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20 tips para ser un buen líder

Para convertirte en un gran líder necesitas trabajar constantemente en tus habilidades de


liderazgo.

Lo primero que debes pensar a la hora de aprender cómo ser un buen líder es que, a
diferencia de lo que dicen muchas personas, los grandes líderes no nacen, sino que se
forman a lo largo del tiempo y la experiencia.

Probablemente todos hayamos conocido alguna vez una persona que, de forma innata y sin
esfuerzo; es seguido, escuchado y respetado por la gente que lo rodea. ¿Cómo lo consiguen?
Son seres que tienen un carisma natural y espíritu de líder. Ahora bien, un líder ¿nace o se
hace? Una respuesta difícil que se ha intentado responder en innumerables artículos y sabios
estudios sobre el liderazgo. En esto solo quiero , tan solo ofrecerte una recopilación práctica
para que tu equipo te siga sin dudar y se sienta orgulloso de tenerte como directivo.

De forma muy resumida, podría decir que un líder es una persona que puede conducir a un
grupo al logro de una meta. Es aquel que sabe poner en marcha al grupo y logra influir sobre
los demás.

Y tú, ¿tienes lo que hay que tener para que tu gente te siga? ¿Te lo has preguntado alguna
vez? Lo que está claro es que el liderazgo se caracteriza por una serie de cualidades que se
pueden adquirir y desarrollar con la práctica. No pretendemos convertirte en un líder de la
noche a la mañana, pero si darte referencias para que, aplicadas en el desempeño de tu
profesión, te sea más fácil ser un referente para tu gente y conseguir un equipo de trabajo
relacionado y motivado.

Es decir, se puede aprender cómo ser un buen líder.

1. Escucha a tu equipo de trabajo


Para aprender cómo ser un buen líder deberás escuchar las críticas y malos comentarios,
estos deben convertirse en una fuente de crecimiento personal para tu vida.

2. Comunícate lo más eficiente posible


Siempre deja claro cuáles son tus expectativas y sentimientos en buenos términos y de
manera continua.

3. Habla menos, escucha más


Algunas veces es mejor no decir nada que decir cualquier cosa simplemente por cumplir. En
ocasiones, se necesita guardar silencio de tal manera que las otras personas tengan espacio
para hablar.

4. Sé un ejemplo
Conviértete en la persona que quieres que sean tus miembros del equipo. No hay mejor
ejemplo que tus propios actos.
5. Apasiónate
Si no te apasiona el negocio en el que estás, seguramente estás en el lugar equivocado. No
puedes aprender cómo ser un buen líder en un trabajo que no te inspira a mejorar todos los
días, en algo que no disfrutas.

6. Sé consistente
Para pasar de seguidor a líder debe haber congruencia entre lo que dices, haces y piensas.
De lo contrario, las personas no podrán confiar en ti.

7. Toma decisiones firmes


No dejes que una decisión se prolongue por mucho tiempo, y una vez la tomes, no divagues
respecto a tu decisión.

8. Interfiere sólo cuando sea necesario


Si confías que tu equipo hará un buen trabajo, no interfieras en sus asuntos y procesos a
menos que lo consideres necesario.
Es importante que ellos tengan la libertad para tomar decisiones, y en caso de cometer algún
error, que lo corrijan si tu presencia.

9. Identifica tus fortalezas


Para aprender cómo ser un buen líder deberás contribuir a tu equipo aportando con tus
fortalezas.

10. Conoce tus debilidades


Para aprender cómo ser un buen líder se requiere que enfoques en tus fortalezas, y aprendas
a delegar aquellas actividades que exijan tus debilidades.

11. Acepta la incertidumbre


Es hora que admitas que no puedes controlar todos los factores que rodean los negocios y los
equipos de trabajo. La mejor manera de lidiar con la incertidumbre radica en el poder de tu
mente.

12. Para ser buen líder, primero sé buena persona


Si lo piensas, aprender cómo ser un buen líder no es más que una extensión de la buena
persona que eres. Comprométete a ser una buena persona, integro, con valores y principios.

13. Mantén contacto con tus emociones


Deja de ser un robot que aparenta no sentir nada y permite a tus emociones salir. La
inteligencia emocional se trata de entender tus emociones, no evitarlas.

14. Controla tus reacciones


Esto va en línea con el punto anterior; cuando no conoces tus emociones y tomas decisiones
basándote en reacciones y no conclusiones racionales, tenderás a equivocarte.
Así que pon en pausa tus reacciones hasta que tengas un momento de analizar tus
sentimientos, clarificar tus ideas y luego tomar una decisión.
15. Aprende cómo ser un buen líder escogiendo un equipo que se complemente
De nada sirve tener personas que hagan lo mismo que haces tú. Escoge un equipo que sea
interdisciplinario y que pueda trabajar conjuntamente. Busca quien complemente las
debilidades y del equipo.

15. Lo más importante es tu equipo de trabajo


Tu equipo es lo más importante. Debes darle las herramientas, medios y espacios para que
estos puedan cumplir con sus funciones, lo que permitirá alcanzar los objetivos de tu
organización.

16. Un buen líder es alguien humilde


Nadie tiene porqué saber acerca de tu riqueza, tus influencias o poder. Utiliza tus habilidades
para ayudar, no para impresionar a los demás. Aprender cómo ser un buen líder no es
cuestión de apariencias, más bien se trata de resultados.

17. Supera las equivocaciones; las tuyas y la de los demás


Todo el mundo se equivoca, tú también lo haces. Lo importante es aprender la lección del
error cometido, sacar conclusiones valiosas y superarlo inmediatamente. No hay necesidad de
crear un problema enorme por una ligera equivocación de alguien más.

18. Aprende a perdonarte


Luego de haber superado un error, aprende a perdonarte y trabajar por corregirlo. La culpa no
te hará solucionar las cosas. Asumir las consecuencias y asegurarte de nunca más cometer el
mismo error sí te ayudará.

19. Nunca dejes de aprender


Adquiere el hábito de la lectura, y asiste a la mayor cantidad de cursos que sea posible.
Invierte en tu conocimiento y formación personal.

20. Disfruta el liderazgo


No sientas mucho estrés por convertirte en un líder. Más bien disfruta de este proceso y de
todos sus beneficios. Aprender cómo ser un buen líder es un proceso que nunca termina; su
aprendizaje y mayores recompensas se encuentran en el día a día. Al final, luego de todas las
experiencias, dificultades y esfuerzos, terminarás aprendiendo como ser un buen líder.

Habrán errores, dificultades y momentos en los que no sabrás qué hacer…este tipo de
situaciones son las que te harán crecer como persona, y profesional.
1 Timoteo 3 – Requisitos para los Líderes

A. Requisitos para un obispo.

1. (1 Timoteo 3:1) Introducción a la buena obra del trabajo espiritual.

Palabra fiel: Si alguno anhela obispado, buena obra desea.

a. Palabra fiel: Pablo acababa de escribir que las mujeres no debían estar en una posición de
autoridad dentro de la iglesia; pero no quiere dejar la impresión de que cualquier hombre está
calificado. Ningún hombre está calificado para ser un líder espiritual sólo por su género.

b. Si alguno anhela obispado: El oficio que Pablo describía es el del obispado. Nuestra
cultura religiosa nos ha dado una idea muy particular de lo que es el obispo; pero la palabra
obispo en el Nuevo Testamento griego [episkopos] literalmente significa “el que vigila” – un
vigilante.

i. Estos eran hombres con liderazgo y autoridad en la iglesia. “El estado tiene su monarca, la
Iglesia tiene su obispo; uno debe gobernar de acuerdo a la ley y a las tierras; el otro de
acuerdo a la palabra de Dios.” (Clarke)

ii. En Hechos 20:17, se nos enseño que había muchos obispos – esto es, vigilantes – en una
iglesia en una ciudad. Sin duda, estos eran hombres que estaban a cargo las diferentes
hogares-iglesias que se reunían en la ciudad. La idea de un “obispo regional” no viene de la
Biblia.

iii. Basándonos en lo que obispo significa, un obispo es alguien que supervisa en la iglesia,
un líder. Tal persona a veces es llamada anciano (presbuteros) o pastor (poimen) como en
Hechos 20:17, 28.

iv. “Sobre la cuestión de los términos presbítero y episcopado, aquí hay suficiente para afirmar
mi propia conclusión, que ambos representan aspectos ligeramente diferentes del mismo
oficio, pastoral y oficial; aspectos que tomaron importancia de forma natural entre las
sociedades Griegas y Judías respectivamente, de las cuales nacieron los nombres.” (White)

v. En este pasaje White agrega: “Después de haber dado instrucciones básicas sobre el
alcance de la oración pública, y de los ministros mismos, San Pablo ahora retoma la cuestión
de la organización de la iglesia”. Sin embargo esta organización de la iglesia es muy limitada.
No hay ningún consejo o guía sobre la estructura o una descripción exacta de los oficios del
obispo o del diácono. En el diseño del Nuevo Testamento, parece haber una cierta flexibilidad
en la estructura y más énfasis en el carácter de los líderes.

c. Buena obra desea: La idea no es “Bien por usted, usted desea un lugar de liderazgo
espiritual,” aunque este pueda ser un deseo piadoso. Las idea más bien es como esto: “Esto
es bueno, noble, un trabajo honroso. Timoteo, tienes que buscar hombres buenos, nobles y
honorables.”
i. “Porque no es cualquier cosa representar al hijo de Dios en una tarea tan grandiosa como
levantar y extender el reino de Dios, al preocuparse por la salvación de las almas a las que el
Señor mismo se dignó a comprar con su propia sangre, y gobernar a la iglesia, la cual es
herencia de Dios.” (Calvin)

d. Buena obra desea: El liderazgo espiritual en la iglesia no tiene que ver con títulos, honor y
gloria; se trata sobre la obra. Jesús dijo: Si alguno quiere ser el primero, será el postrero de
todos, y el servidor de todos. (Marcos 9:35)

i. “Una buena obra, pero un trabajo difícil. El ministerio no es la ocupación de un hombre


ocioso, sino una labor dolorosa.” (Trapp)

ii. “¿De qué sirve un ministro perezoso? Este no es bueno ni para el mundo, ni para la iglesia,
o para sí mismo. Es una deshonra para la profesión más noble que puede ser otorgada a los
hijos de los hombres.” (Spurgeon)

2. (1 Timoteo 3:2a) Requisitos para los obispos.

Pero es necesario que el obispo...

a. Pero es necesario que el obispo: Dios tiene requisitos específicos para los líderes de la
iglesia. Los líderes no deben ser escogidos al azar, tampoco porque se ofrezcan
voluntariamente, o porque aspiren a la posición, ni siquiera porque sean “líderes natos.” Los
líderes deben ser elegidos principalmente en base a qué tanto coinciden con los requisitos
que se mencionan aquí.

i. Los requisitos para el liderazgo no tienen nada que ver con el talento. Dios no dice, “Sal y
consigue al hombre más talentoso.” Dios puede crear fácil e instantáneamente dones en un
hombre, porque los dones son dados por el Espíritu Santo, como Él quiere (1 Corintios 12:11).

ii. Ir a un seminario no hace a una persona calificada para el liderazgo espiritual. Ser un buen
orador no hace a una persona calificada para el liderazgo espiritual. Tener dones naturales o
espirituales no hacen calificada a una persona para el liderazgo espiritual. Lo que uno hace o
da voluntariamente en tiempo o en dinero no lo califica para el liderazgo espiritual. Lo que
califica a una persona para el liderazgo espiritual es un carácter consagrado – y un carácter
consagrado que vaya de acuerdo con estos claros criterios.

b. Pero es necesario: Sin embargo esta no es una lista rígida que demanda perfección en
todas las áreas; son metas a alcanzar y a su vez criterios generales para la selección. Uno ve
esta lista y se pregunta, “¿el hombre en cuestión desea todas estas cosas con todo su
corazón?” “¿ese deseo se demuestra en su vida?” “¿Hay otros hombres disponibles que
cumplan mejor con los requisitos de esta lista?”

c. Es necesario: Estos requisitos también son valiosos para toda persona – no sólo para
aquellos que aspiran al liderazgo. Son claros indicadores de un carácter consagrado y de
madurez espiritual, y pueden dar la verdadera medida de un hombre.
3. (1 Timoteo 3:2b-7) Una lista de requisitos para los líderes de la Iglesia.

Que el obispo sea irreprensible, marido de una sola mujer, sobrio, prudente, decoroso,
hospedador, apto para enseñar; no dado al vino, no pendenciero, no codicioso de ganancias
deshonestas, sino amable, apacible, no avaro; que gobierne bien su casa, que tenga a sus
hijos en sujeción con toda honestidad (pues el que no sabe gobernar su propia casa, ¿cómo
cuidará de la iglesia de Dios?); no un neófito, no sea que envaneciéndose caiga en la
condenación del diablo. También es necesario que tenga buen testimonio de los de afuera,
para que no caiga en descrédito y en lazo del diablo.

a. Irreprensible: Esta palabra literalmente significa “Nada que pueda ser usado en contra.” No
debe haber nada que otros puedan usar en su contra y para atacar a la iglesia.

i. “La palabra es una metáfora, tomada del caso de un experto y hábil boxeador, que defiende
de tal manera cada parte de su cuerpo que resulta imposible para su antagonista el dar un
golpe.” (Clarke)

ii. Este es un término amplio para un hombre que vive una vida recta que puede ser visto
como justo. Nadie puede ponerse de pie y acusar al hombre de pecado grave.

iii. En 1 de Timoteo 3:10, al hablar de los diáconos, Pablo usa la frase si son irreprensibles.
Esto implica que ser irreprensible es demostrado por un historial de comportamiento.

b. Marido de una sola mujer: La idea que se maneja aquí es “Hombre de una sola mujer.”
No es que el líder tenga que estar casado (si así lo fuera, Jesús y Pablo no podrían ser líderes
espirituales en nuestras iglesias). La idea tampoco es que un líder nunca podría volver a
casarse si su esposa hubiera fallecido o si se hubiera divorciado bíblicamente. La idea es que
el amor, el afecto y el corazón se le dan a una sola mujer, a aquella que es su legítima esposa
ante la ley.

i. Esto significa que el líder Bíblico no es un mujeriego, ni adúltero, ni conquistador, y no


muestra amor romántico ni interés sexual por otras mujeres, incluyendo representaciones o
imágenes de mujeres en pornografía.

c. Sobrio: Lleva la idea de alguien que no es dado a los extremos. Son fiables y de confianza,
y usted no tiene que preocuparse por cambios abruptos de visión, estado de ánimo o de
acciones.

d. Prudente: Esto describe a la persona que tiene la capacidad de pensar con claridad y
objetivamente. No bromean constantemente sino que saben tratar los temas serios con
seriedad.

i. “Esto no significa que el hombre no tenga sentido del humor, ni que siempre sea serio y
formal. Más bien sugiere que sabe darle el valor apropiado a las cosas y que no ridiculiza al
ministerio ni al evangelio con una conducta tonta.” (Wiersbe)
e. Decoroso: Lleva la idea de “ordenado.” Es la misma palabra traducida como modesto en 1
de Timoteo 2:9. “Ordenado, tal vez digno en el mejor sentido de la palabra.” (White)

f. Hospedador: Están dispuestos y pueden abrir las puertas de su hogar tanto como para
amigos como para extraños.

g. Apto para enseñar: Lo suficientemente instruidos en la Biblia para enseñar, ya sea en un


lugar público o en un lugar privado.

h. No dado al vino: La idea es de no ser adicto al vino o a emborracharse. Este verso, en sí


mismo, no prohíbe al liderazgo de Dios tomar bebidas alcohólicas, pero si lo desalienta
claramente.

i. “No fabricador de cerveza, ni buscador de tabernas, que se sienta cerca de ella, hasta que
el vino le inflama.” (Trapp)

i. No Pendenciero: Este es un hombre que no es dado a la violencia, ni pública ni en lo


privado; un hombre que puede dejar que Dios pelee sus batallas.

j. No codicioso de ganancias deshonestas: Esta traducción de la versión Reina-Valera


1960 lo describe de una manera memorable: No codicioso de ganancias deshonestas.

i. “Vuelvo a repetir que el hombre que no está dispuesto a soportar la pobreza pacientemente,
inevitablemente se convertirá en víctima de una perversa y despreciable avaricia.” (Calvin)

k. Amable: El tipo de hombre que toma a Jesús como su ejemplo, no al último héroe de
acción.

l. Apacible: El tipo de persona que no siempre está peleando por una u otra cosa.

m. No avaro: Este pensamiento abarca más que la mera ambición por el dinero. El hombre
avaro nunca está satisfecho con nada, siempre está en busca de algo más o algo diferente.
Un hombre que está constantemente insatisfecho no es apto para el liderazgo entre el pueblo
de Dios.

n. Que gobierne bien su casa: El líder consagrado demuestra su capacidad para dirigir
primero en su propia casa; Pablo reconocía que es en nuestro hogar donde nuestro
cristianismo se demuestra primero.

i. Es verdad que un niño puede rebelarse incluso en un buen hogar; pero ¿es la rebelión a
causa de sus padres o a pesar del trabajo de sus padres? Esta es la pregunta que debe
plantearse.

o. No un neófito: A los recién convertidos no se les debe dar una posición de liderazgo
demasiado pronto. El líder debe estar mucho más allá de la etapa de neófito en su desarrollo
espiritual.
i. Neófito literalmente significa “recién plantado.” Cuando alguien recién vino a Jesús, no es
bueno ponerlos en una posición de liderazgo hasta que se les haya permitido crecer lo
suficiente como para echar raíces profundas.

ii. “Los neófitos no solo son atrevidos e impetuosos, sino que están hinchados de una tonta
confianza en sí mismos, como si pudieran volar más allá de las nubes.” (Calvin) Promover a
un neófito demasiado pronto da ocasión para un gran pecado – el orgullo, en imitación al
diablo mismo.

o. Buen testimonio: Estas características deben ser evidentes para que todos, incluso los no
creyentes las puedan ver. El líder potencial debe ser un buen Cristiano fuera de las paredes
de la iglesia.

B. Requisitos para los Diáconos.

1. (1 Timoteo 3:8a) Diáconos, los siervos prácticos de la iglesia.

Los diáconos asimismo deben ser...

a. Los diáconos asimismo deben ser: Un ejemplo de la designación de los diáconos se


encuentra en Hechos 6:1-6, donde los apóstoles vieron la necesidad que había de personas
que distribuyeran la asistencia diaria para las viudas entre la iglesia, sin embargo ellos no
tenían el tiempo de distribuir la ayuda ellos mismos. Ellos eligieron a hombres para actuar
esencialmente como diáconos en esa iglesia.

b. Los diáconos asimismo deben ser:Los requisitos son prácticamente los mismos que los
del “obispo”; el servicio práctico (especialmente cuando se reconoce como un oficio) también
es liderazgo.

i. Es un error ver a un oficio como más prestigioso que otro, aunque los obispos tienen una
mayor responsabilidad ante Dios. Cada uno consiste más en un llamado que en una posición.

2. (1 Timoteo 3:8b-12) Requisitos para los Diáconos.

Honestos, sin doblez, no dados a mucho vino, no codiciosos de ganancias deshonestas; que
guarden el misterio de la fe con limpia conciencia. Y éstos también sean sometidos a prueba
primero, y entonces ejerzan el diaconado, si son irreprensibles. Las mujeres asimismo sean
honestas, no calumniadoras, sino sobrias, fieles en todo. Los diáconos sean maridos de una
sola mujer, y que gobiernen bien sus hijos y sus casas.

a. Honestos: Mostrando un respeto apropiado para Dios y los hombres.

b. Sin doblez: Un hombre que dice la verdad desde la primera vez, sin ninguna intención de
engañar.
c. Que guarden el misterio de la fe: Aquellos que se adhieren a la doctrina correcta, con
convicción sincera.

d. Sean sometidos a prueba primero: Un hombre demuestra ser apto para el cargo en la
iglesia con su conducta. Los diáconos y los obispos son más reconocidos que designados.

e. Las mujeres así mismo: Es difícil saber si Pablo se refería aquí a las diaconisas (como
Febe, en Romanos 16:1), o a las esposas de los diáconos. Las palabras usadas originalmente
permiten ambas posibilidades.

i. Si él está hablando principalmente de la esposa del diácono, es apropiado pues el liderazgo


de un hombre en su casa puede ser evaluado, en parte, por la conducta de su esposa. ¿Es
ella honesta, no[una de las]calumniadoras, sobria, y fiel en todo?

ii. No calumniadoras: “Literalmente, no demonios. Esto pudiera ser también traducido como
difamadoras, traicioneras, chismosas, pues todas estas son de su padre, el diablo, y los
deseos de éste ellas cumplirán. (Clarke)

3. (1 Timoteo 3:13) Una promesa para los diáconos.

Porque los que ejerzan bien el diaconado, ganan para sí un grado honroso, y mucha
confianza en la fe que es en Cristo Jesús.

a. Porque los que ejerzan bien el diaconado: Dios recuerda su fiel servicio, incluso en las
tareas que algunos considerarían de baja categoría. No cabe duda de que usted verá más
diáconos con una gran recompensa que a obispos o pastores.

C. El misterio de la piedad

1. (1 Timoteo 3:14-15) La razón de Pablo para escribirle a Timoteo

Esto te escribo, aunque tengo la esperanza de ir pronto a verte, para que si tardo, sepas cómo
debes conducirte en la casa de Dios, que es la iglesia del Dios viviente, columna y baluarte de
la verdad.

a. Esto te escribo, aunque tengo la esperanza de ir pronto a verte: Pablo deseaba decirle
estas cosas a Timoteo personalmente, pero sabiendo que tal vez no le sería posible, se
aseguró de decírselo en una carta.

i. “Este versículo deja claro que la posición de Timoteo era temporal; el estaba actuando como
el representante de Pablo en Éfeso.” (White)

b. Sepas cómo debes conducirte en la casa de Dios: El propósito de Pablo al escribir era
darle a Timoteo, como líder, información práctica sobre cómo dirigir las cosas en la iglesia de
Éfeso.
c. La casa de Dios: La iglesia debe ser, muy conscientemente, el lugar donde Dios está. Esto
hace a una iglesia más atractiva que cualquier otra cosa.

i. La iglesia es la casa de Dios porque...

· Él es el arquitecto.

· Él es el constructor.

· Él vive ahí.

· Él provee para ella.

· El es honrado ahí y gobierna ahí.

d. La iglesia del Dios viviente: En el lenguaje Griego antiguo, “iglesia” era una palabra no
religiosa para un grupo de personas llamadas aparte con un propósito. El Dios viviente ha
llamado y ha reunido a su pueblo para su propósito.

e. Columna y baluarte de la verdad: La columna y el baluarte (fundamento) de la iglesia es


la verdad. Trágicamente, muchas iglesias en la actualidad venden una verdad incompleta y
por lo tanto son pilares débiles y un baluarte inestable.

i. “La iglesia es el pilar de la verdad debido a que a través de su ministerio se conserva y se


transmite la verdad… Pablo no reconocerá a la iglesia a menos de que en ella la verdad de
Dios sea exaltada y esté a la vista.” (Calvin)

ii. No es que la iglesia es el fundamento para la verdad, sino que la iglesia sostiene la verdad
para que el mundo pueda verla. “Los pilares también eran usados en la antigüedad para poner
en ellos cualquier edicto público, que los príncipes y tribunales hubieran publicado, y expuesto
a la vista de todos; por lo que la iglesia es llamada, el pilar y la base, o el sello, de la verdad
porque por ella son publicadas, apoyadas y defendidas las verdades de Dios.” (Poole)

iii. “Cuando la iglesia se levanta valientemente, y predica la Palabra, es el pilar de la verdad;


cuando está escondida en las catacumbas romanas, y no puede proclamar el nombre del
Señor al mundo, pero aún ahí la verdad vive en lo profundo de los corazones de los
creyentes, ellos son el baluarte de la verdad. (Spurgeon)

2. (1 Timoteo 3:16) Un himno antiguo para expresar los fundamentos de la verdad


Cristiana.

E indiscutiblemente, grande es el misterio de la piedad: Dios fue manifestado en carne,


Justificado en el Espíritu, Visto de los ángeles, Predicado a los gentiles, Creído en el mundo,
Recibido arriba en gloria.
a. E indiscutiblemente: “Cuando él dice ‘indiscutiblemente’ supongo que se refiere a que no
debe haber ninguna controversia sobre estos hechos, sin embargo han surgido controversias
sobre éstos, y siempre las habrá, ya que la verdad más evidente siempre encontrará tontos
evidentes que la contradigan.” (Spurgeon)

i. “Observen que el resumen completo del evangelio dado aquí es contenido en seis pequeños
enunciados, que están escritos de tal forma en el Griego original, que algunos piensan que
estos eran un antiguo himno; y es posible que hayan sido usados como tales en la iglesia
antigua.” (Spurgeon)

b. Dios fue manifestado en carne: Esta es la esencia de la encarnación; que Dios hijo, la
segunda persona de la Santa Trinidad, agregó a su deidad humanidad – y así fue
manifestado en carne.

c. Justificado en el Espíritu: Podemos decir que Jesús fue justificado en el Espíritu no en


el sentido de que alguna vez fue pecador pero fue hecho justo, sino en el sentido de que fue
declarado por el Espíritu Santo, lo que siempre fue – completamente justificado ante el Padre.

i. Esta declaración fue hecha en su bautismo (Mateo 3:16), y en su resurrección (1 de Pedro


3:18; Hechos 2:32-33).

d. Visto de los ángeles: El ministerio de Jesús, en la tierra y a través de la Iglesia, es de gran


interés para los seres angelicales. Hubo muchos casos en los que Jesús fue visto por los
ángeles (Marcos 1:13; Lucas 22:41-43), y especialmente en la resurrección (Mateo 28:2-7).

i. “El apóstol mencionó esto para mostrar la grandeza de nuestra religión, ya que hasta los
más nobles intelectos están interesados en ella. ¿Alguna vez escucho usted de ángeles
revoloteando alrededor de asambleas de sociedades filosóficas? (Spurgeon)

ii. “La Trinidad fue vista en Cristo por los ángeles, como ellos nunca la habían visto. Ellos
habían visto el atributo de la justicia, habían visto el atributo del poder, habían marcado el
atributo de la sabiduría, y habían visto la prerrogativa de la soberanía; pero nunca los ángeles
habían visto amor, condescendencia, ternura y compasión, en Dios de la manera en que
vieron estas cosas resplandecer en la persona y en la vida de Cristo.” (Spurgeon)

e. Predicado a los gentiles, Creído en el mundo: El mismo Pablo hizo lo mejor que pudo
para cumplir con estas declaraciones. El estaba ocupado predicando a Jesús entre los
gentiles y llevando al mundo a creer.

i. “La manera de Dios de producir fe en los corazones de los hombres no es con imágenes, ni
con música, o símbolos, sino al escuchar la palabra de Dios. Esto puede parecer algo extraño,
y como extraño será visto, porque es un misterio, y un gran misterio, pero un hecho más allá
de toda controversia; la iglesia mantendrá por siempre que Cristo debe ser predicado entre los
gentiles.” (Spurgeon)
f. Recibido arriba en gloria: Esto nos recuerda la ascensión de Jesús (Lucas 24:51), su obra
terminada por nosotros (Hebreos 1:3), y su presente intercesión por nosotros (1 de Juan 2:1).

i. “Fue recibido así porque su obra fue terminada. El nunca se habría entrado en su gloria sino
hubiera terminado toda su difícil tarea. El no hubiera aceptado ninguna recompensa sino se la
hubiera ganado por completo.” (Spurgeon)

ii. Recibido arriba en gloria: Jesús ascendió al cielo en un cuerpo resucitado; sin embargo
era un cuerpo que aún conservaba las cicatrices de su gran obra de amor por nosotros. Aún
tenía las marcas de los clavos en sus manos y pies, la herida en su costado, todas las marcas
de su padecimiento por nosotros (Juan 20:24-29).

iii. La descripción que hace Pablo de Jesús después del pasaje que habla del carácter
Cristiano nos recuerda la clave para la transformación de nuestro propio carácter – mantener
nuestra mirada en Jesús. Es tal como Pablo lo escribió en 2 de Corintios 3:18: Por tanto,
nosotros todos, mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria del Señor, somos
transformados de gloria en gloria en la misma imagen, como por el Espíritu del Señor.

iv. Jesús es el cumplimiento perfecto de la descripción del carácter Cristiano. Confiamos en


que Jesús transformará nuestras vidas de acuerdo al mismo carácter, mientras pongamos
nuestra atención en él. Algunas veces nosotros queremos religión para construir este carácter
en nosotros; pero realmente es la relación con Jesús lo que realmente lo construye.
¿Qué significa el liderazgo cristiano?

Sabemos que un líder es una persona a la que la gente respeta y sigue porque sabe
motivarlos y hacer que hagan lo que es correcto para la finalidad que se busca, así como para
ellos mismos.

Pero ¿en qué se distingue el liderazgo cristiano del liderazgo “común y corriente”? esta
pregunta es la que trato de resolver en este artículo.

En qué consiste ser un buen cristiano

Esta pregunta es difícil de responder, pido al lector comprensión y apertura para leer lo que a
continuación escribiré, pues me encuentro en una posición en la que resulta más fácil ser
juzgado que comprendido.

Ser un buen cristiano consiste, desde mi experiencia y  desde el suficiente conocimiento que
tengo de esta religión, en amar a Dios sobre todas las cosas y a nuestro prójimo como a
nosotros mismos. Pero ¿y esto qué significa?

Significa, en primer lugar, qué debo tener una relación de amor, cercana y filial con Dios.
Considerándolo a Él como mi padre y a Cristo como a mí hermano. Un hermano al que debo
ver reflejado (a) en cada uno de los seres humanos con los que me “tope”.

Significa, en segundo lugar, que soy fiel a lo que su hijo dice.  Qué sigo sus enseñanzas y las
pongo en práctica, fortaleciendo mi fe y mi espiritualidad a través de los medios qué Él nos
dejó.

Un buen cristiano consiste, como conclusión, en practicar la justicia y la caridad con las
personas que nos rodean.

Cualidades y virtudes de un líder cristiano

Un líder cristiano debe tener en cuenta que las personas a las que dirige son fines en sí
mismos y no medios, los cuales pueden ser utilizados y después desechados.

La finalidad de este tipo de líder debe ser el servicio y no el aprovechamiento de las personas
que tiene a su cargo. La enseñanza y no el castigo, el perdón y no la venganza.

Este tipo de liderazgo, desde luego, no es fácil de ejercer. Se requieren virtudes tales como la
paciencia, la constancia y la fortaleza.  Es necesario forjar el carácter para no sucumbir ante el
egoísmo y el camino fácil, cuyo sendero está pavimentado por la soberbia, la corrupción y el
autoritarismo. La paciencia es necesaria, porque el ser humano es un ser falible y muchas
veces los cambios se dan a lo largo del tiempo. Un tiempo en el que es necesario esperar,
para ver los frutos de las acciones que llevamos a cabo y que en un principio parecen
imposibles de lograr.
La constancia es necesaria porque debemos ser misericordiosos y caritativos una y
otra vez, nuestra forma de vivir el cristianismo no puede depender del humor con el que me
desperté el día de hoy; debe estar basado en un ejercicio de actos buenos, repitiéndolos una
y otra vez hasta que los asimilemos.

La fortaleza es necesaria para no sucumbir y mantenernos firmes ante las seducciones de


este mundo: el egoísmo, el relativismo y el consumismo. Pensar en servirnos de los demás,
en vez de ayudarlos a crecer y desarrollarse  como seres humanos, es una de las
mayores tentaciones que enfrentan los líderes que desean seguir los principios cristianos
dentro de su vida y  en la forma de ejercer el liderazgo.

Reflexión para líderes cristianos

Invito a los hombres y  a las mujeres que sean líderes, a reflexionar qué tipo de liderazgo
están ejerciendo en sus vidas, en sus familias y en su trabajo.

Pregúntense:

 ¿Soy líder de mi propia persona?


 ¿Me perdono a mí mismo cuando cometo errores?
 ¿Estoy sirviendo a las personas que se encuentran bajo mi cargo, o me estoy sirviendo
de ellas?
 ¿Soy humilde para aceptar los errores que mis subordinados me señalan?
 ¿Soy misericordioso frente a los errores que comenten mis subordinados? O no tengo
paciencia para con ellos y los reprimo constantemente, humillándolos frente a las otras
personas.
¿Qué es un líder y cuáles son las características de un líder?

El liderazgo conlleva por tanto poseer un conjunto de habilidades a la hora de mostrar


iniciativa, de ser innovador, tener capacidad de análisis para definir estrategias que nos
ayuden a gestionar de manera eficiente el trabajo de un grupo de personas. Un líder conoce
sus fortalezas y las aprovecha al máximo.

Lo que hace preguntarse, ¿qué es un líder en la Biblia?

Ser un líder cristiano verdadero es alguien que sirve y se sacrifica. Es entregar su vida para
que Dios pueda depositar en su vida la capacidad de servirle fielmente y que con denuedo
pueda trabajar en el ministerio rescatando almas, y que pueda sentir el dolor que Dios siente
por las almas.

En la misma línea, ¿qué dice la Biblia de un buen líder?

En Mateo 20:27-28 podemos apreciar que “el que quiera ser el primero deberá ser esclavo de
los demás; así como el Hijo del hombre no vino para que le sirvan, sino para servir”, aquí
podemos identificar que, como antes lo mencionamos, tener presente que un líder también
sirve a su equipo ayuda a mejorar la relación y ...

Pero también, ¿qué dice la Biblia de ser un buen líder?

En Mateo 20:27-28 podemos apreciar que “el que quiera ser el primero deberá ser esclavo de
los demás; así como el Hijo del hombre no vino para que le sirvan, sino para servir”, aquí
podemos identificar que, como antes lo mencionamos, tener presente que un líder también
sirve a su equipo ayuda a mejorar la relación y ...

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