Consiste en la caída generalizada del nivel de los precios de bienes y servicios
que conforman la canasta familiar o, lo que es lo mismo, el conjunto representativo de bienes y servicios que con mayor frecuencia adquieren los hogares y que representan un gasto importante en el consumo total. Suele estar causada por la disminución de la demanda, lo cual representa un problema mucho más grave que la inflación, desde el punto de vista de que una caída de la demanda significa una caída general de la Economía.
Escenarios inflacionario y deflacionario
Escenario alcista En este escenario, la economía mundial y los mercados de capitales volverían rápidamente a la normalidad del mundo pre COVID-19 con un crecimiento moderado y baja inflación, como resultado de la aparición de una vacuna exitosa. La economía y los mercados se readaptarían rápidamente y se producirían pocas disrupciones permanentes, ya que las líneas aéreas, los hoteles y otros sectores vulnerables lograrían sobrevivir. Escenario base El crecimiento económico volvería en la segunda mitad de 2020 y tendería gradualmente a la normalidad. La desglobalización, los persistentes brotes del COVID-19 y el comportamiento más precavido de consumidores y empresas dificultarían el crecimiento. La inflación empezaría baja y volvería a subir alcanzando la tendencia inicial. Estancamiento Este escenario sería una combinación de crecimiento lento y baja inflación. La economía saldría de la recesión inducida por la pandemia con un fuerte crecimiento, que disminuiría rápidamente y continuaría a un nivel bajo. Estanflación Se proyectaría una combinación de una recesión profunda seguida de un crecimiento bajo y una inflación ascendente. Las restricciones de la oferta limitarían el crecimiento y, en última instancia, desencadenarían presiones inflacionistas. Los bancos centrales lucharían con la dirección que debe tomar la política monetaria: o bien tipos de interés más altos para luchar contra la inflación o tipos de interés más bajos para estimular la economía. La curva de Phillips: inflación y desempleo La curva de Phillips es una representación gráfica que muestra la relación entre desempleo e inflación. Establece que un aumento del desempleo reduce la inflación y viceversa, la disminución del desempleo se asocia con una mayor inflación. Es decir, la curva de Phillips pone de manifiesto que no se puede conseguir al mismo tiempo baja inflación y alta tasa de empleo. ¿Por qué? Porque cuanto mayor sea la demanda agregada, mayor será la tensión de los precios, por lo que estos subirán, mientras disminuye el desempleo.