7 Semillas

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Idea central

La verdadera felicidad radica en el conocerse a sí mismos y saber que la forma en que estamos actuando sea

saludable con nosotros mismos y con las personas que están en nuestro entorno; vivir de una forma más

desinteresada, puesto que el dinero no trae la felicidad, ya que es por este que se dejan de lado las cosas que en

verdad son mucho más importantes como la familia, los amigos, y uno mismo.

Palabras clave

1. Autoconocimiento.

2. Autocontrol.

3. Ego.

4. Estrés.

5. Paz.

6. Flexibilidad.

7. Desapego.

8. Subconsciente.

9. Ética.

10. Liderazgo.

Definición de palabras clave.

Autoconocimiento: Es el proceso reflexivo (y su resultado) por el cual la persona adquiere noción de su yo y de

sus propias cualidades y características.

Autocontrol: Se llama autocontrol a la capacidad o cualidad que puede tener una persona para ejercer control

sobre si mismos.

Ego: representa el equilibrio que le permite al hombre satisfacer sus necesidades dentro de los parámetros

sociales.

Estrés: El estrés puede considerarse como una reacción física y emocional compleja se da una reacción de alarma

en respuesta a un factor de tensión que activa el sistema nervioso autónomo.

Paz: Generalmente definida, en sentido como un estado a nivel social o personal, en el cual se encuentran en

equilibrio y estabilidad las partes de una unidad, y sentido opuesto como ausencia de quietud, violencia o guerra.

Flexibilidad: Disposición de alguien o algo para doblarse con facilidad, plegarse a la voluntad de otros y la

susceptibilidad de adaptarse a los cambios según las circunstancias.

Desapego: Falta de afición o interés, alejamiento, desvío.

Subconsciente: subconsciente alude a un término antiguo utilizado en psicología para designar el estado mental

que es débilmente consciente, y para lo que se halla por debajo del umbral de la conciencia actual o es incluso

inaccesible a esta.

Ética: Considerada una ciencia normativa ya que se ocupa de las normas de la conducta humana distinguiéndose

así de las ciencias formales y empíricas.

Liderazgo: Proceso de influir en otras personas y de incentivarlas para que trabajen en forma entusiasta por un

objeto común.

Paráfrasis de palabras clave.

Autoconocimiento: Proceso de llegar a saber o conocer las cualidades que te definen a ti mismo.

Autocontrol: facultad propia de la persona de ejercer control de sus actos.


Ego: Perspectiva que una persona de sí misma en la sociedad.

Estrés: Anomalía del sistema nervioso producido pro alta tensión.

Paz: Estado anímico de tranquilidad y quietud.

Flexibilidad: Facilidad al cambio. Adecuarse a las circunstancias.

Desapego: Actitud de alejamiento o desinterés.

Subconsciente: Es la parte de nuestro yo, la cual no manejamos.

Ética: Reflexión que el hombre tiene de la moral sin una autoridad mayor que la imponga.

Liderazgo: capacidad de manejar un grupo de personas, tomando decisiones acertadas y democráticas.

Oraciones

Su inmadurez evidenciaba su pobre grado de autoconocimiento.

Dejo el autocontrol a un lado y optó por el camino fácil.

El ego lo cegó y lo fue seducido a sentirse ajeno a los demás.

Agobiado por el estrés a lo único que atino Arnold fue desplomarse en su cama.

El convenio resulto ser ventajoso y Arturo decidió optar por proponer la paz.

No mostró ser un oficial apto por mostrar demasiada flexibilidad a los demás.

Decepcionado de la situación a Richard solo le quedo mostrar desapego.

Aquellos hechos pasados que repercutían en sus relaciones sociales estaban en el subconsciente de Pedro.

Aceptar ese caso más que por dinero, Christian lo hizo por cuestión de ética.

Ante la situación James no titubeo y tomo el liderazgo, y el grupo coincidió en ello.

RESUMEN

Capitulo 1

Ignacio Rodríguez, es el gerente general de R y G, el trabajaba 18 horas al día, bebía mucho alcohol, fumaba

mucho y no practicaba deporte y era un hombre con muchos problemas en el trabajo.

Un día Ignacio se enfureció, gritó e lo insultó a su gerente de ventas quien había renunciado momentos antes,

esto le ocasionó un pre infarto que lo llevó a la clínica. Al cabo de unos días Ignacio se recuperó, pero el médico le

recomendó cambiar su forma de vida. Que se relaje! Que medite! Para ello le fundamentó con investigaciones

científicas. A Ignacio siempre le pareció tonto pero las explicaciones científicas le hicieron pensar y le comunicó a

su esposa sobre las recomendaciones del médico y ésta se alegró y le dio la dirección de un maestro hindú.

Al cabo de un mes Ignacio se sentía muy bien pero ese día recibió la noticia que habían perdido una cuenta

importante y empezó a gritar e insultarlo a su jefe de ventas. En medio de todo este escándalo sintió un dolor en

el pecho y se asustó. Inmediatamente se dirigió a la casa del gurú hindú.

Cuando llegó se estaba arrepintiendo, sentía vergüenza que las personas lo viesen ahí. Finalmente un joven lo

hizo pasar al interior donde se encontraba el maestro, que era un señor delgado y trigueño, con túnica color

azafrán. El gurú le preguntó varias veces a Ignacio por que había ido a buscarlo y éste dio varias veces la

respuesta que quería aprender a relajarse, pero el maestro le preguntó una vez más cuál era el verdadero motivo

que lo condujo hacia él y la respuesta de Ignacio fue que todo esto era una pérdida de tiempo y se disponía a

retirarse.
Pero el maestro le preguntó si era feliz, pues esta pregunta lo enfureció a Ignacio respondiendo que él era un

empresario exitoso y enumeró sus posesiones a lo que el maestro le respondió que él solo quería saber si se

sentía feliz, esto ocasionó que le saliesen las lágrimas a Ignacio. El maestro había irradiado amor. Ignacio se

sentía muy cómodo. El maestro le explicó que la felicidad no se compra sino se siente y el que siente es el

espíritu, entonces ahora debía aprender a generar felicidad en su vida.

Ignacio le pidió instrucciones al maestro para ser feliz y éste sacó un cofre, donde guardaba 7 semillas, las

semillas de la felicidad. Le dijo que cada una de ellas tiene una profunda enseñanza. El maestro le entregó la

primera semilla para que la siembre y que regrese cuando haya germinado para descifrar la enseñanza.

Ignacio fue a su casa y planto la semilla en su jardín, todos los días la regaba y la cuidaba y la observaba. Pero no

crecía nada.

Capitulo 2

Después de un mes, Ignacio frustrado removió la tierra y sacó la semilla: no había sufrido ninguna variación. A

Ignacio le entraron interrogantes, dudas y se puso furioso, pero quería que el maestro le explique lo sucedido.

El maestro le pidió calma. Le dijo que le dio una semilla golpeada que jamás crecería para demostrarle que los

humanos somos así, que si nos golpean, maltratan, humillan de pequeños jamás creceremos y si crecemos

seremos débiles. Pero los seres humanos golpeados de pequeños si pueden crecer y ser felices, pero necesitan

conocerse a sí mismos, tomar conciencia de su pasado y de cómo los afecta en el presente. La primera semilla de

la felicidad es el autoconocimiento.

Ignacio al escuchar se lleno de paz y tranquilidad.

El maestro le explicó que al ser maltratados de niños llenamos nuestra memoria subconsciente de emociones

destructivas, las cuales llevamos toda la vida manifestándose en nuestro presente sin darnos cuenta,

impidiéndonos ser felices. Mientras más conciencia y conocimiento tenga uno de su subconsciente tendrá más

libertad y será capaz de ser feliz. Seguidamente el gurú le explicó con ejemplos.

Al día siguiente, después de trabajar en su oficina Ignacio se dirigió a la casa del gurú.

El maestro le explicó que cuando uno tiene traumas de niño, las emociones de estos episodios afloran a la

superficie y si uno bloquea estas emociones es como empujar el hielo en el vaso de agua hacia abajo que siempre

saldrá a flote. Nuestra emociones afloran sin ser uno consiente de ellas, por eso hay que disolverlas como el hielo

en el agua y esto se logra con paciencia. Le dijo que debe integrar su aspecto emocional y el racional para que sea

feliz.

Ignacio le contó que ese día en su oficina lo humilló y gritó al jefe de despacho frente a todos por un error que

cometió porque así le enseño su padre.

El maestro comenzó a indagar, a preguntar como era su padre y averiguó que había sido exigente, no aceptaba

ningún error, era violento, lo maltrataba con patadas, con palabras groseras y que la madre de Ignacio nunca fue

cariñosa. Entonces el gurú llegó a la conclusión que para Ignacio era normal la violencia porque había crecido en

ella. Le explicó que él estaba haciendo lo que su padre hizo con él cuando cometía un error.
El maestro le recomendó que tome conciencia poco a poco de sus emociones subconscientes, revisando cómo se

manifiestan en su vida actual y que reflexione sobre su comportamiento. A medida que entienda irán bajando su

intensidad y su influencia en él. Que esté consciente de sus conductas agresivas, de sus pensamientos y

emociones destructivas.

Luego el gurú sacó del cofre la segunda semilla, le ordenó que la siembre y que regrese cuando crezca.

Capitulo 3

Luego de un mes brotó la plantita.

Ignacio estaba de buen ánimo pero al recibir la noticia de negación de un préstamo se enfureció y lo agredió

verbalmente a su gerente de finanzas, pero algo pasó y tomó conciencia de lo que estaba haciendo en el momento

en el que ocurría el atropello. Le pidió disculpas al gerente y sintió regocijo de haber tomado conciencia a tiempo.

En la tarde Ignacio fue a buscar al maestro y éste le reveló el mensaje de la segunda semilla que es ponerse en

contacto con su energía vital, le dijo que la planta es la mimosa púdica y esta se retrae cuando siente ruidos a su

alrededor y busca su paz interior, y de la misma manera los seres humanos deberíamos hacer lo mismo. Para esto

deberíamos dejar de pensar aunque sea algunos minutos al día para acceder a nuestra energía interior, nuestra

energía vital y así podemos sentir paz, felicidad.

Así uno poco a poco se vuelve más alegre, más tranquilo, más amoroso y le nace a uno servir a los demás.

Cuando dejamos de pensar nuestros rasgos negativos caen y aflora una esencia maravillosa que tenemos dentro.

Esa técnica de no pensar es la meditación.

El maestro le enseño una técnica de meditación ya que dejar de pensar no es fácil. La técnica era sentarse

cómodamente y repetir mentalmente por 15 minutos una palabra, así poco a poco tendría una mejor

concentración.

Ignacio al practicarlo sintió una sensación de felicidad por poco tiempo, pues esta sensación lo animó a practicar

diariamente en la mañana y en la noche.

El maestro le enseñó una técnica nueva de respiración, que se concentre en su respiración algunos minutos cada 2

horas y esto le daría un beneficio de lucidez.

Ignacio tenía que presentar su empresa a un cliente potencial, para esto preparó una presentación audiovisual en

computadora y el técnico que debía encargarse de la instalación de los equipos no había hecho el trabajo, así que

esto le preocupó mucho a Ignacio y empezó a gritar pero se concentró en su respiración y pudo calmarse.

Se dirigió a la presentación con el técnico para que instale los equipos y así el pudo tener una magnífica

presentación que le permitió captar al cliente. Cuando uno está en paz y tranquilo atrae lo bueno.

El maestro le hizo entender que el verdadero objetivo de la empresa es ofrecer un entorno que le permita tanto a

él como a su personal realizarse, crecer, aprender, desarrollarse. La rentabilidad y el dinero son un medio y no el

fin en sí mismo.

Le dijo que aproveche cada dificultad, cada crisis para hacerse una mejor persona. Que continúe con su

meditación, practique su respiración y que recuerde siempre el verdadero objetivo de los negocios.

Cierto día Ignacio cuando meditaba sintió ser uno con el todo.
El gurú le enseño el kriya yoga , es una técnica que le permite avanzar más rápido en la meditación que consiste

en una serie de posturas del cuerpo.

Enseguida el maestro le entregó la tercera semilla para que lo siembre y cuando esta florezca, regresé. Le pidió

paciencia, que siga practicando su meditación añadiendo el kriya yoga.

Capítulo 4

Después de cuatro meses la semilla había germinado en un rosal.

Ignacio había avanzado mucho en la meditación, su carisma había aumentado pues esto transmitía confianza a

sus clientes y se constituyó en el mejor vendedor de su empresa.

Aquel día Ignacio se dirigió a la casa del maestro para decirle que la planta era un rosal de flores rojas y el

maestro le dijo que la tercera semilla representada por la rosa es el control del ego.

El ego en el afán de ocultar una realidad interna, desarrolla una conducta a espaldas a nuestra conciencia. Si te

acercas a personas con ego grande, verás una realidad espinosa , de miedo, de dolor interno. Así como la rosa

que quiere ser admirada pero en realidad si te acercas te topas con sus espinas.

El maestro le recalcó que es mejor enseñar con humildad estrategias de venta que decir que uno es mejor que

diez vendedores, o hablar de sus logros.

En realidad Ignacio buscaba el amor que no tuvo de niño , quería mostrar y contar sus capacidades a todos, para

así sentirse aceptado y solicitado.

Ignacio tenía que aprender a no hablar mal de nadie y juzgar sin inflarse. No tenía que permitir que su ego se infle

y no buscar culpables para sacárselos en cara sino para que mejoren.

El objetivo del ego es esconder las carencias internas pero sobre todo esconderlas a uno mismo. El ego no acepta

ideas de los demás, por que el ego se cree superior y más inteligente.

Nosotros venimos para ser felices en el camino hacia la meta.

El maestro le dijo que es difícil librarse del ego, pero se podía poner bajo control. Meditando lograrás consumir tú

ego y le entregó la cuarta semilla para que lo siembre.

Capítulo 5

Después de mes y medio creció la planta, era una planta de mango

Ignacio no se iba a trabajar ni a dormir sin antes meditar media hora, esto lo hacía sentir muy feliz, y estar en un

estado de paz. El quería vencer a su ego.

Un día, Ignacio tuvo una reunión mensual en su empresa con sus ejecutivos para esto él iba a ser el moderador.

Los gerentes estaban exponiendo sus metas y logros, cuando le tocó el turno al gerente de ventas y este dijo que

tuvieron problemas por la crisis económica del país y también problemas de despacho cuando todos empezaron a

culparse y a ofenderse. Ignacio interrumpió y les pidió calma, dijo que no estaban para buscar culpables sino para

apoyarse entre todos.

Le pidió a su gerente de ventas que diga cómo le pueden ayudar para que logre sus metas y éste le dijo que el

culpable es Ignacio, porque su gente esta desmotivada ya que le había quitado sus principales clientes, pues esto
lo puso muy furioso a Ignacio y comenzó a gritar. Otra vez le gano su ego pero se dio cuenta, así que dio por

concluida la reunión y cito al día siguiente al gerente de ventas para arreglar el asunto.

Ignacio se dirigió a la casa del maestro a contarle lo sucedido. Ahí le dijo que se propuso vencer a su ego pero

finalmente el ego lo domina.

El maestro le explicó que cuando uno se propone una meta con tanto apego y deseo y al querer ser el vencedor y

ganarle al ego, uno simplemente actúa con el ego. Cuando uno se molesta o angustia atrae el ego, por el contrario

cuando se está en paz, en tranquilidad aleja el ego. El maestro concluyó diciéndole que uno siempre debe hacer lo

mejor que puede y dar lo mejor de sí, al margen de los resultados. Luego procedió a descifrar la enseñanza de la

semilla de mango. Le dijo que el árbol de mango nos da sombra y nosotros le tiramos piedras todo el tiempo y

encima el mango nos da frutos, entonces el mensaje que nos da el mango es el servicio desinteresado. El servicio

es el opuesto al ego.

Ignacio, no existe felicidad más grande en el mundo que la que se siente cuando ayudas a terceras personas. El

servicio es dejar de pensar solamente en ti y pensar en los demás. Servicio es preocuparse en el crecimiento y

desarrollo de otras personas.

El maestro ayudó a Ignacio a encontrar su darma, el cual era el de comunicar sus conocimientos y experiencias

sobre la meditación, el control del ego, el servicio, a la comunidad empresarial. Ignacio nunca había hecho una

presentación, pero el gurú le dijo que preparase una presentación racional, con base y llegando a los empresarios

basándose en lo que ellos quieren escuchar, pero siempre dando su mensaje.

Ignacio confesó que tenía miedo, pero el gurú le dijo que el miedo nos viene cuando sentimos que estamos

pidiendo y no sirviendo. Si vamos con amor y desinterés el miedo desaparece.

Así que Ignacio acepto dar su primera presentación y volvería donde el maestro después de esta. Ignacio se

preparó en hacer su conferencia en base a las cuatro semillas que conocía: el autoconocimiento, la meditación, el

control del ego y el servicio.

Cuando llegó el día de la presentación, ya frente al público sentía terror, estaba angustiado, pero puso en práctica

la concentración en su respiración y se calmó, poco a poco tomó confianza y dio una buena conferencia e incluso

logró hacer meditar al público y al final todos lo felicitaron.

En casa del maestro, Ignacio recibió más instrucciones. Tenía que sentir amor y entrega verdadera en cada

momento de su servicio. A medida que logre más éxitos tendría que meditar más.

El maestro le dio la quinta semilla y descifrarían el mensaje cuando haya crecido.

Ignacio fue a su casa y sembró la semilla.

Capítulo 6

La semilla era de girasol.

Ignacio no le tomó mucha importancia a la semilla ya que ese día tenía una reunión importante con su gerente de

marketing, que estaba trabajando en una cuenta importante para la empresa, se trataba de una dependencia del

estado, si salía todo bien la empresa tendría tranquilidad financiera.


El gerente de marketing le propuso de darle una coima al encargado de ventas de la institución estatal como lo

habían hecho en otras ocasiones y el negocio sería seguro, pero Ignacio intuía que no era correcto, pero tenía

dudas porque necesitaba el dinero, así que le pidió un día para pensarlo.

Ignacio le pidió consejo al maestro. Para esto el maestro le hizo preguntas como: ¿cuál es tu objetivo al escalar la

cima de tu vida? ¿Llegar más rápido? ¿Subir más alto que nadie? ¿O vivir en paz y disfrutar el camino?

Obviamente Ignacio quería vivir en paz. El meditar y hacer servicio había hecho que tenga la posibilidad de

cuestionar la intensidad ética de las situaciones.

El maestro descifró la enseñanza de la semilla de girasol diciendo: el girasol nos recuerda que no interesa a qué

circunstancias o problemas nos enfrentemos en la vida, o en qué momento del día nos encontremos, siempre

debemos orientar nuestras decisiones hacia la luz, hacia Dios. Usa la regla de oro: "No le hagas a otros lo que no

quieres que te hicieran a ti". Ahora la semilla de girasol nos permite llevar tu luz por todo tu camino en la vida,

asegurando que el sendero esté iluminado. Disfruta la paz y la tranquilidad, y cosecha los frutos producidos por

vivir éticamente.

El gurú le dio otra semilla envuelta en papel periódico, y le dijo que va a demorar en germinar, pues esto le daría

tiempo para que practique todo lo aprendido. Y que regrese hasta que crezca.

Capítulo 7

Ignacio había seguido dando conferencias, él se sentía muy feliz y realizado, él no cobraba pues era su darma,

ahora tenía claro que su misión en la vida era llevar espiritualidad al mundo empresarial.

A pesar de meditar diario Ignacio se sentía estresado. Quería hacer tanto, pero el día no le alcanzaba y se sentía

totalmente tenso y en descontrol.

Pasaron 6 meses hasta que una mañana notó un brote y supo que se trataba de una planta de pino.

Se dirigió a su oficina, tenía tanto que hacer que por atender a uno desatendía a otros, el tiempo no le alcanzaba,

estaba estresado. Pero en la noche fue a ver al maestro y le contó sus frustraciones con el manejo del tiempo.

El maestro le dijo que sus pérdidas de tiempo vienen disfrazadas de una supuesta importancia. Si su darma es

enseñar espiritualidad en el mundo empresarial, no debía perder tiempo en otras cosas. Debía dar el ejemplo a

sus ejecutivos de sentirse en paz y no estresado corriendo de cita en cita. Tenía que dedicarle tiempo a lo

importante.

Trata de delegar a otros la mayor cantidad de actividades rutinarias, dales confianza y prepara a las personas a

que decidan por su cuenta, no trates de ser el salvador del mundo, no pienses que sin ti no va a funcionar la

empresa. Aprende a soltar el poder egoísta que quiere ser el centro de todo.

El gurú le ayudo a descifrar el mensaje de la semilla, la planta era el pino y nos enseña el perfecto equilibrio en la

vida. Nosotros, como el pino, tenemos ramas que son los diferentes papeles que jugamos en la obra de teatro de

nuestra vida. Debes buscar que, en el largo plazo, un papel no le haga sombra al otro, tal como lo logran las

ramas del pino: todas reciben por igual la energía del sol.

Planifica cada semana de manera que puedas darle tiempo a tus diferentes papeles en la vida. También debes de

alimentarte con alimentos sanos, alimentos rajásicos que te ayudan a actuar todo el tiempo y alimentos sátvicos
que te producen tranquilidad y paz e incrementan tu vitalidad y fuerza. Aquí están los vegetales, las frutas,

productos lácteos y comida fresca.

También debes evitar ver televisión y si quieres enterarte de las noticias lee periódico, así tu puedes elegir que

leer y que no leer. Le pidió que practique y que regrese después de tres semanas de haber aplicado realmente las

enseñanzas y no le entregó semilla alguna.

Capítulo 8

Después de seis semanas Ignacio ya no comía carnes rojas, pero aún pollo y pescado, su dieta era principalmente

vegetariana, había bajado de peso y se sentía más ligero y saludable. También bloqueo su semana, delegó

funciones y se dio cuenta que hacía labores rutinarias que le quitaban tiempo, pero le daba pena dejar de hacer

ciertas actividades que él disfrutaba. Los fines de semana no trabajaba y le dedicaba integro a su familia.

Después de estas seis semanas sentía que no lo hacía perfecto, pero que había avanzado lo suficiente para ir a ver

al maestro. Cuando llegó, toco varias veces la puerta y no le abrieron, parecía que no había nadie. Volvió al día

siguiente y fue lo mismo, nadie abría la puerta, por lo que se animó a tocar la puerta del costado. Salió una señora

que le comunicó que al gurú le atropelló un carro hacía tres semanas y murió.

Ignacio sintió ganas de llorar, no entendía por qué le pasaba esto, justamente cuando estaba mejorando y

progresando, le quitaban su única oportunidad de progresar. Se dio cuenta que estaba pensando en él y no en su

maestro, se dio cuenta que en todo este tiempo se había comportado de una manera egocéntrica y nunca le había

preguntado sobre su vida al maestro, nunca le dijo gracias.

Ignacio fue a su casa y en su jardín se puso a observar sus plantas que eran los únicos recuerdos físicos que le

dejo su gurú. Miró a las plantas y sintió ganas de llorar, recordó su transformación como persona. Recordó todas

las lecciones que su maestro le dio, las enseñanzas de cada semilla, los ejemplos que le daba para que entendiera

mejor. Pensó en cuál sería la séptima semilla. Se puso a meditar en su jardín, esta vez fue especial, sintió un

profundo amor y unidad con el todo. Su pena y su dolor se transformaron en paz y tranquilidad.

Capítulo 9

Pasaron tres semanas desde que se enteró de la muerte de su maestro, ahora Ignacio se dedicaba a dar

conferencias 3 ó 4 veces por semana, y al finalizar lo felicitaban y le daban las gracias sinceramente, este era su

mejor pago.

Ese día al regresar a su casa vio un sobre que le habían dejado, tenía olor a incienso, era de su maestro, así que

la abrió, dejando caer unas semillas. El maestro le decía que un maestro nunca olvida a sus discípulos, él ya no

estaba en el mundo material pero le había dejado esta carta. Le entregaba la séptima semilla, era un árbol de

hunco, que representa la libertad, y le daba el mensaje antes que la plantase.

Le dijo que este árbol tiene la peculiaridad de ser totalmente flexible, soporta vientos huracanados y puede

doblarse y colocarse en posición horizontal. Su flexibilidad le da la libertad total de movimiento, lo único que no se

mueve y es rígido es su raíz. Le explicaba que esta planta tenía más de un mensaje y uno de ellos era el mensaje

de flexibilidad, le dijo que en la vida debemos tener libertad de adaptarnos a los vientos del cambio, ya que en el

plano material todo cambia minuto a minuto, hay que estar dispuesto a cambiar y a ser flexible.
El reto del ser humano es tener el valor de crear nuevos caminos y dejar las rutas conocidas, para mejorar y

crecer. Cambiar significa asumir el riesgo de equivocarse y esto nos hace vulnerable, que es exactamente lo que el

ego no quiere. Tienes que ser sordo a las cosas negativas.

Ignacio se puso a reflexionar y continúo leyendo la carta. El otro mensaje de la semilla es la sabiduría del

desapego. En la superficie el hunco no está apegado a nada, fluye con los vientos y no les ofrece resistencia como

otros árboles rígidos. Los seres humanos debemos ser como el hunco, libres y no arraigados a lo superficial, a los

bienes materiales y a las formas. Nuestro arraigo debe estar en nuestro espíritu.

Ignacio recuerda que el objetivo de esta vida es encontrar ese pedacito de Dios dentro de ti y vivir cada momento

en felicidad y paz. Dios sabe por qué hace las cosas. Todas las circunstancias nos ayudan a crecer, a aprender, y

pone a prueba nuestra capacidad de percibir la paz y la felicidad de la divinidad dentro de nosotros.

Después de un tiempo de leer la carta Ignacio daba conferencias pero sólo llegaba el mensaje a un número

limitado de personas, y pensó en la forma de llegar a un mayor número de gente y decidió escribir un libro. Y dijo:

le pondré como título "El secreto de las siete semillas".

Identificación con la obra.

Desde mi punto de vista la situación de Ignacio no era muy envidiable, personalmente no tomo alcohol en

absoluto y mucho menos fumo, por el contrario ocasionalmente practico deporte, y en lo que respecta a su

costumbre de pasar por encima de lo demás como si la crueldad fuera signo de autoridad, no es algo propio de

alguien con su educación; pero a pesar de esto puedo decir que me siento identificado con la obra en la parte de

el cambio, puesto que no es algo fácil de conseguir, pero cuando lo logras sientes, mucha paz y el maestro que es

representado por un sabio gurú en mi historia fue Jesucristo el que hizo el cambio en mí. También me identifique

con lo que hacía Ignacio al dejar de lado las cosas más importantes de su vida por el trabajo, a mi me pasaba algo

similar por falta de tiempo, me aleje también de las cosas más importantes y esta obra presta ocasiones para

pensar dos veces antes de priorizar.

Aplicación de lo aprendido en el texto.

El texto se aplica en la vida de cada persona, según su interpretación, lo que haría sería tomar el la personificación
de Ignacio para tener en cuenta que la meta de ser ´´alguien´´ no es sino un prototipo erróneo muchas veces de
alguien déspota y si interés pro el bienestar de otros. Lo que en realidad significa llegar a superarse es no solo
elevar el monto de tu cuenta bancaria sino aumentar tu valor como persona, para estar bien con los demás solo
así es como se logra la madurez y también la felicidad. En nuestro caso como estudiantes, seria no solo
preocuparse por llegar a ser profesionales y escalar usando a los demás como peldaños en hacia tu meta, sino
mas bien, siendo conscientes de que es lo principal de un buen profesional y una buena persona.

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