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Cambio

Las organizaciones actualmente se desarrollan en escenarios muy dinámicos,


lo que trae consigo cambios constantes para poder enfrentar este entorno y
alcanzar los objetivos estratégicos.
Las organizaciones constantemente están bombardeadas por tensiones
generadas a partir de un ambiente competitivo cada vez más dinámico y
agresivo, que pone a prueba su capacidad de acción y reacción desde la
perspectiva de satisfacer mercados cambiantes y crecientemente exigentes.
La única constante es el cambio» (García Calvo, 1985, p. 47) es muy
usada por ejecutivos y organizaciones a través del mundo entero. El
problema es que, a pesar de las buenas intenciones que puedan existir,
muchos intentos de cambio fallan porque no generan los resultados
esperados al no entender la necesidad de cambiar desde la perspectiva
de la generación de valor (Senge et al., 2000); es decir, no se trata de
cambiar por cambiar, sino de focalizar los cambios hacia la sostenibilidad
competitiva.

Causa externas; nuevas formas de pensar, la globalización y localización de


los mercados, las presiones por la ecosostenibilidad, el desarrollo de los
sistemas de comunicación e información, y muchos elementos que
indudablemente demandan un nuevo estilo de dirección en las empresas.

Niveles del cambio


El término superficial puede sonar trivial, pero no es así.
Superficial: Significa pequeños y continuos cambios que involucran
estrategias, estructuras, procesos, algunas transformaciones físicas y otras,
fáciles de aplicar, rápidos para implementar y con costos limitados. Ejemplos
de estas características se encuentran en muchas prácticas de Kaizen.
Profundida: los cambios profundos o de segundo orden tienen un gran
impacto en las organizaciones, pues afectan su cultura, posiblemente sus
prácticas, su visión, sus estrategias, su estructura y otros elementos (Burke y
Litwin, 1992). Sus principales características son que generalmente cuestan
más, demandan mucho tiempo e impactan muchas áreas dentro de las
organizaciones, con consecuencias posiblemente a largo plazo. Los cambios
en profundidad son riesgosos y, por supuesto, deben ser planeados y
ejecutados muy cuidadosamente debido a los efectos que pueden traer para
las empresas.
Proceso
El principio holístico: significa que es necesario actuar integralmente sobre
todos los componentes que en la organización puedan tener influencia en el
proceso, si se desea que los cambios se realicen en forma consistente (Quinn,
1997). Estos componentes pueden incluir los que integran las acciones
organizacionales (estrategias, estructura, equipos, servicios, productos y otros),
o los que representan su filosofía (valores, cultura organizacional, motivación).
Si el proceso de cambio no los toma en consideración de una manera integral
buscando conseguir sinergias, es factible que la organización no logre los
objetivos propuestos.
El principio de rompimiento: significa que en muchas oportunidades el
cambio obliga a deshacerse de los paradigmas que generan equilibrio en las
organizaciones, manteniendo el desbalance a través del proceso (Grouard y
Meston, 1996). Este principio está fundamentado en la definición de cambio
como un movimiento de un punto a otro, pasar de una acción a otra o de un
sistema a otro. Algunos autores definen su idea de cambio con este principio
(Lewin, 1951; Kotter, 1997) y desarrollan sus estrategias a partir del mismo. En
esencia, el cambio genera inestabilidad mientras se logra la transformación.
El principio de constancia: es esencial en los procesos de transformación.
Muchos procesos fallan porque la organización no es constante en su esfuerzo
para mantener el impulso (Senge et al., 2000). El mejor camino para conseguir
resultados es que la alta dirección de las organizaciones brinde soporte
permanente a las ideas de transformación con la provisión de recursos para tal
fin, y sobre todo con la permanencia del espíritu, la energía y la disposición
para cambiar. Adicionalmente, si una organización inicia el proceso de cambio
sin mantener la constancia, el proceso puede fallar y su gente puede adquirir
una actitud escéptica que podría afectar futuros intentos. Es más, algunos
autores (Lucas, 1997; Kotter, 1997) insisten en el fomento de los cambios
consistentes y anotan que esta es una de las tareas más difíciles para la
gerencia.
El principio de no preferencia: está conectado con el concepto de
universalidad del proceso de cambio (Grouard y Meston, 1996). En general, el
éxito depende de cómo una organización compromete en su implementación a
todas las personas afectadas por el proceso. Si una empresa intenta iniciar
cambios no con las personas que se verán afectadas por los mismos, sino
desconociéndolas o afectándolas, el proceso puede fallar.
El principio de indeterminación: explica que el cambio puede ser dirigido,
pero no totalmente dominado (Grouard y Meston, 1996). La mayoría de las
veces el cambio es un proceso complejo y tiene muchos elementos
impredecibles. La organización y sus líderes de cambio deben manejar
diversas variables, pero es realmente imposible dominarlas todas. Por tal
motivo deben definirse muy bien los objetivos, y los líderes deben asegurarse
de controlar la dirección y la dinámica del proceso.

Enfoques
Los cambios planeados: tratan de definir qué tipo de transformación desea la
organización utilizando un proceso estructurado paso a paso. Esto es el campo
de disciplinas como el desarrollo organizacional (organizational development).
De hecho, algunos autores dicen que «el desarrollo organizacional representa
un proceso y una técnica que permite a las organizaciones dar forma a su
cultura, determinar cómo y cuándo los cambios son útiles, hacerlos y evaluar
sus resultados» (Marguiles, 1972, p. 78). Son los cambios formales que,
generalmente, emergen como estrategias de mejoramiento y desarrollo.
Los cambios no planeados: son aquellos que suceden de forma inesperada,
de una manera intuitiva, disruptivos y sin un proceso estructurado. Pueden ser
realmente peligrosos por los efectos potenciales que pueden tener en las
organizaciones, pero son muy comunes
Modelo Kurt Lewin
Pero ¿cómo iniciar el proceso de descongelamiento con éxito? Tal y como
sostiene John Kotter (1997), lo primero que se debe hacer es generar un
sentido de urgencia, una inestabilidad con el statu quo, basada en la visión
organizacional. En este marco, los gerentes deben desarrollar este trabajo
utilizando comunicaciones, persuasión, reuniones formales e informales y, si es
necesario, manipulación o amenazas explícitas o implícitas. Obviamente estas
últimas son las menos recomendadas porque no aseguran el mantenimiento
del compromiso por largo tiempo, pero puede ser el único camino en muchos
casos.
El segundo paso lleva a la organización hacia el estado deseado mediante
la realización de los ajustes que se consideren necesarios. Desplegar el
cambio demanda un intenso trabajo de la gerencia, porque las personas
necesitan nueva información, posiblemente nuevos modelos de
comportamiento, una absoluta claridad sobre la visión esperada con los nuevos
procesos, ajustes en los valores y, ante todo, una comprensión profunda de lo
que se espera de cada una de ellas en la nueva forma de hacer las cosas.
Todo esto debe estar alimentado por un claro ejemplo de la gerencia acerca de
las nuevas formas de pensar y de actuar. Esta fase, absolutamente vital en el
proceso, es una fase de aprendizaje (Kreitner y Kinicki, 1995) y determina la
posibilidad de una transformación exitosa. Hay muchos temas gerenciales que
pueden ser útiles para su despliegue ordenado, pero los elementos de
reingeniería utilizados pensando en la gente y no solo en los procesos pueden
ayudar convenientemente (Guízar, 1998).
El tercer paso, denominado apropiadamente recongelamiento, es la
institucionalización de los cambios de manera que todas las personas los
conozcan, se ajusten a ellos y los adopten en sus actividades cotidianas. Esta
etapa es realmente importante, porque los cambios necesitan estabilizarse y la
gente necesita asumir los nuevos comportamientos por su propia cuenta. Es
una etapa donde se pretende que las personas integren las nuevas formas de
pensar y de actuar dentro de su personalidad, valores y actitudes. Algunas
veces los gerentes olvidan la importancia de esta fase final y asumen que,
cuando las personas conocen y entienden las nuevas formas, las adoptan
automáticamente. Este es un gran error, y la transformación frecuentemente
fracasa por tal motivo. Los cambios necesitan ser anclados para conseguir
nuevos y consistentes comportamientos (Kreitner y Kinicki, 1995).
Conclusion
Tal y como lo plantean Mintzberg y Westley (1992, p. 57), «el cambio en las
organizaciones es un asunto complejo y multifacético cuyos elementos deben
ser claramente delineados si van a ser entendidos en contexto y manejados
efectivamente». En este contexto, puede afirmarse sin lugar a dudas que,
independientemente de las presiones del entorno, los cambios deberían estar
impulsados por la motivación, la oportunidad y la capacidad de las
organizaciones para lograrlos (Zhou, Tse y Li, 2006). Por ello, los diversos
conceptos inherentes a los procesos de cambio deben ser explorados en
profundidad antes de iniciar acciones en ese sentido.
Innovacion
Dichos cambios implican la adopción de una idea o conducta nueva para la
organización, y son adoptados por la empresa a fin de favorecer su desempeño
y rentabilidad.

Ventajas

 Mantiene los procesos organizados: al innovar en la forma de


ejecutar los procesos, sobre todo si utilizas la tecnología, creas
estándares y sistematizas la forma de trabajar de la manera ideal
para tu marca. Y esto es esencial para que las estrategias tengan
éxito, los resultados se consigan y los objetivos se superen;
 Desarrolla la creatividad: con la innovación, la empresa demuestra
que está abierta al cambio, que los colaboradores pueden aportar
ideas nuevas y darse cuenta en la práctica de los beneficios que lo
nuevo puede aportar a su rutina diaria;
 Aumenta la competitividad de la empresa: al adoptar nuevos
recursos estratégicos, la empresa se vuelve más atractiva para los
clientes, los socios y los talentos y obtiene una ventaja competitiva
en el mercado;
 Mejora la productividad: la innovación propone procesos más
eficientes, mayor control de la producción, estrategias eficaces y
empleados más comprometidos;
 Añade valor al producto/servicio: al innovar, tienes una gran
ventaja en la comercialización de productos y servicios, porque
aportas algo diferente y único a tu público;
 Aumenta los beneficios: con mayor productividad, un negocio más
atractivo y una gestión más eficaz, en consecuencia, la empresa
tiene más beneficios.

DESVENTAJAS
Se corre más riesgo

Las empresas que se dedican a innovar productos corren mayor riesgo, porque
el producto puede ser un gran éxito o un total fracaso. Esto implica que se
corre mucho riesgo, porque aunque el producto sea muy bueno no siempre
recibe la aceptación de los clientes.

2. Se necesita mucho dinero para invertir

De hecho, toda empresa que quiere ser innovadora debe invertir grandes
sumas de capital financiero. Si el resultado es exitoso el dinero invertido se
recupera con amplios márgenes de rentabilidad. Si por el contrario el producto
resulta un fracaso se pierde igualmente mucho dinero, que es muy difícil de
poderlo recuperar.

3. Requiere mucho tiempo

Así mismo, para lograr innovar productos las empresas necesitan utilizar
mucho tiempo para identificar la necesidad, proponer el diseño, generar
prototipos de productos, producirlos y comercializarlos.

Por consiguiente, si se tarda demasiado tiempo en este proceso, puede que


llegue tarde al mercado e igualmente no cause ningún impacto. Podría darse el
caso que otra empresa aparezca con otra solución en menos tiempo y que se
deje de lado la propuesta de la empresa.

TIPOS

Innovación radical

Como su nombre indica, la innovación radical es algo que realmente


cambia el escenario de una marca, ya sea en el mercado o en la dinámica
empresarial.

Puede producirse a través de un cambio completo en el posicionamiento de la


empresa, en la forma de trabajar, en los procesos, en los servicios y productos
ofrecidos o en la forma de relacionarse con el cliente.

Un ejemplo de innovación radical es el iPhone de Apple. Cuando salió al


mercado, los smartphones ya existían, pero Apple incluyó características que
cambiaron y popularizaron el mercado.

Innovación incremental

La innovación incremental también se encuentra entre los tipos de innovación.


Añade novedades, ya sea en el producto, la marca o los métodos de
producción, sin promover un cambio muy brusco.

Por lo general, se trata de una evolución de una innovación ya realizada por


la marca, de manera que se complementa y ofrece mejoras, ya sea para los
empleados, los clientes o los atributos del negocio.

Como ejemplo de innovación incremental tenemos a Gmail, que surgió con el


propósito de entregar correos electrónicos de forma rápida y, con el tiempo, se
le fueron añadiendo diversas funciones para mejorar la experiencia del usuario
y también para hacerlo más útil y competitivo.

Innovación disruptiva
Los cambios tecnológicos y de comportamiento han propiciado la aparición de
la innovación disruptiva en las últimas décadas.

Este tipo de innovación sigue al mercado más que a una marca, producto o
servicio concreto. Puede ser aprovechado por algo que una empresa ofreció
por primera vez y como consecuencia ganó espacio, pero, en general, es
un movimiento escalable que llega a muchas personas al mismo tiempo.

Un ejemplo de innovación disruptiva fue Netflix, ya que anteriormente el


mercado se basaba siempre en empresas como Blockbuster para ver películas
y series. Netflix comenzó ofreciendo envíos de DVD por correo, pero luego
decidió innovar y empezó a ofrecer el servicio de vídeo en streaming a través
de una suscripción mensual y, con ello, expulsó a Blockbuster del mercado.
Además de la innovación, esto también aseguró a Netflix unos ingresos
mensuales predecibles.

ETAPAS

 Generación de nuevas ideas: ¿Cuáles son las oportunidades en el


medio, qué cambiaría realmente un producto, servicio o empresa que no
se ha hecho todavía?
 Evaluación: ¿Qué se necesita para ponerlo en práctica, si es posible y
cómo hacerlo viable?
 Experimentación: Es fundamental que se pruebe lo que se ha pensado,
identificando lo que realmente funciona o lo que hay que mejorar.
 Comercialización: ¿Ha alcanzado el punto ideal? Es hora de ofrecer al
público lo que antes sólo existía internamente o como proyecto.
 Seguimiento: El seguimiento de lo realizado es una parte importante
para entender la aceptación, el público y la estrategia. Para ello, la
retroalimentación es esencial.

¿Cómo implantar la innovación?

 Crear un entorno favorable a la innovación


 Elaborar un proceso de innovación
 Iniciar una transformación de alto impacto
 Seguir el ejemplo de las grandes empresas
EMPRENDIMIENTO
Características de Emprendimiento

 Espíritu: es necesario tener un espíritu dinámico, creativo, orientado


a la búsqueda continua de oportunidad de negocio: El espíritu
empresarial es la actitud que permite al emprendedor de identificar
una oportunidad y luchar por ella para producir nuevo valor o éxito
económico.
 Capacitación: el emprendedor necesita conocimientos técnicos para
llevar a cabo la idea de empresa.
 Marco regulatorio: se mueve en un marco de leyes que pueden o no
facilitar el proceso para pasar de las ideas a la práctica de la creación
empresarial.
 Financiación: es necesario un sistema que le financie para poner en
marcha su actividad y garantice su negocio.
 Red: se genera en un ecosistema donde intervienen varios actores.
También se trabaja en sinergia con otros emprendedores.

VENTAJAS

Independencia laboral: Una de las ventajas más atractivas para las personas


que deciden ser emprendedores es el hecho de ser sus propios jefes y tener
sus propios horarios. Cuando abres tu empresa tienes una autonomía que no
tendrás trabajando para otra persona. Lo que sí cabe decir es que, para que el
negocio funcione, debes trabajar con ritmo y ser responsable, ya que no habrá
nadie detrás de ti para gestionar los tiempos y las prioridades, lo que exige una
gran dedicación y esfuerzo por parte del emprendedor. ¿La mejor parte? Poder
llevar a cabo y desarrollar tus ideas bajo la premisa de llegar a la excelencia
empresarial. Si a la hora de emprender decides hacerlo junto con otra persona,
estudia primero que sea la correcta, ya que será una decisión crucial que
influirá en todo el proceso.

Estabilidad: La estabilidad laboral y, en algunos casos, las precarias condiciones


de empleo, son otra de las causas que lleva a muchas personas a emprender su
propio negocio. Es por ello que, saber que tienes una estabilidad laboral, será otro
de los puntos fuertes. Esto no quiere decir que ser emprendedor no tenga también
sus riesgos e incertidumbres, pero tu continuidad laboral dependerá de otros
factores como el éxito o fracaso del negocio, y no de la decisión de un jefe.
Dar vida a tu propia idea: para muchas personas no hay mayor satisfacción que
trabajar en su propio proyecto, desde el inicio hasta la ejecución. Poner una idea
en marcha y luchar por ella, con los problemas y satisfacciones que puedan ir
surgiendo, supone un gran reto. Por otro lado, también es muy reconfortante crear
y consolidar una empresa que cubra necesidades reales de la gente y, además, te
ayude a crecer y evolucionar como profesional.

Grandes ingresos: si tu proyecto funciona correctamente y tiene éxito,


puede que tus ingresos sean superiores que trabajando como empleado
para otra empresa. También debes tener en cuenta que muchos de los
negocios, en su comienzo, tienen pérdidas económicas, ya sea porque
todavía no son conocidos, no cuentan con una cartera de clientes, etc. Por
lo que debes ser paciente y tener un presupuesto que valore esta
posibilidad.

DESVENTAJA

No poseer todos los medios necesarios: para poder desarrollar una actividad


empresarial debes contar con una serie de recursos, ya sean tecnológicos,
logísticos, humanos o financieros, entre otros. El hecho de no contar con ellos,
puede ser una de las desventajas a la hora de poner en marcha tu negocio.

Asumir una gran inversión económica: Emprender no es barato, necesitas


contar con un presupuesto, recursos y una gran cantidad de tiempo, sobre todo, al
comienzo de la actividad. Aunque también te animamos a no frenarte por el hecho
de no contar con una gran cantidad de dinero, ya que muchas buenas ideas no
requieren de un presupuesto tan grande y pueden desarrollarse con recursos más
económicos.

Desconocer el mercado al que te expones: Antes de lanzar cualquier actividad


empresarial, debes realizar un ejercicio de investigación previo para saber qué
necesidades tiene la gente, y si tu producto o servicio las va a cubrir. ¿Van a
comprar tu producto/servicio y por qué? Eso es lo primero que debes preguntarte.
De modo que poseer unos conocimientos previos y realizar un trabajo de
planificación, te será muy útil antes de lanzar tu idea al mercado.

No estar preparado para emprender: Sacar adelante tu propio negocio es algo


para lo que no todo el mundo está preparado. Se requiere de una disponibilidad y
compromiso muy altas. Ya que tendrás que esforzarte y sacrificarte en muchas
ocasiones para que la empresa no fracase. Y es que, a pesar de que te involucres
al máximo, tener una gran idea no es sinónimo de éxito. En algunos casos se tiene
una idea buena que es  innovadora, se cuentan con todos los medios e inversión
financiera para llevarla a cabo, pero la persona encargada no es responsable,
constante o no está comprometida con el proyecto.

TIPOS

Emprendimiento pequeño

Se trata de negocios unipersonales, salvo ciertas excepciones donde puede


haber uno o dos socios más. También son conocidos como
microemprendimientos y se caracterizan por tener una inversión inicial baja.
Asimismo, se consideran emprendimientos locales, que buscan distribuir sus
productos o servicios dentro de los límites de su ciudad.

Un ejemplo de este tipo de emprendimiento en Argentina son las micro y


pequeñas empresas de las siglas MiPyME.

Emprendimiento escalable

Los emprendimientos escalables buscan tener un crecimiento exponencial en el


corto y mediano plazo. Nacen con el objetivo de expandirse rápidamente y
convertirse en empresas multinacionales.

Suelen ser compañías asociadas al mundo tecnológico y algunos ejemplos de


ellas son las aplicaciones móviles como Netflix, Facebook e Instagram que fueron
diseñadas para satisfacer a millones de personas.

Emprendimiento social

El principal objetivo de este tipo de emprendimiento es generar un impacto


positivo en su comunidad y el mundo. Quienes llevan adelante emprendimientos
sociales suelen desarrollar sus iniciativas en sectores vinculados a la educación,
la salud y el ambiente.

Emprendimiento espejo o de imitación

Son aquellos que replican una idea que fue o está siendo exitosa en el mercado.
Se puede imitar un producto, servicio o un modelo de negocio. Las franquicias
son un ejemplo de los emprendimientos espejo. Para adquirir este tipo de negocio
es necesario contar con una inversión significativa, debido al alto costo que
representa pagar por una marca reconocida.
Emprendimiento oportunista

Tal como su nombre lo indica, este tipo aparece en el momento oportuno para


resolver una necesidad puntual y urgente. Durante la pandemia, por ejemplo,
surgieron empresas que comenzaron a fabricar barbijos en grandes cantidades.
Lo que caracteriza a estos negocios es la visión del emprendedor, su creatividad
y su capacidad para ejecutar con rapidez.

Emprendimiento incubador

A diferencia del oportunista, el emprendimiento incubador se concentra


en investigar cuáles son las necesidades permanentes del mercado para ofrecer
una solución innovadora.

Este tipo de emprendimiento requiere de una gran inversión, para realizar las
investigaciones que les permita llegar a conclusiones acertadas sobre las
necesidades del nicho que están analizando.

Honduras, Mujeres lideran el 60% de los emprendimientos.

El 57.5 por ciento de los emprendimientos reinventan su forma de


trabajo mediante las redes sociales.

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