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CRÓNICA DE MIS VACACIONES

El 11 de diciembre del 2020, a las 11:00 salimos mi mamá, mi abuela, mis 3 primas, mis tíos, mis
3 tías, y dos familiares más rumbo a San Andrés Islas.
Recuerdo muy bien que fue un Viernes y yo salí del colegio con toda la emoción del mundo y
llegué a mi casa, comí y una buseta vino a recogernos para llevarnos al aeropuerto, no podía de
las ansias, parada en esa fila para que nos montaran al avión, se supone que saldríamos a las
10:30 pero el vuelo salió a las media hora después, nos sentamos en primera clase, y me tocó
sentarme con una de mis tías más viejitas, ¡Jesús! Ella estaba tan asustada al despegue que me
contagió de sus nervios. En fin, alrededor de la 1 am llegamos a SAI, el cambio del aire
acondicionado y frío del avión al calor infernal de SAI fue drástico.
A pesar de lo tarde que era, el montón de maletas que llevábamos y el calor tan horrible, nos
tocó irnos a pié hasta el hotel, que era como a las 2 cuadras del aeropuerto, cuando llegamos nos
dieron unos sándwiches (deliciosos) y nos asignaron las habitaciones (¡con aire acondicionado!).
Al otro día, teníamos un paseo en barco por toda la bahía, pero como buenos colombianos
llegamos tarde y no alcanzamos! así que aprovechamos esa mañana para ir a la playa, solo
teníamos que salir del hotel y al frente teníamos la playa, SAI es realmente hermoso, el sol que
hizo ese día fue tremendo para pasar metidas en el mar hasta tarde.

El 12 de diciembre, fuimos al paseo de las Manta rayas, pero me dio mucho miedo y no fui a
verlas, me quedé en el barco a tomarnos fotos y me maree tanto! me tomé una foto donde
estaba que me tira de ahí por que anclaron el barco y aunque no se movía para adelante, se
tambaleaba tremenda mente y yo estaba con muchas náuseas, nos quedamos ahí como 2 horas
hasta que volvimos al hotel.
Ese mismo día, nos quedamos hasta que el bar del hotel cerró, bailando y tomando tropical sin
licor. También subimos al mirador del hotel en la noche y tomé una foto, después fuimos a la
playa a sentarnos en la arena y meter los pies al agua ¡ah, y a ver los cangrejos que salen de
noche!
EL tercer día, fuimos a dar la vuelta a la isla en bus después de pasar toda la mañana en la playa,
ese mismo día cuando estaba almorzando pasé pena, como siempre: Resulta que las comidas son
tipo buffet así que nos servimos cuantas veces quisiéramos; yo me senté con mis 3 primas en
una mesa, y la que se parara a coger más jugo, le servía más a las demás. En fin, yo me paré y no
sé por qué rayos saludé al señor que estaba a mi lado sirviéndose jugó también pensando que era
mi tío (de reojo se veía muy parecido), le dije ¡hola! y
él me respondió ¿quién eres? a lo que le respondí ''pos Natalia'' y se alejó riéndose, lo que me
pareció raro, entonces me senté y vi a mi tío sentado lejos y me percaté que había saludado a un
señor ''x'' y estaba sentado detrás de mí ¡que pena! comí rápido y me fui porque que vergüenza el
tipo burlándose de mí y de paso mis primas y toda mi familia por la severa estupidez que me dio
por hacer. Después de todo eso recorrimos la isla en el bus y pude darme cuenta que nosotros
los turistas solo vemos la parte bonita, por que si vamos a donde viven los isleños, es como ir al
centro un 24 de Diciembre. en las noches salíamos a recorrer la isla y a comprar dulces y cosas
(las hershey 's eran a 2.000)(me compré como 10). Ese mismo día fuimos al hoyo soplador donde
se me volaron las gafas y en la noche a san andresito, donde hacía un calor que jamás olvidaré.
El cuarto día fue el mejor! Nos llevaron a Johnny Cay, pero primero fuimos al acuario, rentamos
caretas y vimos un montón de pescaditos. el acuario queda en la mitad del mar casi, por cierto,
el mar es hermoso! las zonas de azul más oscuro son las más profundas, el azul claro tiene
entre 2-3 metros de profundidad, y el las zonas azules verdosas eran las menos profundas,
tenían ese color por la arena, y podíamos ir por la mitad del mar y encontrar zonas de ese color
por más lejos de la orilla que estuviéramos. también, vimos cangrejos y una mantarraya para
que los turistas se tomaran fotos, los señores que la tenían decían ''A 5000 LA FOTO CON LA
MANTARRAYA NOOOOOOO'', era grande y blanca, me dio miedo tomarme una foto con ella pero
la vi de cerca.
Después de eso nos llevaron a Johnny Key en lancha, el viaje en lancha es adrenalina pura, no
tienen cinturones, así que si te sales, te sales y paila! hay que agarrarse de quienes están a tu
lado y va tan rápido que el agua te salpica hasta las esperanzas.
Johnny Key es la isla que se ve desde la orilla de la playa, en medio del mar, es realmente
hermosa y por alguna extraña razón las olas son más salvajes, el sol más picante y la comida
más cara, pero eso no le quita lo bonita! nos metimos al mar y las olas eran tan grandes que nos
sacaban arrastradas de allá, era muy chistoso ver cómo la gente no podía contra la corriente, y
yo de masoquista era feliz dejándome llevar por el mar 2 metros lejos, y terminar con arena en
partes donde no sabía que la arena podía llegar. Todas las veces que fuimos a la playa no me
había quemado tanto como en J.K, me quemé hasta el alma, estaba carbonizada, pero valió la
pena, aunque sabía que me harían bullying cuando volviera por negra.
El 15 de diciembre, fue el último día, y salimos a comprar regalos para traer y a darle el último
tour personal a la isla, estuvimos en la playa y en la noche, habíamos dejado listas las maletas
para irnos, pero antes teníamos una cena en un restaurante tailandes donde teníamos que ir
vestidos de blanco. A eso de las 7:30 llegamos al restaurante que era muy elegante y nos
sirvieron de entrada una sopa con un poco de mariscos y aunque la comida de mar casi no me
gusta, el olor me sedujo y me la tragué toda, después dieron una especie de arroz ''tailandes'' que
estaba delicioso y de postre un pedazo de pastel mantecada. Cuando terminamos salimos al
hotel, recogimos las maletas y nos fuimos a pie hasta el aeropuerto con mucha nostalgia porque
en realidad no quería irme. San Andrés es hermoso y la comida del hotel era deliciosa, en
especial las galletas que daban de postre! El vuelo salió como a la 1 de la mañana y llegamos a
Yopal a las 3, dormí todo el viaje en el avión.
Fueron las mejores vacaciones!

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