nar más dicha estructura. ruptura (avulsión) del tendón rotuliano.
El pronóstico de estas lesiones dependerá del El trauma repetitivo crónico es la causa más aceptada
desplazamiento y la conminución de la zona dañada de este trastorno, que también se puede explicar como
de la fisis. La edad es importante, ya que mientras una entesitis.
menor edad tenga el paciente al momento de la Con esta separación de los fragmentos de la tuberosi-
fractura, mayor será el potencial de crear secuelas dad, el centro de osificación se tracciona y se sitúa en la
durante el crecimiento como las deformidades an- zona anterior a su posición original, por ello al momento
gulares y las discrepancias en los miembros; situa- de la osificación los niños quedan con una protuberancia
ción inusual en un niño de 15 años o en una niña de a nivel de la tuberosidad.
13 años de edad. El cuadro clínico se caracteriza por aumento de volu-
men en la tuberosidad anterior de la tibia, dolor e inca-
Maltrato infantil3 pacidad para la extensión de la rodilla.
El tratamiento de este padecimiento es informar al
Los niños menores de tres años están especialmente paciente y a sus padres de la evolución natural autoli-
expuestos al maltrato, y de ellos, los niños menores de mitada de la enfermedad. Se deben restringir las acti-
un año son quienes se presentan más con este tipo de vidades físicas, ya que la tracción crónica y repetida del
lesiones. tendón rotuliano perpetúa los síntomas, y se deben co-
Los principales agresores son los cuidadores (padres, locar soportes o incluso inmovilizar la rodilla. La ciru-
familiares, niñeras, etc.) por lo que el interrogatorio ini- gía se lleva a cabo en casos extraordinarios, cuando los
cial es importante. Es frecuente, que el cuidador traiga síntomas persisten y hay un desprendimiento total de la
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al niño al Servicio de Urgencias argumentando que em- tuberosidad con la inserción tendinosa.
pezó a llorar sin causa aparente quejándose de alguna
extremidad hinchada. Algunos signos clínicos frecuentes Enfermedad de Sever o apofisitis del talón
que acompañan al síndrome del niño maltratado son he-
matomas, abrasiones, laceraciones, cicatrices y quema- El dolor del talón en un niño muchas veces se debe a una
duras. apofisitis del calcáneo, por un traumatismo repetido, es
Las zonas características de lesión esquelética en ni- por ello que se debe incluir en la sospecha diagnóstica
ños maltratados son: en jóvenes atletas.
No existe un consenso en cuanto al sitio exacto de la vilización, antiinflamatorios y terapia física. Los casos
lesión. Hay teorías que postulan una fractura por com- que no responden al tratamiento conservador (lesiones
presión del área metafisiaria del calcáneo y otras supo- complejas o bloqueo articular) precisan una artroscopia
nen una lesión epifisiaria. diagnóstica y terapéutica.
Radiológicamente, se observa una imagen nebulosa Es importante tener en cuenta que en un atleta de
alrededor de la fisis del calcáneo. Los ejercicios de es- alto rendimiento la terapia física agresiva y temprana es
tiramiento, los soportes y ortesis del talón son el trata- obligatoria.
miento con mejor resultado, ya que este padecimiento Los esguinces o lesiones ligamentarias, se deben diag-
también se autolimita. nosticar en forma precisa y se deben identificar las po-
sibles lesiones relacionadas. Se debe inmovilizar y dar
Lesiones en bailarinas3 analgesia como tratamiento inmediato.
Cuando existe una ruptura de ligamento cruzado
Os trigonum (hueso trígono) anterior, el tratamiento es la reconstrucción del mismo
con alguna de las diferentes técnicas conocidas, y reha-
Es un hueso localizado atrás del proceso lateral pos- bilitación intensiva.
terior del astrágalo que se forma de los ocho a los 11
años de edad, y que al no fusionarse, queda unido por Lesiones de los músculos isquiotibiales
un puente fibroso.
El mecanismo de flexión plantar forzada y repetida Los músculos bíceps femoral, semitendinoso y semi-
del tobillo, como lo hacen las practicantes de ballet (po- membranoso, se involucran activamente durante los
sición dmi-pointe y en pointe) crean un pinzamiento de movimientos rotacionales de la rodilla.
dicho hueso y en ocasiones, fractura del puente fibroso, Con frecuencia se presentan mialgias de este grupo
lo cual provoca dolor y aumento de volumen local. muscular, por un esfuerzo excesivo o por falta de acon-
El cuadro clínico incluye dolor en el área posterior dicionamiento previo al ejercicio, conocidos como des-
del tobillo, especialmente con la flexión plantar forzada, garros musculares.
movimiento que reproduce el efecto de «cascanueces» El cuadro clínico es dolor en la superficie interna del
que tiene el labio posterior de la tibia distal y el calcáneo muslo con afectación de la ingle y de la cara interna de
con el hueso trígono. la rodilla.
El estudio más útil es la resonancia magnética nuclear, El tratamiento es con antiinflamatorios, aplicación de
con la cual se pueden descartar fracturas del proceso hielo local y relajantes musculares, además de vendaje
posterior, y se observa la reacción inflamatoria local por compresivo. En general los esguinces, luxaciones y frac-
la ruptura de la sincondrosis del os trigonum. turas, se deberán tratar según los lineamientos ortopé-
El tratamiento se inicia en forma conservadora con dicos establecidos.
seis semanas de inmovilización con bota corta suropo-
dálica y analgésicos. Después de estas seis semanas se Manejo del dolor postoperatorio
debe realizar un examen radiológico para confirmar la en cirugía ortopédica4
consolidación del fragmento óseo. En caso de que no se
presente consolidación y que persista el dolor, se realiza Después de un procedimiento quirúrgico el dolor es un
escisión del fragmento en forma abierta o artroscópica. síntoma frecuente y la necesidad de tratarlo es inminente.
El tratamiento con AINEs en el estado postoperato-
Lesiones meniscales y ligamentarias3 rio es útil, ya que la cirugía genera inflamación y dolor.
Es importante saber que para el dolor leve a moderado
Los movimientos de la rodilla en las actividades de alto el uso aislado de AINEs es suficiente, mientras que para
impacto, conjugan mecanismos que pueden crear ruptu- el dolor intenso, es preciso la combinación de éstos con
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ras meniscales y ligamentarias que originan lesiones de acetaminofeno o con opioides.
diversos grados. La idea del manejo analgésico en niños postoperados
La lesión meniscal, se presenta con dolor y aumen- es mantener una medicación constante para evitar fluc-
to de volumen de la articulación, con limitación para la tuaciones notables en los síntomas de dolor.
función. En niños esta conducta proactiva de analgesia man-
El diagnóstico es esencialmente clínico. La resonan- tendrá al paciente con el menor dolor posible, tomando
cia magnética puede ser un apoyo para confirmarlo. El en cuenta que algunas veces la vía de administración y la
tratamiento por lo general es conservador, con inmo- fórmula, son más importantes que el medicamento en sí.
Un niño que se somete a cirugía siempre deberá te- nueva generación de AINEs conocidos como inhibi-
ner una vía intravenosa que permitirá la administración dores selectivos de COX-2 o coxibs, que fueron in-
de analgésicos. ducidos a finales del siglo pasado. La diferencia central
Diclofenaco, ibuprofeno, ketoprofeno y ketorolaco entre los AINEs convencionales y los coxibs es que
son los AINEs más estudiados en pediatría. Se han los primeros suelen relacionarse con mayor riesgo de
hecho pocos estudios comparativos entre los AINEs daño gastrointestinal debido a que inhiben una enzima
y su efectividad para tratar dolor en niños, y no se responsable de la protección gástrica, en tanto que
ha podido concluir una diferencia contundente entre los coxibs ejercen su efecto terapéutico sin afectar las
éstos cuando se utilizan a dosis adecuadas. Tampoco enzimas responsables de la protección gástrica, por lo
existe un estudio que demuestre una incidencia ma- que el riesgo del daño gastrointestinal es menor. De-
yor de efectos adversos de un fármaco en particular, bido a sus efectos se recomienda administrar AINE
aunque algunas referencias causan controversia sobre únicamente cuando son indispensables. Los efectos
el ketorolaco como un medicamento que aumenta la adversos de los AINEs se presentan con más fre-
incidencia de sangrado. cuencia en adultos mayores y se refieren al uso de
El dolor después de la cirugía ortopédica habitual- Este documento
AINEs con una vidaesmedia
elaborado por Medigraphic
corta: diclofenaco, ibupro-
mente es significativo, incluso es mayor que con proce- feno, fluviprofeno y ketoprofeno. Se deben analizar
dimientos de cirugía general. La mayoría de estos proce- cautelosamente las indicaciones y se aconseja limitar
dimientos se realiza bajo anestesia general y/o regional al máximo la dosis y el tiempo de tratamiento. Se re-
y en ocasiones se aprovecha la presencia de un catéter comienda adoptar una actitud muy reservada con el
para extender la analgesia. uso de inhibidores selectivos de COX-2 en pacientes
En un estudio, Teiria y Meretoja, compararon ibupro- con enfermedades cardiovasculares debido a sus efec-
feno, diclofenaco y placebo en combinación con morfi- tos adversos.
na después de cirugía ortopédica mayor en niños. No
hubo diferencias entre los dos AINEs pero la necesidad Recomendación del tratamiento
de morfina fue significativamente mayor en el grupo tra- farmacológico de las lesiones
tado con placebo.La mayoría de los estudios demuestra musculoesqueléticas en el paciente
que los AINEs en combinación con opioides para tratar pediátrico5
el dolor postoperatorio en cirugía ortopédica son bien
tolerados y efectivos. En la mayoría de los casos de la patología traumática pe-
diátrica, el manejo farmacológico es por periodos cortos
Tratamiento del dolor5 (de cinco a 10 días) ya que el manejo ortopédico defini-
tivo (inmovilización, crioterapia, cirugía) es el analgésico
La atención y control del dolor varía dependiendo de y antiinflamatorio más importante.
diversos factores. En términos generales y según cada
caso destacan las recomendaciones de reposo, aplica- Diclofenaco
ción de frío o fisioterapia y uso de medicamentos como
AINEs tradicionales o inhibidores de la COX-2 ya que Es un medicamento que tiene una potencia analgésica y
cada uno tiene diferentes propiedades y mecanismos de antiinflamatoria adecuada para tratar la mayoría de los
acción. padecimientos traumáticos en el niño. Tras la administra-
Se deben analizar cautelosamente las indicaciones y ción de una cantidad equivalente a 50 mg de diclofenaco
se aconseja limitar al máximo las dosis y el tiempo de ácido libre, se obtiene un pico de las concentraciones
tratamiento. en plasma de 0.9 mg/mL, 2.75 mL, en un intervalo de
Se recomienda adoptar una actitud muy reservada una hora. El diclofenaco ácido libre se fija a las proteínas
con el uso de los inhibidores selectivos de COX 2 debi- séricas (99.7%), sobre todo a la albúmina (99.4%). El
do a sus efectos adversos. www.medigraphic.org.mx volumen aparente de distribución calculado es de 0.12 a
Los analgésicos son fármacos que contribuyen 0.17. El fármaco libre pasa al líquido sinovial, donde las
a aliviar el dolor y existen diversos tipos entre los concentraciones máximas se miden en intervalos de 2
cuales destacan los antiinflamatorios no esteroideos a 4 horas después de haber alcanzado la concentración
conocidos como AINEs. Entre los AINEs hay dos máxima en plasma. Su vida media aparente en el líquido
grandes clases: los conocidos como tradicionales o sinovial es de 3 a 6 horas. Dos horas después de haber
convencionales, como por ejemplo el diclofenaco, alcanzado el pico máximo en los niveles plasmáticos, las
naproxeno, ibuprofeno, etc. Por otra parte existe una concentraciones de la sustancia activa son más altas en el
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Tromboprofilaxis en pacientes
médicos y quirúrgicos: resultados
de un estudio multicéntrico
realizado en hospitales de la Ciudad
de México
Cabrera-Rayo A1, Hernández-Díaz EJ2, Guzmán-Rosales G2, Laguna-Her-
nández G3, Pliego-Reyes C4, Zendejas-Villanueva JL5, Pedraza-Méndez H6,
Rosas-Solís MI7, Rivera-Guevara ML7, Ortega-Román D7, Lozano-Villalba
FM7, García-Méndez N7, Hernández-Cid de León S7, Mata-Ruiz B8, Ramírez-
Montelongo S9, Avilés-Hernández R10, Duque-Molina C10
1
Internista intensivista. Coordinador de investigación
en Salud. Delegación Norte IMSS. Adscrito al servicio
Resumen de Medicina Interna, Hospital Regional 1º de Octu-
bre, ISSSTE, Ciudad de México.
ANTECEDENTES: la enfermedad tromboembólica venosa es una 2
Médico pasante en Servicio Social.
complicación que puede manifestarse durante o después de la hos- 3
Médico internista. Hospital Regional 1º de Octubre,
pitalización. Existen pocos antecedentes en nuestro país que evalúan ISSSTE, Ciudad de México.
el comportamiento médico en este tema. 4
Médico internista. Adscrito al Hospital Regional
Lic. Adolfo López Mateos, ISSSTE, Ciudad de México.
OBJETIVO: conocer la prescripción relacionada con el tipo, duración 5
Coordinador de planeación y enlace institucional.
y posibles causas de la omisión de tromboprofilaxis en pacientes
6
Coordinador de enseñanza.
hospitalizados.
7
Jefe de enseñanza e investigación.
Delegación Norte, IMSS.
8
Jefa de consulta externa.
MATERIAL Y MÉTODO: estudio descriptivo, transversal y no proba- 9
Jefa de Medicina Interna.
bilístico en el que de septiembre a noviembre de 2016 se evaluaron Hospital General de Zona núm. 24, IMSS, Ciudad
médicos de Medicina Interna, Cirugía General, Terapia Intensiva y de México.
Urgencias. Se recolectaron datos por cuestionario y presentación de 10
Médico internista. Jefatura de Servicios de Presta-
resultados a través de estadística descriptiva. También se evaluó la ciones Médicas, Delegación Norte IMSS.
duración de la prescripción y la dosis administrada.
Recibido: 25 de mayo 2017
RESULTADOS: se encuestaron 556 médicos adscritos, 14 jefes de
Aceptado: agosto 2017
servicio y 234 residentes (total: 804) de siete hospitales de la Ciudad
de México pertenecientes al sistema de salud. El 30% refirió que
su hospital cuenta con un programa de tromboprofilaxis; 97.7% la Correspondencia
considera segura y 1.2%, riesgosa. El 96% respondió que prescribe Dr. Alfredo Cabrera Rayo
tromboprofilaxis en sus pacientes; 592 (74%) utilizan alguna escala alfredo.cabrera@imss.gob.mx
de previsión clínica de enfermedad tromboembólica venosa. El 71% cabrerarayoalfredo@yahoo.com.mx
recomienda heparina de bajo peso molecular para tromboprofilaxis
y 0.74% administra anticoagulantes orales de nueva generación. Este artículo debe citarse como
Cabrera-Rayo A, Hernández-Díaz EJ, Guzmán-Rosales
CONCLUSIONES: la enfermedad tromboembólica venosa es poten- G, Laguna-Hernández G y col. Tromboprofilaxis
cialmente prevenible; sin embargo, la prescripción muestra oportu- en pacientes médicos y quirúrgicos: resultados
nidades de mejoría en aspectos de farmacología. de un estudio multicéntrico realizado en hospi-
tales de la Ciudad de México. Med Int Méx. 2017
PALABRAS CLAVE: tromboembolismo venoso, tromboprofilaxis, nov;33(6):746-753.
anticoagulantes orales, dosis. DOI: https://doi.org/10.24245/mim.v33i6.1461
746 www.medicinainterna.org.mx
Cabrera-Rayo A y col. Tromboprofilaxis en pacientes médicos y quirúrgicos
Abstract
BACKGROUND: Venous thromboembolic disease (VTE) is a complica-
tion that may occur during or after hospitalization. There are few ante-
cedents in our country that evaluate the medical behavior in this subject. 1
Internista intensivista. Coordinador de
OBJECTIVE: To know the prescription related to type, duration and pos- investigación en Salud. Delegación Norte
IMSS. Adscrito al servicio de Medicina
sible causes for omission of thromboprophylaxis in hospitalized patients. Interna, Hospital Regional 1º de Octubre,
ISSSTE, Ciudad de México.
MATERIAL AND METHOD: A descriptive, transversal and non- 2
Médico pasante en Servicio Social.
probabilistic study was done, in which from September to November 3
Médico internista. Hospital Regional 1º de
2016 physicians of Internal Medicine, General Surgery, Intensive Care Octubre, ISSSTE, Ciudad de México.
and Urgency were evaluated through a data collection by question- 4
Médico internista. Adscrito al Hospital
naire and presentation of results through descriptive statistics. We also Regional Lic. Adolfo López Mateos, ISSSTE,
evaluated duration of prescription and dose administered. Ciudad de México.
5
Coordinador de planeación y enlace
RESULTS: A total of 556 seconded physicians, 14 service heads, and institucional.
234 residents (804 in total) were surveyed in seven hospitals in Mexico
6
Coordinador de enseñanza.
City belonging to the health system. Thirty percent reported that their
7
Jefe de enseñanza e investigación.
Delegación Norte, IMSS.
hospital has a thromboprophylaxis program; 97.7% consider it safe and 8
Jefa de consulta externa.
1.2% risky; 96% responded that they prescribe thromboprophylaxis in 9
Jefa de Medicina Interna.
their patients; 592 (73.6%) used some clinical prediction scale for VTE; Hospital General de Zona núm. 24, IMSS,
71% recommended low molecular weight heparin for thrombo pro- Ciudad de México.
phylaxis and 0.74% administered new generation oral anticoagulants. 10
Médico internista. Jefatura de Servicios
de Prestaciones Médicas, Delegación
CONCLUSIONS: Venous thromboembolic disease is potentially pre- Norte IMSS.
ventable; however, prescription shows opportunities for improvement
in aspects of pharmacology. Correspondence
Dr. Alfredo Cabrera Rayo
KEYWORDS: venous thromboembolism; thromboprophylaxis; oral alfredo.cabrera@imss.gob.mx
anticoagulants; dose cabrerarayoalfredo@yahoo.com.mx
747
Medicina Interna de México 2017 noviembre;33(6)
748
Cabrera-Rayo A y col. Tromboprofilaxis en pacientes médicos y quirúrgicos
RESULTADOS 0
UCI Medicina Cirugía Urgencias
Interna General
Se aplicó encuesta a 556 médicos adscritos, 14
jefes de servicio y 234 residentes (Cuadro 1) de
siete hospitales de la Ciudad de México perte- Figura 1. Número de médicos encuestados por ser-
necientes al sistema de salud gubernamental (5 vicio.
del IMSS y 2 del ISSSTE). UCI: Unidad de Cuidados Intensivos.
749
Medicina Interna de México 2017 noviembre;33(6)
400
45.5%
350
300 97.7
32%
250
200 22.5%
Segura Innecesaria Costosa Riesgosa
150
De los 772 médicos que respondieron que En relación con las dosis, la aspirina se reco-
sí prescriben tromboprofilaxis, 568 (73.6%) mienda de 75-300 mg/día, el clopidogrel de 75
750
Cabrera-Rayo A y col. Tromboprofilaxis en pacientes médicos y quirúrgicos
Aspirina 71 Durante el
456
internamiento
Clopidogrel 18
De acuerdo con
146
la enfermedad
Warfarina 7
Figura 4. Respuestas a la pregunta: ¿Qué tipo de fár- Figura 5. Respuestas a la pregunta: ¿Por cuánto tiempo
maco recomienda para tromboprofilaxis? administra la tromboprofilaxis?
a 150 mg/día. Respecto de los anticoagulantes Los resultados de la encuesta muestran que
orales clásicos de acuerdo con INR, la dosis de la tromboprofilaxis es considerada segura por
heparina de bajo peso molecular es de 40 a 60 97.7% de los médicos; sin embargo, el hecho
mg/24 horas y la heparina no fraccionada de que 18 médicos especialistas o en formación la
3000 a 5000 U/día. consideren innecesaria, costosa o riesgosa se
refleja en que 4% de los entrevistados no pres-
Al cuestionarles por cuánto tiempo administran cribe tromboprofilaxis. Esta conducta también
tromboprofilaxis, 52 (6.7%) médicos especifica- se observa en otras entidades. Deheinzelin y
ron que de 10 a 14 días, 35 (4.4%) durante un colaboradores evaluaron la prescripción de
mes, 438 (56.7%) la duración del internamiento, tromboprofilaxis adecuada en pacientes hos-
140 (18.1%) según la enfermedad y 107 (13.9%) pitalizados en cuatro hospitales de Sao Paulo,
no contestaron (Figura 5). Brasil. Recabaron información relacionada con
factores de riesgo y prescripción de medidas
DISCUSIÓN farmacológicas y no farmacológicas en 1454
pacientes elegidos de manera aleatoria (589
La enfermedad tromboembólica venosa es un quirúrgicos y 865 médicos). De acuerdo con la
problema de salud pública potencialmente escala de Caprini, 29% de los pacientes con ries-
prevenible en pacientes hospitalizados. Sus go alto de enfermedad tromboembólica venosa
complicaciones pueden ocasionar extensión en no recibieron ningún tipo de tromboprofilaxis.12
los días de estancia, discapacidad prolongada,
incremento en los costos de atención y muerte. Dentali y su grupo evaluaron los efectos de la
Sin embargo, a pesar de contar con evidencia tromboprofilaxis en la incidencia de embolismo
fuerte de los beneficios de administrar trombo- pulmonar sintomático, embolismo pulmonar
profilaxis, muchos pacientes no la reciben de fatal, trombosis venosa profunda, todas las cau-
manera óptima.11 sas de mortalidad y sangrado mayor en 19,958
751
Medicina Interna de México 2017 noviembre;33(6)
pacientes. Durante el estudio los pacientes tuvie- 0.76) y embolismo pulmonar sintomático en
ron reducción significativa en la incidencia de 1 vs 3% (OR = 0.39; IC95%, 0.25-0.63). Además,
embolismo pulmonar, reducción no significativa el modo combinado fue mejor que cualquier
de trombosis venosa profunda, incremento no método farmacológico solo para reducir trombo-
significativo de sangrado mayor y ningún efecto sis venosa profunda (0.65 vs 4.2%; OR = 0.16;
en las causas totales de mortalidad, lo que refuer- IC95%, 0.07-0.34).16
za la seguridad y eficacia del procedimiento.13
La heparina de bajo peso molecular es la medi-
Själander publicó un metanálisis que confirmó da farmacológica de primera elección en 71%,
que la profilaxis con anticoagulantes previene mientras que la minoría prescribe los nuevos
aproximadamente la mitad de los eventos trom- anticoagulantes.
boembólicos esperados.14
Por lo menos tres nuevos anticoagulantes ora-
Son varias las intervenciones recomendadas les (rivaroxabán, dabigatrán y apixabán) han
como profilaxis venosa. Se incluyen dispositivos demostrado ser efectivos y seguros para trom-
mecánicos (medias de compresión graduada, boprofilaxis después del reemplazo total de
compresión neumática intermitente) y agentes cadera, rodilla y como medida preventiva en
farmacológicos, como heparinas, fondaparinux pacientes no quirúrgicos.17 El bajo porcentaje en
y anticoagulantes de nueva generación. su prescripción puede deberse a la posibilidad de
acceso institucional o a la oportunidad institucio-
La encuesta se realizó entre médicos que labo- nal y personal de capacitarse en sus beneficios.
ran en instituciones públicas y refleja el uso de
los recursos que tienen a la mano. La mayoría La duración de la tromboprofilaxis es un tema
de ellos (53.2%) prescribe vendaje compresivo delicado. En nuestra encuesta la respuesta más
y 43.8% refiere recomendar medias elásticas. frecuente (56.7%) fue que se otorga sólo durante
la hospitalización, mientras que 18.1% la admi-
La utilidad del vendaje compresivo usualmente nistra de acuerdo con la enfermedad. Es probable
colocado en las instituciones es controvertida y que en estos casos el médico no considere la
nosotros preferimos no recomendarlo. Asimis- posibilidad de trombosis fuera del hospital y, por
mo, la efectividad de las medias de compresión ello, no continúe la protección.
graduada se ha demostrado a través del tiempo.
Una revisión sistemática de 15 estudios con Amin y colaboradores evaluaron los expedientes
distribución al azar demostró reducir en 64% el de pacientes posoperados de cirugía ortopédica
riesgo relativo (RR) en pacientes de cirugía ge- o abdominal con riesgo de enfermedad trom-
neral. Esta reducción mejoró aún más cuando se boembólica venosa sin contraindicación para
combinó con tromboprofilaxis farmacológica.15 tromboprofilaxis egresados de 2005 a diciembre
de 2007. Se eligieron para análisis 14,009 pa-
Una revisión Cochrane de 11 estudios incluyó cientes. Sólo 27.9% de los 10,698 pacientes con
alrededor de 7000 pacientes en quienes se com- cirugía abdominal recibieron anticoagulación en
paró compresión mecánica vs combinación de el hospital. De los pacientes con cirugía ortopé-
métodos mecánicos y farmacológicos. El método dica, 91.1% recibió anticoagulante hospitalario.
combinado fue mejor que cualquier método Al egreso, sólo en 1.2% de los pacientes con
mecánico solo para reducir la trombosis venosa cirugía abdominal se continuó durante 30 días
profunda en 1 vs 4% (OR = 0.43; IC95%, 0.24- la prescripción de tromboprofilaxis, mientras que
752
Cabrera-Rayo A y col. Tromboprofilaxis en pacientes médicos y quirúrgicos
en 54.4% del grupo de pacientes con cirugía lism risk and prophylaxis in the acute hospital care setting
(ENDORSE study): a multinational cross-sectional study.
ortopédica se continuó la profilaxis durante 30 Lancet 2008 Jun 7;371(9628):1914.
días más posterior al egreso.18 9. Goldhaber SZ, Tapson VF. A prospective registry of 5,451
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potencialmente prevenible; sin embargo, es II). Cir 2010;78:333-341.
evidente la subutilización de tromboprofilaxis 11. Sykes PK, Walsh K, Darcey CM, Hawkins HL, McKenzie DS,
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efectiva, por lo que es necesario reforzar la capa-
lism amongst patients in an acute tertiary referral teaching
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