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MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACIÓN

UNIVERSITARIA, CIENCIA Y TECNOLOGÍA


UNIVERSIDAD POLITÉCNICA TERRITORIAL DEL ZULIA
ESTADO ZULIA

ACTIVIDAD ACREDITABLE
TAREA #01

REALIZADO POR:

OLIVARES CASTRO NATALY C.I: 29.999.303


PAÉZ SUAREZ JORGE C.I: 29.758.535
MAVARES COELLO OSMAR C.I: 29.877.959

ACTIVIDAD ACREDITABLE
SECCIÓN I (E3S01)
1. LA PRODUCCIÓN PETROLERA COMO FUENTE DE ACUMULACIÓN
SOCIALISTA PARA LA DIVERSIFICACIÓN INDUSTRIAL.

La economía de Venezuela está orientada a las exportaciones de materias


primas. La primordial actividad económica de Venezuela es la explotación y
refinación del petróleo para la exportación, la extracción y refinación está a
cargo la empresa estatal Petróleos de Venezuela.
La producción se originó en el año 1875,16 con la participación de la
Compañía Petrolia del Táchira en la hacienda «La Alquitrana» en los Andes
venezolanos; luego se construyó la primera refinería de la cual se obtenían
productos como el queroseno y el gasóleo. El reventón del pozo Zumaque I en
el Cerro La Estrella de Mene Grande en 1914 (aún en producción en junio de
2020) marca el comienzo de la explotación petrolera comercial a gran escala,
accionando una gran cantidad de eventos que cambiaron drásticamente el
rumbo del país. En 1960 y por medio de la iniciativa de Venezuela dentro del
mercado petrolero mundial es fundada la Organización de Países Exportadores
de Petróleo (OPEP).
En el año 1945 y durante más de 30 años, la economía venezolana
experimentó un fuerte crecimiento y desarrollo económico constante, esto trajo
como consecuencia que muchas personas de diferentes parte del mundo
emigraran hacia Venezuela durante la década de los 50, 60 y 70. Ya en la
década de 1980 y también parte de la década de los 90, la economía
venezolana se contrajo debido a la caída de los precios del petróleo, la inflación
se disparó hasta alcanzar picos anuales de 84 % en 1989 y 99 % en 1996.
Pero a pesar de estas elevadas tasas de inflación, la economía venezolana
seguía siendo estable y figuraba como la cuarta economía más grande de
América Latina.
Desde el final de la crisis de principios de los años 1990, la economía
venezolana tuvo más de una década expansiva de crecimiento
macroeconómico, por encima de la media del resto de América Latina.
De acuerdo con el BCV, Venezuela recibió de 1998 a 2008 alrededor de 325
mil millones de dólares a través de la producción petrolera y la exportación en
general,20 y de acuerdo con la OPEP para noviembre de 2018 la extracción
petrolera cayó a 1 170 000 barriles diarios.
A pesar de las tensas relaciones con los Estados Unidos, este país es un
vendedor de bienes y servicios a Venezuela. Las exportaciones
estadounidenses a Venezuela incluyen maquinarias, productos agrícolas,
instrumentos médicos y vehículos. Venezuela era uno de los principales
proveedores de petróleo extranjero a los Estados Unidos, ubicándose en 2017
en cuarto lugar con apenas un 41 % de los barriles extraídos.2324 Cerca de
500 empresas de Estados Unidos en diferentes áreas económicas están
representadas en Venezuela.
Desde que Hugo Chávez Frías impuso estrictos controles de cambio en el
año 2003, en un intento de implementar su sistema económico de
nacionalización y expropiaciones y evitar la fuga de capitales, La situación
económica del país empeoró, se incrementó la corrupción durante su gobierno
y se produjo una serie de devaluaciones de la moneda. En 2007 Venezuela
venía presentando una inflación de 22.5% una de las más altas de la región y
casi de los tres últimos años de la primera década del siglo. El país entró en
recesión en el tercer trimestre de 2009 con una contracción del 3,3 % después
de experimentar crecimiento por 22 trimestres seguidos, igualmente, en el
primer semestre del 2010, el PIB de Venezuela se contrajo en 3.5 %,
totalizando cinco trimestres consecutivos sin crecimiento. La corrupción produjo
una crisis bancaria en el 2009, unos 28 bancos fueron intervenidos, algunos
fusionados otros liquidados. En diciembre de 2014 según reportes del Banco
Central de Venezuela el país venía en el segundo trimestre de reportar una
caída de 4,9%, luego de registrar una contracción de 4,8% en los primeros tres
meses del año, para el tercer trimestre el país registró una contracción de
2,3%, este comportamiento económico de Venezuela en lo que va del año
2014, de acuerdo con los parámetros internacionales, dos trimestres continuos
con contracciones económicas apuntan hacia una recesión. De acuerdo a
varios analistas estiman que Venezuela entró en un ciclo de «estanflación»,
que implica contracción económica e inflación alta. Para 2015, Venezuela tiene
la tasa de inflación más alta del mundo, superando el 100 % interanual,
convirtiéndose en la tasa más alta en la historia del país. En noviembre de
2017 Venezuela entra por primera vez en hiperinflación con una inflación del
50,6 % solo en el mes de octubre. El 2018 es un año pésimo para la economía
con retraso en el pago en sus Bonos, pérdida del volumen de sus
exportaciones de petróleo, pérdida de la producción nacional de aluminio,
cemento y hierro. Al final de 2018 la inflación acumulada llega a 1 698
488.2%34 (más de un millón %) los pronósticos para este año no son
alentadores según el FMI el PBI real proyectado para 2019 caerá un porcentaje
negativo -25% y con una Tasa de inflación, precios promedio al consumidor de
10 millones por ciento. En un informe de la Asamblea Nacional de enero 2020
la inflación acumulada durante el año 2019, asciende a 7 374.4%.37 La
hiperinflación acumulada el año 2020 llegó a 3 713.00% una de las más altas.
2. LA INDUSTRIA PESADA COMO BASE MATERIAL PARA EL DESARROLLO
PLANIFICADO.

La industria pesada o industria básica está dedicada a la extracción y


transformación de las materias primas, tales como las minas de los minerales
usados en la siderurgia, el petróleo, y la fabricación de la maquinaria necesaria
para tales fines; entre otras.
En la industria pesada se pueden distinguir las industrias por sectores como
son la metalúrgica, la petrolera, la química y la extractiva. A diferencia de la
industria ligera (que pertenece al sector secundario), requiere de una
considerable mayor cantidad de mano de obra y demás trabajo como
descomponer elementos químicos o extraer materiales, y sus procesos,
susceptibles por tanto de contaminar al medio ambiente.
El desarrollo de la industria crea la base inalterable para la dictadura del
proletariado. Las relaciones mutuas que existen en nuestro país entre la clase
obrera y el campesinado se basan en último análisis sobre las relaciones
mutuas entre la industria y la agricultura. Sólo en la medida en que la industria
haga progresos reales y que la industria pesada se recupere, será posible, y en
verdad inevitable, alterar la importancia relativa en nuestra vida económica de
la agricultura y la industria, y desplazar el centro de gravedad desde la primera
a la segunda.
El derrocamiento de la burguesía en cualquiera de los países capitalistas
más avanzados rápidamente imprimiría su marca al ritmo de conjunto de
nuestro desarrollo económico, ya que multiplicaría de inmediato los recursos
técnicos y materiales para la edificación socialista.
El paso del capitalismo al socialismo termina cuando la propiedad social se
ha afirmado en todos los sectores de la economía. El socialismo se desarrolla
ahora apoyándose en la gran industria planificada y de alta tecnología como
cadena de producción, unida a la agricultura mecanizada colectiva. La propia
sociedad, los propios trabajadores se colocan en condiciones de planificar y
regular el proceso de producción en la escala de toda la economía nacional del
país.
Bajo el capitalismo, una producción más o menos planificada puede
organizarse sólo dentro de una empresa, o todo lo más dentro de un
monopolio. Pero se trata de unos planes que constantemente se ven
trastrocados por la anarquía de la producción que reina en toda la economía
nacional.
El Socialismo permite la dirección planificada de todo el mecanismo de
producción social tomado en su conjunto; como está planteado en la línea
generales del plan de desarrollo económico de la nación.
3. LA INDUSTRIA DE BIENES Y SERVICIOS COMO FUENTES DE
DESARROLLO SOCIAL INTEGRAL.

El gobierno nacional ha propuesto el modelo de Empresas de Producción


Social como elemento fundamental para el desarrollo del modelo productivo
venezolano, en diversos sectores de la economía, en especial aquellos
considerados estratégicos como el sector de minas y el sector de
hidrocarburos. En este sentido, son entidades económicas dedicadas a la
producción de bienes o servicios con un alto contenido social y en donde
prevalecen principios de igualdad, cooperación, solidaridad,
complementariedad y reciprocidad.

Las Empresas de Producción Social han estado promovidas durante los


últimos dos años como una línea de política por parte de organismos estatales.
Estas pueden clasificarse de acuerdo con el tipo de actividad, por su tamaño y
según la naturaleza de su capital. Como empresas, se espera que operen de
manera eficiente con márgenes de rentabilidad moderados, es decir, que
ofrezcan precios justos a los demandantes, una vez que prevalece el interés de
maximizar el aporte social y no el económico.

Desde el punto de vista de la actividad económica, existen empresas de


Producción Social dedicadas a la producción de bienes y se encuentran en
sectores primarios de la economía (agricultura, ganadería y minería) y
secundarios (industria). Su tamaño es variable y abarca desde grandes
empresas hasta pequeñas empresas. Como ejemplo de grandes empresas de
producción industrial están las once promovidas por el Estado para la
transformación de minerales en productos de mayor valor agregado, entre ellas
la EPS Siderúrgica Nacional, EPS Servicios de Laminación y EPS Tubos sin
costura.

Otras empresas se dedican a los servicios de transporte, seguridad,


mantenimiento, telefonía, almacenamiento, asistencia técnica, y abarcan
generalmente a pequeñas empresas llamadas a organizarse para asociarse,
expandir sus servicios a otras áreas (bancaria, administradora de fondos de
inversión, seguros, consultoría) y fortalecer su posición ante el mercado.

Por último, se encuentran las Empresas de Producción Social


comercializadoras que intervienen en los canales de distribución, posición
vulnerable ante las grandes empresas privadas que también ofrecen estos
servicios. Como se puede observar, estas empresas participan en los mismos
sectores en donde concurren empresas privadas y estatales.
4. SOCIALIZACIÓN ARMÓNICA DE LA PRODUCCIÓN Y DISTRIBUCIÓN DE
BIENES Y PRODUCTOS.

La socialización socialista de la producción contiene dos momentos: la


socialización formal de la producción y la socialización real de la producción. El
primero se produce a partir de la toma del poder político por los trabajadores
con la expropiación de los medios de producción capitalista. Con relación al
proceso de expropiación forzosa, Lenin expresó: " es el acto de transformación
de los medios de producción a través del proceso de nacionalización aparece
la expropiación". En tanto el segundo va más allá de la expropiación capitalista,
pues presupone el establecimiento de las relaciones de producción socialistas
y la realización de la propiedad social; es un proceso más duradero, complejo y
eficaz donde deben obtenerse la planificación, la organización, la exigencia, el
control y calidad del régimen socioeconómico.
En la actualidad, se aprecia un desconocimiento parcial en torno a la
socialización de la producción y el proceso de nacionalización y, aunque denso
su tratamiento no deja de ser necesario por lo que representa para la
realización socioeconómica de la propiedad estatal socialista y la llegada a la
anhelada sociedad comunista. Existe confusión respecto al sistema categorial
básico cuando de socialización socialista y proceso de nacionalización se trata
y los factores objetivos y subjetivos que concurren.
Por socialización socialista de los medios de producción, se entiende
en Economía Política, el proceso de planificación, organización, dirección y
ejecución de la producción social en interés de toda la sociedad, que persigue
la eliminación de la propiedad privada y su sustitución por la propiedad social, o
sea, el traspaso de un régimen de propiedad privada individual hacia uno de
propiedad social, ya sea comunitaria o estatal.
La experimentación de diferentes formas y tipos de propiedad y de gestión
realizadas desde el año 1999 en adelante, ha sido evaluada en tres seminarios
nacionales y muchos regionales, realizados durante los años 2007 y 2008 con
participación de trabajadores de industrias, del estado, consejos comunales,
comunidades organizadas, escuelas de formación socialista y estudiantes
universitarios en el análisis de diversas experiencias internacionales conocidas,
entre ellas lado la unión, se han producido importantes recomendaciones,
como una propuesta de modelo de gestión para el socialismo del siglo en
Venezuela, denominado.
Los tipos de propiedad por sí solos no siempre determinan los objetivos y
propósitos para los que pueden servir. En el caso de la propiedad estatal, ésta
puede servir para liberar al ser humano y construir relaciones socialistas, o
para esclavizarlo o someterlo a diversas formas de alienación y explotación,
como ocurrió en los antiguos imperios, egipcio en "África y azteca en ético, así
como en la extinta Unión Soviética.
5. LOS DIFERENTES TIPOS DE PROPIEDAD Y SU ROL EN LA ECONOMÍA
NACIONAL PLANIFICADA.

Los sistemas económicos de producción surgen como respuesta al problema


de la escasez en la economía, el desafío fundamental económico que todas las
sociedades a través de la historia han enfrentado. Este problema económico se
origina al existir aparentemente necesidades humanas ilimitadas en un mundo
de recursos finitos.

Esto significa que no siempre podemos conseguir lo que queremos y que se


deben hacer sacrificios para poder conseguir algo. Así, es necesario tomar
decisiones y priorizar nuestras necesidades. Como enfrentar estas limitaciones,
es decir, como usar nuestro tiempo y recursos, es el reto que han enfrentado
individuos y naciones a lo largo de la historia.

No todos han enfrentado estos problemas de la misma manera. Las


sociedades han desarrollado diferentes sistemas, distintas formas de manejar
los recursos y producir riqueza.

a) Sistema económico: economía de mercado

En este tipo de sistema económico las decisiones son tomadas por los
individuos. Son las relaciones entre las personas y las empresas en el mercado
las que determinan las asignaciones de los factores de producción y la
distribución de los bienes.

Los individuos son libres y toman las decisiones económicas que quieran
basándose en sus propios intereses; en que invertir, si ahorrar o no, trabajar
mucho o poco, que consumir, que producir etc.

b) Sistema económico: economía planificada

La economía planificada tiene como objetivo principal el reparto igualitario de


los ingresos. Para ello el Estado debe intervenir la economía y encargarse de
las tareas de distribución de recursos. Exigen la sustitución de la propiedad
privada por la colectiva en los medios de producción, cambio y distribución. Es
un tipo de sistema económico contrario al capitalismo o economía de mercado.

Sus orígenes se encuentran en la Unión Soviética, después de la Primera


Guerra Mundial. Posteriormente, se expandió a las economías de los países
del Este de Europa. A fines del siglo XX, fue reemplazado en prácticamente
todos los países que lo aplicaban (nunca se aplicó el sistema cien por ciento
puro).
 Elementos claves de la economía planificada:

Existen tres elementos esenciales en el funcionamiento de la economía


planificada. A continuación, pasamos a explicarlos.

 La propiedad estatal o colectiva

En el sistema de planificación centralizada se elimina la propiedad privada.


Todos los recursos y productos quedan en manos del Estado, que representa
la “propiedad colectiva” esto es, de todos los miembros de la sociedad.

El Estado determina los precios de los factores productivos y también los


precios de los bienes y servicios producidos. El mercado no tiene ninguna
función como mecanismo de asignación de recursos.

 La planificación

La organización de la actividad económica se determina de acuerdo a un


plan centralizado en donde el Estado señala detalladamente, para un
determinado período de tiempo, los objetivos de producción, la tecnología a
utilizar, los recursos disponibles para producción e inversión, etc. Los
beneficios de las empresas y los deseos o preferencias de las personas no
tienen ninguna injerencia en la asignación de los recursos.

Asimismo, el Estado también define un sistema de reparto de los bienes y


servicios de modo de que no existan diferentes clases sociales.

 El control

Existe un estricto control del cumplimiento del plan establecido eliminándose


por completo la iniciativa empresarial, la innovación o la apropiación de
beneficios.

 La economía planificada y el socialismo

El socialismo, al menos en sus inicios y en su versión más pura, era un


sistema económico que defendía que la economía debía ser planificada. Con
esto, se lograría un reparto de los recursos más igualitario y una mayor
justicia social.

El socialismo moderno se ha moderado, aceptando que la libre


competencia puede traer beneficios en la forma de mayor eficiencia y
mayores beneficios para los consumidores (menores precios, mayor calidad o
variedad, etc.). De todas formas, los socialistas entienden que el Estado tiene
un rol clave en la protección de los consumidores y en la corrección de ciertas
fallas de mercado.

c) Sistema económico: economía mixta

Este tipo de sistema económico combina elementos de una economía de


mercado y de una economía planificada. Muchas decisiones económicas son
tomadas por los individuos de manera autónoma pero una autoridad central
también influye en las decisiones de producción y distribución.

d) Sistema económico: economía tradicional

La economía tradicional es un sistema basado en las relaciones de familia o


comunidad. Las decisiones de producción, consumo y distribución están
basadas en creencias y costumbres de larga data, es decir, producen de
acuerdo a patrones establecidos desde hace mucho tiempo. Adam Smith
escribió que en el Antiguo Egipto "cada hombre está obligado, por un principio
religioso, a seguir la ocupación de su padre y cometía el sacrilegio más terrible
si cambiaba de actividad".

Los sistemas de economía de mercado y planificada son bastante opuestos.


La principal diferencia entre ambas formas de producción radica en la
importancia que le dan a la libertad y a la justicia. Para los impulsores de la
economía de mercado la libertad es lo más importante mientras que en la
economía planificada la justicia es lo primero.

6. PODER POPULAR Y PROPIEDAD SOCIAL SOBRE LOS MEDIOS


ESTRATÉGICOS DE PRODUCCIÓN.

El carácter social de la propiedad sobre los medios de producción demanda


en la actualidad una renovación de su estudio, pues su implementación más
notable se vincula a la experiencia del llamado «socialismo real», donde se
impuso el estancamiento, la inercia ante los cambios, la usurpación burocrática
del poder del pueblo, la negación de los principios esenciales del proceso de
socialización socialista, los cuales, entre otros factores, condicionaron su
destrucción como sistema social. De ahí que se identifique la naturaleza social
de la propiedad con el fracaso del socialismo y de cualquier sociedad que
intente seguir ese camino.

Es oportuno señalar que, en el mismo período en que las transiciones del


«socialismo real» condujeron a un capitalismo «oligárquico» y periférico, los
países de América Latina que venían de sufrir las consecuencias del
capitalismo neoliberal, comienzan a desarrollar alternativas que se apartan
tanto de la utopía del mercado perfecto, como también de la utopía de la
planificación central eficaz, bajo el dominio de un Estado centralizador
burocrático.

En dichos países, al mismo tiempo que se reconoce el rol estratégico del


Estado para realizar las trasformaciones, se destaca la necesidad de la
participación ciudadana y la descentralización de los gobiernos locales. La
dimensión comunitaria se toma como ámbito para protagonizar la
transformación de la relación capital-trabajo, a través de fomentar las formas
asociativas que permitan ir transformando el trabajador asalariado en productor
asociado.

Los clásicos identificaron las relaciones de propiedad con respecto a los


medios de producción como la base y la esencia del sistema de relaciones
sociales de producción en todas las fases del desarrollo social y determinaron
la situación de las clases y grupos sociales en la producción y
consecuentemente su participación en la distribución, el cambio y el consumo.

Desde este punto de vista, resulta inconsistente hablar de dos dimensiones


en el análisis de la propiedad, una de carácter jurídico en el sentido de la
posesión y la otra de carácter económico en cuanto a la gestión y uso del
objeto de propiedad. Pues se trata -como señala Marx- de que su esencia se
deriva del conjunto de las relaciones de producción, por lo que la forma jurídica
que adopte puede o no reflejar su naturaleza esencial.

Se debe reconocer la dimensión comunitaria local de la propiedad social


sobre los medios de producción, de manera que el ciudadano en comunidad se
convierta en protagonista del desarrollo y de la solución de los problemas que
lo limitan, donde la iniciativa emprendedora no sea solo un atributo del sector
privado a partir del incentivo al éxito individual, sino que se busquen las formas
asociativas innovadoras vinculadas al desarrollo, que contribuya a la
prosperidad de la comunidad, el territorio y del país, e integre a los individuos
bajo una lógica del trabajo y no las del capital.

7. DOCTRINA BOLIVARIANA DE INTEGRACIÓN REGIONAL VERSUS LA


DOCTRINA MONROE IMPERIALISTA.

El antiguo debate político y diplomático entre el bolivarismo y el monroísmo


se mantiene vigente después del fracasado Congreso Anfictiónico de Panamá
de 1826. En los acontecimientos políticos latinoamericanos del siglo XXI,
encontramos aún la esencia del conflicto injerencista en los asuntos internos de
nuestros países por la potencia del norte.
Cuando la guerra de la independencia llegaba a su fin, Bolívar se propuso
consolidar la nueva situación a través de una Liga de naciones
latinoamericanas, la cual posibilitaría el desarrollo autónomo y restringiera la
intromisión de las naciones extranjeras. Comprendía la formación de un
gobierno supranacional de las repúblicas que se formaron en los territorios que
antes fueron colonias españolas. Ellas debían representar la cultura indígena,
española y africana. Además, la lega debía reglamentar el comercio entre los
países y llevar a cabo alianzas entre ellos. De debía incluir un cuerpo de leyes
latinoamericanas y la formación de una fuerza armada supra continental. Todos
estos planes incluidos en el Congreso de 1826 fueron obstaculizados por las
acciones diplomáticas británicas y norteamericanas y políticas internas de
naciones que no creyeron en la unidad porque establecieron como prioridades
sus intereses locales.

En “El Congreso de Panamá: Bolivarismo y Monroísmo”, se confrontó la


ideología hispano americanista del Libertador, con la doctrina monroista del
imperialismo norteamericano. Describe el ideal de Bolívar y su enfrentamiento
a la doctrina monroista del imperialismo que al final del siglo XIX dio como
resultado el panamericanismo (llamado por él “un instrumento político del
monroísmo” que logra sustentarse a través de la Primera Conferencia
Internacional Americana de Santiago de Chile en 1890), destinado a invalidar a
los seguidores de Bolívar plantea acertadamente, a nuestro criterio, la
disyuntiva entre los esfuerzos bolivarianos por constituir una fuerte y unida, y
las fuerzas extrañas que paulatinamente logran romper el itinerario
latinoamericano y adueñarse de los recursos de nuestro continente.

Bolivarismo y Monroísmo, constituye una clave para entender los momentos


actuales en los que se trata borrar el bolivarismo ante la pasividad pasmosa de
los dirigentes de los países liberados por Bolívar. A juicio de Santos Molano
este es un libro “imprescindible, indispensable.”

Bolívar debía ser el blanco de todos los ataques de los agentes


norteamericanos, porque bien se sabía en Washington que al minar su
prestigio se minaba también el prestigio del único hombre resuelto a impedir
que en el Sur se creara el vacío de poder que constituía el requisito
indispensable para el tranquilo progreso del destino manifiesto de la república
continental norteamericana.

En 1928 se realizó en La Habana una Conferencia Panamericana que se


constituyó en la “piedra angular” del Panamericanismo. En ella, la Sexta, los
Estados Unidos exhibieron su poder sobre el continente. Machado, era el
represivo dictador cubano. Calvin Coolidge llegó a La Habana en un acorazado
y sin inmutarse elogió el Panamericanismo Monroista. Las invitaciones a la
Conferencia fueron emitidas por la Embajada de los Estados Unidos.
En esta sexta Conferencia el representante por la República de Panamá fue
el Dr. Ricardo J. Alfaro, quien había sido asiduo representante diplomático en
Washington. En dicha reunión el expresidente justificó la Doctrina de Monroe y
enalteció el Panamericanismo.

8. SITUACIÓN Y PAPEL HISTÓRICO DE LA CLASE TRABAJADORA


MUNDIAL.

El proletariado es la clase social baja de la edad contemporánea que, en el


modo de producción capitalista carece de medios de producción y solamente
posee su fuerza de trabajo. La burguesía es la propietaria de los medios de
producción y constituiría la clase social alta. Por debajo o al margen del
proletariado, se encuentra el lumpen proletariado o subproletariado, término
con el que se designa a la población situada socialmente por debajo o al
margen del proletariado y constituye el último estrato social y al que se
considera que carece de conciencia de clase.

Los trabajadores deben desempeñar un papel decisivo en esta lucha, que es


una lucha contra el sistema capitalista. Porque el antagonismo principal en el
sistema capitalista es entre los explotadores, dueños del capital en sus
diversas formas y los trabajadores manuales e intelectuales, los explotados,
que son los que producen los bienes que constituyen el patrimonio material e
inmaterial del género humano. Dicho de otra manera: los dos actores en la
contradicción fundamental del sistema capitalista que consiste en la propiedad
privada de los instrumentos y medios de producción y de cambio, por un lado y
la producción social, por el otro.

El patrimonio de la humanidad creado por el trabajo está cada vez más


desigualmente distribuido y cada vez peor gestionado por los que se quedan
con la mayor parte del mismo. Con tremendas consecuencias para las
condiciones de vida, ambientales, sanitarias, alimentarias, habitacionales,
educacionales y culturales de las grandes mayorías.

Dicha gestión catastrófica del patrimonio de la humanidad no cabe atribuirlo


a la incompetencia de quienes lo administran sino al hecho de que éstos se
guían por una regla para ellos invariable: la obtención del máximo beneficio en
el mínimo de tiempo, cualesquiera sean las consecuencias para la humanidad
en el corto, mediano y largo plazo.

De modo que además del antagonismo principal entre los trabajadores y los
capitalistas existen otros que oponen a estos últimos y a la inmensa mayoría de
la humanidad, antagonismos que no pueden resolverse de otra manera que
socializando la propiedad y la gestión de los instrumentos y medios de
producción, para que éstos estén al servicio de toda la humanidad y no sean,
en manos de unos pocos, el instrumento de su pérdida.

Esto implica que junto a los trabajadores, deben participar de esta lucha los
movimientos sociales que reivindican diferentes derechos humanos
fundamentales (a la salud, a la alimentación, a un medio ambiente sano, a la
educación, a una vivienda digna, a la libertad de expresión y de información, a
una democracia verdaderamente representativa y participativa, etc., Y por
cierto, a condiciones de trabajo decentes, a un salario digno e igual para
hombres y mujeres por el mismo trabajo) que hemos mencionado en el curso
de este escrito.

El antagonismo irreductible entre capitalistas y trabajadores, propio del


sistema capitalista, es el ingrediente objetivo de una lucha consecuente y sin
renunciamientos de estos últimos. Y de su eventual capacidad para ayudar a
las grandes mayorías a superar sus vacilaciones, sus tomas de posición
inestables y pendulares y/o oportunistas y paras atraerlas a participar en un
proyecto radical de transformación social.

Pero actualmente los trabajadores se hallan en una posición de debilidad. En


primer lugar para negociar sus condiciones de trabajo frente a los capitalistas a
causa de lo que François Chesnais llama la “mundialización del ejército
industrial de reserva”[10], que tiene diversos aspectos: la dispersión mundial de
la producción hacia los países con salarios más bajos, ya sea deslocalizando
las propias plantas industriales o delegando la producción a subcontratistas o
licenciatarios locales; la amenaza de la deslocalización de la empresa de su
sede originaria si los trabajadores no aceptan las condiciones impuestas por la
patronal; la contratación de trabajadores extranjeros peor pagados (los
llamados trabajadores desplazados, institucionalizados por la Unión Europea,
con la intervención del Consejo, del Parlamento y de la Comisión Europeas) e
imponiendo la negociación por empresa, en lugar de la negociación por rama o
por sindicato. A lo que hay que agregar los contratos precarios, la llamada
“flexibilidad” laboral, el trabajo a tiempo parcial y la desigualdad de los salarios
entre hombres y mujeres por el mismo trabajo.

9. DISTRIBUCIÓN Y NIVELES DE ORGANIZACIÓN DEL PROLETARIADO, ASÍ


COMO TRABAJADORES ASOCIADOS A LA PRODUCCIÓN DE BIENES Y
PRESTACIÓN DE SERVICIOS EN EL CONTEXTO MUNDIAL.

En líneas generales, el partido del proletariado debe contar con organismos


de base en los centros de trabajo y en los barrios; con organismos regionales
intermedios, que reúnan a varios organismos de base de un sector o región y
los conecten con los organismos centrales que dirigen a todo el partido. Esta
estructura piramidal permite la comunicación permanente entre todos estos
organismos: desde la base a la cúspide y de arriba hacia abajo. Ella hace
posible la movilización del partido como un solo hombre en la lucha constante
contra sus enemigos.

El venezolano tiene que recurrir al rescate de la justa retribución de los


obreros en contra de aquellos patronos todavía expoliando a la clase obrera,
por intermedio de la explotación que implica la plusvalía. la explotación del
trabajador por plusvalía es un concepto mayormente, pasado de moda, para
muchos solo es útil como elemento de propaganda.

En revolución socialista a la reducción de la jornada de trabajo ensancha las


posibilidades del proletariado, para alargar el tiempo libre. El proletariado y el
campesino deben de apropiarse de los medios de producción.

En revolución socialista la reducción de la jornada de trabajo ensancha las


posibilidades del proletariado, los trabajadores y campesinos puesto que
alargar el tiempo libre. El Proletariado, los trabajadores y el campesinado
deben apropiarse de los medios de producción.

10. DISTRIBUCIÓN Y NIVELES DE ORGANIZACIÓN DE LOS CAMPESINOS EN


EL CONTEXTO MUNDIAL.

Los campesinos constituyen el sector socioeconómico mayoritario del Tercer


Mundo, abarcando a dos tercios de su población, en general los más pobres, lo
cual da idea de la importancia que para la cooperación para el desarrollo
encierra el comprender las características y riesgos de su sistema de sustento.

El concepto “campesino”, propiamente dicho, se emplea para designar a los


pequeños agricultores que disponen de una granja o explotación familiar. Sin
embargo, otros grupos que comparten algunas de sus características son a
veces denominadas también como tales, entre los que cabe mencionar a: los
jornaleros asalariados agrícolas, los agricultores que practican una actividad
intensiva en tecnología y capital, y los campesinos que no viven en aldeas, por
ejemplo, los que ocupan nuevas tierras arrancadas al bosque.

Desde la existencia misma de campesinos, éstos se han vinculado, de una


forma u otra, a los grandes movimientos políticos que han caracterizado la
historia de la lucha de clases. Según análisis históricos, parece ser muy cierto
que los campesinos, en los primeros años de la lucha por la Independencia
venezolana de España, no apoyaron a la dirigencia patriota con el espíritu con
que se manifestaron, por ejemplo, durante el período de la Guerra Federal
entre 1859-1863.
La Independencia no alteró la estructura económico-social de Venezuela, ya
que siguió siendo una formación pre-capitalista donde las no muy desarrolladas
relaciones capitalistas de producción se conjugaban con la esclavitud. Los
dueños de la tierra, los medios de producción y riqueza, era la oligarquía criolla
y, fundamentalmente, explotaban la mano de obra esclava y, al mismo tiempo,
a los campesinos enfeudados por medio de la coerción extraeconómica y,
además, a una incipiente mano de obra asalariada. Sin embargo, es una
sociedad de corte capitalista por sus lazos con el mundo exterior y el carácter
de las relaciones de producción.

Se pudiera sostener que la lucha independentista padeció etapas de flujo y


reflujo, victorias y derrotas, de una parte, por las evidentes contradicciones de
clases entre los conocidos mantuanos y pardos con las fuerzas del
generalísimo Francisco de Miranda, quien no tuvo a su disposición, entre otras
cosas, el apoyo de las poblaciones rurales en los Valles de Aragua y Carabobo.

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