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Brasilia, São Paulo,

Curitiba:
modernidades en transformación*
Hugo Segawa
APUNTES vol. 19, núm. 1: 132-145

Recuerda Oscar Niemeyer que en 1964 dores de Brasilia vislumbraron para el osado
André Malraux le comentó a Le Corbusier: “di- emprendimiento de trasladar la capital del país,
cen que Brasilia va a ser abandonada. Es una desde el siglo XVIII en la litoral cuidad de Rio de
lástima, más que bellas ruinas nos daría”1 Janeiro, para el altiplano central brasilero. Re-
(Werneck, 1978, p.112). En 1999, el crítico nor- visar el discurso de la época puede ilustrar las
teamericano Paul Goldberger escribió en el The expectativas de aquellos momentos y a pesar
New Yorker: de que al tomar fragmentos de charlas poda-
1 “Dizem que Brasília vai
128 ser abandonada. É uma con los sueños socialistas del modernis- mos estar reduciendo la complejidad de un
pena, mas que belas mo hace mucho descartados, y la econo- imaginario, algunos pocos intervalos servirán
ruínas nos daria”.
mía brasilera en recesión, la ciudad parece como ruta del camino de este ensayo.
2 “Com os sonhos
socialistas do un fantástico remanente de los ideales Brasilia como epopeya, la “Capital del fu-
modernismo há muito utópicos, a pesar de no haberse tornado turo y la esperanza”, constituía el discurso pro-
descartados, e a
economia brasileira em
en un lugar desértico como lo tenían los pagado por el gobierno y divulgado en todo el
recessão, a cidade críticos de la época,” – en un ensayo en mundo. En las palabras de uno de los
parece um fantástico que se preguntaba: ¿por qué la capital está formuladores del nacional desarrollismo
remanescente dos ideais
utópicos, embora não más atrayente que nunca?2 (Goldberger, brasilero de los años 1950, el filósofo Roland
tenha se tornado um 1999, p. 5). Corbisier (1914-2005), la nueva capital era un
lugar deserto como
temiam os críticos da Brasilia completó 45 años en 2005, y la asunto estratégico-nacional:
época,” - em um artigo “metasíntesis”, como el presidente Juscelino Esa tarea [...] de desarrollo, de integración
em que se perguntava:
“porque a capital está Kubitschek (1902-1976) calificaba la capital nacional, de construcción de la nación
mais atraente do que que creó, parece menos ruinosa de lo que par- brasilera [...], a pesar de ser de índole eco-
nunca?” ”.
te del país que la rodea. Como decía la escrito- nómica y social, es fundamentalmente
3 “Esta cidade traçada ra Clarice Lispector (1920-1977), “Esta ciudad política e ideológica. No son las fuerzas
no ar”.
trazada en el aire”3 (1999, p. 294), sorprendió del mercado, entregadas a su espontanei-
4 “Brasília, cidade que
inventei”. hasta a su propio delineador, Lucio Costa (1902- dad, a su juego libre, que nos permitirán
1998): “Brasilia, ciudad que inventé”4 , decía corregir los desequilibrios internacionales
5 “Brasília está
funcionando e vai él, en su retorno a la ciudad después de una y los desequilibrios internos, promovien-
funcionar cada vez mais. larga retirada, en 1987, desconcertado con su do en el plazo que nos interesa, el desa-
Na verdade, o sonho foi
menor que a realidade. A vigor: “Brasilia está funcionando y va a funcio- rrollo armonioso y equilibrado del país. La
realidade foi maior, mais nar cada vez más. En verdad que el sueño fue tarea es urgente porque se trata de redu-
bela”.
menor que la realidad. La realidad fue más, más cir, en corto plazo, la discrepancia entre
* Todo el material gráfico bella”5 . (Relatório do Plano Piloto de Brasilia, nuestro atraso, nuestra pobreza, y el pro-
es propiedad del autor. 1991, p. 8). greso y la riqueza de los países altamente
Texto original en
portugués, traducido por
Posiblemente para un foráneo no será fá- desarrollados. Se trata de recuperar el
Luisa Durán Rocca. cil comprender la representación que los crea- tiempo perdido y de convertir el espacio
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6 Essa tarefa [...] de en tiempo, la geografía en historia 6 . brasileras habían acumulado después de la
desenvolvimento, de
integração nacional, de (Corbisier, 1960, p. 46). segunda guerra8 , la nueva capital se prestaría
construção da Nação El presidente Juscelino Kubitschek —eje- como escenario y palco de la capacidad crea-
brasileira [...], embora
seja de conteúdo cutivo del ideal del desarrollo por vía de la dora y original de un pueblo manifestando su
econômico e social, é industrialización—, en cuyo mandato entre emancipación cultural y afirmando una nueva
fundamentalmente
política e ideológica. Não
1956 y 1960 promovió el concurso urbanísti- condición de país en vías de desarrollo, antici-
são as forças do co e inauguró la nueva capital el 21 de abril pando cambios sociales:
mercado, entregues à de 1960, definió su construcción como una La construcción de la capital certifica la
sua espontaneidade, ao
seu livre jogo, que nos prioridad de naturaleza simbólica. En apolo- capacidad de crear la instancia pedagógi-
permitirão corrigir os gía de Corbisier: ca suprema, la ciudad que no sólo con-
La prisa con que está siendo construida tenga obras de arte, sino que sea, ella
Figuras 1 y 2: corresponde a la necesidad de ganar tiem- misma, una obra de arte. A partir de este
Catedral de Brasilia.
Oscar Niemeyer, (1958- po, de quemar etapas, y atiende al ritmo momento, en que se revela capaz de crear
1970). 1994. de urgencias que debe caracterizar nues- la Metrópoli como expresión auténtica de
tro desarrollo. Si no fuera construida así, su sentimiento y de su visión del mundo,
sobre la base de una motivación implaca- un pueblo afirma, realmente, su fuerza
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Figura página anterior:


ble, tal vez nunca fuera edificada o fuera creadora en el campo de la cultura. [...]
Palacio Presidencial del
Planalto, Brasilia. Oscar demasiado tarde7 . (1960, p. 56). El plan urbanístico, tal como se presenta
Niemeyer, (1958-1960). Ciudad-alegoría que capitalizaba el pres- en ese trabajo ejemplar que es el relatorio
2005
tigio internacional que el arte y la arquitectura de Lucio Costa, y la realización arquitectó-
nica de Oscar Niemeyer, tal vez el mayor
artista plástico brasilero, constituyen por
la audacia y por la originalidad, la prueba
elocuente de que no estamos más conde-
130 nados a traducir, imitar, o copiar apenas,
sino que ya nos volvimos capaces de afir-
mar libremente nuestro genio, nuestra
fuerza creadora9 . (Corbisier, s.f., p. 63).
Este discurso, preparado en 1960 en el
interior del Instituto Superior de Estudios
Brasileiros ( ISEB ), brazo del Ministério da
Educação e Cultura implementado por
Corbisier, configuraba la visión oficial de la épo-
ca y, en un cierto sentido, caracterizó una
cosmovisión que sustentaba la euforía nacio-
nal-desarrollista de alcance casi consensual en
el país.
Dijimos “casi” porque también en aquel
momento, otro fundamental analista de la
identidad y de la cultura brasileras, el soció-
logo Gilberto Freyre (1900-1987), denuncia-
ba una “censura oblíqua” de sus posiciones
críticas acerca de la nueva capital en el libro
Brasis, Brasil, Brasilia, editado por primera
vez en Portugal. En el discurso del sociólogo,
se comenta que había sido invitado por el en-
tonces presidente Juscelino Kubitschek, su
amigo personal, para opinar sobre cómo se
estaba llevando a cabo, aun por la mitad, la
construcción de Brasilia y opinó diciendo que
en varios aspectos le parecía satisfatoria; que
la arquitectura, desde el punto de vista es-
cultural, iba a causar verdadera conmoción tos como ciudad-fantasía o quimera urbana ali- desequilíbrios
internacionais e os
mundial, como creación original, desde el mentaron la mitología o la antimitología de una desequilíbrios internos,
punto de vista estético. Más que estaba to- ciudad vista con desconfianza y hasta prejui- promovendo no prazo
que nos interessa, o
talmente deficiente en la parte social: no ha- cio, como presunción de utopía. desenvolvimento
bían sido escuchados los ecologistas, los harmonioso e
equilibrado do País. A
cientificos sociales, los geógrafos, los educa- Pátina moderna tarefa é urgente porque
dores, los urbanistas; no habían sido escu- se trata de reduzir, a
chados otros, más que los dos arquitectos A un quinquenio de completar medio siglo, Bra- prazo curto, a
discrepância entre o
responsables por la arquitectura puramente silia es la hermana menor de las ciudades con- nosso atraso, a nossa
estética y, sobre varios aspectos, abstrata, de sideradas por la Organización de las Naciones pobreza, e o progresso e
a riqueza dos países
Brasilia (Freyre, 1982). Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura altamente
Freyre no fue la única voz discordante; por (UNESCO) como Patrimonio de la Humanidad, al desenvolvidos. Trata-se
de recuperar o tempo
lo general, Brasilia se tornó en objeto sistemáti- lado de Lijiang (sus orígenes se remontan al si- perdido e de converter o
co de críticas. Internamente muchas reacciones glo XII), Quito o Potosí (ciudades “inventadas” por espaço em tempo, a
geografia em história.
provenían de divergencias políticas e ideológi- los colonizadores españoles hace cuatro siglos),
cas, sobre todo con los cambios de perspecti- o nuestras Olinda o Goiás Velha – cuyas pátinas 7 A pressa com que
está sendo construída
vas posgobierno Kubitschek y el golpe militar de y ruinas hacen parte del encanto urbano. La es- corresponde à
1964. Internacionalmente, las apreciaciones se critora Clarice Lispector escribía en 1970: “miro necessidade de ganhar
tempo, de queimar
situaban entre la admiración y la inquietud: Brasilia como miro Roma: Brasilia comenzó como etapas, e atende ao
¿cómo un país de relativa periferia osaba enfren- una simplificación final de ruinas. La hiedra aún ritmo de urgências que
deve caracterizar o
tar el desafío de la ciudad contemporánea ma- no creció”10 (1999, p. 293). nosso desenvolvimento.
terializando los preceptos hasta entonces Acostumbro a impacientar a mis interlo- Se não fosse construída
cutores urbanistas y del patrimonio histórico assim, sob o acicate de
teóricos del urbanismo moderno concebido en
uma determinação
las primeras décadas del siglo XX? A Brasilia se con la paradoja del concepto de “centro his- implacável, talvez nunca
tórico”. El permanente conflicto entre la pre- fosse edificada ou o
dirigieron las luces por la novedad y por lo im-
fosse tarde demais.
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previsto que representaba la iniciativa en el servación del núcleo histórico y la expansión
8 Véase: Hugo Segawa
ámbito mundial a mediados del siglo pasado. urbana, considerando la ciudad como una to-

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(1999).
El abismo entre el discurso redentor en la talidad, un conjunto vivo. Los centros históri-
génesis de la ciudad y la materialización de esas cos tradicionales son tejidos de trazo antiguo
aspiraciones, en la coyuntura de los aconteci- (calles estrechas y pintorescas, concentración
mentos políticos a partir de 1964, tornaron la de monumentos, infraestructura precaria y
nueva capital en un fuerte argumento para des- semiobsoleta) presionados por la ciudad nue-
acreditar las doctrinas del urbanismo moder- va (sistema vial de la era del automóvil,
no, como fueron preconizadas por los congresos parcelamientos de acuerdo con normas “mo-
internacionales de arquitectura moderna (CIAM) dernas”). El ejemplo constante es el centro
y otras vertientes de índole modernista. Epíte- histórico de Ouro Preto, que a cada momento

Figura 3:
Palacio de Itamaratí,
sede del Ministerio de
Relaciones Exteriores,
Brasilia. Oscar Niemeyer,
(1962). 1982
Figura 4:
Eje monumental de
Brasilia. 1994.
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9 A edificação da Capital
atesta a capacidade de
criar a instância
pedagógica suprema, a
cidade que não apenas
contenha obras de arte, comparece en los noticieros, sea por los ac- Brasilia, como artifício, fue objeto favorito de
132 mas seja, ela própria, cidentes con transporte de carga, problemas la crítica internacional. Manfredo Tafuri, célebre y
uma obra de arte. A partir
desse momento, em que geológicos o la amenazadora expansión ur- controvertido crítico marxista de Venecia, consi-
se revela capaz de criar a bana moderna, a denigrar el entorno. En con- deraba a Brasilia “nacida de intenciones
Metrópole como
expressão autêntica de
traste, el Plano-Piloto de Brasilia —el área demagógicas, en medio de la selva (sic), organi-
seu sentimento e de sua trazada por Lucio Costa, con los edifícios de zado en un alegórico e infantil proyecto...”13 (Tafuri
visão de mundo, um povo
afirma, realmente, a sua
Niemeyer, el sector inscrito como Patrimonio & Dal Co, 1986). El británico Kenneth Frampton
força criadora no campo Histórico y Artístico Nacional—, es el “centro (1980) llegó a situarla también en la selva. Estas
da cultura. [...]
histórico” que debe ser preservado, con es- pseudogeneralizaciones de Brasilia, que de ma-
O plano urbanístico, tal tructura inovadora (autopistas, superquadras, nera general difunden imágenes de una urbe ári-
como se apresenta nesse
trabalho exemplar que é o extensas áreas verdes, etc.), servido de todo da en fotos de la ciudad recién construida
relatório de Lucio Costa, e el confort, presionado por las ciudades-saté- (bastante distinta hoy, décadas después de inau-
a realização arquitetônica
de Oscar Niemeyer, talvez lites, de trazados convencionales y precarie- gurada) y en algunos casos, con graves errores
o maior artista plástico dad de infraestrutura. de información, son las que llevan a dudar sobre
brasileiro, constituem
pela audácia e pela La vitalidad de la capital casi-balzaquiana la calidad de esas observaciones14. Asimismo, in-
originalidade, a prova hizo sentenciar a Lucio Costa: “Brasilia tiene telectuales serios no son inmunes a los típicos
eloqüente de que não
estamos mais raíces brasileras, reales, no es una flor de in- estereotipos sobre el Brasil.
condenados a traduzir, vernadero”11 . Condición comentada por Clarice Por otro lado, estudios más profundos15
imitar, ou copiar apenas,
mas de que já nos Lispector: tratan cuestiones concretas y las palabras que
tornamos capazes de Brasilia es artificial. Tan artificial como se alardean en sus títulos —segregación, ex-
afirmar livremente o
nosso gênio, a nossa
debía haber sido el mundo cuando fue clusión, control social, participación política,
força criadora. creado. Cuando el mundo fue creado, fue ciudadanía, crisis— enfocan análisis que privi-
10 “Olho Brasília como necesario crear un hombre especialmen- legian el conocimiento de los procesos políti-
olho Roma: Brasília te para aquel mundo. [...]. No sabemos cos y sociales formadores de la economía del
começou como uma
simplificação final de cómo seríamos si hubiésemos sido crea- espacio urbano, en algunos casos agotando
ruínas. A hera ainda não dos en primer lugar, y después el mundo la comprensión de la arquitectura y del urba-
cresceu”.
deformado por nuestras necesidades. Bra- nismo como desprovistos de carga simbólica
11 “Brasília tem raízes silia aún no tiene el hombre de Brasilia12 . específica. En otro extremo, la exacerbación
brasileiras, reais, não é
uma flor de estufa”. (1999, p. 292). de este aspecto: la autonomía pura de la ar-
quitectura y del urbanismo respecto a influen- Holston vió apenas el opuesto: su mate- 12 “Brasília é artificial.
Tão artificial como devia
cias contextuales. rial enfoca exclusivamente a una crítica ter sido o mundo quando
La más respetable crítica a Brasilia es la radical hecha por parte de las personas foi criado. Quando o
mundo foi criado, foi
tesis defendida en la Universidad de Yale por el que viven en Brasilia, lo que obviamente
preciso criar um homem
antropólogo norteamericano James Holston, no corresponde a la realidad. La eviden- especialmente para
publicada en los Estados Unidos en 1989 y tra- cia por mí trabajada mostrará que su ma- aquele mundo. [...]. Não
sabemos como seríamos
ducida en Brasil con el título A Cidade terial fue extremadamente selectivo. se tivéssemos sido
Modernista: uma Crítica de Brasilia e sua Además, Holston argumentó como si to- criados em primeiro
lugar, e depois o mundo
Utopia. Fueron dos años de trabajo de campo das las clases sociales tuvieran el mismo deformado às nossas
(entre 1980 y 1982), lo que asegura una in- tipo de expectativa sobre la forma de la necessidades. Brasília
ainda não tem o homem
cuestionable consistencia del trabajo, que lo ciudad. Él ignoró los distintos modos de de Brasília”.
distingue de aquellos críticos que jamás han inserción de agentes sociales en el fun-
13 “Nascida de
pisado el país. Sin embargo, su tesis viene sien- cionamiento de una sociedad contradic- intenções demagógicas,
do contestada por otra tesis, presentada al toria, que implican distintos modos de vida no meio da selva (sic),
organizado em um
Bartlett School of Architecture and Planning de y, de la misma forma, distintos modos de alegórico e infantil
Londres en 1998 por el arquitecto Frederico de producir, usar y evaluar el espacio urba- plano...”.
Holanda, de la Universidad de Brasilia, cuya no17 . (Holanda, 2002, p. 41). 14 Estas observaciones
editora la publicó con el título O Espaço da En su investigación de campo, Holanda fueron dadas por Ruth
Verde Zein y Ana Gabriela
Exceção, en 2002. Holanda teje duras críticas constató que “vivir en el Distrito Federal es con- Godinho. Véase: Verde &
a las conclusiones de Holston: “él identificó siderado ‘bueno’ o ‘óptimo’ para la mayoría, en Godinho (2000).

correctamente un conjunto de mitos sobre la todas las clases sociales y/o niveles de ingre- 15 Entre los cuales
podemos relacionar: Aldo
capital brasilera, pero terminó por ofrecer lo que sos”18 (2002, p. 41), contradiciendo lo que él Paviani (1985, 1989,
afirmó querer evitar: una visión reduccionista y llama de “crítica dogmática”, como la de 1991, 1996, 1999),
Matheus Gorovitz (1985),
dogmática sobre la ciudad y las representacio- Holston. Entre la Brasilia de Holston e la Brasi-
y Luiz Alberto de Campos
nes que las varias clases sociales hacen de lia de Holanda, habrá surgido el “hombre de Gouvêa (2000). Entre 133
ella”16 . Holanda se concentró en las reflexio- Brasilia” de Clarice Lispector. publicaciones no-
brasileñas: Norma

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nes en torno de la nueva capital, producidas Un estudio promovido por la Fundação Evenson, (1973), David
después de los años ochenta, algunas de las Getúlio Vargas en 2005, con base en un Índice G. Epstein (1973), L.
Arturo Espejo (1984),
cuales ya habían enfatizado la aprobación de de Condiciones de Vida19 , constató que Brasi- Alex Shounatoff (1987) y
la ciudad por sus habitantes. En palabras del lia es la ciudad con el mayor índice de satisfac- Rosane Bauer, (1997).
profesor de la Universidad de Brasilia: ción entre las 26 capitales brasileras 16 “Ele identificou
corretamente um
conjunto de mitos sobre
a capital brasileira, mas
terminou por oferecer o
que afirmou mais querer
evitar: uma visão
reducionista e dogmática
sobre a cidade e as
representações que as
várias classes sociais
fazem dela”.

Figura 5:
Plaza de los Tres
Poderes, Palacio de
Justicia y Palomar,
Brasilia. (1958). 1982.
Ele ignorou os vários investigadas. Su índice es de 113,52% por en- puede afirmar que esa arquitectura de prota-
modos de inserção dos
agentes sociais no cima del promedio nacional; Rio de Janeiro es gonistas como Lucio Costa20 (1902-1998),
funcionamento de uma la 10ª ciudad, evaluada con 20,50% y São Paulo Oscar Niemeyer21 (n. 1907), Affonso Eduar-
sociedade contraditória,
que implicam distintos la 11ª ciudad, con 18,91% de satisfacción por do Reidy22 (1909-1964), los hermanos Ro-
modos de vida e, assim encima del promedio brasilero. También fue berto, Jorge Moreira23 (1904-1992), Álvaro
sendo, distintos modos
de produzir, usar e
considerada por sus habitantes, la ciudad con Vital Brazil 24 (1909-1997), Roberto Burle
avaliar o espaço urbano”. menor violencia y vandalismo. (São Paulo es sólo Marx25 (1909-1994) y otros se convirtió en
18 “Morar no Distrito la 11ª ciudad en el ranking de satisfacción, el lenguaje corriente y consensual en la ar-
Federal é considerado 2005). quitectura del país. Influenció la formación y
‘bom’ ou ‘ótimo’
majoritariamente, em Cuarenta y cinco años después de su in- el destino de nuevos arquitectos —creyentes
todas as classes sociais auguración, la capital del país sintetiza las pa- en las perspectivas transformadoras de esa
e/ou faixas de renda”.
radojas de una nación en que conviven arquitectura—, así como, con menos preten-
19 Grado de satisfacción hiperdesarrollo y subdesarrollo. Brasilia madu- sión y cierta ingenuidad, fue asimilada como
de los habitantes de una
ciudad que contiene ró territorialidades simbólicas. Sus espacios formalismo por el mercado inmobiliario y has-
doce variables albergan ritos populares en un escenario mo- ta en construcciones populares: se convirtió
condensables en torno
de: renta familiar, numental. La permeabilidad entre espacio pú- en una moda.
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alimentación, servicios blico y lugar político establece una relación que En una década de aparentes esperanzas,
de agua, recolección de
basuras, iluminación, configura y refuerza identidades sociales y cons- que se inició en Brasil bajo el signo de la inau-
drenage urbano, energía trucción de ciudadanía. El paisaje edificado del guración de Brasilia, São Paulo se afamaba
eléctrica, problemas de
Plan Piloto parece inmutable, a pesar de que la como la metrópoli industrial y el principal polo
polución ambiental,
violencia urbana, ciudad se mueve constantemente. Entre la exu- de desarrollo tecnológico del país. La ciudad
vivienda. berancia formal de los monumentos creados se consolidaba como el mayor centro de circu-
20 Lucio Costa (1995). por Niemeyer y la efervescencia social en las lación de riquezas, de gran dinámica económi-
21 Lionello Puppi (1988); ciudades-satélites, se conforma la memoria ca y efervescencia cultural. Las grandes figuras
David Underwood
134 urbana de la capital. en el panorama arquitectónico paulista, con-
(1994); Jean Petit,
(1995); Curves of Time: temporáneas a los maestros cariocas, eran Rino
the Meamoirs of Oscar Levi26 (1901-1965) y Oswaldo Arthur Bratke27
Niemeyer (2000).
La vanguardia en São Paulo
(1907-1997), cuyas realizaciones de la madu-
22 Nabil Bonduki (1999).
La arquitectura moderna brasilera desarrolla- rez divergían de los modelos de Rio de Janeiro,
23 Jorge Czajkowski da a partir de las experiencias realizadas por de influencia “corbusieriana”. En São Paulo,
(1999).
los arquitectos de Rio de Janeiro desde los además del tributo natural a los maestros
24 Álvaro Vital Brazil
(1986); Roberto Conduru
años de 1930 tuvo en Brasilia su apogeo. Se cariocas, circulaban informaciones de la arqui-
(2000).
25 Flávio L. Motta
(1986); William Howard
Adams (1991); Sima
Eliovson (1991); Rossana
Vaccarino (2000); José
Tabacow (2004).
26 Rino Levi (1974);
Renato Anelli, Abílio
Gerra y NelSão Kon
(2001).
27 Hugo Segawa y
Guilherme Mazza
Dourado (1997).

Figuras 6 y 7:
Edificio de la Facultad
de Arquitectira y
Urbanismo, Universidad
de São Paulo. Joao
Batista Vilanova Artigas,
(1962-1969). 1976.
tectura norteamericana: Frank Lloyd Wright, Las proposiciones teóricas e ideológicas 28 Marcelo Ferraz
(1997); João Masao
Richard Neutra, Mies van der Rohe, las Case del grupo en torno de Vilanova Artigas busca- Kamita (2000); Vilanova
Study Houses eran temas frecuentes en los cír- ban fundamentar tesis-utopías que, lejos de Artigas Arquitecto: a
Cidade é uma Casa, a
culos de discusión de los arquitectos y estudian- corresponder apenas a teorías arquitectónicas Casa é uma Cidade
tes del Mackenzie y de la Universidad de São tradicionales, elevaban el asunto a una dimen- (2001).
Paulo, las dos únicas escuelas de arquitectura sión de la ética política y social. Nunca antes 29 Es posible establecer
de la ciudad. En este ambiente ganaba peso la en el Brasil hubo un esfuerzo claro de relacio- un paralelo con la ética
pregonada por el
figura de João Batista Vilanova Artigas28 (1915- nar una serie de tesis con realizaciones con- Brutalismo de la pareja
1985), personaje influyente de la arquitectura cretas, como muchas de las obras proyectadas británica Smithson; sin
embargo, este tema sale
brasilera de las conturbadas décadas de 1960 por el propio Artigas o las de colegas más jove- de los límites del
y 1970. nes. Ética y estética nunca estuvieron tan en presente ensayo.
Un líder natural, profesor elocuente y bien evidencia. Una estética con ética, una ética con
relacionado, militante de la izquierda, Artigas estética; juego de palabras que alimentó las dis-
fue el responsable, por la claridad conceptual y cusiones y la práctica de la arquitectura en São
la sistematización de ideas, de la reorganiza- Paulo en aquellos años 1960/197029 .
ción curricular de la Facultad de Arquitectura y Además de un discurso teórico bien ar-
Urbanismo de la Universidad de São Paulo, de ticulado, las realizaciones más expresivas de
la cual el edificio en la Ciudad Universitaria es esa arquitectura eran impactantes, cargadas
una materialización inconclusa. El fue el ideó- de iconoclastías y extremismos propios de los
logo de una arquitectura dicha progresista, de fulgurantes años sesenta, y aun hoy son
fuerte sentido nativista compartiendo el polémicos y no bien asimilados. Esa arquitec-
desarrollismo de la época. Al sustentar la no- tura debería ensayar modelos de espacios
ción de proyecto como demostración de sobe- para una sociedad democrática y libre. Para
ranía nacional, como un instrumento de sus practicantes más experimentalistas, la
emancipación política e ideológica, Artigas es- ciudad era concebida como un espacio co- 135
tableció una referencia conceptual rápidamen- lectivo, de convivencia, de encuentro. El te-

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te asimilada y discutida por sus colegas y rritorio urbano debería ser de todos y así
estudiantes en plena vigencia del ideal nacio- proyectado, con la abolición de las estructu-
nal-desarrollista, siguiendo una estructura di- ras urbanas tradicionales. Brasilia, en sus ca-
dáctica que educó varias generaciones de racterísticas fundamentales, era un
arquitectos paulistas y también influenció los paradigma de ciudad que podría ser trabaja-
currículos de cursos de todo el país durante el do como un modelo urbano aplicable al ra-
paso a la década de 1970. ciocinio del edificio. Muchas de las obras
30 Sibyl Moholy-Nagy aisladas de esa arquitectura pueden ser exa- II Guerra sugieren la diseminación del hormi-
(1964); William Niño
Araque & Carmen C. minadas por la relación que articulan con la gón a la vista en obras de arquitectos como el
Araujo (1999). ciudad: sea estableciendo una simulación de venezolano Carlos Raúl Villanueva30 (1900-
31 Alberto Montealegre continuidad urbana, sin alteración de la in- 1972), el chileno Emilio Duhart31 (1917-2006)
Klenner (1994).
transigente parcelación del suelo de la estruc- y principalmente los brasileiros, entre otros. To-
32 Esta denominación tura agraria (en la práctica, resultando de una davía, lejos de ser considerado apenas un sis-
que parece abrigar
mucha cosa sin revelar inocua paradoja) o, por lo contrario, por la su- tema constructivo con una estética expresiva,
nada, en realidad es una puesta hostilidad del entorno, un ensimisma- el concreto armado era el o front tecnológico
simplificación que no
toma en cuenta la miento atribuyendo carácter introspectivo y más avanzado disponible para los arquitectos
elaboración ideológica austero a los edifícios, pero con magníficos en Brasil. El hormigón era una tecnología que
que hay detrás de esas
interiores abiertos e integrados, como para efectivamente conoció grandes avances en los
obras identificables
como “paulistas”. constituir un microespacio de libertad como tableros de dibujo brasileños y el cálculo
33 Maria Isabel Villac negación del fragmentado. estrutural brasileño fue considerado como uno
(1996); Rosa Artigas Formalmente, la expresión básica de esa de los más sofisticados del mundo. Gracias a
(2000); Annette Spiro
(2002). arquitectura se manifestaba en un purismo la deferencia de Oscar Niemeyer y su apología
geométrico y en el predominio del sistena cons- del material como soporte ideal para sus ela-
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tructivo: el hormigón a la vista - material de boraciones plásticas, el hormigón como explo-


amplia disponibilidad en el país, sin la compe- ración de sus características formales y técnicas
tencia de los sistemas metálicos, en ese mo- pasó a ser la metáfora de auto-afirmación tec-
Figuras 8 y 9:
mento inaccesibles a la construcción civil. nológica de la arquitectura y la ingeniería en
Casa Millan. Paulo
Mendes da Rocha, Evidentemente, en la América Latina, el influjo los proyectos de los arquitectos paulistas. Ade-
(1970). 1976. de las realizaciones de Le Corbusier en la pos- más, el protagonismo explícito de la estructura
en la arquitectura de Niemeyer no contrariaba
el dictamen miesiano de valorización de la es-
136 tructura. Los paulistas se apropiaron sabiamen-
te de esas lecciones.
Hay un punto en común al identificar la ar-
quitectura de grandes estructuras en concreto
a la vista como productos o derivaciones de la
llamada “Escuela Paulista”32 de arquitectura que
deben ser vistas como una continuidad de la
arquitectura moderna hecha por los cariocas en
los años 1940 y 1950 teniendo como exponen-
te a Oscar Niemeyer y que, tamizada por una
relectura paulista, se transformó en otra mani-
festación, sin pérdida de la esencia ni de la exu-
berancia que caracteriza la arquitectura de la
cual derivó. Arquitectos como Paulo Mendes da
Rocha33 (n. 1928), Fábio Penteado34 (n. 1928),
Carlos Millan (1927-1964), Júlio Katinsky (n.
1932), João Walter Toscano (n. 1933)35 , Eduar-
do de Almeida (n. 1933), Abrahão Sanovicz
(1934-1999), Siegbert Zanettini (n. 1934)36 ,
Décio Tozzi (n. 1936)37 , Paulo Bastos (n. 1936),
Ruy Ohtake38 (n. 1938), Marcos Acayaba (n.
1944) y otros que no obstante presentar trayec-
torias con características propias y personales,
pueden ser agrupados en esta tendencia. Y so-
lamente con la caracterización de esa tenden-
cia es posible comprender la posición de otros
arquitectos igualmente notables en el panora-
ma paulista, como Lina Bo Bardi39 (1914-1992),
Figura 10:
Casa en Guaruja. Marcos
Acayaba, (1998). 1997.

Joaquim Guedes40 (n. 1932), Sérgio Ferro (n. na y de todas las intenciones redentoras que el
1938) y Rodrigo Lefèvre (1938-1984)41 . movimiento moderno de la arquitectura inten-
Las formas de esa arquitectura, menos tó alcanzar. Vilanova Artigas murió en 1985, y
que las ideas, se difundieron en el país, en una con él, toda una utopía arquitectónica de trans-
legitimación contradictoria. Tomada como re- formaciones que Brasil simbólicamente siguió. 137
presentante de la arquitectura heróica de los
años 1930-1960 y al mismo tiempo conceptua- Ciudad ideal vs. Ciudad real

BRASILIA, SÃO PAULO, CURITIBA: MODERNIDADES EN TRANSFORMACIÓN


da como una norma de buena arquitectura bra-
sileña, los contenidos instauradores de esa En la edición del 11 de enero de 1993, el se-
vanguardia arquitectónica fueron apropiados de manario norteamericano Time dedicaba su por- 34 Fábio Penteado:
manera burocrática. Los arquitectos eludieron tada el tema “mega-ciudades”. Anunciaba: Ensaios de Arquitetura
“Para el año 2000 más del 50% de la especie (1998).
las posibilidades de transformación del Brasil
humana vivira en las ciudades incluyendo 21 35 Rosa Artigas (2002).
rumbo al progreso así como la posibilidad de
atender las necesidades sociales. La práctica megaciudades de más de 10 millones de habi- 36 Siegbert Zanettini
(2002).
arquitectónica paulista de los años 1960 —a tantes. Algunas de ellas podrán manejar la ex-
plosión de sus dimensiones. En otras el caos 37 Arquiteto Décio Tozzi
pesar del golpe militar de 1964— no abandonó (2005).
el ideario positivista utópico de un país nuevo, será evidente”42 . La revista introducía el asun-
38 La Arquitetura de
económica y socialmente resuelto. Asi mismo, to contraponiéndose a dos modelos: el desas- Ruy Ohtake (1994);
distante de cualquier transformación redento- tre de Kinshasa, Zaire, y la calidad de Curitiba, Roberto Segre (1999).

ra de la sociedad brasileña, la persistencia y/o Brasil. 39 Marcelo Ferraz


Desde la década de 1960 el Brasil era un (1993).
la reproducción acrítica de las actitudes
proyectuales presentes en la arquitectura país con más de la mitad de su población en 40 Mônica Junqueira de
Camargo (2000).
paulista realzaron la contradicción entre el ideal las ciudades. En los años 1980, en el medio
urbano habitaban 75% de los brasileños. Se- 41 Pedro Fiori Arantes
y la realidad. La mera transposición de mode- (2002); Ana Paula Koury
los formales libres de convicciones ideológicas gún la ONU, la segunda y la décimo primera (2003).
reforzó la banalización de una utopía. En la mayores metrópolis del planeta están en el país: 42 “By the year 2000,
década de 1980, el Brasil no era más el país São Paulo (19,2 millones de habitantes) y Rio more than 50% of
humankind will live in
del futuro simbolizado por la construcción de de Janeiro (11,3 millones de habitantes).
cities, including 21 mega
Brasilia. Los sueños progresistas hacía mucho Lejos de esas megaestadístcas, Curitiba, cities of more than 10
capital del Estado de Paraná, revela dimensio- million people. A few are
tiempo se habían acabado. En la arquitectura coping with their
europea y norteamericana, el posmodernismo nes más modestas: se trata de una ciudad con exploding dimensions.
1,6 millones de habitantes (2000), que conme- Elsewhere, chaos looms”.
anunciaba la muerte de la arquitectura moder-
43 N. de. T: En la moró su tricentenario en 1993. Una discreta cación, recreación e industria. En 1970, la no-
administración pública
brasilera, el cargo de metrópoli que en 1970 albergaba 500 mil per- minación del entonces presidente del Institu-
prefeito equivale al de sonas. Una ciudad que, al lado de otras islas to, el arquitecto Jayme Lerner (n. 1937), como
alcalde.
urbanas de prosperidad en Paraná, asimiló prefeito43 , dio inicio a la materialización de las
44 La Organización
entre 1970 y 1985 la migración de 1,5 millo- soluciones formuladas por el IPPUC, efectivamen-
Mundial de la Salud
recomienda el índice de nes de trabajadores rurales para sus periferias, te, una fábrica de ideas las cuales Lerner sa-
16 m²/habitante. víctimas de la sustitución de la cultura del café biamente convirtió en realidad. Una razonable
por los cultivos mecanizados de la soya y del continuidad de la filosofía administrativa ase-
trigo. No obstante la fuerte migración campo- guró la implementación gradual de las metas
ciudad, Curitiba desde el final de los años 1980 establecidas en los planes, consolidando un
es considerada una de las ciudades brasileras conjunto de propuestas integradas de
con la mejor calidad de vida urbana del país. racionalización de recursos, resolución de pro-
Reconocimientos mediante premios y reporta- blemas urbanos crónicos y de mejoría de la
jes halagadores, de publicacioness de varias calidad de vida. Lerner ejerció el cargo de
partes del mundo alimentan el sentido de prefeito en más de dos mandatos, el último de
autoestima, de corresponsabilidad y solidaridad ellos terminado en 1992. Desde entonces lo-
APUNTES vol. 19, núm. 1: 132-145

de la población curitibana, y el carisma de la gró elegir sucesores ligados a su grupo hasta


ciudad como un paraíso urbano. En 2000, la el 2004. El mismo ejerció el cargo de Goberna-
revista enpresarial Exame eligió a Curitiba como dor del Estado de Paraná por dos mandatos
la mejor ciudad para negocios en el Brasil. consecutivos, hasta el 2003, a pesar de ha-
El inicio de la estructuración de esa políti- berse deteriorado su prestigio político recien-
ca de administración urbana data de 1965, temente.
cuando el arquitecto Jorge Wilheim (n. 1928) Las estadísticas son elocuentes: en 1970,
desarrolló la base del Plan Director de Curitiba. la ciudad mantenía 0,46 m² de área libre por
138 Enfatizando en la organización de un grupo de habitante; hoy, son cerca de 54 m² por
planeación local, la creación del Instituto de curitibano44 . Son alrededor de 17 km² de par-
Pesquisa e Planejamento Urbano de Curitiba ques, jardines, bosques, centros deportivos y pla-
(IPPUC), estableció una línea estratégica de pro- zas, correspondiendo al 4% del área urbana, de
yecto de desarrollo integrado, con grupos 430 km². Parte significativa de esas áreas libres
interdisciplinares trabajando en los temas de surgió con la creación de parques lineales a lo
saneamiento, transporte público, tráfico, edu- largo de los ríos que atraviesan la ciudad. Ante-

Figura 11:
Estación Tubo de buses
urbanos. Jayme Lerner,
(1991). 2003.
riormente cubiertas de construcciones clandes-
tinas y basura, al establecerse una disciplina
para la ocupación de las márgenes de los ríos,
su reforestación y desobstrucción, rectificación
y aumento de los cursos de agua, se formaron
unas cuencas naturales de drenaje que elimi-
naron en los últimos treinta años las constantes
inundaciones que arrasaban la ciudad.
El sistema de transporte urbano de
Curitiba es considerado uno de los más eficien-
tes del mundo. Los buses son utilizados por
75% de la población, representando desplaza-
mientos del orden de 1,3 millones de pasaje-
ros por día. Con esto, cerca del 28% de la flota
de 500 mil automóviles particulares permane-
ce estacionada en casa, frente a la eficiente
opción de transporte colectivo. La racionalidad
del sistema permite una economía de 20% de
combustible, comparada con las estructuras de
transporte masivo de ciudades semejantes,
además de disminuir la polución del aire, por
emisión de gases por motores.
El reciclaje y la revitalización arquitectó-
nica son conceptos amplios que se incorpora-
ron a la cultura de Curitiba: un antiguo polvorín 139
de inicio del siglo XX fue transformado en tea-
tro; una fábrica de cola se tornó en centro de

BRASILIA, SÃO PAULO, CURITIBA: MODERNIDADES EN TRANSFORMACIÓN


creatividad dentro del parque São Lourenço;
tres canteras abandonadas —fracturas en el
paisaje de la periferia de Curitiba— fueron ocu-
padas con equipos públicos: el Espacio Cultu- Sin embargo, y a pesar de los esfuerzos, Figura 12:
ral Paulo Lemminski (espacio para grandes Curitiba es una ciudad lejos de la utopía. A pe- Universidad Libre del
Medio Ambiente.
espectáculos al aire libre, de presentaciones sar de haberse colocado en tercer lugar en la Domingos Bongestabs,
de rock a canto lírico), la Ópera do Arame (au- encuesta de satisfacción entre ciudades brasi- (1992). 1993.
ditorio en estructura metálica con 2.400 asien- leñas antes mencionada, es apenas la décimo
Figura 13:
tos) y la Universidad Livre do Medio Ambiente quinta ciudad en relación al problema de la vio- Calle 24 horas. Abraao
(edificio en estructura de madera destinado lencia y vandalismo. (Brasilia es elegida la me- Assad, Celia Bin y
al desarrollo de intercambio de experiencias jor y menos violenta, 2005). Simone Soares, (1991).
1993.
ambientales de Curitiba). El centro tradicional “Capital ecológica”, “ciudad-modelo”, “ciu-
de la ciudad fue transformado con la dad-laboratorio”, son algunos títulos coleccio-
peatonalización de calles, preservación y tra- nados por Curitiba. Excelente estrategia de
tamiento de edificios antiguos e instalación de marketing para la ciudad que anticipó y acom-
nuevas atracciones, como la Rua 24 Horas, un pañó preocupaciones mundiales de las últimas
espacio comercial y de recreación a la mane- décadas como ecología, sustentabilidad y
ra de las antiguas galerías europeas, abierto reciclaje.
día y noche. En los años 1990, obras como El Brasil es el país que construyó Brasilia,
los Faros del Saber, el Memorial de la Ciudad, la más fascinante y polémica experiencia urba-
las calles de ciudadanía y los memoriales nística de la modernidad del siglo XX, y es el
étnicos ostentan en algunos casos, arquitec- país impulsado por São Paulo, el mayor polo
tura de carácter escenográfico espetacular, de económico suramericano, una de las cinco ma-
fácil acceso público y polémica densidad ar- yores metrópolis del planeta. Entre la ciudad
quitectónica. totalmente planeada y la ciudad virtualmente
desgobernada, hay muchos otros aspectos co- Espejo, L. A. (1984). Rationalité et Formes
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Brasilia, São Brasilia, São Paulo, Curitiba:
Paulo, Curitiba: modernities in transformation

modernidades en Abstract
transformación This article shows the Brazilian panorama of modern ar-
chitecture based on three examples: Brasilia, Sao Paulo, and
(páginas 132-145) Curitiba. These examples represent observation laboratories
among the modernist city, the extrapolated metropolis and
the traditional city.
Brasilia, Sao Paulo and Curitiba reflect the different urban
and architectural realities in Brazil since 1960. The capital of
the country, opened in 1960, was considered the chimera of
Hugo Segawa es arquitecto, profesor asociado de la modern urbanism. The Athens Letter, created half century
Faculdad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de ago, gave the guidelines for the organization of this city, in
São Paulo. Autor de los libros Arquitectura latinoamericana which the urban vitality is still surprising. Sao Paulo, the cha-
contemporánea (2005), Prelúdio da Metrópole (2000); otic industrial metropolis, cannot find the way to resolve its
Arquiteturas no Brasil 1900-1990 (1998) y Ao Amor do públi- urban problems; nonetheless is the scenario for an architec-
co: jardins no Brasil (1996), entre otros. tural vanguard that masters the Brazilian picture between the
years of 1960 and 1970. Curitiba, the model city, emerges
like a paradigm in urban planning in the 70s. This is the real
Recepción
city where a non-modern planning discovers solutions for the
21 de febrero de 2006
traditional city.
Evaluación
3 de julio de 2006 Key words:
Aceptación
• City planning - Brazil - 20th century
17 de julio de 2006
• Heritage - Brazil - 20th century
Correspondencia • Modernism (architecture) - brazil 167
segawahg@usp.br • Architecture, modern - Brazil
• Urban interventions - Brazil - 20th century

RESEÑAS
Resumen
Este artículo presenta un panorama de la arquitectura
moderna brasilera a partir de tres ejemplos - Brasilia, São
Paulo y Curitiba- que constituyen laboratorios de observación
entre la ciudad modernista, la metrópoli extrapolada y la ciudad
tradicional.
Brasilia, Sao Paulo y Curitiba reflejan las diferentes
realidades urbanas y arquitectónicas en Brasil a partir de
1960. La capital del país, inaugurada en 1960, fue considerada
la quimera del urbanismo moderno, la ciudad organizada
conforme los dictámenes de la Carta de Atenas que,
transcurrido casi medio siglo desde su creación, sorprende
por su vitalidad urbana. Sao Paulo, la caótica metrópoli indus-
trial, no encuentra caminos para resolver sus problemas
urbanos, sin embargo es el escenario de una vanguardia
arquitectónica que domina el panorama brasilero entre los
años 1960 y 1970. Curitiba, la ciudad-modelo que emerge
como paradigma de la planeación urbana en los años 1970,
es la ciudad real en que la planeación no-modernista encuentra
soluciones para la ciudad tradicional.

Palabras clave*:
• Urbanismo - Brasil - siglo xx
• Patrimonio - Brasil - siglo xx
• Modernismo (arquitectura) - Brasil
• Arquitectura moderna - Brasil
• Intervenciones sobre la ciudad - Brasil - siglo xx * Las palabras clave están normalizadas por la Biblioteca General de la
Pontificia Universidad Javeriana.

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