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El Niño Solo de Gabriela Mistral

Como escuchase un llanto, me paré en el repecho


y me acerqué a la puerta del rancho del camino.
Un niño de ojos dulces me miró desde el lecho.
¡Y una ternura inmensa me embriagó como un vino!

La madre se tardó, curvada en el barbecho;


el niño, al despertar, buscó el pezón de la rosa
y rompió en llanto... Yo lo estreché contra el pecho,
y una canción de cuna me subió, temblorosa...

Por la ventana abierta la luna nos miraba.


El niño ya dormía, y la canción bañaba,
como otro resplandor, mi pecho enriquecido...

Y cuando la mujer, trémula, abrió la puerta,


me vería en el rostro tanta ventura cierta
¡que me dejó el infante en los brazos dormido!

Gabriela Mistral (Vicuña, Chile, 7 de abril de 1889 - Nueva York,


Estados Unidos, 10 de enero de 1957). Escritora y premio Nobel de
Literatura en 1945. Su verdadero nombre es Lucila de María del
Perpetuo Socorro Godoy Alcayaga, más conocida por su seudónimo
Gabriela Mistral, utilizado por primera vez en el poema «Del
pasado» publicado en diario «El Coquimbo» en 1908.
El Enamorado de Jorge Luis Borges

Lunas, marfiles, instrumentos, rosas,


lámparas y la línea de Durero,
las nueve cifras y el cambiante cero,
debo fingir que existen esas cosas.

Debo fingir que en el pasado fueron


Persépolis y Roma y que una arena
sutil midió la suerte de la almena
que los siglos de hierro deshicieron.

Debo fingir las armas y la pira


de la epopeya y los pesados mares
que roen de la tierra los pilares.

Debo fingir que hay otros. Es mentira.


Sólo tú eres. Tú, mi desventura
y mi ventura, inagotable y pura.

(Buenos Aires, 1899 - Ginebra, Suiza, 1986)


Escritor argentino considerado una de las grandes
figuras de la literatura en lengua española del
siglo XX. Cultivador de variados géneros, que a
menudo fusionó deliberadamente, Jorge Luis
Borges ocupa un puesto excepcional en la historia
de la literatura por sus relatos breves.
Te Quiero de Mario Benedetti

Tus manos son mi caricia si te quiero es porque sos


mis acordes cotidianos mi amor mi cómplice y todo
te quiero porque tus manos y en la calle codo a codo
trabajan por la justicia somos mucho más que dos

si te quiero es porque sos


y por tu rostro sincero
mi amor mi cómplice y todo
y tu paso vagabundo
y en la calle codo a codo
somos mucho más que dos y tu llanto por el mundo
porque sos pueblo te quiero
tus ojos son mi conjuro
contra la mala jornada y porque amor no es aureola
te quiero por tu mirada ni cándida moraleja
que mira y siembra futuro y porque somos pareja
que sabe que no está sola
tu boca que es tuya y mía
tu boca no se equivoca
te quiero porque tu boca te quiero en mi paraíso
sabe gritar rebeldía es decir que en mi país
la gente viva feliz
aunque no tenga permiso

si te quiero es porque sos


mi amor mi cómplice y todo
y en la calle codo a codo
somos mucho más que dos.

(Paso de los Toros, 1920 - Montevideo, 2009) Escritor


uruguayo. Mario Benedetti fue un destacado poeta,
novelista, dramaturgo, cuentista y crítico, y, junto con Juan
Carlos Onetti, la figura más relevante de la literatura
uruguaya de la segunda mitad del siglo XX y uno de los
grandes nombres del Boom de la literatura
hispanoamericana. Cultivador de todos los géneros, su obra
es tan prolífica como popular; novelas suyas como La
tregua (1960) o Gracias por el fuego (1965) fueron
adaptadas para la gran pantalla, y diversos cantantes
contribuyeron a difundir su poesía musicando sus versos.
Me Gusta Cuando Callas de Pablo Neruda

Me gustas cuando callas porque estás como ausente,


y me oyes desde lejos, y mi voz no te toca.
Parece que los ojos se te hubieran volado
y parece que un beso te cerrara la boca.

Como todas las cosas están llenas de mi alma


emerges de las cosas, llena del alma mía.
Mariposa de sueño, te pareces a mi alma,
y te pareces a la palabra melancolía.

Me gustas cuando callas y estás como distante.


Y estás como quejándote, mariposa en arrullo.
Y me oyes desde lejos, y mi voz no te alcanza:
déjame que me calle con el silencio tuyo.

Déjame que te hable también con tu silencio


claro como una lámpara, simple como un anillo.
Eres como la noche, callada y constelada.
Tu silencio es de estrella, tan lejano y sencillo.

Me gustas cuando callas porque estás como ausente.


Distante y dolorosa como si hubieras muerto.
Una palabra entonces, una sonrisa basta.
Y estoy alegre, alegre de que no sea cierto.

Ricardo Eliecer Neftalí Reyes Basoalto, conocido


mundialmente como Pablo Neruda, nace el 12 de julio de
1904, en la ciudad de Parral, situada en la región central de
Chile. Fue hijo único del matrimonio formado por
el conductor de ferrocarril, don José del Carmen Reyes
Morales y por la maestra doña Rosa Basoalto, quien muere
dos meses después del nacimiento del poeta. A los dos
años, éste se va a vivir a la ciudad sureña de Temuco,
donde el padre contrae matrimonio en segundas nupcias
con doña Trinidad Candia Marverde, a quien Neruda le
dedicará su poema “La Mamadre”.
Apremio de Octavio Paz

Corre y se demora en mi frente


lenta y se despeña en mi sangre
la hora pasa sin pasar
y en mí se esculpe y desvanece

Yo soy el pan para su hambre


yo el corazón que deshabita
la hora pasa sin pasar
y esto que escribo lo deshace

Amor que pasa y pena fija


en mí combate en mí reposa
la hora pasa sin pasar
cuerpo de azogue y de ceniza

Cava mi pecho y no me toca


piedra perpetua que no pesa
la hora pasa sin pasar
y es una herida que se encona

El día es breve la hora inmensa


hora sin mí yo con su pena
la hora pasa sin pasar
y en mí se fuga y se encadena

(Ciudad de México, 1914 - id., 1998) Escritor mexicano. Junto


con Pablo Neruda y César Vallejo, Octavio Paz conforma la
tríada de grandes poetas que, tras el declive del modernismo,
lideraron la renovación de la lírica hispanoamericana del siglo
XX. El premio Nobel de Literatura de 1990, el primero
concedido a un autor mexicano, supuso asimismo el
reconocimiento de su inmensa e influyente talla intelectual,
que quedó reflejada en una brillante producción ensayística.
Nashville School
Antología

Clase: español

Maestra: Elsy Godoy

Estudiante: Melany Dubón

Grado/Sección: 10 “A”

“Las personas lógicas se adaptan a las circunstancias. Las personas sin lógica
adaptan las circunstancias a su propia inteligencia. Por eso, las personas sin
lógica son las únicas capaces de crear progreso en una sociedad.”
Índice

El niño solo; Gabriela Mistral………………………………………………………………………….. 1


El enamorado; Jorge Luis Borges…………………………………………………………………….. 2
Te quiero; Mario Benedetti…………………………………………………………………………….. 3
Me gusta cuando callas…………………………………………………………………………………… 4
Apremio; Octavio Paz……………………………………………………………………………………… 5

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