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Artículo n° 1288

Los acreedores hereditarios y los acreedores testamentarios podrán pedir


que no se confundan los bienes Del difunto con los bienes del heredero; y
en virtud de este beneficio de separación tendrán derecho a que Los
bienes del difunto se les cumplan las obligaciones hereditarias o
testamentarias con preferencia a las Deudas propias del heredero.
Para poder comprender de mejor manera este artículo es importante hacer una
diferencia entre los acreedores hereditarios, es que se refiere a las deudas que
tenía el difunto en vida y que dejen ser pagadas por sus sucesores, mientras
que, los acreedores testamentarios, se refiere a aquellas deudas que el
testador plasma en el testamento y quién va a pagarlas, por eso se dice que las
deudas testamentarias su principal fuente es el testamento en si. De este modo
en este artículo 1288 del código civil lo que asegura es que se les pague a los
acreedores lo que se les adeuda.

Artículo n° 1289
Para que pueda impetrarse el beneficio de separación, no es necesario
que lo que se deba sea Inmediatamente exigible; basta que se deba a día
cierto o bajo condición.
El artículo 1289 establece que para poder realizar la solicitud de la separación
de bienes del difunto y los bienes hereditarios o testamentarios no es necesario
que lo que se le deba al acreedor sea Inmediatamente exigible, pues
solamente basta que con se deba a día cierto, es decir a un día que aunque no
se sepa cuándo ha de llegar, por otro lado también cuando exista alguna
condición.

Artículo nº 1290
El derecho de cada acreedor a pedir el beneficio de separación, subsiste
mientras no haya prescrito su Crédito; pero no tiene lugar en dos casos:
1.- Cuando el acreedor ha reconocido al heredero por deudor aceptando
un pagaré, prenda, hipoteca o Fianza del dicho heredero, o un pago
parcial de la deuda.
2.- Cuando los bienes de la sucesión han salido ya de manos del heredero
o se han confundido con los Bienes de éste, de manera que no sea
posible reconocerlos.
El artículo 1290 establece que si bien es cierto el acreedor tiene el beneficio de
separación de bienes, dicho beneficio tiene también un límite de prescripción,
por otro lado también determina dos casos en los cuales no tiene lugar este
beneficio, 1. Este cuando el acreedor deja de perseguir la deuda que tenía el
difunto con él, y en su lugar acepta que el heredero se haga cargo de la deuda
mediante un documento privado, por ejemplo un pagaré, hipoteca, etc. 2.
Cuando los bienes de la sucesión ya no están en manos del heredero quizás
porque los vendió o cualquier otro motivo, siendo así imposible rastrearlos o
quizás ya pueden diferenciarse entre los bienes del heredero, esto puede ser
porque los acreedores no hicieron uso del beneficio de separación s tiempo.

Artículo nº 1291
Los acreedores del heredero no tendrán derecho a pedir, a beneficio de
sus créditos, la separación de Bienes de que hablan los artículos
precedentes.
El artículo 1291, lo que nos dice es que el derecho o beneficio de separación
de bienes es solamente exclusivo de los acreedores testamentarios y
hereditarios, es decir solamente para las personas a las que el difunto le debía,
o en su caso las deudas que emanen del testamento en si, por lo que si el
heredero tiene deudas con alguien este alguien no podrá solicitar separación
de bienes para que se le cancele su deuda.

Artículo nº 1292
Obtenida la separación de patrimonios por alguno de los acreedores de la
sucesión, aprovechará a los Demás acreedores de la misma que la
invoquen y cuyos créditos no hayan prescrito, o que no se hallen en El
caso del número 1º. Del Artículo 1290.
El sobrante, si lo hubiere, se agregara a los bienes del heredero, para
satisfacer a sus acreedores propios, Con los cuales concurrirán los
acreedores de la sucesión que no gocen del beneficio.
El artículo 1292 en el primer párrafo establece que cuando uno solo de los
acreedores de la sucesión logré la separación de bienes, entonces esto será de
beneficio para los otros acreedores si los hubiera, también es importante tomar
en cuenta que estos créditos no hayan prescrito aún o que el acreedor haya
decidido reconocer al heredero como deudor mediante algún documento
privado como un pagaré, hipoteca, etc.
Por otro lado en el párrafo segundo de este artículo nos dice que de existir un
sobrante en dicha separación de bienes, entonces este sobrante pasará a
formar parte de los bienes del heredero, es decir a su peculio, con lo que podrá
pagar el heredero sus propias deudas a sus acreedores, o si hubiera
acreedores testamentarios que no pudieron ejercer su derecho en la
separación entonces estos también podrán por este medio cobrar lo que se les
adeuda.

Artículo nº 1293
Los acreedores hereditarios o testamentarios que hayan obtenido la
separación, o aprovechándose de Ella en conformidad al párrafo primero
del artículo precedente, no tendrán acción contra los bienes del Heredero,
sino después que se hayan agotado los bienes a que dicho beneficio les
dio un derecho Preferente; más aun entonces podrán oponerse a esta
acción los otros acreedores del heredero hasta que Se les satisfaga el
total de sus créditos.
Lo dicho se entiende sin perjuicio de lo dispuesto en el Artículo 1265,
párrafo tercero.
El artículo 1293 nos estipula que los acreedores testamentarios y hereditarios
no podrán tomar acción en perjuicio de los bienes propios del heredero, es
decir no podrán cobrarse de ahí, sino hasta que se hayan terminado los bienes
que el beneficio de separación les otorgó y aunque después de agotados
dichos bienes intentarán cobrarse con los bienes del heredero, aún así los
acreedores del heredero pueden oponerse a qué esto suceda y por lo ellos
este caso tendrán preferencia hasta que se les cumpla con lo que el heredero
les debe a ellos.
Pero en este artículo hay que tener muy en cuenta lo que dice el párrafo
segundo y es que el heredero no está obligado a pagar deudas hereditarios o
testamentarias si lo que hereda no es suficiente para hacerlo, esto según el
párrafo tercero del artículo 1265 del código civil.

Artículo nº 1294
Las enajenaciones de bienes del difunto hechas por el heredero dentro de
los seis meses subsiguientes a La apertura de la sucesión, y que no
hayan tenido por objeto el pago de créditos hereditarios o
Testamentarios, podrán rescindirse a instancia de cualquiera de los
acreedores hereditarios o testamentarios Que gocen del beneficio de
separación. Lo mismo se extiende a la constitución de hipotecas
especiales.
El artículo 1294 establece que, aunque el heredero vendiera, donará o cediera,
lo que heredó o parte de ello sin el objetivo de cumplir con las deudas
hereditarias o testamentarias, entonces los acreedores que gocen del beneficio
de separación tienen hasta seis meses después de la apertura de la sucesión
para pedir que se cancele dicha enajenación, esto también aplica si existieran
hipotecas especiales.

Artículo n° 1295
Si hubiere bienes raíces en la sucesión, el decreto en que se concede el
beneficio de separación se Inscribirá en el Registro o Registros que por la
situación de dichos bienes corresponda, dentro de los seis Meses
subsiguientes a la apertura de la sucesión, con expresión de las fincas a
que el beneficio se extienda.
Verificada la inscripción, sólo surtirá sus efectos relativamente a los
acreedores propios del heredero.
El artículo 1295 nos dice que de existir bienes raíces o lo que puede ser lo
mismo bienes inmuebles en la sucesión, y que si un acreedor ya sea
hereditario o testamentario, solicita el beneficio de separación de bienes, y se
le es concedido, dicho decreto o documento donde se autoriza la separación
debe ser inscrito en el registro catastral, en el IP, o cualquier otro registro en el
que por la situación del bien se deba inscribir, también se deben incluir o
especificar las fincas a que el beneficio de extienda, es decir la delimitación en
el documento.
En el párrafo segundo de este artículo establece que una vez se verifique la
inscripción, solo podrá ser beneficioso para los acreedores propios del
heredero.

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