lo que significa que aprovechando las tecnologías de información y comunicaciones tienen

una relación con el estado que prioriza el contacto para estrictamente lo necesario,

pudiendo acceder a la totalidad de los servicios ofrecidos por el estado a través de un clic, y

permitiendo centrar esfuerzos en otros aspectos como la educación. Igualmente, cualquier

persona del mundo puede acceder a una ciudadanía digital, esto no lo convierte en

residente, pero si permite acceder a servicio como la creación de empresas en Estonia.

Estonia innova permanentemente, reconociendo que esto trae consigo riesgos y

desafíos e incita a los gobiernos del mundo a que esto sea visto como un reto y no como

una barrera para el desarrollo. La constante búsqueda de innovar y mejorar llevó a Estonia a

convertirse también en país referente en temas de ciberseguridad. Entre de los aspectos a

destacar como elementos de innovación está la gestión de proyectos innovadores en donde

se da una alineación efectiva del talento humano, recursos financieros, recursos

tecnológicos, operacionales o de proceso que genera ventajas competitivas; es así como se

dio por ejemplo el nacimiento de Skype que posteriormente fue adquirida por Microsoft y

de otros muchos emprendimientos que han transformado la vida de las personas.

Igualmente, ha desarrollado otro elemento para la innovación y es la gestión del

conocimiento, desde muy chicos los niños aprenden habilidades como la programación y la

robótica que combinados con otras habilidades como el arte y la cultura hacen que

desarrollen destrezas que han permitido a Estonia tener uno del más altos índices de

emprendedores del mundo, esto sin duda repercute en el desarrollo del país, una ecuación

que debe ser adaptada a países latinoamericanos como el nuestro.

 Documentar y justificar, la iniciativa de la agenda Colombia 2030 o Ministerio de las

Tecnologías de la Información y las Comunicaciones, que tendría en cuenta como

oportunidad de innovación.

El libro verde 2030 que Colciencias le muestra al país y describe el gran paso para la

renovación de la política nacional de ciencia e innovación y tecnología, desarrollando su

nivel estratégico mediante la definición de unas bases conceptuales, principios y rutas para

la acción pública, así como interacciones entre los diversos actores del Sistema Nacional de

Ciencia, Tecnología e innovación (SNCTI). Esta política, cuyo propósito central es

contribuir en la solución de los grandes desafíos sociales, económicos y ambientales que

enfrenta nuestro país y que se consideran expresados en los Objetivos de Desarrollo

Sostenible (ODS) de la Agenda 2030 de las Naciones Unidas adoptada por el país como

una ruta para el desarrollo sostenible en el mediano y largo plazo.

Los Objetivos de Desarrollo Sostenible, al enfocarse en gran parte de las problemáticas

más complejas que enfrenta el mundo actualmente y Colombia en particular, representan un

reto fundamental para la política pública, lo que busca encaminar al país en una trayectoria

sostenible del desarrollo.

De acuerdo con la política de ciencia e innovación para el desarrollo sostenible, una

oportunidad para canalizar los recursos y poder hacer un buen aprovechamiento en el área

de I+D+I, es hacer un análisis de las tendencias tecnológicas actuales, identificar las 10 más

relevantes y que hayan logrado cierto grado de madurez y sobre ellos construir

lineamientos que permitan definir estándares de innovación enfocados a la sostenibilidad,

iniciar el proceso de apropiación de esas tendencias y poder realizar una buena

transferencia tecnológica.