Está en la página 1de 3

La 

comunicación individual es un proceso de intercambio de información entre dos


personas, cara a cara y sin que medie ningún interlocutor. Se trata del tipo de
comunicación más básico que existe, y de hecho está en la base de prácticamente todas
las demás formas de transmisión de mensajes que podemos encontrar.

A pesar de tratarse de uno de los procesos de intercambio de información más sencillos


que podemos encontrar, la comunicación individual puede estudiarse desde diferentes
puntos de vista y está formada por varios fenómenos relacionados. Así, dentro de ella
podemos encontrarnos comunicación verbal y no verbal, y procesos conscientes y
subconscientes.

Comprender los procesos de comunicación individual es fundamental, ya que hacerlo nos


permite entender mejor todas las demás situaciones en las que transmitimos mensajes a uno o
más interlocutores. Así, la base de procesos como la comunicación grupal o la colectiva sigue
siendo la misma que la de la individual.

Características de la comunicación individual


– Implica solo a un emisor y un receptor

La mayoría de los tipos de comunicación que existen implican a varias personas,


pudiendo encontrar algunos procesos que se dan en grupos, otros que van de un solo
emisor a gran cantidad de receptores, y otras combinaciones de todo tipo. Por el
contrario, en la comunicación individual solo encontramos un emisor y un receptor.

Esto no quiere decir que no existan variaciones en el proceso. Por ejemplo, en algunos
casos el emisor siempre es el mismo, y el receptor se limita a escuchar el mensaje. En
otras ocasiones ambos se van turnando, lo que lleva a un proceso de comunicación
recíproco y más interactivo.

– Está formado por varios elementos

El hecho de que la comunicación individual solo implique a dos personas no quiere


decir que se trate de un fenómeno sencillo. Por el contrario, incluye gran cantidad de
procesos y componentes distintos, que hay que estudiar en profundidad para poder
comprender lo que ocurre cuando aparece.

Así, además de los componentes más básicos como el emisor y el receptor, podemos
estudiar en profundidad todos los demás elementos que forman este tipo de
comunicación.

Por un lado, el mensaje en la comunicación individual suele ser muy diferente a los que
se transmiten en otros contextos. Cuando estamos a solas con una persona es mucho
más sencillo ser honestos o dejarnos llevar por nuestras emociones.

En este sentido, el contexto que comparten el emisor y el receptor también tiene mucha
más influencia dentro de los procesos de comunicación individual que en otras
alternativas. Dependiendo de la relación que tengan, su forma de comportarse y los
tipos de mensajes que se puedan transmitir cambiarán en gran medida.
Por ejemplo, dos personas que se conozcan en profundidad podrán hacer referencias que
solo ellas entiendan y utilizarán muchas más frases hechas y lenguaje corporal para
comunicarse entre ellas. Por el contrario, dos desconocidos tendrán que ser mucho más
literales para poder transmitirse información de manera adecuada.

Tipos
No todos los procesos de comunicación individual funcionan de la misma manera.
Existen muchas variables que pueden influir en el intercambio de información entre dos
personas, como el tipo de relación que mantienen, la jerarquía de cada uno de ellos, su
estilo de comunicación preferido o el contexto común que comparten.

La comunicación individual es una de las clases más estudiadas dentro de este campo,
por lo que podemos encontrar multitud de teorías sobre ella. A continuación veremos
cuáles son los tipos más comunes de comunicación uno a uno que existen.

– Verbal vs. no verbal

Cuando pensamos en un proceso de comunicación, normalmente nos imaginamos a dos


o más personas hablando. Sin embargo, no todos los intercambios de información tienen
por qué producirse de manera tan explícita, utilizando el lenguaje hablado. Otros
elementos, como la proxemia o los gestos, también pueden considerarse formas de
comunicación.

Los expertos en este campo consideran que la información transmitida de manera verbal
representa un porcentaje muy pequeño de toda la que nos intercambiamos en una
conversación cara a cara. El lenguaje corporal, el tono de voz, los gestos y otros
elementos similares suponen aproximadamente el 80% de todos nuestros mensajes.

– Consciente vs. inconsciente

De la misma manera que no siempre tenemos por qué transmitirnos la información de


manera hablada, no en todos los contextos en los que se produce la comunicación esta
aparece de manera consciente. De hecho, en muchas ocasiones mandamos mensajes a
otras personas sin darnos cuenta.

Los expertos consideran que no es posible que dos personas se encuentren en la misma
habitación sin comunicarse de alguna manera. Cuando no nos estamos intercambiando
mensajes de manera consciente, nuestro cerebro sigue procesando datos
constantemente, lo que se considera un tipo de comunicación subconsciente.

– Recíproca vs. unilateral

En algunos escenarios de comunicación individual, uno de los participantes es el


encargado de transmitir información de manera continua, de tal manera que los papeles
de emisor y receptor siempre se mantienen fijos y no se invierten. En otros, por el
contrario, los roles se intercambian cada cierto tiempo en función de quién sea el que
tome el papel de emisor.
Esta es la diferencia principal entre la comunicación individual recíproca y la unilateral.
Ambos tipos pueden aparecer en contextos completamente diferentes, y tienen
características bastante diferentes.

– Virtual vs. presencial

La última clasificación en aparecer es la que divide los procesos de comunicación


individual en función de si se dan en persona o a través de las tecnologías de la
comunicación. Con la llegada de las redes sociales y los servicios de mensajería
instantánea, han aparecido nuevas maneras de transmitir información uno a uno.

También podría gustarte