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CANNABIS Y SU USO MEDICINAL EN EL TRATAMIENTO DEL DOLOR

Yahaira Lissett Hernández Arroyo


Diplomado en Cannabis Medicinal

La cannabis sativa mejor conocida como “marihuana” ha sido utilizada por el ser
humano desde la prehistoria según registros, estimando el uso médico desde hace 20
siglos en la antigua China, Grecia, Israel e India. En la actualidad se han realizado
varios estudios de la influencia de la planta en el organismo conociendose más de 400
compuestos, llamados cannabinoides, los más conocidos y estudiados son el Δ-9-
tetrahidrocanabinol (THC) el principal componente psicoactivo del cannabis y el
cannabidiol (CBD) además de estructuras tipo flavonoide y terpenoide que influyen de
distinta manera en el sistema endocannabinoide, dicho sistema se integra de
receptores cannabinoides, ligandos endógenos como la anandamida (N-
araquidonoiletanolamina) y 2-araquidonilglicerol (2-AG) y las enzimas involucradas en
la síntesis y degradación de dichos ligandos.

En medio de discusiones en distintos países para la despenalización y legalizaciòn de


la planta en sus distintos usos la industria farmaceutica se encuentra en constante
búsqueda de aprovechar el potencial medicinal de la cannabis pero buscando la forma
de contrarrestrar los efectos psicoactivos de la misma, siendo mayormente extractos
con un porcentaje muy bajo y estrictamente controlado de THC los que son utilizados
por los pacientes. Derivado de las investigaciones suelen ser mínimos los
padecimientos donde es más conveniente el uso de vaporizaciones de la planta debido
a su asociación con un mayor riesgo de efectos adversos neurológicos y posibilidad de
dependencia o una creación del hábito.

Se han realizado numerosas investigaciones que describen casos de intervención con


cannabis en pacientes con distintos padecimientos y niveles de dolor como migraña,
dismenorrea, cólicos menstruales, dolor postoperatorio, dolor oncológico u otros tipos
de dolor neuropático, en donde se describe mejoría en la percepción del dolor y
disminución de la necesidad de medicamentos y opioides con la administración de
cannabis en su forma tópica, sublingual u oral. Los cannabinoides influyen
positivamente en el dolor que causan las enfermedades autoinmunes crónicas debido a
sus propiedades analgésicas como en la de la inflación que suele ser la principal
causa.
Ademas de los cannabinoides estudiados de la planta de cannabis también se
encuentran los terpenos que son moléculas biológicamente activas que de igual
manera aportan efectos en el organismo ademas de olor y sabor.
Respecto a dolores relacionados a neuropatìa y artritis son las variedades de cannabis
con un contenido alto en el terpeno betacarifileno que pueden resultar de mayor
utilidad; una combinación de dicho terpeno con cannabidiol (CBD) que es el compuesto
mayor conocido por sus propiedades analgésicas y antiinflamatorias administrado
oralmente constituye una excelente opción de tratamiento para el dolor crónico.

Retomando el artículo “Cannabis en el tratamiento del dolor crónico no oncológico”


concuerdo con los resultados finales que describe la autora en la que los
cannabinoides ofrecen en la actualidad una opción importante para pacientes con dolor
derivado de cualquier padecimiento al permitir disminuir su exposición a medicamentos
y opioides que ademas no han tenido respuesta a la administración de estos. El
cannabis permite también ser una opción noble, eficaz y segura, siempre acompañada
de un monitoreo medico y profesional que permita una correcta dosificación en base a
la historia clinica del paciente además de evaluar la evolución del paciente y los signos
que presenta en el dolor.

Se destaca que sea un profesional de la cannabis y el sistema endocannabinoude


quien maneje la administración del cannabis como auxiliar pues su uso aún con un
enfoque médico también ha reportado efectos adversos tales como fatiga,
somnolencia, mareo y debilidad siendo bien tolerados a causa de su nivel leve a
moderado, signo de que debe realizarse un ajuste a la dosis que se administra.

Bibliografìa:

Durán, M., & Capellá, D. (2005). Cannabis y canabinoides en el tratamiento del


dolor neuropático. Dolor, 20, 1.

Monroy-Álvarez, C. J., Garduño-López, A. L., Gaspar-Carrillo, S. P., Nuche-


Cabrera, E., & Ayón-Villanueva, H. (2016). Cannabinoides en dolor crónico.
¿ Alternativa o riesgo?. Revista Mexicana de Anestesiología, 39(S1), 11-13.

Muñoz, E. (2015). Cannabis en el tratamiento del dolor crónico no


oncológico. Rev Hosp Clín Univ Chile, 26, 138-47.

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