Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
DERECHO LABORAL I
ARTÍCULO 1851. El que obrando ilícitamente cause daño a otro, está obligado a
repararlo, a menos que demuestre que el daño se causó como consecuencia de
culpa o negligencia inexcusable de la víctima. Es ilícito todo hecho realizado en los
términos del artículo 1806.
ARTÍCULO 1852. El incapaz que cause daño debe repararlo, salvo que la
responsabilidad recaiga en las personas a que se refieren los artículos 1856 y
1857.
ARTÍCULO 1853. Cuando, sin dolo o culpa, dos o más personas se causen daños
mutuamente, cada una soportará los que hubiere recibido, sin derecho a
reparación ni indemnización alguna.
ARTÍCULO 1854. Las personas que causen en común un daño, serán
responsables solidariamente hacia la víctima, por la reparación a que están
obligadas de acuerdo con las disposiciones de este capítulo.
ARTÍCULO 1855. Cuando al ejercitar un derecho se cause daño a otro, hay
obligación de indemnizarlo, si se demuestra que se obró con abuso del derecho, o
si éste sólo se ejercitó para causar el daño, sin utilidad para su titular.
SECCIÓN SEGUNDA
DE LA RESPONSABILIDAD POR HECHOS AJENOS
ARTÍCULO 1856. Los que ejerzan la patria potestad o la tutela, tienen obligación
de responder de los daños y perjuicios causados por los actos de los incapaces,
que estén bajo su poder y su cuidado y que habiten con ellos.
Cesa la responsabilidad a que se refiere el párrafo anterior, cuando los menores o
mayores incapaces ejecuten los actos que dan origen a ella, encontrándose bajo
la vigilancia y la autoridad de otras personas.
ARTÍCULO 1857. Los directores de internados, de colegios, de talleres, los
maestros de aquéllos y éstos y los directores de hospitales y manicomios, son
responsables de los daños y perjuicios que causen los menores o mayores
incapaces, que estén bajo su cuidado y mientras dure éste.
ARTICULO 1858. Las personas a quienes los dos artículos anteriores imponen la
reparación del daño causado por incapaces a su cuidado, se liberan de esa
obligación, si prueban que les fue imposible evitar el daño y que cuidaron y
vigilaron diligentemente al autor de éste, quien en tal supuesto será el único
deudor de la responsabilidad civil.
ARTÍCULO 1859. Los maestros artesanos son responsables de los daños y
perjuicios causados por sus peones, operarios y aprendices, en la ejecución de los
trabajos que les encomienden.
ARTÍCULO 1860. Los patrones y los dueños de establecimientos industriales o
mercantiles o de cualquier medio de transporte, están obligados a responder de
los daños y perjuicios causados por sus obreros o dependientes en el ejercicio de
su trabajo.
ARTÍCULO 1861. Los jefes de casa y los dueños de hoteles o casas de hospedaje
están obligados a responder de los daños y perjuicios causados por sus sirvientes
en el ejercicio de su encargo.
ARTÍCULO 1862. Las personas que ejercen profesiones técnicas o liberales,
están obligadas a responder de los daños y perjuicios causados en el desempeño
de su encargo, por sus auxiliares, ayudantes, colaboradores, pasantes,
enfermeros o empleados.
ARTÍCULO 1863. En los casos previstos por los cuatro artículos anteriores, el que
sufre el daño puede exigir la reparación directamente del responsable, en los
términos de este capítulo, subsistiendo, sin embargo, la responsabilidad solidaria
de las personas a que se refieren tales artículos.
ARTÍCULO 1864. Las personas morales son responsables de los daños y
perjuicios que causen sus representantes legales o convencionales en el ejercicio
de sus funciones.
ARTÍCULO 1865. El Estado y los municipios tienen obligación de responder de los
daños causados por sus trabajadores, empleados o funcionarios, en el ejercicio de
las actividades o labores que les estén encomendadas.