ZAIDA DEL RÍO

“Salud y paz
interior le pido
a la vida”
En exclusiva para
BOHEMIA,,
BOHEMIA
la multifacética
artista comparte
sueños y motivaciones
que la inquietan
a diario
Por SAHILY TABARES
Fotos: YASSET LLERENA Ella es su universo creativo.
ALFONSO

S una de las figuras que todo de sí, dado su tempera-

E dan un perfil particular

a la generación pictórica
de los años 70; en dos décadas
mento franco.
Tras graduarse del Instituto
Superior de Arte cultiva en
sucesivas de trabajo logra el cada pieza maneras propias
tránsito por diferentes etapas de ser y de hacer. Ha recibido
y evoluciona hacia formas que varios galardones, de ellos for-
continúan siendo muy suyas, man parte la Medalla de Oro en
sin dejar de asumir esa com- la Bienal del Cairo, Egipto; y el
plejidad barroca de tan larga Premio de Pintura en la Bienal
tradición en la pintura cubana. de Tenri, en Japón. Su obra se
Zaida del Río (Guadalupe, expone en los principales mu-
Villa Clara, 1954) sorprende, seos del mundo y realizó más
ante todo, por la versatilidad de 30 exposiciones personales
de su obra orientada hacia en los Estados Unidos, México,
varias manifestaciones artísti- España, India, Brasil y otros
cas, en las que encuentra múl- países.
tiples satisfacciones. La poesía Conversamos en su amplia
que cultiva está ligada umbi- casona, en el barrio habanero
licalmente a su praxis como del Vedado, donde el hogar es
dibujante, grabadora y pinto- una interminable galería, la
ra. ¿Influencias? Apreciamos cual propicia desandar algunos
nexos de parentesco concep- de sus caminos, imposible abar-
tual con el ruso Marc Chagall, carlos todos debido al incesante
el cubano Eduardo Abela, el fogueo que sostiene mediante
malagueño Pablo Picasso… Cada nueva serie tiene sueños, ideas, pensamientos.
Pero siempre es ella misma, la impronta particular Habla despacio, pero con
auténtica, pasional; entrega de lo recién descubierto. la energía propia de quien
18 22 de octubre de 2021
nunca descansa: “Estudio mu-
cho. Desde el inicio me intere-
Guadalupe
saron los temas campesinos
Allí tuve mi nido
porque soy una campesina. De
en las sombras profundas y el susto de los venados.
cerca he conocido el trabajo
Allí tuve mi desnudez entre los bienvestidos
diario, los árboles, los anima-
y el musgo de las aguas azules.
les, los guateques, las costum-
Espíritus familiares,
bres en general. Me propuse
Rostros llenos de alegría se confunden en las
enseñar cómo viven y aman las
noches /mías
personas de esos terruños, sus
y el cuerpo traspasa la niebla
gestos, sus preocupaciones.
con la ingravidez de un dios.
Poco a poco he construido rei-
Mi voz es dulce cuando hablo de Guadalupe,
nados en los que lideran caba-
flor de mi conciencia.
llos, un gran zoo, para dar paso
(De su libro Calidoscopio, publicado por la
a otras motivaciones”.
editorial Capiro).
Fabulaciones infinitas
Al parecer, nunca olvida. Pue-
de volver fácilmente atrás,
a los tiempos intensos de la transitar. ¿Ella los intuye? Tal revela sin abandonar la fuerza
academia donde descubrió vez su filosofía lidera en ese de sus intensidades para bus-
la magnitud de una imagina- tránsito. “He vivido para el arte car, seducir, viajar al centro de
ción prolífera. Fueron sus profe- que es mi vida”. Puede parecer la intimidad, de lo raigal todavía
sores José Luis Posada, Nelson redundante su aseveración, pe- ignoto.
Rodríguez, Tomás Sánchez. ro tiene el sentido intenso de “Amo a los seres que no se
Se emociona al decir: “Car- Zaida del Río. han detenido, que nunca han
melo González siempre me de- dejado de crear. Durante la
fendió mucho, dijo que yo iba a Nuevas metamorfosis pandemia ni el dolor ni la triste-
ser una gran artista”. Para ella el cambio es algo ne- za me han detenido”, afirma.
En seguida cuenta sobre las cesario. Investiga, lee, respira Podríamos repasar cada una
series de larga vida en la me- atmósferas desconocidas y las de las etapas de su fructífera
moria. Nombra las aves-muje-
res, los hombres-aves, que solo
pueden encontrar anteceden-
tes semejantes en la literatura
y en el arte de la antigüedad. La
existencia, los gestos de estos
“personajes” se han ido rela-
cionando con situaciones de la
vida y aparecen tomando un
baño, mirando al cielo, en las
posiciones más variadas.
La voz de esta creadora
conserva ímpetus que crecen
a raudales. Incluso interiorizó
tanto la vitalidad de tales seres
que actuó en un performance.
Para ejecutarlo le resultaron
útiles las lecciones de danza
moderna bien aprendidas.
Nada escapa al curso de su di-
námico andar. Rememora Cora-
zonadas, serie en la que los
desnudos están dibujados con
facilidad, los ilumina cierto ángel
Zaida del Río
picassiano propio de esta mujer creó
libre, dispuesta siempre a fundar el empaque
territorios, cauces, nexos. del perfume
Colores, texturas, líneas, La bella
abren senderos nuevos por cubana.
Año 113/No. 31 19
vida profesional, pero es tal
su energía que invita a seguir,
una, otra vez. Su obra es un
ejemplo de diversidad dentro
de la unidad. No hay uno de
sus caminos que no conduz-
ca a ella misma. Puede posar
al lado de sus piezas, contar
anécdotas, llamar la atención
sobre algún detalle y en todo
ese instante mantiene los mis-
mos anhelos.
“Salud y paz interior le pido a
la vida. Que no entre la amargu-
ra en mi corazón. Necesito que
mi corazón esté libre para dar
amor al prójimo. Añoro tener
la inspiración que nunca me
abandona, que no me falten los
amigos”.
Tampoco olvida su propio
método de enseñanza.
“Cuando he trabajado con
niños, en mis clases les hablo Detalles que la
del arte y de todo. Quienes en- emocionan.
señan deben tener presente
que nuestra carrera es muy
larga, con ellos deben comen-
zar como jugando para que no
traten de pensar como viejos
ni quieran pintar como los
mayores”.
En cada palabra, luz o color,
Zaida irradia cubanía. La plas-
ma en platos, jarrones, lienzos,
ilustraciones. El pensar para
ella es una distracción muy
seria. Infinitas preguntas la
inundan, de alguna manera las
lleva a sus libros de poesía o a
la música.
“El disco De mi padre lo
aprendí es una deuda que tenía
con él. La propia selección del
repertorio lo demuestra, pues- El disco producido por Unicornio (Producciones Abdala) es un viejo
to que canto temas clásicos: sueño logrado.
Amorosa guajira, Longina,
Santa Cecilia, Sitiera. Agra-
dezco, en particular, la ayuda Zaida del Río de vuelta a su raíz
sistemática de Silvio Rodríguez, A música en ella proviene de caudales familiares y
y las palabras escritas por Oni
Acosta Llerena”, comenta.
“L está rodeada por tradiciones que rozan los espacios
afines a ellos. Desde el amanecer, el rocío, el gallo que no
¿Añoranzas?, indago. cesa de cantarnos, la siembra o el convite espontáneo de
“Me place que mi hijo juglares cada noche. Su canto es la rebeldía que nos lleva a
Cristian siga mis pasos en la creer en el arte puro sin edulcorantes, lo casuístico sobre la
pintura, pronto expondremos irrelevancia de volver siempre a donde pertenece”.
juntos. También me gustaría (Fragmento de las palabras de presentación al dis-
interpretar un personaje en el co De mi padre lo aprendí, por el musicólogo Oni Acosta
cine. Creo que todavía no he Llerena).
hecho la obra de mi vida”.
20 22 de octubre de 2021