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f? “e Esta obra, y un buen surtido f)


POESIAS
e^as» se hallarán en la libre- ¿J
I ría de Tejada, calle de Carretas I D E
íj trente la imprenta Real. ij
«''<S&€CQ<S5>cCc^^&^&c0c<^c(¡c<S(?o
A N A C R E O N,
TEÓCRITO, BION Y MOSCO,

TRADUCIDAS DE GRIEGO

POR

Z>. JOSEPFI ANTONIO CONDE,

Madrid
EN LA OFICINA DE D. BENITO CANO

ano de mdccxcvi.

• Se ballaràn en la Libreria .de aiionso , calle de la


Concedefon»
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svjsaód

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7

Fue Anacreon el mas florido ingenio


de su edad. Platón le llama Sabio , y toda
la antigüedad Poeta dulcísimo : sus opinio­
nes son las mas felices que ha producido la
imaginación de un mortal.
En la Colección de Odas que nos que­
dan con su nombre , las menos son de
■ aquel bellísimo ingenio : hay en ella mu­
chas escritas á pesar de Apolo , y sin el fa­
vor de las Musas. Es bien fácil, según la
idea que tenemos de Anacreon y del ca­
rácter de sus poesías, conocer quales no le
pertenecen; pero no lo es tanto saber qua­
les sean verdaderamente suyas.
El buen gusto de los Griegos, y su
deseo de imitar las celebradas gracias de
Aií ACREOtt, junto con la halagüeña y fácil
, filosofía que hay en este género de com­
posiciones amorosas y bachicas, es la cau­
sa de que entre las Anacreónticas haya al-
a4
i

8
9
gunas de malos Poetas , y tal vez de bue­
como naturales á la frescura de la edad
nos.
mas dulce y apacible.
Mas á pesar del tiempo , de los Lite­
No quiero decir nada del mérito de
ratos perdidos por parecer Poetas, y de mi traducción , ni temo el juicio de los
la turba de miserables Copiantes y Crí­
inteligentes en ambas lenguas: también es
ticos , se halla en esta Colección un pe-?
fuera del caso referir las muchas traduc­
queño , pero precioso resto de las bellf- ciones que se han hecho en Italia , Fran­
simas composiciones de! Poeta de Teyo,
cia é Inglaterra , y presentar sus defec­
que fué las delicias de la culta Gre­
tos , y los infinitos dé la miserable de
cia.
nuestro Cisne de Naxerilla , solo un es­
Esciioió Anacreon de amores y de
túpido tan ignorante del Griego , como
vino en dialecto jónico , de los mas an­ de las reglas del buen gusto, puede con­
tiguos y graciosos lenguages de Grecia; tentarse de su mala traducción-; fuera de
pero con singular escogimiento de las vo­ que yo no pretendo alzarme sobre las
ces mas bellas , quiero decir , mas dul­
ruinas de otros.
ces y mas expresivas de la lengua : su
Presenta mi traducción muchos frag­
versificación es muy delicada, muy fá­
mentos , que no han traducido los Intér­
cil y armoniosa ; mas todas estas gra­
pretes de este Poeta , y son , á mi pa­
cias desaparecen en las mejores traduc-
recer , muy considerables, y dignos de es­
cíones.
tar al lado de las otras composiciones, que
Esta que ofrezco al Público se de­
acreditan al festivo Anacreon.
be á los años mas deliciosos de mi vida,
Seguí en mi traducción el texto Grie­
quando estas ligerezas y distracciones son
go de Morel , y Estéfano , atendí algu­
tan propias del descuido de los pocos años,
nas veces las correcciones del célebre C.
í
de Pauw , y siempre las reglas del buen POESÍAS
gusto , según el genio de la Poesía Grie­
D E
ga , y las ideas del carácter propio de las
Canciones de Anacreon.
A NA CK X O X
Nota. Oda I.

La estrellita que se halla en algunos


Y„ cantara de Cadmo

versos , denota que allí he seguido en el Los Atridas dixera,


Griego una lección diferente de la vulgar. Mas suenan amor solo
De mi laúd las cuerdas.
Mudé toda mi lyra,
La orné de cuerdas nuevas,
Y á cantar comenzaba
Las Hercúleas contiendas;
Pero mi dulce lyra,
Amor , amor vocea:
Héroes, á Dios, ya siempre
De mi lyra las cuerdas
Solo del amor cantan
Las dulces cantinelas.
POESIAS

Oda II, BE ANACBjEON. 13


Naturaleza al toro
Oda III.
Los cuernos quiso darle,
Duros pies al caballo En las nocturnas horas
Quando el Oso voltea
Con que la tierra bate,
Del Boote á la mano,
A las tímidas liebres
Y ya la dulce fuerza
Correr al viento iguales,
Del apacible sueño
Al león animoso
A los hombres recrea
Los dientes espantables,
Del trabajo domados,
El nadar á los peces,
Entonces Amor llega,
El volar á las aves,
A mis umbrales para,
Y á los hombres prudencia, •
Y á las puertas golpea:
Y el ánimo constante:
Quién va, dixe, quién llama?
Y á las mugeres nada?
Quién mi reposo altera?
Lo que las dio no sabes?
Al punto me responde,
Belleza , la belleza,
Y con voz halagüeña
Don divino y amable,
Me dice el Amor : abre,
Mas que lanza y adarga,
Soy un Niño , no temas;
Y todas armas vale,
Voy perdido , y mojado,
Que el fuego y el acero
La luna no clarea,
Las bellas vencer saben»
Y la espantosa noche
BE ANACREON.
l4 MESIAS En medio de los pechos
Es atezada y negra. Penetrante y ligera:
Compadecíale oyendo El saltaba y reía
Estas súplicas tiernas: A carcajada suelta:
Encendí luz , y abríle Alégrate conmigo,
Al instante la puerta, Decía , que la cuerda
Y catóme allí un Niño Está firme , y el arco
Con todo tren de guerra. Tiene toda su fuerza;
Traía el rapazuelo Mas temo de tu pecho
Arco de tirar flechas, Las amorosas penas.
Alas también y aljaba
De las de Lycia ó Creta. Oda IV.
Entró , púsose al fuego, Sobre yerbas de loto,
Y yo sus manos tiernas
Sobre los tiernos myrtos
Enxugué con las mías, Echado , beber quiero,
Y sus doradas trenzas.
Y ciñendo el vestido,
Después de calentarse
Y con cendal al cuello,
Dice , vamos por prueba
Amor me sirva el vino,
A ver si el arco mío Porque la vida corre
Y su mojada cuerda Con presuroso giro,
Es de provecho: tira, Qual la rueda del carro
y clávame una flecha
POESIAS
SK ANACRKOK.
Rápido y fugitivo,
Y en breve yaceremos Oda v.
De huesos desunidos
Las amorosas rosas
Ce niza y leve polvo
Con el vino mezclemos,
A fuerza del destino.
Las rosas de hojas bellas
Parte de la IV. A las sienes ciñendo,
Y bebamos alegres
De bálsamos preciosos
Dulcemente risueños.
Qué sirve ungir las piedras
Derramarlos en vano
O rosa , flor preciosa,
De primavera esmero,
Sobre la fría tierra ?
Delicia de los Dioses!
Mas vale mientras vivo
De .Cypria el rapazuelo
De suaves' esencias
A las festivas danzas
Ungirme , y coronarme
De las Gracias viniendo,
De rosas' la cabeza.
Ciñe su hermosa frente
Amor , lejos cuidados:
Y dorados cabellos
Trae al punto mi bella,
Con guirnaldas de rosa.
Antes que de los muertos
Cíñeme tú , Lyeo,
Las negras danzas vea.
Coróname de rosas,
Lirizaré. en tu templo,
L con la hermosa mía
i
18 POESIA»
BE ANACRJSON.
La de gracioso seno,
El de doradas trenzas
Con enredados lazos
Amor , la bella Cypria,
Bellas danzas haremos.
Y el alegre Lyeo
Apacibles asistan
Oda VI.
Al festín bullicioso
La corona de rosas
Que á los viejos aviva.
A las sienes ceñida,
Bebamos dulcemente Oda VII.
Con apacible risa:
Amor me provocaba
Y la doncella hermosa
Con vara de jacinto
Con el son de la lyra
A correr , tristemente
Sus bellos pies moviendo
Seguia yo el camino:
La alegre danza siga,
Pasamos eminencias,
Los resonantes tyrsos
Rocas y precipicios,
Que blandamente agitan
Ya por ásperas selvas,
La yedra entrelazada, Ya derrumbados ríos:
Y con mano divina Mientras así vagamos,
Tañe el laúd sonoro, Un áspid atrevido
Y sus cuerdas festivas El corazón me pasa
Aquel gracioso Joven Con su veneno activo:
Con sus voces anima: Caime , y quando daba
ba
30 POESIAS
DE ANACREON-. 41
El último suspiro, Mas que el Dios de las vides
Amor sus' blandas alas Denuestos me dixéron,
Batiendo compasivo Y con picantes dichos
En torno de mi frente, Burlaban de mis juegos
De este modo me dixo: Con aquellas hermosas;
Vaya , tú amar no puedes, Quíselas dar un beso,
Tú no puedes , amigo. Mas disperté ,, y al punto
Todas desparecieron:
Oda VIII. Quedéme triste y solo,

En purpúreas alfombras Con" ardiente deseo


Una noche durmiendo De procurar mil veces
Alegre con las copas Tan delicioso 'sueño.
Del placiente Lyeo,
Oda IX.
A mí me parecía
Que en deliciosos juegos Amable palomilla,
Con hermosas doncellas De dó , de dónde vuelas?
Andaba yo corriendo Por qué los ayres hiendes
Con ligereza tanta, Con tanta ligereza?
Que no tocaba al sueloi ■ Quán preciosos aromas

Allí bellos donceles, Respiras, y goteas!

Bellos y placenteros Pues á tí qué te importa?

'--4
POESIAS BE ANACREON. «3
De Anacreon soy sierva, Si su copa me ofrece
Que á Batylo me envía, Para que vino beba,
A aquel cuya belleza Después que ya he bebido
A todos tiraniza: Doy mil saltos y vueltas,
La hermosa Cytherea Y extendiendo mis alas
Me vendió recibiendo Le cubro la cabeza;
Por mí una cantinela: A dormir me reclino
Hora llevo esta carta, Sobre las dulces cuerdas
Mírala de su letra; * De su dorada lyra:
Y al ^ármela me ha dicho Todo lo sabes, ea;
Que ya no seré sierva. Me voy , que ya me hiciste
La libertad me ofrece, Qual codorniz parlera.
Qual si yo la quisiera;
Siempre seré su esclava Oda X.
Aunque me dexe suelta. ‘ Un Cupido de cera,
Porque el volar qué sirve Cerca de mí en la plaza,
Por montes y florestas? Cierjo joven un dia
Ni sentarme en los bosques Malvaratar pensaba:
Y floridas praderas ? Díxele, quinto quieres ?
Si con su misma mano Lo que te dé la gana,
De comer me presenta, En dórico me dixo,
¿4
*4 POESIAS DE ANACREON. «í
Que no quiero ganancia; Si están , o si se han ido
Esta no es obra mia, No sé; tan solo entiendo
Porque no ignores nada, Que qual á viejo importa
A mí no me acomoda Gozar de blandos juegos,
Este huésped en casa: Muy mas porque la muerte
Es un antojadizo, Cercana la tenemos.
Quiere quanto le agrada.
Dame el hermoso , dixe, Oda XII.
Ahí tienes una dragma. Parlera golondrina,
Y tú, Amorcillo , ahora Qué pena, qué castigo
Mi córazon inflama, Quieres que .te dé ahora?
Porque si no deshecho Que cowagudos filos
Quedarás en las llamas. Corte tus leves alas,
O bien como el antiguo
V Oda XI. s.
Thereo despedace
Dícenmelas muchachas, Tu lengua encrudecido?
Viejo eres, Anacreon, Porque del dulce sueño
Toma el espejo, y mira Delicioso y divino,
Do voló lu cabello, Con matutino canto
Que tu cabeza es calva: Robas á mi Batylo,
Ajas yo no cuido de esp,
BE ANACREON.
POESIAS

Oda XIII.
Oda XIV-
Dicen que enfurecido
Atys, en las florestas Amor así lo quiere,
Y en los montes, clamaba Yo quiero amar, yo quiero:
A Cybeles la bella: Amor me persuadía,
Y que los que del claro Su poderoso imperio,
En la ribera amena, Osado despreciaba
Sonoras aguas beben Mi vario pensamiento:
De la fuente Febea Mas el Dios irritado
De Apolo , que corona El arco toma luego,
De laurel su cabeza,’ Y su dorada aljaba,
Con un furor sagrado Y á combate sangriento
Inspirados vocean: Me desafia , y salgo
Mas yo de Baco lleno, Con espaldar y peto,
Y de aromas Sabeas, Armado como Achyles

Y de dulces delicias Con mi lanzon de acero,

Con mi adorada bella, Y á singular batalla

Quiero, quiero ser loco; Voy con el Rapazuelo:

Su gracia y gentileza El tiraba , yo huia;

Suavemente inspiran Desatinado y fiero,


Hallándose sin dardos,
El furor que me lleva.
4? POESIAS ¿9
BE ANACREON,
Lánzase acia mi pecho
En vez de dardo, y pasa Oda XVI.
Del corazón al centro: Con levantado tono
Caíme desmayado. Tú dices las de Tebas,'
A qué la lanza y peto ? El otro las batallas
Qué me defiendo fuera, De los'Troyanos cuenta,
Si la batalla es dentro ? Y yo mis cautiverios
Y amorosas peleas.
Oda XV.
Los de á pie, ni á caballo,
A mí nada me importa Ni las naves ligeras,
Gyges, Rey de los Sardos, A mí no me perdieron;
Nada me mueve el oro, Mas cierta tropa nueva,
Ni envidio á los Tyranos: Desde unos bellos ojos
Solo cuido de ungüentos Una mirada tierna.
Estar todo bañado,
Y de purpúreas rosas Oda XVII.
Guirnaldas entrelazo, Fabrícame, Vulcano,
Y mis sienes corono: Torneando la plata,
Lo de hoy me da cuidado, Armadura? no, cierto,
Lo por venir quién sabe ? Qué á mí con las batallas?
Ese es cuidado vano. Mas una bella copa
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POESIAS'
de anacrbon, S»
30
Capaz , y bien labrada, Oda XVIII.
Y esculpirás en ella
La dulce primavera
No el carro , ni las claras
En una bella copa, *
Estrellas, ni el tristoso
Sabio artífice, grava,
Orion que amenaza,
Y las suaves horas
Qué á mi con las Pléyades
De la estación florida
Ni luceros del alva?
En que nacen las rosas,
Mas una vid florida *
Extendiendo la plata
De racimos cargada, *
Me harás mas deliciosa
Haz un lagar de vino, *
La divinal bebida;
Y en él también me grava
Mas en ella no pongas
Hermosos pisadores,
Los horrorosos ritos,
Eos amores de Pafia,
Ni terribles historias:
Al alegre Lyeo,
Pon al hijo de Jove,
Y al niño Amor retrata,
Al Dios que me alboroza,
Y á mi dulce Batylo
Y ministrando el vino
Que de vendimias anda.
Cyterea la hermosa,
Que con los Hymeneos
Es su delicia toda, ' ,
Los Amorcillos graba,
32 POESIAS BE ANACREON,
33
Que sin armas retozan
Oda XX.
Con las festivas Gracias
Baxo la víd frondosa En un tiempo mudóse
De floridos racimos, En las playas de Frigia
Y pon á la redonda, La de Tántalo empiedra,
Si allí no danza Febo, Y de Pandion la hija,
La Juventud hermosa. Con súbita mudanza
Voló qual avecilla.
Oda XIX. Ay mí! Si yo pudiese,
La negra tierra bebe, Amada Ninfa mia,
Beben las plantas de ella, El espejo ser hora
El mar bebe los rios, * Donde,siempre te miras:
Y al mar la luz febea, Ay si el adorno fuera
Al mismo sol la luna De que tú vas vestida:
Los bellos rayos lleva: El agua ser quisiera
Dexadme en paz , amigos, La que te baña y limpia:
Que beba quauto quiera. Ungüentó ser quisiera,
Que tal vez te ungiría;
-
1
O la dichosa vanda
Que al pecho traes ceñida;
O joyel para el cuello,
g

SWES
34 POESIAS UE ANACREOM,

Y calzado me haría, Tesoros y riquezas


Que al menos me pisara Ansioso procurara;
La dulce mi enemiga. Y quando ya la negra
Muerte se me llegara,
Oda XXI.
Los tomara , y se fuera:
Hermosas, dadme, dadme Mas si comprar la vida
La gran copa de vino, Al mortal se le niega,
Dádmela bien rasada, Por qué suspiro en vano
Porque >de sed suspiro. Qué sirven mis querellas
El calor me-sofoca Si fuerza del destino
De lo que ya he bebido; * A la muerte me lleva 2
Y dadme nuevas flores, Inútil es el oro;
Que todas las que ciño Y muy mas aprovecha
A mi abrasada frente Bebiendo dulce vino
Al punto las marchito, En deliciosas fiestas
Pues amorosos fuegos * Pasar con los amigos,
Esconde el pecho mió. Y acariciar doncellas
Oda XXII. En dulces, sacrificios
Si Plutón por el oro * A Venus Cyterea,
La,vida-concediera A la risueña Pafia,
A los tristes mortales, Madre de las ternezas.
39 ¡POESIAS
JJE ANACREON, 37
El que ahora seguir debo..
Oda XXIII.
Nada teneis conmigo,
A la sombra , Batylo,
Cuidados, léjos, léjos:
Reclínate: quán grata,
Antes que el fin me llegue
Y quán bella es la sombra
Jugar y reir quiero,
De la fresca enramada!
Y mezclarme en las danzas
Las blandas hojas mueve
Del alegre Lyeo.
Del céfiro agitada
Con un suave estruendo Oda XXV.
Que dulcemente encanta,
Quando yo bebo vino
Y cerca se desliza
Se duermen los cuidados;
Una dulce fontana:
Qué á mí de los afanes?
De tan feliz manida
Qué á mí de los trabajos?
Quién viéndola se pasa?
De qué me sirven penas,
Y estar siempre dudando?
Oda XXIV.
Al fin , aunque no quiera
Después que soy nacido
Lie de morir: bebamos,
Mortal, y voy corriendo
Bebamos, ea, el vino
La senda de la vida,
Del apacible Baco,
Sé solamente el tiempo
Que al tiempo que bebemos
Que pasé, pero ignoro Se duermen los cuidados.
í i
c3
POESIAS
BE ANACREON. 39

Oda XXVI. Oda XXVII.


Quando el alegre Baco
Con apacible frente El hijo celebrado
De mí se enseñorea, Del poderoso Jove,
Y á mi cabeza viene, El apacible Baco,
Paréceme que tengo El alivio del hombre,
De Creso los haberes; Que disipa cuidados
Comienzo un dulce canto, Y mitiga dolores;
Y agrádame tenderme Quando con dulce paso
De yedra coronado, Todos mis miembros corre,
Y mi ánimo prudente Y al corazón me llega
Se eleva sobre todo, La beodez dispone:
Y lo desprecia y vence. Luego á danzar me enseña;
Beber es mi deseo: Me deleytan entonces
Armate tú si quieres; Muy mas que la suave
Venga la copa, niño, Beodez las canciones,
Que mas vale caerse El bullicioso estruendo
Beodo, que no muerto: Del bayle , y de las voces,
Quién será que lo niegue ? Y la rosada Venus
Sus deliciosos dones
c4
4® • POESIAS DE ÁNACKÉOM. 4*
Me ofrece , y encantado Con división muy tenue.
Danzar es mis amores. Sus bellísimos ojos
Amorosos vehementes
Oda XXVIII.
Harás de vivo fuego,
Pintor el mas famoso Qual Minerva celestes,
Que el arte Rodia tiene, IR Con humidad brillante
Qual yo to la pintare !Í£-1R Qual la bella Cytere.
Retratarás mi ausente: t La nariz y mesillas
Primero sus cabellos Como cándida leche,
Deslazados y leves Y de purpúrea rosa
Con suave negrura, Matizada su nieve.
Y si la cera puede Ib f Sus labios, ¡ ay! sus labios
De preciosas esencias djsJ Persuasivos, y ardientes
Perfumados se muestren: pul Como coral y fuego,
Graciosas las mexillas, ..'f Que con ellos me vence,
Nacarada la frente, Y al amoroso beso
Y con purpúreas flores Oul - Inflaman dulcemente.
Sus enrizadas sienes: J 13 Harásla bella toda,
Señalarás sus cejas, Y las Gracias revuelen
Mas no las desordenes, En torno de su cuello,
Ni juntas ni apartadas, Que al alabastro excede.
4« /, POESIAS
DE ANACREON. 43
De púrpura el vestido, Con extremada gracia.
Tan delicado y leve, Harás sus ojos negros, •
Que su beldad divina Llenos de dulce llama,
Descubra y trasparente. > Vivaces, expresivos,
Acabóse, la veo, Que rindan sus miradas;
Que casi hablarme quiere. La gravedad de Marte,
La dulzura de Paña,
Oda XXIX.
Amorosos, y graves,
Qual yo te lo dixere Que inspiren la esperanza,
A Batylo retrata: Y cuidosos temores.
Harás resplandecientes Las mexillas nevadas
Sus trenzas, rociadas Como purpúreas rosas,
De preciosas esencias; Y/jual tiernas manzanas.
Que en ellas sobresalga Suave y blando bozo
En cambiante negrura Parezca ya en su barba.
Un viso de dorada, Sea su color todo
Deslazadas las dexa El que el pudor retrata.
Qual le ondean y vagan tf Sus labios, y su boca,
Por el hermoso cuello. ¡ Ay! yo no sé si alcanza
Su frente delicada Mi expresión á decirla,
Bellas cejas adornen O tú, mano , á copiarla;
BE ANACREON. 45
Pídeme lo que quieras
Si la pintura sacas,
Haciendo que de Apolo
El mi Batylo salga:
Y luego de Batylo
Con ligera mudanza
Forjarás un Apolo
Quando á Samos te vayas.

Oda XXX.

Las Musas á Cupido


Pusiéron en prisiones,
Diéronlo á la hermosura
Enlazado con flores.
Ahora Cyterea
Le busca, y lleva dones
Por rescatar al Niño
Tyrano de los hombres.
No se irá, quedaráse,
Aunque el rescate logre,
A esclavitud tan dulce
’ í'WW
46 POESIAS beañacreon. 47
Acostumbrado entonces. Ayax con sus furores
Esclavo de una hermosa, En los campos de Troya
Quién la cadena rompe ? Vibraba el fuerte escudo
Y la su espada Hectora;
Oda XXXI.
Mas yo con este vaso,
Déxame por los Dioses Coronado de rosas,
Beber, beber la copa Y sin espada ni arco,
Quiero, quiero furores. Furores quiero ahora.
Furioso fué Alcmeonta,
Y el apacible Orestes; Oda XXXII.
Ambos sus madres propias Si de frondosos bosques,
De la vida privaron. Y frescas arboledas
Jamás haré tal cosa; Puedes contar las hojas,
Pero quiero ser loco: Y del mar las arenas;
Bebiendo dulces copas De mis dulces amores
De vino roxo y claro, Tú llevarás la cuenta.
Mi furia es deliciosa. Primero veinte amores
El furibundo Alcides Has de poner de Athenas,
De Ifito el arco toma, Y además otros quince:
Y la horrísona aljaba, De la lasciva tierra
y tembló Thebas toda. De Corinto una tropa,
Z .

i
POESIAS BE ANACREON, 4S>
De Corinto la amena,
Oda XXXIII.
La dé la noble Acaya ■..■.'i cJ; i
Estanza de las bellas: Todos los años vienes,
De Lesbos, y de Jonia, Amable golondrina,,
País de violetas; En dulce primavera,
De Rodas, y de Caria Y en el verano anidas:
Diez mil amores sean. Luego eri áspero invierno
Qué dices ? Pon amores, Te ocultas fugitiva
Que faltan de la cuenta En las cañas de Mentís,> ,
Los amores de Syria, Del Nilo.á las orillas:
Los de Canobe y Creta, Mas el amor ardiente
Allí dó en las ciudades Siempre en mi pecho ;ánida¿
El crudo amor impera. Quando un amor hoya
A qué referir quieres El otro plumas cria;:
Los que Cádiz encierra? Un otro es pequeñnelc^.
Los del pais Circaso, Y en mis oídos gira ;>
Los Indos, y los Persas, De tiernos piadores
Que, todos son amores Confusa algarabía.
Que mi alma señorean. Crian á los pequeños
Los que tienen alitas,
Y luego estos crecidos
SO POESIAS DE ANACREON.

Al punto fecundizan. .. v í ‘ 2 ’' ’ ó. -'y. I

Y qué será el remedio? Oda XXXV.


Porque las fuerzas mias Paréceme ser Jove
Resistir ya no pueden * Este gallardo toro,
A tanto amor vencidas. Que la Sydonia hermosa
» j Lleva en sus anchos lomos:
Oda XXXIV.
El bravo mar traspasa,
No porqué ahora viste Y el ímpetu espumoso
Mi cana cabellera De las marinas olas
Huyas de mí, ni burles Cortando va: ni un otro
Mis amorosas muestras, Sacado del rebaño
Porque la flor preciosa Así pasara el Ponto,
Tienes de la belleza, Sino qual este fuera
Y mira en las guirnaldas Algún divino toro- - x
Quán galanas campean • r• J 3 -''e, ’ Q2 1 £ í; ’ . ¿EL
Con los candidos -lirios Oda XXXVI.
,T ' ■ ;' A X -
Las rosas entrepuestas. Qué me enseñas las leyes,
Y las molestas trabas
De sabios Oradores,
,’.;5i,s i¡- • ,j< í Si no aprovechan nada?
acbias'!'. . o f Mas á beber me enseña
v
d 2
ÍOESIAJ
J5B ANACREÓN.
Las espumosas tazas
De variadas flores
Del suave Lyeo,
Y de purpúreas rosas:
\ Alivio de las almas:
Tranquilidad serena
Enséñame los juegos
Del br?vo mar las ondas.
De la risueña Paña,
Los ansarones nadan,
Porque ya mi cabeza
Y la grulla retorna:
Se corona de canas:
Con mas templado rayo
Echa vino , muchacho,
El sol los campos dora;
Témplamelo con agua,
De las espesas nubes
Mi mente refocila,
Se disipan las sombras,
La vida breve pasa;
Y ya de, los mortales
En horrorosa tumba
Se descubren las obras:
Me cubrirás, mañana,
Florecen las olivas,
Y en estando ya muerto
Frutos la tierra brota,
El desear se acaba.
Tallecen los parrales,
Qda XXXVII. Las vides echan hoja,
< * fc' -
Y entre frondosos ramos
Al tiempo que parecen
Los racimos asoman.
Las apacibles horas
I)e dulce primavera,
Las Gracias se coronan
- L
54 ROESIAS BE ANACREON, 55
■ ífl
Oda XXXVIII, Oda XXXIX.

La vejez me acompaña, Quando yo bebo vino


Viejo soy , no lo niego; Mi corazón se alegra,
Mas si beber conviene, Y con suave canto
Mas que los mozos bebo: A las Musas celebra:
Si se trata de danza, Quando yo bebo vino
La botella es mi cetro, ' Los cuidados me vuelan,
Que no hay tyrso que valga’ Y van mis pesadumbres
Tú, si por mal deseo Como el viento ligeras.
Quieres crudas batallas, ’ Quando yo bebo vino
Armate , y pugna luego. De Lyeo en las fiestas
Dame la copa, niño, £ Con las fragrantés áuras *
Y venga un vaso lleno Y floridas esencias,
De dulce vino tinto, Beodez deliciosa
Que de verdad soy viejo; Mi corazón recrea:
Y danzando entre mozos * Con olorosas flores
Imitaré á Sileno. Hago guirnaldas frescas,
Que mis trenzas enlazan
Y ciñen mi cabeza.
Con apacible tono
d4
ÍOESIAS BK ANÁCKBON. 57
Canto la vida buena •' Oda X L.
Del ánimo tranquilo. Entre purpúreas rosas
De preciosas esencias Una abeja dormía;
Mis miembros rociando, El tierno Amor no viola,
Celebro á Cyterea, Y atrevida le pica:
Y tengo en dulces lazos Un dedo le traspasa
Alguna joven bella: De su mano divina.
Quando yo bebo vino, Gritando corre , y vuela
Y con las copas llenas Acia la bella Cypria:
Mi mente suavizo, Yo muero, madre, dice,
Me deley tan las fiestas, Yo muero , madre mia;
Y alegres sacrificios Pequeña sierpe alada
De las tiernas doncellas: Me dio mortal herida,
Quando yo bebo vino, La que llaman abeja
La mi ganancia cierta, Los que el campo cultivan.
La que saldré llevando Ella dice : si tanto
Quando qual todos muera. Te duele y acuita
El picar de la abeja;
Dime, Amor, por tu vida,
Qué sentirá el cuitado
A quien tus flechas tiras?

s? poesía r BE ANACREOW. ¿9

Bebamos, pues, bebamos,


Oda XLI.
■ ¿ '0'í ¿í Tff.'-:- (j/, Y en espumosas copas
Alegres y gozosos Embriaguemos cuidados.
Dulce vino bebamos, Qué utilidad te viene
Y en festivos cantares De los lamentos vanos?
Celebiemos á Baco, Lo por venir quién sabe ?
Al inventor.de! bayle, Pues al mortal no es dado
Al amante del canto, El saber de su vida
Del niño amor amigo, El destinado plazo.
Y de Venus amado. Por eso yo, por eso
De beodez amable Bebiendo dulces vasos,
Al padre soberano Quiero danzas festivas,
De la risa.y placeres, Y de esencias bañado,
Que disipa cuidados, Con hermosas doncellas
Qne el dolor adormece; Trabar lascivos lazos.
Y quando el dulce vaso Tome pesar quien quiera,
Los jóvenes ofrecen Aflíjanle cuidados,
De su licor mezclado Y nosotros contentos
Qual viento impetuosas Dulce vino bebamos,
Van en tropel volando Y en festivos cantares
Los tristes pensamientos: Celebremos á Baco, ■
6° ÍÓESIAí
BE ANACRE-en.
Huyo el dardo ligero,
Oda XEIJ,
Detesto las contiendas
Del apacible Baco Del destemplado fuego
Las danzas y los juegos, De desmedidas copas,
Y de mí'dulce íyra Que turban, el contento
Los armónicos ecos De apacibles convites:
Son mi placer , cercado Mas nosotros, pasemos
De festivos mancebos, Una vida tranquila
Bebiendo dulces copas En deliciosos juegos
Del néctar de Lyeo: Con jóvenes hermosas,
Mis preciosos instantes, Y á la lyrajdañcemos. .
Mis tínicos deseos / rdorr; Si ; . !’ /
Con hermosas doncellas Oda XLIIL
yctwy:, • ¡b'i
Los deliciosos juegos, Feliz eres, cigarra, y
De flores de jacinto Que en las ramas excelsas
Las mis sienes ciñendo: Suavemente cintas,,
La envidia maliciosa Despnes que te sustentas
No conoce mi pecho, Con el blando, rocío:,
La mordedora envidia Tuyas son las riquezas
Está de mí muy lejos. Que ves por todo el campo
De las malvadas lenguas Y producendas selvas.

r
POESIAS BE ANACREON. á3
Del labrador amiga, Y que el Amor saltando
A nadie haces ofensa, En pos de mí venia:
Y todos los mortales A sus pies delicados
Te estiman y veneran: Una gran pesa asida;
Anúnciales tu canto Mas él al fin cogióme.
Xa dulce primavera, Este sueño qué indica ?
De darte dulce canto Que en diversos amores ’ay
Ni Apolo se desdeña: He pasado mi vida -A y

La vejez no te oprime, Acariciando hermosas 'i. zr T


Sabia hija de la tierra, . r
Qual bien me parecia;
Ni sientes los dolores, Pero la bella que hora .srrtO
Ni humores te molesten: Mi pecho tiraniza, íomT
_ : a c »
Jreliz eres, cigarra, En dulce eterno lazo mi Y
Y á los Dioses íemejas. De libertad me priva. Í1I3 V
-,xe Hítist ■ ' . jijQ JA Y
Oda XLIV. Oda XLV. íainO
El esposo de Venus doeQ

Estando-'yo durmiendo^ nÓO De Lemnos en las fraguas


Soñaba que corría, ' - Para el Amor las .flechas ,A Y
Y en los hombros llevaba De acero fabricaba:
Mis alas extendidas, En dulce miel las puntas

t
POESIAS
EB ANACRKON,
La bella Venus baña,
Y el rapazuelo hermoso Oda XLVI.
Las templa en hiel amarga. No amar es fiera cosa,
Llegara el bravo Marte Amar es mal cruel,
De las crudas batallas, Mas el mayor tormento
Moviendo el fuerte escudo Amante infeliz ser,
Y su robusta lanza, Y de una bella ingrata
Y del Amor desprecia Contrastar la esquivez:
Las flechas y la aljaba. Delante de una hermosa
Amor dixo; son fuertes, La nobleza, el saber,
Crueles y pesadas: Y la virtud'sagrada
Prueba por conocerlo, Abatida se ve;
Y un tiro le dispara; Los bellos ojos miran
Venus se sonreía, ■ Solo al torpe interes:
Y Marte suspiraba; Mal haya quien primero
Y 7" * -1 • ■
Cruel es este tiro, Hizo al oro valer,
Decia Marte Lfaei, , Por un metal odioso
La punta , que me afliger El hermano es infiel
Y dixo Amor, no es nada, Al hermano, y olvida
A quien le diera el ser:
Xas guerras y las muertes
66 POESIAS BE ANACRBON.

Son movidas por él, Dadme también las copas


Y aun mas por é¡ fenecen Y copas dedeysean,
A su impulso cruel, Que á la sagrada usanza
De los tiernos amantes Es razón que yo beba,
La esperanza y la fe. Para que embeodado
Guiar la danza pueda:
Oda XLVII. Y que al son de la Lyra
El anciano me agrada Voluptuosa y tierna
Apacible y festivo, Suavemente cante
Y el joven bullicioso La beodez serena, •
Ligero y divertido: Beodez sin furores
El viejo quartdo danza La que "aviva y recrea.
Muestra juvenil brío,
Oda XLIX.
Y solo por las canas
Da de vejez indicio. Ea pintor famoso,
Oye la Lyra mia,
Oda XLVIII. Las sus ideas copia
Dadme el laúd de Homero Y un bello quadro pinta:
Sin las sangrientas cuerdas Primero las Ciudades
Con que un tiempo cantaba Gozosas y festivas,
De las troyanas guerras: Las Bacantes furiosas
e%
68 POESIAS

Que los tyrsos agitan 69


BE ANACREON.
Al son de dobles flautas, Encanto de los hombres,
También el quadro anima, Que disipa sus penas,
Si lo sufre la cera,
El licor de las vides
Con el Amor y Cypria, En sus pampanas tiernas,
Que á los tiernos amantes, En floridos razimos
Las suaves delicias Pendiente se conserva:
Las amorosas leyes Ya viene el dulce tiempo,
Con dulce imperio dictan. Ya la vendimia llega,
Entonces los mortales
Oda L.
Vigorosos se muestran,
Ya viene el Dios potente Los males y cuidados
Que del joven alienta De los hombres se alejan,
El intrépido pecho, I
Contentos y tranquilos
Y bebiendo desprecia
Otra vendimia esperan.
Los hórridos temores:
»
Ya siente dulce fuerza Oda LL
Que á las danzas le incita,
■'/ Quién ha gravado el ponto?
A los saltos y vueltas:
Qué ingenio tan osado
la viene, ya conduce
Juntó en pequeño disco
El delicioso néctar,
Las ondas del mar bravo?
Qué espíritu divino,

r e3
»E ANACREON. 71
7° POESIAS
De las ondas tranquilas,
Con delicada mano,
Y su pecho rosado
Puso a la bella Venus
Con dulce movimiento
Al impulso flotando
Las olas va cortando:
De las marinas ondas?
Ya en las aguas se esconde,
Quién al Olympo alzado
Ya el cuello nacarado
La divina hermosura
Parece solo , y ora
Be la Reyna de Pafos
Se trasparenta claro
Osado nos ofrece ?
Su bellísimo pecho
Y el amoroso encanto
En el fondo brillando,
De la madre de Dioses
Qual alelí campea
Descubre temerario?
De azucenas cercado.
Mas las ondas recatan
De plateadas conchas
Del espumoso charco
Tiran graciosos carros
Sus dulces bellos miembros,
Los saltantes Delfines
Lo que mirar no es dado
De Amorcillos guiados,
A los mortales ojos.
Y el amable Cupido
Y blandamente á nado
De los hombres encanto,
En las inouietas aquas
Todos con dulce risa
Acá y allá vagando,
Las aguas van cortando:
Qual tremolantes ovas
En un festivo coro
Que mece impulso hilando
e4
7® POESIAS,
DE ANACREON, 73
los peces dando saltos,
Sus canecidas trenzas:
Se chapuzan ligeros
El joven, amoroso
las olas arrollando,
Que á la doncella otea,
Paña se deleyta
Que yace reclinada
Y va risueña á nado.
Baxo la sombra fresca,
Oda LII.
Y ocupa el blando sueño
Be maduros racimos
Eos miembros de la bella,
Cargan colmadas cestas
Del amor y del vino
•Al hombro los mancebos
Ardiendo el joven llega,
graciosas doncellas:
Persuade y acaricia,
En el lagar descargan
Alaga tierno y ruega,
Con algazara y fiesta
Que adelante la boda
Eos jóvenes la pisan
Por amorosas muestras,
Y sale el dulce néctar,'
Ea bella no conviene,
Viendo el suave mosto
El joven insta , y ella
Quando en las cubas llenas
Padece al fin vencida
Hervoroso revosa
Una agradable fuerza j
Sus canciones resuenan.
Si á los jóvenes Baco
S¡ algún anciano bebe,
Acalora y fomenta,
Con sus temblosas piernas
Desórdenes inspira
Alegre salta y mueve
Y extrañas violencias, J
74' POESIAS
BE ANACREON. 75
Oda. LUI.
Quando la turba veo Oda LlV.
De jóvenes festivos, *
Canto la tierna rosa
Al punto me remozo
Con la estación de flores,
Con juveniles brios,
Cantad , cantad conmigo,
1 aunque viejo volando
T Delicia es de los Dioses
Su alegre danza sigo:
Su aroma delicado,
Espera,_y ven, Cybebe,*
Y placer de los hombres;
Al dulce regocijo,
Las bellísimas Gracias
Dame purpureas rosas,* ...q
Y los tiernos Amores
Agradame ir ceñido
Con ella se coronan,
De olorosa-guirnalda:
La hermosa de Dione
Id lejos , años mios. -i.
Las frescas rosas ama
Entre jovenes joven
Mas que á todas las flores.
Dulce fuego respiro, ¡a
Con las purpureas rosas
1 en sus danzas mezclado, ..q
Se adornan las canciones
Si de Baco el divino fj
De las 'suaves Musas:
Licor se me presenta ,
Es la reyna de flores,
Verase un viejo activo
Espinas la rodean,
Alegre y bullicioso, a
Y á las manos se oponen,
Sabio en gracias y vino. Y
Dulce es coger la rosa
»E ANACREON,
7fi POESIAS
77
Sus preciosos aromas
Aunque agudas Jo estorben,
Ni su vigor despoje:
1 llevar en la mano
Digamos el origen
La flor de los amores:
De tan preciosas flores:
Espárcense en las mesas
Quando del mar verdoso
Las aras de los Dioses
En la espuma salobre,
De rosas se coronan,
En nacarada concha
De Baco las funciones
La bella de Dione
Las rosas embellecen,
Se descubrió primero,
No hay cosa que no adornen.
Y la frente de Jove
La de rosados dedos
A la guerrera Palas
Es.de la Aurora el nombre,
Produxo-, desde entonces
Por sus brazos de rosa
Ya los amenos prados
Las Ninfas se conocen,
Las florestas y bosques
La bella Cyterea
Adornados se vieron
Escoge sus colores,
De nuevas tiernas flores,
Los débiles conforta,
Y para queicrecieran
Los despojos del hombre
Regábanlas los Dioses
En la horrorosa tumba
Con el suave néctar:
Conserva, los rigores
La rosa empompeciose,
Del tiempo contrastando,
Se alzó de sus espinas,
Sin que la edad le robe
POESIAS »K ANACREON. 79
Hízosc planta noble, Quién á lo que aborrece
A Baco consagrada Sigue con gran deseo ?
Y á sus divinos dones. Yo suelto y apartado
Del oro fraudulento
Oda LV.
Y fugaz , mis cuidados
los caballos hermosos Y tristes pensamientos
Llevan de fuego marcas, A las ligeras auras
A los ligeros Parthos Confiado encomiendo :
Distinguen sus tiaras: Tomo la dulce Lyra,
A los tiernos amantes Y á su tono comienzo
También amor señala, Amorosas canciones,
De sus pechos el fuego Y canto y me divierto:
Veo de una mirada. Y si otra vez me acosan
los cuidados molestos,
Oda LVI.
Y él fugitivo quiere
El oro fugitivo Que dexe mi contento
Me va huyendo ligero, Por buscarle, embeodo
y con veloces alas Tan tristes pensamientos;
Iguales á los vientos: , Tomo la dulce lyra
Huyeme siempre siempre, Y canto, oro perverso
Seguirle yo no quiero, Huye, huye malvado,
So POESIAS D2 anacreon-. íi
Tus engaños entiendo, Laurel trípode y Lyra,
Y tus falsos halagos A Febo pues cantemos;
A la Lyra desprecio, Cantemos sus amores
Mas estimo sus cuerdas Su delicioso fueso:
O
Que el oro , cantar quiero La pura y bella Nynfa
Unos dulces amores, Fluye su abrazo tierno;
Escucha oro perverso: Ya su figura dexa,
’ Yo moveré la Lyra, Ya crece plantel nuevo,
El premio ya está puesto, Y sus hojas resuenan,
Al certámen concurran sacudidas del viento,
.Los Sabios, vengan luego Mas el Dios amoroso
Y formen dulces tonos Es Febo, y era Febo,
Con el ebúrneo plectro: Y con ardiente abrazo
Al modo frigio canto. El triste de amor ciego
Con armónico estruendo, Estrecha el verde tronco,
Qual Cysne del Caystro Halaga el laurel fresco
Las alas-sacudiendo De la graciosa Ninfa
Las sus candidas alas, En vez del dulce señor
De voz se llena el viento;
Musa, los coros guía
Que son sacros de Febo

f
8¿ POESIAS DE ANACREON. .83

Oda LVII. Oda LVIII.

Quán dulee y delicioso Mis sienes están canas,


Es el andar : vagando Mi cabeza blanquea ,
*
Por los: amenos valles Los dientes envejecen,
Y los floridos prados! Florida edad me dexa,
Dó el zéfiro suave El delicioso tiempo
Su ambiente delicado ¡i Pasó , ni ya me queda
Exhala blandamente, Un apacible instante,
El ver la vid de Baco El Orco me da pena,
Reclinarse á la sombra Por esto, ay mi ¡ suspiro,
De sus frondosos ramos, Cavernosa es la cueva
Con una joven bella Difícil su baxada,
En delicioso abrazo.« Y en descendiendo á ella
En amoroso juego A nadie es permitido
Besar sus dulces labios, Tornar á sqlir fuera. -
Sus labios, que respiran
Oda LIX. ~
De Venus los encantos.
Venga luego la copa,
Dámela presto, niño,
Verás como la bebo
\Y A
POESIAS

Sin costarme un suspiro. »15 XNACRBON,

A diez medidas de agua


Oda LXI. *
Echa cinco de vino;
Así su fuerza insana Coronas apañaba
Muchas veces reprimo: De varias florecidas,
Dánosla pues, no hagamos Y entre purpureas rosas
Un estruendoso ruido, El tierno Amor yacia:
Bebamos y cantemos Cogíle de sus alas
Suaves bellos hymnos. Y en vino le metia,
Bebimele al instante,
Oda LX. Y hora con sus alitas
Con apacible capto Allá dentro del pecho
Al tierno amor celebro Hace dulces cosquillas.
Que de diversas flores
Oda LXIL
Corona sus cabellos:
Al amor soberano Suplicóte Diana
Al despota violento Cazadora de ciervos,
Que á los mortales doma Hija bella de Jove
y á ios dioses excelsos. Que tienes el imperio
De las feroces fieras,
Que vengas del Letheo
A las claras corrientes,
/o
POESIAS
DE ANACREON. ®7
No faltará quien dome
Y propicia te ruego 1
Tu natural braveza.'
Esta tu Ciudad mires
Y horrorizado pueblo; Oda LXIV. *
Porque tus Ciudadanos
Amor, rey poderoso,
Son amables y buenos.
Con quien las bellas Ninfas
Oda LXIII. De azules ojos juegan,
Y la purpurea Cypria,
Me miras enfadada,
Y por las altas cumbres
Y qual traciana yegua
Y selvas escondidas
Rehuyes de, mí esquiva,
Vagan del dulce tiro
Qual si nada entendiera;
Del tierno Amor heridas,
Pero mi diestra mano
Ruégote que propicio
Verás si bien te enfrena,
Oigas las voces mías,
Girando á todos lados
Y vengas á mi ruego
A impulso de la rienda:
Y á Cleobylo rindas
Hora vas por los prados,
A mi ardiente dejeo
Y libre te apacientas
Y amorosas caricias.
Dando ligeros saltos,
Ay Amor, por tu aljaba
Retozos y carreras.
A mis votos le inclina.
Ahora es el tiempo tuyo
Vuga , veloz y suelta
f4
POESIAS
B» ANACREON. 89
Oda LXV. *
Oda LXVE *
Tiróme Amor astuto
Eas graciosas coronas
El de trenza dorada,
Del apio floreciente,
Tiróme, ay mí! por juego
Con delicada mano
Una roxa manzana
A las rosadas sienes
Hiriórame jugando
Nos ciña hermosa joven,
Con la que inspira al alma
Y los coros alegres
Eos mas tiernos amores
Del apacible Baco
Que corazón inflaman:
Ea dulce fiesta empiecen.
Ea bella que yo adoro
Ea bejla que me abrasa Oda LXVIL *
Es de la hermosa Lesbos,
Ay, muera yo cuitado!
Es bella , y no le agrada
Ea muerte es mi deseo,
Mi cana cabellera,
Ni en tantas desventuras
Y suspira y se afana.
Me queda otro remedie?.
Por un cíerto^perdida
Ansiosa y namorada. Oda LXVIII. *

Dulce , y hermoso joven,


En pos de tí me llevas,
Y el amoroso encanto /
POESIAS bb anacrbon, 9»
De tu mirada tierna
Me vence, ay mí! me vene® Oda LXX. *
Con amorosa fuerza, Mi amor impetuoso
Qual los divinos ojos A mi pesar me lleva,
De una hermosa doncella: O encendido me arrastra,
Te llamo dulcemente, O qual yelo me dexa,
Mis namoradas quejas Ya furioso me agita,
De tí son despreciadas, Ya en dulce calma queda.
Si á tus oidos llegan:
Cruel, de mí no cuidas, Oda LXXI, *
Ni sabes, que las riendas, De amor en el abismo
Con poderoso imperio, Quando de amor huia,
Del alma mia llevas. Quedéme sumergido
De oir tu voz divina.
Oda LXIX. *

Qual mamante corcillo, Oda LXXIi: *


Qne en la apartada selva, Amable, qué deléyte
De su ligera madre Qué dulce fuerza guia
Abandonado tiembla. Tus delicados pasos
A la danza festiva?
9-2 SOESIAS DB ANACRSON.
9S

Oda EXXIIL * Oda IXXV. *


Contigo, bella mía, Venga, niño, la copa
En delicias pasara Con agua, y dulce vino,
Mi juventud florida, Las floridas coronas
Por tus amables gracias: Traerás para ceñirnos;
Huye la edad ligera, Que no quiero mas tiempo
»que el tiempo no para, Contrastar atrevido,
Mira que la hermosura, Del amor indomable
Ea gentileza, y gala Eos poderosos tiros.
Vuelan, y desparecen,
Simplecilla, qué aguardas? Oda LXXVI. *
Oda LXXIV. * Eres, ó tierna joven,
Hulee, y hermosa joven, Lasciva como bella:
Oyeme por tu vida, Ay, tus ojos lo dicen,
No desprecies mis anos; Tu andar, y gentileza,
Ufana por ser linda, Y que con dulce agrado
Por tus graciosas trenzas Al que te sigue esperas,
Enlazadas con cintas, Y que apacible escuchas
y porque de oro, y plata Eo que decirte quieran.
Estás toda vestida.
POESIAS BE ANACRBON.
94

Oda LXXVII. * Oda LXXIX. •

Las jóvenes me siguen La pura flor cortaste


Por mis dulces canciones, De tu hermoso cabello,
Las doy cosas muy bellas Y con osada mano
Y aun las diera mejores. Le diste al voraz fuego.
Oda LXXVIIL*
Oda LXXX. *
Ya comí miel y leche,
Y bebí dulce vino, Vuelvo del claro rio,
Y ahora blandamente Sus cristalinas aguas
Regalaré el oido Mis miembros han bañado,
De la mi bella joven, Y al alabastro igualan.
Y ante su umbral tendido,
Oda LXXXI. *
Al son armonioso
De mi laúd festivo El fiero Amor hirióme
. Cantaré mis amores, Quando en el agua estaba,
Y mi feliz destino: Con una ardiente flecha
Mas ay 1 que no le agrada De su dorada aljaba.
Oir el canto mió: *#* ***
Y bien, Amor, no quiere?
No, cierto, ay mi mezquino
95 POESIAS
DE ANACKSON,
97
Oda LXXXIL *
Oda LXXXV.
Mas yo vuelvo al Olympo
Las Bacantes furiosas
C011 mis ligeras alas,
Con gritos, y algazara,
Porque la bella joven
Al poderoso Baleo
No gusta de mis gracias.
Oé Saboé claman.
‘J 't-'fj '. J T '
Oda LXXXIIL*
Oda LXXXVI, *
' ; -
Del poderoso Jove
Amor, el poderoso^
Las hijas bien trenzadas,
El fiero, el indomable, '
Por los amenos valles
Que el corazón abrasa
Forman alegres danzas.
De los tiernos amantes,
Viendo ya de mi frente
Oda LXXXIV.*
La púrpura mudarse:,.
Las Ninfas de los montes
Y que la edad de canas
Por las florestas vagan,
Comienza á coronarme,
Y de la verde oliva,
Con sus doradas alas -
Y de laurel las ramas
Resplandeciente pase, -
Sacuden blandamente,
su encumbrado vuelo
Saltando concertadas. Ni la vista le alcance, : >
Rápido y presuroso, ...

£
'j
i
POESIAS BE ANACREON.
$3 99
Que al viento se adelante, A mi Estratocles ama, a
Déxeme ya tranquilo, Su favor no le niega,
Ay, quiera en paz dexarme! EsposáesdeMyrila: m ..
Mira tu esposa tierna^
Oda LXXXVII. Quán florida, y hermosa!
O Reyna de las Diosas Las gracias la rodean:
Hermosa Cytherea, Es la purpurea rosa
Amor, Rey de los hombres, De las flores la reyna,
Himeneo, defensa Y Myrila es la rosa
De todos los mortales, Entre tiernas doncellas: ■ .1
Mis versos os celebran: El sol de hermosos ravos
Amor, dulce Himeneo, Ilustre y resplandezca:■
Venus amable y bella. El tálamo, apacible ' :
Mira, joven, tú amada, De las delicias vuestras, b - cQ
O mira la 'doncella, Tu vergel delicioso . q .
Levántate , no tardes, Sera si bien le riegas,
Levántate, no pierdas Y entré plañías, y flores
De la perdiz la caza, i El alto ciprés crezca..
La deliciosa presa ' ■ slh ■■f
Oda LXXXVIII.*
Volará si tardares:
Mas Paña, la risueña, Al varón animoso .

t •'
POESIAS sa
DE ANACE KON. XOI
En el crudo combate,
Qual.si saltado hubiera
Que se goza cercada. De la peña Leucada,
De muertes, y de.sangre,
Ahora mas*perdido
El que feroz , y ardiente.
Con incierta esperanza
Revuelve á todas partes
Amo, y a nado corto
El alazan de Tracia, .
Las espumosas aguas.
Que violento el ayre
r .y - ■ /SjQ
Con su relincho rOrnpe, Oda X C. *
■d•■ ■
Y las crines esparce,
Tierno, y vano deseo
Las eriza , y sacude, '
Mi corazón agita:
Y el grueso cuello bate,
Quisiera ser ahora
Este solo es arnaco
Ebúrnea hermosa lira, '. ?¡U
Del horroroso Marte,
Porque suavemente
Que del morrión agita
Tocado y ó seria .j
El penacho •hoñdeíinte*.
De jóvenes graciosos
.T-.-vhtieid <í írwZ *
Oda LXXXI.X. « Con las. manos-divinas,
Llevándome de Baco
Del piélago amoroso .
A las danzas festivas:
Después que ya me alzaras,
O mas bien ser quisiera
Ageno de cuidados,
Joya de oro de Tibar
Y de amorosas ansias, . . í
Sobre el rosado pecho
&3
ios
IOS POESIAS
.. * l '
De amable bella niña, 9
Los epígrafes de las Odas de
Mas linda que las flores
!• slnacreon son obra de los Co­
De la estación florida-.
lectores y Gramáticos , y -ge­
Oda XCI. neralmente poco convenientes al
<• <, 0C£-2T£ ( , -
Lejos, lejos el fiero. ; r.í propo'sito de ellas : yo me he
Qúe en las copas sagradas tomado la libertad de poner
De festivos convites estos que siguen.
Del feroz Marte trata, IT
K .... .,
Sus horrorosas guerras, iíí
Y sangrientas batallas:
> Oda i. . . De su Lyra.
n............. De las mugeres.
Un tal v^ron detesto, !.I
iii........... Aventura de amor.
Y solo aquel me agrada, 1
iv. ..... Filosofa del placer..
Que de las dulces Musas >T
,q v ........... . De las rosas.
Las bellas flores, ama,
vi ............ El festín. .
Que dice de su. pecho
vil........... Caminos del Amor. rxx
Las amorosas ansias, 'f
& viii. .... Su sueño. ■ ■/;
Que á la rosada Venus,
ix. ........ La paloma.
Suaves hymnos canta,
x. ....... . Amorcillo de cera.
Que se mezcla en los juego»
xi............ De su vejez. ........... .:xx
Con hermosas muchachas.
I
¿4
' c
\

704

xn.......... A la golondrina. XXXI. . . , aSmifurores. .......x


xi.ii............ Sus fiurores. XXXII. . . Cuenta de sus amores.
xiv. .... Combate del Amor. XXXIII.. . ¡El nida.deamor. . s
xv. ..... Su filosofia. XXXIV, . . La reconvención. ,.¡x
xvi. . . .. De sus canciottes. XXXV. . . Pintura de Europa, :
xvii. . ... La copa de plata. XXXVI. . . La enseñanza . impar* ¡
xviii... . Copa de la primavera.
xix. .... Que se debe beber.
XXXVII. . La primavera.
xx. ...... Deseos enamorados. xxxvin. .Placeres dsL.vie.jo..
xxi. .... Su sed.
-XXXIX. . . Lai, d'elicias. del vino.
xxii..........La agradable soledad. XL........... . Amor picado de una
xxiii. . ., Inutilidad de las rique­ -inív abeja. . . . .reís
zas. ' XLI.'. . . . Eilasafia P> achira. . ■
xxiv. . . . Iweriidumbre de la vi- XLII. . . . . Sus grandes placeres. ¡ ■
■ da. XLIII. . .. ■. De la cigarra.... . . -
Ttarv. . .. 'Virtupd del vino. . XLIV. . - . Su sueño,. ’ . . ., .1
xxvi. ... Lo que inspira el vino. XLV.. ... . Las ¡lechas del Amor. ■,
xxvn.... Placer del vino. XLVI. . . . El amor y sel .Ínteres. ,■
xxviii.. . Retrata de.su amada. XLVII. . La vejez apacible. ¡
xxix. . . . Retrata de Baty.lo^ XLVIII.. . Pide, la dLyra.. . . .. ■ ■
xxx........... Amor cautivo.. Xl-I-X«'»v. . Ideas de su Lyra, •
jó6 ’ fx, tOlf
X...... . Llegada de las. rvendi- txvn ... La desesperación.
»• mías. . . xxviii»'. : La mirada amorosa.
n...... El baño de Venus. xxix/,. . La corcilla. ............ -rr
III. . .... Los lagares. txx. . Impulsos de Amor.-. ■ -
XIII. • El festín. El encanto de la voz.
XXXI. . . .
«.IV. .......... La rosa. A la joven que danza.
XXXII. . .
XV............... Las marcas de los aman­ La persuasión.
XXXIII. . ,
tes. ’" ■ - . . iiv:< ' : XXXIV. . . Súplica a la joven.
XVI. .... Al oro fugitivo y\ amo- XXXV.. . . Estirada de amar.
.w/siy W res de Febo y. Daph- Ea joven agradable.
XXXVI. • •
nei "u. .... ...
XXXVII, . Su mérito.
XVII. . . . Delicias campestres. XXXVIII. . Su canto despreciado.
XVIII. . . . Mudanzas de la edad. XXXIX. . . Los cabellos.
XIX.'. . . . Su bebida. ......... xxxx.. . ., Su baño.
XX............... .Himno al Amor.. . XXXXI. . .. El tiro de Amor.
XXI.............. Bebida de Amor.: : XXXXII.. .. Vuela al Olympo.
XXII. ... Himno á Diaua.. . :: XXXXIII. .. Las Linfas.
/
XXIII. ... . A la joven orgullos a. XXXXIV. . Las Linfas.
XXIV. Himno al Amor.. xxxxv.. ., Las Bachantes.
XXV.. . . . El tiro dé Amor. XXXXVI. .. Ruego al Amor.
XXVI. . , . Las coronas de. Baco. xxxxvn.. Epithálamio.
to8
txxxviri. El guerrero. r

txxxix. . Alegoría amorosa,


xc................ Deseos enamorados..
xci.......... El varón tratable,.
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I
'XJD TIZIO S
DE

TEOCRITO, BION, T MOSCO.

TRADUCIDOS DE GRIEGO
X
POR

DON JOSEPH ANTONIO CONDE,


DOCTOR EN AMBOS DERECHOS DE LA
UNIVERSIDAD DE ALCALA.

MADRID
EN LA OFICINA DE D. BENITO CANO
Año de 17 <¿5.
PROLOGO.

jrLunque no me agradan dis­


cursos largos , ni repetir lo que ya

otros han dicho , y todos saben , no


«erá fuera del caso decir algo , aun­
que brevemente, de la poesía pastoral
y del mérito de los Idilios de teo-

chito.

A mí me parece que esta poesía


es la mas antigua, como nacida de
/ I
xa ocupación de apacentar rebaños,
la mas sencilla y menos penosa, y

3
VI

la primera que tuvieron los hombres, antiguas;, ya se usaban, y el can­


como se manifiesta en los Patriarcas tar , de Salomón. * , es un Poema pas­
y Heroes de Moyses y Omero : y toral puyas bellezas son admirables.
que unos hombres de buen corazón, £e puede decir que los ArcadeS' y
de carácter dulce y apacible , tran­ Sicilianos perfeeionáron este género de
quilos y descuidados, en unos cam­ Poesía.,, y que los Griegos le dieron
pos deliciosos, no podían dexar de estimación entre las composiciones
ser agitados de las pasiones más ha­ dignas.dé un buen espíritu.
lagüeñas , y de las violencias mas
Las mas antiguas que han que­
naturales, el amor , 13 admiración dado son las de teocrito , y lis
de las grandes obras de la natura­ que han. producido las infinitas que
leza , su descuido y la complacen­ jiay ep todas lenguas : entre tanta1«
cia de sus ánimos, eran poderosos jio hay algunas que lleguen á su be­
motivos para que expresasen en sen­ lleza.;- sps mas sabios imitadores rio
cillos cantares sus sentimientos. han podido alcanzar aquella amable
Entre los Orientales , que son •e • • ?,« rt

los pueblos de quienes se nos con­


‘ * He traducido del Hebreo este antiguo
servan las memorias y poesías mas y excelente resto de ¡a Poesía Oriental.

4
vnr IX
graciosa y natural sencillez de sus
las delicias „de las Musas. Virgilio
Idilios. La moderada pasión de un
se propuso imitar á teocrito , y
candido y delicado corazón, los pla­
aunque alguna vez lo hizo con feli­
ceres inocentes y propios de unQs
cidad , queda generalmente muy in­
hombres buenos, libres y tranquilos,
ferior : lo mismo ha procurado en
laS ocuPa«ones del campo baxo de
nuestros tiempos el Alemán Gesner,
Un aSP£Ct0 Ocioso , son el asunto
pero éste ni el Romano no han po­
de la poesía pastoral , y de los Idi­
dido llegar á la natural sencillez del
lios que verdaderamente son bucólicos,
Griego , en ambos se observa mas
y de teocrito.
cultura y estudio, pero los intereses
Su versificación tiene todas las
rústicos y propios de los pastores no
g^cias, dulce , fluida y de eypre-
se hallan en estos sabios imitadores.
«iones sencillas y apasionadas, libre
Las bellezas de Coridon y Galo son
sie“prez de palabras y conceptos ar,
fielmente trasladadas del Thyrsi y Co-
tificiosos y estudiados , juntase á esto
masta , Gesner ha mejorado poco en
ha excelencia de la lengua Griega,
lo que imita , y todas sus gracias
7 en ella el suavísimo dialecto Dó-
consisten en la nevedad, en la ter­
nC° 3 ^ue P^ece ser formado para
neza y finura de los sentimien­
X
XI

tos. * Pero ¿ dónde está en- Virgilio, ni puede el corazón humano expre­
ni Gesner, el Cyclope , el Boyero, el sar mas delicadamente sus sentimien­
Dafnis, los Segadores, los Pescado­ tos , ni las ternuras de la madre de
res, y la variedad y afectos de la los amores pudieran ser mas patéti­
Encantadora ? las gracias de los Idi'-r cas , ni decirse con voces mas divi­
líos de teocrito son nativas y no nas. Toda la dulzura de la lengua
trasladables según decía A. Gelio, y Griega en el bellismo dialecto Dó­
ha manifestado la experiencia. rico , y. la versificación mas fácil y
En los Idilios de bion se nota armoniosa forman la excelencia de
cierta cultura y belleza estudiada que éste y de los demas Idilios que nos
no hay en las composiciones natura­ han quedado de bioñ.
les y sencillas de teocrito. El cau­ Los de mosco se acercan mucho
to fúnebre de Adonis es el mas afee? á las bellezas de 'los de su maestro
.tuoso y tierno de la Poesía Griega, bion. El robo de Europa es exce­
lente por su variedad y hermosas
* Apenas hay en los Escritores modayf descripciones , aunque los sentimientos
nos de Poemas campe/tres algo de novedad,
y en casi todo son imitadores de Theo'critd,
sean mas ingeniosos que naturales.
de Longo y de Parthenio de Nicea. ;¡ El tercero en que llora la muerte
xn XIII
de biow aunque lleno de expresio­ De mi traducción juzgará cada
nes muy tiernas, se notan en él, los uno como quiera , yo la abandono
mismos defectos de especulaciones su­ al juicio del público , y le consti­
tiles é ingeniosas. Los lamentos de tuyó arbitro de su destino : he pro­
Megara y de Alcmena están escritos curado traducir fielmente, y no co­
con grandeza y sencilléz , qual con­ mo hacen muchos que envuelven á
viene á tales Eroinas, y al mismo sombra de una larga paràfrasi su ig­
tiempo con delicados sentimientos y norancia de la lengua de que quie­
expresiones llenas de terneza. ren ser tenidos por traductores * ni
Debo decir , qUe de estos tres jamas he convenido con aquellos in­
Poetas, nadie se contente con traduc­ terpretes , que todo lo trasladan con
ciones , ni esta , ni quantas hay en libertad tan desmedida , que con di­
otras lenguas son mas que unas .co­ ficultad se conoce por sus traduccio­
pias despreciables de los mas perfec­ nes el original. Es bien cierto que
tos originales : Y que el placer de en los Escritores Orientales Hebreos,
leer estos Poetas en su lengua es un Arabes y Griegos hay cosas de na­
dulce y admirable fruto de los en­ tural gracia, que no pueden trasla­
fadosos años que se emplean en apren­ darse sin desfigurar su suavidad y
derla.
XIV •t

belleza propia ; pero por mas que sencillez de la Poesía Hebrea y Ara­
parezca violento ó extraño , se debe be, y de todas las gracias de la Grie­
imitar en quanto se pueda la fuer- ga, mas culta y mas excelente que la
za y el modo original, el omitir ó de todas las naciones antiguas y mo­
mudar me parece mas propio de los dernas.
que imitan libremente , que de los En consideración de algunas per­
interpretes juiciosos que quieren dar sonas preciadas de erudición y de­
á conocer las bellezas de los buenos licado gusto , que deseosos de hallar
Escritores antiguos. defectos en las obras agenas pesan
Así he procurado con toda dili­ todas las palabras y examinan todas
gencia en mis traducciones, por lo las expresiones : debo decir , que me
qual es disimulable si alguna vez la he propuesto hacer una traducción
versificación no corre y rueda se­ muy literal y exacta , útil á los in­
guidamente con facilidad: por me­ finitos que no entienden á teocrito
jor expresar la letra Griega , no he y desean leerle en Griego, ó no
dudado usar algunas voces antiguas: desfigurado en lengua vulgar ; al
así me parece que se da una idea mismo tiempo he procurado hacerla
menos imperfecta de la grandeza y agradable quanto me ha sido posible:
XVI

si esta exactitud es un defecto, yo


le confieso , y me ¡reporta poco que
muchos no piensen de la misma ma­
nera : tal vez. en mi traducción de
Anacreonte les disgustará su mismo
sistema.

IDILIOS

i 101E TTOC1BITO.

\ - IDI-
3
IDILIOS

ID JE TJEOCJEJJTO.
IDILIO PRIMERO.

TRRSIS, Y EL CABRERO.

TYRSIS.

Es dulce el susurrar de aqueste pino,


Cabrero, que resuena en ías fontanas;
Pero mas dulcemente- tú flauteas:
Después de Pan 1 habrás premio segundo,
Y si un hermoso macho del cabrío
Se llevare, la cabra será tuya,
Y si la cabra quiere, una cabrilla
Te darán, que la carne de las cabras
Pequeñas es sabrosa hasta ordeñarlas.
CABRERO.
Es mas dulce, ó pastor, el canto tuyo,
Que las sonoras 2 aguas derrumbadas
De la alta peña, y quando eh don se lleven
Las Musas una oveja , á tí un cordero
Pequeño se dará , y si Ies aplace
El cordero llevar, tú habrás la oveja.
A2
DE TEOCRITO. §
4 IDILIOS
Y daréte además un hondo vaso _
T Y R S I S, De blanda cera orlado , de dos asas,
¿Quieres tú, por las Ninfas, ó cabrero, Nuevo sin estrenar que huele á talla,
Aquí sentado sobre aquesta loma, Y en sus labios por alto rodeada
En dó crece el taray tocar la flauta, Hay una yedra, yedra al eliocriso
Y yo entretanto paceré las cabras? Asida, y á par della un tallo alzado
De zafranado fruto , y por adentro
CABRERO. Grabada una muger , obra divina,
No es justo, no, pastor, al medio dia De velo y manto ornada : y cerca della
No debemos tocar, á Pan tememos Varones con hermosas cabelleras,
Que de la caza entonces fatigado Que contienden con dichos alternados
Reposa, y es terrible , y la furiosa Cada qual de su parte, y no hace caso,
Cólera en su nariz está sentada; 3 Tal vez risueña al uno dellos mira,
Mas tú, Tyrsl, que sabes los dolores Y tal vez su mirar al otro pone:
De Dafni, y los cantares pastorales, De amor entumecidos han los ojos,
Aquí ven, y debaxo nos sentemos Y trabajan en vano. Cerca dellos
Del olmo de Priapo , 4 y á la vista. Un viejo pescador hay esculpido
De las fuentes, dó esta el pastoral poyo, Sobre una áspera peña, y afanando
Y las encinas: y si tú cantares Arrastra la gran red, y el viejo todo
Se parece á un varón quando trabaja,
Qual un tiempo cantaste contendiendo
Dirías que pescaba ciertamente
Con el Libyco Chromi, yo he de darte
Conquantas fuerzas han sus miembros todost
Una cabra que cria dos mellizos,
Inchánsele la venas por el cuello,
Que la ordeñes tres veces, y criando
Y aun siendo cano, su vigor conviene
Los dos chotos, dos tarros siempre llena.
A3
& IDILIOS BE TEOCRITO. 7
A mocedad. No lejos del marino Ni ^1 olvidoso Dite el canto guardes.
Viejo, hay de roxas uvas una viña
TYRSXS.
Bien cargada, que guarda un pequeñuelo
Muchacho en los bardales asentado. Comenzad , Musas, pastorales cantos.
Dos Zorras hay cercanas, una sigue Este es Tyrsi del Etna, estas las voces
Los sulcos, destrozando los racimos, De Tyrsi: jen dónde estabais Ninfas quando
Y la otra maquina sus engaños, Dafni se deshacia, en los hermosos
Todos contra el zurrón, y va diciendo Bosques, ó del Peneo, o en el Pindó ?
Que no le ha de dexar hasta que quede No en las grandes corrientes del Anapo,
Como en seco 5 el muchacho; y él de pajas Ni cumbres de Etna, ni agua sacra de Aci.
Hace una hermosa xaula para grillos Comenzad, Musas, pastorales cantos.
Re texida de juncos, ni se acuerda Por él lobos cervales y los lobos
Del zurrón , ni del fruto de la viña, Ahulláron, lloró también su muerte
En su trabajo todo embelesado. El león de la selva. Amadas Musas,
Vuela del vaso en torno blando acanto, Comenzad, Musas, pastorales cantos.
Eolico prodigio , 6 que pasmado A sus pies muchas vacas, muchos toros,
Tu corazón será de maravilla, Novillas, y becerras rebramáron.
Por el qual á un marino Calydonio Comenzad , Musas, pastorales cantos.
En precio di una cabra , y un gran queso El primero Mercurio desde el monte
De blanca leche , al qual aun no tocaron Vino, y decia: Dafni j qué te aflige ?
¿Mis labios, y así yace no estrenado: Buen Dafni, jqué te abrasa? Amadas Musas,
Este yo te daré gustosamente Comenzad, Musas, pastorales cantos.
Si tú, amigo, me cantas aquel dulce Vinieron los vaqueros , los pastores,
Cantar: No pues te envidio, sus amigos, Los cabreros vinieron, todos dicen:
A4
idilios BE TEOCRITO.
¿Quémal tienes? Priapo también vino
Entonces Dafni así le respondía:
Y dice : ¿qué te acabas, triste Dafni?
¡O triste Venus! Venus enfadosa,
La moza misma por las fuentes todas,
Venus á los mortales enemiga,
Y por todos los bosques es llevada, ¿Juzgas que todo el sol hame faltado? 5
(Comenzad, Musas, pastorales cantos.) 7 Dafni en Dite será de amor tormento.
De sus pies, lamentando: desgraciado Comenzad, Musas, pastorales cantos.
Amador eres, falto de consejo, Anda al Ida , no dicen que á Cytere
Llamábante boyero , mas ahora El boyero.... al Anchises también anda,
Pareces al cabrero, el qual mirando Allí están las encinas y el Cypero,
Ayuntarse las cabras, se deshacen Y susurran allí suavemente
Sus ojos por no haber cabrón nacido. Las abejas en torno á las colmenas.
Comenzad, Musas, pastorales cantos. Comenzad, Musas, pastorales cantos.
Así túquando miras las doncellas Bello es Adonis, y rebaños guia,
Que juegan, por los ojos te deshaces Las liebres hiere , y otras fieras .sigue.
Porque con ellas tu danzar no puedes: Comenzad, Musas, pastorales cantos.
Pero el boyero nada respondía,
Anda llega otra vez á Diomedes,
Sino el cruel amor al fin llevaba. Y dile: yo vencí al boyero Dafni,
Comenzad , Musas, pastorales cantos. Mas conmigo pelea. Amadas Musas,
Y vino la risueña y dulce Venus, Comenzad , Musas, pastorales cantos.
Ríe disimulada, y grave pena
O lobos, ó cervales, y vosotros-
En su ánimo tenia , y dice : ó Dafni, Osos por las montañas encerrados,
Desvanecido tú vencer creias
Vivid , porque ya Dafnis el boyero
Al amor , y hora dél eres vencido. No estará con vosotros, ni en ios bosques,
Comenzad , Musas, pastorales cantos.
Ni en las selvas, ni espesas enramadas.
I DE TEOCRITO. II
30 IDILIOS

A Dios, pues, ó Aretusa, y claros ríos, Contie ndan á cantar con ruiseñores.
Que las aguas lleváis cerca del Tymbris. Dexad, Musas, los cantos pastorales.
Comenzad, Musas, pastorales cantos. Esto dicho calló: Venus queria
Yo aquel Dafnis que aquí bueyes pacia Levantarle, y los hilos de las Parcas
Y toros y novillos abrebaba. Faltaron todos. 10 Deste modo Dafnis
Comenzad, Musas, pastorales cantos. Pasó al rio, y las aguas zabulleron
¡O Pan! Pan! ya que estés en las mqntañas Al varón estimado de las Musas,
Excelsas del Lyceo, ó que ora vagues Y de las Ninfas nunca aborrecido.
Por el Menalo grande , venir quieras Dexad j Musas, los cantos pastorales.
A la Isla Siciliana, abandonando Dame el vaso, y la cabra que la ordeñe,
La cumbre de Elis, y la alzada tumba Y á las Musas ofrezca. En adelante
De Lycaon á Dioses venerable. He de cantarte yo mas dulcemente.
Dexad, Musas, los cantos pastorales.
CABRERO.
Ven Rey , y lleva aquesta hermosa flauta
Con cera bien compuesta, y torneada Llena sea de miel y de panales
Al labio, porque soy arrebatado Tu hermosa boca , Tyrsi, y del Egilo
Al negro Erebo 9 del amor insano. Los dulces higos comas, porque cantas
Dexad, Musas, los cantos pastorales. Con dulzura muy mas que la cigarra. 11
Violas , lleven ya los espinales, Toma el vaso, y admírate mi amigo
Y ellas espinas, y el narciso hermoso De su suave olor , dirás ser hecho
Florezca entre el enebro, y todo sea En fuentes de las Horas. 12 O Cyseta
AF contrario, ya lleve el pino peras, Ven aquí, tú la ordeña. Mis cabrillas,
Después que finó Dafnis , á los canes No retocéis porque el cabrón no monte.
persiga el ciervo, y ya las abubillas
ta IDILIOS
i . DE TEOCRITO. 33
IDILIO II. Y la negra sanguaza derramada.
Ea terrible Diosa , al fin nos sigue,
Y haz los venenos míos no menores
LA encantadora.
Que aquellos de la Circe, ó de Medéa,
O aquellos de la rubia Perimeda.
¿ do están los laureles? ¿do Testilis
Pezpilta, 3 trae aquel varón á casa.
Los encantos? aquella copa ciñe
En fuego lo primero se deshaga
Con la purpúrea lana de la oveja,
La harina, mas espárcela, cuitada
Poique al cruel amante que me abrasa
Encante: ya pasaron doce dias Testilis, ¿ dó las mientes te voláron?
Que, qual solia, el triste á mi no viene, ¿Soy por caso, malvada , burla tuya?
Na sabe si vivimos ó hemos muerto, Esparce y di: de Delfi esparzo huesos.
Ni ha llamado el cruel á nuestras puertas; Pezpilta, trae aquel varón á casa.
Atorméntame Delfis, sobre Delfi
Mas partióse á otra parte, y le han mudado
Quemo laurel, y quál ardiendo suena,
Venus y Amor sus mientes repentinas. 1
Y encendido deshácese al instante
Buscaréle mañana en la palestra
De Timageto para verle, y luego Que dél ni las cenizas descubrimos,
Le pediré razón de qual-me trata. Así Delfis en llama se consuma.
Pezpilta, trae aquel varón á casa.
Hora le hechizaré con los encantos;
Qual esta cera yo, favor divino,
Pero tú Luna, hermosamente luzcas,
Derrito, el Mindio Delfis al instante
A tí quiero cantar suavemente,
De amor sea deshecho, y qual voltea
O Diosa, y á la Ecate 2 profunda
Este, globo de arambre por Cytere,
A quien tiemblan los canes pequeñuelos
Así voltee aquel á nuestras puertas.
Quando pisa las tunabas de finados,
Pezpilta, trae aquel varón á casa.
DE TEOCRITO.
’4 IDILIOS

Ahora sacrifico los salbados: Oxalá que así vea entrar á Delfi
Tú, pues, Diana 4 que mover bien puedes A esta casa, á un furioso semejante,
A Ra'damanto 5 que el Erebo mora, Viniendo de la Liza esclarecida.
Y si hay algo mas firme. Ya Testilis Pezpilta , trae aquel varón á casa.
Aquesta orla perdió 8 de su vestido
Por la ciudad los canes nos ahullan,
Delfi, la que hora yo despedazada
Ya cierto está la Diosa entre caminos,
Arrojó al voraz fuego. ¡ Ay! ay ! cuitado
Ea suena de súbito el arambre. 5
Amor, ¿por qué la denegrida sangre
Pezpilta, trae aquel varón á casa.
De mi cuerpo bebiste, como sierpe
Mira, ya calla el mar , callan los vientos,
De las lagunas al costado asida ?
Mas no calla el dolor del pecho mió,
Pezpilta, trae aquel varón á casa.
Pues en amor de aquel toda me abraso,
Que á mí cuitada de muger,-infame Cogiendo una lagarta he de traerte
Hizo, y que ya no sea mas doncella. Una mala bebida en la mañana.
Toma ahora, Testilis, estos zumos
Pezpilta, trae aquel varón á casa.
Ofrezco por tres veces, y tres veces Y los umbrales unge, á los que aun hora
O venerable , aquestas cosas digo : Tengo enlazada el alma , y no hace caso.
O duerma con muger, ó con mancebo, Di escupiendo, de Delfi esparzo huesos.
Tanto le olvide quanto , según dicen, Pezpilta, trae aquel varón ácasa.
Un tiempo en Dia 7 se olvidó Teseo Ahora estando sola, ¿ desde dónde
De la hermosa Ariadna bien trenzada. Este amor lloraré? ¿de dó comience?
Pezpilta, trae aquel varón á casa. ¿•Quién me movió tan desmedidos males?'
El Ippomanes es planta de Arcadia Anaxo la de Ubilo á mí se vino,
Con la qual. se enfurecen por los montes La Canefora, 9 al bosque de Diana,
Los caballos y.yeguas corredoras. Quando hubo allí mil fieras, y llevaba
i5 rniLios HE TEOCRITO. 17
Por todo en derredor una leona. Yací'en cama diez dias, y diez noches.
Entiende, ó Luna, IO de mi amor la causa. Entiende , ó Luna, de mi amor la causa.
Rogóme Teucarila, ama de Tracia, Y mi color al tapso 11 parecía,
De memoria feliz , la que moraba Se me cayéron todos los cabellos,
Vecina de mi puerta, y suplicóme Solos huesos y cutis me quedaron.
Saliese á ver la pompa, yo'cuitada ¿Mas á dónde no fui, ni de qual vieja 11
La seguí, y arrastraba un fino manto Encantadora me dexé la casa?
De viso , y embozada por encima Perp nada sirvió, y el tiempo en tanto
De Clearista con el rico velo. En vano se pasaba y consumía.
Envende, o Luna, de mi amor la causa. Entiende, ó Luna, de mi amor la causa.
A la media carrera ya llegaba Al fin dixe lo qierto á la criada:
En dó están de Lycon las heredades, Ea, Testilis, busca algún remedio
Y allí vi á Delfi y á Eudamipo juntos A mi furioso mal: el Mindio, toda,
Que venian: el bozo dellos era Cuitada yo , me tiene: ves y observa
Mas roxo que Eliocrjso, y mas brillantes De Timageto cerca de la liza,
Sus pechos que tú ó Luna , qual dexado Allí va muchas veces, y le agrada
De la palestra el ínclito trabajo. Estar allí sentado, anda Testili,
Entiende, o Luna, de mi amor la causa. Entiende, ó Luna, de mi amor la causa.
¡ Ay mí 1 cómo le vi, cómo furiosa Y quando allí le vieres andar solo
Mísera yo quedé! y el pecho mió Hazle una oculta seña, y di: Simetha 13
Tiernamente tocado! mi belleza Te llamaf, y traelé aquí. Como le dixe
Se deshacía, y ya no mas cuidaba Eila partió, y me traxo aquel hermoso
De aquella pompa; ni tornar á casa De Delfis á mi casa; mas yoal verle
Sabia, y me acosaba un mal ardiente» Entrar con presto pie por los umbrales
B
IDILIOS
DE TEOCRITO.
'9
Entiende, ó Luna, de mi amor la causa Y si de tí admitido acaso fuese,
De la puerta, quedé mas que la nieve Como te estaba bien, pues soy llamado
Helada, y de la frente me caia El hermoso y ligero entre los mozos,
Un sudor qual del Austro las escarchas. Me hubiera contentado solamente
Nada pude decir, ni quanto en sueños Con el besar de tus hermosos labios;
Lalea 13 un niño á su querida madre; Mas si me desechabas, y la puerta
Pero por todo, mi gallardo cuerpo Con aldabas tenias bien cerrada,
Endurecido queda como un yelo. Todas las armas contra tí vinieran,
Entiende, ó Luna, de mi amor la causa Y teas y segures se aprestaran. '
Y miróme el cruel clavando al suelo Entiende , ó Luna, de mi amor la causa.
Los ojos, y en el lecho se sentaba, Hora las .gracias doy primero á Venus,
Y sentado me dixo estas razones: Y luego á,tí, del fuego me has sacado
Te me has adelantado , mi Simetha, Llamándome , Simetha , á tu morada
Tanto quanto corriendo el otro dia Casi abrasado ya, que amor mil veces
Me adelanté á. Filino el agradable, Suele encender muy mas afdiente llama,
Llamándome á tu casa que viniese: Que Vulcano r5 de Lipari en las fraguas;
Viniera yo , viniera , te lo juro Entiende , ó Luna, de mi amor la causa
Por el suave amor, acompañado Y con cruel furor á la doncella
De tres ó quatro amigos por la noche; De su retrete saca , v á la esposa
En el seno guardando las manzanas 14 Del tálamo aun caliente , abandonado
De Baco , y en la frente la corona Del varón. Asi dixo. Yo mezquina,
Del álamo de Alcides planta sacra, Y simple, y fácil le creí al instante,
Toda cercada de .purpureas cintas. Tómele de la mano , y al suave
Entiende , ó Luna, de mi amor la causa. Lecho inclioéle, y luego se encendía
B 1
so IDILIOS

Mi cuerpo con el suyo , y las mexillas DB TEOCRITO. 21


Muy mas que ántes ardientes se pusieron,
El tendrá otra delicia y me he olvidado.
Y nos acariciamos dulcemente.
Yo pienso hora moverle con encantos,
Y por no molestarte, amada Luna,
Y si me aflige mas, juro á las Parcas
Hizose , pues, lo mas, y ambos llegamos
Que del Erebo llamará en la puerta,
Al fin de los deseos. Ni hubo queja
Que tan malos encantos, dicen, guardo
Hasta el pasado dia, ni yo misma
En la cesta , los quales aprendiera,
Del la tenia , pero á mí se vino
Señora, del Assyrio peregrino.
La madre de Filista mi flautera 16
Mas tú apacible , guia tus caballos
Y madre de Meliso , esta mañana
Del Occeano , Diosa , yo qual antes
Quando al Cielo corrían los caballos
Mis males sufriré. Tú, clara Luna,
Que conducían la rosada Aurora
A Dios, y á Dios también vosotros Astros,
Del Occeano , y entre varias cosas
Los que seguís el reluciente carro
Me dixo estaba Delfi enamorado;
De la sagrada y apacible noche-.
Si de muger ó de varón tenia
Amores, no sabia ciertamente;
IDILIO III.
Mas él brindaba siempre enamorado,
Y que al fin se fué huyendo , y me decia
CoÁTASTA.
Tener su casa llena de coronas:
Esto-, pues, me contaba aquella amiga;
Y dixo la verdad , que á mí venia .
A mí Amarilis voy 1, las cabras mías
En el monte apacientan, y las guarda
Por tres ó quatro veces, y la alcuza Tityro. Amado hermoso , tú las cabras
Dórica me dexaba , y se han pasado apacienta y las guia acia la.fuente,
Ya doce dias sin haberle visto: Tityro , y al cabrón blanco morueco
De Libya, guarda no te dé cornada.

»
24 IDILIOS be teocrito. 23
Bella Amarilis ¿cómo no me llamas Ni me oyes, y el pellico desnudando,
Ya tu amorcillo desde aquesta cueva Yo saltaré á las ondas donde acecha
Mirando i O me aborreces , ó de cerca Olpis el pescador á los atunes;
Chato y barbado te parezco , Ninfa, Y aunque no muera.tu serás contenta.
Harás que yo me cuelgue : hora te traigo Supe, poco ha , quando probar queda
Diez manzanas 2 cogidas de allí donde Si tú me amabas, ni sonó el estruendo
Me mandaste coger , y en la mañana De las adormideras sacudidas, 5
Otras te he de traer : mira, te ruego, Sino que así quedáronse marchitas
De mi animo la pena dolorosa. En el suave brazo; y mas Agrea 6
O si yo fuese 3 susurrante abeja, Que adivina con crivas, ya me dixo
Y á tu cueva llegase traspasando La verdad poco ha , quando cogía
La yedra y el helécho que te cercan! * Yerba junto al camino , que del todo
Conozco hora al amor , es un Dios fiero, Por tí estaba perdido , y que no hacías
Que las tetas mamó de una leona, Algún caso de mí. Mira, pues ¡ cierto,
Y en los montes su madre le criaba, Una candida cabra yo te guardo,
Que abrasando á los huesos me ha llegado. Madre de dos mellizos, y Eritaca
O hermosa de mirar , y toda piedra 1 • La negra de Mernon me la ha pedido,
O cegi-negra Ninfa , á tu cabrero Darésela , pues tú de mí te burlas.
Abraza , y yo te bese, que en los vanos Sáltame el ojo diestro,7 y que verela?
Besos hay placer dulce. Harás que luego Cantaré junto al pino reclinado,
La corona destroce, que de yedra, Y acaso mirará no es dé diamante.
Amarilis hermosa , yo texia, Quando Hypomanes, desposar quería
del apio oloroso con las hojas. Con la doncella, la manzana en manos
¡Ay de mí! qué será, de mi cuitado ? Tomando, daba fin á la carrera;
B 4
24 IDILIOS
DE TEOCRITO, «s
Como le vió Atalanta luego en furia
Y en un profundo amor fué reducida. IDILIO IV.
Melampo el adivino desde el Otri
A Pylo la manada conducía, LOS PASTORES.
Y en brazos de Biante reclinada,
BATO , Y CORYDONí
La hermosa madre fue de Alfesibea
La sabia : ¿y á la hermosa Cyterea BATO.
No puso en gran furor el bella Adonis, Corydon , dime, cuyas son las vacas?
Que ni aun muerto del pecho le apartaba?
Son de Filondas i
Endimion dichoso me parece
Pues yace en sueño eterno: y venturoso, CORYDON.
O cara esposa , á Jasion entiendo
Pues tanto consiguió quanto profanos No , de Egon , que ahora
Por las apacentar me las ha dado.
Vosotros no oiréis. ¡Ay! la cabeza
Me duele , pero tú no cuidas dello, BATO.
Ya no cantaré mas,'y aquí tendido
Y en dónde á lo escondido las ordeñas
Yacere do los lobos me devoren,
A todas por la tarde ?
Que est o á tu paladar es qyal miel dulce. s
. CORYDON.

Las terneras
Las pone el viejo , y bien á mi me guarda.

BATO.

Y el ausente boyero á do se ha ido ?


i

20 IDILIOS
DE TEOCRITO. .

AI punto.
CORYDON.
CORYDON.
No lo has oído ? lo llevó consigo
Milon ácia el Alfeo. Las novillas rebramando
Le desean aquí.
BATO.
BATO.
Y quándo él nunca
Vio el' olio por sus ojos ? 1 Triste ganado
Qué mal pastor halló!
CORYDON.
CORYDON.
Pues él dicen
Que en fuerza y robustez contender puede Cierto , cuiiadao
Con Alcides. Ni quieren ya pacer..

BATO. BATO.

También mi madre dixo, A esta novilla

Ser yo mejor que Polux. Los huesos han quedado solamente,


Por caso se mantiene del rocio,
CORYDON.
Como cigarra ?
De aquí íuese,
CORYDON.
Llevando un azadón y veinte ovejas.
No por esta tierra,
BATO.
Que la llevo á pacer junto al Esaro,
Milon hizo rabiosos á los lobos * Y de blando heno buenos hacecillos
X
be teccrito.
*9
' minos /’
CORYDON. |
La doy , y varias veces retozando
Va por Latymno umbroso y floreciente, Ella no , por las Ninfas, que al partirse
A Pisa en don me la dexó, que un poco
BATO.
Soy cantor , y gorgeo los cantares
Está flaco también aqueste toro De Glauca y Pyrro, y á Croton celebro.
El roxo, si por suerte Ies tocara Zazynto es ciudad bella , y el Lacynio
Otro tal á los Lampridos malvados, que mira acia la Aurora, dó el valiente
Al ofrecer á Juno. Egon se comió solo ochenta tortas,
i, ’ Y allí del monte asido por la uña
CORYDON.
Llevó al toro , y donoselo á Amarylis:
, Y ese vaga Las mugeres clamaron altamente,
Da la laguna en la ribera, y cerca Y el pastor se reia.
De Fyco y de Ñeeto, en donde nace
Todo lo bueno, el egipyro 3 y cnyza, BATO.

Y olorosa melisa. O Amarylis


Graciosa! ni ya muerta te olvidamos,
BATO.
Amada , falleciste , qual mis cabras
Áy! Ay! los bueyes Son amadas. Ay! Ay! cruel fortuna
Irán al Orco en tanto , Egon cuitado, En suerte á mi me vino 1
Que tú anhelas la misera victoria!
Y la flauta que un tiempo fabricaste CORYDON.

ApoliUada se envegece ahora. Caro Bato


Conviene confiar, quizas mañana
20 IDILIOS DE TÜOCRITO,
Si
Será mejor , que los vivientes tienen Nó lo ves?
Esperanza, los muertos 4 ya no esperan*
Y Júpiter á veces es sereno, CORYDON.

Y á veces llueve. Cierto, cierto, ya la tengo


Entre las uñas, y hela ya la misma.
BATO.

Ya confio, amigo: BATO.

Y los novillos echa por abajo, O qué pequeña punta / y cómo rinde .
Que los ramos de olivo están royendo A un gran hombre !
Los cuitados. De aquí lejos, ó blanco.
CORYDON.
CORYDON.
Bato , quando vayas
A la cuesta , Cymetha, no has oido ? Por el monte , descalzo no camines,
Iré, por Pan, y te daré un mal año Que en los montes florecen las espinas
Si de aquí no te vas. Hela , ya vuelve, Y zarzas.
Ojalá yo tuviera el corvo palo
BATO.
Que te moliera.

BÁTO.
Corydon , dime, y el viejo
Aun juega con aquella cegi-negra
Corydon, aguarda, P01 quien perdido andaba en otro tiempo?
Por Jove , que una espina me ha clavado
Baxo del calcañal; qué levantados CORYDON.

Están los espinales! Ah ! mal haya O mucho... / El cuitadillo, y encontrólos


La novilla , por ella soy herido. Que estaban juntos quando yo llegaba

t
5» IDILIOS SI TEOCRITO.
33
Junto á la choza.
COMATA.'
BATO.
Qué flauta? pues tú , esclavo Sybarita,
Bueno ! si, tu raza, Quando has tenido flauta ? no te andabas
Hombre lascivo, contender pudiera Con Corydon silbando con las cañas ?
Con los Sátiros 5 mismos desde cerca,
Y con los Faunos de delgadas piernas. LACON.
'■ ■ ■' — ’,J < - n r.j£fjriCv/
La que me dió Lycon , ó noble , dime
IDILIO V. Comata , qué pellico en algún tiempo
Se fue Lacón hurtando , si .ni Eumara
LOS CAMINANTES , Ó LOS BOYEROS
Tu amo tuvo piel en que durmiese?
CANTORES. '
COMATA.
: x'_- , • n . j .■ •
COMATAS , Y LACON. La que me dio Crocylo variada,
Quando á las Ninfas ofreció una cabra:
COMATAS.
Y entonces ya malvado de envidioso
Huid del Sybarita , mis cabrillas,
Te deshacías, y hora finalmente
De aquel pastor Lacón , que mi pellico Me dexastes desnudo.
Ayer robó.
LACÓN.
LACON.
No, mi amigo,
¿ Corderas, de la fuente Por Pan de la ribera , ño ha robado
Cómo no os apartais ? no veis en ella El pellico, Lacón el de Cálete,'
De la mi flauta al robador Comata ? Y sino desta peña derrumbado
C
IDILIOS
34 DE TEOCRITO.
3S
Furioso á Cratí salte.
COMATAS.
COMATAS.

No por cierto, Qualquiera como tú que se confia


De vencer al vecino , como abeja
Por las Ninfas del lago, que graciosas
Susurrando a la par. de la cigarra,
Y placientes me sean, tu flautilla
Mas no iguale el cabrito, tú contiende,
Comata no robó éscondidamente.
He aqui un cabrón.
TACON. • ' ■ ,
óc.íi • TACON.
Que sufra yo de Dafni los dolores
Si te creyese , mas si acaso quieres Despacio , pues , espera,
Que no te abrasa el fuego , y reclinado
Apostar un cabrito, nada es sacro, 1
En este bosque baxo el azebuche
Contenderé en cantar mientras que puedas.
Mas dulcemente cantarás, en donde
COMATAS. El agua fresca corre , y la nacida
Yerba es lecho , y en dó los grillos suenan.
El puerco contra Palas contendía
Un tiempo , ya depuesto es el cabrito. COMATAS.
Pon , pues, tu algún cordero bien pacido.
No me apresuro , pero á mal yo llevo
TACON. Que con derechos ojos á 'mirarme
Te atrevas , á quien , siendo tu muchacho
Y cómo , picaron , nos saldrá á gusto?
Te enseñó ; mira, pues , que agradecido !
Quién trasquilara pelo en vez de lana ?
Cria lobillos , canes cria , y luego
Quién presente una cabra primeriza
Te comerán.
Querrá ordeñar alguna mala perra ?
■ • • ~
C 2
;3* IDILIOS DE TEOCRITO,

LACON. LACON.

Pues qv.ándo algo de bueno De corderos


Aprendí yo de ti, ú oí que sepas, Pieles, y lana pisarás si vienes,
Envidioso, apocado, y hombrecillo? Mas suaves que el sueño: las tus pieles
De cabra peor hieden que tú mismo.
COMATAS.
Y de candida leche un vaso grande
Quando yo te burlaba , y te quejabas, Pondré á las Ninfas , y del olio dulce
Y balaban las cabras que seguidas Otro.
Eran del macho..... A
COMATAS.
LACON.
Si tú vinieses, en el blando
No mas hondo seas Plelecho pisarás, y el florecido
Enterrado , giboso , que aquel juego. Poleo , y por debaxo serán puestas
Mas ven, aquí te llega, y luego canta. Unas pieles de cabra , muy mas blandas
Que las que tienes tú de los corderos,
COMATAS.
Y ocho tarros á Pan daré de leche,
Allá no iré , que aquí ciprés y encina, Y ocho vasos bien llenos de panales2
Y abejas hay , que suenan dulcemente De miel.
En torno á las colmenas , y dos fuentes
LACON^
De frescas aguas , y las mismas aves
Gorgean sobre el árbol , y la sombra Aquí contiende, y aquí canta
No parece á la tuya, el pino arroja El verso pastoral, tu; puesto pisa,
Las pinas desde el alto. Y tente? tu encinal; mas de nosotros
Cj
^8 IDILIOS BE TE0CR1T0. 39
Quién juzgará.? Ly copas si viniese Es la manada , y de cabrío el ato
Aquel pastor de bueyes. Que aqui ves, es de Eumara Sybarita.

COMATAS. TACON.

No Ip quiero, Y quién te preguntaba si el ganado


Si quieres al leñero llamaremos, Es del Eumara, ó mió, bribonzuelo ?
Que allí junto de tí los brezos roza. Que hablador eres.
El es Morson.
COMATAS,
TACON.
Ola, buen amigo,
Llamemos • Lo que digo es verdad , ni me envanezco.
t.... t : ■_ • Eres tú muy amigo de mofarte.
COMATAS. /
: i..■ UOO J ,
TACON.
Tú le llama.
TACON.
Di si es que decir tienes, y al Leñero
Amigo , aquí te llega , y oye un poco, A la Ciudad envia otra vez vivo. 3
Nosotros contendemos en qual sea O Apolo 1 bocáron eres Comatas.
Mejor cantor , y así , Morson amado, A). ..JÍr . ■!. ...'dl.il
COMATAS,
Ni me juzgues por gracia , ni le ayudes.
LasMusas me aman, y muy mas que a Dafni
COMATAS.
El cantor, yo poco ha las di Sos cabras.
Asi , pues , por las Ninfas , ni á Comata . , . - o ni: c ■
TACON,
Des mas ventaja, ó Morson , ni agraciado
Sea Lacón : de Thurio el Sybarita Y Apolo me ama mucho , y un hermoso
C4
/

40 IDILIOS DE TEOCRITO* ít ■,

Cordero le apaciento , pues ya llegan


Las Carneas. 4 COMATAS.

COMATAS.
Mas la zarza, y amapola
No han de ser comparadas con las rosas/
Y yo ordeño las cabrillas) Cuyas flores se crian en las eras. b
Que paren dos } sn estas , y la moza
Mirándome me dice: ó cuitadillo, TACON.

Tú mismo ordeñas?
Ni con bellotas las monteses peras,
LACON.
Que unas tienen ’del tronco una delgada
Corteza , mas las otras son melosas.
Ola , Lacón , ola,
Llena de queso veinte canastillos, COMATAS.
Y con bello doncel juega entre flores. 5
Un palomo después daré á la moza,
COMATAS. Cogido en un enebro, allí anidaba.

Y al cabrero que guia las cabrillas, LACON.


Tiia manzanas Claris , y amorosa
Y yo á Cratis daré para vestidos,
Habíale dulcemente.
En esquilando las ovejas negras,
LACON. Lana blanda.

■:~~J Y á mi Cratis, COMATAS.


Mozo sin barba , loco me ha tornado,
Cabrillas , léjos, ea>
Que un luciente cabello por el cuello
Del azebuche, y pacentad en la alta
le ondea.
Loma , donde hay tarayst
1- X . ,
4«- IDILIOS DE TEOCRITO. 43
Asi enfadáis también los segadores.
LACON.
COMATAS.
No tú Conaro, 7
Ni tú Cymetha, andad desde la encina Aborrezco las zorras de pelosas9
Acia levante , como va Falaro. Colas, que siempre vienen á la tarde,
Y de Micon despojan el viñedo.
COMATAS.

LACON.
Tengo yo de ciprés un tarro , y vaso,
Obra de Praxíteles, y los guardo • Y yo los moscardones aborrezco,
A la moza. • Que llevando los higos de íilonda.
e ......■.• ■
Se van muy altos.
1AC0N.
COMATAS.
Y yo tengo un can amanta
Del rebaño, que acaba con los lobos, ¿ No te acuerdas quando
Y lo daré al muchacho por que siga Yo te azotaba , y tú con faz torcida
Todas las fieras. Te movías muy bien , y te pegabas
De aquella encina ?
COMATÀS.
pW :
C(!
LACON.
O vosotros, grillos,
Que acostumbráis saltar nuestro cercado, De eso no me acuerdo;
Mis vides no dañéis porque son nuevas. ® Pero sí quando Eumara te tenia
Atado, y te azotaba, bien me acuerdo,
V-
LACON, v
CIA :.r’C • '■ ' * ?':v- |0 -r , , 'j erndKc alie
Ved, cigarras, qual yo al cabrero irrito» c.j;.' ■ v , nomo'..'
IDILIOS PE TEOCRITO. ■4.5
44
Entre matas.
COMATAS.
¿ACON.
Alguno ya se pica, ¿no lo sabes, s
Melisa han mis ovejas
O Morson ? Ves al punto, y del sepulcro
Arranca las esciías. 10 Para pasto , y la yedra florecida
Como rosas./
LACON.
COMATAS.
Ya he picado
'Álcipe no es mi amada,
A no sé" quién, y tó lo miras Morson,
Ves al Alente, y saca el cyclamino.
Pues que no me besó la oreja asiendo,
- . *' -'i Ji i.:. ■ \ ' Al darla yo el palomo.
COMATAS.
LACON.
Injera en rez del agua corra leche, < .....
Pues yo quiero
Tú Crati te purpures con el vino,
A Eumedes, pues al darle una flautilla
Y lleven también fruto las juncadas.
Me besó dulcemente.
LACON.
COMATAS.
Corra para mí miel la Sybarita, 11
Y en la mañana la doncella bañe No á las grajas
Con panales el cántaro en vez de agua. Conviene contender con ruiseñores,
'■ OT/f Ni abubillas con cysnes, tu, cuitado,
comatas.
Eres aborrecible.
Mis cabras el cytiso , y el egilo
Comen , y el junco pisan, y se acuestan
45 I>E TEOCRITO. 47
IDILIOS

MORSON. IDILIO VI.


Callar mando
Al pastor obejero , á tí Comata LOS LOTEROS.
■ . ■ ; I
Quiero dar un cordero ,y tú á las Ninfas
Sacrificando , envia bella carne DAMETAS , Y DAFNIS.

A Morson luego.
Dameta un tiempo, y el boyero Dafni
COMATAS. Juntaron en un sitio la manada,
Eñviarela , cierto, Arato , el uno dellos era roxo,
Por Pan : bramen de gozo los cabrones Y el otro el blando bozo descubría:
Todos; y ve qual yo gran carcajada A par de cierta fuente recostados
Contra el pastor Lacón daré , ya tengo Ambos, en .mediodía de verano,
El cordero : saltad basta las nubes, Asi cantaban, comenzó primero
Buen ánimo, cornudas cabras mias, Dafni que la contienda comenzara.
Lábaros he mañana én Sybarita DAFNIS.
Fuente , ola tú, blanco, que corneas,
Si alguna cabra hieres , castigado O Polyfemo , á tu rebaño tira
Serás primero que el cordero ofrezca Manzanas 1 Galatea, y al cabrero
A las Ninfas; mas hele que ya torna, Desamorado llama , y no la miras
Y seré yo si no te castigare Infeliz , infeliz , mas asentado
Como Melanthio 13 , pero soy Comata. Flauteas dulcemente : otra vez hela
Que tira á la mastina que te sigue,
Guarda de las ovejas, y ella ladra
4^ IDILIOS
DE TEOCRITO. qy
Mirando al mar, y las hermosas olas,
Se deshace , y al mar salta, mirando
Que blandamente braman, la descubren
Enderredor las cuevas, y rebaños.
Correr sobre la playa ; ten cuidado
Ladrarla mansamente á la mastina
No hiera á la doncella a la salida
Hice , pues, quando enamorado estaba
Del mar , y despedace el bello cuerpo.
Della , gañia los sus pies lamiendo.
Ella retoza allí , qual del acanto
Viéndome hacer lo mismo muchas veces
Eas secas hojas , quando hermoso estío
Luego me avisará , pero las puertas
Acalora, y huye del su amante,
Cerraré, hasta que jure que ella misma
Y sigue al no amador apresurada:
Me ha de mullir un apacible lecho
Ella la piedra de la raya mueve, ■
Y al amor muchas teces , Polyfemo, Sobre Ja Isla, porque cierto tengo
Hermoso , lo no hermoso le parece. No mala vista (qual me dicen), y hora
Después de este Dameta, así cantaba, En el mar me miré (tranquilo estaba),
Y hermosa la mi barba, y bello el ojo,
í) AMETAS. (Qual para mí pensé ) me parecía:
Vila, por Pan, quando tiraba al ato, El blancor de los dientes mas que piedra
Y no se me ocultó , ni al mi dulce ojo De Paros relucía, y en mi seno
Unico, con el qual hasta el fin vea, Tres veces escupí, no me dañasen,
Aunque Telemo el adivino, míales Qual me enseñó Cotytaris la vieja,
Agoraba , los lleve á su morada, Que poco ha tocando el chiflo estaba
Guárdelos a sus lujos , mas yo mismo Entre los segadores de Hypoconte,
Punzando 2, de mirarla mas no curo; Diciendo así , Dameta á Dafni besa,
Y la digo tener otra doncella, Dale la flauta , y él el chiflo hermoso,
Y ella oyéndolo , ó Febo, de zelosa Toca Dameta el chiflo , el pastor Dafni
Flautea , y en la blanda, y verde yerba
D
SO IDILIOS
DE TEOCRITO.
Las novillas saltáron al instante,
Y era cabrero , y nadie dudaría
Lúes ninguno venció, ni eran vencibles.
Al verle , tan del todo semejante
A un cabrero , ceñida por los hombros.
IDILIO VII.
La roxa piel vellosa de un cabrío
Peloso , que aun olia al fresco cuajo,
LAS THALYSIAS.
Y por los pechos una vieja capa
Un tiempo, quando fuimos al Alente Atada con cordel muy retorcido,
Eucrito y yo de la Ciudad , y Amintas Y una corvada porra de azebuehe
Terciaba con nosotros , pues hacían Llevaba en la derecha , y blandamente)
A Ceres las Thalysias Prasidamo, Y con mirar risueño me decia,
Y Antigenes, dos hijos de Lycope, (Pues la risa en sus labios siempre estaba}'.
Si algo bueno quedó de los antiguos ¿A dó llevas tus pies al medio dia,
De Clycias y Chalcon , el que acabara Simichida? hora ya por los bardales
De su pie la fontana de Burea, 1 El lagarto reposa , ni ya vagan
Bien -apoyada en piedra la rodilla; * Encrestadas alondras. Tú, por caso,
Y á par della los álamos nacidos, O de algún ciudadano en los.lagares
Y los olmos humbroso bosque hacian Pisas, ó.vas á cena convidado?
Cubiertos de frondosos verdes ramos. Quede tus pies las piedras removidas
No anduvimos aun medio camino, Al andar , todas suenan en las suelas.
Y yo le respondí: Lycida caro,
Ni se nos descubria de Brasila
Todos dicen ser tú flautista grande
El sepulcro , y un cierto caminante
Entre los segadores, y pastores,
Varón bueno Cydonio nos hallamos,
Esto me llena e¡ ánimo de gozo,
Por las Musas, que Lycidas llamaban,
Aunque espero igualarte á lo que entiendo.
D2
DE TEOCRITO. 13
S® IDILIOS
Y trabajan en vano. Ya empecemos
Este camino á lásThalysias guia, A cantar las canciones pastorales,
Pues varones amigos han dispuesto Simichida , y escucha si te agrada,
A la velada Ceres un convite, A mían, este cantar que por el monte
De su haber las primicias ofreciendo, Trabajé poco ha, y así captaba;
Porque la Diosa-con medida llena Navegación feliz á Mytilcne
Colmó de mies sus eras: ea vamos, Ageanacte tendrá, aun hora quando
Pues tenemos común camino, y dia, El austro al trasponer de las cabrillas 5
Cantemos las canciones pastorales,
La húmida onda del piélago remueve.
y el uno al otro ayudará por caso,
Y quando sobre el mar los pies afirma
Que mis labi os las Musas inspiraron,
El Orion , si á Lycida remedia
Y excelente cantor me llaman todos.
Encendido de amor, porque me abrasa
Pero yo no los creo fácilmente,
Su ardiente amor, y aplacarán las olas,
No por la tierra, ni según entiendo
Y el mar los Alcyones, y Euro, y Noto
Ni al buen Samio Sicelida me igualo
Los que menean las postreras algas.
En cantar, ni á Fjletas, y porfío, Los Alcyones, que son entre las aves
Qual rana con los grillos: así dixe Que cazan en el mar muy mas amados
Con cuidado. Reía dulcemente . De las Nereidas glaucas. Todo sea
El cabrero, y aquesto me decia: Feliz á Ageanacte que navega
Daréte este cayado, el qual es todo A Mitylene, y halle bello puerto.
Una planta que Dios ha producido, Yo llevapdo aquel dia en la cabeza
Que aborrezco al artífice que intenta La corona de rosas, ó de eneldo,
A la cima igualar de Oromedonte O de blancas violas, reclinado
La casa , y á las aves de las Musas, A par del fuego beberé la copa
■Que en contra graznan del cantor de Chio,
g'4í IDILIOS DE TEOCRITO. ss
Del vino de Ptelea , y otro al fuego o Comata dichoso, estas delicias
Las habas tostará, y el lecho espeso Te aviniéron á tí, fuiste cerrado
Hasta el codo estará de'ceniza, y apio En la caX3, pasaste .un año entero
Flexible , y de gamón; yo dulcemente Con panales de abejas sustentado.
Beberé á la memoria de Ageanacte, ¡O si contado entre los-vives fueras
Los labios aplicando hasta ¡as heces; En mi tiempo! que yo te apacentara
Tocaránme la flauta dos pastores, Las bellas cabras por los altos montes,
Uno Ácharneo , el otro Lycopita, Escuchando tu voz, y tú asentado
Y Tityro allí cerca esté cantando, Debaxo de los pinos, o la encina,
Como á Senea Dafnis el boyero Cantando dulcemente , buen Comata.
Amaba un tiempo, y como por el monte Diciendo así cesó. Yo le decia:
Vagaba, y como al mismo las encinas Lycida caro, ámí también las Musas
Lamentaban que crecen á la orilla Otras varias canciones me enseñaron,
Del rio Imera, quando qual la nieve Apacentando bueyes en los montes,
Se deshacía de la cumbre de Hemo, Y buenas, que la fama las llevaba
O del Atho, ó del Rodope, ó Caucaso Del mismo Jove al trono, mas de todas
Apartado, y cantará como la arca La mejor, la que ahora he de donarte,
Espaciosa otro tiempo recibiera • Comenzaré. Tú, amado de las Musas,
Al cabrerizo vivo , por malvadas Escucha. A Simichida los amores
Intenciones del amo , y las chatillas Estornudáron, 4 pues, á Myrto el triste j
Abejas de.los prados se venían Ama tanto, quanto aman las cabrillas
A sustentarlo, en el suave cedro La primavera, Arato que de todos
Con tiernas flores, porque dulce néctar
Es su mayor amigo, en las entrañas
En su boca la Musa derramara.
Tiene el amor de un joven, bien lo sabe,
D4
5« IDILIOS
BE TEOCRITO. s?
Aristi, el grande Aristi, el qual ni Febo
Vosotros amorcillos colorados
Se desdeñara si cantar le oyese
Como manzanas, á Filino amable
A la lyra en los trípodes. ¡ O como
Tirádmele, tirad con vuestros arcos,5
En los amores del doncel se abrasa
Pues el cruel ni aun apiadarse quiere
Arato hasta los-huesos! Tú le lleva,
De mi huésped , aun siendo mas suave
O Pan, tú que has en suerte los amenos
Que el apio ; y las mugeres muchas veces,
Campos de Omola; vaya no llamado
Ay! ay! Filino , dicen, desparece
A sus amantes brazos, ya que sea
Tu bella flor, ni mas en tus umbrales,
El suave Iilino, óqualquier otro.
Arato , velaremos , ni cansemos
Y si esto hicieses, dulce Pap , los niños
Nuestros pies ya, y el matutino gallo
De Arcadia con escilas no te azoten
Cacareando á otro , en despacibles
Eos ombros, y costados, quando tenga»
Torpecimientos dexe , y solo Molon
Poca carne en las aras; si no quieres,
En esta liza, ó grande, se degüelle.
Por todo el cuerpo seas lacerado,
Y nosotros cuidemos del descanso,
Y con uñas punzado, y en ortigas
Y á par de nos la vieja que escupiendo
Duermas,y en medio invierno por los monte»
Nos aparte las cosas nada buenas.
Estés,de los Edones vuelto al Ebro
Dixe así: y él riendo dulcemente
Del oso no distante : en el estío
Como antes, me donaba el mata liebres
En la última Ethiopia apacentando
Como don de las Musas, y torciendo
Debaxo de la peña de los Blemys,
A la izquierda, el camino que va á Pisa
De donde el N¡l0 ya no se parece.
Siguió. Mas yo, y Eucrit'o nos volvimos
Vosotros que moráis la escelsa estanz?
En cas de Prasidamo, y el hermoso
De la roxa Diana, abandonando
De Jeti y Byblis las suaves aguas.
Amyntillo también, y nos echamos
En camas ondas de suave junco, i
IDILIOS BE TEOCRITO. ¿9

Sobre los frescos pámpanos alegres» Aquel pastor de Anapo, Polyfemo,


Muchos álamos y olmos se movían Que en los'montes lanzaba los peñascos,
Sobre nuestra cabeza, y muy cercano Un tal Néctar7 movió, y en los establos
Salía de la cueva dé las Ninfas Hizo danzar, qual era la bebida
Un arroyo sagrado susurrando. Que vos, ó Ninfas,disteis aquel día
En sombrosos planteles las cigarras De Ceres areal en los altares.
Ardientes en el canto se afanaban, Y oxalá que otra vez en sus montones
Ea calandria á lo lejos chirriaba Fixe yo la gran pala , ella risueña,
En las espinas del zarzal espeso. Tenga.en su mano flor, y adormideras.
Cantaban las alondras y cárdeles,
•La tórtola gemía, y revolaban IDILIO VIH.
Las doradas abejas por las fuentes,
1 odo espiraba un abundoso estío, IOS BOYEROS CANTORES.

1 otoño respiraba:largamente
Al bello Dafni apacentando bueyes
Se meneaban á los pies las peras,
Y á par de los costados las manzanas, Menalcas encontró , que pacentaba
Doblábanse los ramos encorvados Ovejas (según dicen) en los montes
A la tierra cargados con endrinas, Altos, ambos de rubia cabellera,
Y la pez de quatro años se quitaba Y no barbados, y los dos sabían
De la boca de cántaros. O Ninfas Cantar,y flautear , A£enalca viendo
De Castalia , que estáis en las alturas A Dafnis el primero así le dice:
Del Parnaso, decid si allá en la cueva MENALCAS.
Peñascosa de Folo , el viejo Chiron
Puso tal vaso á Alcides, ó ai valiente, Dafni, pastor de mugidoras vacas,
6o IDILIOS
Quieres cantar conmigo? Yo aseguro. J>E TEOCRITO, 61
Que cantando te venzo quanto quiero. Apostar un Cordero, que mi padre
Al qual respondió Dafni deste modo: Es terrible , y mi madre, que á la tarde
Cuentan todo el rebaño.
dafnis.
DAFNIS.
OMenaIca,pastorde las lanudas
Ovejas, y flautista, nunca puedes ¿Pues qué cosa
En el canto vencerme, aunque te mates, Puedes poner , y que llevarse debe
El vencedor?
menalcas.
menalcas.
íQuieresIo ver , y quieres poner premio?
- Apostaré una flauta
dafnis, Buena de nueve voces , que compuse
Quierolo ver, y quiero poner premio. Con cera blanca, igual de todos lados,
Que lo que es de mi padre yo no pongo.
Menalcas.
DAFNIS.
¿Pues el qué se pondrá que nos convenga*
Pues tengo yo también de nueve voces
dafnis. Una flauta , con blanca cera unida
Un novillo pondré, pon tú un cordero Igualmente por alto y por lo baxo,
-Igual ya con la madre. Hícela poco ha , y aun me duele
El dedo herido de rajada caña.
menalcas. ¿Mas quién nos oirá, que juez nos sea?
Nunca puedo
DE JTEOCRITO.
da IDILIOS

MENALCAS.
MENALCAS.
Por todas partes es la primavera,
Llamemos al cabrero, á quien ladrando
Por todas hay pasturas, y de leche
El perro blanco está entre los cabritos.
Las tetas se retestan, y se engordan
Llamáronle los mozos, y.el cabrero
Las nuevas crias: dó la bella niña
A oir vino, y cantaban los donceles:
Viene , y de dó se vá, por allí luego
Cayó la suerte de cantar primero
Abrasase el pastor, también-la yerba.
Al flautista Menalca, y alternando
La cantinek'pastoral seguía DAFNIS.
Dafni, y así Menalcas' comenzaba:
Allí están las ovejas , allí cabras
MENALCAS. Madres de los mellizos, allí abejas
Llenando las colmenas, y mas altas
Valles, y rios, sacra descendencia,
Son las encinas, en dó eLbelloMilon
Si algún dulce cantar cantó Menalcas
Mueve los pies; y si se parte, luego
Flauteando , paced de buena gana
Secanse de una vez boyero, y vacas.
Estas corderas, y si acaso viene
Dafni con sus cabrillas, igual gracia MENALCAS.
Tenga.
DAFNIS.
Gallardo macho de las blancas cabras,
Y vosotros también cabritos chatos,
Fuentes, y yerbas, apacibles
Acia la altura de la selva, al agua
Plantas, si canta Dafnis de tal modo
Venid: aquí él está. Tú, mutilado,
Qüal suelen ruiseñores, haced grueso
Anda , y dile á Milon como Proteo
Este rebaño, y si Menalca liega,
Aun siendo Dios apacentó las focas.
Alegre goce los copiosos campos.
«4 IDILIOS DE TEOCRITO. ffg

Porque siendo pequeño guardo muchas.


DAFNIS.
O can , Lampyro , ¿ así profundo sueño
No sea que yo tenga de Pelope 1 Te tiene ? no conviene dormir tanto
Los países, ni de oro los talentos, Con un pastor muchacho; mas, ovejas,
Ni al viento me adelante en la carrera, * No temáis el pacer la tierna yerba,
Mas téngate en mis brazos, y debaxo Ni os fatiguéis, quando. ella otra vez nace
De la peña yo cante, y juntamente Paced , paced, llenad todas las tetas,
Paciendo las ovejas, y mirando Porque tengan su parte los corderos,
Al mar Siculo. Y parte en los cestillos poner pueda. ;
Luego Dafnis cantó suavemente;
MENALCAS.
DAFNIS'.
El frió es mal temible
A las plantas, y al agua el tiempo seco, Denantes me miró desde la cueva
A las aves el lazo, y á las fieras La cegijunta moza , yo llevaba
Las redes, y á los hombres los amores Las novillas, llamóme bello, bello,
De las tiernas doncellas. Padre Jqve, i cierto no la di mala respuesta,
No solo amé, que tú de las mugeres 3 Mas con los ojos baxos, riii camino
Fuiste amador. Así alternadamente Seguí. Dulce es la voz de la novilla, g
Los donceles cantaron, y Menalcas Dulce el aliento , y el bramar suave
Comenzó deste modo el postrer canto. Del becerro, y suave el de la vaca,
Y dulce el acostarse junto al agua
MENALCAS.
Del arroyo en verano: á las encinas
Dexa mis cabritillos, lobo, dexa Adornan las vellotas, las manzanas
Mis preñadas, ni á mí dañarme quieras Al manzano, a las vacas los novillos,
E
' 66 IDILIOS

Los bueyes al boyero. Así cantaron


DE TEOCRITO. *7
Los donceles, y así cantó el cabrero.
IDILIO IX.
CABRERO.

O qué dulce es tu boca , y apacible DAFNIS, Y ME FT ALC AS,

Tu voz, ó Dafni, y es muy mas gustoso El canto pastoral comienza, ó Dafni:


Oir tu canto , que gustar panales,
Las flautas toma, que en cantar venciste, Comienza tú primero los cantares,
Y si quieres también á mí enseñarme Después Menalca siga, los becerros
Guardando cabras, te daré por ello A las vacas juntando, y con los toros
Esta cabrilla mocha , que contino Las no paridas, y apacienten juntos,
El tarro hasta lo alto llenar suele. Y en la enramada vaguen, nodexando :r
Saltaba alegre el mozo, y aplaudía . El rebaño ; mas tú de aquí me canta,
Venciendo , como salta el cerbatillo Y desde allí Menalca corresponda.
Que va en pos de su madre; mas el otro
DAFNES.
Sintiólo, y de pesar llenó su pecho,
Qual suele entristecerse nueva esposa * Dulce es el rebramar de los novillos,
Ojiando se casa. Desde aqueste tiempo Y dulce el de la vaca , y la zampoña
Dafni entre lo$ Pastores fué tenido Suave, y el boyero, y yo mas dulce.
Por primero, y aun siendo jovencillo Tengo yo un ¡echo junto al fresco arroyo,
Con una Ninfa Nayade casóse. Y en él tendidas las hermosas pieles
De las blancas novillas , que de un risco
i
El abrego arrojó, quando roian
Todas un c ornaron , yo cuido.tanto
Del caloroso estío, quanto.el que ama 1
Ea
DE TEOCRITO. 69
68 IDILIOS
Delante estos pastores: ni ya cries
De padre y madre oir razonamiento. Vexigas en la punta de la lengua.
Así Dafni cantóme. Así Menalca: Amiga es la cigarra á la cigarra,
MENALCAS.
Y la hormiga, á la hormiga, los azores
A los^azores, para roí las Musas
Etna es mi madre, y una hermosa cueva Y el canto que oxalá mi casa llene;
Es mi morada en cóncavos peñascos, Así ni el sueño, ó presta primavera
Tengo quanto en el sueño se aparece, Es mas dulce, ni tanto á las abejas
Muchas ovejas, cabras también muchas, Las flores, como á mí caras las Musas.
Cuyas pieles los pies, y la cabeza A los que ellas alegran Con su vista
Cubren, y hirviendo en encinoso fuego Circe no encantará con sus bebidas.
Están las asaduras, y en invierno
Es de haya seca el fuego ; mas no tengo IDILIO X.
En tanto el tiempo frió , quanto el niño
Las nueces, quando puches ha delante. 1 IOS SEGADORES.

Aplaudiles, y en doná Dafni luego / MILOS, Y BATO.


La vara di por sí misma nacida,
Que en campo de mi padre fué criada - MILÓN, .
Qual nunca algún artífice enmendara.
De ostra una hermosa concha, cuya carne Trabajador Gañan, ¿qué.te sucede-?
Comí, pescada en las Icarias peñas, Cuitado, ni llevar sulco derecho
Que se' partió entre cinco, por ser cinco, Hora como antespuedes, ni ya siegas
Al otro di, y sonó la caracola. A par del compañero, mas dexado
O Pastorales Musas, ea el canto Eres detras, qual res 1 qüe en el rebano' :
Manifestad que yo Cantó algún dia E3
DE TEOCRITO. 7*
Del espinal los pies llagados tiene.
¿ Quál estarás cuitado al medio dia, MILON.
Pues hora al comenzar no vas tragando Sacas el vino
El sulco?
De cuba, y yo ni asaz vinagre tengo. 2 J
BATO.
• . ' ■

O Milon, duro en el trabajo, BATO.

Duro como pedazo de una piedra, Así cabe mis puertas sin simiente
No te avino el amar algún ausente?
Inculto todo está.
MILON.
MILON.
Nunca. De los de fuera qué desea De las doncellas
El hombre que trabaja?
Quál te atormenta ?
BATO.
BATO.

¿No te avino Aquella Polybota


El velar por amor ?
Que hora en los segadores de Hypoconte
MILON. Tocaba el chiflo,

Ni me suceda, MILON.
Difícil es al can comer el cuero.
Por el Dios hallado
‘ í p n¿ ' • ••".’d in . obtliuD
BATO. Es el malo, y ya tienes lo que un tiempo
Deseaste, á tu lado por la noche
Pues yo , Milon, estoy enamorado
Tendrás una delgada calamaya. 3
Casi once dias yá.

E4
V.

V* IDILIOS DE TEOCRITO. 73

A tí. O si hubiera yo quanto se dice


BATO.
Que un tiempo Creso había, ambos corados
¿Comienzas tú á burlarme ? no pues ciego Ante Afrodita fuéramos, teniendo
Es Pluton solo, que también el mismo La flauta tú, la rosa, ó la manzana, 5
Amor tranquilo, ni hables vanamente. Yo con vestido , y con calzados nuevos
En los dos pies. Tus pies,6 ó Bombys bella,
MILON.
Son blancos como dados, tu voz dulce,
No digo vanidad, y tú las mieses Y de tu modo que decir no tengo.
\
Derriba, y di de tu doncella un canto
MILON.
Amoroso, que así el trabajo aplace,
#.
Pues fuistes antes uñusico algún tiempo. Con quán dulces canciones nos divierte
El Segador! Que bien las armonías
BATO.
Ha medido! Sin tiempo eres barbado.
Musas de Piero, celebrad conmigo Oye pues, del divino Lytciersa:
Mi delicada Ninfa, pues á quanías Frutosa Ceres , y espigosa, sea
Tocáis, ó Diosas, las hacéis hermosas. Esta mies bien cogida, y abundante
O bella Bombys, todos la Soriana Muy mas, ó segadores, las manadas
Te llaman, y la flaca y abrasada 4 Apretad, y no digan los que pasen:
Del sol, pero yo solo la melada, Hombres de higuera la merced perdióse.
Y negra es la viola., y señalado Al cierzo miren los cortados haces,
El jacinto, y con todo en las guirnaldas O al céfiro , 7 que ,así la espiga .crece.
Se ponen los primeros. Al cytiso Trilladores del trigo, huid el sueño
Sigue la cabra, y á la cabra el lobo, Del medio día, quando mas la paja
Al arado la grulla, y yo furioso Salta de las espigas. Los que siegan
de TEOCnxiv. 'lí
74 IDILIOS
Médico siendo , y de las nueve Musas
Comiencen al moverse las alondras,
Amado tiernamente. Así vivia
Y dexen el trabajo á su acostarse,
El Cvclope , entre nos tranquilamente,
Y reposar en las ardientes oras. -
Polyfemo el antiguo , quando amaba
O que buena es la vida de la rana,
A Galatea , y por la boca, y sienes
Muchachos, que no cuida al que le presta
El blanco bozo ya se descubría.
El beber , porque asaz ella lo tiene.
Amaba , y no con rosas y manzanas, 1
Mas bien te fuera, mayordomo ansioso,
O apios, si con furias perniciosas,
Cocer lentejas, porque no te llagues
Lo abandonaba todo, y muchas veces
La mano quando partes el comino.
por sí mismas tornaron al cercado
Esto deben cantar los qjie trabajan
Desde las verdes yerbas las ovejas.
En el calor del sol, mas tus amores
Mas él se deshacía en las algosas
Dañosos, segador, cantar conviene
Playas, loando en canto á Galatea
En la'mañana, quando está en el lecho
Tu desvelada madre con reposo. Desde la aurora , y dolorosa llaga
El corazón tenia, que la grande
Venus le traspasó con su saeta
IDILIO XI.
El hondo pecho; mas hallo remedio,
''.......
EL C YC L 0 P E.
Porque sentado sobre una alta peña
Y mirando hacia el mar esto cantaba.
N» hay encontra de amor otro remedio,
Porque abandonas, blanca“Galatea,
Al tu amador, mas blanca que cuajada
O Nicia, ni de polvos, ni de unturas,
Que las Musas, qual creo, y este leve Al mirar, y mas blanda que cordera,
Muy mas lasciva que novilla , y cruda
Y dulce nace entre los mismos hombres;
Mas no es fácil de hallar ? tú bien lo sabes Mas que el áspero agraz: aquí tú vienes
7<s idilios

Guando me tiene el apacible sueño, BE TEOCRITO. 77

\ aste quando me dexa el dulce sueño, Y* á mí mismo de noche, muchas veces


Y huyes qual la cordera al cano lobo. A deshora. Y también para tí crio
Me enamoré de tí, doncella, quando Con sus collares once cervatillos,
Primera vez veniste con tu madre, Y quatro cachorrillos de los osos;
Y querías coger de las montañas Mas vente á mí que los habrás sin falta,
Las hojas de jacinto, y yo enseñaba Y dexa al mar verdoso herir la playa.
El camino: ni pude desde entonces 3 Mas dulcemente pasarás la noche
Ni después, ni hora descansar sin verte; En la cueva conmigo, allí laureles,
Mas tu no cuidas desto , no por Jove, Allí los levantados acyp.reses -
Sé bien,doncella hermosa,porque me huyeSj Están , ía negra yedra , los parrales
Porque en toda la frente se me extiende De dulce fruto, y las heladas aguas .
Una ceja pelosa, y dilatada Que de la blanca nieve del selvoso,
Plasta las dos orejas, y debaxo Etna me viene divinal bebida.
Un ojo solo tengo, y una larga ¿Quién quiere mas vivir entre las olas
Nariz sobre los labios; mas yo siendo Del mar ? Si te parezco mas peloso,
Tal qual soy , apaciento mil ovejas, Tengo encinosos leños, y debaxo
Y la leche mejor que las. ordeño De la ceniza no apagado ruego,
Bebo, ni en el verano, ni el otoño Sufriré que me abrases toda 1’ alma,
Píe falta el queso, ni en el fin de invierno, Y aqueste mi ojo solo, que no hay nada
Colmados siempre están los canastillos. Mas dulce para mí. ¡ Ay mí, si fuera
Aprendí á flautear /corno ninguno Parido de mi madre con aletas 1
Aquí entre los Cyclopes; y te canto. Porque nadando á donde estás la mano
A .tí, manzana. 4 dulce amada mía, Al ménos te besara , pues la boca
No quisieras; Uevarateyo lirios 5
DE TEOCRITO, 79
178 IDILIOS A la presente ordeña: porque sigues
Blancos, y adormideras delicadas, A la que huye de tí, pues igualmente
Que 'tienen siempre coloradas flores, Encontrarás con otra Galatea
Unas en el verano, en el invierno Mas bella aun ? De noche muchas mozas
Nacen otras, que todas en un tiempo fugar quieren conmigo , y todas rien
No te podré llevar. Hora, doncella, Guando las oigo , porque yo parece
Aprenderé á nadar aquí si viene Que soy algo en la tierra. Polyfemo
Por casoun forastero navegante Conllevaba su amor así cantando,
Con su nave, por ver vuestra'delicia Y hacia muy mejor que si oro diese.
De morar en la hondura. Galatea,
Sal, y saliendo olvida , (como ahora IDLIO XII.
Aquí sentado yo) tornar a casa,
Y gusta apacentar aquí conmigo, EL AMADO.
Y la leche ordeñar , y apretar queso,
Mezclando el agrio cuajo. Sí, mi madre Con la tercera noche, y con ,a aurora
Me agravió sola, y della me querello, Viniste , amado niño, ya viniste,
famas de mí te dixo cosa buena, Los que aman envejecen en un diaj 1
Y esto al verme mas flaco cada día: Quanto la primavera es mas placiente
Diré que la cabeza , y los pies ambos Que el invierno , y la pera que la endrina.
Me duelen, porque sienta , pues yo siento, Y quanto mas bellosas las ovejas
i Ah! Cyclope, Cyclope, dó te fueron Que sus corderos, quanto se aventaja
Las mientes! Si teniendo canastillos Doncella á la muger, que se ha casado
Anduvieras, ó bien ramas podando, Tres veces. quanto excede en ligereza
Y llevaraselas á los corderos, El cei batillo al buey , y en voz suave
Quizas mejor parado tú estarías!
8o IDILIOS
DE TF.OCRITO. -8i
El dulce ruiseñor las aves todas, Pues si algo me agraviaste , satisfecho
Tanto con tu venida me alegraste. Al punto me dexaste-', y con-el doble,
Y qual un caminante á la sombrosa * Y bien pagado, siempre me1 retiro.
Haya quando el sol quema, así corría: Niseos Megarenses , en los remos
Oxalá que á los dos unos iguales Excelentes, morad bien fortunados, T
Amores nos respiren , y seamos
Que entre los otros huespedes honrasteis
Cantar á todas venideras gentes,
Al Atico Diócles, el amante
Fueron dos mozos entre sí muy Unos,
De los niños; y siempre en primavera,
Uno era el amador, 3 en Amicleo
Juntos cabe su tumba, al'í contienden
Diga alguno, y el otro era el amado
Los muchachos el triunfo de los besos,
En habla de Tesalia: ambos se amaron
Y el que mas dulcemente aplicar sabe
Con yugo igual, y cierto entonces era
Lós labios-6 á los labios, es cargado
De oro 4 la gente antigua, quando amaban
De guirnaldas, y váse Con su medré.
A los amantes. O si aquesto fuera,
Feliz aquel que juzga aquéllos besos
Padre Cronio, y jamas envejeciesen
Entre -los- niño's : ésfe' piue’s, invoca
Como inmortales, y despues de siglos
Al bello Ganirnedtís irnúchas vedes,
Doscientos me anunciara en Acheronte í
Tara tener la boca qual dé! Lydia
Sin salida, diciéndome así alguno:
La piedra, con que tocan fos plateros
'La tu amistad , y tu apacible amigo
Si el oro fino acaso estaí-visiado.
Todos celebran, pero mas los mozos.
• e.d, fio. am m ?>.'ii
Pero estas cosas los celestes Dioses
, '<■! : ■: r:l i J. oí
Dispondrán como quieran ; bello mozo,
He de loarte yo, que no me trago,
mioA qo y < o: j i:.
Baxo nariz pequeña las mentiras, .’.i.jíjpe ; ..i ■ T
F
$2 IDILIOS HT. TEOCR1TO. 83

Porque según su genio el mozo fuese,


IDILIO XIII. Y bien exercitado un varón bueno
Saliese. Pero quando el Esonida
S. Jason en busca del vellón dorado
Navegaba, con él los principales
N» por nosotros solos ha nacido De todas las Ciudades escogidas
El amor , qual pensábamos, ó Niela, Salieron, según eran esforzados,
De qualquier de los Dioses que naciese; Llegó también á la potente casa
Ni á nosotros primero, ser hermoso De Jaolco , el sufrido en los trabajos
Lo bello nos parece , los que somos Hijo de A'cmena heriona de Midea,
Mortales, y ni vemos ya mañana. Y con él descendió a la firme nave
Pues de Anfitryon el hijo, que de bronce lias, y no tocando las Cyaneas
Era su pecho, y al león valiente Unidas , trasparó los, grandes mares,
Domó , del doncel lia enamoróse, Qual águila , pasando las. honduras
Bello, y de cabellera bien trenzada, De, Fasi: y desde entonces los escollos
Enseñándole todo quanto suele Quedaron. Las Plekidcs se levantan,
U n padre á un hijo que ama ; y enseñado Y los últimos pastos mantenían
Fue bueno, y celebrado , y nunca estaba A los nuevos corderos , acabada
Del apartado , ni en el medio dia, La primavera , quando la divina
Ni quando con sus cándidos caballos Flor de 1 ILeroes, se acordó del embarcarse,
Corre la aurora la mansión de Jove, Y en la concaba- navé se sentaron,
Ni quando los polluelos querellosos Y al Helesponto llegan ayudados
Miran al nido , y en frondoso ramo Tres dias-por el noto, y á los puertos
Bate la madre las pequeñas alas, Del Proponto , y tocáron en los Cyanoss
Fs

i
.84 IDILIOS
DE ITEOCRITO,
Donde los bueyes abren grandes snlcos
Le asiéron luego todas de la mano,
Arrastrando el arado : y en la playa
Porque el suave amor dél mozo Argivo
Póf quadrillas la cena disponían
Cegó sus tiernas siroplecillas mientes.
Por la tarde , y un lecho solo haciendo
Cayó en las negras aguas~velozmente, )
Para muchos, que un prado grande había
Qual rutilante estrella que del Cielo
Bueno para formar lechos herbosos.
Súbitamente al mar. se precipita,
Siegan botomo agudo , y levantado
Y un compañero á los marinos dice:3
Cypero. lias, el roxo, fué por agua,
Haced las armaduras muy mas leves,
Con una muy preciosa cantarilla
O mancebos, que el viento- es favorable.
Para la cena , para el mismo Alcides
Al lloroso doncel en sus?rodillas
Y el fuerte Telamón , que los dos siempre
Las Ninfas tienen, y con blandas voces
Fuéron amigos, y una sola mesa
Le consolaban: de Anfítryon el hijo
Disponían : y pronto vio la fuente
Cuidoso por el mozo se levanta
En un recuesto, en torno della naco-
Llevando al uso Escytioo los arcos <■ ¿ ..
Mucha yerba , y juncadas abundantes,
Corbos , y con la maza, que su diestra
La celidonia azul, el verde adianto,
Siempre tenia , y con. alzado grito
El apio verde , yda torcida grama.
Has llamó tres veces, y tres veces
Las Ninfas una danza componian
El mozo las oyó , y suna kvoz débil-, . A
En medio de las aguas, las velantes 3
De las aguas salia , y aunque cerca
Ninfas , diosas temidas de campestres,
Muy lejos parecía , y como suele,
Eunica , y Malis, y Nichea hermosa,
Oyendo el reorarmár de Un cervatillo
De suave mirar qual primavera.
De lejos* en los montes, un crinado
La capaz cantarilla al agua llega
León devorador , que abandonada
El mozo , y al querer hundirla en ella,
Su morada buscando va su cena
BE TBOCRITi).
,<• idtlios
?i;dr;- ■- , i.t. • oo. ; ■ O-- • -
Dispuesta, tal Alcides deseoso,
Por el doncel vagaba en desviados IDILIO XIV.
e,; ire eñe cb . . J.i.'ñ.m.V - 3 -ó
Espinales, andando mucha tierra.
Cuitados los amantes, qué afanoso epjthalamio dx Helena.
Estuvo por los montes y las selvas! .tro/' ' ■ ii't ■ ,
En un tiempo, en Esparta, en las moradas
De Jason olvidando las empresas.
De Menelao e¡ rubio de cábelos,
Suspensas las antenas de la nave .
Por los marinos, y á la media noche Doce doncellas ornamento claro
Déla Laconii-, las primeras todas
Las- velas dispusiéron los mancebos,
A Alcides esperando , y el corria De la Ciudad , ceñidos los cabellos
Furioso por dó quier que le llevaban De flòrido jacinto , un coro hacían
Los pies, que el fiero Dios le destrozaba Delante del recreo, pintado 'talamo,
Dentro del pecho. Así entre los dichosos Quando.de Atreo- el hijo mas pequeño
El hermosísimo Has es contado. - Encerraba.de-■ I indaro la amada,
Casando con Helena, urr. cauto mismo .1
Los Heroes denostaban ya de Alcides
Movieron todas,^sacudiendo el suelo
Que la nave dexd , y abandonaba
De Argos los treinta remos , yjsé,;viño. . J Con enlazados pies , y el Himeneo 2
A pie á Coico , y á Fasi, no hospedable.
Resonaba por toda la alta casa.
Asistan de mañana te has-dormido, CI
Amado Esposo? Si de miembros tardo
Eresiai dormidor, ó si bebiste
Algo rnas( quando entrabas en el lecho,
Mas bien debias, si es que je agradaba,
tV p'.: ■ ’ chí.iei Dormir á tiempo , y con su amada madre-
F 4
C -
. t IDILIOS
DE TEOCRITO. s9
Dexar la doncelljta, á sus amigas
Asi lucia la dorada Helena,
En juegos hasta,el día ya bien claro,
Excelsa , y grande qual se corre el sulco
Pues de-tarde y mañana , y de año en año
Por el campo , y en huerto los cipreses
Esta será tu esposa , Menelao,
O en el carro 5 el caballo de Tesalia.
Feliz esposo , al tú venir á Esparta,
Asi en Lacedemonia es ornamento
En donde hay,, otros nobles,/-algún bueno
Helena la rosada , ni hay alguna
-te estotnuddT, jxira que¡ tú Jograses.-• Que ponga en el canasto cosas tales,
Entre los Semi-Dioses tendrás solo
Ni mas hermo.so estambre en las pintadas
Por suegro ál Cronio Jo ve, y mecliniadá '
Telas, trabando delicados hilos.
Contigo baxo de una misma cólch’i .
Ni alguna ciertamente tañer sabe
Tendrás la hija de. Jove , que no pisa
La Cy tara á Diana celebrando,
Otra su igual, elrsuelo de,la.-Acaya¿.
O á Palas de ancho pecho , como Helena
Parirate alga .grande , si. es que paré ■:’>
En cuyos ojos los amores todos
Semejante á la madter,'Eraujós 'todas
Están. O bella , y agradable moza,
Iguales en edad;,y un . mistñó .curso ,T
Eres matrona ya , pero nosotras
De vida, que en Tos. baños del Eurcta Saldremos de mañana por los prados
Al modo de varones nos untamos, . . Herbosos á coger las.olorosas,
Quatro veces sesenta', mozas todas' Y suaves guirnaldas , muchas veces
Doncellas..florecientes, de.las qúales
De tí acordarnos hemos, qual corderas
Ninguna está sin tacha comparadas Mamantes que .desean ya la teta
Con Helena. La aurora í ajilando Inace, De la su madre oveja. Las primeras
Descubre bella, faz.'.cn la sagrada, .
Texiendote corona del humilde
Noche , al tiempo de blanca primavera,
Loto, que crece baxo , la pondremos
Al finar el invierno , entre nosotras
En. el sombroso plátano ¡ y tomando
90 IDILIOS DK TEOCRITÓ. 91

Las primeras, los líquidos ungüentos


Del plateado vaso , regaremos IDILIO XV.
El plátano sombroso , escribirase
Esta •dórica letra en la corteza, ROBADOR DE PAYALES.

Porque pasando alguno luego lea:


Yenerame , de Flelena soy la planta. Robando Amor un dia lós panales
Salve esposa , y esposo por el suegro, De un colmenar , una abejilla osada
L-atona ,.pues, Látóna , délos niños Le picó , y traspasó los dedos todos
Guarda os conceda noble descendencia; Déla mano1 : dolíale , y soplaba
Cypria , la Diosa Gypria, entre vosotros La mano, y pateaba el duro suelo,
Mantenga igual amor : y el Cronio Jove Y saltaba , y á Venus descúbria
Desmedidas riquezas , que de buenos Su mal , y se quejaba'de que siendo
En mejores se extiendan muchas veces. Tan pequeñuela bestia .'la abejilla
Dormid sobre los pechos que respiran I-Iaga tan gran herida , ella riendo
Los placeres, y amor; y .al alba luego Le dice : j no eres tú como la abeja
Dispertad, ni olvidas , que demañana Y aunque pequeño fieras llagas haces?
Nosotros tornaremos, quando suene .1 ; vi V r ‘ .v ... T

De su morada el cantador primero, IDILIO XVI.


Levantando su cuello, bien trenzado. ; ójqriv b i,, j 'jobo, ¡o
Gózate entales bodas, ó> Hymeno, EL boyero.1
■ i ;V> i;• . . U' ti j’
Rúnica fiie burló qüañdo queria
V . b to<d ,::p rrdr-L Dulcemente besarla , y denostando
Me dixo así íde mí te aparta, ¿siendo
DE TEOCRITO. 93
. IDILIOS

Boyero , quieres,infeliz, besarme? Pastores, ó algún Dios súbitamente


No aprendí yo á besar, rústicamente, En otro me mudó ? Porque dentantes
Sino á tocar los labios ciudadanos. Cierta graciosa forma en mí se vía,
Qual yedra entronco, y la mi barba ornaba.
No pues besarás-tú mi hermosa boca,
Ni aun en sueños.' Quál ‘miras? quál razonas? Los cabellos qual apio 2 se extendían
En torno de las sienes , y la blanca
¡Cómo juegas grosero , y con dulzura
Frente brillaba sobre negras cejas.
Hablas., qué voces dices tan suaves!
Muy mas bellos mis ojos que Minerva,
Qué blanda: barba tieijes ! quán hermoso
Mas suave que un queso era mi boca,
El cabello ! y los labios, son enfermqs!
De mis labios salia muy mas dulce s
Negrallas manos! oque mal que hiedes/
Que panal la mi voz ,-y el canto mío
Apártate de r mí, up me mancilles.
Dulce: y canto con flautas, y gorgeo
Diciendo así-, tres, veces en su seno
Con cañas, y silvato , y con trompeta:
Escupió , y de 'Ips, ¡pies á la cabeza
Y todas las mugeres por los montes
Me miró? luego Ay. con torcidos ojos
Llamanme hermoso, y todas
Miraba. ,: entre los. labios.murmurando,
Me aman ; pero no asi la Ciudadana,
Vana por sU hermosura, retorcía
Mas porque soy boyero se ha pasado,
La boca con soberbia , y me mofaba*
A mi al punto la sangre se ,me enciende. Y ni jamas oyó que el bello Baco
Me enrogecíó el color con el enojo- Guiaba las novillas por los valles,
Ni sabe como Cypria enloquecía
Qual rosa rociada , y ella vase
Por un.mozo boyero , y en montañas
Dexandome : el furor llevo en el pecho,
De Frigia apacentó, y al mismo Adonis
Pues siendo'yo el hermoso ,,soy burlado
En las selvas besó, y lloró en los bosques
Por una vil, y misera ramera*
¿Endimion qué fué.? ¿ nodué boyero/
Decidme la verdad , ¿no soy hermoso,
IDILIOS
DE ' TEOCRITO '9$
94
Y al.mismo apacentando amó la Luna, Yacían baxo de texida choza,
Y dexando el 4 Olympo á las florestas Sobre unas secas obas, recostados
De Latmo descendió , y con el mancebo A la pared frondosa, y cerca dellos
Dormia : y Rhea 5 , tú , por un boyero Estaban los trabajos de sus manos,
Lloras: y tú también Jove Saturnio, Canastas, cañas, las algosas redes,
Por un doncel que bueyes pacentaba Lazos , nasas, garlitos , y cordeles,
No anduviste vagando ? y sola Eunioa Una pellica , y una vieja barca
Al boyero no amó, mejor sin duda Sobre puntales , y un pequeño cesto
Que Cybeles, que Cypria, y que la Luna. Baxo de la cabeza , los sombreros
No ya tú, Cypria, en la Ciudad tu amado, Y vestidos, que tal es el' trabajo
Ni por el monte beses, y ya sola ,Y las riquezas, que han los pescadores.
Pasa la noche sobre el triste lecho. Olla ninguno tiene , ó can , pues todo
Sobrado lo juzgaban de la pesca.
IDILIO XVII. Erales compañía la pobreza, .......
Ni tenían vecino en mucho espacio,
• IOS PESCA DORE St
Sino por todas partes blandamente
Batia'el mar la pequeñuela choza.
O Diofante , la pobreza sola No medio curso el carro de la Luna
Corrido había , y el afan amado
Las artes mueve, y al trabajo enseña}
Movió á los pescadores sacudiendo
Ni los malos cuidados dormir dexan
A los trabajadores, y si un poco El sueño de sus ojos , y alegraban
Con este canto sus cuitadas mientes.
Tiempo de noche llegan á dormirse,
Túrbanles luego súbitos cuidados.
Dos viejos pescadores juntamente
96 IDILIOS
DE TECCRITO. 9? \
Ni durmiendo en espinas , ni empeñada
ASFALION.
Allá en el 1 Pritaneo la Linterna,
Amigo , mienten todos quantos dicen. Y dicen que aquí siempre se halla pesca?
Que se acortan las noches en verano,
compaRéro.
Y que los dias Júpiter alarga.
Ya vi mil sueños, pero no la aurora, la visión de la noche di á tú amigo.
Ni me engaño, qué es esto? ó sonjas noches
Años ? Asfalio'n.
Luego á la tarde que quede' dormido
COMPAÑERO.
En los afanes de la pesca, (y cierto
No acuses al verano hermoso, No estaba muy comido , si te acuerdas,
O Ásfalio , pues el tiempo su carrera Después que ya cenamos á deshora -'i V
Por si no pasa , que el cuidado mueve Sin cargarnos la panza) ,: me vela
El sueño , y es quien hace larga noche. Afanar en la peña j y asentado
Los peces acechaba ,• sacudiendo .
ASFALIOK.
La engañosa comida de las cañas,
¿Sabes por caso declarar en sueños ? Uno de los mas gruesos allegóse,
Buenos los vi, ni quiero que te sea Que aun en sueños el pan todos los canes
Mi visión no sabida, y partir quiero Agüeran , y yo peces ; ai anzuelo
Qual la pesca , también todos los sueños. Apegado se estaba, y derramaba
A ingenio no te ganan , y el mas bueno Sangre , y del pe¿o se doblo la caña:
Declarador de sueños, el que tiene Extendiendo la mano hallé pelea
Mente para explicarlos, y asimismo Con esta bestia , como prenderla
Recostado en las hojas junto al agua, El gran pez con los hierros pequeñuelos,
G
5* IDILIOS DE TEOCRITO. 99
Después pensando herirle , yo decía: La esperanza del sueño liara que busques
Punzaráme , V sin duda fieramente, El pez de 4 carne, y hora tú no quieras
"Y como no se huyese, eché la mano, De hambre ífiorir entre dorados sueños.
Y vi ya fenecida la pelea.
Saqué el dorado pez , era del todo IDILIO XVIII.
Macizo de oro ,.y el temor me vino
Si amado de Neptuno 2 el pez seria, EL ENAMORADO Ó AMANTE
O de Anfitrite azul algún tesoro, DESGRACIADO.
Soltéle alegremente del anzuelo
Porque á la boca de oro no pendiese, u„ varón amoroso á un inhumano
Y arrástrele con cuerdas á la playa, .Doncel amaba de gentil belleza,
Y juré que jamas el pie pondría Mas de costumbres harto diferentes.
En este mar , sino en la tierra estarme, Aborrecía al amante , y de apacible
Y reynar con el oro ; y estas cosas Nada tenia , y menos él cuidaba
Me dispertaron. Lo demas, amigo, Quál Dios se fuese amor , ni quáles arcos
Tú debes entender, pero yo temo Maneja , y como tira á los mancebos
El juramento que hice.3 Agudas flechas. Era fiero en todo
En su paso, y andar, y en sus razones:
. COMPAÑERO.
Y ni á sus fuegos de solaz servia,
Tú no temas, Ni el brillar de su labio , ni el hermoso
Ni juraste , ni el pez dorado viste, :Esplendor de sus ojos , ni rosadas
O pescaste ; lo mismo que mentiras Mexillas, ni el hablar, ni el dulce baso
Son las visiones, que si en vela luego, • Alivio del amor ; mas como fiera
No durmiendo registras aquel puesto, Selvage al columbrar los cazadores,
Gi
IOO IDILIOS BE TE0CR1T0. IOX
Así con el varón en todo hacía. Y se lo porvenir ; bella es la rosa,
Sus labios aspereza respiraban; Y el tiempo la deshace , y la viola;
Y sus ojos miraban fieramente, En primavera es bella, y luego acaba,
Y había en ellos fuerza poderosa. Y candido es el lirio , y se marchita
A su furor la faz correspondía, A su caer, y candida la nieve,
Huíale el color , y estaba todo Y después de cuajada se deshace:
Mudado del orgullo y de la saña. Bella es también la juventud hermosa,
Y aunque tal, era hermoso , y mas movía Y dura poco : mas será algún tiempo,
Con su enojo al amantey finalmente, Quando amarás también , y en dulce fuego
Ni de Venus las ansias sufrir pudo, Tú corazón tendrás, y tristemente
Y vino al triste umbral , y allí lloraba, Llorarás. Ay! al menos , ó mancebo,
Y la puerta besó , y asi decía: Este último placer hacerme quieras,
O doncel , fiero y áspero , criado Quando al salir colgado en los umbrales
De una cruda leona , ó todo piedra; Estos tuyos me veas, ay ! te ruego
Indigno del amor, á tí he venido No huyas este mezquino, espera un poco,
Para traerte los postreros dones, Haz un pequeño llanto, y derramando
Este mi lazo, porque ya no quiero, Lágrimas , de la cuerda me desata,
Doncel enfurecido , atormentarte; Y de tus miembros quita ¡os vestidos,
Voy dó me condenaste , donde dicen Y cúbreme , y última vez me besa:
Que aquella via está, común remedio Dame tus labios aunque muerto sea.
De los enamorados , donde el Lethe. 1 Y no me temas que vivir no puedo,
Pero aunque yo me le bebiese todo Aunque mudado ya besarme quieras.
No seria apagado mi deseo. Y cávame un sepulcro dó escondido
¡ Ay7 ya de tus umbrales me despido, Mi amor se quede , y al partirte clama
g3 .
BE TEOCRITO. 103
103' IDILIOS

Por tres veces diciendo , amigo yaces. Y tiernamente amad á los que os aman,
Y si añadir quisieres , he perdido Que sabe Amor vengar á los amantes.
Mi dulce amigo , y esta letra escribe, •• . ■ i ' • i . i' ' I. . .
Que dispuesta te dexo en estos versos: IDILIO XIX,
f'b'í i' , ' . ■ ¡I- ,’ . . Uí
Matóle amor, espera caminante,
LAS LENAS Ó SACHANTES,
Y d par de! pliesto di, por un ingrato.
Esto diciendo , á la pared alzaba
Una gran piedra, y de delgada cuerda I110 , Autonoe , y la graciosa Agave,
Atóla al medio umbral, y puso al cuello Tres aras en el monte levantaron, 1
Un lazo , y con los pies movió la piedra, Siendo ellas tres , y las silvestres hojas ¡
Y colgado murió. Luego su puerta De la frondosa encina recogian,
El otro abrió, y miróle allí pendiente La viva yedra , y el gamón humilde,
Y muerto en su atrio mismo : ni movióse Y alzan en puro pradodoce altares,
En su ánimo á llorar la fresca muerte, A Semele los tres, los nueve á Baco,
Y mancilló en el muerto sus vestidos, 2 Y de la Sacra 2 Cesta prevenida
Y á la liza partió, y allí á lo lejos Tomaban con sus mano?, y con preces
Buscando andaba los amados baños. Los colocaban en las nueva? aras,
Llegó dó estaba el Numen que ofendiera, Qual enseñara Baco , y como quiere.
Sobre basa de piedra Amor estaba Pero Pentheo desde una alta peña
Lo atalayaba todo , habiendo entrado
Sobre las aguas, y saltó la imágen,
En un lentisco antiguo, planta propia
Y al mancebo cruel dexó sin vida.
De aquel lugar, y viole Ja primera
Salió la roxa sangre, y juntamente
Autonoe, y gritando ferozmente,
El eco del doncel sobre las aguas:
Con los pies turba del insano Baco
Vivid, amantes, que el cruel ha muerto^
G 4
w .¿IDILIOS DE TBOCRI'TO. Dpcjr.

Las-Orgias, y de súbito diciendo: feste agüero: los hijos del piadoso


No miran estas cosas los profanos, 3 Felices son , y no los del impio.
Ella se enfureció, se enfurecieron Gócese Baco, á quien el sumo Jovc
Luego también las otras , y Pentheo En el nevoso Dracano pusiera,
Huyó despavorido : ellas le siguen Siendo récien nacido, en su rodilla. 5
Alzando sus vestidos á la cinta Y góse'se también Semele 6 hermosa,
Sobre los muslos, y Pentheo dixo: Y las Cadmeas, 7 las hermanas suyas,.
Mugsres, que vos fdlta? y Autonóe. ¡ De tantas heroínas celebradas,
Le dixo asi: sabraslo sin •oírlo»:. Que de Baco agitadas acabaron,
Y lxmadre. bramó, tirando al. suelo Esta inculpable acción. Así ninguno
La cabeza del hijo,, como brama, Las obras de los Dioses vitupere.
La preñadadeanay.et hombro,grande,
Y toda la ancha espalda juntamente IDILIO XX.
Ino, •arra'ncó, pisando, con. fiereza .
El vientre , y Autonoe hizo lo mismo, COLOQUIO AMOROSO

Y las otras iríugeres repartían


Las reliquias d’OCarñe , y se tornaron DAFNIS F ÍA DONCELLA.

M ancilládas eñ sangre á Tebas todas.


Llanto del mónte llevan , no á Pentheo. DAFNIS.
No cuidó mas, ninguno ser procure
Contrario á Baco , ni maldades tales P aris, otro boyero ,, robó á Helena
Cometa aunque de nueve, ó de diez años. La sabia , y para mí muy .mas preciada
Quiero ser bueno , y agradar á buenos. Es esta Helena que hora me besaba.
De Júpiter 4 Egiocho es honrado
T

DE VEOCRITO 107
106 IDILIOS

DONCELLA.
DONCELLA. 7

No te ufanes osado , él beso 1 es vano. No, con tu dulce hablar ya me has burlado.

DAFNIS. DAFNIS.

Mas hay en vanos besos placer dulce, Ven á los olmos, tocaré mi flauta,

DONCELLA. DONCELLA.

Mi boca lavo , y el besar desprecio. Recréate , lo malo no me agrada.

DAFNIS. DAFNIS.

Lavas tus labios ? dame ya otro beso. Ola niña , cuidado con Cythere. 3

DONCELLA. DONCELLA.

Novillas , no doncellas besar debes. No hablo de Venus; Cynthia me protege,

DAFNIS. DAFNIS.

No te ufanes, la edad qual sueño 1 pasa. No digas , no te hiera, y aprisione.


. ■ r, q
DONCELLA. DONCELLA,

Uvas y rosas secas no se acaban. Hiera como quisiere , Cynthia es mia:


Quita la mano, el labio he de romperte.
DAFNIS.

Ven,debaxo los olmos quiero hablarte


V -

io3 ' IDILIOS DE TEOCRITO í©9

• DAFNIS. DAFNIS.

De amor jamas- huyó doncella alguna. ¿ Qué temen las mugeres.? antes mandan.

DONCELLA. DONCELLA.

Yo le huiré , por Pan. Y” á tí qué pena? Temo el parto, parir es dura cosa.

.DAFNIS. DAFNIS.

Temo que te ha de¿dar a algún malvado.; Pero á bien que Diana es tu abogada.

DONCELLA. DONCELLA.

Muchos me quieren, pero no me agradan. Y luego mi hermosura... temo al parto. ■

DAFNIS. DAFNIS.

También soy de los muchos que te anhelan. Pero verás después tus dulces hijos.

DONCELLA. doncella,

Pues, amigo , qué haré ? casar es malo, ¿ Qué dote me darás si conviniere ?

■ DAFNIS. DAFNIS.

Cómo malo el casar ? la boda es fiesta, Todo el rebaño, el pasto, y todo el bosque.

doncella.
DONCELLA.
Pues júralo, no quede yo burlada.
Sí, pero las mugeres siempre temen.
DE TEOCRITO III
no IDILIOS

DAFNI?.
DAFNIS.
No , tú muy noble de Menalcas hija.
No, por Pan , aunque quieras desecharme.
DONCELLA.
DONCELLA.
Enséñame tu bosque, y tu cabaña.
Un tálamo me harás, casa y establos.
DAFNIS.
DAFNIS.
Ven, mira florecidos mis cipreses.
Te los haré : ya Ves buenas manadas.
DONCELLA.
DONCELLA.
Paced , mis cabras, voy con el boyero.
¡ Ay! ¿ qué , qué le diré á mi viejo padre?
DAFNIS.
DAFNIS.
Toros, paced, mientras la enseño el bosque.
Lo aprobará en oyendo el nombre mió.
DONCELLA.
DONCELLA.
¿ Qué haces lascivo, llegas á los pechos?
Díme tú nombre, porque el nombre agrada.
1 DAFNIS.
DAFNIS.
Quiero ántes ver tus pomas florecientes.
Dafni el hijo de Lycida, y Nomea.
DONCELLA.
DONCELLA.
¡Ay! yo tiemblo, porPan , ea... la mano.
De buenos eres, pero, no te cedo.
112 IDILIOS DB TEOCRITO. JI3

DAFNIS.'

Otra te daré yo muy-mas preciada.

doncella.

Dices me darás todo, y luego acaso...


• . ■ ” ■ " >
DAFNIS.

¡ Ay si pudiera darte toda el alma!

DONCELLA.

Diana no te irrites, ya he faltado,

DAFNIS.

A Venus , y al amor daré sus dones.

DONCELLA.

Vine doncella, y voy muger á casa.

DAFNIS.

Aun mas, muger, y madre, y no doncella.


Ellos así con sus floridos miembros
Se deleytaban con hablar suave. . ..
Se alzó el furtivo lecho y, la. pastora
H
114 IDILIOS
- DE TEOCRÍTO. 11 £
Se fue á pacer sus cabras, y llevaba
Para enaguas que 'llevan las mugeres.
Los ojos vergonzosos; mas adentro
Y en un año dos veces trasquiladas
Su corazón de gozo le bullía:
Las ovejas serán para Theugenis
Dafni contento se torno a sus toros.
De bellos pies, según que es hacendosa,
V -
Y ama lo que las sabias, ni he pensado
IDILIO XXI.1
Darte á una casa ociosa y holgazana,
Siendo de nuestra tierra, pues tu patria
LA RUECA.
Es la rica Ciudad, que en otro tiempo
Rueca que amas la lana, de Minerva Fundó Archias deEfira, floreciente
En varones insignes, en Trinacria.
La glauca don, que de prudentes hembras
La casa de un varón tendrás ahora
Eres trabajo amado; confiada Que entiende sabias cosas, y remedios
A la ciudad hermosa de Neileo Que apartan de los hombres tristes males.
Me sigue , dó de Cypria el verde templo
Y en Mileto la amable con los Jonios
Está en las tiernas cañas, y rogamos
Habitarás, porque en su pueblo mismo
A Tove un viento bueno, y navegando
Theugenis tenga su preciada rueca,
Vamos allá; y alegraráse al verme
Y le serás memoria de contino
Mi huésped, y los dos nos besaremos.
De su huésped amigo de cantares,
A Nicias, de las gracias dulce planta,
Y dirá alguno así quando te vea:
Y á tí bien trabajada hermosa rueca
Cierto que es gran favor de don pequeño;
De marfil, llevaremos á las manos Pero de amigos todo es de honor digno.
De la esposa de Nicias, y con ella
Acabará mil obras para lobas2
De los varones, ydabores varias
II 2
1
i x<5 IDILIO*
J5B TEOCRITO. ”7
Y al amante primero lo abandonas
Al tercero lugar; y así pareces
IDILIO XXII.
Respirar á los hombres arrogantes.
Te agrade por tu vida tener siempre
EOS AMORES L
Tu semejante, que si así lo hicieres,
El vino y la verdad , amado niño* Oiráste loar de ciudadanos.
Ni el delicioso Amor grave te sea,
Se dice, y á nosotros nos conviene
El qual vence las mientes de los hombre*
Aun estando beodos ser veraces:
Fácilmente, y á mí me tornó blando
Y diré lo que yace en mi hondo pecho.*
Siendo hierro; y agora dulcemente
De todo corazón no me has amado;
Quiero juntar mis labios á tus labios.
Lo sé, y la media vida que poseo
ViVe por tu hermosura; la otra ha muerto IDILIO xxra.
Y si quisieras tú, yo pasaría /
Vida igual á los Dioses; si no quieres En el año pasado bien me acuerdo
La luz 2 se me acabó: ¿ será bien hecho Eras mas joven, pues en un momento
Dar tormento al amante? Si me atiendes Y viejos, y arrugados nos hacemos,
Qúal joven á un anciano, te aseguro Ni retornar la juventud es dado,
Que te irá muy mejor, y alabarásme. Que al hombro lleva sus ligeras alas,
Un nido solo, en una planta sola Siendo nosotros tardos, y pesados
Harás, donde no ¡legue fiera sierpe.
Para alcanzar el fin de los deseos.
Hora tienes un ramo, otro mañana,
Entendiendo estas cosas fácil seas,
Y uno tras otro buscas; y si alguno
Y á mi amor sin engaños corresponde,
Al ver tu faz hermosa te alabare,
Porque quando ya tengas viril barba
Te haces amigo deste de tres años. H3
11 8 IDILIOS DE TEOCRITO,
119
Seamos los amigos Achíleos.
Mas estas cosas tú las das al viento, epigrama primero.
Y dices en tu pecho: ¡ quál me enfada'
Este mezquino así! Pero yo ahora T /as rociadas rosas, y el frondoso
Fuera á buscar por tí las pomas de oro, L
Serpol es á las Musas consagrado;
Y á dó el Cervero guarda de los muertos.
Y á tí son, Pytio Pean, los laureles
Pero después, tal vez aunque me llames De negras hojas, pues te ornó con ellos
En los mismos umbrales de tu puerta, La piedra en Delfos, y serán las aras
No llegaré , apagado este amor fiero. Ensangrentadas del cabrón cornudo,
Aquel belloso , que se esta royendo
Del terebinto las extremas ramas.

II.' z

Aquel cándido Dafni, que cantaba


Con bella planta cantos pastorales,
Consagró á Pan tres flautas, el cayado,
El dardo agudo, y una piel de ciervo,
Y el zurrón que llevaba las manzanas.

III.

En el frondoso suelo estás durmiendo,


O Dafni, el laxó cuerpo reposando,
H4
120 EPIGRAMAS BE TEOCRITO. Ili
Y lazos en los montes te han parado Con sus picos tonadas muy suaves.
Agora, y Fauno, y Priapo te cazan, Siéntate allí, y á Príapo agradable
Príapo, que na ceñida la cabeza Ruega me dexe ya de los amores
Hermosa, de la yedra zafranada, De Dafni, y un cabrón le sacrifica.
Y vienen convenidos á la cueva; Si oido alcanzo el fin de mis deseos,
Mas huye , huye tú, dexa del sueño Tres víctimas daréle en sacrificio:
El adormecimiento que te oprime. Una novilla, y un cabrón peloso,
Y un tierno recental, propicio sea.
IV.
Doblando'aquel puntal de las encinas, V,
Una estatua hallarás recien labrada
De higuera, de tr§s pies, con su corteza, Algún suave canto, por las Ninfas
Sin orejas, cabrero ; mas bien puede Cantarme quieres, con dobladas flautas;
Con el falete engendrador, las obras Y yo tomando el plectro, alguna cosa
De Venus acabar, y un satro huerto *, Comenzaré á tocar. Dafni él boyero
Que un manantial perenne-de las peñas Nos ha de recrear también , sonando
Rodea todo en torno, y reverdece Con encerado chiflo , estando cerca
De myrtos y laurel, y de oloroso De la frondosa encina, tras la cueva,
Cypres; allí cercana hay esparcida Privaremos del'sueño á Pan cabrero \
Una vid abundosa.de racimos.
Mirlas de primavèra dulcemente VI.
Resuenan con gorgeos variados,
/
Y desde enfrente con silvidos- cantan Mísero Tyrsi, j que te sirve en llanto
Los roxos ruiseñores, y armonizan Deshacer de tus ojos la hermosura?

J
122 EPIGRAM. DE TEOCRITO.

Faltó la-cabra, la preciosa cria


Al Orco fue, robóla feroz lobo:
Los canes ladran; pero nada sirve,
Que ni ceniza de sus huesos queda.

\
IDILIOS

jbjíojn:

I
123

IDILIOS

■ J)JK
IDILIO PRIMERO.

Si CANTO FUNEBRE DE ADONIS \

Y„ lloro á Adonis: el hermoso Adonis

Falleció: el bello Adonis ha finado,


Los Amores lamentan. No ya, Cypria,
En purpúreas alfombras te reclines;
Levántate, cuitada, enlutecida,
Y hiere el pecho, y di por todas partes:
Falleció, falleció el hermoso Adonis.
A Adonis lloro , lloran los Amores.
Yace él hermoso Adonis en los montes,
Herido el blanco muslo con el diente,
Con el cándido diente , ya cuitada
Fué Cypria de su aliento delicado.
Pero la negra sangre se desliza
Por los nevados miembros, y los ojos
Se entorpecen debaxo de las cejás,.
DE BION, I2g
124 IDILIOS
Perdió su dulce esposo, y juntamente
Y la rosa los labios abandona, Su divina hermosura; quando Adonis
Y con él muere el beso que Cytere Vivió, gentil belleza en Venus era,
No olvidará jamas, que á Cypria el beso Mas murió con Adonis la hermosura.
Aun del que ya no vive es agradable. ¡Ay! ¡Ay! de Cyterea! las montañas
Mas Adonis no siente que besado Todas, los encinales, ¡ay Adonis!
Por ella fué quando muriendo estaba. Dicen.; los rios 4 al quebranto lloran
A Adonis lloro, lloran los Amores. De Cytere, las fuentes en los montes
Cruel, cruel herida tiene Adonis 2
Por Adonis lamentan, y las flores
En el muslo; mas tiene Cyterea
De dolor enroxecen; mas Cytere
Herida muy mayor en las entrañas.
Por todas las ciudades, y por todos
En torno del doncel los caros canes
Los valles forma doloroso canto:
Ahulláron, las Ninfas Oreades
¡Ay! ¡Ay! Venus! murió el hermoso Adonis,
Lloran, la misma Venus esparcidas Eco resuena, el bello Adoni es muerto.
Las bellas trenzas, vaga en la floresta
¡ Quién será que de Cyprea el amor fiero,
Llorosa, descompuesta, sin calzado,
Ay, ay, no llore! Como vio de Adonis,
Y hiérenla al pasar los espinales, Luego que conoció la mortal llaga,
Y tíñense de Ja sagrada sangre: Al ver del mustio lado la purpúrea
Grita con alta voz por largos valles,
Sangre, los brazos extendiendo, en llanto
Vocea al Syro 3 esposo, al doncel llama Decía: espera , Adoni, espera , guarte,
Y en torno al vientre denegrida sangre
Adonis infeliz, que ya siquiera
Altamente brotaba, y desde el muslo Ultima vez te estrecharé en mis brazos:
Purpureaba el pecho, y los costados Que yo te abrace, y á lo ménos junte
De Adonis ántes blancos roxeaban. Mis labios con tus labios: ea, Adonis,
¡Ay! ¡Ay! Cytere, lloran los Amores.
12(5 IDILIOS BE BIOS. I2y
Tórnate un poco, y los postreros besos Tan bello, con las fieras contendías?
Me da ; bésame en tanto que se siente Así lloraba Venus, y lloraban
El besar delicioso de tus labios, Eos Atpores también. ¡Ay! ¡Ay! Cytere! -
De tus purpúreos labios, mientras sale Falleció- el bello Adonis. Derramaba
Del ánimo á mi boca, y á mi pecho Tantas lágrimas Pafia, quanta sangre
Tu aliento con el último suspiro. Adonis esparcía, y en la tierra
Así recogeré tu dulce encanto, Toda ella,en flores era.,convertida;
Y beberé tu amor 5, y aqueste beso Nacen de sangre rosas, y amapolas
Guardaré como al mismo, al mismo Adonis. De las lágrimas fueron levantadas.
¡Por qué, infeliz, tú me huyes! Huyes lejos* Yo lloro Adon!, el bello Adoni es muerto
Adonis, y á Acheronte vas, al fiero, No ya en las selvas llores al esposo,
Al triste Rey... ¡Mas yo, cuitada, vivo, Cyterea, esle ornado un bello lecho
Y Diosa soy, y ni seguirte puedo!... A Adonis bien frondosq, ó Cyterea, ¡'
A mi esposo recibe, ó Proserpina: . Yace en tu lecho tu finado Adonis.
Eres pues tú muy mas afortunada Aunque finado hermoso , y qual dormido»;
Que yo, y todo lo bello á tí se torna. El bello muerto está: po^ en.los blanda
Yo soy muy infeliz: dolor furioso Paños en quedormía, en que configo
Me aflige, y lloro á mi finado Adonis, Por lamoehe gozaba endulce sueño- , t
Y te temo. ¡ Dulcísimo ,'ó yaces! En^eqlcha de oro: al,¡tFÍs(¡e Adonis ama:
Voló mi amor qual sueño, y Cyterea Reclytalo en,guirnaldas, % y entre flores;
Abandonada queda, y despreciados Toda? coñiél, después-que ha fallecido, ¡
Conmigo los Amores, juntamente 1 odas las flores ©usti?s;han quedado. ' /
Contigo se acabó el cinto 6 de Venus. Cúbr^fc. de arrayan,báñale en myrra^j Y
¿Por qué cazabas, temerario, y siendo Y ungüentos; todos bálsamos se acaben,
I
128 IDILIOS / DBBION,

Que tu bálsamo 9, Adoni, es acabado. Da fin aldlanto,vCypria, y! hóy freqüenta


El delicado Adonis en purpúreos LoSJCOnvites:: llorar otra vez.debes,
Mantos yace, y en torno suspirando Que en otro, tiempo -1 A tornarás al llanto. -
Los llorosos Amores, sus cabellos 10
Cortados por Adoñi; uno las flechas, IDILIO »II.
. -j - 1” •
El otro el arco huella , aquel la aljaba
Alada despedaza , otro el calzado
De Adonis desénláza, otro en dorados Mientras las aves sigue , al fugitivo
Vasos el agua lleva, otro le lava 11 Amor vio estar de box en una rama.
Los muslos, y otro el lado con sus alas Luego quedé miró regocijóse, ' ¡T
Refresca á Adonis? Los Amores lloran, Porque le pareció páxaro-'grande:.
¡Ay! ¡Ay! Cytere! y Hymeneoapaga Junta luego entre sí las cañas rodase
La fea toda en el umbral, y esparce Acechando al Amor que resaltaba
La corona nupcial, no ya Hymeneo, Por acá, y por allá; y enfurecido
De Hymeneo no mas la cantinela El doncel por no ver fin del trabajo,
5e cantará, y tan solamente , j Ay!' ¡Ay! Alanzando las cañas se llegaba'
¡Ay! ¡Ay! aun mas Adoni, ¡Ay! Hymeneo» A un viejo labrador, que le enseñara
Las Gracias lloran dé Cynira al hijo: Esta caza : le cuenta , y manifiesta
Murió^l hermoso Ádoni entre sí dicen, Al asentado Amor; pero el anciano ;
Aun con mas alta voz que tú, Dione, Moviendo lá.cabeza se reia; ■■ ■ . '
Lo dicen, y las Musas también lloran Y respondió al doncel : tú de tal caza ¡n Y
A Adonis, Adonis ; y le llaman, Te dexa, ni esté páxaro persigas: '1
Y él no las oye, no porque no quiere, Huye léjos, pues es dañosa fiera, . Y
Mas Proserpina no se lo-concede. Será> feliz mientras que rio le cojas:.
la
130 IDILIOS
BB BION. »3»
Y si tú llegas de varón al tiempo, Y aprendí las canciones amorosas,
El que hora salta, y huye, por sí mism© Todas quantas Amor quiso enseñarme.
Sentarse ha de repente en tu cabeza.
IDILIO IV.
IDILIO III.
Las Musas al Amor cruel no temen,

La grande Cypria mjéntras yo dormía Antes bien le aman de ánimo, y sus huellas
Siguen, y si seguidas son de alguno
A mí llegóse, y de la hermosa mano De alma desamorada, dél se apartan,
Traia al niño Amor mirando al suelo, Y ni enseñarle quieren; mas si dulce
Y así me.hablaba: tú, boyero amado, Canta de Amor, movido el blando pecho,
A mi Amor toma, y á cantar le enseña. Se le llegan corriendo luego todas;
Así dixo, y se fué: mas yo tontillo Testigo yo de que verdad es esto:
Quanto cantaba, como si él quisiese Pues si canto los Dioses, ó los hombres,
Aprender, al Amor fui enseñando: . Se me traba la lengua, ni qual antes
Como de Pan la flauta fué inventada, Ya canta; y si de Amor yo canto luego,
De Minerva la trompa, y de Mercurio O de Lycida, entonces de la boca
La harpa, y del dulce Apolo la vihuela, Me sale un ledo , y apacible canto.
Todas aquestas cosas le enseñaba;
Mas él á mis palabras no atendia,
Y amores me cantaba, y enseñóme
De Dioses, y de hombres los amores,
Y juegos de su madre; y olvidóme
De lo que yo al Amor había enseñado,
* ¡ .j, I >>
132 JBJLIOS.' DE BION. 133
«wototna ísr.-.: ^íí;¡ ' ¡bn/noG í
IDILIO VI.
IDILIO V. í ,

S¡ bellos son mis versos, -estos solos,' elices los amigos, quándo amados
Que poco ha la Musa me ofrecía, Son igualmente: así feliz Tese»
Me dan honor, y si estos no son gratos, Era estando presente Piritoo,
Qué á mí por afanar ‘en adelante ? Aun al terrible Dite descendiendo,
-: ; : ■ J -- - ...........

Porque si de la vida doble, tiempo/ Entre fieros Axenos fue dichoso


Jove nos diera, ó la prudente Parca, • Orestes , por seguir comunes vias
De suerte que uno en juegos, y alegrías, Con Pylades, y Achiles el de Eaco
Y en trabajos él otro se pasara,- Fue venturoso en vida de su amigo,
Gozáramos después de las cuitas Y muriendo también fue fortunado,
Las delicias del bien: mas si los Dioses Por la venganza de su cruda suerte,
Solo un tiempo de vida concedieron
Que viniese á ios hombres, y éste breve, IDILIO VIL
Y .muy menor queá todos , ¿hasta quándo ' . Si - - 1 > h¡ :..
CLSODAMO Y MYR.SQS'-
Cuitados en trabajos, y fatigas
Afanamos? .y en artes y ganancias,
Plasta quándo los ánimos ponemos • Cleodamo. •
De mayor bien con tino deseosos?
jMyrson, la primavera, o el otoño,
Y todos olvidamos ser mortales
El estío, ó invierno , quál te agrada,
Que nos toca del hado breve tiempo.
Y quál deseas mas que ya se llegue?
¿Es por caso el estío, en que se acaban
idilios de bion. »3S
Todos nuestros trabajos, ó el otoño
Dulcísimo, en ^ue la hambre ño fatiga IDILIO VIII.
A los varones, ó el invierno ocioso,
Porque en invierno muchos se recrean Jti EPITALAMIO DE ACHILES,
Calentándose en ocio y en holganza? Y DEIDAMIA.
O mas te agrada bella primavera?
Di, qué quieres? El ocio hablar consiente. Myrson , Y Lycidas.
'■ ■ ■ : ': ’O’! jíj SU/ÍÍ
Myrsojst. Myrson.

No conviene al mortal juzgar las obras ¿^t^uieres cantarme ,'Lycida, algún tono

De los Dioses, que todas son sagradas, Siciliano , suave , y apacible,


Y apacibles. Por tí diré, Cleodámo, Y blando, y amoroso, qual cantaba
Quál me sea mas grata que las otras. Polyfemo en la playa á Galatea?
Yo no quiero el estío , pues entonces
El sol me abrasa; ni el otoño quiero,
Lycidas.
Porque produce los dañinos frutos.
Sufrir al duro invierno, escarcha, y nieve
t T;jLcíf/rí '.r , a: '.j,í
Aunque el cantar me agrada, Myrson mío
lo temo. Primavera muy deseada Qué cantaré?
Me dure todo el año, en que no daña
Ni el resfrior, ni el sol: en primavera
Myrson.
Todo cria , y tallece dulcemente,
Y es igual á los hombres noche, y dia,
De Scyro la tonada,
Lycidas, imitando, el amor dulce
I36 IDILIOS .-.munon;:.

los escondidos juegos amorosos De yároü los'ámdrés.’jpyxpasabamelíi! ;}.¡ '


Del hijo de Péle,6, yácBirio' el joven Desde la alba á la nobhe con Deidamia;
El peplo se vistió, y fingió su forma; Ya su ‘manó besaba! binchas veces
Y como Deidamia entre las hijas Su hermoso cuerpo alzaba, y sus suaves
De Lycomedes esquivar solia Lágrimas celebraba; ni comía
AI disfrazado Achiles desdeñosa. Con otra compañera, mas en todo
■.? \ ' . ; Y ' . í ’ '' IA Hacia por tener comunal lecho,
Lycidas. Y decíale así: las otras todas
.ZOíHli,,. Entre sí duermen; sola yo cuitada
Robó á Helena un boyero en otro tiempo, Quedo, y tú, Ninfa, duermes también sola,
Y al.Ida la llevó: tormento fiero - Dos doncellas iguales, bellas ambas,
De Enone, y enfurécese la Esparta; ;¿ Pero solas yacemos en los lechos,
Ni Griego alguno de, Micenas, ó Elis, " Y una mala pared de ti me aparta^
Ni de Laconia se quedó en su casa, Ni yo de tí. ..
Elevando el fiero Marte * á la alta Troya.
Solo Achiles se oculta entre las hijas IDILIO IX.
De Lycomedes, y entendia en lanas,
En vez de armas trataba de doncella
La escoba, y ser muchacha parecia;. -p
O blanda Cyterea, hija de Jove,
Y del mar; ¿por qué tanto á los mortales,
Qual ellas deliciaba, y la flor misma
Y á los Dioses afliges? Poco he dicho.
Sus nevadas mexillas purpuraba,
¿Por qué pues tan dañosa, y por que causa
Y su paso y andar como doncella,
Sus cabellos cubria con un velo, Paristes al Amor con todos malo?
De Marte era el valor; pero tenia Fiero cruel, de faz desemejante
'I38 IDILIO! BE Bietl,

A las mientes, ¿ porqué también alado,


Y diestro tirador nos le presentas,
/Que de su crueldad, ni huir podemos? ■

íd-f-O-, tí! ;
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IDILIO PRIMERO.
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>13! 07; FUGITIVO. ...J
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V enus á su hijo Amor con altas/yoces ■ /
Buscándole gritaba ,si vio alguno .
Entre caminos al amoicerfante, •npoq v :ó'.
De mí se huyó. Quálquier que le; enseñare
Tendra’iu hallazgo rde Citere un'beso: :’
Será su premio: tu si le^traxeres, •
No solo un beso , sino mas, amigo.
Es asaz séñálado el pe^ügfiuelo, ■■ ■ ■.
Y le conocerás aun veinte. upo'?
No es blanco de'fcoloí ,'parece fuego: í ' —
Sus ojos son agudó's-y fulgentes:
Es de mala intencióny hablar suave;
Ni lo mismo que entiende es lo que dlíae:
Es cotrío miel su Voz; y'sise enfada, 1 ;
Es de ánimo cruel, es erigañoso, í
1^0 IDILIOS
PE MOSCO.
Nada veraz , doloso rapazuelo, Toma.jr todas- mis armas quiero darte;
Y de pesadas burlas. Bien trenzadas j Ay! no las toques , engañosos dones,
Su frente , y de mirar feroz y osado. Todas en vivo fuego están bañadas.
Son sus manos pequeñas, pero tira
Lejos , y asaetea hasta el Erebo,
IDILIO II.
Y hasta .al Monarca del escuro Dite.
Lleva desnudo el cuerpo, y encubiertas ' i'M. Al
EUVDVul.'
Las mientes. Como páxaro es alado;
Y de unos á otros vuela como quiere V . ' ' '- ' ' '
V .enus un tiempo-á.la doncella Europa"
Varenes y mugeres, y se sientá-
Envió un, dulce y apacible sueño,
En las mismas entrañas. Tiene un,arco
A la tercera parte de la noche,
Muy pequeño , y en él una saeta
Cecea ya'de la aurora, quando el sueño ‘'
Sutil, pero con ella al Cielo llega. .(
Sentado en las pestañas es mas dulce
Tiene á los hombros su dorada aljaba, í>
Que miel, los miembros laxos, y lqs ojos
Y dentro de ella las doradas flechas, ,.
Ata con blando lazo, quando viene
Con las quales á mí también me hiere.
La tropa de los sueños.:r-verdaderos.
Todo, todo es cruel, y mas la tea
Durmiendo entonces- en las altas casas
Pequeña, mas al mismo sol enciende.
Europa, hija de Eeriix , aun.doncella,
Tú pues si lo cogieses traelo atado,
Parecíale ver las dos regiones
Y ni te compadezcas aunque llore, -.'o ;j;2
Por -ella, conte oder, Asia la una,
Guárdate no-te engañe; y aunque ría,
Y la otra la de enírente. .Su figura,
Tú\ti‘aele ; y si besar, también te quiere,
Qual de mugeres, una parecía
Huye, sü beso es malo, y en sus labios
España ; mas la otra semejante
Tiene veneno; y si por caso dice:
A las de aquella tierra, y mas pugnaba
£
* '
14’ IDILIOS DE MOSCO. 143
Por su doncel’a, y como la pariera, Sus dulces compañeras, sus iguales
Decía, y ella misma la criara. En ánimo y querer, y bien nacidas,
La otra con fuertes manos forcejaba, Con las que solazarse acostumbraba,
Y la llevaba, bien que no á desgrado, Ya en sus placientes juegos, y ya quando
Decia ser dispuesto por el hado La danza disponían, ó sus miembros
De Júpiter Egioco, que fuese Bellísimos en baños deliciosos
Por premio suyo Europa. Entonces ella Bañaban en corrientes del Anauro;
Saltó del blando lecho amedrentada, O biea quando del prado recogían
Palpitando su pecho ,'pues vio el sueño Los olorosos lyrios: ellas vienen
Como verdad, estúvose callando Al punto, y en las manos cada una
Un buen rato sentada, pues tenia Para flores llevaba un canastillo:
Delante las mugeres, bien que abiertos Con sueltos pies andaban por los prados
Sus ojos ya; pero después ya tarde A par del mar, donde venir solian
Así la voz alzaba la doncella: Juntas,y recrearse con las rosas,
¿Quién 2 de los celestiales ha enviad» Y el fragor estruendoso de las ondas 3.
Tales visiones, y en el blando lecho Llevaba Europa un canastillo 4 de oro
Quando dormía yo suavemente, Muy bello y admirable, gran trabajo
Qué sueños me asustaban? ¿y quién era De Vulcano, que en don á Libya diera
La forastera que durmiendo via ? Quando al tálamo vino de Neptuno.
¡ Ay, quál hirió su amor el pecho mío! Ella lo dio á la bella Telefesa,
• Ella quán dulcemente me abrazaba, Porque era de su sangre, á la doncella
Y me miraba como á su hija propia! Europa, este don ínclito su madre
Mas los Dioses en bien el sueño tornen. Telefesa donó, en el qual labradas
Diciendo así, se levantó, y buscaba Habia muchas cosas muy preciosas:
Ka
144 IDItJOS
BE MOSCO. I45
De oro esculpida estaba lo, de Inachó Ellas después que á los floridos prados
Siendo novilla aun, sin forma humana. Vinieron, con las flores recreaban
Enfurecida por sus pies corría Variamente sus ánimos, algunas
Eos salados caminos qual nadante: Con narciso oloroso, ó con violas;
Estaba el mar azul, y dos varones Otras con el jacinto; otras cogían
Juntos estaban sobre la alta playa El serpol, y caian por el suelo
Viendo la yaca traspasar los mares. De los prados que crian primavera
También estaba Jove, que halagaba Muchas hojas: algunas contendían .
Con su divina mano blandamente Para coger las olorosas hebras
La marina novilla.,.y junto al Nilo De azafran colorado: en medio de ellas
De siete bocas, de cornada vaca La Reyna estaba, qual la Cypria Venus
En, muger otra vez la .trasformara. Entre las Gracias brilla , y con sus manos
De plata era del 5 Nilo la corriente, El esplendor de la purpúrea-rosa
De bronce la novilla,, de. oro Jo,ve. Cogia ; pero ya no mucho tiempo
Baxo del cerco d,el redondo cesto, Su corazón de. flores cuidaría,
Y en derredor también Mercurio estaba Ni guardar puro el cinto 6 de doncella.
Y á par del estendido Argos ornado Luego que la vio Jove, ¡cómo herido
De veladores ojos, y nacia Su corazón , y cómo fué domado
De su purpúrea sangre una gran: ave, De Cypria con las flechas improvisas!
Ufana del color muy floreado Que sola domar puede al mismo Jove.
De sus plumas, sus alas extendiendo El por huir de la zelosa Juno 7
Como una veloz nave , y encubría La saña, y engañar las tiernas mientes
Con sus plumas los labios del cestillo. De la doncella, su deidad oculta
Tal era el cesto de la bella Europa.
El cuerpo muda, y se convierte en Toro.
k3
I4<S IDILIOS BE MOSCO. »47
No qual en los establos se apacienta, Migdonia el dulce son; dobló las manos
Ni qual abre los sulcos, arrastrando Delante de sus pies; miraba á Europa
El corvo arado, ó'qual paciendo yaga Volviendo el cuello, y descubrióla el lado’
En los rebaños, ó domado lleva De sus anchas espaldas; y ella dixo
El muy cargado carro. Era su cuerpo A las otras doncellas bien trenzadas:
Todo roxo, y en medio de la frente Venid, dulces amigas, mis iguales,
Resplandecía 8 un círculo de plata. Subamos en el Toro á recrearnos
Fulguraban de amor sus ojos garzos, Asentadas en él, que ciertamente
Iguales entre sí de la cabeza ■ Nos llevará tendiendo sus espaldas
Los cuernos le salian, qual parecen Como nave. ¡Qué manso y apacible
Los cuernos de la luna á medio cerco. Es al mirar! En nada es semejante
Al prado vino, ni asustó asomando A otros toros, y tiene intención buena
A las doncellas, y tuviéron todas Como de hombre, y la voz le falta solo.
Deseo de llegarse mas de cerca, Así dixo, y sentada en las espaldas
Y de alhagar al amoroso Toro, Reja, y á subir iban las otras;
Cuyo divino olor, aunque de lejos, Pero el Toro saltó con gran presteza,
Aventajaba al dulce olor del prado. Robando á quien quería, y velozmente
Paró á los pies de la inocente Europa, Al mar llegó; mas ella se volvía,
Y el cuello la lamia, y alhagaba Y á sus caras amigas voceaba,
A la doncella, y ella blandamente Y extendía sus manos; pero aquellas
Le acariciaba, y con sus blancas manos Seguirla no podían. De la playa
Mucha espuma limpiaba de sus labios; Entrando al mar como Delfín corria;
Y besó al Toro, y él suavemente Y del mar las Nereidas asomaron
Mugió , que oir dinas de la flauta Sentadas en espaldas de ballenas,
K 4
IDILIOS DE MOSCO, 149

Iban todas en orden; y Neptrino’j ¿Quién eres? ¿Cómo vas este camino .
Que rodea la tierra , y causa estruendo Con graves pies? ¿ni temes el mar bravo?
En.pi(na de las aguas, allanaba A las naves ligeras el mar se halla
Eas ondas, y en los húmedos caminos ■Abierto; mas los toros siempre temen
A su hermano guiaba; y dé! cercanos Los caminos dej mar. ¿ Quál será ahora
Se congregaban todos los Tritones, Tu suave bebida? ¿y de las ondas
Que la hondura del mar contirio inoran, Quál será la comida? Si por caso
Con anchas y torcidas caracolas Eres un Dios, ¿ cómo haces lo que á Dioses
Una nupcial canción iban cantando.' No conviene? Ni vagan por la tierra
Ella sentada en la boyuna espalda Los marinos Delfines, ni los toros
•De Jove, el largo cuerno en una mano En el mar; pero tú tierras y mares
Tenia, y con la otra los purpúreos Enxuto pasas , y te son las manos
Pliegues del manto alzaba, que la orilla Remos, y acaso por el ayre glauco
Aun así levantada humedecían En alto alzado volarás qual ave
Del cano mar las ondas infinitas. Veloz. ¡ Ay mí, ay mí desventurada!
De Europa el ancho velo por los hombros Que dexada la casa de mi padre,
Se hinchaba como vela de una nave,' Y siguierido este buey, sola y perdida
Y muy mas leve á-la doncella hacia: Navegación estraña voy haciendo.
Y de su patria tierra ya lejana, Mas tú, Ngptuno, Rey del cano Ponto,
Quando ni viajas marinas playas, Socórreme propicio, y bien .espero
N¡ alto monte, y mirando solamente Verte mi guia en el marino curso:
Abaxo el hondo mar, y arriba el cielo, No ando sin Dios los húmedos caminos.
Mirando de sí en torno así decidí Así dixo; y el Buey de grandes hastas
¿Dóndeme llevas, ó divino Tor.o? Así hablaba: buen ánimo, doncella,
»B MOSCO.
IDILIOS

Y n.o temas del mar lasbravas ondas.


IDILIO III.
Yo soy Jove, y de cerca ser parezco
Toro , y parecer puedo lo que quiera.
Forzóme pues tu amor á que midiese CANTO FUNEBRE DE BIOS, BOYERO

Tanto mar , semejante á un roxo toro. ENAMORADO.

Recibiráte Creta, que á mí mismo


Llorad, ó valles 1, con lamentos tristes:
Me crió: allí serán las bodas tuyas,
Y parirás de mí gallardos hijos lo, Onda dórica y rios, al amable
Que reynarán sobre los hombres todos. Bion llorad: las plantas todas lloren:
Dixo así, y acabó lo que dixera. Lamentad, selvas; y vosotras, flores,
Aparecióse Creta, y otra forma Con tristes copas respirad : las rosas
Jove tomó, y el cinto desatóla, Bellas, las amapolas se purpuren
Y las Horas el lecho aderezaron: Lúgubremente, y el jacinto clame
Y la que ántes doncella, al punto esposa Con sus letras, y ponga mas, ay, ay,
De Jove fué, parióle dulces hijos En sus hojas: murió el cantor divino.
AI mismo Cronio, y ya llamóse madre. Sículas Musas, comenzad el llanto.
Ruiseñores, que en densas enramadas
Lamentáis, anunciad á las fontanas
Sículas de Arethusa, que ha finado
Aquel pastor Bion , y juntamente
La dulzura finó, y dórica Musa.
Sículas Musas, comenzad el llanto.
Cabe las ondas, Estrirnonios cisnes,
Tristemente llorad; fúnebre canto
I £2 IDILIQS WK MOSCO. ,

Con gemidora boca cantad, como Ni miel de las colmenas, se ha perdido,


Un tiempo en vuestros labios él cantaba. En la cera ha faltado, nada importa
Decid á las doncellas Oeagrias, Hallar otro dulzor .si el tuyo falta.
Decid á todas las Bistonias Ninfas: Siculas Musas, comenzad el llanto.
Falleció, falleció el dórico Orfeo. No así el Delfin en la marina playa
Sículas Ninfas, comenzad el llanto. Lloró, ni ruiseñor así en las peñas
Ya no canta el amado del rebaño; Cantó jamas, ni con lamento tanto
Ya no mas solitario , só la encina Suspiró golondrina en altos montes,
Cantará reclinado: el son Leteo Ni de Afcyon así en las desventuras
Con Píuton canta: mudos son los montes, El cuitado Ceix se afligia.
Y las vacas que vagan con los toros, Siculas Musas, comenzad el llanto,
Lloran, y del pacer se han olvidado. No así Cerylo en las azules ondas
Sículas Musas, comenzad el llanto. Cantó, ni en los collados del oriente
Tu acelerada muerte el mismo Apolo Al hijo de la Aurora, así lloraba..
Lloró, Bion , los Sátyros lloraban; El ave de Memnon, volando en: torno
Y también los Priapos enlutados, De su tumba, qual estos lamentáron
Y ¡os Faunos suspiran pór tu canto. Al finado Bion , a! ya finado.
Las Ninfas de las fuentes por la selva Siculas Musas , comenzad el tlanto. ,
Lloran, su llanto e.n agua se convierte. Ruiseñores , y vos las golondrinas.
Eco llora en las peñas su silencio, Que un tiempo deley tó, las qüe enseñaba
Y ya no mas imitará tus labios. A gorgear, sentadas en los ramos
Cayó en tu muerte el fruto del plantío; Unasá frente de otras lamentabais
Todas las ñores mustias han quedado, Entre sí respondiéndose las aves.
Ni á las ovejas viene dulce leche, O vosotras, también gemid, paloma^.
DS MOSCO.
IDILIOS
Ig4 De tu túmulo en torno se lamentan.
Siculas Musas, comenzad el llanto.
La misma Venus, mas que al beso te ama
¿Quién, pues, amado tocará tu flauta?
Con que besaba al falleciente Adonis.
¿Quién aplicará el labio á tus reclamos?
Esto á tí el mas sonoro de los rios
¿ Quién será tan .osado ’ pues aun ora
Otro dolor será , nuevo quebranto
Respiran á tus labios, y á tu aliento,
O Mele, te faltó el primer Homero 3
Y aun Eco entre las cañas tus cantares
Resuena: á Pan yo llevo tuflautilla, Aquel de Caliope dulce labio,
Y es fama que lloraste al hijo hermoso
Acaso no osará poner el labio
Por no quedar después de tí segundo. Con tus llorosas ondas, y llenaste
Siculas Musas, comenzad el llanto. Todo el mar con tus voces, mas ahora
Tu melodía llora Galatea, De otro tornas al lloro, y consumido
Aquella que contigo se apiada Del fiero llanto estás, ambos amados
Reclinada del mar en la ribera, De las fuentes, el uno que bebía
No cierto como el Cyclope cantabas* De la Pegasia fílente, el otro siempre
Que del la bella Galatea huia, Bebia de las aguas de Arethusa.
Pero á tí desde el mar suavemente Uno cantó de Tyndaro la hermosa
Miraba, y ya del piélago olvidada, Hija, y de Tetis al doncel gallardo,
Agora yace en la desierta arena, Y á Menelao de Atreo; mas el otro
Tu vacada la misma apacentando. No las guerras, no muertes, á Pan solo
Siculas Musas, comenzad el llanto. Cantó, y entre pastores resonaba,
Contigo lian fenecido de las Musas Y cantando pacia , .y flautas hizo,
Los dones, ó pastor, de las doncellas Y ordeñó las novillas blandamente,
Los amorosos besos, y los labios Cantó los besos de la edad florida,
De los mozos, y tristes los Amores Siempre al amor alimentó en su seno,

/
i$<5 idilios DE MOSCO. TS7

Y amado fue de la risueña Venus.': -t A tnszagales,- y por don postrero


Siculas Musas, comenzad el llanto. Con las Dóricas Musas nos ornaste.
Bion, todas las Ínclitas ciudades Yo tú canto, tn haber otros llevaron.
Te lloran , todas las aldeas Ascra Siculas Musas, comenzad el llanto.-
Muy mas que á su Esiodo te suspira, Ay¡ ! ¡ ay! quando las malvas en el huerto
Ni así lloran á Pindaro las selvas Mueren, ó el apio verde, ó floreciente
De Beocia , ni así la defendida Blando eneldo, retornan á la vida,
Eesbo lloraba á Alceo, ni de Ceyo Florecen otra vez, pero nosotros
la aldea lloró tanto á su poeta, Aunque varones grandes, fuertes, sabios,
Paros mas que á Archiloco te desea, Qúando una vez finamos, olvidados
Y por su Sapho ahora tus cantares En la cóncava tierra , un largo eterno
Resuena Mitilene. Los pastores No dispertable sueño ya dormimos.
Todos quantos han labio fervoroso Y tú también en el silencio puesto
Tu fatal muerte con canciones lloran, Serás en tierra, que á las Ninfas place
Sicelida te llora , honor de Samo, El cantar de la rana en todo tiempo,
Y aquel que en los Cydones en un tiempo A la qual ciertamente yo no envidio,
Con risueño mirar se recreaba, Que su canto no suena dulcemente.
Llora Lycida , en llanto doloroso Siculas Musas, comenzad el llanto.
Se deshace ; Filetes se lamenta A tu boca, Bion , mortal bebida
Cabe el undoso Alente , en las ciudades Llegó, ¿sentir pudiste? el veneno?
De Triqpe,y también en Syracusa ¿Cómo no fue endulzado por-tus labios?
Teocrito; mas yo te canto tonos Que tan fiero varón el que mezclaba
De Ausonico dolor, aunque no agenos El veneno, ó mandó que té le dieran
Del canto pastoral, que tu enseñabas ¿Huyó de tus cantares la dulzura ?
L
Í)E MÒSCO,
j53 idilios V

Siculas Musas, comenzad el llanto, ryteO


Mas el justo dolor á todos llega, IDILIO IV- ■‘J-V
• 1 ■ . í.1 •K'O riinlí
Y yo en aqueste luto lamentable t
Tu muerte lloro, y como yo pudiese .•■'EG.'IRji.
Qual Orfeo y Ülises; y como ántes Madre mia, ¿por qué con triste lloro
Aleides, que baxaron al infierno,
Tu amante corazón así atormentas ?
Así quizá también yo descendiera
Ni el rosado color de tus megiilas
De Pluton á la casa, y miraria
Dura ya ; ¿ por qué así te afliges tantó? .
Si en Dite cantas, y tu canto oyera:
¿ Es quiza porque pasa mil dolores
Delante Proserpina cantar debes
Tu ínclito hijo por un hombre nadie?
Algún Siculo tono, algún suave
¿•Quál por un cervatillo un león bravo? ‘
Pastoral canto, que en la playa Etnea
¡Ay iftí! ¡por qué los Dioses inmortales ?
Y Sicula también se recreaba,
Tanto así me atormentan! ¡por qué causa
Y cantaba también Dóricos tonos.
Ni despremiadó quedará tu canto, Con tan contrarios hados meenggndráro'tf,
Y como ántes á Orfeo le fue dada Mis padres! ah ! cuitada, que venida, :
Por el dulce cantar á la vihuela Al tálamo de un hombre irreprehensible,
La recobrada Éuridice , sin duda, Al qual como á mis ojos 1 estimaba,
A tí Bion, retornará á los montes, Y aun en mi corazón venero y amo; ■
Y si yo flautear hora supiera, Pero no füé jamas de los vivientes
Yó ittismo en Dite ahora cantaria. Otro mas desgraciado , y que probas©
t; En su ánimo mas penas y dolores.
¡Mísero! cdn el arco y Crudas flechas
Que le dio el mismo Apolo, ó Bien las Parca#
x Lí
160 IDILIOS

O alguna de las Furias,2 á sus hijos DE MOSCO. lól


Quitó la vida y el aliento amado. Tienes Sobre las hembras delicadas,
Enfurecido por la casa, y lleno Y con piadosas manos nuestros padres
De estrago, y yo mezquina con mis ojos Nos hubieran llorado, y con ofrendas
Los vi tirados de su mismo padre, Copiosas nos pusieran en un mismo
Lo que nadie soñara, y ni podía Fuego, y cogidos todos nuestros huesos
Socorrer á los tristes que clamaban En sola una urna de oro nos pusieran,
De contino á su madre, pues cercano Y sepultaran dó nací primero.
Estaba el fiero mal, qual avecilla Mas hora ellos habitan allá en Tebas 3
Que lamenta sus pollos que perecen, La fecunda en caballos, y cultivan
Y una horrorosa sierpe los devora El gasón pingüe del Aonio campo,
Pequeñuelos aun en la arboleda Y yo en Tirynto en la ciudad potente
Frondosa, y ella en torno revolando De Juno, en mil dolores atormento
Pia con voz aguda y lastimosa, Mi corazón, y siempre, y ni así tiene
Y socorrer no puede á sus polluelos, Reposo mi llorar, y un tiempo breve
Que el acercarse de la tierna madre Miran mis ojos al esposo en casa,
Estorba el gran temor del fiero monstruo:, Que de muchos trabajos prevenido,
Así yo infeliz madre , lamentando El continuado afan está sufriendo,
Mis dulces hijos, corro por la casa Y por la tierra, y por elmar errante
Con pies desatinados: ¡ay! si quiera Afana, que un espíritu valiente
Hubiese con mis hijos allí muerto. Tiene en su pecho, qual de piedra ó hierro.
Cayese ay mí! cayese yo cuitada! Y hora tú como el agua'4 te deshaces
De venenoso dardo traspasado Llorando noche y dia: otro ninguno
El pecho, ó Cintia, quel potente imperio De los parientes consolarme puqde
Aquí presente, porque no los tiene
J5B MOSCO. I®5
16 i. idilios
Seria bien, el que contar quisiese
La pared destas casas.- Todos moran Nuestros lamentos: mas confia , un hado
Del pinoso Istmo allá mucho mas lejos, Semejante no hubimos de los Dioses.
Ni tengo.alguno-á quien volver dos ojos ' De incesantes-dolores agoviada
Por descubrir mi corazón amado,
Hija mia/te, veo, y fácilmente
Quajbmuger afligida, sino á Pyrra
Excuso tu dptar, que aun hay hartura
Mi hermana, mas, la triste se consume Del gozo, y te lamento, y compadezco;
También por tu hijo-1 ficta su jnarjdo.
Mas sepa Proserpina, y la velada
Tu creo que de Dios, y un mortal hombre
Ceres (que ,pox su mal algún malvado
Pías parido, los hijos mas mezquinos. Perjure , que no menos en n/1 pecho
Así dixo: y calan de sus ojos.
Eres amada, que si deste seno
Lágrimas mas hérniosas ¡que manzanas o-
Salido hubieras, yen mi casa fueses
A su amoroso seno, al acordarse ,
Unica dpncellita, y yo no creo,
Desushijós, y.lnífgp-de sus padres.
Que tú d¿el .tqdo ignores- es,tas. cosas,
Y Alcmena con. .sus lágrimas bafiaj» o .
Y así no digas-,, ó pimppllo mío,
Sus cándidas megiilas igualmente, - , ' Que no cuidado tí, no porque lloro
Y con graves suspiros-de su pecho Muy mas confino que Ja,bien trenzada
Dixo con sabios,dichos á su nuera. Niobe, y ni se culpe que una madre
¡ O ¿mísera en los hijos! ¿ qué ha caído
Eamente-.por un-hijo maltratado,
Hora sobre tus-mientes eqidadqsas í , ,
Pues le ljevé, diez ,meses en.mi seno,.
¿Cómd así quiejjesiqjie, ambas nos turbemos
Y con grave dolor ántes de verle,
Tan desmedidos males recordando,?
Y á puertas de Pluton casi llevóme,
Que no lloramos hora lo primero,
Que padecí al parirle dolor fiero.
No son.bastantes. yaT los que sentimos
Hora solo partióse á lejas tierray
De dia en día siemp/éd y dado al llanto, L4
idilios BE MOSCO.
Por acabar extrañas aventuras, • Delante de su cuerpo como escudo,
Y ai sé, 'si tornado, ¡ ay mi cuitada! Acá, y allá sus ojos revolvía,
Abrázatele'-, ó no, turbóme ahora ' Porque no le abrasara el voraz fuego,
En el suave sueño, un horroroso El animoso Ificlo cayó en tierra
Ensueño, y así temo habiendo'visto Por quererle ayudar, me parecia
Una triste visión, ei'que suceda1 Antes que le llegase, y ya no pudo
Alguh mal á mis hijos, yo veía Levantarse derecho, y sin moverse
Al esforzado Hércules mi hijo, Así yacia qual un débil viejo,
Que tenia en las manos una pala Aquien á su pesar vejez odiosa
Bien labrada ,'jf con ella socababa, Hace caer por fuerza, y derribado
Qual tomado á merced , úna gran hopa, Allí se queda, hasta que' alguno pasa
En el extremo dé un florido campo, Y le alza con su mano, conmovido
Desnudo sin lá fcleftá, y Bien ceñido De su vejez, y venerables canas:
Gaban, y quahdó ál término ÍISgaba Así se revolcaba por el suelo
De todo su trabajo, reparando ' ; 111 ■ Ificlo vibrador del ancho escudo,
La fuerte cercardeuri plantel de viña, ’ 3i l Y yo lloraba, viendo abandonados
Y clavando la pala en lugar alto ’’n Y sin favor mis hijos, hasta tanto
Del vallado,’ al tó'miír las .vestiduras' Que mis ojos dexó el suave sueño,
Que antes llevaba', resplandece al punto Y se manifestó la clara aurora.
En la profunda fosa un vóraz fuego, Tales sueños mímente perturbáron
Y llama inmensa le cercaba en torno: Toda la noche,pero vayan todos
El con ligeros'pies'afras volvía, Desde la nuestra en casa de Euristeo
Deseando escapar la cruda llama, Y de adivino mi ánimo les sea,
Vibrando siempre sin cesar la pala Ni de otro modo Dios lo perficione.
i6á IDILIOS- 167
DE MOSCO.

IDILIO V. idilio vi.


Cenando suavemente el viento mueve
A la vecina Eco Pan amaba,
Al glauco mar, mi corazón cuitado Y Eco á un saltante Sátiro queria,
Se agita, ni la tierra 1 es agradable, Y el Sátiro por Lida enloquecía;
Y el sosegado mar muy mas me lleva; ;; Quanto Eco á Pan, el Sátiro abrasaba
Mas quando el cano piélago resuena, A Eco, y Lida al Sátiro encendía:
Y el encorvado mar. levanta espumas, Amor así á los míseros perdía,
Y la onda se enfurece, á tierra miro - . Y quanto alguno al otro desdeñaba,
Y á los árboles, y huyo;de los mares,; ; Tanto era de su amante despreciado,
Es me la tierra fiel ;. y ya me agrada De odiosa ingratitud' justo castigo,
La selva umbrosa , allí si mucho viento Dulce venganza, al triste namorado.
Respira, canta<el pino, Ciertamente; Yo de la turba enamorada, amigo,.
Que vive el pescador, mísera vida, Que amantes hade haber si hay hermosura,;
Al qual la barca es casa,,y el trabajo' o ¿ Y Este exemplar les doy, y al fin les digo:
El mismo mar, y el peze falaz presa» L; í Amad, amantes, con igual ternura.
A mí baxo de un plátano frondoso \ , * . .fí'. * ‘J’.' •' ’ ■ '-i ; □ I2xí
Es dulce el sueño, y el oir. el ruido ..IDILIO VIL
De la cercana fuente es mi deseo, .. ■' ■; ■ ; ■ ■ ;n;; toct
Que al labrador con susurrar suave Esperio, 1 bella luz del alma Venus,
Deleytacon recreo, y no amedranta,;;.; .aCí Esperio amado, de la negra noche
« Y. i h ’ ni ■ w> Y Sacro decoro, entre los otros astros
Luces después de la fulgente Luna,
BE MOSCO. 3.6$
I«S IDILIOS

Ea mi dulce luz, tus resplandores IDILIO IX,


Dame en vez de la Luna que boy comienza, Dexada tea, y arco amor dañoso,
Y presto se traspone, voy 2 de ronda
A mi amada, 3 ni voy por hacer robo, Tomó vara de bueyes movedorá,
Ni por dañar de noche al caminante, Y de sus hombros el zurrón pendía,
Mas arpo, y el amante es de amor digno., Y la cerviz sufrida de los toros
Al xugo unciendo, siembra el fértil sulco
IDILIO VIII. De Ceres, y mirando á lo alto dixo
Al mismo Jove : llena aquestos campos,
De allá de Pisa Alfeo al mar entrado O te pongo al arado; buey de Europa.
A su Arethusa va, lleva las aguas
Que crian azebuches, lleva en dones
Bellas1 hojas y flores, polvo sacro,
Y profundo camina por las aguas,
(
Y debaxo del mar se va escurriendo,
Y ni las aguas con las aguas mezcla,
Ni siente el mar al traspasante rio.
Así el fiero doncel, el malicioso
Amor, que enseña cosas admirables,
Por amoroso encanto á un rio enseña
A zambullirse á nado por las aguas,

A
170 171
La colera está sentada en su nariz, dice Theó-
anotaciones crito , para expresar que era colérico : se nota que
en Hebreo la voz of es nariz y colera, y consi­
deraban la nariz como el asiento de e9ta pasión,
A LOS IDILIOS asi dicen cbaron af encendimiento de nariz , ó de
colera , y también : scbafak cbaron afd, derramó el
de t e o c r i t o. fuegode su colera , ó de su hariz.
Es ademas muy de gusto Griego : lá risa esta­
IDILIO PRIMERO. ba en sus labios, dice en el Idilio VII. para de­
cir , era risueño , y en otra parte dice de Helena:
1 Pan es el mismo que Fauno, Deidad campes­ en sus ojos estaban los amores, que es decir, eran
tre, adorada principalmente de los pastores : este muy amorosas sus miradas.
nombre en su origen Oriental significa padreólos 4 A todos los Dioses se consagraban áfboles, tron­
Arabes llaman Fan á un viejo acabado de ánOS; cos ó piedras , como manifiestan varios lugares de
y entre los Persas es muy celebrado nn Genio que Esiodo, Omero, Pindaro y Calimaco. No eran otra
llaman Aban , compañero de Cburdadt. cósalos Ascberim planteles ó bosques de Molok y
2 El susurrar de los arroyos , y el . delicioso es­ Astharoth: en Hilcoth Sukka ó constituciones de
truendo de las aguas ha sido siempre muy celebra­ la fiesta de los Tabernáculos se prohíbe á los He­
do de los poetas , y los Orientales' dicen muchas breos el hacer su cabaña de árboles de bosque
veces, un ru-do como el fragor estruendoso de mu~ consagrado á los Idolos. Priapo era el Balpaor
chas aguas que se derrumban de los montes. Idolo de la torpeza de los Antiguos.
3 Era opinion común entre los Gentiles que to­ 5 Dexarle codiò èn séco , es decir, Sin merienda,
das las Deidades campestres se manifestaban in­ sin Acratismo, como quando decimos, apurar una cosa
tratables y furiosas al mediodía : juzgan algunos, consumirla,
que esta opinion la aprendiéron de aquellas pa­ 6 Eolico prodigio llama á su vaso por estar hecho
labras del Salmo 9o 7. «b incursu & dcemomo me­ en la Eolia, 10 mismo dicen los Arabes quando
ridiano i pero esta extraña persuasión de los Gen­ hablan de sus rayos , yemanos , espadas que-se fa­
tiles es mas antigua que la version del Synhedno brican en la parte dé Arabia que llaman Yeman.
Alexandrino, y no pudieron tomarla de libros 7 Los intercalares son generalmente impertinen­
que no conocían. Los Rabinos de Alexandria tra- tes y colocados fuera de su lugar por -los Gramá­
duxéron el texto Hebreo según sus tradiciones, ticos y copiantes.
dice el Hebreo; mi qeteb jascbud zabanm de la 8 Es bellísima expresión Griega para decir que
peste desolante el mediodía ■ quiere decir : ale aun hay algunas esperanzas del bien que se desea-
contagio pestilencial que aflige la parte del medio­ faltarelsol es morir, modo de decir muy usado
día • pero los Rabinos siguieron su antigua fabula de Omero:
de los dos demonios Deber y Qeteb, uno que daña
de dia, y Otro de noche ; la causa que seña a Si vive aun y goza del sol claro.
Teócrito es la que creían los pastores ser lo de la ¥ Esiodo:
colera de Pan al mediodía. ¥ del sol se dexáron la luz bella.
17«
9 Herebo es voz oriental que significa obscuridad
y negrura , y se toma por el lugar del espanto y yá se sabe que Diana era la Diosa de la Caza ; el
de las tinieblas, la. voz que usa aqui Tbeocrito es nombre de Diana se puede reducir al mismo ori­
oída. También del mismo origen, y significa pérdi­ gen , y significa nuestra abundancia.
da , muerte , acabamiento : generalmente se subs­ 5 Rhadauiantbo juez infernal; esta voz en su
tituye con la otra Herebo. origen es el adormecedor de los mortales. Job 4. r3.
10 Faltar los hilos de las parcas, es faltar la 6 Eran varias las vanas observancias de las hechi­
vida ■ expresión usada de todos los Orientales. En ceras enamoradas, nuestra Symetha se acuerda del
el Thargum Qoheleth se dice : hasta que no se chapeteo deí arambre del rhombo mágico , de
rompa Cbebel hakkesef el hilo de plata , y lo expli­ arrojar al fuego la orla del vestido del ausente &c.
ca asi : bad saab sel mautb hasta la ora de la muer­ En Luciano y en Apuleyo se refieren otras.
te. Parca es la que corta ó divide, los Griegos no las 7 Dia, es ei nombre antiguo de la Isla de
llaman con este nombre. tíaxos.
11 La Cigarra se celebraba por su dulce canto, 8' La misma coubuscion de la orilla del ves­
como se ve en Omero, y Auacreon hizo uua bellí­ tido aconsejaba la Aya á Fedra para hechizar ;í
sima Oda en su elogio; pero ó mudó de voz, ó Hypolito: ( en Eurípides. )
nuestra Cigarra no es la de los Griegos. 9 La Canefora ó Canastera era uu doncella de
12 Cysetha es nombre de una cabra. las que llevaban canastillos de flores en las .fiestas
de Diana y otras.
IDILIO II. 10 La Luna es llamada en dialecto dorico Selanm
voz Oriental que significa la que vela de noche:
x Venus y Amor dice que son causa de sus mu­ dice el Scholiasta Griego de Theocriio que las ena­
dables inclinaciones, y de sus ligerezas juve­ moradas invocaban á la Luna : lq causa es que las
niles. quejas y lamentos amorosos requieren la soledad
2 Ecate es uno de los nombres de Diana, con­ y el silencio, este se ofrece en la noche, y en­
siderada como Diosa infernal , en su origen esta tonces ninguna cosa ocurre á la vista mas adrni-
voz significa una como si dixeramos la única. Si fable que la Luna.
se atiende í otras radicales puede significar la que 11 El Thapso es planta con que tintaban de
aflige, la que turba y amedranta ; ideas que con­ Color azafranado ó amarilla, y le llamaban Palo
vienen á la que se formaban los antiguos de la Diosa Scythico.
infernal. 12 Las mugeres que pasaban su juventud perdí- '
3 Pezpilta es antiguo nombre Español de la ave­ damente, luego, en su tristes y miserables afios de
cilla que los Griegos llamabau rings , que creían vejez se daban á hechizéfas , y fi engallar con vanas
eficaz para los encantos , y para las conciliaciones observancias á los jóvenes.
amorosas. 13 Symetha es el nombre.de la enamorada en­
4 El nombre Griego de Diana es Artemis, en cantadora.
su origen Oriental tiar.Tbemi, que quiere decir el 14 ralear , he introducido esta voz por expre­
moute, mi admiración O mi recreo , y atendida sar mejor ei pensamiento original.
otra radical, perfección ó hermosura del monte; is Baco no "solamente se considera como el dios
de las viñas y del vino', sino de toda la labran—
M
za; los nombres de Baco son varios , pero los prin­ dia publico las Odas de Anacreon , presentaré
cipales son fenicios: Baco es lo mismo que vocin­ algunas Orientales que no agradarán menos que las
glero, Dionisio es el violento, ó el tirano; llamá­ del Griego.
banle’ también los Egipcios Osiris que es el feliz, 4 La morada de Amarilis es semejante á la que
el rico. Baco tal vez seria Baal-Cut. describe la esposa en el schir sel Selomoh: Nues­
x6. El nombre GTiego de Vulcano es Hephestos, tro lecho florido, nuestra casa rodeada de abetos y
voz Oriental aiberiba padre del fuego, nombre del cedros. Es de notar que el nombre de casa mas an­
Adrammelec de Chánaan , rey del fuego. Y Vulca­ tiguo es Beitb , y este significa solamente una aco­
no á Volcan lo mismo significa ; como los Grie­ gida para pasar la noche: y tales son las moradas
gos veian los Volcanes de Sicilia y Lipari fingie­ rústicas de los Pastores
ron que allí estaban las fraguas de este Dios. 5- Tenían los antiguos cierta vana observancia de
17 Eh Grecia para los festines y convites se poner en la dobladura del brazo unas flores de
llevaban músicos hombres y mugeres pagados para amapola tí adormidera, y sacudirlas con la otra
mano, si al romperse sonaban , era señal de ser
tocar y cantar.
18 Los nuevos esposos adornaban sus casas con amados, y si no hacian ruido, denotaba que no eran
flores y guirnaldas para recibir á las. esposas. correspondidos, esto se llamaba el Delefilo tí mues­
19 Como luchador llevaba para ungirse la olpe tra amor.
tí alcuza dórica para distinguirla de la Coryntia 6 Agrea nombre, de la vieja Coscinomantis, tí
adivinadora con cribas: sinoes nombre propio , se
que solia ser de piel como una bota pequeña.
debe traducir la vieja.
7 También tenían la vana observancia de creer
idilio i i i.
que los sucesos venideros buenos se sentían en los
1 No hay en Español voz equivalenteá la Grie­ ojos, y los malos en los oidos , á esto alude el de­
ga Comaido, este era un obsequio de amantes, decir : sáltame el ojo &c.
música y bayle con cantares lascivos que se hacia 8 Supone el enamorado pastor ser tan cruel su
comunmente de noche : tan antiguo entre los Orien­ amada , que aunqué lo devoren los lobos, no lo sen­
tirá , antes bien le será agradable como la miel al
tales que en Job c. 3. hay memoria de esta costum­
bre : ha leilah hahu jebi galmud, al tbabo rinanah, paladar. El mismo pensamiento es el de Alarasxi
Id. Aquella noche será solitaria, ni habrá música poeta Arabe que dice:
en ella. j&mautb ahgldo ¡ndana min alharli.
2 Los presentes y regalos amorosos de los Pasto­
res son tan sencillos como ellos mismos, fruta,
páxaros y flores. En el schir sel Selomoh hay igua­ mas dulce que'la miel nos es la muerte.
les expresiones.
3 La hermosura y natural gracia de las voces IDILIO IV.
Griegas de este Idilio , y mas las de esta expre­
sión no pueden trasladarse á las lenguas vulgares:
1 Los luchadores se ungían con azeyte para pe­
lear , y como Bato no creía que Milon tuese tan
entre los Persas hay canciones anacreónticas llenas
valiente , dice que jamas habia visto el oleo.
de estos amorosos y disparatados deseos; si algún
Mi
i7<5
i77
2 Después de la partida de Milon los lobos habían
hecho mucho daño en los ganados, y esta es una 5 En schir seT Selomoh es muy freqüente la
misma imágen : dodi li be scbusckanim, mi amado
manera de decirlo muy singular.
3 El egipyro es planta espinosa de hojas anchas para mi entre flores, entre azucenas, que es la
y como las de las ovas; la enyeta es yerba especie misma voz oriental.
6 Hay en Griego por la voz eras andera yaz
de heno , de que las mugeres Griegas hacían sus
Syro-caldaica que significa lo mismo que arugotb
camas para prepararse á las thesmofórias; porque
la frescura de esta yerba er.a á propósito para con­ eras de flores , y eras para trillar : en las sierras
tener los impulsos veuereos. Ea melitea era la lla­ del Reyno de Granada hay un territorio que le
mada también melirobqtane, ó yerba de abejas. llamaban los moros Andar ax la era ó la mera de
4 Esta reflexión es muy repetida de los poet» y la vida.
1 Todos estos son nombres del cabrío tomados de
filósofos Griegos.
5 Es, bien sabida la porfiada .lascivia de los Sa- los colores &c.
lyros , y sus continuas asechanzas pira sorprehender 8 Las vides dice que son abai nuevas floridas,
á lasNymfas, este nombre es oii«i.tal, sise lla­ esta voz es fenicia , y significa verdes, tiernas, y
mó Satber, es el que se oculta yyesconde, y. si de la misma radical es la voz uva : en schir sel
Schatir, es el que fatiga y rinde sus molestias. Selomoh se acuerda la esposa de sus viñas we
keramenu remada^, y de nuestras viñas las uvas
IDILIO V. tiernas, de suerte que remudar es lo mismo que
abai.
í- x riada es sacro, es como quando los Musulma­ 9 En el schir sel Selomoh hay el mismo pensí5
nes dicen que una cosa es harem ó halel según Azun- miento , ccbczu lanu rualim. rualim qetanim mecbahe-
na ó Alcorán ,’es decir, prohibida ó licita. lim keramtm , cazadnos las zorras , zorras pequeñas
2 Es de genio Oriental decir panal de miel, en desoladoras del viñedo : si en vez de la repetición
el Schir se dice : jaaratb baddebar panal de miel: de sualim.se lee raarirn se dice á la letra lo mis­
porque si se dice miel solamente no se entendía mo que aquí Teocrito.
ja de avejas, porque ellos llaman miel las com­ 10 Escitas , es la yerba que llamamos zebollas
posiciones de uvas, y de dátiles, y los Arabes albarranas. . :
nos dexáron SI nombre de arrope que es miel de ir La Svbarita es nombre de una fuente., no
uvas, pronunciaban arrob que es espesado. Es fre­ hay expresión mas común entre los orientales»
cuente en. Avicenna rob riméni, arrope de granada, lar piedras destilan miel , y lor collados fluyen leche.
que es el asir rimonim , zumo de granadas. r2 Usté modo de besar asiendo las orejas se
3 Enviar vivo, es decir , no le molestes, dexale. llama.en Griego Chutra ollas, y era el modo de
besar niños.; y los padres á sus hijos en los ojos, y
4 Las Carneas, eran fiestas de Apolo , y se sa­
crificaban carneros : los Musulmanes tienen una en la frente; los amantes en los labios.
Pascua que llaman de Carneros, ó hida-lhadea fiesta
de lar Victimar ; todas han nacido .de la Pascua IDILIO VI.
Hebrea. Kantea en su origen es lo mismo que cuer­
nos. i Tirar manzanas mcloballein era entre los Grie­
gos provocar á los' placeres ’amorosos, en Aristo-
M3
179
478
soledades de los campos en bosques frondosos, en
fanes en Filostrato, y en Luciano ocurren fre­ floridos valles y deliciosas grutas : se las figuraban
qüentes txemplos. como hermosas doncellas siempre ocultas y retira­
a Punzando , es decir fingiendo por darla zelos. das. Es la voz Nymfas Oriental , y significa almas;
la idea de considerarlas como doncellas retiradas y
IDILIO VII, fugitivas de la vista de los hombres; es también
Oriental , en la lengua Fenicia las Doncellas se
Los antiguos Gramáticos pusieron á este Idilio llaman Halamoth , retiradas ocultas : en Omero es
el título de viage de Primavera , debiendo decir de celebre la cueva de las Nymfas que dio ocasión á
Otoño, como el mismo Idilio manifiesta : ademas Porfirio de escribir una sabia disertación , en Longo
las Thalysias eran fiestas que se hacían á Ceres
se describe otra también muy bella.
por la cosecha 'de frutos , y se hacia después de 7 A todas las bebidas deliciosas daban los Grie­
vendimias. En este mismo tiempo y por la misma gos el nombre de néctar, porque su teología les
razón se hacia entre los Hebreos la Cbag succotb enseñaba qee era la bebida de los Dioses , el nom­
fiesta de los Tabernáculos ó Cabanas , asi es que bre en su origen significa aromático perfumado;
con otro nombre se llamaba cbagdekenisa fiesta de ni solo 'bebían néctar , que freqüentemente servia
recolección y se les mandaba celebrarla después de Ganymedes el vino tinto dulce y muy suave : a lu­
recogidos los frutos de las eras y de ¡w lagares : se ce­ diendo á estas opiniones gentílicas, se dice en e
lebraba en el mes llamado Tisri, que corresponde de los jueces , y dixoles la vid , be cbadaltbt
en parte á nuestro Septiembre : observó, juiciosa­ etb tbiruscbi, hamsameacb elobim we anascbtm . Dexare
mente Aristóteles en las qüestiones Nicomach que yo mi mosto, que alegra á los Dioses y á los
todas las fiestas de casi todos los. pueblos se ha-
ciau después de recogidos sus frutos, hombres ?
1 Burea, quiere decir que arrojaba, el agua uní IDILIO VIII.
cabeza de buey , ó que salía de una. estatua de un
buey. 1 Tiene aquí el original versos elegiacos, y por
2 Apoyar la rodilla eu tierra , quiere decir que esta razón quieren decir que este Idilio no es de
íe hizo í toda costa y con firmeza, Teocrito, pero el lenguage es el mismo.
3 Se nota que los nombres de las constelaciones 2 La misma expresión es usada con mucha ener
son campestres y pastorales, prueba de la ocupación gía por íos Poetas Arabes: dice así Thabbet:
de los primeros observadores , y estos nombres
vienen de la mis remota antigüedad. T al viento se adelante por do quiera,
4 Estornudar, era señal ó agüero feliz, si el Seguir el torbellino de su curso.
que estornudaba era hombre estimable , y al con­
trario si era un miserable , ó un malvado. omito las voces Arabes que no se expresan bien
5 Decía Sócrates , que tal vez el pintar.con ar­ con nuestros caracteres : el primer verso suena asís
cos á los amores e.ra manifestar que la hermosura tvajasbik tvafda '1 reicb mirbeiza mutbedarik...
aun de lejos hiere. 3 Júpiter entre otros nombres tenia el de Zcífi,
6 Entendían los Gentiles por las Nymfas ciertos y en dórico Zan , y Zana, esta voz fenicia que
Genios apacibles que se recreaban eu las amenas M4
i8o' iSl
significa hombre lascivo ruñan ; quien duda qup
este nombre es muy propio de Júpiter? I D I’L I O XI.
4 Habla de la tristeza de las nuevas esposas al
salir de la casa de sus padres , y de la tierna t Que no era su amor de rosas y manzanas,
despedida de ellos : en Sepber Tehilim hay una ni de otras pequeñeze's y bagatelas propias de los
canción para consolar á la nueva esposa en esta amores inocentes de los niños y de los pastores,
despedida. sino una pasión vehemente y violenta que le en­
furecía. He leido felinois Apios , por Kidnoii Ri­
IDILIO IX. zos , que dicen las ediciones vulgares, y favo­
rece esta conjetura un lugar del Toxaris de Lu­
i~ Esto, quiere decir, que los Consejos de lo s ciano. . •
padres suelen ser poco estimados, y desatendidos a Es del todo imposible el expresar la gracia y
de los jovencillos acalorados y fervorosos en sus armonía de los -versos de Teocrito en este Idilio»
amores. Galatea era Ninfa marina.
, 2 Dice que desprecia el frió al lado de su fue- 3 De las amorosas impaciencias dice un, prover­
go de encinosos leños, como el .niño las., nueces bio Persa : nab sabr dar dil baxik, no hay sufri­
quando le presentan otra cosa mas agradable, miento en corazón amante.
4 El amor que turba el entendimiento hace
IDILIO X, decir á los enamorados mil agradables y tiernos
desatinos en Schir, jonatM , paloma mia : los Poe­
1 Res, es voz Arabe que significa cabeza, se tas Arabes Gazelatbi cervatilla mia: en Piauto,
dice siempre hablando de ganados; asi es lo mis­ tneum niel, mcus molliculus caseus.
mo decir una res que una cabeza. 5 Lirios blancos son las flores que con nombre
2 Son expresiones, proverbiales, todas del mismo oriental llamamos azuzenas, que quiere decir de
gusto que nuestros refranes. seis petalos, scboscbanim.
3 Calamaya es un insecto.muy delicado, y alu­
de á que la amada era flaca ó muy seca. IDILIO XII.
4 Dice que su Bómbys era llamada Soriana , es
decir de Syria , según su antiguo nombre , y que 1 Los que, aman envejecen en un dia de au­
la notaban de eliocausta ó tostada del sol; pero á sencia , que para los enamorados es un año i Ws-
esto ya respondió la esposa en el Schir sel selom, lid Jezidai poeta Arabe dice;
dice : bebedora arti vue ñaupa , negra yo y hermosa.
5 La rosa y la manzana eran consagradas á Ve­ Aquien abrasa el amoroso fuego i
nus , con extrañas significaciones. De ausente bella joven , es la noche •
6 La celebra por la hermosura de sus pies , y lq Triste y odiosa qual un año todo;
mismo hace el esposo en el citado schir sel Selom. • Mas quando en dulces amorosos fjegqs
7 El Zefyro en su origen es viento de la Au­ Se pasa el año , como noche breve.
rora , y en Ezeqniel 7, 7. Zefyra aurora.
« Es muy repetido este pensamiento., entre los
i8a
Orientales. Isaías cap 32 , 2. y no.es extrafio aten­ á una criatura,
dido lo ardiente del clima y sus bastos desiertos. 3 Aquí parecen dislocados estos versos.
3 En Diálecto Amicleo el amante y el amado 4 Rice que partid solo ; pero con su arco al qsa
se llamaban el inspirado y el inspirante. de r=cytia : el Griego dice los arcos , y lo mis­
4 Los Griegos llamaban áureo á todo lo pre­ mo dice muchas veces Omero Kampulp toza los
cioso bello y amable , y los Latinos también usa­ corbos arcos: siempre los valentones Tnuy celebra­
ron este modo de hablar, Omero dice mil veces, dos'aunque se olviden de todo , se acuerdan de sus
la dorada Venus , y no menos Anacreon , Pindaro gruías. Chelfalahmar poeta Arabe decía :'
y otros.
5 Es bellísima expresión muy usada de Ariste- Jarkebo-lheula Wahid,
neto, Longo , Eustacio , Prodromo y Alcifron. Wa le jassbebohu,
1 líle-lyemani-lafllo.
IDILIO XIII. Cabalgó en el terror y solitario
Sin otra deliciosa compañía' <
1 Expresión muy poética usada de Omero y de Que la de su Yetnana acicalada.
Pindaro: también la usan los Orientales, y aun
en el estilo Thalmudico se dice pheracb cetmnab J,a yemana , es espada del Yemen , Arabia feliz,
flor del Sacerdocio , y en joma cippnrim be leí­
do pheracbe cobanim flores de los Sacerdotes, en IDILIO XIV,
Griego se toma por lo mas excelente y acendrado
en su genero, yen los Orientales generalmente por Aqui he omitido lös Idylios que no son bucó­
la juventud. licos : dos mimos que imitó de los de Sofron. Un
i Ya he dicho la idea que tenian los antiguos elogio á Hieron , y otro it Tolomeo; un Hymno á
de las Ninfas, eran respetadas de los Pastores y Casior y Polux ; y los dos fragmentos de la He-
demas rústicos; porque aunque las creían apacibles». racléida poema de Pisandro de Camiro.
las consideraban sin embargo de la misma natu­ 1 Con propiedad dice que Menelao eucerraba a
raleza que los Genios, y estos eran muy temidos. Helena , porque según las costumbres 'antiguas y
Este nombre liento es Oriental, y Significa un es­ de ahora entre Orientales los Padres llevan la bija
píritu que protege y sirve de amparq y escudo á á la casa del esposó, este la recibe, y la entra
los mortales : los Griegos les llamaban demonios: en su Harem tí retiro reservadtí , y asi son voces
los Arabes dicen que Abu pen , el padre de los Ge­ equivalentes encerraba tí casaba &c.
nios, era de figura de una serpiente blanca de ojos 2 El Hymeneo , era la-deidad de las bodas:
negros: los Romanos pensaban lo mismo cornos« en su origen el nombre significa el que ayunta,
ve en Virgilio : los Persas al espíritu le llaman y aúna: los cánticos de boda se cantaban por
Gen , y de aqui el nombre Latino : eutre nosotros, coros de jovenes y doncellas en la tarde del día
se dló á estos soñados espíritus el de duendes, de la boda, á media noche, y por la mañana:
tisú-ente el que te posehe , tí señorea , porque los los Escoliastas Griegos dan.la razón de cantarse á,
habia según el Islam, benéficos y furiosos que tales horas, pero la omito.
asmaban á su cuidado el favorecer tí atormenfar 3 Ya he dicho la vana observancia del estar-
' \ ■ M
if»4
nudo, en el Idilio VIII. de Pindaro : también en el. Schir se dice : qoleca
•4 La misma imdgen se ofrece en el schir sel bereb, tu voz dulie, y debaxó dé tu lengua hay
Selomoh j quien es esta que resplandece Kemó scba-, miel y leche &c.
cbar, japba koiebanab , como la autora", hermosa co­ £ 4 En el celebrado monte Olympo se consideraba
mo la luna? y en el Diván Hudiel, ó colección la morada de los dioses, el nombre en su origen
de poesías dedicadas á los Principes Hudelitas, era Olemimbó los eternos en él.
hay una canción de Muleih , á su amada, y dice; 5 Rhea , antiquísima deidad madre de Dioses
y de hombres, la misma que Opis y Cibeles,
1 Qual rutilante sol de un claro dia, su nombre Phenicio siguifica. Reyna ó pastora,
Del albor de la aurora producido. • ideas que convienen á las que tenían los Griegos
de ella : bien sabido es que los Reyes se llaman
5 En el schir sel Selomoh , dice el esposo : le en Omero Pastores de los Pueblos.
eusatbi berikbe pbarbob dimitbika , á mi yegua en los
carros de Faraón te comparé : y Abu-lola com­ IDILIO XVII.
para la amada de Said á una vaca silvestre: y el
Tograi la suya á uná Gazela ó cervatilla : no hay ’ i Es bien conocida la Casa de Consejo que lla­
expresión mas común, entre los Orientales. maban los Griegos Prytaneo, y en ella se depo­
sitaban los bienes seqüestrados, y á esto alude el
IDILIO XV. pescador.
2. Entre los Orientales se veneraba una deidad,
i El texto Griego dice Cbeirón de las manos, celebre en la? Santas ,Éscrlturas llamada Dagon,
pero no puede ser asi , he leido Cbeiros, de la este nombre significa pez, y asi figuraban al dios
mano , y apoya esta conjetura la Oda XL. de del mar,
Auacreonte , que. tal vez sirvió de exemplar á esta 3 Era tal la religión del juramento , que aun el
graciosa composición. hecho en sueños creían que obl’gabá : entre los
Thalmudistas se propone esta qüestion.
IDILIO XVI. 4 Pez de carne, para distinguirle del soñado de
oro.' Un Luterano tomó ocasión de aqui para cen­
1 Algunos quieren quitar este Idilio ¿ Teocrito, surar nuestras comidas de viernes,
pero no-hay razón que lo persuada.
2 En el schir sel Selomoh : Roscho ketbeir. pbaz, IDILIO XVIII.
qutsotbaio tbattbali’», tchecborotb caborcb, su cabeza
oro .esmaltado, sus trenzas palmas , negras como el r El Lethe , rio del olvido , según la lengua Grie­
cuervo. Alahmar dice: ga , en Arabe es del placer. Le llamaban así viendo
que ninguno se acordaba de volver por mas que se
Idse Ummcthi sewád Ka-lbmgui fu6se euamorado de cosas de esta vida.
... Mi trenza entonces negra qual razimo. a Esta observancia de no mancillarse con el con- ’
tacto de los cadáveres es también oriental.
-3. Bellísima expresión muy usada de Omero y

i
v.
i8S 187
nía varios nombres, los Orientales son : Afrodita
IDILIO XIX. que significa Ramera, la radical es farad , los
Griegos deducían la etimología de su misma len­
1 Los antigóos adoraban á los Dioses en los mon­ gua , y en ella significa la producida de la espu­
tes (be bahamoth ¡n excelsis)', y éu el Sepher Tehil ma , como pensaba Esiodo: El otro nombre es el
hay uno que principia i V» el hebanm , le­ de Penus usado de los Latinos , este mas que nom­
vantaré mis ojosá los montes &C. bre era título de la Diosa, se decia en su origen
2 La Sacra Cesta era una de las ceremonias de Benotb que significa hijas, las jóvenes, las muge-
las fiestas de Serapis el prevenir la Cesta Sacra res &c., y era como si dixeramos la Diosa délas
que sé llenaba de flores &c. él nombré de Serapis mugeres , y Succotb Benotb cabañas de los jovenes.
es Oriental, y en su origen significa . el Toro de 4 La banda era la zone ó mitbre que denotaba •
la'cesta ; aludiendo á las ceremonias de sus Fiestas, la doncellez.
ya he dicho que el mismo era Baco que Osiris y
Seradis: Aser Badl-Cus feliz Señor de Cus.. IDILIO XXI.
, Era expresion.de liturgia , en Calimaco se- dice
lo mismo, y denotaba que las ceremonias debían -1 Versos que hizo para regalar una rueca á la
ser secretas, .' ., muger de su amigo Nicias..
4 Todas las fábulas y deidades griegas nacieron .2 Lobas, voz antigua Española tomada de los
en Fenicia , Jove Egiocbo , es. Júpiter el de las ca­ Arabes , y significa .vestidos.
bras; bien sabido es, que uno de los títulos del
Todo-poderoso es el de Tsabaotb, voz que puede IDILIO XXII.
jnterpfetarse de las cabras , de los exerc.tos y de los
i Escribió Theocrito muchas Composiciones que
PEs muy sabida la fabula deí nacimiento de
se llamaban. Paidica , '.de amores según las perdidas
Baco, que decían salió del muslo de Júpiter: esto costumbres Griegas : no faltan de esta especie entre
prueba que no entendieron bien la lengua Fenicia, los Arabes
en ella se dice hablaudo de la generación de un 1 La luz se me acabó , es decir , soy muerto:
Patriarcha jarro mi jrzeco exierünt é femore suo- &c. es bella expresión Griega usada de Omero.
6 Semele , nombre orientalque significa don­
cella casadera. . IDILIO XXIII.
7 Las Cadmeas,quiere decir, las Orientales.
1 Este es un fragmento que publicó Casaubon
IDILIO XX. eu las notas de Diogenes Laercio.
i Èra modo proverbial para expresar lo momen­ EPIGRAMA IV.
taneo de los placeres , lo mismo dice un prover­
bio Arabe : El beso no es durable. 1 El Falote es lo mismo que el falo, el origen
« Es pensamiento Oriental. del culto del Falo fué que despedazado Osiris solo
3 venus la Diosa de los placeres amorosos, te- Pareció aquella parte : la fiesta de esta invención
i88 189
se celebraba en Egipto en el mes Paofi qué corréis* 5 -alude d los: últimos besos que se daban á ¡os
pande en parte al Septiembre. La voz es Oriental moribundos para recoger su último aliento es tan
y de la misma significación : dicen los Arabes ad. expresivo el original y tan bello que no. puede
rem iuhonestam detestaudam , ¡.abana ¡lab í'alotehu, trasladarse.
maldiga Dios su falo. Es muy sabida la costum­ 6 El cinto de Venus era un adorno propio de
bre de los Coros Phaücos , y la de los Huertos en 1 esta Diosa , en -el qual estaban todos los encantos
que se ponían estatuas y aras al Falo. ■ amorosos,
7 Era tan celebrada la muerte de Adonis que
EPIGRAMA V. se. llamaban sus fiestas, las, dei .ítí/íci-jo , y .asi se
nombran eu la Santa Escritura.
1 Los Pastores intentan turbar el Sueño á Pan, 8 Cubrían de flores ios cadáveres de las perso-r
que es llamado en este Idilio aUgibata yo he leí* ñas muy estimadas, ¡acostumbre de embalsamarlos
do sligibota, por evitar la otra voz. es muy sabida.
9 Tu balsamo, ,es modo de decir muy amoroso
IDILIOS DE BION. y del mismo genio que la mayor parte de estas
poesías-.- : . : ■ ; ;, ...................
IDILIO PRIMERO. • 10 Los mas allegados y amigos dei difunto ha­
cían .esta demostración, ,t}.e .sentimiento , en los fu­
í Éste Idilio se hizo para las Aioniar .fiéstís nerales de Patroclo , y en otros lugar.es de Omero
que se hacían todos los años i, la muerte de Ado­ se ofrece esta costumbre.
nis. Eran celebres en todo el Oriente , era fiesta 11 También es muy antigua la de lavar los ca­
' de mugeres, y salían las Kadesim ó Sacerdotisas dáveres tos Orientales .la usan aun ,y. nuestros
de Venus i llorar d Adonis, y en algunas partes moros Españoles lo hacían.
todas las mugeres. En Alexandría se hacia cierta 12 Alude al aujyersanp de estas fiestas fúne­
representación del -funeral de Adonis, y una actriz bres, que se terminabad en festines y convites,
representaba á Venus: Adonis es voz fenicia que ¿oishshisv ,;í . , -
significa Señor, no hay cosa mas .vulgar, Josefo IDILIO III.
interpreta esta v.oz ; en el Penulo de Plauto se sa­ ; ' ••■jue - ■; "J f
luda así: avi doni, que es ave domine mi : se ce­ En- este bellísimo Idilio ocurren ios nombres de
lebraban estas, fiestas en el mes llamado Thammuz ó las Deidades inveotoras de los instrumentos mú­
caloroso que es parte de Junio , y de aquí vino sicos : Hermár es. nombre Griego de Mercurio, voz
el llamarle Thammuz y fiestas de Thammuz. que en su .origen significa astuto , sagaz, el nom­
2 Estas repeticiones son de gusto Oriental. bre que le daban los. Latinos es Syro-Griego, lá
3 Llámale Syro, porque era de Syrla. voz Mer.es en Sy riaco , Señor, y ¡a otra parte
4 Dice que los rios lloraban, esta puede ser ex­ curius es interpretación Griega de la voz Mar d
presión Orieutal, ó por in credulidad dejos de Sy- Emir que dicen los Arabes.
ria , que dice Luciano , que pensaban ser la sangre El nombre de Apolo también es Orieutal y sig­
de Adonis la que euroxecia las aguas del rio ds nifica el maravilloso.
Biblia que basa del Líbano. La Cythara es voz que ysan los Arabes, los He-
N
19T
190 nosotros los Españoles llamamos añil al color in­
breos dicen que su Kinnor ó Kinnnra'(que dice Jo­ dico , y que los antiguos nombres de este rio eso
sefa ) es la íCythara; los Alexandrinos traducen significan: Scbecbor negro, JUelas lo mismo; pero
Siempre Cytharas por Kinnoroth, R. Abraham en es mas fácil que sea de la voz Nebil corriente,
Schilte hagibborim dice : bacinnor mqra belaz. ar- rio.
fte, la kinnorase llama en lengua extraña Arpa. 6 Va se ha dicho del cinto ó banda virginal.
La Lyra, la Cythara, el Barbitos y Chelys se 17 Juno es llamada en Griego Hera, que en su
usan sin diferencia unos por otros en Omero, Ana- origen significa zelosa.
creon y Pindaro: los Persas conservan. A Barbet 8 El Toro Serapis, dice Ero'doto que tenia una
que es el Barbitos Griego, y los Arabes explican estrella en la frente : el nombre Oriental era Sor-
esta' voz por Aud, que nosotros decimos con artí­ M , Toro de la cesta ó del agua, atendida la len­
culo Laúd; qué significa el desentristeciente el que gua Pérsica : son de la misma radical que Tberaf, y
alegra al triste. Seraf, voces mas conocidas.
9 El nombre Griego de Neptuno , es Poseidon
IDILIO VIII. 1 u'i' f que en su origen significa el que vate con violencia;
" i ci -¡up unsirn íeb y bien sabido es el continuo, embate del mar sobte
T Marte , aquí se entiende la guerra : el1noray la tierra.
bre Griego es .Ares dt Hari, VOZ Oriental que sig­ 10 Lo mismo dicen las bendiciones de Ephraim*
nifica feroz montes, nombre que se daba á losan­
tiguos valientes, que se distinguían en el robo, o en IDILIO 11 J.
la caza.
z Por manifestar mayor sentimiento quiere que
IDILIOS DE MOSCO. lloren las cosas insensibles : diqe el Griego , llorad
lamentaciones ailina, los Griegos creian que fuesen
IDILIO SEGUNDO. _ canciones en que se lloraba la muerte de Lino, mú­
sico y poeta celebre ; pero la voz es fenicia, y sig­
1 Los sueños de la mañana se creian verdaderos, nifica alarido de dolor, gemido , griio fúnebre.
y noasi los del principidrlé la.noche a Mele Rio de Esmyrna , patria según algunos
2 Dice Omero que los sueños son enviados de de Omero y de nuestro Biou,
Dios, y esta opinión era • común entre los Orien-
IDILIO IV.
tal?S Ya hemos notado quanto agradaba el ruido
del agua á los Griegos, y sin duda es un placer .t Amar como á los ojos., expresión tan tiern^
que encanta , el estruendoso fragor de algunas cas­ como vulgar. Lloraba Megara los trabajos de su Es­
cadas y derrumbaderos, y mas sf las aguas que poso Ercules, sus aventura? son muy sahidas : los
baxan despeñadas cSen entre alamos y yedras. Persas tratan de un Haroe agigantado que llamaban
4 La voz Talaras he traducido canastillo o ces- Sam-dmi, a el Genio Saip,. que fue caudillo de
tillo, puede decirse vaso'. . los Exercitos de Feridun, y acabó los monstruo^
5 El nombre del Nilo quieren algunos decir que horrendos .de la Isla, Darem , todo e^to cpnyiepe.á
color indico ; es cierto que los. Arabes y Ñ1
iça 193
Hercules : en lengua fenicia Hercules significa, he señalado las radicales por parecerme que para
traficante ó mercader Rocel. _ , . los inteligentes no es necesario , y para los que
i Las Furias Ermes , voz Oriental que significa no' lo son es del todo inútil. No digo esto por
atormentadoras. vanidad, ni por manifestar erudición vieja , esti­
3 Thebas Ciudad famosísima de Beocia : en sa mada de muy pocos y despreciada de infinito?!
origen el nombre significa la hermosa ,’ con otras porque estoy muy distante de creer verdadero aquel
radicales la nave ó arca, proverbio Turco que dice:
.! - : ijegílO
IDILIO V. Neb cadr dillerí adem bilur,
OI cadr ademlerung jeríni tutur.
i He seguido la corrección de Grocio en este Idi-
lio , el mas gracioso de los de Mosco.
. . .... . .
I D I L I O V 1,1.

i Esperto , estrella muy resplandeciente y éer-


masa , que eso significa el nombre en su origen.
a Aqui' he dado al tomaeei« de los Griegos un
equivalente muy vulgar,
3 Por poli poimena he leído , ( por darle sig"
nificacion mas honesta) pop eromena.
• ' /■'■ ■ ¡V '. . i - q 7
IDILIO VIII.

i Hojas y flores de las coronas de los Atletas, y»


,el polvo de los sagrados juegos.

Habia pensado publicar el Texto de Theocrito;


pero no habiendo parecido conveniente., he otni—
tido las notas que justificaban la exáctitud de mi
traducción : en estas anotaciones que presento se
han omitido tpdrs las noticias muy vulgares de
mythologla ,' y por cierto gusto de novedad:-he se­
ducido algunas voies á sus antiguos orígenes. • o
Él qué rpiísiere exáminar- mis .conjeturas ,ety—
motogicas , há de recurrir á lás: lenguas ¡Hebrea,.
Arabe, Syfo-Cáidea y Pérsica : nidia) de conde*-,
nsíflas con précipitado juicio ,-si solamente sabe al­
guna de- estas- lenguas 5 porgue las mas veces ato
c .0.' ’ ' \
: . ' ■• - "''. l·ir- *:c'. - : <•> ' T ' í
©L ' J, '• ? , Cf TtCOCíI .¿ ) • y. ^ ¡ > ■

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