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¿Cuándo hare lo correcto?

Soy una adolescente normal, con una vida normal, con problemas más graves de lo que las

personas creen… bueno, todo ocurrió un día de Diciembre en el que mi novio, o mejor dicho ex novio me hizo
ver cosas en el que desearía jamás haber descubierto, y rompí con él. Ese día marco mi vida, y desde ahí me
sentía triste, humillada, deprimida, inútil, que nadie me quería, ¿realmente el me llego a amar? Era la pregunta
de todos los días si él decía que me amaba porque fue tan malo conmigo y decidió cambiarme por una de esas
chicas fáciles, rubias y más bonitas que yo. Me sentía muy mal cuando descubrí que él ya estaba buscando una
nueva novia cuando no llevábamos ni siquiera una semana de haber terminado, me sentí aun peor. Dure en
depresión alrededor de 1mes, lo único que hacía era comer helado, llorar y malgastar mi vida pensando en él,
pensaba que si ya no lo tenía al menos me podría conformar con pensar en el día y noche. Y mis actos fueron en
vano, en lugar de hacerme sentir mejor conmigo misma cada vez la tristeza y la soledad eran peores, no podía
dejar de llorar y cuando al fin lo lograba cualquier cosa me hacía sentir mal, yo necesitaba amor, cariño,
amistad; y no recibía demasiada por parte de algunos amigos. Mientras unos hacían hasta lo imposible para que
me sintiera mejor, otros hacían todo para que me sintiera aun peor. Fue cuando descubrí que ahí no podía
encontrar todo el apoyo y atención que necesitaba, mis padres al ver que mis notas iban es descenso y que las
clases que recibía no eran las mejores decidieron cambiarme de escuela, hice hasta lo imposible para no irme de
esa escuela, porque a pesar de haberme ganado algunos enemigos, encontré unos muy buenos amigos,
realmente buenos que los considero como parte de una familia. Cuando descubrí que me habían aceptado en esa
escuela me puse algo feliz porque tendría nuevos amigos, una nueva familia que podría formar, por decirlo así,
personas que podrían comprenderme y apoyarme en momentos de debilidad. Al principio me adapte en el grupo
de las populares, si así se les puede llamar, eran demasiado hipócritas como para seguir juntándome con ellas y
considerarlas mis mejores amigas. Así que decidí intentar de socializar con un pequeño grupo de chicas que
eran sinceras, sacaban buenas notas, se apoyaban entre sí, no hablaban mal unas de otras y ese tipo de personas
en las que si confiarías un secreto. Poco a poco empecé a adaptarme a mis nuevas amigas. Yo ya estaba un poco
acostumbrada a este tipo de cosas, ya que me eh cambiado de escuela más de cinco veces y siempre tienes que
encontrar un grupo con el que te identifiques y te sientas cómoda. Aun no terminaba de salir de mi depresión, y
menos con mis antiguas amigas lejos, sentía que mi corazón se partida en mil pedazos; primero terminar con
alguien que tu creías tu príncipe morado, alguien que antes fue tu amigo, alguien que decía que te quería; y
también por dejar a tus verdaderas amigas que te apoyaron en buenas y malas, que formaban un estilo de
familia. Tú mejor amiga a la que consideras tu hermana, que siempre te apoya. Yo ya sabía que lejos de ellas la
amistad no sería igual con todas, a algunas jamás las volvería a ver, otras cambiaran repentinamente, unos ni
siquiera se acordarían de mí y otros que quizás se burlarían de mí por una razón o por otra. En mi nueva escuela
los maestros, sentía que no me apoyaban de la misma manera que los anteriores pero bueno, no siempre puedes
contar con ellos, una vez más tenía que llevar clases de guitarra y eso no era algo que me pusiera muy feliz.
Todos los días hablaba con mis antiguas amigas y les decía lo mucho que las extrañaba y que quería regresar a
esa escuela, me sentía identificada con muchas personas ahí pero pues, no había vuelta atrás. Por más que
trataba de llevarme bien con todos, definitivamente había personas con las que jamás me llevaría bien, no solo
por diferencias de gustos, sino porque de una manera u otra no lograba caerles bien o encajar con su
personalidad. De repente 2 chicos a los que solo saludaba me hablaron un jueves de febrero en la noche, para
decirme que le gustaba a un chico del salón. Al principio me intrigaba saber quién era y cuando me dijeron
quién era la persona, fue algo raro, no sentía que era del tipo de personas que le gustan a los chicos dark’s, no
era una chica que le interesara mucho el heavy metal y el color negro, si me gustaba el color negro pero ya no
tanto como para ser mi preferido, después me dijeron que a él también le gustaba una amiga, fue aún más raro,
ella ni siquiera escuchaba rock, al menos yo escuchaba a Paramore, no era propiamente heavy metal, pero si era
rock alternativo, pero bueno al principio no les creí mucho y así lo deje, solo le conté a mis dos amigas, con las
que me juntaba en los recreos. Para mi mala suerte el lunes fue 14 de Febrero, me sentía pésimo, no quería
comer y mucho menos escuchar otra estúpida cosa sobre el amor, para mí eso ya no existía, me habían roto el
corazón y no tenía esperanzas de que se pudiera remediar lo que me habían hecho. Cuando aún éramos novios,
yo pensaba en pasar el 14 de Febrero junto a él, ir al cine o algo por el estilo; pero desde ese pequeño asunto, mi
nube se desvaneció. En la tarde me la pase escuchando canciones de desamor y llore por un buen rato, alrededor
de unas 2 o 3 horas. Mis amigas me decían: ¿Realmente el valía tanto la pena como para merecer tus lágrimas?
Otros me decían que hay más hombres en el mundo, que había personas que realmente me querían y que no me
harían sufrir de esa manera, como yo estaba tan triste solo decía que si pero por dentro sabía que era mentira;
¿Quién se fijaría en mí? Estaba gorda, tenía espinillas, mi cabello era un desastre, mis ojos eran comunes y
corrientes, no era muy alta, no tenía cintura, no tenía ni una sola curva. Era un adefesio, tal vez exageraba pero
de esa manera me sentía, no me gustaba como era en el espejo, veía a alguien que no se parecía a esa chica que
daría hasta su vida por conquistar a ese chico que tanto amaba, y que logro tener pero tan poco duro su suerte
que en dos semanas lo perdió. Ya no me sentía bien conmigo misma, unos decían que necesitaba ver a un
psicólogo, pero la verdad es que lo que realmente necesitaba y sigo necesitando es a alguien que realmente me
quiera por lo que realmente soy, no por lo exterior, lo superficial ni por lo material, sino por mi interior, mis
gustos, mi personalidad y ese tipo de cosas. Yo creo que nadie es realmente tan humano como para ver el
interior de las personas y enamorarse del interior y no del exterior. Aun así sigo sin perder las esperanzas de que
algún día alguien se me declare y sea muy feliz. Aunque eso solo ocurra en los cuentos de hadas espero que
alguna vez me llegue a enamorar de verdad y que esa persona también se enamore de mi personalidad, más que
nada. Mi interior en sí, es algo complicado; soy demasiado sentimental, cuando realmente me enamoro suelo ser
un poco cursi y cosas por el estilo. Bueno… regresando al tema, después me empecé a juntar más con una chica
que pensé que sería como una hermana, hablábamos mucho, con la mirada sabíamos lo que queríamos decir, la
apreciaba de verdad, la ayudaba a estudiar y cosas así. El chico en sí, era muy serio, no hablaba casi nada con
él. Empecé a hablar mucho con un chico que consideraba mi amigo aunque después sus sentimientos se
voltearan y me hicieran sentir incómoda en algunas situaciones, pero esa es otra historia.

Una amiga me hizo prometerle que si alguien me la cantaba (así lo dijo ella) le dijera que si porque no
soportaba verme sufrir, se sentía culpable porque ella tenía novio y yo no, aunque realmente eso no me hacía
sentir mal; yo me sentí mal porque ella sufriera por mi culpa así que le dije que estaba bien, aunque no prometía
nada, ya que no quería un novio en estos momentos, esa herida aun me dolía, y mucho. Aunque todos dijeran
que necesitaba de un novio para poder volver a ser cien por ciento feliz yo no les creía, yo pienso que lo que
necesito es un descanso de todo tipo de sufrimiento. Tiempo después realmente me sentía sola, deprimida, triste
experimentaba todo tipo de tristeza a la vez. Intente quitarme la vida para no tener que seguir sufriendo, pero no
tuve la suficiente fuerza de voluntad necesaria como para suicidarme. Decidí hablar con un amigo y me dijo que
me desahogara con él. Desde ese momento de debilidad que tuve busque ayuda en un amigo y él fue el que me
indujo en el rock, me dijo que empezara con rock no muy heavy como kiss o mago de öz, y me paso canciones
de aerosmith, bon jovi, journey, pero me dijo que primero escuchara de kiss y mago de öz. Me empezó a
interesar el rock y empecé a escuchar Guns n roses, busque más canciones de Green Day, Iron Maiden,
Metallica, escuche más de Queen, etc. Sentía que esos grupos casi no utilizaban temas de amor, o al menos no
se reflejaban mucho en la letra de las canciones, y no me hacían llorar, a veces me daban ganas de destruir cosas
y así. Me podía concentrar más fácil en las clases y mis notas empezaron a ser mejores, era como si hubiera
encontrado la medicina perfecta para mi depresión, al fin podía ser feliz, sentirme bien conmigo misma, volver
a valorarme de la misma manera que lo hacía antes, empecé a hacer ejercicio para bajar de peso. Pero de pronto
se presentó un nuevo problema, sentía que estaba muy gorda, entre en una pequeña depresión, no comía mucho,
lloraba sin razón alguna, insistía en usar ropa holgada. Tiempo después baje un poco de peso y me sentí mejor y
todo volvió a la normalidad.

Quizás recibía mucha presión por parte de mi mamá en cuanto a las calificaciones, ella no quiere que saque
ochos y mucho menos sietes; me tenía que preocupar por muchas cosas pero al menos podía ser algo feliz.

Después la maestra hizo algo por lo que aún le agradezco, ¡nos cambió de lugar! Me toco cerca, demasiado
cerca para ser sincera, de mis amigas, delante de mi quedo un chico que me cae bien y es gracioso, pero detrás
de mí quedo un chico demasiado gracioso y divertido, divergracioso mejor dicho. Todo era diferente, no
hacíamos casi nada de la clase porque siempre nos estábamos riendo o estábamos cantando, y aun así, ese mes
fue en el que saque mejores calificaciones. Él es uno de los chicos más graciosos que conozco. A este pequeño
grupo lo llamamos “Cuadro” por ser cuatros personas, acomodadas en forma de cuadros y simplemente porque
nos llevábamos bien. Era como si mi mundo, que era a blanco y negro, por decirlo así, se hubiera llenado de
colores, diversión, risas, amistad y un sinfín de cosas que tardaría mucho en escribir. Ellos saben que han sido
personas muy importantes porque aunque les contara las cosas una y otra y otra y otra y otra vez me
escuchaban.

Después nos cambiaron una vez más de lugar y fue terrible, me toco alrededor de personas con las que casi no
hablaba. Pero aun así trate de adaptarme lo mejor que pude, cuando una vez más pensé que todo estaba bien, un
nuevo problema se presentó.

Una persona a la que yo consideraba una amiga me humillo de una manera horrible, ni siquiera se atrevieron
ella y su mejor amiga a decírmelo en la cara, todo eso fue publicado en una red social, en ese texto se burlaban
de mi aspecto físico, por así decirlo, de la manera en que modifico MIS fotografías y las de personas que me
piden que se las modifique, que me empezó a gustar el rock de una manera diferente a la que realmente me
empezó a gustar, de antisocial y de otras cosas que no me gustaría mencionar solo para no prestarle tanta
atención a comentarios estúpidos, lo que más me agrada de que hayan hecho eso es que, me dedican su tiempo,
en lugar de hacer otras cosas, se fijan en cada cosa que hago, por eso me sentí identificada con esta frase: “Love
your haters, they are your biggest fans because they keep on wasting time just to watch your every wrong
move” que en español es: “Ama a tus enemigos, que son sus mayores fans, ya que siguen perdiendo el tiempo
sólo para ver cada error que cometes” es como si la persona que puso esto en un tweet supiera exactamente por
la situación en la que estoy pasando y la pusiera para ver que no debía de hacerles caso, obvio que lo primero
que hice fue darle re-tweet. Al día siguiente una de ellas me pidió perdón y la perdona con la condición de que
no me volviera a hacer lo mismo, pero pues no se puede volver a confiar plenamente en alguien que te
decepciona.

No sé si las personas lo hacen adrede o lo hacen sin pensar, pero últimamente siento que todas las personas la
traen en contra mía y eso me hace sentir muy mal porque yo no les eh hecho nada, o al menos no que yo sepa,
muchos dicen que es por envidia, otros dicen que es porque critican a todos, otros dicen que son sentimientos
resentidos, yo digo que es porque simplemente no me valoran como amiga, que todo lo que yo trato de hacer
por caerle bien a las personas es en vano, porque siempre alguien me decepciona y me hace volver a entrar en
depresión, una vez más intente ahorcarme pero por falta de fuerza de voluntad, no pude cumplir mi acometido,
eso y porque por poco y mi hermana me ve tratando de suicidarme, no quiero que mi familia se preocupe por
mí, yo sé que a lo mejor lo que hago es una estupidez, y sé que ellos tienen sus propios problemas y se tienen
que enfocar y preocupar en ellos como para darles más, así que yo trato de resolverlos por mí misma. Espero
que la fuerza de voluntad siempre sea débil, porque no me perdonaría hacerme daño. Y mucho menos que me
llegara a suicidar, creo que tengo que encontrar otra manera de superar mis depresiones y mis problemas,
porque quiero sobrevivir a esta etapa y no seguir sufriendo por un estúpido amor de dos semanas que realmente
marco mi vida y que podría hacer que esta llegara a su fin.

Hace poco hable con mi ex, lo que me hizo recordar cosas que pasamos juntos, también me acorde de cuando
cortamos, recuerdo perfectamente que para curar ese intenso dolor, agarre todas las cartas que él me había dado,
unas cartas que nunca le alcance entregar y las queme una a una, mientras yo lloraba con desesperación, al fin
me sentía muy mal pero ahogue mis penas escribiendo canciones de desamor que después quemaba o rompía.
Muchos pueden pensar que fue algo loco o algo estúpido, pero para mí fue algo que me hiso sentir un poco
mejor.

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