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BOGOTÁ
2017.
2
CODIGO: 2013208121
Director
Ingeniero Forestal
BOGOTÁ
JUNIO DE 2017
3
Contenido
INTRODUCCIÓN ................................................................................................................ 11
JUSTIFICACIÓN ............................................................................................................. 13
1. OBJETIVOS ..................................................................................................................... 15
3. METODOLOGIA ............................................................................................................. 28
4. RESULTADOS ................................................................................................................ 41
7. CONCLUSIONES ............................................................................................................ 61
8. RECOMENDACIONES .................................................................................................. 62
BIBLIOGRAFÍA .................................................................................................................. 63
ANEXO A. ........................................................................................................................... 66
ANEXO B. ........................................................................................................................... 69
5
LISTA DE TABLA
Tabla 4: Temperatura máxima y mínima promedio mensual [C°] estación tibaitatá convencional . 42
Tabla 5: Humedad relativa [%] promedio mensual estación Tibaitatá Automática – convencional 43
Tabla 6: Velocidad promedio mensual del viento [m s-1] estación tibaitatá convencional. ............ 43
Tabla 7: Insolación directa promedio mensual (horas) estación tibaitata convencional .................. 43
Tabla 8: Radiación solar [MJ. m-2. día-1] estación tibaitata convencional. .................................... 43
Tabla 9: Duración en días de cada etapa para el cultivo de Lechuga Batavia. ................................. 44
Tabla 11: Factor de respuesta de la productividad de acuerdo a la etapa de desarrollo del cultivo . 45
Tabla 21: Estimación huella hídrica verde para lechuga batavia. .................................................... 53
Tabla 24: Estimación huella hídrica total para lechuga batavia ....................................................... 55
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LISTA DE ILUSTRACIÓNES
Ilustración 2: Infraestructura del canal tibaitata y las compuertas deslizantes, Distrito de riego y
drenaje “La Ramada” ........................................................................................................................ 23
Ilustración 4: Preparación del suelo con tractor en la seccional ICA C.I Tibaitata ......................... 26
Ilustración 5: Cultivo de lechuga Batavia etapa inicial en la seccional ICA C.I Tibaitatá. ............. 26
Ilustración 6: Cultivo de lechuga Batavia etapa final y cosecha en la seccional ICA C.I Tibaitata 27
LISTA DE ECUACIONES
Ecuación 4: Precipitacion efectiva (PPef) método USDA S.C.S precipitacion meno o igual a
250 mm ............................................................................................................................... 30
Ecuación 5: Precipitacion efectiva (PPef) método USDA S.C.S precipitacion mayor a 250
mm ........................................................................................................................................ 30
𝛼 Fracción de lixiviación.
ADT Agua total disponible en el suelo.
AR Aplicación estimada de productos químicos. [𝐾𝑔. ℎ𝑎 −1 ]
C° Grado Celsius
CWU Requerimientos hídricos del cultivo. [𝑚3 . 𝑡𝑜𝑛−1 ]
CWU Verde Requerimiento hídricos o uso consuntivo de agua verde. [𝑚3 . 𝑡𝑜𝑛−1 ]
CWU riego Requerimientos de riego del cultivo. [m]
C Max Concentración máxima aceptable de contaminantes. [𝐾𝑔. 𝑚−3 ]
RESUMEN
El presente trabajo de investigación tiene por objeto la determinación del volumen de agua
requerida durante el proceso vegetativo siembra indirectas - cosecha de la lechuga Batavia a
través de la huella hídrica azul, verde y gris. Se realizó en la seccional CORPOICA C.I
Tibaitatá, ubicada en el Km 14 Vía Bogotá – Mosquera; en un área cosechada de 1.286
hectáreas con 3 600 plántulas, regadas con agua del distrito de riego y drenaje ´La Ramada´,
a partir de datos meteorológicos y agronómicos teniendo en cuenta condiciones hídricas y de
suelo.
Para las estimaciones se empleó la metodología propuesta por la Water Footprint Network
(WFN) y la tesis “Estimación de la Huella hídrica de cultivos con potencial bioenergética en
la Provincia de Limarí, Región de Coquimbo, Chile.” de Barros, 2012. La WFazul y WFVerde
se calculó por medio de balance hídrico y la WFGris con una aproximación de la cantidad de
fertilizantes aplicados al cultivo y el porcentaje de cada compuesto químico.
Como resultado de la investigación tenemos una huella hídrica total del cultivo de 2,113
𝒎𝟑 𝒕𝒐𝒏−𝟏 , distribuida en los siguientes componentes: WFVerde 0.892 𝒎𝟑 𝒕𝒐𝒏−𝟏 , WFAzul 0,281
𝒎𝟑 𝒕𝒐𝒏−𝟏 y WFGris 0,94 𝒎𝟑 𝒕𝒐𝒏−𝟏 . Estos datos son producto de la combinación del rendimiento
del huerto extensivo y regulación de la plántula por lámina de agua, lo que significa que más
del 74 % del agua necesaria para satisfacer el CWU debe ser suministrada por precipitación y
el 25 % restante se suplirá con riego por aspersión; por otra parte debido a las prácticas
agrícolas empleadas y características edafológicas del suelo, el componente gris cuenta con
el mayor valor, con evidencia en el desequilibrio natural de nutrientes en los canales de riego
y drenaje.
ABSTRACT
This research aims determine the amount or volume of water required to produce crops
(lettuce Batavia) through blue, green and gray water footprint. It was held in the sectional
ICA CI Tibaitatá, located at Km 14 Via Bogota - Mosquera; a harvested area of 1,286
hectares and 3 600 plants, irrigated with water from irrigation and drainage district 'La
Ramada', from meteorological, agronomic and irrigation data, taking into account water and
soil conditions.
Estimates for the methodology proposed by the Water Footprint Network (WFN) and the
thesis "Estimation of the water footprint of bioenergy crops with potential in the Province of
Limarí, Coquimbo Region, Chile." of Barros, 2012. The WFBlue and WFGreen was calculated
using water balance and the WFGrey with an approximation of the amount of fertilizer applied
to crop and the percentage of each chemical.
As result of research we have total water footprint cultivation 2.113 distributed in the
following components: WFGreen 0.892 𝒎𝟑 𝒕𝒐𝒏−𝟏 , WFBlue 0,281 𝒎𝟑 𝒕𝒐𝒏−𝟏 y WFGrey 0,94
𝒎𝟑 𝒕𝒐𝒏−𝟏 . These data are result of the combination of crop yield and satisfaction CWU
providing more than 74% water by precipitation and the remaining 25% will be supplied by
overhead irrigation; partly because other agricultural practices employed and soil
characteristics of the soil, the gray component has the highest value, with evidence in the
natural imbalance of nutrients in irrigation canals and drainage.
INTRODUCCIÓN
Colombia tiene una oferta hídrica aproximada de 2.011.655 Mm3, distribuida en un territorio
heterogéneo, donde la agricultura utiliza el 46,6 % del total del volumen de agua que se
utiliza en el país (ENA, 2014). A nivel mundial la escasez de agua es unos de las principales
problemáticas ligada al sector de la alimentación; de acuerdo a la FAO (2015), esta presenta
la mayor proporción de uso de la tierra y el recurso hídrico, generando efectos ambientales y
sociales asociados a la contaminación del agua por nitratos, fosfatos y plaguicidas, y del
suelo por salinización y fitosanitarios de las tierras de regadío (Carranza, 2008).
En la sabana de Bogotá se encuentran suelos con buenas condiciones de drenaje y retención
de humedad, aptos para el cultivo de lechuga (Lee, 2000)., por lo cual es la hortaliza más
cultivada en Cundinamarca a nivel departamental con un área aproximada de 2.621,34 ha
13
(participación nacional área cosechada del 64,40%), con una producción anual de 46.467,04
Ton (participación nacional del 55,59%) (Min Agricultura, 2014), siendo una de los cultivos
transitorios que requiere mayor lámina de agua para el desarrollo en su periodo vegetativo, es
cultivada con ineficientes prácticas agrícolas aumentando la demanda de agua para riego y
transversalmente el flujo de retorno (escorrentía).
El territorio ha sido sometido por lapsos considerables a intensas actividades agrícolas, con
efectos negativos como: desequilibro en el balance hídrico, déficit en el almacenamiento de
agua en el suelo, desecamiento y agrietamiento, disminuyendo la capacidad agropecuaria y
aumentando la competencia por el uso de los recursos hídricos
Para proporcionar un uso adecuado del recurso hídrico en terrenos ocupados por cultivos
agrícolas intensivos (hortalizas) en la sabana de Bogotá, es necesario información relevante y
confiable. Sin embargo, la información disponible sobre el uso directo e indirecto del agua
(huella hídrica) durante la producción de la plántula es general e inconclusa, lo cual dificulta
la toma de decisiones por autoridades regionales, gremios y agroempresarios.
JUSTIFICACIÓN
Los recursos hídricos se han convertido en una parte fundamental del desarrollo sostenible,
impulsado por la creciente demanda, escasez y/o degradación de la calidad del agua. Esto
lleva a la necesidad de una mejor comprensión de los impactos relacionados a esta como base
para mejorar la gestión a nivel local, regional, nacional y global, por lo cual se han
desarrollado técnicas como la huella hídrica (WF) formando parte de una evaluación
ambiental integral (ISO 14046:2014).
Actualmente la WF es una herramienta que contribuye en la Gestión Integral del Recurso
Hídrico – GIRH a nivel territorial y de sectores productivos, permitiendo hacer análisis
multisectorial en un lapso definido, con el objeto de evaluar la correlación entre la oferta
hídrica y las actividades antrópicas en una cuenca (industria, persona o producto). De
acuerdo a Shrestha, Pandey, Chanama y Ghosh (2013), los estudios de la WF a nivel
nacional son importantes porque proporcionan una visión detallada del uso del agua para la
producción agrícola.
De acuerdo a la Evaluación Multisectorial de la Huella Hídrica en Colombia (2014), el
concepto de WF “es más que la evaluación del uso sectorial del agua o de la contaminación
de las fuentes hídricas por actividades antrópicas, este concepto ha permitido introducir
importantes elementos al balance hidrológico nacional, complementando y enriqueciendo
estudios” (p.152). Por ello cuantificar los requerimientos hídricos es fundamental para hacer
uso eficiente del recurso (agua verde y azul) y potencializar la producción (durante el periodo
de crecimiento), por medio de la reducción del uso no productivo (evaporación del suelo) y
consuntivo (transpiración del cultivo) de agua en el sector agrícola, además, reconocer los
efectos del estrés hídrico en el cultivo por medio de la relación medio ambiente - cosecha.
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Según la CAR (2010), “El agua de riego es fundamental para la producción de alimentos, por
lo cual el agricultor debe proporcionar en cantidad y frecuencia necesaria, para su adecuado
desarrollo en el periodo vegetativo, obteniendo un aumento en rendimiento y producción”
(p.5). Es decir la sostenibilidad hidráulica de la sabana de Bogotá se encuentra ligada al uso
eficiente del recurso y de los distritos de riego y drenaje.
De acuerdo a lo planteado por Terán (2015), la WF fuera del concepto consolidado,
“pretende denotar la eficiencia económica del uso del agua en dicho proceso, definiéndola
como la cantidad de agua por unidad de cosecha producida… comprendiendo la eficiencia
del proceso de producción en términos de agua utilizada”. (p. 107), De acuerdo a lo anterior “
la producción del cultivo se potencializa con el uso del recurso hídrico proveniente de la
precipitación (huella hídrica verde), la aplicación suplementaria del recurso hídrico en los
ciclos del cultivo (huella hídrica azul)” (p.63)., además el control sobre el uso adecuado de
agroquímicos (huella hídrica gris).
Por lo cual se expresa que se malgasta el agua si el volumen empleado para riego se
encuentra por encima de su huella hídrica intrínseca, así que es necesario determinar la
eficiencia del uso del agua del sistema productivo.
Es de gran relevancia estimar la producción de lechuga Batavia en la sabana de Bogotá, a
partir del agua disponible para uso agrícola en la región (distrito de riego y drenaje La
Ramada y condiciones climatológicas) por medio de la huella hídrica, ya que esta
información establecerá para esta especie la cantidad óptima de agua requerida de acuerdo al
volumen de lechuga producida por unidad de área, con fines de una gestión integral del
recurso hídrico además de tecnológicos, agropecuarios y de planeación.
Por último la estimación de la huella hídrica total del cultivo se convierte en estrategias para
el cambio y motor de la gestión ambiental en el ámbito del desarrollo rural, cuando a partir de
la disminución de sus tres componentes (WF verde, azul y gris) por medio de la modificación
a las prácticas agrícolas se logra la producción sostenible regional, proporcionando
beneficios a nivel biofísico, económico, tecnológico y social.
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1. OBJETIVOS
Estimar la huella hídrica del cultivo de lechuga Batavia (lactuca sativa capitata) para la
sabana de Bogotá (Colombia), considerando su importancia en la Gestión Integral del
Recurso Hídrico – GIRH y desarrollo rural local.
1. Establecer los criterios, lineamientos y variables con los cuales pueden ser definidos
valores de huella hídrica (WF verde, azul y gris) en el cultivo de lechuga Batavia
(lactuca sativa capitata) localizado en la seccional ICA C.I Tibaitatá.
3. Estimar los valores resultantes de la huella hídrica (WF azul, verde y gris) en el
cultivo extensivo de lechuga Batavia (lactuca sativa capitata), aplicando la
metodología de la Water Footprint Network con adaptación de la Evaluación
multisectorial de la huella hídrica y la tesis de Barros, 2012.
2. MARCO REFERENCIAL
Teniendo en cuenta que hace parte de las funciones de la Dirección general dirigir, coordinar
y controlar la administración y operación de los distritos de riego en el perímetro urbano de
Bogotá (Acuerdo 44, 2005, art. 5), la CAR mediante la Ley 3 de 1961 administra desde ese
mismo año los distritos de Riego la Ramada y Fúquene - Cucunubá, implementando
estrategias de conservación del ecosistema sin dejar a un lado el importante significado de la
producción. Los distritos de riego y drenaje muestran la indiscutible eficiencia en el uso del
medio natural cuando a través de ellos se racionaliza el recurso hídrico, reuniendo a más de 6
mil productores a quienes se les garantiza el riego, dentro de esquemas de administración,
manejo del medio ambiente y aprovechamiento de aguas tratadas a nivel primario del río
Bogotá y que son aptas para la reutilización en el sector agrícola (Bejarano, 2010).
Como parte integral del desarrollo agrícola y rural en Colombia, los sistemas de riego y
drenaje han sido potencialmente importantes en el siglo XX, cuando las condiciones
topográficas naturales eran causantes de inundaciones y encharcamientos, obstaculizando el
uso de suelos para agricultura y reduciendo la superficies aptas para el cultivo de especies
vegetales, por ello La Ramada construida en 1936 y puesta en marcha en 1939 ha sido
orientada hacia la protección de la frontera agrícola de la Sabana de Bogotá, al incentivar la
producción agropecuaria (utilizando sistemas de rotación y combinación de cultivos
relativamente eficientes, alternándolos con un periodo de descanso) , logrando un equilibrio
entre la productividad y el medio ambiente (CAR, 2010).
El Instituto Colombiano Agropecuario – ICA es una “entidad pública de orden nacional con
personería jurídica, autonomía administrativa y patrimonio independiente, perteneciente al
Sistema Nacional de Ciencias y Tecnología, adscrita al Ministerio de Agricultura y
Desarrollo Rural, sus acciones se orientan a lograr una producción agropecuaria competitiva,
de igual manera garantiza la calidad de los insumos agrícolas y semillas que se usan en
Colombia” (ICA, 2017).
El municipio de Mosquera por medio del Acuerdo N° 0001 del año 2000 adopta el Plan
Básico de Ordenamiento Territorial, donde es deber del concejo municipal adoptar planes de
ordenamiento territorial que dictaminan para el municipio objetivos, estrategias, políticas y
programas para orientar de manera racional su crecimiento, desarrollo físico y utilización del
suelo. En la actualidad los usos del suelo están definidos por el acuerdo 038 de 1993, donde
se reglamenta el corredor vial rural de la troncal de occidente (zona sur de la troncal de
occidente), con el siguiente uso:
Zona de interés ambiental y agroforestal: zona agroforestera Corpoica: dentro de este uso se
encuentra el total del área de los predios de Corpoica y se encuentra de los siguientes
linderos: Por el norte con la troncal del Occidente, por el sur con las Haciendas Santa Isabel y
la Herradura. Por este con las Haciendas la Primavera, el Porvenir hasta la hacienda la
Herrera. Por Oeste con la Universidad Nacional, fincas San José y Santa Rosa hasta la
Hacienda el Trébol. Tiene un área de 5, 366, 984. 10 m2, de los cuales 400.000 m2 se destinan
a reserva forestal.
La Asociación Mundial para el Agua – GWP lo definen como un “proceso que promueve la
gestión y el aprovechamiento coordinado de los recursos hídricos, la tierra y los recursos
naturales relacionados, con el fin de maximizar el bienestar social y económico de manera
equitativa sin comprometer la sustentabilidad de los ecosistemas vitales”. La gestión integral
significa que los diferentes usos del recurso hídrico debe considerarse en conjunto, donde
diferentes grupos de usuarios (agricultores, comunidades, ambientalistas) pueden tener
influencia en las estrategias para el desarrollo y la gestión del recurso hídrico (PNUD, 2005),
Por lo cual la GIRH debe ser holística e involucrar aspectos claves (oferta, demanda, calidad
y riesgos), buscando orientar el desarrollo de políticas públicas en materia de recurso hídrico
(en proceso de mejoramiento continuo), a través de una combinación de desarrollo
económico, social y la protección de los ecosistemas, garantizando la sostenibilidad del
recurso, entendiendo que su gestión se deriva del ciclo hidrológico que vincula una cadena de
interrelaciones entre diferentes componentes naturales y antrópicos (Minambiente, 2010).
19
Para la elaboración del presente trabajo fue necesario mencionar las normas generales
relacionadas con la Huella hídrica a nivel Colombia evidenciadas en el tabla 1, con el objeto
de tener presente aspectos legales que apoyan al desarrollo del proyecto.
Ministerio de
Resolución 1207 de ambiente y Por el cual se adopta el uso de aguas residuales
2014 desarrollo tratadas para uso agrícola.
sostenible
rotación, con prácticas agrícolas a cielo abierto y tratamientos de manejo por medio de
surcos.
En la ilustración 1 se puede observar la localización del Centro de Investigación Tibaitata, el
círculo rojo identifica el lote donde se encontraba el huerto extensivo de lechuga batavia.
Ilustración 1. Ubicación del C.I Tibaitata CORPOICA
SENA
2.4.1 Suelo.
total que se encuentra en el departamento de Cundinamarca con este tipo de suelo asciende a
15. 196 Ha.
Son suelos de reacción mediana a ligeramente ácida, alta capacidad de intercambio catiónico,
baja saturación de bases, contenido bajos a altos de magnesio, potasio, fósforo y medios altos
de calcio; la fertilidad de estos suelos es moderada a alta. Las características son: Textura
Franca y/o franco- arcillo- limosa y franco - arcillosa, bien drenada, plana; profunda; normal
y/o ligeramente salina. El suelo experimental se describe con más detalle en el anexo A.
2.4.2 Agua.
El agua usada para fines agronómicos en el lote es procedentes del proyecto saneamiento
ambiental del distrito de riego y drenaje “La Ramada” Unidad I, el cual se suple del canal
Tibaitatá, alimentado a partir de la ciénaga de Tres esquinas mediante bocatoma de
compuertas deslizantes, donde se permite la utilización de las aguas del río Bogotá en
actividades de riego una vez haya sido saneada (CAR, 2010, p. 4). Los canales de riego y
drenaje se abastecen del canal Tibitata por medio de aletas de encausamiento lateral y una
compuerta tipo guillotina (ver ilustración 2).
La tecnología para el tratamiento de aguas residuales del canal de riego Tibaitatá con fin
agrícola contempla los siguientes procesos: 1)Filtración: con tres tanques que contiene arena,
antracita y carbón activado, tiene el objeto de retener contaminantes orgánicos e inorgánicos,
2) Desinfección por medio de radiación UV para estabilización microbiológica, 3)Aireación:
paso del agua por estructura de 5 niveles (4 de ellos con carbón coque), 4) Almacenamiento:
en reservorio con capacidad de 100 m3, donde se aplica microorganismos para conservar el
agua en óptimas condiciones para riego (CORPOICA, 2017).
En las áreas destinadas a producción agrícola se traslada el agua para riego hacia puntos de
entrega en los lotes y se controlan excesos hídricos por medio de canales abiertos. Se capta el
recurso por bombeo y se riega el cultivo por aspersión con mangueras de 6”, para la
aplicación de agroquímicos se utilizan bombas aspersoras de 20 Lts (ver ilustración 3).
Ilustración 2: Panorámica de la infraestructura del canal tibaitata y las compuertas deslizantes, Distrito de riego y
drenaje “La Ramada”. Tomado por Lizcano, P. 2017.
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Ilustración 3: Panorámica de canales de riego y drenaje, moto bomba, estructuras de sistema de riego y fertilización
en la seccional ICA C.I Tibaitata. Tomado por Lizcano, P. 2017.
La lechuga es una hortaliza de climas frescos Se cultiva desde el nivel del mar como en la
Costa Atlántica, hasta los 2600 msnm como en la Sabana de Bogotá y zonas elevadas con
climas templados y húmedos , en Colombia se encuentran variedades para clima medio, frío
moderado y frío. La temperatura media óptima para el desarrollo normal del cultivo es de 15
- 18°C, con máxima de 21 °C y mínima de 7°C, la planta resiste bajas temperaturas en su
primera edad, pero es sensible a heladas durante el periodo cercano a la cosecha.
En la sabana de Bogotá las necesidades de riego del cultivo de lechuga pueden ir desde 0,5
Litros/m2/día cuando las plantas son pequeñas hasta más de 4 Litros/m2/día para plantas
adultas. El agua para riego debe ser de óptimas calidad química y biológica, las
características químicas deseables son un pH entre 6 y 7, conductividad eléctrica (CE) menor
a 1 dSm-1 y contenido de sodio (Na) y cloro (Cl) menores a 50 y 70 ppm, la parte biológica
debe tener agua con bajos niveles de microorganismos (coniformes totales y fecales y otras
bacterias). La frecuencia y cantidad de agua a aplicar para la lechuga es de 300 a 600 mm de
agua durante todo su ciclo.
Teniendo en cuenta que para horticultura el sistema radicular es corto se desarrolla bien en
suelos sueltos, fértiles, franco arenosos, con alto contenido de materia orgánica (ya que
retiene humedad, favoreciendo la alta demanda de agua por parte del cultivo) y con buen
contenido de poros grandes y bien distribuidos (proveen buen drenaje y aireación para un
adecuado crecimiento), el pH más apropiado es ligeramente acido con pH entre 6.0 y 6.5.
La preparación del suelo debe lograr una textura suelta que facilite el trasplante y
establecimiento del cultivo. En grandes extensiones se recomienda el uso de tractor haciendo
los pases de arado y rastrillo para que el suelo quede bien desmenuzado (ver ilustración 4), en
áreas pequeñas se hace uso de motocultor o con obra de mano. Para el trasplante de la
lechuga se acostumbra levantar camas o eras de 10 a 15 cm de altura y entre uno y dos metros
de ancho de acuerdo con condiciones topográficas del terreno, del sistema de riego y de la
distancia de siembra.
26
Ilustración 4: Preparación del suelo con tractor en la seccional ICA C.I Tibaitata. Tomado por Lizcano, P. 2016
Ilustración 5: Panorámica del cultivo de lechuga Batavia etapa inicial en la seccional ICA C.I Tibaitatá. Tomado por
Lizcano, P. 2016.
El cultivo de lechuga como la mayoría de las hortalizas demandan alto consumo de agua, la
duración y frecuencia del riego depende del crecimiento del cultivo. Desde el trasplante la
zona radicular debe estar en buenas condiciones de humedad, cerca de la capacidad de campo
(máxima cantidad de agua que el suelo puede contener sin llegar a inundarse y sin que haya
pérdidas de agua hacia el subsuelo). Como regla general el cultivo debe hacer riegos cortos y
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frecuentes durante las primeras semanas, más adelante la frecuencia del riego puede
disminuir en la medida que aumenta la duración del riego para mantener una buena humedad.
El sistema de riego más aconsejable es por aspersión o por goteo.
Ilustración 6: Cultivo de lechuga Batavia etapa final y cosecha en la seccional ICA C.I Tibaitata. Tomado por
Lizcano, P. 2017
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3. METODOLOGIA
De igual forma, se realizó bajo un enfoque cuantitativo evaluativo, debido a que se empleó
recolección de datos meteorológicos, agronómicos y de riego para aplicar los cálculos
pertinentes a la estimación de la huella hídrica en el cultivo, y se buscó evaluar las diferentes
metodologías asociadas al cálculo de la huella hídrica en el sector agrícola con el fin de
emplear la mejor opción de acuerdo a las características del cultivo de análisis. Adicional, se
pretende que con la información generada se establezcan resultados que permitan la toma de
decisiones propendiendo al ahorro y uso eficiente del recurso hídrico y empleo de buenas
prácticas agrícolas (BPA’s).
Al mismo tiempo, el tipo de investigación empleada fue el estudio de caso con una unidad
de estudio, ya que para la sabana de Bogotá siendo el mayor productor de hortalizas en
Colombia se trabajó con un cultivo de lechuga batavia siendo este el objeto específico de
estudio. Se indago sobre la metodología para la estimación de la WF definiendo criterios,
lineamientos y variables para sus tres componentes, se recolecto información y se
evidenciaron resultados de la cantidad y calidad de agua usada en el cultivo, por medio de
estos se realizó la evaluación de la WF. Para el proyecto se empleó el método inductivo,
donde se partió de lo particular con el objetivo de proporcionar conclusiones generales
aplicables a los cultivos de hortalizas en la sabana de Bogotá en cuanto al uso del recurso
hídrico.
3.2.1 Manuales.
Como guía para estimar la huella hídrica en el cultivo se utilizó el manual publicado por la
Water Footprint Network (WFN) en el año 2011 donde se explica la metodología de
Hoekstra et al., definiendo y formulando el cálculo de la WF (verde, azul y gris) de forma
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La huella hídrica total para el cultivo (WF Cultivo [m3.ton-1]) (Ecuación 1) siendo un
indicador que tiene en cuenta el uso directo e indirecto del agua (uso y contaminación),
corresponde a la sumatoria de las WF verde, azul y gris, se define como el volumen o
cantidad de agua requeridos por la especie para producir una unidad de cosecha; para
agricultura o silvicultura se manejan en unidades de m3.ton-1 lo que equivale a L. Kg-1,
cuando los productos agrícolas se pueden contar por unidad la WF puede ser expresada como
volumen de agua por unidad (Hoekstra et al, 2011).
Dónde:
WF Cultivo Huella hídrica en [L. Kg-1]
WF verde Huella hídrica verde [L. Kg-1]
WF azul Huella hídrica azul [L. Kg-1]
WF gris Huella hídrica gris [L. Kg-1]
La huella hídrica verde (WF Verde [m3.ton-1]) (Ecuación 2) siendo el volumen de agua
procedente de la precipitación que no se convierte en escorrentía, sino que se almacenan en
los estratos permeables superficiales del suelo satisfaciendo la demanda de la plántula y
vuelve a la atmósfera por proceso de evapotranspiración (Arévalo, et al., 2012). Se estima
como el cociente entre uso consuntivo (CWU Verde [m3.ha-1]) y el rendimiento del cultivo (Y
[ton . ha-2]) (Hoekstra, et al., 2011), expresado en L. Kg-1 o m3.ton-1.
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𝑃𝑝𝐸𝑓
𝑊𝐹𝑉𝑒𝑟𝑑𝑒 =
𝑌
Ecuación 3
Donde:
WF Verde Huella hídrica verde [m3.ton-1]
CWU Verde Uso consuntivo de agua o requerimientos hídricos [m3.ton-1]
Y Rendimiento del cultivo [ton . ha-2]
Ppef Precipitación efectiva [m]
La precipitación efectiva [m] se define como la cantidad de agua precipitada que no se pierde
a través de escorrentía superficial ni por percolación profunda, por lo que queda disponible
para el aprovechamiento de la planta (FAO, 2010).
Donde
P month Precipitación promedio mensual (mm)
mañana de ese día hasta las 7:00 de la mañana siguiente, periodo que se conoce
universalmente con el nombre de “día pluviómetro”, así mismo un milímetro de
precipitación equivales a un litro de agua por metro cuadrado de superficie, o a 10 metros
cúbicos de agua por hectárea.
La huella hídrica azul del cultivo (WFAzul [m3.ton-1]) (Ecuación 6) se define como el
volumen de agua dulce extraída de una fuente superficial o subterránea usada para riego,
cubriendo la demanda de agua no satisfecha a causa de un déficit en la disponibilidad de agua
procedente de lluvia (Arévalo, et al., 2012). Se calcula como el cociente entre el agua
aprovechada por el cultivo procedente de riego y el rendimiento del cultivo (Hoekstra, et al.,
2011), expresado en L. Kg-1 o m3.ton-1, La CWU Riego corresponde a la diferencia entre los
valores de agua requeridos por el cultivo y la precipitación efectiva (Barros., 2012).
𝐶𝑊𝑈𝑅𝑖𝑒𝑔𝑜
𝑾𝑭𝑨𝒛𝒖𝒍 =
𝑦
Ecuación 6
Donde:
WF Azul Huella hídrica azul [m3.ton-1]
CWU riego Requerimientos de riego del cultivo [m]
Y Rendimiento del cultivo [ton. m-2]
Donde:
Los requerimientos hídricos del cultivo (CWU), se define como el volumen de agua dulce
que debe suministrar a la planta para compensar las pérdidas provocadas por la
evapotranspiración, con el objeto de un adecuado crecimiento y desarrollo (Allen, et al.,
1998), es decir es directamente inverso a la evapotranspiración y en términos numéricos es
equivalente a la evapotranspiración del cultivo (ETC) (Barros., 2012). Los requerimientos
hídricos se estima por medio del software CROPWAT, requiriendo información de la
evapotranspiración potencial, características del cultivo y el suelo (FAO, 2010).
ETC = ETO * KC
Ecuación 8
Donde:
gobiernan el intercambio de energía y el flujo de calor (ET). Por practicidad se hace uso del
método calculado por medio del software CROPWAT.
Para el cálculo de ETo se requiere de la siguiente información, para el caso puntual de la
investigación uso los resultados de la estación meteorológica Tibaitatá convencional y
automática proporcionada por el IDEAM, para el periodo vegetativo de la lechuga Batavia.
Fue necesario para la estimación de la huella hídrica azul [WF Azul] conocer las características
del cultivo de análisis referentes a: fechas de siembra, etapas de crecimiento (duración en
días), coeficiente del cultivo [KC], factor de respuesta de la productividad [Ky], profundidad
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radicular [m], altura máxima del cultivo [m] y fracción de agotamiento hídrico [p] (FAO,
2010).
a) Fecha de siembra: Este dato le permite al software calcular junto con duración de
la etapa de crecimiento la fecha de cosecha (FAO, 2010).
C) Coeficiente del cultivo [KC]: Este valor resume las características que
diferencian a un cultivo particular del cultivo de referencia (FAO, 2010). El Kc
varía principalmente en función de las características del cultivo (etapas de
crecimiento del cultivo), variando solo en una pequeña porción en función del clima y
la evaporacion. Permitiendo la transferencia de valores estándar del coeficiente del
cultivo entre distintas áreas geográficas y climas, durante el crecimiento del cultivo
esta relación varía en función de los cambios fenológicos de la especie y el grado de
cobertura vegetal (Allen, et al. 2006). Con estos valores el método CROPWAT
interpola los valores correspondientes a la etapa de desarrollo y final o cosecha.
f) Altura máxima del cultivo [m]: Este parámetro permite al método FAO
CROPWAT ajustar valores del coeficiente del cultivo en condiciones no estándar,
especialmente cuando los valores para humedad relativa son notoriamente distintos a
45% o cuando la velocidad del viento difiere de los 2 [m s-1] (FAO, 2010). La altura
del cultivo tiene influencia en el valor de resistencia aerodinámica, así como la
transferencia de vapor de agua a la atmosfera (transpiración) (Allen., et al 2006)
Corresponde a la cantidad de cosecha dividido la superficie sembrada [m 2], esta puede ser
expresada como tonelada cosechada de planta.
De acuerdo a las características del lote y de la región de estudio, se asumió que el suelo no
presenta limitaciones hídricas para el crecimiento del cultivo, uso el método FAO
CROPWAT para un suelo sin restricciones de humedad usando la opción “CWR option” por
lo que no fue necesario incorporar datos. En caso de necesitar un resultado más específico, se
puede utilizar la segunda opción “Irrigation Schedule option” como un dato más para la
estimación de los requerimientos hídricos del cultivo (Hoekstra et al., 2009).
La huella hídrica gris del cultivo (𝑊𝐹𝐺𝑟𝑖𝑠 [𝑚3 𝑡𝑜𝑛−1 ]) (ecuación 9), se define como el
volumen de agua necesario para que el cuerpo receptor asimile la carga contaminante
asociada al proceso productivo, sin que la calidad del agua supere los límites permitidos por
las normas de calidad de agua para calidad ambiente del agua (Caso específico nivel
nacional). Se calcula como carga contaminante dividida la diferencia entre el máximo
aceptable y la concentración natural y dividido por el rendimiento del cultivo; estimándose
solo para los principales productos químicos usados en el cultivo (Hoekstra, et al., 2011).
36
𝛼 ∗ 𝐴𝑅
(𝐶 )
𝑀𝑎𝑥 − 𝐶𝑁𝑎𝑡
𝑊𝐹𝐺𝑟𝑖𝑠 =( )
𝑌
Ecuación 9
Donde:
La estimación de carga química en el caso de foco difuso de contaminación del agua no es tan
fácil como en un caso puntual. Cuando un producto se aplica directamente en la zona
radicular como es el caso de fertilizantes, insecticidas o plaguicidas se puede medir, sin
embargo puede ocurrir que una fracción de la cantidad total de sustancia químicas aplicadas
se filtra a aguas subterráneas o por escorrentía a aguas superficiales la cual no se puede
cuantificar. Es recomendable desarrollar una aproximación asumiendo que una fracción fija
de producto químico aplicado llega a un cuerpo receptor (Hoekstra, et al., 2011).
1. Triple 15: fertilizante granulado con aplicación a cualquier tipo de cultivo, aporta a
la tierra macronutrientes como N, P y K, el huerto extensivo lo maneja disuelto en
agua con frecuencia de aplicación 15 días después del trasplante hasta un mes antes
de la cosecha.
Corresponde a la cantidad de carga química aplicada al cultivo que infiltran y percolan hasta
llegar a un cuerpo receptor. Teniendo en cuenta que cuando se aplica el producto químico
directamente al cuerpo de agua se puede realizar medición directa de contaminantes, pero
cuando los productos se aplican en el suelo no infiltra el total del contaminante por lo que no
se puede realizar una medición directa, por lo cual se toma un porcentaje del total de los
principales productos químicos usados en el cultivo. De acuerdo a Carmona (2010) los
principales nutrientes que contiene los fertilizantes son el Nitrógeno, Fosforo y Potasio,
analizando su comportamiento durante la lixiviación se puede observar que:
El nitrógeno (N) tiene una elevada movilidad en el terreno y no puede ser retenido por
el, siendo la sustancia en los fertilizantes más susceptibles a lixiviación. La presencia
en agua destinada a consumo humano es perjudicial para la salud por lo cual la
normatividad restringe el contenido de iones de nitratos que debe contener el agua.
Los datos sobre características del cultivo como fecha de siembra, duraciones de las etapas
vegetativas y demás, se tomaron del portal web de MINAGRICULTURA siembra y datos de
campo; el coeficiente de cultivo (Kc), profundidad radicular (Zr) y fracción de agotamiento
del cultivo (p) fueron suministrados por el Evaluación Multisectorial de la Huella Hídrica en
Colombia (2015) y Allen et al (1988).
“El método de la FAO Penman – Monteith utiliza datos climático estándar los cuales pueden
ser fácilmente medidos. Todos los procedimientos de cálculo han sido estandarizado en
función de los datos meteorológicos disponibles y la escala de tiempo” (FAO, 2006). De
acuerdo a lo anterior los datos agroclimáticos usados para la estimación de la WF en el
cultivo, proviene de la información suministrada vía web por el IDEAM de las estaciones de
C.I Tibaitata convencional y automática, ya que no se realizaron mediciones directas en
campo.
El desarrollo de este proyecto se llevó acabo en cuatro etapas, formuladas y proyectadas para
dar cumplimiento a los objetivos propuestos, siendo estas etapas las siguientes:
Para la estructura de las fórmulas de la WF (verde, azul y gris) se tomaron varios referentes
metodológicos, partiendo desde la estandarizada a nivel mundial por la WFN, luego la
aplicación en el contexto nacional en la Evaluación Multisectorial de la Huella Hídrica en
Colombia publicado por el IDEAM donde se usa balance hídrico para la estimación y por
último la tesis “Estimación de la Huella hídrica de cultivos con potencial bioenergética en
laProvincia de Limarí, Región de Coquimbo, Chile.” de Barros, 2012., con lo cual se
estableció la mejor opción para el cultivo de lechuga Batavia (lactuca sativa capitata), de
acuerdo a disponibilidad de datos meteorológicos, agronómicos y de riego (características
del cultivo).
Para calcular el uso consuntivo de agua del cultivo o requerimiento hídricos (CWU), se
escogió el modelo CROPWAT desarrollado por la FAO en 2009 basado en el método de
Allen et al 1998, en lugar del modelo AQUACROP de la FAO, 2010 diseñado
específicamente para crecimiento de cultivos y evapotranspiración en condiciones
deficitarias de agua (Hoekstra, 2011).
Por medio de visitas de campo se realizó la observación directa del comportamiento del agua
en el cultivo, además del estado del suelo y del sistema de distribución de agua con fines de
riego y agroquímicos usados; se realizó el diligenciamiento de listas de chequeo donde se
verifico información referente a prácticas agrícolas, uso del agua y estado de suelo, y se
diálogo con los actores vinculados al proceso vegetativo (agricultor, agroempresario y
funcionarios C.I Tibaitatá).
Se localizó la estación cercana al cultivo por medio del catálogo del IDEAM, donde se
encontró que el C.I cuenta con dos estaciones: Tibaitata convencional [21205420] y Tibaitata
automática [21206990], de las cuales se solicitaron datos meteorológicos para el cálculo del
CWU; los datos de riego y agronómicos se obtuvieron con ayuda del agricultor y referentes
bibliográficos.
desarrollo del cultivo comprendido entre Agosto – Noviembre de 2016 al IDEAM, para las
variables meteorológicas: precipitación, temperatura máxima y mínima (C°) y radiación
(MJ. m2 .día) se tomaron a partir de datos suministrados por la estación Tibaitata
Convencional y los datos de humedad relativa (%) se tomaron de la estación Tibaitata
Automática.
Posterior a obtener los resultados de la estimación de la WF, la visualización del uso del agua
utilizada durante el proceso vegetativo siembra – cosecha, ayuda a una mejor comprensión y
cuantifica los efectos sobre el recurso hídrico, sirviendo como base para una mejor gestión de
los recursos hídricos a nivel rural, además de incentivar a las buenas prácticas agrícolas,
primero se debe hacer un análisis de los resultados desde una perspectiva ambiental y social,
posterior se propone formular estrategias de respuesta en términos generales, dando como
resultado como el producto vegetal puede ser más sostenible desde la perspectiva del agua y
como estas estrategias pueden ayudar al desarrollo rural y la GIRH.
41
4. RESULTADOS
Los datos fueron suministrados por el IDEAM por consolidado 1954 – 2015, sin embargo los
datos suministrados para el año 2016 se manejaron como datos preliminares sin proceso de
verificación y para algunos parámetros la base de datos no registro datos anuales en las
estaciones. La información agroclimática fue promediada para un lapso de diez años
enfatizado al periodo vegetativo (siembra indirecta- cosecha) de la lechuga batavia, por
medio de registros históricos de suficiente duración.
Las características del cultivo fueron tomados del Estudio No 56 de la serie riego y drenaje de
la FAO y el Evaluación Multisectorial de la Huella hídrica en Colombia (EMHHC), además,
de mediciones y observaciones directas en campo. Por último los datos de fertilizantes fueron
tomados de campo y del Vademécum de productos fitosanitarios y nutricionales de Liñan, C.
Agosto 40,6
42
Septiembre 35,5
Octubre 88,4
Noviembre 86,7
Total 251,2
Fuente: IDEAM, 2017.
Para el cálculo de la WF azul se determinaron los requerimientos hídricos del cultivo (CWU),
la estimación de CWU con el método FAO CROPWAT requiere el cálculo de
evapotranspiración de referencia (ETO), junto con características del cultivo y de suelo;
además se usan los mismos valores de precipitación efectiva de la WF verde.
Latitud 4,41 N
Longitud 74,12 w
d) Velocidad del viento: los datos suministrados por el IDEAM para la estación
tibaitata convencional fue para el lapso 2006 – 2015, el año 2016 a la fecha no
cuenta con información sobre este parámetro, por lo cual para este parámetro
no se contempla, en la tabla 6 se evidencia la información.
Tabla 6: Velocidad promedio mensual del viento [m s-1] estación tibaitatá convencional.
Velocidad
del viento 1,68 1,75 1,6 1,54
[m s-1]
Radiación solar
[MJ. m-2. día-1] 14,3 14,9 14,7 14,1
Con el fin de estimar los requerimientos hídricos del cultivo empleando la metodología FAO
CROPWAT, fue necesario conocer ciertas características del cultivo transitorio de
investigación, como se muestra a continuación:
Inicial (siembra) 25
Desarrollo 35
Medio (maduración) 30
Final (cosecha) 10
Total: 100
Fuente: Allen et al., 1988.
KCI 0,7
KCM 1,1
KCF 1,0
KY LECHUGA
BATAVIA
KYI 0,6
KYD 1,0
KYM 0,8
LECHUGA BATAVIA
LECHUGA BATAVIA
La WF Gris como indicador del grado de contaminación de agua dulce asociado al proceso
agrícola incluye la infiltración de agroquímicos en el terreno, para ello se requiere los
siguientes datos para su estimación:
Para estimar AR se empleó la metodología usada por Castillo y Rojas (2015), multiplicando
cada elemento químico por la cantidad de abono aplicado dividido el área cultivada, la tabla
16 evidencia los datos estimados.
Nitrógeno 0.15 N P K
200 1.288
Fosforo 0.15
TRIPLE 15
Potasio 0.15
UREA 1.288
Fosforo 0.0
Potasio 0.0
1.288
Fosforo 0.40
NATURFOS
Potasio 0.0
Nitrógeno 0.09 20
RAIZAL 1.288
Fosforo 0.45
Potasio 0.11
Por falta de datos específicos del porcentaje de químicos aplicados que lixivia se escogió un
10% de nitrógeno como la 𝛼, a causa de que la cantidad que llega al agua de flujo libre se
supone ser de un 10% de la tasa de fertilización aplicada [ 𝐾𝑔 𝐻𝑎−1 ] (Hoekstra and
Chapagain, 2008). Teniendo en cuenta que no todos los fertilizantes poseen la misma
movilidad en el suelo dependiendo de varios factores.
Respecto al Decreto 3930 de 2010 y la Resolución 631 de 2015 los límites máximos
permisibles para Nitrogeno, Potasio y Fosforo se encuentran en análisis y reporte, al no tener
concentraciones aceptable se desarrollaron los cálculos con base al Acuerdo 43 de 2006 de la
CAR, donde se establecen los objetivos de agua para la cuenca del Río Bogotá a lograr en el
año 2020. Señala en la clase II y IV los valores de referencia para los usos agrícolas
correspondiente al elemento nitrógeno con 0,010 Kg/m3; teniendo en cuenta que para fosforo
y potasio no se encuentran valores de referencia y siendo el nitrógeno el compuesto con
mayor posibilidad de contaminación al recurso hídrico se tomó como límite máximo
aceptable.
De acuerdo a Carrillo et al., 2015 citando a (Ramírez, 2011), la concentración natural para
nitrógeno promedio a nivel nacional en aguas superficiales es de 0,0009 Kg/m 3. Para los
elementos químicos fósforo y potasio no se dispone de información, por lo cual se estima ser
bajas o por su simplicidad se asume la mejor estimación de concentración natural que es
igual a cero (Hoekstra et al., 2011).
49
Se usó el método FAO CROPWAT empleando datos de las etapas de desarrollo (meses) de la
lechuga, tomando como base condiciones climáticas y atmosféricas presentes en el C.I
Tibaitata, los resultados obtenidos se muestran en la tabla 17. Teniendo en cuenta que no
existen limitaciones de agua, densidad del cultivo, enfermedades, malezas, insectos o
excesiva salinidad en el área de estudio, no fue necesario ajustar la ETo.
La tabla 18 evidencia los resultados de precipitación efectiva siendo esta la parte que puede
ser utilizada por la plántula durante el proceso vegetativo especializada para la zona de
Tibaitata, donde se comparó los métodos precipitación confiable (formula FAO/ AGLW) y el
USDA del soil conservation service, se utilizó para la investigación la segunda fórmula con
el objeto de obtener el cálculo más exacto de acuerdo a las condiciones del cultivo.
Tabla 18: Precipitación efectiva media estación Tibaitata
Método
Precipitación Formula FAO/
Mes
(mm) USDA S.C.S AGLW
PP ef (mm) PP ef (mm)
Agosto 40,6 38 14,4
Septiembre 35,5 33,5 11,3
Octubre 88,4 75,9 46,7
Noviembre 86,7 74,7 45,4
Total 251,2 222 117,7
Fuente: Autor, 2017.
Los resultados obtenidos de CWU para la lechuga Batavia se evidencia en la tabla 19,
especifica que se debe suministrar para el periodo vegetativo (siembra indirecta – cosecha)
260.5 milímetro de agua, entre agua proveniente de precipitación y riego para compensar las
perdida por el proceso de evapotranspiración y crecer de forma óptima.
Corpoica (2016), señala que el cultivo de lechuga como la mayoría de hortalizas, demanda
altos consumos de agua, esta especie necesita entre 300 a 600 mm de agua durante todo su
ciclo. El estimado para CWU con respecto al valor real no se encuentra dentro del rango
propuesto, es decir en este caso el huerto extensivo tiene un requerimiento hídrico del 86,8%
ahorrando aproximadamente el 13.2 %, con posibilidad de afectación a la biomasa, clorosis
en las hojas, acorta el periodo vegetativo de 100 días a aproximadamente 90 a 95 días
evitando la carencia de una unidad más de riego, hasta la muerte por deshidratación en
algunas zonas del cultivo, afectando la producción y la salud del cultivo.
Tabla 19: Requerimientos hídricos de la lechuga Batavia (siembra indirecta – cosecha)
Estos valores expresan la cantidad de metros cúbicos de agua procedente de lluvia utilizada
para la producción de una tonelada de lechuga cosechada, ya que el agua verde no se pueden
manejar (cultivo a campo abierto), para reducir la WF Verde del cultivo se debe aumentar el
rendimiento de agua lluvia, por medio de la modificación de prácticas agrícolas, aumentando
el rendimiento del cultivo, significando la reducción de HH azul en la producción agrícola
(Hoektra et al., 2009).
0,232 0.892
USDA 0.222 0.957
S.C.S
Fuente: Autor, 2017.
54
Para la estimación de la huella hídrica azul hubo inconvenientes en la obtención de los datos
ya que los registros meteorológicos presentada información incompleta, además algunos
datos dependen de las prácticas de manejo del cultivo por lo que varían considerablemente,
generando dificultad para aplicar valores estándares para la investigación con lo cual algunos
se comprobaron con información recolectada en campo.
Los datos recolectados permitieron calcular el requerimiento de riego del cultivo y se dividió
por su rendimiento, la tabla 22 evidencia el valor estimado para la lechuga Batavia. Estos
valores representan la cantidad en metros cúbicos de agua azul requerida para la producción
de una tonelada de lechuga cosechada. La CWU Riego solo considero el agua de riego por el
cultivo, excluyendo lo que puede evaporarse desde el almacenamiento de agua de riego y
canales de transporte del recurso (Barros, 2012).
Para reducir la huella hídrica azul se debe optar por la optimización de la utilización del agua
por medio de buenas prácticas agrícolas y sistema de riego de alta eficiencia, minimizar las
pérdidas de agua en las motobombas y tuberías de distribución del recurso.
La huella hídrica total para el cultivo corresponde a la sumatoria de las WF verde, azul y gris,
siendo indicadores del uso directo e indirecto del agua desde el trasplante o siembra indirecta
hasta la cosecha de una tonelada de lechuga Batavia. Al estimar los tres componentes de la
huella por separado, permite direccionar estrategias para disminuir cada aspecto asociado al
uso y contaminación del recurso, con el objetivo de realizar una gestión integral del recurso
hídrico maximizando el bienestar social y económica en zona rural de forma equitativa con el
aprovechamiento de recursos hídricos, tierra y recursos naturales asociados. La tabla 24
muestra los resultados obtenidos.
5. DISCUSIÓN DE RESULTADOS
La precipitación efectiva estimada con base en el método USDA del soil conservation
service, indica la precipitación media mensual por medio de datos agrometeorológicos
definida como máximo esperado, al realizar un promedio entre los dos valores podemos
estimar una WFVerde que se acerca más a la condiciones reales del cultivo.
Las dos precipitaciones presentan una variabilidad del 13,2 %, evidente en las etapas de
crecimiento inicial (agosto) y final (noviembre) del cultivo como se muestra en la ilustración
7.
De la anterior gráfica, se puede inferir que el huerto extensivo de lechuga batavia aprovecha
la mayor cantidad de agua procedente de lluvia aproximadamente el 86.5% de total promedio
de precipitación proyectado para la zona geográfica, lo cual indica menor demanda de agua
proveniente de fuente de abastecimiento superficial.
La huella hídrica azul es el indicador de uso de agua azul, cubriendo por medio de riego la
demanda de agua no satisfecha a causa del déficit en disponibilidad de agua lluvia. De
57
acuerdo al CWU calculado se debe suministrar para el periodo vegetativo (siembra indirecta
– cosecha) 260.5 milímetro de agua, teniendo en cuenta que el cultivo se encuentra en campo
abierto se lleva a capacidad de campo con un 74% de precipitación y un 25% de riego por
aspersión.
La lechuga demanda altos consumos de agua, desde el trasplante hasta la etapa de desarrollo,
más adelante la frecuencia de riego puede disminuir a medida que el cultivo madura, como se
evidencia en la ilustración 8.
De acuerdo a la gráfica, se puede analizar que el CWU para agosto es de 11% con
distribución del 70 % para precipitación y 30 % para riego, septiembre es de 26 % con 50 %
para precipitación y 50% para riego, en octubre es de 35% con el mayor porcentaje
distribuido 83% precipitación y 17% riego, por ultimo noviembre con el 28% donde
precipitación tiene el 87 % y riego el 13%. Es decir que el cultivo suple sus necesidades
hídricas a través de sus etapas de crecimiento en mayor proporción con agua de lluvia, donde
paras las etapa inicial y de desarrollo este requerimiento es ascendente, cuando la plántula
alcanza un nivel de maduración es descendiente.
Se evidencia que el cultivo de lechuga Batavia demanda una menor cantidad de agua
procedente de fuente superficial que agua procedente de precipitación, lo que significa que el
cultivo presenta un mayor rendimiento. De acuerdo a la estimación de CWU con respecto al
valor real (referencias bibliográficas) no se encuentra dentro del rango propuesto, es decir en
este caso el huerto extensivo tiene un requerimiento hídrico del 86,8% ahorrando
aproximadamente el 13.2 %, traducido en un reducción del periodo vegetativo de 100 días a
aproximadamente 90 a 95 días evitando la carencia de una unidad más de riego y
disminuyendo el requerimiento hídrico de agua lluvia.
La huella hídrica gris es el indicar atribuido al grado de contaminación generado por la
actividad agrícola a partir del uso de agroquímicos, comprendiendo la cantidad y frecuencia
58
Para la huella hídrica total del cultivo, los valores resultantes muestran la cantidad de agua
utilizada en el periodo vegetativo comprendido para siembra indirecta y cosecha, el huerto
extensivo de lechuga batavia demanda 2,113 m3 por tonelada de producto cosechado, del
cual el 42,2% corresponde a la huella verde, el 13,3% a huella azul y el 44,5% a huella gris,
como se evidencia en la ilustración 9.
Ilustración 9: Comparación huella hídrica total de lechuga Batavia
Obtener el mayor valor en la WFGris, en delicado al tener en cuenta que solo se estimó para los
fertilizantes usados en el cultivo, por lo que la realidad de dicha huella debe ser aún mayor
adicionando información de fungicidas e insecticidas. Sin embargo la disminución es
relativamente más sencilla que las otras dos, ya que se pueden modificar las técnicas de
manejo para aplicar menor cantidad de producto químico. Por otro lado los valores de WFAzul
y WFVerde, se acercan más a las condiciones reales del cultivo, teniendo en cuenta que el
cultivo este desarrollando buenas prácticas agrícolas en cuenta al manejo del riego y es
susceptible a mejora en el administración de agua lluvia.
59
De acuerdo a los resultados generados en la estimación de la Huela Hídrica total del cultivo
de lechuga batavia en la Sabana de Bogotá, se realizó la evaluación de sostenibilidad de la
WF para establecer acciones prioritarias y directrices racionales encaminadas al manejo
eficiente del recurso hídrico durante el periodo vegetativo en el huerto extensivo (siembra
indirecta – cosecha), sugiriendo la implementación de la siguiente línea de trabajo como
estrategia de mejoramiento y control de los valores determinados para los componentes
verde, azul y gris, por medio de la adopción de Buenas Prácticas Agrícolas (BPA´s).
Es recomendable para WFVerde el cual presenta mayor porcentaje en cuanto al uso hídrico,
reducir su valor maximizando el rendimiento de agua lluvia y minimizando la erosión del
suelo modificando sus prácticas agrícolas, mediante la trasferencia tecnológica “agricultura
de conservación” enfatizada a la labranza mínima, abonos verdes y uso de coberturas
permanentes, tomando como evidencia los resultados obtenidos en el proyecto Checua-
Procas de la CAR. Este proceso permiten aflojar superficialmente el suelo y abrir surcos
sobre una cobertura vegetal (biomasa viva o muerta) dejando descubierto el terreno trabajado
para el trasplante de la plántula, por otra parte es recomendable implementar sistemas
agroforestales (barrera viva) como medida para recuperar suelos y proporcionar beneficios a
nivel biofísico, económico, tecnológico y social en zona rural donde se realicen actividades
agrícolas enfatizadas a producción sostenible regional.
La huella hídrica gris siendo la que cuenta con mayor porcentaje total para el cultivo de
análisis, se puede minimizar realizando un plan de fertilización basándose en un análisis de
fertilidad del suelo con el objeto de proporcionar cantidades óptimas de agroquímicos en el
suelo (Flores et al., 2012), de igual forma es adecuado monitorear la cantidad de fungicidas
aplicados y su frecuencia, La labranza convencional aumenta el uso de fertilizantes para
compensar la pérdida de fertilidad en el suelo (Rodríguez et al., 2008), por lo cual se
recomienda adoptar labranza mínima como ya se mencionó anteriormente para disminuir la
cantidad de insumos aplicados a las plántulas del huerto extensivo de lechuga batavia.
El sistema de riego por aspersión manejado actualmente es eficiente, sin embargo se propone
riego por goteo como medida para economizar agua y permitir la aplicación de fertilizantes
en forma precisa, sin afectar las concentraciones naturales de nutrientes en el agua de los
canales de riego y drenaje evitando el proceso de eutrofización.
7. CONCLUSIONES
La huella hídrica total para el cultivo de lechuga Batavia en la sabana de Bogotá, tiene un
valor aproximado de 2,113 𝒎𝟑 𝒕𝒐𝒏−𝟏 para un área cosechada de 1.286 hectáreas,
correspondiente al periodo vegetativo siembra indirecta – cosecha, evidenciando ineficiencia
en términos de regulación hídrica.
La huella hídrica del cultivo de lechuga batavia determinó para sus componentes los
siguientes valores: WFVerde 0.892 𝒎𝟑 𝒕𝒐𝒏−𝟏 y WFAzul 0,281 𝒎𝟑 𝒕𝒐𝒏−𝟏 resultado de la
capacidad de campo constituida en un porcentaje mayor a precipitación y una WFGris 0,94
𝒎𝟑 𝒕𝒐𝒏−𝟏 atribuido a inadecuadas manejo de agroquímicos y características edafológicas
del suelo.
El cultivo de lechuga batavia puede reducir el uso de agua verde maximizando el rendimiento
de agua lluvia y minimizar la erosión del suelo adoptando agricultura de conservación,
adaptadas a la disponibilidad económica del agricultor.
La huella hídrica gris puede controlarse por medio de un análisis de fertilidad del suelo con el
fin de proporcionar cantidades óptimas de agroinsumos a las plántulas, previendo el impacto
ambiental a tierras de regadío y recurso hídrico.
8. RECOMENDACIONES
Se sugiere estudiar características del suelo donde se localiza los cultivos de análisis, en
especial el perfil modal y la capacidad de retención de agua, con el objetivo de conocer el
volumen de precipitación para que el terreno llegue a capacidad de campo, adicional se
indica que el cultivo tenga buen drenaje y se evite el encharcamiento y compactación del
terreno, con fines de producción y salud del cultivo.
Otro aspecto a tener en cuenta para futuras investigación con huertos extensivos de lechuga
batavia, es la concentración de metales pesados (cadmio y bromo) presente en agua para
riego, ya que las crucíferas bioacumulan y biomagnifican estos contaminantes impactando el
tamaño de la especie y a sus consumidores, siendo una variables que puede incluirse en la
componente de contaminación en la huella hídrica.
Por ultimo para la gestión integral del recurso hídrico a nivel regional, es necesario realizar
estudios para cada actividad económica que haga uso del agua procedente de una cuenca
hidrográfica en común, con el objeto de estimar el impacto ejercido sobre el recurso,
aumentando la escala de acciones encaminadas al aprovechamiento coordinado de los
recursos naturales asociados.
63
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66
ANEXO A.
El suelo de estudio perteneciente al C.I Tibaitatá hace parte del complejo Pachic Haplustands
- Humic Haplustands - Fluventic Dystrustepts. Simbolo RMQ. Fases: RMQa, RMQb. La
clasificación taxonómica de estos suelos predominantes en un 14% en el departamento de
Cundinamarca es: orden: Andisol; suborden: Ustands; Grangrupo: Haplustands, subgrupo:
Pachic Haplustands.
El orden Andisol se presenta en áreas que han recibido aportes significativos de ceniza
volcánica, son profundos, ricos en materia orgánica y de perfiles A/B/C; evolucionan en
sectores de paisaje montañoso los pisos térmicos muy frío, frío y medios, húmedos y muy
húmedos. Los regímenes edáficos de humedad y temperatura permiten clasificar dentro de
los subórdenes Cryands, Udands y Ustands.
Los suelos Ustands cumplen en todas sus partes con los conceptos de suborden, por tanto se
clasifican a nivel de Gran grupo como Haplustands, algunos poseen epipedones de color
negro y espesor superior a 50 cm, con lo cual se incluye en el Subgrupo Pachic Haplustands,
(RMQ).
1. Fuente: Instituto Geográfico Agustín Codazzi - IGAC (2000). Estudio General de Suelos y Zonificación de Tierras del
Departamento de Cundinamarca. Departamento Administrativo Nacional de Estadística - DANE e IGAC, subdirección de
agrología. Bogotá, D.C., 901 p.
Terán, C. (2015). Determinación de la huella hídrica y modelación de la producción de biomasa de cultivos forrajeros a partir del
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20h%c3%addrica%20y%20modelaci%c3%b3n%20de%20la%20producci%c3%b3n%20de%20biomasa%20de%20cultivos%
20f....pdf?sequence=1&isAllowed=y
67
La unidad cartográfica está integrada por los suelos Pachic Haplustands (perfil MU - 1) en
una proporción estimada del 35%, Humic Haplustands (MU - 3) en un 35% y Fluventic
Dystrustepts (MU - 15) en el 30% restante de la unidad.
Los suelos del subgrupo Pachic Haplustands (Perfil MU-1) son de evolución moderada a
baja (a partir de ceniza volcánica), con la siguiente descripción de los horizontes (Tabla A.
1). Son suelos de reacción mediana a ligeramente ácida, alta capacidad de intercambio
catiónico, baja saturación de bases, contenidos bajos de magnesio, fósforo y medios a altos
de calcio; la fertilidad de estos suelos es moderada.
Horizonte Descripción
Los suelos Humic Haplustands (MU- 3) son de evolución moderada a baja (a partir de
ceniza volcánica), profundos, moderadamente bien drenados y de grupo textual
moderadamente finos a moderadamente gruesos.
El proceso específico de los suelos con ceniza volcánica es el de la andolización, que consiste
en la transformación de los materiales piroclásticos para generar productos especialmente
alofánicos, los cuales establecen uniones estables con los compuestos húmicos, produciendo
una melanización superficial, mediante la acumulación de compuestos orgánicos minerales.
Las características y propiedades de los andisoles están estrechamente asociados con los
procesos evolutivos de los tipifican. Estos pueden en el concepto de Andolización, con dos
subprocesos específicos relacionados fundamentalmente con la formación de Al- humus, de
preferencia en los epipedón Melánico, y la generación de productos alofánicos en los
endopedones, aparece con frecuencia en los suelos de Cundinamarca en los pisos térmicos
medio, frío y muy frío.
69
ANEXO B.
La Lista de chequeo elaborada para el canal tibaitata, las compuertas deslizantes y los canales
de riego y drenaje (ver tabla B.1), se desarrolló por observación directa en campo
estructurada con los parámetros agua, suelo y estado de la infraestructura. Con el fin de
proporcionar la caracterización de las condiciones del campo para el agua destinada para uso
agrícola en el C.I Tibaitata.
SI NO
1.1.3 INFRAESTRUCTURA
1.2.1 INFRAESTRUCTURA
1.3.3 Infraestructura
SI NO
2.2 INSTALACIONES