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Matrimonio y sus deberes conyugales

Estudiante: Nelson Peralta Nalvarte

(Reina Valera,1960, 1pedro 3:1-7)


3:1 Asimismo vosotras, mujeres, estad sujetas a vuestros maridos; para que también los
que no creen a la palabra, sean ganados sin palabra por la conducta de sus esposas,
Exegéticos: desde la raíz de la palabra (strong > vine>)
Método analítico: frase por frase
Método biblico: citas bíblicas que se relacionan con el tema.
Método deductivo: antes y después, el contexto del texto
Método inductivo: ver el contexto
Según el contexto de la antigüedad las mujeres estaban absolutamente sujetas a la
cabeza del hogar, el esposo. Pedro está hablando a las mujeres cristianas a través de su
epístola, que estaban extranjeros en diferentes partes del mundo de ese tiempo. Estas
mujeres eran de origen pagano, a veces sus esposos no eran creyentes solo la mujer era
creyente en Cristo; por eso el apóstol insta a estas mujeres que tengan buena conducta y
buen testimonio ante sus esposos, así viendo sus buenas acciones de amor y
sometimiento los hombres sean ganados o convertidos para Cristo.
3:2 considerando vuestra conducta casta y respetuosa.
El apóstol sigue exhortando a las esposas que sean moralmente irreprochables en sus
conductas, la conducta debe ser casta y respetuosa para convencer a los hombres duros
de corazón.
3:3 Vuestro atavío no sea el externo de peinados ostentosos, de adornos de oro o de
vestidos lujosos,
También se puede deducir que las mujeres eran de estatus social alta, ya que muchas
mujeres pobres no tenían acceso a ropas y adornos lujosos; le está diciendo a estas
mujeres que lo externo no es lo más valioso sino el interno. Sin embargo, el apóstol no
estaba en contra del cuidado físico de las mujeres, los que sucedía es que muchas mujeres
se ataviaban de peinados ostentosos, de adornos de oro o de vestidos lujosos con la
intención de conquistar a sus maridos a través de la belleza externa.
3:4 sino el interno, el del corazón, en el incorruptible ornato de un espíritu afable y
apacible, que es de grande estima delante de Dios.
El aspecto mas importante para Dios es lo interno. Las esposas deberían adornar lo
interno que aún más tendrá recompensa en el cielo sus acciones justas, de respeto y amor
que vivió en este mundo de peregrinación.
3:5 Porque así también se ataviaban en otro tiempo aquellas santas mujeres que
esperaban en Dios, estando sujetas a sus maridos;
En el antiguo testamento las santas mujeres se adornaban con humildad, integridad y
paciencia; como por ejemplo Ruth que con sinceridad de amor y con lealtad de espíritu se
mantuvo al lado de su suegra, luego al pasar el tiempo Dios le dio la recompensa.
3:6 como Sara obedecía a Abraham, llamándole señor;(C) de la cual vosotras habéis
venido a ser hijas, si hacéis el bien, sin temer ninguna amenaza.
También el apóstol Pedro pone como ejemplo a Sara esposa de Abraham, Sara fue una
mujer que esperaba en Dios para tener su hijo prometido, dice en hebreos que por la fe
sara concibió y dio luz su hijo Isaac, siendo estéril y de edad avanzada.
3:7 Vosotros, maridos, igualmente, vivid con ellas sabiamente, dando honor a la mujer
como a vaso más frágil, y como a coherederas de la gracia de la vida, para que vuestras
oraciones no tengan estorbo.
Finalmente, también el apóstol exhorta a los esposos a vivir de manera sabia con sus
esposas. Muchas veces las mujeres eran humilladas por sus esposos, pero para el Apóstol
y Dios tanto el varón y la mujer tienen de igual derecho y consideración. Cuando dice que
la mujer debe ser consideradas como vaso frágil, está diciendo que las mujeres son
frágiles en lo físico que necesitan ser protegidas por sus esposos.

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