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Música

La música tradicional

« Anselmo López, Saúl Vera y Antonio Castillo


Eljorcpo llanero se toca con arpa (cuerdas de nailon), cuatro y marac
embargo, en muchas ocasiones, es posible sustituir el arpa por el sin¡
sonido de la bandola llanera. Anselmo López es su máximo ejecutantt
ello se le reconoce como e l«Rey de la bandola». Saúl Vera es compoi
ejecutante de los instrumentos de cuerda de la música tradicional ver
119. Atlas de tradiciones venezolanas • Música

L a música popular tradicional venezolana sus ritmos, sus melodías y sus tambores Zaire. Y en cuanto a los inc gemas > sollo
es -al igual que otras formas cultura­ y que entre nosotros fueron a animar para mencionar algunos, los «araos ::el
les- producto de un largo proceso de las fiestas de San Juan y San Benito. Delta del Orinoco c o n s ta ta r :' sl «cár
mestizaje en el que se han fundido en Finalmente, están las formas musicales -sekesekeima-, mientras a" a . ..e sc :ie
diversos grados los aportes de indígenas, que son creaciones originales, únicas, Guanipa los Kariñas se -eer»: ja r r a r :;:r
europeos y africanos. De ese intercambio y producto de nuestro particular proceso sus muertos mediante la fiesta de
cultural surgieron nuevas y particulares de mestizaje, tal como el joropo, los so­ atom po, donde hacen sonar sus laUSas
formas musicales tal como el joropo, nes de negros, las gaitas zulianas, la llora, de Pan o verékusi. Asi z _es
mientras otros géneros se hacen criollos y los tonos de velorio -la más importante música popular tradicional c : er
conservando las huellas visibles de alguna polifonía vocal de tradición oral de toda ritmos y melodías cuyas raíces sa m e le ­
de aquellas culturas matrices. Por eso, de Am érica- que son géneros que no han en una vasta geografía de : er as ■ :e cul­
acuerdo con las características mismas existido ni existen en ninguna otra cultura. turas. La música venezolana, s m e r
de su conformación, hoy día podemos La música tradicional venezolana es pues go, no se ha detenido en su e * : _,oar en
distinguir varios tipos de música dentro un colorido mosaico que a su vez se ha su largo devenir las formas rniijsiicalfes qp* 1 '
de nuestra tradición. En principio, están nutrido de una diversidad de expresio­ nos dan identidad har .-ere»: s^-e n de
soue as de raíz 'ndígena que son cultiva­ nes locales. De España cada quien trajo transformaciones d e n :r: sa _r m aces:
bas e~ su contexto cultural o bien están lo suyo. El misionero vino con su canto modernizador que a ha . r c u á j : :o r
Drese- :es sn celebraciones del calendario gregoriano. Los andaluces nos trajeron el sonoridades universaHes* b ta ilta M É m itíi
"rigióse cue nos /n o de Esoaña, -c o m o flamenco para dejar su huella en el polo, mundo de las granees ro je s rs c ¡caüe-
Las lu irá s- donde conservan todos os punto, punto y llanto y fulía oriental, y los micas así comc a
rasgos que a. distinguen c o n o una forma canarios cantaron su malagueña para tales de van 5^='3 =
>- aneen étnico am-encano. sembrarla en estas tierras. Los europeos una constante _. renovadora twjsoueoa
Par :iür:= zxans. ‘ener-os ¡as :e origen eu- a su vez trajeron a esclavos de distintas estética.
«epec u e x im : a <®andcc c c n s e rv a rx culturas del África negra. Los dahomeya-
■ • nos nos legaron el tam bor mina; los bailes
«uocr adirnsiaaQs ai aatjumr nuestra chimbangueleros provienen de la cultura
"KiiiiiHiiiiiwí" i i r r n o te ~anioer ¡ss que bantú. mientras los quitiplás de Curiepe « Velorio de Angeiita - ■ ; .e *
í x.-í ; ..... a » ' .....=. :■»:■ í ,:n ...
3 ir!«BB"'«aiiar & i..cj-xieí arncana x r ■jeror . síos en Nigeria y también en S cA i& una des S s tm s iB t T s p s n b a d a s ' szng, U S E
'2 0 • Atlas de tradiciones venezolanas • Música

EL joropo
S i alguna palabra está asociada con la paña y es sinónimo de toda una fiesta de no s- mueven los pies a manera de cortos
esencia de la cultura venezolana, ésa es participación popular. Se trata de un baile avances y retrocesos como si estuviesen
joropo. En el pasado, referido a una fiesta alegre que cumple la función de reunir y cepillando sobre el suelo; el zapatiao,
o baile popular y hoy más bien a una for­ divertir, al que cada región le imprime su se le conoce por su carácter varonil y es
ma musical tradicional que el venezolano propia esencia, desarrollando nuevos pa­ realizado por la pareja sin soltar el abrazo
ha hecho suya com o símbolo emblemáti­ sos y figuras que distinguen a cada una de como en la zona centro-norte, o sueltas
co de identidad. las variantes. Sin embargo, existen figuras completamente, como es propio de los
Aun cuando la primera noticia del joropo básicas que siempre se conseivan y se llanos. En esta figura sólo el hombre hace
se encuentra en una ordenanza de 1749, combinan para crear una rica y armoniosa sonar sus pisadas en el suelo, mientras la
el campesino venezolano empleó de danza que ha hecho del joropo el baile mujer se limita a escobillar. A excepción
| preferencia el término fandango para re­ nacional. Las principales son; de la guayanesa, la mujer no acostumbra
ferirse a sus fiestas familiares, y es hacia El valsiao, con que se da inicio al baile, a zapatear en el baile.
| principios del siglo xx cuando comienza a es la figura hija del vals europeo. En él, las El joropo se extiende por todo el territorio
ser desplazado por la palabra joropo. parejas suavemente abrazadas recorren nacional, y según la región donde se cul­
Fandango nos remite a un posible y el espacio de baile marcando el paso tiva recibe el nombre de: joropo llanero,
lejano origen africano del término y a un de tres tiempos propio del vals. A veces central, y oriental; diferenciándose entre
cercano parentesco con el fandango es­ dan rápidas vueltas en giros de espiral y sí por los instrumentos empleados, las
pañol, género del cante jondo o grande, suelen rematar separándose tomadas de formas musicales, la estructura literaria
caracterizado como uno de los cantos una mano para que la mujer realice una de las estrofas y el tipo de baile. También
con bailes más populares dentro de la vuelta por debajo del brazo del hombre; el en la región de Guayana, la centro-occi­
tradición flamenca. escobillao, es otro de los pasos básicos dental y la de los Andes se da, en cada
El joropo parece haber tomado del fan­ del joropo. En esta figura los bailado­ una, un tipo de joropo con características
dango el sentido de fiesta, jácara o baile, res colocados de frente -generalmente específicas.
abandona el galanteo amoroso propio del sueltos y a veces tomados de las ma­
flamenco, y adopta el asido de manos y
,os giros del vals, que es como se conser­
va hasta hoy.
Dentro de los aspectos constitutivos del
joropo puede ser rastreada la huella de
las matrices culturales que caracterizan
el mestizaje venezolano. Así en la rítmica
de la melodía, las fórmulas de acompa­
ñamiento armónico del arpa y el cuatro,
y en las maneras de versificación literaria
está la presencia europea. Por otra parte,
son aportes del negro la melódica inde­
pendiente -té rrr no empleado por Luis
cs ipe Riarnon . - vera para designar la
aLTomomiia zjqii cántente fronte ai acompa-
ñiamieHfD- * lia a suicerposctóri
3© íoirmuiBE nítricas diversas que produce
•sss aeinisaQDr nie -a m é is fe c ie lic a ■
inailTiane., sienas r f iM o n e s era ai santo

¡fe ípissanciiEi' ¡ie te «Bracas Jar señales


nequiiw/acas rte liaÉiiaelBi intíügpia.
:3 I p o p e 'ni; sai:-: 3¡ies»pi® iur :fflp:: rie irniiu-

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121 • Atlas de tradiciones venezolanas • Música

Joropo central
O c a s ió n » Todo el año O r ig e n » Mestizo
Fulgencio Aquino y
D is p e r s ió n G e o g r á f ic a » Distrito Capital y Estados Miranda, Aragua, Margarito Arístiguleta
Carátula del disco
Carabobo y Guárico Golpe Tuyero

Formas m usicales reposado, en el que se conservan las

;^a= formas musicales básicas del joropo figuras básicas: el valsiao, el escobillao, y

::er:ral reciben los mismos nombres el zapatiao.


Intérpretes
que las del joropo llanero -pasaje y En Campo de Carabobo, la dulzura de
Uno de los intérpretes más distinguidos y que
r o c e - :;>ero con otras características: el la música del violín y el ímpetu con que
enriqueció con su arpa pasajes, golpes y revuel­
aasae :z~tra! no sigue un molde pre- se baila produce un joropo distinto. Es
tas de la región central, fue el maestro Fulgen­
acádo, a diferencia del llanero que un baile de parejas que recorren el sitio
cio Aquino , el Rey del arpa tuyera, quien dio a
:sna . -a •: -: vciura formal fija. El golpe tomados de la mano, semiabrazados y
conocer en la ciudad de Caracas, una manera
US de giros y formas melódicas desplazándose en sentido contrario a las
virtuosa de ejecutar el arpa central.
« p e 'lio tipificar 5 „ forma poética es sobre manecillas del reloj. En esa zona suele

txiiD lia oqplla. interpretarse la música a mayor velocidad


No me mires que miran
Ilh á te rm a ‘diistirtr./a de ;oropo central, a de lo usual siendo el joropo cerrero, que
que nos miramos,
.«cíes x ro o e r a c a como un pasaje de dicen haber recibido de sus antepasados,
y dirán los que miran
pmii'ewtenisuQin es a 'evje~a. en la que el más picante y de más sabor.
que nos amamos:
alpinos *a r r a o : enioontrar elementos nos contendremos
imiiLMicaUBs j a : a n x c europeo. Instrum entos
y cuando no nos miren
te : . a : ': ca re s Para la ejecución del joropo central inter­
nos miraremos.
¡xaones :;pe t v enlazadas entre vienen el arpista y el cantador, éste último
(Canto aragüeño)
m Bwn iiwilBPuiipicican: z a s a p . ■¡aguase-, además toca las maracas, recibiendo

si, ¡immiBeÉL Sn-ielie *amiiiinar c o r el conjunto la denominación de «arpa,

roete íjuk anuncie el *'inai naraca y buche», entendiendo por buche


'■jFJ .
—¡L * .«as. Eie te ílm o e s "ieneza'hrtas • Hiiska

EL CARRA!
PALMARI

Joropo llanero
O c a s ió n » Todo el año O r ig e n » Mestizo
• Juan de los Santos Contreras, «El Carrao de Pa’ los
D is p e r s ió n G e o g r á f ic a » Estados Apure, Guárico, Cojedes, Palmarito». uno ele los intérpretes más reconocióos chamos!
del joropo llanero
Barinas y Portuguesa Carátula del disco

Formas m usicales llevan letras en versos octosílabos donde gunda parte se canta otra cuarteta o los

El joropo llanero se caracteriza por un sis­ se destaca el espíritu desafiante y guerre­ dos versos faltantes de la primera parte.

tema de secuencias armónicas fijas, que ro de los llaneros así como lo heroico, lo Las dos secciones son enlazadas gracias

a lo largo de la historia, a partir de cancio­ patriótico, la tradición, el amor a la tierra, al arpa.

nes y danzas tradicionales, se convirtieron el arraigo, la defensa de la identidad, la En los Llanos se destaca una diversidad de

en formas musicales, subdividiéndose épica bolivariana y la hermandad colom- formas de joropos de gran riqueza musical,

en dos grandes tipos, golpes y pasajes. bo-venezolana. entre los que cabría mencionar:

Este último de un carácter lírico, mientras El pasaje es de carácter más sereno que Pajarilio: el joropo más común en tono
cue a primero generalmente se le califica el golpe, se canta al amor y a la tierra y se menor y posiblemente el más difundido
como - recio= . adjetivo que implica una desarrolla formalmente en dos secciones. tanto en Venezuela como en el exterior.
nterpretación de mucha fuerza y vigor. En la primera se entona una cuarteta o Admite dentro de su ciclo armónico una
A los golpes se les asignan nombres pro­ si no dos versos que se repiten y en la se­ notable variedad expresiva.
pios, poseen una estructura musical fija y Catira: tiene la misma composición
armónica del pajarilio pero un ritmo más
lento. Sus letras siempre giran entorno al
« Baile del joropo llanero
Jóvita Nieto y Heriri Ramírez tema de la mujer.
Zumba que zumba: joropo en tono
menor que tiene un curioso ciclo armóni­
co de dieciséis compases que se repiten
sucesivamente; ambas manos del arpista
se alternan en el discurso melódico, por
io que su ejecución requiere de una técni­
ca depurada.
Sanrafael: joropo con uno de los ciclos
armónicos más complejos que se co­
nocen, en el que suele estar presente el
tema de la pesca.
Seis por derecho: es el golpe más
representativo, de tono mayor y de gran
popularidad. Se desarrolla dentro de un
esquema armónico muy simple que se
repite tantas veces como se desee; cada
arpista o cantador puede desarrollar su
propia interpretación.
Seis perreao: es una variante no muy
común del seis por derecho, que se logra
mediante una pequeña alteración de su
estructura armónica hacia la mitad de la
pieza, cuando se inicia un contrapunteo
que habla de dos perros cazadores, para
crear un verdadero climax: final .
123 • Atlas de tradiciones venezolanas • Música

« Conjunto de joropo llanero


;¡;;iiiiiinipaii: ii¡3 lfc :¡ie ..¡m .genere.miusica: marca pasos lentos y sencillos; el figuriao,
Arpa: Pablo Marvez
in w lta iK «iv iifíSiOKesei'iiteaiCBin más a rtg .e tomados de una sola mano y el remoli­ Cuatro: Pedro Castro
Maracas: francisco Ramírez
(«ni un» fitíffl® «ir raadto n e w r . que ~ = do. figura inspirada en el toreo de capa.
iiHi! ;«• m m ® » « • jw i* w una pees En este caso el hombre detenido en su mento líder. La bandola llanera de cuatro
raM U u.:ii) :i::mk ;::¡air é\ ¡a ra r 3fe une puesto hace girar a la mujer alrededor de cuerdas ha tenido un desarrollo específi­
m uar Smiwilhii » d f t M a e s lia ifa lM o n iz a o o r : sí mismo. Es una figura muy elegante y co para lograr simultáneamente el tipleteo
(mmwil«»ími«mÍlBimiMiic p ip e 3tue "¡ace muy propia del joropo. y el bordoneo, característicos del arpa, a
mm‘ w M ito ir o ir c f t » . m iup ataime- través del cual compite por la hegemonía
i» *#»- j e * fln te n c Instrum entos en el gusto popular. Esta técnica especial
sica del joropo llanero es ejecutada permite escuchar una línea melódica gra­
i -T .e i :ei r e zearpa : candóla consi- ve y otra aguda, desarrolladas de manera
c o n tra p u n tis ta .
:::;j is é ic - n a r a c a a E a r c a s e a i in s t r u ­

IM U JI
124 • Atlas de tradiciones venezolanas • Música

Joropo oriental
O c a s ió n » Todo el año O r ig e n » Mestizo

D is p e r s ió n G e o g r á f ic a » Estados Sucre, Anzoátegui,

Monagas y Nueva Esparta Cuereta

Formas m usicales joropo, las parejas «no levantan polvo», las parejas van sueltas, y la mujer se

En Oriente se habla tanto del joropo en lugar de zapatear se van deslizando va desplazando mientras el hombre la

propiamente dicho como de una variante por el piso, bordeando la melodía, sin persigue con firmeza y respeto, hasta que

muy popular que nace en Sucre, favo­ alzar los pies, ni realizar movimientos finalmente se toman de las manos en el

rable para el baile y la improvisación: el bruscos de cadera, como si se tratase de cotorreo.

joropo con estribillo, también conocido personajes de cofres musicales. Algunos

com o golpe y estribillo. dicen que el baile del joropo oriental es Instrum entos
El joropo con estribillo es excelente para una danza mixta porque, a diferencia de En el joropo oriental intervienen como

la improvisación tanto del ejecutante otras regiones, las parejas van realizando instrumentos principales: el bandolín, la

como del cantante que construye el texto figuras entre ellas, actúan de manera bandola (de ocho cuerdas) o la cuereta:

poético, dándole a través de la repetición interdependiente. El estribillo se trata y de acompañamiento: el cuatro, las ma­

una gran riqueza rítmica, en la cual, el de un baile donde predomina el uso de racas, la marímbola, la caja y la tambora

sello africano se sobrepone al indígena y las piernas tejiendo figuras. Su entrada (cuando se trata del joropo con estribillo:.

al hispano. El estribillo puede ser además genera una danza menos reposada, en la La manera de percutirse las maracas se

una entidad musical autónoma, indepen­ que se describen círculos hacia distintos conoce como «maraca ordeñada», por su

diente del joropo. lados, el escobillao adquiere más vigor y semejanza con los movimientos caracte­

El estribillo cotorriao es característico combinado con medias vueltas y vueltas rísticos del ordeño mañanero.

del estado Sucre y de la región norte de enteras, dando la impresión de bailadores

Monagas, se le llama así por la asocia­ que vuelan sobre el piso.

ción directa con el habla excesiva que En los estados Sucre, Anzoátegui y Mo­ Intérpretes

caracteriza a la cotorra criolla. Se canta nagas, se destaca una variante de joropo José Julián Villafranca es uno de los intérpretes

parafraseando en forma veloz la cuarteta basada en dos períodos armónicos y más conocidos del joropo oriental al que siem­

inicial del joropo e intercalando alguna conocida como la guacharaca] cuyo baile pre se le pide de regalo un estribillo cotorriao

interjección. es expresivo por su gracia y galanteo, Pedro Pablo Cova Lara, mejor conocido como

En Oriente los términos joropo y golpe Perucho Cova es uno de los grandes maestres

se emplean a veces de manera confusa, de la cuereta, nuestro pequeño acordeón. Otro

siendo utilizados en algunos casos como compositor y violero ya desaparecido fue Cruz

sinónimos. Sin embargo, se pueden esta­ Quinal, El Rey del Bandolín, apasionado canto:

blecer ciertas propiedades en cuanto a las del joropo con estribillo.

características musicales de cada uno.


El golpe, como señala Carlos García, gene­ He llegado a Margará
É

ralmente tiene caracteres formales y meló­ hospedando mi c a n

dicos preestablecidos como es el caso del con esta dedic¿oa\

golpe de arpa, sabana blanca, media diana, de tipo muy cuM

entre otros: mientras que el joropo oriental Lo grande de Nueva Espeté

se- caracíerza per tener una estructura y digno de recoal

determinada, pero si¡ir ceñirse a secuencias lo simpático : t i

armónicas especificas.. en cultura pocatij


Adelante Nue'<£ £¿pa

Baile io 0)vidas tu ja ja i

Jim«temerafeo flp® distingue- ai o rx c ponpe uin paate siir

amorten es I®eiieganoia M su aallfe.. Er al es press. Pe £ Jesíraxl


pranáf x taja*® rasad
y/psé J i
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El joropo contemporáneo
O c a s ió n » Todo el año O r ig e n » Modernización del joropo tradicional

D is p e r s ió n G e o g r á f ic a » El joropo gana espacio en los escenarios

aristicos de la ciudad Maracas »

E oropo, en especial el llanero, alcanzó Aparicio y el bandolista Anselmo López.


durante los años cincuenta un desarrollo Como intérprete del joropo aragüeño se
com ercial que llevó a m uchos arpistas destaca Margarita Aristiguieta, junto a
' cantores a dedicarse de lleno a esta Pancho Prim «El rey del canto mirandi-
adMiidad. 3 o r este cam ino se desarrolla el no»; en el oriente brilla la cantora María
estile d>e Juan Vicente T orreaba, pionero Rodríguez, y en el estado Lara son bien
írtrodlucción del contrabajo en el conocidos Los Golperos del Tocuyo.
•x n ju n tc instrum ental llanero, y quien Por otra parte, el joropo salta las barreras Nuevos espacios
riras un e s tio ce pasaje para consum o de la instrumentación tradicional gracias La capacidad de adaptación y cambio ha per­
jllissügirálOQ urbano. al extraordinario desarrollo de la música mitido que el joropo sea una expresión vigente.
_i: rctyzar& ziz~ d d contrabajo es una orquestal -simbiosis de tradiciones aca­ Además de los bailes realizados en familia y los
- ¡a presencia del espíritu démicas y populares- y la incorporación propios de la religiosidad popular, están vigentes
x m x s a r c & : : . de as tecnologías de los jóvenes citadinos al estudio del los bailes con intención comercial que alguna vez
sr el caminí: evüilufivo del joropo. En arpa y la bandola. Es así como se inicia se llevaron a cabo sólo en prostíbulos y cantinas.
n c r e r r : se trs*: ::e un símbolo de en los años ochenta la conformación de Según los estudios sobre el joropo central de la
¡amasÉgiic u ■nociernoac . su presencia se ensambles instrumentales que hicieron musicóloga Katrin Lengwinat, existen en los clu­
Itíu» ir a r s J o s m : en eí e n s a lc e r a : - suya la interpretación del joropo. Entre bes bailes de concepto como e l«de la orquídea»,
3 in 8 i tiifr arpia;,. c u a n ')¡ Tnairaca. O bajo otros surgen grupos como El Cuarteto, el «de las faldas» y «de farándula» que implican
h ansio x a n d K .:osiib¡íi¡CEdes a Ha mane e Ensamble Gurrufío, Paul Desenne la realización de concursos donde los triunfado­
S K w e r» . air.:i: :assar.. :iar nuevos giros con su disco Tocatas Galeónicas, y Saúl res reciben premios. Los intérpretes del joropo
üc: o * tecie más dinámica ,a Vera, maestro de la bandola llanera, llanero se han organizado en asociaciones,
'•ffisarar m ut os arasras :ie iiti* En fas quienes crean nuevos climas sonoros y editan publicaciones, participan en festivales -en
ncdKsrxK t, «staurantes de tas destacan la ejecución virtuosística. Tam- Venezuela y Colombia- y organizan espectáculos
acra e íla m úsica del : e- Ismael Querales conforma un grupo como el famoso Atardecer Llanero que reúne
¡Hedí*®) i p n a i e , sI© :e_ er c o a a bandola como protagonista. celebridades en el Poliedro de Caracas. El joropo
1m ¡awgiyroa; :asos ra n o A s n s~*c. Ricardo Sandoval con la es, sin duda, una de las formas expresivas
I'.fflllunajpauicior;; ffllil candeda : e":a . Cheo Hurtado con distintivas del venezolano y su fiel compañero
«aim'wiiiteira, ■' •*! o m c '& lb a n a : su bancoia guayanesa ejecutan joropos en los nuevos estilos de vida que impone la
xm :ana:nenzaQ'3s por una ima.or libertad y modernidad.
•sscansor. amónica, 3iini;jteneamente a
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Otras variantes
Andino Centro Occidental Guayanés

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O r ig e n » Mestizo O r ig e n » Mestizo O r ig e n » Mestizo
D is p e r s ió n G e o g r á f ic a » Estados Mérida, Trujillo y D is p e r s ió n G e o g r á f ic a » Estados Lara, Falcón y D is p e r s ió n G e o g r á f ic a » Guayana
Táchira Yaracuy

En la región de los Andes -Trujillo, Mérida En los estados Lara, Falcón y Yaracuy de la En la región de Guayana encontramos uno
y Táchira- se baila joropo al igual que en el región centro occidental, el joropo adquiere de los géneros menos difundidos del país.
resto del país, aun cuando no con la inten­ una forma genuina denominada golpe. Es un joropo de bandola de ocho cuerdas
sidad de íes llanos; incluso zonas relativa­ El golpe tiene como características básicas que reúne ias variantes del oriental y la de
mente aisladas como los pueblos del sur en el canto a dúo alternado entre varios coros, los llanos. El joropo guayanés se interpreta
el estado Mérida y debido a la influencia de con la participación de una batería de con cuatro, maracas y bandola y la percu­
la radio, han hecho suyo el joropo llanero, instrumentos de cuerdas, acompañados de sión la constituye el golpe de las suelas de
y o interpretan con tanto fervor como su tambora y maracas. los bailadores en el piso.
propia música tradicional. En los Andes Los golpes reúnen gran variedad de melo­ Entre las variantes musicales se destacan:
venezolanos se difundieron los golpes y co­ días y hay algunos que tienen una secuen­ la burra, que es un estribillo callejero en
rridos y algunos de ellos adquirieron nuevo cia armónica libre. Los de estructura formal modo mayor; el mocho Hernández, que
nombre. Así ocurrió con el Nuevo Callao usan un pequeño estribillo, del cual gene­ equivale a la periquera llanera; el seis gua­
que en el estado Táchira se convirtió en ralmente proviene el nombre de la pieza, yanés., que no tiene una letra fija y posee
Macallao. Considerado como el auténtico para cerrar el período musical y comenzar una fuerza rítmica y variantes virtuosas
joropo andino, es una pieza propicia para el interludio instrumental. Las figuras utili­ únicas; la josa, que equivale al corrío llanero
la improvisación, bailable y muy alegre. zadas en el baile también se observan en en modo menor, interpretada por un solista
Su música en tono menor consta de dos algunos sones del tamunangue. La forma y un coro, y el golpe patricio, similar al
partes de ocho compases cada una: poética que acompaña al golpe es casi gabán llanero.
exclusivamente la cuarteta octosílaba tanto El joropo guayanés se acostumbra a bailar
Qué bueno es el macallao
en la copla como en el estribillo, con rima trapiao oyuquiao. El baile yuquiao se inicia
p a ’bailarlo bien rascao
asonante o consonante entre el segundo y con la figura del vals, cuando la pareja se
los hombros se van moviendo
cuarto verso: toma las manos, comienza un zapateo
con su girito tumbao.
recio en el que la mujer también partici­
Ah mundo cuando era mundo
Otro joropo andino es La perrabaya, con pa, ya que ella tiene la libertad de realizar
Ah Llano cuando era Llano
ritme de vais-pasaje, también se presta a la cualquier figura. Una de las formas de baile
yo digo Ah mundo El Tocuyo
improvisador, y el contrapunteo, y consta más común es el golpe de burra, donde
porque yo soy tocuyano
efe jn a so,a parte de dieciseis compases. as pareas, en determinado momento se
Jh are :le ú ric o propio de esa región es M i p a ís s e e n c u e n tra e n c ris is sueiían para crear figuras de galanteo.
¡tí samoodm, cpiis ss iniBjprsta en esestado es .a g ra n p m B o a jp a á ó n :
A es creías úe un rió
~3cnra atmaeúar de una süOjfertB dita e r ■Dor cullpa :J& poiiücos
y a Ja semora de un laurel
rajinioF dl& ariocs. que oa rrpieroe una. > su mim&nsa: z:üirupoior
neajQFúb- efe ti amor mío
¡piBirifflraiipiiritlffi1te 3tíhc.i is D n p m B s -raneta 'Goipe ftDCLMim©),
«ende Hasaguas correr
-O íS H E
noss.
j onmpaaa a
* Atlas de tradiciones venezolanas • Música

Dos grandes del joropo


Ignacio « In d io » Figueredo Cruz Quinal

\ -ce en Apure el 31 de julio de 1899 y muere el 2 de sep- Cruz Quinal nace el 3 de mayo de 1934 en el estado Sucre y
~ie~-ore de 1995. Se inicia de manera autodidacta a los once muere en agosto de 1987. Considerado «el rey del bandolín» fue
aliños, después de haber presenciado las ejecuciones de Pedrito el más destacado intérprete de los estribillos orientales. Transcu­
-lerera. uno de los mejores arpistas de la región. Apenas en una rre su infancia trabajando el campo y es a los doce años cuando
serrara ya pudo cautivar la admiración de los invitados interpre- al comprar un bandolín, se despierta su pasión por la música. En
la r o : e arpa en un baile organizado por su madre en San José poco tiempo y practicando de manera autodidacta, no sólo llegó
¡UleRayara. Para el año 1914 comienzan a oírse sus primeras a interpretar joropos y estribillos en fiestas y bailes populares,
.i: :s cones. sino también galerones, fullas y aguinaldos. Tocaba el bandolín
3 llrncHic Hcjenado alcanzó su fama muy pronto. Para 1948, ya con tal energía que tuvo que cambiar las cuerdas de acero por
Caracas, se haba hecho testigo de su virtuosismo, gracias al unas de nailon que ofrecían mayor resistencia a su técnica de
ancuencrc Antonio Estévez, Fredy Reyna, y Reinaldo Espinoza ejecución.
~ier.lanoiaz _rvo de los primeros arpistas que viajó a festivales Como compositor, se dedicó casi exclusivamente al joropo con
sr repraseríac c~ de Venezuela. Para el año 1952 hace la primera estribillo, y cabe citar entre sus principales obras: «Botucal»,
g ra ta o o r oe jn LP nstrumental, lo que marcaría un sinnúmero «El montanero», «El panecillero», «El peligro», «Los bejuqueros»,
'ííEngiraraciones posteriores. uno de ellos un álbum antológico que «San Salvador», «Quebrada Seca», «San Lorenzo», títulos que
e a jT E ios círtersos es: o s o e joropo llanero. reflejan el hondo apego que siempre profesó a su región, su coti­
"e n e en s l ha ter "ras ce 3CC composiciones que expresan dianidad y su arte.
sl. e n p a fe cor _aoc er ~e as que cabe mencionarse: «Los Su inquietud musical no se redujo a ejecutar distintos géneros,
caiiuipntiDs™’., «"Las-rayas ciel guayaco1. «Mi Camaguán», «Lastres se inclinó también por la fabricación de los instrumentos con
A-auca», «8 gaibár> > M aría Laya», tema de que interpretaba su repertorio, hasta convertirse en el principal
®raiH![PQ)pull0inidad; escrito por sil ndiic en honor a una simpática fabricante de instrumentos de cuerdas del Valle de Cumanacoa,
•sncOTilMKcira nuiier que conoce s r u ra "esta llanera en 1914 proyectándose igualmente hacia otras regiones del país. De
•nBfüpiiÉEUtoi deifBuaahiara y que aun cuando no vuelve a verla lo su taller repleto de cedro y pino, salieron innumerables cua­
i l M N H i a n t i i i n i i i i p K , naBán p o r la cual se le en leyendas a su tros, bandolines, bandolas, tres, guitarras, violines y su famoso
(QÉKI8ll!!Mülu3l!;. bandolín morocho -producto de su creatividad-, que consiste
caracfariiiza por su reciedumbre, en una mandolina con doble trastera, que con cierta técnica de
pe une cíe os eslabones perdidos ejecución permite cambiar de tonalidad una pieza musical sin
ite-tfla UnisEona ~ jsi«ca arpa modificar la digitación de la mano izquierda.
sir “5gP3P3re«£ sscrcas s r nota- Cruz Q uinal«El Rey del bandolín» ccn su bandolín moracho
fbfc; Safe©'Ssft'asye
128 • Atlas de tradiciones venezolanas • Música

Los géneros musicales al igual que las ñan los velorios de cruz; los aguinaldos, en géneros y talentos musicales ha tenido
artesanías o las danzas tradicionales son villancicos y gaitas para celebrar los ritos entre sus intérpretes más versátiles a Ma­
el resultado de un largo proceso de bús­ de Navidad; o los golpes de tam bor para ría Magdalena Rodríguez, quien deslum­
quedas expresivas. En éste intervienen festejar a San Juan o San Benito. Y en los bra como cantora al igual que bailadora
múltiples criterios estéticos y musicales, espacios para el descanso, la alegría, y el de los más variados géneros musicales
tanto individuales como colectivos, que solidario intercambio, están los géneros de esa región.
finalmente van a dar un producto con para divertir y bailar, tales como el joropo, La diversidad de géneros musicales
forma distintiva, reconocible y única. De el vals, la guasa, el merengue, el polo, el existentes en la tradición venezolana da
esa manera, difícil de reconstruir en su bambuco y los cantos galantes. fe de un rico proceso en el que múltiples
autoría y etapas de creación, surgieron el Cada localidad o región ha contado colores y timbres sonoros se tejieron para
joropo, ia gaita, el merengue, los cantos siempre con cultores destacados de reafirmar nuestra condición mestiza.
de trabajo, la tonada, la fulla y muchos uno o varios de los géneros de música
otros. Por eso los géneros son anónimos pertenecientes a la tradición. El oriente
y de autoría colectiva, ya que pertenecen venezolano -p o r ejem plo- tierra pródiga
a las sociedades y
no a los individuos.
La autoría individual
sólo tiene cabida en
la creación de un
ejemplo, una pieza,
que algún com posi­
tor diseña sobre la base estructural de
un género que ha cuajado al crisol de
varias generaciones y a la que le impone
su sello particular. Así, la tonada como
género no tiene autor, pero en cambio
nadie discute los derechos de Simón Díaz
sobre cualquiera de las tonadas surgidas
de su creación. Las sociedades llegan
a producir géneros musicales al asociar
algunos momentos o acciones carga­
dos de significación con determinados
«climas» musicales que de tanto repetirlos
van adquiriendo una forma y un sentido
funcional. Por eso existen cantos de arru-
c y ce ronda donde la música tranquiliza
riño : cien música asociada
a i unos casos para tranqui­
lizar a j r a u n a ~ r ¡i -=&~a manual del
□rdaiiic, el ara:. : »a «tranza. oíros
poma, ayudar a aaraaoiraer al i r i r e . ótame
fas- c a rie s dte pillar mofe, liraitarari 'estar
tas sanos de IuiiIIIb a ra ñ a ra : a rJIte: a
asiera": lila "lailaiaiiuBiñia,. ¡p e accjnD&r
• Atlas de tradiciones venezolanas • Música

El galerón
O c a s ió n » Todo el año en fiestas populares y festivales y especialmente en la interpretación del tamunangue larense y en los velorios de Cruz de Mayo

Qmgbi» Mestizo

j i s p s b w n G e o g r á fic a » Estado Lara, los Andes y oriente

C : ' este nombre se designan distintas


e *: 'rsiones musicales que tienen lugar
er sas regiones del país. En el es-
liaoc La/'a corresponde al penúltimo son
i 0i farnunangue, en el oriente se trata de
« c a r i t o que se entona principalmente
io s de Cruz de Mayo y en la
:s Andes, el galerón es un anti-
giijü gonpe iirst'u ~ e r:= conocido también
~:an el n c rc r e ae ra s ta cr rense.
IB gpHeror nene perú .timo son del tamu-
" s r:.g. r en un canto entonado a
;;;ujC, a r - - n2,Q- , acompañado por

iJtfcs dos esrriiallfcs fijos / cuartetas


:*• x t c biliarias,.

mm a s ' :r

.imtmmw mam- iimum


,m m s 1ittumiiimwlIBi
.aflfiife J0 M
• Atlas de tradiciones venezolanas • Música

« Francisco Mata y sus guaiqueríes, El Carite

Polo, jota y malagueña


El polo La jota La malagueña

O c a s ió n » Cualquier momento del año O c a s ió n » Cualquier momento del año O c a s ió n » Velorios de Cruz de Mayo
O r ig e n » Europeo O r ig e n » Europeo O r ig e n » Europeo
D is p e r s ió n G e o g r á f ic a » Estados orientales, Falcón D is p e r s ió n G e o g r á f ic a » Estados orientales D is p e r s ió n G e o g r á f ic a » Estados orientales
y Zulia ____

S e trata de un canto procedente de Espa­ La jota es un género procedente de Es un canto que se entona en los esta­
ña, que llega a nuestro país para poblar las España que en nuestro país está ligado al dos orientales. En Monagas y Anzoátegui
costas de los estados orientales. canto. Aunque conserva algunas carac­ forma parte de la música de los Velorios
La más antigua transcripción musical que terísticas musicales del género que le dio de Cruz.
se conoce del polo entre nosotros data origen, no está relacionado con el baile La malagueña se diferencia de la jota
de 1883, contenida en el libro Ensayos de complicadas coreografías. porque es tocada y cantada sólo en tono
sobre el arte en Venezuela, del general La jota forma parte del cancionero oriental menor. Utiliza los mismos instrumentos
Ramón de La Plaza. al igual que el polo y la malagueña. Se acompañantes que otros cantos orien­
El polo se canta en los estados Falcón, trata de un canto triste y melancólico tales: el cuatro, la guitarra y el bandolín.
Anzoátegui, Sucre y Nueva Esparta, y en que se refiere al tema de la pesca y del Emplea cuartetas de once, doce y hasta
menor medida en el estado Zulia. amor. Los instrumentos que acompa­ catorce sílabas, en las que se rinde ho­
En cuanto a las características musica­ ñan el canto son la guitarra, el cuatro y menaje a la Virgen del Valle, se expresa la
les, este canto posee una melodía de el bandolín, este último se encarga de cotidianidad de los pueblos pesqueros,
ocho compases creada libremente por el realizar el contracanto en forma de floreo se relatan acontecimientos históricos y se
cantor, en la que se combinan los modos sobre la melodía vocal. Ornar Serrano y cantan los más variados sentimientos.
mayor y menor. Algunas veces dos José Ramón Villarroel son algunos de
hombres se alternan al cantarlo, ya que, los Intérpretes de este canto. Niña del campo que cortas flores
en el polo, como en el seis y otros golpes, de nomeolvides y de azahar
se tiene la tradición de cantar en con­ Por estas playas rodarán mis restos corta una rosa de dos colores
troversia, razón por la cual se conserva porque la suerte lo convino así; para mi amante que está ai llegar
el aspecto juglaresco de esta expresión ofreciéndoles velas a los santos
musical. como raudal mi madre llorará por mí
« María Rodríguez y el conjunto de Atanasio Rodríguez «El Chiguao»

El polo suele ser más alegre que la jota interpretando géneros orientales. Foto: Sebastián Garrido

y la malagueña. Los cantores de polo


cuentan las costumbres de sus pueblos,
historias de amores y hechos históricos.
ES conjunto instrumental que utilizan está
formado por cuatro, mandolina o bando­
la ranacas y guitarra. Emplean general-
: rielas formada por versos de
«m arta u r o y ¡longitud.

_i' :ae¡; mámm « same cima míim


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131 •Atlas de tradiciones venezolanas • Música

EL vals
O c a s ió n » Cualquier momento del año

0=,igen» Europeo « Disco de larga duración de Pedro Ramón


Oropeza Volcán, destacado compositor y
D s p e r s i ó n G e o g r á fic a » En casi todo el país ejecutante de música tradicional venezolana

Entre los bailes de salón que llegaron a


xénezuela durante el siglo xix, el vals ha
3 30 el de mayor arraigo y dispersión. El
vals, que entre nosotros es llamado valse,
consiste en una expresión musical deriva-
ce de un baile popular alemán conocido
c orre aendler.
4,une ue no pueda establecerse una fecha
a o d ta de la llegada del vals a nuestro
país se puede asegurar que para me-
dfiodos de siglo • se hizo presente en la
escriture musical venezolana, registrán­
dose panru-es e r el Nuevo método de
gu&ars c ira edsiado en Caracas por
lom as Arfare Le. popularidad del vals se
«c- Ti::r,aie::¡eE. : c as múltiples publicá­
ronles que ar cenoclicos re.ísíasse
« Tamunangue Sones de una sola pareja, figura del
t w t ceesre genere. B .•■ais tuvo gran y cuatro. También en Lara se ejecutan Sanare, Edo. tara

acspftaocr x r cante de Tambre vene- valses con violín o mandolina, cuatro y


z a a rr :;¡xc i caco tanta ¡a música guitarra. La estructura musical carac­
-a ciaille,. se x rv 'rtia re r ar .a base terística de los valses populares es la
gánenos n ja c a le s , a rc e el ce de tres partes o temas melódicos. Aun
cuando algunos músicos populares han
.óiqpuini P É rrrr - -Inwere existen dios com puesto melodías imprimiéndoles
s an -sil m is , lie de salón y lia su nombre, la mayoría ha dejado sus
5safar ai iinsfinurner:: composiciones en el anonimato. En la
es ai painc.. tradeión popular podemos encon-
; cawc a! die Manuel t'a r a . ais como baile en muchas
ira,, ¡Ranee sa~ imanrsstacienes coreográficas,
jeiiciadic a r r e o ta s tenemos: ailg jira s fi­
i a s * r n m iB guras de¡ cirepe > del Tanijran-
5pipm> guR jm da te partes, do 'late-
b BariiDK;, -ir :í:¡ i:;;;::::!"*::::::::"
• Atlas de tradiciones venezolanas • Música

EL merengue
O c a s ió n » Durante todo el año

O r ig e n » Mestizo
«CañónContigo . grupo que retoma ¡a música ca­
ñonera como expresión musical (década de 1980)
D is p e r s ió n G e o g r á f ic a » En todo el país

Para algunos la palabra merengue se el bajo ejecutado en guitarra o marímbola en el «rucaneao». Los intérpretes de
emparenta con el francés «meringue», y un particular golpe de maracas. Los merengue tradicional en Caracas son:
nombre que designa al dulce que en instrumentos más utilizados en el interior Los Antaños del Stadium, desde la
nuestro país recibe el nombre de suspiro del país para ejecutar el merengue son la década de los cincuenta; el grupo Cañón
y a una danza popular haitiana. Otros bandola, las maracas, el cuatro, la guita­ Contigo, formado desde 1980. También
opinan que proviene de vocablos afri­ rra y la tambora. se destaca la labor de varios cantantes
canos como «muserengue» o «tamtam En general, la melodía del merengue es como Jesús Sevillano, Cecilia Todd,
mouringue». bastante alegre. Las letras se refieren a entre otros. Entre los grupos y solistas
El merengue como género musical se temas diversos entre los que destacan instrumentales se encuentran el Grupo
extiende por toda la cuenca del Caribe. la cotidianidad, el amor, la mujer y los Raíces, El Cuarteto, Ensamble Gurru-
Las primeras noticias del merengue en grandes acontecimientos del país. fío, Beto Valderrama, Henry Rubio. En
Venezuela son unas partituras de «danza El baile del merengue no posee una el interior del país resaltan las com posi­
merengue» de la segunda mitad del siglo coreografía específica. Se realiza sobre ciones de Luis Laguna, Henry Martínez
xix. Como género de canciones bailables, dos compases y en ocasiones suelen y Pablo Camacaro.
el merengue adquiere popularidad en estar presentes movimientos de cadera
Caracas durante los años 20. Al baile del bastante acentuados, como se aprecia « Parejas bailando merengue rucaneao

merengue tradicional caraqueño se le


llamaba comúnmente merengue rucaneao
y se bailaba «a locha» o «a medio» en los
mablles. La orquesta estaba formada - y
así continúa en la actualidad- por cuatro
instrumentos solistas: trompeta, trombón,
saxo y clarinete y como Instrumentos
acompañantes el cuatro, el bajo y la
percusión. También existían grupos que re­
cibían el nombre de cañoneros y participa­
ban en fiestas y celebraciones familiares.
En cuanto al ritmo del merengue, se
distinguen dos estructuras: la del 2/4 es­
pecialmente ejecutado por estudiantinas
y bandas de retreta: y la del 5/8, preferida
por grupos populares y músicos cara­
queños de ‘.'adición oral. Es esta última
esfrudaura a que -npone un sello muy
partaJar», des a re o p e s y ritmos cruzados
merengue de
aquel pimíamente düe Saras Domingo..
5 irerangue "’€ 3óib se ciálwa s r Ca-
"a E » amo en .-ruchas regañes je país.,
jomete adquiere :aractensftc3 s ornas.
¡Es asii comic m Lata, e¡ ritme es je o/E
k * iSBinqjji; aii golpe. Er jüiwim, w r »
133 • Atlas de tradiciones venezolanas • Música

La futía
O c a s ió n » Se canta en los Velorios de Cruz

Giras»» Europeo

B i b f b s k n G e o g r á fic a » Estados centro-costeros y orientales

L- palabra fulía está emparentada con palmadas de los asistentes que transmi­ instrumentos que la acompañan son la
i r canto de procedencia canaria llamado ten el carácter alegre y vivaz. En algunas guitarra, el cuatro, el bandolín y algunas
t í a . En nuestro país es una expresión ocasiones no se emplea el cuatro, por lo veces las maracas. Esta variante de fulía
imusi cal que forma parte de los velorios que se ejecuta sin el apoyo armónico. En es cantada con la misma libertad caracte­
oe cruz de la región centro-costera y la la fulía central el coro responde al solista rística de otros cantos de oriente. Intervie­
iragnán oriental. repitiendo el tema central o concluyendo nen uno o más cantores separadamente
Los cantos de fulía tienen contenidos la glosa iniciada por éste. que van desarrollando temas de conte­
son interpretados por solistas nido religioso y entre el canto del solista
taue 5¡e alternar . reciben respuesta del Solista suelen intercalarse trozos instrumentales.
. sientes. También se pueden Si la mar fuera de tinta
süvos a asuntos históricos oye la mar como suena Bendigo la santa Cruz
: anecdóticas, ay como suena, Bendigo quien la adornó
al -entonada en casi todo y las olas de papel Quien en la Cruz esmaltó
■aii estadio Miranda, e D stritc Capital y Coro Con ricas conchas del mar
Ubi coste del estaco Arague- se mezclan oye la mar como suena Dime quién pudo esmaltar
• i s x s oe "luesra ru rrjra hispana afro- (Fulía central) Toda la pasión entera
«iriiezoiiaina. Los r s E r jn e - t is c u e s u e e r Y para cantar con gracia
are d coeíro, que La fulía de la región oriental de Venezuela Aclárenme esta ronquera
:■ i nn pm je o e te -cantada en los estados Anzoátegui, (Fulía oriental)
lOTsupaidc rfmicamentie ton un oubiertc: '■/onagas, Nueva Esparta y S ucre- posee
mm ' tamboras mayor influencia de las melodías euro-
» sniiiairaisar mihhi pamoiiiaion tp e a - oeas. En los velorios de Cruz de Mayo,
« Futía en celebración de Cruz de Mayo
intBffiBiiB- aPCT»^.iBcc»anB # Ijwiiiiniiiiiíf las se alterna con el galerón y el punto. Los Carapita, Caracas
134 • Atlas de tradiciones venezolanas • Música

Cantos de trabajo
O c a s ió n » Durante las faenas de trabajo

O r ig e n » Mestizo
« Cantos de pilón
D is p e r s ió n G e o g r á f ic a » Estado Lara, estados andinos y llaneros Panaquire, Edo. Miranda

S e trata de un tipo de canto que el hom ­ La costumbre de entonar cantos de faena La tonada
bre venezolano entona durante el trabajo ha ¡do desapareciendo con la introduc­ Una canción que deriva de los cantos
cotidiano. Este canto que surge de la ción de nuevas tecnologías, sin embargo, de arreo y de ordeño tradicionales de la
faena y ayuda a suavizarla, es usualmen­ aún continúa el llanero emitiendo su canto región de los Llanos es la tonada. Para
te un canto individual, aunque existan con fuerte voz o silbando melodías delan­ Luis Felipe Ramón y Rivera, la tonada
algunos de tipos colectivo como el de te de las reses y en el ordeño. También es es un canto nostálgico que combina un
las lavanderas. Puede suceder que el posible encontrar las labores de molienda trozo melódico lento y de largos sonidos,
canto individual se alterne con el de otro y labranza suavizadas por la entonación como el de los cantos de ordeño, segui­
compañero de faena, como en el caso de de estos cantos. En los estados andinos do de otro, parecido al joropo, alegre y
los cantos de pilar maíz, los de arreo y los y en haciendas cafetaleras de Sanare, más rápido. El instrumento que acom­
de recolectar café. en el estado Lara, pueden escucharse paña esta canción es generalmente el
Las coplas de estos cantos en su mayoría cantos de recolección de café o «de cafe­ cuatro, aunque también puede participar
están formadas por versos octosílabos tería». Y en las ciudades, los que ofrecen un instrumento solista como el arpa o la
y se refieren a temas variados llenos de sus servicios de casa en casa, tales como bandola y otro armónico como la guitarra.
picardía y buen humor. los heladeros, zapateros y amoladores de Los más destacados representantes de
cuchillos van por las calles entonando sus este género son Eduardo Serrano, com ­
Para ser un buen llanero pregones.
positor de la primera tonada, que sirvió
tres cosas se han de tener: de ejemplo a muchas otras canciones de
buena soga, buen caballo, igual combinación; José Reyna, autor
y una zamba a quien querer caraqueño; Juan Vicente Torrealba,
(Canto de arreo) « Cantos de labranza
llanero en cuyos cantos no se observa el
HumocaroAlto. Edo. Lara

contraste copla-joropo, sino más bien los


sonidos largos de la melodía; y actual­
mente Simón Díaz, el más importante
impulsor del género, autor de famosas
tonadas como «Mi querencia», «Tonada
de luna llena», El alcaraván», «El loco Juan
Carabina» entre otras.

Yo vide una garza mora


dándole combate a un río
así es como se enamora
tu corazón con el mío

Luna, luna, luna llena menguante


luna, luna, luna llena menguante...
La luna me está mirando
yo no sé lo que me ve
yo tengo la ropa limpia
ayer tarde ¡a lavé.
ilanada de una Mena
tetar Siinnon Diiaz;
13b Atlas de tradiciones venezolanas • Música

~1

Polca Bambuco
O casión » Todo el a ñ o O r ig e n » Europeo O c a s ió n » Todo el año i O rige n » Canciones a dos tiempos de tipo habanera

D is p e r s ió n G e o g r á fic a » Centro-occidente, Mérida, Táchira, Trujillo, D is p e r s ió n G e o g r á f ic a » Estados andinos, Zulia, Lara

Apure. Barinas, Sucre y Bolívar y Distrito Capital

Polca acompaña a los diablos de Corpus Christi, definitivas en torno a este tema. El bambu­

_s polca es un baile de salón que tiene quienes salen los 24 de junio y ios 5 de co como género musical tiene su origen en
julio a bailar alrededor de un palo de cintas las canciones a dos tiempos -cadenciosas
su. origen en Europa a principios del siglo
llega a nuestro país a mediados de que tejen y destejen. En el estado Sucre y lánguidas- de tipo habanera, que se
la polca anima una diversión que trata esparcieron por América Latina a media­
ase s a o .
13 DC’Ca no ha sido reconocida como un problemas sociales o de salud, conocida dos del siglo xix. Nuestro bambuco en sus

■-'■'3muestro, pero muchos composi- como El Mosquito Patas Blancas. En los inicios estaba muy cercano al estilo de la

■ices a han cargado de rasgos venezo­ estados Trujillo y Táchira, la polca per­ música cubana, pero tiempo después,

lanos Las Pandas que se consolidaron manece como forma de baile en el Pato tanto aquí como en Colombia, el bambuco

hacas finales jeí siglo <x se ocuparon de Bombeao. En la fiesta de Los Enanos y La sufre modificaciones rítmicas, de compás

r e a r a r ar; ■=;_ 'epertorio estas composi- Muñeca de la Calenda, propia del estado y de estructura, en la que se agregan

•aonas. garantizando Ja vida de la polca Trujillo, los personajes bailan una polca que pequeñas introducciones o interludios de
es interpretada por violines, mandolina, las partes principales.
en iiiestero paB,
pandero, maracas, cuatro y tamboras. Y En el estado Táchira, región donde más
3,ars el tier.ip : oue ■egc ¡a polca a Vene­
en los estados Apure y Bolívar un baile de se ha arraigado el bambuco, este género
zuela, tos Paites de saion coosíftu'an uno
palos conocido como El Paloteo es anima­ suele tener tres partes o temas melódicos
as ¡os tbe wnpo rtartE S entreten mientos
í ...... =•: : e : ; - - do con la interpretación de una polca. en los que se combinan los modos mayor
y menor. Dos ejemplos populares de bam­
.a ta r :;;:¡r -arcas musicales que gene-
rífflmrrieritte se- cfjnipoiníen de uaiis polca
El bambuco bucos tachirenses son Mañanitas navide­
Es un género musical característico de los ñas de Marco Antonio Rivera Useche, y
j a r a * oras- piezas x r c lia mazurca,
uir carácter Andes venezolanos y de Colombia, país Soy de los Andes de Luis Felipe Ramón
donde constituye un género de sólida pre­ y Rivera.
En asios bai bs
sencia. El bambuco también se interpreta En las décadas del treinta y cuarenta del
» sricn. aunque ae dar am una época er
en otros lugares de nuestro país como siglo xx, resurge el bambuco en el estado
s ¡ u t * ra¡Raer»ace is esrueíiJira soda,
Lara, Zu,;a y Distrito Capital. Lara con las ejecuciones de la orquesta
3 ikb¡BMM m » iterauatsaB ¡ias dfiifarancas
E! ténnr r e b a rxiu o c usía algunos tiene un Mavare, dirigida por Napoleón Luce-
« t» a r a .a d t e v. negros. Ssios
r a :|bk .señoras all 'Origen' africarac, per: nc eosíar opciones na. autor del famoso bambuco titulado

sus» Diaiíscs: despules -¡endrina Por esta misma época, Caracas


se : c r „ie re en' e), escenario de creación
:e nueras : andones bambuco, entre as
•& Samaba, Mannuei Enrí-
'"aiiE: HiffiE jñirírfe. lie Jfmiqiust;
liitraniiiitt! ‘iointrniimic
136 • Atlas de tradiciones venezolanas • Música

La música cañonera
La música cañonera
La música cañonera está asociada a los llamados músicos cañoneros, que eran pequeños conjuntos de
calle que en la primera mitad del siglo xx irrumpían en los zaguanes de las casas haciendo explotar un
pequeño cañón de bambú cargado de carburo. De esta manera escandalosa de presentarse derivó su
nombre. Una vez que se abría la puerta de !a casa los músicos cañoneros animaban a los asistentes con
la interpretación de merengues, joropos, pasodobles y valses que se acompañaban con guitarra, cuatro,
rallo, y mandolina, flauta, violín c un clarinete como instrumento solista. La música cañonera pertenece a
una etapa feliz de la vida caraqueña.

El rallo
El rallo es un instrumento de frotación hecho de
metal que comunica un timbre bien particular al
acento rítmico del merengue y la guasa.

El sombrero de pajilla
El músico cañonero se distinguía por su parti­
cular elegancia, propia de la época, vistiendo
corbata de lacito, zapato de dos tonos y el
inseparable sombrero de pajilla.
137 Atlas de tradiciones venezolanas • Música

El redoblante
Seguramente tomado de las bandas de plaza, el
redoblante se incorpora a la música cañonera para
reafirmar la medida de los tiempos e imprimir vivaci­
dad al tempo.
138 • Atlas de tradiciones venezolanas • Música

Grandes agrupaciones
UN SOLOPU33D
se re n a ta «e l.
!¡u a y a n e sa

quinteto 5 mutie»
contrapunto p u l u l a r y f* lW * r ie a
i5«n*jet#na

Quinteto Contrapunto Un Solo Pueblo Serenata Guayanesa


Se trata de una agrupación vocal cuya Un Solo Pueblo es una agrupación vocal Este grupo vocal e instrumental ha divulga-
i
vida transcurrió entre 1963 y 1971, y que instrumental que ha tenido por finalidad do ampliamente, en todos los escenarios
se destacó como uno de los mejores proyectar la música tradicional venezolana, posibles y ante todo público, un gran
grupos de música tradicional venezolana. para de esa manera reafirmar y fortalecer número de géneros locales. Desde sus
El Quinteto Contrapunto estuvo integrado nuestra identidad cultural. Este grupo inicios en 1971, su trabajo se basó en la
en sus inicios por Morella Muñoz (mezzo- musical debe su existencia a la iniciativa búsqueda e investigación de la música ve­
soprano), Aída Navarro (contralto), Jesús de los hermanos Querales: Jesús, Ismael nezolana, así como también en la creación
Sevillano (tenor), Domingo Mendoza y Florentino, quienes en 1972 se organizan de nuevas piezas musicales inspiradas en
(bajo) y Rafael Suárez (barítono), director para interpretar música latinoamericana, lo popular.
de la agrupación y arreglista. Recorrieron experiencia cuyo éxito conduciría en 1980 En las interpretaciones de Serenata
los principales escenarios de Venezuela y a la creación formal de Un Solo Pueblo. Guayanesa, siempre se observa un gran
realizaron giras por Europa y por muchos A fin de interpretar la música venezolana criterio estético y un profundo respeto
países latinoamericanos. Sus actuaciones de la manera más fidedigna los hermanos hacia las formas tradicionales de nuestra
sirvieron para reafirmar un nuevo estilo de Querales, junto a los demás integrantes música. Algunos de los géneros que for­
hacer música tradicional con arreglos de realizaron, desde sus comienzos, viajes de man el repertorio del grupo son el joropo,
la mejor factura académica, plasmados en investigación por todo el país, hecho que el merengue, la fulía, aguinaldos, calipsos,
cinco discos de antología, que generaron además les permitió atraer como miem­ valses, bambucos y canciones infantiles.
una revolución sin precedentes dentro y bros a destacados cultores, tal es el caso Esta agrupación musical, conformada por
fuera del país. En este sentido, Helmut de Francisco Pacheco, natural de Cata y César Pérez Rossi, Mauricio Castro,
Thierfelder, de la Orquesta Sinfónica de cantante solista de la agrupación. La ca­ Miguel Ángel Bosh e Iván Pérez Rossi,
Hannover, expresó: «la altura artística de lidad interpretativa de Un Solo Pueblo los ha recibido innumerables reconocimientos
este conjunto (...) es extraordinaria, quiero acerca al éxito con gran rapidez y fueron y ha obtenido diversos premios artísticos.
decir, única en el mundo». las parrandas La matica (1979) y El cocuy Su discografía consta de más de veinte
La desintegración del grupo se debió a la que alumbra (1980), más la pieza María títulos, han realizado importantes giras
muerte del director en los años setenta. Paleta, las grabaciones de mayor venta internacionales y sus presentaciones han
Sin embargo, algunos de sus integrantes -200.000 copias- por lo que se ganaron el llegado a todos los rincones del país. Han
prolongaron su trabajo participando en la Disco de Platino del año 1982. dedicado especial esfuerzo a la composi­
agrupación Quinteto Cantaclaro. Un Solo Pueblo ha cosechado innumera­ ción e interpretación de música para niños.
En 1995 reaparece la antigua agrupación bles triunfos, tanto en reconocimientos, Según afirma Iván Pérez Rossi «Estamos
con los mismos objetivos de interpretar como en éxito de taquilla y venta de en la obligación de crear un repertorio mu­
cactos tradicionales, bajo el nombre de discos; por eso esta agrupación sigue sical verdaderamente nacional, que sirva
B '.je * o G.> -íerc? Can,'aburare aihoca haciendo historia en la defensa de la al niño de escudo protector para repeter la
irtto ia d Q por Eftaám -Vtaaga Jesús Se- tradición musical y sus conciertos no dejan avalancha de modelos extraños».
■i'iiillianc -_ a r V a r r e z Víanme --ursrjei¡£ i s despertar un vivo interés, en e público
jiuiámcteE Dtiiiiia ^odircpiiiESE, '«iBEollamo.
Grandes intérpretes

Simón Díaz Los Antaños del Stádium María Rodríguez


Esíe eran compositor e intérprete de Con el nombre Los Antaños del Stádium Nace en Cumaná el 22 de julio de 1924.
mmatioa venezolana nació en Barbacoas, se conoce a un grupo de música popu­ De su contacto directo con las manifes­

.estado Aragua, el 8 de agosto de 1928. lar cañonera cuyo inicio hacia los años taciones tradicionales del oriente del país,
Después de haber vivido en medio de cincuenta ocurre en el estadio de San surge su inquietud por el baile y el canto

msturnbres llaneras, en 1949 viaja a Ca­ Agustín, en Caracas. En ese viejo estadio popular. Desde pequeña participó en

racas, donde recibe lecciones de piano y este grupo estableció la costumbre de comparsas, fiestas populares, velorios,

se iscribe en la escuela de música José animar los partidos de la época de oro teatro de calle y presentación de títeres.

ftnge Lamas. Se introduce en la radio del béisbol venezolano, de manera que Dirigió el grupo de danzas folclóricas de la

za'aqueña como animador de distintos al culminar el juego, el triunfo era cele­ Universidad de Oriente. Como cantante y
ro g ra m a s, donde se da a conocer como brado al ritmo de pasodobles, golpes y cultora de la música popular de la región

cantante de música llanera. La fama y la merengues. En otros lugares, también oriental su repertorio incluye fulía, agui­

receptividad adquirida lo trasladan a otros amenizaban las grandes fiestas de la naldo, gaita, golpe, joropo con estribillo,

~ iedbs de arte y comunicación como el sociedad caraqueña. Tuvieron el privilegio golpe de arpa, galerones, diversiones,

'8c~.ro, el cine y la televisión, siendo este de compartir escenario con la Sonora zumba que zumba, jota, malagueña, me­

ultimo el que le ha proporcionado mayor Matancera en la oportunidad en que esta rengue oriental. Por mucho tiempo estuvo

proyección. Simón Díaz se ha destaca­ famosa orquesta celebraba sus cincuenta acompañada por el Chiguao -dirigido

do como juglar en la improvisación de años de vida musical. Algunos de sus éxi­ por Atanasio Rodríguez- presentándose

coplas, en la interpretación de cantos tos son Cocoíta, San José, Negra mala, en importantes escenarios de Venezuela,

:e faena, en la creación y el canto de Tuerca y tornillo, entre otros. Estados Unidos, Portugal, Inglaterra y las

baleros, aguinaldos, merengues, pa­ islas del Caribe.

sajes, joropos, valses, pero sobre todo


en la composición y reactivación de las
tonadas.

Gualberto Ibarreto
Es:e intérprete de nuestra música p o ­ Universidad de Los A ndes- a difundir los
b la r e s uno de los más afamados del géneros musicales de la región oriental:
oriente del país. Nace en El Pilar, estado la jota, la malagueña, el polo, el galerón y
Sucre, el 12 de julio de 1947. Aprendió la gaita, entre otros. Interpreta obras de
e canto de manera autodidacta, al igual grandes compositores como Luis Mariano
3iue la ejecución del cuatro, la mandolina Rivera, Simón Díaz y Augusto Ramos. Sus
* ía guitarra. Se ha dedicado por más de producciones discográficas son conocidos
treinta años -desde que empezaran sus en todo el país y en otros del continente
pmmeras presentaciones en las salas de la americano.
Un /ersidad Central de Venezuela y de la
• Atlas de tradiciones venezolanas • Música

Música de navidad
Una de las tantas costumbres que he­ mentos empleados, sus particularidades tradición local de algunas regiones o en
redamos de la cultura española es la de musicales, formas de baile y por los las voces de los orfeones y grupos co­
asociar cada ciclo del calendario festivo temas que les inspiran. De todas ellas es rales, la gaita de furro y en menor grado
con una música específica. Así durante el la gaita de furro, propia de Maracaibo, la los cantos de parranda se han apropiado
ciclo de Navidad los españoles han tenido que más se ha popularizado, llegando in­ del mercado disquero y de los medios
por tradición entonar rondas de Noche­ cluso a desplazar al aguinaldo en amplias masivos de comunicación social.
buena, aguinaldos y villancicos, además zonas del país. No hay duda de que es
de romances y canciones narrativas. esta gaita la que ha demostrado mayor
De todas esas formas musicales que capacidad de transformación y dinamis­
llegaron a América con la colonización, mo, en ese viejo conflicto entre tradición
los venezolanos tomamos los villancicos y modernidad, logrando -p o r e so - inte­
y aguinaldos y los hicimos nuestros al grarse a la vida de las grandes urbes
enriquecer su repertorio con nuevos te ­ en los días navideños. De allí que
mas e imprimirles una nueva musicalidad al comparar la evolución de los « Tamborero Caita de tambora
Gibraitar, Edo. Zulla
producto de nuestra cultura mestiza. distintos cantos navideños
Junto a esas dos expresiones musica­ vemos que mientras los
les dirigidas especialmente a alabar el villancicos y aguinaldos
nacimiento del Niño Dios, en nuestro se han quedado en la
medio surgieron otras formas musicales.
Además de aquel aguinaldo cuyos m oti­
vos cantan a lo divino, nuestra tradición
creó también aguinaldos a lo humano,
con el fin de elogiar al espíritu festivo, la
alegría navideña. Luego los villancicos y
aguinaldos se hicieron expresión musical
de grupos espontáneos de aguinalderos
y de parrandas que cantan de casa en
casa, y se convirtieron en soporte musical
de algunas fiestas tradicionales alusivas al
Niño Dios. Por eso hoy forman parte de
las Paraduras andinas, y los cantos de
los Pastores o Velorio del Niño Jesús
en Aragua y Carabobo.
Además de los aguinaldos a
fo foumam o de parranda,
¡la; IradieiM p e p ita «arob un
conjunto ale lom es "nuscaues
asogiaÉma 5. lis f’tiii/jíidtaEli dc*-
.■
oe qpife. ¡Enpr n a s o * * aas»
gafe oiiiieriai, •& ;piilte 1 3sir E
fifi-50 Í ¡2 Jliüir i M¡iilillll!¡i¡
C O n p iB B t ílE E J llif e & ¡ a llí» .i- iu im m .

gatease carteara, pite - ¡¡piiíioi


:ie i j r z ' j u z ae o lis iiin g u e r" ;::e ras im éiiiiii!
.a gaita
Ente areutre y febrero

aSBID» ¡ ' É B S É Z C

isirminc g a ta se emplea para designar Con el peso, con el peso Sin embargo, en el Zulia se reconocen
la rra s , formas musicales que se cultivan de la bella Cermlra, varios tipos de gaita diferenciadas entre
idüBinrniinadas regiones del país y que la tabla cimbró sí por los instrumentos utilizados, cier­
Jtarancsan p o -s u estructura, instru- tas características musicales y tipos de
pamtos; ■, nrocvo de ejecución. Estas Para 1880 la temporada gaitera comen­ bailes, determinadas fechas de ejecución,
bu: zaba en Maracaibo el 13 de diciembre el tema al que aluden y la región en la que
ante el altar de Santa Lucía, día de la san­ se cultivan: gaita a Santa Lucía, gaita de
Saris a San Benito ta y de la bajada de los furros. Continua­ tambora, gaita perijanera y gaita de turro.
Es urna forma musical que acompaña ban las gaitas hasta el 2 de febrero, día
eui ta ile que se rea za en honor a San de La Candelaria y durante mucho tiempo
feeniio de Palermo en el estado Trujillo. Se estas fiestas marcaron el inicio y el fin de
acam para con tambores tipo chimbán- la temporada gaitera, lo que refleja que
aiiiré oerc ejecutados sin la polirritmia de en sus comienzos estaba marcada por el
¡os zutenos. espíritu religioso.
Actualmente la gaita zuliana, de índo­
3r :,2 oriental le festiva, se ha convertido en el ritmo
ISEis u * cano que se entona en la región pascual de los venezolanos, ha invadido y
oriental ce país. Puede referirse a temas contagiado al país entero, dejando de ser
I .axaafes. históricos, humorísticos o patrimonio exclusivo del Zulia y adquirien­
amorosos.. Musicalmente se desarrolla en do carácter nacional.
in flo menor con una estructura armónica
! íiijiíSu. guardando relación con las décimas
culianas Se acompaña con cuatro, guita-
| ira y mandolina. « Tambores utilizados en la gaita de tambora
Giórallar. Edo. Zulia

2r t a zuliana
rs te mar testación festiva del pueblo
amilliÉic nace de la fusión de los cantos
Éta nuescros indígenas, la música espa-
í MÉtay los tambores rituales africanos.
Ei ixmjvo ia interpreta para divertirse en
¡as oa..andas y en sus hogares y como
mesíc de expresión de sus más variados
aartimiientos, entre los que se destaca
□ m e ca m ente, la devoción a la virgen de
¡ia O hounquirá y el descontento produci-
ia oo: las acciones de los gobernantes.
ILa más antigua gaita zuliana -cita d a por
Manuel Matos Romero- es una gaita de
Qfcmraftar denominada La costera, cuya
HLSíoa y letra data de 1805:
• Atlas de tradiciones venezolanas • Música

De tambora A Santa Lucía


O c a s ió n » Diciembre y enero O c a s ió n » Diciembre. Fiesta a Santa Lucía

O r ig e n » Afrovenezolano O r ig e n » Afrovenezolano

D is p e r s ió n G e o g r á f ic a » Estados Zulia y Mérida D is p e r s ió n G e o g r á fic a » Estado Zulia

GAITA DE TAMBORA Ampoa. ampoa buyé Características


ya yo no la quiero a usted El núcleo central de la fiesta lo constituye
Ubicación ampoa. ampoa buya el altar, frente a él se sitúan los músi­
Su dispers ón comprende ios pueblos de ya yo no la quiero más cos y cantores para ejecutar esta gaita
2 costa s^r de: lago de Maracaibo: Santa que nunca se baila. El altar puede estar
sabe EJ Batey,, San Dedro. San José. Baile hecho con tejidos de mangle, papeles de
Santa Varía. Bobures y Gibraftar y en Para bailar la gaita de tambora hombres colores, luces, flores y otros obsequios
algunos poblados mer: deños como el de y mujeres forman un círculo en el que de los devotos. La imagen de la santa es
Pairrarto. van tomados de la mano, moviendo paseada por las calles en procesión con
los brazos hacia arriba y hacia abajo. velas encendidas.
Motivo Los cantores y músicos se ubican en el Esta forma de gaita tiene una estructu­
La razón de esta gaita es la diversión, centro de la rueda danzante. Cuando ra musical preestablecida sobre la cual
cualquier motivo de fiesta como bautizos, son muchos bailadores se forman varias intervienen los cantadores. A diferencia de
cumpleaños, matrimonios, el día de los ruedas concéntricas. A ratos, se sueltan las gaitas de furro o de tambora, la gaita a
inocentes u otras fechas que coincidan las manos y siguen bailando sin que se Santa Lucía tiene un estribillo único:
con santos del catolicismo son propicias rompa el círculo. Al llegar la medianoche
para su ejecución. la fiesta adquiere carácter religioso por­ Canten muchachos
que puede ocurrir que las fuerzas del mal con alegría
Instrumentos quieran apoderarse del grupo, entonces que esta es la gaita
Esta gaita es acompañada de tambora, debe cantarse a lo divino. de Santa Lucía
tamborito, maracas y clarinete, que según Gloria le damos a Santa Lucía
algunos autores, sirve para reemplazar GAITA A SANTA LUCÍA
a una flauta hecha de un tallo parecido Los solistas cantan estro­
al orumo del chimbángueles, que los Ubicación fas en las que participa
africanos llamaban buto. La tambora, Esta gaita pertenece a los pueblos del también el coro. Las
de gran tamaño, es el tam bor grave del norte de la ciudad de Maracaibo: Santa estrofas son cuartetas
conjunto y el tamborito, más pequeño y Rosa de Agua, El Moján, San Carlos, de ocho sílabas y se
más agudo, realiza repiques sobre la base Zapara, Sinamaica y otros. improvisan en alusión a
de la tambora. la santa y al entorno festivo
Motivo Después de cada dos ver­
Características El motivo de este canto popular es religio­ sos del solista, el coro los
Se : : t is gaita de tambora, tradición so, el de pagar promesas a Santa Lucía, repite invirtiéndoles
a io » ie z D ¡a ra . nació con los cantos quien es el centro de la fiesta y a la que el orden.
::e * "aban: t b t e r uro 55,cíe: ai.~iente de van dirigidos el estribillo y casi todas las

as neiodlHs :ie clonaras ■ lavanderas, estrofas que cantan los solistas.

empeecce. pura smmm ¡a faena.


La g a to dte la rts o ra -se zattia 201 esa®- Instrumentos
billllos T U * SBUSflllllOS 3LIE fe JB T '31 'ICIHUlPlfE _a gaita a Santa _ u d a es e e co ta d a con

a lía peas. p n a r a lr o r iB z jo r m m c.L¡S'.ro\ tambera, c/iawsiscs.. Taracs. v

sexiolas faroiadlais por jwsrsos É0IOL


iairaiudi:
anacos
ideña

¡Ewsopec
SaaáHGt» tsíados Mérida, Táchira. Trujillo, Lara, Yaracuy, Falcón y Barinas

jeiacxc . e~r ce •. a-'o. Los instrumentos que acompañan al


:Lie 3.1-de a d pueblerino o villancico son generalmente el cuatro,
Jfleanicr, as» com o al poblador de ese la tambora y algún otro para frotar o
■BdliOi. Esta denominación se utiliza tanto puntear. En el estado Táchira los instru­
h Veniez:ji9¡á com o en España, para mentos utilizados son el tiple, el bandolín
e a «na pieza musical ligada a los y la charrasca principalmente, pero en
^ ^ ^ ^ ^ ■ e ñ o s y autos sacramentales. algunos casos se incorporan la guitarra y
ndiccs ¡egan a América a partir las maracas. Las melodías son de sencillo
N atividad Piero della Francesca
[bi sigilo »'» a través de libros impresos, ritmo -b in a rio - y de acompañamiento Hacia 1470-1475

■Nos reiaestros de capilla y de gente uniforme, de simple estructura, carecen


pueitolt Se forman así dos tenencias: de estribillo y se conforman por una sola Se hace un lindo día
•cárter* ca .. ia popular. La primera parte que se repite todas las veces que como aquella noche
unce lías coirn posiciones españolas y las sea necesario. cuando los tres reyes
□onen en los grandes centros Los textos tienen forma de romance, o abrieron sus cofres
p a n a le s . La segunda se desarrolla a cuartetas hexasílabas u octosílabas, algu­ (Villancico tradicional)
:ie ds misioneros, de indígenas nas veces son fragmentos de romancillos
sos > gente del pueblo español antiguos.
en este continente,
e N'iilllai" t e t s en nuestros campos pue- « Villancicos a l Hiño en cantos de Paradina
Edo. Mérida
»■ presentarse con distintos nombres:
ir anee, decima, plegaria del Niño, ala­
b e a 3 hasta aguinaldo. Los cantos más
Ligues De este grupo pueden entonarse
ír.iDier fuera de la Navidad, con textos a
o a lo humano.
¡iia in a cc. aunque le ha servido de base
Lgpiimialdc. se encuentra localizado en
• a H o r r geográfico más reducido: los
faradios Vénda, Táchira, Trujillo, Lara,
bacu'jí =aicón y Barinas.
m i ¡a,tc eos como todo canto navideño
■nÉonan en las casas de familia, tanto
Silitas campos como en las ciudades,
Lrre e Niño o los pesebres que son
p o ra d o s por el cumplimiento de una
■mesa : por simple tradición en los
pares- cristianos. La interpretación de
r lllíarsocos también está asociada a las
L ss rife aguinaldos y a fiestas tradicio-
Ites nlle a Navidad, como la Paradura
H . ’
1 M ire l ¡las procesiones de posadas y el
T ic - Búsqueda del Niño.
146 • Atlas de tradiciones venezolanas • Música

AMIHALDOi BE VENEZUELA

Aguinaldos
O c a s ió n » Época navideña

O r ig e n » Europeo - Aguinaldos de Venezuela, Conjunto Jesús, María y José


Disco de larga duración
D is p e r s ió n G e o g r á f ic a » En todo el país

El aguinaldo es la especie musical navideña síncopas, gran libertad métrica y alternan­ Los textos de los aguinaldos se confor­
de mayor dispersión nacional. En muchas cia de las estrofas con el estribillo. man en versos generalmente hexasílabos.
comunidades del interior del país es cos­ Pueden formar parte del conjunto instru­ Pueden ser versos conocidos, tradiciona­
tumbre que los músicos recorran las calles mental de la parranda navideña: el violín, les o compuestos especialmente, o. bien,
cantando aguinaldos frente a las ventanas o el clarinete, el bandolín, y hasta el acor­ improvisados en el momento, de acuerdo
los pesebres. deón como instrumentos cantantes, que con las circunstancias.
El conjunto de músicos recibe el nombre de se encargan de los preludios e interludios
parranda navideña; los parranderos cantan y de duplicar la melodía del canto si lo de­ Nacieron las rosas
a acontecimientos locales, al sentimiento sean. Sin embargo, el aspecto más rico lo y las azucenas;
de alegría colectiva que genera la fiesta conforma el acompañamiento que puede nació el Niño Dios
navideña y a las promesas hechas para el Incluir la charrasca, el chineco, el triángu­ ¡qué cosa tan buena!
año venidero. En su recorrido van recibien­ lo, tambores de uno y dos parches, pan­
do obsequios o dinero. deros, furruco, el cuatro, el cinco, algunas Nació en un pajal
El aguinaldo venezolano se clasifica, veces la guitarra y el tiple. En cada región siendo soberano
según su contenido, en aguinaldo de pa­ se cultiva con el uso de determinados para dar ejemplo
rranda y aguinaldo religioso. El aguinaldo instrumentos, es así como en el aguinaldo al género humano
de parranda aunque se canta en el con­ oriental está presente con frecuencia el (Aguinaldo tradicional)
texto de la Navidad no se refiere estric- bandolín y el tambor de bastidor, en Lara
| tamente a temas divinos sino humanos, el aguinaldo se ejecuta con el cinco y el
mientras que el religioso alude a temas medio cinco y en los estados Barinas y
cristianos de esta fecha. Los aguinaldos Apure se agrega la bandola.
también reciben otros nombres como
« Aguinaldos Venezolanos d el siglo xix
el de cantos de Nochebuena, versos al Disco de larga duración bajo la dirección del maestro Vicente Emilio Sojo

Niño, villancicos, plegarias y alabanzas,


según sus textos. En la celebración de
los Pastores de San Joaquín, especie de
auto sacramental, se entonan aguinaldos.
La ejecución de aguinaldos de tipo reli­
gioso es común en la Paradura del Niño
celebrada en los estados Táchira y Trujillo.
Y por último, cabe mencionar una clase
ce aguinaldo polifónico, realizado por
compositores académicos como Vicente
EnflfoScjD, Quien realizó arreglos corales
de aguiindHcs, parrandas y villancicos.
lliis.aiÉiíiBftlns^ en iBiuctoos casos, man­
ie re n n e icd iia scr las quie se «©conocer
los anegues vilianciicos.. paite et tactor rt-
—mee . a1uso sálte iiunierasos instrumentras
U riD cantantes coime scom painntes, los
jiliíenanciiia ce aauelllos.. Eh por •ate uue se
puede ttiraüter efe un ¡pita® ® e»talÉro ¡ar
•al aipiintíliiÉs) quue ¡iincliLw/e le j j w r a f c *
Aguinaldos de parranda
Durante todo el año

venezolano
ón de parrandas de La Verde Clarita
j E P e f is o 'i G e o g r a h c a » estados Aragua, Carabobo y Cojedes Edo. Carabobo

S' r :: i o Dce como aguinaldo de parranda ro, chineco, maracas y tres. Como parte meses de mayo y junio, con la intención
: parranda propiamente a una forma de la tradición, los integrantes de estos de actuar con fines de beneficio econó­
riuEiica certeneciente a la zona costera conjuntos llevan bandera y una estrella, mico, realizar producciones discográficas
de os estados Aragua y Carabobo. En también usan sombreros y unos paño­ y proyectarse a través de emisoras de
esta z ;r a la tradición ha establecido una lones sobre los hombros con los colores radio. La intención de cambio de estos
cllara diferencia entre el aguinaldo y la que identifican al grupo. Los conjuntos conjuntos los ha llevado al uso de otros
parranda como expresiones musicales. que se destacan por su trayectoria en instrumentos como el teclado y la batería
_a parranda de la costa es de mayor pre­ esta región son: La Verde Clarita, La Flor y a ampliar sus temas a personajes o a
sencia afrovenezolana y según trabajos de Cojedes, las parrandas Unión Santa amigos y a la protesta social. A pesar de
die n *esíigación realizados, las parrandas Elena y Los Turpiales de Aragua. las transformaciones de estos conjuntos
pueden prescindir del furruco y añadir En los últimos tiempos se ha dado un conservan el uso de la improvisación en
nitros instrumentos ajenos a las tradicio­ proceso de dinamización de la parran­ el canto de las estrofas y los tres instru­
nes navideñas, además de tocarse duran­ da central que está conduciendo a la mentos acompañantes: cuatro, tambora
te io d o el año. Por otra parte, la parranda multiplicación de estos conjuntos y a una y furruco.
taita acerca de personajes y situaciones diferenciación entre aquellos que se man­
: : : : : anas aun cuando también pueden tienen dentro de la tradicionalidad y otros
¡referirse al Niño Jesús, o a la Navidad. más estables y organizados impulsados
Lira de las agrupaciones venezolanas hacia la modernización. Estos últimos
Parranda La Flor de San Joaquín
que se ha encargado de dar a conocer la comienzan sus actividades desde los San Joaquín, Edo. Carabobo

parranda a lo largo de toda la geografía


nacional es Un Solo Pueblo, que des­
de 1970 ha sido uno de los principales
protagonistas de la difusión -sin prece­
d e rle s - de la música tradicional. Con la
parranda El cocuy que alumbra, recopi­
lada en Cuyagua, los hermanos Querales
-Jesús, Florentino e Ismael-, fundado­
res de la agrupación, comenzaron un
proceso indetenible de popularización y
masrficación de esta expresión musical.
O ra denominación asociada con pa­
rranda y que vale la pena aclarar es la de
pepanda central. Nombre que reciben los
conjuntos pertenecientes a los estados
-ragua, Cojedes y Carabobo y que se
organizan en tiempos navideños para
entonar aguinaldos. Estos interpretan
aguinaldos y cantos de parranda en los
que. generalmente, intervienen varios so­
listas en alternancia con un coro, impro-
vsando temas a lo divino o a lo humano.
Los instrumentos acompañantes son
eoaíro, guitarra, tambora, furruco, chape-
• Atlas de tradiciones venezolanas • Música

Parranda navideña
La parranda navideña Cuatro, charrasca y maracas
Estos instrumentos son los más solidarios compañeros
No hay duda que los conjuntos de pa­
de la alegría del venezolano. El cuatro, instrumento de
rranda navideña han sido una de las ex­
cuerdas que con su rasgueo afirma el ritmo básico de a
presiones de alegría, entusiasmo y canto parranda y proporciona el apoyo armónico; la charras¿i
solidario que mejor hablan del optimismo que hace sentir la sucesión del tiempo binario y terna'
y la energía vital del venezolano. Por tra­ mientras las maracas se agitan como si bailaran para
dición al inicio de la Navidad cada caserío llenar de vivacidad y colorido

o barriada organiza su conjunto para ir el estilo merengueado


propio de la parranda.
de casa en casa cantando sus versos al
jefe def hogar a las damas presentes y
por supuesto al Niño Jesús que descansa
en el pesebre. Los dueños de casa, en
agradecimiento, les obsequian bebidas,
comidas y dinero a los parranderos que
nuevamente responden con otros cantos
y coplas de despedida. A pesar del cre­
cimiento desordenado de las ciudades,
que ha traído violencia e inseguridad y de
la adquisición de nuevas formas de vida,
todavía es posible escuchar las parrandas
de aguinalderos en las grandes urbes. En
algunos pueblos de los estados Ara­
gua, Carabobo y Cojedes se conservan
conjuntos de parranda en plena vitalidad
que ya son un símbolo emblemático de
identidad local. Esas parrandas conoci­
das como conjuntos de parranda central
están conformadas por un abanderado,
cuyos colores y símbolos identifican
al conjunto; también una estrella y los
instrumentos: violín o mandolina, cuatro,
furruco, maracas, charrasca y chineco.

mr ¡limm mlliKmiiJiwiuu
Chineco
El chineco es un sonajero de bastón vistosa­
mente adornado que al ser sacudido o golpeado
contra el piso desprende múltiples sonidos
ce campanillas o pequeñas chapas que se
entrechocan. En su origen se entrecruzan la
posible ascendencia asiática del nombre, quizá
proveniente de chinesco o cimbalero y su deri­
vación del bastón sonaja propio de los antiguos
jrruco indígenas.
Hmsmdiente de la zambomba española, el
urmc: -furro entre los zulianos- es el tambor Violín
?todos asociamos con la parranda navideña, Este instrumento solista, ampliamente conoc ido
manera particular de ejecución, mediante la por todos, entona el interludio, hace dúo cor, ¿s
itdón de una verada cuya vibración es trans­ voces y canta el estribillo siguiendo ia mebdét
tea a la membrana del tambor, impregna del aguinaldo. El violín y la mandolina teca? os
l música de parranda de un largo y rítmico instrumentos principales en los c&npn nite ée
KPitío que llama a la participación colectiva. parranda.
150 • Atlas de tradiciones venezolanas • Música

La gaita contemporánea
O c a s ió n » Época navideña

O r ig e n » Modernización de la gaita Iradicional


« Disco compacto (1998) con gaitas ganadoras de los
premios M ara y Virgilio Carrullo (1984-1996')
D is p e r s ió n G e o g r á f ic a » En todo el país

L a gaita de furro ha alcanzado durante saxos, timbales, teclados, entre otros. del Éxito, Gran Coquivacoa, M a n sa
las últimas tres décadas un desarrollo co ­ Además del empleo de estos instrumen­ 15, Gaiteros de Pillopo, fíincón tOMm
mercial asombroso. Aunque es expresión tos y la organización de los conjuntos les, Saladillo, y muchos otros rile iiguj
genuina del pueblo zuliano, es interpreta­ con grupos de un solo sexo, la gaita éxito y nombre. Estos grupos han tu
da, escuchada y bailada en las grandes comercial se distingue por la fusión de grandes producciones discagtráica
ciudades y pueblos de toda la geografía otros ritmos como bossa nova, cumbia, basando su trabajo en la combinad
nacional durante la época decembrina, salsa, y hasta el propio chimbángueles, lo tradicional y lo innovad. o. Es asi i
convirtiéndose en el ritmo pascual por realizada por agrupaciones como Guaco, en algunos casos se consena ís irnn
excelencia. con más de cuarenta años en escena y la cadencia y el golpe de tambor sil
La gaita actual es muy distinta a la gaita cuya fama se ha extendido incluso a otros gaita zuliana, pero con a • - :
de antaño, ya que no ha estado exen­ países, a través de temas inmortales e instrumentos modernos, o tamlMÍ
ta de la evolución y los cambios que como Un cigarrito y un café y Me gustan se interpretan temas de antaño oaj
el pueblo mismo ha experimentado. las caraqueñas. fuesen actuales, tal es el casa de
Originalmente se tocaba acompañada Hay un gran número de agrupaciones teros de Pillopo quienes se har i a
sólo de furro, maracas, charrasca, cuatro que proyectaron la gaita en lugares a interpretar las gaitas de V trgiiic ffi
y tambora. En la actualidad las agrupacio­ tales como tarimas, centros nocturnos, yo, uno de los grandes e <: orner •
nes que se han encargado de incorporar restaurantes y muchos otros que ofrece la tradicional música zuliana,. falllleoid
esta música a los grandes mercados ciudad para expresiones musicales. Entre más de noventa años.
de consumo, utilizan organetas, bajos, ellas se destacan: Guaco, Cardenales Todas estas agrupaciones partiap|
gran interés en los festir a:es de gi¡:
conciertos, ferias de La C - nriítei, fe¡
del Zulia, siendo los espectáaiitos
cuentan con mayor númeirc de piJ
los realizados durante e mes de di
bre en el Poliedro de Caracas. E s i
espectáculos que muchas veces u
el nombre de gaitazos. reúnen "¡a
amanecer, a distintas cellecridadeq
música zuliana, acom paracas de
íiAf'j’AAMANONA alternadas con miniteca.

“ Disco compacto (1998) con distritos


grupos musicales interpretando viejas gaixss

A m a i r e. : ....11....

OF L I V IT O « P tD R O
d j . tX iT o C o l in a

& y *VM LLQ


)os grandes intérpretes
Galíndez Ricardo Aguirre

Otilio Galíndez en su única grabación como intérprete « Ricardo Aguirre «,Lo mejor del Monumental»
de los temas de su autoría

feo® en Y arlagua el 13 de diciem bre de 1935. Desde Este artista nació en la parroquia de Santa Lucía de Mara­
Lprana ecad demostró inclinación y facultades especiales caibo, en pleno corazón de El Empedrao. Es mejor conocido
r:a la irnos ca, apoyado ampliam ente en la sensibilidad y como el «Monumental», por ser considerado uno de los
Ntysiiasmo de su madre por el canto y la poesía. En 1957 com positores de gaita más grandes de todos los tiem pos en
pesa 2: O 'e ó n Universitario de la Universidad Central de el estado Zulia. En vida fue tam bién un gran cantante popular,
¡peiiüiefe ca o la dirección de destacados profesores como cuatrista y docente.
«orne- Es:evez. Inocente Carreño y Modesta Bor, quienes le Impulsó la gaita de denuncia, utilizándola como medio de crítica
p is a n s crear para esta agrupación coral. De esta manera social, lo que produjo que se extendiera exitosamente por todo
c a r sus primeras com posiciones que van a ser interpretá­ el país. Se inmortalizó cantando a La Chiquinquirá su grey zulia-
is :o - os niegrantes del orfeón, obras que posteriormente na, uno de los más conocidos ejemplos de gaita de protesta:
aparar p o r un gran número de coros, individualidades y
"as agrupaciones. La grey zuliana
irne tas obras de Otilio Galíndez predominan los temas alusivos cual rosario popular
a Mavídad. dedicando la mitad de su producción a la com po­ de rodillas va a implorar
ner de aguinaldos a lo divino y parrandas. Su primera com po­ a su patrona,
ner. _a Restinga, es un aguinaldo de parranda: y una montaña
de oraciones quiere dar
mllms mjjfa esta gaita magistral
ffi imbepescado nada que El Saladillo le entona
ir 'lismar embravecida
r b mar sue está picada Formó parte del conjunto de gaita Cardenales del Éxito y tiene
en su haber muchas composiciones, entre las que destacan:
apwfer embustero Soberbia gaitera, Flor de La Habana, La pica-pica, Galtoneando,
f safe? en Navidad Ronda antañona. Gloria de un parrandón y Remembranza, entre
p « s ps La Restinga otras.
:n a re una botella Ricardo Aguirre muere en un accidente de tránsito el 8 de no­
murna sirena chinga viembre de 1969. Como una manera de rendirle memoria, los
;r jrs sirena bella zulianos establecieron el 8 de noviembre com o día del gaitero.

Ib obra de Otilio Galíndez, además de aguinaldos y parrandas


ten presentes otras expresiones musicales como el vals, la
ranaca ía canción y el joropo. Actualmente no hay en Venezuela
iip r to s de parranda ni agrupación coral que no incluya en su
nercno creaciones de. este compositor, que además se mul­
lic a ' en las voces de artistas como Ulia Vera, Soledad Bravo,
adía Todd y Pablo Milanés, entre otros.
152 • Atlas de tradiciones venezolanas • Música

Instrumentos venezolanos
Cada pueblo deja huella de los cantos y Contra su voluntad y con su memoria
ritmos que por siglos le han identificado como único equipaje vino desde el África
a través de lo único material que tiene el negro esclavo. Con él vinieron los
la música: sus instrumentos. Estos dan tambores que rendían culto a deidades
pista del origen, desarrollo y significado africanas y que aquí repicaron en honor a
que ha tenido la música para aquellos a santos católicos bautizados por la negri­
quienes ha pertenecido. Por eso a través tud. Es así como resuenan los chimbán-
de nuestros instrumentos tradicionales los gueles en honor a San Benito, el tambor
venezolanos podemos rastrear toda una tamunanguero para animar a San Antonio
historia de símbolos, afectos y mestizajes. y el gran protector de los tambores: San
Primero fueron los indígenas, quienes Juan es celebrado en todo el país con
utilizando huesos, caracoles y el tronco cumacos, tambores redondo, mina y
hueco de algunas plantas, hicieron flautas curbata y toda una diversidad sonora
verticales, trompetas y flautas de carrizo que habla de la gran riqueza musical que
para invocar a sus dioses, buscando así trajo el esclavo. No hay duda de que el
atraer las fuerzas bondadosas del más tiempo y las circunstancias históricas se
allá para dar beneficio y protección a encargaron de hermanar a esos sonidos
las cosechas y las gentes. Por eso los surgidos de distintas raíces para confor­
instrumentos indígenas han sido ejecuta­ mar un mestizaje instrumental que hoy
dos por hombres especiales: chamanes, día es considerado como una muestra de
o maremare, encargados de hacer la nuestra identidad cultural.
música sagrada; y también
responsables de usar
la maraca con fines de
curación.
Con el europeo desembarcaron
en el Nuevo Mundo otros
instrumentos que
vinieron a con­
tarnos historias
musicales de la cultura
de Occidente. Llegó
toda una familia de
nstrumentos de
cuerda: os ante­
cesores del CLauo,
t u t e n b g iu ia rra , la mando-
ir',,a e nafa , muchos "'.ras que
¡as je m e s u-eagmi as asertaran
cars a írainstror'marideiitos •*
5: ¡su ser ¡¡Ir ssitsitiicc.
Instrumentos de viento
km» Eié rie:::,*5r se ':: d s \ oanzas ndígenas y dentro de. ciclo festivo navideño

h»» llndlípBnB

fiisaíim S a i® * » » Estado Monagas, Guárico, Falcón, Lara, Trujillo, estados orientales y centrales

s ír jn e r ío s que producen sonido producen, de manera que se conocen la celebración del Baile del Mono en el es­
scner a" "'ación el aire reciben el la tura grande macho y la hembra y la tado Monagas. Los cachos de las turas,
rucre ze serefonos. En nuestra cultura, tura pequeña macho y la hembra. Las utilizados en la celebración del mismo
navcir : ="e de estos instrumentos son llamadas hembras son cortas y abultadas nombre, son construidos con cráneos
:ena. Algunos ponen en y las macho alargadas y más estrechas. secos de venado y en el orificio inferior
lira c o r una comente de aire que provie- Estos instrumentos son empleados en la se les coloca cera natural para facilitar la
E efe ¡a marcz o la boca del ejecutante y fiesta de Las Turas, rito agrícola propio de emisión del sonido.
Le as zonienida dentro del instrumento, las poblaciones limítrofes de los estados La guarura o caracol se utiliza como
fetos pueden tener dispositivos para inte- Falcón y Lara. instrumento acompañante en algunas
lirapiiiir ;a corriente y así variar el sonido, Entre las trompetas naturales usadas fiestas celebradas durante el ciclo de la
ios»,, o e rc r nados aerófonos libres, por la población criolla destacan los Navidad: la danza de los Pastores de San
B e a r « t ir a r una corriente de aire en tor- cachos o cuernos y la guarura o caracol. Miguel de Boconó, en el estado Trujillo y
I mal instrumento, mediante la rotación Los cachos o cuernos son vaciados el Baile del Mono en Calcara de Maturín,
Cirui:iru£ enérgica de éste, como es el y generalmente las puntas cortadas en estado Monagas.
Esc efe palo zumbador. bisel y pulidas. Son ejecutados predomi­
ra r iz o s pertenecen al grupo de las nantemente por hombres y se emplean
feiusj de p a r que consisten en flautas en la interpretación de música del ciclo « Higinio Coronado ejecutando
los carrizos o ilautas de pan
pEsttiÉuiidas por más de dos tubos de navideño en los estados centrales y en Las Trincheras, Edo. Sucre

®tarerTe 'amaño. Estos tubos están


Lm siM bos de caña y atados entre sí de
¡tawor a Tenor. Los carrizos también son
p ia d o s caramillos. Según su sono-
jfeÉaril v por tradición indígena, a estos
nisruirentos se le suelen atribuir carac-
brístSiicas de género: los carrizos hembra
teswan fe melodía y los carrizos machos la
ijpiiiBi Estos instrumentos son de reco-
niaiciida tradición en la región oriental de
iijescr: país y en el estado Guárico. Su
apoucón está asociada a festividades del
::dc ::e ‘ Javidad y a algunas ocasiones
apégales. También son utilizados para
n m p a ñ a r danzas de origen indígena.
_a:= turas son flautas que se construyen
ton caña y pertenecen al grupo de las
oimgiudinales. Consisten en flautas de
mift 50"o canal con un número de agujeros
p e vara de dos a cuatro. En la parte
nRenc'. e: corte del extremo coincide con
jir nudo y en la parte reservada para
« pilar poseen un corte en forma de W.
as u ra s también poseen atributos de
¡puiaro según el tamaño y el sonido que
154 • Atlas de tradiciones venezolanas • Música

Instrumentos de cuerda
A quellos instrumentos musicales cuyo su caja de resonancia es más ancha que a la voz solista. Los registros graves,
sonido se produce al hacer vibrar una la del arpa llanera. Las cuerdas son de intermedios y agudos son reconocidos
o varias cuerdas reciben el nombre de metal, tripa y material sintético. Las cla­ por nuestro pueblo como: bordoneo,
cordófonos. En nuestra tradición musical vijas están dispuestas en una sola línea. cuerdas de sonido grave (bordones) que
encontramos instrumentos de este grupo El arpa llanera se utiliza principalmente se pulsan para acompañar; los tenoretes,
con cuerdas hechas de distintos mate­ en los estados Guárico, Barinas y Apure. lugar donde los arpistas demuestran sus
riales: seda, crin, tripa, fibras vegetales, La caja de resonancia es angosta y las habilidades para el contracanto rítmico
metal o materiales sintéticos. El número clavijas están colocadas en doble fila, las y sonoro del joropo; y tipleteo, ejecución
de cuerdas varía según el instrumento y cuerdas son de tripa y material sintético. en la región aguda, donde se localizan
se pueden colocar en órdenes simples, Actualmente, por un deseo de competir los tiples. El repertorio de los arpistas
dobles o triples (una, dos o tres hileras), en el mercado disquero, el arpa central comprende toda la música que acom ­
pueden ser percutidas, rasgueadas, pun­ está acercándose a las características de paña al baile del joropo: golpes, pasajes
teadas y frotadas con la mano desnuda, construcción y a las dimensiones del arpa y revueltas. Como ejecutantes del arpa
con plectro, con arco o con otros objetos. llanera. El arpa criolla no tiene pedales. destacan: Ignacio Figueredo «El Indio»,
Generalmente constan de una caja En la región central se ejecuta en toda Eudes Álvarez, Luis Rojas, Cándido
de resonancia que amplifica el sonido ocasión, como instrumento solista con Herrera, Sergio Aranguren, Pedro Castro,
que produce la vibración de la cuerda. acompañamiento de maracas, o bien, Fulgencio Aquino, Ciro Pimentel, Máximo
La mayor parte de estos instrumentos sirve al canto del propio maraquero o de Bogado, Alfredo Sánchez y Salvador
penetraron en nuestro país a través del un cantor. El arpa llanera forma trío con Rodríguez, entre otros.
continente europeo. el cuatro y las maracas para acompañar

ARPA

O r ig e n » Europeo

O c a s ió n » El arpa venezolana se emplea

para interpretar la música y animar el baile

del joropo

D is p e r s ió n g e o g r á f ic a » Arpa central en los

estados Aragua, Miranda y Carabobo. Arpa llanera

en Guárico, Barinas, Apure, Cojedes y Portuguesa

El instrumento de cuerda que antecede a


nuestra arpa criolla es el arpa triangular,
iocdcc ca también como arpa céltica.
Esta, ai! c: _,a.¡ zue la nuestra, está confor­
mado. p o r lie s dementes: caja de reso­
nara®,,céibbIIIb f cdliuraina- En Venezuela Arpa central, oe caja « Arpa llanera de caja
ancha y cuerdas metáli­ angosta y cuerdas de
tü" :ii i' V"" cas de registro agudo nailon (antiguamente
de tripa)
dft c u e r a s epE: '•ara. smttfe to a ría . trenría
- gíiEfc. Se idlilfairaBiafflPi « r el sam are ate
ta sajp dte “Bsananae f 9i¡ :e
las ainadas. Sagiun lia nape
m nulto» (Efe arpe obiébII e ttapena •"
•teñera. El arpa caimttfalí se ariipie® -sr ce
* L' J1' J t f l ' Jzi‘ .lurí?
2e &oifedsraaffi!'
[De.ajuerasaóerectia:
Cuatro
Cuatro de cinco cuerdas
Cinco
Seis

El cuatro puede ejecutarse como solista y cuerda complementaria que se sujeta por
cu ra o
también como instrumento acompañante una clavija en la parte inferior del mango.
tanto para música ritual como diversional. Al no ser pisada produce una entona­
' i u * - : "eme de la antigua familia
Es considerado como instrumento emble­ ción fija y cumple el papel de resonador.
piir patenas v guiíarrillas españolas
mático del venezolano y se utiliza tanto en Actualmente está en desuso.
tosa»* r-f fro .e a en cualquier momento del los campos como en las grandes ciuda­ El cinco se caracteriza por ser un poco
sAn t e n como solista o junto al arpa y las des. En su desempeño como instrumento más grande que el cuatro, y recibe su

m a n c a s ¡para nterpretar joropos y muchos


solista el cuatro ha recibido el aporte de nombre debido al número de órdenes
grandes ejecutantes. En primer lugar, o afinaciones. La técnica de ejecución
¡rilrrss generas de la tradición musical
Fredy Reyna, quien llevó al cuatro a los es igual a la del cuatro. Se utiliza en los
éspokim •sEDofwncA» Todo el territorio nacional y estados andinos y en Lara, Carabobo y
escenarios internacionales más exigentes
¡ a r t e r e r ios ¡.'anos colombianos y además creó un método novedoso que Falcón.
ilumina los difíciles caminos de la ejecución El cinco y medio, de la misma manera
Bl asalto pertenece a la familia de las para conciertos. Es justo mencionar igual­ que el cuatro y medio, agrega al cinco
aunffigpas cutarras y guiíarrillas españo­ mente a Hernán Gamboa quien aportó una cuerda denominada tiple, la cual
las. 'Es de tamaño reducido y le debe su su técnica del rasgapunteo; y en nuestros aporta una resonancia permanente.
nombre a número de cuerdas que posee. días, Cheo Hurtado, gran ejecutante de El seis es ligeramente mayor que el cinco,
Se ^¡jecuta principalmente con rasgueo o éste, nuestro instrumento nacional. con seis cuerdas pero cinco órdenes. Es
cltatrasqueo, cuyo estilo varía según las El cuatro posee variantes basadas fun­ conocido en la región centro-occidental, es­
o^gnones . especies musicales que acom ­ damentalmente en el número de cuer­ pecialmente en los estados Lara y Falcón.
pañe. B cuatro posee tradicionalmente das y la afinación: el cuatro y medio, el Se emparenta con la jarana mexicana en su
awafcro : uerdas: una prima, una segunda cinco, el medio cinco, el cinco y medio, diseño y afinación.
líos lenceras, que hace algún tiempo el seis y el octavo. Existe tam bién un El octavo presenta ocho cuerdas dis­
se to e ían de tripa pero actualmente son tipo de cuatro de caja pequeña con puestas en cuatro órdenes dobles. Es
¡te nailon. Por lo general, los ejecutantes cinco cuerdas conocido com o cuatro prácticamente una guitarra renacerfisáa
'/sinan a colocación de las cuerdas para monterola que se emplea en el estado en desuso y que en los áltir- : ; :;e rp c s
Dibíene' deferentes temples, o sustituyen Lara para animar el tamunangue. ha recobrado vida e r ra n o s :e luEiier
jimias con otras. El cuatro y medio es un cuatro con una caroreño Antonio a ra
• Atlas de tradiciones venezolanas • Música

el nombre de bandurria. En nuestro país da son algunos de los más destacados


BANDOLA se distinguen de acuerdo a su interpre­ intérpretes de este instrumento.
tación, técnica y estilos de música, cinco La bandola oriental consta de ocho

O r ig e n » Procede del laúd, instrumento muy variantes de bandolas: llanera, central, cuerdas de nailon y una caja de reso­
oriental, guayanesa y andina. nancia más grande y profunda que la
popular en la Europa del Renacimiento
La bandola llanera es de cuatro cuerdas de la llanera. Se ejecuta con plectro. Se
O c a s ió n » Se usa para la interpretación
(de nailon), que van en órdenes simples. utiliza en los estados Anzoátegui, Sucre
de joropos, y música local en cualquier mo­ y Nueva Esparta donde también recibe
Se ejecuta con un plectro que puede ser
mento del año fabricado con cacho de ganado o mate­ el nombre de bandolín. Cruz Quinal y

D is p e r s ió n g e o g r á f ic a » En sus cinco variantes es: rial sintético. Daniel Mayz -y a fallecidos- fueron gran­
Algunos de los grandes y recios intér­ des virtuosos en la interpretación de este
llanera, central, oriental, guayanesa
pretes de este instrumento son Anselmo instrumento.
y andina
López, Arévalo Tapia «Don Julián», Octa­ La bandola guayanesa de ocho cuerdas
vio Calderón, Héctor Hernández, Pedro con sonido metálico combina la técnica
La bandola es un instrumento con caja de
Castro, Jhonny Colmenares, Ismael de la bandola oriental y la llanera. José
resonancia en forma de pera. Procede del
Querales y Saúl Vera. «Cheo» Hurtado es uno de los más afa­
laúd, uno de los instrumentos más popu­
La bandola central posee ocho cuerdas mados intérpretes.
lares en la Europa del Renacimiento. En
pero cuatro órdenes. Las cuerdas son de La bandola andina es la auténtica ban­
algunas regiones se conoce también con
metal. Juan Esteban García y Luis Miran­ durria española. Se emplea en la interpre-

■SlammUim ■ .mmmilms
~aaon de pasillos > ¡baubycos. La ira s E violín es uíi.ízado en nuestro país pr n- de carángano :“ a siso . isto e r Samare
c o n j r posee dieciséis cuerdas que se cipalmente en los estados andinos, así estado Lara. La rr.sma técnica se ap ica
d i¡s ír iiD L . Y s r en cuatro cuerdas aob.es para como también en Lara, Falcón y Yaracuy en las otras dos variantes del instrumen­
ios cordones y cuerdas triples para los para acompañar aguinaldos, Paraduras to, una de cuerda metálica sobre base
auianrc órdenes restantes, más agudos. del Niño y géneros musicales como la de madera y otra fabricada con fibra de
polca, la danza y el vals. En el estado palma. El carángano está presente en al­
3” R0S INSTRUMENTOS DE CUERDA Carabobo es utilizado en la ejecución del gunas fiestas tradicionales como El Baile
joropo. Los Warao construyen un tipo del Mono y La Llora.
guitarra es utilizada como instrumento de violín al que llaman sekesekeima, y lo La marimba es un instrumento afrove-
38 acompañamiento en varios gáne­ utilizan en cantos y ceremonias rituales. nezolano. La caja de resonancia está
o s ru sica le s populares, tales como: El carángano es utilizado en distintas constituida por la boca del ejecutante,
bambucos, valses y polcas en los Andes, zonas del país; se conocen tres varian­ quien modula para generar la melodía.
décimas y danzas en el Zulia, y también tes de este instrumento con principios En algunos lugares se toca poniendo un
=r e merengue, las serenatas, la guasa y similares de ejecución. En su forma más extremo del arco en la boca del ejecutan­
lias -¿'versiones. simple, consta de un arco musical, el cual te, mientras la cuerda se pulsa con una
E tiple se asemeja en forma y tamaño a es golpeado en su cuerda por un par de pluma o púa. En otra versión se apoya el
lia gu larra, posee cuatro órdenes de dos palos, mientras otro ejecutante pasea por arco sobre una caja, mientras el ejecutan­
: ires cuerdas combinadas de diversa sobre la cuerda una vejiga de res inflada te modula la altura pasando una concha
remera. Se utiliza en los Andes venezo- y rellena de semillas o granos. Este tipo de coco a lo largo de la cuerda.
Itanos.
• AtLas de tradiciones venezolanas • Música

Tambores « Tamboritas de

O ca sió n » El cumaco se emplea en las fiestas a San Juan Bautista, San Antonio y San Benito. Los chimbángueles son utilizados para rendir culto a San Benito

de Palermo. El mina, el curbata y tambor redondo es propio del ciclo festivo de San Juan Bautista. El tambor coriano alegra las fiestas decembrinas. La tam-

borita es un instrumento que en sus distintas variantes es empleado como acompañante en aguinaldos y parrandas, gaitas, estribillos orientales y cantos de

fulía. El furruco es acompañante de aguinaldos, gaitas y parrandas. El pandero refuerza la percusión en la canturía, el polo, cantos de Pascua y las parrandas.

O r ig e n » El tambor coriano proviene del intercambio entre el litoral falconiano y las islas de Aruba y Curazao. El furruco y el pandero provienen de Europa.

Todos los demás tambores son afrovenezolanos

D is p e r s ió n G e o g r á fic a » El cumaco pertenece a la costa central del país, la zona subcostera del estado Yaracuy y algunas localidades de Lara, Mérida, Truji­

llo y Zulia. Los chimbángueles son propios de Lara, Mérida, Trujillo y Zulia. El mina, el curbata y el tambor redondo se emplean en Barlovento. El tambor

coriano o veleño es propio del estado Falcón. La tamborita se encuentra en la región central, oriental y zuliana. El furruco se encuentra en el todo el

país. El pandero es propio de Falcón, Yaracuy y Carabobo

Los instrumentos que producen sonido Los chimbángueles son un conjunto de


al percutir o friccionar una membrana tambores cónicos de un solo parche, el
o parche reciben el nombre de mem- cual es prensado a través de un juego
branófonos. Pueden ser de una o dos de cuñas que cada tam bor posee en su
membranas templadas rígidamente sobre parte inferior. Se ejecutan con la mano
una base o un cuerpo hueco de cual­ y con un palo o rama flexible según el
quier forma o material. Para su ejecución tipo de tambor. Los chimbangles, como
estos instrumentos pueden ser golpea­ también se les conoce, están formados
dos, como ocurre con los tambores o por siete tambores de madera agrupados
frotados, como se hace con el furruco como machos y hembras. Existen cuatro
y el pandero. La mayor parte de estos tambores machos: el tam bor mayor o
instrumentos en nuestra tradición musical «arriero», el respuesta o «respondón»,
pertenecen a la cultura afrovenezolana. el cantante y el segundo. Los tambores
El cumaco es el nombre que recibe un hembras son: la primera requinta, la
tam bor de tipo tubular de un solo parche segunda requinta y la media requinta. Son
o membrana. Esta membrana general­ utilizados para rendir culto a San Benito
mente es claveteada. Para su ejecución de Palermo en distintas poblaciones de
se coloca acostado en el suelo, un los estados Lara, Mérida, Trujillo y Zulia.
tocador se sienta a horcajadas y percute El mina es un tam bor de una sola mem­
la membrana con las manos desnudas, brana que está sujeta a cordeles unidos
mientras uno o más ejecutantes percuten a unas cuñas insertas en la parte supe­
sobre el cuerpo del tambor con varillas de rior del tronco, para buscar la tensión
madera llamadas rolitos o palitos según la deseada. Este tam bor que tiene una
región. La dispersión de este instrumen­ altura aproximada de dos metros se per­
to abarca toda la costa central del país cute asegurándolo sobre dos horquetas
desde Chuspa en el Distrito Capital hasta cruzadas, de manera que el ejecutante
Puerto Cabello en el estado Carabobo, se pare frente a la boca del tam bor para
también la zona subcostera del estado percutir el parche con un palo; además el
Yaracuy y algunas localidades de! estado tronco del tam bor es golpeado por dos o
Lana, donde se usa en e cufio de San tres tocadores con unos palos que llaman
Artartéc. En. las otras zonas s a fa a d a s se teures. Se emplea en el estado W randa.
empinas en ,as ceremonias er ic n c r 3 San t ' E :• : . en •: curarte el odio mesmc de
JiiuiBF Bauiiste. s a r J d sú a
es yin tambar tubular rife una E tam bor coriano c veteño es un
raime que .se emnpfea cornio taimbor j e ara con el. que se alegran las
ée ©Ti '& ejecoaión á a mina, fiestas decembrinas en las localidades
ergs- t e n s o n e s , se apoya en de Coro, La Vela y Puerto Cumarebo en
die parare, caracterizada por ei estado Falcón. Proviene del constante
■ra s paras se -percute con intercambio entre el litoral falconiano y las
islas de Aruba y Curazao.
■- : : : 3 - o e puya es La tamborita es un instrumento propio
B1farmacia por rres tambores de la población criolla y mulata de Vene­
:ie doole parche y pequeño zuela que se emplea como acompañante
Las parches están unidos entre de diversas modalidades de música en
lienes oara ograr el temple de- casi todo el país. Algunos ejecutantes la
íftpnaduor sonidos diferentes percuten con palo y otros se sirve sola­
io n Itongitudes y diámetros lige- mente de las manos. Cuando el músico
aiiiafafes. Cada tam bor recibe está de pie va colgada del cuello y cuan­
se n d o ios más genéricos: do está sentado se apoya horizontalmen­
ii..'he je es el que comienza el te sobre el regazo o se sostiene apretada

MUSI CA
Z3IO f pLtiao. Para su ejecución entre las piernas. Es indispensable en
dar se coloca el tam bor entre los aguinaldos y parrandas de la región
s. inclinándose levemente hacia central, en la ejecución de las gaitas, en
MicutiéTídolo con una mano li- los estribillos orientales y sobre todo com ­
spe lifc'i i¡za un palo. Se emplean pañera inseparable de los cantos de fulía.
Uto Miranda, en honor a San El furruco es un instrumento de fricción
lista. de una sola membrana. En su fabricación
se emplean materiales como madera o
calabaza para la caja de resonancia y una
vara de madera que es encerada para fa­
cilitar la fricción y emisión del sonido. Para
su ejecución se sitúa en el suelo, se lleva
colgado del hombro, o se coloca debajo Furruco

del brazo para poder apoyarlo sobre el


pecho. Es un acompañante por excelen­
cia de la música navideña en todo el país
tanto en las ceremonias rituales como
en la ejecución de aguinaldos, gaitas y
parrandas.
El pandero es un instrumento parecido
a la pandereta española pero ejecutado
de distinta manera, también se conoce
como pujío. Para su ejecución, el centro
del parche se unta con cera negra y se
toca friccionando este lugar con el dedo
medio. Se emplea en los estados Falcón,
Yaracuy y Carabobo para reforzar la
percusión en la canturía, en el polo, en los
cantos de Pascua y en las parrandas.

« Tambor cumaco
« Tambora gaitera
160 • Atlas de tradiciones venezolanas • Música

Tambores venezolanos

Tambores de calipso Tambores chimbángueles


Los tambores de calipso son, junto al traje de Se conoce como chimbángueles a una batería
madama, los mediopintos, y los diablos de de siete tambores empleados para festejar a
elaboradas máscaras, los símbolos del carnaval San Benito. Por tradición los chimbángueles se
de El Callao en el estado Bolívar. Duranie estas clasifican por género, criterio -por cierto- muy
fiestas desfilan los tambores junto a los típicos propio de los indígenas, quienes agrupan sus
rallos, el cuatro, la campana, las maracas metá­ flautas como hembras y machos. Los tambo­
licas y el pequeño tambor conocido como bum- res machos son: el tambor mayor o «arriero»,
bac. De caja metálica y con moderno sistema el repuesta o «respondón», el cantante y el
de tensado del cuero, los tambores de calipso, segundo. Los chimbángueles hembras son: la
seguramente descienden de aquellos otros que primera requinta, la segunda requinta y la media
llegaron a mediados del siglo pasado en manos requinta.
de un contingente de mineros inmigrantes
provenientes de las islas antillanas.
’ e " Dores en la tra d ic ió n
ÜL5 r e . ;d a de nuestros tam bores están asociados a celebraciones rituales,
\ya aue en e oasado los esclavos ofrendaron su fe y su música a algunos
santos protectores. Por eso form an parte de los festejos a San Juan, San
Benito. San Antonio o la Cruz de Mayo. De to d o el santoral católico es San
Juan es gran protector de los tam bores venezolanos. De allí que en Bobures
v 3 c-altar se le rinda con el sonar del tam bó largo; en Falcón al ritm o del
/ e e " : y el coriano; en Caraballeda y Naiguatá con una batería de tam bores
donde están el cum aco grande y la pipa; en pueblos del Valle de O rituco con
Tambores quim bánganos; y en Curiepe, y m uchos otros pueblos de la región
ce Bariovento con la alternancia del conjunto mina y curbata con los tres
tam bores culo e ’puya. Por otra parte es San Benito el señor de los chim bán-
giuetes, mientras las tam boras acom pañan, en mayo, los cantos de fulía y
s r Navidad salen junto al furruco a rendir culto al Niño Jesús. Algunos de los
tam bores de la tradición venezolana han abierto su radio de acción y hoy día
suenan en cualquier fecha para animar fiestas populares o sim plem ente para
(hacerse sentir en m anos de grupos de proyección folklórica, renovando así
su funcionalidad y con ello sus posibilidades de permanencia.

El mina y el curbata Batería de tambores redondos


Conjunto asociado a la fiesta de San Juan y También conocidos como culo e’puya, los
propio de la zona de Barlovento en el estado Mi­ tambores redondo parecen derivar su nombre
randa. El mina es un tronco de árbol totalmente del círculo - redondo- que se forma en torno a
cilindrico y al igual que el curbata se ejecuta de la pareja que baila. Este conjunto instrumenta
pie. Según la opinión del cubano clon Fernando está conformado por tres tambores bimembra-
Ortiz, el conjunto mina es de procedencia daho- nófonos, conocidos en algunas regiones como
meyana, por presentar un sistema de tensión pujao, cruzao y corrido. Se ejecutan con un ps -
por clavijas que lo asemeja a los que usan ¡os to delgado y duro, y los tambores son colocados
negros haitianos en sus ritos rada. entre las piernas, a manera de cabalgadura,
posición que sugiere el nombre de culo e’puya.
Según Juan Liscano los tambores redondo dan
indicios de un posible origen bantú.

Las pipas
En la población de Naiguatá se celebra
a San Juan mediante el toque de
grandes barriles denominados pipas.
Tambores que posiblemente cons­
tituyen una evolución reciente de
antiguos tambores de origen africano.
No hay duda de que las característi­
cas de zonas pesqueras y cercanas a
puerto marítimo puso a la población
de Naiguatá ante la posibilidad de
aprovechar estos grandes barriles
-que venían en los barcos- como
instrumentos musicales.
162 • Atlas de tradiciones venezolanas • Música

Instrumentos de golpe, punteo o frotación


O c a s ió n » Las maracas se emplean todo el año, bien en los ritos indígenas o en la música criolla. La charrasca se utiliza para acompañar guasas, aguinal­

dos, gaitas y fulías. El chineco se usa para cantar aguinaldos y parrandas en Navidad y en la fiesta de los Pastores del Niño Jesús. El chapera para la

ejecución de música de Navidad. La marímbola se emplea todo el año para acompañar distintas formas musicales

O r ig e n » Las maracas son de origen indígena. La charrasca es caribeña. El chineco puede derivar del bastón sonaja. El chapera tiene su origen en los

sonajeros. La marímbola parece emparentada con la sanza africana

D is p e r s ió n G e o g r á f ic a » Las maracas, la charrasca y el chapera se encuentran en todo el país. El chineco es utilizado principalmente en la región central. La

marímbola es propia de la región central, centro-occidental y oriental del país

L o s instrumentos que producen el sonido de carácter ritual y en muchas expresio­ El chineco es un bastón de aproxima­
como consecuencia de la vibración de nes musicales tradicionales del país. En damente dos metros y medio de altura,
sus propios cuerpos reciben el nombre las fiestas de carácter ritual, el ejecutante adornado con medias lunas que van co­
de idiófonos. En este caso, la vibración emplea una sola maraca, mientras en locadas en el extremo superior. Se le atan
es lograda por la acción del ejecutante al algunas celebraciones y expresiones cintas de diversos colores, cascabeles y
percutir los instrumentos contra el suelo, musicales de tipo diversional, las maracas chapas de hojalata. Se ejecuta golpeando
sacudirlos, puntearlos, frotarlos, rasparlos son empleadas por pares, tal es el caso el palo contra el suelo para que suenen
o golpear a unos contra otros. del joropo. En la gaita de tambora se ha sus colgantes, pero también algunas
Las maracas son sonajeros construidos incorporado una maraca de gran tam a­ veces es sacudido en el aire como una
con el fruto del taparo seco y vaciado, al ño que es construida con flotantes de maraca. Forma parte del conjunto que se
que se le introducen semillas de capacho, tanque, de plástico, para obtener sonidos usa para cantar aguinaldos y parrandas.
granos de maíz o piedrecillas, que por más fuertes. En la parranda central, se El chineco es utilizado principalmente en
sacudimiento producen el sonido al cho­ acostumbra a colocar la maraca en la ve- la región central entre los Pastores del
car contra la corteza del fruto. Tienen dos rada del furruco, con el fin de aprovechar Niño Jesús.
perforaciones que sirven para insertar un la vibración de éste sobre la membrana El chapera tiene diversas formas de
mango de madera como eje. La maraca del tambor. En el carnaval de El Callao, construcción. Suelen estar hechos de una
está presente en casi todas las culturas se usan maracas hechas de latas de pequeña tabla en la cual van clavados
indígenas, en numerosas celebraciones aceite y pintadas de diversos colores. En juegos de chapas de refrescos aplasta­
los Llanos están reemplazando el mango das. También pueden construirse con
«Sonajero utilizado por la etnia kariña en el baile de La Culebra que atraviesa la maraca por otro que sólo un aro de alambre grueso, al que se le
Pueblo Nuevo, Edo. Anzoátegui
penetra con una mínima extensión, lo que traspasa un juego de chapas de refrescos
amplía las posibilidades sonoras. aplastadas y perforadas, las que produ­
Entre los maraqueros que han ganado cen su sonido por sacudimiento. Este ins­
prestigio destacan: Pedro Aquilino Díaz, trumento es utilizado en todo el país para
Máximo Teppa, Silvino Díaz, Quico Ramí­ la ejecución de la música de Navidad y
rez y Juan Guerra. también es popularmente conocido con
La charrasca es una pieza alargada a la el nombre de pandereta.
cual se le abre una serie de surcos que La marímbola es un instrumento formado
son raspados con un objeto de metal por una serie de flejes metálicos, los cua­
o de madera resistente. Pueden estar les están fijados a una caja de resonancia
hechas de caña, de tapara, de tubos de madera. El ejecutante se sienta sobre
de cobre, de calabaza o de madera. En la caja o se la cuelga del cuello pa-a pun­
algunos casos los músicos populares tear los flejes. Este nstrumento se empa­
reemplazan la charrasca p o r u r p ato rienta con ¡a saoza africana > es ufeizEdc
ce D'Sitfe frotado c o r jn,a cucn.ars Se fundamentalmente' en ia; región central,,
u tiliza r en to d o e; .país paira lo m a r pane 'Ceninrc-ocGidertal! y orienta! dleil paíis,
lien :,ani:un:c de n s t " j r « r r : « que ejjecu-
Luthiers
S .. oas 03566 magníficos fabri- sido ejecutados por Fredy Reyna, Oscar cortes de manzar lio frac y caoba apro­
:a rte s de nstruimentos de cuerdas. La Martínez, Gregorio González, entre otros; vechando los ricos contrastes y coloridos:
mayoría. se ha n o ado por modelaje o sus guitarras, por el maestro Alirio Díaz y de estos tipos de madera. A os adornes
sio jie ro c una tradición -familiar, sin asistir sus bandolas por Anselmo López, Saúl o apliques se les llama taraceas y se coto-
a escuelas o talleres, ni adquirir conoci­ Vera y Florentino Valderrama. can en el golpeador, el mástil y la pala del
mientos en : bros especializados. Se trata cuatro. Ramón Figueroa y los herederos
e que cumple cinco siglos, que Ramón Figueroa de su obra han llevado este arte hasta
se- escarce por todos los pueblos y ciu­ Nació en Cumaná. Aprendió el arte de su actual estado de desarrollo. Ramón
dades je oaís. donde aún la herramienta fabricar instrumentos a través de la expe­ Figueroa murió en Cumaná en 1980.
mas ~ o o e r a no ha podido desplazar las riencia de su padre. Construyó bandolas,
manos y ei ingenio de estos artesanos cuatros, bandolines, quintos y guitarras.
que . e rie r la madera en música. Las maderas que utilizaba en sus talleres
ro ñ a r a Eduardo Morales, eran cedro, caoba, manzanillo, pardillo y
m Z u la creador del cuatro campana; algunas veces cartán. Conoció y difundió
JM o n ib INlavairo, en Carora, Ramón la técnica del «aro a candela» para doblar
« Mateo Goyo, Luthier especializado en la construcción del cuatro
Kgiueraa y sus herederos, en Cumaná, la madera. Los cuatro son adornados con estilo monterol. San José de Quíbor, Edo. Lara

rab -ca ries ce cuatro oriental, el de sun-


ppSG diiaoasón; Cruz Quinal, también de
C u n a ra creador del bandolín morocho;
MMbd Goyo, sn San José de Quíbor,
¡ p e junto a sus hijos ha sido guardián de
¡iis o r tc a '-adicional del estilo monterol,
girar luti" e ' /a fallecido; los hermanos
C h irrio s herederos de Eladio Pérez
Eltininos en Carora; Misael Montoya,
BÉwiranfe de arpas «finas», Pedro Pablo
A lija ra . -a n c o Blanco, Jorge Ball, Cami-
Ig Herrera entre otros.
Por razones ::e espacio sólo podemos
Iteradirie homenaje a la vida y a la técnica
cíe moa :e sores artesanos: Ramón Figue-
M f Antonio Navarro.

;11 3 ^ a v a rro

ita o e en Carera. Empezó a fabricar


i r s r j r 'e n T o s de cuerda a los 34 años,
■ÉiBiiiiiBgúin iipc de maestro. Gracias a su
■iriiisiiniG « d e y a algunos conocimientos
M§OTtíi0rnao:a. física, química e ingenie-
........... I il se ha llegado a convertir en
iiipiitíii? Ibs Dres luthiers de Venezuela,
(pipíes Éuéitro t pos de madera: cedro,
caoba ■eoano. Sus cuatros han

«Antonio Navarro
Carora, Edo. Lara
164 • Atlas de tradiciones venezolanas • Música

La música tradicional venezolan


P o r su origen y conformación se pueden » O RIGEN / RAIZ » C A R A C T E R ÍS T IC A S G E N ER A L ES
distinguir varios tipos de música dentro
D e origen La música autóctona indígena tiene fundan
de la tradición venezolana: talmente una función ritual. Es realizaca
étnico am ericano
chamán con fines curativos o de invoc
espíritus. Otras veces anima danzas colé
• De origen étnico americano. Es aque­
es interpretada por hombres muy respe:.,
lla música de raíz indígena que se cultiva también música utilitaria para acompañar
en su contexto autóctono o bien es parte o eventos especiales. Es música que fiera:
repetitiva y con pocas variantes.
central de formas musicales ejecutadas
por el hombre criollo.

• De origen europeo que como el villan­


cico conservaron todos sus elementos o
bien como el aguinaldo fueron aclimata­
dos adquiriendo nuevos aspectos.

• De raíz afrovenezolana que se distin­


D e origen De España nos llegaron formas mus cále
gue por su riqueza rítmica, sus tambores europeo mentos, danzas y bailes de cada reg¡on|
y particulares giros melódicos aún pre­ país, así como elementos de raíz árabe
andaluces llegó el flamenco y de los
sentes en las fiestas populares. malagueña, mientras los misioneros ;.
capilla enseñaron villancicos y aguinac
glo xix llegó la polca, la mazurca, la i
• De origen mestizo. Aquellas formas
-forma musical derivada del laender,.
musicales únicas, particulares, que como baile alemán. De Europa llegaron ins;:r
el joropo se gestaron en suelo americano cuerda, como el arpa, la guitarrilla r?r.=
el violín, la mandolina. También la zana
luego de un intenso proceso de mezcla y flautas, la pandereta, cascabeles, cane
creatividad. redoblante, entre otros.

De raíz Los europeos a su vez trajeron a esdl


afrovenezolana tintas culturas del África negra que
aporte al mestizaje musical. Los
nos legaron el tambor mina; los bal
gueleros provienen de la cultura fca:
los quitiplás de Curiepe fueron visto
y el Zaire. Con los tambores vine: «bal
sualidad en el baile, canto dórele se
solista, y una serie de vocablos y ©
origen africano.

De origen Como parte de la tradición m usca


m estizo están aquellas formas únicas, :ma¡ri¡|
aparecen en la tradición de riúngun
ya que son producía deí parfcdiair:
mestizaje ocurrido entre nosotros.
» INSTRUMENTOS MUSICALES » GÉNEROS » FESTIVIDAD O RITO

nautas. - eras, cachos, trompetas, clarinete, El mare mare es una de las pocas formas musicales Del contacto de la cultura indígena c o r e¡l ho rria ie
rom pa oe cuerno, caracola, arco musical, indígenas que se integraron al patrimonio tradicional criollo queda huella en: las fiestas de as ~;"3S..
silbatos, :ambores, bastones de ritmo, palo del hombre criollo. Entre los indígenas se encuentran propia de descendientes de ayamanes y gayares
ziiiimbadcf. maracas, birimbao, zaranda. cantos mágicos, chamánicos de curación, o utilitarios, ubicados en pueblos y caseríos entre les esiaooE
para rallar yuca, dormir al niño, cazar báqulros, toques Lara y Falcón, donde resuenan los cae1" : : de .“ -si ­
funerarios, llamadas de caza, toque de tura. do, las maracas y las flautas o turas para an nnar al
baile ritual en honor al maíz; el rito del Akaatcrncc „
en el que las comunidades Kariñas de! es:a:::
Anzoátegui rinden culto a los muertos, y cbncte se
escucha el sonar de flautas y el ritmo de ur : uatr:
Interpretando un mare mare; y la danza de a Yo p -
na, en la que los goajiros, realizan su danza _na"
-Yonna- siguiendo el ritmo de la casha. u r éstese /
sonoro redoblante. En general los indígenas :
ritos de cosecha, de invocación a los espíritus de £
naturaleza, de curación, funerarios, de in icia :: - .
muchos otros.

E arpa, la guitarra, el cuatro, los cencerros, los Polo, jota, punto, punto y llanto, fulía oriental, mala­ Ciclo navideño, Paradura, Reyes Magos. Pasteras
cascabeles, las campanas, el redoblante, el gueña, galerón, villancicos, aguinaldos, romances, del Niño Jesús, Muñeca de la Calenda. V e k r: ce
pandero, la pandereta, el furruco, la mandolina, polca, vals. Canciones de cuna, rondas, cantos de Cruz de Mayo, El Tamunangue, también er. ~es:as
a cardóla, el bandolín y el tiple. trabajo, cantos de rogativa. locales y familiares.

5 c - descendientes de lejanos tambores La forma musical asociada a los tambores afrovene- Los tambores afrovenezolanos están asociaces a
arréanos: los tambores mina y curbata, los zolanos es el golpe, que entre los chlmbangueleros las fiestas de San Juan que abarca toda la ccs:a
cu -raeos, la batería de tambores culo e'puya, presenta una diversidad, siendo los más usados agé, central y las de San Benito en el occidente de Ve­
a oatería de tambores chlmbángueles, los cantica, sangorongomes, chocho, cimbanguelero vaya nezuela; también a los Velorios de Cruz de la : : s:a
ou -Jolas, las tamboritas de fulía, el caránga- y misericordia. En tanto los golpes dedicados a San central; y al Tamunangue larense. Por su para e
rc: y del calypso: los tambores cilindricos, el Juan se conocen como sangueo, corrío. de plaza, gol- carnaval de El Callao está cargado de elementes
-a~oor grande, los típicos rallos y el pequeño peao y trancao en unas regiones, de legio, San Juan procedentes de la cultura afrocaribeña que se
tarroor conocido como bumbac. Son de raíz y macízón para los ritmos reposados, y jinca y perra expresan musicalmente en el callpso.
afrovenezolana la marimba, el carángano y la para los movidos en la costa central. El csiipsc. es un
marímbola. ritmo que en Venezuela, va a adquirir características
propias que le distinguen de su originarlo artillano, tal
como la presencia de un coro o estribillo y el hecho de
narrar situaciones jocosas o sucesos locales.

Aun cuando no se puede hablar de algún Es el joropo el más emblemático por constituir un El joropo se celebra todo el año tanto en ferias
■Instrumento único, original salido del particular símbolo de nuestra identidad. En la región centro-oc­ como en celebraciones familiares. La gaita sua-a
proceso de mestizaje, sí se podría afirmar que cidental se cultiva el tamunangue o sones de negros. dentro del ciclo de fiestas navideñas, y celebra a
en su mayoría son de hechura muy venezolana. También son originales de nuestro proceso cultural San Benito y Santa Lucía. El Tamunangue a- n a ¡as
B euatro, el arpa en sus dos modalidades, la las gaitas zulianas en sus distintas formas, ia Liora del fiestas a San Antonio en el estado Lara. Los tonos
cardóla en sus distintas variantes, y muchos estado Aragua y los tonos de Velorio -la más Impor­ de velorio se oyen en los Velorios de Cruz. _a -orn­
oíros, han acumulado en su sonoridad, diseño tante polifonía vocal de tradición oral de toca América. en el día de los muertos. El merengue y ei ca~cacaj
V materiales, varias generaciones de creatividad Venezuela también ha hecho suyo géneros musicales se escuchan todo el año.
ocal. tales como el merengue que adquirió personalidad
propia, distinguiéndose el caraqueño, el larense y el
cumanés. Por último, el bambuco, propio ce Venezue­
la y Colombia, inspirado en canciones toe raoanera.
166 • Atlas de tradiciones venezolanas • Música

Instrumentos musicales venezolanos


Los instrumentos musicales son la evidencia material de la ces culturales. De allí que en la tradición venezolana encontremos
tradición musical de un pueblo. Ellos nos indican la evolución, instrumentos de evidente raíz europea, otros indígenas, tambores
desarrollo, riqueza y diversidad de esta expresión popular. Son la descendientes de africanos y otros que a lo largo de siglos de
expresión de mestizajes, encuentros e integración de diversas raí- historia se han arraigado en nuestra cultura.

r Marimba
J Simples
I
I
Arcos musicales
[ Carángano
& M
Arpa llanera

[Arpa central

Guitarra

Instrumentos Cuatro, cuatro y medio


de cuerda ¡ Compuestos
(cordófonos) Ejecución digital Cinco, cinco y medio
I (de caja y mango)

Seis, octavo

Tiple

Bandola
Ejecución con plecto
[ Mandolina

Ejecución con arco •• ^Violín

Turas

Cachos de turas

Silbatos
Sin canal de insuflación
Flautas globulares

Flautas de pan
Flautas
^Flautas transversas

Flautas longitudinales

Instrumentos
Con canal de insuflación
[ Flautas globulares

de viento O b o e s .............................. jjjShirimía (indígena andino)


(aerófonos)
Totoy (goajiro)

De lengüeta Massi (goajiro)


Clarinetes .......................
Isimoi (guarao)

Guana (guaracj

De caracoli

Guarura

Cachos
La clasificación universal de los instrumentos -creada por los en vibración. Esta es: Idiófonos (vibra el propio cuerpo?; membra-
alemanes -om bostel-S achs- organiza científicamente a los nófonos (vibra la membrana o cuero); cordófonos (vibra ia c as
¡psioimentos musicales según la naturaleza del material que entra cuerdas) y aerófonos (vibra el aire).

Tambor de calabaza
Semi-esféricos
L de una membrana

C u m a C O (con un parche cia.ar:

Tamunango

T a m b o r a s hechas con t a " es

Chlmbángueles
De golpe directo Tubulares
Mina

Curbatas {con patas)

Tambores redondo

Erurú de los guaraos

Casha goajira

Tambora criolla

^Tambores de calipso

Furruco

L
De frotación
[ Pandero

Marímbola
Directo
Steel Band

Quitiplás

Chineco

Indirecto Pandereta

Maracas

Cencerro

Punteo
Trompa goajira

[ o birimbao

Frotación
Charrasca de madera,

[ cuero o meta!
Fu
Big
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FUNDACIÓN 3 S .'~ ¿u iHBiwwkwnL N im iM u .

Junta Direcwa jjanttiiiitÉKwtawH

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ífe r« ic ne Difusión Cultural Presidente Ejecutivo


/Münráxr'i Manuel J. Sucre G.

lÜMMIMtt't!lUMBOeumniB Editor Adjunto


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Gerente de la Unidad de Nuevos Hegoc.cs


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- r ' r de Proyectos

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