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Universidad de Concepción

Facultad de Educación
Depto. Currículum e Instrucción

Literatura Infantil

Módulo I
Género Narrativo

Dra. Beatriz Figueroa Sandoval


Segundo semestre 2011
Género narrativo

Se caracteriza por

Relatar acontecimientos ficticios inventados


por un autor

que puede ser

Novelista Cuentista
el que crea una voz ficticia
llamada

Narrador

Mitos, leyendas, fábulas, crónicas, cuentos, microcuentos, etc.


La Narración
• La narración, relato o texto narrativo implica la presentación de
hechos reales o imaginarios, a través de la prosa y estructurados en
torno a una idea o tema central. Pertenecen a este género: las
novelas, los cuentos, las fábulas, etc.

El género narrativo presenta las siguientes características:


• La presencia de un narrador, que nos hace partícipe de los
acontecimientos.

• Acontecimientos que están relacionados entre sí y ubicados en un


espacio y un tiempo determinados.

• Los relatos presentan personajes, caracterizados con rasgos físicos


y sicológicos.
La Narración

• La narración presenta la evolución de los hechos y los


personajes

• La acción es el conjunto de hechos, a través de los cuales se


desarrolla el argumento. Éste se presenta en tres instancias:

a) Presentación (situación inicial).


b) Nudo y desarrollo.
c) Desenlace (situación final).
La Narración
• La narración es una modalidad discursiva que se utiliza para contar
una historia, un acontecimiento o una serie de hechos que le suceden
a unos personajes en un tiempo y espacios definidos.

• Es frecuente que la narración se mezcle con otra modalidad discursiva


como la descripción. Surge así el texto narrativo puro o bien el texto
narrativo descriptivo en el que, además es posible distinguir otra
modalidad discursiva que es el diálogo de los personajes.

• Si observamos la narración desde el punto de vista de la situación


comunicativa, podemos distinguir los siguientes elementos:
- Un emisor (narrador o escritor).
- Un texto (relato o historia).
- Un receptor (oyente o lector).
• Un marco social específico determinado por las relaciones de
carácter por el mundo de la ficción literaria - novelas, cuentos,
poemas narrativos ,etc.

• Una finalidad (entretener, informar, convencer, pedir, reclamar,


etc.).

• Un código que permite la transformación de la historia en


señales conocidas por emisor y receptor, sujeto a registros de
lenguaje pertinentes a la situación enunciativa.
• Narrar es contar hechos que acaecen a personajes en un lugar
y tiempo específicos. Tales hechos pueden ser reales – noticias,
crónicas, anécdotas, etc.-, o bien ficticios cuentos, mitos,
leyendas, fábulas, novelas, poemas épicos, etc.

• Las narraciones realistas cuentan hechos verosímiles que no


vulneran las convenciones de lo real. Podrían acontecer o
haber acontecido.

• Las narraciones fantásticas, en cambio, relatan sucesos


inverosímiles. El mundo de este tipo de relatos está poblado por
hadas, seres extraordinarios e inmortales, animales que hablan,
personajes que viajan en el tiempo y en el espacio.
Gramática o plan de
Narración literaria: Leyenda
un texto narrativo

Descripción de personajes, tiempo,


Exposición o
lugar, situación inicial. A menudo
situación inicial
comienza por “Había una vez”

Acontecimiento Presentación de un acontecimiento


gatillador que hace comenzar la historia.
Generalmente es introducido por “Un
día”.
Comprende la reacción del personaje
(lo que piensa o siente del
Complicación acontecimiento); el objetivo (lo que
decide hacer respecto al
acontecimiento) y la tentativa (el
esfuerzo del personaje para resolver el
problema).
Fin La consecuencia a largo plazo de la
acción del personaje que explica un
acontecimiento extraordinario,
expresando las ideas y creencias de
un pueblo o comunidad.
Situación
Inicial

Elemento
Gatillador

Complicación

Fin

Unidad 1 de 5º básico “Las leyendas nos cuentan de Chile”. Cuaderno del


alumno. Mineduc, P. 34
Género Narrativo

Taller 2:

Del relato ficticio El Hobbit:

1. ¿Por qué se puede decir que este relato es ficticio?

2. Considera el contenido del texto e intenta caracterizar al:

Emisor (escritor)
Mensaje (relato o historia)
Receptor ideal (lector)
Elementos del texto que caracterizan la ficción literaria.
La finalidad.
El código – señales conocidas por el emisor y receptor, registros de
lenguaje pertinentes a la situación enunciativa-.
Prof. Beatriz Figueroa S.
“La tertulia inesperada”
(fragmento)
“En un agujero en el suelo, vivía un hobbit. No un agujero húmedo, sucio,
repugnante, con restos de gusanos y olor a fango, ni tampoco un agujero seco,
desnudo y arenoso, sin nada en que sentarse o que comer: era un agujero- hobbit, y
eso significaba comodidad.
Tenía una puerta redonda, perfecta como un ojo de buey, pintada de verde, con
una manilla de bronce brillante, justo en el medio. La puerta se abría a un vestíbulo
cilíndrico, como un túnel: un túnel muy cómodo, sin humos, con paredes revestidas
de madera y suelos enlosados y alfombrados, provistos de sillas barnizadas, y
montones y montones de perchas para sombreros y abrigos; el hobbit era aficionado
a las visitas. El túnel se extendía serpenteando, y penetraba bastante, pero no
directamente, en la ladera de la colina- La Colina, como la llamaba toda la gente de
muchas millas alrededor-, y muchas puertecitas redondas se abrían en él, primero a
un lado y luego al otro. Nada de subir escaleras para el hobbit: dormitorios, cuartos de
baño, bodegas, despensas (muchas), armarios (habitaciones enteras dedicadas a
ropa), cocinas, comedores, se encontraban en la misma planta, y en verdad en el
mismo pasillo. Las mejores habitaciones estaban todas a la izquierda de la puerta
principal, pues eran las únicas que tenían ventanas, ventanas redondas,
profundamente excavadas, que miraban al jardín y los prados de más allá, caminos al
río.
Este hobbit era un hobbit acomodado, y se apellidaba Bolsón. Los Bolsón habían
vivido en las cercanías de La Colina desde hacía muchísimo tiempo, y la gente los
consideraba muy respetables, no sólo porque casi todos eran ricos, sino también
porque nunca tenían ninguna aventura ni hacían algo inesperado: uno podía saber lo
que diría un Bolsón acerca de cualquier asunto sin necesidad de preguntárselo. Ésta es
la historia de cómo un Bolsón tuvo una aventura, y se encontró a sí mismo haciendo y
diciendo cosas por completo inesperadas. Podría haber perdido el respeto de los
vecinos, pero ganó… Bueno, ya veréis si al final ganó algo”.

Tolkien, J. J. R. (2005). El Hobbit. Buenos Aires: Minotauro


Elementos del mundo Narrado

Son aquellos elementos que constituyen una obra narrativa.


Podemos reconocer los siguientes elementos:

• Narrador.
• Personajes.
• Acontecimientos.
Elementos del mundo Narrado:
1. El narrador

• Quien inventa o recrea una historia es el autor o escritor, pero quien la


cuenta, en definitiva es el narrador. El narrador puede situarse dentro del
acontecer como un personaje que participa de los hechos del mundo
narrado y contar en primera persona o puede estar fuera del relato y
narrar en tercera persona.

• El narrador es - en otros términos- el sujeto de la enunciación, una entidad


creada por el autor, a la que éste, convencionalmente, cede la palabra y
con ella todo el caudal de información que posee sobre los hechos que va
a narrar y sobre los personajes que se irán configurando en el desarrollo de
la historia.
Tipos de Narrador:

1. Si el narrador forma parte de la historia e interviene en


los sucesos narrados se denomina homodiegético (homo:
igual; diégesis: historia) y puede ser protagonista, testigo o
personaje.
a. El narrador protagonista cuenta los hechos en primera persona; el universo
representado está organizado en torno a su accionar, cuenta su propia
historia, el relato en consecuencia, es personalizado y marcadamente
subjetivo. Se produce la coincidencia entre narrador y protagonista en una
misma entidad o personaje.

“La señora Van Daan, Dussel y yo estábamos fregando los platos. Y lo que casi nunca
ocurre e iba seguramente a llamar la atención de mis compañeros de tareas: Yo había
guardado un silencio absoluto”.

Frank, A.(1984) El diario de Ana Frank. Santiago: Pehuén Editores.


b. El narrador testigo también narra en primera persona, sin embargo, asume un
rol de segundo orden; lo que narra le ocurre a otro; se comporta más bien como
un espectador del acontecer, es decir, narra lo que ve sin participar en la acción;
no es tan subjetivo como el anterior.

“Mi mamá estaba echa una furia con la Domitila por haber dejado la puerta
abierta o por estar durmiendo, pero la cuestión es que en todo caso después no
le dijo casi nada para que no se fuera”.

Paz, M.(2005) Papelucho. Santiago: Editorial Sudamericana.


c. El narrador personaje corresponde a un personaje secundario que narra lo
que le acontece al personaje principal o protagonista. A diferencia del
testigo, este narrador participa de la acción, pero sin ser él eje de ella.

“(…) De esta manera tuve conocimiento al tercer día, del drama de los
baobabs.
Fue también gracias al cordero y como preocupado por una profunda
duda, cuando el principito me preguntó:
- ¿Es verdad que los corderos se comen los arbustos?
- Sí, es cierto.
- ¡Ah, qué contento estoy!
No comprendí por qué era tan importante para él que los corderos se
comieran los arbustos”.

De Saint-Exupéry, A. (1998) El Principito. Santiago: Editorial Andrés Bello.


Tipos de Narrador:

2. El narrador heterodiegético (hétero: diferente) no forma parte del


relato y cuenta el acontecer desde fuera; por lo general utiliza la
tercera persona gramatical. Se caracteriza por poseer mayor
objetividad y distancia de los hechos narrados, puede adoptar dos
puntos de vista: Narrador omnisciente y narrador de conocimiento
relativo.
a. Narrador omnisciente: conoce todo respecto del mundo representado.
Es una especie de dios que sabe todo lo ocurrido en el pasado, se anticipa a
veces al futuro e interpreta los sentimientos y pensamientos de los
personajes.

“El muchacho vio por el espejo que el cofre estaba abierto. No comprendía cómo
había sido esto posible, porque estaba seguro que su madre había cerrado el cofre
antes de partir: jamás lo hubiera dejado abierto quedando su hijo solo en casa”.

Lagerlöf, S. (2001) El maravilloso viaje de Nils Holgersson. Santiago: Editorial Andrés Bello.
b. Narrador de conocimiento relativo u objetivo: asume el rol de una cámara
de cine que registra exclusivamente lo que ocurre en la exterioridad del
universo representado. Ofrece datos concretos, acciones de los personajes,
hechos, etc. No trata de interpretar los pensamientos ni los sentimientos de los
personajes, no penetra en el interior de sus conciencias. Trata de mostrar una
visión objetiva.

“(…) todo su cuerpo temblaba. El vampiro estaba de pie ante él respirando con
dificultad. Sus dientes hacían un atroz clic clac y sus ojos relucían como carbones
ardientes”.
Sommer- Bodenburg, A. (2006) El Pequeño vampiro. Santiago: Alfaguara.
Elementos del mundo narrado

Taller : 3
• Lee con atención los fragmentos y caracteriza los tipos de narrador de
acuerdo con los postulados teóricos anteriormente descritos.

“Todos tuvieron un gran éxito, menos el cohete.


Estaba tan húmedo por haber llorado, que no pudo arder. Lo mejor que Tipo de narrador:
había en él era la pólvora y ésta se hallaba tan mojada por las lágrimas,
_________________
que estaba inservible. Toda su pobre parentela, a la que no se dignaba
hablar sin una sonrisa despectiva, produjo un gran alboroto por el cielo Fundamentación:
como si fuesen magníficos ramilletes de oro, floreciendo en fuego”.
________________
Wilde, O. (2004) El príncipe feliz, el ruiseñor y la rosa y otros cuentos. Santiago: Editorial Andrés
Bello.

Prof. Beatriz Figueroa S.


Elementos del mundo narrado

Taller 3.1

“Lo malo fue que junto con meterme a la cama me desvelé Tipo de narrador:
rotundamente. Aunque era plena noche yo estaba entero de día _________________
y sentía el silencio que latía en todo el mundo”.
Paz, M. (2003) Papelucho y el marciano. Santiago: Editorial Sudamericana. Fundamentación:
_________________

“Mientras se acercaba a Edmundo, el trineo presentaba una Tipo de narrador:


magnífica visión con el sonido de las campanillas, el látigo del
enano que restallaba en el aire y la nieve que parecía volar a _________________
ambos lados del carruaje”.
Fundamentación:
_________________
Lewis, C. S..(2005) Las Crónicas de Narnia. El León, La Bruja y el Ropero. Santiago: Editorial
Andrés Bello.

Prof. Beatriz Figueroa S.


“En la casa todos dormían. Emilia tosió varias veces para ver si Tipo de narrador:
su hermana se despertaba; pero ésta, con un almohadón sobre _________________
su cabeza, murmuró unas palabras ininteligibles, y siguió
durmiendo”. Fundamentación:
Balcells, J y Güiraldes, A. (2004) Trece casos misteriosos. Santiago: Editorial Andrés Bello. _________________

“(…) No llegó a nuestros oídos la respuesta de la criada; pero


Tipo de narrador:
oímos cerrar la puerta y los pasos de alguien que subía la
escalera. Estos pasos eran como vacilantes e inseguros. Al _________________
escucharlos, se dibujó en la cara de Holmes una sorpresa sin
límites”. Fundamentación:
Conan Doyle, A. (2006) Estudio en escarlata.cinco pepitas de naranja. Santiago: Editorial zig zag. _________________

Prof. Beatriz Figueroa S.


Elementos del mundo narrado

Taller 4:

1. Elabora una síntesis respecto de las clasificaciones de tipo de narrador.


Organiza la información en un ordenador gráfico (mapa conceptual u otro).

2. Reescribe el fragmento del texto uno Las medias de los flamencos: el


narrador debe ser un personaje.

3. Reescribe el fragmento del texto dos: El mejor amigo, tal como haría un
narrador protagonista.

4. De acuerdo con las características de un narrador testigo, reescribe el


fragmento del texto tres De profesión, fantasma. Para ello utiliza un registro
coloquial.

Prof. Beatriz Figueroa S.


Texto uno
Fragmento: Las Medias de los flamencos
“Sólo los flamencos, que entonces tenían las patas blancas, y tienen ahora
como antes la nariz muy gruesa y torcida, sólo los flamencos estaban tristes, porque
como tienen muy poca inteligencia no habían sabido como adornarse. Envidiaban el
traje de todos, y sobre todo el de las víboras de coral. Cada vez que una víbora pasaba
por delante de ellos, coqueteando y haciendo ondular las gasas de serpentinas, los
flamencos se morían de envidia”.

Quiroga, H. (2004) Cuentos de la selva. Santiago: Editorial zig zag, p. 20.

Texto dos
Fragmento. El mejor amigo
“Una mañana la vieja rata de agua asomó la cabeza por su agujero. Tenía
ojillos brillantes, vivarachos, y tiesos bigotes grises, y la cola era como un trozo largo de
negra goma de borrar. Los patitos nadaban por el estanque, con todo el aire de una
nidada de canarios amarillos, y su madre, toda blanca y con patas muy rojas, intentaba
enseñarles cómo estar cabeza abajo del agua”.

Wilde, O. (2004). El gigante egoísta y otros cuentos. Barcelona: Editorial Vicens Vives, p. 32.
Texto tres
Fragmento: De profesión, fantasma.

“Mucho me hubiese gustado marcharme del castillo, con cualquiera de los


disfraces, pero no habría llegado muy lejos. Busqué, pues, mis viejos vestidos, que yo
mismo había desperdigado entre los otros antes de aquel registro general que tanto me
había asustado.
Encontré en seguida todas mis cosas, excepto el pantalón. ¿Dónde podría estar
aquel maldito pantalón? Seguramente, el personal de lord Cecil había revuelto todo…
Pero el pantalón no podía andar muy lejos”.

Monteilhet, H . (2002) De profesión, fantasma. Madrid: Ediciones S.M., p. 138.


Elementos del mundo Narrado:
2. Los Personajes
• El término personaje deriva del latín persona que significa máscara.
Recoge el significado del vocablo griego prosopon (rostro), usado en el
antiguo teatro clásico con el cual se aludía a papel. En el teatro
grecolatino, los actores salían a actuar disfrazados con máscaras, hecho
que marcaba la diferencia entre lo que el actor era en la realidad y su
papel o personaje en la obra. Con el transcurso del tiempo, el personaje
va a identificarse progresivamente con el actor, lo que de algún modo
ayudará a verlo como un ente personal e individual a la vez.

• Tanto en el teatro como en la narración, los personajes constituyen el eje


dinamizador sobre el cual gira todo el desarrollo de la acción. Son entes
de ficción creados por el autor –escritor o guionista-, que participan en los
acontecimientos que la obra refiere. Generalmente suelen ser personas,
pero pueden ser también animales, cosas y seres imaginarios que adoptan
rasgos humanos en su accionar.
Clasificación de los personajes

Considerando su configuración y su grado de individualidad, los


personajes pueden parecer como estereotipos, es decir, como seres que
responden a una imagen prefijada y reiterada en formas conductuales y
expresivas, como resultado de una extensa tradición literaria, por
ejemplo: el soldado fanfarrón y cobarde, la mujer dominante y
mandona, el anciano avaro, el viejo verde, la mujer celosa, etc.
Con mayor grado de individualidad aparece el tipo. Éste es
portador de rasgos psicológicos y morales reconocidos por los lectores
como propios de un modelo impuesto por la tradición, pero que no
posee el sello de reiteración mecánico y superficial del estereotipo. El
tipo representa a un sector de la sociedad, por ejemplo: el provinciano
de Martín Rivas, el caballero andante en el Ingenioso Hidalgo don
Quijote de la Mancha.
• En tercer lugar tenemos los personajes literarios, es decir, aquellos
que responden a un sistema de convenciones artísticas que les
atribuyen papeles prefijados, no obstante estar fuertemente
individualizados y con conciencia de sí mismos. Estos entes saben
cómo actúan y por qué. El público los ubica por su nombre propio y
son de rasgos y personalidad muy fuertes. Caben en esta
denominación don Quijote, Madame Bovary, el Cid, la Celestina, etc.

• Si se toma en cuenta su gradación jerárquica en el desarrollo del


acontecer, los personajes pueden ser principales o protagonistas, o
secundarios, cuya vida y acontecimientos importan menos al
narrador, pero que no por ello dejan de ser vitales para la trama de la
obra en general.
Si consideramos su génesis y desarrollo, tenemos personajes dinámicos y
estáticos. Los primeros se caracterizan por evolucionar en el transcurso del
relato. Ana Frank, por ejemplo, no es la misma al inicio del relato que al final.

Por grado de complejidad en su configuración, un personaje puede ser plano


o redondo. Hablamos de personaje plano cuando estamos en presencia de un
ente creado en torno a una sola idea o cualidad; en cambio, hablamos de
personaje redondo cuando suponemos en éste un mayor grado de
complejidad, ambigüedad y consistencia psicológica.

Desde el punto de vista de la unidad o pluralidad, el personaje podría ser


individual o colectivo. Un ejemplo de este último es el pueblo mapuche y el
pueblo español en La Araucana, entidades que en algunos pasajes pasan a ser
protagonistas, como compactas muchedumbres en que no se destaca ninguna
individualidad.
Los tipos de relaciones que se pueden establecer entre personajes
dependen de su actuación en el mundo narrado, del carácter como
seres individuales y de su entorno.

De este modo tenemos personajes que pueden:


• actuar en forma negativa,
• ejecutar las acciones o recibirlas,
• ser benefactores, en tanto que ayudan a los demás,
• o destructores porque los dañan.

En muchas narraciones, junto al protagonista, suele aparecer un


antagonista o personaje que se opone a los intereses o deseos del
principal e intenta obstaculizar la concreción de sus actos o hazañas.
Ambos, en consecuencia, pueden tener ayudantes y enemigos.
La descripción de los personajes de la narración

En el transcurso del relato, el lector va conociendo a los personajes a través de


diferentes estrategias utilizadas por el narrador. Tenemos, por ejemplo:

• La descripción que realiza de los rasgos físicos y el modo de vestir de los personajes
– proposografía- y su carácter y sus rasgos morales-etopeya-. Si unimos la
prosopografía con la etopeya, surge el retrato del personaje.

• Las declaraciones que formulan otros personajes sobre ellos.

• Los datos que aporta el propio personaje a través de su forma de hablar, de sus
gestos, de las acciones que realiza y de la relación que establece con otros
personajes y con su entorno.

• El nombre de los personajes. A veces éste cumple sólo con la función de identificar
a los actantes. Sin embargo, a veces, los nombres son significativos o simbólicos. Por
ejemplo, Victoria (mujer que triunfa), Blanca (joven inocente).
Elementos del mundo narrado: Descripciones de personajes

Taller : 5
• Elabora un cuadro de doble entrada donde clasifiques, a modo de síntesis, la
información recogida respecto de los personajes en la narración. Identifica
ejemplos de las obras leídas que permitan ilustrar las categorías de la
clasificación.

• Lee los fragmentos de textos literarios presentados a continuación y realiza


las actividades solicitadas.

• Del texto Fallido: a) escribe, de acuerdo con al información entregada por el


narrador, la etopeya del protagonista; b) ¿qué tono se advierte en las
palabras del narrador respecto del protagonista?; ¿cómo imaginas su
personalidad? Intenta describirlo; c) ¿Qué tipo de narrador se observa en el
cuento?

• Del texto 1935, Buenos Aires: Evita, completa la apariencia externa, los rasgos
físicos, el modo de vestir y el carácter del personaje.

Prof. Beatriz Figueroa S.


Elementos del mundo narrado

Fallido
“Hubo una vez un hombre que escribía acerca de todas las
cosas; nada en el universo escapó a su terrible pluma, ni los rumbos
de la rosa náutica y la vocación de los jóvenes, ni las edades del
hombre y las estaciones del año, ni las manchas del sol y el valor de
la irreverencia en la crítica literaria.
Su vida giró alrededor de este pensamiento:
“Cuando muera se dirá que fui un genio, que puedo escribir sobre
todas las cosas. Se me citará –como a Goethe mismo- a propósito de
todos los asuntos.”
Sin embargo, en sus funerales- que no fueron por cierto un
brillante éxito social- nadie le comparó con Goethe. Hay además en
su epitafio dos faltas de ortografía”.

Torri, J. (1990). “Fallido” en Epple, J. y Heinrich, J. Cien micro-cuentos Hispanoamaricanos. Concepción: Lar.
Elementos del mundo narrado

1935, Buenos Aires: Evita


(Eduardo Galeano)

“Parece una flaquita del montón, paliducha, desteñida, ni fea ni linda, que usa ropas de
segunda mano y repite sin chistar las rutinas de la pobreza. Como todas vive prendida de los
novelones de la radio. Los domingos va al cine y sueña con ser Norma Shearer y todas las
tardecitas, en la estación del pueblo, mira pasar el tren hacia Buenos Aires. Pero Eva Duarte
está harta. Ha cumplido quince años y está harta: trepa al tren y se larga.
Esta chiquilina no tiene nada. No tiene padre ni dinero: no es dueña de ninguna cosa. Ni
siquiera tiene una memoria que le ayude. Desde que nació en el pueblo de los Toldos, hija de
madre soltera, fue condenada a la humillación, y ahora es una nadie entre los miles de nadies
que los trenes vuelcan cada día sobre Buenos Aires, multitud de provincianos de pelo chuzo y
piel morena, obreros, sirvientas que entran en la boca de la cuidad y son por ella devorados:
durante la semana Buenos Aires los mastica y los domingos los escupe a pedazos.
A los pies de las altas cumbres de cemento, Evita se paraliza: El pánico no la deja hacer
otra cosa que estrujarse las manos, rojas de frío y llora. Después se traga las lágrimas, aprieta
los dientes, agarra fuerte la valija de cartón y se hunde en la ciudad...”

Galeano, E. 1995. Mujeres. Madrid: Alianza Cien.


Elementos del mundo Narrado:
3. Los Acontecimientos
• Los acontecimientos son los hechos que tienen ocurrencia en el relato. En sí,
constituyen un proceso para llegar a un resultado. En otros términos,
podemos hablar de acciones que los personajes realizan para conseguir o
resolver un problema o salvar un obstáculo.
• En un relato, el acontecer se organiza en tres frases: planteamiento,
desarrollo y desenlace.
• En el planteamiento, la voz narrativa presenta al personaje o a los personajes
fundamentales y da cuenta del espacio y del tiempo en que ocurren los
acontecimientos; a veces, suele presentarse el conflicto.
• En el desarrollo se expone, en detalle, el accionar de los personajes hasta
llegar al climax o momento de mayor tensión.
• En el desenlace, se presenta la resolución del conflicto del relato, dando
lugar a un final que puede ser feliz, desgraciado o bien incierto.
Tema y argumento

• El argumento o asunto del relato está conformado por la sucesión de


acontecimientos que se desarrollan en él. Se puede expresar por
medio de una breve síntesis del texto y debe conservar los detalles
fundamentales. Para resumir el argumento de un texto, podemos
responder a la interrogante: ¿qué dice el texto ?

• Cuando hablamos de tema, nos referimos a la formulación breve y


clara que contesta a la pregunta ¿de qué trata el texto? La respuesta
es, por lo general, un sustantivo abstracto con algún detalle que
completa su sentido, haciéndolo más concreto. Por ejemplo, en la
Odisea, el regreso a la patria; en otras obras será el amor más
poderoso que la muerte, etc.
Taller: 6

De la lectura del texto Los tres dones:

• Realiza un recuento de todas las acciones que presenta la narración,


destacando la acción principal.

• Segmenta el relato, indicando los párrafos que cumplen las siguientes


funciones: planteamiento, desarrollo, desenlace.

• ¿Cuál es el tema que plantea el cuento?

• ¿Qué tipo de narrador presenta el cuento?, ¿por qué?

• Selecciona uno de los cuentos leídos recientemente y relátalo


siguiendo el esquema: planteamiento, desarrollo, desenlace.

Prof. Beatriz Figueroa S.


Los tres dones
“Cierta vez, en la ciudad de Bichar vivió un bondadoso príncipe a quien todos sus
súbditos amaban y honraban. Pero había un hombre excesivamente pobre, que estaba
amargado contra el príncipe y no paraba de utilizar una lengua pestilente para
denigrarlo. El príncipe lo sabía, pero era paciente. Finalmente, empero, lo reconsideró, y
una noche de invierno llegó a la puerta del hombre un servidor del príncipe, llevando
un saco de harina de trigo, un paquete de jabón y un poco de azúcar.
- El príncipe te envía estos presentes como recuerdo- explicó el sirviente.
El hombre se regocijó, pues pensó que los regalos eran un homenaje del príncipe. Y en
su orgullo fue en busca del obispo y le contó lo que le había hecho el príncipe diciendo:
- ¿No veis como el príncipe desea mi amistad?
Pero el obispo respondió :
- ¡Oh, que sabio es el príncipe, y qué poco lo que tú comprendes! El habla con símbolos.
La harina es para tu estómago vacío; el jabón, para tu sucio pellejo, y el azúcar para
endulzar tu lengua amarga.
A partir de ese día, el hombre se avergonzó incluso de sí mismo. Su odio hacia el
príncipe se hizo mayor que nunca, y odió más aún al obispo que le había revelado al
príncipe.
Pero, de ahí en adelante, permaneció en silencio”.
Gibran, K. ( 1990). El vagabundo. Barcelona: Ediciones Urbano.
Autoevaluación

• Autoevalúa tu desempeño de acuerdo a los siguientes indicadores, tanto


en el área de comprensión como de producción.

Indicadores para evaluar la comprensión de relatos:


 ¿Utilicé mis conocimientos y experiencias personales para construir el
significado e interpretar el texto narrativo?

 ¿Identifiqué el tema y acciones principales, eliminando la información


trivial y destacando la relevante?

 ¿Formulé, confirmé y/o rechacé hipótesis mientras leía?

 ¿Realicé inferencias, relacionando información obtenida en diferentes


párrafos del texto, o información del texto con otras recogidas de mis
experiencias previas ?

 ¿Analicé aspectos como: secuencias de acontecimientos, personajes,


espacios, ambientes, tipo de narrador, luego de la lectura?
 ¿Identifiqué partes del texto en el que se usaban figuras literarias y pude
interpretar sus significados?

 ¿Identifiqué palabras nuevas y pude inferir su significado apoyándome en


el contexto o con ayuda del diccionario?

 ¿Dialogué con mis compañeros expresando mi interpretación de la lectura


y recibiendo las interpretaciones de ellos?

 ¿Expresé opiniones, juicios y comentarios críticos sobre el contenido del


relato?

 ¿Pude relacionar las ideas del relato con temas o situaciones similares
ocurridas en la vida real?

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