Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
OBJETIVO
identificación de tintes naturales que se obtienen a partir de flores y plantas para revalorizar técnicas
ancestrales.
Definir las técnicas empleadas en el teñido artesanal y las posibilidades que ofrecen los tintes naturales
determinando la obtención de colores naturales según la fibra a teñir y el mordiente a utilizar
Validar procesos ancestrales para que las comunidades no se sientan invadidas con el conocimiento y ellas
sean participes de sus propios cambios
Experimentar con la vegetación de la zona de trabajo y comprobar su eficacia o no para el teñido.
Difundir la metodología de teñido artesanal y las posibilidades que ofrecen los tintes naturales aún en nuestros
días
Determinar las distintas reacciones de los colorantes naturales según la fibra a teñir y el mordiente a utilizar.
Determinar los tintes naturales existentes en la actualidad
HISTORIA
Antes de la invención de las tinturas sintéticas en el siglo XIX, los colores de las tinturas se obtenían de
diferentes elementos de la naturaleza. Hoy, nuestra colaboradora Isabel Infante, fundadora del proyecto
Flor de Chile, nos cuenta sobre cómo este arte está volviendo a sus orígenes y nos da diferentes
ejemplos de especies nativas de Chile. No se pierdan su investigación aquí.
El cambio climático, la contaminación y sus efectos en el planeta, han generado una alerta en muchos de
nosotros y consecuentemente un acercamiento que nos lleva a conocer, entender y volver a hacernos parte
de la naturaleza que nos rodea.
El ámbito textil y tintorero, no ha sido la excepción. En las últimas décadas se ha generado un despertar y
una reacción por conocer y aplicar la tintorería natural para obtener color en pos de una economía circular.
Hasta 1856, cuando William Henry Perkin inventó la tintura sintética o anilina, todos los colores y tintes
se obtenían de la naturaleza. Con la introducción masiva de la anilina al mercado a fines del siglo XIX,
esa tradición se fue perdiendo.
A través de sus componentes vegetales, minerales y animales, el entorno natural nos proporciona una
gama de colores inmensa. Se pueden obtener tonos rojos de la grana cochinilla (Dactylopius coccus Costa),
un parásito que se alimenta de las hojas de nopal en México y que comenzó a exportarse a Europa luego de la
conquista. El color azul, añil o índigo se fabrica tradicionalmente a través del tratamiento de hierbas de la
familia indigofera.
Curiosamente, es una técnica que se desarrolló en los cinco continentes por medio de diferentes
plantas: hay ejemplos del uso tradicional del índigo en Japón, Francia, Laos, Mali y Guatemala. Los
tonos amarillos se pueden lograr de múltiples fuentes, un elemento efectivo y de muy fácil uso es la cúrcuma.
Tonos café y verde se obtienen de una alta variedad de cortezas y hojas. El negro, de pantanos y barros con
un alto nivel de oxidación, así como lo hacen las tintoreras mapuche o en algunos pueblos de Escocia
Trabajar con tintes naturales en nuestra era implica volver a entender el equilibrio ecológico y los ciclos
de la naturaleza que como civilización hemos dejado tan olvidados.
Es decir, el uso de tintes naturales implica tener un profundo conocimiento y respeto del entorno que
nos rodea. De hecho, es conocido que las tintoreras mapuche realizan una invocación de agradecimiento a la
Tierra antes de recolectar barro o plantas para diversos usos. Teñir con elementos de la naturaleza es una
actividad interdisciplinaria que involucra botánica, química y arte, lo que genera un entendimiento holístico del
medio ambiente que a la vez nos lleva a maravillarnos con lo que podemos lograr gracias a la naturaleza y a
querer proteger y cuidar ese ambiente.
CONCLUSIÓN:
La conclusión más importante a la que se pudo arribar fue la confirmación de que aún en la actualidad existen
gran cantidad de tintes en nuestro entorno más cercano y que la mayoría de las fibras naturales son aptas para
este tipo de tintura, a pesar de las diferencias existentes en los procesos de teñido y en la coloración final.
Es importante aprender a identificar las propiedades de cada tinte y conocer su reacción ante las distintas
fibras para de esta manera poder optimizar su utilización, teniendo en cuenta, en todos los casos, los ciclos
vitales de la naturaleza para evitar perjudicarla