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Antes de abordar el problema Perú hablaremos un poco de los cambios en el contexto global
que nos tocará vivir.
La realidad es que vivimos en un mundo deflacionario cuyos signos ya son evidentes. La mala
noticia es que las crisis deflacionarias se han solucionado hasta ahora, con guerras o
imprimiendo billetes. Así fue a fines de 1929 y principios del 2009. Pero las últimas mega
inyecciones de capital ya no reaniman la economía mundial. Veremos el eclipse del dólar y el
estancamiento de la economía global en los próximos cinco años. China será el gran jugador de
este milenio.
Tecnología: Ray Kurzweil define como "singularidad" al punto en el que el ritmo del cambio
tecnológico será tan rápido, su impacto tan profundo, que la vida humana se transformará
irreversiblemente. Ello ocurrirá cuando la Inteligencia Artificial (IA) supere la inteligencia
humana. Kurzweil le pone fecha: 2045 pero hay indicios que podría ocurrir mucho antes.
Trabajo: Trabajadores externos libres serán la regla en la próxima década pero el impacto
profundo de la Singularidad de Kurzweil podría generar un desempleo global de trabajadores
sin posibilidad de aportar a ningún proceso productivo que la IA no pueda resolver. Los
experimentos en curso sobre Renta Básica Universal (RBU) se harán más frecuentes y
extendidos en la próxima década. RBU es una forma de seguridad social en la que todos los
residentes de un país reciben regularmente una suma de dinero sin condiciones, desde un
gobierno o alguna otra institución pública; en adición a que perciban o no un ingreso regular.
Moneda: El 70% de los Bancos centrales del mundo están estudiando, y unos pocos ya
desarrollando, proyectos de tecnología blockchain para generar crypto-monedas nacionales de
curso legal. Esto para el Perú tiene un potencial inmenso como veremos en próximo artículo.
En este contexto sumarísimo - faltó espacio para población, comercio global, el auge asiático,
la revolución verde - qué oportunidades tiene el Perú? Lo vemos la próxima semana.
Ramiro F. Prialé