A lo largo de nuestras vidas podemos practicar muchos valores, tal y como lo fue
hace 75 años cuando las delegaciones japonesas y aliadas firmaron la rendición
incondicional de Japón poniendo fin a la segunda guerra mundial. Reciban un cordial saludo de paz y bien licenciada Xiomara Olivares y compañeros; mi nombre es Jonathan Eduardo Cerna Palacios y continuación presentare mi disertación sobre el final de la segunda guerra mundial. La historia ha sido marcada icónicamente por enfrentamientos bélicos en diferentes partes del mundo, la segunda guerra mundial es una de ellas, en este enfrentamiento militar global, el más grande de la historia, se enfrentaron dos bandos: los Aliados (Francia, Polonia, Reino Unido, La Unión Soviética, China y Estados Unidos), y las Potencias del Eje (Alemania, el Imperio de Japón y el Reino de Italia). Comenzando asi con la invasión de Hitler a Polonia en 1939. Este conflicto se desarrolló entre 1939 y 1945 con más de cien millones de soldados movilizados, Marcada por hechos de enorme repercusión que incluyeron la muerte masiva de civiles el Holocausto, los bombardeos intensivos sobre ciudades y el uso, por única vez, de armas nucleares en un conflicto militar la Segunda Guerra Mundial fue la más mortífera de la historia con un resultado de entre 50 y 70 millones de víctimas, el 2,5 % de la pobl-ación mundial Desde finales de 1939 hasta inicios de 1941, merced a una serie de fulgurantes campañas militares y la firma de tratados, Alemania conquistó o sometió gran parte de la Europa continental. En virtud de los acuerdos firmados entre los nazis y los soviéticos, la nominalmente neutral Unión Soviética ocupó o se anexionó territorios de las seis naciones vecinas con las que compartía frontera en el oeste. El Reino Unido y la Commonwealth se mantuvieron como la única gran fuerza capaz de combatir contra las potencias del eje en el Norte de África y en una extensa guerra naval. En junio de 1941 las potencias europeas del eje comenzaron la invasión de la Unión Soviética, iniciando así la más extensa operación de guerra terrestre de la Historia, en la que desde ese momento se empleó la mayor parte del poder militar del Eje. En diciembre de 1941 el Imperio del Japón, que había estado en guerra con China desde 1937 y pretendía expandir sus dominios en el Sudeste Asiático, atacó a los Estados Unidos y a las posesiones europeas, francesas, británicas y neerlandeses en Asia y el océano Pacífico, conquistando rápidamente gran parte de la región. La guerra acabó con una victoria total de los aliados sobre el eje en 1945 y la liberación de los prisioneros en campos de exterminio. La guerra en Europa terminó con la captura de Berlín por tropas soviéticas y polacas y la consiguiente rendición incondicional alemana el 8 de mayo de 1945. La Armada Imperial Japonesa resultó derrotada por los Estados Unidos y la invasión del archipiélago japonés se hizo inminente. Tras el bombardeo atómico sobre Hiroshima y Nagasaki por parte de los Estados Unidos y la invasión soviética de Manchuria, la guerra en Asia terminó el 15 de agosto de 1945 cuando Japón aceptó la rendición incondicional. Entendiendo así que las guerras no son ni más ni menos que un acto egoísta de ser humando por territorios o por simple economía en el tráfico de armento, San Francisco comprendió esto e inculco en las personas la solidaridad, el dialogo, la paz y el amor, siendo estos la mejor arma para prevenir todo conflicto. No obstante, muchas personas prefieren utilizar la violencia en actos inhumanos forzando sus objetivos a cumplirse, creando así un futuro con una historia manchada, aunque se dice “se hizo justicia” ¿pero? ¿realmente esto es correcto? ¿logras sus metas a base de sangre inocente? También se dice “el tiempo pasa su factura” y he aquí su factura con una sociedad rota, dividida en su gran mayoría.
En busca de formas de superar y olvidar la tragedia surgen auges musicales, y
motivadores siendo uno de los compositores y cantes Jimii Hendrix, que una vez dijo: “cuando el poder de el amor sobrepase el amor al poder, el mundo conocerá la paz” Muchas gracias, paz y bien